estructura de clases en España 2011

Embed Size (px)

Citation preview

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    1/71

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    2/71

    Edita: Fundacin Encuentro

    Oquendo, 23

    28006 Madrid

    Tel. 91 562 44 58 - Fax 91 562 74 69

    [email protected]

    www.fund-encuentro.org

    ISBN: 978-84-89019-38-6

    ISSN: 1137-6228

    Depsito Legal: M-46952-2011

    Fotocomposicin e Impresin: Albadalejo, S.L.

    Antonio Alonso Martn, s/n - Nave 10

    28860 Paracuellos del Jarama (Madrid)

    CECS

    1 edicin: febrero de 2000

    2 edicin: marzo de 2000

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    3/71

    Gracias a las entidades que nospatrocinan Fundacin RamnAreces, Fundacin Mapfre ySecuritas Espaa la Fundacin

    Encuentro dirige el Centro deEstudios del Cambio Social(CECS), que elabora este Informe.En l ofrecemos una interpretacinglobal y comprensiva de la realidadsocial espaola, de las tendenciasy procesos ms relevantes ysignificativos del cambio.El Informe quiere contribuir a la

    formacin de la autoconcienciacolectiva, ser un punto de referenciapara el debate pblico que ayudea compartir los principios bsicosde los intereses generales.

    Convenio de colaboracin

    23 de marzo de 2011

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    4/71

    ndice

    PARTE PRIMERA:

    296

    Captulo VESTRATIFICACIN Y CLASES SOCIALES

    I. Tesis Interpretativas 3011. Modernizacin y proesionalizacin de la estructura ocupacional 3012. Protagonismo de las clases medias proesionales 3023. La inmigracin ha polarizado la estructura de clases espaola 303

    II. Red de los Fenmenos 304 1. Introduccin 304

    1.1 Defnicin de las clases 3052. Desarrollo econmico, modernizacin social y cambio en la estructura

    de clases 311

    2.1 Crecimiento econmico y cambio sectorial 3122.2 Actividades econmicas y estructura ocupacional 3172.3 La distribucin de las clases en Espaa 3222.4 Cambio en la estructura de clases 326

    3. Inmigracin y estructura de clases 3343.1 La oleada migratoria de la ltima dcada 3343.2 Actividad y ocupacin de los inmigrantes 3393.3 La clase social de los inmigrantes 3443.4 El impacto de la inmigracin en la estructura de clases 350

    4. La estructura de clases espaola en perspectiva comparada 3534.1 Diversidad institucional y pautas de estratiicacin social

    en las sociedades avanzadas 353

    4.2 Las estructuras de clases en Europa y las peculiaridades delcaso espaol 3574.3 Desindustrializacin y cambio de la estructura de clases:

    mejora o polarizacin? 3604.4 Clases sociales y riesgo de desempleo 363

    ndice de tablas y grficos

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    5/71

    Captulo V

    ESTRATIFICACIN YCLASES SOCIALES

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    6/71

    I. TESIS INTERPRETATIVAS

    1. Modernizacin y profesionalizacin de la estructuraocupacional

    Debido a que las clases sociales se definen como agregados de ocupa-ciones, la transformacin de la estructura de clases de un pas depende delcambio en la composicin sectorial de su economa y en su estructura ocu-pacional. A este respecto, el patrn de crecimiento de la economa espaoladurante las ltimas dcadas se ha caracterizado por la contraccin de laagricultura y el desarrollo de los servicios, con una presencia considerable,

    aunque muy dependiente del ciclo econmico, de la construccin. Desdelos aos sesenta del siglo pasado, Espaa ha venido experimentando unatransicin continua desde una economa basada en la agricultura, con undesarrollo industrial retrasado en relacin con otros pases europeos, hastala expansin posindustrial de una moderna economa de servicios. En granmedida, los ltimos quince aos han prolongado esa tendencia y acentuadolos procesos de modernizacin econmica que se haban puesto en marchadurante las dcadas anteriores.

    En este sentido, el cambio de la estructura de clases ha venido dadopor la prolongada contraccin de la agricultura, la continua expansin de laactividad econmica en el sector de los servicios, los vaivenes del sector de laconstruccin que acompaan al ciclo econmico y la prdida relativa, perosostenida, de mano de obra en el sector industrial. La expansin del sectorde los servicios se ha producido en todas y cada una de sus ramas de activi-dad. Sin embargo, dos actividades han sido capaces de generar un volumenmuy considerable de puestos de trabajo hasta el comienzo de la crisis: por unlado, el comercio y las reparaciones y, por otro, los servicios a las empresasy las actividades inmobiliarias y de alquiler.

    En estrecha asociacin con el cambio sectorial, la distribucin de los

    diferentes tipos de ocupaciones en el mercado de trabajo espaol ha experi-mentado considerables transformaciones que apuntan a una gradual moder-nizacin de la estructura ocupacional por la va de la profesionalizacin, unatendencia congruente con el nivel formativo cada vez mayor de las cohortesms jvenes de espaoles. Ninguna categora ocupacional aument ms sutamao que los llamados tcnicos y profesionales de apoyo, aunque caberegistrar tambin un incremento muy notable de los ocupados que trabajancomo profesionales cientficos e intelectuales. Destaca, asimismo, el creci-miento de los trabajadores en restauracin, servicios personales, protecciny ventas, ocupaciones que concentran sobre todo mano de obra femenina.

    Tambin el relevante crecimiento de los empleados de tipo administrativo lohan protagonizado principalmente las mujeres durante este perodo.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    7/71

    302 Informe Espaa 2011

    2. Protagonismo de las clases medias profesionales

    Dada la distribucin actual de las ocupaciones en la sociedad espa-

    ola, su estructura de clases se caracteriza por tres rasgos principales:1. Un peso agregado ciertamente importante de las nuevas y viejas

    clases medias, que incluyen a casi la mitad de la poblacin ocupada (49%).

    2. Una presencia considerable y creciente de los trabajadores de cue-llo blanco de nivel bajo (trabajadores de los servicios y del comercio de rangoinferior), que constituyen el 15% de la fuerza de trabajo.

    3. Una clase trabajadora compuesta sobre todo por trabajadores nocualificados (24%).

    En trminos dinmicos, el cambio en la estructura de clases espaolaen los ltimos quince aos ha venido marcado por:

    Un crecimiento de los profesionales, tanto de nivel alto como bajo.

    Un aumento de los trabajadores del comercio y otros servicios denivel bajo.

    Un incremento, por encima del promedio general, de las ocupacio-nes intermedias.

    Un crecimiento, de la misma magnitud que el del conjunto de los

    ocupados, de los trabajadores no cualificados, gracias sobre todoal empleo femenino.

    Un escaso crecimiento, inferior a la media, de los trabajadores cua-lificados.

    Un esperable e intenso declive de los pequeos propietarios y tra-bajadores autnomos.

    Por lo tanto, en trminos ms sintticos, el cambio en la estructura declases espaola ha seguido tres tendencias. Primera, una alteracin radicalen la composicin de las clases medias en virtud de la cual los profesionales

    han ganado importancia a costa de los pequeos empleadores y los trabaja-dores autnomos. Segunda, y en conexin con la expansin del sector de losservicios, un cambio en el balance entre trabajadores manuales y no manua-les a favor de los segundos. Y, tercera, un crecimiento de los trabajadoresno cualificados a expensas de los cualificados. En otras palabras, los datossobre la evolucin de la estructura de clases revelan que el cambio ms signi-ficativo se debe sobre todo a la expansin de las clases directivas y profesio-nales, a la disminucin de los trabajadores cualificados y a un crecimientode los no cualificados similar al del conjunto de las clases. Se ha producidoas una mejora en la estructura ocupacional que se puede interpretar como

    un resultado del proceso de sustitucin de las viejas clases medias por lasnuevas clases medias profesionales y directivas.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    8/71

    Estratificacin y clases sociales 303

    En trminos comparativos, Espaa muestra varios de los rasgos pro-pios del rgimen fragmentado de bienestar que es tpico de los pases delsur de Europa. En primer lugar, se observan marcadas diferencias entre

    hombres y mujeres en cuanto a la participacin en el mercado laboral. Ensegundo lugar, existe una polarizacin de las oportunidades de empleo entrediferentes clases sociales que refleja la segmentacin del mercado de tra-bajo. En tercer lugar, la estructura de clases en Espaa sigue reflejando unamayor proporcin de trabajos no cualificados que en los pases europeos delcentro y del norte, aunque la tendencia reciente haya sido la de una paula-tina mejora del perfil ocupacional. Otra de las caractersticas que comparteEspaa con los pases mediterrneos es la elevada proporcin de trabajado-res autnomos y pequeos propietarios, si bien hay claros indicios de con-vergencia con las estructuras de clases de otros pases europeos occidentales

    durante los ltimos quince aos.

    3. La inmigracin ha polarizado la estructura de clases espaola

    Para entender correctamente el cambio en la estructura de clases es-paola no se puede soslayar el impacto que ha tenido la llegada al pas, entre1998 y 2009, de un contingente de no menos de cinco millones de inmigran-tes. Procedentes de diversas regiones y pases del mundo como frica, Am-

    rica Latina y Europa del Este, se han incorporado principalmente a trabajosde baja cualificacin en la agricultura, la construccin y los servicios. Setrata, en la inmensa mayora de los casos, de inmigrantes econmicos quese han situado en la clase de los trabajadores no cualificados. Contrastanas claramente con los espaoles: estos inmigrantes econmicos tienen unapresencia relativamente mayor que los espaoles en las clases trabajadoras,pero se encuentran manifiestamente infrarrepresentados en el mundo deltrabajo de cuello blanco (es decir, directivos y profesionales de nivel alto ybajo y ocupaciones intermedias).

    En consecuencia, el impacto de la inmigracin ha polarizado la dis-

    tribucin de clases espaola en la medida en que ha concentrado ms traba-jadores no cualificados en el fondo de la estructura. Si la sociedad espaolano hubiese recibido este inmenso flujo de inmigrantes durante la primeradcada del siglo XXI, su estructura de clases sera mucho ms equilibrada ymenos desigual de lo que en realidad es.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    9/71

    II. RED DE LOS FENMENOS

    1. Introduccin

    En este captulo sobre estratificacin y clases sociales en Espaa pre-tendemos presentar a los lectores un anlisis riguroso, pero accesible, de loscambios ms relevantes que ha experimentado la estructura de clases en laEspaa de los ltimos quince aos. Nuestro objetivo es doble. En primerlugar, nos proponemos hacer acopio de los datos pertinentes para describirlos perfiles fundamentales de la estructura de clases del pas: qu clases lacomponen y qu tamao tienen, bsicamente. En segundo lugar, daremosun paso ms para aproximarnos a una sucinta explicacin de la distribucin

    actual de esa estructura: mostraremos cmo el proceso de desarrollo eco-nmico y modernizacin social que ha experimentado Espaa en estos l-timos aos ha impulsado cambios en la estructura sectorial de la economaespaola, en el mercado de trabajo y en la distribucin ocupacional que, a suvez, han transformado la estructura de clases. Para ello, nos serviremos deun concepto contemporneo de la clase social, la llamada Clasificacin So-cioeconmica Europea (ESeC, por sus siglas en ingls), que responde a cri-terios rigurosos de validez y ha obtenido un amplio respaldo internacional.

