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N.\! 17 - Diciembre 2012 Portada: Zaguán de la Casa de la Magdalena, sede del Centro. Foto portada: Javier Barbancho Imprime: Argos Impresores CÓRDOBA Depósito Legal: CO-I146-91 ISS : 1l34-1211 Distribución gratuita Edita: Centro Asociado a la UNED de Córdoba Plaza de la Magdalena, l. 14002 - C ' RDOBA Patronato del Centro: Consejería de Economía, Innovación, iencia y Empleo Diputación Provincial de Córdoba Universidad Nacional de Educación a Distancia CajaSur Director: Secretaria: Vocales: CONSEJO DE REDACCIÓN: José CAMERO RAMOS M~ Dolores RUIZ LARA Carmen ARNEDO VILLAESCUSA César JIMÉNEZ SANCHIDRIÁN Rafael de la Paz MÁRQUEZ YEPES Maribel RAMOS VADILLO Luis RAYA CASTILLO Juan RIVERA REYES Luis RODRÍGUEZ GARCÍA Alfonso RODRÍGUEZ TÁPIZ Ramón ROMÁN ALCALÁ Miguel ROMERO VELASCO 7/2013 ALMIREí'

“Rodolfo II de Praga como mecenas y coleccionista: la formación de un gusto”, revista Almirez, nº 7 (2011), pp. 103-128. ISSN. 1134-1211

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N.\! 17 - Diciembre 2012

Portada: Zaguán de la Casa de la Magdalena, sede del Centro.

Foto portada: Javier Barbancho

Imprime: Argos ImpresoresCÓRDOBA

Depósito Legal: CO-I146-91ISS : 1l34-1211

Distribución gratuita

Edita: Centro Asociado a la UNED de CórdobaPlaza de la Magdalena, l. 14002 - C ' RDOBA

Patronato del Centro: Consejería de Economía, Innovación, iencia y EmpleoDiputación Provincial de CórdobaUniversidad Nacional de Educación a DistanciaCajaSur

Director:Secretaria:

Vocales:

CONSEJO DE REDACCIÓN:

José CAMERO RAMOSM~ Dolores RUIZ LARA

Carmen ARNEDO VILLAESCUSACésar JIMÉNEZ SANCHIDRIÁNRafael de la Paz MÁRQUEZ YEPESMaribel RAMOS VADILLOLuis RAYA CASTILLOJuan RIVERA REYESLuis RODRÍGUEZ GARCÍAAlfonso RODRÍGUEZ TÁPIZRamón ROMÁN ALCALÁMiguel ROMERO VELASCO

7/2013 ALMIREí'

La revista ALMIREZ no se hace responsable de las ideas y opiniones emitidas en las colabo-raciones insertas en este número.

NORMAS PARA LAS COLABORACIONES:

Con el objeto de coordinar la estructura de la revista, debe procurarse que la extensión máximade los artículos sea de quince folios, incluidas notas y referencias bibliográficas.

Los trabajos se entregarán impresos y en soporte informático, teniendo en cuenta losiguiente:

• No dar estructura al texto. O sea, escribir sin dar sangrías, separación de párrafos otabulaciones, en definitiva, hacer un solo bloque con todo el texto, o en su defecto,por tamaño de archivo, dividido en capítulos.

• Para separar párrafos, únicamente dar un paso de línea.

• En el caso de que un trabajo contenga gráficos para reproducir, conviene adjuntar losoriginales.

8/2011 !\LMIIZI:¡

ÍNDiCE

Presentación¡uJl'José CAMERO RAMOS. 11

lm roducción¡".rJuanRIVERA REyES..... . .

1:1 halneum del complejo arqueológico de Fuente Álamo (Puente Genil, Córdoba):1" decoración pictórica de la Estancia II y su contexto inmediato¡"Jl'José Miguel BASCÓN MATEOS .

Il

17

l In anillo merovingio en el Tesoro visigodo de Torredonjimeno¡UIr Guadalupe GÓMEZ MUÑOZ .

La Puerta de Osario de Córdoba¡un' Jesús PADILLA GONZÁLEZ .

(,j

79

Rodolfo II de Praga como mecenas y coleccionista: La formación de un gusto¡)()r Mª Dolores GARCÍA RAMOS. . 101

Juan Manuel González Gaitán y Arteaga. Apuntes sobre un maestro de capilla cordobésentre épocas (1716-1804)I)()r Mª Asunción ONIEVA ESPEJO... 129

El teatro-cinema GÓNGORA (1929-1932)¡)(¡rJesús PADILLA GONZÁLEZ.. 149

El ilustrador cordobés Antonio Merlo en el contexto de su tiempo¡)()rDavid LEDESMA MELLADO 11\7

Aproximación a la actividad pictórica mural del artista Francisco Zueras Torrcns¡.m Fmncisco Manuel CARMONA CARMONA .. 217

Del tren de los Lumicrc al cin . ohj 'In pO'1l1od '1no: breve historia del cinc de 1 rror¡.m Fmncisco MWI1/cl SÁNC/I/:2 .~AN< '/11'"2" " """."""".. .. .... """"" ¿SI)

9/211!\IMlR¡:¡

De la chimenea ~ las salas de cine: El cine de terror como relato folklórico postrnodernopor Javier MARTIN PARRAGA . .Parroquia Beato Alvaro. Architectura ad Milennio Tertiopor Luis GOMEZ AGOST .

Patrimonio Industrial: perspectivas y enfoques.Un estado de la investigación en la provincia de Córdobapor Luis Miguel PRADOS IWSALES ... . ... . .. . . ., ........ , .... . ... . ...................La musealización de un territorio. El Guadalquivir en Córdoba/)01' Angel MONTERO.................................. .

10 / 2013 ALMIREZ

341

275

295

315

N. 1\ alegra presentar otro número de nuestra querida revista ALMIREZ, 1r;l~.1.", ,111<\\ largos de retención en su publicación, Dos años de silencio, pcdríam: \~.1,.11 •\hlig;ldo, periodo impuesto por circunstancias totalmente ajenas a nucxu.i\ , ti \ 1111;Id de propiciar la aparición de nuestra publicación cada año,

I ,<1dilatada espera ha tenido otras consecuencias, cuyo reconocimicnu \\ • 'I)¡\\ici(m también traemos hasta aquí sin problema ni tapujo alguno, pOI'1111'nuestro deseo es que esta presentación, aunque breve, sirva de punto dL'•• HIIIlllic<1ciónentre nosotros, entre el lector y el equipo de redacción y el1IIL'• '.111\con los colaboradores para, al menos y sobretodo, intentar mejora r '11IIIIIII:I~ediciones.

Ik acuerdo con lo anterior, hemos de unir a nuestra petición de dis 'ldp:"1"11L'Iretraso en la aparición de este número, la tolerancia con aquellas UII.I1,.'1,ILioncs que excedían los límites preestablecidos, superando con crec '~ ('\,1'luuu.rciones y que, dado el interés de la temática planteada, nos oblígnl»: ,1

ui.uu cncrlas en este número.

S('\lo queremos dejar claro en estos párrafos nuestra alegría por ver 011.\1I1111ll'rOde ALMIREZ en la calle y poner de manifiesto nuestra acepta .ión.11'I:I~pequeñas deficiencias, si así se les puede llamar, que aparezcan en '~Il'1'll'llIplar de la revista. Creo que la ilusión y el entusiasmo que compartimos1u.uu os estamos involucrados en este proyecto, compensan con cree 's 1:1\I\(\\ihks deficiencias formales que puedan detectarse .

.lcrrnino con una felicitación a todos los colaboradores incluidos en 'sIl'11111111'1'0y, por supuesto, con la invitación abierta y expresa para que se un:1I1;¡

1'\1L' proyecto quienes lo deseen: nuestras puertas quedan abiertas para todos.

