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Revista quincenal de la familia que trabaja en la Casa InspectorialMarzo del 2013 - Año 3. Número 52-53

Editorial

“La Semana Santa es como una síntesis de Dios, de la Iglesia, de cada uno”

La Semana Santa es la semana más santa: protagonismo de Dios, el santo de los santos; protagonismo de Cristo, el amor encarnado, que amó hasta el extremo; el pro-tagonismo de los cristianos que absolutizamos el amor: cuanto más amamos más nos parecemos a Dios y más humanos somos .

La Semana Santa la “inventaron” los judíos ¡vaya “mérito”! A Cristo lo apresaron, torturaron y mataron ellos,” aliados”, para esto, con los romanos. Como dice el pue-blo: “los intereses hacen siempre extraños compañeros de cama”.

En el momento de la despedida definitiva de uno, se da lo mejor de sí mismo, el testamento. Cristo dijo a los discípu-los “ pequeño rebaño”, “ya no les llamo siervos sino AMIGOS”, les lavó los pies, se quedó “ en el pan y el vino” para no dejarlos huérfanos.

Cargó con la cruz de nuestros peca-dos, murió “por” nosotros aunque fue por culpa de los judíos. Siempre igual: estor-ban los profetas y estorban los testigos.

En la cruz dijo Jesús: “Padre, ¿por qué me has abandonado?”. Y quizás dijo también aunque no lo escribieron : “Ami-gos ¿ por qué me han abandonado?” Y yo me figuro que nos mira a cada uno y pregunta: “Amigo, ¿por qué me abando-nas?”

Y cuando resucitó, nos grita: ¿por qué no me sigues? ¡Sígueme!

Es Pascua, el triunfo total y definitivo.

Alfonso Francia

Cristo resucita, Cristo nos resucita

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Símbolos cristianos de siempre

Son los cuatro elementos naturales y “vitales”. El cristiano vive la naturaleza con natu-ralidad, es la gran aliada de Dios, la que utiliza para crearnos, mantenernos y ayudarnos a crecer. Y nos ayuda a descubrirle a Él, a cantarle a Él, a sentirla como intermediaria entre Él y el hombre, su creatura también.

Te invito a leer los pasajes bíblicos donde aparecen estos elementos-símbolos, tú solo o con los hijos, pareja, grupo etc Y sería también bueno rezar a partir de ahí, celebrar y sacar conclusiones.

No faltes a las celebraciones de Semana Santa en tu parroquia. Si no puedes, celebra con tu familia o amigos.

1.-El agua. Sana, purifica, quita la sed…Recuerda el paso del Mar Rojo, liberación de Israel, el Nilo de Moisés, liberación de Egipto, bautismo en el Jordán, conversión del agua en vino, lavatorio de los pies…, de su costado manaron agua y sangre.

Está muy bien bendecir con agua, tener agua bendita en casa, recordar a Dios en el agua (toda agua es salvadora, sin ella no podemos vivir). Cristo fuente de agua viva. La samaritana en el pozo...

2.-El fuEgo. Purifica, endurece, forja, destruye. Sodoma y Gomorra, el carro de Elías, la zarza ardiendo. El fuego de Pentecostés...

3.-El airE. Es vida, lleva el polen, purifica y sanea, soplo de vida, viento del Espíritu. “Dios es como el viento, no se ve pero se respira”.

4.-la tiErra. Dios nos hizo de barro, curó al ciego haciendo lodo, la tierra prometida “donde mana leche y miel”, abandona a tu tierra, dijo Dios a Abraham, el grano que cae en buena tierra…

( en Semana Santa ayudan a reflexionar y vivirla con más autenticidad y fuerza)

a ti, que tienes vivencias salesianas te invito a formar parte de algún grupo de la familia Salesiana. Contacta al p. alfonso francia, delegado para la familia salesiana del Perú.

(afranciah@gmail.com; cel: 989125810)

¡ invitaCión !

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En la universidad de la vida

El signo de la cruzNo somos masoquistas ni sádicos: vemos en la cruz la firma en sangre de quien nos liberó,

Cristo. Y es el paso necesario para llegar a la resurrección definitiva, al paraíso. Todos los mortales llevamos nuestras cruces y morimos. Ni nos quedamos en la cruz ni nos quedamos en la tumba: “si Cristo ha resucitado, nosotros resucitaremos”.

