168

Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

  • Upload
    others

  • View
    2

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central
Page 2: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

RONCESVALLES - TOLIMA

HÉCTOR SALGADO LÓPEZ Profesor Asistente

Facultad de Ciencias de la Educación

Universidad del Tolima

Fundación de Investigaciones Arqueológicas Nacionales Banco de la República Universidad deiTolima

Fondo Mixto de Cultura deiTolima

Santafé de Bogotá, O.C.1998

Page 3: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Carátula: Loma con plataformas de vivienda t'!>calonadas (Finca La Granja)

FUNDACION DE INVESTIG/\CJONES ARQUEOLOCI CAS NACIONALES. No. úú

BANCO DE L/\ REPUBLICA

EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL RONCESV/\LLES - TOLIMA

Primera Ed ici6n. 1 <)9H

© 19lJI{ HiTT<JI( S¡\1.(,¡\l)(l L<ll'l:l

Armada d igit a l e impresión Edi10ra Cuadalupc Llda. Tel.: :!úlJ 07 Xl:l E-mail: ~uada <í_t col l.t.c lcrom.conl.CO Santak de l~o~ot;\, I) .C .. Colombia

Prinr.:d and madt' in Colombia 1 lmpn:'>o v hecho l'Il Colomhi:1

Page 4: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

CONTENIDO

Pág.

FECHAS DE RADIOCARBONO ...... ...... .................... ..... ... .... .. 7 AGRADECIMIENTOS .... ........... ..... .. ...................................... .. 9 P.ARTICIPANTES ... .. ........ .. ...... .. .. ...... .. ........... .. ............ .... .. . .. .... JI INTRODUCCIÓN ............. .... ..... .... .. ................................ ......... 13

Capítulo l

LA REGIÓN . .. ... .. ........ .... .. . . . . . . . ... ... .. . . . .. .. .. .. ... .. . .. . . . .. . . .............. 15 1 . Localización Geográfica .. . . . . . . . . .. . . ... . . . . . . .. . .. ... . . .. . . . . . . . . . . . . . . . .. J 5 2. El medio Natural ......... .......... ....... ..... .. ..... .. .. ..... ....... ......... 15 3. Geología y Geornorfología .......... .................... .. .... ............ 18 4. Economía Regional .. .. .. .. .. .. . .. .. . .. .. .. . .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. .. 18

Capítulo ll

ANTECEDENTESARQUEOLÓGICOS ............................ ...... 2 1 I . La.Zona Plana del Val1e del Magdalena y la Ve.rtiente

Occcidental de la Cordillera Oriental ..... ,.. .......................... 22 2. La Cordillera Central en el Tolima y Regiones Adyacentes . . 25

Capítulo III

METODOLOGÍA ......... .. .. ...... .... ........ .................... .... ..... ..... ...... 27 l. Can1po ...... ......... .......................... ............................ ........ 27

l . l. Reconocimiento y Prospección .. .. ..................... ....... . 27 1.2. Excavaciones....... .. .... ..... ......... .... ...... ...................... ... 28

2. Laboratorio .. .. .... . .... . . . . . . . . . . .. . .. . . .. . .. .. .. .. .. .. .. .... .. .. .. . . .. .. ... .. .. . 29 2.1. Análisis de los Materiales Cerámicos y Líticos........ .. 29 2.2. Ot ras Muestras...................... ... .. ..... .............. ...... ...... . 30

3. ln fonne final .. .. ................ ......... ..... .... .............. ........... ... ... 31

Capítulo IV

LA EXPLORACIÓN ARQUEOLÓGICA .. .. .... ........ ..... ............ 33 l. La Exploración , . . .. .. .. .. .. . .. .. .. . .. .. .. . . . . .. . . .. . .. . . .. . . . . . .. . .... .. . .. . .. .. .. .. .. 33

1.1 . Rosales, Londres y Siberia .... ...................................... .... 35 1.2. Buenos .Aires ........... .... ..... ..... ......... .............. ..... ... ..... .. .... . 37 J .3. La Granja........ .......... ...... ................... ...... ................. ....... 37 l .4. El Jordán............ ............................ ........................ .. ........ 40 1.5. Patio Bonito y El Reflejo ............ ........................ .... .... ..... 40

Page 5: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

6 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Capítulo V

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS ............... .. .... ....... ...... .. ... 43 l . Fisiografía General de la Región de Roncesvalles .. . .. ...... . .. .. . 43 2. Excavaciones en Sitios de Asentamientos ..... ................ .. ... .. . 44

:.l. Buenos Aires .. .... .... .......... .................... .. ........... .. ........ 44 2.2. La Granja ....... ... ............ ..... ........................................ 52 2.3. El}ordán... ......................... .. .... ... ....... .. ..... .. ................ 6 1 2.4. Patio Bonito...... .. ............................... ... ........ .. ............ 84

Capítulo VI

LOS MATERIALES ARQUEOLÓGICOS ...... ........................ ...... 89 l. La Cerámica............... .. .. ......................... .. ............................ 89

1 . 1 . Criterios Metodológicos .. . .. ....... ............................. ..... 89 1.2. Cerámica Formativa .... .. .. .. .. .. .... .. .. .. .. . .. .... .................. 90 1.3. Comparación de los Grupos Cerámicos

del Período l ardío.. .......... ....... . ............ ....................... 93 2. El Material Lítico.... ............................... .. ............................. 108

Capítulo VII

PAUTAS DE ASENTAMIENTO PREHISPÁNICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL DEL TOLIMA ....... ............... ........ 113

ANEXO 1

Descripción Formal y Técnica de Los Grupos Cerámicos del Sistema Alfarero de Roncesvalles -Tolima ........ .................... 125

A. Período Fom1at ivo ........... .................. ............ ............. ........... 125 B. Período Tardio ............................... .. ..... ... ........... ......... .... ...... 127

ANEX0 2

Estudio Palinológico . .. .. .. .. .... .. ...... .. .. .... . .. .. .... .. . .... .... .. . .. .. . . .. . ... .. . .. . 133

ANEX03

Análisis Fisicoquírnicos de Suelos.. .. ................................. ........... 145 Indice de Figuras.......... ............. .............. .. .. ... .. ........... .. ................. . 14<) lndice de Fotografías.. .. .... .. .. .. ....... .. ................. .. ........ ... .................. 159 lndice de Láminas........................... .......... .. .......................... ... .. .... . 161

BIBLIOGRAFÍA ... ................. ........... ........... .... ... .. ......... ................. 163

Page 6: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

FECHAS DE RADIOCARBONO

TARDIO Beta- 111973 L:t Granja 1020 ± (l(l a. p.

Terraza 1 H70- 1 9'30 l - <.JtJO d. C. R./\ 1: 1 00 - 1 15 cm

Reta- 113703 La Gran ja 1030 ± 60 a. p. Pl<~taforma 3 1{60 - t 920 J- 980 d.C. U.E.3: 40 - 50 Cll\

FORMATIVO

Bet.a- 1 167ó3 El Jord:\1' 2850 .:!.: 50 a.p. 'Jc rrazR 1 RSO-llJOO J -lJ50 <I.C. U.E. l-1: 110 - 130cm

PRECERA.MlCO

Beta- ll 6764 El Jordán 9760 .:!.: 1 60 a. p. Terraza 1 7650 -1 7R 1 O J - 7970 a.C. U.E.l4: II 0 - 130cm

Bcw - 1 1 197'1 El Jord <i ll 12910 ± 60 a.p. ' lcrra~:a 1 1 OCJOO -1 10960 J- 1 1010 a.C. U.E. 10: l00-120cm

Page 7: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

10 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

toa los profesores César Velandia ]agua y Manuel León Cuanas, quienes siempre han imaginado un rnuseo universitario que lidere la investigación arqueológica regional; por lo cual impulsaron el inicio de este trabajo.

De igual manera, queremos reconocer el interés, por divulgar los resultados, demostrado por los profesores de la Universidad del Tolima, Luis Fernando Rozo (Comité de Investigaciones) y César Augusto Zambrano (Fondo Mixto) y su gestión, en dichos organismos, para la aprobación de los apoyos económicos de la publicación.

Aparte de las personas que se mencionan en la lista de parti­cipantes, se agradece el esfuerzo denwstrado por Gloria Rivera en las labores de laboratorio; Martha Barrero y Ricardo Rivera en la digitación del manuscrito. Así n1isrno, un especial agradecimiento para la arqueóloga Alba Nelly Gómcz por su decidido apoyo e interés en la elaboración v redacción del texto.

Nuestros agradecimientos también son para el colega Camilo Rodríguez., por enseñarnos los materiales cerámicos y permitirnos consultar sus diarios de campo y los estudios de la cerámica no publicados, de las investigaciones que adelantó c1.1 Chaparral y Herrera (Tolima).

Por último, nuestra gratitud se hace cxtcnsiv::~ a la cornuni­dad de Roncesvalles; en especial al párroco Osear Fcrnándcz, a la profesora Aleyda Gómcz Torres, su esposo Jorge Murillo y a Samuel Casuu'leda porque con su cooperación y apoyo se mejoró nuestra estadía en campo; a los prOpietarios de los predios (Isabel Castro, lrma Galindo, Julio Pelácz y Ncftalí liméncz) por permitirnos ade­lantar las excavaciones.

Page 8: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

AGRADECIMIENTOS

La real izac ión de la presente investigación arqueológica no hu­biera sido posible sin los aportes financieros de ciertas instituciones y la colaboración de un grupo de personas que brindaron su apoyo; a todas ellas hacemos llegar nuestra más sincera gratitud.

La Universidad del Tolima, a través de la Facultad de Cien­cias de la Educación y del Museo Antropológico, proporcionó per­son al, equipos e instalaciones; además faci litó el tiempo necesario para adelantar las labores investigativas. El Comité Central de Investigaciones, asumió parte de los costos del proyecto. La Fun­dación de Investigaciones Arqueológicas Nacionales FlAN del Banco de la República, también proporcionó recursos económi­cos para adelantar el proyecto. Igualmente, el Fondo M ixto para la Promoción de la Cultura y las Artes del Departamento del Tolim.a ayudó a financiar la investigación.

Igualmente, agradecemos a los Doctores Luis Duque Gómez, Director Ejecutivo de la FlAN; Luda Durán Pin illa, Directora del Comité Central de Investigaciones, Universidad del Tolimn y José Eusebio Suárez Gaitán, Director durante ese período del Fondo Mixto, por considerar y creer en la propuesta de investigación; por apoyar a la FlAN, en la edición del presente lib ro, a través ele la aprobación de partidas económicas tendientes a cofinanciar la pub! icación.

A las actuales y anteriores directivas ele la Unive rsidad del Tolima, espedalmente a la Doctora Sandra Amaya por brindar la oportunidad para el desarrollo de la investigación arqueológica en la institución. También, presentamos un especial reconocimien-

Page 9: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

10 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

toa Jos profesores César Velandia Jagua y Manuel León Cuartas. quienes siempre han ilT1aginado un museo universitario que lidere la investigación arqueológica regional; por lo cual impulsaron el inicio de este t rabajo.

De igt.~.al rnanera, queremos reconocer el interés, por divulgar los resultados, demostrado por los profesores de la Universidad del Tolirna, Luis Fernando Rozo (Comité de Investigaciones) y César Augusto Zambrano (Fondo Mixto) y su gestión, en dichos organismos, para la aprobación de los apoyos económicos de la publicación.

Aparte de Jas personas que se mencionan en la lista de parti­cipantes, se agradece el esfuerzo denwstrado por Gloria Rivera en las labores de laboratorio; Martha Barrero v Ricardo Rivera en la digitación del manuscrito. Así m ismo, un eSpecial agradecim.iento para la arqueóloga Alba Nelly Gómez por su decidido apoyo e interés en la elaboración y redacción del texto.

Nuestros agradecimientos también son para el colega Camilo Rodríguez, por enseñarnos los mateliales cerárrlicos y permitirnos consultar sus diarios de campo y los estudios de la cerámica no publicados, de las investigaciones que adelantó en Chaparral y Herrera (Tolima).

Por último, nuestra gratitud se hace extensiva a la comuni­dad de Roncesvalles; en especial al párroco Osear Fcrnándcz. a la profesora Aleyda Gómez Torres, su esposo Jorge Murillo y a San1uel Castai'\eda porque con su cooperación y apoyo se rnejoró nuestra estadía en campo; a los propietarios de los predios (Isabel Castro, lrma Galindo, Julio Pelácz y Neftalí Jiméncz) por perrnitirnos ade­lantar las excavaciones.

Page 10: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

PARTICIPANTES

DIRECfOR Héctor Salgado López

EQUIPO EN CAMPO Jhony Carvajal Alba Nelly Gómez Martha Barrero Ricardo Rivera Gloria Rivera Catalina Oíaz (Temporada 1998)

GUAQUERO Hugo Alberto Montenegro Y.

AUXIUARES ENlABOMTORIO Gloria Rivera Martha Isabel Banero Ricardo Rivera Walter Cataño Catalina Díaz Ji mena Bustos

ANÁLISIS D.E RADIOCARBONO Beta Analytic Inc. , Florida

IDENTIFICACION DE PAISA­JES E INTERPRETACIÓN DE SUELOS Pedro José Botero

PALINOLOGÍA Alexis Jaram illo Gustavo Lozano C.

PETROGRAFÍA Javier Rojas

TOPOGRAFÍA Diana Tocora Camilo A. Escobar

DIBUJANTE César Bonill<:l José Ledesman Díaz

ANALJSTA DE SISTEMAS Fidel Claudio Silva A.

DIGITACION DE TEXTOS Martha Barrero Ricardo Rivera

FOTOGRAFÍAS Héctor Salgado L ¡ ho ny Carvajal Alba Nelly Gómez

OBREROS Rubén Sanabria ferney Uribe lesús Hernández

CONDUCTORES Hernán Cómez Samuel Cast<:u1eda Marg::~rita Dell.(ado

V <..

Page 11: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

INTRODUCCIÓN

La historia prehispánica de los grupos humanos que habj­taron la cordiJlera Central , en el actual departamento del Tolima, es muy compleja al igual que las relaciones culturales que establecieron con otras áreas del suroccidente colo1T1biano. La gran altura de la cordillera no fue un obstáculo para la co­municación entre los valles cálidos del Magdalena, Cauca y las vertientes andinas, permitiendo el intercambio y el estableci­miento de diversos patrones de asentamiento.

A partir de 1996 la Universidad del Tolima, a través del Museo Antropológico, inició el desarrol lo de un programa de in­vestigación arqueológica regional, cuyo priJT1er proyecto fue rea­li zado en el municipio de Roncesvallcs - Tolima y sus resultados se describen en la presente publicación. El propósito general fue el de localizar, identificar y evaluar los recursos a rqueológicos de la zona escogida, por medio de prospección arqueológica y de excavaciones parciales en los sitios más representativos.

La información obtenida ayuda a incrementar el conocimien­to sobre la dinámica cuJtural de las sociedades prehispánicas que habitaron las vertientes v zonas altas de la cordillera Central, en es ta región del Tolima y' son un aporte significativo tendiente a superar el nivel descriptivo que, a partir de rasgos es ti lísticos (tan­to en cerám ica como en orfebrería, etc), ha caracterizado el esta­blecimiento de relac iones culturales preh ispánicas entre !;,1 re­gión tolimense y otras áreas arqueológicas del suroccidente co­lombiano, como: San Agustín, Quimbaya, valle rnedio del río Cauca y Calima.

Page 12: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

14 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDiLLERA CENTRAL

En su conjunto, los haiiazgos arqueológicos de Roncesvallcs­Tolirna contribuyen al estudio del ptoceso l'üstórico regional. pre­hjspánico del suroccidente colombiano, En los yacimientos investi­gados se identificaron ocupaciones aborígenes que amplían la se­cuencia cultural y cron ológica prehispánica del Tolima, desde fina­les del Pleistoceno y Holoceno Temprano (XIll a X milenios a. p.), al formativo tardío (s iglo IX a .C.) y hasta los desarrollos prehispánicos tardíos de Jos siglos lX a XII después de Cristo.

Las evidencias encontradas y los estudios especiales (suelos y polen), aportan nueva información sobre las antiguas pautas de asen­tamiento, rnanejo y aprovechamiento del medio ambiente. Asimis­mo, se pudo ampliar y complementar la distribución espacial de formas y decoraciones cerámicas de la ocupación mas tardía en la cordillera Central y posibles relaciones con la vert iente occidental de la misma cordillera (región Quimbaya) y valle del Magdalena, al norte del departamento del Tolima, incluyendo las estribaciones de la cordillera Oriental.

Investigaciones arqueológicas, con un enfoque regional, como la presente, proporcionan importante información que ayuda a mejorar nuestro conocirniento del pasado prehispánico de la zona, a través de la reconstrucción de un proceso histórico, con una di­rnensiól"l ternporal, de más de d iez rriil años de historia precolombi­na en el departamento del Tolima. lguahncntc, son un aporte ten­diente a desnütificar las imágenes impuestas por la historiot,rrafia tradicional, referente a un pasado prehispánico cuya antigüedad se rem.onta a l período de la conquista y colonia cspal''lola; época en la cual surgieron representaciones fantásticas para, j\tstificar el exter­minio de los habitantes aborígenes (léase Pijaos y otras parcialida­des) , de la cordillera Central en el Tolima y que todavía perduran en el imagin ario colectivo.

Page 13: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Capítulo 1

LA REGIÓN

l. LOCALIZACIÓN GEOGRÁFICA

La región objeto de la presente investigación está sitt.tada en la parte alta, vertiente oriental de la cordillera Central, en el departamento del Tolima y pertenece jurisdiccionalmente ál municipio de Roncesvalles, cuya cabecera municipal está ubicada a los 4o O 1' de Latitud No1te v 75° 32' de Longitud Oeste (lGAC 1980~ 1386), (Foto 1 ). ·

El municipio de Roncesvalles se ubica al suroeste de l departa­mento del Tolima. limitando por el norte con l.as rnunicipalidades de Rovira y Cajamarca. por el oriente con Rovira v San Antonio, por el sur San Antonio, Chaparral y al occidente con los departa­mentos del Valle de l Cauca y Quindío (lGAC 1980: 1386; Polanco 1995: 33), (Fig. 1 ).

2. EL MEDIO NATURAL

El territorio de Roncesvalles en toda su extensión es montaJioso v tiene un área de 778 Km~, distribuidos entre los pisos térmicos: Medio 1.03 Kmz (13.2<Yu), Frfo36 1 Km:.! (46.4%) v Páramo 314 Km·1 (40.4%) . (lGAC 1980: 1386; Castañeda 1982). ·

El área ob jeto J e estudio arqueológico sólo ha comprendido el piso biocl imático frío, que corresponde con el típico Bosque de N iebla y en él se distinguen dos biozonas o formaciones vegetales. La prime­ra de ellas es el Bosque Húmedo Mont3no Bajo (BH-MB), que se distribuye entre los 2000 y 3000 msnm; se caracteriza por una biotemperauua entre los 12 y los 1 SOC, un promedio anual de lluvias entre 1000 y 2000 mm anuales. La segunda formación, presente en la

Page 14: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

16 EXPLORACIONES AI<QUEOLÓC ICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

E

~

]! . J . u

::

e

J ·:.

Page 15: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LA REG10N 17

zona explorada, es el Bosque muy Húmedo Montano Bajo (Bmh-MB), que se localiza entre el área de Páramo y la aJHerior formación , en una franja altitudinal que varía de 1900 a 2900 m.snm con temperaturas que van de t2 a 18oC y una lluvjosidad anual de 2000 a 4000 mm (Polanco L 995: 34 a 39; Espinal y Montenegro; l963), (Fig. 2).

La Topografía varía desde lomas onduladas con suave relieve y cimas planas. hasta montañas escarpadas con fuertes pendientes. La vegetación nativa ha sido fuertemente intervenida y se le halla ubica­da en reductos, dentro de las áreas agropecuarias y en zonas de difícil acceso, donde se observan variadas especies arbóreas entre las cuales sobresalen los robledales (Quercus Humboldtii) y la palma de cera (Ceroxylo n Quindiuen se) o árbol nacional, que le dan un contraste muy característico al paisaje de la región de Roncesvalles. Paisaje que tiende a desaparecer debido al uso indiscriminado de la palma de cera. dado que se usa para hacer cercas. canales de agua, construcciones de viviendas, encierros para ganado y huertos, alinderamientos de casas en poblados y encienos de patios , pero sobre todo la explotación de cera. utilizada como fuente de energía. para el consumo de los habi­tantes de la región. (Polanco 1995: 23-40).

Roncesvalles junto con otros municipios del Tolima en la vertien­te oriental de la cordillera Central corno: lbagué. Cajamarca, Rovira y Santa Isabel, son portadores de reservas del árbol nacional denomina­do palma de cera, las cuales constituyen una riqueza de biodiversidad tan especial que constituyen patrimonio de carácter universal, de ahí lo importante de su preservación . (Polanco 1995: 23-40).

La vegetación nativa, puede alcanzar alturas elevadas con riqueza de especies, lo que genera una biodiversidad tanto en la tlora como en la fauna existentes; las zonas no alteradas aun cuentan con especies variadas de líquenes, orquídeas, musgos. bromelias y aráceas, que cre­cen entrernezcladas con el bosque. (Espinal y Montenegro 1963; Polanco L995).

Las áreas despejadas de bosque natural se aprovechan en su ma­yoría con potreros de pasto para una ganaderíit extensiva de muy baja productividad en detrimento de la zona forestal. En el Tolima i!Oio el 30% de las tierras de cordillera, que corresponden a bosques nativos. son aptas para la agricultura y la ganadería (Corpes 1986: 55).

Page 16: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

18 EXPLORACIONES ARQOEOLOGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

3. GEOLOGÍA Y GEOMORFOLOGÍA

La geología de la región la constituyen grandes 11údeos de rocas ígneas y metamórficas recubiertas por mantos de cenizas volcáJ1icas pertenecientes a los períodos geológicos Triásico- Jurásico y Cretáceo; los sedimentos del Cuaternario están representados por diversos de­pósjt.os de aluviones recientes (lGAC 1988). Los suelos son bien drenados, profundos y con alta fertilidad (Castat1eda 1982).

Geográficamente sobresalen los Páramos de Barragán y Cumbarco, el alto de Tribuna, el cerro Argelia, la cuchilla del Valle, el cañón de la India v la depresión de la Yerbabuena, paso natural montañoso, por dond.é desciende el río Cucuana y que ha perrnit.ido la comunicación con la vertiente occidental de la cordillera Central (Barragán y Santa Luda, en el departamento del Valle del Cauca y Pijao en el Quindío), (lGAC 1980: 1386; Castañeda 1982) .

Roncesvalles pertenece a la red hidrográfica del sur del Tolitna (cuenca del río Sa.lda t1a) ; los principales anuentes son el Cucuana, Cucuaníta, Chilí. San Marcos y otras corrientes menores (Castai'leda 1985).

4. ECONOMÍAREGIONAL

Roncesvalles al igual que la mayoría de los municipios del Tolima, que están ubicados en las partes mas altas de la cordillera Centra l, no tienen mayor reJev<:Ulcia en el desarrollo económico del depa1iamento: en cornparación con los del Val le del Magdalena donde se observa un notable crecimiento de la agricultura industrial mecanizada. Esta dife­renciación es debida a la f<dta de vías de comunicación, procesos des­centrali zadores y cambios en los prograrnas políticos (Espinosa et al. 1996: 136).

La base económica de ésta región es la ganadería y en segundo renglón se encuentra el cultivo de papa el cual se utiliza para la rota­ción de potreros; además existen otros cultivos transitorios como fri­jol, maíz, algunas frutas, legun1bres y hortalizas que no son muy re· presentativas en la economía de la región (C01·pes 1986:47) .

Page 17: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LA REGLÓN 19

Este panorama económico podría cambiar gracias a la tendencia de " ... transformación de los sectores privados, público y político para continuar el desarrollo económico y social del Tolima, que en el marco de la apertura económica, tiende a consolidarse mediante la integra­ción regional con los departamentos de Caldas, Quindfo y Huila" (Es­pinosa etal. 1996~ 135).

Existen otras perspectivas de crecimiento econón1ico para la re­gión como es la apertura de la carretera Roncesvalles- Buga. Esta vía comunicará el Tolima con el valle del Cauca y hará parte esencial de la troncal del pacífico: Villavicencio - Bogotá - Buenaventura; tcunbién servirá para unir al occidente colombiano, de una forma mas directa, con el mercado venezolano.

Page 18: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Capítulo 11

ANTECEDENTES ARQUEOLÓGICOS

Debido a su privilegiada posición geográfica el departamento del Tolima es una región de suma importancia para contribuir a compren­der los desarrollos prehispánicos de otras áreas culturales como el Va­lle del Magdalena y el suroccidente colombiano. Sin embargo, en el contexto regional , es una de las zonas menos estudiadas arqueológicamente. En general , la investigación arqueológica en el Tolima ha sido de carácter ptmtual, esponidica y st.l jeta más a criterios personales que institucionales.

Las investigaciones arqueológicas en el actual departamento del Tolima y en regiones periféricas, se iniciaron en la década de los cua­renta. Los investigadores Gerardo Reichel-Dohnatoff y Al ida Dussán, en su trabajo de campo en el valle del río Magdalena resaltaron la importancia de la dispersión espacial de urnas funerarias a lo largo de dicho valle. En Arrancaplumas (Honda- Tolima) identificaron vasijas fitamorfas y decoración aplicada en forma de racimo de "chupas", (un fruto silvestre de la región) ( 1944); posteriormente, Reichel-Dolmatoff ( 1986) relacionó esta cerámica con la tradición Zambrano (costa Cari­be colombiana) y la ubicó dentro de la etapa Formativa tardía; tam­bién relacionó este tipo de cerámica con la cordillera Oriental (Guaduas, Tocaima y la Sabana de Bogotá), específicamente con el tipo Mosquen\ Rojo Inciso y la fase Machalilla de la costa pacífica ecuatoriana.

En el municipio del Espinal (Tolima), los investigadores Julio Cesar Cubillos y Vktor Bedoya (1954) llevaron a cabo excavaciones en un sitio de enterramiento; luego de analizar los materiales, conclu­yeron que algunas características de fonna y decoración de esta cerá­mica se relacionaban con otros est ilos de las riberas del río Magdale­na, especialmente los localizados entre el sitio la Jabonera y Puerto Wilches (Santander) .

Page 19: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

22 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

En 1976 Marianne Cardale realiza excavaciones en el nordeste de la población de Pubenza, (Tocaima - Cundinamarca); dentro del ma­terial destacó la presencia de tres t ipos cerámicos: Pubenza Rojo Ba­ilado, Pubenza Policromo y la cerámica con impresión de estera y pro­pone que dichos estilos pueden pertenecer a una tradición que se de­sarrolló entre el yalle del Magdalena y la parte suroccidental de la Sabana de Bogotá (Cardale 1976). A finales de esta década Gonzalo Correal realizó una prospección a lo largo del río Magdalena ubicando sitios del perfodo precerámico y propone la existencia de una tradición de Chopper para dicha región (Correal 1977).

A partir de la década de 1980 la Fundación de Investigaciones Al·queológkas Nacionales- FlAN -del Banco de la República ha veni­do auspiciando una serie de prospecciones y excavaciones (en suma­yor parte trabajos de grado), en diferentes partes del Tolima y en zo­nas circunvecinas con lo cual se ha dado tm nuevo énfasis a la arqueo­logía regional y se ha generado un mejor conocimiento acerca de la historia prehispánica de dos áreas específicas:

l. La zona plana del valle del Magdalena y la vertiente occidental de la cordillera Oriental

Los arqueólogos Castaño y Oávila ( 1984) efectuaron excavaciones en Jos sitios Mayacas y Colorados (Puerto Salgar - Cundinamarca); excavaron pisos de vivienda, basureros, talleres líticos , cementerios nucleados, etc., datados en el siglo XII d.C. Con relación al material cerámico, identificaron un complejo Alfarero Tardío que denominaron Colorados. el cuál se caracteriza por su función doméstica y funeraria y una decoración con motivos aplicados - modelados , incisa intermi­tente, incisa simple, digital corrugada y excisa.

Fernando Á vi la ( 1985) realizó una prospección arqueológica en las márgenes del río Venadillo (Tolima), en el municipio del mismo nombre. El análisis del material cerámico le pennit i.ó establecer rela­ci.ones con la cerámica de Pubenza. Mayacas y Colorados, Espinal y el horizonte de urnas funerarias del Valle del Magdalena. En la misma época Cecilia de H ernández adelantó exploraciones y excavaciones en jurisdicción de Armero - Tolima; ubica los materiales como pertene­cientes al formativo tardío ( 1978).

Page 20: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ANTECEDENTES ARQUEOLÓGICOS 23

En el municipio de Guaduas (Cundinamarca) , las arqueólogas Cecilia de Hernández y Carmen Cáceres ( 1989) excavaron un basme­ro (sitio Guaduero) el cual tiene dos dataciones, una por radiocarbono (siglo IIl a.C.) y otra por termoluminiscencia (siglo V d. C.). Dentro del material cerámico recuperado identificaron cuatro tipos cerámicos~

Guaduero Liso, Guaduero Aplicado, Guaduero Pintado y Guaduero Inciso. El Guaduero Aplicado se caracterizó por vasiías con decoración aplicada en forma de cresta (son los mismos en forma de racimos de ''chupas" descritas por Reichel-Dolmatoffy Dussán). concha y botón.

