100
TARA VANFLOWER DANY PUNX | BRAULIO D'AGUIRRE | ROSACRUX | ICARO DANTE LITERATURA | CINE | Y MUCHA MÚSICA AÑO: 2 | NÚMERO 20 UNA REVISTA IMAGINARIA The13th

The 13th Número 20

Embed Size (px)

DESCRIPTION

Revista The 13th Número 20 con Entrevistas en exclusiva a Tara Vanflower, Dany Punx y Braulio D'Aguirre. Rosacrux. Icaro Dante. Johnny Marr. Cine, Literatura y Música.

Citation preview

Page 1: The 13th Número 20

TARA VANFLOWERDANY PUNX | BRAULIO D'AGUIRRE | ROSACRUX | ICARO DANTE

LITERATURA | CINE | Y MUCHA MÚSICA

O:

2

|

ME

RO

20

UNA REVISTA IMAGINARIA

The13th

Page 2: The 13th Número 20

STAFF

DIRECCIÓN GENERAL

Diego Centurión

REALIZACIÓN Y DISEÑO

Julieta Curdi

TRADUCCIÓN

Bernardo Jiménez Mesa

Marcelo Simonetti

ESCRIBEN EN ESTE NÚMERO

[ Departamento de Música ]

Diego Centurión

Erick R. Vieyra

Alejandro Cenizacromada

Marcelo Simonetti

Maxx Wilda

Rodrigo Debernardis

Ariel Soriano

Marianarchy Deadbilly

Bernardo Jiménez Mesa.

Ricardo Padilla (Oriani_K)

J.D. Daire Alujas

Gabriel Rojo

CONTACTO

issuu.com/revistath13th

[email protected]

[ Departamento de Cine ]

Nicolás Ponisio

José Luis Lemos

Gustavo García

[ Departamento de Literatura ]

Pablo Ravale

Damián Snitifker

[ Departamento de Artes Visuales ]

Julieta Curdi

facebook.com/the13thlarevista

twitter: @RevistaThe13th

Las fotografías usadas en esta Revista son propiedad de sus respectivos autores.

Page 3: The 13th Número 20

Llegamos al número 20. Después de más de dos años de existencia, seguimos reformándonos para encontrar la medida justa en localidad que queremos ofrecerles. Estamos en la búsqueda de nuestro ideal.

En este número tenemos muchas cosas para ofrecerles. Para empe-zar un excelente dossier sobre la banda Rosacrux. También geniales en-trevistas a los músicos argentinos Dany Punx y Braulio Aguirre. La en-trevista internacional y nuestra portada, Tara Vanflower, la voz de Lycia.

Abrimos un espacio para las bandas nuevas llamado “Derecho de Piso” en donde presentaremos una banda que está emprendiendo su camino.

La literatura y el cine siempre presentes con sus subsecciones. Y la mejor información sobre música.

Como siempre queremos darle el espacio a nuestro programa PISO 13, en donde a fines de Julio estaremos comenzando con las “The Quiet Sessions”, que serán sesiones en donde los músicos podrán explorar su lado más desconocido, reinventar su música, y animarse a desnudar-la frente a los oyentes. Para luego ser escuchadas (y tal vez observadas) bajo el mundo de PISO 13 (la radio y el canal de youtube de la Revista).

En fin otro número que nos llena de ideas y ganas.

Julio, 2015

REVISTA THE 13TH

EDITORIAL

Page 4: The 13th Número 20

ÍNDICE

EL TIEMPO TODO LO TRANSFORMA por Bernardo Jimenez ..................................................................10

HACELO VOS MISMO, NO ESPERES NADA DE NADIE por Ariel Soriano .....................................06

EL HOMBRE INQUIETO Y CREATIVO por Rodrigo Debernardis .....................................................................................24

PALABRAS EN LA ARENA

LA DESNUDEZ GANADA AL VACÍO por Pablo Ravale .................................................................................................32

CRÓNICAS DESDE MERDEVILLE

ESCRIBIR ES ROBAR Por Pablo Ravale .........................................................................................................................34

HIDDEN TRACK...............................................................................................................................................................38

RESCATE CINÉFILO

WINTER IS COMING

EN LA NIEVE NADIE PEUDE OÍRTE GRITAR por Nicolás Ponisio .................................................................................46

ENTRE LO DIVINO Y EL BARRO por Alejandro Cenizacromada ..................................................................16

Page 5: The 13th Número 20

TERROR INVERNAL por Gustavo M. García..................................................................................................................48

ERRAR ES HUMANO por José Luis Lemos ...................................................................................................................50

AMOR CRUOD por Gustavo M. García .........................................................................................................................52

MI VIEJA MARMOTA YA NO ES LO QUE ERA por Nicolás Ponisio .............................................................................53

SILENCIO VIVE por José Luis Lemos ............................................................................................................................55

FRAGMENTOS por Nicolás Ponisio ..............................................................................................................................56

FAN SERVICE por José Luis Lemos ...............................................................................................................................58

¿REALIDAD FILMADA O FICCIÓN REGISTRADA? por Nicolás Ponisio .......................................................................61

EL ESCRITOR SERIAL

RIGET: EL HORROR DE MUCHOS… UN HOSPITAL

por Nicolás Ponisio .......................................................................................................................................................62

EN CONCIERTO

MARRTE ATACA por Gabriel Rojo ...............................................................................................................................68

PURA MELOMANÍA

THE 13TH SIXTIES ELEVATOR

EL DÍA QUE ELECTRIFICARON LA TIERRA por José Luis Lemos ................................................................................74

EXTRACCIONES DE UN PAISAJE DIVINO por Diego Centurión .................................................................................78

EL PERFIL MÁS ORGÁNICO DE LA BANDA por Erick R. Vieyra ...................................................................................79

EL PASO CRUCIAL por Diego Centurión ......................................................................................................................79

A NORTHERN SOUL por J. D. Daire Alujas ..................................................................................................................80

EL COMIENZO DE LA LEYENDA por Pablo Ravale ......................................................................................................81

¡LARGA VIDA A THE RAMONES! por Rodrigo Debernardis .........................................................................................82

EL ÚLTIMO GRAN PROBLEMA por Grabiel Rojo ..........................................................................................................83

¿QUÉ BEBER PARA ESCUCHAR MEJOR?

PHANTASMAGORIA & RUSTY NAIL por Max Wilda ....................................................................................................86

EL JARDÍND E LAS DELICIAS .........................................................................................................................................88

EFEMÉRIDES

RAT SCABIES ................................................................................................................................................................96

DERECHO DE PISO .........................................................................................................................................................98

Page 6: The 13th Número 20
Page 7: The 13th Número 20

7

HACÉLO VOS MISMO, NO ESPERES NADA DE NADIE

[ Entrevista a Dany Punx por Ariel Soriano ]

Cuéntanos cuando fueron tus comienzos…Los comienzos míos datan de fines del año 1983 cuando forme Repudio Social una banda punk  in-fluenciada por The Clash y Blondie.

¿Cómo era ser punk en aquella época post dictadura mi-litar en las entrañas de la zona Oeste de Buenos Aires?Recién se acababa la dictadura pero íbamos presos solo por portación de imagen (risas). En aquellos años ser punk era muy difícil, tanto como conseguir música relacionada. Había muy pocas cosas editadas que se podían conseguir relacionadas con el punk rock, algún disco de The Ramones, The Police (que ha-bían tocado en vivo a fines de 1980 en obras), Adam and The Ants, The Clash, Blondie, y, a nivel nacional, el primer disco de Los Violadores (que estaba graba-do pero no salía) y Virus (Wadu Wadu de 1981), ellos fueron los primeros. A nivel personal era muy loco,

imagínate que me hice una cresta y me echaron del secundario... y comenzaron a mandarme las psicó-logas a mi casa... después de muchos años un veci-no se acerco para decirme que en esa época no me miraba porque pensaba que lo iba a morder… (risas).Las otras bandas que había eran una mierda, todo muy hippie. En el oeste nadie nos entendía, de las 15 o 20 personas que nos venían ver 2 entendían de lo que se trataba... ocho eran amigos y el resto venia por curiosidad. En el año 85 pasé a ser el guitarrista de TUS ULTIMOS DIAS, una banda mas influenciada por Joy Division, The Cure y Wire…, con la cual graba-mos un demo que lo ponían muy seguido en el pro-grama de radio La Pesadilla o La Guillotina en una FM clandestina que se escuchaba masivamente des-de Moreno hasta Ramos Mejía conducido por Ariel Soriano de Iguana Lovers, él tocaba por ese entonces en una banda post punk llamada Ranxerox con quie-

Dany Punx es uno de los pioneros del punk rock en Sudamérica y uno de los artistas más prolíficos de la zona oeste de Buenos Aires. Desde Paso del Rey nos cuenta como fueron sus comienzos. Su nuevo álbum, After Punx (2014) está dotado de un sonido genuino que le da aún más prestigio a este artista innovador e influyente que desde principios de los 80’s se encuentra inmerso en su propio universo de creatividad y autogestión sin claudicar.

Page 8: The 13th Número 20

nes hicimos un par de shows, en uno de los shows tu-vimos que tirar abajo la pared de una habitación de la casa porque se había desbordado de gente que llegó a una quinta en Merlo convocados por el programa de radio, en esa Radio, anterior a la Rock and Pop, sona-ban Virgin Prunes, SPK, The Jesus and Mary Chain, Eintürzende Neübaten, Echo and The Bunnymen, Joy Division o Cabaret Voltaire con demos de Sumo, Los Pillos, TUS ULTIMOS DIAS, Ranxerox o Beso Negro, fue el año 1986 si mal no recuerdo.

¿Cómo era el panorama en la Ciudad de Buenos Aires visto desde la zona oeste y cómo te insertaste?Para 1987 forme Las Ramas que Caen de los Arboles al Final se Secan, hicimos un par de shows en el Parakultural… Ya en 1989 arme La Flor Renace, ha-cíamos post industrial con tachos, un instrumento con cuerdas de alambre y una computadora básica tocando con Uno x Uno y Daniel Melero en la presen-tación de la Fauna Abisal, y con Omar Viola dueño del Centro Parakultural. Charly García me vio tocan-do el palo con cuerdas de alambre y me invitó a tocar con él en un cabaret. Desde el oeste viajábamos los fin de semana hacia la capital y también para otros lugares como el sur para ver todo tipo de bandas re-lacionadas con el punk... como Cadáveres de niños,

Los Mutantes del Kaos, Tumbas N.N, Los Corrosivos... y mediante los fanzines nos enterábamos quienes y donde tocaban… un día yo estaba completamente ebrio en Medio Mundo Varieté y estaba con mi ins-trumento con cuerdas de alambre (La Flor Renace) y se me acerca Charly García y me pregunta que era y se lo muestro al instrumento… me dice que algún día lo quisiera escuchar... para esa época Charly era lo opuesto a lo que yo era... pero bue... la cosa que cuando salgo en un auto estaba Don García... Charly no el sargento… y  me lleva a un cabaret para zapar unos temas... parece que mucho no le gusto pero no tuvo que otra que invitarme unas cuantas cerve-zas... (risas)

¿Como te adaptaste a los ‘90s, cuando la hiperin-flación terminó con todos los proyectos de todas las bandas indie?, ¿qué hiciste? A principios de 1991 forme una banda hardcore con Mache (fundador del oeste hardcore) llama-da Argentina está Muerta… para 1993 forme 3 Tiros al Dolor donde le dábamos a lo Sonic Youth de bad moon Raising… terminando caóticamente en el Centro Cutural Recoleta -en un show de la colifata… de ahí sale mi banda PASO DEL REY, en honor al barrio, del oeste en donde tengo mi base de opera-

Page 9: The 13th Número 20

9

ciones con la cual nos dejábamos llevar por el soni-do Husker Du.

