PUBLICACIONES MÉDICAS BIOHORM—SECCIÓN: MEDICINA E HISTORIA

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Prof. Pedro Piulachs — Prof. Diego Ferrer de la Riva — Prof. J. Rof Carballo — Prof. Ramón Sarro BurbanoProf. Manuel Usandizaga. — Dirección gráfica: Pla-Narbona

n." 39 Octubre 1974-Barcelona (Segunda Época)

Ahora también I \M %\¿F I I Vwí I

antibiótico/|N El corticoide dérmico de En cualquier""•ir- acción «depot» asociado a edad y proceso dérmico.^ / la neomicina y al

cloroquinaldol.

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Cuando el síntoma es (~H*~W^

epigastralgia precoz ^q[ •

IM^I r / ' 5 ^ ^ _ *" , 1 1 y ^ ^ • í u i l C r ^ ' i La ,

Sw>?^ -< fl / V N/ •/ f il W a M C H • >>n I \ < *r B B

HEPA e| "%T^^^^^"T^ ^ ' I ' aimoniza la estructura

I I #^ B I~* ^ ^ Y la dinámica de laI y I ^ L ^ ^ y I | i^y JL encrucijada hepato-bilio-digestiva

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^ ^ ^ ^ * ^ ^ al dia.PRESENTACIÓN: Frascos de 4O grageas, ptas 297.BO

J. URIACH J. Cia. S. A. Barcelona

MEDigNA&HIMORKREVISTA DE ESTUDIOS HISTÓRICO-INFORMATIVOS DE LA MEDICINA

Centro de Documentación de Historia de la Medicina de J. URIACH & Cía. S. A.

Barcelona, octubre de 1974

EDITORIAL SUMARIO EL XXIV CONGRESOINTERNACIONAL DE HISTORIA

LA RELACIÓN CUERPO Y ESPÍRITU DE LA MEDICINA

La naturaleza sigue su curso entre dos _. _polos claramente definidos, la tenden- f&' #cia a una desintegración progresiva que Editorial. £1 día 29 del pasado agosto se clausuróconduce a la muerte térmica y la ten- El XXIV Congreso Internacional de en Budapest esta reunión internacionaldencia opuesta que lleva a la nivelación Historia de la Medicina que congregó cerca de cuatrocientoso anulación temporal de la corriente historiadores y en la que se leyeronentrópica. El resultado de este equili- Pág. I/XVI trescientas comunicaciones. Agrupadasbrío es no solamente la vida vegetativa La crisis de la e n cuatro secciones se trató de la evo-sino que en el hombre, mediante el Anatomía macroscópica lución de las ideas médicas a partirinstinto sexual y la inteligencia, trans- e n j a 0 D r a de del siglo xvm; de las relaciones histó-ciende el impulso ñsiológico hasta ac- Federico Oloriz rico-médicas entre los países de la Euro-ceder a la conciencia, lucidez que lleva por pa central y del Este, con el resto delal hombre a aceptar que si la vida no Emilio García Carlos. mundo; un simposio sobre las relacio-puede escapar al inexorable destino nes de la Medicina propiamente dichaentrópico, en cuanto a su existencia in- p¿g 29 y las demás ciencias y artes, desde eldividual, le trasciende en cambio en el Obras inm-esadas s i g l° XVHI y U n a c u a r t a s e c c i o n <lue

devenir de una existencia general. ww englobó historia de la Farmacia, de laEl cartesiano «pienso, luego existo», e n n u e s i r a D1D»oceca- Psiquiatría y Etnomedicina.que hubiera podido ser una excelente Asistieron representaciones de todo elfórmula para volver las ciencias del es- 8" ™ mundo cabiendo destacar, aparte de lapíritu y de la materia al punto donde Noticias. del país organizador, las muy numeró-las situara Hipócrates, desgraciadamen- sas de ambas Alemanias, Estados Uni-te, sirve sólo para escindir al hombre dos, Francia, Italia, Gran ^Bretaña, Po-en dos aspectos antagónicos. Tres lar- lonia, Rumania, Unión Soviética, singos siglos han sido menester para recu- olvidar al delegado del Japón. Menciónperar el pensamiento del maestro de aparte merece el grupo hispanoparlan-Cos y aceptar de nuevo, con toda evi- te entre el que cabe citar a los repre-dencia, que el hombre es un complejo sentantes de Venezuela, los doctores Ro-indisociable de carne y espíritu, una sario Beauperthuy de Benedetti, Pedrounidad hecha de materia viviente y de Quintero García, Pedro J. Téllez Ca-energía consciente. La máxima de Ju- irasco y J. M. Llopis, portavoces de lavenal, mens sana in corpore sano, en- inclusión del castellano como lenguacuentra hoy todo su sentido en la oficial para próximos congresos; a laFisiología, puesto que es experimental- presidenta de la Sociedad Argentinamente demostrable que lo psíquico y de Historia de la Medicina, doña E. Pe-lo somático, el comportamiento psico- nini de Vega y, por último, a nuestrafisiológico, se asienta sobre bases rea- delegación, constituida por la doctorales en los equilibrios o desequilibrios Elvira Arquiola, representante de la So-elementales, ciedad Española de Historia de laEl actual pensamiento médico fluctúa Medicina y por los doctores Franciscoentre el optimismo que nos brinda el Guerra, de Madrid; Ignacio Yáñez yarsenal terapéutico y el pesimismo que Juan Ramón Zaragoza, de Sevilla y Ra-nos ofrece el hombre en cuanto a las món Sarro, de Barcelona, e incluyendoreservas de sus defensas como indivi- ^m"^ ^ ^ ^ en este grupo de habla española condúo. Hay una tendencia a sustituir una 4 • • » lodos los merecimientos, al doctor Sal-terapéutica donde dominan la cantidad W I M vador Israel, de Solía, descendiente dey la agresión, a iin de paliar los desór- » ^ T ^ ^ ^ ^ B antiguos sefarditas y quien se expresadenes orgánicos que provocan la re- ^ k ^^^W ^ a e n u n c o r r e c t o castellano con viejassistencia a los antibióticos, los riesgos W V £ W reminiscencias de siglos pasados.de los corticoides, las catástrofes impu- ^ ^ ^ ^ ^^^F La organización, perfecta, había distri-tables a los tranquilizantes, etc., es buido con anterioridad los resúmenesdecir, un retorno, una nueva toma de de todas las comunicaciones que porconfianza en aquello que la Medicina » J ^ • 1 su número tuvieron que ser leídas entradicional y empírica desdeñara: la / \ / l l 3 ? í ~ | cuatro sesiones simultáneas, ademásnatura medicatrix del hombre. « " n*Jl I del simposio. Budapest, al decir de

