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Guía de Trabajo Práctico Final 2008 Semana de Proyectos Jóvenes Consigna Objetivos Título del Trabajo Etapas del trabajo Materialización Presentación en Semana de Proyectos Jóvenes Criterios de evaluación Presentación del proyecto Normas básicas para las citas bibliográficas Rótulos, etiquetas y portadas Guía de comprobación de requisitos de entrega Declaración jurada de autoría Una historia de mi familia TÍTULO Comunicación Oral y Escrita ASIGNATURA

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Guía de Trabajo Práctico Final 2008

Semana de Proyectos Jóvenes

Consigna

Objetivos

Título del Trabajo

Etapas del trabajo

Materialización

Presentación en Semana de Proyectos Jóvenes

Criterios de evaluación

Presentación del proyecto

Normas básicas para las citas bibliográficas

Rótulos, etiquetas y portadas

Guía de comprobación de requisitos de entrega

Declaración jurada de autoría

Una historia de mi familia

TÍTULO

Comunicación Oral y Escrita ASIGNATURA

Equipo de Gestión Académica

Guía del Examen Final

El relato oral es la forma discursiva más antigua en la humanidad, esencial en la

transmisión de experiencias y costumbres personales, familiares y sociales. Desde

tiempos inmemoriales el relato es un instrumento muy valioso en la construcción de la

identidad individual y social.

En este sentido esta asignatura se constituye como el espacio de creación y expresión de

los relatos tanto individuales como familiares.

En todas las familias circulan relatos muy ricos y diversos que merecen ser

redescubiertos, difundidos y compartidos por el grupo no sólo para construir la

identidad personal y social sino también para indagar en el origen de uno mismo y en el

de la propia vocación.

Consigna: Investigar una historia familiar y crear un relato visual y escrito.

Objetivos

• Explorar en la historia familiar . • Elegir una temática susceptible de ser narrada. • Aplicar trabajo de campo. • Aportar a la identidad. • Entrenarse en la producción de los relatos escritos, orales y visuales . • Lograr una correcta expresión verbal frente al público. • Aplicar técnicas de exposición y presentación. • Trabajar en el armado de una puesta en escena para la Semana de Proyectos

Jóvenes El trabajo es estrictamente individual y deberá respetar, para ser aceptado, las pautas de presentación descriptas a continuación.

Título del trabajo: "Una historia de mi familia"

El subtítulo será creado por el alumno.

Etapas del trabajo:

1) Realización de una investigación exploratoria por medio de entrevistas a miembros de su familia, observaciones y relevamiento en fuentes documentales de la época.

2) Selección de la temática central: migraciones, traslados, mudanzas, vocaciones, historias insólitas o divertidas, historias de personajes conocidos, casas y espacios de la familia, amores y desencuentros, protagonismos en hechos históricos, retratos desconocidos, objetos de la familia, pueblos y ciudades de origen, entre otros.

3) Escritura del relato testimonial o ficcionado, en cualquier género, sobre base real

4) Elaboración del relato visual (a partir de fotos, dibujos, ropas, objetos, recortes de diarios y revistas, canciones, músicas, poemas, películas familiares o de la época)

Materialización

El estudiante debe entregar tres carpetas anilladas conteniendo:

Cuerpo A � carátula � guía del trabajo práctico final � síntesis del trabajo (máximo una página) � curriculum vitae (máximo una página) � declaración jurada de autoría (utilizar la ficha institucional)

Cuerpo B � carátula � índice � introducción � investigación exploratoria � relato escrito � relato visual � conclusiones personales � bibliografía (ver normativa para citar)

Cuerpo C (si corresponde) � carátula � Fotocopias de artículos periodísticos, imágenes, entrevistas, trabajos de

campo y otros. No se debe fotocopiar los capítulos de los libros.

Presentación en Semana de Proyectos Jóvenes

El estudiante deberá presentar el relato visual (power point o un film) acompañado

de una puesta en escena y la grabación del relato escrito presentado en una voz en

off.

