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El Magallanes • 1 domingo 15 de marzo de 2015 www.laprensaaustral.cl

11El Magallanes domingo 15 de marzo de 2015www.laprensaaustral.cl

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Silvestre Fugellie Mulcahy

Un incansable narrador magallánico a sus 90 años

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Imágenes íntimas del gran escritor magallánico

Mario Isidro Moreno

“Junto a mi amigo y “yunta” Ra-fael Barrientos fuimos al varade-ro de Violic y Doberti, en la pla-ya Ecuatoriana e influenciados por las competencias de boga de

aquellos años y queriendo emular a los me-jores remeros, sacamos un bote de aquellos que estaban en los cúteres de reparación y nos internamos en las aguas del estrecho de Magallanes.

Sentimos la emergencia cuando las co-rrientes nos habían internado casi dos mil metros en el mar. Afortunadamente una nave de la Gobernación Marítima de Pun-ta Arenas nos rescató, requisando el bote y ordenándonos en forma estricta nunca más volver a bogar”.

Esta escena retrospectiva del pasado, nos permite entrar en la vida de Silvestre Fuge-llie Mulcahy, uno de los escritores más ga-lardonados de Magallanes y que, sin embar-go, asombra por su sencillez humildad y una llaneza de la que carecen otros literatos de

tanta trascendencia e importancia.El racconto nos lleva a los orígenes fami-

liares, cuando su abuelo Otto Fugellie y un hermano, escapan de Noruega para lo cual se ocultan en un barco de la firma de su pa-dre. ¿La razón? Falta de entendimiento con la segunda esposa de su progenitor que era demasiado estricta. En su viaje al sur, murió su hermano, arribando solo a Montevideo, capital del Uruguay, donde lo esperaba una orden de aprehensión, quedando en calidad de detenido en una pensión inglesa donde conoció a la hija de la propietaria, de la cual se enamoró contrayendo matrimonio tras-ladándose ambos a las islas Malvinas, donde tuvieron seis hijos.

El atractivo de la noticia del oro en Maga-llanes trajo a la familia hasta Punta Arenas, donde se establecieron en forma definitiva y donde en 1923 vio por primera vez la luz en la zona austral.

“Mi padre Otto Fugellie -capitán Mercan-te- con un potentado local de apellido Sam-sing, fueron a instalar una pesquería en la isla Dawson. Mientras realizaban estas acti-

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Silvestre con su esposa y sus hijos.El conocido hombre de letras es uno de los escritores más destacados de Magallanes.

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vidades, al cocinero que les preparaba sus alimentos se le enfermó su mujer grave-

mente y no había cómo tras-ladarla a la ciudad. Mi papá entonces preparó un bote, le puso un mástil, vela y enfiló rumbo a Puerto Harris. En el trayecto los sorprendió un temporal que hizo zozobrar el velerito muriendo todos los ocupantes. Yo tenía seis meses de edad, mi padre había cumplido recién 33 años”.

El semblante de Silves-tre denota la tristeza que le embarga en sus recuerdos con este tipo de situaciones que fueron templando su espíritu y le concedieron la sapiencia para entregar a los lectores, humanas narracio-nes en sus múltiples libros publicados, que lo llevaron a ser galardonado con mu-chos premios y distincio-nes, entre los que destacan ser nombrado Miembro de la Academia Chilena de la Lengua y ganar el Premio Poeta José Grimaldi.

“Mi madre, Bridget Mul-cahy, quedó con cinco hijos pequeños y tuvo que luchar para darnos el sustento. Yo era el menor y vi cómo mi progenitora fue surgiendo gracias a su empeño, prime-ro como peluquera ondula-dora, luego con una pensión y finalmente con un hotel en la Avenida Colón”.

Se queda pensando cuan-

“Con la experiencia que me ha dado vivir más de 90 años, les envío un mensaje a la juventud actual: huyan de los vicios ya que son malos y perjudiciales en todo orden y sentido. Si logran éxito en la vida no sean avaros, porque no es bueno sólo reunir dinero para sus propias complacencias y no darse la satisfacción de realizar algo en beneficio de la comunidad”

A sus 90 años, Silvestre Fugellie Mulcahy sigue activo como escritor.

Su padre Otto Fugellie.

F Sigue en la P.4

do le consulto cómo fue su vida de niño y luego no tre-pida en darme la respuesta: “fue tirada a lo pobre”. Se turnaban con sus hermanos para ayudar a su progenito-ra, hacían la comida, el aseo y Silvestre, como el menor, era el ayudante de todos y el que más trabajaba.

Su primera escuelita fue la Anexa y luego la Superior N° 1 para más tarde ingresar al Instituto Comercial y luego al trabajo.

La analepsis o flashback, lo lleva rápidamente a su época de niño y en sus evo-caciones parece disfrutar de los juegos y “maldades” propias de la infancia.

