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INSTITUTO TECNOLÓGICO DE PEROTE BIOTECNOLOGÍA PROCESO DE TRANSESTERIFICACIÓN PARA LA OBTECIÓN DE BIODIESEL INGENIERÍA EN INDUSTRIAS ALIMENTARIAS Unidad VI Aplicación de la biotecnología en los alimentos Asesor: D.C. Faviola Sandoval Salas Alicia Méndez Colio 18/12/2015 Introducción

TRASESTERIFICACION PARA OBTECION DE BIODIESEL

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INSTITUTO TECNOLÓGICO DE PEROTE

BIOTECNOLOGÍA

PROCESO DE TRANSESTERIFICACIÓN PARA LA OBTECIÓN DE BIODIESEL

INGENIERÍA EN INDUSTRIAS ALIMENTARIASUnidad VI

Aplicación de la biotecnología en los alimentosAsesor: D.C. Faviola Sandoval Salas

Alicia Méndez Colio

18/12/2015Introducción

En el presente trabajo de investigación se describe el estudiado la obtención de biodiesel mediante transesterificación de aceites residuales de restaurantes y cocinas económicas pues resultan ser un problema a la hora de desechar para el medio ambiente.

El impacto ocasionado en el medio ambiente por el uso de hidrocarburos y combustibles fósiles ha motivado la necesidad de buscar otros tipos de energías sostenibles. El biodiesel representa una de las alternativas más interesantes, al reemplazar parcial o totalmente el diésel de origen mineral.

Los aceites vegetales constituyen la materia prima principal en la producción de biodiesel mediante procesos de transesterificación. En este proceso los triglicéridos reaccionan con un alcohol, en la presencia de un catalizador, originando ésteres alquílicos y glicerina obtenido mediante un proceso llamado transesterificación que consiste en la reacción entre las grasas (triglicéridos) presentes en un aceite vegetal con un alcohol de cadena corta que generalmente es metanol o etanol dando como productos los ésteres (biodiesel) y la glicerina.

Justificación

En el presente trabajo se aborda el proceso de transesterificación, que consiste en la obtención de biodiesel a partir de aceites de desecho.

El aceite doméstico usado se puede reciclar y es una acción sencilla que favorece al medio ambiente, evitando que se contaminen las fuentes hídricas y el suelo y afecte las tuberías, además de ser utilizado para la elaboración de jabones y biodiesel.

Los residuos de los aceites usados forman gruesas capas en las redes de alcantarillado una vez que son arrojados por los desagües provocando taponamientos y desbordamientos de las aguas negras, además de olores inaguantables, proliferación de animales roedores, bacterias y una extensa contaminación ambiental.

Todo residuo o desecho que pueda causar daño a la salud o al medio ambiente es considerado como un residuo peligroso; ante tal situación se busca reciclar tales desechos para obtención de biodiesel.

El reciclaje de aceites es considerado como una medida de mitigación que ayuda a reducir los gases de efecto invernadero y el calentamiento de la tierra.

Con este trabajo se pretende llevar a cabo medidas para reciclar correctamente el aceite de desecho y así reducir la contaminación del medio ambiente por este.

Es importante la preservación del medio ambiente y nada mejor que emprender una labor de reciclaje de los residuos de aceites usados con su respectivo tratamiento, reciclaje y valorización.

.

1. Transesterificación

El Biodiesel se produce gracias a una reacción química denominada transesterificación, lo que significa que el glicerol contenido en los aceites es sustituido por un alcohol ante la presencia de un catalizador.

Aunque la esterificación es un proceso posible, sin embargo el método utilizado

comercialmente para la obtención de biodiésel es la transesterificación

(también llamada alcohólisis).

Se basa en la reacción de moléculas de triglicéridos (el número de átomos de

las cadenas está comprendido entre 15 y 23, siendo el más habitual de 18) con

alcoholes de bajo peso molecular (metanol, etanol, propanol, butanol) para

producir ésteres y glicerina (que puede ser utilizada en cosmética,

alimentación, farmacia, etc.).