Criterios para la evaluación del Trabajo Práctico Final

• Presentación en tiempo y forma (se requiere consulta previa y entrega con una

semana mínimo de antelación al examen). • Dedicación y preparación de acuerdo a las consignas. • Calidad tanto del trabajo como de su presentación. • Actitud y argumentación en la defensa del trabajo. • Respeto de las normas de presentación de los trabajos en Diseño y

Comunicación (ver recuadro en la guía)

Criterios para la evaluación del Examen Final

• Consulta previa (una vez como mínimo) con el profesor. • Concurrir al Examen con el 100% de los trabajos prácticos de cursada y con la

documentación solicitada en la presentación (Guía de Trabajo Práctico Final y Planificación).

• Calidad del discurso acorde al ámbito universitario y al nivel alcanzado en la carrera.

• Calidad de la argumentación en la defensa del Trabajo Práctico Final. • El esmero para relacionar los resultados obtenidos en el Trabajo Práctico Final

con el marco teórico y la bibliografía correspondiente. • Dominio de los contenidos de la asignatura y su correspondiente bibliografía.

PRESENTACIÓN DEL PROYECTO

Presentar anillado // Hojas A4 // Páginas numeradas // Fuente no superior a 12 pto. para cuerpo de texto; libre para títulos y paratexto // Carátula con: Título del TPF, nombre y mail de los alumnos y del docente, indicación de la carrera, materia, comisión y fecha de entrega. Este informe deberá ser presentado en formato papel y digital.

Normas básicas para las citas bibliográficas

Normas APA y funcionalidad de la citas bibliográficas La cita bibliográfica otorga seriedad al trabajo, lo hace verificable y transparente a la

crítica, y permite a los lectores profundizar sobre el tema tratado. Es conveniente no abundar en citas poco sustanciales y sí hacerlo con aquellas que sean relevantes al trabajo. Existen normas de uso generalizado para citar y describir bibliografía, algunas de ellas internacionales, como las ISBD (Descripción Bibliográfica Internacional Normalizada), otras de uso específico en una disciplina o áreas disciplinarias, y otras de uso establecido en una disciplina pero que se han hecho extensivas a otras, como las normas contenidas en el Manual de estilo de publicaciones de la American Psychological Association (APA). Son éstas las normas que la Universidad de Palermo ha adoptado para las citas en los trabajos de investigación, las Tesis y Trabajos de Integración Final. Basándose en las mismas, la Biblioteca de la Universidad ha elaborado, para los casos más frecuentes, las «Normas básicas para las citas bibliográficas» que se detallan a continuación. Para aquellos casos que no estén contemplados en estas normas se deberá consultar el Manual de la APA, antes citado, disponible en la Biblioteca. Se debe documentar el estudio a lo largo del texto citando con el sistema autor / fecha los documentos que se consultaron. Este estilo de cita breve identifica la fuente para los lectores y les permite localizarla en la «Lista de Referencias Bibliográficas» al final del trabajo.

Citas textuales Si se transcriben frases enteras de un trabajo se dice que es una cita textual. Si no se

cita la fuente es plagio. Las citas textuales deben ser fieles. Deben seguir las palabras, la ortografía y la puntuación de la fuente original, aun si ésta presenta incorrecciones. Si alguna falta de ortografía, puntuación o gramática en la fuente original pudiera confundir al lector, inserte la palabra sic entre corchetes (ie. [sic] ), inmediatamente después del error de la cita. Las palabras o frases omitidas han de ser reemplazadas por tres puntos. Una cita textual corta (con menos de 40 palabras) se incorpora en el texto y se encierra entre comillas dobles.

Paráfrasis o cita ideológica Si interesa algún concepto de un autor y se lo resume en las propias palabras del que

escribe un trabajo, se dice que parafrasea al autor original. Esto es legítimo siempre que se indique la fuente. Cuando se parafrasea o se hace una referencia a una idea contenida en otro trabajo, se coloca el apellido del autor y el año de publicación, los cuales se insertan dentro del texto en el lugar apropiado.

Citas de citas Algunas citas, tanto textuales como ideológicas, pueden ser de segunda mano, es

decir, el autor del trabajo de investigación hace una cita de una obra que a su vez aparece citada en otra obra. El autor no tiene contacto con la fuente original sino a través de la obra que la cita. En este caso debe quedar aclarado, indicando el autor y la obra original, y el autor que la cita y en qué obra lo hace de acuerdo con las normas detalladas anteriormente.