¡Y llegó el 2000! ¿Cómo seguiste?En el año 2000 formé Nombre, una banda experimen-tal con la que tocábamos en La Catedral de Almagro junto a Omar Viola (dueño del Parakultural) y un dúo experimental llamado 2 Contra el Mundo con el artista plástico Andres Theza.

¿Cuándo te diste cuenta que eras un artista solista?Desde 2005 y hasta ahora. Empecé mi etapa solista acompañado por varias bandas como Dany Punx y sus Comadrejas… o Los Disconformes… y actualmente Dany Punx y sus Satélites.

¿Que opinión te merece el Punk Rock?Para mi el punk rock fue fundamental en sus prime-ros años de vida, luego fue decayendo en creatividad pero cada tanto aparece alguna banda que realza el emblema punk y hace de las suyas… (risas) - en los primeros años era muy duro salir a la calle o ir a un recital punk era mas fácil caer preso que llegar al lu-gar… y muy duro también organizar recitales, siem-pre era hacélo vos mismo no esperes nada de nadie.

¿Cómo siguen tus cosas? ¿Cuáles son tus planes?Actualmente grabe un disco en el estudio 8 bits con la producción de Javier Loppez con la participación de algunos amigos como invitados, se llama AFTER PUNX (2014) y lo estoy presentando en vivo por to-dos lados. En 2013 organicé el Dany Punx Fest en Paso del Rey en donde participaron artistas de varias disciplinas y algunas bandas que me gustan como Southern Wilde (la banda de Julio Torres y Adrián Yanzón), Iguana Lovers y Ludomatic, que son artistas que vienen desde los 80’s y son de mi generación. Estoy craneando repetirlo en este 2015 ¡si consigo el sponsoreo de la fábrica de sanwichs otra vez!

¿Dónde podemos escucharte a Dany?Todos los discos desde el inicio de mi carrera en 1983 se pueden bajar de mi página:http://www.danypunx.com, están TUS ULTIMOS DIAS (DEMO) 1985, LA FLOR RENACE (1989) ...DANY PUNX Y PASO DEL REY (DEMOS 1993 1995 2005)… 2 CONTRA EL MUNDO (2007), NOMBRE (2001) y DANY PUNX - AFTER PUNX (2014)…

Page 10: The 13th Número 20
Page 11: The 13th Número 20

11

EL TIEMPO TODOLO TRANSFORMA

[ Entrevista a Tara Vanflower de Lycia por Bernardo Jimenez ]

Si yo empezaría esta entrevista alabando la obra de Lycia, no habría espacio suficiente para las preguntas y respuestas, pues dicha labor sería un ejercicio sin fin; pero es necesario decir que Lycia se encuen-tra entre las bandas más importantes de la música Ambient oscura de la historia. Habiendo dicho lo anterior, podemos abrir la puerta a nuestros lectores al hermoso, gélido y melancólicamente devastador de Lycia....

Tara Vanflower es esposa del espíritu fundador de Lycia, Mike Vanportfleet, y parte de la banda desde el año 1994. Como solista tiene dos álbumes en su haber más múltiples colaboraciones. En la actuali-dad su actividad musical se limita a colaborar a Mike con Lycia, pues el centro a donde dirige su energía creativa, es la escritura. Con tres li-bros ya publicados y mucho material en progreso, Tara Vanflower es un nombre a explorar para nuestras futuras lecturas. En esta entrevista, sin embargo, hablamos con ella de Lycia; su participación con la banda; el más reciente sencillo (y al álbum próximo a salir) y en general los re-cuerdos de estas dos décadas como parte de la banda.

Silver Leaf es todo lo que hemos escuchado hasta ahora de esta nue-va etapa de Lycia. Sabemos que el álbum será lanzado próximamente y nosotros, quienes seguimos y admiramos la obra de la banda, nos en-contramos a la expectativa, listos a sumergir una vez en las aguas que sólo Lycia puede crear.

Hola Tara, primero que todo quisiéramos agradecerte por el tiempo que nos brindas para esta entrevista. Estamos más que complacidos de tenerte en nuestra Revista.

Page 12: The 13th Número 20

Hace apenas unos minutos, leía comentarios que dejan los seguidores de Lycia en el perfil oficial de Facebook, y encontré un mensaje, escrito en castella-no, que decía ¨son lo mejor del mundo¨, y pensaba que esa simple frase lanzada al aire, en verdad con-tiene en esencia lo que Lycia para muchos significa: el color de un mundo anhelado, y el dolor de habitar, en cambio, esta prisión. Para muchos Lycia es uno de los recursos más útiles, si la expresión me es per-mitida, para transformar el mundo en que somos obligados a existir, en una nueva y propia "realidad"; es nuestro derecho poder crear mundos nuevos des-de la propia perspectiva, visión e imaginación, y la música es ciertamente una forma de lograrlo. Son muchos quienes atesoran la obra de la banda, sobre todo los momentos vividos a través de ella. Yo, como parte de una generación que creció escuchándolos, guardo memorias entrañables y etapas enteras de mi vida relacionadas con la música de Lycia. Como mú-sico quisiera agregar que alcanzar reconocimiento a esa escala, es mucho más que recompensa.

BIENVENIDA TARA A THE 13H

Esta mañana busque la primera entrevista que hice con Lycia, en 1998, después del lanzamiento de Estrella (uno de mis álbumes preferidos). Leyendo aquellas líneas, mientras escucho Cold, inevitable-mente me lleva a viajar en el tiempo. Un viaje de ida y vuelta. Es sorprendente pensar que Lycia, como banda, se encuentra ya próximo a cumplir tres dé-cadas.; y si bien no fuiste parte de la primera alinea-ción, como esposa que eres de Mike Vanportfleet, conoces toda la historia perfectamente. 

Tara, siendo escritora de profesión y dedicando la mayor parte de tu tiempo a este oficio, quisiera pen-sar que algún día, más temprano que tarde, tendre-mos una biografía oficial, escrita de primera mano. Podría ser una biografía o una recolección de memo-rias a través de los años. ¿Hay alguna oportunidad de ver mis anhelos hechos realidad? Primero que todo, muchas gracias por todos los co-mentarios de afecto por Lycia. Siempre nos senti-

mos conmovidos por el apoyo que recibimos. Por mi parte, no soy una buena historiadora. ¡Mi memo-ria es terrible! Recuerdo momentos especiales, pero los tiempos están todos desconectados. Tengo tantas memorias entrañables y recuerdos de tiempos, per-sonas y lugares; sin embargo, soy un desastre cuan-do se trata de poner fechas a estos eventos. Mike se-ría quien podría realmente hacerlo, su mente es una trampa de acero y él puede recordar fechas como na-die más que haya yo conocido. Pero sé que él diría a esta sugerencia "a nadie le importaría"… (Risas)...Yo pensaría más bien sugerirle abrir un blog y compar-tir memorias que él tiene de momentos con Lycia... como retrospectiva, tal vez. Pero no aseguraría nada.

Nuestro editor, Diego Centurión, quisiera saber ¿cómo se siente hoy este viaje que has hecho a través de los años con Lycia? Si por un momento pensaras en lo que ser parte de Lycia significaba al principio, y lo comparas con el presente... ¿Qué has ganado? ¿Qué has perdido?Es gracioso, el otro día vi un documental acerca de Kurt Cobain, y viendo la moda que imperaba, escu-chando esa música... me transportó a los comienzos de Lycia para mí. Todo sucedió tan rápido. Yo era sencillamente una fan de la banda. Conocer a Mike era todo un suceso para mí. Esto cambio el curso de mi vida obviamente. Yo era tan joven y todo parecía posible. Pasé de ser esta chica que vivía una zona rural de Ohio a estar de pronto de gira con la banda que amaba, aterrorizada también al pensar que po-dría tal vez fallar o dañarlo… También se abrieron todas las posibilidades que el mundo podía ofrecer y las asumí con la mentalidad de mi juventud. Yo viajaba por todo el país, conocía gente "famosa", me tomaban fotos para magazines, me paraba en esce-narios donde antes habían tocado aquellos que yo admiraba. Era increíble. Y de pronto... el tiempo fue transformando esto, como el tiempo todo lo trans-forma... Mike se enfermó. Tuvimos problemas con el sello. Todo nos llevó a cambiar de dirección, al-terando nuestro curso en una manera que no nos hacía felices, pero que tenía que ser así. Todo tenía que cambiar. No pudimos salir de gira más. No tuvi-

Page 13: The 13th Número 20

13

mos más apoyo. Todo cambio. Esto nos llevó a ver a Lycia y lo que era posible de otra manera. Hay veces que me siento y pienso "¿Qué hubiera pasado si?".... ¿Qué hubiera pasado si esto hubiera ocurrido? ¿Qué hubiera sido de nosotros si hubiéramos tomado ese camino en vez de este?... Nunca lo sabremos y nada puede ser cambiado ahora.Respecto a lo que Lycia significa para mía hora y lo que pudo ser al principio… Es difícil definirlo...Al principio significaba "posibilidades". Era aventura, pasión... y el mundo todo. ¿Ahora?... Lycia es un vie-jo amigo que me da alegrías y me frustra también. Puedo ver lo que pudo haber sido y eso me causa frustración. Por otra parte sé que lo que soy está di-rectamente relacionado a Lycia y jamás podrán se-pararme de ello, y nunca morirá… por todo lo que representa y significa para mí.

Un gran amigo y gran fan de Lycia, Cesar León, de Colombia, me ha enviado un par de preguntas que

encuentro muy interesantes y bien formuladas, pues representan lo que muchos seguidores de la banda quisiéramos saber. Tomando estas pregun-tas y añadiendo unos pocos detalles, lo primero que quisiera saber es: ¿Extrañas los "días de Projekt"?... Para muchos de nosotros más que una época fue todo un movimiento. Un momento grandioso don-de vivías atento esperando cada nuevo lanzamiento, recital, giras, festivales, mercancía relacionada con las bandas, etc. En aquel entonces teníamos a World Serpent y es movida europea que era como la contra-parte al movimiento de Projekt. Cada mes el catálogo de ambos sellos (y un par más) llegaban por correo, llenos de ediciones que luchabas por poder adquirir.¿Cómo comparas aquellos días con el presente? ¿Internet ha hecho las cosas más fáciles o de pronto ha destruido las posibilidades para los músicos reci-bir un pago por sus obras?... ¿Es más fácil para Lycia trabajar independiente ahora?Esto también me es difícil responderlo, en parte por-

Page 14: The 13th Número 20

que lo que hizo los "días de projekt" especiales fue-ron aquellas cosas que mencionaba antes. Creo que los fans del sello piensan que había una camaradería entre nosotros... cosa que no era realmente así. Solo hubo un corto lapso de tiempo donde tal vez así lo sentimos, pero en verdad creo que fue algo que pasó más entre los fans del sello que entre quienes ha-cíamos parte de él. Considero que Projekt fue muy importarte para la escena darkwave americana (lo que sea que eso signifique) por un par de años, pero rápidamente se desvaneció. Nosotros siempre nos sentimos como “los chicos diferentes”, por decirlo de alguna manera. Hablo a nombre mío y sin poner palabras en las bocas de Mike o de David, diría que había mucha competencia, y yo no quería tener algo que ver con eso. Habiendo dicho eso, adoro a mucha gente que tiene o tuvo que ver con el sello aún hoy. Hay mucha frustración asociada con el sello y como todo se vino abajo. Respecto a cómo comparo aque-llos días con el presente, en términos profesionales no podríamos estar más contentos en Handmade Birds (el sello). Nos gusta el sello y como todo es di-rigido. También la libertad artística y respecto que nos brinda Rich Loren. Musicalmente en general las cosas han cambiado y nuestras expectativas son bas-tante diferentes (comparadas a los días en Projekt). Creo que todos en la banda opinarían de la misma manera. Somos mayores ahora y no esperamos sa-lir de gira y hacer las cosas que hacíamos cuando éramos más jóvenes. Todo es diferente ahora. Ya no hay ninguna expectativa de ̈ ganarnos la vida¨ con la música, como sí sucedía en aquellos días.