Rarezas de Dios: hace el mundo de la NADA, se hace hombre como nosotros, nace de una virgen, se perpetúa en la eucaristía, un condenado a muerte nos da la vida muriendo…

“Adoramos tu cruz y te bendecimos porque con tu santa cruz redimiste al mundo”

Sólo Dios da respuestas “fiables” a cada uno. Los demás, a menudo, damos cada explicación, cada consejo, cada información, cada catequesis, cada homilía…Uno se pregunta qué tiene que ver con la vida real de cada uno y con lo que Dios verdadera-mente quiere. Cristo es la Palabra encarnada, la no encarnada es bla bla bla...

①.-Estudiando teología en Lyon-Francia, íbamos dos españoles a la universidad, con sotana, como entonces se estilaba. Se nos acerca un mendigo y nos dice en fran-cés si le dábamos alguna limosnita…Nosotros nos “defendimos hablando estudiada-mente” en mal francés, para que se diera cuenta que éramos españoles estudiantes y por lo tanto sin dinero…

El buen hombre nos mira fijamente y nos dice en correcto castellano: “Bueno, si llego a saber que son curas españoles no les pido”.

La imagen cuenta mucho. Quizás desde entonces se convenció más de que era inútil pedir a curas españoles. Yo sí aprendí la lección: no se puede andar por la vida saliendo de apuros de cualquier manera. Él saco mala conclusión, yo la saqué buena.

②.-En una guerra, fue derribado un avión. Logró salvarse el piloto. Cayó con su paracaídas en lo alto de un árbol. Se quedó silencioso y observando para averiguar si había caido en campo amigo o enemigo. Se jugaba la vida. Aguantó mucho tiempo pero pensó que tenía posibilidades de salvarse si estaba en terreno amigo…Por fin, se atrevió a gritar al primero que pasaba por el camino:

-Por favor, ¿me puede decir dónde estoy?

-Usted está en un árbol.

-Muchas gracias, catequista, Dios te lo premie.

-¿Por qué sabe usted que soy catequista?

- Muy fácil: usted da respuestas que no sirven para nada.

- Aprenda usted a preguntar... y siguió su camino.

Son muchos los valores y cualidades. Un valor suele conllevar otros. Educarse, edu-car en algunos que están a la raíz de otros muchos es ganar tiempo y lograr mayor eficacia. Y hoy, es imprescindible y urgente educar en valores: a la persona, a la familia, a profesionales, sociales, religiosos.

Para ayudar a conocer más y mejor, relacionar unos con otros, verlos en la vida de cada día, trabajarlos para enriquecerse, para educar a hijos, alumnos, catequizandos…enumero todos estos.

Te propongo que hagas en casa, en familia, con alumnos o hijos, con amigos:

1. Añadir otros

2. Juntarlos por parecidos.

3. Juntar los que hacen relación: a) al cerebro, inteligencia, ideas, b) al corazón, sentimientos, emociones, c) a la voluntad, esfuerzo, trabajo, constancia, d) acción, dinamismo, movimiento, c ambio…,e) a la fe en Dios, en uno mismo, en los demás f) a la Semana Santa, g) a la Pascua, h) los que más tienes, i) los que más necesitas, j) los más característicos de Cristo y del cristiano k) los que más valoras, l) los que más interesa a la gente de hoy…

Solidaridad- Autenticidad – Fidelidad- Bondad-Agradecimiento- Responsabilidad- Libertad- Amistad-Belleza- Paz- Laboriosidad- Justicia-Autocontrol- Autoestima- Austeridad- Alegría-Altruismo- Calma- Compasión- Comprensión-Confianza- Autoconocimiento- Cordialidad- Reflexión-Creatividad- Generosidad- Decisión- Diálogo-Delicadeza- Dignidad- Diligencia-Disciplina- Disponibilidad- Educación-Eficacia- Elegancia- Entusiasmo- Equilibrio-Esfuerzo- Esperanza- Espiritualidad- Estabilidad-Carácter- Familiaridad- Fe- Felicidad- Firmeza- Fortaleza-Gozo intelectual- Gratitud- Heroicidad- Honradez-Higiene mental- Hospitalidad- Humanidad- Humor-