“Nos reuníamos los chi-cos del barrio a divertirnos y a participar en los juegos comunes de la época, las bolitas, el trompo, la mancha, elevar vo-lantines, etc. A ve-ces trato de olvidar


mis maldades que en todo caso no eran tan terribles, pero que me crean malos recuerdos porque destruía los bienes públicos. Me en-cantaba tirar piedras, es-pecialmente a las ampolle-tas del alumbrado público y una vez logrado el propó-sito de romperlas huíamos del lugar. Claro que ese tipo de faltas, comparadas con las que ahora hacen los niños como por ejemplo rayar las murallas o los mo-numentos. Si mi padre nos hubiera sorprendido en eso seguro nos habría dado una ejemplar paliza”.

¿Cómo empieza un poe-ta y escritor a hilvanar sus primeros trabajos? Silves-tre me dice que desde niño le dio por escribir versos y recitar, por lo cual en su es-cuela lo tenían de “casero” para considerarlo en todos los programas culturales para que diera a conocer el arte de la declamación.

“Comencé a escribir tí-midamente y, en cierta oportunidad, dos pensio-nistas del hotel de mi ma-dre me escucharon recitar mis propios poemas se pu-sieron a reír, causándome tal desilusión que tomé el manojo de versos y los quemé. Pero, no obstante

aquello, normalmente sen-tía esa necesidad y de vez en cuando me venía la ins-piración para escribir. Con el tiempo, comencé a reali-zar trabajos exclusivamen-te referidos a Magallanes, especialmente en cuanto a los sucesos históricos ya que mis recuerdos son de épocas que yo viví y al con-versar con representan-tes de distintas corrientes migratorias que llegaban a nuestro hogar y compar-tían sus historias vividas a partir de su arribo a esta región; de esa mezcla que se producía entre extran-jeros cuando se casaban un alemán con una inglesa, un croata con una chilena, etc. Me encantaba escribir sobre cómo se fueron for-mando las industrias de la mano de estos esforzados pioneros, sin mirar por su-puesto los conceptos de ri-queza o pobreza sino de su labor pionera”.

Al hacer un análisis de la Región de Magallanes, me dice que siempre fue una zona muy aislada y ajena al ‘metropolitismo ‘y eso

es porque mucha gente del norte no conoce la realidad de este lugar de Chile y se emiten órdenes en la capi-tal que acá causan risa y de esa manera se fue criando acá una raza de gente au-tóctona, pero nunca des-vinculada de Chile, por sentir que estaban hacien-do patria en este confín del mundo.

“Es tanto así que cuando vino a Punta Arenas Ga-briela Mistral con la misión de ‘chilenizar’ a las maga-llánicas y, al mismo tiem-po, enviaron desde Santia-go un profesor de apellido alemán para chilenizar a los hombres. Lo mismo ocurrió en la década del ‘70 cuando se realizó una campaña de alfabetización y chilenidad para vestir de huaso a los campesinos re-gionales. Eso no es posible porque sentirse chileno es cosa espontánea, nace con el individuo, no se puede inculcar”.

Fugellie ha publicado una serie de libros como “Solana del Viento”, “Sin-fonía en Alba Mayor”, “Los Muros del Silencio”, “Fau-na Ficción” e “Imágenes Intimas”, entre otros, y ha visto reproducido sus ver-sos en antologías apareci-das tanto en Chile como en el extranjero.

Durante años, tuvo res-ponsabilidades directivas en la Sociedad de Escrito-res de Magallanes. Al re-cordar aquellos años se en-camina a un especial lugar de reunión de los antiguos literatos.

“Nos reuníamos en la Subsede, bar ubicado en calle Chiloé, al lado de la Sociedad de Empleados, local de propiedad de una amiga que permitía nues-tras tertulias donde con-currían Osvaldo y Enrique Wegmann, Marino Muñoz

Lagos, Carlos Vega Letelier, Rosa de Amarante, Ma-nuel Andrade Leiva y Jor-ge Rubén Morales. Al calor de un buen mosto nacían ideas espectaculares que se planteaban posteriormente en reuniones de la Socie-dad de Escritores de Maga-llanes”.

Alegrías, amarguras, sa-tisfacciones, desagrados, todo ello forma parte de la vida de un ser humano.

“Alegría y satisfacción puedo decir que las sen-tí después que comencé a trabajar y con ello se fue formando mi carácter, contraje matrimonio con Ema Vukasovic y pude edu-car a mis hijos. Desagrados y amarguras quedaron en mí al perder a uno de mis hijos y recientemente a mi

esposa luego de 70 años de matrimonio”.

“Con la experiencia que me ha dado vivir más de 90 años, les envío un mensaje a la juventud actual: huyan de los vicios ya que son ma-los y perjudiciales en todo orden y sentido. Si logran éxito en la vida no sean avaros, porque no es bueno sólo reunir dinero para sus propias complacencias y no darse la satisfacción de realizar algo en beneficio de la comunidad”.

