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Santiago Villegas, 29 Ha creado una red social ciudadana para denunciar delitos de forma rápida y segura Seguridadenlínea.com Para una ciudad como Medellín (Colombia), incluida año tras año en el ranquin de las urbes más violentas del mundo, toda ayuda es poca para salir del bucle de tiroteos, secuestros y narcotráfico que golpea a sus habitantes desde hace décadas. Por suerte, las tecnologías de la información hábilmente aprovechadas pueden aportar cauces de participación que transformen, poco a poco, a ciudades como esta en hábitats más seguros. Convencido de su potencial, el joven informático Santiago Villegas ha invertido los últimos tres años de su vida en el diseño de una plataforma de denuncia que el ciudadano puede utilizar desde su dispositivo móvil Android, Blackberry, iPhone o iPad para evitar que la actuación de mafias, conductores temerarios y ladrones quede impune. Tal y como advierte el propio Villegas, "Martin Luther King decía que quien ve el mal y no protesta, ayuda a hacer el mal; pero quizá no consideró que en una ciudad como Medellín, protestar podría significar la muerte". Para luchar contra el miedo, la ignorancia y la desconfianza que empujan a callar a los ciudadanos que son testigos de un delito, Villegas ha creado un sistema sencillo y rápido con el que informar de cualquier suceso delictivo en las calles. Su plataforma, llamadaSeguridadenlínea.com , es utilizada ya por la Alcaldía de Medellín dentro de la estrategia para combatir la inseguridad.

Santiago Villegas

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Santiago Villegas, 29Ha creado una red social ciudadana para denunciar delitos de forma rápida y seguraSeguridadenlínea.com

Para una ciudad como Medellín (Colombia), incluida año tras añoen el ranquin de las urbes más violentas del mundo, toda ayudaes poca para salir del bucle de tiroteos, secuestros ynarcotráfico que golpea a sus habitantes desde hace décadas. Porsuerte, las tecnologías de la información hábilmenteaprovechadas pueden aportar cauces de participación quetransformen, poco a poco, a ciudades como esta en hábitats másseguros.

Convencido de su potencial,  el joven informático SantiagoVillegas ha invertido los últimos tres años de su vida en eldiseño de una plataforma de denuncia que el ciudadano puedeutilizar desde su dispositivo móvil Android, Blackberry, iPhoneo iPad para evitar que la actuación de mafias, conductorestemerarios y ladrones quede impune. Tal y como advierte elpropio Villegas, "Martin Luther King decía que quien ve el mal yno protesta, ayuda a hacer el mal; pero quizá no consideró queen una ciudad como Medellín, protestar podría significar lamuerte".

Para luchar contra el miedo, la ignorancia y la desconfianza queempujan a callar a los ciudadanos que son testigos de un delito,Villegas ha creado un sistema sencillo y rápido con el queinformar de cualquier suceso delictivo en las calles. Suplataforma, llamadaSeguridadenlínea.com, es utilizada ya por laAlcaldía de Medellín dentro de la estrategia para combatir lainseguridad.

Según Villegas, los ciudadanos han registrado a través de ellamás de 2.000 denuncias en los tres meses que lleva funcionando apleno rendimiento. Calcula, también, que reciben "unas 20.000visitas" cada mes, aunque remarca que no obligan a los usuariosa registrarse porque el anonimato es "una de las característicasclave" de la plataforma.

Tal y como indica Villegas, Seguridadenlínea.com permite subir ala red, en cuestión de segundos, información georreferenciadadando cuenta de atropellos, robos y tiroteos, añadir fotografíasy vídeos, y escoger si se desea que la información se hagapública para que otros ciudadanos puedan, a su vez, añadir másdatos, comentarios y advertencias. De esta forma, asegura eljoven, su plataforma se convierte en "una especie de red social  que incluye a toda la ciudadanía en la dinámica de prevención yreacción ante eventos de inseguridad".

Cada denuncia está acompañada de un nivel de credibilidad que seasigna desde que se crea. Cuando el ciudadano se registrar en elsistema, empieza a acumular reputación que es transferida a cadadenuncia, aunque él nunca queda asociado a la misma parapreservar el anonimato. Cualquiera puede contribuir a aportarcredibilidad utilizando tres botones: "Es cierto", "No escierto" y "Me afecta". "Esto permite que la misma ciudadaníaindique cuando una denuncia debe ser prioridad para el gobierno,o cuando su nivel de credibilidad es bajo", explica Villegas.