¿El proceso creativo de la banda ha cambiado desde que entraste a formar parte de la banda? ¿Cómo se da ahora?Solo ha cambiado en un sentido. Cuando entré a for-mar parte de Lycia nosotros trabajamos en ello de tiempo completo. Ahora tenemos que buscar tiem-po para trabajar en Lycia dentro de nuestros horarios de trabajo; la distancia es otro factor (cuando trabaja-mos con David u otros músicos); nuestra vida fami-liar y las limitaciones que impone la salud. De ma-nera que la VIDA dicta cuándo podemos trabajar en

Lycia. Por otra parte, el advenimiento de la tecnología de grabación también cambio, obviamente, todo. Ya no nos preocupa que alguien esté a 2000 millas de distancia, para grabar una canción. Ese es un aspecto positivo en la manera en que hacemos las cosas aho-ra. Es increíble trabajar con gente que nunca he visto siquiera, frente a frente (Será Timms, por ejemplo)

Muchos de nosotros pensamos que la banda había llegado a su fin en el 2003. Pero en el 2013, para for-tuna nuestra, Lycia anunció su regreso. ¿Qué pasó durante esa década?... Durante ese tiempo, ¿pensa-ron que volverían?Lycia ciertamente se había terminado. Nosotros nos encontrábamos sometidos a un contrato al cual no estábamos más de acuerdo y tampoco nos permitía dejar el sello. Así que terminamos con Lycia. Una vez el contrato termino, le dimos de nuevo vida. Mike es-tuvo muy enfermo hacia finales de los 90’s y comien-zos de los 2000’s, él casi muere, así que tuvimos que replantear el nivel en el cual Lycia podía operar.

Esta es una pregunta que siempre me hecho. Todos sabemos que Lycia fue siempre una banda más de estudio que una banda que sale de gira y da recita-les constantemente; sin embargo, Lycia tocó muchas veces e hizo un par de giras cortas por USA. ¿Cómo es posible que no haya registros de aquellos concier-tos?... El material en vivo de Lycia es objeto de culto. Casi no hay filmaciones, ni grabaciones en vivo. ¿Fue esto una decisión personal?, ¿la banda no quería ser grabada o filmada durante las presentaciones?, ¿exis-te material en vivo, en una buena resolución y cali-dad, que pueda salir a la superficie en el futuro?Creo que hay una respuesta muy simple a esa pre-gunta. Nosotros hacíamos giras antes de la llegada de teléfonos celulares!... creo que si saliéramos de gira ahora habría toneladas de filmaciones...y ¡eso sería terrorífico! (Risas) El público pudo haber fil-mado o tomado fotos...sólo que por alguna razón no sucedió… creo que a nadie le importaba tampoco… (Risas) No existen grabaciones en vivo, hasta donde yo sé. El último Festival Projekt en el Irving Plaza en Nueva York, fue filmado. Puede que en algún

Page 15: The 13th Número 20

15

momento hagamos algo con ese material... pero... quien sabe...

¿Algún álbum favorito de Lycia? y ¿por qué?Esta pregunta me es muy difícil, por razones obvias. Cada álbum significa algo muy diferente. Así que responderé de manera un poco predecible: Ionia. Ese álbum, literalmente, cambió mi vida. El mo-mento en el cual escuche la voz de Mike, yo sabía que tenía que conocerlo así que ¡empecé a perseguir su trasero! (Risas)... Respecto a mi contribución per-sonal, Tripping Back Into The Broken Days es pro-bablemente mi favorita por mi desempeño y lo que doy de mí, así como el álbum completo.

El sonido de la banda ha cambiado conforme los integrantes de la banda entran y salen. Ahora, con David Galas de nuevo en Lycia, ¿cómo afecta esto al sonido y la dirección de la banda?No ha cambiado nada realmente, no lo creo. Siento que este momento es de alguna forma como una continuación de la época de The Burning Circle and Then Dust y Cold, pero también parece un poco como Quiet Moments e inclusive Bleak en algunas partes. David canta en dos canciones, esto es algo inédito en Lycia. Pero en general, creo que el álbum no se aleja del pasado sino que es su continuación.

De Colombia, regresamos a Argentina. Diego Centurión pregunta: Algún recuerdo o anécdota que quisieras compartirnos de los días y sesiones de gra-bación de The Burning Circle and then Dust?Wow, para mi esa fue una época mágica! Conocí a Dave y grabamos el mismo día, creo. yo era tan solo esta chica temerosa de Mantua, Ohio, que estaba por

fin con esta banda que adoraba y con al cual se iba al estudio a grabar. Creo que grabe mi s lineas de voz en una sola toma. Recuerdo todo el valor que tuve que tomar para poder grabar y ahora me causa gra-cia...La inocencia de la juventud.

Pregunta final, ¿podrías contarnos algo acerca del nuevo álbum? y ¿los planes actuales de Lycia para el futuro?¿Cómo poder abarcarlo todo?....bueno, Dave primero que todo está de nuevo en la banda, como lo mencio-né anteriormente. También contamos con la partici-pación de Sera Timms (Ides of Gemini / Black Mare) y Michael Irwin, quien fuera el primer colaborador de Mike, antes de Lycia. Fue grandioso tener vocalis-tas invitados. Creo que el álbum tiene una sensación un poco de The Burning Circle y Cold, pero a la vez se siente muy nuevo. El tema final puede ser mi can-ción favorita de Lycia en toda su historia. Respecto a planes futuros, Mike está disfrutando de unas largas vacaciones. Él se quiere tomar al menos un año an-tes de pensar en lo el siguiente paso. Yo, por mi par-te, tengo libros en camino, así que estaré trabajando todo el tiempo en eso, supongo. Dave quiere remas-terizar y relanzar sus álbumes en solista.

Siempre es un placer y un honor estar en contac-to con una de las bandas más grandes de todos los tiempos. ¿Hay algo más que quisieras agregar y de-cir a nuestros lectores?Quisiera agradecer a todos por el apoyo. De verdad apreciamos tanto amor y cariño. A través de los años hemos conocido tanta gente maravillosa, en perso-na o en la distancia, y significa mucho para nosotros poder conectar con tanto público.

Page 16: The 13th Número 20
Page 17: The 13th Número 20

17

ENTRE LO DIVINOY EL BARRO

[ Rosacrux por Alejandro Cenizacromada ]

Un hombre aparece desnudo en una pequeña habitación, dos asistentes empiezan a trazar en su cuerpo enigmáticos gráficos. El hombre es introdu-cido en una jaula circular, sostenida por una larga ca-dena a manera de péndulo y es elevado a los cielos. La música para algunos sacrílega, que invocan anti-guos textos alquimistas se hace presente como fon-do del surreal performance. El péndulo se empieza a balancear sobre los espectadores que en medio del éxtasis observan el espectáculo, la jaula colgante se va estrellando conforme se balancea contra una in-mensa lámina de metal que está a un extremo del escenario mientras la música y los satíricos cantos invocan pesadillas y sueños de tiempos olvidados. En el mundo del gótico curiosamente las bandas que han influido el movimiento, muchas de ellas no se consideran góticas como tal; para Nick Wade de los grandiosos Alien Sex Fiend el término gótico se torna pomposo, pretensioso. Salvo en el caso de Bauhaus, muy pocas bandas han aceptado con gus-to la etiqueta de góticos. Rosacrux puede parecer a primera vista una banda pretensiosa, pero basta con mirar todo el arduo trabajo a través de los años para sacar adelante su obra y sus detalladas puestas en es-cena. De 1986 hasta el día de hoy solo han editado tres álbumes en estudio como tal, un proceso lento porque según Olivier Tarabo (cantante, guitarrista, compositor, director, ingeniero, y programador de Rosacrux) en ningún estudio de grabación enten-

dieron lo que trataban de hacer, así que se llenaron de paciencia y se tomaron su tiempo para montar su propio estudio. Probaron con bateristas pero ningu-no se acercaba a lo que querían como banda, es así como el señor Tarabo y su secuaz, el tecladista y can-tante Claude Fenny se ponen a la tarea de diseñar un set de percusiones operado robóticamente llamado BAM (Batería acústica midi) al mejor estilo visiona-rio de maestros del renacimiento como Leonardo Da Vinci. Es curioso, una guitarra eléctrica no parecería acorde para un espectáculo que indaga en las entra-ñas de oscuros tiempos; pero Olivier Tarabo es un puto genio y se las ingenia para buscar la distorsión apropiada y meterlo a uno en el viaje. La voz de barí-tono de Fenny sirve como contrapeso a la sacrílega voz de Olivier. Proficere es una obra maestra, siem-pre he considerado que la música es algo sublime que no merece entrar en un punto de comparación o competición con nada, porque la música es alma pura; pero poniendo sobre la balanza a Rosacrux con otras bandas que dicen ser góticas es devastador el resultado, lo pone a uno a pensar sobre la verdadera naturaleza del arte y nos damos cuenta de sacrificios de toda una vida para poder gestar todo ese concep-to, un resultado que aparte de dejarnos sin palabras, nos deja sin aliento. El disco comienza con Abbrasax una canción de carácter ritual con fuertes percusio-nes marciales, esta canción tiene una primera ver-sión mucho más ligera; pero no menos inquietante

Page 18: The 13th Número 20

en un vinilo de 45 r.p.m de edición limitada llamado Ales et Feles de 1987. Morituri es uno de los temas que con el tiempo se convertiría en uno de los clá-sicos de Rosacrux, en internet ronda el video con el mítico performance del hombre de la jaula colgan-te, una abismal atmósfera se abre paso y nos arropa en ese rito de iniciación. Se viene la instrumental Orgue que brinda una pausa con ese juego de ar-monías de órgano de iglesia y un redoble que va en crescendo. Entra otro pico del disco y de la obra de la Rosacrux, Eli Elo es un tema repetitivo cargado de aura maldita, de estremecedora fuerza teatral y bri-llante juego en las voces. En los conciertos toma pre-sencia durante el desarrollo de esta canción otro in-faltable performance que es la Danse de la terre, dos actores desnudos postrados sobre una especie de al-tar embadurnados de barro, ataviados con jirones de algo que cuelga de sus cabezas y sus bocas (¿raíces?, ¿cuerdas? ¿Cabello?) en un frenético y repetitivo mo-vimiento arrojándose tierra al ritmo de la música.