Desde hace 60 años co-labora con La Prensa Aus-tral y El Magallanes. Y al preguntarle hasta cuándo piensa escribir, con esa simplicidad y forma espon-tánea de expresarse emplea el dicho popular: “Hasta que las velas no ardan”.

Desde hace 60 años colabora con La Prensa Austral y El Magallanes. Y al preguntarle hasta cuándo piensa escribir, con esa simplicidad y forma espontánea de expresarse emplea el dicho popular: “Hasta que las velas no ardan”

Una foto de su matrimonio., con Ema Vukasovic.

Su madre y hermanos Leonel y Otto.

Otto, Madre, Pedro, Silvestre, Leonel y Magallanes.

E Viene de la P.3

¿Cómo empieza un poeta y escritor a hilvanar sus primeros trabajos? Silvestre me dice que desde niño le dio por escribir versos y recitar, por lo cual en su escuela lo tenían de “casero” para considerarlo en todos los programas culturales para que diera a conocer el arte de la declamación


Para gobernar adecuadamente se re-quiere de varios factores: tener claro cuales deben ser los proyectos para tratar en el Congreso Nacional y tra-bajar con cada iniciativa con ahínco

y entereza. El gran problema de todo gobierno que aspire a realizar muchas cosas en la breve-dad del tiempo (cuatro años) es llevar adelante esas aspiraciones a través de proyectos de ley que se deben tramitar en el Congreso Nacional.

Escuchamos hace más de 30 años a un políti-co que dijo: “Cuando un gobierno no puede so-lucionar alguna cuestión especial, simplemente designa una comisión”. Esto puede encontrar al-guna solución o simplemente la autoridad tiene otra alternativa: dejar tal tema para que la resuel-va “el próximo gobierno”. Este sistema ha sido utilizado por la Presidenta Michelle Bachelet al terminar su primer mandato, y lo expresó cuan-do se le dio a conocer un estudio sobre el posible uso de la energía nuclear en Chile, y ella simple-mente dijo: “Esta materia la dejamos pendiente para que la resuelva el próximo gobierno”.

En aquella oportunidad el “próximo gobier-no” fue el de Sebastián Piñera, y entre sus pri-meras decisiones envió una misión de expertos a los Estados Unidos para iniciar conversaciones sobre el tema. Además viajaron profesores uni-versitarios a Francia para contactar a especia-listas. Se produjo un problema de los llamados “imponderables”, porque en esos mismos días hubo un fuerte terremoto en Japón y le acom-pañó un tsunami con mucha fuerza que dejó pérdidas cuantiosas además de muchos muer-tos, heridos y desaparecidos.

La aspiración de construir una planta de energía nuclear en Chile quedó pendiente qui-zás por muchos años, aunque en un foro de la Universidad de Tarapacá al que concurrió en aquel tiempo el entonces senador Ricardo Núñez, quien era presidente de la Comisión de Minería de la Cámara Alta escuchó voces que se refirieron a esa posibilidad.

En Chile no se ha vuelto a tocar el tema, aun-que la energía nuclear se utiliza en muchos paí-ses de Europa y en Rusia, además de Estados Unidos, Brasil y Argentina, que acaba de inau-gurar otra planta que estará pronto en funcio-namiento (Atocha).

En el foro al que hacemos referencia se dijo que el país tenía buenos lugares para montar una planta como son los sectores cordilleranos del norte chileno.

El análisis que se entregó a Michelle Bache-let era muy claro. En Chile era posible construir una planta nuclear, pero antes era necesario estudiar todas las posibles alternativas, como la electricidad proveniente de los vientos o quizás de los mares. Además se requerían ingenieros especializados en el tema.

Luego de los daños y otras consecuencias que dejó el tsunami en Japón no se ha vuelto a tocar el tema en nuestro país.

Cuando Michelle Bachelet asumió la Presi-dencia por segunda vez se encontró con una serie de propuestas en que se destacaba una sustancial Reforma Tributaria, para obtener re-cursos indispensables para iniciar un cambio en la enseñanza. La iniciativa fue perfeccionada en el Senado, y así se entiende que el Estado, fisco y gobierno tendrá este año unos ocho mil mi-llones de dólares destinados exclusivamente a la Reforma Educacional.

Hoy han surgido varias comisiones desig-nadas por la Presidenta para analizar temas pendientes destacando una reforma previsio-nal, porque se ha captado luego de estudios de expertos que es indispensable un cambio para evitar pensiones “enanas” para muchos jubila-dos que recién dejaron de trabajar. Hasta el mo-mento dicha comisión de unos 30 expertos no ha dicho nada, salvo expresar a la Presidencia que requerían unos seis meses más para estudiar el tema, y por lo tanto; quizás para mediados de

año habrá luz verde.No es novedad que haya que estudiar por años

la situación de la previsión en Chile. El Presi-dente Jorge Alessandri pretendió un análisis de-signando para presidir dicho estudio al abogado Jorge Prat Echaurren, pero terminó el gobierno de Jorge Alessandri Rodríguez, y sólo se logró un estudio contenido en varios tomos, pero el estado de la previsión en ese año 1960 es abso-lutamente diferente a lo que hay hoy, luego que el ministro José Piñera realizara un cambio sus-tantivo a ese tema.