José CAMERO RAM()S!)i11'l'I01

11/2011 ALMmF¡

1''':\ 1 111, \1 11 H

RODOLFO II DE PRAGA COMO MECENAS YCOLECCIONISTA: LA FORMACIÓN DE UN GUSTO

María Dolores GARCÍA RAM()S

UNE O ClÍn/()¡'1I

RESUMEN: El coleccionismo manierista se configuró dentro de unambiente y gusto cortesano que lo hizo propio. Las cámaras de I:t~

maravillas o gabinetes de curiosidades se convirtieron en un signo Lit'

ostentación del poder de los príncipes europeos del Renacimiento, llcgándose a caracterizar por la acumulación de objetos diversos, rarezas yobras de arte. Muchas de estas colecciones serán la base de los museosde arte y de historia natural europeos.

Rodolfo II de Praga es un claro ejemplo de coleccionista y m . 'CI1;I~

del Renacimiento. Su colección estaba cargada de sentido id 'ol!',gico, marcada por los dictámenes dinásticos de las ramas imp 'ri;d yespañola de los Habsburgo y muy ligada a los gustos del emperador,factores que la convierten en una de las colecciones manicri tus .onmás personalidad.

PALABRAS CLAVE: Colcccionismo, mecenas, gabinete de uriosid«des, Manierismo, mus 'o.

I01/2011I\LMm¡:¡

I'~\ 1 ....•1 H .;\( H)N

( mÍCENES DEL COLECCIONISMO. LAS CÁMARAS ARTÍSTICAS YM!\ RA VILLOSAS

Los orígenes del coleccionismo se remontan a los ajuares y tesoros funera-rios que se custodiaban en los templos griegos y romanos l. Son lugares donde~e depositaban objetos de todo tipo con la mera intención de acumular yadornar, son los precedentes de lo que más tarde serían las Wunderkammemeuropeas. Schlosser, en su estudio titulado Las cámaras artísticas y maravillosasdel Renacimiento tardío: una contribución a la historia del coleccionismo, describeestos lugares de la Antigüedad de la siguiente manera: "Se dice que Césarhabía depositado en el templo de Venus Genitrix seis colecciones completasde piedras talladas. Plinio menciona toda una serie de objetos de inventariopertenecientes a santuarios griegos, clasificables dentro de la categoría de lascuriosa artificialia que, más tarde, encontraremos en las Wunclerkammem: espe-jos mágicos, extraños instrumentos musicales o quirúrgicos y, especialmente,manufacturas, cuyo valor se determinaba por su particular artificiosidad y porsus cualidades artístícas'".

Tras el edicto de Milán en 313, la Iglesia favoreció un coleccionismobasado en el uso de formas plásticas propias para diferenciarse de las paganas.Es cuando los tesoros de la Antigüedad se transforman en eclesiásticos, ambosespacios votivos, estaban destinados a recoger las ofrendas que se hacía a unadivinidad pagana o cristiana].

El coleccionismo bizantino viene representado por la figura del emperadorCostantino VII Porfirogéneta, gran aficionado a la arqueología y al coleccio-nismo", de gusto bizantino por las joyas y la o tentación que tanto influenciaráen las cámaras de las maravillas manieristas.

En el Medievo aparecen los tesoros religiosos de las iglesias, llenos de obje-ros raros, simbólicos y trofeos, a los que se les atribuían poderes mágicos o mila-grosos. La exposición de estas colecciones en las cámaras del tesoro quedaba

MORÁN,J. M. y CHECA CREMADES,F.:El coleccionismo en EsfJéoia: de la cámara de las maravillasa la galería de fJimuras, 1985, p. 15.

SCHLOSSER,J. V: Las cámaras artísticasy maravillosas del Renacimiento tardío: una contribución a lahistoria del coleccionismo, 1988, p. 8.

ALONSO FERNÁNDEZ,L.:Museología y museograiia, 2001, pp. 49-50.

Idem:p. 51.

104/20013 ALMIREZ

I ~\ 1 lit, \1 tI I

(ll'ldLI ;1 los ojos del gr:1111111"111(1, 1',II,dl'[;lIl1L'llll', empezaron n convrvu 111111.1"pr iruit ivas cámaras de leM)I(I~ ,Iv 1:1.,l(llle~ e incluso con algun;l~ .Iv l,II,I,I( 1privado: las primeras cámaras de hl~ maravillas de! Renacimiento. L~I(I~V'p,l( [(1',Sl' caracterizan por sus contenidos profanos, por la disposición casi ,1rhi 11:111.1l' 11armarios de objetos procedentes de la naturaleza e ideados por el homl» l' ( 11111:1sola función decorativa y por su presentación en pequeños rccin« b 1(1I11(Iswdiolos, joyeros, sagrarios y capillas de iglesias).

Llegados a las décadas centrales del siglo XVI, el hombre comil'11::1 :1interesarse cada vez más por la naturaleza, los viajes a países desconocidos, I(l'estudios científicos y e! pensamiento filosófico con tintes de misterio, h:IS:III( l'en lo raro y excepcional. Esta tendencia, irrumpe también en el cok" i, 1nismo; e! stucliolo medieval se convierte en cámara de las maravillas, l'll [;"Wunclerkammem renacentistas, definidas como lugares de reunión d0111k,L'acumulaban y exponían objetos procedentes de la naturaleza, obras de urt c dI'la Antigüedad, curiosidades, instrumentos matemáticos y científicos, objc: (I~1'11los que se mezcla la magia y la ciencia, insertos en un ambiente de mist irixm. 1Y pensamiento cabalístico como la astrología o el pitagorismo".

El carácter enciclopédico es uno de los aspectos que mejor define :1 [;"cámaras maravillosas de los siglos XVI y XVII. Los primeros coleccionistas :I¡~lrltinaban todo tipo de cosas, ya fueran realizadas por el hombre, las artifirilllill, 1.1'aiuiquitas o las artes, o procedentes de la naturaleza,las naturalia, con 1:\ idl':1 d,'agrupar la totalidad del saber y de la creación en un solo espacio".

Los gabinetes de curiosidades no sólo nos revelan los distintos 1111'"1,,,sociales, de riqueza, formación y gusto de sus propietarios, sino t,lmhll'll '11proximidad a los centros artísticos y culturales de los que irradiaban las 111\1,1.1'Las piezas que se guardaban en estos espacios, constituían no sólo una 111('1,1

MORÁN,J, M. Y CHECA CREMADES,F.:oe. Cit, p. 29,

" CANO DE GARDOQUI GARCÍA,José Lufs:Tesoros y colecciones: orígenes y evo/¡lci611 del"'/¡'I' If/

rusrno artístico,2001, pp. 106-107,

Dentro de este microcosmosartificial,creado a imitacióndel macrocosmosque rodea ,11 'CI IHlIlI,III",nosencontramosvariascategoríasde objetos:lasnawralia, procedentesde lostres reinos ,Ic-1"11,1111rnlcza; artificialia, realizadospor el hombre,como instrumentosastronómicos,científicos y 1111"1\,.1""materialesorgánicose inorgánicos;lasamiquitas e historia, donde se agrupan anrígücd.uh», ll:í'l\ ''',restos romanos, árbolesgcncnlóuicos,retratos de familiay hombres ilustres,entre OTros:y la, 11I1('\,como una categoríaespc i:ll" p;II'll'dl,l" lIclllmrlia, en la que entran la escultura, pintura, gl;¡h,IlI""dibujos y otras modnlidudc ,1111\'"S( '111( )SSFH., J. V: 01', Cit, pp. 130-131,

105/201 'lI\LMmF¡

Ir \ l' 11l,\\ Il\N

, ," uvmpl.rción estética, sino también una fuente de estudio y una agrupación,Iv (,I'jl'IOS del saber.