De hecho una toma en primer plano de la Danse de la terre es el arte de la carátula para este álbum. En Invocation las gaitas y los ritmos marciales se ha-cen presentes, ese ambiente que lo transporta a uno a antiguas guerras, a esa gusto innato del ser huma-no por la destrucción va aumentando para explotar con Svmvnt Mali (Fueron la maldad)

SVMVNT MALISvmit vnvs,Svmvnt mille, Qvantvm isti tantvm ille,Nec svmtvr consvmitvr...

Et svmvnt mali, Et svmvnt boni,Sorte tanem in eqvali...

Mors est mali, Mors est boni, Mors est ineqvali.“Él fue uno, otros fueron miles… algunos aquí,

otros en cualquier lugar.Pero ellos fueron puros…Y ellos fueron el mal, y ellos fueron el bien, una

clase de equidad…La muerte es maldad, la muerte es bondad, la

muerte es equidad…”

En Hel - Hel se retoma ese concepto minimalista y mántrico de Elí Eló pero esta vez dosificado de furia eléctrica. Vielles apareció originalmente en un cas-sette de 1992 llamado también Danse de la terre, un tema instrumental que gira en torno a la interpreta-ción sacra de una guitarra donde no existe el tiempo.

Lleflo llega con su aura celta y militar para brindar algo de luz a tanta niebla ocre que destila el disco para caer nuevamente en la perversa Misericorde, una canción llena de registros onomatopéyicos y que lo centra a uno en la tensión de los tambores. Proficere, que da nombre al álbum es más quieta con un piano pantanoso y la voz ambigua de Olivier. El tema que cierra la placa es el instrumental Vil que es perfecto para dejarlo a uno expectante con su secuencia aterradora y sus sórdidos arreglos en te-clados. Resumiendo, Proficere es un viaje trepidan-te entre la niebla y la lava, entre lo divino y el barro. Como último dato, Nathalie Méquinion fue la con-trabajista pare este fascinante disco.

Page 19: The 13th Número 20
Page 20: The 13th Número 20
Page 21: The 13th Número 20
Page 22: The 13th Número 20
Page 23: The 13th Número 20

23

Page 24: The 13th Número 20
Page 25: The 13th Número 20

25

EL HOMBREINQUIETO Y CREATIVO

[ Entrevista a Braulio D’Aguirre por Rodrigo Debernardis ]

¿Cómo comenzaste en la música y cómo fue tu lle-gada a los Auténticos Decadentes?Comencé jugando desde niño, con una batería como regalo, luego fui a estudiar con un profesor de Ramos Mejía (Raúl "Capicúa") y encontré un aviso en un lo-cal de discos de una galería de Ramos Mejía, que de-cía: "Se busca baterista para una banda de Reggae Ska". Esa banda más tarde se llamó "Los Autenticos Decadentes", que integré hasta un poco más de un año de la edición del disco "El Milagro Argentino" con temas como "Tu forma de ser" y "Raquel"Y no haber encontrado algo mejor para hacer, fue lo que me motivo a continuar con este juego tan mara-villoso, como hasta hoy.

¿Cómo fue el cambio de pasar de tocar con los Decadentes a formar parte de una banda con Richard Coleman?Bueno, fue algo glorioso, ya que para esas épocas, a mis 19 años, la cultura musical venía de la mano del rock nacional, con bandas como “Soda Stereo” y “Fricción” por solo nombrar a las dos que yo escu-chaba y admiraba. Para entonces Decadentes no es-taba bien visto, ni tampoco es la megaempresa en la que se fue transformando con el correr de los años, y aunque yo la pasaba muy bien con ellos, siempre di-vertidos, era adolescente y mi meta principal era lle-gar a estar cerca de Cerati, Fricción y Charly García entre otros.

Braulio D Aguirre es un exitoso músico que transita los caminos del rock nacional desde hace más de 25 años. Como baterista formó parte de los Auténticos Decadentes (ya una marca registrada hoy), Los 7 Delfines (a mi criterio una de las cinco bandas de rock más innovadoras que existieron en Argentina) y Ultratango (un interesante proyecto de tango electrónico junto a los miembros de El Signo).Inquieto y creativo, hoy no sólo compone música para cine y tv, sino que también le hizo un espacio a The 13th para charlar sobre su carrera:

Page 26: The 13th Número 20

Cuando aparecieron Los 7 Delfines a principios de los 90, la escena musical era bastante más rica que la de ahora. Sin embargo Ustedes llegaron con un sonido y una propuesta única que influenció a mu-chas bandas que vinieron luego.¿Cómo ves hoy a la distancia aquellos primeros tiempos?Bueno, parte de la pregunta está respondida ante-riormente pero quisiera decir que si bien fuimos una gran banda vanguardista como pocas, hoy tam-bién hay muy buenas bandas y solistas muy inte-resantes. Ocurre que la influencia de la tecnología hizo estragos en los gustos de la gente y hoy por hoy todavía no hay una gran apertura mental como la habrá en unos años, pero yo me siento feliz de que tengamos la tecnología mezclada junto a los instru-mentos acústicos, como lo veíamos antes en los ar-tistas extranjeros.La globalización nos trae estas buenas nuevas posi-bilidades y así también, gracias a las redes sociales, más conocimientos y formas de contacto.

¿Qué etapa/disco de la banda disfrutaste más? La verdad, soy un gran disfrutador y gracias a Dios pude vivir todas las etapas, desde los Decadentes, 7D, Ultratango, con todo lo bueno que hay para vi-vir en la música, pero últimamente no le encuentro la vuelta a lo actual a nivel musical para volver a sen-tirme completo como antes en la música, pero pre-siento que algo muy bueno me está por llegar. Con la edad los sueños se ponen más exigentes y se hace algo más difícil llegar a concretarlos, pero hay que tener la certeza de que si estamos aquí es para que se hagan realidad.

¿Piensas que L7D tienen el reconocimiento que se merece dentro del rock nacional? ¡Sí!, totalmente, “Los 7 Delfines” fue una banda muy bien conceptuada por muchos grandes músicos y por todo aquel que conoce nuestra obra. Sin dudas tuvimos lo que merecimos y sino se llegó a algo po-pular fue porque nunca quisimos. Ser parte y miem-bro original de “Los 7 Delfines” siempre me dio un gran orgullo personal hasta el día de hoy.

Cuando editaron el último disco, Carnaval de Fantasmas (gran álbum, de lo mejor de los Delfines en mi opinión) en 2008, parecía que la banda venía finalmente a ocupar un destacado lugar en la esce-na pop/rock de Argentina. ¿Qué pasó después? ¿Por qué la historia llegó hasta ahí?También yo sentía lo mismo, todo se daba como que estábamos a un muy buen nivel, buenos temas, la banda estaba sólida, el publico, todo daba para mu-cho más, pero habría que preguntarle a Richard (Coleman) que es quien se alejó de la banda para dedicarse a su carrera solista.

¿Crees que los 7Delfines es un ciclo cerrado o ves en el futuro alguna posibilidad de que vuelvan a reunir-se? ¿De qué (o de quién) depende que eso suceda? Los 7 Delfines es el fin de una etapa, aunque yo soy de dejar puertas abiertas, pero en este caso solo de-pende del cantante, que se alejó de la nosotros para recorrer su carrera solista. Por lo tanto, nuestra ban-da hoy vive en los discos.

¿Cómo ves la escena musical hoy de Argentina en particular y de Latinoamérica en general?Hay algo muy bueno en las bandas que utilizan la tecnología, mucho se puede percibir en el homenaje a Cerati de Canal 7 del año pasado (se puede ver en youtube) Pero también hay otros estilos musicales muy ricos como el folklore de música étnica ó como la música New Age de “Acualactica” que apasiona y es muy recomendable. He viajado por Latinoamérica, conocí otras culturas musicales y elijo el folklore de algunos países, aun-que lo popular es la bachata y el reggaeton, así que creo que con eso está todo dicho.

¿Qué bandas te gustan hoy, de acá y de afuera? ¿Qué escuchas habitualmente? De Argentina escucho todo lo que me pasan vía fa-cebook y hay de todo, bueno y también hay mucho por aprender. No se queden con el sonido de la pc, investiguen y desarrollen.Hay artistas para sacarse el sobrero, toda la camada de “Fuga Discos” por ejemplo.

Page 27: The 13th Número 20

27

Suelo escuchar lo que me llega, pues contrato músi-cos para las producciones de televisión.Y diseño auricularmente mis días con música muy actual, artistas como The M Machine / Skrillex / Bison / Echaskech / Royksöpp / UKF.¿Qué opinión tienes acerca de internet como herra-mienta de difusión, de la música en este caso?¡Sublime! internet es lo mejor que nos pudo pasar a los seres humanos como herramienta de difusión. Este es solo el principio, pero debemos aprender a convivir con ello, ya que es muy nuevo este medio todavía, y la gente se olvida del respeto por el otro al, por ejemplo, chequear su teléfono celular en una re-unión. En el futuro esa será una materia educacional que se la denominará “Educación Celular”, mien-tras tanto, todo mejorará para este mundo.

Todos te conocen por tu carrera con los ya mencio-nados 7 Delfines, muchos por tu pasado con los Auténticos Decadentes o tu trabajo más recien-te con Ultratango, pero muy pocos por tu costado

como productor y autor de música incidental o mú-sica para cine y tv. ¿Cómo llegaste a ese ámbito? Con lo que había ganado cuando tocamos como so-porte de Guns & Roses en River en el 92, me compré un teclado para utilizar los sonidos para una batería electrónica y lo menos que hice fue eso, ya que me puse a tocar las teclas y descubrí un mundo mara-villoso de sonidos que podía trabajar, utilizando au-riculares por las madrugadas, cuando yo no podía tocar la batería.De ahí en más comencé a transitar por el camino de la creatividad toda, ya que desde mi adolescencia siempre escuchaba la música de las películas con gran atención, sobre todo los programas de TV. Me maravillé con el tema de Jan Hammer, “Crocket”, para la serie “Division Miami”, y ese fue el punta-pié inicial para decidir dedicarme a esta gran carre-ra paralela a la batería. Compuse varios temas y los fui a llevar a los canales de televisión, hasta que di con América TV y pude hacer que pasen mi músi-ca durante 3 años en la señal de ajuste, al inicio del

Page 28: The 13th Número 20

día. Luego me contacté con un productor de Canal 13 que hizo que mi música suene en un programa de Cesar Massetti. De ahí en adelante fue siempre llamar y golpear puertas una y otra vez.

¿Cómo se logra ser creativo en ese espacio, quizás un poco más esquematizado (por tener que compo-ner pensando en un determinado tema o para colo-rear una situación particular en la pantalla)? Creo que hay tener oído, creatividad desde naci-miento y un gran ejercicio de escuchar la tv sin mi-rar las imágenes. Pero sobre todo hay que ir a estu-diar, todo mejora cuando uno estudia.