También está en estudios previos, una llama-da Reforma Constitucional, pero en ese tema no hay comisión analizando la materia, en que hay opiniones muy variadas, desde quienes aspiran a una reforma total y hacer una nueva Carta Ins-titucional y los que desean cambios utilizando lo que señala la actual Constitución.

En ese tema no hay comisión alguna, salvo declaración que hizo antes de asumir el actual

ministro de Justicia, y otras expresiones, de la ministra Ximena Rincón, en el sentido que la Presidenta le había encargado monitorear ese proyecto del cual en los últimos meses no se ha sabido nada.

El impacto que ha tenido en la opinión públi-ca y en la prensa la situación provocada por la empresa Penta, que aparece entregando recur-sos a numerosos personeros políticos, los que recibían cheques por abultado monto enviando una boleta “ideológicamente falsa”, puesto que no correspondían a ningún trabajo. Eran boletas o facturas “fuleras”, lo que provocó la actuación de los tribunales y en la parte previa hay varios empresarios, y funcionarios del Servicio de Impuestos Internos (SII) y varios etcéteras que podrían ser procesados. Seis personajes están en prisión preventiva, pero el hecho logró que al menos dos cadenas de televisión emitieran en vivo y en directo todos los debates. Incluso un ex subsecretario de Minería del gobierno del Presidente Piñera está recluido por orden del juez que conoce la causa.

A su vez, la Presidenta Michelle Bachelet de-signó una comisión para analizar las relaciones entre los negocios y la política.

Lo extraño es que estas comisiones son gru-pos de trabajo al margen del Congreso Nacional y llamó la atención que al Palacio de La Mone-da acudieron los 15 integrantes de la comisión nombrados por la Presidenta y causó sorpresa aquella tarde a diputados y senadores cuando se constituyó el grupo de trabajo y esos congresa-les se paseaban mirando a los integrantes de esa instancia.

Los senadores y diputados que acudieron a La Moneda en calidad de “mirones” quizás se pre-guntaron: “¿Qué hago yo aquí”?.

El arte de gobernar con comisiones

Germán GamonalEspecial para El Magallanes

La Presidenta Michelle Bachelet designó una comisión para analizar las relaciones entre los negocios y la política. Lo extraño es que estas comisiones son grupos de trabajo al margen del Congreso Nacional y llamó la atención que al Palacio de La Moneda acudieron los 15 integrantes de la comisión nombrados por la Presidenta y causó sorpresa aquella tarde a diputados y senadores cuando se constituyó el grupo de trabajo y esos congresales se paseaban mirando a los integrantes de esa instancia

Esta semana la Presidenta Bachelet presentó a los integrantes del Consejo Contra los Conflictos de Interés, que

abordará el tráfico de influencias y la corrupción. Tendrá un plazo de 45 días para presentar propuestas.

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El Día Internacional de la Mujer, que ce-lebramos el 8 de marzo de 2015 fue para mí muy especial. Tuve el orgullo de ser la primera mujer en haber asumido la presidencia del Senado, en 203 años

de vida independiente en nuestro país. Asimismo, fue un honor que en mi calidad de segunda auto-ridad del Estado, y a través de nuestro tradicional rito republicano, ponerle la banda a Michelle Ba-chelet Jeria, cuando asumió el 11 de marzo de 2014, como Presidenta de la República de Chile.

Dos mujeres, dos socialistas, dos víctimas de la dictadura militar. Sabíamos que sería una foto histórica como lo fue, pero lo más importante es que cuando nos abrazamos, ambas nos dijimos que nuestros padres estarían orgullosos de ese momento y sentíamos que estaban con nosotras, reivindicando la ética y las convicciones democrá-ticas que siempre les acompañaron.

El hecho que las dos primeras autoridades de Chile seamos mujeres, no se expresa necesaria-mente en una real igualdad, y eso es importan-te recordarlo. Nuestro Parlamento no supera el 15,8% muy por debajo del 25% de Latinoamérica y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde).

Menos del 50% de las chilenas participa del mercado laboral (48%), y siempre son las primeras en abandonar el trabajo si es que hay que hacerse cargo de los hijos, los ancianos, los enfermos o las personas con capacidades especiales.

Es por ello que los cambios políticos y legisla-tivos que se han producido en este primer año de gobierno, son importantes para sentar las bases de buenas prácticas en materia de igualdad de género que queremos instaurar en el Estado chileno.

