8
Visita Centro Cultural Universitario El mundo mágico de Cri-Crí llega a la Sala Miguel Covarrubias Visita Coyoacán Se inicia etapa final de restauración de la capilla de La Conchita MULTI MEDIA FOTOGALERÍA FOTOGALERÍA El búho René Avilés Fabila 2 Café París Eduardo García Aguilar 4 [email protected] @Expresiones_Exc EXCELSIOR DOMINGO 2 DE AGOSTO DE 2015 PLANETA DANZA. Rosario Manzanos analiza el montaje coreográfico Cubanía, presentado en Londres por el bailarín habanero Carlos Acosta. >2 29 años sin Leduc Bohemio de obra literaria perdurable, el poeta, novelista y periodista mexicano Renato Leduc —quien nació el 15 de noviembre de 1897— murió a causa de una afección pulmonar un día como hoy, pero de 1986. >4 JOSÉ JUAN TABLADA (1871-1945) Hoy se cumplen siete décadas de la muerte del poeta, periodista y diplomático mexicano, considerado un protagonista del modernismo >5 Imagen: Retrato de Leduc por Fernando Leal, 1930. El jugador, novela de Dostoievski Presentamos un fragmento de la nueva edición de la novela que el escritor ruso publicó en 1867. Ilustraciones de Raquel Fernández acompañan a esta traducción encargada por Sexto Piso. >6 Voz de la Vanguardia Ilustración: Abraham Cruz Imagen: Cortesía Sexto Piso

EXCELSIOR DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 , presentado …bfc1c332b5c17ae20e62-6cbba7cfb59c65abd107ce24040b0bca.r14.cf2… · la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: EXCELSIOR DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 , presentado …bfc1c332b5c17ae20e62-6cbba7cfb59c65abd107ce24040b0bca.r14.cf2… · la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes

VisitaCentro Cultural UniversitarioEl mundo mágico de Cri-Crí llega a la Sala Miguel Covarrubias

VisitaCoyoacán Se inicia etapa final de restauración de la capilla de La Conchita

MULTI MEDIA

FOTOGALERÍA FOTOGALERÍA El búhoRené Avilés Fabila 2Café ParísEduardo García Aguilar 4

[email protected] @Expresiones_Exc

EXCELSIORDOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 PLANETA DANZA. Rosario Manzanos analiza

el montaje coreográfico Cubanía, presentado en Londres por el bailarín habanero Carlos Acosta. >2

29 años sin LeducBohemio de obra literaria perdurable, el poeta, novelista y periodista mexicano Renato Leduc —quien nació el 15 de noviembre de 1897— murió a causa de una afección pulmonar un día como hoy, pero de 1986. >4

JOSÉ JUAN TABLADA (1871-1945)

Hoy se cumplen siete décadas de la muerte del poeta, periodista y

diplomático mexicano, considerado un protagonista del modernismo >5

Imagen: Retrato de Leduc por Fernando Leal, 1930.

El jugador,novela de DostoievskiPresentamos un fragmento de la nueva edición de la novela que el escritor ruso publicó en 1867. Ilustraciones de Raquel Fernández acompañan a esta traducción encargada por Sexto Piso. >6

Voz de la

Vanguardia

Ilustración: Abraham Cruz

Imag

en: C

orte

sía

Sex

to P

iso

Page 2: EXCELSIOR DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 , presentado …bfc1c332b5c17ae20e62-6cbba7cfb59c65abd107ce24040b0bca.r14.cf2… · la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes

2: EXPRESIONES DOmINgO 2 DE agOStO DE 2015 : EXCELSIOR

Víctor Manuel TorresCoordinador

Edgar HernándezEditor

Paola RodríguezCoeditora Visual

Cada escritor tiene sus métodos. Máximo Gorki y Silvio Pellico explicaron cómo trabajaron en prisiones; el primero dice que las cárceles fueron sus universida-

des. El marqués de Sade y Ezra Pound, dentro de manicomios. De Quincey y Baudelaire, bajo los efectos del láudano o el opio. Poe, Capote y Bukowski, ebrios, tal como Lowry redactó obsesivamente su novela Bajo el vol-cán. Jack Kerouac y sus camaradas de gene-ración, la beat, repletos de LSD y mariguana. El poeta español Miguel Hernández lo hizo en plena Guerra Civil de España. Un hermoso libro, Hablan los escritores, le concede la voz a Allen Ginsberg, quien habla detalladamen-te de su escritura bajo el influjo de las drogas. ¿Alguien podría imitarlos?

Jules Valles, miembro de la Comuna de París, vio las escuelas como prisiones. Nada de ello es didáctico y menos recomenda-ble, pero a muchos les funcionó. La síntesis que puedo ofrecer a quienes aspiran a ser escritores es muy simple: el método para hacer novelas consiste en que no hay tal. No es negativo asomarse con cuidado a las cartas para jóvenes novelistas que Sabato, García Márquez y Vargas Llosa escribieron o a las entrevistas donde grandes narradores cuentan sus secretos. Los resultados serán óptimos o pésimos, pero en todos los casos diferentes e imposibles de duplicar.

Para ejemplificar el proceso de investiga-ción artística, permítanme usar mi experien-cia con mi novela Réquiem por un suicida, finalista del Premio Planeta. El tema de la muerte voluntaria no parecía interesarme. De pronto apareció. Tenía presente la obra de Goethe, Werther. Pensé la historia, en jus-tificar el tema del suicidio, defenderlo. Re-quería mostrarlo como un acto de libertad, aunque la idea no es propia, es sobre todo de Camus. Uno no escoge el momento, el lu-gar ni los padres para nacer. A cambio, puede seleccionar la hora oportuna, si así lo quie-re, para morir. Lo primero fue pensar en el hombre que se mataría y las razones que es-grimiría para hacerlo. Mal armado, me intro-duje en un tema que desconocía: el suicidio. El primer capítulo lo leí en la Sala Manuel M. Ponce. Una señora mayor se acercó y me dijo: no vaya a matarse. No, repuse, quien lo hará es el personaje de mi novela.

El tono, la prosa utilizada, eran correc-tos, pero ¿qué seguía? Mi ignorancia sobre el tema era mucha. Comencé a investigar tal como un historiador o un sociólogo lo hacen, apoyados por un orden y una am-plia bibliografía que crece en la medida en que van agotando libros, artículos, ensayos y profundiza entrevistando a los afectados por una muerte voluntaria o a una persona que sobrevivió a su intento de matarse. Co-mencé por los libros clásicos como El suici-dio, de Emile Durkheim; logré, con diversos apoyos, una amplia bibliografía que incluía

historia, tratados científicos sobre el tema, biografías de suicidas, estadísticas de países donde el suicidio tiene una tasa alta y otras de naciones donde la gente huye de la vida por presiones económicas o por soledad.

La bibliografía comenzó a aumentar. La lista de artistas del más alto nivel que opta-ron por el suicidio es abrumadora. Hurgué en leyes, novelas, diarios y revistas y fui encon-trando un mundo complejo e inaceptable para gobiernos, religiones y para la mayoría de los habitantes del planeta que llegan, in-cluso, a crear instituciones para combatir la muerte voluntaria. Supe que en Japón el ín-dice de niños suicidas es enorme a causa de la presión escolar. Y que así como en el siglo XIX los románticos solían matarse por amor, el mal de Werther, hoy, en la Ciudad de Mé-xico la gente se tira a las ruedas del Metro por atroces razones económicas.

El suicidio es producto de una intensa de-presión y es raro que un loco llegue a sui-cidarse: lo suelen hacer personas cuerdas,

pero con graves problemas materiales o es-pirituales. Que no son “cobardes” ni “huyen por la puerta falsa”, como indican quienes gustan de las frases hechas. Simplemente pierden el gusto por la vida, como si fueran personajes de Kafka. Hice una lista de sui-cidas famosos y estudié lo que los impulsó a matarse. Me topé con el libro del marxis-ta Isaac Deutscher, donde trata de desen-trañar las razones por las que Maiakovski, Esenin o Primo Levi dejaron la vida, la lu-cha. Levi había sobrevivido a los campos de exterminio nazis, ¿por qué suicidarse?

