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DEL MISMO AUTOR pOT nuestro sello editorial PODER MILITAR Y SOCIEDAD POLITICA EN LA ARGENTINA I - HASTA 1943 PODER MILITAR Y SOCIEDAD POLITICA EN LA ARGENTINA II - 1943-1973 '? d' % 1 - '"::lOg .' . .... ALAINROUQUIE '. i . ELESTADO MILITAR EN AMERICA LATINA EMECE EDITORES IIANCO DE I..A enU.lor£eA lU1S-ANGEL AR.ANGO

ELESTADO MILITAR EN LATINA

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Page 1: ELESTADO MILITAR EN LATINA

DEL MISMO AUTOR pOT nuestro sello editorial

PODER MILITAR Y SOCIEDAD POLITICA EN LA ARGENTINA I - HASTA 1943

PODER MILITAR Y SOCIEDAD POLITICA EN LA ARGENTINA II - 1943-1973

'? d' % 1 - '"::lOg .' . .... ALAINROUQUIE

'. i .

ELESTADO MILITAR

EN AMERICA LATINA

EMECE EDITORES

IIANCO DE I..A REPUII~IL'"

enU.lor£eA lU1S-ANGEL AR.ANGO

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tituyeron fuentes de inestabilidad, aparecen en el siglo xx como J Capitulo 8 medios de control de los ejercitos.

La fuerza y coherencia del sistema partidista parecen cum; .

plir un papel decisivo. Sea porque, al hallarse fuertemente·.J De los militares legahstas arraigado, se identifica con la sociedad civil (C?}ombia), sea j al Estado terrorista porque se confunde con el Estado en una sltuaclon de mono-polio historicamente legftima (Mexico). En este Ultimo caso, Ia movilizacion masiva por arriba permite canalizar a las capas subordinadas, peligrosas para el statu quo; en el primero, la movilizacion clientelista chisica tiene el mismo efecto desmovilizador.

La modernizacion de los enfrentamientos sociales y el pacto de no recurrir al ejercito contra hIs autoridades constituidas hacen a la definicion misma de la democracia como compromi­so y acuerdo, mcito 0 no, de colaboracion social. En otras pala­brs, un regimen politico en el cual Ia oposicion est,,- integrada I al sistema institucional: donde hIs fuerzas polfticas y sindicales .Ide izquierda son debiles( donde la participacion popular; se en­i cuentra mediatizada y canalizada: 0 bien marginada, tiene 'mejores posibilidades que otros de resistir Ia militarizacion. Dicho eso, no existe ninguna panacea contra hI marejada mi­litarista; solo cabe recordar modestamente las lecciones de la historia. Y todo 10 dem,,-s es literatura.

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Si bien la peor alternativa no es siempre inevitable, ni siquiera en el continente de hIs "venas abiertas", a partir de 197.3., la presencia democratica esta en peligro. Asi, una larga tradi- !(/

l.:j clOD; de. ~~tabil~dad ~. d .. e sumision del. eiercit~ al poder civil !.'

.:~ no ImpldlO hI rrrupclOn, duradera, caSI sImultanea, del poderl :, militar en Chile y Uruguay, Sin embargo, antes de 1973, se afir-!

maba con frecuencia que'Chile poseia un sistema politico !1J) "tamente desarrollado, mas estable que los de Francia, Italia y

Alemania, mientras que otms paises del continente, mejor do­tados en cuanto a riquezas naturales y de distribucion mas equi­

! tatlva de hI renta nacional, no conocian ni de lejos una vida + politica tan armoniosa y apacible.' En Uruguay, pacifica ;. Republica de inmigrantes europeos, que anteriormente poseia ;, un Ejecutivo coJegiado, la vida polftica era tan serena que un , observador seiialaba, en 1960, que Hel papel de los militares

.!; es tan reducido que muchos uruguay os incluso han olvi<;lado ;~J Ia existencia del ejercito"! .. .' En Chile Iasubordinacion militar, impuesta en 1932 ;,' po~ un gobierno conservador, i."?'as habra si<;'o cuestionada . senamente, y en Uruguay los militares no hablan ocupado el

poder en este siglo: los golpes de Estado de Terra y Baldomir, en 1932 y 1942, fueron realizados por la policia y los bombe­fOS ante la indiferencia del ejercito.

Ahora a principiosde los anos ochenta, hI ex "Suiza ameri­cana" posee el siniestro record mundial de presos politicos.

Uno de cada seiscientos uruguayos ha pasado por la carcel por delito de oposicion.' La tortura se ha convertido en ins-

I Vease Ernst Halperin, Nationalism and Communism in Chile, Cambridge, 1965, pags, 27-28.

1 Theodor Wyckoff, "TIes modalidades del militarismo latinoamericano", Combale

(San Jose, septiembre-octubre 1960), pag. 15.

3 Cifras presentadas ante la SubcomisiOn de las Naciones Unidas para la Prevencioll

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trumento de gobierno practicada 'al ." (' por el noventa por cie~to de I 'fiS::in 4 gunos testimonio,,' '10 que es mas, con una importante representatividad de fuer-

" alcanzado un do . ?S ~,CI ~s. ~~tos metodos hani ,zas revolucionarias y anticapitalistas, cuya presencia, aunque el laboratorio =resiv~e :~i:~lCaclO~. clentlflCa aterrador.' Y/c' minoritaria, en otras partes bastariapara poner en movimiento al Ul:uguayo, EI golpe de Estad~ dn~ 1~e~e na~ que envidiarle' a las cJases dirigentes y Jas legioues. La experiencia de la Unidad ha sldo uno de los mas san' e e septiembrede 1973, Popular (1970-1973) apasiono y provoco encendidos debates