Trabajos más recientes como los de Peña ( 199 J ), Mendoza y Quiazua ( 1990) han hecho más evidentes las relaciones culturales que existieron entre los grupos que habitaron el Valle del Magdalena y el altiplano Oriental a Jo largo de la cuenca del río Bogotá.

Desde 1989 Arturo Cifuentes ha realizado una serie de investiga­ciones en los alrededores del rnunkipio de Honda. Los reconocimien­tos. prospecciones y excavaciones en ambas márgenes del río Magda­lena, le han permitido identificar dos períodos diferentes caracteriza­dos por su material cerámico: El Formativo Tardío (en Arrancaplumas y el río Sabandija) y el período tardío cercano a la Conquista (quebra­da El Perico) , (Cifuentes 1989, 1991 , 1993).

En Arrancap.lumas obtuvo una fecha del siglo I a.C. e identificó dos grupos cerámicos denominados A y B. El grupo A presentó simili­tudes en formas y diseños con la cerámica de Guaduero y. especial­mente, con el tipo Guaduero Aplicado: Platos planos, macizos, platos pandos, cazuelas, bases trípodes. copas y vasijas aquilladas (con bor­des evertidos y apliques en forma de concha v cresta), botellones. apli­ques y figurinas (Cifuentes 1991, 1993).

El grupo B se caracterizó por diseños acanalados en forma de espiral y apliques mamilares, formas como cuencos hemisféricos , vasi­jas campaniformes, cazuelas y olfas subglobulares o con hombro. Se­gtm dicho investigador, este material guarda relación con la cerámica de Zambranoy Malambo (bajo Magdalena). Además comparte carac­terísticas con el tipo Guaduero Inciso (Cifuentes J 991 , 1 993).

En el río Sabandija (hacienda Bremen, la cerámica corresponde a la fase media (siglos lX a. C. a II d. C.) del Período Herre ra de la

Page 21: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

24 EXPLORACIONES ARQUEOLOGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Sabana de Bogotá (Formativo Tardío), específicamente a los tipos M osquera Roca Triturada, Zipaquirá Desgrasan te T iesto y Mosquera Rojo inciso. También se encontró cerámica del tipo Guaduero Liso (Cifuentes 1993).

En síntesis, C\fuentes propone que el grupo A es originario de la Saba11a de Bogotá y de sus estribaciones hacia el Valle del Magdalena. Con respecto al tipo Mosquera Ro jo Inciso considera que "puede pro­ceder de otra región arqueológica, como es el sur del Alto M agdalena, donde existe una cerámica similar que pertenece al período Formativo ( 1 100-200 a. C.)'', (Cifuentes 1993:50).

Las investigaciones más recientes realizadas por Cif\tentes ( 1994) en el rnunicipio del Guama- Tolima, específicamente en la vereda La Chamba, le permit iemn excavar un sitio cerámico (fechado en 1640 d . C.). Tecnológicamente identificó dos grupos cerámicos denominados Chamba Rojo PuJido y Chamba Café Presionado; este último es simi­lar al tipo cerámico Chaparral Café Presionado, descrito por Chacín ( 199 1, L 995) en la cordillera Centrai (Chaparral), el cual se caracteri­za por tener decoración presionadn t riangular sobre el hombro y el labio de algunas formas cerámicas (Ci fuentes 1994).

En el departamento del Tolima a partir de la década de los 90, se han adelantado estudios arqueológicos de rescate. financiados por el estado y empresas privadas. buscando cubrir extensas :\reas geográfi­cas para llevar a cabo proyectos de extensión eléctrica y redes de hi­drocarburos. Entre ellos se destaca la prospección del corredor proyec­tado para el Gasoducto Centro - Oriente, por toda la zona del Valle medio del río Magdalena, entre Gualanday (Tolima) y Barrancabenneja (Santander) , (JCAN - ECOPETROL 1995).

A partir de dicha exploración se excavó el sitio Pi pintá ll , locali­zado en cercanías a la confluencia de los ríos Guarinó y Magdalena (la Dorada-Caldas) . Fueron encontrados dos pisos de ocupación; en el primero la cerámica es tardía (siglo VIl d.C.) y presenta las mismas características de la alfarería del complejo Colorados. El material de la pri mera ocupación tiene relación con la de los grupos ronnativos A y B descritos para Arrancaplumas- Honda (Gómez y Correcha 1995).

Otro sitio excavado recientemente fue San Felipe. localizado en cercanías de Mariquit·a. El materi al ce rámico pertenece ni período for-

Page 22: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ANTECEDENTES ARQUEOLÓGICOS 25

mativo y se relaciona estrechamente con los est ilos alfareros identifi­cados eñ la región de. Honda- La Dorada y con la cerámica tardía de la cordillera Central (Salgado et al. 1997).

2. La cordillera Central en el Tolima y regiones adyacentes

Los resultados de las investigaciones realizadas en la zona cordillerana del Tolima indican la presencia de dos grandes períodos de ocupación prehispánica a saber:

El precerámico todavía poco documentado; los datos cronológicos lo ubican entre el Holoceno Temprano y Medio (VIll - VI milenio a. p.) y podría alcanzar edades del Pleistoceno Terminal Presenta una tecnología lítica simple relacionada con la tradición precerámica pro­puesta para otras zonas del Surocddente (Cali tTia y el Valle Medio deJ río Cauca), señalando adaptaciones tempranas a las vertientes de las cordilleras andinas de Colombia (INCIVA 1995 ,1 996; INTEGRAL 1995; lNVlAS 1996; Munera s.f.; Munera et al. 1998; Rodríguez 1989, 1991 ,1995 y 1997; Salgado 1989y 1995;GneccoySalgado 1989).

El segundo período corresponde a sociedades agroa)fareras que se asenta,rofl en la región; los datos cronológicos indican la presencia de grupos agrícolas y cerámicos a partir del Siglo IV d. C. hasta los siglos XVI y XVII de nuestra era (Cubillos 1945; Rodríguez 1989, 1990 y J 991; Chacín J 995; Cifuentes 1994). Sin embargo, se desco­noce en qué momento se inició esta ocupaciórí y es de suponer que la misma comenzó en el primer milenio antes de Cristo.

Los arqueólogos que han trabajado recienternente en la zona re­conocen dos estilos alfareros con materiales cerárnicos, supuestamen­te relacionados. El primero de ellos, ha sido propuesto por Rodríguez ( 1989,1990 y 1991) para la región de Herrera y Chaparral y está aso­ciado a fechas del siglo IV d.C. EL segttndo se ha documentado a partir de las excavaciones realizadas en la región de Chaparral por Cubillos ( 1945 ), Rodríguez (1989, 1991 ), Chacín (1991 , 1995) y Cifuentes ( 1994 ); cuenta con fechas tardías que lo sitúan entre los siglos XV y XVI d.C. Para Chacín, la cerámica se caracteri za por una decoración presionada triangular denominada, Chaparral Café Presionado o Chamba Café Presionado (según Cifuentes). Ttadicionalmente estos rnateriales culturales han sido asignados como pertenecientes a la et-

Page 23: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

26 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

nia Pijao, lo cuaJ no deja de ser una hipótesis que espera ser confron­tada a través de investigación etnohistórica y arqueológica en la zona.

En la región del sur del Tolima también se ha documentado la presencia de un estilo de metalurgia y una cerámica (unas pocas vasi­jas enteras y bordes de cuencos) que presentan semejanzas estilísticas y tecnológicas con la orfebrería y la alfarería de la ocupación Yotoco de la región Calima, en la cordillera Occidental )' Valle del río Cauca (Cubillos 1945; Rodríguez )989 y 1991; Chacín 1995),

Hacia la parte media de la cord illera Central, Arnold Tovar ( 1981) adelantó exploraciones y excavaciones en el calión del rio Anaime (Cajamarca- Tolirna). Por sus características técnicas y estilísticas (pas­ta. formas, decoración , tratamiento, etc.) la muestra cerámica recolec­tada pertenece al período tardío; sin embargo la fecha de radiocarbono (l ii milenio a.C.) asociada a dichos materiales no corresponde con ellos y debe hacer parte de un evento natural.

Para la década de los 90 en la zona central de la cordillera havun incremento de tesis de grado, de diferentes universidades. Alvaro Osorio ( 1992), adelanta exploraciones en el Líbano- Tolima y Fernando Ruiz ( 1994) prospecta la vertiente oriental de la cordillera en el parque de Los Nevados; estos trabajos describen pautas de asentamiento prehispánicas y materiales arqueológicos de la ocupación tardía en ambas vertientes de la cordillera.

Recientemente Daniel Ramírez ( 1996), explora la cuenca alta del río Combeima, tesis que junto con la de Barrero, Ramírez y Rivera ( 1997), también adelantada en el municipio de l bagué (sitio La Martinica , montañas que circundan el valle de Las Lanzas) , señalan la existencia en la región de pautas de asentamiento y de materiales cerámicos que corresponden con la ocupaciÓTl tardía de la cordi llera Central en el Tolima; así como la presencia de cerámica relacionada con los esti los del Cauca Medio (Quimbava Tardío), de la otra ver­tiente cordillerana.

Page 24: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Capitulo lll

METODOLOGÍA

La metodología utilizada para el desarrollo de la investigación tuvo en cuenta tres fases de trabajo: Campo, laboratorio e informe final.

Para este efecto se contó con un equipo humano conformado por: un investigador Principal, un asistente de investigación. un arqueólogo, tres auxiliares en campo. un gttaquero y estuchan tes del Departamento de Cien­cias Sociales (Facultad de Ciencias de la Educación, Universidad del Tolima).

l. CAMPO

1.1. R econocimiento y Prospección

Con el fin de dar inicio, en el museo antropológico de la Univer­sidad del Toli rna , a un programa de investigación arqueológica en la cordillera Cent ral (departamento del Tol ima), se realizó un reconoci­miento arqueológico en los municipios de San Antonio de Calam1a y Roncesvalles, durante el mes de octubre de 1995.

En San Antonio se tuvo conocimiento de un sitio en donde . al construir unos estanques para cu ltivos piscicolas. aparecieron una serie de elementos arqueológicos. Fue posible reseñar una industria lítica en cuarzo conformada por desechos de talla y numerosos cantos irregulares sin modificaciones humanas; también se recogieron unos pocos dese­chos y un núcleo lascado en Chert (Fig. 32: 3), pero sin duda el artefacto más sobresaliente fue el que encontraron los moradores del lugar: se trata de una azada o instrumento con doble acanaladura de enmanga· miento. Este tipo de artefacto se ha convertido en un indicador material de ocupaciones precerámicas tempranas en vari ados a111bie ntes del suroccidente colombiano (Ver Fig. 31 e lndice de figuras). Este reporte se hace a manera de antecedente para futuros trabajos en la zona.

Page 25: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

28 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

En general el reconocimiento permitió identificar un mayor poten­cial arqueológko en la jurisdicción de Roncesvalles: área que fue esco­gida para adelantar el presente proyecto.

La prospección se llevó a cabo en tres temporadas de campo, du­rante los me.'>es de juJio- Agosto de 1996, Noviembre- Dicien1bre del mismo ai\o y Agosto de 1997. La exploración se realizó teniendo en cuenta las cuencas hidrográficas y zonas aledai1as de los ríos Cucuana y Cucuanita, en veredas cercanas a la cabecera municipal. El procedi­miento utilizado consistió en recorridos generales en vehículo y acaba­llo, permitiendo seleccionar algunos predios que posteriormente fueron caminados detenidamente.

Los procedimientos técnicos que se adelantaron en cada pnsihle sitio comprendieron recolecciones superficiales. pozos de sondeo, de prueba y sondeos con barreno y mediacaña.

1.2. Excavaciones

Del resultado de la prospección se identificaron y excavaron sitios de asentamiento prehispánico en terrenos de las fincas:

- Patio Bonito: Dos rasgos an¡ueolúgicos. - Buenos Aires: Un corte de 3 x 1 m. un rasgo arqueológico y una tumba. - La Granja; Tres cortes desde 1 x 2 m hasta 1 x 5 m y un rasgo arqueológico.

- El Jordán : Quince cortes desde 1 x 1 m hasta 1 x 3 m y un rasgo arqueológico.

Todas las excavaciones se realizaron en plataformas y terrazas de vivienda, se procuro excavar áreas donde los sondeos indicaron mayor presencia de materiales culturales (bordes y caída de las te­rrazas) ; igualmente, se excavaron pozos de diferentes formas y ta­maños que contenían una mayor presencia de actividad antrópica (rasgos arqueológicos). Los trabajos en El Joi·dán consistieron en una serie de trincheras que cortaron el sitio sobre su eje central , desde la parte posterior ha~ta su caída final en el frente de la plataforma.

En todos los sit i.os el proceso de excavación se reali2'.ó en niveles convencionales de lO ó 20 cm de acuerdo a la presencia de materiales culturales y siempre teniendo en cuenta los cambios estratigráficos na~ turales o los producidos por actividades humanas. Al final de los

Page 26: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

M ETODOL.OGiA 29

hori zontes culturales se profundizaron las excavaciones hasta los sue­los parentales, con el fin de conocer mejor los procesos de formación de cada sitio.

Los materiales arqueológicos fueron debidamente empacados y rotulados al iguaJ que las muestras de carbón , suelos (para el análi sis de polen). Se realizaron levantamjentos topográficos detallados de los sitios donde se efectuaron las e...xcavaciones.

Toda la información obtenida fue registrada en diarios de campo fonnularios, dibujos a d iferentes escalas y fotografías que ilustnm los diferentes procesos de prospección y excavación. En general la fáse de campo tuvo tma duración de sesenta y cinco días.

2. LABORATORIO

Al finalizar cada temporada de campo inmediatamente se rea­lizó la correspondiente etapa de laboratorio con el propósito de pro­cesar y analizat los materiales y no dejar acurnulado este t rabajo para el final del proyecto. La fase de laboratorio contó con un grupo de apoyo conformado por auxiliares. monitores. dibujante. analista de sistemas y especialistas en diferentes áreas relacionadas con la presente investigación.

2.1. Análisis de los !vlateriales Cerámicos y Líticos

La totalidad de los materiale,o; obtenidos fueron inicialmente la­vados. Una ve.z concluido el proceso de lavado y secado se procedió a marcar todos los elementos con un código que consistió en las inicia­les del municipio (Roncesvalles = R C) , más un número único y con­secut ivo para cada elemento, pata un total de 3694 elementos , ar­queológicos (3021 fragmen tos cerámicos y 673 líticos). Cada uno fue registrado en un libro de inventario donde se hizo una breve descrip­ción del mismo.

Una vez finalizada la marcación e inventario , se procedió a reali­zar el estudio y clasificación de los materiales. Para la cerámica se esta­blecieron gn1pos a partir de un rasgo sobresaliente corno es el color del bano (Llanos y Duran 1983; Salgado 1986 '! 1989). Para el análisis de

Page 27: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

30 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

la cerámica también se tuvieron en cuenta las características técn icas de la pasta (desgrasante, textura y cocción); el tratamiento superficial (grado de erosión, pulido, manchas de hollín); orientación de los bor­des, reconstrucción de formas de vasijas y técnicas decorativas: espesor de las paredes y diámetros.

Para tal propósi~o se disefió una ficha en la cual se consignó toda la información descrita anteriormente, junto con los datos de proce­dencia de cada elernento. La información de las fichas fue procesada en una base de datos (Microsoft Access). El análisis de estos datos en la base, en general, permitió establecer los rangos de mayor popularidad en el color del baño, formas , decoraciones etc., para los grupos cerámicos establecidos.

Los artefactos líticos se clasificaron siguiendo algunos parámetros ya establecidos taJes como: materia prima y categoría morfo-funcional (Correal y Van der Hammen 1977; Correal 1979, 1990; López 1991 ).

2.2. Ot1'as Muestras

2.2.1. Carbón Vegetal

Las muesuas de carbón provienen de las diferentes excavaciones y de los suelos procesados en laboratorio por medio de flotación. Este carbón fue cuidadosamente limpiado, seleccionado y rotulado.

Se diseñó un formulario donde se consignó toda la infonnación de las muestras de carbón obtenidas en excavación y flotamiento: nú­mero de muestra, sitio, procedencia, tipo de muestra, litros de suelo flotados , peso y análisis a realizar.

2.2.2. Suelos

Se tomaron muestras de suelos para tres tipos de análisis diferentes. El primer tipo fue el estudio de caracterización de suelos y fósforo total.

En los sitos excavados también se recolectaron suelos para ser flotados y obtener más muestras de carbón y restos botánicos. El tercer tipo de muestra fue utilizado para el análisis palinológico.

Page 28: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

METODOLOGÍA 31

2.2.3. Macrorestos

Dentro de las muestras de suelos flotados se recuperaron granos y fragmentos de tusas de maíz; las cuales fueron limpiadas mecánica­mente y con xilol, posteriormente se consolidaron con paraloid.

3. INFORME FINAL

En la fase final de la investigación se integraron todos los estudios especiales (paisajes, suelos , polen y radiocarbono), ju11to con los datos arqueológicos; una vez condensada y analizada toda la información, se redactó el informe final

Page 29: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Capítulo IV

LA EXPLORACIÓN ARQUEOLÓGICA

l . L.l\ EXPLORACIÓN

El objetivo general del proyecto era el de localizar y evaluar los recursos arqúeológicos de la región de Roncesvalles, con el propósito de obtener información que se pudiera relacionar con la historia cultu­ral de las sociedades prehispánicas que habitaron las vettientes de la cordillera Central, en el actual departamento del Tolima. Por lo tanto, a nivel metodológico se tea! izaron una serie de prospecciones con el fin de localizar sitios arqueológicos y posteriormente adelantar excavaciones parciales en los asentamientos más representativos.

En cada posible sitio arqueológico se hicieron recolecciones super­ficiales de materiales cerámicos y líticos (si eran observados en superfi­cie) y pozos de sondeo, a través de todo el sitio, para detenninar el tamaf\0 del n1ismo, la estratigrafía, la densidad y profundidad cultural del asentamiento.

Con el propósito de generar los resultados de terreno se efectuaron cuatro temporadas de campo, la primera de qL¡jnce días de prospección (entre julio y agosto de 1996), la segunda de veinte días de prospección y excavaciones (entre noviembre y diciembre del mismo ai1o), la tercera de veinte días (en agosto de 1997) y diez días en febrero de 1998 con el fin de desarrollar las últimas excavaciones.

Inicialmente, se realizó un recorrido en vehículo con el fin de ha­cer un recollocitniento general del paisaje de la región y observar las posibilidades arqueológicas del mismo para determinar, con una ma­yor aproximación, en qué áreas se debería centrar el trabajo de campo; razón por la cual se adelantó un reconocimiento de la cuenca del río Cucuana a lo largo de su angosto valle y del suave cañón que forma hasta la depresión de La Yerbabuena a unos 3 700 msnm, en los límites con el Valle del Cauca.

Page 30: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

34 EXPLORACIONES ARQUEOLÓG ICAS E LA CORDILLERA CE TRAL

Foto l. Panorámica de la cabecera municipal de Roncesvallcs1 Tol ima.

Foto 2. Vista panorámica de la cuenca del rio Cucuana.

Page 31: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LA EXPLORACIÓN ARQUEOLÓGICA 35

En general, La Yerbabuena es una zona con un paisaje de tierra fr(a y de páramo donde no fue posible determiJ\ar rasgos arqueológi­cos sobre el terreno (Tambos), si n embargo por sus suaves caracterís­ticas topográficas es tma ruta natural que fácilmente permite la comu­nicación entre los dos lados de la cordillera Central (Foto 2).

De la misma fom1a se recorrieron parte de las veredas San José, San Marcos y Dinamarca, tomando el carreteable que de Roncesvalles conduce al corregimiento de Santa Helena. Se recolectaron mater.iales superficiales (cerámica y líticos), en terrenos removidos por activida­des agrícolas actuales, en las fincas Orinoco, Curubera y Holanda. Al inspeccionar la tOpografía y el paisaje de las veredas recorridas fue posible observar, sobre las lomas, áreas planas con probabilidades de contener restos materiales de asentamientos precolombinos.

Finalmente, se visitaron las veredas El Diamante y El Mirador (localizadas al noreste de la cabecera municipal), región donde el río Cucuana se empieza a encaflonar profundamente y las lomas presen­tan un relieve mucho más inclinado, al igual que una transición a un área fisiográfica de clima medio. Las posibilidades arqueológkas en esta parte fueron muy pocas, por el paisaje tan accidentado.

Una vez finalizados los recorridos antes descritos y debido a difi­cultades de orden público y logístico , se decidió que IÓ mas prudente sería desarrollar los trabajos de exploración arqueológica en inmedia­ciones de la cabecera municipal de Roncesvalles, en diferentes predios que pertenecen a la cuenca alta de los ríos Cucuana y Cucuanita (Fig. 1). A continuación se presentan los diferentes predios que se prospectaron (Fotos 1 y 2).

1.1. Rosales, Londres y S iberia

La prospección arqueológica se centró al norte de la población, sobre una serie de lomas altas que bordean el pequei1o vall e y cañón del río Cucuana; la topografía se can~cteriza por ser desde suave hasta bastante quebrada. El primer predio explorado fue Rosales. antigua hacienda. hoy repartida en parcelas. Sobre las cimas y costados de las lomas; entre los 2.460 y 2.600 msnm, se observaron agrupaciones de áreas planas. desafortunadamente alteradas por labores agrícolas en las cuales no fue posible adelantar trabajos arqueológicos (Foto 3).

Jnmedü1tamente al noreste de Rosales se encuentran las hacien­das Londres y S iberia, las cuales también fueron objeto de una deteni ­da exploración arqueológica. Entre los 2.480 y 2. 700 msnm se obse r-

Page 32: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

36 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Foto 3. Relieve de lomas con cimas planas (Hac1endas Rosales y Londres).

Foto 4. Paisaje de alta montaña en la hacienda La :S1bena

Page 33: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LA EXPLORACIÓN ARQUEOLÓGICA 37

varon , sobre las Jomas, agrupaciones de plataformas artificiales de regular tamaño y terrazas naturales muy grandes (algunal' con un área mavor a los J 500 m'! ); varios de estos sitios conservan uno o más huécos grandes de anliguas actividades de guaquerín. En general, so­bresalen por la ausencia de un estrato o capa cultural sobre el área plana y de rellenos sobre los costados, ind icando que su función de­bió ser para actividades agrícolas o funerarias (Foto 4).

1.2. Buenos Aires

Posteriormente, los trabajos de prospección continuaron en la fin­ca Buenos Aires, donde se explor6 una loma cuyo filo rnás aJto se encuentra a una altura de 2.450 msnm, lugar donde se ubicó una gran teiTaza de forma serniovalada (terraza uno). Las diferentes pruebas rea­hzadas indican que este sitio fue modificado con cortes y rellenos arti­ficiales, conservándose un horizonte con elementos culturales sobre el borde de la terraza. Descendiendo esta lorna se encuentra un conjwHo de 19 plataformas o tambos de menor tanuu1o, formando un patrón de asentamiento disperso; de este grupo se sondearon ocho tJmbos (e n total se realizaron 14 7 pozos de prueba en toda la loma).

Los sondeos realizados en la parte baja de la loma sef1alaron que en esa zona tambjén se realizaron modificaciones a la topografía natu­ral, para acondicionar el sitio como área habitacional (terraza dos, Figs. 2 y 3; .Foto 5).

1.3. La Granja

La prospección arqueológica continuó en la finca La Granja, pre­dio adyacente a Buenos Aires (vereda San Marcos). Sobre el filo más alto de una extensa loma que baja al río Cucua11a (24 70 a 2360 msnm) , se identificó un patrón de asentamiento indígena -:onformado por g-ran­de~> plataformas artificiales (en algun~.ts hay huecos producto del sa­queo de Jos sepulcros) ven la zona de alturas medias se distl'ibuyen tambos o plataformas de menortamaño (ocho en tmal). Se pro~>pectaron detenidamente cuatro de ellos, de los cuales sobresale el codificado con el número t res por su gran tamaño (722 m1 de superficie) . por una pared posterior mayor a los 5 m de altura y por :Su buen estado de preservación (Figs. 2 y 8; Fotos 6. 11 y 12) . En general este yacimiento fue seleccionado para reali zar varios cortes arqueológicos con el fin ele poder documentar el período de construcción del mismo, por medio de cronología absoluta y tratar de buscar ocupaciones más antiguas.

Page 34: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

38 EXPLORACIONES ARQUEOLÓCJCAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

coNvt • c•o " rs LAOERAS -·- CAMINO

C CIMAS e::::> CASCO UII9AN0

SP Sub- PARJI.MO • CASA S

41'» AAU S AAOUEOLOGICAS

,_- I..IH[,3. FUIUGJlA~(.:A

"- RIO - O'I€:11QA.-,tl.

C'AI'ifo~T~RA.

Figura 2.

,,

L

z ¡----

rU(NT( IGAC f'Oi o o4f.o N° 160

RONCESVALLES-TOLIMA PlllOtltAPIA tiNUAL

ESCAl-A ! o tnoo ~ ----

Page 35: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LA EXPLORACIÓN ARQUEOLÓGICA 39

<

Page 36: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

40 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

1.4. El Jordán

El lindero entre las fincas La Granja y El Jordán corta una serie de cuatro planes o terrazas dispuestas sobre el filo de la loma (Figs. 2 y 8), en algunas hay huecos de gran tamaño que corresponden a las tumbas saqueadas a comienzos de este siglo. Es importante resaltar el trabajo de ingeniería y remoción de tierra hacia el frente de las terrazas, el cual permite obse_rvar e l corte de la pared trasera que en algunos casos alcan za alturas su periores a los 4 m (Figs. 2 y 8; Foto 6).

Sobre el costado oriental, a una dist ancia de 33 metros de este grupo de grandes espacios modificados se localizó otra terraza de gran tamaño (codificada con el número uno). Fue sometida a una rigurosa prospección. Se practicaron pozos y sondeos con mediacaña, los cua­les permitieron observar la estratigrafía y la forma como un relleno artificial cubrió parte del borde y del área plana deJ sitio. Por su buen estado de conservación y por la gruesa capa de relleno (70 a 80 cm de profundidad), este sitio se seleccionó para adelantar excavaciones par­ciales, por med io de cortes de diferentes tamailos (fotos 14 a 16). La parte baja de esta terraza es una loma de pendientes suaves, en la cual se observan pequeños y medianos sitios de vivienda esparcidos sobre los diferentes filos ; varios de ellos se sometieron a sondeos los cuales no reportaron horizontes culturales bien conservados.

1.5. Patio Bonito y El Reflejo

También , fue objeto de prospección la finca Patio Bonito, un pe­queño predio localizado en inmediaciones del casco urbano, al no· roeste del misrno; en este lugar se realizó una recolección superficial de materiales cerámicos con caracterfsticas burdas, revueltos con ties­tos delgados y finos, lo mismo que evidencias de guaquería en la parte mas alta y central del sitio, área donde se adelantaron excavaciones arqueológicas.

Otra de las fincas visitadas en cercanías del á rea urbana fue el Reflejo, en la vereda Cucuanita; se registró una tumba guaqueada, de la cual se recuperaron dos dijes en concha marina y un fragrnento de cristal de xoca (Fig. 30: 5 y 6). Se realizó una prospección con pozos de sondeo y una recolección superficial en un potrero recién arado. Este sector presenta una topografía de pequeí1a~ lomas con cimas pla­nas, donde no fue posible localizar mas tumbas.

Page 37: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

'

Foto 6. En Primer Plano. lomas de la Granja con plataformas de vivienda; en la parte superior, grandes terrazas artificiales.

1~ rr1 X

" r' o :::0 :> n o z :> :::0 o e rrl o r' o ()

ñ )>

.¡::. >--'

Page 38: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

fii(CA U. Olt.A.Uo.IA

_._... .-·--r .¡, ..-- ~

' . . •, :'

~~ ...

~-~ ~ . ... (t> ~~-~ $"'®~ .. ~~S~ Y!® ..... ~~~ ~'&* .. ·~fJl¡~

¡f.;; ~·

tr·~~: :t , .. · .;¡

\

'\ ' ' 1 1

t-.. r ¡ '

\\ ¡\

/ ·'

\. ,J , \~ ·-·--·-=

,-

4 •

\\-ff vil .. / ,.o

' ' 1

' 1

1 ' / .. ' 1 1

--..-·--·~-. 1·· ' ' .1iitl ,' 1 !• .~, / ~"

• ~ ~

~ S"< l? ~ ~· '~~ ~ P· ~-

• ~ '\ 1~ ~~o; · D

·~ w

&*

J•: J .r/ ..-

~..,.