1/\S CÁMARAS DE LAS MARAVILLAS MANIERISTAS DE LAS COR-1'I:S PRINCIPESCAS EUROPEAS

Los que poseyeron las cámaras de las maravillas y las colecciones manieris-1:l' más completas y perfectas fueron los príncipes de las grandes cortes europeas"t' 1:1segunda mitad del siglo XVI, entre las que destacan: la del archiduqueh'rn;¡ndo del Tirol, las de su hermano el emperador Maximiliano Ir y su hijo1" ,dolfo Ir de Praga, personaje que nos ocupa, la del archiduque Alberto V de11.I\'icra, la de Francisco I en Florencia, la de los electores de Dresde y Berlín" 1.11k Felipe Ir en España. Las Wunder/wmmer principescas son un exponente,1, 1.1imugen de magnificencia, decoro y poder de los monarcas y príncipes, son1, ',11111\mio de los gustos, del pensamiento y de las tendencias artísticas de las, "11," del Renacimiento.

h .incisco I de Medicis, antes de convertirse en Gran Duque en 1574,11I.llld(')construir un studiolo en el Palazzo Vecchio de Florencra. Idea un espacio"11l,l que la pintura es la protagonista, al sustituir por medio de la represen-1,Ili,')I1la presencia física de los objetos. Su gusto se centraba en temas comola .ontraposición entre arte y naturaleza o los elementos fundamentales de la11:11uraleza, la alquimia o la mitología,

Una de las Wunderkammem centroeuropeas más interesantes es la delLlcctor de Baviera, el duque Alberto y, construida en Munich entre 1563 y1567 en su Theatrum Sabieruae por Quiccheberg. El edifico estaba compuestopor varias galerías, la Kunstkammer y una biblioteca; pero el palacio que alber-g:lha la galería más ambiciosa era el Anticuarium, construido en 1569 comoI11l1SeOpara su colección de objetos y esculturas clásicas.

Las colecciones del archiduque Fernando del Tirol" son igualmente unejemplo destacado de cámara artística. Guardadas en el Castillo de Ambrasc crcn de Innsbruck, que transformó hacia 1563 bajo una estética renacentista,ordenó su colección con criterios museográficos para que todos los viajeros que

1:1!\rchiduque estaba relacionado por lazos familiares con los mejores príncipes coleccionistas delmomento: hijo del emperador Fernando 1, quien agrupó en su cámara de Viena el patrimonio de los1 "'hshllrgo de Alemania, e igualmente es hermano del emperador Maximiliano 11, tío de Rodolfo11y primo de Felipe 11.

IO(¡ /20 13 ALMIREZ

1';1':11:111p,)r cl Ti rol las pudieran visitar. Ln selección de obj 'los y lihr.», l/lInl.lm.u , :ld:1 por un gusto por la historia y las antigüedades, por el cok Cilllll'lll,j"l' ohjelos preciosos, curiosos y raros, basados en un interés por el saber gL'11L'1:1I\' 1;1ciencia de finales del Renacimiento, en definitiva interesado por I:I~111/\'\

\' 1:lsIuuuvoliu",

Para terminar con este breve recorrido por las cámaras de las rn.truvil]usprincipcscas europeas, es imprescindible hablar de las colecciones de Felipv111",La mentalidad y el gusto del monarca se reflejan en la conformación de "I~l'(ilcccioncs, centradas en la cultura europea del Renacimiento y en los modch I~

morales, culturales y estéticos de la Antigüedad clásica. La ciencia y naturaleza~l' mezclan, la obra de arte contribuye a la educación cultural y estéti <1, ;1 1;1construccíón de una imagen política y a la propaganda religiosa y devccíon.il.

Estaban repartidas por los palacios madrileños de El Escorial, El Pardo yel Alcázar, cada uno destinado a albergar una parte concreta de su cxt 'n~;1

colección. La Biblioteca del Monasterio de El Escorial" fue concebida como 1111microcosmos y síntesis del conocimiento universal, planteada como un nlil~,'()y gabinete científico basado en los ideales del Humanismo y la Contrarrcfonna,y extendida al campo de la alquimia; al Alcázar de Madrid se destina UIl llllljunto de pinturas muy heterogéneo en temática y estilo, como la gal 'rí:1 ll\'retratos que pretende exaltar a la dinastía, junto con pinturas mitológicns, dl'devoción o naturalistas, la Armería y la Cámara del Tesoro del Rey; y P;t1:llllldel Pardo, donde se guarda la mejor colección real de pinturas, una gal 'rí;1 "l'personajes regios realizados por Tiziano, Moro y Sánchez Coello o las po '~I.I'de Tiziano".

'. CANO DE GARDOQUI GARCÍA, J. L.: Op. Cit. p. 110.

'" Para profundizar en Felipe II como coleccionista, véanse: AA.VY.: Felipe ¡¡ y el arte de Sil 1;""1/''',1998; CHECA CREMADES, F.: Feli/Je 11, mecenas de las anes, 1992; CHECA CREMADES, l:: /,/Real Alcázar de Mad,-¡d. Dos siglos de anluitectura Y coleccionismo en la corte de los reyes de 1'::,\1'(/1 Irl,1994; CHECA CREMAD ES, F.: Felipe 11: un monarca y su éPOca: un prínciPe del Renacimiento, 199H,MORÁN, J. M., y CHECA CREMADES, F.: El coleccionismo en España: de la cámara de las "1lIl'ClI'dl(/\

(/ la ¡;alería de Pinturas, 1985, pp. 87-127; etc.

11 La Biblioteca de El Escorial guarda la colección de códices impresos del monarca, junio t ruinstrumentos científicos y matemáticos, elementos de la naturaleza, temas naturalistas iruluuu »,esculturas clásicas de temática mitológica e histórica, la galería de retratos de personajes il."1 /l"

Y la galería de mapas.

" Con Felipe 11, la cámara d 'la, m:II,I\'III:" \'\'"llIli,,"a hacia la aparición de la galerfa de pint ur:»,

107/2013 ALMII 1:1'

1.\ 1 _1 h. \1 h \N

I A 1-\)RMACIÓN DE UN GUSTO: ESPAÑA y PRAGA

P¡Ha entender la formación de la colección de Rodolfo II de Habsburgo,l'~ imprescindible conocer algunos aspectos de su vida y personalidad. NaceVil Vicna el 18 de julio de 1552 y estableció su residencia desde 1583 hasta..,11muerte en 1612 en el Castillo de Praga. Hijo del emperador MaximilianoI! de Habsburgo y de María de Austria y Portugal, hija de Carlos V, y nieto deI'l.:rnando 1, rey de Bohemia y de Hungría. De carácter débil, enfermizo y excén-t rico, pasaba de la apatía a la melancolía sin motivo alguno. Fue muy aficionado;t la alquimia, ciencia que conoció en la corte de su tío Felipe II en Madrid,donde también se instruiría en astrología, magia y en los juguetes mecánicos,especialmente autómatas, relojes y máquinas de movimiento perpetuo.

Giuseppe Arcimbolo. Maximiliano IIy su familia

108/20013 ALMIREZ

I~\ 1 111. \111\

I !\ LSTANCIA DE RODOLh) 11I·N 1 1\ «( lIZ II~ I)L H::LIPE 11"

En 1:1 educación de Rodolfo II ~c pnlduj(l una controversia entre I:I~do·.I:II11¡I~de los Habsburgo. Felipe II y su hermana la emperatriz Marfu esl:¡/l:111m uv interesados en que su educación se completase en España p:lr:1 l/lll'.ihnndonase Viena, donde estaba expuesto a las influencias de la do '1 rin.:protestante y pudiera educarse en el ambiente cultural y científico de /;1 el ut rde Felipe Ir. A pesar de la negación de Maximiliano n, Rodolfo, junto CllII ~IIhermano Ernesto, fue llevado a la corte española para completar su educa ·i,'lIl.Allí pasaría ocho años, período que marcaría la personalidad, el gusto y much:l\de sus acciones futuras.