Lista de referencias bibliográficas Todos los documentos citados en el texto deben ser incluidos en esta lista. Las

referencias bibliográficas no deben ser indicadas a pie de página. No se debe omitir ninguna obra utilizada por más parcialmente que se lo haya hecho. Debe cerciorarse que cada cita en el texto aparezca referida en la lista y que la cita en el texto y la entrada en la lista sean idénticas en su forma de escritura y en el año. También se incluirán aquellas obras no citadas pero que conciernen directamente al tema tratado y los estudios de interés general del área del trabajo.

En todos los casos deben incluirse solamente los documentos que se hayan leído o consultado. No abultar la lista con títulos que se conocen apenas de nombre. En cada entrada en la lista se hará sobresalir la primera línea y se sangrarán las siguientes a tres espacios.

Cada entrada por lo común tiene los siguientes elementos: Autor, año de publicación, título y subtítulo, datos de la edición, si no es la primera, lugar de publicación (ciudad) y editorial.

En el caso en que la cita se refiera a una revista los elementos y la secuencia de los mismos será la siguiente: Autor, año de publicación, título y subtítulo, título de la revista, volumen, número y páginas.

Las entradas se ordenarán alfabéticamente por apellido del o de los autores invirtiendo el orden, es decir, presentando primero el apellido y luego las iniciales. Se lo hará en un solo orden, independientemente del tipo de documento (libros, revistas u otro tipo de material).

Formas de entrada según el tipo de documento

.Libro Koontz, H. y Weihrich, H. (1998). Administración: una perspectiva global (11ª ed.).

México: McGraw-Hill Interamericana.

. Capítulo de libro con editor/es o compilador/es Fillmore, Ch. (1982). Scenes and frames semantics. En Zampolli, A. (Ed.). Linguistic

structures processing (p. 5581). Amsterdam: North-Holland.

. Artículo de revista científica Lee, J. y Musumeci, D. (1988). On hierarchies of reading skills and text types. Modern

Language Journal, 72 (2), 73187. Está indicando: Volumen 72, número 2, de la página 73 a la 187.

. Artículo de revista no especializada Lefort, R. (2000, junio). Internet, ¿Salvador de la democracia? El Correo de la

Unesco, 53, 44-46. Está indicado: Volumen 53, de la página 44 a la 46.

. Proporcionar la fecha mostrada en la publicación El mes para las mensuales o el mes y día para las semanales. Dar el número de

volumen.

. Ponencia y acta de congreso No publicada: Thomas, B. (1989). El desarrollo de la colección en bibliotecas

públicas. Trabajo presentado al II Congreso Latinoamericano de Bibliotecas Públicas, realizado en Montevideo del 5 al 10 de julio de 1989. Publicada en actas:

Carsen, T. (1995). Derecho a la información: una aproximación hacia una ética y conducta profesionales. En Reunión Nacional de Bibliotecarios (29a: 1995: Buenos Aires). Trabajos presentados (p. 41-49). Buenos Aires: ABGRA.

.Manuscrito no publicado

Para distintos tipos de trabajos no publicados se debe aclarar: Manuscrito no publicado. Spindler, G. (1993). Education and reproduction among Turkish families in Sydney. Manuscrito no publicado.

.Comunicación personal

Incluye cartas, mensajes de correo electrónico, listas y grupos de discusión, conversaciones telefónicas, y similares. Se debe citar en el texto pero no en la «Lista de referencias bibliográficas». «Juan González sostiene (carta del autor, 10 de mayo, 1993) que ...»

. Recursos electrónicos Siguen básicamente la estructura de la cita ya indicada (autor, fecha, título).

Cuando la información se obtiene a través de Internet, al final de la cita se agrega la dirección correspondiente.

