Perspectivas políticas

Lacan lo inconsciente reinventado – Colette Soler

1. ¿Disidencia del síntoma?. Intro

1.1 El cuerpo civilizado• Síntoma como acontecimiento de cuerpo civilizado, por practicas de

normativización, dominio, disciplinamiento (significante amo). Incluye la idea de Habitus d Pierre Bourdieu.

• Capitalismo tiende a homogeneizar las practicas corporales, no obstante hay practicas anti-pathos, anti empáticas, que sostiene una diferencia binaria sostendia en practicas de mutilación, o subyugación d ellos cuerpos (cuerpos gestantes?). Tiende a meter todos los goces en la maquinara de consumo.

• El discurso nos da un cuerpo, pero no necesariamente nos apropiamos de el, eso se decide a nivel del uso que hagamos del cuerpo cuerpo (imagen, objeto, rendimiento, erótico… ) eso tiene un limite, porque se puede elegir la practica de goce a la que someter el cuerpo pero no las respuestas de goce que obtengamos, eso no se elige.

• Las respuestas de goce esta fuera del programa del discurso establecido (cuerpo a cuerpo)

1.2. Cuerpo fuera de discurso• El ejemplo del autismo

• El síntoma muestra un punto de excepción del lazo/discurso establecido.

• El disorder, el orden del discurso que regula los cuerpos/goces, se halla dañado.

• La disidencia del sintoma tiene un alcance politico

1.3. El síntoma objetor

• La histeria de conversión. Erogenización desplazada, rehusamiento del cuerpo. Huelga del cuerpo (con el cuerpo), ambigüedad de sostener al amo y objetarlo con un síntoma corporal.

• Cuando el ste amo es poderoso, el síntoma aparece como disidencia. Los sin

1.4 Un discurso de urgencia• Liquidar los síntomas atípicos (averías de la maquina cognitivo

comportamental), sobre todo los que llevan la marca del goce autista de la oralidad (anorexia), del humor (humor)

• Un síntoma de singularidad, sin mentir ni sobre la relación que no hay, ni sobre lo real y sus síntomas (que suplen y sustituyen el destino para cada hablanteser). Los modelos de pareja construido por medio de semblantes, suplen… construyendo normas implícitas (Ej.?)

• Es necesario saber cual es el síntoma de suplencia para cada sujeto, a- si este es socializable (soportable en el lazo social), la dir de la cura va desde la novela fantasmática hasta lo real de la letra unaria autista que no cesa de no inscribirse (pulsión y de repetición). b. caso contrario se ira de un real demasiado libre, fuera de lenguaje, a un amarre en el lenguaje.

• En todos los casos se apunta ala diferencia absoluta.

• Dañada de la libido socializante (grandes conglomerados de cuerpos proletarios fuera de lazo social) sin nada con que hacer lazo social. Ej. Amores-sintoma surgidos (sintomaticamente) de las particularidades de cada quien.

• Avance de la ciencia (la tecnología al servicio del capitalismo neoliberal) al servicio de la pulsión de muerte. Ya no solo la biopolítica sino la necropolitica.

Achille

Mbembe,

acuño este

termino

de necropolít

ica. Él

sostiene que

la biopolítica

no es

suficiente

para entender

cómo la vida

se subordina

al poder de la

muerte en

África.

• No hay relación entre goces individuales… tampoco hay relación entre los síntomas. Es necesario reconocerse en los síntoma fundamentale de cada quien (salida del discurso establecido)

• Solre invita a incluir el concepto de inconsciente real para que los psicoanalistas puedan unirse a la subjetividad de la época.

2. El psicoanálisis y el capitalismo2.1 Abrir los ojos• El psicoanálisis no es el envés del

discurso capitalista. Desidentificación y acceso/localización del goce tiene usos opuestos. (Ej. Saldo cinico y cinismo)

• Derecho al goce (?). Causas privadas.

• Los ordenamientos propuestos por los discursos son incapaces de acallar “la maldición del sexo”. (p.222)

• Los 4 discurso (amo, histeria, universitario, y analítico) son modos de tratar los infortunios programados de la pareja sexual. Nada de eso hay en el cientificismo capitalista, que solo se interesa en la pareja individuo-consumo. Produce satisfacciones insatisfactorias, el narcisnismo, la rivalidad e individualismo salvaje, la inestabilidad de los lazos sociales… el capitalismo ofrece un objeto que promete calmar la insatisfacción y sin embargo la acrecienta. Pero sostenido, con ciertos fundamentalismos de derecha neoliberal, religión, ideologías “psi”.

• El mercado es global, “todos proletarios”, pero los valores y las ideologías están fragmentadas (?)

2.2 Irrisión de la palabra• Los fundamentalismos y totalitarismos (políticos, religiosos, epistémicos?),

solo dejan oir las voces que los sostienen o reproducen. Cualquier desviación (como lo es el síntoma) se le niega el valor de verdad, lugar para la policía o el psiquiatra que medicaliza síndromes, pero no para el interprete-psicoanalista.