'tinente. Se habla de tr . tgnen~s que ~aya cOnocidoefcon_ en Francia, debido a su similitud con los sistemas partidistas cuaIes se halla el presid::e a ~::t~o milertomuerto~,," ~~tre'"lo, .' de la Europa Mediterranea. Visto mas de cerca, se observa la mano entre Jas . , mu con un amra: en'j" bajo las similitudes nominales una fuerte y fascinante especi­nas de Ja DINA ~s de~ palacio presidencial. Las haza .. i: ," ficidad. EI Partido Radical era socialdemocrata. El Partido­que no vacila en' ~~!Cla polltlCa re!>autizada CN! en 1977,' ,: ,; Socialista no 10 era; se reivindicaba marxista leninista, gravitaba .• fronteras, no han servi~ a los op~,utores ~cluso fuera de las: , bacia Cuba y solo aceptaba Ja via electoral de palabra. En tales it, Pinochet ante la opinion ~~: meJorru: Ja wagen del general" condiciones, l.como explicar el funcionamiento armonioso'" tares chilenos como su; h ' c~ mundiaI. Con todo, los mill. ,', del regimen democrlitico, de las posibilidades de alternancia, "

ejer~er el pode'r directamente ~~~o~06lt:.Igud~YOS, pretenden', del Frente Popular de 1938 a la Unidad PopuIar de 1970, te Slglo. Esta dominacion prol d h a :cada del presen·; en un pais subdesarrollado, dependiente, donde la gran riqueza ! profunda en las' "onga a a deJado una huella se codea con Ja pobreza extrema, donde existe un euorme! han sUfrido :c~edades de ambos paises, que desde 1973; abismo social entre los grandes burgueses del Club Uniou y los, tal vez irreversful~s. ClOnes y reestructuraciones profundas, y rotas de las ca/lampas de Santiago 0 de los {undos del Valle i

Estado, 1970 elases sociaIes y estabilidad politiea en Chile antes de t~,?'

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EI Chile posterior a 1930 es un r politico del continente. Su estabil'~~o ad parte ep.el contexto , en un sistem d I emocratlca se basa ~

a mo erno Y complejo de partidos politicos. Y, :~,

de la Discriminacion y la Proteccion de Min ' Ver tambien los infonnes de Amnesty In, ~las. Le Monde, 21-22 ag08to 1917

ernational. . .1;

4 SegUn el oficial JUlio Cesar Coo er e' -~, Amnesty International. Vease "Unf a n ~n~ confer;pCla de ~rensa convocada por ;;:?~' Reports, Londres, 9 marzo 1979 ~, Y, ~ Gaps .. en Lattn American Political 1,: ~a~ en ~o~eso (Mexico), 16 juni~ 19,,:.se revelacrones del olicia! H.W. Garcia iii

Vease Repression en Uruguay A "', d ' ~l techniques phannacolo i ue . cote es methodes de torture 'classique' des ;1'!

.20 junio 1,9780"Le lab g ~ . s sont de pl~s en plus sauvent employees". Le M~nde, ~~.~,.""',' , ora oueuruguayen ,LeMonde.14junio 17979. ,~

(; La Direccion Nacional de Inteli end' -" Estado. es reemplazada en ag08to d; 197j p~e ;e~o~~'Nadir:ctamente al jefe del }.

:o:~as mismas atribuciones. r n Clonal de Informacion, if

Central? A partir de septiembre de 1973, ya no es correcto referlrse vagamente al "alma chilena" 0 a la "tradicion", salvo que esos coneeptos vaporosos reflejen Ja articuIacion especl­fica del Estado con Jas elases sociales en una sociedad depen­diente poseedora de una historia singular.

En un eapituIo anterior observamos el earacter precoz de la formaeion de un Estado centralizado en Chile, y laausen­cja"decaudillismo centrifugo en una epoca en que los paises vecinos se debatian en Jas convuIsiones de la independencia. La "geografia loca" de esa cinta de tierra apretada entre los <\Udes y el Pacifico indudablemente facilito la centralizacion sobre ]a cual se cimenta el "Estado portaliano". La guerra del Paci­fico y Ja victoria sobre Peru y Bolivia (1879-1883) significaron ]a anexion de las ricas provincias mineras del Norte, 10 cual consolido Ja unidad del pais, condicionando su insercion en el mercado mundiaI. En efecto, la victoria no solo cimenta el prestigio del ejereito, sino que" legitima el poder de la clase dirigente, unificada en tomo al Estado gracias a los nuevos recursOJi de la exportacion. Elnitrata de los desiertos del Nor­te, explotado por empresas britanicas, se convierte en fuente esencial de Ja prosperidad nacionaI. Pero con ella el principal resorte de poder economico quedo fuera de las manos de las clases dominantes. Fue esto, indudablemente, 10 que posibili­t6 Ja disociacion de los poderes polltico y economico y permi-

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tio la autonomfa del sistema representativo, base de su estabi­lidad. A esta forma particular de dependencia corresponde un tipo particular de Estado. El majestuoso edificio del "Estado portaliano" se trasforma en "Estado de enclave", enriquecido por los derechos e impuestos que pagan las emprt'isas extranje­ras explotadoras del salitre. Las elases dominantes, practiea­mente exentas de presiones fiseales, se reparten los abundantes ingresos del comercio exterior sin enfrentamientos.7 La falia de poder acumulativo facilita las negociaciones entre sectores burgueses y aparta las tentaciones exelusivistas, sustentando as! el funcionamiento de una democracia aristocratica basada en el voto restringido. Las riquezas del Estado, que aumen.tan· con .la explotacion del cobre en el siglo pc -los capitales nor­teamericanos reemplazan a los ingleses-, permiten el reeluta­miento precoz y el mantenimiento de una nutrida burocracia, 10 cual es otro de los rasgos particulares del sistema.

En efeeto, es a traves del Estado que un sector de la clase media .se integra a la estructura de poder. La expansion de los servieios publicos consolida el Estado tradicional y 10 "nacio­naliza" al disociarlo, al menos en apariencia, de las decisiones de las elases dominantes. Asf se crea una imagen de neutra­lidad, de independencia jurfdica y politica que sera, durante mucho tiempo, una de las singularidades del pais.8 La creacion de un euerpo de funcionarios publicos diversificado -yespeciali­zado y la tradicion del servicio eivil despojaran al ejercito' del monopolio de la representacion profesional del -aparato esia­tal y de sus principales reeursos politicos • .En talescirclliistan­cias, .lll ejercito ino es sino una rama mas de la burocracia pu­blica: Como tal, comparte la ideologia juridica dominante.

