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1 LA MARCA El mundo da muchas vueltas MAGÍSTER PABLO VÉLEZ IBARRA ING. D.G. [email protected] Quito, Ecuador - miércoles 27 de noviembre de 2013 A lo largo de mi vida académica y en las asignaturas que he impartido, se ha hablado de La Marca y cómo esta se vuelve un bien inmaterial-material para cada empresa y todo lo que esta representa para ella. Ahora, también me quiero referir a la marca, no en el contexto del branding, más bien quiero referirme al contexto académico, pero más en el contexto del mejoramiento de la calidad académica. Usted estimado lector se preguntará a dónde van estas líneas, ¿qué se busca con este comentario? Para esto quiero volver en el tiempo a noviembre de 2009 cuando el CEAACES (Consejo de Evaluación, Acreditación y Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior) categorizó a las universidades del Ecuador en cinco categorías A, B, C, D, E. Algunas universidades caímos en la última categoría la “E”. Para aquellas que fuimos colocadas en la categoría “E” esa designación nos dejó una marca, “…éramos lo peor de lo peor” “... todas deben desaparecer...”. Sus secuelas fueron muy duras, a nivel docente, estudiantil, personal administrativo y directivo. Para muchos era difícil buscar otro trabajo y para tantos padres, madres y principalmente estudiantes fue más doloroso y hasta humillante ingresar en otra universidad que no fuera “E” y mucho peor si la universidad era de categoría “A”, porque te decían “…eres de la categoría E… universidad de garaje…”. Cuántos epítetos y calificativos se tuvo que aguantar. Sin embargo con el esfuerzo de todas y todos en cada una de las universidades categoría “E” se hizo los mejores esfuerzos para salir de esa condición; como sabemos algunas no pasaron, las que sí lo hicieron subieron un peldaño y se ubicaron en la categoría “D”. A pesar de esto para muchos estás universidades no se merecían estar en esa nueva naturaleza. La marca seguía ahí cuestionándolo todo ¿Cuánto tiempo más tendría que pasar para borrar de nuestra carne esa marca creada en la categoría “E”…? El miércoles 27 de noviembre de 2013 el CEAACES hace público un nuevo listado. Las universidades que estábamos en la categoría “D”, ahora estamos en la “C” y lamentablemente algunas que estaban en la “A” ahora se encuentran en la “B”. Como diría Rubén Blades “…la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida”. Con esto no quiero sonar irónico y mucho menos burlarme de esta situación, simplemente digo “el mundo da muchas vueltas” y creo que siempre debemos ser humildes y nunca confiarnos del sitio al cual se ha llegado y vivir solo del buen nombre (que a pulso muchas universidades se han ganado) o de tradiciones de décadas pasadas. Mi en hora buena a todas las universidades que han escalado nuevos peldaños en esta nueva evaluación y también mis mejores deseos para aquellas universidades que han bajado un peldaño,

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...a noviembre de 2009 cuando el CEAACES (Consejo de Evaluación, Acreditación y Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior) categorizó a las universidades del Ecuador en cinco categorías A, B, C, D, E. Algunas universidades caímos en la última categoría la “E”. Para aquellas que fuimos colocadas en la categoría “E” esa designación nos dejó una marca, “…éramos lo peor de lo peor” “... todas deben desaparecer...”. Sus secuelas fueron muy duras, a nivel docente, estudiantil, personal administrativo y directivo. Para muchos era difícil buscar otro trabajo y para tantos...

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LA MARCA El mundo da muchas vueltas

MAGÍSTER PABLO VÉLEZ IBARRA ING. D.G. [email protected]

Quito, Ecuador - miércoles 27 de noviembre de 2013

A lo largo de mi vida académica y en las asignaturas que he impartido, se ha hablado de La Marca y cómo esta se vuelve un bien inmaterial-material para cada empresa y todo lo que esta representa para ella. Ahora, también me quiero referir a la marca, no en el contexto del branding, más bien quiero referirme al contexto académico, pero más en el contexto del mejoramiento de la calidad académica. Usted estimado lector se preguntará a dónde van estas líneas, ¿qué se busca con este comentario? Para esto quiero volver en el tiempo a noviembre de 2009 cuando el CEAACES (Consejo de Evaluación, Acreditación y Aseguramiento de la Calidad de la Educación Superior) categorizó a las universidades del Ecuador en cinco categorías A, B, C, D, E.

Algunas universidades caímos en la última categoría la “E”. Para aquellas que fuimos colocadas en la categoría “E” esa designación nos dejó una marca, “…éramos lo peor de lo peor” “... todas deben desaparecer...”. Sus secuelas fueron muy duras, a nivel docente, estudiantil, personal administrativo y directivo. Para muchos era difícil buscar otro trabajo y para tantos padres, madres y principalmente estudiantes fue más doloroso y hasta humillante ingresar en otra universidad que no fuera “E” y mucho peor si la universidad era de categoría “A”, porque te decían “…eres de la categoría E… universidad de garaje…”. Cuántos epítetos y calificativos se tuvo que aguantar. Sin embargo con el esfuerzo de todas y todos en cada una de las universidades categoría “E” se hizo los mejores esfuerzos para salir de esa condición; como sabemos algunas no pasaron, las que sí lo hicieron subieron un peldaño y se ubicaron en la categoría “D”. A pesar de esto para muchos estás universidades no se merecían estar en esa nueva naturaleza. La marca seguía ahí cuestionándolo todo ¿Cuánto tiempo más tendría que pasar para borrar de nuestra carne esa marca creada en la categoría “E”…?

El miércoles 27 de noviembre de 2013 el CEAACES hace público un nuevo listado. Las universidades que estábamos en la categoría “D”, ahora estamos en la “C” y lamentablemente algunas que estaban en la “A” ahora se encuentran en la “B”. Como diría Rubén Blades “…la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida”. Con esto no quiero sonar irónico y mucho menos burlarme de esta situación, simplemente digo “el mundo da muchas vueltas” y creo que siempre debemos ser humildes y nunca confiarnos del sitio al cual se ha llegado y vivir solo del buen nombre (que a pulso muchas universidades se han ganado) o de tradiciones de décadas pasadas.

Mi en hora buena a todas las universidades que han escalado nuevos peldaños en esta nueva evaluación y también mis mejores deseos para aquellas universidades que han bajado un peldaño,

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realicen un análisis profundo casa adentro. A veces Dios nos lleva a lo alto de una montaña para ver el esplendor y toda la magnificencia de una valle hermoso y sentirnos casi inmortales; pero también Dios a veces nos lleva a lo más profundo de la tierra para mirarnos en lo más interno de nuestro ser y analizar todo aquello que pudimos mejorar y no lo hicimos, mirarnos como simples mortales...

Lo que el CEAACES ha generado el día miércoles 27 de noviembre, ha sido establecer nuevas “marcas” que dejaran distintas secuelas en la comunidad universitaria ecuatoriana. Sin embargo, creo que antes que nada en lugar de colocarnos “marcas” entre universidades, debemos prepararnos desde hoy para las nuevas evaluaciones, animarnos mutuamente y sobre todo aprender de los más pequeños o los más jóvenes. El mejoramiento de la universidad ecuatoriana no termina el miércoles 27. Al contrario debemos seguir mejorando día a día, para dentro de pocos años no seguir compararnos entre nosotros, sino para compararnos entre las mejores universidades del mundo.

Mg. PVI