Más allá de este “trabajo” u “oficio” como composi-tor musical para eventos, películas y novelas televi-sivas, ¿de qué otra manera canalizas esa necesidad de expresión que todo músico tiene?Hoy desarrollo mi mejor expresión componiendo para las tiras de alguna novela (pueden oir material en https://soundcloud.com/bdamusica/tracks) Eso me da el equilibrio espiritual para la vida que lle-vo. Por otro lado toco para Fede Arroyo, un cantante que me contrata como baterista, y también soy co-

lumnista en “Discorama”, programa de radio que se emite los viernes 22 a 24hs por Radio LED (www.radioledonline.com) En tus presentaciones como solista cambiaste la ba-tería por el teclado (igual que Lol Tolhurst de The Cure !!). ¿A qué se debió ese cambio?¡¡Grande Lol !!... ¡¡mi admiración por los Cure!!Fue una necesidad, hay mucho material y la gente que me rodea siempre quería escucharlo en vivo, así que le di ciertos matices y lo sacamos a la pista junto a una banda de amigos que suelen resolver los shows de la mejor manera. Así que tuve que dedicar-me a ser la voz cantante de mis temas, ya que solo yo sabía como tenían que ser cantados.

¿Cuáles son tus proyectos musicales para el futuro?No soy de hacer proyectos, voy haciendo sobre la marcha, sin prisa pero sin pausa. Y me visualizo tocando batería y realizando música para tv para Argentina y otros países como lo vengo haciendo. ¡¡Muchas gracias Braulio por tomarte el tiempo para responder esta entrevista!! Gracias a ustedes por entrevistarme, hasta pronto.

Page 29: The 13th Número 20

29

Page 30: The 13th Número 20
Page 31: The 13th Número 20

PALABRAS EN LA ARENA

Page 32: The 13th Número 20

LA DESNUDEZGANADA AL VACÍO

[ “Voces” de Antonio Porchia por Pablo Ravale ]

Un solo libro. Ediciones múltiples. Una sola voz. Un hilado de ecos que se niegan a apagarse y en-traman su conversación y su mensaje con el pensa-miento de todos. Eso es Antonio Porchia…

Nació el 13 de noviembre de 1885 en Conflenti, un pueblito perteneciente a Catanzaro, capital de la provincia de Calabria. Fue el mayor de siete herma-nos. A los 15 años emigró junto con su familia ha-cia Buenos Aires en busca de nuevas oportunida-des (su padre acababa de morir), abandonando a una Italia sumida en una crisis económica. Al llegar a Argentina, Antonio, un inmigrante más, un explo-tado más, la yuga durante catorce horas diarias para mantener a los suyos, empleándose en un aserrade-ro y luego en el puerto. Inicialmente, la familia se ra-dica en el barrio de Barracas; más tarde, hacia 1918, consigue otra casa en San Telmo. Este mismo año, Antonio y su hermano Nicolás compran una peque-ña imprenta en ese barrio, en la calle Bolívar, donde trabajaría hasta 1935.

+En 1943, a sus 57 años, publicará su primer (y único) libro,  “Voces”, en una modesta edición de autor. La particularidad era que Porchia no se reco-nocía como un escritor, así que decidió donar los ejemplares a la Sociedad Protectora de Bibliotecas Populares, organización que coordinaba pequeñas bibliotecas por toda la Argentina y a las cuales le fue-ron entregados esos libros. El azar hizo que Roger Callois, poeta y crítico literario francés que se en-contraba en Argentina debido a la Segunda Guerra Mundial, recibiera un ejemplar de “Voces” y que-dara fascinado, emprendiendo la búsqueda del au-

tor. Y cuenta la historia que cuando por fin dio con Porchia, Callois le dijo: “Por una de esas líneas yo cambiaría todo lo que he escrito”. De esta forma, y una vez regresado a Francia, el crítico va a traducir sus aforismos y publicarlos en diversas revistas li-terarias. Estas publicaciones llamarían la atención de Henry Miller y de André Bretón. El primero va a añadir a Porchia entre los cien libros de una biblio-teca ideal y el segundo va a afirmar: “El pensamien-to más dúctil de expresión española es, para mí, el de Antonio Porchia, argentino”. Como no podía ser de otra forma, el elogio europeo llamó la atención de la revista Sur, que publicaría distintas ediciones de “Voces” de Porchia. El autor, pese a no tener un pa-sar económico holgado, le pidió a Victoria Ocampo, directora de la revista, que donara los honorarios “a un poeta necesitado”. Ya con la fama rondando su nombre, editorial Sudamericana le propone publi-car su obra, lo que implicaría una llegada a un públi-co mucho más masivo. Para ello, selecciona versos de sus dos ediciones de autor anteriores, descar-ta otra y agrega unas nuevas, conformando la edi-ción oficial de “Voces”, que luego sería editado por Hachette en 1966.

Hablar de su obra o, más bien, de su escritura, no es referirse a un autor (ni siquiera es que haya sido un escritor, de hecho, vivió siempre al margen de la vida intelectual o literaria), sino, por el contrario, a alguna suerte de maestro zen, de oráculo devenido en aforista. Su mirada se despoja de todo hasta sólo quedar ella frente a las cosas, frente al destino (“Lo que hice o no hice, creo que pasó. Y lo que haré o no

Page 33: The 13th Número 20

33

haré, creo que también pasó”, escribía). Nada deja que pueda llegar a obturar el misterio de antemano. Ningún prejuicio que ocupe el lugar de la razón. La arquitectura de sus ojos es desconstructiva. Pero la indigencia de su mirada encierra el palacio de la in-temperie. Porque Porchia representa aquella sabi-duría del hombre que mira con el largo y el ancho disponible de su experiencia y que entiende perfec-tamente su lugar en el mundo; alguien que contó los pasos que hay hasta su propio horizonte, que co-noce exactamente hasta el último rincón de su alma y que, sin embargo, no siente miedo ante lo desco-nocido de la muerte (“Toda cosa existe por el vacío que la rodea”). Volviendo al libró, quisiera remarcar también que las voces desbordan el aforismo y lo acercan al género poético. Algunas de ellas parecen concordar, por su brevedad y por su sugestión, a los haiku y esa no es la única analogía con las culturas orientales. Ya E. S. Merwin, quien lo editó en Francia en 1969, hizo notar las similitudes con elementos del budismo y el taoísmo, sobre todo en lo que se re-fiere al retraimiento del yo para hallar a este incorpo-rado a las cosas, participante del mundo e inmerso en lo que, sólo con su razón, no podría aprehender (“Hombres y cosas, suben, bajan, se alejan, se acer-can. Todo es una comedia de distancias”).

La mítica Alejandra Pizarnik, quien supo visitarlo (al igual que el poeta Roberto Juarroz) lo consideraba también un maestro: “Asiento a cada una de sus ‘vo-ces’ con toda mi sangre” –decía– “y, lo que es extra-ño: su libro es el más solitario, el más profundamen-te solo que se ha escrito en el mundo y no obstante,

releyéndolo a medianoche, me sentí acompañada o mejor dicho amparada. Y también asegurada, tran-quilizada, como si me hubieran dado la razón en la única cosa que yo rogaba tenerla”.

Para ir cerrando, entonces, diré por último que la escritura del enorme Porchia frena todo apuro. Cada uno de sus textos propone un alto. Como una vida: no puede vivirse toda de repente. Y esto induce a pensar que sus “voces”, unas tras otras, pausadas, como si se tratara de un ladrillo sobre otro, edifican una autobiografía en clave, un legado indestructible.

Page 34: The 13th Número 20

CRÓNICAS DESDE MERDEVILLE

Page 35: The 13th Número 20

"… Sí, soy consciente de que para ser escritor se debe estar ligado a la tarea constante de hackear el lenguaje, el Sistema, el Cosmos entero, como si se tratara de un mero programa de computación. La actividad de la escritura es, entonces, una actividad de hacking. Aunque, ¿de qué? Sencillo: del lenguaje mismo."

Page 36: The 13th Número 20

Escribir es robar

Escribir es robar. Todos los escritores somos ladrones. No hay ningu-no que no se apropie de lo que oye por ahí. Ya lo dijo Rimbaud “El poe-ta es realmente ladrón de fuego”, o sea, está siempre expectante, al ace-cho, listo para cazar historias o cosas que los demás nunca parecen ver.

Fieles son los perros y raíces tiene los árboles. Los que escribimos no tenemos patria ni bandera. Somos criaturas de ninguna parte. Somos rabiosos, resentidos y, a la vez, un poco candorosos. Porque nos hace-mos querer, sí. Y si no nos quieren, quienes se nos cruzaron en alguna oportunidad, se llevarán, al menos, la más fuerte o la más grata de todas las impresiones: una puteada o una cojida.

Escribir, como recién les decía, es robar, pero, por sobre todo, es ino-cularle tu veneno a quien te lea. Es ser ese loco que le patea la cabeza a quien le falte el respeto, es ser ese degenerado que se anima a tocarle el culo a tu hijita, es ser ese disociado que abre fuego contra cualquiera en medio un shopping, o es ser ese yonqui que se introduce una jeringa en las venas para inyectarse la sutil paranoia de los fantasmas que nos ha-bitan. Puesto que de eso, en definitiva, se trata el ritual de sentarse fren-te a una hoja y ponerse a sacar palabritas: de conseguir ver al mundo tal cual es, mientras la vida se te chorrea sobre tu puta percepción. Sin in-ventos, sin cursilerías, sin mensajes esperanzadores ni mucho menos filtros que hagan que los demás te vean como un tierno. Ya que buscar

Page 37: The 13th Número 20

ser tierno en un escrito es de maricón… Yo, de hecho, me cago desde arri-ba de un puente sobre todos esos pajeros que dicen que el arte está para embellecer más las cosas. La vida es esta, le pese a quien le pese, y si de a momentos o de a temporadas se nos vuelve un poco dura, es porque todos tenemos que pasar por ese sótano oscuro del edificio abandonado que resulta que es el tiempo.

A todo esto, también, sucede que para quienes escribimos vivir es como estar sentado sobre un incómodo e inseguro trono, en el cual, lo más probable, es que nada te duela demasiado, pues vos no querés o no sabés de otra cosa más que darle a la lapicera hasta que te queden los ojos colorados y la cabeza partida. Y esa es la condena, ese el precio a pagar: el existir por y para lo que hacés. Ya que la realidad es que no te queda otra. Asimismo, hay que tener un insano prejuicio para creerse eso de que la literatura es algo importante, o que la poesía es trascendente, o que las novelas son un fiel retrato de la vida. Los artistas no valen tres mierdas, váyanlo sabiendo. Mucho menos los músicos, cuya máxima aspiración es comprarse mansiones o tomar champagne en pelotas rodeados de pendejas. El escritor, sin embargo, es otra cosa. El escritor está más allá de lo que escribe y, mismo, de su propia era. Por eso es que ve… ve por-que, justamente, vive desandado... porque, en el fondo, sabe, o sospecha, que esto es todo una farsa.