0--'--a~•··

r/.,-•' -

/ ~RONC€SVALLES -TOLIMA · '*C4 IUliiOI 4 11111 ~ LEVA" TAfo!IEiffO TOPOGRAI'ICO

' f-SCAL-'.i •ot>~..-' \ ., ... '•)

_.,;ftJ ............, P\.At:4f01llrii.A Dl ttAetlJIC:JoJ "-"" PitCHISPAMICA

/

. CONVENCIONES

~ ..r SV.oti<O ,.,. ........ eo • UNIO,ttD Dt UClVACIOfil

4 IU$GO AII:~OLOGICO

• PClO 0( SOHOtO

o TVtUA

#IIOVI .IIHTO fi'A$)1/0

Figura 3

,p. lv

rrl >< -o S ;;;; )>

o o z rrl (f)

)> ;;;; o e m o r o C)

ñ )> (f)

m z r >

8 :;;:j (j

e= r m ;:::l

> n c:r1

~ :;:;i )> r

Page 39: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Capítulo V

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS

Finalizada la exploración se se leccionaron cuatro predios (Bue­nos Aires, La Granja. El Jordán y Patio Bonito) para adelantar excavaciones parciales con el fin de identificar depósitos arqueológi­cos no penurbados que permitieran contextualizar culturalmente los materiales obtenidos en los sondeos y recolecciones superficia les; conseguir muestras de carbón bien asociadas para datación y para aurnentar y refinar la secuencia cronológica de la cordillera Central en el Tolirna; así mismo, recuperar sedirnentos para anal izar la pre­sencia de planta:; a través de semillas (macrorestos) y polen.

Los anterjores objetivos tenían como propósito obtener infor­mación relacionada con los posibles cambios en los patrones de asen­tamiento a través del tiempo, definir los medios de subsistencia (for­mas de aprovechamiento agrícola del suelo) y tratar de tener una mavor claridad acere::\ de posibles desplazamientos d<.> grupos entre distintas regiones fisiográficas (la parte alta de la cordi llera Central y sus vertientes hacia el valle del Magdalena y a la región Quimbaya).

l. FISIOGRAFÍA GENERAL DE LA REGIÓN DE RONCESVALLES

La í'A>na está conforrnada por laderas erosionales (L), con algu­nas cimas res iduales; pendientes muy indinadas hasta escarpadas que permiten frecuentes rnovimientos masivos de los suelos. Las ci­mas se presentan subredonde<tdas (C), hasta subangulares con pen­dientes moderadamente indinadas hasta casi planas.

El paisaje es montai'loso cubierto por gruesas capas de ceniza volcánica que recubren rocas metamórficas e intrusivas. Los vallecitos

Page 40: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

44 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

son muy estrechos en V, de tipo fuertemente erosiona! (Fig. 2). El clima es frío y muy húmedo, se presenta la provincia climática del Sub - Páramo muy Húmedo (SP) donde la utilización de la tierra está muy restringida por las extremas condiciones cl imáticas.

Como se puede observar en la figura 2, la ubicación preferencial de las áreas arqueológicas está sobre las cimas subredondeadas, debi­do a:

- Posición dominante en el relieve.

- Suelos más profundos y estables.

- Mayores posibilidades para con.struccion,es con 1nenor esfuerzo de trabajo.

2 . EXCAVACIONES EN SITIOS DE ASENTAMIENTOS

2. 1. Buenos A ires

Den.tro de Jos precUos de la fi nca Buenos Aires se prospectaron dos terrazas y 19 plataformas o tambos, que fo rmaban un patrón de asentamiento disperso ubicado en una ladera erosiona) con una cima subredondeada, a una altura entre 231 O y 2450 msnm (Figs. 2 y 3; Foto 5).

La terraza denominada uno se localizó en la parte más alta de la ladera (2459 msnm), su forma es ovalada y su área total plana de 1600 m¿ . El lugar fue sondeado con 40 pozos, además se hicieron pruebas con barreno y mediacaña; por medio de esta prospección se localizaron dos rasgos arqueológicos y una tumba en el costado orien­tal de la terraza.

El rasgo uno es un pozo circular irregular con un diámetro de 90 cm y tma profundidad de 115 cm; la entrada del pozo se identificó a 40 cm en un estrato de ceniza volcánica amarilla revuelta. A 86 cm de profundidad el suelo tomó una tonalidad oscura (negra) '! aumentó notablemente el material arqueológico. Entre 90 y 1 15 cm se encontró una concentración de piedras de variados tamaños. en diferentes posi­ciones (horizontal vertical y oblicua), con presencia de desgaste y car-

Page 41: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS 45

PLANTA

OT-------------------------T .. . .., . . ., . ., ... .,.., ... . .. .. .. .. . ... . ., . . . . . .. . .. .., .. . -. ... ., .. . . • • "" • fl1 • • • • r • • •

- .40 ~JJlJJIWlWUll1UlliJJ11WlllllllllJillllWJJW..UillllJ!

-LOS L ____ __,~------- LOS

CORTE A-A

CONVENCIONES

~ AAICU

amJII1D MU II US

-.to

Figura 4

RONCESVALLES-TOUMA PINCAS IUENOS Al"ll - LA UAN.IA

TERRAZA 1

RASGO ARQOEOLOGICO 1

O •---•JO cm.

Page 42: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

46 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Foto 7. Proceso de excavación del Rasgo Arqueológico Uno. Terraza Uno (Buenos Aires - La granja).

Foto 8. Excavación del Rasgo Arqueológico Dos. Terraza Uno (Buenos Aires).

Page 43: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS 47

bón adherido (dos fragmentos de manos de moler), asociadas a peda­zos de barro quemado y fragmentos cerámicos (Fig. 4; Foto 7) , entre ellos un borde con decoración incisa formando un achurado cruzado y muescas ttiangulares en una línea horizontal alrededor del cuello de la vasija1 (Fig. 28: 11. ; Lám. JI: 7). Además, se observó la presencia de abundante carbón vegetal en trozos grandes que permitieron conocer por rnedio de análisis de C 1

q la época en que fue hecha y rellenada dicha estructura: La muestra enviada a laboratorio (37 gr.) se tomó del nivel l 00 - liS cm de profundidad. El resultado proporcionó una fe­cha del siglo X d.C. para la ocupación de este sitio (930 :t 60 d. C.; sin calibrar, Beta- 1 11973).

lgualn1.ente, el rasgo dos es un pozo de forma cuadrada de l 00 cm de lado que se evidencio desde los 40 cm de profundidad. descendien­do hasta 116 cm en total. El relleno estaba compuesto por ceniza vol­cánica revuelta de color café - amarillenta, el cual contenía algunos fragmentos cerámicos y abundante carbón; este relleno penetra en el horizonte de diabasa roja entre 95 y el piso final (a 1 16 cm); en estos últimos 21 cm, sobre el extren10 nororiental del pozo se encontró una pequeí'\a acumulación de partes de una misma vasija (Figs. 5 y 26: 1; Fotos 8 y 9).

Con relación a la finalidad que pudieron tener estas estructuras verticales se ha descartado la posibilidad de que fueran depósitos de basuras por el poco y clasificado material arqueológico que se encon­tró en el interior de los mismos. Por el contrario, la alta cantidad de grandes pedazos de carbón podrían corresponder a una actividad pri­maria, como un fogón hecho bajo 1a superficie con el fin de preservar el fuego, de los fuertes y fríos vientos; pues el sitio se localiza en 1a cúspide de una loma.

En esta terraza también, se excavó una pequeña tumba de pozo con cámara lateral , orientada en dirección oriente- occidente; el inicio del pozo de forma rectangular (94 X 1 OOcm), se detectó a 50 cm de profundidad; descendiendo hasta 140 cm. Ala entrada de la cán1ara el piso se profundiza fonnando una zanja ovalada de 25 cm de ancho por 35 co1 de espesor que fo rma una grada, hasta ll5 cm, separando el

Ce,·ámic.a ton esw s rasgos decorativos hn sido dcnomi11ada Tm:aima inciso y fue reponarl;.J po r Merui.ola v Quiazun ( 1990) en la cut:ntil del rín Hogolá y en In región del Gu:uno pOI' Cifuente-~ ( 1 994).

Page 44: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

48 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Foto 9. Rasgo Arqueológico Dos. Terraza Uno (Buenos Aires).

Foto 10. Pequeña tumba de pozo con cámara lateral (Terraza Uno. Buenos Aires- La granaja).

Page 45: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

A

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS

PLANTA

\ O ~•'' vv-. . .,~.,, ...

" • "' .., , • .., 'f ~ f .., • .. "' ., " . ... ... ...

- . 4 3 !llllJlilUllWlJ.UJllU1Ulllill1lllll.lllllilllJUillUilll.WU

•1.13

CONVENCIONES

e:i:E!D 11 A 1 C !S

ammD IIUIIIUS

CORTE A·A'

Á - ··- . >.:· ·1.14

Figura 5

49

RONCESVALLES- TOLIMA FINCA BUENOS AIRES

TERRAZA 1

RASGO AROUEOLOGICO 2

Page 46: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

50 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGlCAS EN LA CORDlLLERA CENTHAL

r A

CONVENCIONES

~ AAICfS

cam:om HUMUS

PlANTA

CORTE A·ti

Figura 6

A'

RONCESVALLES - TOLIMA fiNCAS BUENOS Al !tU -LA GltAN.IA

TERRAZA 1

TUMBA 1

o 30 cm.

Page 47: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS 51

pozo de la cámara, cuyo piso se encuentra entre 120 y 129 cm de profundidad, la pequeña cámara es de forma ovalada (de 80 X 58 cm), (Fig. 6; Foto 10). Pudo comprobarse que tanto en el pozo como en la cámara no hubo ningún tipo de ofrenda ni restos en descomposición (pudre) que indicaran el enterramiento de una persona, lo cual penni~ te especular que esta construcción no fue utilizada.

Asimismo, sobre las pendientes de la loma se ubicaron 19 plata­formas de diversos tamai'los. cuyas áreas oscilan entre 28 y 464m2, de todas se sondearon ocho, por medio de 55 pozos, además de sondeos con barreno y n1ediacafla; las pruebas proporcionaron muy poco mate­rial y no indicaron la presencia de evidencias arqueológicas que a111erüaran labores más específicas en los sitios (Fig. 3; Fotos 5).

La terraza dos está ubicada en la parte inferior de la ladera entre 2350 a 2360 msnm y corresponde a la parte superior de una pequena colina que fue cortada y modificada; su forma es circular irregular y su área es de aproximadamente 2000 m2 (Fig. 3). En este sitio se realizaron pozos de prueba (26) y sondeos con barreno y mediacai'la, tratando de localizar tumbas y/o concentraciones de materiales arqueológicos.

Hacia la parte rneclia de la terraza (costado oeste) las pntebas indicaron un mayor número de elementos arqueológicos dentro de unos horizontes oscuros; por lo cual se realizó un corte de 2 x l m que pe.rnútió identificar seis horizontes (A. Ap1, ABp2b1, Ap.lb2, B y C; que presentaron características similares a los suelos hallados en la finca La Granja. por lo cual se tomó como referencia las descrip­ciones de los perfil es de este predio), (Fig. 7).

En general la cerámica proveniente de esta excavación fue poca y la mayoría (95%) se encontró en el tercer horizonte (ABp;¿b

1), algunos

fragJnentos alcanzaron a penetrar en el horizonte subyacente (Ap3b2).

La poca cantidad, posición (en su mayoría vertical) del material, así como la distribución de pequei\as partículas de carbón en el corte, indican que estos elementos provienen de los sitios de vivienda que se encuentran sobre la pendiente de la loma; los cuales fueron arrastra­dos por procesos de escorrentía hasta el área más cercana (la terraza 1 ). El gran t.'lmaf10 de la terraza, las modificaciones (cortes y aplana­mientos) que se realizaron , íunto con la ausencia de rasgos arqueoló­gicos (como tumbas, basureros, etc.) , asi como el e~>pesor de los hori-

Page 48: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

52 EXPLORACiONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

zomes ABp2b 1 (6Scn1) y Ap3b2 (85cm) y su tonalidad oscura permiten argumentar que en la terraza se realizaron prácticas agrícolas.

2.2. La Granja

La finca La Granja está ubicada entre 2360 y 2460 msnm y se caracteriza por un relieve de lomas (entre 2460 y 2360 msnm), con pendientes fuertes a medias que bajan al do Cucuana (cimas residuales laterales) ; sobre estas lomas hay una serie de terrazas y plataformas artificiales, conformando u11 patrón de asentamiento nucleado disperso (Fig. 8; Fotos 6, ll , J 2 y carátula).

Los trabajos consistieron en sondear dichos sitios y adelantar excavaciones en tres de ellos (tambos l, 3a y 3') con el objetivo de recuperar elementos culturales (cerámica, líticos y carbón) para aná­lisis, datación y profundizar el conocimiento sobre el tipo de cons­trucciones que se hicieron en el lugar.

Los sondeos y pozos de prueba dentro del área de vivienda del tambo 1 ( 180 m2), dieron muy poco material cultural; sü-1 embargo, se delimitó una unidad de excavación por medio de un corte de 1 x 1.5 m a la salida de la plataforma, sobre su margen oriental. Se excavó usando niveles convencionales de lO cm de espesor, profundizándose hasta los 100 cm, en los horizontes culturalmente estériles, para te­ner un mejor control estratigráfico. Los materiales culturales (80 ele­mentos) se depositaron entre 20 y 60 cm de profundidad. entre los horizontes Ap 1b 1 y ABp1b2

(Fig. 9).

La segunda excavación se realizó sobre una suave caída que pre­sentó la plataforma 3a en su parte oriental. El corte comprendió una unidad de 2 x 1.5 m; se excavó en niveles convencionales de 1 Ocm, pero teniendo en cuenta la depositación natural de los estra­tos y se descendjó hasta los 150 cm en la diabasa natural, (horizon­te C). Los fragmentos cerámicos ( 4 76), líticos (74) y el carbón vegetal se encontraron hasta los 100 cm de profundidad, depositados en los cuatro primeros horizontes (A, Ap 1b1, Ap2b2 yAC) siendo mayor su cantidad entxe los niveles 20 a 60 cm (horizontes Ap 1b1 y Ap2b2).

(Fig.9).

Page 49: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCA\AC"IO'-..f<:; Al{QUEOLOGil r\._,

1 : '

1

Page 50: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

54 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

1 i \ .. ·

/ 1

~ / 1

b,. • • • ~-·- ~ • · . .. - ---

/

.9 .1 •

/ . 1 .. ¡ . ' 1 1 • • 1 1 • • 1 1 i

\ A\ V \

\ i

i l

o~ ~

·-·-·-·--~·-·--·-...1

Page 51: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLóGICAS 55

Foto 11. La granja, vista de las plataformas Tres y Cuatro.

Foto 12. La granja. panorámica en planta de las plataformas Tres, Tres A y Cuatro.

Page 52: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

56 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

01111

~. . . '. ~:' .

. , .... . ... : ... . ~ .

.....; ' •• :~ ·: 1 •• ·~·

.. · .. ::.'\-_!'''

D A

B Aptbt

~ - Mp2bJ

[Jill a ~ e c:::J Apzbz

[21 N;

:. ·: ·.'o :: . ··t •• , .

CCIN'liBICDEI

IIIGIRO

CAA;WYO.U.O

CAAi loiWiaJ.Bfl'O OICUICI

CAAi loiWiaJ.Bfl'O CLARO

~

CAAi OICUICI

CAA; AIWIU.IJfTO

Figura 9

o u \/ e::>

o

1111

RONCESVAllES • TOLIMA !POIHICA 1\A G~

P\.ATAFORMAB 1 Y lla PERFU8 E8TRAllORAF1C08

PARfDNORTE

o,_..,!!!!!!,.. .. lOcm.

.._.1111111 CIUI'm~palln

c:.a .......... o..na c.tlan Vlllllll

F'llllh Cll*llá

Page 53: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS 57

Las modificaciones artificiales sobre el paisaje (tambos) y la au­sencia de basureros profundos indica un patrón de asentamiento característico de las áreas de !aJera para el período tardío. además la estratigrafía cultural observada en los cortes uno y dos (tambos J y 3a) conoboran la presencia de una sola ocupación no muy densa demográficamente a través de un largo período de tiempo. La última plataforma que se excavó, en La Granja, fue la codificada con el número tres , pues durante las actividades de prospección se pudo determinar que sobre la parte frontal de este sitio se depositó un relleno artificial que entre 65 y 70 cm de profundidad cubrió parte de una antigua superficie o paJeosuelo. Los trabajos consistieron en la realización de una trinchera de 5 x l m, que se inició desde el borde hacia el centro del área plana de la plataforma. Esta excava­ción se efectuó con el propósito de documentar el contenido del re­lleno, saber si la superficie enterrada contenía materiales arqueoló­gicos y su pertenencia cultural (Foto 12).

Se excavó en n iveles de 1 O cm, hasta donde fueron más notorios los restos arqueológicos ( 60 cm de profundidad en promedio; para un total de 305 fragmentos). También, se pudo establecer que de la anti­gua superficie solamente se conse¡;va un tramo rnuy estrecho (de más o menos 70. cm de ancho), sobre el frente de la platafonna '! a una profundidad promedio de 70 al 05 cm (Fig. 1 0).

En general. los suelos de las excavaciones realizadas en las plata­fonnas 1, 3a y 3 en predios de la finca La Granja presentan iguales características de fonnación y similar distribución estratigráfica, -por lo cual se han tomado como base para la descripción de los horizon­tes, los perfiles norte y sur de la unidad de excavación 3 de la plata­forma 3 (Fig. 10).

La Granja, Platt~fonua 3

Pared: Norte

A

Color: En húmedo 1 OYR 2/ 1 , negro.

Textura al tacto: Franco arcilloso.

Page 54: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

58 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

i 1

a

Page 55: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACJONES ARQUEOLÓGICAS 59

Estructura:

Consistencia:

Poros:

Raíces:

Ap¡

Color:

Textura al tacto:

Estructura:

Consistencia:

Poros:

Raíces:

Color:

Textura al tacto:

Estructura:

Consistencia:

Poros:

Raíces:

Color:

En bloques subangulares finos.

En húmedo, friable; en mojado, ligeramente pegajosa; ligeramente plástica.

Abundantes finos, regulares medios.

Abundantes finas y medias, vivas y muertas.

En húmedo J OYR 2/2, café muy oscuro.

Franco arcillosa.

En bloques sub angulares medios y finos.

En húmedo, pegajosa y plástica.

Abundantes finos y medios.

Abundantes fi nas, vivas y muertas.

En hú1nedo l OYR 3/3, café muy oscuro.

Franco arcillosa.

En bloques subangulares medios y finos.

En húmedo, friable; en mojado, pegajosa y plástica.

Regul<:lres, finos y medios.

Pocas y muy finas.

En húrnedo 1 OYR 3/3. café oscuro; pocas man­chas lOYR 4/6, cafés ama rillentas oscuras.

Page 56: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

60 EXPWRACTONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Textura al tacto:

Estructura:

Consistencia:

Poros:

Raíces:

AB

Color:

Textura al tacto:

Estructura:

Consistencia:

Poros:

Raíces:

B

Color:

Textura al tacto:

Estructura:

Consistenda:

Poros:

Raíces:

franco arcillosa arenosa.

En bloques subangulares finos.

En húmedo, friable; en mojado, ligeramente pegajosa y ligeramente plástica.

Abundantes finos y medios.

Escasas y finas.

En húmedo 1 OYR 4/6, café amarillento oscuro.

f ranco arcillosa arenosa.

En bloques subangulares medios y finos.

En húmedo, friable; en mojado, ligeramente pegajosa y ligeramente plástica.

Abundantes finos y medios.

Escasas y muy finas.

En húmedo 1 OYR 6/4, café amarillento claro.

franco arcillosa arenosa.

En bloques subangulares medios.

En húmedo, friable; en mojado, ligeramente pegajosa y ligeramente plástica.

Abundantes muy finos y medios.

No hay.

Page 57: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓG ICAS 61

Las condiciones químicas del suelo en La Granja (con excepción de los horizontes AB y B suelos naturales de la región) revelan alta capacidad de ahnacenarniento de nutrientes (CCC) '! una alta can ­tidad de cationes (Ca, Mg, K, Na), esto unido al abundante carbón orgánico, fósforo y un ph cercano n la neutralidad, hacen de ellos suelos excelentes para la agricultura. No obsrante el clima (frío muy húmedo, en transición hacia áreas de subpáramo) no es óptimo para grandes cultivos (ver anexo 3).

Dentro del perfil estratigráfico se identificaron tres horizontes A sepultados (Ap 1, Ap~b , y Ap:lb) que muy posiblemente fueron tapa­dos con los movimientos de tierra para la adecuación de los sitios; todos estos horizontes prese~1tan altas cantidades de carbón vegetal y fósforo indicando la fuerte influencia antrópica (el mayor porcentaje de fósforo total lo presentan los horizontes Ap~b 1 con 2.405 ppm y el A con 4220 pprn, siendo de los más altos conocidos en los .suelos co­lombianos), (Fig.l O; Anexo 3).

El paleosuelo (Ap3b) contenía muy poca cerámica que no difiere de la encontrada en los horizontes superiores (Ap

1 y Ap~b 1 ) . En gene­

rallos materiales provenientes de estos suelos (lo mismo que los en­contrados en las plataformas l. y 3a) se caracterizan por presentar ele­mentos diagnósticos en forma y decoración (cuencos, ollas, asas gran­des y muescas triangulares) de la cerárnica del período tardío en la cordillera Central del Tolima (figs. 23: 1 O, 26: 3, 29: 1-2 '! 30: 3; Lám. lll: 3 y 4). Asociado a este material también se hallaron fragmentos de vasijas (copas y cuencos) del Complejo Cauca Medio. que deben pro­venir de la región del Quind{o en la vertiente occidental de la cordille­ra Central (figs . 24: l , 26: 5 ; Lárn. ] l: 2). Una mnestr;a de carbón (nivel 40 -50 cm, Cuadrículas A, B, C, D y E) sumi nistró una edad de 920 ± 60 d.C. (sin calibrar, Beta- 113703). Este result.ado permite inferir que entre los siglos lX y X d .C. fue la época del desarrollo de estos asentamientos tardíos y sus vínculos con otras áreas arqueológicas.

2.3. El Jordán

Los terrenos de las Oncas La Granja y El Jordán presentan un paisaje si milar. formado po r un alto cerm; sus lados son lade ras erosionales sobre las cuales se encuentran sitios de habitación , a isla­dos o en pequenos grupos. La parte superior de las pendientes corres-

Page 58: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

62 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

üi vi o o "' N

"' ... ~ ~ () ~

() ~ ... o ..0

ü ... o a. o e: .E "' ()

() ~

o Vl e: <J () <1': <(

..-i o

~

Page 59: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQLfEOLÓGICAS 63

ponden a una cima amplia - alargada, sobre las cotas de los 2460 a 23 70 n1_snsm. Dicha cima se caracteriza por presentar una serie de estmcturas arqueológicas o grandes plataformas artificiales que so­bresalen en la topografía de la región por su tamaño y forma. Su excelente posidón las convierte en un lugar estratégico, desde donde se domina el paisaje de la cuenca del río Cucuana y sus alrededotes. (Figs. 2 y 8; Foto 6 y carátula).

La cirna esta conformada por cuatro superficies planas ovala­das de gran tamaño, cuyas dimensiones varían entre 4000 y 13000 rn2. Estas grandes planadas se construyeron cortando la pendiente y/o retirando parte o la totalidad de la cúspide de la cima y deposi­tando los suelos alrededor del área que se proyectaba ampliar, hasta lograr el tamaño deseado (Fig. 8; Foto 6).

En estas terrazas se realizaron una serie de sondeos por medio de pozos, barrenos y mediacaña permitiendo observar el suelo parental (diabasa) casi en superficie y saber que el horizonte de ce­niza volcá1üca fue retirado. en gran parte de la estratigrafía natural, para ser usado como relleno sobre los lados; igualmente Jos sondeos mostraron la carencia de material arqueológico (cerámica y lítico) . Otra de las características de estos espacios es la presencia, en algu­nos de ellos, de uno o varios orificios (entre uno y cuatro) que corres­ponden a tumbas de gran tamaño; saqueadas a comienzos de siglo por buscadores de tesoros, según la información oral de los habitan­tes de la zona.

A pesar del tiempo y de la constante intervención moderna, en estas terrazas, también se han conservado otros rasgos superficiales como son restos o tramos de antiguos caminos y/o senderos. Entre las terrazas dos. u-es y cuatro fue posible observar parte de un cami­no, del cual se ha mantenido un tramo de 155 m de largo, variando el ancho entre 4 y 6.5 m y 40 cm de profundidad actual, muy pro­bablemente por la continua sedimentación en la hondonada del ca­mino. Igualmente, se registraron algunos caminaderos más cortos y angostos entre tambos (finca La Granja entre las plataformas dos y tres) y otro atraviesa la terraza dos de Buenos Aires (Fig. 8; Foto 13).

Pautas de asentamiento que incluyan grandes obras de ingeniería prehispánica (tambos, grandes terrazas y caminos) similares en for­mas de construcción, tamaño y posible ftmción han sido estudiadas en

Page 60: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

64 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

l -=> z .~

•= !!·~ 2¡~ e é

2

- ~ . ... ...1 -o: e

t-o N ' e e .,o ac ... w" ac

~~ ~ o >ce e CI) UI-wa z ~ ~-e u

~ ..J .. 0 L ..

o . ... &

...

...

•• .. 8 2 u i!l .. ~ 9 .. ~o S z ~ ~ i 2

u .... o z o .. : . ... .. o o o > ..

~ ~ • o o i u :>

1 o ..

·-

Page 61: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

4

1~00~-·~-----------------------------------------------------------------------------------------------------

CONVENCIONES

II:n. A CAf'f: OSCUIIO

liD A PI CAFf: MJV OSCURO

¡;m & 8 po•c C&l'!: AHAIIILL(NTO OSCU..O

- Ap oba CAf'f: HUY OSCUIIO

C:::J &p•U CAf'f: ORIS ACf:O "'UY OSCUIIO

Elilll a CA.Ff A .. AIU .. Lt:MTO CLAIIO

~ e AMAIIILLO IIOJt lO

Figura 12

RONCESVALLES- TOLINA "IMCA lL .IOMWf

TERRAZA 1 RECONSTRUCCION 0€ lA ESTRATIGRAFIA

O 4m v = ~

t iCA LA o u o m. H • !1

- ,.g.zo m~

m X ()

~ o o z m > ::<::! o e lj 5 C)

ñ > tf)

0\ U1

Page 62: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

66 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Foto 14. El Jordán. panonimica de la Terraza Uno.

Foto J S. El Jordán. Terraza Uno. Linea de excavaciones sobre el eje central.

Page 63: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS 67

otras áreas arqueológicas de la región andina (Calima, cordillera Occi­dental), (Bray J 992; Cardale 1996; Herrera l992; Herrera et al. 1990; Salgado 1986; Salgado 1993).

Al costado oriental de la cima y a 33 m de distancia de la platafor­ma cinco se localizó una terraza de menor tamaño, de forma ovalada y

con un área de 3102 m 2 (terraza uno). Esta planicie fue seleccionad-a para adelantar excavaciones parciales por varias razones (Figs. 2 y 8; Foto 14):

- El buen estado de conservación. - La locaJi¿ación con respecto al resto de las plataformas.

Su tamaíio permitiría desarrollar la metodología de campo propuesta para conocer la forma de construcción de estas planicies.

• La posibilidad de encont.ri\r evidencias culturales mú:; tetnpnuuts, ta­padas por rellenos de la ocupación más tardía.

Con el propósito de conocer la fonna de construcción de la terra­za, la extensión y el espesor de las capas culturales, se trazó una línea a lo largo de Ja misma desde atrás, en el inido de la pared posterior, (construida sobre la pendiente), la cual atravesó toda la superficie pla­na hasta la caida al frente del borde, donde la loma aumenta nueva­mente su pendiente (Figs. 11 y 12; Fotos 15 y 1 G).

Este transepto perrnitió conseguir la forma de la superficie con sus desniveles naturales y artificiales. A lo largo de dicha línea se delimitaron doce unidades de excavación de diferentes dimensiones (U.E.I a l2); los espacios entre las excavaciones fueron sondeados con barreno y mediacai1a, cada 50 cm, 1 m o 2 m.

Con el fin de verificar los datos obtenidos en el transepto se hi­cieron cortes y sondeos en otras partes, pero siempre sobre la caída (U.E.l3, 14 y 15). En general , las excavaciones y los sondeos suminis­traron información acerca de la estratigrafía natural y artificial de la terraza, permitiendo reconstruir, ap roximadamente, por medio de un perfil vertical, la forma interna de la terraza (Fig. l 2).

A diferencia de las otras terrazas, esta presenta una pequeña área plana de forma ovalada (2 1 x 7m), en la parte posterior, cerca a la pared {que en la actual idad se encuentra un poco erosionada); dicha planicie hace parte del piso natural de la colina (que no fue retirado en el momento del desarrollo de la obra); se diferencia del resto de la

Page 64: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

68 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EiN LA CORDILLERA CENTRAL

i 1 ' 1

~ ~ ; dld1 ~ ~ hi .1 a

1 5 5 5 1

11 ¡1 i ciLól a:: DO ..... D[J o

: . l '"' 1 '1 :

... .. .. 1 1

1 1

1 1

1! 11 !1

1 1 1 B 1 li B B 1 o o

~ o • •

Page 65: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS 69

terraza por una altura de 50 cm aproximadamente. Desconocemos el pmpósito por el cual se dejó este espado en desnivel con respecto al piso de la terraza (Fig. 1 1 ).

Los diferentes sondeos y los quince cortes realizados permiti eron establecer la estratigrafía de la terraza ; para la descripción se han to­mado como base los perfiles norte de las unidades de excavación 1 , 1 O y 14 (fig. 13 a 18; Fotos l 7 y 18; Anexos 2 y 3):

El Jordá11, Terraza 1

Pared: Norte

A

Color:

Textura al tacto:

Estructura:

Consistencia:

Poros:

Raíces:

En húmedo lOYR 3/2, café grisaceo muy os­curo.