    Dada su importancia en los debates sobre la transformacin de la

    estructura social de las sociedades avanzadas, prestaremos una particularatencin a la evolucin y a la situacin actual de las clases medias. Se tratade un segmento social que, en principio, se supone que est destinado acrecer y a ampliarse con el desarrollo econmico y la modernizacin social.Como es obvio, los procesos continuados de crecimiento econmico y loscambios en la estructura ocupacional que los hacen posibles y los impulsanson fundamentales para entender la condicin de las clases medias en lospases desarrollados.

    Un aspecto insoslayable del cambio en la estructura social espaolaes el impacto que en ella ha tenido la reciente oleada migratoria que lleg a

    nuestro pas en la primera dcada del siglo XXI. Como es bien sabido, entre1998 y 2009 se establecieron en Espaa alrededor de cinco millones de inmi-grantes procedentes de diversas zonas del mundo como frica, Amrica La-tina y Europa del Este. En unos pocos aos, Espaa dej de ser un pas conescasa presencia de inmigrantes para convertirse en otro, muy distinto, conuna de las tasas de poblacin inmigrante ms altas de Europa. La inmensamayora, por no decir la casi totalidad, de los inmigrantes llegados son in-migrantes econmicos. Es decir, trabajadores impulsados por la intencinde conseguir en Espaa empleos, condiciones de vida y oportunidades depromocin social mucho mejores que las que dejan en sus pases de origen.

    No es menos sabido que esos inmigrantes econmicos se concentran entrabajos de baja cualificacin en la agricultura, la construccin y el sector

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    10/71

    Estratificacin y clases sociales 305

    de los servicios. Esta masiva afluencia de inmigrantes econmicos ha tenidoque implicar por fuerza una alteracin de la estructura de clases que con-viene analizar con atencin. Aunque es muy posible que a da de hoy la fase

    expansiva del reciente ciclo migratorio espaol est agotada a causa de lacrisis econmica, es obligado incorporar a nuestro anlisis el impacto de lainmigracin en la estructura de clases espaola como una pieza separada denuestra contribucin. Nos proponemos hacerlo, primero, precisando la clasesocial de los inmigrantes y, segundo, perfilando los efectos de su incorpora-cin a la estructura social.

    Finalmente, dedicaremos el ltimo bloque del captulo a situar el casoespaol en el contexto de otros modelos de estratificacin social del mundoy, en particular, de Europa. En la literatura comparada aparecen varios mo-delos de estructura social a los que normalmente se asocian distintos pases.

    Nuestro propsito en esta ltima parte es comprobar en qu nos parecemosa otros modelos europeos occidentales y en qu nos diferenciamos de ellos.En el rea europea se suele hablar, por ejemplo, de los modelos nrdico, an-glosajn y continental. Dentro de este ltimo tipo se distingue a veces la exis-tencia de un modelo mediterrneo con caractersticas propias que agruparaa los pases del sur de Europa. El examen comparado de las peculiaridadesdel caso espaol permitir determinar hasta qu punto se ajusta a alguno delos modelos existentes.

    1.1 Definicin de las clases

    A qu se refieren los socilogos contemporneos cuando hablan declases sociales? Desde luego no a aquellos grandes agregados sociales conlos que algunos tericos del siglo XIX aspiraban a explicar todo el curso dela Historia universal a partir del conflicto de intereses materiales. Hoy enda, las pretensiones de los expertos en estratificacin social la rama de lasociologa que se ocupa de analizar las formas estructuradas de desigualdadsocial son bastante ms modestas, aunque creemos que estn mejor funda-mentadas. La idea es tan simple como contar con un esquema organizado degrupos sociales que sirva bsicamente para dos propsitos: describir el mapade la desigualdad en una sociedad, es decir, definir cmo est estratificadaen diferentes categoras; y explicar algunas formas de desigualdad y algunoscomportamientos sociales asociados a la distribucin diferencial de recursosque implica la existencia de esas categoras.

    Merece la pena insistir en lo que tiene de distintiva la perspectivasociolgica de la desigualdad social1. Dos precisiones son aqu pertinentes.

    1Goldthorpe, J. H. (2012): De vuelta a la clase y el estatus: por qu debe revindicarseuna perspectiva sociolgica de la desigualdad social, en Revista Espaola de InvestigacionesSociolgicas, en prensa.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    11/71

    306 Informe Espaa 2011

    En primer lugar, los socilogos abordan la estratificacin de forma multidi-mensional: las desigualdades que se observan en las complejas sociedadesdesarrolladas en modo alguno se pueden reducir a una nica dimensin;

    adems, las diferentes dimensiones de la desigualdad (renta, riqueza, pres-tigio, educacin, salud, felicidad, etc.) no necesariamente tienen por qucoincidir, producindose a menudo claras inconsistencias entre unas y otras.En segundo lugar, frente al enfoque tpico de los economistas y otros cient-ficos sociales, que es sobre todoatributivo, la aproximacin de los socilogoses eminentementerelacional. En otros trminos, mientras los economistassuelen trabajar con un concepto de la desigualdad que se preocupa de losatributos (en particular, de la renta, de la riqueza y, a veces, de la educacin)que en mayor o menor cantidad poseen los individuos, los socilogos abor-dan la desigualdad interesndose por el tipo de relaciones sociales en las que

    unos individuos obtienen ventajas sobre otros.Desde un punto de vista sociolgico, en las sociedades actuales, las

    clases se definen fundamentalmente por las relaciones sociales en el mer-cado de trabajo2. Por qu el mercado de trabajo es la matriz social bsicade la que nacen y en la que se insertan las clases sociales? Porque en unaeconoma de mercado es la posicin en el mercado el elemento fundamen-tal que produce las desigualdades sociales. Ms concretamente, siendo elempleo la principal fuente de ingresos para la gran mayora de la poblacin,la posicin en la estructura ocupacional resulta determinante para generardesigualdades sociales. Dicho de otro modo, las oportunidades vitales de losindividuos y las familias dependen en buena medida del tipo de trabajo querealizan y, por lo tanto, su ocupacin se convierte en el principal indicadorde su posicin en la estructura de clases. Una importante ventaja adicionalde este concepto relacional, frente al atributivo, de la desigualdad es que laocupacin suele cambiar poco a lo largo del ciclo vital de una persona. Enconsecuencia, la clase social es un indicador mejor de las oportunidadesvitales de los individuos a largo plazo que, por ejemplo, la renta, que sueleestar sujeta a una mayor fluctuacin.

    Este trabajo se centra sobre todo en las clases sociales como catego-

    ras surgidas de las relaciones de empleo. Se sigue de ah que las clases hande entenderse como conjuntos de posiciones en la estructura ocupacional o,ms simplemente, como agrupaciones de ocupaciones. El esquema con elque vamos a trabajar es la llamada Clasificacin Socioeconmica Europea(ESeC, por sus siglas en ingls), que se compone de diez categoras bsicasque se recogen en el cuadro 1.

    La clase 1 incluye a los grandes empleadores, los altos directivos delas empresas y la Administracin Pblica y los profesionales de nivel alto.Los grandes empresarios (empresas de ms de diez trabajadores) y los altos

    2Ibdem.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    12/71

    Estratificacin y clases sociales 307

    directivos representan una parte relativamente pequea de esta clase, queest numricamente dominada por los profesionales de nivel alto. Incluyeocupaciones como las de abogado, mdico o ingeniero. Cuando no se desem-pean bajo el modo del trabajo por cuenta propia, estas ocupaciones profe-sionales se atienen bien a lo que se suele dominar relaciones de servicio delos empleados a sus empleadores. La relacin de servicio implica que la cua-lificacin del empleado es muy especfica y la capacidad de supervisin que

    tiene el empleador sobre su trabajo es muy limitada. A diferencia de la tpicarelacin laboral de contrato (dinero a cambio de esfuerzo), las relaciones deservicio implican una forma difusa de intercambio en la que los empleadosrinden un servicio a los empleadores a cambio de alguna compensacin quesuele incluir la perspectiva de promocin en el futuro. En la terminologaanglosajona de los creadores del esquema se la suele denominarhigher sala-riat o clase de servicio de nivel alto.

    La clase 2 agrupa a los directivos y profesionales de nivel bajo, aunquetambin a los tcnicos superiores. Incluye ocupaciones como las de maes-tro, trabajador social o personal de enfermera. Tambin a los directivos ygerentes de nivel bajo (por ejemplo, los directores de departamento en lasempresas) y a los llamados tcnicos y profesionales de apoyo. Se supone quelos miembros de esta clase mantienen con sus empleadores una relacin deservicio atenuada en comparacin con la que es caracterstica de la clase 1:por un lado, estas ocupaciones implican tambin un grado relativamentealto de especificidad en la cualificacin que requieren, pero las posibilidadesde supervisin para el empleador son mayores que en el caso de los altosprofesionales o directivos. Los anglosajones la suelen denominar lower sala-riat o clase de servicio de nivel bajo.

    En la clase 3 se integran los empleados de cuello blanco de nivel alto.Las ocupaciones que componen esta clase, entre las que destacan sobre todo

    Cuadro 1 Clasifcacin Socioeconmica Europea (ESeC)

    1 Grandes empleadores, directivos y proesionales de nivel alto

    2 Directivos y proesionales de nivel bajo

    3 Empleados de cuello blanco de nivel alto

    4 Pequeos empleadores y trabajadores autnomos no agrcolas

    5 Trabajadores autnomos agrcolas

    6 Supervisores y tcnicos de rango inerior

    7 Trabajadores de los servicios y comercio de rango inerior

    8 Trabajadores manuales cualifcados

    9 Trabajadores no cualifcados

    10 Excluidos del mercado de trabajo y parados de larga duracin

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    13/71

    308 Informe Espaa 2011

    los empleados administrativos, suponen una forma mixta de relacin deempleo, con algunos elementos de la de servicio y otros de la de contrato. Elgrado de especificidad de sus cualificaciones es bajo, aunque esto no implica

    que los empleadores no tengan problemas de supervisin de sus empleadosen estas categoras. En todo caso, tanto las retribuciones como las perspec-tivas de promocin de estas ocupaciones son claramente inferiores a las delos profesionales.