El viaje de los archiduques partió de Viena e! 8 de noviembre de IS() \

y en su recorrido pasaron por varias cortes de! norte de Italia, como I¡)~ ,kTiento, Venecia o Milán, atravesaron e! río Po hasta Alessandria y Génov.r,hasta llegar al puerto de Barcelona, donde les recibió Felipe Il. El monun nestaba interesado en que conocieran los reinos españoles, por ello recorrieronlos enclaves más destacados. Finalmente el3 de junio del año siguiente d . ~IIpartida, entran en Madrid.

Felipe Il sentía gran aprecio por sus sobrinos y mostró mucho interés pOIsu educación y en inculcarles la ortodoxia católica. La formación cortesana dvRodolfo y Ernesto se basó en el estudio de las materias que el monarca consid«raba esenciales para ellos. Tuvieron asignaturas de latín, griego, español, (nlllc ~~,

ética, política, geografía e historia, que fueron impartidas por los profesores l/!lVvinieron en su cortejo desde Viena't.'Iarnbién realizaban actividades en I:I~quvaprendía a bailar, los ejercicios de caza y las armas de fuego. Estas destrezas Iv,valían para desenvolverse en e! ambiente cortesano, en e! refinamiento d . I:I~fiestas, justas, ceremonias civiles, religiosas y acontecimientos de todo tipo.

Pero la asignatura más importante fue la matemática", base de la fund» 'i(lIlen 1582 de la Real Academia de Matemáticas, dirigida por Juan de Hcrr '1':1.Esta materia agrupaba aspectos tales como la música, la arquitectura, la ¡lSI J'()

nomía, la astrología, la navegación y la cartografía, que pudieron complcun ~l'

1 \ J 1MÉNEZ DÍAZ, P.: El co/eccionismo manierista de los Austrias entre Feli/Je /1 y Rodo/fo 11. 200 l.pp. 35-44.

11 Idcm: p. 35.

109/201'l !\I.Mml·¡

I~\ 1 dl\. \\ 1\ lNP~\ 1 I n ,\1 11 I

de Iorm.: práctica con las enseñanzas de Juan de Herrera y los proyectos que seIl';dlzaban en la corte para la defensa de las posesiones de Felipe n.

Tuvieron que enriquecerse con la lectura de autores clásicos y la cante m-pl;¡~ión de las colecciones de Felipe Il y de Carlos V y María de Hungría, que.'iL'rladecisivo para la aparición del gusto del archiduque Rodolfo por el colee-cionisrno y su sentido del arte y de la estética. Felipe Il se encargaba de ordenarsus galerías y dividir por conjuntos sus colecciones, dándoles un significadopolítico, dinástico, religioso y cortesano.

En estos años llegaban a la corte gran cantidad de humanistas, pintores,cstuquistas, escultores, artesanos, jardineros y joyeros para trabajar a en lasobras. de El Escorial. Los archiduques tuvieron la ocasión de contemplar eltrabajo de estos maestros, como Antonio Moro y Sánchez Coello, los frescosromanistas de Gaspar Becerra y Bergamasco, las Poesías de Tiziano, las vistas de/vntón ~an den Wyngaerde, las esculturas de los hermanos Leoni, los trabajosde joyena de Jacopo da Trezzo, o las pinturas de El Bosco y flamencas traídas1"lr el propio Felipe n de sus viajes por Centroeuropa.

"[ti vez, lo que más plldll 111.11,.111.1111l·IIt.dld;ldde Rodolli», (Ul' 1;1inl.l¡:\'llque ofrecía Felipe Il en cada uno ,k 1,I~ vi.ijc» y jornadas que realizar UIl IlIll

España; la de un monarca victorioso, recibido triunfalmente en todas I;I~ciu.I.:des de su reino. En estos viajes", Felipe Il aprovechaba para impulsar gr;llILk~obras arquitectónicas y urbanísticas, como por ejemplo la Puerta del Pucnn- d\'Córdoba, por Hernán Ruiz III, o la Lonja de Sevilla, diseñada por Hcrrcr.i 1,.

LOS PRIMEROS AÑOS DE SU REINADO'8

Al regreso de los archiduques a Viena las relaciones de Maximiliano 11con Felipe Il eran un tanto tensas, debido a los conflictos entre protestantes ycatólicos. Tanto Rodolfo como Enrique sufrieron un proceso de hispanizaciónen sus hábitos y gustos que no fue muy del gusto de su padre.

Durante estos años el imperio había cambiado mucho. Hungría había conseguido la tregua, y tras la muerte de Fernando 1y la sucesión de Maxirnili.uroIl, el archiduque Fernando se trasladó en 1565 al Tirol, dejando Bohcnn.:sin gobernador. En este contexto político, se produce en Austria, Hungría yBohemia, un conflicto religioso. Esta situación afectará al carácter enfermizo ydesequilibrado del aún joven Rodolfo Il, quien estaba a punto de ser nombr.uk 1

el sucesor de las coronas húngara, checa e imperial, quedando la polaca P;ll;1su hermano Ernesto.

En este contexto, el futuro emperador vive en una corte con gran vida SOL iul,cultural e intelectual, rodeado de colecciones traídas de todas partes del muncl. l.Entre 1575-1577, Maximiliano construye el palacio de Rudolfburg en Vi '11;1,donde Rodolfo vivirá sus últimos años como archiduque. Simultánearncnu-se estaba fraguando la sucesión imperial, se esperaba que el futuro emperadorsiguiera la línea política de su padre, contraria a lo aprendido de con tío Felipen. La sucesión tenia como base unas iniciativas de promoción intelectual yartísticas promovidas por Maximiliano II, cuya finalidad era exaltar su lina~

A/onso Sánchez Coe/lo. Archiduque Rodo/fo de Au

'6 Los viajes fueron de gran importancia en la formación del gusto de los monarcas del Rcnncinn '\1111,

les permitía completar su educación y gusto con el conocimiento del exotismo de nuevo, \11l1\1.1'I\,

que luego acercarían a sus palacios a través de las colecciones de rarezas que poblaban su, ·:lm.tI,"de las maravillas.

\J jlMÉNEZ DÍAZ, P.:Op. Cit. p. 44.

,. ldcm: pp. 61-82.

110/2001'3 !\LMIREZ111/211!\LMIRI:¡

IN\ 1-, llt I,\l Il IN

IN\I ~,Ih I,\¡ 11 l!

1 í: 1, donde juega un papel primordial la presencia de la familia en las fiestas,ccrcmonias y apariciones públicas, actuaciones entendidas como símbolo deI(lS l labsburgo. En los primeros años del reinado de Rodolfo II se produce unp.ir.ilclismo con los gustos de su padre, alejándose de los intereses españoles.

En 1577 hasta 1583, el nuevo emperador establece su residencia enVicna, y su madre, la emperatriz María y sus dos hermanas, las archiduquesasMargarita e Isabel, quedaron en Praga. Finalmente, en 1583 Rodolfo Il fijó sucorte en Praga, convirtiendo a la ciudad en un gran centro cultural. FomentóLIs artes, sobre todo la pintura, reuniendo a los mejores artistas de la Europamanierista, como los pintores Hans von Aachen, Bartolomeo Spranger y elescultor Adrian de Vries.

Sil mecenazgo, La atmósfera que rL·il1;I[J:Ipor entonces en la Prugn rudolfin«,contribuyó a la llegada de alquimistas y astrónomos, así como a la prolif 'r:lei¡')llde leyendas.