Franco arcillosa.

En bloques subangulares medios.

En húmedo, friable; en mojado pegajosa y plás­tica.

Abundantes finos , regulares medios.

Regulares muy finas, pocas medias.

Color: En húmedo 1 OYR 3/3, café oscuro.

Textura al tacto: franco arcillosa.

Estructura: En bloques subangulares medios.

Consistencia: En húmedo, friable; en mojado, pegajosa y plástica.

Poros: Abundantes finos, regulares medios.

Page 66: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

70 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

UNII:WJ DE EXCAVAaON 4

UNII:WJ DE EXCAVAoCION a o~m ,-.~. ~ .. ~.=. ~ .. =.= .. =.=. ~ .. =.~ .. ~.=.~~.=~= .. =.-.-.. -.-.. -.-.-.. -.-.-.. -.- .-.-.-.. -.~-.-.. -.-.-.. -.-.. ~.~. ~ .. ~ ..... - ••• =-=-- - - -- -- -

.. .,

lJNHW) DE EXCAVAoCION 1 Oam ,---------------------------------------------------, . . . . . . .. ........ ..... ... . ' .. .. ' . ' . . ' . . . . . . . ..... .. .... ~ . . ~ ... ..

RONCESVAll..ES- TOUMA FONCA a Ja~RDM

TERRAZA 1 PERFILES ESTRATIGRAFICOS

PARED NORTE

ESCALA o¡;¡¡;iiiiiii!!!!!!!!50iiiiiiiii30 cm.

Figura 14

f_:!¡J ABprab t CNUIWIWIIIDCIKIR)

F---i e MWILLO

[1]} C 1 MWILLO "D..ID

C] ca !DIO

o ........ IUIIo

Page 67: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS 71

Raices:

Color:

Regulares muy finas . pocas medias.

En húmedo l OYR 3/6, café amarillento oscu­ro.

Textura al tacto: Franco limoso.

Estructura: En bloques subangulares finos y medios .

Consistencia: En húmedo, friable; en mojado ligeramente pegajosa y ligeramente pl.ástica.

Poros: Abundantes finos, poco medíos.

Raíces: Pocas finas v medias.

Color:

Textura al tacto:

Estructura:

Consistencia:

Poros:

Raíces:

Color:

Textura al tacto:

Estr uctura:

En húmedo lOYR 2/2. café muy oscuro.

Franco 1 imoso.

En bloques subangulares finos y medios.

En húmedo, friable; en mojado , ligeramente pegajosa y ligeramente plástica.

Abundantes muy finos y medios.

Pocas finas y medias .

En húmedo 1 OYR3/2. café grisáceo muy oscuro.

Franco arcilloso.

En bloques subangulares finos y medios.

Page 68: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

72 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS BN LA CORDILLERA CENUAL

Consistencia:

Poros:

Raíces:

B

Color:

Textura al tacto:

Estructura:

Consistencia:

Poros:

Raíces:

e

En húmedo, friable; e.n mojado, ligeramente pegajosa y ligeramente plástica.

Abundantes finos v medios.

Pocas muy finas y medias.

En húmedo 1 OYR 6/4, café amarillento claro.

Franco arcilloso.

En bloques subangulates meclios a finos.

En húmedo, friable; mojado, ligeramente pe­gajosa y ligeram.ente plástica.

Abundantes finos, poco medios.

Pocas finas.

Color: En húmedo 7.5YR 6/8, amarillo rojizo, con pocas rnanchas.

Textura al tacto: Arcillo limoso.

Estructura: En bloques an!,•1.Ilares gruesos y medios.

Consisten cia: En húmedo, firrne; en motado, pegajosa y pl{\.S­tica.

Poros: Regulares finos y medios.

Raíces: Pocas muv finas.

Las unidades de excavación posibilitaron la identificación esuatigráfica en la parte plana de la siguiente manera: Entre los prime-

Page 69: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS

~DE ElCCAVAaOH 1

Figura 15

73

RONCESVAUS - TOI.JMA IFIICA 1!11. JORDM

TEitlltAZA 1 PERFILES ESTitATIGitAFICOS

PARED NOitTE o'-o;;;;;e!!!!,_ ... ;¡JO e m.

D A CAFI! OIClR)

~ A8p2b1 CAA! JIWM!.ENTOOICURO

El e MIMilD

[[] C1 .w.wu.o AQDI)

[21 a CAFI! MIM&1BfTO aMO

B CJ AOJO

- Apab2 CW'E tiiJ'f OKUIO

o .......

Page 70: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

74 EXPLORACIONES ARQUEOLÓG ICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Foto 16. El Jordán. Excavaciones sobre el borde de la terraza. unidades de Excavación Nueve a Quinco;:.

Foto 17. Unidad ele Excavación Diez. perli les estratigráficos paredes Norte y Oeste. El Jordán .

Page 71: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS 75

ros 52 m de largo (desde la pared) se realizaron seis cortes de 1m:~. y uno de 2 x 1 m , donde se registró la presenci~ de tres horizontes. en cada excavación, con simUares secuencias (A, ABp2b1, y un e que va­ría entre e, e, y C) ; en las unidades uno y tres se evidencio el hori­zonte Ap , que corresponde al suelo formado en el últin1o período de ocupación preh ispánica del sitio (Fígs. 11 a 14) . El horizonte ABp2b1 es un relleno que aparece inmediatamente después del material parental (horizonte C); lo que permite suponer que el corte para la constmc­ción de la terraza se realizó hasta la diabasa o suelo parental. retiran­do los horizontes A y B de la estratigrafía original para formar el relle­no ABp2b 1 que aparece en toda la terraza y de manera más abundante en la pendiente (Figs. 15 a 18). En los últimos 14m del área plana se realizó un corte de 1 m:~. (unidad de excavaciól'l 8) y una serie de son­deos con barreno y mediacaña que mostraron , que en esta zona solo se cortó desde el horizonte B; encima de este aparece el suelo de relle­no (Fig. 15).

Además de los cortes que se hicieron con propósitos estratigráficos se adelantaron sondeos en toda la superficie horizontal y en los costa­dos de la terraza con el fin de ubicar rasgos arqueológicos (depósito~ de cerámica, tumbas, etc.). Fue posible localizar, hacia el extremo no­reste . un pozo irregular de forma aproximadamente circular ( 1 m de diámetro) con una profundidad de 106 cm. El relleno que cubría el hueco estaba conformado por un suelo café - an1.arillento, piedras de mediano tamaño (entre 3 y 25 en} de diámetro) quemadas e impreg­nadas de hollín, abundante carbón en trozos grandes y unos fragmen­tos de cerámica (Fig. 1 'J).

A partir del inicio de la pendiente hasta la caída final de la terraza se excavaron tres cortes de 1m~ (Nns 9, ll y 12), uno de 3 x 1m (N° 1 O) , otro de 2 x 1m (N" 14) y el último de 1.5m x lm (N° 15), (Figs. 11 y 12); estas excavaciones permitieron conocer la formación natllral ele Ía pequei1a colina que compone el frente de la terraza y reconstwir, con un confiable grado ele precisión. los eventos naturales y culturales sucedidos en el lugar (Figs. 15 a 18).

La base de la secuencia natural es el horizonte C y com~sponde él arci llas derivadas de la roca meteorizada. es el más profundo y sola­mente se alcanzó con barreno a n1ás de 2m bajo la superficie. Encima del horizonte C se produce una sedimentación de cenizas volcánicas

Page 72: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

76 EXPLORACIONES ARQUEOLOGICAS EN LA CORDI LLERA CENTRAL

1 1

o 1 ..

Page 73: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS

o ., •

77

Page 74: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

78 EXPLORACIONES ARQUEOLÓG ICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

que debe corresponder con la lluvia, de ceniza deposiLadas, sobre la región hace, aproximadamente, :w .OOO a i1os antes del presente (hori­zonte B). Por acción del tiempo di chas cenizas se meteori znn y trans­fonnan originando un perfil na tural de suelo (A- AJ3 - 13) , el cual debió formarse en un ambiente sereno y extenderse por LOda la peqttc­i1a colina; de dicho perfil . actualmente, solo se conserva p::trte del que fue e l horizonte AB, cuya equivalencia en las excavaciones es el hori­zonteAp~b'.l (Figs. l2, 16 y 17; Fotos 17y 18).

En promedio desde los 130cm de profundidad el horizonte Ap~b.l

conserva una serie de evidencias directas e indirectas que sustentan la presencia de una primera ocupación humana en el sitio.

- En primer lugar dos tnuestras de radiocarbono , recogidas en los niveles 1 00- J 20cm v 1 1 O- 130cm en las unidades de excavación 1 O y 14 respectivamente dieron una antigüedad de J 2.91 O ± 60 aüos a.p. (Beta- 1 1 L 972) ~' 9760 ± 160 a11os a. p. (Beta- 1 16764). (ve r fechas de radiocarbono y cuadro 1 ).

- Las fechas representan un largo Período de habitación en el si­tio , confonrtado, posiblemente, por una serie de eventoc; de ocupación y ab:-~ndono a través de rnucho tiempo, como también lo confirma el espesor que todavía tiene el horizonte Ap}>.~ (40cm en promedio ). a pesar de que In parte superior de este suelo se erosionó completamen­te como consecuencia de la acción de los ocupantes y seguramente por condiciones ambientales natura les. Cuando sucedió este evento el antíguo horizonte A fue eliminado y con él se perdieron la mayoría de los vestigios materiales (a rtefactos). de la actividad humana. que se

habían depos itado en esre suelo y solo quedó el antíguo AB (Ap~b3) que conserva a lgunos rasgos de actividades antrópicas y nawrales, las cuales se reflejan en la co loración oscura, indicando aportes de mate­ria orgá nica humificada, en un horizonte cuyo lín-.ite superior no es claro (de gradual a difuso), corno consecuencia de haber est:Kio ex­puesto en la superficie a diversas alteraciones y finalmente ser sepul­tado por nuevos eventos de sedimentación eólica.

- Al m ismo tiempo, en este horízonte (Ap4b

1) se observan

alteraciones y disturbios en 1:-.s condiciones natura les de la estructura del c;ue lo (tonalidad oscura, compactación y mezcla). ocasionadas por pi <ioleo y en generaJ por las actividades desarrollada en e l lugar. Por otra parte, caracterís ticas químicas como el fósforo total (indica-

Page 75: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS

1 •

1 • 1 • '<;

1

79

1 •

Page 76: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

80

r A

EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDlLLERA CENTRAL

CONVENCIONES

IZUD:l NA 1 CES

ammiD HU II US

PLANTA /~

-1 A'

Figura 19

RONCESVALLES- TOLIMA FINCA ELJOR)AN

TERRA ZA!

RASGO ARO UEOlOGICO 1

Page 77: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGlCAS 81

dot del grado de influencia humana sobre un suelo), no son natura­les pues, el fuerte incremento en el porcentaje de fósforo total ( 1050 ppm, anexo 3 ), signi fica que d ichas cantidades fueron agregadas al suelo por la acción del hombre, ind icando la presencia de una fuerte :tctividad antrópica sobre este horizonte .

-Los resultados del estud io de polen indican que aJ horizonte Ap.¡b.1 corresponde la zona de polen l, la cual está dividida en dos subz.onas de polen (lA a 135cm y 1 B a l20ém de profundidad, res­pectivamente). Las condiciones cliJnáticas de esta zona son las más húmedas y frías a las que estuvo sometido el área del yacimiento.

En general en la zona 1 se observa un predominio de una vegeta­ción de bosque alto and ino constituído por robledales y Cyatheas en un estado suces ional natural. La presencia de helechales de pterydophitas con dominancia de Polypodium sp, cuyas taxas son rnuy altas para este tipo de ambientes, señalan que en el {uea hubo intervención de carácter antrópico. por tT\edio del despeje de la co­bertura vegetal , con el fin de tener espacios libres o claros dentro del bosque; en la parte superior de la secuencia (sub zona 1 B) las áreas despejadas son de mayor e>.'tensíón, lo mismo que las cantidades de helechos, indicando retrocesos del bosque y una mayor interven­ción humana sobre el m.edio pero sin hacer uso del suelo en cultigenos (ver anexo 2).

· La cahtidad de evidencias materiales líticas recuperadas en el horizot1teAp.¡b3fue mínima, solo seis elementos y de los mismos ape­nas dos pueden considerarce artefactOs (Fig. 32: l , 2 y 3; ver índice de figs., para una descripción más detallada).

Esta poca evidencia limita cualquier interpretación que se pre­tenda reali zar referente a las estrategias de sübsistencia y al tipo de tecnología lftica que portaban los grupos humanos que, en diferen­tes momentos de ocupación, habitaron la colina durante el período precerám.ico.

Esta evidencia negativa (ausencia de artefactos), suscita Ja discu­sión acerca del grado de importancja que tienen los efectos postdeposicionales sobre el registro arqueológico, de un determinado depósito (Gnecco, l997: 36- 39); que para el presente caso debieron ser intensos procesos erosivos y de bioturbación que desestabilizaron

Page 78: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

82 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Foto 18. Unidad de excavación Catorce. Pared E~ te. El Jordán

Page 79: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS 83

la parte superior del antiguo perfil (horizonte A), dando como resulta­do la pérdida de los materiales arqueológicos por arrastre erosivo.

No obstante lo antetior, en parrafos precedentes se examinaron datos e información provenientes de [echamientos por radiocarbono, at1álisis fisico-químicos e interpretació11 de suelos y estudios de po­len., que sustentan, con un acertado grado de confiabilidad, una ocu­pación precerámica en el sitio El Jordán (Roncesvalles - Tol ima), para el período comprendido entre el Pleistoceno terminal y princi­pios del Holoceno.

El creciente impacto antrópico sobre el paisaje desestabiliza las condkiones ambientales en el área del yacimiento y deja de ser un lugar atractivo como campamento y, según el registro radiocarbónico, es deshabitado durante milenios. Nuevas lluvias de ceniza volcánica fom1an otro suelo (horizonte Ap3b), el cual queda en contacto direc­to con el suelo restante del perfil anterior (horizonte Ap

4b:¡); procesos

de bioturbación (mesofauna) mezclan parciahnente la zona de fronte­ra de los dos suelos, motivo por el cual el límite entre estos dos hori­zontes no es abrupto (Fígs. 16 y 17; Fotos 17 y 18).

Este horizonte presenta cambios en la estructura natural del sue­lo que se reflejan en la coloración bastante oscura (café muy oscuro) , compactación por pisoteo y mezcla de cerámica con partículas de sue­lo quemado y liticos rnenudos que indican a.lteraciones propiciadas por los nuevos ocupantes del sitio.

Lo anterior se reafirma con el incremento en las cantidades de fósforo total ( 1300 ppm) y con los resultados del anál isis de polen. el cual registra un paisaje que continúa siendo dominado por vegetación de bosque andino (zona de polen 2), pero m\ty perturbada con respec­to a Ja.c; condiciones observadas en el anterior horizonte. También se reconoce una alta presencia de helechos (D eenstaedtiaceae) que evi­dencian intervención humana, pero sin aprovechamiento del suelo en prácticas agrícolas . Confonne n lo descdto puede plantearse que el área de la terraza era un espacio abierto de helechales al interior de una vegetación boscosa, de robles y de cyatheas (ver anexos 2 y 3).

EJ propósito principal de los cortes adelantados en el borde de la terraza era el ele tratar de hallar, dentro de los horizontes enterrados, una cerámica diferente , a la de los suelos superiores , que permitiera

Page 80: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

84 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGJCAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

documentar un periodo de ocupación amerior al tardío para la región de Roncesvalles- Toli m a.

En general, la excavación de este paleosuelo (horizonte Ap1bJ proporcionó una pequeña muestra de cerámica ( 104 tiestos') en su mayoría pedazos de cuerpo (solo 13 fragmentos diagnósticos); no obstante , se pudo establecer que por sus características técnicas y formales corresponden a un sistema alfarero diferente al registrado en los demas sitios estudiados en Roncesvalles y por lo tanto a otro período de ocupación prehispánic<J.

Madera carbonizada, en trozos grandes, asociada a fragmen­tos de bordes y decorados (Fig. 22: 3 , 4 , 5 y 8) , se recogió entre 100 y 11 Oc1n de profundidad, en un espacio de 30 cm de ancho. en la unidad de excavación 14, para formar una muestra de 9.38 gr; la cual dato, la base del horizonte Apjb1, entre 850 y 950 años· a.C. (900 :±: 50 a.C. ; sin calibrar, Beta- 116763). Este resultado es la edad para los inicios de una ocupación agroalfarera que por su tem­poralidad pertenece al período formativo de la región andina (ver fechas de radiocarbono y cuadro 1 ) .

El último evento relacionado con la dinán1ica de asentamiento prehispánico en la terraza uno de El Jordáti ocurre cuando en una épo­ca posterior otro gmpo portador de pautas ele asentamiento diferen­tes , decide ampliar el tamaño del sitio con propósitos que no tenemos claros; entonces sobre el horizonte Ap.,b1 se deposita un relleno (ABp2b 1) que cubre toda la terraza. Encima ele este relleno se conser­vó, en algunos sectores, partes del suelo que se formó durante la ocu­pación tardía del sitio (horizonte Ap

1), especialmente en la zona cer­

cana a la pared posterior y en las pendientes (Unidades 1, 3 y 1 O a 15; Figs. 13 y 16 a 18; Fotos 16 a 18). Es probable que este suelo ocupa­cional , de poco espesor, no se haya conservado en sectores del área plana de la tenaza debido a la utilización moderna del sitio (agricultu­ra y ganadería) y a procesos erosivos naturales.

2.4. Patio Bonito

El sitio corresponde a una colina cuya parte superior es plana y que cae al río Cucuana; se realizaron sondeos sobre el borde, al rede­dor de un área que había sido guaqueada, pennitiendo localizar dos

Page 81: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS 85

rasgos arqueológicos de formas nmy simples; ambos presentaron poca profundidad ( 150 cm) y ausencia de cámaras. El procedimiento de excavación , consístíó en retírar los diferentes estratos desde la capa hún1ica superficial , transición , ceni¿a volcánica y posteriormente J;:¡ diabasa roja donde finalizaban los pozos en el piso <le las mismH.<> (Figs. 20 y 21 ).

Los fragmentos cerárnicos hallados en los rellenos de los pozos son similares a Jos recuperados en los sitios de vivienda, lo que. al menos, permite inferir que estos rasgos arqueológicos pertenecen a l mismo período de ocupación referenciado en los asentamientos: sin embargo no hay claridad acerca de la verdadera función que desem­peñaron estas estructuras verticales y sl realmente fueron sepulcros (no se encontraron vasijas enteras u otros objetos que indicaran ajuar funerario , ni restos óseos humanos).

Page 82: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

86 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

CONV ENCIUN ES

li:iE:El RAI CES

lmliiiiD HUMUS

PLANTA

/

CORTE A- A'

Figura 20

RONCESVALLES - TOLIMA FINCA PATIO BONITO

RASGO AROUEOLOGICO 1

ISCALA o'l;¡¡¡¡.....,.,...¡¡¡;3u o m.

Page 83: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

EXCAVACIONES ARQUEOLÓGICAS

,-----, .. , ¡'/ " ·· .. ----------

/ ' 1 ' .. , ¡ 1 \

~~ 1 4'

\

\: '------------¡/

CONVENCIONES

IZEZlCEl OA 1 Cts

mmn:m Hu ... us

PLANTA

CO RTE A-A '

Figura 2 1

87

RONCESVALLES - TOLIMA FINCA MTIO BONno

RIISGO A~OUEOLOGICO 2

O 30 cm. EICAl.l. ~

Page 84: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Capitulo VI

LOS MATERIALES ARQUEOLÓGICOS

l. LACERÁMICA

1 .l. Criterios Metodológicos

La cerámica obtenida en las diferentes fase~ de Gunpo. en el mu­nicipio de Roncesvalles, fu e estudia da partiendo de cri lerioc; metodológicos planteados, para cJa<;ificar b ce rámica. en otra-. áreas a rqueológicas de la región andina como son: San Agustín , Calima y norte del Valle del Cauca ( Llano~ v Duran 1983 ; Llanoc; 1988; Salgado 1986 y 1989). ·

Los materiales cerámicos tardíos fueron clasifi cado~ en grupoc; de acuerdo al color del baño o engobe que presentaron . El engohe observado en los fragmentos pern1itió agruparlos en cuatro grupos, que presentan una variada gama de tonalidades: Rojo (ro jo. rojo claro); café (café, claro, oscuro, rojizo~' amarillento): amarillo rojizo y gris (gris, oscuro y rojizo). Además, se encontraron algunos frag­mentos de color crema pero por su poca cantidad no se analizaron como grupo, estos fueron eswdiados como elementos independien­tes. Tres de los grupos presentan un baño superficial con la misma arcill a de la pasta di luida y solarncmc el grupo rojo presenta un bai\o de u n color d iferen te a la su perficie de la pa~ta .

Una vez establecidos los grupos. se inicic1 el anúlisis de la!> de­más ca racterísticJs t écnicas. formales y decorativas presentes en la cerámica, información que se registró en una planti lla o ficha que fue el sistema de alimentación de la base de datos elaborada para el proyecto. ( Las características formales, técnicas y decorativas de cada gnq)o se encuentran en el anexo 1 ).

Page 85: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

90 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Las propiedades estudiadas aparecen en la plantilla en ocho varia­bles que, a su vez están divididas en ca racteres rnás específicos así:

Referencia: Presenta la locali1.aci(>n precisa del fragmento; sitio. número, yacimiento y profundidad.

- Pasta: Se annliz6 la composición del desgrasan te q11e consistió b:ísica­me.nte en arenas, compuestas de: Cuar:w , feldespato , mica. biotiia y pirita de hierro. Igualmente se estud iú la textura, la cual varía entre fina- compacta. granulosa- burda a friable, granulosa- porosa a com­pacta. 'J'ambién se observó el tipo de cocción a q11e fue sometida la vasija, partiendo de la presenci:1 o tW de núcleo se pudo establecer una oxidación cnmplet<J o incompleta.

- Tratamiento Superficial: Permitió observar si e l fragmento presentaba pulimemo, el tipo de alisado, la erosi()n '! las manchHs de hollín :;obre las superficie~ : igualmente se tomó el color del ha1io v el espesor de la:-; pan:!cles de cada demento.

La!\ tres variables anteriores se aplicaron a la totalidad de la muestra, las que se describen a continuación sólo se llevaron a cabo en fragmentO$ diagnósticos que permitieron registrar información más específica.

- A pnrtir de lo:; fragmentos (jllt' presentaron bnrcle~ fue po!'ihle analizar v obtener:

1, ()rientat i<Ín de los bordes: Sobresalen nbíerto!>. directo.~,. re~tringídos . 2. Oit\metro de las \'ilsij<ls, que oscill'1 cntn: 7 y 32 cm. · 3 . Formas de las vasijas donde primaron los cuencos v las ollas. - Técnicas decorativas: Se re¡.,•i.~traron las técnicas: 'Acanalad<1 , aplica­

da. presionada, impresa'! pintura negativa: pero las mú~> abuncl:111tes fueron las muescas y l~t incisión.

- Igualmente. ~e anal i :~.aron volantes de U$0, bn:-:e~ y a~as.

En el caso de la cer:lmica formativa. se agrupó de acuerdo al color del baño o engobe que presentaron los fragmento:-: '! a conti­nuación se realizó e l respectivo análisis de las características técni­cas. forrnales v decorativas de la certímica. con los mismos criterios tnetodolúgicos que se habían utilizado para clasificar la alfareáa del período tardío.

1.2. Cerámica Formativa

En su totalidad la cerárn.ica de este período proviene de un solo sitio; terraza J de El Jordán y de las excavaciones realizadas sobre el

Page 86: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LOS MATRl~lALI!S AltQUEOLOGICOS

' 1 1 1

... <D

1

~-

1 ... ~

$ S ~

li •

o

Page 87: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

92 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

borde (unidades de excavación 10, 14 y 15). La posición estratigráfica de estas evidencias y el resultado de C 14 ratifican la gran antigüedad de la cerámica.

La tOtalidad de la muestra analizada fue de 1 04 fragmentos. dis­tribuidos de la sigu iente ma1.1era: 67 elementos en la U.E. 1 O; 33 ele­mentos en la U.E. 14 y 4 en la U.E. l5 , Dichos materiales fueron clasi­ficados ele acuerdo al co lor del baño o engobe que presentaron sus superficies. dando como resultado la conformación de dos grupos cerámicos para el período prehispánico formativo (las caracte rísticas formales, técnicas y decorativas se encuentran en el anexo 1 ).

El primer grupo presenta un bai'\o rojo en dos tonalidades (rojo y rojo amarillento) y est<~ representado por una mínima cantidad ( 15 fragmentos). El grupo con baño café es el rnás numeroso (89 elemen­tos en total) v tiene una mavor variedad de tonalidades: Café (33 fragmentOs); ~afé claro (42) y café pálido (J 4) .

En general los dos grupos comparten las mismas características técnicas con leves variaciones en dcsgrasante y textura de la pasta; el tratamiento superficial es muy similar a pesar de que la cerámica café tien de<~ ser menos acabada {superficies ennegrecidas y ton hollín).

El dibujo de los borde:-: obtenidos (siete en total). permite inferi r que las fom1as corn-esponclen a pequeñas vasijas globulares (Fig. 22: 1-3 y 6). Fragmentos decorados solamente se encontraron se is, los cuales presentan una técnica consistente en pequei'tas acanaladuras solas o lineales paralelas (Fig. 22: 4 , 7 y 8) y solo tres tiestos conser­van una franja de pintura roja en la supe rficie interna.

Finalmente, podernos decir que la muestra de cerámica fom1ativa, de RoncesvaJles - Tolima. no es representativa ni en tamaño de Jos fragmentos, cantidad total y elementos diagnósticos (bordes y decora­dos) que permitan aproximarnos a las fo rmas de las vasijas y recons­truir un estilo alfarero para dicho período. En In muestra se observan algunos rasgos (tonalidad de los baíws, tratatniento superficial, tama­lÍO de desgrasante, espesor de las paredes) que recuerdan las cerámi­cas de la tradición temprana en el suroccidente Colombiano. Sin ern­bargo, estas apreciaciones subjetivas no permiten conjeturar ¡·elacio­nes o nexos estilísticos con cerámicas de épocas similares en otras áreas a rqueológicas como: El Formativo de San Agustín; el Marrón Inciso

Page 88: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LOS MATERIALES ARQUEOLÓGICOS 93

del Cauca Medio v Viejo Caldas e lla n1a en Calima v valle medio del río Cauca. - ·

1 .3. Comparación de los Grupos Cerámicos del Petíodo Tardío

Los mateTiales cerámicos obten idos en las recolccc ione~ superfi­ciales. pozos de sondeo y excavaciones, permitieron estab lecer un sistema alfarero perteneciente al período cultural prehisp~ínico tar­dío. Igualme nte . se hallaron algu nos elementos foráneo!> a dicho sic;­tema, que podrían estar indicando intercambios o movimientos e n­tre diferentes áreas arqueológicas.

Los porcentajes obtenidos en la muestra analizada (291 7 frag­mentos e n total ) nos indican que e l g rupo café es el m~s a bundante, pues representa las tres tercer<~s partes de la muestra (76%). le si­

guen e n proporción el amarillo rojizo ( 1 1.6%), el bar1o rojo (6. 7%) y el gris (4.64%) y por último unos elementos de color crema (nueve

tiestos) , (Gráfica l ).

En general. la cerámica prco;ema el mismo desgrasanre para todo e l sistema a lfarero (arena de río), pero la textura varía segú n el gru­po de colo r (ver anexo 2); e n cuanto la cocción la mayor parte de la nntestra (92%) presentó una cocció n en atmósfer<l oxidant e com­

pleta y una mínima parte tiene unn atmósfera oxidante incompleta. Con relación a el trata mie nto ~uperficial la mayor parte de la cerá ­mica e ta emsionada (89%), más de la n.1itad con se rvt~ manc has de ho llín (66%) y el 1 1% presenta huellas de pulimento.

L O!. grupos cerámicos se distribuyen en diferemes cantidades

para todos los sitios. predominando el gmpo café seguido por el a mari ll o rojizo, rojo y gris. El sitio que mayor cantidad de cerámica

proporc ionó fue La Granja co n un total de 11 91 fragmentos que eq11iva le n a l 40% de la muestra total ; le ~ igue Buenos Aires con 563 fragme ntos ( 19.3 %); el Jordá n con 390 tiestos ( 13%) y en menores

proporciones los sitios de prospección y la finca Patio Bonito que aunque allí se adelantaron excavaciones las cantidades de materia­les cer:lmicos no fueron significmivas (Cráfica 1 ).

Estratigr áficamente los g rupos cerámicos se encuentran repre­sentados e n todos los cortes, pero las frecuencias cerámicas varían

Page 89: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

94 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Grupos Cerámicos

Grupos Cerámicos por Sitio

35~o ~------------------------------------~

Total Grupos Cerámicos

Gráfi ca 1

Page 90: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LOS MATERIALES ARQUEOLÓGICOS 95

de un nivel a otro, por e jernp lo en todas las unidades de excavación los niveles donde se hallaron la mayor cantidad de cerámica fueron de 40 a 60 cm . En los rasgos arqueológicos las frecuencias más altas se encontraron a mayor profundidad. Así mismo. la comparación en­tre diferentes niveles de excavación pem1itió identificar que todos los grllpos están presentes en una misma secuencia estratigráfica, sustentando la pertenencia de estas evidencias arqueológicas a un solo período cultural (El Tardío).