    Con las clases 4 y 5 (formadas por los pequeos empleadores y porlos trabajadores autnomos no profesionales) se entra en el mundo de lapequea burguesa tradicional. Sus relaciones de empleo son peculiares.Los pequeos empleadores (menos de diez trabajadores) compran trabajo asus empleados, sobre los que ejercen autoridad y control. Los trabajadoresautnomos trabajan por cuenta propia, es decir, no compran ni venden tra-bajo. Aunque a menudo se funden en una sola categora, la clase 4 incluyea los pequeos empresarios y autnomos en ocupaciones no profesionalesno agrcolas. Si ejercen sus ocupaciones en la agricultura y la pesca formanla clase 5.

    En la clase 6 se ubican los supervisores y tcnicos de rango inferior.Esta clase incluye ocupaciones que implican trabajo manual cualificado conejercicio de la funcin de supervisin sobre otros trabajadores, como los en-cargados, jefes o capataces. Puesto que de alguna manera las relaciones deempleo en estas ocupaciones tienen elementos mixtos (servicio y contrato) y

    dado que se trata de una clase muy poco numerosa, se la suele unir a la clase3 para formar la llamada clase de las ocupaciones intermedias.

    La clase 7 incluye a los trabajadores del comercio y los servicios derango inferior. Sus miembros realizan trabajo no manual y sus relaciones deempleo se regulan mediante contratos de trabajo. Constituyen el mundo delos empleados de cuello blanco de nivel bajo. Adems de los dependientes decomercio, agrupa a los trabajadores en los servicios personales. Se trata deuna clase con una composicin fundamentalmente femenina.

    Pertenecen a la clase 8 los trabajadores manuales cualificados. Aunquesus relaciones de empleo se rigen por contratos laborales tpicos, en las ocu-paciones que se sitan en esta clase, la especificidad de las cualificacionesrequeridas es relativamente alta y los empleadores tienen ciertos problemasde supervisin de la calidad del trabajo. Compuesta fundamentalmente dehombres, incluye a los trabajadores cualificados de las industrias manufac-tureras, la construccin y la minera. Son ocupaciones muy representativasde esta clase los electricistas, moldeadores, soldadores y mecnicos.

    La clase 9 est integrada por los trabajadores no cualificados. Pertene-cen a esta clase quienes desempean las denominadas ocupaciones elemen-

    tales, a veces tambin llamadas de rutina. Se trata de trabajos que exigenpoca cualificacin para su desempeo lo que hace que estos trabajadores

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    14/71

    Estratificacin y clases sociales 309

    sean fcilmente sustituibles y en los que los empleadores no tienen espe-ciales problemas para ejercer la funcin supervisora, por lo que el contratode trabajo prevalece como relacin de empleo dominante. Los peones en la

    industria, la agricultura y la construccin forman parte de esta clase, al igualque los trabajadores no cualificados de los servicios, como limpiadores, or-denanzas y empleados domsticos.

    Por ltimo, la clasificacin contempla la posibilidad de distinguir unadcima clase formada por los involuntariamente excluidos del mercado detrabajo, bsicamente buscadores de empleo sin previa experiencia laboral yparados de larga duracin.

    El esquema de la ESeC3 se deriva de los trabajos tericos y empricosde John Goldthorpe profesor emrito de la Universidad de Oxford y uno delos mayores expertos contemporneos en estratificacin y movilidad social,respecto a cuyo esquema original supone un producto ms evolucionado conms capacidad comparativa que su antecesor. Se forma agrupando aquellasocupaciones codificadas con tres dgitos en la variante europea de la Clasi-ficacin Internacional Uniforme de Ocupaciones 1988 (CIUO-88 o ISCO-88,en sus siglas en ingls), que, por sus caractersticas (estatus de empleo, tipode contrato, etc.), mantienen una posicin similar en el mercado de trabajo.Una vez establecidas las diez categoras bsicas, la clasificacin permite ul-teriores agrupaciones, ms sintticas, que reducen el nmero de clases.

    En parte, el esquema de la ESeC responde a los importantes desafosa los que se han enfrentado los estudios de estratificacin social desde losaos setenta. Esos retos han obligado a adaptar el aparato analtico de lasociologa de la estratificacin para poder reflejar los cambios sociales yeconmicos que se han ido produciendo a un ritmo cada vez ms aceleradoen las sociedades posindustriales. Esquemas como el de la ESeC permiten ala teora de la estratificacin social dar respuesta a algunos autores que hanproclamado la desaparicin de las clases como consecuencia de que los tra-bajadores de cuello azul han dejado de ser el grupo mayoritario de la estruc-tura ocupacional4. Por otro lado, los ajustes del aparato analtico tambin

    han servido para reconciliar el anlisis de clase con la teora feminista quehaba criticado que el enfoque convencional, y el esquema de J. Goldthorpeen particular, representaba una perspectiva indebida y exclusivamente mas-culina de la sociedad al no prestar mucha atencin a las condiciones deempleo de la mayora de las mujeres5.

    3Rose, D. y Harrison, E. (eds.) (2009): Social Class in Europe. An introduction to theEuropean Socio-economic Classification. Abingdon: Routledge.

    4Beck, U. (1983): Jenseits von Stand und Klasse?, en Kreckel, R. (ed.): Soziale Ungleich-heiten. Soziale Welt. Gttingen: Sonderband, p. 3574.

    5Crompton, R. (1989): Class Theory and Gender, en The British Journal of Sociology,40 (4), p. 565-587.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    15/71

    310 Informe Espaa 2011

    La clasificacin, como su propio nombre indica, ha sido diseadaen el contexto europeo. Hasta ahora ha demostrado un ms que aceptablegrado de validez y es apropiada para hacer comparaciones internacionales.

    Por todo ello, ser nuestro instrumento bsico para dibujar el mapa de lasclases sociales en Espaa, estudiar su evolucin en el tiempo y cotejarlo conel de otros pases europeos.

    El esquema clasificatorio que estamos utilizando no identifica espec-ficamente como media a ninguna de las clases que lo componen. De hecho,la teorizacin contempornea en este campo no considera que haya elemen-tos analticos suficientes que permitan y justifiquen construir la categora delasclases medias. Sin embargo, dada la generalizada aceptacin del trminoen el espacio pblico y en los discursos populares, proponemos, a efectospuramente heursticos, considerar que las clases medias las integran, porun lado, los profesionales de todos los niveles (clases 1 y 2), las ocupacionesintermedias o trabajadores de cuello blanco de nivel alto (clases 3 y 6) y,por otro, los pequeos empleadores y autnomos tanto agrarios como noagrarios (clases 4 y 5). Claramente, las tres primeras clases constituiran lasnuevas clases medias, cuya posicin en el sistema de estratificacin se basaen el trabajo tcnico cualificado y en una relacin laboral de servicio a losempleadores, frente a la relacin puramente contractual de intercambio detrabajo por salario propia de las clases trabajadoras. Las dos ltimas se co-rresponden con la idea convencional de lasviejas clases medias (la pequeaburguesa tradicional) y basan su posicin en la propiedad de los recursosproductivos que utilizan.

    Incluso en trminos puramente prcticos, esta solucin no est sinembargo exenta de problemas. Tal vez el ms importante sea que, si las cla-ses medias se agrupan de la forma propuesta, no tienen un referente por en-cima de ellas en la propia estructura con el que compararse. Por as decirlo,no hayclasealta en esta representacin de la estructura social y, por lo tanto,no termina de estar claro en medio de qu clases se sitan las clases medias.Una posible solucin sera considerar como clase alta a los directivos y pro-fesionales de nivel alto (clase 1), al menos en la medida en que parte de sus

    miembros son grandes empleadores y altos directivos de grandes empresas.Pero las encuestas por muestreo que son nuestra principal fuente de in-formacin para estudiar la estructura social plantean serios problemas deacceso a esos segmentos sociales, por lo que su presencia y tamao en estosdispositivos de recogida de datos son siempre muy reducidos, por no decirinsignificantes. La clase 1 incluye de facto a un nmero muchsimo mayorde altos profesionales en los sectores privado y pblico, cuya pertenencia ala clase alta es en principio discutible y a los que cabra situar ms bien en lazona alta de las nuevas clases medias. En suma, las limitaciones de nuestradefinicin prctica de las clases medias son importantes en la medida en que

    no quedan bien determinadas sus fronteras superiores y habrn de tenersemuy en cuenta cada vez que hablemos de ellas.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    16/71

    Estratificacin y clases sociales 311

    2. Desarrollo econmico, modernizacin social y cambio en laestructura de clases

    Durante las ltimas dcadas, la sociedad espaola ha experimentadocambios transcendentales que han afectado a prcticamente todos los m-bitos de su vida social, poltica, econmica y cultural6. Una de las conse-cuencias ms destacadas de estos cambios ha sido la mejora constante delas condiciones materiales de vida de los espaoles, ya se midan stas encantidades de renta o riqueza, pautas de consumo, niveles de cualificacin,acceso a servicios y beneficios sociales o condiciones de salud y esperanzade vida. Como se ha sealado, la historia econmica de las ltimas dca-das en Espaa puede considerarse como un gran xito colectivo7. Sealaren estos momentos las dimensiones positivas del cambio socioeconmico

    puede parecer un ingenuo ejercicio de optimismo. Todos somos ahora muyconscientes de que el pas est atravesando una gravsima crisis econmicacuya salida no se divisa, por desgracia, a la hora de escribir este captulo. Entodo caso, y por penosas que estn resultando las actuales adversidades, sise mira la realidad con una perspectiva temporal algo ms amplia se imponela conclusin de que la sociedad espaola se ha ido haciendo cada vez msprspera a lo largo de las ltimas dcadas. Incluso teniendo en cuenta la po-sibilidad de un continuado estancamiento econmico durante los prximosaos, no cabe duda de que las condiciones de vida de los espaoles seguirnsiendo considerablemente ms favorables que hace veinte aos.

    Ahora bien, que la reciente trayectoria econmica del pas slo puedacalificarse de xito colectivo hasta la llegada de la crisis dice poco o almenos no dice lo suficiente de las transformaciones especficas de su es-tructura social. El problema es, simplemente, que las meras cifras de creci-miento del PIB no trasmiten informacin precisa sobre el cambio social queha acompaado a ese crecimiento. Dicho en otros trminos, la indudablemejora agregada del nivel y las condiciones de vida en Espaa puede, enprincipio, asociarse a diferentes formas de cambio de la estructura social ya distintas evoluciones de su distribucin de clases. Lo mismo cabe decir delas dificultades asociadas a la crisis econmica, cuyo impacto diferencial enla estructura social interesa igualmente conocer.

    Por eso, para entender mejor cmo se han distribuido la prosperidady la adversidad en los distintos estratos socioeconmicos que componen lasociedad espaola, en este epgrafe se analizar con cierto detenimiento la

    6 Gonzlez, J. J. y Requena, M. (eds.) (2008): Tres dcadas de cambio social en Espaa.Madrid: Alianza; Requena, M. (2011): Espaa en la Unin Europea: cambios sociales y din-micas demogrficas, en Ferreira, T. y Garca Prez, R. (coord.): Portugal e Espanha. Crise econvergncia na Unio Europeia. Parede: Tribuna de Histria, p. 49-73.