M. CARRERAS ROCA (Segunda Época) (sigue)i

quienes ya conocían la ciudad, ha expe- A) Los métodos empíricos usados en D) Los profesionales de la Medicinarimentado un extraordinario cambio en Terapéutica, en especial los de origen popular,los últimos siete años teniendo en cuen- vegetal y las fuentes medicinales.ta su aspecto externo, instalaciones no- B) Existe una importante Medicina La Sociedad Internacional de Historiateleras, nivel de vida, un gran parque popular que podemos incluir en el gru- de la Medicina acordó designar la ciu-automovilístico y hasta los comercios po mágico. dad de Quebec como sede del próximodentro de los límites, éstos, de un país C) Las ideas religiosas de la época Congreso de 1976.que todavía no ha entrado de lleno en mantienen una estrecha relación con lala tan criticada sociedad de consumo. práctica de la Medicina. D.Al margen del Congreso, y aparte delas obligadas visitas al Museo Semmel-weis de Historia de la Medicina, alMuseo de Historia de la Farmacia ya la Biblioteca de Historia de la Me-dicina, cabe destacar un extraordinario ^^^~ ^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^mconcierto de órgano en la iglesia Mal- i ^ . ^ ^ ^ ^ ^thias, que domina la ciudad, y unas ^MC^^^M tf^^E^^^rtfc¿É¿¿^lfc^MfcfráShrecepciones, las del Gran Hotel y lade la Galería Nacional, donde los tra- yÉrV^^Idicionales estilos de la vieja Europa foiiurT ^VlÜfueron revividos, con nostalgia, por la jBr fadlf^ | y V | |Át f i l r «MImayoría iL- los asistentes. "IB í T W ' r g ^ f l i**ESP^F^ ILMS'W^T vKLos componentes del reducido grupo W^l^wB jLgpV • ? j t i B B S t m i ^ ^ ^ ' ^ T f ' Mespañol fuimos recibidos con toda cor- '•kj " n* m^wm f ' D r l i^^i ^^1cualidad por nuestro representante di- Jm*^ K ^ N V H N S í > JJ K j u C ^ i f l j flBj^^PfV ^^rplomático, v por su esposa, de quienes f"~ ~^^^jhí^ifí^^^U —*^recibimos toda clase de atenciones. An- ^w0ÜK^ V ' K L P ^ ^ B l uflL K • I ^T tftes de pasar a resumir las comunica- ^ ^ ^ ^ fcH^* ^ 1 ¿J^^ V V'^^^i ^L»* \ Wciones españolas, queremos expresar ^^^•^H A^H^^ T \ K ^ f c « ^ l l T^ i "nuestro reconocimiento al comité or- ¿ f l R / ^ ^ l fl W •¡Jc»'**^* j \ganizador por la excelente acogida que \'9i I L - ' ^ ° - ^ K ^ ^ B jS^f ^ ^ ^ ^ ^ ^ JGIhemos disfrutado en su país. ^^^Bfcrfc-Jfi L * J ^ ^ fPor parte española fueron presentadas l f I "~-: i ^ ^ 4 ^H"lcinco comunicaciones: tres nuestras ya H [ "^^Ll r^^afc. ^Ls f ^ B » ^ ^ ^ * ^ >resumidas en el número anterior de ^T l Jfl E ? ^ ^- B/^^^^ \ ^J^^^Jm^r^MEDICINA E HISTORIA, y otras dos, orí- ^vflUl ^* ~* i -^^B ^^^K" IBginales del doctor Francisco Guerra y W I B ^^^^^^TA| ^^BftJ""^"^ Ade los doctores Ignacio Yáñez y Juan ^ftr «ÍP ^IBUBH^ ^ ^ * ^Ramón Zaragoza, cuyos resúmenes da-mos a conocer hoy:GUERRA, Francisco: «LA INTRODUCCIÓNDEL SOCIALISMO EN HISPANOAMÉRICA POR Un momento de la sesión inaugura!.

UN MÉDICO HÜNGARO».

El socialismo fue introducido en Méxicopor Plotinus C. Rhodokanakis (1820-1884), oriundo de Khios si bien de nació- ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ M ^ H ^ ^ K f i ' ^ ^ ^ ^ J ^ R ^ ^ ^ ^ ^ ^ b ^ * ~ T ^nalidad húngara. Después de participar ^ ^ ^ ^ ^ ^ .. Mt*en los movimientos revolucionarios de ^^^^^^^^ ÍH1848 llegó a México en 1861 practicando ^ ^ * ^ " ^ T - ^la Medicina entre la clase trabajadora. *"*"111*- ^ "Publicó este mismo año una Cartilladel Socialismo colaborando con nume-rosos artículos en el periódico El So- ^ ^ f ccialista (México, 1871-1888), en donde i ^-"apareció el Manifiesto Comunista deMarx y Engels el 12 de junio de 1884. £% mIÍRhodokanakis fundó asimismo una Es- R_« 49d £^L ,C^% f^ ^í* r f _--cuela Libre en 1863 y un Club Socia- - ^ ^ ] ^ tt W ftlista para mujeres en 1876. Su residen- S H ' ^ • ^ • M J MÍ <H ¿á\^^Á~~~ i *\cia en México contribuyó al inicio de ™ ^íl V Hl ld L • ) " ^ \los movimientos sociales, al crecimien- d^^^fe sflV IR^^^^H ^H^H^to de las Uniones de Trabajadores y l ^ E Í ^ ^ ^ ^ ^ L ía las primeras huelgas políticas en pro m£ . ' ¿de mejores condiciones laborales. ^ ^ ^ ^ 1 *'-hYXÑEZ, Ignacio y Juan R. ZAK.U;O/,\: ^ ^ ^ ^ ^ H«MEDICINA POPULAR ESPAÑOLA DEL SI ^^^T^BGLO X V I I » . I fí|^^^^]H BL» !Se hace un minucioso estudio de los ^ ^ J É • L ^ ^ ^ linformes de viajeros extranjeros en 1^ ( ^^kEspaña durante el siglo xvii que com- Hfe Hprende los reinados de Felipe III, Feli- ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^pe IV y Carlos II. De ellos se tomanreferencias para el conocimiento de laMedicina científica y popular practica- intervención del delegado soviético, V. D. Petrov, quien tiene a su derecha a los doctoresdas en aquel tiempo, donde cabe se- Stanislaw Sliwiiski, de Cracovia; Louis Dulieu, de Montpellier; Imre Zoltán, József Antalln a'a r : y Emil Schultheisz, de Budapest, y por último, al rector de la Universidad.4

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MEDICINAg?HI5IDR!A

REVISTA DE ESTUDIOS HISTÓRICO INFORMATIVOS DE LA MEDICINADirector: Dr. Manuel Carreras Roca

Secretaría de Redacción

Centro de Documentación de Historia de la Medicina de J. URIACH & Cía. S. A.