Page 38: The 13th Número 20
Page 39: The 13th Número 20

39

HIDDEN TRACK

Page 40: The 13th Número 20
Page 41: The 13th Número 20

41

Page 42: The 13th Número 20

RESCATE CINÉFILO

Page 43: The 13th Número 20

43

Page 44: The 13th Número 20
Page 45: The 13th Número 20

45

WINTER IS COMING

Estamos en pleno Julio y el frío aún tarda en hacerse sentir del todo. Incluso llega antes en la tierra de Game of Thrones que aquí. Sin em-bargo, decidimos repasar algunos films donde el invierno se hace pre-sente y también es protagonista. Así fue que nos encontramos en la tierra del western, en historias de amor y en inhóspitas situaciones paranormales que hicieron que los tres miembros de Rescate cinéfi-lo terminen dedicando cada uno una nota a Stephen King, el maestro del horror. Sin extenderme más, abríguense bien, tomen algo caliente y adéntrense en las páginas de este especial invernal.

Page 46: The 13th Número 20

En la nieve nadie puede oírte gritar

[ Por Nicolás Ponisio ]

Desde tiempos inmemoriales se le ha temido a lo desconocido. Lo que excede al conocimiento y en-tendimiento humano siempre a helado la sangre de quienes se encuentran cara a cara con ello y tam-bién de quienes observan todo desde la comodidad de una butaca. La misma, no tarda en contagiarse de su inquietante atmósfera.

Alien (Ridley Scott, 1979) lo ponía exitosamente en práctica con ese ser del espacio exterior que ape-nas se dejaba ver en pantalla, otorgando uno de los mayores suspensos y horrores del mundo cinemato-gráfico. Luego de atestiguar las vivencias de la tripu-lación de la nave Nostromo, parecía poco probable que pronto alguien volviera a atrapar de tal forma al público sabiendo sorprender con originalidad. Sin olvidar tampoco que el cine se debe centrar en sus distintos componentes artísticos y no en un mero susto que haga levantar el culo del asiento. Sin em-bargo, tres años después de Alien, John Carpenter daría a luz su mayor obra.

Con The Thing (remake de The Thing from Another World, clásico de Christian Nyby y Howard Hawks de 1951), el maestro del horror bebe mucho

argumentalmente del film de Scott a la vez que crea y reinventa nuevos aspectos en un género que no siempre sería tratado con el debido respeto. La fal-ta de criterio que coexiste en muchos otros films brilla por su ausencia. Aquí todo se encuentra pen-sado con una mirada puramente artística en todas las áreas. Lo cubre todo como la nieve que rodea a MacReady (Kurt Russell) y sus compañeros de la Antártida. Desde su comienzo con la persecución a tiros de un helicóptero a un perro, acompañada por la música de Ennio Morricone con un claro uso de la pulsión de suspense en su composición, el film mantiene una intranquilidad que no desaparecerá de él en ningún momento.

Carpenter opta por no incluir charlas banales o pequeños conflictos y situaciones que nos den un breve pantallazo sobre quiénes son estas personas y cómo se comportan (exceptuando un poco al perso-naje de MacReady). Gracias a ello, identificar el pe-ligro será aún más difícil. El extraterrestre no solo cumple el rol del mencionado miedo a lo descono-cido sino que, al ser una suerte de virus que invade a los seres vivos, el terror se vuelve más palpable en

Page 47: The 13th Número 20

47una versión terrorífica del quién es quién. El direc-tor dosifica muy bien las dosis de suspenso, terror visceral de la mano del arte del diseñador Rob Bottin (la cantidad de deformaciones, tripas y sangre la si-túan más dentro del género que a Alien) y el contex-to de una época.

Si se lo puede denominar de una forma, el trabajo de género en The Thing podría ser tratado como te-rror reflexivo. Si se logra cavar en el desierto nevado, se halla más de lo que se ve a primera vista. El mons-truo como enfermedad invasiva no es elegido azaro-samente. Con la mirada apropiada se puede lograr un diálogo entre la realidad planteada por la ciencia ficción del relato y la realidad de los tiempos que co-rren fuera de la pantalla. La relación principal y más clara que se puede hacer con la criatura y el factor de no saber quién la lleva dentro de sí es su paren-

tesco con el Sida, una enfermedad desconocida para entonces, que en los ochenta comenzaba a estar en boca de todos y que solo puede descubrirse por un análisis de sangre (tratamiento similar al que se so-meten los protagonistas).

Teniendo en cuenta la visión norteamericana, la amenaza de los rojos como problema exterior y los conflictos de la era del Macarthismo como el ene-migo dentro del país sin forma de identificarlo, son otros de los paralelismos que se pueden hacer con la historia del director y la de su país. John Carpenter maneja los hilos del entretenimiento y de la concien-cia humana por igual sabiendo despertar más de un sentimiento a la vez y muy lejanos al sobresalto hue-co al que está tan acostumbrado el género. Lejos de brindar tranquilidad hacia el final, se deja en claro que en la fría nieve, nadie puede oírte gritar.

Page 48: The 13th Número 20

Terror Invernal

[ Por Gustavo M. García ]

Si hablamos de películas en donde el invierno es fundamental en la trama, no podemos dejar pasar a The Shining (Stanley Kubrick, 1980). Aunque también podríamos haber hablado de ella el mes pasado, cuando hicimos un especial de escritores, o en muchas otras temáticas que se nos ocurrieran. Pero creo que esta ocasión es una gran oportunidad para hablar de este em-blema del cine de terror.

El invierno es el sexto protagonista de la histo-ria: está Jack Torrance (Jack Nicholson), un escri-tor que atraviesa un bloqueo creativo y ve bene-ficioso para su concentración aceptar un trabajo de cuidador en un hotel cerrado fuera de tem-porada; su fiel esposa Wendy (Shelley Duvall); su particular hijo Danny (Danny Lloyd); Tony, el amigo imaginario de Danny (la personifi-cación del poderoso don de Danny al que pode-mos llamar “el resplandor”), el macabro Hotel Overlook y, por supuesto, el invierno. Este últi-mo es el más neutral de todos, es aliado de los “malos”, pero en otro momento defensor de los “buenos”. Es la razón del conflicto y el culpable

de su desenlace.Para el que no vio esta joya de Kubrick, como

ya adelanté, la trama aparenta ser simple: un profesor desea escribir una novela, pero necesi-ta aislarse del mundo para concentrarse y super-ar su bloqueo creativo. Entonces ve la oportuni-dad de pasar todo el invierno cuidando, junto a su esposa e hijo, las instalaciones de un gran ho-tel que cierra sus puertas al público en esa época del año por la nieve que dificulta su acceso. Poco después de su llegada al hotel, comienzan a suceder extraños fenómenos paranormales, al mismo tiempo que Jack empieza a padecer in-quietantes trastornos de personalidad y su hijo tiene visiones horribles del pasado y del futuro.

El relato de Kubrick es excelente. Por más que algunos lo critiquen por no respetar el hilo argu-mental de la novela homónima en la que se basa el film, incluso la más ferviente crítica proviene del propio autor del libro (Stephen King), la construcción a la que ha llegado el director es perfecta. Durante las casi dos horas y media de película uno está tenso frente a la pantalla. Cada

Page 49: The 13th Número 20

49

sonido, cada toma, cada movimiento de cámara, cada expresión es inquietante. Hasta el día de hoy, luego de ver cientos de copias de los mis-mos recursos, hay tomas de The Shining que aterran gratamente. Y lo expreso de esa forma porque es bueno cuando uno se estremece con fórmulas que hoy serían absurdas. Díganme dé-bil, pero aún me cuesta ver valientemente la es-cena cuando Jack entra a la habitación 237.

Aquí no deslumbra la dirección de arte, ni las actuaciones. Sí, Nicholson es excelente, pero soy de los que opina que los cambios de per-sonalidad podrían haber sido bastante más pro-gresivos. Desde el primer momento que se ve a Jack Torrance en escena aparenta estar total-mente desquiciado. Aquí el que se lleva absolu-tamente todos los premios, y perdonen si soy reiterativo, es Kubrick. Su trabajo de cámaras es increíble y son los que convierten a la obra en magnífica. Los planos cenitales del princip-

io, reflejándonos lo inaccesible que es el hotel, o el que se sumerge en la maqueta del laberin-to de hierbas para ingresar en el laberinto real; los interminables planos secuencia que siguen a Danny y su triciclo por las distintas áreas del hotel, que convierten al edificio en un enemigo aterrador dentro del conflicto, y los que siguen a Danny y su padre por el inmenso y frío laber-into; y, para mí el mejor aplicado, el contraceni-tal que muestra a Jack encerrado en el almacén amenazando a su esposa a través de la puerta. Todos juntos dan cátedra cómo dominar el len-guaje audiovisual y qué decir con él.

Con todos estos poderosos recursos, el film se convirtió en una cita obligada para todo cinéfi-lo, para los amantes del terror o para cualqui-era que desee disfrutar de una película perfecta-mente contada donde todo lo que se muestra, y de la forma que se muestra, tiene un por qué.

Page 50: The 13th Número 20

Errar es humano

[ Por José Luis Lemos ]

Cuando se planteó la premisa de escribir sobre pe-lículas invernales, pensé inmediatamente en clási-cos nevados como El resplandor, Gremlins o La zona muerta, más allá de que donde vivo el frío se ma-nifiesta visualmente con una simple escarcha en el pasto visible únicamente por las mañanas. Sin em-bargo, no solo grandes nombres vinieron a mi men-te y allí, entre las imágenes de Paul Sheldon acci-dentándose con su auto y Silencio cabalgando en la nieve, también estaban los dedos de Emma Bell en Frozen. No hablo de la famosa princesa de Disney, sino de esta película de suspenso y supervivencia di-rigida por Adam Green.

Frozen no es una obra maestra, ni tampoco preten-de serlo. Sin grandes nombres en su reparto, y con un presupuesto casi tan bajo como la temperatura a la que son expuestos sus protagonistas, es de esas películas que se pierden entre las bateas de algún vi-deoclub (¿existen aún?) y con suerte encuentran su público entre el sufrido aficionado al cine de género. Así y todo, Adam Green –responsable de la trilogía de slasher paródico Hatchet- logró con muy poco lo que otros directores con millones de presupues-

to apenas llegan a arañar: dos o tres escenas de sus-penso muy efectivas y actuaciones creíbles. La idea era muy simple: Dan y Joe, (Kevin Zegers y Shawn Ashmore) amigos de toda la vida y aficionados al snowboard, se encuentran en una estación de esquí junto a Parker, la novia de Dan (Emma Bell, o la her-mana de Andrea en The Walking Dead). Hay una tensión latente, ya que Joe cree que Parker se está in-terponiendo en la amistad. Luego de este comienzo más propio de una película de Kevin Smith- diálogos nerds incluidos- las cosas toman un giro más oscuro cuando debido a un malentendido quedan varados en una aerosilla. Completamente solos y a una altu-ra lo suficientemente elevada como para matar a una persona, la desesperación comenzará a apoderarse de los amigos hasta extremos insoportables.