    7Chislett, W. (2009): Spain Going Places. Economic, Political and Social Progress, 1975-2008. Madrid: Telefnica.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    17/71

    312 Informe Espaa 2011

    transformacin de la estructura de clases en Espaa en los ltimos quinceaos. Cmo ha cambiado el patrn de estratificacin social en Espaa a lolargo de esos aos? Qu zonas de la estructura de clases han crecido y se

    han desarrollado ms? Qu sectores sociales han aumentado su tamao yganado importancia en ese perodo? Qu otros segmentos se han contradoy han perdido peso en el curso del cambio? Qu han supuesto los cambiospara las clases medias? Ha implicado el cambio en la distribucin de lasclases, como sugieren algunos analistas, una polarizacin de la estructurasocial?

    A estas preguntas se dar respuesta en las pginas que siguen. Paraello, se examinar el impacto de las transformaciones sociales y econmicasen la estructura de clases, su distribucin en Espaa y la evolucin de lasdistintas clases sociales en estos ltimos quince aos. Como se ha sea-

    lado antes, la teora contempornea de las clases sociales las concibe comoconjuntos de ocupaciones que, por una parte, son coherentes debido a quecomparten una misma posicin en el mercado de trabajo y un mismo estatusde empleo y, por otra, tienen una apreciable influencia en las oportunida-des vitales de quienes las ocupan. As, la transformacin de la estructurade clases de un pas depende necesariamente del cambio en su estructuraocupacional.

    Por lo tanto, para contextualizar la reciente evolucin de la estructurasocial y precisar los factores que la han dirigido, hay que comenzar por

    destacar los cambios que se han producido en la estructura econmica delpas y en su distribucin sectorial, la correspondiente transformacin dela estructura ocupacional, la tremenda expansin del mercado de trabajohasta el estallido de la crisis econmica, el aumento del nivel formativo delas nuevas generaciones de espaoles, el acceso generalizado de las mujeresal empleo o la masiva incorporacin a nuestra fuerza de trabajo de un vo-lumen muy considerable de inmigrantes. Esos cambios estn de una u otraforma relacionados entre s y como vamos a detallar en las pginas quesiguen todos ellos han dejado su impronta en la estructura social del pas:al hilo de los mismos, la distribucin de las clases sociales ha cambiado de

    forma gradual, pero claramente perceptible, y lo ha hecho, adems, en unadireccin relativamente convergente con lo que ha sucedido en otros pasesdesarrollados de nuestro entorno.

    2.1 Crecimiento econmico y cambio sectorial

    Se mire como se mire, el balance econmico espaol del perodo 1995-2008 es muy positivo. En esos aos, la economa espaola creci a un ritmomedio anual del 3,6%, alcanzando picos prximos al 5% en el entorno del

    ao 2000; el PIB a precios de mercado se multiplic por un factor de 2,4; elpas se convirti en una de las economas ms abiertas del mundo, con una

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    18/71

    Estratificacin y clases sociales 313

    participacin relevante en el comercio mundial y un papel destacado comoinversor exterior gracias a la pujante actividad de sus compaas multinacio-nales. Mientras suceda todo esto, la sociedad espaola fue capaz de recibir y

    dar empleo a un contingente de inmigrantes muy voluminoso. Durante granparte de estos aos predominaron las sensaciones de opulencia, optimismoy confianza en el futuro: la prolongada bonanza haba convertido a Espaaen el octavo pas del mundo por el tamao de su economa (o, excluyendoa China, en el sptimo de los desarrollados). Nuestro pas pareca, en suma,consolidarse como una prspera economa desarrollada a la que correspon-da una no menos desarrollada sociedad del bienestar.

    Qu tipo de desarrollo sectorial permiti alcanzar y mantener eseritmo de crecimiento econmico? El patrn de crecimiento de la economaespaola es bien conocido: contraccin de la agricultura y desarrollo de

    los servicios, con una presencia considerable, aunque muy dependiente delciclo econmico, de la construccin. En efecto, desde los aos sesenta delsiglo pasado Espaa ha experimentado una transicin continua desde unaeconoma basada en la agricultura, con un desarrollo industrial retrasado enrelacin con otros pases europeos, hasta la expansin posindustrial de unamoderna economa de servicios8. En gran medida, los ltimos quince aoshan prolongado esa tendencia y acentuado los procesos de modernizacineconmica que se haban puesto en marcha durante las dcadas anteriores.La informacin sobre la distribucin sectorial del PIB es clara: segn losdatos del INE, entre 1995 y 2008, el peso del sector primario en la economa

    espaola, medido por su contribucin al PIB, se redujo de forma importante(desde un 4,2% hasta un 2,4%) y retrocedi tambin el de la industria (desdeun 16,6% hasta un 13%), mientras crecan el del sector terciario, es decir, elsector de los servicios (desde un 60,9% hasta un 63,1%) y, sobre todo, el dela construccin (desde un 6,9% a un 10,4%).

    De particular inters respecto a los efectos de su implicacin para ladistribucin de las clases es analizar el cambio econmico en trminos deempleo9. En el perodo considerado, el crecimiento de la economa espaolaha supuesto, en primer lugar, una tremenda expansin del mercado de tra-

    bajo que ha hecho aumentar nuestra fuerza laboral desde los ms de 12,6millones de ocupados de comienzos de 1996 hasta los 20,4 millones de prin-cipios de 2008 (tabla 1). Los cerca de ocho millones de nuevos puestos de

    8Garrido, L. y Gonzlez, J. J. (2008): Mercado de trabajo, ocupacin y clases sociales,en Gonzlez, J. J. y Requena, M. (eds.), p. 89-134.

    9La estructura del mercado laboral es una realidad compleja con, al menos, tres ele-mentos fundamentales: la demanda de trabajo derivada del cambio en los sectores econmi-cos y la estructura ocupacional, la oferta que proporciona la mano de obra potencial con susdiferentes niveles de cualificacin y la regulacin institucional de las relaciones laborales. Lostres elementos son obviamente importantes para la formacin de las clases y el cambio en sudistribucin, aunque aqu nos centraremos sobre todo en los relativos a la demanda.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    19/71

    314 Informe Espaa 2011

    Ta

    bla

    1

    Evo

    luc

    in

    de

    losocupa

    dospor

    sec

    tores.

    Va

    lora

    bso

    lutoenm

    ilesyporcen

    taje

    .1996-2

    011

    Va

    lora

    bso

    luto

    Porcen

    taje

    Agricu

    ltura

    In

    dus

    tria

    Cons

    trucc

    in

    Serv

    icios

    To

    tal

    Agricu

    ltura

    Ind

    us

    tria

    Cons

    trucc

    in

    Serv

    icios

    To

    tal

    1996

    1.130,0

    2.553,9

    1.166,5

    7.776,3

    12

    .626

    ,7

    8,9

    20,2

    9,2

    61,6

    100

    1997

    1.135,4

    2.610,0

    1.283,3

    8.097,9

    13

    .126

    ,6

    8,6

    19,9

    9,8

    61,7

    100

    1998

    1.158,7

    2.766,2

    1.309,1

    8.398,9

    13

    .632

    ,9

    8,5

    20,3

    9,6

    61,6

    100

    1999

    1.073,4

    2.918,5

    1.481,9

    8.850,4

    14

    .324

    ,2

    7,5

    20,4

    10,3

    61,8

    100

    2000

    1.041,1

    3.004,4

    1.656,6

    9.417,1

    15

    .119

    ,2

    6,9

    19,9

    11,0

    62,3

    100

    2001

    1.092,7

    3.167,5

    1.803,6

    9.802,5

    15

    .866

    ,3

    6,9

    20,0

    11,4

    61,8

    100

    2002

    1.069,9

    3.099,9

    1.951,7

    10.214,0

    16

    .335

    ,5

    6,5

    19,0

    11,9

    62,5

    100

    2003

    1.005,2

    3.208,8

    2.042,9

    10.666,6

    16

    .923

    ,5

    5,9

    19,0

    12,1

    63,0

    100

    2004

    1.031,8

    3.173,6

    2.161,0

    11.233,9

    17

    .600

    ,3

    5,9

    18,0

    12,3

    63,8

    100

    2005

    1.017,3

    3.257,5

    2.270,5

    11.947,3

    18

    .492

    ,6

    5,5

    17,6

    12,3

    64,6

    100

    2006

    984,8

    3.273,6

    2.436,7

    12.705,0

    19

    .400

    ,1

    5,1

    16,9

    12,6

    65,5

    100

    2007

    990,0

    3.265,3

    2.664,7

    13.149,3

    20

    .069

    ,3

    4,9

    16,3

    13,3

    65,5

    100

    2008

    863,7

    3.313,4

    2.670,3

    13.554,8

    20

    .402

    ,2

    4,2

    16,2

    13,1

    66,4

    100

    2009

    837,8

    2.900,1

    1.978,0

    13.374,9

    19

    .090

    ,8

    4,4

    15,2

    10,4

    70,1

    100

    2010

    835,2

    2.599,8

    1.663,0

    13.296,1

    18

    .394

    ,1

    4,5

    14,1

    9,0

    72,3

    100

    2011

    783,2

    2.540,8

    1.494,0

    13.333,7

    18

    .151

    ,7

    4,3

    14,0

    8,2

    73,5

    100

    Variacin1996-2008

    266,3

    759,5

    1.503,8

    5.778,5

    7.7

    75

    ,5

    23,6

    29,7

    128,9

    74,3

    61

    ,6

    Variacin2008-2011

    80,5

    772,6

    1.176,3

    221,1

    2

    .250

    ,5

    9,3

    23,3

    44,1

    1,6

    11

    ,0

    No

    ta:

    Datosdelosprimerostrimestresdeca

    daao.Desde2008losdatosestnd

    esagregadosdeacuerdoalaCNAE2009.

    Fuen

    te:ElaboracinFundacinEncuentroa

    partirdeINE,

    EncuestadePoblacin

    Activa,variosnmeros.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    20/71

    Estratificacin y clases sociales 315

    trabajo suponen que el ritmo de creacin de empleo en Espaa (un 61,6% enel perodo) fue claramente superior al promedio europeo durante esos aos.La mayor parte de esos nuevos empleos (casi 5,8 millones) se crearon en los

    servicios, sector que acumula casi las tres cuartas partes (74,3%) del creci-miento total del perodo, aunque hay que considerar tambin la importantecontribucin de los sectores de la construccin y la industria y las no menossignificativas prdidas del sector primario. Al cambiar el ciclo econmico,la crisis ha supuesto la destruccin de ms de 2,2 millones de empleos en eltrienio 2008-2011, algo ms de una cuarta parte (28,9%) de los generadosen los aos anteriores.