Barcelona, octubre de 1974

EMILIO GARCÍA CARLOS

LA CRISIS DE LAANATOMÍA MACROSCÓPICA

EN LA OBRA DEFEDERICO OLORIZ

39M&H

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II

EMILIO GARCÍA CARLOS

LA CRISIS DE LA

ANATOMÍA MACROSCÓPICA

EN LA OBRA DE

FEDERICO OLORIZ

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III

I. INTRODUCCIÓN

El propósito que nos ha movido a confeccio- ra de España y lo sitúan entre las primerasnar el presente trabajo ha sido el de acercar- figuras mundiales de la Antropología morfo-nos a una de las personalidades médicas más lógica.2 Notoriedad, en definitiva, tanto másimportantes de la segunda mitad del siglo xix importante cuanto que su contribución al de-español.1 En efecto, Federico Oloriz es quizás sarrollo de la ciencia se verifica en unos mo-uno de los científicos españoles más descono- mentos y bajo unas circunstancias verdade-cidos en la actualidad pese a la gran notorie- ramente dramáticos.dad que en su tiempo alcanzó, tanto dentro Nuestro estudio, en verdad, no pretende sercomo fuera de España. Dentro, por la mérito- definitivo. Es simplemente una aproximaciónria labor docente al frente de la cátedra de al conocimiento de la obra científica de Oloriz,Anatomía de la Facultad de Medicina de Ma- fundamentalmente en aquellos aspectos en losdrid, incrementada por la publicación de obras que se hace notar la crisis del saber morfo-tan importantes como el Manual de Técnica lógico, centrado exclusivamente en la descrip-Anatómica y el Compendio de Anatomía Des- ción macroscópica, y la desesperada búsque-criptiva, este último en colaboración con Ju- da de otros derroteros científicos creadoreslian Calleja. y fructíferos.No obstante, donde Oloriz brilla con propia Las fuentes de las que nos hemos valido paraluz, es en el campo de la Antropología. Su Es- realizar el presente trabajo son, en su mayo-tudio sobre el índice cefálico en España, o su ría, manuscritas e inéditas, las cuales se en-contribución al desarrollo de la técnica de cuentran en el «Archivo Oloriz» de la Facul-investigación dactiloscópica se proyectan fue- tad de Medicina de Granada.

Retrato de Federico Oloriz, durante su etapa de catedráticoen la Facultad de Medicina de Madrid.

v

1/Facsímil de la parlada del Manual de Técnica Anatómica. iy algunos de sus grabados. MWl M.

TÉCNICA ANATÓMICA

DiSECClON

KMttIO

II. EL AMBIENTE CIENTÍFICO-SOCIAL DE I A SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XIX EN ESPAÑA

López Pinero3 ha estructurado la Medicina y que tan obviamente frenaron el desarrollo yla ciencia española del siglo xix distinguiendo el progreso científico.en ella una serie de períodos. Así, la genera- Federico Oloriz es, pues, hijo y fruto de estación de médicos y científicos nacidos en torno situación. Situación que se presenta más dra-a 1850-1855 pertenece de lleno a la denomi- mática aún cuando se traslada a capitales denada «generación de sabios». En ella están provincia. Imaginemos la Granada de finesincluidos hombres como Cajal, Federico Ru- de siglo, encerrada en sí misma, atrasada, sinbio, Ferrán, Simarro y nuestro Federico Olo- participación en el desarrollo industrial pe-riz. Esta generación se caracteriza no sólo culiar de otras latitudes españolas. Una ciu-por su plena conexión con Europa y la pose- dad dirigida espiritualmente por el clero y so-sión de hábitos de trabajo e instituciones cien- juzgada por la imposición intransigente detíficas, sino que incluso realiza aportaciones los caciques. Oloriz vivirá en sus propias car-originales en sus distintos campos, en plena nes las consecuencias de tal situación comocorrespondencia con la ciencia europea del tendremos ocasión de comprobar más ade-momento. lante.4

Estos científicos no surgieron por «generaciónespontánea». Su obra e instalación científicafue posible gracias al esfuerzo de los que, enmuchos aspectos, fueron sus maestros: la lla-mada por López Pinero «generación interme-dia» y que vivió el período correspondienteal reinado de Isabel II. La característica quemás nos interesa señalar de esta generaciónfue que sobre su esfuerzo personal y al mar-gen de todo interés por parte de la sociedadse logró superar el profundo bache en que elreinado de Fernando VII dejó a la cienciamédica española.No creamos que la «generación de sabios» su-pera totalmente los obstáculos que caracteri-zan a la «etapa intermedia». Ellos tambiénvivieron la indiferencia social, la limitaciónde medios y las estructuras político sociales

10

, & BufaK11 r o i>^^S • \ IIIOHOM*

/ - - I UN TRIANGULOI z—rra. f i PEUGROSO

• • • • El vasoconstrictor• • H K IV y descongestionante& • • • de la mucosa nasal

^ ^ H • • I V ^ ^ I V de acción prolongadaOximetazolina /jíchcim

UTABON representa un gran progreso en la 9 su efecto aparece rápidamenteterapéutica descongestionante. Se toleraperfectamente, es activo a concentraciones • es el vasoconstrictor local de acción1: 2.000 y 1 : 4.000 y su acción es dos veces más prolongadamás duradera que fa de los vasoconstricto-res hasta ahora utilizados. • n 0 produce vasodilatación

compensatoriaLa acción prolongada del UTABON hace 4 _ , i n l l l l , , . h i n , r . ^ . „ , .que sea suficiente una administración por • í ™sec™ció¡ FaciMta la resoiraciónla mañana al levantarse y otra por la noche " ^ ^ « 1 d en%e de ^ L n " P ' m a x t e sal acostarse para proporcionar al paciente u f ra r ita |BSuna respiración nasal normal durante las 24 " " " " " " ' " 'horas del día. Q n 0 inhibe los movimientos ciliares

UTABON, clorhidrato de oximetazolina en « su tolerancia es excelente. No producesolución acuosa isotónicatamponada, es el irritación local, ni efectosvasoconstrictor nasal de acción ideal porque estimulantes sobre el sistema nervioso.

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Dolores abdominales.• Anorexia psicógena.