El valor de educar en valores

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Ideal- Identidad- Ilusión- Modestia-Imaginación- Autonomía- Singularidad- Madurez-Magnanimidad- Mansedumbre- Misericordia-Moral- Naturalidad- Obediencia-Optimismo- Orden- Paciencia- Piedad-Poder- Realización-Razonabilidad- Relajación mental- Respeto- Riqueza-Sabiduría – Salud - Bienestar Seguridad SencillezSentimiento- Serenidad- Sexualidad- Silencio-Tiempo- Tolerancia- Trabajo- Trascendencia-Urbanidad- Valentía- Voluntad- Aceptación de sí- Flexibilidad- Iniciativa.

Se fue pero no se fue. ¡Benedicto bendito! En todas las personas, aunque sea Vicario de Cristo, hay errores, defec-tos, impotencias, pecados, sufrimientos, pero en él hay muchas más gracias, ale-grías y euforias. En él, no muy explosivas por su temperamento y estilo, no creo que por opciones.

Los fallos y pecados no deben hundir-nos. Los apóstoles y primeros cristianos no eran mejor que nosotros. ¿Y los san-tos? Algunos no hubieran sido tan santos si no hubieran sido tan pecadores…

Los fallos, errores, limitaciones y pe-cados forman parte del barro que somos y de la voluntad de Dios que nos hizo de barro y de espíritu.

Cuanto más se ama, más se exige, se es más feliz, ¡y también se sufre más! ( en todos los aspectos de la vida: el amor humano, educación, pastoral, deportes, asociación, partido político…)

El Papa Benedicto lo pensó bien y lo rezó: decidió renunciar al Papado, y se retiró a un Convento. Cristo se retiró muchas veces para rezar: antes de empe-zar la vida pública y al terminarla, en el monte de los Olivos. Benedicto consideró que el papel de Vicario era tan vital - ¡no vitalicio!- que requería dar toda la vida, en plenitud de energías. Sabía que el Es-píritu deja la vida, la Iglesia y mil cosas en nuestras manos.

Se fue pero se queda

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Agradecemos a los tres amigos que dejan su tarea entre nosotros

Hemos cantado muchas veces. “Adiós con el corazón, que con el alma no puedo; al despedirme de ti, al despedirme me muero”. Y tambien se canta: “Algo se muere

en el alma cuando un amigo se va...” Señores Otto, Bromley y señora Guadalupe no dejan aquí un vacío, dejan muchas cosas: amor a lo nuestro, disponibilidad, servicio...

se van pero se quedan. Se van pero nos llevan. Gracias

Hasta Él se pone en nuestras manos. Benedicto no era elegido de Dios desde la eternidad para la eternidad, no para ser eterno en el servicio de Papa.

En ningún organigrama de empresas se ha inventado una función, un puesto de trabajo para recoger los impresos de renuncias de personajes y personajillos, se moriría de aburrimiento. Benedicto, al dejar su papel con su renuncia, ha dado trabajo a muchos: ha llenado el espacio, los espacios, el ciberespacio. Cuando una vela se apaga, echamos en falta la luz y valoramos más la cera, que se inmola.

Benedicto fue luz, fuego y cera.

Afrontó muchos escándalos en la Igle-sia, santa y pecadora. Por el calvario de su sinceridad y valentía, merece un mo-numento en todas las Iglesias y plazas de las ciudades.

Creo que si aguantó tantos chaparro-nes y ciclones de escándalos en la Iglesia es porque conocía muchos más profe-tas y testigos que pecadores en todos los rincones del mundo. Él renuncia al “cargo-carga” , por falta de fuerzas, no se retira, como tampoco Cristo, sólo repone fuerzas para seguir peregrinando en una última meta. La persona, el creyente, el papa, expresa su amor en la acción-servi-cio, en la contemplación… ¡en la renuncia!