La reacción de transesterificación, que se presenta en la ilustración 1, se

desarrolla en una proporción molar de alcohol a triglicérido de 3 a 1,

reaccionando en la metanólisis 1 mol de triglicérido con 3 moles de alcohol

(aunque se añade una cantidad adicional de alcohol para desplazar la reacción

hacia la formación del éster metílico). El triglicérido es el principal componente

del aceite vegetal o la grasa animal. Además, la formación de la base de la

glicerina, inmiscible con los ésteres metílicos, juega un papel importante en el

desplazamiento de la reacción hacia la derecha, alcanzándose conversiones

cercanas al 100%.

Ilustración 1 Reacción de transesterificación

En la ilustración 2 se presentan las diferentes reacciones que tienen lugar en la

transesterificación, la cual consiste químicamente en tres reacciones

reversibles y consecutivas. El triglicérido es convertido consecutivamente en

diglicérido, monoglicérido y glicerina. En cada reacción un mol de éster metílico

es liberado.

Ilustración 2 Reacciones implicadas en la transesterificación

En la reacción de transesterificación se utiliza un catalizador para mejorar la

velocidad de reacción y el rendimiento final, que sin él no sería posible esta

reacción. Los catalizadores pueden ser ácidos homogéneos (H2SO4, HCl,

H3PO4, RSO3), ácidos héterogeneos (Zeolitas, Resinas Sulfónicas, SO4/ZrO2,

WO3/ZrO2), básicos heterogéneos (MgO, CaO, Na/NaOH/Al2O3), básicos

homogeneos (KOH, NaOH) o enzimáticos (Lipasas: Candida, Penicillium,

Pseudomonas); de todos ellos, los catalizadores que se suelen utilizar a escala

comercial son los catalizadores homogéneos básicos ya que actúan mucho

más rápido y además permiten operar en condiciones moderadas. En el caso

de la reacción de transesterificación, cuando se utiliza un catalizador ácido se

requieren condiciones de temperaturas elevadas y tiempos de reacción largos,

por ello es frecuente la utilización de derivados de ácidos más activos.

Sin embargo, la utilización de álcalis, que como se ha comentado es la opción

más utilizada a escala industrial, implica que los glicéridos y el alcohol deben

ser anhidros (<0,06 % v/v) para evitar que se produzca la saponificación.

Además, los triglicéridos deben tener una baja proporción de ácidos grasos

libres para evitar que se neutralicen con el catalizador y se formen también

jabones.

De esta manera las reacciones secundarias que se pueden dar son las

siguientes:

Reacción de saponificación

Reacción de neutralización de Ácidos grasos libres

El triglicérido reacciona con el catalizador básico, consumiendo éste, en

presencia de agua dando lugar a la formación de jabones (reacción de

saponificación), tal y como se puede ver en la ilustración 3.

Ilustración 3 Reacción de saponificación

1.1La saponificación

La saponificación está favorecida cuando se utiliza el hidróxido potásico o

sódico, ya que sus moléculas contienen los grupos OH responsables de esta

reacción. Así, cuando se utilizan estos catalizadores, se debe tener especial

precaución con las condiciones de reacción, especialmente la temperatura y la

cantidad de catalizador básico, para reducir al máximo la saponificación. Sin

embargo, los metóxidos sólo contienen el grupo OH como impureza, por lo que

su utilización no produce prácticamente jabones por saponificación.

En cualquier caso, se deben utilizar aceites y alcoholes esencialmente

anhídros, ya que el agua favorece la formación de jabones por saponificación.

Por este motivo, se debe eliminar el agua, mediante evaporación, en los

aceites con altos contenidos en humedad antes de llevar a cabo la

transesterificación.

Por otra parte, hay dos maneras de eliminar los ácidos grasos libres presentes

en el aceite. Así, se puede proceder a su neutralización, ya que los ácidos

grasos presentes en el aceite vegetal pueden reaccionar con el catalizador

básico (fundamentalmente NaOH) en presencia de agua, ocurriendo asimismo

una reacción indeseable, produciendo como en el caso anterior jabón, tal y

como se puede ver en la ilustración 4.