Wf U ' Vómitos del lactantes (habi-^ F ^ ^ ^ ^ H tuales, infecciosos orgánicos,

^k por intolerancia medicamen-

^ B \ fl t0Sa^BIOHORM 1^ - ^ klBL R J l i 112

V

III. BIOGRAFÍA DE OLORIZ

Nace Oloriz el día 9 de septiembre del año hacer los padres de Oloriz para proporcionar-1855. Granada es, por entonces, una pequeña le unos estudios.ciudad provinciana, asiento de grandes térra- Ingresa Oloriz en el año 1865 en el Institutotenientes y cuna de una Iglesia conservadora de Segunda Enseñanza donde cursa los estu-e influyente. Su fértil vega es incapaz de pro- dios de bachillerato.' Su expediente escolarporcionar suficientes puestos de trabajo a una no denota nada extraordinario. Sus inclina-población analfabeta y desnutrida. La Univer- ciones de adolescente parecen «normales»sidad le proporciona un semillero de inquie- siendo de destacar la tendencia a la introver-tos profesionales más preocupados por el as- sión, lo que le lleva a confeccionar un «diario»censo social y el medro político que por la en el que vierte todos los acontecimientos debúsqueda de soluciones idóneas a tan anor- su cotidiano quehacer. Posee gran observaciónmal situación económica. Por otra parte, el y compone y redacta con gran facilidad poe-aislamiento geográfico agravado por la falta mas sencillos de carácter muy romántico,de comunicaciones, confiere a Granada el as- En el año 1870 ingresa en la Facultad de Me-pecto de ciudadela, tan propicio al desarrollo dicina de Granada. De los primeros contactosde un género bastante numeroso en la Espa- con la Anatomía le nace una inquebrantableña de entonces: los caciques. vocación hacia los estudios morfológicos, vo-Así pues, configurado el aspecto político a tra- cación que le durará toda la vida. Termina lavés de los grandes propietarios y de las altas carrera a los veinte años, en 1875. Su expe-jerarquías del ejército, el ideológico por me- diente académico, con respecto al alcanzadodio de una Iglesia poderosa e influyente y el en bachillerato es mejor aunque sin alcanzarsocial matizado por las grandes diferencias visos de extraordinario. Es a partir de lasde clase, Granada se nos presenta como una primeras oposiciones cuando empieza a bri-ciudad parásita, falta de recursos industria- llar ante sus maestros como un individuoles, inhibida al desarrollo económico y social, dotado de un talento extraordinario. Termi-albergue de laboriosos artesanos, pequeños nada la carrera inicia Oloriz una segunda eta-comerciantes y servidores del hipertrofiado pa, de la cual lo más significativo es el «poli-aparato administrativo. facetismo profesional», actitud en verdad yaEl padre de Oloriz es empleado municipal y vieja en la práctica profesional del médico,eventual desocupado a causa de las constan- En efecto: a comienzos del curso de 1875 ex-tes mudanzas políticas de la Administración.5 plica, en calidad de profesor ayudante, en laNo nos sorprendemos de los enormes esfuer- cátedra de Higiene. En 1876 comienza expli-zos que en tales circunstancias tuvieron que cando el primer curso de Anatomía Descrip-

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VISantiago Ramón y Cajal en los últimos años de su vida.

tiva y General en situación de ayudante inte- por los resultados de aquel vigoroso enfren-rino, para pasar a fijo a finales de aquel mismo tamiento intelectual entre los que, después yaño. El 30 de julio de 1877 y previa oposición al correr el tiempo, serían firmes puntales dees nombrado profesor clínico. En 1879 el go- la ciencia médica española. Una anécdota cu-bernador civil le nombra «vocal de la Junta riosa de aquel primer enfrentamiento la tene-Suplente de Sanidad». En marzo de 1880 es mos en el siguiente comentario de Oloriz aldesignado para el reconocimiento de reclutas calibrar a su contrincante: «muy aplicado pe-y en septiembre de 1882 el alcalde le nombra ro poca cabeza».' El brío, la fogosidad juvenil«vocal de la Junta de Sanidad de la parro- y el especial talante de aquel que se sientequia de San Justo».7 plenamente convencido de sus conocimientosÑo mencionamos otros cargos así como tam- le hicieron aventurar un juicio que con elpoco consignamos las obligaciones que le pro- tiempo habría de modificar. Por su parte, Ca-porcionaba su numerosa clientela. Sí qucre- jal, refiriéndose a Oloriz, dejó escrito el si-mos destacar un hecho que nos parece muy guíente testimonio: «Sólo había un contrin-significativo por ofrecer indirectamente una cante (en la primera oposición de 1880) quepanorámica de la situación económica de los contrarrestaba y soslayaba habilidosamentelicenciados de entonces, e incluso, por con- mis asaltos, si no por la superioridad de suservar en la actualidad plena vigencia. Con preparación anatómica (que era nada vulgar),carácter de «sociedad» Oloriz y un condiscí- por la claridad y agudeza de su entendimien-pulo suyo dieron clases particulares retribuí- to y la hermosura incomparable de su pala-das por los propios alumnos, en los locales bra».9

y con los medios de la Facultad de Medicina En el año 1883 vuelve Oloriz a opositar y ob-(de esto nos da testimonio el propio Gómez tiene por unanimidad la cátedra de AnatomíaOcaña, quien se lamentaba de no haber po- de la Facultad de Medicina de Madrid. Ins-dido asistir a ninguna de aquellas clases por talado definitivamente en Madrid, Oloriz des-carecer de recursos económicos). Oloriz pre- pliega una enorme actividad tanto desde elpara oposiciones a la cátedra de Anatomía de punto de vista de la docencia como desde lala Facultad de Medicina de Madrid y en 1880 investigación. Es necesario insistir de nuevose presenta a las mismas. De una terna de en las vicisitudes económicas por las quesiete opositores Oloriz obtiene el tercer lugar atraviesa y en las limitaciones que por tal rao-en las votaciones, por detrás de Cajal que tivo tuvo que sufrir. Así, le vemos dando cla-ocupa el segundo. Es a partir de esta oposi- ses particulares de Anatomía, de profesor ención cuando comienza entre Oloriz y Cajal la Escuela de Policía, colaborando en publi-una gran amistad que durará toda la vida. Si caciones científicas y ejerciendo la profesión,traemos a colación semejante oposición es El tiempo para él es la constante obsesiva.

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, .. . Ju/tán Calleja y Sánchez-

• • t

Es un avaro del tiempo. El día laboral lo di- como cuerpo organizado y colectivo es nue-vide en cuartos de hora que fiscaliza escru- va... la ciencia difiere de las llamadas profe-pulosamente en su diario. Aparte de todo ello siones liberales en que su práctica careceaún le queda tiempo para ocuparse del Museo de valor económico inmediato... resultado dede Antropología del cual es director, mante- ello es que el problema de cómo ganarse laner una febril comunicación con el extranjero, vida ha sido siempre la primera preocupacióncomunicación que se ve impedida en gran del científico y la dificultad de su solución haparte por la falta de conocimiento de los idio- actuado en el pasado, y aun en el presente,mas inglés y alemán; viajes, exámenes, do- como freno de primera magnitud para el pro-cencia, oposiciones, todo lo lleva adelante con greso científico».10

un ánimo y una energía verdaderamente sor- Lo prematuro de su muerte, ocurrida a losprendentes. Pero en definitiva la situación del cincuenta y siete años, sin duda supuso unacientífico ahí queda señalada: lo titánico ruptura en la continuidad de su obra antro-del esfuerzo personal no es sino la manifesta- pológica que hubiera podido alcanzar, ención de su marginación social. Y es que, como otras condiciones, un desarrollo verdadera-dice Bernal, «... La institución de la ciencia mente insospechado.