En la parte periodística, comencé entre-vistando a una colega cuyo marido decidió matarse. Estaba rabiosa, lo detestaba por ha-berla dejado sola e inerme, algo parecido a lo que le sucedió a Courtney Love cuando Kurt Cobain dejó de tocar rock para siem-pre. Hablé con madres dolidas, maridos des-concertados y con quienes no encontraban la razón de la muerte de un amigo o un fami-liar. Un mundo intenso y sorprendente. Fui a los escritores fundamentales del tema, qué pensaba Dante o qué san Agustín en La ciu-dad de Dios. Cuando pensé saber suficiente del suicidio, escribí el resto de la novela, casi de corrido. Diez años investigando para es-cribir unas 250 páginas. Para hacer novelas, cuentos o poemas hay que leer e investigar, igual que lo hace el científico. No hay inspi-ración ni musas revoloteando sobre el autor. Es decir, en arte, también se investiga.

— www.reneavilesfabila.com.mx

La lista de artistas del más alto nivel que optaron por el suicidio es abrumadora.

La investigación ¿sólo es científica o puede ser artística? (2/2)De pronto apareció. Tenía presente la obra de Goethe, Werther. Pensé la historia, en justificar el tema del suicidio.

El búho

RENÉ AVILÉS [email protected]

PLANETA DANZA

El bailarín Carlos Acosta refrenda por qué juega el rol protagónico del ballet de la isla y la representa en el mundo

Foto: Tomada de Facebook

Acosta recién actuó en la Royal Opera House of London.

Fulgor de cubanía

Durante su adolescencia Acosta arrasó con todos los premios posibles.”

ROSARIO MANZANOSCRÍTICA DE DANZA

Hoy cumpleMEMPO GIARDINELLIESCRITOR / 68 AÑOSTraducido a más de 20 idiomas, se hizo acreedor al Premio Rómulo Gallegos (1993).

EL RADAR [email protected] @Expresiones_Exc

El mundo de Cri-CríTiliches, tambaches y cachivaches inició ayer una breve temporada en la Sala Miguel Covarrubias, del CCU. Hoy, sábado 8 y domingo 9, 13:00 y 17:00 horas. Insurgentes Sur 3000, Ciudad de México.

Creador de sinfonías e institucionesUn día como hoy, pero de 1978, murió el compositor mexicano Carlos Chávez, fundador de la Orquesta Sinfónica de México. La llamada Sinfonía India, que utiliza instrumentos de percusión yaqui, es quizás la más conocida de sus obras. Nació el 13 de junio de 1899.

RECOMENDACIONES EFEMÉRIDES AGENDA

¿SABÍAS QUE?

Hace 16 años murió el pintor surrealista Alberto Gironella, uno de los artistas mexicanos más importantes del mundo.

ALGUNAS NOVELASLa revolución en bicicleta, El cielo con las manos, ¿Por qué prohibieron el circo? y Qué solos se quedan los muertos.

La mano del muralistaEl escritor Ernesto Lumbreras presentará su libro La mano siniestra de José Clemente Orozco, en la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes. La obra reúne ensayos en los que se analiza la obra del gran muralista mexicano. Hoy a las 12:00 horas. Presentan: Magnolia River, Adolfo Castañón, Eduardo Antonio Parra y el autor.

TÍTULO: Sucedió

AUTORA: Edna Lieberman

EDITORIAL: Rosa Ma. Porrúa, México, 2015; 77 pp. “Lo cotidiano es la antítesis del erotismo, une a la pareja, pero aleja a los amantes.”

EL LIBRO

CONCIERTO

POR ROSARIO MANZANOSEspecia [email protected]

Con el espectáculo Cubanía, estrenado hace unos días en la Royal Opera House of Lon-don y que culminará hoy, el bailarín Carlos Acosta (1973) refrenda por qué es la princi-pal estrella del ballet cubano en el mundo.

Coreógrafo, intérprete, es-critor, Acosta es el bailarín in-vitado estelar del Royal Ballet of London, donde en junio pasado hizo su versión del ballet Don Quijote —bailando él— en una de las propuestas más cercanas al espíritu de la obra de Cervantes.

La puesta fue un éxito total en su gira por Estados Unidos. Acosta logró quitarle lo flemá-tico a su elenco para llenar de regocijo, risa y misterio una de las más famosas piezas del re-pertorio clásico.

Nacido en La Habana en el seno de una familia don-de la danza no era una tradi-ción, Carlos, el más pequeño de una familia de 11 hijos, se interesó primero en el futbol soccer y en el break dance que en el ballet. Fue su padre, un modesto chofer de guguas —camión de pasajeros— el que lo llevó de la mano a ini-ciarse en el ballet, impulsa-do por el deseo de que su hijo fuese más disciplinado.

Carlos, un niño juguetón, tenía todas las condiciones para el ballet, pero fue cuando vio al Ballet Nacional de Cuba que decidió que ese era su ca-mino. A los 16 años empezó a bailar como profesional y a los 18 se graduó con honores y una medalla de oro.

Durante su adolescen-cia arrasó con todos los pre-mios posibles. Carlos, de esa raza negra que avasalla por su fuerza y estructura muscu-lar, es, además de un tremen-do atleta, un artista refinado con técnica de hierro, capaz de hacer temblar de emoción al más templado en sus giros y saltos en El Corsario.

Ahora con Cubanía puso a salsear a la Royal Opera Hou-se. El artista retomó algunos

de los elementos de su mon-taje Tocororo (2003). En cinco cuadros mostró la identidad cubana en su apogeo tropical y con ello confirmó su inte-rés de moverse hacia la dan-za contemporánea y crear su propia compañía.

Cubanía es una celebra-ción de ser cubano. Música en vivo, bailarines de danza con-temporánea de la isla, rumba, son, salsa, casino, combina-dos con la pirotecnia del ballet

han sido una bomba que ha puesto de pie —literalmen-te— al público asistente para acabar todos juntos bailando una rítmica conga.

Con un inglés perfecto, pero inmerso en un acento del que nunca se ha querido deshacer y que realza para hacer saber que el inglés no es su idioma, Carlos no sólo hizo la curaduría con varios coreó-grafos cubanos, sino la direc-ción general del espectáculo, la dirección musical y las lu-ces. “El objetivo de la puesta en escena es mostrar lo que somos los cubanos y cómo nos movemos, de alguna ma-nera lograr que este foro tan convencional tenga otro giro y las caderas se agiten”, dice.

Llenos totales, todo ven-dido, el sencillo hombre que ha puesto al público de Mos-cú, Paris, Nueva York, Turín, Estocolmo, Tokio y México de pie, sigue siendo el bailarín la-tinoamericano más exitoso en la historia del ballet mundial.

Page 3: EXCELSIOR DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 , presentado …bfc1c332b5c17ae20e62-6cbba7cfb59c65abd107ce24040b0bca.r14.cf2… · la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes

EXCELSIOR : DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 EXPRESIOnES :3ANTONIETA RIVAS MERCADO

DE LA REDACCIÓ[email protected]

La soledad, las pasiones y el espíritu libre, que caracteriza-ron la vida de Antonieta Rivas Mercado, guían la puesta en escena Cita en Notre Dame, dirigida por Gema Aparicio y que a partir de hoy se presenta en el foro que lleva su nombre de la Biblioteca de México.

Personaje controversial que vivió a principios del siglo XX, que rompió los esquemas impuestos por la sociedad de su época, pero que también dejó un legado para la cultu-ra y sociedad de México, Rivas Mercado aparece en escena –estelarizada por Roxana An-drade– como una mujer que estuvo convencida de que lo fundamental era ser con-gruente consigo misma.

El montaje, en forma de monólogo, ha implicado un estricto y riguroso entendi-miento de la vida de quien fuera periodista y bailari-na, de tal suerte que la ac-triz protagonista explora sus capacidades actorales para profundizar en los diversos ambientes y épocas en los que se desarrolla la obra, desde 1900 hasta 1931.

Con elementos mínimos e indispensables de esceno-grafía y utilería, la ilumina-ción es un factor relevante creando ambientes y espacios

Dirigida por Gema Aparicio, la obra teatral Cita en Notre Dame aborda la tórrida vida de la periodista y bailarina

Una mujer de espíritu libre

vida el 11 de febrero de 1931, dentro de la Catedral de No-tre Dame, en París, donde trabajaba como escritora y periodista.