Las formas que se lograron reconstruir a través del dibujo permi­ten inferir que el sistema alfarero tardío de Roncesvalles esta com­puesto en su mavor parte por ollas, cuencos y copas, algunas con muescas e incisiones; al igual que aplicaciones, también se encuentran gran cantidad de asas y en mínima proporción los cántaros , botellones y figu1inas (entre 1 y 3 elementos) , (.Figs. 23 a 30; Láms, [ a Ill).

Las formas ITtás comunes en todos los sitios fueron orl as, cuencos asas'! bases de posibles copas (en La Granja, El Jordán . Bu~no1. Ai­res. Patio Bonito, La Esperanza, Matadero, La Curubera '!El Reflejo ). De todos los sitios excavados La Granja es el que presenta la mayor cantidad y variedad de formas (35 bordes).

Con relación a las decoraciones las más comtme:-; para todos los sitios son las muescas triangulares, luego le siguen las incisiones en forma ovalada y lineal y las muescas rectangulares (están presentes en La Granja. Buenos Aires , El Jordán. El Colegio, La Curubera , La Pro­videncia, El Matadero y El Reflejo); aplicaciones se conservaron en solo dos fragmentos, acanaladura e impresiones uno solo por técnica (de La Granja) y pintura positiva roja en franjas verticales, apenas en tres tiestos (La Granja, Buenos Aires y El Jordán), (Figs. 23 a 30 e Índice de Figuras; Lárns. 1 a lll e índice ele Láminas).

En general, tiestos decorados se encontraron en poca cantidad (55 en total) distJ·ibuidos en los diferentes niveles de excavación hast.:'\ los 70 cm de profundidad en promedio. Las muescas triangulares al ser la más común de las técnicas decorativas reiteran una característica estética de la alfarería tardía de lél cordi llera Central en el Tolima.

En términos generales, la cerámica procedente de Roncesvalles se caracteriz.a por su sencillo tratamiento superficial, por su poca diversi­dad formal y por presentar una mínima variedad de técnicas decorati-

Page 91: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

96 EXPLORAOONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDlLLERA CENTRAL

vas. Las anteriores particuhu"idades son rasgos distintivos de la alfare­ría de los grupos que se asentaron en la cordi llera Central , del departa­mento del Tolima, durante el Período tardio. Cerámica similar ha sido investigada en Chaparral (Rodríguez 1991; Cubillos 1945). región si­tuada un poco más al sur de la presente zona de estudio, donde se le ha denominado Chaparral Café Presionado (Chacín 199 J v 1995) v re­cientemente Chamba Café Presionado sobre los contrafuértes de 1á cor­dillera Central, en El Guamo- Tolima (Cifuentes 1994).

Recientemente, en la parte baja del cañón de La Línea se han realizado dos proyectos arqueológicos ~ Daniel R<unírez ( 1996). ex­ploró la cuenca alta del río Combeima, tesís que junto con la de Barrero, Ramírez y Rivera ( J 997). también adelantada en el muni­cipio de !bagué (sitio La Martinica, lomas adyacentes al Valle ele las lanzas), seí1aJan la existen cia en la región de pautas de asentamien­to y de materiales cerámicos que corresponden con la ocupación tar­día de la cordillera Central en e11olima.

En la cerámica tardía de Roncesva1les se reconocen elementos. formales v decorativos. externos q~.:le sei1alan cm1tactos e intercam­bios con otras zonas arqueológicas periféricas. Tanto en excavaciones como en recolecciones superficiales se recuperaron fragmentos con decoración presionada circular zon ificada y caolín blanco ( ocasio­nalmente), (Figs. 23: 12; 24: l; 26: 5 a 7; Lám. 11: 2, 3), que corres­ponden a cuencos y copas; formas características del Complejo Cauca Medio que se di¡¡tribuye por la región geogrúfica del Quin<.lío y Viejo Caldas (Bruhns L976. J 990; Osorio 1986. 1990; Salgado 1996 y 1997).

Dos disei'los decorativos de la alfarería de la Cordillera (F.igs. 26: 2; 28: 11; Lám. 11: 7); se encuentran en los materiales cen\micos de sitios local izados en el Valle del Magdalen_a (centro. norte del Tolima y piedemonte ele la cordillera Oriental), (Avila 1985; Cifuentes 1994; Cubillos 1954; Mendoza y Quiazúa 1990; Salgado et al. 1 997) . A pesar de que las técnicas decorativas son similares , los disei'los varían un poco, elementos que permiten plantear la existencia de diferencias estilísticas dentro de la tradición cultural tardía~ estas pueden estar sef1alando grupos cultmales diferentes compartiendo ciertos patrones culturales que se estarían reflejando. e.c:;pecíficamente, en afinidades estilísticas entre la alfarería de la cordi ll era v la del valle del Magdalena .

Page 92: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LOS MATERIALES ARQUEOLÓGICOS 97

e u

• ( N .. --...

1 11'1

' ,.

1

~N

Page 93: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

98 EXPLORACJONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRA l.

É u

]

1

~

1

' 1

~, CD

4

1 -...

Page 94: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LOS MATERIALES ARQUEOLÓGICOS 99

1 3

1 4 \ -.

o •cm ! ,..----

Figura 25

Page 95: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

100 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

" .

t

N

E

"

]

Page 96: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LOS MATERIALES ARQ

~' ~~~·:.Q~.- · .~ .. .}.;.~1

'i:"y 1

~

UEOLÓGIC~OS:_ __ _

~ t "'

~-

101

E . ]

1

'

Page 97: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

l02 EXPLORACIONES ARQUEOLOGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

É o

]

=

·~

Page 98: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LOS MATERIALES ARQUEOLÚGICOS 103

E •

------....._ \ (------"? o.

"' .. 1 \

... :::l

1 / ,';.IJ

N

''---' '""

\(-") l 1 1 1

ll ~

Page 99: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

104 EXPLORACIONES ARQUEOLCGICAS EN LA CORDILLI!RA CENTRAL

e u

~ ]

1

-~

Page 100: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LOS MATERIA LES A RQUEOLÓGICOS 105

• ~

e E

· <'11 ...)

Page 101: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

106 EXPLORACIONES ARQUEOLóG ICAS EN LA CORDILLERA CENTRA L

.. . o -

E

r o

Page 102: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LOS MATERIALES ARQUEOLÓGICOS 107

=

Page 103: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

108 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA COLWILLI3RA CENTRAl

2. ELMATERIALLÍTICO

La muestra analizada solo abarcó los materiales del período tar­dío. no se tuvo en cuen ta el material precerámico por su mínima cantidad. El estud io se reali zó partiendo de la materia prima y de los procesos tecnológicos segu idos para la fabricación de los artefac­tos lít icos.

Dentro de los 430 elementos de la muestra se identificaron cua­tro grupos diferentes de materia prima:

- Material Ígneo l ntrusivo

Granod ioritas 42

Basaltos 226

- Oc Origen Volcánico

Piroclastos (pómez ) 18

- Sedimentarias

Chtrt 19

- M etam órfico

Pizarra (esquistos verdes) 17

Cuarzo (metamórfico) 15

Cunrzo (lechoso) 68

Dentro de la muest ra hallada priman los desechos de talla (4ó%). seguidos por las nücrolascas ( 18%). algunas de ellas con posibles bor­des activos como: cuchíUos (3%), raspadores (7%) y punzones ( 1 'Jtf1).

También se encontraron 60 cantos rodados (la mi tad presenta de<;gaste en algunas de sus caras). ·~o núcleos, 5 pulidores , 5 manos de moler, 4 artefactos múltiples y un cincel (ver Figs. 33 y 34 e índ ice de figuras).

Page 104: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ARQUEOLóG:lCJC:2o:s:_ ____ _ ____ ~ ~LO~S~M~A~T~U~R~IA:~LES=·~------

N

E u

]

Page 105: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

110 EXPLOHACIONES ARQUWLÓCJCAS EN LA CORDI LLEI~A CBNTHA L

~~·"' ·· C~t.:·; . . . .

e o ...

Page 106: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LOS MATERIALES ARQUEOLóGICOS 111

"

]

N

Page 107: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

112 EXPLORACIONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDfLLERA CENTRAL

É "

]

e N

Page 108: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Capítulo VII

PAUTAS DE ASENTAMIENTO PREHISPÁNICAS EN LA CORDILLERA

CENTRAL DEL TOLIMA

El departamento del Tolima se encuentra ubicado geográficamente en el centro del país, zona de suma importancia para el movimiento de grupos hun1anos a Jo largo de todos los períodos histórico~;; por lo tanto, es una región estratégica para comprender Jos procesos sociales prehispánicos locales. así corno los de otras áreas del centro v del suroccidente colombiano. Los diferentes pasos naturales, entre la cordillera Central y los valles del Cauca y Magdalena, sien1pre facili­taron la comunicación y el intercambio de ciertos productos y espe­cialmente de un pensarniento simbólico que, en términos generales, unificó las distintas áreas culturales del suroccidente del país ,

En el panoran.1.a investigativo regional ha tenido más continui­dad la arqueología de campo en San Agustín, Quimbnya y Calima, áreas periféricas al Tolima; lo cual le ha permitido a los arqueólogos plantear una interpretación general relacionándo etHre s í, la historia prehispánica de tan extensa región incluyendo en la misrna el área tolimense.

A partir de los resultados que se t ienen para algunas pa rtes de la cordillera Central y el vall e del río Magdalena es posible plantear, para la región toli mense, un esquema de periodización cultural el cual se basa esencialmente en datos cronológicos. en los cambios que se observan, a través del t iempo. en la tecnologfa lítica, en Jos diferentes estilos cerámicos y orfebres, en las pautas de asentam ien­to y en las relaciones culturales con las áreas enunciadas anterior­mente. Dicho esquema comprende cuatro períodos: Precerrimico.for­matitiO, clásico regional)' tardío.

Page 109: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

114 EXPLORACIONES ARQUEOL0GtCAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Las investigaciones realizadas en la cordillera Cent:ral del Tblima (sitio el Prodigio en Chaparral y El Pomo en El Fresno: Rodríguez 1 991, 199 5 y l 997), señalaban que los pdmeTos pobladores habi<m habitado la región duraJlte el Holoceno Medio (7000 a 5000 ai'los a.p.). Uno de los aportes mas relevantes de la presente investigación es el de habet ampliado la profundidad cronológica, de la ocupación precerámica, al Holoceno Temprano (X milenio a.p.) y hasta finales del Pleistoceno (Xlll milenio a.p.). de acuerdo a fecharnientos por radiocarbono (ver cuadro 1 y fechas de radiocarbono).

En Roncesvalles. desafOll.unadamente. Jos horizontes donde se depositaron las evidencias arqueológicas precerámicas estuvieron so­metidos a eventos naturales postcleposicion;;¡les que erosionaron casi en su totalidad el depósito, conservandose solo se is elementos líticos, los cuales están asociados a la datación m<'ls antígua del sitio (ver capí­tulo V, numeral 2.3. y Fig. 32).

De acuerdo al registro arqueológico, que se ha conservado en Jos otros sitios de la región tolimense. la tecnología lítica, de este período, es bastante sencilla y está orientada a unas estratégias a lternativas de subsistencia basadas en la manipulación de vegetales (recolección y molienda de frutos y raíces comestibles), al manejo incipiente de di­versas plantas (horticultura rudimentaria) y en una menor proporción a la cacería de pequei'\as presas.

Sitlos que incluyan artefactos líticos similares también han sido estudiado!; en otras áreas del sumccidente colombiano como el valle de Popayán , Calima (cordillera Occidental). en el Viejo Caldas y not­te del valle medio del río Cauca. Las si111ilitudes tecnológicas en los conjuntos líticos presentes en estos sitios indican una amplia disper­sión del registro arqueológico y una dinámica de poblamiento que in­cluye adaptaciones a los valle!' y vertientes de las cordilleras con vege­tación tropical y a los bosques sub:mdinos y alto andinos de las zonas más elevadas. También permiten inferir la existencia de una sola tradi~ ció11 cultural precerámica , en el suroccidente colombiano. desde épo­cas muy tempran;.lS (INC IVA 1995 ; Integral 19lJ5; Múnera y Monsalve et al. 1998: Rodtiguez 1991 . 1 Y95 y 1997; Salgado 19Hóa. 1986. 19t59 y J 995; Gnecco y Salgado 1989).

De acuerdo a la información cron<)lógica disponible se conoce que los grupos recolectores - horticultores acerámicos habilaron di-

Page 110: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

CORRELACION ESTRATIGRÁFlCA Y EVENTOS DE OCUPACIÓN PREHISPÁNICA RONCESVALLES - TOLIMA

ESTRA TIGRAFIA CRONOLOGIA ACTIVIDAD

PROFUNDIDAD ( HORIZONTES ) EDADC RESULTADOS EVENTO FOSFORO TOTAL ANTRO PICA

COHIIENCIONAL CAUBRADOS (POlfH "1 MA~OM.STOS}

.;ro a -Z>cm A ACTUAL 4.200iiiim

896 a 1170d.C. Ap, TARDIO 930 • 1970 ppm

·23a -39 em Café muy oscuro OCUPACION El Jordán • la Granja AGROAlFARERA

890 a 1165 d.C

ABp,b, 1020 t 60 O.p.

Café Amarillenlo La GranJa OSQJro RA1 · 100. 115 cm TARDIO 273 • 2405 ppm

..J.9a~cm (relleno artificial) OCUPACION El Jordán - la Granja TUSAS DE MAIZ AGROALFARERA

Ap,b, 1030 ± 60 a.p. SUelo de La Granja U.E.3:

ocuoaciOn 40·50cm

Vegetaco6n bOSCOsa andina bastante

Ap,b, 2850 t 70 a.p. FORMATIVO 1300 • ~830 ppm perturt>ada.

-94 a ·110cm Café Muy OSQ.WO El Jordán 1215 a 830 a.C. OCUPACION El Jordiln - La Granja Plantas invasoras, U.E 14 : 100- 110 cm CE,RAMICA tala excesiva y

ampllac16n del e$pacio abierto alrededOr del

yacimiento.

9760 ± 160 a, p. El Jordán 9650 a 8465 a. e Atea$ bOscosas

u .e . 1~: 110- 130 em dominadas por -110a-151 em Ap•b, OCVPACION tOSOppm robledales y diVé<s•dad

Cafégn~ PRECERAMICA de Cyatheas. eon leve muy oscuro int&tvención antróptca

E.s la zona mas 'rla y 12.910 ± 60 a.p . Su antlgOeded no húmeda de toda la

El Jotdiln pennite la -secuencia. U.E. 10· 1 00·120 cm ealillraci6o

8 · 151o · 161 cm Calé Amarl~ento SIN OCUPACION 312ppm

_Qscuro

C uadro 1

> e :;! (j)

o m )>

~ z --1 )>

~

m

~ "'' ;::;! m :r; Vi 'V )>.

z () )> (j)

.......

....... t:../1

Page 111: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

116 EXPLORACJONES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRA L

versas regiones geográficas de l suroccidente hasta el a i'lo 2.000 a.C. (Salgado J 986a, 1989 y 1995 ; Múnera y Monsalve 1998) , época a partir del cual se inicia un período de aproximadamente quini·entos a mil af10s. sin mucha infom1ación arqueológica que exp lique los pro­cesos de cambio en los s is t e rTras '>oc ioeconómicos de grupos igualitarios (bandas) h:1cia sociedades jerarquizadas.

Entre mediados del segundo e inicios del primer rrlilenio a .C. aparecen en el registro arqueológico evidencia,<; de un período forma­t ivo tardío representado por sociedades agrícola.<: con un alto desa­n·ollo de la cerámica y de la orfebrería y claros indicios de compleji­dad social: llama en la región Calima y Valle del río Cauca: la fase t emprana de San Agustín, en e l alto Magdalena y de Tumaco- l()lita ,

en la costa pacífica colombo- ecuatoriarr a y quizás grupos portado­res del esti lo Marrón Inc iso d e l Viejo Cald as y de la región Antioque i'la.

Estas tempranas comunidades agroal fareras perduran hasta el siglo 1 a.C.: los materiales ce rá micos y orfebres conservan afinidades esti lísticas entre sí, pues comparte n elementos formales y temas iconográficos indicando intercan'lbio de conocimiento . .:; y un pemamiento simbólico sirnilar (Cardale 1992 : Cardale et al. 1989; Llanos 1995 y 1997; Salgado 1993; Salgado y Rodríguez 1994; San­tos 1993).

Hasta ahora en el Tolima 110 existía información recogida , por especia listas , que permitiera establece r in ferencias relat ivas· a la pre­senc ia de comunidades de l período formativo tardío en la región. Otm de las contribucion c~ del prec;ente estudio e<; la de haber regis­n·ado un sue lo . de ocupación J e l período formativo tardío. que fue posi ble dat;.ir en e l año 900 a.C. y cuyo resultado cal ibrado propor­ciona una edad estimada con un rango de antigüedad que es tá entre 12 15 ~~ 830 aí'los a .C. (Cu<ldrn 1 y fechas de rad ioc;uhono).

En términos gene ra les, l<:l cerámica se identifi ca con In de los esti los a lfareros tempranos de otras áreas como San Aguc;tín. Calima

y Viejo Caldas. No obst ante. la muestra es poca y no muy diagnóst ica lo cua l limita nuestras deducciones.

Finalmente, la documentnc i<'>n de este período de ocupación, en la cord ille ra Centra l t olimensc. abre nuevns perspectiva<; de investi-

Page 112: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

I,AUTAS DE ASENTAMIENTO PREHISJ'ÁNICAS 117

gación sobre el formativo a nivel del suroccidente del país y rcafinn,1, una vez más, que e l desconocimiento sobre un de-terminado período arqueo lógico puede deherse nuís a la carencia de estudi os sislemáti ­cos que a la ausencia de yaci mientos de dich a época en IItH\ región .

En los últ imos sig los del primer milenio antes de C ri sto se pro­dtll.:en una serie de cambios que se i'lalan un desarro ll o hm:in c;n<: i ed<~­

des con una mayor complej idad soc io-cultural. El registro arqueoló­gico muestra la existencia de un período tr:.msicional. que -.c puede c;ituar entre los o; iglos cuarto~' primero antes de C.-isto , con una o;e rie de transfo rmaciones graduales en varios elementos de las pauta .... de asen tam iento , en los estilos cerámicos y en la tnetalurgia; confor­mándose culturas con una marcada tendencia regional e identidad propia, las cuales tuvie ron su período de máximo ec;plrndnr en los primeros 500 a 700 ai\os del primer Milenio de nuestra era.

A esta época se le puede denominar como e l período clás ico regiona l de l suroccidente colombiano y en e lla se inscriben cu lturas re~ionales como San Agustín (desarrollo de la arquitectura Mep;alítica y del arte escu ltórico) y Tierradentro (construccic'ln de hipogeos y estatuaria), en el Macizo Colombiano: Tumaco - Tolita. en el li toral Pacífico; Yotoco, en Calim a: Malaga na. en el va lle del Cauca; Q uimbaya clásico, en el vie jo Caldas (norte de l valle medio del río Cauca v An tioq ui a) v Tolima, en la zona ce ntral del país. . .

Estas comunidades de agricultores sedentario:; sobresalen por haber ocupado toda la v;Hiedad de pais::tjes ex isten te!) en el su roccidente (costa , llanura a luvial, vertientes de las cord illeras, v:~­lles interandinos cál idos y templados, páramos y nevados ); al igual que por una fina y bien acabada alfare!Ía con diferentes estilos cerámicos en cada región y por una ma jestuosa meta lu rgia con fines ritua les y de prestigio (A rchi la 1996: Bray 199:l; Bruhns 1990; c,u·da le et a l. J 989; Ca rda le 19Sl2: Llanos 1990. 199 5 V 1997; Plél­zas y Fa lchetti 1983: Plazas 1990 y 1 992; Salgado 1993 y 1 996; Santos 1993).

En tre los diferentes esti los cerámicos v o rfeb res de toda la re­gión se obse rva una gran similitud en técnicas, motivos y en menor proporción formas que se comparten; indicando t:ontactos por 111edio de redes de intercambio de bienes mate1iales "objetos de lujo" v a nivelec; de pensamiento "simbolismo", a larga distancia , en tod<; el

Page 113: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

118 EXPLORACIONES A RQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

suroccidente (Langebaek, 1993 y 1 995; Gnecco l996) . EstOs víncu­los también penTliten sugerir que las diferentes á rea:, estuv ieron culturalme..r1te interrelacionadas )' postular la existencia de una "ho­mogeneidad cultural básica" para toda la región (Carda le y Herrera 1995; Llanos 1997; Museo del Oro 1996; Plazas v Fa lcheui 1983; Salgado y Rodriguez 1 994 ). ·

Para la región tolimense, la información científica disponible para esta época es aun rnuy fragmentaria . H ace mas de rned io .siglo en la regió n sur del Tolin\a se document6 la existencia de un estilo de me­talurgia que presenta marcadas afinidades estilísticas y tecnológicas con la orfebrería clás ica Cal inla, de la cordillera Occidental (específicamente con la del periodo Yotoco). (Cubillo~ 1945; Pérez de Barradas 1954 y 1966). Recienten1ente, estas similit11des han sido nuevamente observadas y reconfirrnadas en piezas de metal prove­ni ente~ del sitio Malagana, en la sue la plana del Valle del Cauca ( M use o del Oro 1 996; Herrera ct al. l 99 S) .

Con relació n a la a lfarerfa , investigaciones posteriores adelanta­das en la misma zona (municipio de Chaparral ), también han repor­tado la presencia de unas pocas vasijas y fragmentos d e cuencos con los típicos rasgos de fo rma y decoración de la a lfarería Yotoco (Rodríguez 1989 y J99J : Chacín 19<) 1 y 1995).

Varios auwre han deste~cado estos fragn1entarios datos (01-fe­brería y cerámica), los cuales les han permitido postular contactos e intercambios entre el Tolima v otras á reas culturales del suroccidente corno Calima, vall e medio dei río Cauca y el alto Magda lena e inferir la presencia de culturas regio nales con identidad propia. pero rela­cionadas entre si a través de un pensamiento s imbólico que se expre­saba por medio de ra gos iconográficos compartidos entre dichas re­giones (Pérez de Barradas 1954; Plazas y Falchetti l 983; Card:tle et a l. 1989; Cardale y Herrera 1995; Bn1~r 1992; Salgado y Rodríguez 1994; Llanos 1995 v 1997).

Este es uno de los péríodos donde "e hace más nmnri a la ause n­cia de investigación que permita conocer la dinámica de los cambios culturales sucedidos durante los prirneros siglos después de Cristo (t ransfo rmación e n las pautas d e a.,.o;e ntamiento, en los estilos cerámicos y orfebres) y obtener resultados de C 14 que t1yuden a pre­cisa r la cronología.

Page 114: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

PAUTAS DE ASENTAMIENTO PR EHISPÁNICAS 119

En la arqueología regio nal del To lima :::e conocen dos d atacio nes del siglo IV d .C.. las cuales están ubicadas dentro del marco cronológico esperado para el clásico regional del surocciclent e. Las fechas provienen ele excavaciones en sitios de viv ienda de la regi6n de H errera y Chaparral y .se obtuvieron en los niveles más profundos de ho rizontes antrópicos sepul tados pot capas de ceniza volcánica y rellenos posteriores (Rodríguez 1989. 1990 y 1 <)9 1 ).

Los materiales asoc iados a los niveles fechados corresponden a fragmentos de cerán1 ica que en sus características (Pasta, desgrasa nte , espesor, baños y tratamiento) difieren un poco de la cerámica de los niveles superiores: indicando diferentes fases de ocupación _v sugi­riendo cambios progresivos en la cerámica y un vinculo ancestral en­tre Jos materiales w lturales de un período (Clás ico regiona l) y los del tardío. Sí las deducciones de Rodríguez ( 1989. 1990. 199 1 ? comunicac ión pe rso nal 1998) son correctas, los análisis d e radiocarbono d el siglo IV d.C. serían la únicas d~üaciones que se tienen, hasta ahora. para el período CJ:1sicn Regional en la zo na co rdillerana del Tolima.

Otras evidencias relacionadas con el período clé1sico regional para el Tolima, provienen de piezas producto del saqueo. para las cual es se desconoce su asociación de hallazgo (entre ellas una parte de 1 ::~

colección del Museo de la Univers idad del Tolima) , Así misn1 0, se conocen conjuntOs encontrados en salvamentos. como el reali zado por Velandia v León en El EspinaJ (co municación personal 1995) . o el dE>! al"to anterior en Suárez (Botiva, comunicació n personal 1996).

En ombos lugares se trata de enterramientos. en tumbas de pozo con cámara lateral. acompaúados de cerámicas (especialmente cn­pas, ollas y alcarrazac;) , decoradas con engobes rojos. complejos di­sei'los geon1étricos en pintura negativa y decoración esgrafiada . En general. por su forma y decoraci<)n. estas vasijas y. ocasionalmente, la orfebrería asociada (pa ra el caso de Suárez). presentan una estre­cha relación estilística, ct~yo~ elementos mas sobresa lientes pueden ser asignados formal y temporalmente a los inicios del primer milenio después de C risto o época de Jos d esarroll.os culturales regionales en el suroccidente ele Colombia ,

Recientemente. en el municipio de El Guamo, ha sido reportado Lm sitio de asentruTIÍento que se caracteriza por una estratigrafía donde

Page 115: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

120 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRA L

se conservaron tres fases de ocupación antrópica, intercaladas con eventos naturales (Tobas vokáníca- v arenas de río ), que señalaban ro~ibles avalanchas, inundaciones y abandonos ternporales del lugar (Cift¡ente-s 1994).

En los niveles más profundos sobresalen dos grupos cerámicos (Cuamo Ondulado y Guanw Pintado), relativamente nuevos para esta región periferica al vall e del Magdalena ( Piedemonte ori.euta l de la co rdillera Central). Por sus características formales y decorativas (alGuTazas, cuencos , vasijas globulares y aquilladas, fr-anjas de pin­tura ro ja encima de Jos bat1os , ondulaciones v crestas sobre los bor­des). el autM (Cifuen te,<> t 994 }, ubica esta oc¿tpacíón, temporalmen­te , hacia mediados del pri mer 1nilenio después de Cristo.

Dicha edad concuerda con la periodización arqueológica que he­mos abo rdado en los {d timos párrafos; sin ernbargo, estos materiales parecen inscribirse más dentro de la problemática de las ocupaciones del "denominado Formativo'' del valle dt>l Magdalena. Hasta tanto no se tengan mayores datos de campo, no se podrá argu mentar nin­gún tipo de relación entre los desanollos cultu rales contemporáneos de la zona corclillerana v los de las vertientes bajas'! zonas cercana¡; al valle del Magdalena.

Para tenninar. ]a falt<1 de investigación de campo orientada a reso lver interrogantes sobre la di námica de los desarrollos culturales ocurrídos, en los primeros siglos después de Cristo, en el Tolima ~r la ITIÍnima información confiable y disponible acerca de los hall azgos producto de la guaquerí::~ (proceden cia~' asociación) so lo permiten. en el momento , hacer corre laciones esti lísticas. con otras áreas cu ltu­rales, de los materiales de cerámica v oro que durt~nte décadas se han reconocido como "cultura o estilo Tolima" y que conforman lasco­lecciones que sobre la región exponen diferentes museos.

El último período de ocupación prehispánica en el Tolima es el que cuenta con un mavor número de sit ios reportados, lo cual no quiere decir que e~:te mejor invest igado. Los arqueólogos que han trabajado recienten•ente en la zona reconocen una ocupación que corresponde a grupos agroalfarerns que se asentaron a lo largo de la cordillera Central. En Ot ras áreas arq ueológicas del surocciden te co­lombiano se han ident ificado pt~utas. de asentamiento ubicadas crnnológicam.ente entre los siglos VI y XVI d. C.. conocidas como:

Page 116: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

PAUTAS DE ASENTAMIENTO PREHISPÁNICAS 121

Período Reciente en San Agustín ; Sonso en Calima; Complejos Cauca Medio, Caldas, etc., en la región Quimbaya. Para estas regiones se cuenta con una vasta información sobre las pautas de asentamiento y los materiales arqueológicos (cerámica y metalurgia) , un amplio marco de referencia cronológico y un mejor manejo interpretativo de los procesos culturales desarrollados en dichas centurias.

Para el departamento de Tolima, este periodo se ha documenta­do a partir de exploraciones y excavaciones reali zadas en la región de Herrera, Chaparral, alrededores de lbagué y El Guamo (ver Capitulo 11). La cronología absoluta que fecha la fase tardía de este período está conformada por dos fechas de ( 14; las mismas estan datando el final entre mediados del siglo XV y los inicios del siglo XVll d. C. (Chadn 1991 , 1995; Cifuentes 1994).

La época inicial del período tardío aún está por establecerse pues. como se expuso anteriormente, los datos cronológicos del siglo lV d.C., pueden estar fechando una fase temprana de ocupación, rela­cionada con el desaxrollo cultural tardío de siglos posteriores, otorgandole una n1ayor profundidad cronológica al tardío en el "lb lima con relación a Otras regiones del suroccidente.