Otra manera de eliminar los ácidos grasos libres es mediante una reacción de

esterificación con un catalizador ácido con lo que se formaría el éster metílico.

Ilustración 4 Reacción de naturalización de ácidos grasos

1.2Reacciones de esterificación de ácidos grasos

El proceso que se utiliza para la producción de biodiésel es la

transesterificación, sin embargo la esterificación se viene aplicando

combinándolo con la transesterificación de cara a aprovechar el subproducto

de ácidos grasos y producir asimismo biodiésel.

Dada la importancia de los ésteres se han desarrollado numerosos procesos

para obtenerlos. El más común es el calentamiento de una mezcla del alcohol y

del ácido correspondiente con ácido sulfúrico, utilizando el reactivo más

económico en exceso para aumentar el rendimiento y desplazar el equilibrio

hacia la derecha (esterificación de Fischer). El ácido sulfúrico sirve en este

caso tanto de catalizador como de sustancia higroscópica que absorbe el agua

formada en la reacción. A veces es sustituido por ácido fosfórico concentrado.

En la práctica este procedimiento tiene varios inconvenientes. El alcohol puede

sufrir reacciones de eliminación formando olefinas, esterificación con el propio

ácido sulfúrico o de formación del éter, y el ácido orgánico puede sufrir

decarboxilación.

La reacción de esterificación aparece desarrollada en la ilustración 5.

Ilustración 5 Reacción de esterificación

1.3 Los catalizadores

Los catalizadores que se utilizan en este tipo de reacción, al contrario que en el

proceso de transesterificación que habitualmente son hidróxidos, son ácidos o

enzimáticos. En el caso de la esterificación, al contrario que en la reacción de

transesterificación, al utilizar catalizadores ácidos no es necesario recurrir a

trabajar con temperaturas elevadas y tiempos de reacción largos

2. ¿Qué es el biodiesel?

El biodiesel es un biocarburante líquido producido a partir de los aceites

vegetales y grasas animales, siendo la colza, el girasol y la soja las materias

primas más utilizadas en la actualidad para este fin. Las propiedades

del biodiésel son prácticamente las mismas que las del gasóleo (gasoil) de

automoción en cuanto a densidad y número de cetano. Además, presenta un

punto de inflamación superior. Por todo ello, el biodiesel puede mezclarse con

el gasóleo para su uso en motores e incluso sustituirlo totalmente si se adaptan

éstos convenientemente.

La definición de biodiésel propuesta por las

especificaciones ASTM (American Society for Testing and Material Standard,

asociación internacional de normativa de calidad) lo describe como ésteres monoalquílicos de ácidos grasos de cadena larga derivados de lípidos

renovables tales como aceites vegetales o grasas de animales, y que se

emplean en motores de ignición de compresión. Sin embargo, los ésteres más

utilizados, son los de metanol y etanol (obtenidos a partir de la

transesterificación de cualquier tipo de aceites vegetales o grasas animales o

de la esterificación de los ácidos grasos) debido a su bajo coste y sus ventajas

químicas y físicas.

A diferencia de otros combustibles,

los biocarburantes o biocombustibles presentan la particularidad de utilizar

productos vegetales como materia prima. Esto es la causa de que sea preciso

tener en cuenta las características de los mercados agrícolas, junto a la

complejidad que ya de por sí presentan los mercados energéticos. En este

sentido, hay que destacar que el desarrollo de la industria de los

biocombustibles no depende principalmente de la disponibilidad local de

materia prima, sino de la existencia de una demanda suficiente. Al asegurar la

existencia de una demanda de biocombustibles, el desarrollo de su mercado

puede aprovecharse para potenciar otras políticas como la agrícola,

favoreciendo la creación de empleo en el sector primario, la fijación de

población en el ámbito rural, el desarrollo industrial y de actividades agrícolas, y

reduciendo a la vez los efectos de la desertización gracias a la plantación de

cultivos energéticos.