Sobre la obra, la dramatur-ga Estela Leñero ha dicho que “da cuenta de una Antonie-ta total con múltiples aristas y contradicciones, y va de lo privado a lo público a partir de un yo íntimo y entrañable. An-tonieta Rivas Mercado mues-tra la soledad de su existencia. Inquieta siempre, guiada por sus pasiones y su espíritu li-bre, no repara en transgre-dir los cánones sociales de su época, convencida de que lo fundamental es ser congruen-te consigo misma. Nos aden-tramos en su universo desde las cartas apasionadas que escribía al pintor Manuel Ro-dríguez Lozano y los discursos incendiarios que preparaba para José Vasconcelos y acu-dimos puntuales para recorrer con Antonieta un mundo lleno de vida, y de muerte.”

La obra se presentará en el Foro Antonieta Rivas Mercado de la Biblioteca de México de la Ciudadela (Plaza de la Ciu-dadela No.4, Centro Históri-co de la Ciudad de México) a partir del hoy y cumplirá tem-porada durante todos los sá-bados y domingos de agosto, a las 13:30 horas.

Gema Aparicio además de directora, ha sido actriz e in-vestigadora teatral.

Foto: David G. Martínez, cortesía Conaculta

distintos, y la música se con-vierte en el motor que genera recuerdos y situaciones con-cretas de la vida del persona-je que decidió acabar con su

INBA reconoce a FilomarinoCon el recuerdo de los maestros que le enseñaron el arte de la danza, la bailarina, coreógrafa y docente Rossana Filomarino, recibió, por parte del INBA, un re-conocimiento por 50 años de trayectoria y 25 al frente de la compañía artística DramaDanza. De Guillermi-na Bravo, dijo, “hemos sido cómplices muchos años”; a Martha Graham, la recordó como formadora de su pen-samiento, de su estructura y conocimiento corporal.

— De la redacción

El muralismo y su actualidadCon la participación de los maestros Rina Lazo, Artu-ro Estrada, Arturo García Bustos y Adolfo Mexiac, entre otros ponentes, el 5 y 6 de agosto se llevará a cabo el Fo-ro Internacional de Muralismo. El reto de los muralistas ante el siglo XXI, en el Aula Magna José Vasconcelos del Centro Nacional de las Artes. Coordinado por Guillermina Guadarrama, el encuentro busca revalorar la importancia del muralismo en su renacimiento actual.

— De la redacción

BREVES

50 AÑOS DE TRAYECTORIA

ENCUENTRO EN EL CENARTFoto: Especial

Foto: Cortesía Conaculta

La puesta en escena aborda la breve vida de la escritora.

Page 4: EXCELSIOR DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 , presentado …bfc1c332b5c17ae20e62-6cbba7cfb59c65abd107ce24040b0bca.r14.cf2… · la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes

4: EXPRESIONES DOmINgO 2 DE agOStO DE 2015 : EXCELSIOR

88AÑOStenía Renato Leduc cuando falleció.

2OCASIONESganó Leduc el Premio Nacional de Periodismo (1978 y 1983).

Los inmigrantes llegan desde el sur, este y oeste en una incesante romería de angustias y desespera-ciones que llena barcazas, buses, trenes o carre-teras regionales en un éxodo bíblico inédito no visto desde cuando los europeos huían en masa

de la pobreza y la guerra hacia otros lugares exóticos donde salvar el pellejo, como Nueva York, Buenos Aires o México.

Árabes, africanos, asiáticos, afganos, paquistaníes, mon-goles, turcos, kurdos, sirios, libaneses, iraquíes, rumanos, búlgaros, húngaros, ucranianos, magrebíes, yemenitas, su-daneses, nigerianos y subsaharianos huyen de las guerras y la miseria en una estampida generalizada.

Habitantes de todos los colores y orígenes desembarcan en las costas griegas o italianas y luego de jornadas por tie-rra se apeñuscan en las estaciones centrales de París, Ve-rona, Milán o Múnich, sin saber una palabra de los idiomas locales, en busca de interlocutores benévolos que los orien-ten a pedir asilo político o económico. Basta observar en las estaciones o campamentos improvisados para ver familias que sólo traen una maleta y el bolsillo vacío. La madre jo-ven, una hija adolescente, un bebé que llora, la abuela ciega, el abuelo resignado. Y en la mirada de los jóvenes, cierto brillo de felicidad como si hubiesen llegado al paraíso.

Eso no se veía desde cuando millones de familias del mundo llegaban en barcos a Nueva York e iniciaban el lar-go proceso de buscar papeles, en busca de El Dorado del trabajo y una casa donde poner las maletas para iniciar la conquista del sueño americano. Lo mismo ha ocurrido con millones de mexicanos y centroamericanos que llegan a la frontera de Estados Unidos y huyen de las balas de la migra o mueren de sed en el desierto o, antes de llegar a la fronte-ra, son baleados por los narcoparamilitares.

Unos lograron huir de las guerras que sacuden a Irak y a Siria, dejando atrás sus casas derruidas y después de vegetar meses o años en campamentos gigantescos, situados en la frontera turca o libanesa, emprenden la aventura, ya sea por tren o carretera o de isla en isla a través de países hostiles, hasta llegar guiados por coyotes a aquellos lugares donde al fin se vislumbra la Europa del espacio Schengen, de libre circulación. Cristianos coptos, chiítas, sunitas o miembros de una interminable lista de confesiones corre a toda velo-cidad antes que los asesinos de Daesh y el califato islámi-co lleguen para degollarlos en público o quemarlos vivos. Otros huyen de donde reinan los talibanes o los jeques de Al Qaeda, o de países fronterizos en el sur de la vieja Unión Soviética, donde ahora no se sabe cuál es la ley.

Otros abandonan el infierno africano, donde las guerras estallan cada día azuzadas por dictadores o presidentes de opereta que crean países como solares donde el fanatismo de las religiones y las etnias predominan entre el sangui-nolento espectáculo de las masacres de Boko Haram o los ejércitos sudaneses, nigerianos, nigerinos, chadianos o ye-meníes. Más al norte huyen los libios o los tunecinos, argelinos o egipcios sin empleo, mezclados a los malienses y los tuareg de turbante por los desiertos, donde yacen los vestigios de los primeros homínidos y hoy circulan arsenales lo-cos de armamentos aban-donados tras la guerra en la Libia de Gadafi.

A todos ellos se agrega la juventud española y portuguesa que huye del desempleo y es visible ya por cientos de miles en Francia o Alemania o los países nórdicos, a donde llegan en busca de trabajo, portando sus diplomas universitarios. Es un éxodo económico al que se agregan decenas de miles de sudamericanos sin empleo en la madre patria y que re-corren Europa en busca de trabajos de obreros, plomeros o albañiles. Y toda esa gente llega así a Italia, Francia, Alema-nia, Gran Bretaña, Suecia, Dinamarca o Noruega a reunirse con amigos, contactos o familiares. Estos últimos días, cen-tenares se metieron en estampida por los túneles del tren que lleva de Calais, en Francia, a Inglaterra, por debajo del Canal de la Mancha, e incluso un adolescente fue electrocu-tado el viernes al lanzarse al techo del tren de alta velocidad que lleva a Londres, como lo hacen los pobres en India.

Son cientos de miles los que llegan a Italia y el drama es tal que los países europeos se dividen por decenas de miles los refugiados para que no se concentren en un solo lugar. En Alemania, donde hay movimientos muy fuertes de aco-gida, fustigados por los opositores de extrema derecha del movimiento neonazi Pegida, los militantes manifiestan para exigir al gobierno más facilidades y hospitalidad. Es usual ver chicos traumatizados por las guerras, que no saben el idioma, orientados por educadoras alemanas que les abren las puertas en ese mundo desconocido. La cantidad de mu-jeres con velo o burka es visible y cientos de miles viven ya en apartamentos de interés social en los suburbios donde pasan sus días encerrados viendo televisión y en espera de subvenciones otorgadas después de trámites engorrosos.

En París aparecen y desaparecen los campamentos de refugiados instalados en baldíos, espacios abandonados por los ferrocarriles o en edificaciones desiertas, donde son orientados por organizaciones humanitarias. Parejas jóve-nes, muchachos perdidos con la mirada hacia los bulevares, ancianos lelos en medio del griterío y el sonido de los ve-hículos que cruzan por el periférico, esperan que el destino vele por ellos. Eso ocurre hoy en la Europa marcada por cri-sis simultáneas, estancada y llena de deudas, timorata, ce-gatona y pesada por la creación de un mastodonte unitario y torpe que no sabe cuál es su rumbo, mientras crecen los partidos extremistas que protestan contra los inmigrantes viejos y nuevos, y acecha la amenaza de los islamistas fa-náticos que esperan el momento para cometer atentados sanguinarios contra los occidentales en nombre de Alá.