El hecho de que la riqueza principal escape al control . directo de la burguesia y fortalezca el poder del Estado parece ~. haber paliado los conflictos entre seetores dominantes y penni- " tido el ingreso de las clases medias a un sistema embebido de

7 Salvo durante la crisis de' 1891; que enfrent& a1 presidente Bahnaceda con el Con­greso ,. cuOOino con el suicidio de aquel tras una breve guerra civil. Bahnaceda era

partie ,rio de un rol mas activo del Estado en ]a economia nacional En cuanto at "Est",10 enclave"', vease, entre otros, Anihal Pinto, "Desarrollo ecollomico y ten­

siont':> sociales en Chile". Trimestre econbmico (Mexico, octubre-diciembre 1963). pag,.641-658. '

8 Vease Antonio Garcia, "Reflexiones sobre los cambios poIlticos en America lati­na. Las c1ases medias y el sistema de 'podern, Revista mexicana de soci%gio Gulio­septiembte 1968) pags. 593-602 .

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ideologia legalista y entrecruzado por mediaciones adminis­trativas. Si bien a partir de 1919, y sobre todo de la gran de­presion, elases medias se incorporan electoral y sociahnente es necesario seiialar .que, a diferencia de Mexico 0 Venezuela; no sustituyen la hegemqnfa oligarquica sino que ocupan un puesto subordinado en el marco de la dominaci.on tradicional.

Esta incorporacion se acompafia de (posiblemente se ex­plica por) la relativa lentitud de la movilizacion politica. La ex­tension gradual' del derecho al voto no provoca un alto grado de movilizacion politica, capaz de asustar a las clases poseedoras. En 1952, el 54 por ciento de los ciudadanos con derecho a

. voto no estan inscriptos en los padrones electorales.10 EI aisla­miento de los campesinos en sus fundos, donde reina una patronal por derecho divino, la fuerza de los vinculos de de­pendencia personal en el campo y la inexistencia de sindicatos agrarios hasta 1965," facilitan en parte esta exclusion. La' continuidad en Ia evolucion polftica explica asimismo Ia fuerza y plasticidad del Partido Conservador, convertido en Partido Nacional, que aiin en 1973 recibia el veinte por ciento de los

. votos, y anteriormente entre el veinticinco y el treinta y cinco' por ciento. La capacidad de negociacion y el pragmatismo de esa organizacion reflejaban c1aramente.las regIas de un juego que no Ie planteaba peligros mortales a la dominacion burgue­sa y el caracter funcional de la juricidad y el compromiso que constitufan su base de sustentacion ..

atra consecuencia tangible de la economia de enelave la eonstituye la configuracion de las relaciones entre las clases. Puesto qlle la clase obrera organizada estaba concentrada esen­cialmente en los centros mineros, las relaciones economicas entre las clases oponian al proletariado chileno principaimente a una patronal extranjera. Los partidos y sindicatos obreros surgidos a partir de 1920 se reivindican socialistas, pero en los

, Vease Fernando'Henriq~e Cat~oso y E. Faletto, ob. cit., pags. 118-135.

10 Atilio BorOn, ~'El estudio de la movilizacion politica en America latina: la movi­

lizacion electoral en la Argentina y Chile", Desarrollo economico (Buenos Aires.

julio -septiembre 1972), pags. 211-243. Vease tambien Ricardo Cruz Cooke, Geogra­

lia electoral de Chile. Santiago, 1952. pigs. 13~SO.

U Lossindicatoscampesinos fueron ilegales hasta 1937, despues de 10 cua! se tolera

su existencia pero son muy dificiles de constituir legalmente. La participacion cam­

pesma se reduce aun mas con la exclusion de los analfabetos..

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hechos son mas antUm 'aIistas . patronales.12 En cambi~enlas q?e ~ticapitaJistas 0 anti. • Popular que llega al poder en 1938, y solo se parece en nombre q?e ,mantienen relacione; an~;g~mzacl~nes d!". trabajadores'a sus homologos europeos, es una coalicion ·desarrol/ista que nomlcas Con la bur' orueas mas pohticas que' 000- sienta las bases de la industrializacion del pais, impulsada por el esta. Esto de ningun:U:;~!~' :':SIlltan mas tol~rables pan !'.stado. La, participacion de los sindicatos obreros confedera­les hayan sido idilicas la ~l~ que las relaClones socia. dos en los organism os ,de desarrollo y control ecouomico14

La historia sangrienta reI CO~di?lOn obrera feliz en ChlIe. ,profundiza la asinillacion de la clase obrera organizada. La in­por las masacres de Santa MmoYI7e~to .obrero esta jalonada lervencion del Estado en los conflictos laborales, en ocasiones muertos-, de Punta Arenas ~la 19~0 qUlque (190~) -dos mil a favor de los obreros, acenttia la imagen paternalista de uu --tres mil muertO"- 1 n , de la Coruna en 1925 "Estado neutral, situado por encima de las clases. Situacion 1903 en Valparafs~ y ~e ~9~~tal Srepr~ion de las huelgas de extrafia en Ameriea latina, hasta el punto que vale la pena

,lidad social se ve atem era en an~o. Con todo, la hasti. detenerse en ella. ,tizado de hi lucha de clase~efo~~l ~ter indirecto ° media· , Elejercito chileno es el ejercito de eseEsj;ado. Marginado ~iacion polftica. El COnflict" d~ ~ so~ se trasmuta en migo., de la politica despues de su intervencion progresista en los , I" ,\,£,

~tituciones. Se pasa de la callec ai~ ti;~.: lugar dentro de las ,anos 1925-1932, el ~ercito, ,tanto por la imagen del Estado VV,l nuento (que en oeasiones estalla ar~ento, del enfrenta- del cual forma parte cuanto por su propio reformismo, apa-lada) a la concesion. ' , perc Slempre en forma' ais- reee como una institucion perteneciente a todas las clases socia,