IV. LA CRISIS DE LA ANATOMÍA MACROSCÓPICA EN LA OBRA DE OLORIZ :SUS RELACIONES CON CAJAL Y CALLEJA

Las principales influencias anatómicas las re- jano de la época y gran anatomista. De loscibe Oloriz de sus maestros, los profesores autores extranjeros, Sappey y Poirier, ambosGarcía Carrera y Maestre de San Juan. Más seguidores de las teorías evolucionistas, reci-tarde, ya en su cátedra de Madrid, es estimu- be Oloriz los elementos germinales de su ul-lado por el ambiente científico creado por el terior dedicación antropológica,profesor Fourquet, muerto en 1865. Son tam- Cuando estudiamos la trayectoria científicabien importantes sus relaciones con Martínez de Oloriz nos sorprendemos al descubrir unMolina y con Julián Calleja, con quien cola- elemento nuevo y cualitativamente diferen-boró en la publicación del Nuevo Compendio te que marca definitivamente el carácter dede Anatomía Descriptiva, pero solamente en sus ulteriores investigaciones. Nos referimosla segunda edición, a la que incorpora la par- a la especial dedicación con que Oloriz sete de Embriología. Igualmente fue muy es- enfrenta a los problemas antropológicos. ¿Entrecha su relación con Ribera, notable ciru- virtud de qué circunstancias se opera este

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VIII

cambio de actitud científica? ¿Qué premisas cha y para hallar un detalle nuevo hay queexistieron y hasta qué punto influyeron sobre espigar porfiadamente durante muchos años:Oloriz para que se operase esta radical trans- en tanto que la Histología normal, la Embrio-mutación científica? logia, la Fisiología general nos brindan mul-Sabemos que en los tiempos en que Oloriz titud de problemas que resolver; el campo esdespliega sus energías en el aprendizaje de vasto y tan poco cultivado que por muchoslas ciencias morfológicas, la Anatomía enten- hombres que se dediquen a su estudio todavíadida como ciencia morfológica pura, ha de- quedarán muchos fenómenos en la sombra yjado ya de ser cantera de aportaciones origi- legaremos tarea a los venideros».12 Es eviden-nales: en Anatomía macroscópica está ya te, pues, que ante tal panorama y siendo cons-hecho todo. Tal situación parece ya intuirla ciente Oloriz del cerco a que se encuentra so-Oloriz, puesto que en el año 1881 (nueve an- metido intente romperlo. Pero ¿qué caminotes de la aparición de su Técnica Anatómica) toma? ¿Acaso el que Cajal tan atinadamenteprepara una memoria para oposiciones a cá- supo ver? No. Las razones por las cuales Olo-tedra de Fisiología." Pero es que hay más: en riz opta por la Antropología en vez de por lael año. 1886 Oloriz le escribe a Cajal pidién- Histología o por la Embriología (emparenta-dole unos datos sobre los métodos empleados das estrechamente con la Anatomía pero apor él para la conservación y preparación de otros niveles de presupuestos científicos), sonpiezas anatómicas. La carta de respuesta hipotéticas y a ellas nos referiremos a con-de Cajal es ilustrativa de cuanto venimos di- tinuación.ciendo: «... La Anatomía descriptiva está he-

Carta de S. Ramón y Cajal a Federico Oloriz.3 diciembre 1SS6.

16

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^^Hi ^^PMir^w*"^^'.^^^ ^^l^^^KW ^^^v^^^z ^ ^ r y ^ ^ ^ y ^ . 'F.IZ—-^—^^..^L***Á±^^^^^^^M ,^^^^M

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los patológicos de enfermedades (embarazo, lactanci?, crecimiento,infecciosas, osteopatías, raquitismo. infecciones, convalecencias,convalecencias, etc. astenias, etc.) en los que las

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21

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' í3te=V^ c : o s ' a " v ' a a ' P a c ' e n * e de su sintoma-Éfc tología al estabilizar el psiquismo y

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2!

XIIIBorrador de la carta de Federico Olorizal antropólogo alemán lohannes R. Ranke. 15 diciembre 1894.

t

V. LOS COMIENZOS DE LA OBRA ANTROPOLÓGICA DE OLORIZ

Hemos visto anteriormente algunos aconteci- y durante la denominada por Glick 1! «segun-mientos, los cuales hemos conjeturado podían da subetapa en la recepción del darwinismohaber influido en la dedicación antropológi- en España», tiene en Granada lugar un sig-ca de Oloriz y en el sesgo dado a la labor ini- nificativo suceso que prueba no sólo la pene-ciada en el terreno de la descripción macros- tración del evolucionismo en el mundo cien-cópica. En efecto, podemos comprobar cómo tífico y docente, sino también hasta qué puntoes a partir de 1890, fecha en la que edita su su ulterior difusión es frenada y rechazadaManual de Técnica Anatómica, cuando decli- por las propias instituciones del país, a tenorna su dedicación a la Anatomía y comienza de unas supuestas transgresiones éticas y re-íos trabajos sobre Antropología, fruto de los ligiosas. Tan es así que el ya citado profesorcuales es la memoria El índice cefálico en don Rafael García Álvarez es anatematizadoEspaña, presentada al Congreso Geográfico y su libro Estudio del Transformismo secues-Hispano-Luso-Americano, en la sesión del 19 trado por mandato del arzobispo de Granada,de octubre de 1892. doctor Bienvenido Monzón, por considerarAhora bien, las razones que hemos conjetura- que tal libro «... es herético, injurioso a Diosdo y que pudieron influir en su alejamiento y a su Providencia y sabiduría infinitas, de-de la técnica macroscópica no nos explican presivo de la dignidad humana y escandalosopor qué prefirió el camino de la Antropología para las conciencias cristianas».14

morfológica. ¿Acaso porque desde su primi- Estos destacados acontecimientos es evidentetiva instalación científica los nuevos cometí- que los viviera Oloriz. Pero es que, además,dos se le antojaban más fáciles? No creemos hay un hecho que prueba de manera muy sig-que éstos fueran los motivos, porque tal ac- nificativa el que Oloriz hubiera incorporadotitud hubiera presupuesto un acercamiento las enseñanzas evolucionistas en su conoci-especulativo a la realidad investigada. Y no miento de la Anatomía: tal es sus lecturas defue la especulación, en verdad, lo propio del Sappey y Poirier, destacados anatómicos dar-método de Oloriz. Volvamos a los hechos. winistas, seguidores de la obra de Haeckel yRecordemos que Oloriz estudió el bachillera- Gegenbauer. Gracias a sus anotaciones perso-to en el Instituto de Enseñanza Media en el nales conocemoá sus lecturas de Huxley."cual el catedrático don Rafael García Alvarez Que la corriente nueva del pensamiento, aque-explica la disciplina de Historia Natural. Pues lia que tiene al experimentalismo y al mate-bien, en el año 1872, a la sazón Oloriz alumno rialismo como bases generales del conoci-de segundo curso de la Facultad de Medicina miento de la realidad, penetra profundamente