Abandonan el infierno africano donde las guerras estallan diario.

Café París

EDUARDO GARCÍA [email protected]

Europa y los inmigrantesUnos lograron huir de las guerras en Irak y Siria, dejando atrás sus casas derruidas.

RENATO LEDUC (1897-1986)

Hoy se cumplen 29 años de la muerte del poeta, novelista y periodista, pluma distinguida de Excélsior

LA CONCHITA

ARRANCA RESCATE El Conaculta informó que la etapa final de salvamento de la capilla de La Conchita, en Coyoacán, inició con una inversión de 5.5 millones de pesos. Se restaurará carpintería en pisos, puertas y barandas del coro, entre otras cosas.

Un bohemio perdurable

Foto: Cortesía Conaculta

POR RAFAEL MIRANDA BELLOE s p E c i a l

[email protected]

El poeta, periodista y hasta funcionario público Renato Leduc pensaba que “los in-telectuales deben ser anti-solemnes o, en último de los casos asolemnes”, pues con-sideraba cierto aquello de “que la solemnidad es la se-riedad de los pendejos”. El autor del poema Temas, en donde como un “preámbulo inevitable” puede leerse: “No haremos obra perdurable. No tenemos de la mosca la vo-luntad tenaz”, falleció el 2 de agosto de 1986 en Tepepan. Fiel a los principios que de-fendió a lo largo de su vida, de acuerdo con el escritor Vicen-te Quirarte, mantuvo hasta el final la voluntad de “templar la palabra entre la bajeza y la dignidad, entre el reclamo so-cial y el cinco por ciento de pureza lírica”.

Nacido en Tlalpan, DF, el 15 de noviembre de 1897, era el hijo mayor de Alberto Leduc, escritor modernista de origen francés que participó en la fundación de la Revista Mo-derna y tradujo a Huysmans. Estudió en la Escuela Nacio-nal Preparatoria, y a partir de una apuesta que aceptó —y perdió— para sobrellevar el aburrimiento de una clase de Literatura que cursaba con el escritor Julio Torri, compuso el soneto que se haría famo-so con el título de Tiempo, “aunque originalmente se lla-maba Time is Money y estaba dedicado al pintor Edmundo O’Gorman”.

Antes de cursar hasta el tercer año la carrera de Leyes, fue aprendiz en la industria eléctrica y ejerció como tele-grafista en la Revolución, bajo las órdenes de Pancho Villa, y fue ahí, contaba, que conoció al periodista John Reed, autor del libro testimonial Diez días que estremecieron al mun-do. Años después escribió El aula, etc. (1924); Unos cuan-tos sonetos que su autor tiene el gusto de dedicar a las ami-gas y amigos que adentro se verá (1932); Algunos poemas deliberadamente románticos y un prólogo en cierto modo innecesario (1933) y Poema del Mar Caribe (1933); además de la obra de teatro Prometeo sifilítico (1934); y la obra incla-sificable Los banquetes (1932 y 1944), “meditaciones in-tempestivas desde una barra de cantina”, como la definió el crítico literario Christopher Domínguez Michael.

Enviado por la Secreta-ría de Hacienda, Leduc viajó

separado del compositor, La Doña le preguntó: ‘’Oye, tú, ¿por qué no te casas conmigo? Al fin que tú no estás casado con nadie”, a lo que el poeta “mal encadenado” respondió, aludiendo a esa cualidad que le permitía decir tres groserías por cada dos palabras: ‘’no, no me chingues, María. Yo estoy muy contento de ser el señor Leduc, ¿por qué chingados voy a ser el señor Félix?”.

Aquel de quien el poe-ta José Juan Tablada dijera “nuestro Leduc, ese lobo, ese lobezno de mar, encallado en los arrecifes periodísticos”, fue colaborador de Excélsior con las columnas Tics (1943-1945) y Banqueta (1981-1984), que antes había aparecido en en el vespertino Últimas No-ticias (1955-1965); y también escribió En cinco minutos en el diario Esto (1946-1960); Semana inglesa en la revista

Siempre! (1951-1985); y Ca-picúa en Ovaciones (1980-1986). Fue un destacado cronista taurino, y además publicó Historia de lo inme-diato (1976), que contenía una Autominibiografía; y el libro de memorias Cuando éramos menos (1979).

Ese bohemio “para quien el estilo era la brújula para guiar-se en la borrachera de la vida”, anotó Domínguez Michael, recibió el Premio Nacional de Periodismo en 1977. “Irónico, certero, lúdico”, en opinión de Poniatowska, “dio un nuevo sesgo a la poesía”, porque “la desentimentaliza, la desen-solemniza, le suena la nariz y le quita los mocos, la hace más severa y más inteligente”, aunque Leduc, como relató el ensayista y crítico Emmanuel Carballo, llegó a hablar de sus poemas como “simples pen-dejadas de juventud”.

a París en 1935 para ocupar un cargo en el Consulado de México, y llegó a conocer a Breton, Miró y Picasso. Ahí es-cribió Breve glosa al Libro de Buen Amor (1939); El corsa-rio beige (1940), novela de 46 páginas; y Desde París (1942). También estuvo en Inglaterra y España, en donde se casó con la pintora surrealista Leo-nora Carrington en 1941, para ayudarla a escapar de las per-secuciones nazis durante la Segunda Guerra Mundial.

Luego de su regreso a Mé-xico aparecieron XV fabulillas de animales, niños y espan-tos (1957) y Catorce poemas burocráticos y un corrido re-accionario, para solaz y es-parcimiento de las clases económicamente débiles (1963). Fue amigo de María Félix y Agustín Lara, e incluso, cuenta la escritora Elena Po-niatowska, cuando ya se había

Page 5: EXCELSIOR DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 , presentado …bfc1c332b5c17ae20e62-6cbba7cfb59c65abd107ce24040b0bca.r14.cf2… · la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes

EXCELSIOR : DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 EXPRESIOnES :5

El escritorTABLADA. En 1941 es investido como miembro de número de la Academia Mexicana de la Lengua y en 1944 es nombrado vicecónsul en Nueva York.

REFERENCIA DE LA LITERATURA MEXICANA

Hoy se cumplen

70 años del fallecimiento

de José Juan Tablada,

protagonista literario del

modernismo y la vanguardia

Ese escritor proteico, maleable, vasto como un paisaje e íntimo como un cajón.”GUILLERMO SHERIDANESCRITOR

“En su tiempo se adelantó a los tiempos y eliminó los tiempos ante la presencia absoluta de la luz espiritual.”RAMÓN XIRAUESCRITOR

que aceleró una tradición

POR RAFAEL MIRANDA BELLOE s p E c i a l

[email protected]

E l 15 de junio de 1900, el poeta, periodista y crí-tico mexicano José Juan Tabla-

da abordó en el puerto de San Francisco un transpacífico que lo condujo a Yokohama, desde donde escribiría una serie de crónicas que apare-cieron en la Revista Moderna como parte de una columna titulada En el país del sol. Al presentarlas a los lectores, el autor recuerda una anécdo-ta en la que “Hokusai, el gran pintor de la vida japonesa”, había llevado a su editor 300 de sus obras más relevantes, y cuando éste preguntó el nom-bre con el que las publicaría, el artista dijo con sencillez: “Mangua”. Entonces Tablada explica que la palabra “Man-gua” en su traducción lite-ral significa: “el dibujo como viene”, y sigue: “Mangua se-rán, pues, estas crónicas, estas acuarelas rápidamente lava-das en el álbum de viaje; frági-les aspectos de kaleidoskopio que se fijarán en el paciente mosaico de mañana, en el so-ñado libro futuro”.

Sin embargo, aunque “la veracidad de este viaje ha sido puesta en duda”, como señala el poeta y académico Rodolfo Mata, resulta indu-dable que el interés y la fas-cinación por lo japonés, que surgió “principalmente a tra-vés de la lectura de los herma-nos Goncourt”, fue parte vital de la eclosión que permitió a Tablada, “ese escritor pro-teico, maleable, vasto como un paisaje e íntimo como un cajón”, en palabras del escri-tor Guillermo Sheridan, depu-rar una tradición “que rebasó y aceleró” sobre todo como uno de los poetas “más sin-gulares y avanzados del idio-ma”, pero también como “una máquina de vivir y de escri-bir” que ejerció “un periodis-mo cultural riquísimo, a la vez como divulgador de la vaste-dad artística y como su crítico ferviente”.