Muchos otros factores parti . ' Jes, a la medida de un Estado perteneciente al pueblo. A partir "Estado de compromiso" . . clparon en la formacion de este ,de entonces, al aislamiento de la sociedad militar, cuyos miem-craticos. Se ha dicho que ~1C::::~ : los mecanismos demo- bros viven separados del medio civilIS y se aferran a valores -de la pampa salitrera las en .. de los centros mineroa propios, distintos de los de la sociedad global, corresponde te a los yacimientos de ~arb~:~~ mmas de c,?bre en el nor- un tabu politico: el "gran mudo" es intocable. La juridicidad geogrMica y socia1rnent al' extremo sur-, encerrados afecta al aparato de defensa. Regis Debray ha dicho con tOda banos y carentes de acceio erdos de los grandes centros ur- razon que los valores de la ley y el parlamentarismo habfan sido a. organizaciones obreras m~y o:~~=°adass de poder, dieron Ingar internalizados en Chile, incluso por los partidos obreros"" flcaban un peligro liz perc que no signi. ley a fortiori por los militares. Antes de 1970 existla consenso el enfrentamiento d~~:s ~rden esta~lecido. Sea como fuere, general de permanecer en el terreno legal: si el movimiento representantes de las em eros del ~trato 0 el cobre con los '~obrero aceptaba circunscribir la lucha de clases al terreno sfa chilena acentuo el c!l~: ~x:nJeras y no con la burgue- demarcado y simbolico de la arena politica, 10 mismo sucedfa relaciones de clase y facilito su m ecto y !ragmentario de las 1: eon los militares. Cualesquiera que fuesen los sentimientos y estrictamente politico La jurici~~c~7.ento en el terreno convicciones de los oficiales, existfa el consenso mayoritario una clase media bum' . ~ . 0 ogIca, trasmitida por de apoyar a los detentadores del poder legal. Lo cual tambien eng;anajes, conth'b'U ~\, l::e ~e Identifl~a con el Estado y BUS significaba que, para que el ejercito abandone su actitud de sub-pohtica. Hasta la U~dad P u::r medida .a la estabilizacion ordinacion, es necesario (y suficiente) que el ejecutivo de prue-sentante de las capas intermO~ , ~l Partld<;> Radical, repre- I': daa, era el eje de las c ~~' mdependlentes y asalaria- ~ 14 Vease Liliana de Riz, Sociedad y politica en Chile (de Portales a Pinochet). Mfuti... partido "frentista" cuest~~:~a ~lOn: de iz':luierda, y ningUn I co, 1979, pags. 60-63. .

s re as del Juego." El Frente 1,.,.,', . ,

12 v,' .~, 15 Vease RA. Hansen, ab. cit, pags. 119-136. y Antonio Cavalla Rojas,. Organizacion ease Maurice Zeitlin. "The Social Detenn" II' yestructura de las {uerzas armodas chilenas. MexicO, 1978' (mimeografmdo). pags.

en James Petras, Maurice Zeitlin L . man,ts of Political Democracy in Chile" 1 60-65. Y co • ab. Cit. pags. 220-234. '

13 Ob. cit ; • pag. ~32. Antonio Garcia, ab. cit. pag.548.

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_

t.,.'., 1~ Regis Debray. Entretiens avec Allende sur lo situation au Chili Paris, 1971. ": : pags. 24-41. (Edicibn en espafiol: Conversaciones con Allende. Barcelona, 1971).

; 257

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~ ba de salir del marco de .l~ ~egalidad. Esta actitud a?e~tu~ ,]a I pular (FRAP) de All~nde, busca apoyarse. en los .sectores SOcia~. autonomla de la esfera polltlCa, que subyace tras la IimitaclOn'jles marginados del juego politico y la VIda sOCIal, y. a la. vez volun~aria de los enf;en~ientos y procedimie~tos, factores ! modernizar el aparato productivo. Su c'?llp~~a, fmanCla~ , esenciales para el fUnClOnamIento de una democracla estable. ,en parte por la CIA estadounidense, '7 esta tem~de un :mti

I comunismo que a veces cae en 10 caricatur~,sco. AI.filocas!,:"sm de su adv~sario, ~ei opone "~ revoluclOn, e~ hberta~ '. qu~ encaminara pac.flcamente a Chile por una v.a no cap.talist~

Las mutaciones del sistema politico y el ejercito I de desarrollo acorde con la "doctrina social" de la Iglesla. Frei tratara de reformar las estructuras econornicas mas arcaicas para quitarle a la izquierda sus banderas y sus bases de apoyo

Estas hip~~sis, de resultar jus.t~, mues~. a las ,cJ.a.l potenciales. La democracia cris~a se' aboca a int~grar a !~s ras la ':llinerabilidad ?e! orden polItic~ const.tuClO~. ~~te] sectores marginales de la poblaClon urbana a Ja vl?,a pol~ti­resulta mcapaz de res.strr por ~ucho tIempo la polarlZac'~~':l ca y social, bajo SU tutela, por m~dio de una red, ~e co~~eJos de los extremos, ~l c;Iesb.~rdam.ento del mru:co parlamenlano'l de barrio" y "centros de matermdad". Esta polltica. de. pr~:

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y el ascenso y mult.pllcaclOn de los enfrentam.entos. Pero cuan, I mocion ,popular" que lleva la marca del "comumtansmo .do Salvador Allende y la Unidad Popular acceden al poder en 1 democristiano se complementa con medidas mas radicales en 11970, ;'1 sistema politico ya se encuentra en gran medida que- el campo. Se fomenta la formacion de sindicatos campes~os I brant:'do. La crisis es anterior al ingreso de la iz:quier~a al y se promulga una ley de reforma a~aria en 1967. ~u o~j~tIvo , PalaClO .d~ la Moneda. Se r~m~m~a a 1964, a ~ preSldencra del, es poner fin al eslado de semis~~d~bre de los mqUllinos,