. Documentos en Internet: Especificar la vía (el «URL») para documentos obtenidos por Internet. Lander, E. (Comp.) (1993). La colonialidad del saber: eurocentrismo y ciencias sociales. Buenos Aires: CLACSO. Disponible en: http://www.clacso.org/www/clacso/espanol/ html/fbiblioteca.html Para otro tipo de recurso, a continuación del título y entre corchetes, se agrega del tipo de recurso, por ejemplo CD- ROM, disquete, base en línea, etc.

. Medios audiovisuales Es la misma estructura de cita, especificando el medio entre corchetes

inmediatamente después del título. Crespo, J., Hermida, J.A. (1993). Marketing de la tercera ola [videocasete]. Buenos Aires: Marketing para el Crecimiento.

Ejemplo de Lista de referencias bibliográficas -Alfaro Drake, T. (1993). El marketing como arma competitiva: cómo asegurar

prioridades a los recursos comerciales. Madrid: McGraw-Hill. -Amor, D. (2000). La (R)evolución E-business: claves para

vivir y trabajar en un mundo interconectado. Buenos Aires: Pearson Education. -Ávalos, C. (2001). El futuro de las marcas. Diseño & Comu-nicación. 4 (33), 4-5.

Normas de Estilo Se indican a continuación algunas normas de estilo. Para los casos no contemplados

aquí, se debe consultar el Manual de la APA. .Tablas y figuras Las tablas exhiben datos cuantitativos que se disponen en una presentación

ordenada de columnas y filas. La figura es cualquier tipo de ilustración distinta a una tabla: diagrama, gráfica, fotografía, dibujo u otro tipo de representación. Las tablas y figuras deben ser tituladas, numeradas con números arábigos en secuencia diferente para tablas y figuras, y referidas en el texto por su número.

.Comillas dobles En general se usan para:

. Las citas de menos de 40 palabras dentro del texto

. Presentar una palabra como comentario irónico, como jerga o como expresión inventada. . Para resaltar el título de un artículo de revista o capítulo de un libro cuando se mencionan en el texto. No confundir con el título de una revista o el título de un libro.

No se usan para: . Enfatizar. . Presentar un término nuevo, técnico o clave. En vez de ello ponerlo en cursiva. . Citas en bloque (citas de más de 40 palabras).

.Cursivas Como regla general se deben usar las cursivas sólo de manera excepcional.

Se usan para: . Palabras de otro idioma. Cuando éstas estén asimiladas al castellano, irán en redonda y con la acentuación correspondiente (estándar). . Títulos de libros y revistas. . Presentar un término nuevo, técnico o clave. Se usan dentro de una oración para indicar que se ha omitido material de la fuente original. No se deben usar al principio o al final de cualquier cita a menos que se necesita enfatizar que la cita comienza o finaliza en medio de una oración.

.Paréntesis Además del uso en las citas y en las referencias bibliográficas, se usan para: .

Introducir una abreviatura. Técnica del Grupo Nominal (TGN) . Para resaltar letras que identifican los puntos enumerados en una serie. a), b), c).

Rótulos, Etiquetas y Portadas Estandarización de las presentaciones de los estudiantes de Diseño y

Comunicación (ver en www.palermo.edu � Facultad de Diseño y Comunicación � Orientación al estudiante� Rótulos)

La Facultad de Diseño y Comunicación ha estandarizado y sistematizado las producciones de los alumnos, con el objetivo de jerarquizar sus presentaciones. Los alumnos en sus carreras producen trabajos en diversos soportes (digital, papel, fotografía, audiovisual, prototipos, etc.), para todas estas instancias se han diseñado las portadas, los rótulos y las etiquetas que unificarán las presentaciones de las diferentes asignaturas.

Equipo de Gestión Académica 5º piso. Teléfono 5199-4500 int. 1552

[email protected]

GUÍA DE COMPROBACIÓN DE LOS REQUISITOS DE ENTREGA DEL TRABAJO PRÁCTICO FINAL

Asignatura: Comunicación oral y escrita

Nombre y apellido: Legajo:

Teléfono: mail:

REQUISITOS DE ENTREGA

SI

NO

CUERPO A Carátula Guía de Trabajo Práctico Final Síntesis del trabajo Curriculum vitae Declaración jurada de autoría CUERPO B Carátula Índice Introducción Investigación exploratoria Relato escrito Relato visual Conclusiones personales Bibliografía CUERPO C Carátula Fotocopia de artículos periodísticos Imágenes Entrevistas Otros Versión digital

Firma:

Declaración jurada de autoría

A: Facultad de Diseño y Comunicación. Universidad de Palermo.