Habemus papam…¡aleluyaa! ¡aleluyaaa!La renuncia de Benedicto nos ha traído la alegría del nuevo Papa, Francisco, que ha

caído de pie en el mundo católico y social. Se necesitaba ya un papa así: familiar, cerca-no, pueblo, austero, enemigo de los protocolos en razón de la sencillez evangélica, en versión franciscana ( por eso el nombre de Francisco –de Asís-) y en versión salesiana pues tiene mucho de salesiano: estudió un año en un colegio de Buenos Aires, tuvo a un salesiano como director espiritual y se ha mostrado siempre muy vinculado a don Bosco, María Auxiliadora y a santos salesianos.

Estamos en los primeros días ( es su Domingo de Ramos, en que todos le aclaman). Es como la luna de miel. Seguro que terminará muy pronto y empezarán a darle palos y sacarle los trapos sucios de la Iglesia o a inventárselos. Vendrán para él nuevas cruces

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(30 de marzo, sábado de Gloria)

Me ordené en Lyon-Francia el 1963. Muchísimos me superarán en santidad, inteli-gencia, autoridad, imagen social, cargos…No es fácil superarme en la felicidad de mi vida sacerdotal, llena de gracia y pecado, grandezas y miserias, pero “ donde abunda el pecado sobrea-bunda la gracia”.

Sólo quiero dar gracias a Dios, y los que me quieran que se unan a mí en esta acción de gracias.

Dios seguirá, no lo dudo, dándome lo que necesito, y Él ne-cesita de mí.

Lo expreso en este sencillo y sentido poema.

y calvarios. Pero es valiente, sufrido y de gran espiritualidad. Cuenta con las oraciones, que él siempre pide, de miles y miles.

Lo mejor de él a mi juicio, lo que más me entusiasma, es su opción por los pobres y necesitados, una opción que creo que va a mantener contra viento y marea; y que va a crear una sensibilidad mucho mayor en la Iglesia-y también en la sociedad-sobre el tema de la pobreza en todos los aspectos, que cruje y escandaliza- .La lucha contra la pobreza nos puede salvar, de lo contrario la pobreza nos ahoga a todos, quizás en sangre.

Un temor: hemos leído muchas encíclicas, circulares, libros…Hemos participado en muchas jornadas, congresos, foros… Todos estamos de acuerdo en lo fundamental y teórico.

La “nueva evangelización” sigue siendo un bello ideal, una bella idea, que en mu-chos sitios va a envejecer y morir…sin estrenar.

La renuncia de Benedicto nos pareció a todos sensacional pero…¡no veo renuncias que tendrían que darse en racimo…!

¿Pasará lo mismo con el fondo y las formas de Francisco? ¿Quedará en co-mentarios positivos, en aplausos, en citas de lo que dice y hace?

Es que la tortuga, con tanto peso enci-ma y tan poco espíritu, se defiende y casi no avanza.

! Qué gesto tan significativo ! -y tan sa-lesiano ! -: celebrar el Jueves Santo en una cárcel de menores.

En mis Bodas de Oro Sacerdotales

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Director: Alfonso Francia sdb, Delegado para la Familia Salesiana del Perú e-mail: afranciah@gmail.com / oficinaalfonsofrancia@gmail.com / www.familiasalesiana.pe Consejo de Redacción: Elvira Jiménez, Elsa Lazo, Víctor Pérez, Elena Ganoza, Marco Calderón. Impreso en: Gráfica Editora Don Bosco / Diseño: Jonathan E.

Poema de acción de gracias

Alfonso Francia, sacerdote salesiano( Lyon 30 marzo 1963- Perú 2013)

Gracias porque la “Casa de san José” ( sus mo-radores) representa mucho para mí. Gracias a cada uno de los que están y de los que fueron.

Gracias, Padre, por la vida, por la fe y la vocación;

gracias por llamarme un díapara ser eucaristía

y ministro del perdón.

Y gracias, Padre, mil graciaspor la altísima misión

de proclamar tu Palabra,portadora de esperanza,

de paz y resurrección.

Gracias por sentir la urgencia, sentir la audacia y pasión

por hacer un mundo nuevo, más libre, justo y fraterno,

más según tu corazón.

Y gracias por tantas gracias:por tantisimos hermanos,

por tantisimos testigos,por tantisimos amigos,

que tuve siempre a mi lado.

Gracias, Padre, por don Bosco,gracias por mi Auxiliadora,los pusiste en mi camino,para llevarme al destino:¡mi felicidad de ahora!