En cuanto a la utilización del biodiésel como combustible de automoción, ha

de señalarse que las características de los ésteres son más parecidas a las del

gasoil que las del aceite vegetal sin modificar. La viscosidad del éster es dos

veces superior a la del gasoil frente a diez veces ó más de la del aceite crudo;

además el índice de cetano de los ésteres es superior, siendo los valores

adecuados para su uso como combustible. ASTM ha especificado distintas

pruebas que se deben realizar a los combustibles para asegurar su correcto

funcionamiento.

3. Proceso de obtención de biodiesel

A continuación se explica cómo fabricar biodiésel a partir

de aceites y grasas que han sido utilizados en la cocina, aunque el método

también sirve para aceites nuevos. Además del aceite o grasa, sólo se necesita

unos pocos productos químicos  y un equipamiento.

El biodiesel obtenido es un combustible, en algunos casos, más barato que

el diésel del petróleo, limpio, no tóxico, renovable, y de gran calidad que se

puede utilizar en cualquier motor diésel sin ningún tipo de modificación.

3.1 Recomendaciones para el proceso de obtención de biodiesel.

Para realizar el procedimiento es necesario contar con ciertas medidas de seguridad:

Es recomendable utilizar guantes, delantal, gafas protectoras, y una máscara

especial para evitar respirar los vapores del metanol, en caso de no contar con

esta última, se debe evitar estar expuestos directamente a los vapores.

En concentraciones elevadas el metanol puede causar dolor de cabeza, mareo,

náusea, vómitos y hasta la muerte. Una exposición aguda puede causar

ceguera o pérdida de la visión. Una exposición crónica puede ser causa de

daños al hígado o de cirrosis. Además, no hace falta beberlo, ingresa

directamente por la piel. El hidróxido de sodio es corrosivo, por lo que puede

causar quemaduras graves. Cuando se mezclan forman metóxido de

sodio (metóxido), que es extremadamente caústico. Son productos muy

peligrosos por lo que es preciso tener mucho cuidado.

También es importante tener siempre cerca un grifo de agua corriente. El lugar

de trabajo tiene que estar muy bien ventilado. No debe haber

cerca niños ni mascotas.

4. Productos Necesarios

4.1 Aceite

El primer ingrediente es el aceite o la grasa. El aceite vegetal que puede

tratarse como desecho en la mayoría de los hogares o que puede recolectarse

gratis de muchos restaurantes.

Las industrias que preparan biodiesel en una escala muy grande son capaces

de utilizar la grasa usada de freír, aceite de pescado, grasa animal y otras

clases de aceites. Una ventaja acerca de la elaboración de biodiesel es que se

puede hacer de muchas sustancias diferentes, en su mayor parte, desechos.

4.2 Alcohol

El segundo ingrediente es el alcohol. El Metanol se usa generalmente para la

elaboración con aceites vegetales reciclados. Cuando se utilizan aceites

nuevos, es posible la mezcla con etanol.

Hay que aclarar que tanto el metanol como el etanol son materiales muy

peligrosos. Hay que evitar inhalarlo y el contacto con la piel y los ojos. Siempre

se debe de utilizar guantes aptos para la manipulación de estas sustancias,

protectores para los ojos y máscara para la cara, además de trabajar siempre

en lugares bien ventilados.

4.3 Catalizador

El último ingrediente es el catalizador. Se pueden utilizar tanto el KOH

(hidróxido de potasio) como el NaOH (hidróxido de sodio o soda caustica). La

ventaja del KOH es que la glicerina que queda del proceso es mucho menos

tóxica que cuando se utiliza NaOH. En este caso, es posible procesar la

glicerina para producir un fertilizante artificial. El KOH tiene también la ventaja

de que se disuelve mucho mejor en metanol. Sin embargo, la ventaja del NaOH

es que es muy simple y barato de conseguir porque se lo utiliza normalmente

como destapador de cañerías y a su vez es fácil de manipular.

Asegúrese de utilizar NaOH con una pureza de por lo menos el 96%. El KOH

de esa pureza es bastante difícil de encontrar, pero uno de entre el 92% y el

85% puede funcionar bien. Ambos, el NaOH y el KOH son químicos muy

peligrosos. Hay que tomar precauciones cuando se utilizan estos químicos.