En esta primera etapa de su reinado se puso de moda entre la nobleza .IvBohemia realizar viajes de estudios a otros países, como Italia, Francia y bp:ll1:1.El interés hacia la corona española'? radicaba en el lujo y exotismo de Sil cortey su nobleza, y en la imagen de poder que ostentaba Felipe Il en el exterior,con la que pretendía exponer la grandeza de su imperio ante las demás cortescuropeas/". En un reino como el checo, la presencia de lo español generó re<leciones contradictorias, admiración o repulsa, pero siempre propició un dchnrcintelectual y cultural que marcó el rumbo de las cortes europeas. La influcnci«entre ambas cortes fue constante, pese a la escasez de documentación sobre 1:1"relaciones políticas, sociales, culturales y de mecenazgo mantenidas".

[otis Hoefnagel. Grabado de Praga. 1591

LA DECADENCIA DE SU REINADO. EL AFIANZAMIENTO DE UN/\PERSONALIDAD

Todo este contexto de inestabilidad y desavenencias de la corte dl'Maximiliano II con la corte de Madrid, hizo que Rodolfo Il, desde sus prirn 'r()~años en el trono comenzara a manifestar cierta oposición hacia lo español yllegará a mostrar síntomas de psicopatía, que se agudizará progresiva me n te ;1 11)largo de su reinado. A pesar del rechazo, el contacto con la corte española IH)se romperá, siempre quedará el recuerdo de su educación con su tío Felipe 11yde su madre, la emperatriz María.

Tanto en Madrid como en Viena, Rodolfo había aprendido el gusto por ellujo, las artes plásticas y el interés por las ciencias. Pero tuvo serios probl 'maspara gobernar, dado su escaso nivel de inteligencia y su inestabilidad psíquicuque le dificultaron la toma de decisiones. Había sido educado para ejercer U11

poder que nunca llegó a poseer por sus enfermedades físicas y mentale , lo LJII\'le produjo una gran frustración.

Rodolfo II trataba de responder a los nuevos interrogantes culturales pro-ducidos por los avances del Renacimiento y para ello se valió de los recursosque le ofrecían la astrología, la alquimia y la magia negra. Las fronteras entre1:1magia y ciencia eran imperceptibles todavía, por ello, el monarca financiabaI;1I1toa estudiosos serios, como a impostores que trataban de aprovecharse de

112!2 011 ALMII EZ

,,) ldem: pp. 83·87.

I¡l Para el contexto político-ideológico dl' 1" h","í" del sigl<l XVI, véase CHECA CREMI\I)ES, 1,,:Fcli/Je 11: un monarca y SIl d/)/)('II: "" /"111' I/,...Id II"IIII())II)('II¡)), 199H.

!I JIMÉNEZ DÍAZ, l., ()p, c lt , 1', 11/

11) /201) I\LMII~I:I

1' 1 111,\\ 1111I~\ 1'lit ;¡\CI,,~

Con el inicio del nuevo siglo, tras fracasar en política y '11,11vid" personal,inicia un autoaislamiento, que le lleva a refugiarse en sus colecciones y exccn-1 ricidades. Rodolfo II entendía sus colecciones como objetos destinados a larecreación y divertimento que le permitía alejarse del cansancio de los negociosy el gobierno, como reflejo del poder y magnificencia de su imperio y como unmedio para afianzar la grandeza de su autoridad".

,;I,;IS \' dccor.rcioncs ,I\' "',1111('11, 1.1111"'1.,,'1' ,,1 vvst ir, l'l cuh iv« liL' llou- d,'/\1;lI1jllL'Z,los reg;J!lls, 1;1, 1111"\,1', ,1".1\ It'II,', de los nrt ist ns II I;IS li(',t;!., '111\'1 "IlÍ:11llugar en la corte,

I:ORMACIÓN DE LAS COLECCIONES DE RODOLFO 11: ARTI:, IZ/\IU'I/\S y EXCENTRICIDADES

El papel de los embajadores en la corte imperialLas noticias del gusto que se fermentaba y evolucionaba en España, IIq:o ;1

Rodolfo n a través de la correspondencia e informes de sus embajador 's"'I, l luejemplo de este intercambio fueron las cartas que le enviaban in(orlll,í 11dolt-de los descubrimientos de objetos raros o de los asuntos relacionados ((\11 \'1interés del emperador por comprar algún objeto concreto'". Fueron los Illl'j'lres aliados del emperador para mantener sus contactos, tanto en cucst i,Illl',de coleccionismo y mecenazgo, así como en las relaciones con otras con ('S'''.

Adquirían todo tipo de obras procedentes de Europa y África, principalmcntvde las cortes italianas y española, e igualmente actuaban de intermediarios cnt 1\'artistas y el propio emperador". Los más destacados fueron Khevenhi.illc, /\d.1I11Dietrichstein y Vratislav Pernstejn.

Una consecuencia de los contactos que mantuvieron con España, (tll' \'1matrimonio acordado entre Rodolfo Ile Isabel Clara Eugenia, la hija mayor d\'Felipe Il. Este hecho supuso la mejora de las relaciones políticas y díplom.iu

1-Ians van Aachen. H.odolfo II. /607 24 Idern: p. 165.

15 Como ejemplo podemos citar la carta que el embajador Khevenhülle manda desde la corte "11:11" .l,en 1604 con el asunto de la adquisición de unos tapices de la guerra de Túnez, en la que Ilpill;! ",h,,·imposibilidad de efectuar tal encargo, pese a reiterada presión de Rodolfo: "En esrct va mi "1'''''"''respecto a lo que vuestra majestad cesárea me escribió al respecto de los taPices de Túnez. El rey de 1',,, 1"1:,·1[?] tiene uno, el rey otra, las Descalzas Reales de Madrid el tercera [el cual] la reina Mar(a Ie"ir, y ""1" .'"herencia a la /Jrincesa doña Juana de Portugal, el duque de Alba tiene cuatro y todos los w/¡ic('\ 1""II/eI",son exactamente iguales. El duque de Alba tiene a parte de éste, otras dos, uno de las fantasía., d" ( ;<'11"""'"Basca, y otro de las guerras de Esmalcalda. Lo.' tres son hermosos y preciosos, pero está" ,id/¡ 'lid", 1'"/'''juntos a su mayorazgo, por lo que no se puede iniciar ninguna vía respecto a ellos". Texto eXlr:<rd" .1,'

ldem: p. 224.

'6 ]IMÉNEZ DÍAZ, P: Op. Cit. p. 83-88.

Intentó hacer de Praga una ciudad internacional en contacto con otraspotencias, Para ello se basó en el modelo de Felipe II, en los productos que llega-ban a la corte de Madrid desde América y de las colonias portuguesas en Áfricay Asia. Al igual que su tío, pretendía que este tipo de objetos formara parte desu colección de rarezas, del mismo modo que intentaba que fuera símbolo de laextensión de su imperio-'.

Para terminar con este apartado, hay que remarcar, que la admiración deRodolfo II por lo español, también se manifestaba en el gusto por los jardines,

114/2001) ALMIREZ

27 Para un estudio más detallado d ' lns rcl •• ioncs y el significado existente entre I;¡~ (()leed,,'1\" .1\,1Castillo de Praga y los iruclccuurlv y '" 1hl;", .omo que llegan a la corre y que trubuj ••n P'":< I{. "l. ,11,.véase: EVANS, R.j.W: Hlld"/I'" l/lid /dl ~I,."I'" 197>, pp. 263 y ss.

'2 ldcm: p. l34.

'. ídem: p. L35.

