Objetivos:
Establecer los objetivos de investigación es responder a la pregunta: ¿para qué se hace? Es decir, se trata de indicar el destino o los efectos que se pretenden alcanzar con su realización. Conforman un elemento fundamental del diseño de investigación, porque en ellos se expresan los logros que se pretenden obtener.
Fuente: Ortiz Uribe, Frida Gisela, Metodología de la Investigación, p. 79.
Clase 18: Objetivos de la Investigación
Taller de Lectura, Redacción e Iniciación a la Investigación Documental IV Unidad 2: DISEÑO DE UN PROYECTO DE INVESTIGACIÓN
Marco Teórico:
Escoger un marco teórico en el cual apoyar la investigación implica también la necesidad de definir conceptos clave enmarcados en la teoría seleccionada para darle congruencia metodológica al aparato crítico que definirá nuestro trabajo. Este conjunto de conceptos clave se engloban dentro de lo que se conoce como marco conceptual.
En el marco conceptual están presentes los conceptos que dan sentido, estructuran y articulan a la investigación. En este ámbito, es imprescindible que definamos cada uno de nuestros conceptos, para que el lector comprenda el significado y la relación que existe entre la investigación y nuestras nociones.
Fuente: Contreras Burgos, Ana Eugenia, Metodología de la investigación, p. 150.
Clase 18: Objetivos de la Investigación
Taller de Lectura, Redacción e Iniciación a la Investigación Documental IV Unidad 2: DISEÑO DE UN PROYECTO DE INVESTIGACIÓN
COLEGIO DE CIENCIAS Y HUMANIDADES. PLANTEL ORIENTE. PROFR: FERNANDO VELÁZQUEZ HERNÁNDEZ. MATERIA: TLRIID 4. MATERIAL DE APOYO: 19.
EL PROCESO DE INVESTIGACIÓN Objetivos
Una vez que se ha expuesto el tema de investigación, es decir, una vez que se ha resaltado su importancia, se ha delimitado, se han expuesto las interrogantes alrededor de él y se ha justificado, es necesario precisar qué es lo que se quiere investigar, para ello es importante saber cómo se formulan los objetivos de la investigación.
Los objetivos deben expresarse con claridad, para evitar posibles desviaciones en el proceso de investigación y deben ser susceptibles de alcanzarse; son las guías del estudio y durante todo su desarrollo deben tenerse presentes. Evidentemente, los objetivos que se especifiquen han de ser congruentes entre sí.
Su redacción es simple, se utilizan enunciados que proponen de manera abierta la realización de una tarea determinada, por lo general, inician con un verbo en infinitivo, es decir, con verbos no conjugados. Éstos pueden ser: comparar, clasificar, analizar, conformar, describir, evaluar, etcétera. Es necesario recalcar que los objetivos no son preguntas, son metas por alcanzar, no dudas por resolver. Algunos ejemplos pueden ser:
Evaluar el conocimiento que tienen los estudiantes de preparatoria sobre la Historia de México.
Determinar las condiciones geográficas y climatológicas del llamado bosque tropical.
Clasificar las principales especies de reptiles que existen en el desierto de Sonora. Dentro de esta parte del proyecto de investigación existen: 1. Objetivos generales: Se refieren al propósito general de la investigación, deben ser coherentes y pertinentes con el planteamiento del problema. Ejemplo: • Determinar las causas que motivan la falta de bibliografía relacionada con las teorías que apoyan la
educación bilingüe de las comunidades indígenas en México. 2. Objetivos particulares: Definen los pasos necesarios para cumplir con el objetivo general. • Rastrear de manera cuidadosa las publicaciones existentes que aborden o se refieran al tema.
• Jerarquizar los factores que han generado la escasez de publicaciones.
Nota: También es conveniente mencionar que durante la investigación pueden surgir objetivos adicionales, modificarse los objetivos iniciales e incluso ser sustituidos por nuevos objetivos, según la dirección que tome la investigación. Bibliografía: Reza Becerril, Fernando, Ciencia, metodología e investigación, México, Longman de México Editores, 1997, p. 230.
Hemerografía: López, Patricia, “Riesgo de desastre ecológico por sargazo” en Gaceta UNAM, Número 4,980, 6 de agosto de 2018, pp. 4 y 5.