    Comenzando por el sector primario, a mediados de los aos noventa laagricultura tena todava un peso relativamente grande (en comparacin conotros pases desarrollados) en la economa espaola, ya que casi uno de cada

    diez ocupados (8,9%) trabajaba en este sector. En los quince aos siguientesse puede observar una disminucin considerable y continua del nmero detrabajadores y la proporcin de poblacin ocupada en el sector agrario. Demanera que, al finalizar la primera dcada del nuevo siglo, el sector agra-rio espaol proporcionaba empleo slo a uno de cada veinticinco ocupados(4,3%). En otras palabras, la agricultura haba perdido al final del perodo acasi uno de cada cuatro ocupados del comienzo. La casi continua prdida deempleo en el sector agrario obedece a la propia transformacin estructuralde la economa espaola, es relativamente independiente del ciclo econ-mico y, como veremos, constituye uno de los factores fundamentales que

    explica el retroceso de las clases medias tradicionales de pequeos propie-tarios en Espaa.

    Aunque la construccin sea un sector de tamao relativamente pe-queo, el mayor crecimiento del empleo en el perodo, en trminos relativosa su volumen inicial, se ha producido en este sector como uno de los efec-tos de la llamada burbuja inmobiliaria10. Se ha registrado un crecimientoconstante del empleo en el sector desde 1996 hasta 2008. En dicho perodolos empleos del sector crecieron en 1,5 millones de empleos, un 128,9%, unritmo muy superior tanto al del conjunto como al de cualquiera de los otros

    tres sectores. Visto de otro modo, la proporcin de trabajadores ocupadosen el sector de la construccin se increment desde un 9,2% hasta un 13,1%.Sin embargo, es necesario insistir en que, de los cuatro sectores analizados,la construccin es el que ms sensibilidad presenta a los cambios del cicloeconmico, lo que se ha puesto de manifiesto tanto en la expansin del em-pleo correspondiente a los aos que enmarcan el cambio de siglo, como enla fuerte contraccin de los tres ltimos aos, en los que el sector ha perdidocasi 1,2 millones de empleos (un 44,1% de los puestos que existan en el sec-tor en 2008). La magnitud de la prdida de empleo en la construccin es de

    10Garca Montalvo, J. (2008):De la quimera inmobiliaria al colapso financiero. Crnicade un desenlace anunciado. Barcelona: Antoni Bosch.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    21/71

    316 Informe Espaa 2011

    tal calibre que en slo esos tres aos de crisis han desaparecido ocho de cadadiez empleos (78,2%) creados en los trece aos previos. En general, el sectorde la construccin incluye empleos con un variado perfil de clase: desde

    peones y trabajadores cualificados a pequeos empleadores. En todo caso,las fluctuaciones del empleo en la construccin repercuten en la estructurade clases en el sentido de que no slo hacen variar de forma significativa eltamao de las clases trabajadoras, sino tambin (aunque en menor medidaque la agricultura) el nmero de pequeos empleadores y trabajadores aut-nomos, que tienen una presencia notable en el sector.

    Tambin la industria ha perdido durante estos aos peso en la estruc-tura sectorial espaola, como corresponde al cambio esperable de una eco-noma posindustrial crecientemente volcada hacia los servicios. As, en 1996trabajaban en el sector secundario alrededor de 2,6 millones de espaoles, laquinta parte de la fuerza de trabajo ocupada. Quince aos despus, en el pri-mer trimestre de 2011, la industria empleaba a una cantidad muy parecidade personas, que sin embargo representaba slo el 14% de la fuerza laboral.Esto significa que la ganancia de empleos industriales del perodo 1996-2008se anul con las prdidas derivadas de la crisis. Pero, incluso si no se tiene encuenta el efecto de la crisis ms reciente, se puede afirmar que a comienzosde 2008 la industria era capaz de dar empleo a una proporcin de espaoles(16,2%) menor que a principios del perodo; de hecho, el porcentaje de po-blacin espaola ocupada en la industria no ha dejado de menguar desde, almenos, mediados de los aos ochenta. La prdida de peso del empleo en elsector industrial es obviamente relevante para la evolucin de la estructurade clases, en la medida en que constituye uno de los nichos fundamentalesde las clases trabajadoras, tanto cualificadas como no cualificadas.

    El sector de los servicios es, globalmente considerado, el que mejorilustra la transformacin de la economa espaola y, en particular, de sumercado laboral. En primer lugar, porque es el que ms aporta al creci-miento del empleo y aquel cuyo peso en la poblacin ocupada ha crecidoms. As, entre 1996 y 2011, los empleos en los servicios pasaron de 7,8 a 13,3millones y la participacin de los trabajadores en el sector pas del 61,6%

    al 73,5% del conjunto de la poblacin ocupada. Al mismo tiempo, tambines el sector que mejor ha soportado el peso de la crisis, pues de los casi 5,8millones de nuevos empleos creados entre 1996 y 2008, cuando el sectoralcanz la cifra rcord de 13,6 millones, slo se han perdido 221.100 en lostres aos siguientes de crisis. En segundo lugar, porque, como es comn atodas las economas posindustriales, se trata de un sector muy feminizado, adecir verdad, el ms feminizado de la economa: en 2011, haba 1,2 ocupadaspor cada ocupado. El grado de feminizacin del sector es, adems, creciente,pues en 1998 slo haba 0,8 mujeres ocupadas en el sector por cada hombre.

    En realidad, los empleos en los servicios se han convertido en el des-tino usual de las mujeres que desean y consiguen incorporarse al empleo re-

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    22/71

    Estratificacin y clases sociales 317

    munerado, hasta el punto de que se puede decir que la masiva incorporacinde la mujer al mercado de trabajo y la feminizacin de la fuerza laboral sonindisociables de la expansin del sector. En las economas desarrolladas, las

    variaciones de los empleos en los servicios son altamente relevantes para en-tender el cambio de la estructura de clases debido al tamao y al dinamismodel sector. De hecho, el crecimiento de este tipo de empleos es el que le da superfil caracterstico a las estructuras de clase tpicamente posindustriales, enla medida en que los servicios son el semillero de las clases medias profesio-nales, de las ocupaciones intermedias y de los trabajadores de cuello blancode nivel bajo, as como de aquella parte de los trabajadores no cualificadosel llamado proletariado de los servicios que no desempea su trabajo enla agricultura, la industria o la construccin.

    2.2 Actividades econmicas y estructura ocupacional

    Dado el tamao y la importancia creciente del sector de los serviciosen el mercado de trabajo espaol no estar de ms comprobar en qu activi-dades econmicas y con qu intensidad ha variado el empleo durante el pe-rodo considerado hasta el comienzo de la crisis. Al margen de las prdidasde empleo ya reseadas en agricultura a las cuales hay que aadir las de lapesca y de las industrias extractivas y del aumento en la construccin, sise observa la evolucin del sector de los servicios con cierto detalle se com-

    prueba la expansin en todas y cada una de sus ramas de actividad (grfico1). Sin embargo, dos actividades han sido capaces de generar un volumenmuy considerable de puestos de trabajo hasta el comienzo de la crisis: deun lado, el comercio y las reparaciones (con ms de un milln de nuevosempleos creados) y, de otro, los servicios a las empresas y las actividadesinmobiliarias y de alquiler (que generaron ms de 1,3 millones de empleos).Hay que destacar especialmente el crecimiento de esta segunda actividad,no slo por ser ms importante en trminos absolutos, sino tambin relati-vos. De hecho, el nmero de ocupados en los servicios a las empresas y lasactividades inmobiliarias y de alquiler creci nada menos que un 173,8%,

    hasta casi triplicarse desde un tamao inicial de 751.100 empleos, con lo quepas de representar un 5,9% del empleo total a un 10,1%11. El comercio y lasactividades de reparacin dan empleo a un nmero de trabajadores superioral de los servicios a las empresas, pero su crecimiento relativo (54,8%) noalcanz el del conjunto de la poblacin ocupada, por lo que estas actividadeshan perdido algo de su peso en la economa espaola.

    Otras actividades de servicios merecen asimismo destacarse por habercrecido entre 1996 y 2008 por encima del promedio general (61,6%), aunque

    11El crecimiento de estas actividades durante la ltima dcada y media ha estado liga-do principalmente al auge de la construccin.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    23/71

    318 Informe Espaa 2011

    individualmente consideradas dan empleo a un nmero menor de ocupadosque el comercio y las actividades de reparacin y que los servicios a las em-presas y las actividades inmobiliarias y de alquiler. Se trata de la hostelera(que creci un 83,2%), las actividades sanitarias (77,9%), las actividadessociales y servicios personales (76,9%) y el servicio domstico a los hogares(que, aun siendo relativamente pequeo, dobl su tamao). Las cuatro gene-raron, conjuntamente, casi dos millones de empleos. El transporte, almace-

    namiento y comunicaciones (51,9%), la intermediacin financiera (55,7%),la Administracin Pblica incluidas la defensa y la seguridad (50%) y la

    Grfco 1 Variacin de los ocupados por rama de actividad. En miles. 1996-2008

    -196,3

    -11,0

    -23,9

    803,6

    7,9

    1.454,0

    1.147,3

    634,0

    399,5

    184,9

    1.305,5

    408,5

    404,0

    524,6

    355,5

    375,4

    1,9

    -200 0 200 400 600 800 1.000 1.200 1.400

    Agricultura, ganadera,caza y selvicultura

    Pesca

    Industrias extractivas

    Industrias manufactureras

    Produccin y distribucin deenerga elctrica, gas y agua

    Construccin

    Comercio, reparacin de vehculos demotor, motocicletas y ciclomotores y

    artculos personales y de uso domstico

    Hostelera

    Transporte, almacenamientoy comunicaciones

    Intermediacin financiera

    Actividades inmobiliarias y dealquiler; servicios empresariales

    Administracin pblica, defensay seguridad social obligatoria

    Educacin

    Actividades sanitarias y veterinarias;servicios sociales

    Otras actividades sociales y deservicios prestados a la

    comunidad; servicios personales

    Hogares que empleanpersonal domstico

    Organismos extraterritoriales

    Fuente: Elaboracin Fundacin Encuentro a partir de INE, Encuesta de Poblacin Activa, varios nmeros.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    24/71

    Estratificacin y clases sociales 319

    educacin (54,7%) crecieron tambin hasta crear 1,4 millones de nuevosempleos, pero lo hicieron por debajo del promedio.

