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Oscar "El Yori" Bonfiglio - Investigación de Alexis Sánchez

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Investigación deportiva de Alexis Sánchez sobre la historia deportiva del general y ex deportista guaymense Oscar Bonfiglio Martínez.

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Page 1: Oscar "El Yori" Bonfiglio - Investigación de Alexis Sánchez

5BDomingo 13 de Junio del 2010 / LA VOZGuaymas, Sonora DePORTES

Recibió el gol al inaugurarse el Mundial Uruguay 1930; También vistió la casaca del América en 1938; ‘Topo’ Valenzuela el segundoALEXIS SÁNCHEZESPECIAL PARA LA VOZ

Debieron transcurr ir apenas 19 minutos cuando Lucien Lau-

rent marcó el primer gol en la historia de los mundiales. Fue en Montevideo, Uruguay. El estadio Pocitos era la casa del Club Peñarol y el patíbulo de la primera oncena mexicana defendida en el arco por un militar sonorense: el General Oscar Bonfiglio Martínez.

El primer futbolista guaymense

La llegada de Juan Carlos Valenzuela Hernández a las filas del Atlas de Guadalajara, ilusionó a quienes disfrutamos de este deporte en tierras beis-boleras. El hasta ese entonces desconocido chico del Foviss-ste, llamó la atención de pro-pios y extraños, y cómo no, si era el primer guaymense en llegar a la Primera División del balompié mexicano. Por lo menos eso creímos hasta que conocimos la historia del “Yori” Bonfiglio.

Estación Ortiz se constituyó como poblado y comisar ía del municipio de Guay mas en 1881, gracias al tendido ferroviario que existía entre la cabecera municipal y la capital del estado, Hermosillo.

Para antes de 1930, fecha en que Uruguay sería el escenario del primer mundial de futbol en la historia, en la comisaría de Ortiz se atestiguaba la cons-trucción de un cuartel militar, indicio de una actividad del tipo desde muchos años antes.

Allí nació el General Oscar Bonfiglio Mart ínez un 5 de octubre de 1905, militar mexi-cano que jugó futbol para diver-sos equipos del ejército, de entre los cuales apareció uno famoso en la historia de nuestro balom-pié: el Atlético Marte.

Su posición era la de arquero y nunca imaginó que escribiría

historia en nuestro futbol. ¡Y de qué manera!

“El Yori”Le conocían como el “Yori”,

término de la etnia yaqui que se refiere al hombre blanco, y en general, a quien no pertenece a la tribu. Ellos se llamaban a

sí mismos “Yoreme”, que en dialecto significa gente, y es la contraposición del “Yori”.

Por los años del mundial, la milicia y los siempre aguerri-dos yaquis sostenían cruentas batallas de exterminio mutuo.

Eran fines de la revolución y el “Yori” Bonfiglio fue designado a cubrir el arco mexicano en Uru-guay. Ese momento representa

una importante página en la historia deportiva de nuestro país, pero también para nues-tro estado de Sonora y nuestra Ciudad y Puerto de Guaymas.

Fue uno de los nuestros el primer representante del arco mexicano en la historia de los mundiales, pero también el pri-

mero en recibir una anotación al minuto 19 por parte de Lucien Laurent de la selección francesa.

De esa manera tam-bién se inicia-ron los datos h i s t ó r i c o s denominados como “los p r i m e r o s ” en el libro de récords de los m u n d i a l e s . México fue la primera selec-ción en recibir

gol… y la primera en perder un encuentro.

Tradición beisbolera

Los estados de Sonora y Sina-loa están catalogados depor-t ivamente como entidades meramente beisbolistas. Los equipos, la historia y los logros lo justifican.

Por muchos años se dijo que en Guaymas se jugó el pr imer encuentro de beisbol en nuestro país . Esto lo validó por muchos años el Salón de la Fama del Beisbol en México, tras una investigación realizada por otro guaymense, Fran-cisco “Gallo” Rodríguez Gómez , basada en una publicación del escr itor Miguel Silva Durazo quien se basó en un relato de un vecino portense, don Tor-cuato Marcor.

Otra investigación, la del joven César González Gómez, desmintió muchos elementos del hecho rela-tado en el libro “El beisbol en Sonora”, despojando momentáneamente a Gua-ymas del mote “Cuna del beisbol”, pero no de la tradi-ción que impera en nuestra entidad por el “deporte rey”, por lo que el hecho de que existan jugadores destaca-dos en el llamado “juego del hombre”, es una situación poco frecuente y a veces, escasamente difundida.

El Topo ValenzuelaJuan Carlos Valenzuela

Hernández se convirtió en un académico prometedor en la filial de divisiones inferiores del Atlas de Guadalajara, como un destacado defensa. Debutó en la jornada quince del Clau-sura 2003 en el t r iunfo de Zorros sobre Tecos de la UAG (su siguiente equipo).

Conoció la glor ia del gol al minuto 61 del sábado 5 de noviembre de 2005 en el torneo de apertura, anotando el momentáneo 2-0 de Atlas sobre Chivas del Guadalajara , sin embargo al 65 y al 86, Adolfo “Bofo” Bautista terminaría empatando el encuentro.

Ese gol motivó al defensa para buscar una posición más ofen-siva en los siguientes torneos. En el clausura 2006 le anotó a Dorados de Culiacán y al Necaxa en las jornadas 13 y 16, respectivamente.