23

XIV

LA CRISIS DE LA

ANATOMÍA MACROSCÓPICA

EN LA OBRA DE

FEDERICO OLORIZ

en Oloriz nos los prueba el siguiente testi- la concepción de una Anatomía dinámica ymonio: «... Cualquiera que sea el grado de evolutiva.precisión y delicadeza de nuestros medios, 2. Su decepción ante la vía muerta de la Ana-nunca pasaremos más allá de la superficie tomía descriptiva y macroscópica, a la que node las cosas, pues aun en la textura no apre- debió ser ajena tampoco su relación con Ca-ciamos más que superficies pequeñas; la vis- j a l y sus «tensiones» con Calleja,ta y el tacto nos dan noción sólo de propieda- 3 £1 disponer de un museo antropológico,des relativas, no absolutas; nos enseñan lo legado del profesor Velasco y del cual comoque los cuerpos son respecto a nosotros y no sabemos fue directorlo que son en sí».'6 D e s d e , 8 9 0 a f i o e n b l i c a o ] o r i z s u Ma_Es evidente, en efecto, el planteamiento día- , de T¿cnica Anatómi h a s t a s u m u e r t e

lectico de la ciencia experimental en tal tes- , „ , , , . , . ,timonio. Oloriz desprecia, a priori, el conocí- f" . 1 9 ' 2^™ 8™™. 1} d0CC a n°f d ' l n t c n S ? ^ 'miento metafísico de las cosas, sus esencias. b aJ° dedicado febrilmente a la Antropología.De la realidad sólo le interesan los fenóme- M a s d e veintiocho trabajos dedicados a la An-nos, las manifestaciones aprehensibles de las tropología (alguno tan importante como sucosas. Aspira a conocer y para ello mide, ob- Estudio del índice cefálico en España) ates-jetiva. Tal es su método de aproximación a la tiguan tan fecunda labor, no sólo en el camporealidad, su criterio acerca de la Antropolo de la Antropología morfológica sino en el degía morfológica. la Antropología cultural. Ejemplo de esta úl-Colocados ya en situación de poder analizar tima actividad fue su célebre viaje de estudiolas premisas que pudieron determinar en Olo- a la Alpujarra en 1894, auténtico hito en lariz el rechazo hacia la Anatomía descriptiva Antropología cultural española. Su esquemacomo ciencia morfológica pura, nos queda por de trabajo es todavía indispensable para losindagar cuál fue la circunstancia o circuns- actuales antropólogos culturales, tanto nacio-tancias que posibilitaron la catálisis hacia la nales como extranjeros, que se acercan a esaAntropología. Nos inclinamos a creer que zona tan interesante del área andaluza. Susfueron: observaciones no son sólo imprescindible pun- '1. Su instalación científica anterior, esto es, to de partida sino incluso pauta metodológi-

24

XV

»

ca de acercamiento en el estudio de las co- dedicación antropológica, observamos un he-munidades alpujarreñas." cho muy significativo al respecto: el progre-Pero en todo momento Oloriz es consciente de sivo abandono de los trabajos de Antropologíalas dificultades por las que tiene que atrave- como ciencia pura en favor de los de la Antro-sar para desarrollar su trabajo científico. Ya pología aplicada. La sociedad española de suen 1894, en una carta que le dirige a Ranke, tiempo fue sensible a estos últimos trabajosse lamenta de su situación: «... procuraré se- y los estimuló. «Cuando la ciencia se ha con-guir reuniendo datos y materiales sobre la vertido en un misterio en manos de una se-Antropología de mi patria ya que no me es lecta minoría se ha encadenado inevitable-posible acometer trabajos más elevados por mente a los intereses de la clase dominante,incompetencia mía y por carecer casi total- separándose de la inspiración y comprensiónmente de publicaciones periódicas y obras de que suscitan la capacidad y las necesidadesconsulta, que tan necesarias son para seguir, del pueblo.» "aunque retrasado, el movimiento científico Diremos para acabar, que la producción cien-contemporáneo».'8 tífica y cultural, como cualquier otra manifes-Pese a que desde la muerte de Oloriz hasta tación del positivo desarrollo humano debehoy han transcurrido sesenta años, bastantes realizarse, para que sea fructífera, al amparohechos relativos a la situación del científico de las instituciones y gobiernos que le danen la España de entonces conservan en la ac- cobijo. Que no hay tal desarrollo mientras quetualidad plena vigencia. Todavía el científico la sociedad vuelva sus espaldas a la libre ini-de hoy arrastra las secuelas de aquella «gene- ciativa de los individuos. En suma, que si laración de sabios». No es menos cierto que al- ciencia significa progreso y desarrollo y éstos,gunas parcelas de la ciencia reciben protec- escalones de transformación y abolición deción y amparo del gobierno; pero ello no per- profundas injusticias sociales, nosotros, comomite suponer que la ciencia, en general, goce científicos, debemos luchar para que la cien-de los mismos favores. Sólo aquellas discipli- cia recupere sus auténticas y definitivas pro-nas científicas que tienen un inmediato pro- porciones.

' vecho son estimuladas económicamente. Enla propia biografía científica de Oloriz y en su

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XVI

LA CRISIS DE LA

ANATOMÍA MACROSCÓPICA

EN LA OBRA DE

FEDERICO OLORIZ *

NOTAS BIBLIOGRAFÍA

1 Los principales trabajos dedicados a Oloriz se deben a ESCRIBANO GAH- I- FUENTESCÍA, V.,» GUIRAO GEA, M. , " GÓMEZ OCAÜA, J . " y MURILLO FERROL, N.11

I Véanse, en este sentido, los elogios de Ranke, Lombroso, Bertillon, e tc . , A. Manuscritas

7 I L ^ P m S ^ 1 V » S ^ r a 3 3 T ° P O l Ó 8 Í C a ' OLORIZ. F.: Diario. Archivo Oloriz (A.O.,. Cátedra de Anatomía. Facultad• Para una descripción de los aspectos sociales y políticos de la Espaf* de Medicina, Granada.del momento, véase JOVER ZAMORA, J. M.» ' OLORÍZ, F.: Epistoíano: Ca,al. (A.O.)' MURILLO FERROL, N. « pág. 21. ' OLORIZ. F.: Epistolario: Ranke. (A.O.)• MURILLO FBRROL N. « pág. 34. ' OLORIZ, F . : Notas sobre oposiciones. (A.O.)» MURILLO FERROL, N.,*> págs. 41-48. ' OLORJZ, F.: Viaje a la Atpujarra. (A.O.)< OLORIZ, F *' MURILLO FERROL, N.,11 págs. 62-63. B. ImpresasII MORILLO FERROL8 N a pág 279 * CAUBIA, 1.; F. OLORIZ: Nuevo Compendio de Anatomía Descriptiva. 2.» ed.,i] OLORIZ F.1 2 vols. Zaragoza, Tipografía de «La Derecha», 1886-87,13 GLICK T '<• pases 207-214 ' GARCIA ALVARBZ, R.: Estudio sobre Transformismo. Granada, Imprenta» MONZÓN B ' pLts 371-393 Ventura Sabatel , 1B83.13 OLORIZ F.1 * MONZÓN, B. : «Pastoral denunciando al evolucionismo.! Boletín Eclesiásti-'* MURILLO FERROL N " Das 162 co del Arzobispado de Granada, ¿8: 1872. 371-393." OLORIZ F> ' " ' OLORIZ, F . : Manual de Técnica Anatómica. Madrid, El Cosmos Editorial,it OLORIZ F> !890." BERNAL J " p á s 31 M OLORIZ, F.: El índice cefálico en España. Madrid, Imprenta del Memorial

de Ingenieros, 1892.11 OLORIZ, F.: Dactiloscopia. Madrid, Imprenta de Eduardo Ariza, 1906.11 OLORIZ, F . : Manuel pour I'Identification des délinquents de Madrid. Bru-xelles, fid. Lorcier. 1911.