LA FERIA DE LA VIDA Tablada nació en la Ciudad de México el 3 de abril de 1871 y pasó su infancia en va-rias haciendas de los estados de Tlaxcala, Puebla y Méxi-co. Durante su adolescencia se estableció con su familia en Tacubaya, y en el libro de memorias La feria de la vida (1937) cuenta que como casti-go por una correría, de la que volvió a su casa a la mediano-che, fue enviado por sus pa-dres al Colegio Militar que se encontraba en el Castillo de Chapultepec.

En esa estancia publicó junto a Julio Ruelas (quien se convertiría en un destacado artista gráfico) el periódico El Sinapsismo, episodio que consideraba como su auténti-ca iniciación periodística.

Estudió en la Escuela Pre-paratoria Nacional y duran-te un tiempo tuvo un empleo en la administración de ferro-carriles. Se casó en primeras

nupcias con Evangelina Sie-rra, sobrina del escritor y po-lítico Justo Sierra, y con ella visitó París en su viaje de bo-das a principios de 1903. Al regresar trabajó en el Minis-terio de Instrucción Pública y se dedicó al comercio de vi-nos importados. En 1914, al ser derrocado el gobierno de Victoriano Huerta, del que era abierto colaborador, tuvo que partir al exilio a Nueva York. Después obtuvo el in-dulto de Venustiano Carranza y en 1918, el mismo año que se casó en segundas nupcias con Eulalia Cabrera, fue enviado con un encargo diplomático que lo hizo recalar en Bogo-tá y Caracas. Volvió a Nueva York en 1920, y ahí se estable-ció hasta 1936. En esa tempo-rada recibió el nombramiento de miembro correspondiente de la Academia Mexicana de la Lengua y publicó sus libros de poemas más celebrados.

LOS POEMAS Y LAS PROSAS La carrera de Tablada en las letras había empezado en un diario de la Ciudad de Méxi-co en 1891, publicando versos y crónicas dominicales con el título de Rostros y másca-ras. Y aunque a principios de 1893 aparecieron en la pági-na literaria del periódico El País los versos de Misa Negra —“el primer poema mexicano que podemos llamar en rigor erótico”, en opinión del escri-tor y poeta José Emilio Pache-co—, es con la publicación, un año después, del poema Ónix —“iniciador del movimien-to simbolista o decadentis-ta en México”— en la Revista Azul, que se instala de forma rotunda como una figura emi-nente del modernismo his-panoamericano. Su prestigio se amplía con la aparición de Florilegio (1899, corregido y aumentado en 1904), su pri-mer libro de poemas, y con los artículos que escribe para

Madero-Chantecler. Tragico-media zoológico-política de rigurosa actualidad en tres actos y en verso (1910) —que apareció con el seudónimo de Girón de Pinabete, Alcorno-que y Astrágalo—, rubrica co-laboraciones con El Diario, El Mundo Ilustrado, Revista de Revistas, en la que aparecie-ron Los días y las noches de París (1912-1913), y La Sema-na ilustrada.

Desde el exilio publica los poemarios Al sol y bajo la luna (1919); Un día... poemas sinté-ticos (1919), en donde presentó a plenitud sus famosos haikús, una “miniaturización del mo-dernismo”, en palabras de José Emilio Pacheco, y que tuvie-ron gran influencia en México, así como en los poetas espa-ñoles Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez; Li Po y otros poemas (1920), que incluía caligramas a la manera de Apollinaire; Retablo a la me-moria de Ramón López Ve-larde (1921); El jarro de Flores (1922), en donde afirma que se complacía de haber introduci-do el haikú, “aunque no fuese sino como una reacción con-tra la zarrapastrosa retórica”; Intersecciones (1924), y La fe-ria (1928), volumen tras el cual abandona la poesía, aunque después todavía aparecerá el libro Los mejores poemas de José Juan Tablada (1943), una selección que venía preparan-do desde 1925.

Incluido a los cincuen-ta años en una antología de Jóvenes poetas mexicanos (1922), fue nombrado “poeta representativo de la juventud” en un homenaje al que asistió José Vasconcelos en el Museo Nacional en 1923. Luego apa-reció la novela La resurrec-ción de los ídolos (1924), y de 1925 a 1928 colaboró en las páginas de El Universal con las crónicas de Nueva York de día y de noche, y la columna México y el mundo. Como crí-tico publicó una Historia del

arte en México (1927) y apor-tó notables artículos sobre los pintores José Clemente Oroz-co, Diego Rivera y Roberto Montenegro.

LAS SOMBRAS LARGASAl volver del exilio, Tablada escribió doscientas sesenta y dos crónicas que se publica-ron en Excélsior entre agosto de 1936 y diciembre de 1939. Es la última serie de trabajos periodísticos que realizará y dieron forma a la columna México de día y de noche. En poco tiempo deja la Ciudad de México y se retira a vivir a Cuernavaca a causa de un pa-decimiento cardiaco.

En 1941 es investido como miembro de número de la Academia Mexicana de la Lengua, y en agosto de 1944 es nombrado vicecónsul de Mé-xico, por lo que viaja, una vez más, a Nueva York. Su muerte ocurre el 2 de agosto de 1945 en esa ciudad, y sus restos son traídos a nuestro país y depo-sitados en la Rotonda de los Hombres Ilustres el 5 de no-viembre de 1946.

Autor de los textos satíri-cos reunidos en el libro Del humorismo a la carcajada (1944), entre la obra que dejó inédita y que se ha publicado de manera póstuma destacan Las sombras largas (1993), se-gunda parte de sus memorias, y el Diario (1992). “Modernis-ta y moderno”, escribió Xirau, “fue Tablada un hombre que en su tiempo se adelantó a los tiempos y eliminó los tiem-pos ante la presencia absolu-ta de la luz espiritual”. Octavio Paz confirmó su “naturale-za de padre fundador”, como un creador que “oía crecer la hierba” y “tenía alas en los zapatos”. Y Sheridan lo llamó “una de las bengalas más re-lucientes en la noche de las le-tras mexicanas”.

www.paracaidismos.wordpress.com

[email protected]

la Revista Moderna, de la que había sido uno de los funda-dores en 1898.

Por esas fechas publica La epopeya nacional (1909) de-dicada a Porfirio Díaz, que de acuerdo con el poeta y críti-co mexicano de origen cata-lán Ramón Xirau es “simple y sencillamente mala”, y cola-bora con El Imparcial, escri-biendo las prosas de Tiros al blanco (1909-1910), y como jefe de redacción (1912-1913). Luego de la obra de teatro

262TEXTOS PUBLICÓTablada en Excélsior, entre agosto de 1936 y

diciembre de 1939.

TÍTULO: De Coyoacán a la

Quinta Avenida. Una antología general

AUTOR: José Juan Tablada

SELECCIÓN, EDICIÓN Y ESTUDIO

PRELIMINAR: Rodolfo Mata

EDITORIAL: FCE, F, L, M., UNAM,

México, 2007, 522 pp.

Foto: Archivo Excélsior

Page 6: EXCELSIOR DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 , presentado …bfc1c332b5c17ae20e62-6cbba7cfb59c65abd107ce24040b0bca.r14.cf2… · la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes

6: EXPRESIONES DOmINgO 2 DE agOStO DE 2015 : EXCELSIOR

Con autorización de Sexto Piso regresamos a un libro clásico de la literatura rusa que reaparece con ilustraciones de Raquel Fernández

El jugador

TÍTULO: Historia y utopía

AUTOR: E. M. Cioran

PRÓLOGO Y TRADUCCIÓN: Esther Seligson

EDITORIAL: México: Tusquets, 2014; 168 pp.

La mejor obra del rumano está en su ensayo largo

POR LUIS BUGARINIE s p E c i a l

[email protected]

Más de un lector ocasional de E. M. Cioran (1911-1995) tendrá la idea que el filósofo rumano dedicó sus mejores esfuerzos al aforismo, que la forma bre-ve fue su persecución de estilo y que en ella logró sus mejores líneas.