En primer lugar, la Reforma al Binominal, el sistema político que nos dejó la dictadura militar y al cual -después de 25 años de vida democrática- estamos poniendo fin, e incorporado el Sistema de Cuotas. Ello nos permitirá -en las sucesivas y próximas cinco elecciones- disponer de un meca-nismo que promueva una equivalencia de 60/40 entre las candidaturas, de tal manera que ningún género esté representado por sobre esta propor-ción.

Esta es la principal reforma política que acaba-mos de aprobar en el Parlamento. Con ello se sus-tituye el sistema electoral binominal por uno de carácter proporcional inclusivo: se fortalece nues-tra democracia, diversificamos nuestro Congreso Nacional y sobre todo, terminamos con un sistema que sólo daba espacio a dos grandes bloques políti-cos, situación que se ve reflejado en nuestro Poder Legislativo actual.

Esperamos que el Congreso sea el espacio donde la sociedad se vea lo más fielmente representada. Por ello, el establecer un porcentaje de cuotas es clave, ya que debemos promover una mayor par-ticipación política de las mujeres, en el acceso al poder y la toma de decisiones.

También aprobamos la creación del Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, pronto a pro-mulgarse por parte de la Presidenta Bachelet, en el próximo Día Internacional de la Mujer. Este Minis-terio tendrá entre sus facultades proponer políticas y programas orientados a fomentar y materializar la equidad de género, la igualdad de derechos y fun-damentalmente eliminar todo tipo de discrimina-ción contra las mujeres, como asimismo, tendrá la tarea de formular el Plan Nacional de Igualdad.

Igualmente legislamos y aprobamos la modifi-cación de la jornada laboral, descanso y compo-sición de la remuneración de las trabajadoras de casa particular, cuestión muy relevante para un importante sector de mujeres de nuestro país, y también de mujeres migrantes que se están que-dando en Chile.

Asimismo, la Presidenta presentó el proyecto sobre la interrupción del embarazo bajo tres cau-sales, el cual por cierto apoyaré durante su trami-tación legislativa, ya que considero que es un de-recho humano fundamental para las mujeres.

Buscando apoyar esta orientación en pro de la igualdad de género, presenté un proyecto de ley en materia laboral que establece la obligación que en los directorios de empresas públicas, ningún género pueda representar más 60% de la compo-sición total.

En el mundo corporativo, un número cada vez mayor de reportes indican que existe una correla-ción positiva entre la proporción de mujeres en los niveles más altos y el rendimiento de las empresas. Es así como una visión diferente de los negocios puede otorgar nuevos aires a una empresa, y sería muy pertinente que también las empresas priva-das comenzaran a avanzar en ello.

Todavía en Chile, a pesar que este 2014 que acaba de terminar y el 2015 que empieza cuenta con dos mujeres a cargo de las dos principales instituciones de la República, aún nos falta mucho por avanzar. Espero que muchas mujeres, de todos los sectores y estratos sociales, de todas las edades sigan atre-viéndose a participar en la política. No nos faltan capacidades, lo que nos faltan son oportunidades.

Agradezco y valoro el importante rol que ha te-nido la Presidenta Michelle Bachelet, abriéndonos a todas un horizonte en Chile que hasta su primer gobierno no teníamos.

No olvidaré cuando las mujeres, de todas las edades, se pusieron la banda presidencial y reco-rrieron las calles de todo Chile, porque desde ese día ya no teníamos ningún límite para acceder a cualquier cargo de poder.

Espero que, tal como dijo nuestra Presidenta de la República, al inaugurar el Encuentro de Onu Mujeres realizado a fines de febrero, no tengamos que esperar 81 años para que alcancemos una efec-tiva igualdad de género entre hombres y mujeres, en Chile, y en el mundo. A lo que agrego, y no ten-gamos que esperar otros 203 años para que otra mujer sea Presidenta del Senado.

Isabel Allende Bussiex Presidenta del Senado

Nicolás Harambour Nieto, soció[email protected]

Twitter: @nharambour uncalcetindelana.com

Los ingleses de Sudamérica

Esta semana me tocó viajar desde Santiago a Bue-nos Aires, como enlace en Río Gallegos. Al llegar a la capital trasandina me quedé esperando en vano mi maleta. Le ocurrió lo mismo a otros 7 pasajeros, entre los cuales naturalmente había otros chilenos,

que mucho más pronto que tarde se indignaron, y comencé a escuchar frases del tipo “¡Bah! Por eso están como están los ar-gentinos”.

Como iba a estar varias horas en Buenos Aires, el dependiente de la aerolínea me aconsejó salir nada más, y volver un poco antes de mi segundo vuelo a preguntar por la maleta. Al volver al aeropuerto, se produjo el siguiente diálogo:

- “Llegué en vuelo desde Santiago y quiero saber qué pasa con mi maleta”.

- “A ver el ticket... Ah, no. Esta valija está para irse con vos di-recto a Gallegos”.