I I . Bibliografía critica11 BERNAL, J. : -La ciencia como institución.* Historia social de la Ciencia.2 . ' ed., 2 vols. Barcelona, Ediciones Península, 1968. Pág. 29.14 BERNAL, J. : .La ciencia como institución». Historia social de la Ciencia,2.' ed. , 2 vols. Barcelona, Ediciones Península, 1968. Pás . 31.11 ESCRIBANO GARCÍA, V.: La Anatomía y la Cirugía en los siglos XVIII yXIX. Granada. Tipografía Guevara, 1916.'* GLICK, T. : «La recepción del darwinismo en España en dimensión com-parativa.» Asclepio, 21, 207-214.17 GUIRAO GEA, M : Datos biográficos de D. Federico Oloriz Aguilera. Gra-nada, Imprenta «El Sagrado Corazón», 1954.11 COMBE OCASA, i.: «Elogio de D. Federico Gómez Aguilera. Estudio bio-gráfico de cinco sabios españoles.» Memorias de la Real Sociedad Españolade Historia Natural. Tomo 7. Madrid. 1915.11 JOVER ZAMORA, J. M.: «Edad contemporánea. . Introducción a la Historiade España. 7." ed. Barcelona, 1970. Págs. 507-927.» Lórer PINERO, J. M.; L. GARCIA BALLESTSR, y P. FAUS SEVILLA: «El sabermédico en la sociedad española del siglo x ix . . Medicina y Sociedad en laEspaña del siglo XIX. Madrid, Sociedad de Estudios y Publicaciones, 1964,páginas 33-56.11 MURILLO FERROL, K.: Contribución al estudio de la Historia de la Anato-mía: El profesor Oloriz Aguilera. Granada, tesis mecanografiada, 1957.

* Este trabajo quedó finalista en el III Premio «Biohorm* de His-toria de la Medicina, con la recomendación, por parte del Jurado,de su publicación.

2fi

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28

apéndice con una breve nota biográfi- SUÁREZ DE RIBERA, Francisco: Claviculaca del doctor Emilio Pi y Molist.] Regulina. Madrid, Diego Martínez Abad,COMENCÉ, Luis: Clínica Egregia. Apun- 1718-

OBRAS INGRESADAS tes históricos. Barcelona, Imprenta de TRUETA, José: «Reflexiones sobre el exi-EN NUESTRA BIBLIOTECA Henrich y Cía., 1895. lio de Luis Vives en Oxford.» Separata

DIPUTACIÓN DE BARCELONA: Guia de ¡es del libro Homenaje a Xavier Zubiri.Institución Científiques i d'Ensenyan- Madrid, Diana Artes Gráficas, 1970: 695-ca. Barcelona, Consell de Pedagogía, m Donativo.1916. TURRÓ, Ramón: Diálegs sobre cosesPDCTV»C T P D B H K t • /«nf««/ i t t t AP d'Art i de Ciencia. Méxic, Club del Lli-

BARBERÍ, Faustino: La historia y la téc- FREIXAS i FREIXAS, J.. lmpressions de

nica de la Intubación laríngea. Valen- metge. Barcelona, llustració catalana,cia, Imprenta de Manuel Aluííé, 1897. [ s a J 'GUERRA PÉREZ, Francisco: La materia ~

médica hispanoamericana en la épocacolonial. Tesis doctoral. Curso 1955-56. FLUTENAL ANTIBIÓTICOMadrid, Universidad Complutense, 1973. _ _ _ _ _ _ _ _ ^ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ ^ ^ ^ _ _ _ _ _ _ ^ _ _Donativo del autor. j ^ H SJIMÉNEZ SALAS, María: Historia de la

Asistencia Social en España en la EdadModerna. Madrid, Instituto Balmes deSociología, 1958. ^ _MARTÍNEZ SAN PEDRO, Rafael: Historia ¿g£ « ^ —~sz*r

¡le los Hospitales en Alicante. Alicante, ^°*" ^ ^ ^ ^0f*Ü& ¡Instituto de Estudios Alicantinos, 1974. - ^ ^ ^ ^ ^ # f T j 2 ^ 2 ^ ^ ^ ' ^ ^0MESTRE I PUIG, Josep: La coordinado ^^^^^ ^mpjlm**deis servéis hospiíalaris a Catalunya. **"*^ ^^^^JÉGranollers, Gráfiques Garrell, 1936. •^^^rP^S**^^ " " ^ ^VELASCO, Diego y Francisco VILLAVER- ^^^^U ^Ep¡"*^ ''^DE: Curso teórico-práctico de operado- ^^^^^k ^Kp**7 ^-~~"'""'nes de Cirugía. Partes primera y según- g ^ - —da en un volumen. Madrid, Miguel Es-cribano, 1751 ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^Donativo doctor Saunders, de San j ^ ^ H B ^ ^ ^Francisco: M. ^ ^ ^ I I ^ ^ ^ H i K S S X S S ^ ^ .SAUNDERS, J. B. de C. M.: «A critique of H^^. *^HBi g^the Biological contributions of Leonar- H B É / ^ ^ ¿ 7 * ' « ^ Sdo da Vinci.» Reprinted from 1963 Irán- ^^*«SBsactions of the Pacific Coast Oto-Oph- ^^^^9 ^^« Italmological Society: 13-33. ^ ^ í ~^^^SAUNDERS, J. B. de C. M.: The ¡ransition ^ ' ^ "from ancient Egyptian to Greek Me-dicine. Lawrence, University of Kansas ^^^^^^^^^^^•t

Press, 1963. Las dermatosis bacterianas ocupan un en una eficacia clínica muy destacable.SAUNDERS, J. B. de C. M. and Charles ) u destacado en nuestra práctica Por su selectividad de acción, la Flupa-D. O'MALLEY: The itlustrations from the , j j a r i a . mesona actúa exclusivamente a nivelworks of Andreas Vesalius of Brus- E 1 e i e v a d o porcentaje de dermitis cau- dérmico, lo que le confiere una tole-sels. New York, Dover Pubhcations, s a d a s , complicadas o amenazadas por rancia local y general perfectas.1 T O . infección microbiana, ha hecho pro- La asociación al cloroquinaldol y a laSCHILLER, Francis: «Concepts of Stro- digar gran cantidad de especialidades, neomicina hace extensiva su acción ake before and after Virchow.» Reprin- compuestas por asociaciones de cor- las bacterias grampositivas y gramne-ted from Medical History, vol. XIV, ticoides con antibióticos y que, muchas gativas (incluyendo estafilococos, es-n." 2, 1970: 115-131. veces, no aportan novedad alguna so- treptococos, proteus y pseudomonas),SCHILLER, Francis: «Health aspeets of bre sus antecesoras. protozoos, monilias, candidas y otrosthe Noble Savage.» Reprinted from Clío El tratamiento de estos procesos dér- dermatoñtos.Médica vol 6 n ° 4 1971: 253-273. micos debe atender a los dos factores Los resultados clínicos obtenidos conSCHTIIFR Francis- «SvDhilis EoileDsv patogénicos involucrados: la infección FLUTENAL ANTIBIÓTICO destacan, ademásDKto^BioSaDhersandFlauber . R e ' Y la inflamación, bien sea primaria de su eficacia, la extraordinaria rapidez^ n t P r i l ' ^ m c t o Médica lo\ ; 1970- o secundaria. Las manifestaciones del con que mejora la sintotnatologia. so-printed from Cito Medica, vol. 5, 1970. c ( ¡ m p o n e n t e i n f l a m a t o r i o ( e r i t e m a , ede- bre todo el prurito, lo que facilita la