Una lectura retirada de sus libros pone al descubierto la reiteración de una idea fija: la aparente felicidad de no-ser. Escribo aparente porque nadie ha experimentado ese

RELECTURAS HISTORIA Y UTOPÍA

no-ser —fácilmente confun-dible con la muerte—, que bien podría estar diferencia-do. Para Cioran, experimentar sensiblemente es una caída en el deseo. Ideas cercanas al bu-dismo expresadas con un dra-matismo que enloquece a sus lectores debido a su contun-dencia y temeridad.

No obstante lo anterior, el Cioran de más fuste aparece en el ensayo largo y medita-do, que mezcla la experiencia de su vida (salir de Rumania, afincarse en Francia y cambiar de lengua), con el espectácu-lo tenebroso del siglo XX. His-toria y utopía es uno de esos libros que se abandonan con facilidad porque ahí no figu-ra el Cioran que dispara líneas atesorables, sino aquel capaz

de tejer una argumentación de carácter metafísico sobre la urgencia de la utopía. A su modo de ver, la idea de uto-pía genera movimiento social, pues el ser humano es un ani-mal que proyecta y por tanto necesita perseguir una forma ideal para concebir formas diferenciadas al engranaje hegemónico. El volumen es la confesión de cómo una gene-ración quedó atrapada tras los barrotes de la utopía socialis-ta. Esto es: es un riesgo aun-que debe correrse, so pena de perecer en la inmovilidad.

Historia y utopía es una oportunidad sin igual para admirar de cuerpo comple-to al Cioran menos popular y más intenso. No abandona su pesimismo, es cierto, pero

hay más argumentación que el consabido: “odio la vida y no me suicido, háganle como puedan”. El libro de las qui-meras, su segunda obra, aún escrita en rumano, ofrece una posibilidad semejante y se-ría un presagio de su maes-tría para insuflar los aforismos con carne humana.

Su obra tiene altibajos y uno tiene la sensación de que muchos aforismos son la re-escritura de otros y podrían integrarse en uno solo. Hay posibilidad de resumir su obra en ese formato. Los giros en espiral son constantes. El mis-mo Cioran que nos confirma en una página que la vida es insufrible, dos más adelante refiere que respirar es intole-rable —o caminar por la plaza

y beber un café—, lo cual no es sino una reiteración de la mis-ma idea. En la escritura ensa-yística de largo aliento, por el contrario, nunca se tiene esta sensación. La argumentación filosa recoge las mejores cu-ñas para orillar al lector hacia el acantilado. Lo logra y la caí-da en pleno es imposible de esquivar.

Queda Cioran por descu-brir cuando pasamos de lar-go ante la felicidad chispeante de sus tiros de escopeta. Es un pensador que merece más que la mera consideración de aforista. No hay planteamien-to general de la situación del hombre en el mundo, a mane-ra de sistema, pero la falta de consuelo nos confirma la po-sibilidad de concebirlo.

Cioran, más que un breve pesimista

POR FIÓDOR DOSTOIEVSKI

E s p E c i a l

[email protected]

ADELANTO EDITORIAL

(Diario de un joven)

CAPÍTULO 1

Por fin he regresado después de una ausencia de dos se-manas. El resto de la familia lleva ya tres días en Ruletem-burgo. Pensaba que me reci-birían a lo grande, pero estaba equivocado. El general me ha mirado con desdén y, con-descendiente, me ha man-dado donde su hermana. Era evidente que habían pedido dinero prestado en algún si-tio. Incluso me ha dado la im-presión de que el general me miraba con cierto embarazo. María Filípovna estaba ocu-padísima y apenas ha hablado conmigo, aunque ha cogido el dinero, lo ha contado y ha es-cuchado mi informe de prin-cipio a fin. Para el almuerzo esperaban a Mezentsov, a un francesito y a no sé qué inglés. Como de costumbre, en cuan-to hay dinero se organiza un banquete a la moscovita. Po-lina Alexándrovna, nada más verme, me ha preguntado por qué había tardado tanto y, sin esperar respuesta, se ha ido. Es evidente que lo ha hecho a propósito. Pero ella y yo tene-mos que aclarar ciertas cosas que se han ido acumulando.

Me condujeron a una ha-bitación pequeña en el cuarto piso del hotel. Aquí todos sa-ben que pertenezco al séqui-to del general. Es evidente que han tenido tiempo de darse a conocer. Todo el mundo pa-rece creer que el general es un alto dignatario ruso muy rico. Antes de la comida, entre otros encargos, se las ha arre-glado para darme dos billetes de mil francos con el encargo de cambiarlos, cosa que hice en la oficina de cambio del hotel. Ahora nos tomarán por millonarios, al menos duran-te una semana. Estaba a punto de ir a recoger a Misha y a Na-dia para salir a dar un paseo, cuando me llamaron desde la escalera para que fuera a ver al general. Le había parecido oportuno preguntarme adón-de los llevaba. Es evidente que este hombre es incapaz de mi-rarme directamente a los ojos. Le encantaría, pero cada vez que lo intenta yo le devuel-vo una mirada tan intensa, en suma, tan irreverente, que pa-rece quedarse turbado. Me ha dado a entender, montando con grandilocuencia una fra-se sobre otra hasta hacerse un completo embrollo, que podía ir a pasear con los niños al par-que, pero lo más lejos posible del casino. Terminó enfadán-dose y añadió bruscamente:

—Si no, puede que acabe llevándolos al casino, a la ru-leta. Usted me perdonará —añadió—, pero sé que sigue siendo bastante cabeza loca y es capaz de ponerse a jugar. Sea como fuere no soy su tutor y no tengo intención de arro-garme semejante cargo, pero tengo derecho, por así decirlo, a pedirle que no me ponga en un compromiso…

cabeza presentarnos, o men-cionarme siquiera, pues-to que monsieur le comte ha estado en Rusia y sabe que lo que allí se conoce como un outchitel (profesor) es poca cosa. Por otro lado, me cono-ce de sobra. Confieso que me presenté en la comida sin ha-ber sido invitado. Al parecer, el general se había olvidado de dar instrucciones, si no probablemente me hubiera mandado a comer a la table d’hôte (mesa común). Cuan-do aparecí, pues, el general me miró con desagrado. La buena de María Filípovna me indicó inmediatamente un asiento. El encuentro con mister Astley salvó la situa-ción y, sin querer, entré a for-mar parte de su grupo.

La primera vez que me crucé con este inglés excén-trico fue en Prusia, en un va-gón en el que viajábamos uno frente al otro, cuando me dis-ponía a encontrarme con la familia del general. Más tarde me volví a cruzar con él en-trando en Francia y, por úl-timo, en Suiza. Dos veces en dos semanas y ahora volvía a encontrármelo aquí, en Rule-temburgo. Nunca en mi vida he conocido a un hombre tan tímido. Es tímido hasta un lí-mite absurdo y, por supuesto, es consciente de ello, porque no tiene un pelo de tonto. Pero es una persona muy calmada y amable. Fui yo quien inició la conversación en nuestro primer encuentro en Prusia. Me contó que ese verano ha-bía estado en el cabo Norte y lo mucho que le apetecía ir a la feria de Nizhni Nóvgorod. No sé cómo conoció al ge-neral. Creo que está perdida-mente enamorado de Polina. Cuando ésta entró, se encen-dió como una tea. Se alegró mucho de que yo me senta-ra junto a él a la mesa y pare-ce como si me considerara un amigo íntimo.

A la mesa, el francesito se pavoneaba de una forma in-creíble. Se dirigía a todos con un tono de superioridad y desdén, aunque en Moscú no recuerdo que hiciera otra cosa que rascarse la barriga. No pa-raba de hablar de economía y política rusa. El general de vez en cuando encontraba valor para contradecirlo, pero con modestia, sólo lo justo para que su autoridad no quedara en entredicho.

—Pero si ni siquiera tengo dinero —respondí con cal-ma—. Para jugar hace falta te-ner dinero.

—Le pagaré inmediata-mente —respondió el general y, ruborizándose ligeramente, hurgó en su escritorio, com-probó su libreta y llegó a la conclusión de que me debían casi ciento veinte rublos.