- “Ok, ¿me quedo tranquilo entonces, la recibo allá?”.- “No te quedés nunca tranquilo con nosotros, eh”.- “Jaja bueno, entonces si llego y la maleta no está, ¿reclamo

allá?”.- “¡Pero no llamés a la mala suerte tampoco!”.De este lado del cerro, hace días que estamos inmersos en este

impresionante reality legal que es el Caso Penta. Y, así como con el vergonzoso Caso Caval, muchos acusaron un golpe al discurso de meritocracia y lucha contra la desigualdad del gobierno, con el Caso Penta, muchos se lamentan de que esta vergonzosa ocu-rrencia esté haciéndose eco en los medios internacionales, mos-trando que Chile no es tan distinto a los demás países en cuanto a corrupción.

Esperen un poco. Si supusiera una gran cantidad de lectores gitanos, y yo fuera uno, les pediría que dejáramos de consultar-nos la suerte mutuamente. Los argentinos han incorporado ya a su patrimonio cultural el desorden institucional, los atrasos en las fechas, y la corrupción en su política. Y no lo discutiré dema-siado; vivimos con la tele sobre una caja de cartón y durmiendo en colchones en el suelo durante tres meses cuando nos fuimos a vivir a Buenos Aires, por los reiterados atrasos en llevar los mue-bles. Y a nadie le sorprendía demasiado.

Pero en Chile somos buenos para hacernos los lesos. No he co-nocido otra nación donde en el día a día, en el discurso privado y en confianza, y en la mecánica en que operan la economía, la política, el empleo, el arte y la ciencia, reine tanto el amiguismo, el “pituto”, el “ser pillo”. El pillo es la figura de orgullo culpable del chileno. El que “la hace”. El que fue más inteligente que el sistema. El que aprovechó una mezquina ventaja. El que sabe usar acordarse de los amigos cuando conviene. El que se dio cuenta de que podía falsear información tributaria sin que se den cuenta. El que tiene el auto personal de lujo a nombre de la empresa y com-pra jamón serrano en el supermercado y pide factura.

En el microcosmos chileno, todas prácticas fáciles de justificar con algún reclamo sobre cómo “nos roban a diario”. Sobre cómo todos lo hacen y el que no, es huevón. Sobre cómo, la magnitud de lo que hago no se compara con los verdaderos delincuentes...

Y eso nos duele ahora, nos duele porque ahí entre los cara-duras que en sus declaraciones muestran cero consciencia de su grave delito, acusando una persecución política en el solo hecho de transparentar esta vergonzosa exposición de falta de ética y respeto por la ley, nos reflejamos todos. Se refleja ese vano orgullo de ser los “ingleses de Sudamérica”. Y, ¿qué cresta significa eso, en todo caso? Da para otro momento discutir so-bre el pariente del pillo... el insoportable arribista.

Necesitamos muchas mujeres en la política


Fue el primer fiasco del genoma huma-no, o eso se creía. Cuando se presentó el libro de la vida a principios de siglo, uno de los datos más chocantes fue la pre-sencia de docenas de genes bacterianos

intercalados entre los propiamente humanos, pero el ardor duró bien poco, y la conclusión fue atri-buida a un error. No lo era. Quince años después de aquella encendida polémica, un análisis que se beneficia de los grandes avances recientes de la genómica demuestra por encima de toda duda que nuestro ADN contiene 145 genes de origen micro-biano. Y son importantes.

Según una información del diario español El País, el trabajo de Alastair Crisp y sus colegas de la Universidad de Cambridge no se limita al ADN humano, sino que examina los genomas de otras 9 especies de primates, 12 de moscas y cuatro de gusanos, además de un análisis parcial de otros 14 vertebrados. Esta amplia perspectiva a lo largo de la evolución demuestra que la donación de genes por otras especies (transferencia horizontal, en la jerga) es común en los animales, y que da lugar a decenas o cientos de genes de origen microbiano activos en según qué especie. Los resultados se presentan en Genome Biology.

Los genes importados de las bacterias y otros microbios cubren funciones que no parecen ele-gidas al azar: la gran mayoría tienen relación con el metabolismo, la cocina de la célula, o conjunto de reacciones químicas que gestionan sus flujos de energía y la regeneración de sus componentes.

El corazón del metabolismo es constante -y universal en la biología-, pero la adaptación de cada especie a su entorno local requiere a menudo nuevas aptitudes metabólicas para gestionar las singularidades químicas del medio: ahí es donde los genes importados de las bacterias pueden re-sultar cruciales.

En nuestra especie, los investigadores han con-firmado 17 genes que ya eran sospechosos de pro-cedencia extranjera, y han identificado 128 adi-cionales. Uno de ellos es el gen Abo responsable del grupo sanguíneo.

Los demás están en su mayor parte relaciona-dos con el metabolismo de las grasas y los ami-noácidos, la respuesta inmune, la inflamación y las actividades antioxidantes de la célula. Como se ve, buena parte de nuestra interacción con el mundo microbiano se basa en genes adquiridos de los propios microbios.