Con un planteo muy similar a Open Water, aquel film con una pareja a merced de un grupo de tibu-rones, Frozen también deja fuera de cuadro lo que pudo haber sido una carnicería en manos de otro di-rector. Bueno, al menos todo lo fuera de cuadro que se pueda permitir el realizador de una saga tan pro-pensa a las salvajadas gore como Hatchet. Mentiría

Page 51: The 13th Número 20

51

si dijera que es un ejercicio sutil de suspenso psico-lógico, ya que Green no puede con su genio e incluye un par de planos fugaces que son realmente doloro-sos, pero la escena más terrible del film no la vemos en imágenes, sino que la construimos en base a lo que oímos fuera de cuadro. El director parece haber aprendido la lección que nos dejaron las grandes pe-lículas de terror de la historia, y es que no hay nada más horrible que lo que la imaginación deja librado al azar. Ahí están El proyecto Blair Witch y Tesis para darnos la razón. Otro acierto es dedicar la primera media hora a la construcción de los personajes me-diante diálogos superficiales que, sin embargo, lo-gran que nos identifiquemos fácilmente con ellos. De ese modo luego nos importa, y nos duele, lo que les sucede, a diferencia de otros exponentes del gé-nero en los que deseamos que maten a los protago-nistas lo antes posible…y de la manera más brutal.

Muchos críticos le reprocharon a Frozen lo pre-cipitado de algunas de las acciones de los persona-jes. Sin ánimo de entrar en detalles para no arruinar esta reseña con spoilers, lo cierto es que es muy fá-cil -desde la comodidad que nos brinda la distancia analítica- proponer soluciones alternativas a los con-flictos planteados. Pero en primer lugar, ¿Cómo sa-

bemos que en una circunstancia como la que mues-tra Frozen la desesperación no nos puede llegar a jugar una mala pasada? La niebla (el film de Frank Darabont, no el de Carpenter) se animó a plantear la misma pregunta en su resolución y se ganó el odio de gran parte del público. ¿Acaso una persona pue-de ser insensata o estúpida en la vida real, pero no en las películas? ¿Si al protagonista se le escapa una solución obvia a un problema, debemos condenar al guionista por no hacer personajes inteligentes? La respuesta más acertada a este interrogante la dio George Romero en La noche de los muertos vivien-tes. En aquel clásico, dos personajes se enfrentaban por una diferencia de opiniones: el “villano” decía que para protegerse de los zombies que los acecha-ban debían refugiarse en el sótano. El héroe soste-nía que debían resistir el ataque arriba. Resultado: todos mueren y solo se salva el héroe…refugiándose en el sótano. Esto, lejos de desmitificar al héroe, lo hacía más humano, más real. Lo mismo sucede en Frozen, y resulta satisfactorio ver que no siempre los protagonistas son hijos no reconocidos de McGyver. De los errores se aprende, dicen. Yo, por lo pronto, ya sé que cosas no hacer si me quedo atrapado en una aerosilla.

Page 52: The 13th Número 20

Amor crudo

[ Por Gustavo M. García ]

El crudo frío de los inviernos del norte encierra historias misteriosas, terroríficas, mágicas, pero también románticas. La nieve es capaz de ocultar los crímenes más infernales, pero también las pasiones más profundas. Y de ese contraste nace Låt den rätte komma in (Tomas Alfredson, 2008), un largometra-je sueco que apareció en el auge de las películas de vampiros para imponer una mirada diferente, pro-funda y emocionante. Let the right one in o Criatura de la noche (como se la conoce en el mercado inglés y en nuestro mercado respectivamente) es genera-dora de sonrisas, de escalofríos, de miradas de asom-bro y, sobre todo, de ternura. Es increíble como una película con una gran carga de dolor físico y emocio-nal puede provocar tanta ternura, tanto amor.

Quizás el secreto está en sus dos protagonistas, una niña y un niño de doce años envueltos en un ro-mance casi inocente: Él, un solitario hijo de padres separados fanático de noticias violentas, que sufre a sus compañeros de colegio y está comenzando a sentir curiosidad por su cuerpo y el de los demás. Y ella, un ser con una infinidad de años vividos, en-cerrado en el cuerpo de una niña resignada por su

naturaleza, pero fiel a lo que quiere y le hace bien.Juntos viven la verdadera esencia del amor. No ha-

cen falta besos apasionados, escenas de sexo o sali-das de cuentos de hadas para demostrar lo que ellos sienten. Sólo sus miradas alcanzan para llevarse el mundo por delante, para saber que pase lo que pase, si están juntos, todo va a estar bien. Es el amor cru-do, sin cocciones sociales que le quiten la belleza y la fuerza de lo primitivo.

Seguro se pueda decir más de esta joya filmada en Estocolmo. Podría hablar durante hojas y hojas de lo bien que la dirección de arte fría y pesada perfeccio-nan esa crudeza. O de las increíbles actuaciones de los dos jóvenes enamorados, Kåre Hedebrant y Lina Leandersson. O de los pequeños detalles que realza el director para llevarnos por un relato totalmente original. Pero en esta ocasión no quiero gastar pa-labras en eso. Quiero respetar esa crudeza y que, al verla, sus ojos juzguen por sí mismo. Porque aquí queda demostrado que una mirada cuenta mucho más que cualquier otra forma de expresión.

Page 53: The 13th Número 20

53

Mi vieja marmota ya no es lo que era

[ Por Nicolás Ponisio ]

Obviada y desvalorizada en su momento, Groundhog Day ha alcanzado el status de film de culto compartiendo el puesto con otras obras de re-nombre. La puesta en escena, la fotografía e incluso las actuaciones son correctas pero no llegan a desta-carse por sobre otros films de la época.

El atractivo reside en la originalidad de la trama, la historia de un meteorólogo (Bill "cazafantasma" Murray) que vive una y otra vez el mismo día sin po-der escapar de la pequeña ciudad en que se encuentra. Un viaje de autodescubrimiento y crecimiento per-sonal por medio de la cotidianeidad. Lo tedioso que puede resultar para algunos la reiteración de eventos en el film en realidad funciona como elemento de cambio constante lo cual permite mantener nuestro interés en la trama del desafortunado protagonista.

Años después se trataría de emular la misma fór-mula con menos encanto en la comedia de Adam Sandler 50 First Days, en este caso haciéndonos de-testar Wouldn't it be nice de los Beach Boys en vez de I got you babe de Sonny & Cher.

A pesar de esa fuerte estructura cambiante el film no resiste demasiado al paso del tiempo (oh, la iro-nía). Visto hoy en día su humor puede resultar muy inocente o pasado de moda pero a la vez funciona como un portal a otra época, a otro tipo de cine ya perdido y rescatado por las tardes de algún canal de aire y las épocas navideñas. Es entonces cuando el hechizo temporal trasciende a la pantalla convirtién-dose en un momento pasado y destinado a ser (re)vivido las veces necesarias, en este caso no a la fuer-za y por el público que guste hacerlo.

Page 54: The 13th Número 20

Silencio vive

[ Por José Luis Lemos]

Hay películas de las que no se puede hablar sin invocar el final. Y no hablo de casos como el de Sexto sentido o Los sospechosos de siempre, films cuyas últimas escenas dejaban al descubierto argucias de guión que estaban ocultas para sorprender al espec-tador. No, me refiero a films como Dead or Alive, aquella locura de Takashi Miike que (SPOILER) cul-minaba una trama de yakuzas con una resolución al mejor estilo Dragon Ball o como- en un sentido muy diferente- El gran silencio. Una advertencia al lector que aún no vio este gran film de Sergio Corbucci: detenga aquí su lectura si no quiere verse expuesto a más información respecto al final. Si acaso necesita algún dato extra para ver si la trama puede llegar a interesarle, aquí abajo le dejo una breve sinopsis de la película libre de spoilers, tras la cual debe ir co-rriendo a verla y continuar leyendo esta reseña una vez que los créditos finales hayan pasado. El que avi-sa no traiciona.

A fines del siglo XIX, un grupo de forajidos es-condidos en las montañas nevadas de Utah se ven obligados a buscar víveres en el pueblo de Snow Hill

tras la llegada del invierno. Allí los espera la ban-da de cazarrecompensas del sádico Tigrero (Klaus Kinski), quienes ansían cobrar la recompensa que el juez de paz Pollicut da por sus cabezas. En el medio de esta situación se encuentra Silencio (Jean –Louis Trintignant muchas décadas antes de intentar atra-par palomas en Amour de Michael Haneke), un pis-tolero mudo que es contratado por la viuda de uno de los forajidos para eliminar a Tigrero, aunque él tiene sus propios asuntos pendientes.

Como casi todo spaghetti western, El gran silencio subvierte los códigos de los exponentes del género americanos poniendo como protagonistas a antihé-roes más interesados en ganar dinero que en realizar actos altruistas. Pero a Corbucci no le alcanza con eso y va por más: no solo cambia el sol abrasador del desierto de Almería por paisajes cubiertos de nieve, sino que también desmitifica la imagen del cazarre-compensas canalla y querible instalada por Sergio Leone en su Trilogía del dólar. Hay una diferencia abismal entre el simpático hombre sin nombre in-terpretado por Clint Eastwood y el cínico Tigrero,

Page 55: The 13th Número 20

55

interpretado magistralmente por un Kinski al que no le es muy difícil hacerse odiar. Aquí los cazarre-compensas son viles especuladores que trafican con vidas humanas con una frialdad escalofriante, mien-tras que los bandidos son parias de un sistema legal que los excluye por razones religiosas (aunque esto varía dependiendo de si uno está viendo la versión doblada al inglés o al italiano). Cuando Tigrero apila cadáveres sobre una diligencia con el entusiasmo de un chico amontonando juguetes, es difícil no pensar en la escena final de Por unos dólares más, aquella en la que El manco (Clint Eastwood) parte hacia el horizonte sobre una carreta repleta de muertos, en busca de su recompensa. La comicidad de ese final aquí toma un giro más oscuro, crudo y realista, a tono con el pesimismo general de la historia.

Además de cuestionar el cinismo del otro Sergio, con El gran silencio Corbucci se animó a cuestionar su propia obra, lo que dio lugar a uno de los finales más imprevistos de la historia del cine. En su film más exitoso, Django, el héroe llegaba al final con las manos destrozadas, hecho que no le impedía matar a balazos a sus enemigos, con una precisión y veloci-dad envidiables. Franco Nero caminaba hacia el hori-zonte con dificultad -pero vivo-mientras se imprimía sobre él la palabra Fin. Pero aquí no hay lugar para finales felices. Silencio va al encuentro de Tigrero luego de que sus manos fueran colocadas en un bra-sero, y uno cree que- como Django- de todos modos va a poder matar al villano y además quedarse con la chica. Pero no. Tigrero y sus secuaces, ocultos detrás de las ventanas de una cabaña, le dan muerte a bala-zos antes de que pueda desenfundar, y luego hacen lo mismo con Pauline (la viuda que lo contrató) y los forajidos a los que intentaba proteger. El villano parte hacia el horizonte, en busca de su recompensa. Fin.

Corbucci afirmó que el final pesimista se le ocu-rrió tras la muerte del Che Guevara, el mismo año en que se estrenó el film, y que también tuvo en mente a otros revolucionarios como Malcom X. La placa que se encuentra antes de los créditos fina-les- en la que se nos dice que la matanza ocurrió realmente y que debido a ella la reputación de los cazarrecompensas comenzó a cuestionarse- le da

al film un fuerte carácter político y de denuncia. Sin embargo, no queda del todo claro si el mensaje que nos quiere dejar Corbucci es que siempre alguien debe ser sacrificado para que las cosas cambien, rei-vindicando de ese modo la figura del mártir, o que la justicia en manos de un solo hombre es un acto tan heroico como inútil. Todas suposiciones que quedan anuladas en el final feliz que se hizo por encargo de la 20th Century Fox. Aparentemente el jefe del estudio se tragó su propio cigarrillo al termi-nar de ver el film, y pidió una conclusión alternativa para ser usada en lugares donde el final original no funcionaría. Esta escena, en la que Silencio aparece con una mano de metal (¡!!), mata a tigrero y libera a los forajidos, por suerte solo puede ser vista como un extra en algunas ediciones en dvd.