—¿Cómo hacemos las cuentas? —comentó—. Hay que pasarlo a táleros. Tome cien táleros, redondeando, no

me olvidaré del resto. Tomé el dinero en silencio.—No se ofenda por lo que

le he dicho, por favor, es usted tan susceptible… Si le he he-cho esa observación ha sido, en cierto modo, para preve-nirle, y por supuesto estoy en mi completo derecho…

De regreso al hotel con los niños para la comida, me cru-cé con una auténtica comitiva. Nuestro grupo se dirigía a visi-tar unas ruinas. ¡Dos maravi-llosos coches de caballos con

unas monturas excelentes! En uno de los coches iba made-moiselle Blanche con María Filípovna y Polina. El france-sito, el inglés y el general iban a caballo. Los transeúntes se detenían a mirar. El resultado era realmente impresionante, aunque al general iba a salir-le muy caro. Calculé que entre los cuatro mil francos que yo había traído y los que habían conseguido ellos, ahora mis-mo tendrían siete u ocho mil francos. Era una cantidad de-masiado pequeña para made-moiselle Blanche.

Mademoiselle Blanche se hospeda en nuestro hotel con su madre, y nuestro francesi-to también anda por aquí. Los sirvientes lo llaman monsieur le comte y a la madre de ma-demoiselle Blanche, mada-me la comtesse. Y quién sabe, puede que de hecho sean comte et comtesse.

Yo sabía que monsieur le comte no me reconoce-ría cuando nos viéramos a la mesa. Al general, por su-puesto, ni se le pasó por la

TÍTULO: El jugador

(Diario de un joven)

AUTOR: Fiódor Dostoievski

TRADUCCIÓN: Rafael Torres

ILUSTRACIONES: EfEalcuadrado

EDITORIAL: Sexto Piso, México,

2015, 200 pp.

LA ILUSTRADORARaquel Fernández (Efe-alcuadrado) es licencia-da en Bellas Artes. Cursó un año en la Accademia di Belle Arti de Venecia donde se inició en el mundo de la ilustra-ción. Seleccionada en el V Catálogo de Ibe-roamérica Ilustra, ha expuesto en España.

Page 7: EXCELSIOR DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 , presentado …bfc1c332b5c17ae20e62-6cbba7cfb59c65abd107ce24040b0bca.r14.cf2… · la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes

EXCELSIOR : DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 EXPRESIOnES :7

1. La colección Tus libros Se-lección pretende fomentar el hábito entre los más jóvenes de formar y apropiarse de sus colecciones bibliográficas. Constituyen, generalmente,

ese primer catálogo personal obras clásicas que han resistido el paso del tiempo. Una de ellas es, sin duda, la vasta obra de Jules Verne. Con su serie Viajes extraordinarios, el autor francés quiso crear una epopeya cósmica. De la Tierra a la Luna es una de las más apasionantes historias que, sin olvi-darse de los chispazos de humor que carac-

terizaron la obra de Verne, sumerge al lector en la aventura de los hombres por lanzar un gigantesco proyectil al satélite natural. Fue escrito, se dice, con asesoría de matemáti-cos, constructores y astrónomos. Ediciones de este clásico abundan, pero los libros de Anaya tienen las características para ir con-formando una primera biblioteca: una he-chura a prueba del uso más agitado, pies de página que ayudan a entender la lectura sin interrumpir su curso e ilustraciones que per-miten imaginar aún más la travesía en la que Verne quiso sumergir a sus lectores.

— Luis CarLos sánChez

2. El 5 de julio pasado, la UNESCO incluyó al Sis-tema Hidráulico del Acueducto del Padre Tembleque en su lista de Patrimonio Mundial de la

Humanidad. La obra, construida en el siglo XVI, de más de 48 km de longitud, es uno de los prodigios de la ingeniería en la Nueva España. Su autor intelectual fue el fraile franciscano Francisco de Tembleque que, preocupado por las dificultades que tenían los indígenas para obtener agua limpia, emprendió la odisea de

construir la obra. Erróneamente identificado sólo con su arcada monumental, es un com-plejo sistema que condujo agua por varias po-blaciones. En este libro, editado por primera vez en 1945, el autor novela la forma en la que el fraile se embarcó en su empresa y las pe-nurias que debió sortear. Cuenta, como en la segunda edición, con un apéndice que ofrece datos sobre el proceso de construcción y los glifos que adornan sus arcos en el tramo, el más colosal y conocido, que pasa por el mu-nicipio de Otumba, en el Estado de México.

— Luis CarLos sánChez

3. El lenguaje no escapa a su calidad de herra-mienta, aunque igual admite ser utilizado para esbozar una geografía de aquello que soñamos

y termina por convencernos. No es inusual que las formas del mundo hechicen a los paseantes. Sophie Canal nos obliga a des-ordenar el entorno para descubrir siluetas que habitan en la memoria del tiempo. Son geometrías como diseños verbales que in-vitan y repelen, abren la partitura y cierran

la libreta para que la imaginación vuele libre. La trama de la irrealidad es magnética y, por lo mismo, no puede negar las virtudes del silencio y la algarabía. Elaborar una escritura de vista seccionada no carece de mérito. La reinvención del lenguaje es el primer paso hacia la utopía. Sólo que para desenredarlo hacen faltan atributos de visionario. Canal los tiene y los comparte. De nada sirve el ingenio más afilado si se aleja del sol para sudar la nostalgia y así construir significados imprevistos. El resto es tarea del lector.

— Luis Bugarini

TÍTULO: De la Tierra a la Luna

AUTOR: Jules Verne

EDITORIAL: España, Anaya, 2015; 254 pp.

TÍTULO: El padre Tembleque

AUTOR: Octaviano Valdés PRÓLOGO: Manuel Olimón Nolasco

EDITORIAL: México, Jus, 2005; 200 pp.

TÍTULO: Geometría del deseo

AUTOR: Sophie Canal

EDITORIAL: Cuadrivio, México, 2015; Ebook: www.cuadrivio.com

DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015

TRES PARA LLEVAR

La cuesta de la memoriaRESEÑA LITERARIA AUTOR NORUEGO

POR RAFAEL MIRANDA BELLOe s p e C i a L

[email protected]

Mientras la “realidad” a la que se asiste habitualmente a tra-vés de la televisión y los me-dios electrónicos e impresos aparece saturada de ficción, la veracidad y la sinceridad han dado un paso al frente como cualidades invalua-bles —aptas para simpatizar con las grandes ventas y ca-paces de facturar una buena suma de veredictos a favor— en los confines evasivos de la literatura.

Es decir, en tanto que los relatos públicos o privados de los hechos son narrados como versiones legítimas e incontrovertibles a pesar de su evidente invención, una porción significativa de los informes en prosa —novelas, diarios, ensayos— que se re-dactan desde las entrañas de la literatura, han encumbra-do a las verdades construidas de “realidad” e imaginación (¿hay otras?), con la auto-biografía deviniendo en res-paldo cuantificable, como santo y seña de sus labores narrativas.

Encabezando la cartelera de los fenómenos literarios que reditúan algo más que lo medido en plazos mone-tarios, Karl Ove Knausgård (Oslo, 1968) vuelve a arries-garse a trepar la cuesta de la memoria, y echa a andar la novela La isla de la infan-cia (2009) —tercer volumen de la saga autobiográfica Mi

lucha (seis novelas escritas y publicadas entre 2009 y 2011)— a principios de la dé-cada de los 70, después de que la familia recién formada por una pareja de jóvenes de la posguerra se mude a la isla de Trom, en la costa sur de Noruega, para perseguir esa vida que eligieron, al lado de dos pequeños, los hijos que dan forma y completan esa fórmula preconcebida de “la familia nuclear”, signo del es-píritu de toda una época.

Y a través de la escritura, Ove redescubre la tremenda sombra del miedo que apa-rece en la superficie de las cosas y que se oculta, insi-diosa, en el trasfondo de las relaciones filiales o comuni-tarias, dominado por la seve-ridad de un padre autoritario

y que contrasta con la figura de una madre que mantie-ne a raya la oscuridad que se filtra, de tanto en tanto, para aislar a ese niño que el escri-tor recuerda al contemplar las marcas de las historias de su infancia.

Cuando fueron publica-das en Noruega las novelas La muerte del padre y Un hombre enamorado, las dos primeras partes de Mi lu-cha, provocaron un alboroto mediático de tales propor-ciones que el autor decidió y tuvo que aislarse para po-der seguir escribiendo lo que se proponía, y al cabo logró, con esa obra que es, por ahora, la bandera en la punta del iceberg que vene-ran los interesados en pro-seguir el sentido de términos

como “autoficción” o “exti-midad”, que sólo han servido para pulir, aunque sea de feo modo, el resplandor de pos-tizas innovaciones literarias.