democrIstlallO Eduardo Fre!, s. b.en ~s la elecclOn de Allende 10: creando la pequeiia propiedad familiar e mtegrando a los campe­que la pone al desnudo. El sorpres.vo ascenso de Allende es< sinos sin tierra en cooperativas. ~ruto de un e~en~ento electoral ~gul",: ~ue refleja,i Al prometer justicia social y un aumen~, consta~te de ]ustamente el divorclO entre la democracla crIstIana 'y los!, los salarios Frei suscita esperanzas en la poblaclOn trabaJado~. cons~rvadores d~1 Parti~o Nacio~? que les han retirado su r AI modifi~ar la situacion de los campesinos, la democ~c~ conflanzll. El pa.s no e, lige al, sociallSlllo, puesto que, SalVadOl",'~'I" cristiana desencadena fuerzas que no puede contener raPl-, , Allende, que obtiene apenas treinta y.nueve mil votos mas que \, dsmente ni controlar politicamente.18 La patronal esta preocu­Alessandri el candidato, de la d~rech~, ha disminuido .su cau~ pada. La gran burguesfa latifundisla se co~sidera .exp~l~ por electoral con respecto a las preSldenclas de 1964: tremta y seH' . una refonna agraria que Ie otorga una mdemnlZaclOn msu· con dos contratreinta y ocho con nueve por ciento. Pero la Unkl" ficiente" y libera a los peones. E1 Partido Nacional se siente dad Popular se beneficia con la ruptura entre la gran burguesiar traicionado. En 1967 un integrisj;a brasileiio publica un libro, y las clases ~edias, entre las clases dominan~~ tradicio~les::~i prohibido en Chile, lntitulado Frei, el Kerenskychileno;'9 el y la burgues.a moderna, provocada por la poll tica refonnlStaE

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de FreL . . . - ,~I _ 11 La CIA habfa recibido autorizacion para invertir tres millones de dolaIes r:ara Para enfrentar el ascenso de la lzqUlerda, que ya en 1958,j~ '~ garantizar la eleccion de Frei. Se utilizo- por 10 menos la mitad de, esa suma. Ve~e

agrupada en torno a Salvador Allende, habia estado al borde'.!" el infonne del Senado. Covert action in Chile, 1963-1973. cit., pags. 9-15. Se diCe

de derrotar a Jorge Alessandri, candidato de la derecha cIasica,l: que Frei aprovecho esta ayuda sin ,aberlo.

y para sacar al pais del estancamiento economico en que sejYi IB Lalentitud delareformaseagravaaI quedar marginados los asaIariados temporario~ de.b~te desde principios de. I~ decada del sesenta, la democraCia.'~" de 1o, [undo,. Durante el prmer ailo y en el marco de la_ mlsma ley, ;'illende expr~p~: CrIstmna presenta un amblClOSO proyecto renovador a las pre-~. :,- tantas propiedades com? Frel de 1965 a: 1970. Tamblen enfrentara el problem

sidenciales de 1964. Eduardo Frei, elegido por abrumadoraj, ,los obrero, rurales temporario,.

mayoria gracias a los votos de los conservadores, que no presen-;' ',,', 19 F bO V"<li a1 Xavier de Silveira Fre~ el Kerensky Chileno. Buenos Aires, 1968, tan candidatos por temor a favorecer al Frente de Accion Po-:,', pag. ~7'; 1 g ,

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I I autor pretende demostrar que Ia democracia cristiana Ie abre el

. camino al comunismo. Es mas 0 menos 10 que piellSa la derecha chilena. Cuando el pais no logra salir del marasmo economico, . a pesar de algunos alios de bonanza debidos a los precios eleva. dos del cobre, los conflietos sociales se vuelven mas violentos y el espectro politico se .radicaliza; la democracia cristiana se divide.

AI abrir la eaja de Pandora de la partieipacion de los marginados, Frei rompe el "pacto social explicito" que servia' de base de sustentacion del modelo' politico chileno. La movili· zacion popular fomentada por Ia democracia cristiana agrava y generaliza las tensiones sociales, sin poder mantenerlas dentro ' de los marcos institucionales a los cuales se habfan eircunscripto basta el momento. La aparicion de nuevos actores, Ia pues1ll en mareha de sectores basta entonces marginados y Ia irrupcion en la escena politica de confrontaciones sociales imposibles de resolver mediante el compromiso, quebranta el fragi! equi· librio basado en la "disyuncion entre el sistema politico y eJ sistema de desigualdad social".'o

Es entonces que, en el seno de Ia derecha, se desarrolla y extiende una "nueva" ideologia antidemocratica que asigna al ejercito nn papel mas aeorde con los "peligros" del momento .. Sus autores fustigan Ia concepcion de un ejercito sometido al poder civil; el neocorporativismo "portaliano" Ie .asigna un lugar eseIicial en la estructuracion de un Estado nuevo. En octubre de 1969, el regimiento Tacna de Santiago se rebela . bajo las ordenes del general Viaux, en protesta por la disminu· cion del presupuesto militar, los bajos salarios y el desprecio que siente el gobiemo democristiano, segUn ,,1, por los oficiales.

., 22 L socialistas fieles at matiz tea eon el jefe <:Ie Ia r<;belion. s~s orientaeion' maximalista Y militar de su ongen asl ~omo a b indudablemente que el '\ SUS ine1inaciones putsehlStas, sa en, emo del espectro I

ct· . ta Viaux se eneuentra en el otro extr f.·ali I a IVlS sector inIportante de la 0 leI -, politico y, sobre to<!-o,. q~e un orativo sea por la influeneia \ dad, sea por resentmnen ~ ~~la sum~ion constitncional Y la <!e Ia nueva derecha!~~es ~tar que se remonta a 1932. Esos tradicion de neu!"'all ~, ~ es de detectar en la faz publica procesos subterraneos, diflC;il . den eon el aeeeso a los puestos y "sindieal" del .tacnazo, comel eneracion de oficiales formad~ de mando de umdad~s, d~ ~na t! reorientacion estrategiea anti­durante Ia guen;a. fna y a}o tados Unidos. Las nuevas orien­subversiva proplcmda por Es particularmente enfatizadas Iaciones de la era pr~eu1;>ana eran bia errillas, la "amenaza en un pais donde, SI bIen nOt h~ve ~ los ojos del Pentago­comunista" resultaba sumamen ~os euadros del ejereito no se no. Es ver~<:I que a esa altura una ideologia contrarrevolucio­hallaban uniflcados en tomo a., del mito de la neutralidad naria oficial, pero Ia ddest~ee~~tacion polltiea que sufre el profesional correspon e a a

pais."