5. Proceso de elaboración de biodiesel

5.1 Filtrado de las impurezas del aceite

El primer paso para la obtención de biodiesel es filtrar el aceite para quitarle los restos de comida. Es mejor calentarlo hasta 35º C (95º F), aproximadamente, para que esté más fluido y pase bien por el filtro.

5.2 Quitar el agua presente en el aceite

El aceite que ha sido utilizado para cocinar es el más propenso a contener

agua, esto hace más lenta la reacción y favorece la saponificación. En

la transesterificación, es mejor que contenga menos agua presente en

cualquiera de los componentes del proceso.

Tras el filtrado para quitar restos de partículas se calienta el aceite hasta los

100º C (212º F) y mantiene a esta temperatura mientras el agua se evapora. Se

debe agitar constantemente para evitar que se formen burbujas de vapor.

Cuando empieza a salir menos vapor, se aumenta la temperatura hasta 130º C

(265º F) y mantiene durante diez minutos. Finalmente se reirá del calor  y se

deja enfriar.

5.3 Proceso de Valoración

Es necesario medir la acidez del aceite con un método que se

llama valoración. Es la parte más importante y más ‘difícil’ del proceso ya que

la valoración debe ser lo más exacta posible.

El NaOH hidróxido de sodio, también llamado sosa cáustica y lejía a veces.

Se utilizan como catalizador en la producir biodiesel. Es importante protegerle

de la humedad dentro de recientes herméticos.

Parar este proceso se prepara una disolución de un gramo de NaOH en un litro

de agua destilada asegurándose de que está totalmente disuelta. Esta muestra

sirve como valor de referencia en el proceso de valoración. Es importante que

esta disolución no se contamine porque puede ser utilizada en

muchas valoraciones.

Posteriormente se mezcla en un recipiente pequeño 10 ml de alcohol

isopropílico con 1 ml del aceite (se debe estar seguro de que es exactamente 1

ml). La muestra de aceite debe ser previamente calentada y agitada.

Se añaden dos gotas de fenolftaleína, que es un indicador ácido-base

incoloro en presencia de ácidos, y rojo en presencia de bases.

La fenolftaleína se conserva bien durante aproximadamente un año. Se

degrada fácilmente con la luz y empieza a dar medidas erróneas después de

este tiempo.

Con un cuentagotas graduado se agregara en la disolución de

aceite/isopropílico/fenolftaleína, gotas de la solución de NaOH. Cada gota

debe tener dos décimas de ml, medidas con mucha exactitud.

Después de cada gota se agita vigorosamente la disolución. Si todo sale bien,

luego de una cantidad de gotas, la disolución se volverá magenta (rosa) y

mantendrá ese color durante diez segundos. El magenta debe indicar un pH de

entre 8 y 9.

El objetivo de la valoración es averiguar el número de ml de solución de NaOH

necesarios para alcanzar un pH de entre 8 y 9.

Es recomendable hacer la valoración más de una vez para comprobar que

la medida sea correcta. Dependiendo del tipo de aceite, de la temperatura que

pudo haber alcanzado en la freidora, de los alimentos que fueron cocinados en

él y del tiempo de uso, la cantidad de disolución de NaOH necesaria en la

valoración suele ser de entre 1,5 y 3 ml.

5.3.1 Cómo calcular la cantidad de HaOH

El siguiente paso es calcular la cantidad de HaOH necesaria para la reacción.

Se debe multiplicar el número de ml medidos en la valoración por el número

de litros de aceite que se desea convertir en biodiésel.

Cada litro de aceite que NO ha sido cocinado (aceite nuevo) necesita 3,5 gr de

HaOH para la reacción. Por eso hay que sumar 3,5 gr de HaOH por cada litro

de aceite cocinado que se vaya a convertir en biodiésel.

Por ejemplo: si en la valoración fueron necesarios 2,4 ml para alcanzar el pH

8-9 y vas a usar 150 litros de aceite.

2,4 gr HaOH x 150 l aceite = 360 gr HaOH

3,5 gr HaOH x 150 l aceite = 525 gr HaOH

360 gr + 525 gr = 885 gramos de HaOH

Normalmente hacen falta entre seis y siete gramos de HaOH por cada litro de

aceite.