    Observando la paulatina transformacin del sector de los serviciosen esta prolongada fase de crecimiento econmico de finales de los aosnoventa y primeros aos del actual siglo, se puede destacar una diferenciay una similitud con lo sucedido en los diez aos previos. Por una parte,mientras durante los aos ochenta y principios de los aos noventa con losprimeros gobiernos socialistas la expansin del sector vino marcada por elcrecimiento de los servicios pblicos propulsado, a su vez, por la descentra-lizacin territorial de la Administracin Pblica y por la creciente provisinde servicios pblicos de bienestar12, durante el perodo ms reciente hansido los servicios privados los que han liderado el proceso de creacin de

    empleo en el comercio, la hostelera y la sanidad. Por otra, estas actividadeshan continuado dando empleo a un nmero creciente de mujeres y contribu-yendo decisivamente a la feminizacin del sector. No es por ello exageradodecir que la expansin de la actividad econmica en el sector de los serviciosse ha convertido as en la condicin estructural que ha permitido la continuaincorporacin de las mujeres al mercado de trabajo en Espaa.

    En estrecha asociacin con el cambio sectorial, la distribucin de losdiferentes tipos de ocupaciones en el mercado de trabajo espaol ha expe-rimentado considerables transformaciones que apuntan, en primer lugar,a una gradual modernizacin de la estructura ocupacional por la va de laprofesionalizacin. La profesionalizacin creciente de la estructura ocupa-cional espaola no es un fenmeno nuevo que haya surgido en los ltimosquince aos, sino la continuacin de una tendencia con varias dcadas deexistencia. En todo caso, la profesionalizacin de la fuerza de trabajo espa-ola es coherente con su cada vez mayor nivel formativo13 y tiene implica-ciones muy importantes para la evolucin de la estructura de clases. Si setoman como extremos temporales de la comparacin los aos 1996 y 2008,se puede decir que el cambio en la estructura ocupacional en Espaa haestado dominado en muy buena medida por el auge de los profesionales(tabla 2). En particular, ninguna categora ocupacional aument ms sutamao que los llamados tcnicos y profesionales de apoyo, que crecieronun 144% (220,5% en el caso de las mujeres). A este dato hay que aadir quese trata de una categora relativamente numerosa de la fuerza de trabajoespaola, pues con casi 2,5 millones de efectivos representaba un 12% de

    12Garrido, L. y Gonzlez, J. J. (2008).13Requena, M. y Bernardi, F. (2008) El sistema educativo, en Gonzlez, J. J. y Reque-

    na, M. (eds.), p. 229-252. La cualificacin creciente de la fuerza de trabajo es un requisitoestructural del desarrollo econmico en las modernas economas posindustriales de servicios.De hecho, en pases como Espaa, con un gran nmero de titulados universitarios, se planteaa veces el problema de la sobrecualificacin de la fuerza de trabajo y la correspondiente deva-luacin de los ttulos.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    25/71

    320 Informe Espaa 2011

    la poblacin ocupada en 2008. Paralelamente, se ha producido en el mismoperodo un incremento tambin muy notable, aunque menor (81,9%), de losocupados que trabajan como profesionales cientficos e intelectuales (97,3%en el caso de las mujeres).

    La importancia de estas dos categoras de profesionales es decisiva

    para entender el peso creciente de las clases medias de profesionales y tc-nicos14 en la estructura de clases espaola: en 2008, ambas categoras su-ponan la cuarta parte de la poblacin ocupada. Si a estas dos categoras seles suman los directivos, entre los tres grupos representaban un tercio de lapoblacin ocupada.

    En concordancia con la expansin de los servicios, hay que destacartambin el crecimiento de los trabajadores en la restauracin, los servicios

    14A los efectos del esquema de clases utilizado en este trabajo (ESeC), buena parte delos llamados profesionales de apoyo se clasifica entre las llamadas clases intermedias, esto es,trabajadores de cuello blanco de nivel superior que realizan trabajos no manuales de carcterno rutinario.

    Tabla 2 Variacin de los ocupados por sexo y ocupacin. Valor absoluto en miles y porcentaje. 1996-2008

    Absoluta Porcentual

    Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total

    Direccin de las empresas y de laAdministracin Pblica 353,8 162,4 516,1 49,9 49,3 49,7

    Tcnicos y proesionales cientfcose intelectuales 470,8 668,4 1.139,2 66,9 97,3 81,9

    Tcnicos y proesionales de apoyo 680,1 765,1 1.445,4 103,5 220,5 144,0

    Empleados de tipo administrativo 53,2 529,5 582,7 9,3 78,8 46,9

    Trabajadores de servicios derestauracin, personales, protecciny vendedores de comercio 326,8 1.110,1 1.437,0 39,9 120,8 82,7

    Trabajadores cualifcados enagricultura y pesca 223,6 105,7 329,4 36,7 47,6 39,6

    Artesanos y trabajadores cualifcados deindustrias manuactureras, construcciny minera, excepto operadores 1.144,9 24,7 1.169,5 57,8 14,3 54,3

    Operadores de instalaciones ymaquinaria montadores 495,4 93,4 588,9 42,4 51,9 43,6

    Trabajadores no cualifcados 332,8 858,6 1.191,4 33,6 103,1 65,3

    Fuerzas Armadas 27,0 7,9 34,8 48,4 877,8 61,3

    Total 3.661,1 4.114,5 7.775,6 44,3 94,3 61,6

    Nota: Datos de los primeros trimestres de cada ao.Fuente: Elaboracin Fundacin Encuentro a partir de INE, Encuesta de Poblacin Activa, varios nmeros.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    26/71

    Estratificacin y clases sociales 321

    personales, la proteccin y las ventas, con ms de 1,4 millones de nuevosempleados. Como se ha sealado, estas ocupaciones han aumentado parti-cularmente entre las mujeres, entre las que han crecido un 120,8%, frente

    a slo un 39,9% entre los hombres. Tambin el relevante crecimiento delos empleados de tipo administrativo corresponde sobre todo a las mujeres(78,8%) durante este perodo. Se trata de empleos que no requieren un grannivel de cualificacin, que bsicamente consisten en la realizacin de tareasrutinarias y que nutren en gran medida la clase de los ocupados en el co-mercio y los servicios de nivel bajo, tambin llamada clase de cuello blancode nivel bajo aunque tal vez convenga ms la etiqueta de cuello rosa, por elacusado grado de feminizacin que caracteriza a estos empleos.

    Estas mismas dos tendencias, crecimiento considerable ms femi-

    nizacin, han caracterizado la evolucin de los trabajadores no cualifica-dos. El saldo neto del perodo para estas ocupaciones que se sitan en lazona ms baja del sistema de estratificacin supone la creacin de casi 1,2millones de nuevos empleos de este tipo, pero mientras las mujeres (conun crecimiento de un 103,1%) llegaron a duplicar su nmero, los empleosmasculinos experimentaron un aumento mucho ms modesto (un 33,6%).Por lo que se refiere a las mujeres, la demanda de trabajo en el serviciodomstico y en el sector de la limpieza cubierta en gran medida por traba-jadoras inmigrantes es sin duda una de las claves del aumento. En cuantoa los hombres, hay que referirse a las ocupaciones de porteros, vigilantes,

    ordenanzas y peones en la industria, la construccin, el transporte y la agri-cultura, nichos de empleo que han atrado asimismo a un gran nmero deinmigrantes.

    Finalmente, tambin se ha incrementado la proporcin de ocupa-dos (casi todos hombres) en la categora de los artesanos y trabajadorescualificados de las industrias manufactureras, la construccin y la minera(excepto operadores), debido principalmente al continuo incremento de lademanda de mano de obra en la construccin hasta finales de 2007. Porotra parte, la bien documentada transformacin de las estructuras de pro-

    duccin agraria en nuestro pas y, en consecuencia, la transferencia de unaparte importante de la poblacin rural a otros sectores econmicos ha sidola principal causa de la notable disminucin del peso de los trabajadorescualificados en la agricultura y la pesca en la poblacin ocupada total. Entre1996 y 2008, los trabajadores agrcolas cualificados disminuyeron un 36,7%entre los hombres y un 47,6% entre las mujeres. Con 501.600 ocupadosen 2008, es el grupo ocupacional menos numeroso de la fuerza de trabajoespaola15.

    15 Excepcin hecha del grupo Fuerzas Armadas, que es residual en el conjunto de lasdiez categoras de dos dgitos en las que la Clasificacin Nacional de Ocupaciones (CNO-94)divide la fuerza de trabajo.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    27/71

    322 Informe Espaa 2011

    2.3 La distribucin de las clases en Espaa

    Como se ha explicado, la distribucin y la estructura de clases depen-

    den bsicamente de la distribucin y la estructura ocupacional. En este sen-tido, y dada la distribucin de las ocupaciones en la sociedad espaola que seacaba de presentar, se puede decir que su estructura de clases se caracterizapor tres rasgos principales:

    Un peso agregado ciertamente importante de lo que hemos con-siderado clases medias, que incluyen a casi la mitad de la poblacinocupada.

    Una presencia considerable y creciente de los trabajadores de cue-llo blanco de nivel bajo (trabajadores de los servicios y de comerciode rango inferior).

    Una clase trabajadora compuesta sobre todo por trabajadores nocualificados.

    En 2010 haba en Espaa 1,8 millones de directivos y profesionales denivel alto (clase 1), 2,6 millones de directivos y profesionales de nivel bajo(clase 2) y 2,5 millones de trabajadores en ocupaciones de cuello blanco denivel alto (clase 3). Constituyen el grueso de las nuevas clases medias (pro-fesionales y tcnicos) y, en conjunto, representan un 37,3% de la poblacinocupada en Espaa en esa fecha (tabla 3). Agrupan a las ocupaciones queexigen un mayor nivel de cualificacin y, en el caso de los profesionales, se

    caracterizan por mantener una relacin laboral de servicio a los empleado-res (distinta a la relacin contractual). La clase de los empleados de cuello

    Tabla 3 Estructura de clases de la poblacin ocupada por sexo. Valor absoluto y porcentaje. 2010

    Valor absoluto Porcentaje

    Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres

    Directivos y proesionales de nivel alto 1.817.519 1.141.137 676.382 9,8 11,0 8,3

    Directivos y proesionales de nivel bajo 2.631.127 1.308.455 1.322.671 14,2 12,7 16,2

    Empleados de cuello blanco denivel alto 2.457.692 973.666 1.484.027 13,3 9,4 18,2

    Pequeos empleadores y trabajadoresautnomos no agrcolas 1.778.412 1.174.833 603.580 9,6 11,4 7,4

    Trabajadores autnomos agrcolas 456.139 359.044 97.095 2,5 3,5 1,2

    Supervisores y tcnicos derango inerior 235.380 204.079 31.301 1,3 2,0 0,4

    Trabajadores de los servicios ycomercio de rango inerior 2.723.598 996.327 1.727.271 14,7 9,6 21,2

    Trabajadores manuales cualifcados 1.873.536 1.738.961 134.575 10,1 16,8 1,7

    Trabajadores no cualifcados 4.503.456 2.437.422 2.066.034 24,4 23,6 25,4

    Total 18.476.860 10.333.924 8.142.936 100 100 100

    Fuente: Elaboracin Fundacin Encuentro a partir de INE, Encuesta de Poblacin Activa, segundo trimestre de2010.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    28/71

    Estratificacin y clases sociales 323

    blanco de nivel alto (clase 3) est compuesta por los tcnicos y profesionalesde apoyo y por algunos de los empleados de tipo administrativo.