„ . , . , . ma v prurito) se superponen a las del remisión del proceso (ausencia del ras-STEUER, Robert O. and J. B. de C. M. p r o c e s 0 s é p t ico, creando una situación cado).SAUNDERS: Ancient Egyptian and Cm- requiere una terapéutica adecúa- La doble presentación en crema (exci-dian Medicine. The relatwnship of their d a erradique la sepsis y restaure la píente evanescente e hidrosoluble) yAetiological Concepts of Disease Ber- fisiología tisular. pomada (excipiente graso), permite ade-keley, University of California Press, p o r ¡ a s c a r a c t e r ¡ s t ¡ c a s a e s u composi- cuar el tratamiento a cada caso particu-" " • ción, FLUTENAL ANTIBIÓTICO introduce lar, de acuerdo con el tipo y antigüe-Donativo doctor Ignacio Aragó, de Bar- una novedad en la terapéutica de las dad del proceso y de su aspecto (seco,celona: dermopatías con componente bacteria- exudativo, descamativo, etc.).BOTET Y Sisó, Joaquín: Discursos leí- no o micótico. Esta nueva especialidad Así pues, esta nueva especialidad cons-dos en la Real Academia de Buenas Le- de la línea dermatológica de Biohorm tituye una terapia eficaz y segura detras de Barcelona en la recepción pú- contiene Flupamesona, original corti- las dermitis sépticas, de manejo fácilblica de... el día 27 de diciembre de coide de acción depósito y cuya poten- y sin peligro de acciones secundarias.1908. Gerona, D. Torres, 1908. [Hay un te acción antiinflamatoria se traduce

29

MfiHEditada por J. URIACH & Cía. S. A. (Centro de Documentación deHistoria de la Medicina — Decano Bahl, 59-67. Barcelona), y distribuida

a todo el cuerpo médico español

Secretario de Redacción: Dr. José Danón Bretos

oBIOHORM

La revista no es responsable de los conceptos vertidos en los artículos que se publiquen,siéndolo exclusivamente de sus nulorcs.

NOTICIAS Dada la extraordinaria cantidad de da- diente a 1976, dotado esta vez contos onomásticos y topográficos que se 50.000 pesetas y la edición de la obra,incluyen en el trabajo, existe un mi- sobre el cual puede obtenerse infor-nucioso índice. marión en la secretaría de la Funda-

La Fundación «Salvador Vives Casa- Inmediatamente a la concesión del Pre- ción «Salvador Vives Casajuana», Pa-juana» tiene establecido el premio bie- mió ha sido convocado el correspon- saje Permanyer, 17, Barcelona-9.nal «Jordi Cases» vid.: MEDICINA EHISTORIA, 18, 1972), destinado a fomen-tar estudios histórico-médicos y sobre ^ ^ _ ^ ^ _ _ _ _ ^ ^ ^ ^ ^ _ ^ ^ _ ^el ejercicio profesional en Cataluña. "" m ^Jorge Cases, titular del Premio, fue un C Añ ZZ 13 / ^ C Kl (** I A Oestudiante de Medicina fallecido en •— ' » • V- I V V J b 1 1 V«* I r \ O1950 como consecuencia de una infec-ción tuberculosa adquirida en el Hos- «•— _ .pital Clínico de Barcelona. ^ |\JEste año, segundo de su convocatoria,ha sido concedido al trabajo titulado:

«Aportación al estudio social de la TnrOfilMCTni C\C2.\ l\.Medicina en Cataluña, 1768-1827» reali- I \J V* \J Vil I I M C \s \J L \J VU I Azado por el doctor José Danón, direc-tor de nuestro Centro de Documenta-

En él, y tras recoger cerca de un mi A R T U R O A C H A R D M. CARRERAS-ROCAllar de expedientes de médicos revali- .dados por el Protomedicato y por laSubdelegación de Medicina de Barce- COLARORADOBESlona, se estudian algunas característi- WIUDUIWUUKJcas del ejercicio de la Medicina duran- ADEODATO FILHO, J. LIVIO MARTINI, JUANte aquel período, pudiendo sacar, entre ALVARIIZ BRAVO, ALFONSO LOMBARDI, RAÚLo t r a O a s siguientes conclusiones: BAR6ATO. WALTER LLOPART, TERESA1. Después del medio profesional me- BEDOYA HEVIA, MARIANO MAUTONE, JOSÉ A.dico, y a muy corta distancia de éste, BORRAS, PABLO E. MERCHANTE, FERMÍN RAÚLera el campo quien proporcionaba el CAMPALANS, LUIS A. MORALES, JULIO Mmayor numero de facultativos. CASTELAZO AYALA, LUIS NEME, BUSSAMARA2. Su procedencia terr i torial corres- C O R I O _ E R N E S T O PERDOMO ROBERTOpondía, en su mayor parte, a los lími- D I A Z |NFANTE IBARRA, AUGUSTO PEREIRA, JULIO Ctes del obispado de Gerona seguido del FERNANDES, MARTINIANO PETRUCCELLI, DANTEde Urgel es decir, zonas con pequeños F 0 , x A N T O N | O PLANELLA RIERA VICENTE Lnúcleos de población muchos de los GIAMPIETRO, ALFONSO POCH ANDRÉScuales no superaban los 200 habitantes. GONOSOWSKY, RUBÉN RODRIGUES LIMA, OCTAVIO3. Pese a la obligatoriedad que pesa- GONZÁLEZ GARCÍA, CELESTINO E. SAMPAIO CANDAL, FONSECA Aba sobre los catalanes de graduarse en GONZÁLEZ DEL DIEGO CHAVEZ, M. SANTOS ASTETE, ALBERTOla Universidad de Ceryera, los títulos GOSENDE, JULIO CESAR SARALEGUI BUELA, JOSÉ P.procedentes de la de Huesca siempre KARCHMER K., SAMUEL SUAREZ, RAÚL A.superaron a los de aquélla. KREYMIIR FRESNO, EDUARDO TOBLER, GUILLERMO A.4. Las Universidades de Gandía y LAGRUTTA, JOSÉ VILLAGI LEIVA, JUAN CARLOSOnhuela recibían un importante con- LEÓN, JUAN WOOD JUANtingente de estudiantes que, una vezsuprimidas, derivaron hacia Valencia

5. Teniendo en cuenta las guerras del Formato del libro 27 Vi X 19 Vi - Número de píginas 650Rosellón de finales del siglo xvm y, Doscientos grabados. Precio 2.200 ptas.posteriormente la de la Independencia,

es muy grande el número de médicos EDITORIAL ROCAS - AmiqO 47 - BARCELONA (ique realizan sus prácticas en el ejér- »—-.»» n m i y u , t i DHni/CLUIMA-ocito. _ ^ ^ ^ ^ _ _ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^30

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