Esta herramienta gratuita también ofrece al usuario laposibilidad de suscribirse a un servicio de alertas por zonas:en el momento en que otro usuario denuncie algo que ha pasado endeterminado barrio de la ciudad, todas las personas que hayanindicado su interés por esa área recibirán un aviso.

Villegas, diplomado en Arquitecturas de Seguridad e IngenieroInformático por la Escuela de Ingeniería de Antioquía(Colombia), trabajó durante un año en solitario para desarrollarla primera versión, que fue creada solo para web en 2009. Traslanzarla para que los usuarios la probaran, la presentó ante elConsejo de Gobierno Municipal de Medellín y logró que la Empresapara la Seguridad Urbana (ESU) la apadrinara.

Con la financiación obtenida de esta institución pública,Villegas contrató a otro ingeniero y, actualmente, son cuatroespecialistas dedicados al mantenimiento y mejora de laaplicación. A medida que el uso de smartphones ha ido creciendoen Colombia, el equipo de Villegas comenzó a desarrollar

aplicaciones para móviles. Las primeras estuvieron disponiblesen Google Play, App Store y App World a mediados de 2013.Tal y como explica el innovador, Seguridadenlínea.com cuenta yacon "miles" de usuarios en Medellín, y ESU ha decidido ademáscomercializar este servicio en todo el país, lo que ha permitidoque recientemente esté también disponible en la ciudad deBogotá.

Tejiendo una red de seguridadTras el creciente éxito de esta aplicación, Villegas no hadejado de inventar nuevas soluciones que convierten las ciudadesen espacios más habitables y seguros. Un ejemplo esUrbanismoenlinea.com, una herramienta en la que los ciudadanos,en lugar de informar sobre delitos desde internet o desde susaplicaciones móviles, pueden hacerlo sobre desperfectos  y dañosen la infraestructura de la ciudad. Esta plataforma estádisponible ya para todo el territorio colombiano y permitedenunciar desde agujeros en el firme de las carreteras hastafarolas fundidas.

Además, aprovechando la información sobre inseguridad einfraestructura ciudadana procedente de estas dos plataformas,Villegas ha creado también el proyecto Ciudadenlinea.com degeorreferenciación de lugares de interés, en el que se indica asus usuarios qué zonas de la ciudad son seguras, el estado delas calles y la disponibilidad de transporte público.  Paraobtener información sobre éste último aspecto, Villegas hacreado también Transporteenlinea.com, una herramienta web quetambién está disponible como aplicación para móviles Androiddesde la que se informa a los ciudadanos de Medellín sobreestaciones de metro y autobuses cercanos para llegar de un lugara otro.

En el futuro, este joven espera que su plataforma se posicionecomo "la más completa red social de seguridad" y se convierta enuna vía de comunicación entre gobierno y ciudadanía alternativa"al canal telefónico tradicional". Villegas explica que, delmismo modo que Facebook permite estar en contacto con familiaresy amigos, y Linkedin con la red de contactos profesionales;Seguridadenlinea debe ser "la alternativa digital paracomunicarnos con nuestro gobierno local, policía, organismos deatención a emergencias, vecinos y todo aquel que estéinvolucrado en nuestra seguridad".

En opinión del director ejecutivo y fundador de Guardly, JoshSookman, que es miembro deljurado de los premios   MIT Technology Review   Innovadores menores de 35 Colombia , Villegas ha diseñado

un servicio que ofrece "un verdadero beneficio social ycomunitario" y que "de ser alojado en la nube, probablementepueda ser escalado para satisfacer las necesidades de otrasgeografías".