    En cuanto a su composicin por sexo (grfico 2), mientras que entrelos directivos y profesionales de nivel alto son ms los hombres que las mu-jeres (1,7 a 1), las mujeres superan a los hombres entre los trabajadores decuello alto de nivel alto (1,5 a 1). La composicin de los profesionales denivel bajo, en cambio, est muy equilibrada.

    Lo que se podran considerar viejas clases medias, compuestas porlos pequeos empleadores y los autnomos no profesionales (clases 4 y 5),suponen 2,2 millones de ocupados (dos de cada diez se encuadran en elsector agrario) y representan un 12,1% de la fuerza laboral. Se trata de unosestratos sociales fundamentalmente masculinos, en particular en la agricul-tura (3,7 hombres por cada mujer), a los que se puede identificar como lapequea burguesa tradicional. Dado el pequeo tamao del sector agrarioy su prolongado declive en las ltimas dcadas, siguiendo un criterio muyconsolidado16, agruparemos en lo que sigue estas dos clases en una nicacategora: los pequeos empleadores y trabajadores autnomos.

    16Rose, D. y Harrison, E. (2009).

    Grfco 2 Distribucin de la estructura de clases de la poblacin ocupada por sexo. En porcentaje. 2010

    Directivos y profesionales

    de nivel altoDirectivos y profesionales

    de nivel bajo

    Empleados de cuello blancode nivel alto

    Pequeos empleadores ytrabajadores autnomos no agrcolas

    Trabajadores autnomos agrcolas

    Supervisores y tcnicosde rango inferior

    Trabajadores de los serviciosy comercio de rango inferior

    Trabajadores manuales cualificados

    Trabajadores no cualificados

    Total

    HOMBRES MUJERES

    0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100

    Fuente: Elaboracin Fundacin Encuentro a partir de INE, Encuesta de Poblacin Activa, segundo trimestre de2010.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    29/71

    324 Informe Espaa 2011

    Los supervisores y tcnicos de nivel inferior (clase 6) conforman unsegmento muy pequeo de la estructura de clases (poco ms de un 1,3% dela fuerza laboral), muy masculinizado (6,5 hombres por cada mujer). Puesto

    que su relacin laboral es, caractersticamente, la que estipula el contratolaboral tpico y venden su trabajo a cambio de un salario, deberan encua-drarse entre las clases trabajadoras; pero como ejercen tareas de supervisiny control en su lugar de trabajo, se sitan en una posicin laboral peculiarde mediacin entre los empleadores y los empleados que justifica su trata-miento separado del resto de los trabajadores. Al objeto de simplificar laclasificacin, y debido a los pocos miembros que pertenecen a este estrato,se les suele unir a los empleados de cuello blanco de nivel alto para formarcon ellos la clase de las ocupaciones intermedias.

    En torno a 2,7 millones de trabajadores se ocupan en empleos de

    cuello blanco de nivel bajo (clase 7); es decir, en ocupaciones de baja cua-lificacin y carcter rutinario en el comercio y otros servicios, a los que sedistingue de los trabajadores no cualificados (clase 9) por sus ventajosascondiciones contractuales (derivadas de que muchas veces el trabajo se rea-liza en grandes organizaciones pblicas y privadas) y sus mejores perspecti-vas de promocin ocupacional. Representan un 14,7% de la fuerza laboral,con un tamao muy parecido al de los profesionales de nivel inferior y alde los empleados de cuello blanco de nivel alto. Como estos ltimos, son unsegmento social con una presencia muy destacada de mujeres (1,7 por cadahombre).

    Los trabajadores cualificados (clase 8) representan a uno de cada diezocupados en Espaa, suman casi 1,9 millones de personas y conforman losestratos superiores de la clase trabajadora tradicional. Muy vinculados alsector industrial y a la construccin, los integran ocupaciones como los tra-bajadores de acabado en la construccin, los soldadores, montadores y me-cnicos. Son, definitivamente, la clase social con un mayor sesgo masculino,hasta el punto de que la componen 12,9 hombres por cada mujer (es decir,ms del 90% de sus miembros son hombres).

    Finalmente, los trabajadores no cualificados (clase 9) son 4,5 millones

    de ocupados. Constituyen la clase ms numerosa de las nueve que distingueel esquema ESeC y agrupaban a casi la cuarta parte de la fuerza de trabajoespaola en 2010. Integrada por ocupaciones rutinarias que no exigen nin-guna preparacin especfica, esta clase aglutina los empleos de peor calidaden trminos de salario, condiciones de trabajo, estabilidad laboral y pers-pectivas de promocin. Dado su gran tamao, rene una amplia variedadde ocupaciones en todos los sectores, desde operadores de maquinaria ydiferentes tipos de peones (en la agricultura, la minera y la industria) hastaempleos no cualificados en los servicios como limpiadores, vigilantes, con-serjes y trabajadores del servicio domstico. Los hombres predominan lige-

    ramente sobre las mujeres (1,2 a 1, 54,1% de hombres y 45,9% de mujeres),aunque tambin es cierto que los trabajos no cualificados representan una

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    30/71

    Estratificacin y clases sociales 325

    proporcin relativamente mayor entre las mujeres que entre los hombres.Hay que sealar adems que, dada su naturaleza, en su composicin hanadquirido un peso decisivo los inmigrantes llegados a Espaa durante los

    primeros aos del siglo.Antes de dar por concluida esta presentacin de la estructura de clases

    en Espaa y abordar su reciente evolucin conviene hacer una precisinsobre la fraccin de la poblacin espaola que ha quedado incluida en esteanlisis. Normalmente la descripcin de la estructura de clases de un deter-minado pas se suele basar en la poblacin ocupada, aquella que tiene em-pleo y desempea efectivamente una ocupacin en el momento de recogerla informacin pertinente y a la que, por lo tanto, se le puede atribuir unaposicin en el mercado de trabajo y asignar un estatus de empleo. sta sueleser la perspectiva que se adopta usualmente en el anlisis contemporneo de

    clase, en particular cuando se desean hacer comparaciones entre pases, yes la que hemos adoptado en este trabajo. Ahora bien, una visin ms inclu-siva de las clases sociales tambin es posible, utilizando, a partir del mismoesquema bsico, tres recursos clasificatorios para agregar a los ocupadosaquella parte de la poblacin que es ajena al mercado de trabajo.

    El primero contempla la inclusin de una dcima clase social formadapor los involuntariamente excluidos del mercado de trabajo: parados delarga duracin con ms de seis meses en situacin de desempleo y personassin previa experiencia laboral. En el caso espaol, en el segundo trimestre

    de 2010 haba prcticamente tres millones de parados en busca del primerempleo o con ms de seis meses en situacin de desempleo. De ellos, 1,6millones eran hombres y 1,4 mujeres. Con datos del segundo trimestre de2011, el proceso de destruccin de empleo asociado a la crisis econmica haproducido 300.000 parados ms en estas categoras durante 2010, elevandoel monto de esta dcima clase a los casi 3,3 millones de excluidos del mer-cado de trabajo.

    El segundo procedimiento consiste en recurrir a la ltima ocupacinconocida de aquellos que se encuentran fuera del mercado de trabajo (jubila-dos, amas de casa con experiencia laboral previa y parados de corta duracin

    que han trabajado antes17). Si se opta por esta solucin, la distribucin declases refleja no slo el estado de la estructura ocupacional en el momentode la medicin, sino que tambin incorpora elementos del pasado recientede la misma, ya que se toma en cuenta a quienes formaron parte de la fuerzalaboral pero ya no lo siguen haciendo. Esta solucin, aunque perfectamentelegtima para algunos objetivos de investigacin, tiene el inconveniente delas dificultades que surgen para ubicar en la estructura de clases a las que en

    17A los estudiantes se les suele asignar la posicin de clase del cabeza de familia (opersona de referencia de sus hogares) bajo el supuesto de que carecen de independencia eco-nmica.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    31/71

    326 Informe Espaa 2011

    Espaa solemos denominar clases pasivas fundamentalmente, jubilados ypensionistas, un segmento social cada vez ms amplio que, por definicin,carece de relaciones sociales en el mercado de trabajo y de estatus de empleo

    y previsiblemente no es susceptible de tenerlos en el resto de sus vidas. Enpases como Espaa, la fuente fundamental de ingresos de las clases pasivasno depende de las fluctuaciones de los mercados laboral, de capital o finan-cieros, sino sobre todo de las provisiones pblicas del Estado de bienestar yde la cuanta de las pensiones que se conceden a los beneficiarios.

    El tercer recurso clasificatorio atribuye a toda la unidad familiar laposicin de clase del cabeza de familia (o persona de referencia del hogar).El supuesto, en este caso, es que son las familias, no los individuos, las uni-dades fundamentales que componen las clases sociales. Este procedimientoparece el ms adecuado para clasificar a toda la poblacin en aquellas so-ciedades o economas tpicamente industriales con una escasa participa-cin de las mujeres en el mercado de trabajo y, de hecho, tiene una larga ybien consolidada tradicin en el estudio sociolgico de las clases sociales.No obstante, cuando las mujeres son una parte fundamental y permanentede la fuerza de trabajo caso de todas las economas posindustriales, muya menudo se plantea la cuestin de la atribucin de la posicin de clase aaquellas familias en las que ambos miembros de la pareja trabajan y no haycoincidencia entre la clase del marido y la mujer. Aunque es posible arbitrarcriterios de dominancia para estos casos, no faltan analistas que discutenla pertinencia de esta solucin a la vista de la creciente inestabilidad de lasfamilias y de la no menos creciente volatilidad de su ciclo vital. Por eso, eneste anlisis hemos preferido presentar la doble dimensin, dividida porsexo, de la estructura de clases de la sociedad espaola y as lo seguiremoshaciendo en el resto del captulo.

    2.4 Cambio en la estructura de clases

    A estas alturas ha quedado claro que el cambio en la estructura de

    clases en Espaa en estos ltimos quince aos ha estado dominado por latransformacin sectorial de la economa espaola, de su mercado de trabajoy de su estructura ocupacional. En este sentido, el contexto en el que se haproducido el cambio de la estructura de clases viene dado por la prolongadacontraccin de la agricultura, la continua expansin de la actividad econ-mica en el sector de los servicios, los vaivenes del sector de la construccinque acompaan al ciclo econmico y la prdida relativa, pero sostenida, demano de obra en el sector industrial. Asimismo, datos muy relevantes paraentender el cambio en la estructura de clases son: el aumento de los tcnicosy profesionales de apoyo y de los profesionales cientficos e intelectuales; la

    expansin, particularmente entre las mujeres, del empleo en los serviciosde restauracin, personales, de proteccin y ventas; el crecimiento entre los

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    32/71

    Estratificacin y clases sociales 327

    hombres de los empleos de trabajadores cualificados hasta 2008 y las prdi-das, a partir de esa fecha, provocadas por la crisis econmica; el desarrollo,en su mayor parte femenino, de los empleos de los trabajadores no cualifi-cados; y la continua desaparicin de empleos en el sector agrcola.