Ninguno de estos genes es una adquisición re-ciente: las transferencias genéticas ocurrieron antes de que evolucionara la especie humana, y muchas de ellas antes de la aparición de los pri-

mates, a lo largo de la tortuosa historia evolutiva de los vertebrados. Pero eso mismo es una indi-cación de su importancia, puesto que han esta-do funcionando durante decenas de millones de años.

La donación de genes entre especies, o trans-ferencia horizontal, es cualquier cosa menos una sorpresa en el mundo microbiano. Las bacterias se intercambian genes con tal eficacia que, según una estimación reciente, más del 80% de los ge-nes bacterianos han estado implicados en algún momento de la evolución en un intercambio en-tre especies.

Este mecanismo explica, entre otras muchas cosas, la facilidad con que las bacterias adquieren resistencia a los antibióticos, y el peligro de que

cepas microbianas inocuas se conviertan en viru-lentas de la noche al día.

Es en el mundo animal donde la transferencia horizontal era hasta ahora polémica, salvo en ca-sos muy especiales. Por ejemplo, se sabe que los gusanos nematodos han adquirido genes de bac-terias y hasta de plantas, y que algunos escaraba-jos han importado genes bacterianos que ahora les permiten digerir las semillas de café. También hay insectos de la familia de los ápidos que han im-portado genes para la síntesis de los carotenoides (los colorantes del tomate y la zanahoria) que les confieren una coloración naranja útil en su entor-no.

“Este es el primer estudio que muestra la am-plitud con que la transferencia horizontal de genes ocurre en los animales, incluidos los humanos, dando lugar a cientos de genes foráneos activos”, explica el primer autor del trabajo, Alastair Crisp, de Cambridge. “De manera sorprendente, lejos de ser un fenómeno raro, resulta que la transferencia de genes ha contribuido a la evolución de muchos animales, quizá de todos ellos, lo que implica que tenemos que reconsiderar la forma en que pensa-mos sobre la evolución”.

Los donantes de genes no son solo bacterias, sino también protistas (organismos unicelulares eucariotas, es decir, hechos del mismo tipo de cé-lula que constituye nuestro cuerpo) y virus. Estos últimos son particularmente importantes en la evolución de nuestro linaje, los primates. Tam-bién hay algunos genes procedentes de hongos, que son la principal razón de la polémica original: se pensó que se había descartado su procedencia por transmisión horizontal, cuando solo se había descartado su origen bacteriano.

Estamos acostumbrados a ver a las bacterias como el enemigo a batir. Pero también son parte de nuestra lógica más profunda.

El genoma humano contiene genes donados por microbios- Un nuevo estudio demuestra la polémica “transferencia horizontal” de ADN en los animales.

La bacteria ‘bacillus cereus’, una de las implicadas en la transferencia genética.

Ciencia


Lugares

Dos alternativas de trekking imperdibles: faro San Isidro y bahía El Aguila

A 75 kilómetros al sur de Punta Arenas pode-mos escoger el perfecto lugar

para realizar una caminata, conociendo los puntos más significativos del inicio de la Región de Magallanes: el faro San Isidro.

Inaugurado en 1904, con una altura de 7,8 metros y un alcance luminoso de 9 millas náuticas, este im-portante faro forma parte de una cadena de 8 ele-mentos de esta clase a lo largo del estrecho de Ma-gallanes. Se ubica en el ex-tremo sur de la Península de Brunswick, y alberga

un museo que cuenta la historia del faro desde sus acontecimientos más an-tiguos, hasta la actualidad, destacando las especies de flora y fauna más recono-cidos del lugar. Este punto de encuentro está rodeado de un bello entorno y un inolvidable paisaje, don-de se aprecia el estrecho de Magallanes en hermo-sos tonos y desde donde se pueden avistar especies marinas que van pasando, a veces delfines magallá-nicos, y otras, aves de la zona. Desde ahí se divisa la Cruz de Froward -el punto más austral del- además del conocido Fuerte Bulnes

y el océano.Luego de caminar algu-

nos metros hacia el este, es posible adentrarse en un frondoso bosque de un circuito que recorre 2,3 kilómetros. En un sende-ro cuya altura asciende los 50 metros sobre el nivel del mar, se halla una señaléti-ca de identificación de su bella flora. Entre las espe-cies se puede contemplar principalmente el coihue y el canelo, además de otra variedad de árboles de la zona. El recorrido cuenta con un mirador principal desde donde se aprecia una maravillosa vista al monte Sarmiento, que da inicio a

Caminando hacia el bosque, hay que pasar por la playa para tomar el destino al sendero que conduce a bahía El Aguila

Bárbara López y Juan Antonio Soto estaban fascinados con la flora del circuito, caminando entre

un bosque frondoso y húmedo.