Es recomendable hacer varias pruebas con distintas cantidades de HaOH para

saber cuál es la cantidad más adecuada.

Cuando hay demasiada HaOH a veces se forma una pasta inservible. Si no hay

suficiente HaOH la reacción no se completa y queda aceite mezclado con

el biodiésel y la glicerina. Cuando esto ocurre, se forman tres capas: el

biodiésel arriba, el aceite en medio y la glicerina en el fondo. Si había

mucha agua mezclada con el aceite se forman jabones que luego forman

una capa sobre la de glicerina. Es difícil separar los jabones del biodiésel y la

glicerina.

5.4 Preparación del metóxido de sodio

Generalmente la cantidad de metanol necesario es del 20% en masa de

la cantidad de aceite. Las densidades de los dos líquidos son

bastante parecidas; también debería funcionar con el 20% en volumen. Para

estar completamente seguros.

Para esta etapa se debe medir medio litro de cada

líquido, pesarlos y calcular exactamente el 20% en masa. Distintos aceites

pueden tener distintas densidades dependiendo de su procedencia y de cómo

hayan sido utilizados.

Por ejemplo: para 100 litros de aceite hacen falta 20 litros de metanol.

Cuando se mezcla el metanol con el hidróxido de sodio (lejía) se produce

una reacción exotérmica cuyo resultado es el metóxido de sodio.

Exotérmica quiere decir que desprende calor. Los utensilios que entren en

contacto con la lejía deben estar totalmente secos.

Advertencia: se debe tratar al metóxido de sodio con extremo cuidado. No

respirar sus vapores. Si se cae sobre la piel produce una quemadura que

muchas veces no se nota porque va matando los nervios. Hay que lavar la

zona con muchísima agua. Cuando se manipula metóxido de sodio se debe

tener siempre cerca agua corriente.

El metóxido de sodio también es muy corrosivo para las pinturas.

La lejía reacciona con el aluminio, el estaño y el zinc. Se puede

utilizar recipientes de vidrio, acero inoxidable, o esmaltados. Los mejores son

los de acero inoxidable.

5.5 El proceso de transesterificación

Para que la reacción química se produzca sin problemas, se calienta el aceite hasta aproximadamente los 48-54º C (120-130º F).

También se es necesario mezclar el aceite con mucha cautela. Un giro

demasiado rápido produce salpicaduras y burbujas y perjudica al resultado

final.

Luego se vierte el metóxido en el aceite mientras se bate, y se

sigue agitando la mezcla durante 50 ó 60 minutos. La reacción suele

completarse en media hora, pero es mejor batir durante más tiempo.

Durante la transesterificación los ácidos grasos se separan de la glicerina, y

el metanol se une a ellos formando metilésteres ó etilésteres (si se utiliza

etanol). El hidróxido de sodio estabiliza la glicerina.

5.6 La decantación para separar el biodiésel de la glicerina

Tras mesclar se deja que repose al menos durante una hora después de

la reacción, manteniendo la temperatura por encima de 38º C (100º F). De esta

forma la glicerina se mantiene semilíquida (solidifica por debajo de 38º C) y

se hunde antes. Después hay que decantar el biodiésel con cuidado.

Se pueden separar la glicerina y el biodiésel por un agujero del fondo del

reactor a través de un tubo transparente. La glicerina semilíquida es de

color marrón oscuro; el biodiésel es del color de la miel. Primero saldrá

la glicerina y cuando empiece a salir biodiésel se cambia la salida del tubo a

otro recipiente. Si cae algo de biodiésel en el recipiente de la glicerina es fácil

recuperarlo cuando la glicerina se espesa.

Si la glicerina se solidifica antes de separarla del biodiésel, se puede calentar

nuevamente para licuarla, pero evitar agitarla para que no se vuelva a mezclar

con el biodiésel.

5.6.1 Restos de jabón

Mezclado con el biodiésel también hay jabón. Cuando el metanol se une a

los ácidos grasos se forma agua. El aceite también puede contener agua.