Uruguay: Estado providencia y Iatjfundios

" t' ico" en mas de un sentido. Antes de El U~gua?,. es a Ip oria de sus vecinos por su alta

La mayorfa de los partidos restan importancia al asunto.· Ca- f

racterizan al taenazo como una especie de huelga militar reivin· dicativa, carente de alcances politicos. Los sindicatos y la mayoria de los partidos de derecha e izquierda apoyan a Frei y defienden la legalidad constitucional. Pero el Partido Socialista J defiende las reivindicaeiones de los facciosos, se niega a pronun·\.,.'.·I',·.'.· ciarse por la defensa de las "instituciones burguesas,,21 y coque· •

1973 el Pll;I,S diflere de la, m~~ la mitad de 13 poblacion reside coneentrac~on urlabana .--m

tal as su elevado nivel cutural y sus leyes

en MontevIdeo, cap' ,

- 969 ags.130-134.ElsenadoIsocialistaAn.iceto de sesiones del Senado. 29 oetubIe 1. • P d olpismo en declaraciones postenores, Rodriguez trato de refutar las acu~aclOnes de, g defender "un civilismo trasnochado". a la vez que declaraba que su p.artldo no po la

mama Hora (Santiago), 11 novlembre_1969.

. el enerat Viaux. Vease Florencia V aras, Conver~ 2:); Eso, al men~s, es 10 q?e sostiene ! 120. Allende Ie habria ofrecido una emba­saciones con Vzaux. Santiago, 1972, P g.

20 Liliana de Riz, ob. cit., pag. 199.

21 Veanse las dec1araciones de los partidos: "Declara"ciones para 1a historian, Punto

final (Santiago), 28 octubre 1969. Asimismo, los debates en el Senado sobre la crisis,

COll la intervencion de A. M. Carrera en favor del ejercito. Republica de Chile. Diario

260

r\ jada.

Agii Felipe Bustamante Chile. Democracia.

l 1 I

-L_

23 Vease Augusto V. aras, Felipe ero'a s 170-177. • [uerzas armadas. Santiago, 1980, cap. IX. p g .

261

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sociales de avanzada. EI propio sistema partidista, piedra an. gular de la vida nacional, que se remonfu a la creacion del pais, divide a los ciudadanos, en cierta fonna hereditariamente, en dos partidos: el Blanco y el Colorado. AI igual que en Co. 100nbia, ambos partidQsson veiditCferas comunidades, durante muchotiempo en guerra el uno contra el otro,dondel!!]dimti~;

-ficacion partidista es muy marcada. _I!!lonace, nO,se vuely~", blanco 0 colorado, y esas "patrias subjetivas;'que s.QnJs,s_Qll!.. gJ:andes familias, sobre todo .eL Partido Colorado urbano, cum. plieron una funcion esencial en la asimilacion de los illiiiigiaiites ,; europeos, desde fines del siglo XIX hasta la crisis de los anos treinta.

EI Partido Colorado, que gobierna sin interrupcion durante noventa y tres anos, de 1865 a 1958, crea un ejercito a su imagen y semejanza: civijista y colorado. Tan es asi, que en 1917 se expulsa de la Escuela Militar a los cadetes blancos, y en 1958, cuando el Partido Nacional (Blanco) gana las elecciones, los militares yen el cambio con malos ojos: al nuevo gobierno Ie resulta diffcil encontrar generales "simpatizantes".24 Hay quie. nes Yen ~n ello una de las razones de la prescindencia militar: el ejercibo no es autonomo; al estar vinculado a una familia politica, no se halla por encima de los partidos ni se arroga el derecho de erigirse en autoridad suprema y garante de los intereses nacionales.25

Este ejercito, sometido a controles de tipo tradicional, se inserta en una sociedad moderna y por mucho tiempo rica. Modesto Estado buffer entre los dos colosos, Brasil y Argen. tina, el Uruguay posee en sus doscientos mil kilometros cuadra. dos de superficie algunas ventajas notables: poblacion homo. genea y de baja densidad, integrada esencialmente por los des. cendientes de los inmigrantes europeos; un suelo excepcional­mente fertil, que comprende el ochenta y nueve por ciento de las tierras productivas; clima templado. Gracias a esas ventajas naturales, a principios de siglo el pais es un importante exporta. dor de carne y lana a Europa. La "renta diferencial" generada por condiciones excepcionalmente favorables para la ganade­ria extensiva Ie pennite dotarse de una legislacion social progre-

24 Federico Fasano Martins, Despues de la derrota. un eslabbn debilllamado Uruguay, Mexico, 1980, pag. 139.

2S Wyckoff,ob. cit., pags. 13-14.

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sista. El Estado distribuye una parte de los considerables ingre­sos del comercio exterior a los asalariados urbanos, cuyo nu­mero se multiplica rapidamente. Por otra parte, el Estado uruguayo de la "belle epoque" asume el coni TO! de numero­sas ramas de la industria y los servieios, multiplicando asf el numero de funcionarios y dependientes.

Pero la urbanizacion del pais (vale decir, su "montevi­deacion") y la expansion de la funcion publica coniTibuyen a mantener las estructuras agrarias tradicionales. De alguna manera I. produccion agraria fin.ncia el desarrollo urbano. Esto a su vez pennite disminuir las tensiones sociales en el sec­tor productivo y mantener el statu quo en el agro. Los enormes sectores . burocraticos han jugado' su papeJ en la asombro­sa estabilidad que conocio el pais durante setenta anos. La pros­peridad de la que gozo Uruguay hasta la Segunda Guerra Mun­dial Ie permitio forjar un sistema socioeconomico particular, en que la gran propiedad agraria se codea con una suerte de. socialismo urbano; los latifundios son ]a base del Welfare \ \

Dicho de otra m.nera, Uruguay posee una socieda(f ae eurQpeo asentada en una agricultura tipicamente latinoa­

mericana; consumodesarrollado que depende de una produc­cion subdesarroIlada. Porque la estabiJidad social y polftica se obtuvo a costa de un sistema productivo debit y una eseasa capacidad de adaptacion a las mutaciones eeonomieas.