Aunque en todo caso, la envergadura de La isla de la infancia estriba en la destre-za de Knausgård para contar bien una historia, simple-mente del modo y con el tono que eligió, así como lo han hecho los buenos narradores desde hace mucho tiempo, en este mundo en el que cada vez todo y todos parecen tan cercanos. Una novela con el regusto de las experiencias únicas o que pasan poco y muy de vez en cuando, y que evoca el placer que concede un juguete nuevo a un niño.

www.paracaidismos.wordpress.com

[email protected]

TÍTULO: La isla de la infancia

AUTOR: Karl Ove Knausgård

TRADUCCIÓN: Kirsti Baggethun y Asunción Lorenzo

EDITORIAL: Anagrama España, 2015; 498 pp.

Ilustración: Cortesía Edgardo Lara / instagram.com/ed_lara

SINGULARIDAD AJEDRECÍSTICAEl ucraniano-ruso Sergey Karjakin, dueño del récord mundial de precocidad en ganar el título de gran maestro, derrotó en fila india al prestigioso equipo de China durante el match que enfrentó a Rusia en Heixiazi, del 29 al 1 de agosto. Karjakin se impuso a Yi Wei, Liren Ding, Ni Hua y Yu Yangyi Yu en un singular match Super Go en el que el jugador vencedor podía continuar bajo el sistema de ganar y seguir. Rusia presentó con Karjakin a Evgeny Tomashevsky, Alexander Morozevich, Ian Nepomniachtchi y Dmitry Andreikin. El certamen constó de cuatro matches de tal manera que un quinto jugador chino Yue Wang no tuvo acción. Los jugadores iniciaban con un match de 90, +30, con 30 segundos por movimientos. En caso de empate sostenían dos partidas de blitz y resolvían por Armagedón. Karjakin empató ante Yi Wei y ganó los dos blitz. Empató con Liren Ding, el resultado en blitz 1–1 y en Armagedón hicieron tablas sólo que la victoria correspondió a a Karjakin por llevar negras. Derrotó a Ni Hua en el ritmo de 90 minutos. Ante Yangyi Yu empató y resolvió al imponerse en los dos blitz.Los equipos sostendrán la segunda fase en Harbin del 12 al 17 de diciembre.Blancas: Sergey Karjakin, Rusia, 2,753.Negras: Hua Ni, China, 2,703.Defensa Petroff, C42.R-3, Match China vs. Rusia, 31–07-2015.1.e4 e5 2.Cf3 Cf6 3.Cxe5 d6 4.Cf3 Cxe4 5.d4 d5 6.Ad3 Cc6 7.0–0 Ae7 8.Cc3 Af5 9.Te1 Cxc3 Adams-Polgar, 0–1, 2008. 10.bxc3 Axd3 11.Dxd3 0–0 12.Te2 a6 13.Af4 Dd7 14.Tae1 Tae8 15.c4 dxc4 16.Dxc4 Ad6 Un movimiento impulsivo. Tras el intercambio de las piezas pesadas y el alfil, se puede visualizar, quedarán desarticulados los peones con debilidades en d6 y b7 17.Txe8 Txe8 18.Txe8+ Dxe8 19.Axd6 cxd6 20.d5! Ce7 [20...Ca5 21.Dc7 y ganan el juego por la debilidad de la octava. El caballo no puede ser defendido.] 21.Dc7 Cxd5 22.Dxb7 Cc3 23.Dxa6 Db8 24.g3 h6 25.a4 El peón libre va a decidir. 25...Db1+ 26.Rg2 Dxc2 27.Dc8+ Rh7 28.a5 Db2 29.Dc6 d5 30.Db6 Da2 [30...Dxb6 31.axb6 Cb5 32.b7 y no es posible evitar la coronación.] 31.a6 Ce4 32.a7 g5 33.Ce5 Rg7 34.Cd3 d4 35.Dxd4+ Cf6 36.Cc5 1–0.

LIREN DING OCUPA EL 10O LUGAR DEL MUNDO FIDEEl gran maestro chino Ding Liren, vencedor reciente del ex vice campeón mundial Boris Gélfand, ascendió a la décima posición del mundo en el escalafón oficial de la FIDE en el que domina el monarca Magnus Carlsen, de Noruega, con 2,853 puntos. Hay cinco GM con más de 2,800 puntos Elo y 47 con más de 2,700. El inglés David Howell aparece por vez primera en la elite de +2,700 en el sitio 36 en la publicación oficial de la FIDE, en donde dominan numéricamente 10 ajedrecistas rusos y 8 chinos. Lista correspondiente al mes de agosto.

1. Magnus Carlsen, Noruega, 2,853.

2. Viswanathan Anand, India, 2,816.

3. Veselin Topálov, Bulgaria, 2,816.

4. Hikaru Nakajura, Estados Unidos, 2,814.

5. Fabiano Caruana, Italia, 2,808.

6. Anish Giri, Holanda, 2,793. 7. Wesley So, Estados Unidos, 2,779. 8. Vladimir Krámnik, Rusia, 2,777. 9. Alexander Grischuk, Rusia, 2,771. 10o. Liren Ding, China, 2,770.

11. Levon Aronian, Armenia, 2,765. 12. Dmitry Jakovenko, Rusia, 2,759. 13. Sergey Karjakin, Rusia, 2,753. 14. Chao b Li, China, 2,748. 15. Evgeny Tomashevsky, Rusia, 2,747. 16. Boris Gélfand, Israel, 2,741. 17. Pentala Harikrishna, India, 2,740. 18. Michael Adams, Inglaterra, 2,740. 19. Peter Svídler, Rusia, 2,739. 20. Teymour Radjábov, Azerbaiyán, 2,738.

21. Leinier Domínguez, Cuba, 2,736. 22. Shakhriyar Mamedyarov, Azerbaiyán, 2,735. 23. Radoslaw Wojtaszek, Polonia, 2,733. 24. Maxime Vachier-Lagrave, Francia, 2,731. 25. Yangyi Yu, China, 2,726. 26. Vassily Ivanchuk, Ucrania, 2,726. 27. Yi Wei, China, 2,725. 28. David Navara, R. Checa, 2,724. 29. Pável Eljánov, Ucrania, 2,723. 30. Yue Wang, R. China, 2,721.

31. Dmitry Andreikin, Rusia, 2,720. 32. Nikita Vitiugov, Rusia, 2,719. 33. Peter Leko, Hungría, 2,714. 34. Hua Ni, China, 2,713. 35. Xiangzhi Bu, China, 2,712. 36. David Howell, Inglaterra, 2,712. 37. Alexander Morózévich, Rusia, 2,711. 38. Ruslan Ponomáriov, Ucrania, 2,711. 39. Lauren Fressinet, Francia, 2,710. 40. Alexander Moiseenko, Ucrania, 2,710.

41. Hao Wang, China, 2,705. 42. Ioan Nepomniachtchi, Rusia, 2,705. 43. Rustam Kasimdzhanov, Uzbekistán, 2,704. 44. Igor Kovalenko, Letonia, 2,702. 45. Sergei Rublevsky, 2,702. 46. Alexei Shírov, Letonia, 2,702. 47. Zoltan Almasi, Hungría, 2700. 48. Anton Koróbov, Ucrania, 2,699. 49. Le Quang Liem, Vietman, 2,699. 50. Yuriy Kryvoruchko, Ucrania, 2,697.

AJEDREZARTURO XICOTÉNCATL

Las blancas van a jugar y las negras abandonan de inme-diato. ¿Puede indicar el movimiento? Posición tras 35. Dxd4+ Cf6, de la partida Karjakin-Hua Ni, en el singular match entre China vs. Rusia.

10 RUSOS Y 8 CHINOS CON MÁS DE 2,700 PUNTOS ELO

SERGEY KARJAKIN BARRE AL EQUIPO DE CHINA

Page 8: EXCELSIOR DOmIngO 2 DE agOStO DE 2015 , presentado …bfc1c332b5c17ae20e62-6cbba7cfb59c65abd107ce24040b0bca.r14.cf2… · la Sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes

8: EXPRESIONES DOmINgO 2 DE agOStO DE 2015 : EXCELSIOR