Por la presente dejo constancia de ser el autor del Trabajo Práctico Final

titulado

que presento para la asignatura

dictada por el profesor

Dejo constancia que el uso de marcos, inclusión de opiniones, citas e imágenes

es de mi absoluta responsabilidad, quedando la UP exenta de toda obligación al

respecto.

Autorizo, en forma gratuita, a la UP a utilizar este material para concursos,

publicaciones y aplicaciones didácticas dado que constituyen ejercicios académicos de

uso interno sin fines comerciales.

___ / ___ / ___

Fecha Firma y aclaración

Aportes

El desarrollo de este trabajo me permitió llevar a cabo una investigación en la

que conocí más a fondo parte de mi historia y de mis raíces. Pude

contextualizar todo aquello que vivieron mis antepasados y así poder valorarlo.

También fue interesante el hecho de indagar en la familia mediante la

participación de sus miembros como proveedores de información.

El hecho de lograr escribir esta historia fue gratificante, desde el punto de vista

en que uno a veces puede subestimarse creyendo que no es capaz de lograr

ciertas cosas. Además, este trabajo me permitió brindar un homenaje a una

persona importante en la historia familiar, que perdurará en el tiempo.

Un italiano exitoso La historia de mi tatarabuelo

La historia trata sobre algunos aspectos de la vida empresarial de Luis Godio,

un italiano que llegó a Argentina por motivos laborales. Al igual que muchos

inmigrantes, construyó su riqueza desde abajo y con el empeño característico

de los italianos. En esta historia se contará sobre los pasos que fue dando

desde su llegada a Argentina y cómo fue estableciéndose en la ciudad de

Bahía Blanca con la instalación de una industria harinera y la construcción de

un imponente hotel, entre otras de sus propiedades.

Se rendirá homenaje a su persona por el legado que ha dejado a su familia y a

la sociedad en general.

Un italiano exitoso La historia de mi tatarabuelo

Esta historia ha sido elegida porque se considera relevante la figura de Luis

Godio tanto a nivel familiar como a nivel social y económico. Este hombre fue

de gran importancia en Bahía Blanca a partir de la década de 1920 y aún hoy

es recordado, tanto por sus cambios y su accionar en la ciudad como por su

humildad y su forma de ser con los demás.

Entre sus logros se encuentran la fundación de la primera industria molinera

“La Sirena” junto a su tío José Godio en 1922 y además se le atribuye la

creación del reconocido e histórico Hotel Italia, fundado en 1919. Más allá de

su reconocimiento en inversiones y su desenvolvimiento como empresario, su

generosidad se evidencia en donaciones que ha realizado a entidades como

hospitales y escuelas de la ciudad que hoy en día llevan su nombre.

En este relato se desarrollará su historia, desde su llegada a Argentina

proveniente de Italia, avanzando hasta la actualidad donde hoy se ve lo que ha

dejado su accionar en la ciudad.

Capítulo I: EL MOLINO

La historia empresarial comenzó a fines del siglo XIX cuando José Godio, un

italiano nacido en Piamonte, provincia de Novara, llegó a Buenos Aires en una

época en que la Argentina no estaba constituida definitivamente y sufría las

consecuencias de transformaciones políticas. Estuvo en Buenos Aires, hasta

que se estableció en el Tigre con una panadería y almacén. Por esos años, y

en el marco de la guerra con Paraguay, tuvo que proveer al ejército argentino

de galletas, vino y otros artículos.

Con algunos ahorros, atraído por el renombre y el porvenir que auguraban

nuevas tierras en desarrollo, decidió trasladarse en el año 1881 a la ciudad de

Bahía Blanca, en el sur de la provincia de Buenos Aires. Llegó al lugar con el

objetivo de comprar algún campo y establecerse en la zona. Una vez allí,

adquirió una colonia inglesa que recientemente se había establecido sobre las

orillas del Sauce Grande. Pero su propósito cambió totalmente, porque su

visión a futuro le permitió ver el porvenir de esta ciudad en su aspecto

comercial. Por dicho motivo, decidió radicarse en la ciudad, renunciando a los

objetivos de colonizar que traía consigo en un comienzo.