María Adelaida Gómez, 34Ha ideado un enfoque multifactorial para predecir la efectividad de los fármacos contra la LeishmaniaCentro Internacional de Entrenamiento e Investigaciones Médicas

La leishmaniasis es una enfermedad parasitaria que afecta a 12millones de personas en 88 países del mundo. Un alto porcentajede quien la sufre vive en regiones desfavorecidas y con escasoacceso a la atención médica. Esta enfermedad se transmite a loshumanos a través de la picadura de una mosca muy pequeña delgénero Lutzomyia, comúnmente llamada pringador o palomilla. Lamosca porta al parásito Leishmania en su intestino y lo inoculaal picar. En la piel del hospedador, la Leishmania comienza amultiplicarse dentro de los macrófagos, un tipo de células delsistema inmune, lo que provoca la formación de úlceras ycicatrices en la piel."No hay vacuna disponible y las opciones terapéuticas actualesson inaceptablemente tóxicas y con altas tasas de fracaso deltratamiento", explica María Adelaida Gómez, una jovenmicrobióloga colombiana que lleva 10 años investigandodiferentes aspectos de esta enfermedad y está tratando deidentificar alternativas más seguras y eficaces para estospacientes. En muchos casos, se trata de mujeres y niños en losque la infección genera "estigmas psicológicos con potencialimpacto en su desarrollo intelectual y económico", remarca lajoven.

Gómez estudió en la Universidad de los Andes (Colombia), sedoctoró en Microbiología e Inmunología en 2009 por laUniversidad de McGill (Canadá) y actualmente es la coordinadorade la Unidad de Bioquímica y Biología Molecular del CentroInternacional de Entrenamiento e InvestigacionesMédicas (Colombia). Al frente de su grupo de investigación hainiciado un camino novedoso en el estudio de la leishmaniasis,convencida de que el hecho de que los fármacos actualmentedisponibles no sean suficientemente efectivos no se debe sólo aque el parásito sea resistente a ellos, sino a un conjunto defactores, en su mayoría aún desconocidos.La joven explica que cuando un paciente acude a consulta, si seaísla el patógeno que causa su enfermedad y se analiza en ellaboratorio, a menudo se observa que el parásito es sensible alos medicamentos disponibles. El problema es que cuando elpaciente toma el fármaco, el tratamiento muchas veces no eseficaz. "En ese caso ese fracaso no es culpa del parásito, esalgo inherente al individuo mismo", explica la joven.

Por un lado, Gómez cree que para entender esta "fallaterapéutica" no sólo hay que analizar si el parásito esresistente, sino considerar también "su interacción con elmacrófago y los efectos del fármaco en dicha interacción". Porotra parte, la joven apuesta por diseñar herramientas para sabercuál será el desenlace del tratamiento, ya que el hecho decarecer de ellas hace que se administren medicamentos que, enmuchos casos, no mejoran el estado de los pacientes, provocantoxicidad y hacen que la Leishmania se vuelva más resistente.Gómez cree que obtener nuevo conocimiento sobre los factores quehasta ahora no se consideraban, y crear una forma de predecir silos fármacos van a ser o no efectivos en cada paciente, sentarálas bases para diseñar mejores estrategias terapéuticas. Ésta esuna necesidad imperiosa, asegura la joven, especialmente enzonas de bajos recursos que no son "una prioridad de laindustria farmacéutica".

¿Cómo se comportan tus macrófagos?Para abordar estos retos en el tratamiento de la leishmaniasis,la resistencia a los fármacos y su baja efectividad, Gómez hacreado un nuevo enfoque, que parte de los resultados de susinvestigaciones sobre el papel de los macrófagos en la respuestaal tratamiento.

Los macrófagos, las células donde el parásito se hospeda en elhumano, se encargan normalmente de controlar infecciones.Paradójicamente, la Leishmania es capaz de sobrevivir ymultiplicarse dentro de estas células que deberían aniquilarla,

a veces incluso aunque se haya administrado un tratamiento.Gómez y su equipo han descubierto que los macrófagos "afectan eltráfico y acumulación de uno de los medicamentos contra laleishmaniasis, el antimoniato de meglumina". Este hallazgoofrece una primera explicación sobre cuáles son los factoresexternos al parásito que pueden estar contribuyendo al fracaso oéxito de la terapia con los fármacos habituales.Partiendo de estos resultados, Gómez ha identificado una seriede genes humanos cuya expresión tiene relación con elcomportamiento de los macrófagos y el efecto de los medicamentoscontra el parásito, y tiene "un potencial impacto en eldesenlace terapéutico". Este conocimiento permitiría, en elfuturo, hacer un análisis directo al paciente para saber cómoactúan sus macrófagos y darle (o dejar de darle) alguno de losfármacos disponibles.