26

Por otra parte, desde 1914 y sobre todo a partir de la cri­sis de 1930, Uruguay desarrolla industri~ de consUffiO destina­das a un mercado interno en expansion. Estas se yen golpeadas duramente a partir de 1955, cuando el "boom coreano", la retraccion del mercado de la lana, la caida de los precios y la falta de capacidad para paliar las ganancias no realizadas me­diante la diversificacion de la produccion exportable -las superficies dedic.das a la agricultura disminuyen constante-, mente- provocan un prolongado estancamiento del comercio", exterior y el hundimiento progresivo de la economfa nacionaI:" : A '-pesar de los precios relativamente sostenidos de la carne y

26 El rendimiento uruguayo ~e sumamente bajo en comparaclO11 con el de otras economias especializadas del mismo tipo. Las explotaciones lecheras rinden la cuarta

parte de sus similares neocelandesas, y las ovejas rinden 2,9 kg de lana, por cabeza, contra 4,9 kg. para este ultimo pals. Para producir una tonelada de carne se requieren

27 animales en Uruguay. peTO 17 en la Argentina y 13 en Holanda. Una de las causas

de esta situacion es la insuficiencia de las iBve.r.siones; ---

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. ., ., bilados a cargo del Estado, euyo los eereales, el marasmo de las exportaciones se agrava debi-,trescientos vem~leme? mil JU vez el envejecimiento de una po­do a la baja productividad del sector agroganadero.27 La falla' pesoexcesivo slmboliza a la la generosidad de la de dinamismo del sector motriz de la vida nacional provoca;blacion demograficamente n0re'!!"°k~;;en son victimas !nde­la recesion de la economia en su conjunto, cuyo ritmo de cr.:, legislacion de las "v~cas ~?rd~, ienza el desmantelamlento cimiento, a partir de los ailos cincuenta, coloca al Uruguay fensas de la nueva sltuaclOn. o~so Este proceso no p~,:de en el peloton de cola del continente americano. 2

• de Estado bas:>do .en el. cO';fr0'f rn~ al liberalismo, eXIgido No se trata de una mera recesion coyuntural sino de una desarrollarse sm vlOlencta. d re 0 ataca las bases mismas del

profunda crisis estructural que cuestiona la viabilidad del mode-, 'por los productores Y posee ores,

10 uru~ayo, e~ el cual un~ sociedad .mode~na y un ~parato sistema uruguayo. . I control directo del poder. Con es~ productiv~ arclUCO se combman para lIDpedrr el camblo y la " Para ella se reqillere e _ 'P checo Areco asume la presl­adaptaeion. Los enfrentamientos entre distintos seetores socia·,,' fin, en 1968, cuando el se,?-or :uevos funcionarios -hombres les por el reparto de un ingreso redueido sustituyen el COmpr(h dencia a la muerte de Gestld~, propietarios- sustituyen a la mise permanente que caracterizaba a la vida nacional. La "pall- : de negocios, banqueros,. gr~ ~~ los grandes partidos. So!, eS­perizacion" del pais genera tensiones que hacen peligrar el pac-' "clase politica':, prove,?-en e tr taran de imponerle al pals un to social, hasta entonees respetado p~r todos. Se agndizan , ' tos hombres ,?-~ev~~ qUlene~~ento eeonomieo, cuyo ele:nen-las luehas entre gropos sociales por obtener U11a tajada mayor plan de estabilizaclOn y s~ ritario de los aumentos salarlales. de U11 produeto nacional absolutamente estacionario. La infla· "to principal es. el fI;<;no au 0 el balance eeonomieo muestra un cion galopante refleja esas luehas, tanto como las mutaciones, Se dom~ l:> mflaclOn, l?e~oa Si bien el costo social del.plan politieas que se producen a partir de las elecciones de 1966.", ,estado proXlIDO a la qille \;'par en absoluto a un gob~erno

Los duelios de los grandes medios de produccion, es deck", . economieo no parece Ipr'~~d la resistencia de los asalarlados

los grandes terratenientes pero tambien el poderoso sector c que no busca la pop~ ar; d; la poblacion activa) es ~uy fuer­financiero' y exportador, empiezan a cuestionar las reglas del·, (mas del setenta por Cle';,. 0 el que eonrnoeiona al pals, el go­juego soeiopoIitieo. A fin de mantener sus ingresos; se oponeD,~ teo Ante una oleada de uilit:zacion de los empleados de.l?s

, a la politiea redistributiva del Estado providencial, y las trans- I bierno resp~lllde. eo~ la m la imposicion de un es~ado de SltiO • fereneias en favor de los asalariados y la industria. Estos gruPOB baneos naelOnall~td oS y ntas de seguridad), medldas ~e emeri 'dominantes olvidan el papel jugado p~r el dirigismo y el pater- atenuado (las me f' as pro rofundamente el elima SOCIal y e nalismo del Estado en la preservacion del statu quo, para abogar gencia que trans orman p por U11a politica de austeridad y disminucion de los gastos caracter del poder. 'f tensa incluso desesperad~, agravada publicos. Los fU11cionarios, alrededor de doscientas cincuenta Es en esa .~tmos e; aden~ia irreversible, que rrrumpe .en mil person:w, casi e..l ~iez por cient? . de la poblacion del p~is, por una sensaC1~n. ,de e;~aparlamentaria ju~~nil" y clandestm~ son las prrrneras Vlctimas de la CrlS1S: en 1967, sus salarios escena una oPOslclon s de "violencia simbolica socav~,la au bajan mucho mas que los de otros sectores urbanos.'· Los ~ que, por medlo ?e acto t'ende a provocar la disgregaclOn del

toridad del goble!n? Y I L'b acion Nacional Tupamaros r"gun' en. El MOVlmlento de. I er enunprimermomento, 27 La tasa de aumento dela produccion fue nula entre 1951 y 1968.

28 La tasa de crecimiento annal per capita del PBI fue del 0.7 por clento de 1950 a 1960 y del -0,1 poraento de 1960 a 1970. ONU-CEPAL, Estudio econOmicode America latina. Nueva York, 1970.

"' d' ecta nosmhumory, "' te practica la aCClOn rr, N' dos de la exasperaclOn an sin derramarniento_ de sangre. aCI

I derrumbe del Estado pro­

Ia quiebra del sueno uruguayo Y t sos" e imposibles de atra­videncia, estos "guerrilleros respe~~s dominantes, se vuelven

29 El aumento del costo de Ia vida razc, el136 por ciento en 1967. par desafian al Estado Y las C d Y con sus "juicios" a los ntrapoder a traves del absur 0, . . is ministeriales.