Sin embargo , las dataciones obtenidas en Roncesvalles indican una edad radiocarb6nica del siglo X d.C., para los asentamientos tar­díos de la zona; s i estos mismos resultados son analizados dentro de la curva de calibración se puede concluir que dicha temporalidad esta en un intervalo entre los siglos IX a Xll d.C. (ver cuadro 1 y fechas de radiocarbono). Esta información concuerda más con el cuadro cronológico de otros desarrollos agroalfareros tardíos, con1o el Com­plejo Cauca Medio del viejo Caldas (en Roncesvalles , fragmentos de este estilo están asociados a las fechas de ( 14

).

La alfarería de este período en el Tolima, se encuentra en toda la cordillera Central; en general, sobresale por tener unos rasgos estilísticos y fonnales similares como son la poca variación de formas, la sencillez en sus decoraciones y el poco acabado superficial . Para el caso especí­fico de Roncesvalles se estableció un sistema alfarero conformado por cuatro grupos cerámicos (Baño Rojo, Café, Amarillo Roiizo y Gris); en el cual predominaron pocas fo11nas correspondientes a ollas y cuencos de diferentes tamaños con escasa decoración, sobresaliendo técnicas como el presionado o muescas triangulares en la parte superior de las

Page 117: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

122 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

vasjjas (ver Figs. 23, 24, 25, 27 y 28) también son frecuentes las asas macizas y figurinas burdas (Figs. 29 y 30). Cerámica con estas mismas características ha sido estudiada con anterioridad, u11 poco mas al sur, sobre la misma cordíllera Central en Chaparral y Herrera (Rodríguez 1990 y 1991; Chacín 1991 y 1995) y en el piedemonte de la misma cordillera, municipio del Guamo (Cifuentes 1994).

Dentro deJ sistema alfarero establecido para Roncesvalles se re­conocen algunos elementos cerámicos foráneos, que indican inter­cambios con otras regiones periféricas. Se identificaron fragmentos de copas y/o cuencos del Complejo Cauca Medio (con decoración presionada circular y caolín blanco y corrugado u-regular; figs. 23: 12,24: J i lO , 26:5 a 7; Lám. Ir: la 3) , establecido para el actual departamento del Quindío y el Viejo Caldas; cuya temporalidad está ubicada a partir del siglo X d.C. (Bruhns 1976. 1990 y 1995; Rodríguez 1987; Osorio 1986 y 1990; Salgado 1996 y 1997). Así tuismo, entre los materiales fue posible registrar partes de una mis­ma vasija que, por sus atributos de forma y decoración (los bordes pertenecen a una vasija subglobular con incisiones achuradas y pre­siones o muescas alrededor del cuello , Fig. 28: 11 : Lám. 11 : 7) , com­parte afinidades estilísticas con la cerámica conocida como Tocaima Inciso; que se distribuye desde la cuenca baja del río Bogotá hasta El Espinal y El Guan1o (Tolima) (Mendoza y Quiazúa 1990; Rozo 1990; Cifuentes 1994; Cubillos y Bedoya 1954).

La presencia en la cordillera Central de cerámica que proviene del valle del Magdalena y el piedemonte de la cordillera Óriental , permite sugerir la existencia de relaciones entre los grupos tardíos de ambas regiones, las cuales pudieron iniciarse desde épocas tempra­nas dentro de periodización del Tardío.

Los grupos portadores del estilo alfarero tardío , en Roncesvalles, desarrollaron unas patttas de asentamiento caracterizadas por obras civiles que comprenden la presencia ele numerosos tambos para esta­blecer viviendas dispersas sobre las laderas y grandes plataformas artificiales cuya finalidad no es muy clara. En algunas partes de este antiguo paisaje se conservan tramos de canünos y senderos que unían entre sí las plataformas y ocasionalmente los tambos.

Un aspecto notndo del paisaje arqueológico de Roncesvalles es la ausencia de campos de cultivo sobre las laderas; no obstante esta

Page 118: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

PAUTAS DE ASENTAMIENTO PREHISPÁNICAS 123

ausencia no implicaría la falta de prácticas agrícolas, pues los resulta­d os a rqueológicos (granos y tusas de maíz) y Jos análisis fisicoquímicos evidencian suelos con buenas condiciones agrícolas; además, los estudios de polen confirman alteraciones antrópicas del bosque natural desde finales del Pleistoceno, las cuales se asentuaron mas durante el Formativo y seguramente en el Tardío.

Las investigaciones de Barrero et. al 1997, Chacín 1995, Osario 1 992, Ramírez 1 996, Rodríguez l99l , Ruiz 1 994 y Tovar l98l de­muestran la presencia de una pauta de asentamiento en tambos y cimas modificadas, para otras zonas de la cordillera Central en el Tolima. Sin embargo, la región arqueológica que presenta una mayor similitud en sus pautas de asentamiento tardías con las reportadas en la presente investigación es Calima, en su período Sonso.

Page 119: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Anexo 1

DESCRIPCIÓN FORMAL Y TÉCNICA DE LOS GRUPOS CERÁMICOS DEL SISTEMA

ALFARERO DE RONCESVALLES- TOLIMA

A. PERÍODO FORMATIVO

l. Con Baño o Engobe

l . Rojo

Pasta:

Color:

Desgrasan te:

Textura:

Cocción:

Supe!ficie:

Baño:

Amarillo Rojizo (7.5 YR 7/6) y Café fuerte (7.5 YR 5/ 6).

Abundante arena de granos finos , fragmentos medianos de cuarzo lechoso y feldespato, p iri­ta de hierro en poca cantidad.

Fina y compacta.

En atmósfera ox1dante bien controlada y en rnuy pocos se observa núcleo central negro por cocción incompleta.

Presenta dos tonalidades, una es el Rojo en la cara interna ( 1 OR 4/4) y Café pálido ( J OYR 6/3) en la cara externa; la otra es Rojo Amarillento (SYR 5/6) en ambas superficies .

Page 120: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

126 EXPlORA ClONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORD1LLERA CENTRAl

Tratamiento:

Espesor de las paredes:

Bordes:

F01·mas:

Díámetro:

Decoración:

2. Café

Pasta:

Color:

Desgrasan te:

Textura:

Cocción:

Supeiflcie:

Baño:

Ambas superficies bien acabadas y evidencian huellas de pulidor, unos pocos conservan bri­llo y hollín.

De 5 a 9 mm.

Solamente tres bordes de los cuales uno es res­tringido y los restantes son abiertos.

Los bordes corresponden posiblemente a un cuenco y a pequeñas vasijas globulares.

El tamaño pequeño de los fragmentos no per­mitió registrar el diámetro.

Los fragmentos con baJ'\o rojo amarillento pre­sentan Llna decoración de acanaladuras lineales paralelas, no muy profundas, y un solo fragmen­to presenta una banda de pintura roja interna.

Los mismos colores de la superficie.

Arenas de granos medianos y finos , fragmentos medianos de cuarzo lechoso, feldespato y líticos, pequei1as cantidades de óxido ferroso, mica­biotita y pirita de hierro.

Compacta- Granulosa.

Atmósfera oxidante bien controlada a excep­ción de los que tienen tonalidad café.

De la misma pasta dilnído, en este grupo se observan tres tonalidades; café ( 7 .5YR 5/4 ); café claro (7.5YR 6/4); café pálido (J OYR 6/3). En

Page 121: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ANEXO 1

Tratamiento:

Espesor de las Paredes:

Bordes:

Formas:

Diámetro:

Decoraciones:

127

los fragmentos café claro hay algunos con ho­llí n y superficies totalmente negras por exposición al fuego.

Regular en ambas superficies; se observan res­tos de hollín y superficies ennegrecidas por fuego. Solamente Jos fragmentos de tonalidad café pálido presentan un mejor acabado de la superficie.

Entre 6y 1 O mm.

Solamente hay dos bordes abiertos.

Parecen corresponder a pequeñas vasi jas glo­bulares.

El tamaño pequeúo de los fragmentos no per­mitió registrar el diámetro.

Un fragmento y un borde conservan franja de pintura roja en la cara interna y sobre el labio; dos fragmentos presentan acanaladuras lineales paralelas.

B. PERÍODO TARDIO

l. Con Baño o Engobe

l. Rojo (6. 74% del total de la muestra).

Pasta:

Desgrasante:

Textura:

Se observaron pequer1os y finos granos de cuar­zo, feldespato y mica biotita y en algunos frag­mentos se detectó la presencia de pequeñas can­tidades de óxido ferroso.

Es fina - compacta y en algunos fragmentos se observó una pasta granulosa porosa.

Page 122: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

128 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Cocción:

Supe¡ficie:

Baño:

Tratamiento:

Espesor de las Paredes:

Bordes:

Formas:

Diámetro:

Decoración:

El 100% de la muestra presentó una cocción en atmósfera oxidante completa.

Es diferente al co lor ele la pasta. Rojo ( LOR 4/6, 5/6, 5/8; 2.5YR 5/6, 5/8); Rojo claro (2.5YR 6/8).

El 70% ele los fragmentos presentan huellas de pulimento, solo el 30% tiene manchas de ho­ll fn y en general la mayoría (77%) están erosionados.

Oscilan entre 5 y 14 mm pero el más común es deS mm.

Los de mayor frecuencia son abiertos ( 11) y ligeramente abiertos y en una mínima propo~­ción con dirección restringida, directa, ligera­mente restringida y d irecta.

Las formas que predominaror\ fueron cuencos, fragmentos de posibles copas. asas y una figurina antropomorfa.

Aunque fueron pocos los bordes que pennitie­ron registrar sus diámetros debido a su tama­ño, los obten idos oscilan entre 7 y 32 cm.

La más común fue el presionado circular en cuerpos (3) y en una tTiínjma proporción muescas triangulares y rectangulares al igual que un cuerpo con presionado circular con engobe blanco dentro de los círculos.

Page 123: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ANEXO 1 129

Il. Con Baño de la Misma Pasta

l . Café (76.6 o/o del total de la muestra).

Pasta:

Desgrasan te:

Textura:

Cocción:

Supe¡:ficie:

Baiio:

Tratamiento:

Espesor de las Paredes:

Bordes:

Cuarzo, feldespato, mica-biotita, pirita de hie­rro en granos de finos a gruesos y oxido de hie­rro en forma de manchas y de granos finos.

Granulosa - porosa a bw·da, granulosa - porosa a compacta y esponjosa- burda a friable.

El 93% en atmósfera oxidante completa y el 7% en atmósfera oxidante incompleta, es de­cir, presenta núcleos negros y grises).

Este grupo mostró varias tonalidades debido a diferentes grados de cocción, erosión inten­sa, hollín y manchas de humo que presentan algunos fragmentos, teniendo en cuenta es­tos elernemos se decidió agrupar las tonali­dades formando un solo grupo, pues sus otras características son iguales. Café ( 1 OYR 5/3; 7.5YR 413 , 5/3, 5/4). Café claro (lOYR 6/4; 7.5YR 6/4). Café rojizo (2.5YR 4/4; 5YR4/4, 5/4). Café Amarillento (1 O YR 5/6). Café os­curo (5YR 3/2).

El 81.4 %de los fragmentos tienen manchas de hollín, solo eJ 65% presenta huellas de pulimen­tO y la mayoría (89.4%) están erosionados.

Oscilan entre 4 y 20 mm, pero los rnás comu­nes son 7. 8, 9 y 1 O mm y el espesor de las asas es de 9 a 42 mm.

Los de mayor frecuencia son abiertos (32) y li­geramente abiertos (18). en menor proporción

Page 124: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

130 6XPL0RACJONES ARQUEOLÓGICAS EN LA COHDILLERA CENTRAL

Formas:

Diámetro:

Decoraciones:

le siguen los directos ( 1 1 ), restringidos, ligera­mente abie1tos y ligeramente restringidos.

Predominan las o llas, ( 14 fragmentos) y en menor proporción los cuerpos y bases de po­sibles copas.

Entre 8 v 32 cm. '

Las más co1nunes fueron muescas triangulares y rectangulares en cuerpos ~, bordes (25 frag­mentos), incisiones ovaladas y lineales (8 frag­mentos), y varios cuerpos con: pintura positi­va ro ja (3), cuerpos acanalados (2). muescas ( 1 ), incisiones ( 1) y uno con aplicaci6n de una rana y muescas triangula res; otro cuerpo con incis ión lineal cruzada , (achurado cruzado) y muescas triangulares.

2. Amarillo Rojizo ( 11.63% de la muestra total)

Pasta:

Desgrasan te:

Textura:

Cocción:

Su pe1ficic:

Baf1o:

Tratamiento:

Cuarzo, feldespato, mica - biotita y pirita de hierro d e granos finos a gruesos, no se obser­vó presencia de óxido de hie rro.

Es granulosa, burda y en la mayoría friable.

El 89% en atmósfera oxidante completa y el restante en atmósfera oxidante incompleta (es decir presentó núcleos negros y grises).

Amarillo Ro jizo (5YR 6/(, , ()/8: 7.5YR ó/6) .

El 82 o/o de los fragmentos tienen mancha!'. de hollín. solo el 7 1% presentan huellas de puli­dor y la gran mayoría (92%) están erosionadas.

Page 125: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ANEXO 1

Espesor de las Paredes:

Bordes:

Fomws:

Diámetro:

Decoraciones:

131

Oscilan entre 5 y 14 mm. pero el más común es de 8 rnm .

Los de mayor frecuencia son abienos ( l 1 ) , y en una mínima proporción con dirección li ­geramente restringida, restringida , ligeramen­te abierto v d irectos.

Predominaron las ollas y con un solo elemen­to: base, volante de uso, y figurina.

Oscilan entre 1 O y 28 cm.

Las más comunes son muescas triangulares y rectangulares (11), y un cuerpo con pintura positiva ro ja.

3. Gris (4.64% del total de la muestra)

Pasta:

Desgrasan te':

Textura:

Cocción:

S uperficíe:

Baño:

Tratamiento:

C uarzo, feldespato y nüca-bintita de granos finos a gruesos. no se observó prese ncia de óx ido fe rroso.

Granulosa-burda y granulosa-compacta.

El 98'111 en atmósfera oxidante completa y e l restante en atmós fera oxidante incompleta.

Gris (7.5 YR 5/1 ); Gris Rojizo Oscuro (2.5 YR 4/l, 5/ 1).

El S 1% de los fragmentos t ienen manchas de hollín. Solo el 22% presentan huellas ele puli­mento y la gran mayoría (92%) está n erosionados.

Page 126: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

132 EXPLORAOONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Espesor de las Paredes:

Bordes:

Formas:

Diámetro:

Decoraciones:

Oscilan entre 4 y 14 mm pero el mas común es de4 mm.

Los de mayor frecuencia son abiertos y en una menor proporción, restringidos.

Las formas que predominan son las ollas.

Los bordes fueron muy pocos y pequef\Os por esta razón solo se obtuvo un solo diúmetro de 20 cm.

Este grupo es poco sígnificativo debido a su poca cantidad, solo un cuerpo tiene muescas ovaladas.

Page 127: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Anexo 2

ESTUDIO PALINOLÓGICO

Alexis Jarami llo

Gustavo Lozano

RESUMEN

Se observaron dos zonas bien definidas detertTiinadas por dos eventos culturales diferentes. Una basal que en su interior contiene dos subzonas: Un í'\ primera subzona ( 1 A) ubicada en el espectro obtenido a 1.35 m, donde se observa la presencia de extensas áreas boscosas dominadas por robledales, pero con manifestaciones muy sutiles de in tervención y perturbación del ecosistema; se conservan altas poblaciones de especies nativas. aunque se puede inferir algún uso del espacio al interior del bosque, a esta subzona se encuentran asociadas las condiciones climáticas más frías v húmedas observa­das en todo el espectro bioestratigráfico.

En la segunda subzona ( lB) se observa un retroceso de las áreas boscosas asociado a incrementos ele Pteridophytas (Helechales), s in presentarse un uso intensivo del recurso forestal ; no hay evidencias de ningú n tipo de cultivo, ni selectividad de especi e!>, lo que si mues­tra es la ampliación espacial de la zona intervenida que redujo la población de los elementos de bosque.

En la segunda zona representada por la muestra tomada a 1.00 m, se observa el área de la terraza aún dominada por la vegetación boscosa andina pero rnuy perturbada y un ecos istema deteriorado con respecto las condiciones observadas en la zona ant cl"ior.

Page 128: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

134 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

En general la población de especies fué muy alta, en particular en las muestras de 1 .00 y 1.20 m, mientras hacia la parte basal del análi­sis, ubicada a 1.35 m de profundidad, las poblaciones son relativa­mente inferiores .

ZONACJÓN

Suelos asociados a andisoles en altitudes alrededot" de los 2000 a 2500 msnm, hacia el costado oriental de la cordillera Central, presen­tan un porcentaje entre el 1 O - 48 % de polen bien preservado en los suelos, entre un l5 - 63% de polen deteriorado determinable y entre un 12- 38% de polen deteriorado indeterminable (Salomons 1989).

La zonación de la terraza 1, tmidades de excavación 1 O y 14, en La finca El Jordán (Roncesvalles- Tolima) se caracteriza por pÍ·esentar 2 zonas bien definidas. Una zona basal denominada zona uno con dos subzonas (A-B) y una zona superior, en total se realizó la interpreta­ción con base en 798 granos contabilizados donde se reconocieron 112 palinomorfos.

Tabla l.

ZONA

2

Distribución vertical de zonas y subzonas de la secuencia pedoestratigráfica de la terraza 1 , U .E . 10 y 14 , El Jordán (Roncesvalles- Tolima).

SUB ZONA

lB lA

PROFUNDIDAD (cm)

100 120 -135 120 135

En este diagrama la vegetación cerrada (bosque) , está provista por Quercus sp -Fagaceae-, Cyathea sp 1- Cyatheaceae -,CJ,athea sp 2-Cyatheaceae -,Cyathea sp 3- Cyatheaceae -, Cyathea sp 4- Cyatheaceae -, Cyathea sp 5- Cyatheaceae -, Cyathea sp 6- Cyatheaceae -,Cyathea sp 7- Cyatheaceae -. Cyatltea cf Hon-ida - Cyatheaceae -, Cyathea cf trichipteris - Cyatheaceae -,Hedyosmum sp - Chloranthaceae -,

Page 129: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ANEXO 2 135

Rubiaceae. Cecropia sp - Cecropiaceae -, Caesalpinaceae, Smilax sp -Smi lacaceae -. Clethra sp - Clethraceae -, Ficus sp- Moraceae -. Croton sp- Euphorbiaceae -, Salvia sp- Labiatae -, Bignoniaceae, 13romeliaceae l nde t 1, Bromeliaceae Indet 2, Tabehuia sp - Bignoniaceae - . Anacardiaceae, Loranthaceae, Ficus sp- Moraceae -.

La vegetación abierta esta suministrada p or Gramineae y Cyperaceae, se tomaron independ ientemente todas las Arecaceae. y los e lementos p ioneros están rep resentados por Compositae y Melastomataceae.

1. ZONA DE POLEN 1: 120 - 135 cm

Las muestras procesadas provienen de la unidad de exc<wación 14 (pared sur- horizonte Ap

4b.J Un 70 - 85 % de los granos de polen

están preservados, mientras que los granos de polen dete riorados determinables estan en tre un lO- 15 %y el porcentaje ,de polen dete­riorado indeterminable fue inferior al 1 O- 15 %.

Esta zona se dividió en dos subzonas, se caracteriza por poseer 40 especies en la subzona superior o lB y 67 especies en la subzona inferior o lA. Presenta poblaciones elevadas de palinomorfos, pero d ebe observarse corno la diversidad es mavor en la subzo na B (superior) con respecto a la subzona A (inferior). En esta wna. en genera l, se observan extensas áreas boscosas dominadas por robl e­

dales. gran diversidad de Cyatheas y otros elementos de bosque los cuales fueron intervenidos an t róp icamente. evidenciando retn)cec;os del bosque y de los rob ledales hacia la parte superior de la zona. No se observan á reas de pastizales, ni á reas dominadas por e lementos pioneros.

Esta zona pone de n1 an ifi esto una vegetación producto de un estado su cesional natural levem ente intervenido por actividad antrópica; se sugeriere para esta zona un ambiente de bosque con la

apertura de claros en su inte ri or no por acción natural si no producto de la manipulación del ecos is tema, se observan como pos iblemente estos claros son de mayor extensión espacia l hacia la parte superior de la zona (1 B) q ue en la parte inferio r. las condjciones ambientales

de esta zona son mucho más húmedas que las observadas en la zona dos y ligeramente m ás frías.

Page 130: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

136 EXJYLORAGONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

1.1 . Subzona de Polen lA: 135 cm

Esta subz.ona se caracteriza por presentar 73 especies, mostrando un espectro bastante diverso. Se observa aquí la presencia de bosque alto andino con una uistribución en el espectro particular de 4 1.45% o sea un 79. 18% del espectro general, le sigue lo elementos pioneros con una distribución en el espectro particular de 5.8 l % o sea un ll.09 o/o uel espectro general, Arecaceae presentan una distribución en el diagrama particular d. e 4 . 72 o/o o sea un 9 .O l %del diagrama general y por último Gramineae quien presentan una distribución en el d iagra­ma particular de 0.36 o/o o sea un 0.68 'Ml del dia6rrama general.

Esta zona se caracteriza por presentar poblaciones interesantes de Quercus sp - Fagaceae · 14 ,54 %, Cyatlzea cf t7'ichipteris -Cyatheaceae - 0 .36 %, Cyathea ~f h.onida ~ Cyatheaceae - 0 .36 %, C_yathea sp 1 - Cyatheaceae - 4.36 % CJ!athea sp 2 - Cyatheaceae -0.72 %, Cyathea sp 3 - Cvatheaceae - 2.18 % Cyathea sp 4 -Cyatheaceae- 2.18 o/o Qyathea sp 5- Cyatheaceae- O. 72 %. Cyathea sp 6 - Cyatheaceae - O. 72 %, Cyatheaceae - O. 72 %, Araceae 0.36 %, Cornpositae Indet 1 · 4.36 %, Acaulimalva purpúrea - Malvaceae-1.09 %, Piperaceae 0.36 o/o, Pol,ypodium sp 1 . Polypocliaceae - 10.9 %, Polypodium sp 2 - Polypodiaceae - 1.09 %, Polypodíum sp 3 -Polypodiaceae- O. 72 %, Polypodium sp 4 - Polypodiaceae- 0.72 %, Polypodium sp 5- Polypodiaceae · 1.81 %, Arecaceae 4.36 %. Hypolepis sp · Deenstaedtiaceae - 5.45 %. Loranthaceae 2.9 %, Ficus sp -Moraceae- 5.09 o/o, Bignoniaceae O. 72 %. Valelian.a sp- Valerianaceae · 0.36 %, Brorneliaceae 0 .36 o/o Croton sp - Euphorbiaceae - 0.36, Selaginella sp 1 - Seláginell aceae - O. 72 %. Selaginella sp 2 . SeJaginellaceae · O. 72 %, Vittaria sp 3.27 %. Salvia sp - Labiatae -t.09 <M,, Tabebuia sp- Bignoniaceae- 3 .27 %.

El yacimiento presenta en este momento unas condiciones de bos­que alto andino dominado por robleuales y Cyatheas con las condicio­nes particulares de bosque en las proporciones más elevadas observa­das en todo el perfi l gracias a la mayor diversidad registrada alli y posiblemente a la mayor cobertura que este presentaba en ese 11\0-

mento. Este bosque se caracteriza por tener unas condiciones de ele­vada humedad, la cual es ligeramente superior a la observada en la subzona 1 B y posiblemente las condiciones más frías a la que estuvo sometido el yacitniento.

Page 131: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ANEXO 1 137

La presencia de helechales de Pterydophita~ con dominancia de Polypodium sp cuyas poblaciones son muy altas para este tipo de an1-bientes, así como la presencia muy su til de elementos pioneros, ponen de manifiesto que el área en este momento ya presentaba perturba­ción de carácter antróptco posiblemente enfocando el esfuerzo en el despeje de cobertura vegetal para adecuación del terreno o la búsque­da de espacio fís ico; es ele aclarar que no se observa elemento cultiva­do alguno o evidencia de selectividad de especies tanto en el uso del recurso forestal, como en el etnobotánico. No se observan claros aso­ciados a vegetación de pastizales (Gramineae) y los elementos pione­ros se encuentran en poblaciones muy bajas .

Esta zona en general pone de manifiesto una vegetación producto de un estado suces ional natural muy levemente interven ido por activi­dad antrópica posiblemente en la búsqueda de espacio físico sin co­bertura vegetal.

1.2. Subzona de Polen 1 B: 120 cm

Esta subzona se caracteriza por presentar 40 especies mostrando un espect ro menos diversü en comparación con la subzona anterior. Se observa aquí una disrninución de las áreas de bosque alto andino con una distribución en el espectro particular de 28.3% o sea un 9 LO % del espectro general. le sigue los elementos pioneros con una d istri­bución en el espectro particular de 2.8% o sea un 9.0% del espectro general , Arecaceae presentan una distribución en el diagrarna particu­lar de 0.3 % o sea un 1 .O % del d iagrama general. No se observó la presencia de gram i neas.

Se caracteriza por presentar poblaciones interesantes de Araceae 4.6%, Pilularia sp-Marcileacea - 0.3 cyo, Compositae lnclet 1-2.4%. Authurium sp - Araceae · 16.2 %, Quercus sp - Fagaceae - 18 %, H edy osmum sp - Cloranthaceae- 0.37 %, Monolete psilado 1 1.9 %, Malvaceae 0.6 %. Piperaceae 0.3 %, Polypodium sp 1 - Polypodiaceae - 14.0 o/o, Polypodium sp 2- Polypodiaceae- 3.2 %, Pob1podhun sp 3 · Polypodiaceae - 1,8 %. Pob1podium sp 4 - Polypodiaceae - 0.6 91,, Cyathea sp 1- Cyatheacea.e- 6. 1 %, Cyathea sp 2- Cyatheaceae- J .5 %. Cy ath.ea sp 3- Cyatheaceae- 0.6 %. Arecaceae 0.3 o/o, Ly copodium sp - Lycopodiaceae t .8 o/o, Selagiitella sp 1 - Selaginellaceae - 1 .8 %, Selaginella sp 2 - Selaginellaceae - 1 .2 %. Cvperaceae 0.3 %,

Page 132: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

138 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGiCAS EN LA CORDll..LERA CENTRAL

Dennstaedtía sp - Dennstaedtiaceae- 0.3 %, Apocynaceae '? 0.3 %, Rubiaceae 0.6 %, Malphigiaceae 0.3 %, Croton sp- Euphorbiaceae-0.3 %, Miconia sp - Melastomataceae - 0.3 %, Hypomicetes (Hon­gos) 0.3 %,Bromeliaceae 0.3 %, Gramm itis sp ? - Grammitidaceae­l.22 %, Valeriana sp- Valerianaceae - 0.3 %, Bignoniaceae 0.9 %.

El yacimiento presenta en este momento unas condiciones de bos­que alto andino dominado aún por robledales los cuales, a pesar de la disminución de la zona boscosa, mantienen sus poblaciones e in­cluso muestran un leve incremento; esto posiblemente, debido a una gran <lisponibilidad de bancos de semillas e individuos juveniles en el zotobosque (lo cual es muy característico de los robledales), apro­vechando los claros para germinar y crecer; todo esto gl"acias a que no se sometió el bosque a procesos intensivos v constantes de t<1la.

También se observa el aumento en las poblaciones de helechos Pterydophitas; asociado a que la actividad antrópica de la región pudo modificar levemente el paisaje sin hacer uso del suelo eón fines agrícolas. Tampoco se evidencia selectividad en el uso del recurso forestal, ni claros asociados a vegetación de pastizales (Gramineae) y los elementos pioneros se encuentran en poblaciones bajas.

La terraza en este momento se encuentra dominada por elemen­tos de bosque los cuales "iOn muy homDgéneos en su composición y moderadamente diversos (Robledales). Se pueden observar condicio­nes dirnáticas húmedas y frías , pero ligeramente más secas que las de la subzona lA.

2 . ZONA DE POLEN 2 : 100 cm

La muestra analizada proviene de la U.E.l O (pared norte- hori­zonte Ap.~b) . Una vez procesada fue pos ible hacer un conteo de 336 granos que se caracterizan por presentar un porcentaje de 80 a 85 o/o de grat1os bjen preservados e identificables, un 5 a un lO% de granos de polen deteríorados pero identificables '! un 1 O - 15 Wo de granos deteriorados no identificables.

La muestra presenta una elevada población de granos con una alta diversidad de especies . Se observaron un total de 65 palinomorfos. Se presenta una marcada don1it1ancia de lns elementos

Page 133: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ANEXO 2 139

de bosque representada con un 24.03 % del espectro particular y un 79.46% del espectro general , le siguen en su orden las Arecaceae las cuales constituyen un 3.85 o/o del espectro particular o sea un 12.73% del diagrama general; los elementos pioneros tienen una distlibuci6n en el espectro particular de 1 .4 7 %, que en el diagrama generAl repre­sentan un 4.86 %, las Gramíneas están representados con una distri­bución del 0.89% en el espectro panicular equivalente a un 2.94 q.{) del diagrama general.