• Se alienta a la palabra (vacía), al testimonio, a la expresión… siempre que no tenga consecuencias. Palabra reducida a una mera función catártica, alivia al consumido, elector… para que continúe re-produciendo el sistema. Hablar (incluso como técnica psi) aliviar, descargar, sin que nada cambie y es un goce económico, de bajo costo (sic). Esto para el psicoanálisis es un obstáculo, disputa contra la asociación libre y la espera de la interpretación de lo que no se sabe. Negación o desmentida del retorno de lo real.

• Ostracismos inspirados en la afinidad, hermandad en el síntoma o el goce. Segregaciones. A contrario el psicoanálisis busca la verdad del goce, la ficción o fixión propia de aquello que separa del rebaño.

• El universo del discurso es incompleto.

2.3 Freud enmascarado• Su descubrimiento fue subversivo ética y filosóficamente, pero el avanzo

enmascarado, de cientificidad, de eficacia, de solución al impasse medico ante la histeria. El que imaginaba llevar la peste, no considero que el capitalismo forcluye al sujeto y la dimensión de verdad de sus síntoma/goce.

• Administrar el goce no es interrogarlo por su verdad. El psicoanálisis fue fagocitado por la psiquiatría anulando sus categorías (ej. la histeria freudiana)

3. Malestar en el psicoanálisis• El ejemplo de Melanie Klein, la no adaptación al standard de Lacan, y el

interrogante por el psicoanalista afectado por el discurso capitalista (también universitario?). Por ejemplo: la cantidad de pacientes, cuanto cobra el fulano, cuantos pacientes tiene, cuanto tiempo trabaja, la competitividad, el individualismo, el estándar de estilo lacañoso… la secta, la hermandad sintomática que espera del amo el saber digerido, el consumo de cursos, pilchas, viajes u otras ostentaciones… pero también la demanda de disciplinamiento bajo la forma irrisoria de formación, la proscripción de autores que no se pueden citar (como es el caso de Colette Soler), la cita obligada del Uno, amo. El uso del saber como poder, la reterritorializacion de espacios públicos y académicos por las milicias que sostienen “la causa analitica”. La trasformación en pensamiento hegemónico… etc

3.1 Precariedad de las instituciones• El analista silente, el mediático, el que no da cuenta de lo que hace. La

autorización, las garantías. El deseo del analista no debe ser anónimo. El sujeto supuesto saber, el significante cualquiera y la transferencia al Uno y a la Institución, da la ilusión (neurótica) de fratria u orda y de cobijo bajo el manto del Uno. A la espera de la muerte del padre para ocupar su lugar, o a la espera de un signo de su amor para habilitarse a practicar. Grandes asociaciones psicoanalíticas donde los empresario del saber, y sus sucursales se ubican por debajo del director general o amo impuesto. Para ascender en la jerarquía hay que pagar, de distintas maneras. El virus capitalista es la verdadera peste que puede minar las instituciones… como la psicoanalítica tambien.

• Y la escuela de psicoanalisitas?

3.2 la institución reinventada3.3 un acto sin retribución• El analista es el residuo de la operación analítica. Opera pero no se firma. Si

bien cada analista tiene su estilo, esto no debe repercutir en el analizante (limite de la practica). Es imposible identificarse con el analista definido por su acto. No tiene descendientes, herederos ni obras de su creación. Desde este perspectiva el psicoanálisis no se trasmite pero se perpetua. Acto anticapitalista, sin Otro (no hay intercambio). Si hay fracasos son del analista si hay éxitos son del analizante.

• Cuando el Otro es consistente, la marginalidad es apetecible. Cuando es inconsistente, hace estragos en los lazos.

• El deseo del analista y el de saber pueden ir d ela mano. No solo es practicar sino reinventar el psicoanalisis

4. Que quiere el psicoanalista?• Hay que tomar el deseo a la letra. Política de lectura, saber hacer con la

estructura del lenguaje?

• La ética del psicoanálisis

• No se pieza la división del sujeto sino mas bien dentro de la división (ej. Discurso histérico).

• La realidad es abordada por los aparatos del goce (discursos). No hay realidad previa al lenguaje. El pensamiento procede por via ética, el juicio, hasta el “ultimo” es solo fantasma.

• La política del psicoanálisis se define por como éste se defina y como se defina al sujeto que trata. No se puede pensar su propia causa, sino que la causa lo divide. Por eso es mas importante la perspectiva que sitúa la ética de su discurso, de su práctica.

• Su ética y su política se orientan por lo real (como toda ética solo que aca es por el Real lacaniano) cerniéndolo por medio del buen-decir

4.1 una terapéutica no prescriptiva• Que se diga! Queda olvidado en lo que se dice tras lo que se oye. El olvido del

olvido?

• No todo dolor es síntoma. No hay partenaire que no sea sintomático. Un partenaire puede sustituir una sintomatología (ej una obsesión) tal vez algo mas soportable (el sujeto debe evaluarlo)

• El discurso va mutando, los encuentros con el goce y sus escollos deben ser subjetivados. El relajamiento del puritanismo religioso y moralista ha permitido mayor expresión del deseo. No hay sujetos mas perversos que antes, sino sujetos mas tomados por el discurso que impera al goce. ¿Cómo situarse en la época sin renegar de la experiencia y el saber obtenido?