115/2 /1 !\I.MII~¡:I

1.\ 1,11',\( 1')

, ;1,', y lIl1 acercamiento de la cultura y sociedad española a la corte de Praga.1·1enlace favoreció la reanudación de los envíos de obras de arte y objetos de1:'P;IÍl;l a Praga, tras un período de distanciamiento producido por la crisis per-"lid de los últimos años del reinado de Rodolfo Il. En estos contactos, tambiéndestacaron los embajadores que Felipe Il mandó a la corte de Rodolfo Il, como.lon Juan de Borja y Castro, y su sucesor Guillén de San Clemente.

Artistas y científicos

A pesar de las patologías y excentricidades que rodeaban su personalidad,Rodolfo Il era un hombre inserto en el arte de su tiempo, hecho que demuestra1;1magnífica relación que mantuvo con los artistas y anticuarios que llegaban;1 su corte. Su interés por las artes se reflejaba, por ejemplo, en la selección,Iv los cuadros para su galería, que llegó a contar con unas tres mil obras. En'" colección había obras de grandes maestros del momento, como lo, Dánae,1¡d"í11ledes y Leda, de Correggio; la Fiesta del Rosario y el Martirio de los diez/lIt!, de Durero; y pinturas de otros maestros europeos como Rafael, Leonardo,11 i.mo, Tintoreto, Brueghuel el Viejo, el Bosco o Cranach. Igualmente seuuvrcsaba por la escultura contemporánea, como los bronces de los hermanos1 l'( Ini o de Giarnbologna".

, S( ;11LOSSER, J. v: Op. Cit. p. 134.

11(1/200131\1.MIRI:Z

I IIII I lIt

I\'ro;d l'Il1Pl'l;ld'll 11I'111111111,,1111111111111,·1111l'1l'''II1:1,:llk'111:1'llvl .1111'Il'll;lL'l'llIista y antiguo, 1'1;1l'l 111111,1111'1I\ 1:1111111,1"1" vnricd.ul dl' ,,1'1 i,I;" y 11111"111,de diferentes estilos y Plll( nll'llll:" Il'l'l,l"ll SlISgustos estéticos: 1111illl('I(",pm 1,,5tendencias modernas iml'II;" en el l lumanismo. La COrLede I'r;¡g;¡ ,,,caracterizaba por una libertad casi ilimitada para todo tipo de cxpcrinu-nro-.uusticos y científicos, en la que los artistas y científicos contaban con ,1rl',pel, 1de Rodolfo Il, al contrario que los políticos, el clero o los funcionarios y cri.u l: l'de la corte, hacia los que sentía bastante rechazo/".

Previo a la llegada de artistas a la corte rudolfina, se produjo un período deimportación de obras, con el que se definió el gusto estético y ternáti o lk- 1:1colección. En la década de 1590 es cuando el emperador comienza a coru 1';11;11

a la mayoría de los pintores". Los artistas se imbuyeron en la personalidad .Ivla colección, que ampliaron manteniendo los cánones de esta y el gusto tlvRodolfo n-.

Entre los pintores", destacaba por su creatividad el único italiano, Giuscpp«Arcimboldo, que junto con Bartolomeo Spranger, eran los únicos que en 1591quedaban del grupo que también trabajó para Maximiliano Il, aunque lIeg;1" 1:1corte respondiendo a la llamada de Fernando 1. Arcimboldo, probablemcnrc, (1Il'el artista más original de la corte rudolfina, con el estilo más peculiar y el qtll'gozó de mayores privilegios. Nace en Milán en 1519, proveniente de una (;lIlldl.!de pintores, su padre, Biagio Arcimboldo o Arcimboldr", trabajaba en 1<1 1)11'111111de Milán y estuvo al servicio de los Habsburgo entre los años 1562 y 15H7.

En estos años realizó numero as obras que engrosaron las colecciones illlfl\'riales. Posteriormente, siguió trabajando para Rodolfo II, para el que dis 'IH 11.1celebración de su coronación como rey de Hungría en 1572. Su universo pk 1,1rico se adaptó perfectamente al ambiente artístico, científico, erudito y m;ígi IIde la corte y a la personalidad de los tres emperadores. Tuvo mucho que v .r L'II

,., JIMÉNEZ DÍAZ, P: o.. Cit. pp. 176·180.

In Idern: pp. 206-212.

" Idern: p. 201.

" ldcm: pp. 185-198; 206 ss. DUTe1·o. Martirio de los diez mil. 15081\ El apellido familiar se dos formas, aún no se conoce cuál es la forma correcta de escribirlo, y:¡ L(1I1',,1

propio Giuseppe usaba las dos.

117/2013 ALMml:¡

1 1 11 • \1 11 l~1 \1 1I1 l I1I

1.11111:,1111;:1,i,'111,di~cl-H) y creación del gabinete de curiosid:ldes de Rodoifo !l,1',11:1 vi que rL':diz,') gran cantidad de obras e incluso llegó a realizar viajes para,1.1<11111il piC::l:', :ml igliedades y animales". En 1587 se retira a Mílán, pero hasta\11 11I1I,'11L'en 1593, siguió realizando encargos para el emperador,

Sil ,)hra se adaptaba perfectamente a la personalidad de la colección:, 1111/() pi 111m rcrra tista de la corte, destacaron sus cuadros fantásticos por estar, '1I1111I1l':'1(lS de flores, animales, verduras y objetos, Entre las más destacadas se,'11, 111'111r:l el Venumno, que envía a Praga desde su retiro en Milán junto con la,In:lp:lrecida Flora, Representa e! retrato de Rodolfo II, uno de los más origina-l", .Iv la historia de! arte. Lo representa como e! dios de los huertos, metamor-11)'1':1.10 y personificando en una misma figura a las cuatro estaciones, con el fin.1" 'l'lhlcir a Pomona, diosa romana de los frutos y los vegetales, Es una alegoría,It- 1:1.uu oridad y voluntad de gobernar de! emperador, en la corte de Praga todo,,'1 proveniente de la naturaleza es digno de admiración, Con esta metamorfosis; \ 11illlholdo pretende enaltecer la figura de Rodolfo como emperador". '

1\'rlll:lI11hiél1 :"11111':';"11)1'111',II,IJ.!il,'1'" ,11'.u quin-cturu, illgl'llivlí:l, Il'llll' ,1\.Iv construcción hidráuln », 1'"111,', 111',1 Y muxic«: COIllO llrg¡miz:ld,lr dI' fl"'I.",,li:'l'11<ldor de la indumcru arin 11':III:d, LlC:ICil'lI1de escenarios y VC,.,111:1Iill'; \' 111)1l' inoccr las técnicas para la creación plástica 16.

Spranger, pintor de proyección europea, es otro de los creadores 1l1:í:,ill'l'111t:1I11edel arte rudolfino. Pintaba para e! monarca, además de alegorías y,':' VII.I'mitológicas, cuadros de temática erótica. Fue e! pionero en el nuevo 'si i 1111'11rórico que se impondría en la corte, al mezclar los modelos estéticos n 1I11:lIli),con la interpretación flamenca. Entre sus obras más destacadas está Ll :,,'1 iv ,1,·aventuras amorosas de personajes mitológicos, realizada entre 1582 y l,)tl7 \ampliada a lo largo de la década de 1590; y el Triunfo de la Sabiduría, rc;III::ldl1entre 1591 y 1595, obra con un fuerte componente simbólico, rclacion.ulu conlos acontecimientos políticos, militares y e! carácter moral de Rodal fo 11.

GiusseJJ/JeArcimbalda. Rada/fa IIcama VertumnaS¡ml1l¡;cr l1'hmfa de la sabiduría- 1951

.• 111\II'NF¡nfAZ, 11: Op, Cit. p. 202.