Se observan en es ta nwestra poblaciones interesantes de Moraceae- 0.89 %, Cyathea sp 1 - Cyatheaceae- 2.08 %, Cyathea sp 2- Cyatheaceae- 6.25 %, Cyathea sp 3- Cyatheaceae- 0.89 o/o Cyathea sp 4 - Cyatheaceae - 1.48 %, Cyathea sp 5 - Cyatheaceae - 0.89 %. Cyathea sp 6 - Cyathe:etceae - 0.59 %, Cyathea sp 7 - Cyatheaceae LAS %, Cecropia sp - Cecropiaceae 2.08 %, H edyosmum sp -Chloranthaceae 1.48 %. Ericaceae 1. 78 %, Rubiaceae 0.59 %. Bignoniaceae 0.29 %, Quercus sp - Fagaceae 2.08, Caesalpinaceae 0.29%, Polypodium sp 1 - Polypodiaceae 1. 19 %. Gramineae 0.89 9-ú, Deenstaedtiaceae (?) 15.4 %. Cyperaceae 3.57 %, Asteraceae Indet. l 0 .89 %, Po[ypodium sp 2 - Polypodiaceae 0.89 %, Peperomia sp -Piperaceae 0.89 %, Polypodium sp 3 - Polypodiaceae 1 . 19 %. Lycopodiunl sp- Lycopodiaceae 2 .98 %, Arecaceae 3.~5 %, Anthuryum sp.- Araceae 1 O.~ J %, Selaginellasp.- Selaginellaceae 4. 75%, .Ericaceae 4.16 %, Asteraceae 1.4 7% y Smilax sp. - SmibKaceae 0.89 %.

Esta muestra no presenta indicios de taxa cultivables. lo que indi ­ca que el área del yacimiento no fué utilizada en est e motnento para agticultura. En general la muestra representé\ un área dominada por la vegetación boscosa andina bastante intervenida con respecto a la.;; con­diciones arnbientales observadas anteriormente. No existen zonas de pastizales de grarnineaes. Se observa una elevada presencia de vegeta­ción pionera y una mayor ampliación del espacio disponible en el bos­que a partir de la tala, indiscriminada y excesiva, por los moradores dd sitio, disminuvendo considerablemente la extensíón del bosque alre­dedor del yaci.miento; se observa muy poca regener::~ción del mismo y una muy alta intervención del ecosistema.

Algo que es muy particular es la alta presencia de helechos (Deenstaedtiaceae) seiialando que el área del yacimiento presenta intervención al interior del bosque pero sin aprovechamiento del

Page 134: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

140 EXPLORACIONES A RQUEOJ..OGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

recurso suelo, el yacimiento puede observarse con1.o un parche de helechales al interior de bosques de robledales y de Cyatheas.

Las condiciones ambientales posiblemente fueron má~> húmedas que las observadas en la subzona anterior (lB) , muy similares a las observadas en la subzona 1 A, pero la temperatura fué ligeramente la más cálida de todas registradas.

3. CONCLUSIONES

- La bioestratigrafía del yacimiento en la rerr¡¡za 1, unidndes de ex­C<I V<tción 1 O y 14 pone de manifíesto el uso del espacio del v ;;tcimien ­tO para actividades de canícter antrópico, de~c\e 1.35 m hast¡¡ 1.00 m de profundidad que fue lo ana lizado con dicho fíu .

-De acuerdo al manejo ambient:1 l. el es p<1cl o del yaci miento fue ocupa­do por dos grupos diferentes, en condiciones temporales distinta~ y con manejos sobre el eco~ istema sin nada en común. Una ocupación basal ubicada en la zona l , la cual deteriora m11y levemente el medio '! los recursos alrededor de él: mientras el segundo asentamiento, obst·rvado en la zona 2, deteriora fuertemente d bosque a partir de una 1ala exten· siva. pero aún sin aprovechamiento del suelo.

4. TABLA DE ESPECIES OBSERVADAS

En la distribución alfabétita de la lista cada tipo identificado es colocado bajo su nombre genérico y familia.

Nombre Científico Familia

Jamesonia sp Adiantaceae Anacardiaceae Anacardiaceae

Pistia sp Ara cea e

A nthuryum sp Ara ce a e

Ara ce a e 1 ndet l Araceae Arecaceae lndet 1 Arccaceae

Arecaceae !ndet 2 Arecaceae Areca.ceae 1 ndet 4 A.reca.ceae Arecaceae l ndet 3 Are cacea e

Page 135: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ANEXO 2

Apocynacec1e ('?)

Tabelnda sp Bignoniaceae lndet 1

Bignoniaceae Jndet 2

Bromeliaceae Indet 1

Bromeliaceae Indet 2

Caesalpinaceae

Cecropía sp Chenopodiaceae

Hedyosmum sp Clethra sp

Compositae indet 1

Compositae indet 2 Compositae indet 3 Compositae indet 4

Cyathea cf tríchipteris C,yathea cf horrida Cyatltea sp indet l

Cyathea sp indet 2

Cyathea sp indet 3 Cyathea sp índet 4

Cyathea sp indet 5

Cyathea sp indet 6

Cyathea sp 1 ndet 7

Cyperaceae

Hypolepis sp D eenstaedtiaceae

Diaporthacea

Ericaceae 1 ndet l

Ericaceae - lndet 2-

Croton sp Quercus sp

Granlineae

Apocynaceae

Bignoniaceae

Bignoniaceae

B ignon iacec1e

Bromeliaceae

Bromeliaceae

Caesalpinaceae

Cecropiaceae

Chenopodiaceae

Chloranthaceae

Clethraceae

Compositae

Compositae

Compositae

C:ompositae

Cyatbeaceae

Cyatheaceae

Cvatheaceae

Cyatheaceae

Cyatheaceae

Cyatheaceae

Cyatheaceae

Cvatheaceae

Cvatheaceae

Cyperaceae

Deenstaecltiaceae

Deenstaed tiaceae

Oiap01thacea

Eri.caceae

Ericaceae

E u phorbiaceae

Fagaceae

Gramineae

141

Page 136: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

142 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Grammitís sp

Sal11ia sp Loran thaceae

Lycopodíum sp

Malphigiaceae

Malvaceae

Acaulímalva cf purpurea Pilularía sp

Miconia sp Ficus sp

Moraceae

Onnagraceae

Passifloraceae

Peperomia sp Píperaceae

Polypodium aureum

Polypodium sp lndet l

Po(ypodium sp ¡ndet 2

Polypodium sp indet 3 Polypodium sp í ndet 4

Polypodíwn sp indet S

Pteris dejlexa

Cephaelis sp Psychotria sp

Rubiaceae

Selaginella sp lndet 1 Selaginella sp Indet 2

Selaginella cf asperula

Smilaxsp Solanaceae

Tltelipteris sp Umbelliferae

Valerianaceae

Gramtnitidaceae

Labiatae

Loranthaceae

Lycopodiaceae

Malphigiaceae

Malvaceae

Malvaceae

Marsileaceae

Melastomataceae

Moraceae

Moraceae

Onnagraceae

Passi f1 oraceae

Piperaceae

Piperaceae

Polypodíacea

Polypodiacea

Polypodiacea

Polypod iacea

Polypodiacea

Polvpodiacea

Pterídaceae

Rubí aceae

Rubiaceac

Rubiaceae

Sellaginellaceae

Sellaginellaceae

Sellagi nellaceae

Smilacaceae

Solanaceae

Thelipteridaceae

Umbelliferae

Valcrianaceae

Page 137: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

A N EXO 2

Valeriana sp

Monolete psUado H ypomicetes aecidiospora Coniochaeta Gelasinospora retispora Saccoloma sp Lindsaea cf pendula Acrostichum sp Spirogyra Sphaeroedes Bryohita ascospora tipo l ascospora tipo2 Espora Indet l Espora Indet 2

Espora Indet 3

Espora Indet 4

Espora Ind~t 5 Espora Indet 6

Espora lnde.t 7

lndet l lndet 2 I..ridet 3 lndet 4 lndet 5 lndet 6 lndet 7 Indet 8 Indet 9 Indet 10 lndet 11 lndet 12

143

Valerianaceae

Page 138: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

g ~ ~ > "1\

i ~ z m ~ ~ m .-

:;: ~ '- r-o m ::0 ~

~ o

~ ~ r ~ i

o

fiJ o o

-\; o

ID

1 -~

1 !. !. 1

¡;, fiJ ó 'r ~

o 9 p l> ~ 'O ,. (.ol

CT CT ¡,¡ N

H N

p ID ; ' 1 1

1

.

. 1

' .

1 1

1

1

1

10 ,. p CT ~

111 CT -

1

"' 10

p ~

1

N o

~

)>

Profundidad (cm)

Nombre del horizonte

Zonación general del sitio

Polypodium sp indet 1-Polypodiace•

Polypodium sp indet 2

Polypodium sp indet 3

Polypodium sp indet 4

Polypodium sp indet 5

Cyathea of trich ipter ia - Cyatheacasc

Cyathea of horrida

Cyatheaceae

Cyathea sp indet 1

Cyathea sp indet 2

Cyathea sp indet 3

Cyathea sp indet 4

Cyathea sp indet 5

Cyathca sp indet 6

Compositae indet 1

Compositae indet 2

Compositae indet 3

Compositae indet 4

Solaginella sp in del 1 - Soliaginaliaceae

Solaginella sp indet 2

Solaginella of seperula

Aracea indct 1

Pilu laria sp- Marsileaceae

Quercus sp • Fagaceae

Monolete paliado

Aracaceae indet 4

Aracaceae

Cyperaceae

Oeenstaedtiaceae

Apocynaceae (?)

Rubiaceae

Psychotria sp- Rubiaceae

Malphiglaceae

Croton sp • Euphorbiaceae

Mlconia sp • Melastomataceae

Hypomicetas

Bromeliaceae lndet 1

Bromeliaccae lndet 2

Oiaporthacea

Grammitis sp- Grammitidaceae

Valeriana sp · Valerianaceae

Bignoniaceae

Tabebula sp • Bignoniaceae

Page 139: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

1 1

!

. 1

.

Gramíneas

Ascospora tipo 1

Ascospora típo 2

Espora indet 1

Espora indet 2

Espora indet 3

Espora indet 4

Espora indet S

Espora indet 6

Espora indet 7

Cecropia sp • Cecropiaceae

Peperomia sp • Piperaceae

Hedyosmum • Chloranthaceae

Malvaceae

Acuaulinalva cf purpurea . Malvaceae

Lycopodium sp • Lycopodiaceae

Moraceae

Ericaceae 1

Anthuryum sp ·Araceae

Jamesonia sp • Adiantaceae

Valerianaceae

Caesalpinaceae

Chenopodiaceae

Sphaeroedes

Loranthaceae

Erlcaceae- lndet 2

Smilax sp • Smilacaceae

Umbelliferae

Cephaelis sp • Rubiaceae

Bryohita

Aecidiospora

Coniochaela

Hypolepis sp • Deenstaedtiacea

Solanaceae

Ficus sp • Moraceae

Vitaria

Clethara sp • Clethraceae

Drabasp

Gelasinospora restipora

Saccoloma sp

Ranunculaceae

Pteris deflexa • Pteridaceae

Onnagraceae

Polypodium aureum

Llndssea cf pendula

Passífloraceae

Salvia sp. Labiatae

Acrostichum sp

lndet 1 lndet2

lndet 3

lndet4

lndetS

lndet6

Page 140: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

.

1 1

1 1

1

1 1

' . 1

lndet7

lndet8

lndet 9

lndet 10

lndet 11

lndet 12

Thelipteria sp

Piperaceae

Pistia sp • Araceae

Arecaceae lndet 1

Arecaceae lndet 2

Spirogyra

Dignoniaceae indet 2

Cyathea indet 7

Elementos pioneros

Elementos del Bosque

Arecaceae

Pteridophyta

Greamineae

Fungi

Bryophyta

Page 141: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

Anexo 3

ANÁLISIS FISICOQUÍMICOS DE SUELOS

Page 142: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

HZTE % o¡o

Arena Umos A 64 26

Ap, 52 24

AP,¡b, 38 32

AP3b1 72 20

AB 66 24

8 68 20

RONCESVALLES- TOLIMA LA GRANJA

ANÁLISIS FISJCOQUÍMICOS DE SUELOS PLATAFORMA TRES

UNIDAD DE EXCAVACIÓN TRES PARED NORTE

GRANULOMETAIA COMPLEJO DE CAMBIO me/100 gr SATURACIONES %

% Textura

Ph P. TOTAL ccc BT Ca Mg K ST Sea SMg SK Arcilla 1:1 ppm

Na

10 FA 48 4,200 50.0 24 6 150 67 26,0 030 492 300 134 52

24 FArA 5.5 1,970 34,0 16,1 11.4 3,3 1,2 0,20 47.4 33.5 9,7 3,5

30 FArA 6,2 2.405 30.0 14,7 10,3 3 ,1 1,2 0,20 49,0 34,3 10,3 3,8

8 FA 6,3 1,830 33.5 12,8 7,9 3,9 0,8 0,20 38,2 23,6 11 ,6 2,4

10 FA 62 481 30 1 93 4.6 34 1 1 0 ,20 30,9 15.3 11 3 37

12 FA 60 559 280 94 48 33 1 2 020 33.6 17 1 11 8 4 1

e p

% ppm

122 954

4,7 35,2

1,8 58,5

2,2 12,8

1 3 4,0 09 95

AL

meg/100g

1 5

--

---

m X v r o ;:;:l :> n 6 z ITl (fJ

:> ;;:;¡ o e m o r o ()

;=; > (fJ

m z r > n o ;;:;¡ o r r ITl ;;:;¡ > ') m z -l ;;:;¡

> r

Page 143: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

HZTE % %

Arena Limos

ABp2b 1 36 22

e 30 26

RONCESVALLES - TOLIMA EL JORDÁN

TERRAZA UNO, UNIDAD DE EXCAVACIÓN UNO PARED NORTE

GRANULOMETRIA COMPLEJO DE CAMBIO me/100gr SATURACIONES %

% Textura

Ph P. TOTAL ccc BT Ca Mg K Na ST Sea SMg SK Arctila 1:1 ppm

42 Ar 5,9 422 26,0 9.4 6.7 2,0 0,6 0,10 36,2 25.8 7,7 2,31

44 Ar 60 59 23.5 74 4.6 21 0.6 0 10 31 5 19 6 8.9 2.55

e p

% ppm

1.8 2,0

05 0.5

AL

meg/100g

--

)>

z r.l X o

Page 144: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

HZTE % %

Arena Limos

Ap, 56 20

ABp2b1 52 24

AP:Jb2 66 22

Ap~bs 74 20

B 70 22

RONCESVALLES - TOLIMA EL JORDÁN

ANÁLISIS FISICOQUÍMICO DE SUELOS TERRAZA UNO, UNIDAD DE EXCAVACIÓN DIEZ

PARED NORTE

GRANULOMETRIA COMPLEJO DE CAMBIO me/100 qr SATURACIONES%

% Textura

Ph P. TOTAL ccc BT Ca Mg K Na ST Sea SMg SK Arcilla 1:1 ppm

24 FArA 5,5 930 31 ,0 3,90 3,0 0,50 0,30 0,10 12,6 9,7 1,6 1,0

24 FArA 5,3 273 28,7 1,30 0,8 0,30 0,06 0,10 4,5 2.8 1,0 0,2

12 FA 5.4 1,300 30,0 0,70 0,3 0,20 0,06 0,10 2,3 l,O 0,7 0.2

4 FA 5,5 1,050 30,0 0,90 0,3 0.45 0,05 0,10 3,0 1,0 1,5 0,2

8 FA 52 312 27 o o 70 03 020 o 06 o 10 2.6 1 1 07 02

e p

% ppm

3,9 3,0

2,5 1,2

3,8 1,5

2,7 2,5

1 1 1 S

AL

meg/100g

0,7

0,5

-08

rr1 X

" r' o :::0 > n 6 z m V1

> ;;:: 1) e m o r' o 9 ()

> V1

m z r' > ()

o ;;:: o r' r' en ;;:: > () m z -i ;;:: > r'

Page 145: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ÍNDICE DE FIGURAS

l. Mapa con locali zación geográfica de la región estudiada. Toma­do de la carta generallGAC, No. 263, escala 1:25000, departa­mento del Tolirna.

1. Mapa un idades fi siográficas de la región de Roncesvalles toma­do de la aerofotografía No. 160, vuelo (2 11 8, lGAC), escala 1:22.400.

3. Levantamiento topográfico de Buenos Aires.

4. Buenos Aires , terraza 1 , planta y corte del rasgo arqueológico LIJ"'\0.

5. Buenos Aires, terraza 1, planta y corte del rasgo arqueológico dos.

6. Buenos Aires. terraza 1, planta y corte de la twnba l.

7. Buenos Aires, terraza 2, pe rfiles estratigráficos de la U.E. l , pa­redes oeste y sur.

8. Levantamiento topográfico de La Gran ja y El Jordán.

9. La Granja, plataformas 1 y 3a, petfiJes est1·atigráficos de las U.E. 1 y 2, pared norte.

1 O. La Granja, plataforma 3, perfil estraügráfico de la U.E.3, pare-des notte v sur.

11. El Jordán, terraza 1, levantémtiento en planta.

12. El Jordán, terraza 1, reconstrucción estratigráfica.

13. El Jordán, terraza 1, perfil es estratigrMicos de las U.E. l, 2 y 3, pared norte.

14. El Jordá t1, terraza l , perfiles estratigráficos de las U. E. 4 , 5 y 6, pared norte.

Page 146: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

150 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

15. El Jord~m, terraza l. perfiles estratigráficos de las U.E. 7, 8 y 9. pared norte.

16. El Jordán, terraza 1, perfil estratigráfico de la U.E. 1 O, paredes norte y oeste.

17. El Jordán , terraza l . perfil estratigráfico de la U.E. 14 . paredes norte v ~ur.

18. El Jordán, terraza l. perfiles estratigráficos de las U.E. 1 l, 12 y 13 paredes norte.

19. El Jordán , terraza 1, planta y corte del rasgo arqueológico uno.

20. Patio Bonito, planta y corte del rasgo arqueológico uno.

21. Patio Bonito, planta y corte del fé\sgo arqueológico dos.

22. Reconstrucción aproximada de formas y decoraciones del siste­lna a lfarero formativo de RoncesvaJles - Tolima.

1. Vasija subglobular, bai1o café. El Jordán, terraza 1, U.E. 14, cuadrícula B: 80-90 cm, No. 3597.

2. Vasija subglobular con franja de pintura roja en el labio interno, bai1o Café. El Jordán , terraza l. U.E. 10:90 - lOO cm, No. 3040-304 1.

3. Vasija globular, baño rojo. El Jordán, terraza l. U.E. 14, cuadriculaA: 100-llOcrn, No. 3589.

4. Fragmento con acanaladuras lineales paralelas . bai'lo rojo. El Jordán, terraza 1, U .E. 14, cuadrícula A: 1 00-J 1 O cm. No.3590.

S. C uenco de borde restringido, bai1o rojo. El Jordán, terrazH l . U.E. 14, cuadrícula A: 110-11 O cm, No. 359 1.

6. Vasija de borde ligeramente directo, bai1o rojo. El Jordán , terraza l, U.E. l4, cuadrícu la B: 80-90 cm, No. 3596.

7, 'Fragrnento con acanaladuras lineales paralelas, baño café. El Jo ruán , terraza l, U. E. 14, cuadrícula A: 90-1 00 cm, No. 3587.

8. Ftagmento acana lado y pintura roja en el interior, baño rojo. El Jordán. terraza 1, U .E. 14, cuadrícula A: 1 00-1 1 O cm, No. 3594.

Page 147: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

INDICE DE FIGURAS 151

9. Fragmento con acanaladura lineal paralela, bai'lo café. El Jordán, terraz::l J , U.E. 10: 100 crn , No. 3091.

lO. Fragmento con acanaladura linea l paralela, ba1ío café. El Jordán, terraza 1, U.E. 10: 100 cm, No. 3087.

1 l. Fragmento con acanaladura lineal paralela. baíw café . El Jordán. terraza 1, U.E. 10: 100 cm, No. 3092.

23. Reconstrucción aproxin1ada de formas y decoraciones del s i~> ­

tema alfarero tardío de Roncesvalles - Tolima.

Cuencos:

l . Restringido, baño café o~>curo. El Jordán , terraza 1, ra¡;go arqueológico 1: SO- 60 cm. No. 2854.

2. Abierto con muescas triangulares sobre el borde , bai1o café. La Providencia, recolecciÓn supelficial , No. 538.

3. Ligeramente abierto con muescas triangulares sobre el borde y decoración aplicada incisa, baJio amarillo rojizo . Buenos Aires, terraza 2, pozo de sondeo, No. 3335.

4. Abierto. baf10 café. Buenos Aires. terraza l. pozo de son­deo. No. 3493.

5. Ligeramente abierto. bai'lo café oscuro. Matadero. reco­lección superficial, No. 907.

6. Ligeramente abierto, batío amarillo roji zo. Buenos Aires, terraza 1, rasgo arqueológico dos: 106- 107 cm. No. 2487.

7. Ligeramente abierto, baJíO café. Matadero , recolección su­perficial, No. 393.

8. Directo, b;.u1o amarillo rojizo. 13uenos Aires. ten·aza 1. ras­go arqueológico dos: 106 - 116 crn, No. 402.

9. Ligeramente directo, bmío café claro. Matadero, recolec­ción superficial. No. 397.

10. Ligeramente directo. b<uío café. La Granja, plataform a 3 , U.E. 3, 40- SO cm. No. 1754.

L l. Ligeramente directo, baf10 café. La Providencia, recolec­ción superficial, No. 2 J 8.

Page 148: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

152 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

12. Ligeramente directo con presionado circular zon ificado v caolín blanco (esti lo Cauca Medio), bat'lo rojo. El Colegio, recolección superficial. No. 496.

24. Reconstrucción aproxjmada de fonnas y decoraciones del siste­ma alfarero tardío de Roncesvalles - Tolima,

Vasijas Globulares y Subglobulares:

l . Subglobular con Presionado circular zonificado (estilo Cauta Medio). bai'lo rojo. La Granja, plataforma 1. U.E. 2 . 30 - 40 cm, No. 1 1 21.

2. Subgl obula1~ batio café. Matadero, recolección superficial, pozo de sondeo l . No. 423 .

3. Subglobular con muescas t:Jiangulares, bar'lo café. El Retle­jo, recolección superficial , No. 540.

4. Subglobular con aplicación. baf\o rojo. Matadero. Fecolec­ción superficial, No. 707.

5 . Subglobular con muescas triangulares, bai'\o café, Matade­ro, pozo de sondeo l. No. 424.

6. Globular con muescas triangulares, baño café . Matadero. pozo de sondeo 1, No. 897.

7. Subglobnlar con muescas trianb'tdares. bai1o café. Matade­ro. recolección superficial, No. 425.

8. Globular con muescas triangulares, baño café. Mataderó. recolección superficial. No. 388.

9. Subglobular con incisión lineal y bai'\o café. El Colegio, recolección superficial. No. 509.

1 O. Subglobular con corrugado irregular (estilo Cauca Medio). baño café. El Colegio, recolección superficial , No. 2671.

25. Reconstrucción aproximada de formas y decoraciones del siste­ma alfarero tardío de Roncesvalles- Toli n1a.

Vasijas Globulares, Subglobulares y Cuencos:

l . Globular con muescas triangulares zonificadas ~' aplica­ción zoomorfa, batío café. La Providencia, recolección su­pe.rficial , No. 221.

Page 149: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

INDICE DE FIGURAS 153

2. Globular con muescas triangulares, bañ'o café. Matadero, fecolección superficial, No. 896.

3. Subglobular con muescas triangulares, ba1-10 café. Buenos Aires. terraza 2, pozo de sondeo. No. 3296.

4. Subglobular con muescas triangulares, baúo café. La Gran­ja, plataforma l. pozo de sondeo 5. No. 2164.

5. Fragmento con doble hilera de muescas triangubres, baflo amarillo rojizo. La Granja - Buenos Aires. terraza 1. pozo de sondeo 14, No. 3202.

6. Globular con mues<.:<\$ triangulares. baiin café. La Granja. plataforma 1, pozo de sondeo 4. No. 2 1 59.

7. Subglobular con doble hilera de muescas rectangulares, baño café. La Granja - Buenos Aires, terraza 1, pozo de

sondeo 14, No. 3203.

26. Reconstrucción aproximada ele fonnas y decoraciones del siste­ma alfarero tardío de Roncesvalles - Tolima.

J ~ Fragmento con incisión circular zonificada lineal, baño ama­rillo rojizo. Buenos Aires , ten-aza 2. rasgo arqueológico 2, 1 06- 1 1 6 cm, No. 2496.

2. Fragmento con acanaladuras poco profundas. ba•io café. La Providencia, recolección superficial, No. 230.

3. Fragmento aplicado (cordón), baño café. La Cranja, plat:t­fonnn 3, U.E. 3: 40- 50 cm. No. 1 751.

4. Fragmento con orificio, bai'lo café, El Reflejo. recolección

superficial. No. 545.

5. Fragmento con presionado circular zonifkatlo y caolín blan­co (esti lo Cauca Medio). baño café. La Granja, platafor­ma 3, U.E. 3: 40- 50 cm, No. 1752 .

6. Fragmento con presionado circul<1r zonificado (estilo Caucn Medio). lxu1o rojo. La Curubera, recolección .<ouperficial , No. 136.

7. Fragmento con presionado circular zonificado y caolín blan­

co (esti lo Cauca Medio), baño rojo. La Curubera, recolec­ción superficial. No. 135.

Page 150: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

154 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CO RDILL ERA CENTRAL.

27. Reconstrucción aproximada ue formas y decoraciones del siste­ma alfarero tardío de Roncesvalles - Tolima.

Vasijas Globulares:

l. Baño atnarillo rojizo. La Curubera, recolección superficial, No. 114.

2. Baí10 café. La Curubera. recolección superficial , No. ll 5.

3. Baño arnJrillo rojizo. Matadero, recolección superficiaL No. 304.

4. Baño amarillo rojizo. El lordán, terraza l . U. E. 12: 20-30 cm, No. 3132.

5. Baño café. La Curubera. recolección superficial , No. 117.

6. Baf1o gris . El Jordán, terraza 1, U.E. 9: 60 - 80 cm. No. 2971.

7. Baño café, con muescas triangulares. Buenos Aires, terra­za 2, U.E. 1: 40- 50 cm. No. 2598.

8. Baño café, con muescas triangulares . La Granja, platafor­ma l. Pozo de Sondeo 5. No. 2165.

9. Baño amarillo rojizo. La Curubera, recolección superficial. No. 116.

1 O. Baño café. La Curubera. recolección superficial , No. 122.

11 . Baflo rojo. Buenos Aires, tenaza l , rasgo arqueológico 2. ~O- 90 cm, No. 2425.

12. Baño rojo. Buenos Aires. terraza 1, rasgo arqueológico 2, 90 - 100 cm, No. 2455 .

13. Bai1o amarillo rojizo. El Jordán , terraza 1, rasgo arqueoló­gico 1, 50 - 60 crn. No. 2851.

14. Baño café. La Esperanza, recolección superficial, No. 271.

15. Baño café, con muescas triangulares. El Colegio, recolec­ción superfici al, No. 5l0.

16. Baño rojo. La Granja. platafonna 3a, U. E. 2: 20- 30 crn, No. 1062.

l 7. Baño rojo. La Curubera, recolección superficial. No. 1 1 9.

Page 151: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

INDICE DE FIGURAS 155

18. Baño amarillo rojizo. La Gran ja, plataforma 3a. U.E. 2: 50- 60 cm, No. l330.

19. Baño café. Patio Bonito, tumba 2, pozo, No_ 1995.

20. Baño café. La Esperanza, recolección superficial, No. 270.

28. Reconstrucción aproximada de formas y decoraciones del siste­ma alfarero tardío de Roncesvalles - Tolima.

Vasijas Subglobulares:

L Baúo amarillo rojizo. La Granja , platafonna 1, rasgo ar­queológico 2: 90- l 00 cm, No. 2322.

2. Baño gris, El Jordán , terraza 1 U.E. 9: 70- 80 cm, No. 2970.

3. Baño rojo. La Granja, plataforma 3a, U.E. 2, 20- 30 cm, cuadrícula No. 2699.

4 . Bano café con muescas triangulares. La Granja, platafor­Ina 1, Pozo de Sondeo 1, No. 21 19.

S. Baño café con muescas triangulares. El Jordán , terraza 1, U. E. 13:20 cm, No. 3149.

6. Ba1ío café con muescas triangulares. El Refle jo, Tecolec-ción superficial, No. 543.

7. Baño café. Matadero. recolección superficial , No. 904.

8. Bai'lo café. Matadero , recolección superficial, No. ~05 .

9. Baño café. La Granja, plataforma 3, U.E. 3: 30- 40 cm, No. 2709.

10. Baño café con muescas triangulares. La Granja, platafor­ma 3a, U.E. 2: 20 - 30 cm, No. 1065.

1 J. Baño café con achurado cruzado y muescas triangu lares (estilo Tocaima IncisO') . La Granja, terraza 1, rasgo arqueo­lógico 1: 95 - 98 crn, No. 232 J .

l2. Baño café. Matadero, recolección superficiaJ , pozo de son­deo 1, No. 2435.