Una vez instalado en la ciudad, conoció a Antonio Boccardo, que era dueño de

una panadería llamada “La Sirena”. Fue uno de los primeros panaderos de

Bahía Blanca.

Boccardo y Godio se asociaron y fundaron un molino que conservó el mismo

nombre que la panadería.

Así fue que en el año 1882, se fundó el molino “La Sirena” a orillas del Arroyo

Napostá. Se instaló en un terreno ubicado a cinco kilómetros de la ciudad de

Bahía Blanca. Era un molino primitivo, a piedras, movido con agua por medio

de ruedas. Tenía la capacidad de ascender cincuenta bolsas diarias de trigo,

que por medio de algunas transformaciones se transformaron en doscientas

bolsas.

La sociedad “Godio y Boccardo” continuó hasta el año 1894, cuando el señor

Boccardo fue eliminado voluntariamente, entonces se convirtió en “Godio y

Sobrino”, por la incorporación de Luis Godio a la empresa familiar.

Mucho antes de ser incorporado en la sociedad, ya intervenía en los negocios y

era de suma importancia en las decisiones de la firma Luis Godio, sobrino de

José Godio. Era originario de Novara, al igual que su tío y dejó su tierra al ser

llamado por éste para incorporarlo en los negocios, poder contar con su ayuda

y para que, tiempo más tarde, continuara con la empresa familiar. Por eso, en

el año 1892, Luis Godio llegó a Argentina y desembarcó directamente en Bahía

Blanca. Su activa participación en los negocios familiares y su empeño en el

accionar empresarial, hicieron que una vez que se retiró el señor Boccardo,

formara parte de la sociedad. Hasta que en el año 1918, quedó como único

dueño de la industria molinera.

En esta nueva etapa, el molino ya había atravesado grandes transformaciones

que contribuyeron a un aumento notable de su producción. Un primer cambio

fue en el año 1884, cuando una crecida en el arroyo Napostá destruyó las

instalaciones, que fueron reconstruidas en el mismo lugar. Pero en 1921, la

industria se trasladó a una nueva ubicación, cerca del centro de la ciudad, en la

intersección entre las calles Dorrego y General Paz. Además del molino, allí se

encontraban construcciones que complementaban el proceso de

industrialización como galpones muy amplios donde las bolsas de trigo

esperaban la transformación que las convertiría en harina, desvíos, cintas

continuas que transportaban el producto de forma rápida y cómoda desde

cualquier parte del galón hasta los silos, donde el cereal esperaba a su

molienda, que se realizaba con una maquinaria muy moderna de industria

suiza, alemana e italiana. Además, su ubicación estaba cerca de la estación de

ferrocarril de la ciudad, con el objetivo de disponer de un acceso directo para

los vagones que transportaban materias primas y productos. Poco quedaba de

aquel molino lento, que sólo producía cincuenta bolsas diarias de harina. Éstas

se habían multiplicado por cien…

El molino se encargaba de elaborar dos tipos de harinas destinadas a usos

diferentes. Por un lado producía harina Doble A, para a la fabricación de pan de

primera clase y artículos finos; y por el otro Doble B para la galleta. Otro tipo

especial de harina se producía para la fabricación de la galleta cordillerana, que

se enviaba a las cordilleras. Además de estos productos directos, generaba

subproductos que eran exportados.

Todas estas maquinarias eran movidas eléctricamente por energía que

proporcionaba la Compañía Ítalo-Argentina de Electricidad, de la que el señor

Godio era accionista.

La producción del molino “La Sirena” no sólo abastecía al comercio local, sino

que se extendía a partidos limítrofes y a territorios de las provincias de

Neuquén, La Pampa y Río Negro. Los productos eran muy bien recibidos por

su buena calidad.