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Por Macarena Núñez

la cordillera de Darwin.La caminata termina

aproximadamente una hora después en la pla-ya, hasta llegar a bahía El Aguila, cuya importancia histórica recae en la socie-dad ballenera de Magalla-nes, construida a princi-pios de siglo XX, donde se realizaban operaciones de caza y faenamiento de ce-táceos. Contaba con cinco cañoneras y hoy, muchos turistas se dirigen al lugar para conocer los vestigios y restos que quedan de ella.

Alrededor, existe una variada mezcla de flora, en las que se destacan los ar-bustos y calafates, además de las rocas ubicadas en la playa, repletas de molus-cos adheridos a ellas con el paso de las olas.

Al llegar al faro San Isidro, es necesario subir una escalera que conducen al patrimonio regional.

El faro posee un museo que cuenta la historia del lugar, desde sus inicios a la actualidad. Es posible subir con un guía que relatará los acontecimientos importantes.

El faro fue construido en 1904 por el escocés George Slight, inspector general de faros, y el contratista chileno Luis Camuzi.

En medio del trekking, se puede realizar una parada en el mirador, desde donde se toman

fotografías al estrecho de Magallanes y sus especies nativas de alrededores. Jorge Sandoval

disfrutaba del paisaje junto a su esposa Liliana Ulloa.


Sin lugar a dudas, la presencia de la mujer en esta región tiene una importancia vi-tal en el desarrollo de

la vida de las distintas comuni-dades.

Tanto las mujeres originarias de las distintas razas de este cono sur, como las pioneras y las actuales integrantes feme-ninas de la gran familia austral, han contribuido con su presen-cia al desarrollo de la historia y de la cultura. ¿Qué papel des-empeñaban las mujeres aborí-genes?

Las esforzadas

mujeres aborígenes

Vamos a analizar por partes. A las mujeres aonikenk, les correspondía criar a los hijos, alimentar a la familia, función para la que debía prepararse desde el encendido y cuidado del fuego al suministro de leña combustible, además de reco-ger agua, alimentos y cocinar; descuerar a los animales ca-zados, preparar las pieles para el abrigo o cobijo, coserlas y decorarlas cuando procediera, armar, desarmar y trasladar los toldos y, por fin, por si faltara, cuidar a los enfermos y enterrar a los difuntos.

Una de las pocas veces que se distinguía a la mujer era en la ceremonia de la “Casa Bonita”, realizada al ingresar una joven a la pubertad, con su primera regla.

Similar caso ocurría con las

mujeres selknam, que debían ocuparse de la recolección de crustáceos, pececillos, hongos y bayas. Desplumar las aves ca-zadas por su marido, conservar sobre ramas elevadas trozos de carne de guanaco o bien, a in-dicación de su esposo llevarla a los vecinos. Ella misma debía buscar el agua y mantener en-cendida la fogata de la choza de día y de noche.

Por si esto fuera poco, debía ante el peligro de un incen-dio, poner nieve o agua para

apaciguar la fogata, además de cuidar de poner una piel que sirviera de tiraje al humo para que éste no molestara a nadie. Armaba y desarmaba la choza, curtía las pieles, las cosía, y en sus ratos libres confeccionaba canastillos y objetos de adorno para ella y su pareja. Por fin, cuando viajaban a otros lu-gares portaba en su espalda al hijo, las pieles, y otros objetos y como llevaba libre sus manos, llevaba algunos bolsos con dis-tintos utensilios.

El grupo de los canoeros, kawésqar y yaganes, tienen una similitud en cuanto al tra-to con la mujer. Ellas, debían encargarse de cuidar el fuego en la canoa y remar, mientras el marido iba en la proa, ojo avizor, por si salía alguna presa para cazarla. Sacaba de la em-barcación los elementos para armar la choza, los cuales debía transportar en el momento de partir. Se hacía cargo de la co-mida y del cuidado de los hijos. Cuando arribaban a un lugar para radicarse temporalmente, ella debía lanzarse al agua para aproximar el bote a la playa, transportando a tierra a su ma-rido y a los hijos.

Respecto de las leyendas aborígenes que dicen relación con mujeres, existen la “del lobo de Wasana” que trata de una niña que se enamoró de un lobo marino que la llevó a vivir en una roca, donde tuvieron un hijo y vivieron felices hasta que ella quiso ver a su familia. Envidiosos de su dicha, sus hermanos la llevaron engañada mientras que otros ultimaban a su esposo, el lobo, poniéndo-lo luego a asar para comerlo. Cuando ésta llegó de regreso, su hijo venía corriendo a su en-cuentro cantando “Ita pua shi, ama saman dapa”, que quiere decir “Yo estoy comiendo car-ne de mi padre”. Horrorizada,

Lo que todo magallánico debe saber

La presencia de la mujer en Magallanes

La presencia de la mujer en esta región tiene una importancia vital en el desarrollo de la vida de las distintas comunidades

Un detalle del monumento a la goleta Ancud.

Antiguas maestras de escuela.

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domingo 15 de marzo de 2015 enelsofá