La joven afirma que quieren validar estos hallazgos en "unnúmero más grande de pacientes" e identificar "una variaciónmolecular" que sea detectable con "una prueba sencilla, tipoprueba de embarazo", ya que en este momento realizar eseanálisis es muy complejo y caro.

Gómez confía en que, al identificar dichas variaciones enfactores moleculares que determinan la eficacia del tratamientoen cada individuo, podrían diseñarse también "estrategiasterapéuticas que modulen el efecto de la variación". Su enfoquepermitirá, por una parte, hacer un uso más racional de losfármacos disponibles y preservar su vida útil, prescribiéndolossólo a los individuos que responderán a ellos. Además, si secombinan estos fármacos con otros que "aumenten subiodisponibilidad" y que "converjan en la actividadantiparasitaria" se podría incrementar su eficacia y reducir laexposición del paciente a medicamentos tóxicos.

Para el director ejecutivo y fundador de Guardly, Josh Sookman,que es miembro del jurado de los premios   MIT Technology Review   Innovadores menores de 35 Colombia , Gómez es unainvestigadora "bien preparada" que aporta con su trabajo "unaperspectiva innovadora para hacer frente a una necesidad clínicainsatisfecha de altísima relevancia e impacto local". Por suparte, el subdirector de MIT Technology Review, Brian Bergstein, quetambién es miembro del jurado, destaca que la novedad de suenfoque es "apasionante" y el impacto potencial de su nuevoenfoque "enorme"

Laura Parra, 24Ha desarrollado un sistema de sensores asociados a videojuegos para mejorar la rehabilitación de niños con problemas motricesUniversidad Pontificia Bolivariana

Una niña de cinco años llora, protesta y se sienta en el suelo.Lleva más de 20 minutos concentrada y no quiere seguir caminandopor la cinta ni subir y bajar escalones. Por mucho que sufisioterapeuta le anime, la sesión de rehabilitación le pareceaburrida y agotadora. Sin embargo, para esta pequeña, que sufreuna malformación en su columna vertebral que le impide moversecon normalidad, los ejercicios de rehabilitación son esenciales.Al ejecutarlos fortalece sus músculos y mejora sus capacidadesde interacción con su entorno.

Para conseguir mantener la atención y la motivación de pacientescomo ella, la joven Laura Parra, ingeniera electrónica porla Universidad Pontificia Bolivariana (Colombia), ha decididoservirse de un poderoso aliado: los videojuegos. Gracias a unsistema que los combina con diferentes sensores, esta joven haconseguido que las sesiones de rehabilitación se vuelvan lúdicasy mucho más atractivas para los pequeños.Generalmente, esta terapia dura aproximadamente una hora, en laque el niño, acompañado por su fisioterapeuta, hace ejerciciosen una banda caminadora, en una escalera y traslada objetos deun lugar a otro. Ahora, con la tecnología diseñada por Parra, elpaciente puede realizar la rehabilitación "de una maneraamigable", manejando un personaje que le representa en unapantalla. Cuando el niño se mueve, su avatar en el videojuego

también lo hace, y puede avanzar, esquivar y recoger objetos sinsalir de un juego que le traslada  a un bosque en las diferentesestaciones del año o, incluso, al espacio.

Tal y como explica Parra en su sistema existen tres niveles dedificultad para realizar la terapia. En el primero, el niñocamina despacio sobre la cinta, ayudado por una órtesis oexoesqueleto. Gracias a una serie de sensores que lleva encima,la señal con la información sobre su movimiento llega alordenador y a la pantalla. En los siguientes niveles, deberá irmoviéndose cada vez más rápido por los mundos del videojuego.

Inicialmente, Parra colocaba estos sensores (potenciómetros)directamente sobre la órtesis de los pacientes. Sin embargo,tras las primeras pruebas, decidió sustituirlos poracelerómetros que, en lugar de atornillarse al exoesqueleto, sefijan a la pierna o al brazo del niño mediante una bandaelástica o un guante. Cuando el paciente mueve la maño o lapierna, la posición del personaje en el videojuego cambia.