Dentro del molino trabajaba personal selecto y un gran número de obreros que

eran retribuidos con buenos salarios y con un mejor trato. Si en algo se

destacaba Luis Godio, a demás de su brillante aptitud para los negocios, era en

su generosidad. Era un hombre muy activo, incansable. Enemigo de las

aventuras, muy racional, siempre supo manejar su negocio con la prudencia

necesaria. Fue operando, lento pero firme, esa transformación que lo llevó a

ser dueño de un molino símbolo de organización. Claramente su fortuna no fue

un acto librado al azar ni de pura suerte, sino el resultado de su esfuerzo y su

trabajo constante. Su lema era muy sencillo: producir. Producir para obtener

riqueza de la naturaleza y para que los que siguieran aprendieran el camino

emprendido y pudieran superar las dificultades que aparecieran en el camino.

El molino continuó su funcionamiento y en 1967 fue adquirido por la firma

Werner S.R.L que modernizó nuevamente las instalaciones y cambió su

nombre a Molino Atlántico. Diez años más tarde, la empresa declaró su quiebra

y el molino pasó a manos de veinte empresas harineras del país, algunas de

ellas de capital extranjero que procedieron a desmantelarlo con el fin de

“eliminar posibles competencias”. Esto mismo ocurrió con otros molinos del

país. Según decían los expertos, este tipo de consorcios lo que buscaba era

destruir industrias locales para tener el dominio del mercado, mediante la

política de la tierra arrasada “por donde ellos pasan, no vuelven a florecer

industrias”. En 1983, se retiró el equipamiento y se procedió a demoler parte de

la obra. Se retiró la cubierta de la principal nave industrial, se quitaron

aberturas y se demolieron los silos de hormigón que habían sido construidos en

1925 por la empresa del ingeniero Francisco Marseillán. Eran cuatro cilindros

de veintiún metros de alto y seis de diámetro que demostraban la capacidad

operacional del lugar. Junto con el cierre definitivo y la demolición de ciertas

partes de su edificación, se desvanecieron entre los escombros años de trabajo

y dedicación, al igual que la destrucción de una parte del patrimonio de la

ciudad de Bahía Blanca.

Desde entonces, las instalaciones del molino “La Sirena”, popularmente

conocido como molino Godio, han quedado en completo desuso y el interior del

inmueble se encuentra poblado de árboles y malezas, convirtiéndose en la

imagen del triste destino de un edificio industrial que funcionó por más de

sesenta años.

Capítulo II: EL HOTEL

En paralelo al desarrollo de la industria molinera, Luis Godio llevó a cabo otras

acciones empresariales, como la adquisición de tierras en la provincia de

Buenos Aires para la explotación agropecuaria y la compra de propiedades en

distintos sectores de la ciudad. Sin embargo, hubo una inversión por parte de la

familia Godio, que contribuyó a nivel local y fue la adquisición de un importante

inmueble. En el año 1907, José Bautista Godio compró el Kayser Off, un hotel

de dos plantas dedicado a los encuentros de parejas, ubicado en la zona

céntrica donde se encontraban el viajo mercado, hoteles de citas y teatros.

Tres años más tarde se proyectaron reformas y ampliaciones que fueron

constituyendo al reconocido Hotel d’Italia. Esa reconstrucción estuvo a cargo

de Juan Russo y José Guagnini. El edificio ocupaba toda una pequeña

manzana rodeada por las calles Donado, Brown, Anchorena y Arribeños,

ubicada en un lugar privilegiado de la ciudad. El sábado 20 de septiembre de

1919, el hotel fue inaugurado por Luis Godio. Contaba con ochenta y tres

habitaciones con baños, ascensor y calefacción, además de un restaurante a la

carta y ofrecía descuentos a viajantes y pensionistas.

