EL FINANCIERO

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CLASIFICACIÓN NACIONAL NUM. HOJAS /

En Mayo Iniciaría la Etapa de Pruebas

D e s c o n o c e S e d u e s i l a I n c i n e r a d o r a T E E S A S o l i c i t a r á s u R e u b i c a c i ó n e n O t r a Z o n a d e l P a í s

TIJUANA, BC, 5 de abril.- Después de 15 millones de dólares invertidos, el inci­nerador Tijuana Equilibrio Ecológico So­ciedad Anónima (TEESA), filial de la Che­mical Waste Management, cuya licencia de operación le fue cancelada el pasado 2 de abril durante la visita de Patricio Chirinos a la entidad, no ha solicitado su reubicación en otra zona del país.

El hermetismo de los funcionarios de la transnacional no ha permitido conocer los planes futuros para el incinerador, el prime­ro que funcionaría en México para la elimi­nación de askareles —un aceite utilizado como enfriador de transformadores—, considerados carcinógenos o tóxicos.

Hasta el momento la delegación de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecolo­gía (Sedue) en Tijuana, desconoce si la empresa solicitará la reubicación de la planta incineradora.

TEESA fue inaugurada el 14 de noviem -bre de 1988, después de una inversión de

5̂ millones de dólares para constituirse amo única en su género dentro de la Re­

pública Mexicana, con el objetivo de redu­cir al mínimo sustancias altamente tóxicas generadas por Petróleos Mexicanos, la Co­misión Federal de Electricidad y la indus­tria maquiladora instalada en esta frontera. De acuerdo a los planes iniciales, TEESA iniciaría su etapa de pruebas en mayo pró­ximo. Sin embargo, por estar ubicada a cinco kilómetros de la zona habitacional Playas de Tijuana un grupo de amas de casa empezó a protestar en contra de la operación de la planta que "atenta contra la salud de los residentes de esta zona".

Grupos Ecologistas se Unen a la Protesta

Asimismo, se unieron a la protesta di­versos gfupos ecologistas como el Movi­miento Ecologista Mexicano, Greenpeace, Are Sano, entre otros, que levantaron sus demandas a lo largo de la frontera de Mé­xico y Estados Unidos.

Durante dos visitas previas a la cancela­

ción de la licencia, Patricio Chirinos argu­mentó que las plantas incineradoras eran el futuro para el desarrollo industrial del país y que la autorización final para las opera­ciones de TEESA, se daría siempre y cuan­do la empresa cumpliera con 99.9 por cien­to de las normas de seguridad que exige la Ley Ecológica Mexicana.

Ante la ola de protestas que se genera­ron en Tijuana sobre la instalación de TEE­SA, la transnacional inició una campaña de publicidad para explicar los mecanismos de seguridad del incinerador y de las ven­tajas que ofrece este tipo de instalaciones para el manejo de residuos tóxicos.

Sin embargo, ante el descontento y las protestas, Patricio Chirinos por instruccio­nes del presidente Carlos Salinas de Gorta-ri, según dijo, anunció la cancelación de la licencia durante su reciente visita a Tijuana y San Diego, en donde asistió a la X Con­ferencia de Gobernadores Fronterizos.

De acuerdo al funcionario de ecología, "las condiciones urbanas de la zona se han modificado sustancialmente, al crecer en más de 20 kilómetros cuadrados en los últimos cinco años, mientras que la pobla­ción lo ha hecho a un ritmo de 4.7 por ciento anual. Situación que por sí misma es suficiente para revisar los términos de la licencia previamente otorgada, a la luz de la realidad actual".

"Por causas imputables a la empresa, la manifestación del impacto ambiental a que obliga la ley, fue presentada de manera

ción". "El espíritu del Convenio de la Paz y el propio Plan Integral Ambienta* Fronterizo -puesto en marcha recientemente-, nos exi­gen actuar con la máxima responsabilidad, para proteger la salud de nuestra población y evitar aquello que pueda afectar a las comu­nidades al otro lado de la frontera".

Por todo eso, puntualizó el secretario de la Sedue, "se revoca la licencia que, en forma condicionada le había sido otorgada". El anuncio oficial de la clausura de TEESA fue bien recibido por funcionarios federales, es­tatales y municipales, empresarios, y sobre todo por los grupos ecologistas.

extemporánea, sin ajustes a la nueva reali­dad urbana".

Adicionalmente, señaló Chirinos Cale­ro, "se trata de un proyecto originalmente diseñado para una planta semimóvil, preci­samente para facilitar su eventual reubica-