Por otro lado, el sistema de Parra es capaz de obtenerinformación de una serie de electrodos que se conectan a lasextremidades del niño y permiten conocer el avance de laterapia. Para lograrlo, Parra y su equipo diseñaron "una tarjetaque capta y aplica diferentes filtros a las señales deelectromiografía" que llegan al ordenador a través de los cablesde los electrodos.

En el caso de la niña de cinco años con la que probaron elsistema, Parra asegura que "se evidencio que la señal procedentede los músculos de una de sus piernas era mayor que en la otra",un dato que el fisioterapeuta puede tener en cuenta paraprogramar futuros ejercicios y conocer su progreso.

No obstante, la innovadora puntualiza que en las pruebas que hanrealizado hasta ahora "el paciente no puede tener puesta almismo tiempo la órtesis y los electrodos y, por tanto, no sepuede jugar y ver las señales de los músculos simultáneamente".Para superar esta limitación, su equipo ha ideado unaintervención en dos etapas: primero observan el avance delpaciente caminando en la banda caminadora con los electrodos; ydespués, colocan los sensores en la órtesis o en lasextremidades del paciente para que pueda jugar sobre la cinta.

Parra asegura que han constatado el "avance anímico" de lospacientes en los que han probado su sistema, ya que "en eltrascurso del proyecto se evidenció que querían seguir con laterapia, seguir jugando y realizando ejercicios". Aunque estos

resultados son sólo "cualitativos", en el futuro la joven esperarealizar pruebas de validación de la eficacia de la tecnología"con cierta cantidad de pacientes".

Adaptando el sensor al pacienteLas primeras pruebas de este sistema, con el prototipo basado enpotenciómetros fijados a la órtesis como sensores, tuvieronlugar en 2012 con pacientes de Centro Terapeútico Integral deNeurodesarrollo BOBATH de Bucaramanga (Colombia). Hace cincomeses, el equipo de Parra realizó más pruebas en el CentroTerapéutico Asopormen (Colombia), donde usaron su nueva versióncon un videojuego diferente y acelerómetros colocados con bandaselásticas.

Según la joven innovadora, el cambio de sistema se debió a lamayor sencillez en la captura del movimiento y en la conversiónde la señal que aportan los acelerómetros. "Ofrecen unaubicación precisa que con el potenciómetro estábamos obligados averificar constantemente", detalla. Además, la joven asegura queson más pequeños y cómodos, se colocan fácilmente en las bandasy son más resistentes a una manipulación brusca.

A diferencia de otros sistemas como Kinect, la tecnología ideadapor Parra permite que el terapeuta asista al niño durante larealización de los ejercicios sin interferir en su interaccióncon el videojuego. "El niño juega y detrás de él está elfisioterapeuta sosteniéndolo; con Kinect la cámara podríadetectar a los dos al mismo tiempo", explica Parra, quepuntualiza su sistema evita este problema al ser solo el niñoquien lleva el sensor.

Este año el equipo de Parra ganó la convocatoria regional delprograma Appsco y fue seleccionado para presentar su sistema enel Congreso Internacional de TIC Andicom 2013 celebrado enCartagena (Colombia).  Según ella, esta oportunidad les haservido para darse cuenta de que "enlazar medicina y tecnologíapermite avanzar en los tratamientos de rehabilitación física nosolo de niños, sino también en adultos". Además, les hapermitido "contactar con patrocinadores" e iniciar una búsquedade centros terapéuticos que "podrían estar interesados enadquirir su producto en el futuro", afirma la joven.

En opinión del líder de Videojuegos e Internet en Codesa S.A.,Ernesto Gálvez, que es miembro del jurado de los premios   MIT Technology Review   Innovadores menores de 35 Colombia , el proyecto deParra emplea "tecnología de punta para ayudar a sobrepasar elobstáculo de repetir una actividad física a pesar de las

molestias que pueda producir". Para Gálvez, la tecnología deesta innovadora es "una aplicación con un gran potencial de laque se pueden desprender muchos más desarrollos y empleos".