1.1"111.pp. 16· 38.Ih KRIEGE KC KII', \XI. (11' ( 11 l' J(,

11," / 20013 ALMIREí' 119/213AIMIIU'/

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11.111'VI'll A:1 lun l'~ nom hr:Ido pin101'de 'Urle e 1\ 1')1).' •• 1111111'1,' \1' 11:1,'Lid:1,II'iIIIIlIV:III1l'llll' :1 Pr;¡g;¡ en 1596, al igual que el suizo .J')M'I,II 11l'111~,Ahora,\',11,1\1 Il'I'lllin:1I1do la centuria, es cuando queda cornpl ,t¡ldo el grupo de los¡:I,llllb pintores de la Praga de Rodolfo 11.

1:gid iU~S:tdeler fue clmejor grabador en cobre de Rodolfo 11. El más célebre,11, '"~ gr:th:lc!oS, inspirado en e! retrato de Hans von Aachen, representa al"IIII'L'I':tdorcon coraza y corona de laurel, a pesar de que nunca llegó a combatir1'111111c.unpo de batalla,

1:1escultor más destacado de la corte fue Adrian de Vries, Para la corte11.rl ':1j: I!'( 1Il también el tallador de cristal, Gaspar Lehmann, tres talladores de1,1\,\11':"preciosas de la familia Miseroni y los orfebres Krystof]amnitzer y Hans\':111Vcrmcycn. Este último fue contratado para la realización de la corona deIlucl(}111! //, fechada en 1602, La pieza es una de las mejores joyas de la colección,1.1I1Iopor su valor artístico y material, como por el iconográfico. Representa1'11.uuhio que se produce en el mecenazgo en los últimos años de! reinado de1\lIdl,I(() 11,cuando sus patologías psíquicas se agudizan, se vuelve más solitario\' '1' produce una ruptura política con la corte de Madrid, Está formada por una'Ul Dil-lI)de perlas, esmaltes y complicados engarces de diamantes y rubíes, que\1' ivm.uan con un gran zafiro sobre la cruz; y cuatro relieves que representan:d l'II1I'L'I':tdorcomo héroe, rey y militar".

1A C( )LECCIÓN, ARTE y NATURALEZA

1.:1colección de arte que e! emperador Rodolfo II poseía en su Castillo deI\:tg:l r .sultó ser una de las más famosas y admiradas del Renacimiento. Cuando11:1.,I:tdlíla corte imperial desde Viena a Praga en 1583, transformó la capital111l'l':1en una bulliciosa urbe.

I\mlolfo II también se interesó por la adquisición de objetos procedentes de"'1':lIi:l, principalmente compró obras de arte para decorar sus jardines; intentóIJlIl' ,1jardín imperial de Praga se asemejara lo más posible a aquellos que habíaVI.,IOdurante su estancia en la corte de Felipe 1I, En ellos plantó árboles deII)do i ipo, e hizo traer animales exóticos que ponía a disposición de los pintores1':11:1que pudieran reflejarlos en sus obras, Aquí demostraba su interés por lan.u urnlcza, por las naturalias, de hecho, durante los primeros años de su rei-

11,111".'11l,hM'"illl\ hl('lllIl 1,l' 1.11,/1111\ 11 '.1,,1. ,1, ,,11111"',1'1\ I'¡;',~:I ,'l' 1:1'11\'1.11111:1nucvu 1\\:\lll'r:1dc 1'1\11'11,1111.111.1111I.d,.1.1111.11IIII'V:II'sll'lir:l h:I~:ld:11'1\,·/I"q,;ll .ntrc l,llWl1Irulill y 1.1e/llllll/llllll. "111,1d"l\ 1111io de la n.u urnlcza 1'11I1',1111'1/1,/homhrc ".

Ya hemos hablado de los m.tcxt n », que se instalan en Praga pnru Ir:II1:II.11;¡ LISórdenes de Rodofo Il, realizando encargos que iban a nutrir las g:lkll:I,'del Castillo. Pero otros muchos objetos llegaban como regalos que 1's /):1\1:11\de otras cortes mediante o como compras realizadas en el extranjero POI'U\embajadores, quienes atendían siempre los caprichos de! emperador, Las :ldqlllsiciones podían llegar a terminar con las arcas reales, ya que muchas liL' 1:1\piezas alcanzaban precios desorbitados. Pero en la correspondencia que f\odllll"mantenía con sus embajadores, como Khevenhüller, expresa su deseo de COI\\pral' siempre a bajo precio, regatear, y si fuera preciso, esperar varios años :1qu,:bajara e! precio de la obra en cuestión o a que le fuera regalada 39.

Cuando le era imposible hacerse con algún original, sin problemas se l'lll \tentaba con copias de grandes obras realizadas por autores desconocidos, t;d D

el caso de dos reproducciones anónimas de! CuPido y de! Rapto de Ganírnedo dI'los originales de Parmigianino, o una de Leda basada en un original de Corrcts,« 1mandada pintar a Eugenio Cajés por e! propio Khevenhüller por la imposihihdad de conseguir el original'".

Muchas veces ponía sus miras en colecciones ya formadas que por ,1V,l\;lrl',de! destino de sus dueños ponían en venta, se hacía fácil su compra y se '011vertían en una oportunidad para adquirir a bajo precio un gran lote de objetos yobras de arte. Tal es el caso de las colecciones españolas de Antonio Pércz y dl'1Cardenal Granvela, compuestas en su mayoría por obras de pintores italianosatraídos a España por e! ambiente de la corte de Felipe II,o algunas piezas dI'la colección que poseía Pompeo Leoni. Las obras se adaptaban a los gu 'lll~ dI'Rodolfo II y a los de Khevenhüller, destacando lienzos de! Parmigiamo y delCorreggío".

J8 jlMÉNEZ DÍAZ. P.:Op. Cit. pp. 147-153,

19 Idern: pp. 188-191.

40 Idem: p. 220,

41 Idem: pp, 190-198,'1 IItv1l~NEZnÍAZ. P.:o., Cit. pp, 210-213.

110/2 1"3ALMIREZ121/201"3 J\LMIRI:¡

1 \1 Ilt.\1 ¡ti

1 \ 1 lit. \1 11 I

11.,I"gn'lljIlL' rcprcscnt.i I (/ //1'\/01 ,/,//,"'''''", '1"1' 1 r : " lksi~lir dc I,,~gl"lltllll" d,'1I,lsl"do, fue él mismo qui '11Sl' ,'lll,ll/:tI lk IIc\'"rla a su habitación 1',

Sin embargo, su carácter difícil y personalidad excéntrica marcnnin Sil '11'1.,l' influcnciarán las características de su colección, Este rasgo hizo, que :11ll":1Ide interesarse por grandes obras de arte de la Antigüedad y de sus .orucmp«r.incos, valorara por encima de todas las rarezas de arte y de la naturnlczu, 11l'objetos difíciles de conseguir y lo antiguo, En los últimos años de su rcin.ulo,es cuando se vuelca de lleno en las colecciones de rarezas de su gahinl'll' ,1..maravillas, Los objetos que e! emperador conseguía acumular se disPlllll:111desordenadamente, sin metodología museística. Mezclaba las rarezas con 1,,,objetos de arte, dando una sensación de abigarramiento, De este desorden ,1.1testimonio e! diario de viaje de una embajada de Weimar en Dresden en 1(1 ,1,donde se describe detalladamente el aspecto de la cámara y los objetos ':111"que había en ella y que tanto llamaban su atención".

La colección se guardaba en cuatro habitaciones de su palacio de Pr:lg:l, 1.1'piezas se amontonaban en cuatro estancias abovedadas, donde primaba el .1(',orden, Usaba cajas, denominadas almare en e! antiguo inventario, par" los llhil'tos de pequeño formato; arcas y mesas para exponer piezas mayores y/o gU:1Id:tlmenudencias en sus cajones, Había todo tipo de pinturas, conternporánc.» y

antiguas, en cajas, en las paredes y amontonadas; y de las paredes colgaban lodotipo de cosas muy llamativas, como cornamentas de animales".