30 E1 Iodice lIega a1 60,2 en 1967 (100 =1957), contra 91,4 para la industria. Univer· un ~~ tos provocan una sene de .ens 0 ulari-sidad de Ia RepUblica. Instituto de Economia. E/ proceso economico en el uruguQYOl poltticos corru~ t desafio que goza de mnegable p P

Montevideo, 1969, pags. 274-330. . Ante semeJan e , 265

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T d~~, la polida ';~ impotente y el ~ima politico se deteriora ! no se contradiceq mutua~e!'te, mere~e!,ser discuti~os. aunque rapld";ll~nte. EI estado de emergencla" no es propicio para el ·1 ambos responden a una IOgIca mecalllclsta que de lllllgIlll'" ma· floreclml~mto. d~ las libertad~s f~ndamentales. Uruguay se "Ia. n®l.,exp~c~ los _ enfrentamientos pol~~icos y sociales de esos tmoam,:n~.alllza en forma mqmetante. Sin embargo, aunque . trllll. drama~lcos anos en ~da ~u compleJldad. la oposICIOn parlamentaria denuncia algIlllas decenas de casas Por clerto, los partldarlOs ortodoxos de las "Ieyes unilver- , de tortura de presos politicos, las elecciones se realizan normal- sales del paso al socialismo" no se equivocan al sefialar que mente. el 28 de noviembre de 1971, tras una campana violenta no puede haber revolucion sin ejercito revolucionario.31 C'ual­y febnl. En efecto, junto· a los dos partidos dominantes divi- quier observador comprende sin dificultad que instaurar el so­didos en mUltiples corrientes de acuerdo a diferencias ~bian. cialismo contra la voluntad del sesenta por ciento de la pobla: tes y generalmente desprovistas de contenido ideologico 0 so- cion,·sin recurrir a la coercion, constituiria una hazana sin cial, la izquierda se presenta en un "Frente Amplio" junto precedentes. Ahora bien, la experiencia de la Unidad Popular con disident~s blancos. y cO,lorados y el apoyo de los Tupama-: esm circu~~cripta, en esos. ~imites estrecho;;. Esta so~etida ros. El candidato presldenclal del Frente es un militar presti- 1 a los condlCIOnannentos asfixIalltes de sus ongenes. La pnmera gioso y progresista, el general Liber Seregni. condicion para su supervivencia es permanecer en el marco

Sorpresivamente, gracias a la ley electoral triunfa el candi- de las instituciones "burguesas" y respetar el estado de derecho

dato del continuismo, miembro de la fraccion del Partido que Ie ha si~,? confia~o. "Mi. fuerza_ -di~~~ gue dijo Alle~~e Col~rado a la que pertenece el sefior Pacheco Areco. Juan en ~ .ocasIon- radlCa en la legalidad. . Esa fue tamb~?n Mar~a Bordaberry, estanciero, ex ministro de Agricultura, es su debilidad fren~e a un Pa:I~ento hostil y una p~b~~cIOn partldario de la mana dura y su (mica ambicion es seguir las qu,: ~n su mayona no susenbla su programa de translclon al

huellas .de su anteeesor. EI Frente Amplio, que obtiene apenas socialismo. . . "' . . el dlecIOcho coma oeho por ciento de los sufragios, asusta E~ tales. condiCIOnes, el eJerel~. celoso de su monopolio pero n,? vence. para sus dirigentes el resultado constituye de la vIOlenCla y I~ ar:m~, era la pl~,dra de toque y el garan-u.na autentica derrota, a pesar de haber obtenido el treinta par teo ~el respeto a las ?IStltucIOnes. ;.Qmen puede ~ostener que. los Clento ~~ los v,:,tos en Montevideo. A pesar de la crisis, el siste. militares, un sector nnportan.te de I?s cuales empleza a COnsPlI,,! ma POh~ICO resls.te. Los partidos tradicionales, aun en decaden- ya e,;,- oetubre ~e 1970 p~ nnpedlI que Allend~ asuma ~.pr~sl-CIa, o~,tIenen mas del oehenta por ciento. Pero el "voto tradi. denc~ y ?-o ~ila en as~smar al c,:,~andan~ e~ Jef~ ,del e]erclto, ClOnal ha entrado en un proceso de erosion y la exasperacion legalista mfleXlhle, hublera permltido la distnbuCIOn de annas d.e los .conservado~es, provocada por el miedo al cambio y la a los obreros?33 Y considerando que Ia: derecha militar solo

vIOlencIa, no permlte augurar una solucion pacifica a los males del pais.

EI ejerdto, arena y objetivo Chile bajo la Unidad Popular.

del enfrentamiento politico en "

{~

31 Vease, entre otros,GabrielSmirnow, La revolucUm desarmada. Chile, 1970·1973. Mexico, 1977.

32 SegUn Joan Garces, asesor de Allende. Vease sobre tado, «Allende, les rnilitaires

etta voie socialiste au Chili", Le Mande, 18 y 19 diciembre 1973.

33 El incidente de los ubaUIes cubanos" desembarcado~ en el aeropuerto de Santiago

con destine a la "Presidencia, demuestra hasta que grado los militates estaban alertas.

~ A principios de 1972, unos baulesmisteriosos provenientes de Cuba Uegan a Pudahuel.

EI fracaso de la "via chilena al socialismo" suele ser atri.:1 La oposicion habIb de importacion ilegal de annas. El gobiemo respondio que se tra­buido tanto al 1ega1ismo timorato de los lideres reformistas:1!i! taba de obras de arte. Sobrevino un periodo de tensio~ que cuhnino en la aprobacion

de la Unidad Popular que no f d" al'~ de 1a "ley de control de armamentos". que permitia a las fuerzas annadas requisar uebl " .'. ,. "ueron c~.t:aces e armar todo para segurarse de que su monopolio no habia sido violado. La ley fue utilizada

p . 0, como a la ~teryenClon desestabihzadora" de Estados I pOI los militares facciosos contra la izquierda. Vease Paul E. Sigmund, The Overthrow

Umdos y las consplIacIOnes de la CIA. Estos analisis que,~ of Allende an the Politics of Chile (1964-1976J.Pittsburgp., 1977,pag.183.

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