Para el clausura 2008, Cesar Luis Menotti lo llamó para formar parte de los extintos Tecos, ahora Estudiantes de la UAG, donde sólo le anotó al Monterrey en la jornada 4 del apertura 2008. Recordar que primero se juega el clausura y luego el apertura.

La calidad defensiva y en ocasiones ofensiva del Topo Valenzuela, le valió que fuese llamado por el América para el clausura 2009, en el que también se hizo presente en el marcador contra su club debutante , el Atlas , en la fecha 6.

El sueño de todo futbolista de enfundarse en la casaca verde de la Selección Nacional, lla-mado por el sueco Sven-Göran Eriksson el 24 de septiembre de 2008, lo cumplió en un amis-toso ante la oncena de Chile, corriendo con la mala suerte de acreditarse un autogol que le dio la victoria a los andinos.

Otro terrible momento del guaymense fue en la semifi nal de la Copa de Oro 2009, cuando faltando apenas 20 segundos para concluir el tiempo comple-mentario, tras un pelotazo de la selección costarricense al área grande, un delantero gana la pelota al Topo y ter-mina anotando en la portería de Memo Ochoa, empatando y llevando hasta la tanda de penales que f i n a l m e n t e

ganaría la oncena mexicana.Lo que pareció el cierre de su

trayectoria en la llamada “Selec-ción Mayor”, desapareció con el llamado y segunda oportunidad del “Vasco” Javier Aguirre, brin-dando hasta hoy actuaciones de regulares a buenas, y se ha colado hasta la fase final de la eliminatoria mundialista.

La hazaña de un guaymense como Valenzuela Hernández de destacar en el futbol siendo de una tierra beisbolera, llamó la atención de la crónica especializada y pronto fue catalogado como el primer gua-ymense en llegar al futbol profesio-nal mexicano; el primero en debu-tar con la Selección Nacional, y el primero en defender la casaca del club más importante de México: el Águilas del América, sin embargo,

no fue así. Hubo uno antes en esos rubros: Oscar “Yori” Bonfi glio.

Lo que si puede presumir “El Topo”, es ser el primer guay-mense en anotar un gol en el futbol profesional mexicano el 5 de nov iembre de 2005; el hecho de ser adquirido por César Luis “El Flaco” Menotti (ex técnico del Barcelona, Atlé-

tico de Madrid, Boca Juniors, River Plate, Peñarol uruguayo, Sampdoria italiano, de la Selec-ción Mexicana y de los Tecos de la UAG); el llamado de Sven-Göran Eriksson (ex técnico de la Selección de Inglaterra y de México); y de la confianza depositada por Javier Aguirre, actual técnico nacional . Sin duda, algo le ven.

El primer guaymenseen el América

Oscar “El Yori” Bonfiglio fue partícipe de algunos encuen-tros internacionales celebra-dos por clubes mexicanos , esto debido a la no existencia aún de una liga profesional, sin embargo, el amateurismo de la época estaba afiliado a la FIFA, de ahí que la entonces Federa-ción Nacional de pronto desig-nara a ciertas agrupaciones o clubes para representar al país, como sucedió con el primer y original “campeonísimo” del futbol mexicano: el Necaxa de 1935.Antes de ello, en 1923, México

tuvo su primera participación internacional, enviando en su representación al Club América a Guatemala. La historia se repi-tió en 1926, pero en esta ocasión fue en La Habana, Cuba.

México asistió a los Olímpi-cos de Amsterdam dos años después, y la base de la selec-ción era precisamente el Club América.

Bonfiglio defendió el arco nacional en esos olímpicos, que-dando eliminados en el primer encuentro por la llamada “Furia española”, cayendo 7 goles por 1. Ese acercamiento del “Yori” con los azulcremas le valió para jugar con ellos su partido de despedida en 1938, convirtiéndose en el primer

portense en vestir esa casaca.

Futbolista, General de la milicia y Director Técnico

La historia y desarrollo de nuestro balompié son de hecho recientes, de ahí que el General Bonfiglio fue también uno de los primeros ex jugadores que se convirtió en director técnico.

En el ejército mexicano llegó a ser General de División. Se retiró como profesional en 1938 con las Águilas del América. Ese mismo año se convierte en director técnico del Club Deportivo Gua-dalajara, pocos años después bautizados con el mote de “Las Chivas” en la temporada 38-39. Dirigió también a la entonces popular Selección Jalisco en los 40, así como al Puebla y al Ira-puato en los 50’s.

Es padre del actor mexicano Oscar Bonfiglio Mouett, cono-cido en el mundo artístico como Oscar Morelli, y abuelo del actor Oscar Bonfiglio y del cantante Andrés Bonfiglio.

¿Lo sabía?

Oscar ‘Yori’ Bonfiglio…

Primer guaymense enla Selección Mexicana

Este es el primer equipo mexicano que participó en una Copa Mundial, ‘Uruguay 1930’, el primero de pie al lado izquierdo, el guaymense Oscar ‘Yori’ Bonfi glio, guardameta que marcó historia al recibir el gol inicial de la justa.

La selección viajaba a bordo de un barco, y el mismo se acondicionaba para ir entrenando durante el largo viaje.

Juan Carlos Topo Valenzuela, el segundo del municipio guaymense en llegar al América y la Selección Nacional.

El hombre historia, en una de las fotos más reciente.

Oscar Bonfi glio en su época de gloria en el futbol (imágenes no nítidas por su originalidad).