Reinaba un gran caos generalizado en todas las estancias del palacio (1"1'imposibilita la enumeración detallada de todos los objetos de la colección, ""1los armarios había rarezas de la India o antigüedades egipcias, como jucgos d\'jeroglíficos o naturalias raras, como piedras preciosas en bruto o trabaj.ulnx,cajitas con imanes y clavos de hierro, fetos malformados en botes, cajas l', I11raíces de mandrágora o restos de animales africanos, Se exponían, igualmcnu-,gran cantidad de relieves en cera y trabajos torneados.

Eugenio Cajés. Leda. (Copia de un original de COJTeggio)

La característica más destacada del coleccionismo de Rodolfo 11, es la:11 r.icción y curiosidad que éste sentía por la naturaleza, por lo científico y por loirracional, lo abigarrado y extravagante, Se interesó más por las naturalia, joyas,11il'drasy materiales preciosos y lujosos exotismos, que por las artes plásticas. Ennll' sentido, rompe con e! gusto o estética iniciado por su padre, quien basaba\'1 esplendor de su reinado en las artes y en la maestría de los grandes artistasLJlIl'I rabajaban para él. Maximiliano 11 era un gran amante de la antigüedades, I:ísi 'as y la arqueología, pero por el contrario, su hijo, dejó de adquirir este tipod\' obras, dejaron de interesarle.

1.<1 figura de Rodolfo II como coleccionista y gran conocedor de las artes,IH 1 l'sl:í m uy alejada de la de los grandes príncipes y nobles de! Renacimiento.L In" muestra de ello es el interés y e! empeño que mostraba en la adquisiciónd\' :¡/gunas de sus obras, incluso llegaba él mismo a hacerse cargo del traslado de/:1, mismas. Tal era el interés del emperador por adquirir el relieve de Giovanni

4! SCHLOSSER, J. v: Op. Cil. p. 1)4.

,\ Idem:134-13S.

H Idcrn: pp. I H

11. /20013 /\LMIREZ121/ zon /\1 MII~I'/

Ir \ I .111. \1 1I \1,,)

llllll ti\' I()~ grllPos Ill¡ís valiosos de la colección, MIlI 1,)', ljlll' lllldllrlllanl." I'I)';I~I' Y objetos preciosos, su interés radicaba en su vnh n 'llll11'JIl1ico y en1.11;lIl':¡1 y originalidad casi exclusiva de los diseños, donde se unía el ingenio1111111;111\)con la naturaleza, Entre las joyas que se enviaron desde la corte1"II;lllllh destacan los regalos que hicieron Felipe IIy la emperatriz María, que1I,,¡dí;1 en las Descalzas Reales en Madrid, cargados de fuerte sentido familiar)' dlll;íst ico. Algunos de los más conocidos, son la Jarra de Jaspe, realizada por1';lld van Vianen; una copa realizada sobre un cuerno de rinoceronte, atribuida aNrkol.ius Pfaff; o la Jarra de Jan Vermeyen realizada con un diente de ballena.

Nikolais Pfaff Copa en cuerno de rinoceronte,

" IIM(:NEZ DíAZ, P.: Op. Cit. pp. 170-175,206 Yss.

1 4/20011 ALMIREZ

LI grupo de bczoarcs" l'~ \'1 11111'Il'~ldt¡1 Ill¡'I~curioso, tanto por LI liqlll· .. 1lk los materiales como por su rurczu. Se tratan de unas piedras () 1\11111;1111111l'¡¡lculosa que suele encontrarse en el estomago de mamíferos, a la que ~l' 11;111.u ribuido propiedades curativas contra diversas enfermedades, como 1;1pl'~t v, LIimpotencia, la melancolía o problemas cardiacos. Rodolfo IIera un gran nm.mn:de este tipo de piezas, coleccionismo que se convirtió casi en una obsesión J1( I1su carácter hipocondríaco. Los más destacados de la colección presentaban gl;¡ 1Ilujo de su decoración, como el bezoar español de llama peruana con uxmes y ntll/t'\

!¡cruanos, realizado entre 1560 y 1575.

IkZll(/1 1'\/111111.1,11I1/l'()lIe~y rubíes /Jeruanos

.". ldcm: p. 174,

I 'i/ lIIAIMIIU·'!

I \J 11t.\. I1I

1 I 11·. II¡I

111111 I 1 ;¡ L'slas piezas se exponía un sin fin de objct (lS( 111 i( "1" \' 1 aros, como, Ill'llhls, dientes, huesos, relojes, autómatas, paisajes en mosaico o pieles de,lllilldes raros. Un ejemplo es el cuerno de rinoceronte adornado en España o1 \ 11"1 11g:11 con filigranas de oro, rubíes y perlas, que adquirió la emperatriz María\' que regaló a su hijo en 1582.

hll'¡ 11 11 ,¡( \ 1 1. \

Respecto a Rodolfo II, una de las vías para conocer su personalidad y gustoestélico es el estudio de su colección de rarezas y curiosidades. Esta se vio muyIllarcada por su estancia en la corte española, cerca de las colecciones y perso-nulidad de su tío Felipe II, los consejos y gusto de los embajadores destinados aI1I1'I1S países y el contacto con los mejores artistas y científicos del momento.

,\/\.VV: reli¡)e 11y el arte de Sil riel/I/)(),Madrid, Visor, 1998.

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( :t )NCLUSIÓN

P:1I'<1terminar con este tema que nos ha ocupado a los largo de estas pági-11:1" \' a modo de conclusión de lo expuesto, se puede afirmar que una de las\ 1:10, para conocer la personalidad del emperador Rodolfo II, es el estudio de su, ,'¡vLTi(m de rarezas, en la que se refleja su gusto. Esta, al igual que su perso-Il.did:ld, se vio muy marcada por la corte española y por el legado de su padreI\l.lxilllili:lI10 II

l.nt r« los aspectos de su personalidad que se han señalado, cabe destacar,·1 de gran mecenas. En su cámara de las maravillas, se aunaban objetos dedtll'l'L'llle índole y procedencia, desde obras de arte de los principales maestros" copias de grandes obras, hasta objetos diversos, extraños y raros traídos dep:lísL'Sexóticos.

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JUAN MANUEL GONZÁLEZ GAITÁN y ARTEA(,!\:APUNTES SOBRE UN MAESTRO DE CAPILLA

CORDOBÉS ENTRE ÉPOCAS (1716~1804)

Mª Asunción ONIEVA I:~I)¡:I()I

RESUMEN: En este artículo se hace un análisis de la vida de JII:III

Manuel González Gaitán, maestro de capilla de la catedral ord()hl'~:1durante la segunda mitad del siglo XVIII. Durante su larga vida ~(lll

numerosos los acontecimientos que inciden en el transcurrir diario dvla Capilla musical catedralicia.

PALABRAS CLAVE: Música, Capilla musical, Ilustración, Caicdrnlde Córdoba, Historia de la música española.

12H/zoor: !\I.MIRI:Z

INTRODUCCIÓN

El archivo de la catedral de Córdoba nos sorprende con la riqueza Lk ~II

fondo documental, que ha permitido a los investigadores la realiza ión detrabajos que preferentemente se han orientado hacia el estudio de la CaL xlrul

1 Mª Asunción Onicva E'l'l'jlll" 1""""111":1 .1,' Lenguaje Musical y Repenrización en el 0"''''''':11111111

Profesional de M,hi ".1" ('""I"¡'.I 1)"',11'1" 1", ,"im 2003-2009 OCl,',PÓ la cátedra de lmpruvrx.« 1""

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