29. Reconstrucción aproximada de formas del sistema alfarero de Roncesvalles - Tolirna.

Page 152: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

156 EXPLORACION'ES ARQUEOLóGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Asas:

l . De argolla, baño café. La Granja, plataforma 3: U.E. 3, 40 -50 cm. No. 1757.

2. De argolla, baño café. La Granja, platafonna 3: U.E. 3, 30 - 40 cm, No. 1755.

3. De argolla, bal"io café. La Esperanza, recolección superfi­cial , No. 268.

4. De argolla, bal"io crema con incisiones punteadas en línea. La Curubera, recolección superficial , No. 128.

5. De argolla, baño café. La Granja, plataforma 3a, U.E. 2, 40-50 cm, No. 1207.

6. Aplicada, bai1o amarillo ro jizo. La Curubera, recolección superficia l, No. 129.

Bases:

7. Troncónica, baño café. El Jordán, U.E. 12, capa negra, No. 3135.

8. Baño rojo. La Providencia, recolección superficial, No. 220.

9. Baúo rojo. La Curubera. recolección superficial. No. 132.

30. Reconstmcción aproximada de formas y decoraciones del s iste­ma alfarero tardío de Roncesvalles- Tolima.

Figurinas:

l . Rostro de forma triangular. baño amarillo. La Curubera, recolección superficial, No. l 13.

2. Rostro de forma ovalada, baúo rojo. Patio Bonito, tumba 2. pozo, No. 2003.

3. Rostro aplicado, bat"lo café rojizo. La Granja, plataforma 3 , U .E.3, cuadricula C: 20- 30 cm, No. 1593.

4. Volante de uso, baúo amarillo rojizo. La Providencia, re­colección superficial , No. 225.

5 y 6. Cuentas de collar. El Reflejo, tumba saqueada, recolección superfici al.

Page 153: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

TNDJCE DE FIGURAS 157

3). Artefactos líticos precerámicos de San Antonio- Toli ma.

l. Artefacto con doble acanaladura latera l (Azada). Villahermosa, sitio 1, recolección superficial , colección pri­vada.

2. Fragmento de canto rodado en cuarzo. Villahermosa. sitio l, recolección superficial, No. 10.

3. Fragmento de canto con huellas de calentamiento por fue­go. Villahermosa, sitio l , recolección superficial, No. l 9 ,

4. Cu chilla en cuarzo lechoso. Villahermosa, sitio 1, No. 7.

32. Artefactos líticos precerám.icos de RotlCesvalles y SanAmonio­Tolitna.

L Cortador en basalto. El Jordán, terraza 1, U, E. 10: 1 10-120 cm, No. 3109.

2. Desecho de talla en cuarzo. El Jordán , terraza 1, U.E. J 0: t00-120 cm, No. 31 13.

3. Núcleo lascado en Chert. San Antonio, Yillahermosa. sitio l . recolección superficial , No. 2.

4. Golpeador en arenisca. El Jordán. terraza 1, U.E. l 0: 1 OO­l20cm,No.3 1I4.

33. Artefactos líticos del Período tardío, Roncesvalles- Tolima.

l. Mano de moler part ida en u n extremo. Buenos Aires · La Granja, terraza 1, rasgo arqueológico J : 106 cm, No. 233 7.

2. Pulidor. El Jordán, terraza l , U. E. 2 : 20-30 cm, No. 2898.

3 . Raspador. El Jordán. terraza l, U.E. 9, No. 2974.

34. ArtefactOs líticos del peliodo tardío Roncesvalles- 1\Jlima.

l . Núcleo lascado. Buenos Aires - La Granja . terraza J , rasgo arqueológico uno: 94-115 cm. No. 2345.

2. Cincel fragmentado. Matadero, recolección superficial, No. 422.

3. Machacador. El Jordán, terraza 1, U.E. 8, No. 2930.

Page 154: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

ÍNDICE DE FOTOGRAFÍAS

l . Panorámica de la cabecera municipal de Roncesvalles - Tolima, tomada desde el lindero El Jordán -La Granja.

2. Vista panorámica de la cuenca alta del río Cucuana, tomada desde La Granja.

3. Relieve de lomas con dmas planas (haciendas Rosales y Lon­dres).

4. Paisaje de alta montaña en la hacienda La Siberia.

5. Buenos Aires, Panorámica de la terraza uno en la pat1e alta de la loma (en primer plano, encima del carreteable ).

6. En primer plano lomas de La Gran ja con plataformas de vivien­da, en la parte superior grandes terrazas artificiales (li ndero con la finca El Jordán).

7. Proceso de excavación del rasgo arqueológico uno, terraza uno (Buenos Aires- La Granja).

8. inicio de la excavación del rasgo dos, terraza uno (Buenos Ai­res).

9. Rasgo arqueológico dos , terraza uno (Buenos Aires).

JO. Pequeña tumba de pozo con cámara lateral (terraza uno, Bue­nos Aires - La Granja).

11. La Granja. vista de las plataformas tres y cuatro.

12. La Granja, panorámica en planu1 de las plataformas tres , tres a y cuatro; al fondo la población Je Roncesvalles.

13. Ascenso de camino por el borde de la terraza dos, (El Jordán).

14. Panorámíca de la terraza uno, (El Jordán).

15. El Jordán, terraza uno. Línea de excavaciones sobre el eje cen­tral.

Page 155: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

160 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

16. El Jordán, excavaciones sobre el borde de la terraza (unidades 9 a 12).

t 7 Unidad de excavación diez, perfiles estratigráficos. paredes nor­te y oeste (El f ordán).

18. Unidad de excavación catorce, pared este, (El Jordán).

Page 156: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

INDICE DE LAMINAS

I. Cerámica del Período Tardio

l . Borde de vas ija globu lar con m.uescas triangu lares. bai\o café. Matadero, recolección superficial, No. 896.

2. Borde de vasija subglobular con muescas triangulares, baño café. El Reflejo, recolecc!ón superficial , No. 540.

:3 . Borde de vasija subglobula r con muescas triangulares , baJ'1o café. Matadero. recolección superficial , No. 388.

4. Fragmento con doble hilera de m.uescas triangulares, bai1o amarillo rojizo. La Granja-Buenos Aires , terraza l. pozo de sondeo 14. No. 3202.

11. Cerámica del Período Tardío

l . Fragmento con presionado circular zonificado y caolín blan­co (estilo Cauca Medio), baño rojo. La Curubera, recolec­ción superficial , No. J 35.

2. hagmento con presionado circular zonificado (estilo Cauca Medio). baóo café. La Granja. plataforma 3. U.E. 3: 40-50 cm, No. 1752.

3. Borde de vasija subglobular con decoración corrugada (es­tilo Cauca Medio), bailo café. El Colegio, recolección su­perficial , No. 2671.

4. Borde de cuenco lige r•a mente ::~bierto con muescas trian ­gulares sobre el borde y decoración aplicada incisa. batio amarillo rojizo. Bue11os Aires, plataforma 2, pozo de son­deo. No. 3335.

5. Borde de vasija subglobular con muescas ttiangulares. ba11o café. Buenos Aires , platafo1ma 2. pozo de sondeo, No. 3296.

Page 157: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

162 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA COHDILLERA CENTRAL

6. Fragmento con orificio, baño café. El Retlejo, recolección superficial, No. 545.

7. Borde de vasija subglobular con achurado cruzado y muescas triangulares (estilo Tocaíma Inciso), baño café. La Granja, plataforma l, rasgo arqueológico l: 95-98 cm , No. 2321.

111. Cerámica del Período Tardío

l. Rostro de forma ovalada, bai1o rojo. Patio Bonito, tumba 2, pozo, No. 2003

2. Rostro de fonna triangular, baño amarillo. La Curubera, recolección superficial. No. 113.

3. Asa de argolla, baño café. La Granja, plataforma 3, U.E. 3: 40-50 cm, No. 175 7.

4. Asa de argolla, baúo café. La Granja, platafonna 3, U.E. 3: 30-40 cm, No. 1755.

5. Asa de argolla, baño crema con incisiones punteadas en línea. La Curubera, recolección superficial, No. 128.

Page 158: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

BffiLIOGRAFÍA

ARCHILA. Sonia 1 996. La Orfebrería de Malagana. En: Los Tesoros de los Señores de Malagana: 53 - 95, Museo del Oro. Banco de la República, Bogotá.

ÁVILA Olmos, Fernando 1985. Prospección en la región del río Venadillo, departamento del Tolima. Trabajo de Campo. Depar­tamento de Antropología, Universidad Nacional de Colombia. ivls. Inédito.

BARRERO, Martha Isabel; Adriana Ramírez; Gloria Rivera v Norma Galeano 199 7. Prospección Arqueológica del Valle de. las Lan­zas. Ibagué- Tolima. Monografía de Grado. Facultad de Cien­cias de la Educación, Universidad del Tolin1a, Ms. Inédito.

BRAY, vVarwick 1989. Cerámica Buga: Reevaluación. Boletín Museo del Oro. 24: 103- l J 9.

______ 1992. El período Yotoco. En: Calima diez mil aflos de historia en el suroccidente de Colombia: 73-J 24, Funda­ción Pro Calima, Santafé de Bogotá.

BRAY, Warwick y Edward Moseley 1976. Una secuencia arqueológica en las vecindades de Buga, Colombia. Cespedesia 5 ( 17-1 8): 55-78.

BRUHNS , Caren 1976. Ancient Pottery of the Middle Cauca Valley, Colombia. Cespedesia S (17- 18): 101 - 196.

_____ 1990. Las Culturas prehispánicas del Cauca medio. En: Arte de la Tierra. Colección tesoros precolombinos , quimbayas. Vol. IV: 10 - 14. Fondo de Promoción de la Cultu­ra. Banco Popular. Bogotá.

Page 159: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

164 EXPLORACIONES ARQUEOLÓG ICAS EN LA CORDILLERA CENTHAL

l995. Archacological lnvestigations in Central Colombia. Oavis P. Oavidson y MA. Mphil Dphi l (Eds. ). Bar International. Series, 606 Oxford.

CAR.DALE de Schrimpff. Mal'ianne 1976. lnvestigacinnes <wqueológi­cas en la zona de Pubenza Toca ima, Cundinamarca. Revis ta Co­lombiana de Antropología. 20: 335-496.

_____ _ 1992. La gente del período llama. En: Calima diez mil años de historia en el suroccidente de Colombia: 23 - 7 1, Fundaci.ón Pro Calima, Santafé de Bogotá.

______ _ 1996. Caminos prehispánicos en Calima, el estudio de caminos p recolombinos de la cuenca del alto río Calima, cordillera Occidental, valle del Cauca. No. 62. FlAN, Banco de la Rep(Iblica. Bogotá.

CARDALE de Schrimpff, Marianne. Warwíck Bray y Leonor Herrera 1989. Reconstruyendo el pasado en Calima. Rec;ultados recien­tes. Boletín Museo del Oro. 24: 3-33.

CARDALE de Schrimpff, Marianne y Leonor H errera 1995. Caminos y comerciantes en el suroccidente de Colombia entre 2500 y J 500 A.P. En : Perspectivas regionales en la arqueo logía del suroccidente de Colombia y norte del Ecuador. 195-:l22. Cris­tóbal Gnecco (Ed. ). Popayán: Editorial Universidad de l Cwca.

CASTAÑEDA, Samuel 1982. Zonificació n d e l a e mpresa agropecu aria l a Sib eria, como modelo para la zona de Roncesvalles. Tesis de grado, Universidad de la Sall e. Ms. In­édito.

CASTAÑO , Carlos y Carmen Oávila 1984. lnvestigaciones a rqueo­lógicas en el Magdalena medio, sitios Colorados y Mayacas . No 22. FlAN, Banco de la República. Bogotá.

C lFUENTES Toro, Arturo 1989. Prospecciones y reconocimientos ar­queológicos en el valle del Magdalena, municipio de Honda (Tolima). Boletín de Arqueología 4 (3):49-55. FlAN, Banco de la República.

Page 160: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

BIBLIOGRAFÍA 165

_______ 199 1 . Do.c: períodos arqueológicos del valle del río Magdalena en la región de Honda. Boletín de Arqueología 6 (2): 2-1 J. FlAI'\J , Banco deJa República.

_____ __ 1993. Arrancaplumas y Guataquí dos Períodos ar­queológicos en el val le rn.edio del río Magdalena. Boletín de Ar­queología 8 (2):3-88. FlAN. Banco de la Republi ca.

_______ 1994. Tradición Alfarera de La Chamba, En: Bole­tín de Arqueologia. Fundación de Investigaciones Arq ueológicas Nacionales. Año 9, No 3, Septiembre. Bogotá.

CORREAL, Gonzalo J 977. Exploraciones arqueol6gic:ts en la Costa Atlántica y en el v~1 lle del Magdalena: sit ios precerámicos v tipologías lít icas . Caldasia (55): 35 - 1 J J .

_______ 1979. Investigaciones arqueológicas en abri­gos rocosos de Nemocón y Sueva. No. 3. PIAN. Banco de la República , Bogotá.

-----=----· 1990. Aguazuque. Evidencias de cazadores recolectores y plantadores en la altiplanicie de la cordille­ra Oriental. No. 43. FlAN, Banco de la República, Bogotá.

CORREAL. Gonzalo y Tbotnas Van Der Hammen 1977. Investiga­ciones arqueológicas en los abrigos rocosos del Tequendama. Banco Popular. Bogotá.

CONSEJO REGIONAL DE PLANIFICACIÓN ECONÓMICA Y SOCIAL CORPES 1984. Plan de desarrollo para el Tolíma. Gobernación de l Tolima, Universidad Nacional.

CUBILLOS, Julio Cesar 1945. Arqueología de Rioblanco (Chaparral. Tolima). Boletín de Arqueología S (1):519-530.

CUBILLOS, Julio Cesar v Víctor Bedoya 1954. Arqueología de las riveras deJ rio Magdalena. Espinal, Tolima. Revista Colombia­na de Antropología 2: l28-l44.

CHACÍN Lara, Regina l99 1. Exploración Arqueológica en la parte tnedia-alta del cañón del río San Fernando. ChapatTal-

Page 161: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

166 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

Tolima. Tesis de grado, Departamento de Antropología. Univer­sidad Nacional de Colombia. Ms. Inédito.

________ 1995. Asentamientos preh ispánicos en la cuenca del río Ambeima (cord illera Cent ral, Chaparral. Tol irna). Cespedesia 20 (64-65):149- 170 (años 1993- 1994).

ESPIN AL, Luis y El mo Montenegro 1963. Formaciones Vegetales de Colombia. lGAC, Departamento Agrológico, Bogotá.

ESPINOSA, Miguel, Cesar Fonseca y Otros 1997. Re-descubriendo al Tolima. En: Signos y hechos. (4):45: 135- 136. !bagué.

FORERO Lloreda, Eduardo 1993. Excavaciones arqueológicas en la cuenca m edia del río Guad alajar a , municipio de Buga -Valle, cordiller a Central. FlAN, Banco del la República. Ms. inédito.

GNECCO Cristóbal 1996. Relaciones de in tercarnbio y bienes de élite entre los cacicazgos cle1 surocciclente de Colombia. En: Caci­qu es, Intercambio y Poder: Interacción Regional en el A.rea Intermedia de .las Américas, C. Langebaek y f. Cárdenas (Eds.), 175- 196, Bogotá: Un iversidad de los Andes.

_______ 1997. Cazando Mastodontes , recolectando pal­mas; Un ejercicio revisioni sta de las investigaciones arqueológi ­cas sobre cazadores-recolectore!l en Colombia. En: Nuevas M e­morías so bre la s an t iguedades Neogranadinas, 29-44. San­tiago Mora y Franz Flórez (Eds. ). COLCIENClAS. Santafé de 13ogot<1.

GNECCO Cristóbal y Héctor Salgado López 1989. Adaptaciones precerámicas en el suroccidente de Colombia. Boletín Museo del Oro. 24: 34-53.

GÓMEZ. Alba Nelly y Heidy Margari ta, Correcha 1995. Evidencias de Grupos Aceiámicos y Agroalfareros en el Magdalen a M edio . Excavación y Rescate Arqueológico. Gasoducto Cen tro­Oriente, Km. 4 al 2 1 Barrancabenneja (Santander) y Hacienda Pipintá (La Dorada-Caldas) . ECOPETROL, Plan Nacional de Gas (PNG) Bogotá. Ms. Inédito.

Page 162: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

167

HERNÁNDEZ, Cecilia de 1978. Sitio de asentamiento Panche (Armero- Tolima) . Tesis de grado. Departamento de Antropo­logía, Universidad de los Andes. Ms. Inédito

HERNÁNDEZ, Cecilia de y Carmen Cáceres de Fulleclu 1989. Excavaciones arqueológicas en Guaduero, Cundinamarca. No. 41. flAN, Banco de la República. Bogotá.

HERRERA, Leonor 1 992. El período Sonso tardío y la conqui sta es­paño la. En: Calima diez mil años d e his t o ria en e l suroccidente de Colo mbia: 149- 177, Fundación Pro Calima. Santafé de Bogotá.

H ERRERA, Leonor; M aríanne Cardale de Schrimpff y Warwick Bray 1990. La arqueología de l paisaje en la región Calima. En: Inge­n ierías Preh ispánicas: 1 11 - 150. Fondo EN, Colombia, JCAN , Bogotá.

------=-_l995. Los sucesos de Malagana visto desde Cal i­ma. Atando cabos en la arqueología del suroccidente colornbiano. Rev is ta Colombiana d e Antropología 3 1: 14' '-174.

INTEGRAL (Ingenieros Consu ltores) 1995. Arqueología d e resca­te. Vía Alterna d e la troncal de occid ente variante C hinchiná. Cart illa. Editorial Endvmión.

INSTITUTO NACIONAL DE VÍAS INVIAS 1996. Separata: Arqueólogos e ingenieros de la mano p<'lra recuperar p<Hrimonio histórico en variantes de Chinchín<\ y Santa Rosa en Caldal> Risaralda. Notivias, Afw 2 , 19. Bogotá.

INSTITUTO COLOMBIANO D E ANTROPOLOGÍA ICAN 1995. Un Pasado sin Raíces , un Futuro s in Identidad. Reconoci­miento y Prospección. Tomo 11. Primera parte. lCAN, Empresa Colombiana de Petróleos (ECOPETROL), Plan Nacional de Gas (PNG). Bogotá. Ms. Inédito.

INSTITUTO VALLECAUCANO DE INVESTIGAC IONES CiEN­TÍFICAS (INCIVA) 1995-6. Proyecto de rescate arqueológi­co gasoducto de occidente Mariquita - Yumbo. Volumen l. INCIVA- Empresa Colombiana de Petróleos (ECOPETROL), Cali - Bogotá. Ms. Inédito.

Page 163: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

168 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN LA CORDILLERA CENTRAL

INSTITUTO GEOGRÁFIC O AGUSTÍN CODAZZI (IGAC) 1980. Diccionario geográfico de Colombia . Tomo ll. Bogotá.

----------- 1988. Estudio genet:al de suelos de los municipios: Coyaima, Chaparral, Ortega, Roncesvalles , Saldaña, San Antonio y parte de Purificación (Departam ento del Tolima), Santafé de Bogotá.

LANGEBAEK, Carl Henrik 1993. Arte precolombino - Culturas. Gran Enciclopedia d e Colombia, 6: 27-42 , Círculo de Lec­tores, Bogotá.

--------- 1995. Algunos comentarios ~'\Obre cambios diacrónicos en el intercambio prehispánico en el norte del Ecua­dor y sur de Colombia: Revisión de la evidencia. En: Perspec­tivas regionales en la arqueologia del suroccidente d e Co­lombia y norte d el Ecuador, editado por C. Gnecco, 3 14-330. Popayán: Editorial Universidad del Cauca.

LÓPEZ Casta iio, Carlos Eduardo 1991. Investigaciones Arqueo­lógicas en el Magdalena Medio, Cuenca de l Río Carare (Depto. de Santander) . No. 4 7 FlAN. Banco de la Repúhlica. Bogotá.

LLANOS Vargas, Héctor 1988. Arqueología de San Agustín. Pau­tas de Asentamiento en e l cañón del río Granates , Saladoblanco . No. 37. FlAN. Banco de la República. Bogotá .

_ ________ 1990. Proceso Histórico Prehispánico d e San Agustín en el Valle de Laboyos (Pitalito- Huila). No 44. FlAN, Banco de la República. Bogot<Í.

- ----- --------- 1995 . Los chamanes jaguares d e San Agustín. Génesis d e un pensamiento mitopoético. Héctor Llanos V. (Ed.), Bogotá.

l995a. Montículo Funerario d el Alto Betania (lsnos). Territorialidad y espacio de los muertos en la Cultu ra de San Agustín . No 6 1, FlAN. Banco de la República, Bogotá.

Page 164: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

LilBLIOGI~AFÍA 169

1997. Tradiciones cuJtumles y orfebrería del suroccidente de Colombia. En : L'Eta deU ' Oro. Arte de lJ ' Antica Colombia: 19-40, Nodolib ri- como (Ed.)

LLANOS Vargas, Héctor y Anabell a Ourán 1983. Asentamientos prehispánicos de Quinchana, San Agustín. No. 20. flAN . Banco de la República, !3ogolá.

MENDOZA, Sandra y Nuhia Quiazua 1990. Exploraciones arqueo­lógicas en el municipio de Tocaima. Cundinamarca. Boletín de Arqueología 5 (3): 3-29. FlAN . Banco de la Repúbli ca.

MÚNERA, Luis y Osear Monsalve S.f. Ocupaciones tempranas en el área Quimbaya. Ms. Inédito.

MÚNERA, Luis Carlos. Osear Monsalve y Silvia Bo1et'O 1998. Nue­ve mil ru"i.os de historia en el Viejo Caldas. En : Vías y Desa­rrollo Social, Impactos Socio-ambientales: 199-239, Institu­to Nacinal de Vías INVlAS. Santafé de Bogotá.

MUSEO DEL ORO 1996. Los Tesoros de los señores de Malagana. Banco de la Repúblic.1.

OSORlO, Osear 1986. Investigaciones arqueológicas en la zona Quimbaya, correspondiente al departamento del Qtündío. Univers idad del Quindío. Ms. Inédito.

______ 1990. Las investigaciones arqueológicas en la zona Quimbaya. Arte de la tierra. Quimbayas. Fondo de Promoción de la Cultura. Banco PopuJar, Bogotá.

OSORlO, Alvaro l99:l. Exploraciones arqueológicas en el Líba­no. Tolima. Tesis de grado. Departamento de Antropología, Universidad Nacional de Colombia. Ms. Inédito.

PEÑA León, Germán l991 . Exploraciones arqueológicas de la cuen­ca medja del río Bogotá. No 50. FlAN, Banco de la República. Bogotá.

PÉREZ DE BARRADAS , José 1954. Orfebrería Prehispánica de Colombia: Estilo Calima. Ed itorial jura, Madrid.

Page 165: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

170 EXPLORACIONES ARQUEOLÓCICAS E , LA CORDILLERA CENTRAL

l966. Orfebrería p rehispánka de Co­lombia: Estilos Quimbaya y otros. Banco de la República, Mu­seo del Oro. Bogotá.

PLAZAS, Clemencia y Ana María Fétlchetti 1983. Trad ición metalúrg•­ca del surocddente colombiano. Boletín Museo del Oro. 14, Sep­tiembre - Diciembre: J -32.

PLAZAS, Clemencia 1990. El Nuevo tesoro Quimbaya. Boletín Museo del Oro. 20: 133- 134.

1 992. El oro de América. Museo del Oro del Banco de la República, Bogotá. Sociedad Estatal para la Exposi­ción Universal, Sevilla 92, Sevill a. p.p 14 - 1 O l.

RAMÍREZ Jáuregui , Daniel Alfonso 1996. Exploración Arqueoló­gica de la C uenca Alta d el Río Combeima, M unicipio de lbagué-Tolima . Tesis de grado. Departamento de Antropología, Universidad Nacional de Colombia. Bog0tá. Ms. Inédito.

REICHEL-DOLMATOFF, Gerardo 1986. Arqueología de Colom­bia, un texto introductorio. Fundación Segunda Expedición Botánica, Bogotá.

REICHEL-DOLMATOFF, Gerardo y Alicia Dussán 1944. Urnas fu­nerarias de la cuenca del Magdalena. Revista del instituto Etnológico Nacional. Entrega 1, Bogotá.

RODRÍGUEZ, Carlos Armando 1989. La Población Prehispánica del Vall e Medio del río Cauca entre los siglos VIl -XVI D.C. (Cultu­ras Guabas y Buga). Boletín Museo del Oro. 24:73-89.

RODRÍGUEZ Ramírez, Camilo 1987. Agricultores prehispán ícos en la hoya del Quindío. Tesis de grado. Departamento de Antro­pología, Universidad Nacional de Colombia. Ms. 1 nédito.

________ 1989. Patrones de asentamiento de los agricul­tores prehispánicos de El Limón (Chaparral, Tolima). Boletín de Arqueología 4 (2):41 -50. FlAN, Banco de la República.

_ __ --,.. _______ 1990. Asentamienros y alfarería prehispánica del alto río Saldaflé\ (cordillera Central - sur del Departamento del

Page 166: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

BTBLTOGRA FÍA 171

Tolima). Boletín de Arqueología 5 (2): 45-59. FlAN , Banco de la República.

________ 1991 , Patrones de asentamiento de los agri­cultores prehispánicos en El Limón, municipio de Chaparral (Tolima). No 49. FlAN, Banco <k la República, Bogotá.

---=-----~=-=--=--- 1 995. Asentamientos de los bosques subandinos durante el- Holoceno medio En: Ámbito y ocupaciones tempra­nas de la América Tropical. 1 15-1.23 Inés Cavelier y Santiago Mora (Eds.) . Fundación ERIGAIE- JCAN, Bogotá.

________ 1997. Rescate arqueológico sitios los atTaya­nes PK 91 · + 150 Villanería - Caldas y El Pomo PK 7 + 200 ramal a Manzanarez, Fresno - Tolima. Empresa Colombiana de Petróleos ECOPETROL. Gasoducto de Occidente. Primer Volu­men. Ms. Inédito.

ROZO Sandoval, José Manuel J 990. Una aproximación al conoci­miento arqueológico de la zona de confluencia de los dos Bogotá y Magdalena. Boletín Museo del Oro. 27: 85-97.

RU1Z Gómez. Fernando 1994. Prospección arqueológica en la ver­t iente oriental del parque de los nevados, departamento de] Tolima. Tesis de grado. Departamento de Antropología. Universi­dad NacionaJ de Colombia. Ms. Inédito.

SALGADO López, Héctor 1986. Asentamientos prehispánicos en el noroccidente del Valle del Cauca. No. 32. FlAN, Banco de la República, Bogotá.

1986a. Investigaciones arqueológicas en el curso medio del río CaluTia, cordillera Occidenta.l , Colombia. Bo· letín de Arqueología. FlAN. Banco de la República. l (2): 3-15.

-------,----,-- 1989. Medio Ambiente y Asentamientós Hu­manos Prehispánicos en el Calima Medio.INCIVA. Imprenta Departamental , Cali .

-~~----:---:-~- 1993. Investigaciones Arqueológicas e..n el Po­blado Prehispáníco de ]iguales- Calima (Segunda Temporada).

Page 167: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

172 EXPLORACIONES ARQUEOLÓGICAS EN tA CORDILLERA CENTRAL

En: La Vivienda Prehispánica Calima: Instituto Vallecaucano de Investigaciones Científicas. Imprenta Departamental. Cali.

________ 1995. El precerámico en el cañón del río Cali­ma, cordillera Occidental. En: Ámbito y ocupaciones tempra­nas de la América Tropical. 91-97 Inés Caveliery Santiago Mora (Eds.). Fundación ERIGAJE- !CAN. Bogotá.

1996. Asentamientos y Enterramientos prehispánicos tardíos en el Norte del Valle del Cauca y en el Quindío. Gerencia Plan Nacional de Gas Natural, ECOPETROL. Ms. Inédito.

1997. Rescate arqueológico en los mu­nicipios de Montenegro (Quindío) y Bugalagrande (Va­lle del Cauca). Gerencia Plan Nacional de Gas Natural, ECOPETROL. Ms. Inédito.

SALGADO López, Héctor y Carlos Armando Rodríguez 1994. El Va­lle del Cauca prehispánlco. En: Diez mil años del Valle del Cauca: Una historia en construcción . Catálogo de exposi-ción. INCJVA. Cali. .

SALGADO López. Héctor; Alba Nelly Gómez y Judith 1-lernández 1997. Rescate Arqueológico, Subestación San Felipe Armero - Guayabal. Interconexión eléctrica. S. A. (ISA). MedelJín. Ms. Inédito.

SANTOS Vecino, Gustavo J 993. Una población prehispánica de Antioquía representada por el estilo cerámico marrón-inciso. En : El marrón inciso de Antioquia : 39-55. Colección Museo Uni­versitario- Universidad de Antioquia 190 años. Santafé de Bogo­tá.

TOVAR, Arnold 1981. Investigaciones arqueológicas en el cañón de Anaime. Trabajo de campo. Depatiamento de Antropología , Universidad Nacional de Colombia. Ms

Page 168: Exploraciones Arqueológicas en la Cordillera Central

La impresión de este libro se terminó en el mes de diciembre de 1998,

en los Talleres Gráficos de EDITORA GUADAL UPE L TOA.

Santafé de Bogotá, D.C., - Colombia