El jabón se forma porque el ion Na+ del hidróxido de sodio (NaOH) reacciona

con los ácidos grasos en presencia de agua.

Si hay un exceso de agua en la mezcla durante la reacción, se forman

más jabones de lo normal. El aceite que ha sido cocinado puede

contener agua y hay que quitársela como puedo verse en los primeros pasos.

Es muy importante evitar la presencia de agua durante la preparación del

metóxido. Todos los objetos que entren en contacto con la lejía deben

estar totalmente secos. El biodiésel suele salir mejor en días secos que en días

húmedos.

5.7 Proceso de lavado y secado del biodiésel

El método de lavado y secado del biodiésel para llevarlo a una calidad

óptima para usarlo como combustible consiste en separar los jabones del

combustible lavándolo con agua una o varias veces. En el primer lavado es

mejor añadir un poco de vinagre (ácido acético) al agua. Con el ácido

acético se consigue que el pH del biodiésel sea casi neutro, porque se une a

los restos de lejía y los neutraliza.

Para realizar este proceso se vierte primero agua en el recipiente hasta

completar aproximadamente un tercio del volumen. Luego, se agrega el

biodiésel. Después de agitar con cuidado estos dos líquidos, se deja

que repose algunas horas hasta que se ve claramente la separación de los dos

líquidos. El biodiésel limpio queda encima y el agua con los jabones

disueltos se puede sacar por una válvula localizada en el fondo del recipiente.

Se repite este proceso dos o tres veces para retirar todo el jabón. El segundo

lavado y el tercero pueden hacerse sólo con agua. Después del tercer lavado,

el agua que queda puede separarse calentando lentamente hasta que el agua

se evapore completamente y el biodiésel deje de borbotear. El producto final

deberá obtener un pH 7.

El biodiésel presenta un aspecto más limpio y cristalino después de lavarlo.

5.8 Calidad del biodiésel

La calidad del biodiésel terminado puede comprobarse visualmente y midiendo

su pH. El pH puede medirse con papel tornasol o con un medidor electrónico.

Debe ser neutro (pH 7). Debe tener el aspecto del aceite vegetal, pero con un

matiz marrón, parecido a la sidra.

Es malo que haya una película sobre la superficie, partículas o turbiedad. La

película superficial puede ser de restos de jabón, y se quita lavándolo de nuevo

o pasándolo por un filtro de cinco micrones (o más fino). La turbiedad puede

ser agua y se quita calentando. Las partículas pueden ser cualquier cosa y

aparecen cuando los filtros fallan.

Todos los aceites parecen cristalinos cuando están calientes, pero los que son

realmente cristalinos siguen siéndolo cuando se enfrían. Si el biodiésel frío no

está cristalino, se deja que repose una o dos semanas más para que las

impurezas se hundan.

Es importante saber que el biodiésel limpia muy bien los restos de diésel

mineral del interior del motor. Por eso se debe comprobar y cambiar los filtros

de combustible cuando se comienza a usar biodiésel.

Conclusión

Los biocombustibles, aunque no son la solución a los problemas energéticos, económicos y ambientales, son un medio por el cual se puede llevar a cabo la transición energética de una economía sustentada en los combustibles fósiles a una economía mundial basada en fuentes renovables de energía, entre ellas el biodiesel.

El proceso de obtención de biodiesel conlleva al aprovechamiento de desechos como en este caso el aceite de cocina que se puede recolectar de cocinas económicas, restaurantes o de amas de casa, resultando más económico y además así se evitaría que el aceite usado llegue a los drenajes provocando malos olores y contaminación.

Bibliografía

Castellar 2014 “Transesterification vegetable oils using Heterogeneous catalysts”, Prospect, Vol 12, N° 2, 90-104, 2014. http://www.scielo.org.co/pdf/prosp/v12n2/v12n2a10.pdf consulta 17/12/2015

Fernando Olmedo 17 de agosto de 2010 Transesterificación (biodiésel) de aceites vegetales catalizada por ácidos http://www.biodisol.com/temas/biocombustibles/biodiesel/ consulta17/12/2015