    Todos esos procesos socioeconmicos han dado forma a la transfor-macin de la estructura de clases en Espaa que ahora vamos a presentar.Al objeto de conseguir una mayor simplicidad expositiva, se utilizar unavariante de la clasificacin original que distingue slo siete categoras en

    lugar de las nueve originales. Las siete clases resultan de combinar la clase3 (empleados de cuello blanco de nivel alto) y la clase 6 (supervisores ytcnicos de nivel inferior) para formar una nueva clase que denominamosde ocupaciones intermedias; y de unir a los pequeos empleadores y aut-nomos de las clases 4 (no agrarios) y 5 (agrarios) en una nica clase de pe-queos empleadores y autnomos (la pequea burguesa tradicional)18. Lareduccin a siete categoras permite subsumir segmentos muy reducidos (lasclases 5 y 6 originales) en las clases sociales ms amplias (la clase 4 y la clase3) a las que ms se asemejan por su posicin estructural19.

    Para el perodo 1995-2010, la transformacin de la estructura de cla-ses en Espaa (tabla 4) se puede descomponer en los siguientes cambios.Por una parte, se ha producido (1) un crecimiento de los profesionales, tantode nivel alto como bajo y (2) un aumento de los trabajadores del comercioy otros servicios de nivel bajo. De las siete clases que ahora distinguimos,stos son los tres segmentos que mayor crecimiento han experimentado enel perodo. Aunque tambin (3) han aumentado por encima del promedio ge-

    18Para otras posibles combinaciones de clases sobre la clasificacin original, vaseRose, D. y Harrison, E. (2009).

    19El peso escaso, y decreciente en el tiempo, de estas dos clases justifica sobradamentela prdida de informacin que supone incluirlas en categoras ms amplias.

    Tabla 4 Evolucin de la estructura de clases de la poblacin ocupada por sexo. En porcentaje de varia-cin. 1995-2010

    Total Hombres Mujeres

    Directivos y proesionales de nivel alto 114 83 204

    Directivos y proesionales de nivel bajo 107 90 126

    Ocupaciones intermedias 63 28 106

    Pequeos empresarios y autnomos 19 18 20

    Trabajadores de los servicios y comercio de rango inerior 108 56 157

    Trabajadores manuales cualifcados 13 13 7

    Trabajadores no cualifcados 50 25 96

    Total 48 26 91

    Fuente: Elaboracin Fundacin Encuentro a partir de INE, Encuesta de Poblacin Activa, varios nmeros.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    33/71

    328 Informe Espaa 2011

    neral las ocupaciones intermedias y (4) los trabajadores no cualificados hancrecido como el conjunto de los ocupados, pero lo han hecho gracias sobretodo al empleo femenino. Por otra parte, frente a estas clases que en mayor omenor medida han aumentado de tamao, (5) el crecimiento de los trabaja-dores cualificados ha sido muy escaso y claramente inferior al promedio, loque ha hecho que termine perdiendo peso en la estructura. Finalmente, hayque constatar (6) el esperable e intenso declive de los pequeos empresariosy trabajadores autnomos.

    El impacto de estos cambios en la transformacin de la estructura declases en Espaa no es en absoluto desdeable (grfico 3). Como es obvio, lasvariaciones de tamao en las distintas clases determinan el peso que en cadamomento tienen y cambian as la forma de la distribucin. Es interesante,a este respecto, observar que son las clases sociales que en 1995 tenan untamao menor, es decir, los profesionales de nivel alto y bajo y los trabaja-dores de los servicios y del comercio de nivel bajo, las que ms han crecido.Al mismo tiempo, clases con un peso importante entonces, como los peque-os empleadores y autnomos, han disminuido de forma muy considerable,un proceso que se viene produciendo desde hace varias dcadas y que est

    asociado al declive de la agricultura y, ms en general, al de las formas deproduccin domstica. Paralelamente, los trabajadores cualificados tambin

    Grfco 3 Evolucin de la estructura de clases de la poblacin ocupada. En porcentaje. 1995-2010

    1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010

    30

    25

    20

    15

    10

    5

    0

    Directivos y profesionales de nivel alto

    Directivos y profesionales de nivel bajo

    Ocupaciones intermedias

    Pequeos empresarios y autnomos

    Trabajadores de los servicios ycomercio de rango inferior

    Trabajadores manualescualificados

    Trabajadores no cualificados

    Fuente: Elaboracin Fundacin Encuentro a partir de INE, Encuesta de Poblacin Activa, varios nmeros.

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    34/71

    Estratificacin y clases sociales 329

    han perdido en el perodo parte de su tamao relativo, que han mantenido sinembargo tanto los trabajadores no cualificados como las ocupaciones inter-medias. El resultado de esos cambios es que, al margen de los trabajadores no

    cualificados la clase ms numerosa, que al comienzo y al final del perodoprcticamente no ha variado su volumen relativo, se ha producido en estosquince aos una considerable reduccin de las diferencias de tamao entrelas seis clases restantes.

    La transformacin de la estructura de clases se puede sintetizar en lassiguientes grandes tendencias, que ofrecen un panorama general del cambioy del sentido de su evolucin en el comienzo del nuevo siglo y que afectan atodas las zonas de la distribucin.

    1. Mientras el tamao de lo que aqu venimos considerando clases

    medias en sentido amplio no ha cambiado sustancialmente, se ha producidouna alteracin radical en su composicin en virtud de la cual los profesiona-les han ganado importancia a costa de los pequeos empleadores y los traba-jadores autnomos: si en 1995 haba en Espaa 0,8 profesionales por cadapequeo empleador y autnomo, en 2010 eran 2. La tendencia no es desdeluego nueva, pero s muy notable, y se debe a la profesionalizacin crecientede la estructura ocupacional espaola y al aumento generalizado del nivel decualificacin de la fuerza de trabajo. Por lo tanto, a la vista de estos datos ydel cambio en el tiempo que reflejan, parece plenamente justificado aplicarla denominacin de nuevas clases medias a los profesionales y la de viejas

    clases medias a los pequeos empresarios y autnomos. En todo caso, hayque resaltar que el ritmo de cada de los pequeos empleadores y autnomosse ha atenuado a partir del estallido de la crisis. Esto sugiere que en algunasocupaciones el trabajo autnomo puede convertirse en un refugio ante lasadversidades de la crisis.

    2. En conexin con la expansin del sector de los servicios, el balanceentre trabajadores manuales y no manuales se ha decantado claramente afavor de los segundos: en 1995 haba en Espaa 0,8 trabajadores de los ser-vicios y del comercio de nivel bajo por cada trabajador manual cualificado,mientras que en 2010 eran 1,5. No hay en estos datos sorpresa alguna: queel trabajo no manual (de cuello blanco) crezca a mayor ritmo que el trabajomanual no es sino un resultado estructural ms de las transformacionesproductivas que cabe esperar de las economas posindustriales.

    3. Los trabajadores no cualificados han crecido a expensas de los cua-lificados: 0,6 trabajadores cualificados por cada trabajador no cualificadoen 1995, frente a 0,4 en 2010. Entre los empleados de cuello blanco, los derango inferior (comercio y otros servicios) han crecido bastante ms que losde rango superior: si en 1995 haba 1,3 empleados de cuello blanco de nivelalto por cada uno de nivel bajo, en 2010 casi se haba invertido esa relacin

    al situarse en 0,9. Aunque esta tercera tendencia es de menor intensidad quelas dos primeras y puede interpretarse en parte como un efecto de la prdida

  • 8/2/2019 estructura de clases en Espaa 2011

    35/71

    330 Informe Espaa 2011

    de empleo en la industria y en la construccin derivada de la crisis, es im-portante en la medida en que apunta tambin a la posible formacin de unproletariado de los servicios integrado por trabajadores de escasa cualifica-

    cin y pocas perspectivas de movilidad ocupacional ascendente. Su tamaoen Espaa es grande en comparacin con otros pases y su composicines muy heterognea (mujeres, jvenes e inmigrantes), pero relativamenteestable20.

    Han supuesto estos cambios en la distribucin de las clases una po-larizacin de la estructura social espaola durante estos ltimos aos? Lapregunta es pertinente porque diversos autores han sealado que las estruc-turas ocupacionales de algunas sociedades desarrolladas se han polarizadodurante estos ltimos aos, ya se mida la polarizacin por medio de losingresos21 o de la calidad de los empleos22. Aunque las explicaciones del

    cambio de la estructura ocupacional son necesariamente muy complejas,factores como el progreso tecnolgico23 parecen estar detrs de estos fen-menos de polarizacin. Est claro que las innovaciones tecnolgicas exigentrabajadores ms cualificados y mejor retribuidos, de ah la creciente profe-sionalizacin de la fuerza de trabajo y el crecimiento de las clases integradaspor profesionales. Pero, a la vez, la tecnologa sustituye tambin muchosempleos de rutina que se sitan no en la parte baja sino en el centro de lajerarqua ocupacional24. De esta manera, los empleos de alta cualificacin ygran calidad (directivos y profesionales) crecen junto a los trabajos de bajacualificacin de mala calidad (tpicamente en los servicios personales), des-

    pejando as la zona intermedia de la estructura.

    Si por polarizacin entendemos simplemente concentracin de po-blacin en los extremos de la distribucin de las clases es decir, si porel momento prescindimos de los recursos que caracterizan y establecenlas oportunidades vitales de las diferentes clases (como ingresos, presti-gio, educacin, salud, etc.) y nos fijamos slo en la forma de la distribu-

    20Bernardi, F. y Garrido, L. (2008): Is There a New Service Proletariat? Post-industrial

    Employment Growth and Social Inequality in Spain, enEuropean Sociological Review, 24 (3),p. 299-313.21Goos, M., Manning, A. y Salomons, A. (2009): Job Polarization in Europe, enAme-

    rican Economic Review: Papers & Proceedings, 99 (2), p. 58-63.22Oesch, D. y Rodrguez Mens, J. (2011): Upgrading or polarization? Occupational

    change in Britain, Germany, Spain and Switzerland, 1990-2008, en Socio-Economic Review,9, p. 503-531.

    23Otros factores como la creciente deslocalizacin de los procesos productivos haciapases con menores costes laborales o incluso una mayor demanda de servicios de bajo costepor parte de los segmentos con ms capacidad econmica parece que desempean un papelmenor en la polarizacin del empleo en los pases europeos.

    24La innovacin tecnolgica difcil