En 1930 otra remodelación se llevó a cabo. La obra estuvo en manos de los

arquitectos Roberto Germani e Ines Rubio. El hotel pasó a tener noventa

habitaciones, distribuidas en los frentes de los tres pisos, con la luz, aireación y

ventilación ideal. Además, todas las piezas fueron dotadas de lavatorios con

agua fría y caliente, aumentando el número de baños y se le adjuntó baño

privado a nueve de las habitaciones. En el primer piso, se encontraba un hall y

una sala de recepciones, mientras que en la planta baja funcionaba el

comedor, el bar y en el sótano (que abarcaba todo el área del edificio), las

cocinas, el frigorífico y los depósitos. Además, contaba con un entre piso donde

se instalaba una sala de conferencias para reuniones y otras actividades. El

personal estaba integrado por cincuenta personas. Todas las modernizaciones

que atravesó el inmueble, permitieron que se mantuviera como uno de los

hoteles más importantes de la ciudad hasta que la situación comercial se tornó

insostenible.

El hotel administrado por Luis Godio, pudo sortear varias etapas de la historia

hotelera. Además, estuvo ligado al crecimiento comercial local y cobijó entre

sus paredes a numerosas delegaciones deportivas, políticos y artistas de

alcance nacional. Se convirtió en uno de los espacios más tradicionales de la

ciudad y adquirió reconocimiento como bien patrimonial de valor tres (sobre

cinco), inventariado por su condición histórica, cultural y paisajística.

En enero de 2011 el edificio bajo el nombre del Hotel Italia, cerró sus puertas a

pocos días de cumplir cien años. La cuarta generación de la familia Godio

afirmó que el fin de su funcionamiento se debió a pérdidas económicas que

estuvieron relacionadas con la creciente competencia producida por los

departamentos de alquiler por día. Los veinte trabajadores que quedaron

desempleados, cobraron subsidio por desempleo y sus respectivas

indemnizaciones. Dos meses después de su cierre, todo el equipamiento se

subastó públicamente en el local donde funcionaba el restaurante del hotel. Se

vendieron setecientos veinte lotes, a martillo corrido durante casi diez horas.

Gran parte de la historia del centro bahiense se fue con el cierre del

emblemático Hotel Italia.

En el año 2012, se procedió a la venta del edificio a valores muy inferiores a los

que se había pensando en un principio, además de haber recibido propiedades

en el sur del país como parte de pago. Tras varios intentos fallidos por

conseguir compradores que continuaran en el rubro, las gestiones de la

operación inmobiliaria demandaron varios meses de tratativas y finalmente los

adquirentes del bien afirmaron la instalación en toda la planta baja de un local

de comidas rápidas de la ciudad, “Big Six”, firma que comenzó a operar en

1997 a dos cuadras del Hotel Italia. Los pisos superiores del edificio,

continuarán funcionando como hotel, solo que los actuales propietarios

adaptarán las plantas altas a los nuevos tiempos. Las remodelaciones para

dicha instalación aún se encuentran en proceso. Los nuevos dueños son

locales, por lo que conocen la historia e importancia del edificio en la ciudad y

se han comprometido a continuar su mantenimiento como patrimonio cultural.

Otro aporte importante de Luis Godio hacia la ciudad, se produjo en el año

1923, cuando donó quince hectáreas de su propiedad para que en ellas se

construyeran las instalaciones del actual Hospital Pena. Las obras comenzaron

tres años más tarde y quedaron terminadas en 1928, pero su inauguración se

llevó a cabo en 1932, una vez que se contó con el equipamiento necesario para

su habilitación. De esta manera contribuyó en el área de sanidad local en un

acto de generosidad para el bien común.

Mediante esta sucesión de actividades empresariales y comunitarias, se

percibe la humildad y generosidad de Luis Godio, un italiano trabajador cuyo

accionar en la ciudad es aún hoy sumamente importante a nivel cultural y

social. Empleó a muchas familias y llevó una vida sacrificada donde todo lo que

obtuvo fue gracias a su esfuerzo. Siempre pensando en el futuro y en las

generaciones siguientes, hoy en la cuarta generación de la familia Godio poco

queda de aquellas empresas instaladas en el siglo XX, pero siempre se

recordará y agradecerá el esfuerzo de aquel hombre que tanto hizo por su

descendencia y su ciudad. El legado arquitectónico e histórico es imborrable y

permanecerá por siempre en las calles bahienses y en el recuerdo de las

personas que tuvieron la posibilidad de estar alguna vez allí.