El tono sombrío de El gran silencio no solo se li-mita a su temática o su excelente fotografía, sino que encuentra su correspondencia en el soundtrack compuesto por Ennio Morricone. Sergio Leone solía decir que los temas de Morricone que el rechazaba terminaban siendo los temas principales de los de-más spaghetti westerns. Si eso es cierto, Leone dejó pasar una auténtica obra maestra: desde los crédi-tos - en los cuales Silencio “cabalga” a través de un gélido paisaje hasta terminar literalmente hundido en la nieve- se establece la atmósfera dramática del film con una melodía tan sutil como inolvidable que nada tiene que envidiarle a los temas que ilustran los films de Leone.

Inclusive, con sus melodías lúgubres de piano y el uso del fuzz, funciona como un antecedente per-fecto de la banda sonora compuesta para Erase una vez en el Oeste.

Tal vez el spaghetti western más siniestro que se haya hecho, junto con Si estás vivo, dispara. El gran silencio no solo hace alusión en su título al protago-nista del film, sino que describe perfectamente la reacción del público luego de ver un final tan osado y shockeante, donde nos quedamos tan mudos como Silencio, con un nudo en la garganta a falta de cica-triz. Y que nos recuerda que allá fuera, lejos de la seguridad que nos brinda la sala de cine, los buenos no siempre salen ganando.

Page 56: The 13th Número 20

Fragmentos

[ Por Nicolás Ponisio ]

Si en el invierno nos vamos a centrar lo menos que se le puede pedir a un film es que sea climático. Y en el caso de The Dead Zone de David Cronenberg la ola de frío es imparable. No solo porque el gélido clima es el que envuelve de principio a fin la trágica historia de Johnny (Christopher Walken) y sus pode-res, también se debe al hecho de que son esos pode-res los que funcionan como maldición que aleja al personaje de la sociedad, apartado en soledad entre la nieve que lo rodea.

El film de Cronenberg en cada aspecto funciona correctamente y resulta adaptar con fidelidad la obra homónima de Stephen King. Al mismo tiem-po se desarrolla con simpleza, sin destacarse mu-cho como lo hacían otros trabajos del director. Dicho tratamiento simplista le juega a favor si se lo mira únicamente como adaptación pero que como film en sí sale perdiendo, acercándose más a un producto pensado para televisión, al igual que lo fueron otras obras de King como It (Tommy Lee Wallace, 1990) y Salem's Lot (Tobe Hooper, 1979).

El film posee una narrativa lineal de manera epi-

sódica. Cada situación por la que pasa Johhny, las visiones a las que se enfrenta y el malestar que ésto le provoca se desarrolla de manera rápida y autocon-clusiva en cada una de ellas. De poder verse por sepa-rado cada acto, de no verse al film en conjunto como una totalidad, la atmósfera creada por Cronenberg y el pequeño universo invernal de King englobaría de mejor manera al relato. Así, situaciones como la del asesino serial de Castle Rock o el maléfico candi-dato a senador (personificado endiabladamente por Martin Sheen) podrían centrarse más en su núcleo narrativo y desarrollarlo no tan apresuradamente.

El resultado en cambio es una narrativa fragmen-taria que, más allá de ser correcta y de más intere-sante, deja una sensación de relato apresurado, de no poder empatizar del todo con las nuevas situacio-nes y personajes que aparecen en la historia. El úni-co con el que realmente sucede esto, y porque es la figura que guía a toda la historia, es con el personaje de Johnny. No nos preocupa si su alumno se ahoga o si Greg Stillson hará volar a todos por los aires. Nos preocupa Johnny, la pérdida de cinco años de vida,

Page 57: The 13th Número 20

57

la soledad al no estar con su amada, la vida que le fue robada y que por más vidas que salve o tragedias evite, nunca podrá recuperar.

Lo sobrenatural deja lugar al factor más humano de la historia y allí, entre tantas visiones y escalo-

friantes shocks visuales, es donde la empatía y el dolor hallan su lugar. Quizás sin poder compartirse con nadie, pero atrapado en una suerte de bola de nieve de cristal desoladora donde podemos observar la cruda vida de Johnny en un crudo invierno.

Page 58: The 13th Número 20

Fan service

[ Por José Luis Lemos ]

“Un tipo delgaducho me pidió que le firme un pa-pel en blanco, pero no le alcanzó con esto y a los gritos me decía si podía sacarse una foto conmigo. Le dije que sí, y luego me pidió que le firme la foto. Vi que tenía un lápiz especial, para que la fotografía no se estropee, y me di cuenta que había hecho esto antes, porque es imposible escribir con un marca-dor común sobre una Polaroid sin que se destruya. Y le dediqué la foto: `mis mejores deseos para Mark Chapman’. Sí, era el mismo tipo que asesinó a John Lennon. Y en el transcurso del diálogo se describió como mi fan número 1”.

Este suceso vivido por Stephen King fue uno de los disparadores que lo llevaron a escribir Misery, una idea que en realidad se le ocurrió en sueños, mientras viajaba en avión. Pero aunque muchos de sus lectores pusieron el grito en el cielo con la his-toria del escritor torturado por su fan número uno, quien se niega a aceptar que su ídolo está cambiando de estilo (¿se habrán sentido identificados, quizás?) lo cierto es que hay temas más profundos en juego.

Durante 1987, año en que además de escribir

Misery también terminó su novela de ciencia ficción Los Tommyknockers, King estaba pasando por una de las peores etapas de su vida. En el pico de su al-coholismo y adicto a cualquier sustancia que pasara por sus manos, volcaba sus miedos al papel y trans-formaba a los Tommyknockers y a la enfermera Annie Wilkes en una metáfora de sus adicciones: la misma enfermera que le había salvado la vida y que lo calmaba, también le daba pesadillas y le infligía terribles dolores. Paul Sheldon necesitaba a Wilkes, aun cuando sabía que tarde o temprano lo iba a ter-minar matando. El carácter personal de esta novela corta para los parámetros de king (300 páginas y monedas) hizo que el escritor no pusiera en venta los derechos para su adaptación cinematográfica, temiendo que el film no estuviese a la altura de sus pretensiones. Solo accedió a hacerlo luego de que Rob Reiner le ofreciera hacerse cargo del traslado de Misery a la pantalla grande, y con la única condición de que sea él quien la dirija, pese a que el director propuesto por Reiner era Barry Levinson.

Rob Reiner venía con dos grandes éxitos en sus es-

Page 59: The 13th Número 20

59

paldas, el drama Cuenta conmigo (también basada en un cuento de King), y la comedia Cuando Harry conoció a Sally. Misery iba a significar su primera entrada al género de terror, y también sería la última. Lo cual es una lástima, ya que el film que nos ocupa es uno de los ejercicios de suspenso más efectivos que nos haya dejado la década del noventa, un tour de force bestial al que le basta una casa y dos personajes para mantenernos tensionados hasta poco antes de los créditos finales. No hay elementos sobrenatura-les, como tampoco los había en Cuenta conmigo, y esa quizás sea una de las razones por las cuales Reiner accedió sentarse en la silla de director. Pero sí hay monstruos. ¿De qué otra manera se puede des-cribir al personaje interpretado magistralmente por Kathy Bates? Annie Wilkes, enfermera, aficionada a las novelas rosa y asesina de niños, es uno de los personajes más temibles creados por King y está allí, al lado de It, de George Stark y de Jack Torrance. Y en la novela es incluso más temible: Annie no golpea al escritor cautivo con un martillo, sino que le corta un pie a hachazos para luego quemarle la herida. Además, le amputa un pulgar a Paul Sheldon con un cuchillo eléctrico y remata al sheriff Buster pa-sándole una cortadora de césped por encima. ¿Se imaginan algunas de estas escenas en los clips de nominaciones de los Oscar? Fue Reiner quien le pi-dió a William Goldman (guionista de films como Marathon Man y encargado del guión) que estos de-talles se suavicen o directamente desaparezcan en el film, aunque éste no estaba del todo de acuerdo. Y lo cierto es que habrá que darle la razón al director: las miradas de Kathy Bates y los constantes cambios de tono en su voz son suficientes para convencernos de su monstruosidad.

No deja de ser irónico que Annie Wilkes, siendo una fanática de la literatura al estilo Jane Austen y detractora del uso de malas palabras (“¡he didn’t get out of the cockadoodie car!”) a la hora de ejercer vio-lencia no tiene ningún prurito. ¿Es acaso una res-puesta burlona de King a los que cuestionan a sus novelas por ser violentas y malhabladas? No menos irónico es que Paul Sheldon está pasando por un proceso inverso al de King: mientras Sheldon quiere

dejar la literatura rosa por otra más cruda, el autor de Cementerio de animales estaba tratando de ampliar sus horizontes con novelas como The Body, que ins-piraría a la antes mencionada Cuenta conmigo

Antes de que James Caan personificara a Sheldon, hubo muchos otros actores que declinaron la ofer-ta, entre ellos Michael Douglas, Dustin Hoffman, Richard Dreyfuss, Robert de Niro, Al Pacino, Gene Hackman, Robert Redford y William Hurt. Sí, los productores no se andaban con chiquitas. Si bien uno se pregunta cómo hubiera sido Misery con un Pacino o un De Niro, el irónico y sarcástico Paul Sheldon de James Caan parece haber sido escrito a su medida. El hecho de que su personaje esté postra-do la mayor parte del film, con la dificultad gestual que ello implica, no hace más que acentuar la destre-za interpretativa del querido Sonny Corleone, quien ya se había cruzado con Kathy Bates en un film del mismo año: Dick Tracy.

Menos justificado es el papel de Lauren Bacall, que parece estar en el film solo para que los productores pongan en el poster su nombre y ampliar el espectro de público. Richard Farnsworth, por su parte, inter-preta al sheriff Buster como si estuviera haciendo una audición para Fargo y corre la misma suerte que Scatman Crothers en El resplandor. Moraleja: si es-tás en una historia de Stephen King y se te ocurre ir a rescatar a alguien aislado por una tormenta de nieve... NO VAYAS.

Otro de los talentos que dejaron su huella en el film fue Barry Sonnenfield. Un año antes de pasarse a la dirección con Los locos Adams (y muchos an-tes de su consagración definitiva con Hombres de negro), Sonnenfield aún era mayormente conoci-do por ser el director de fotografía de los hermanos Coen, con quienes ese mismo año estaba rodando Miller’s Crossing. El estilizado trabajo de cámara que Sonnenfield aportó a los Coen también se deja ver más sutilmente en Misery, con una cámara que se niega a quedarse quieta por mucho tiempo y que nos ofrece infinitos puntos de vista para que el recorrido por la casa de Annie Wilkes sea siempre distinto.

Aunque hubo muchos films basados en la obra de Stephen King que merecían ganar una estatuilla

Page 60: The 13th Número 20

(The Shawshank Redemption y Cuenta conmigo, por poner solo dos ejemplos) Misery es la única que os-tenta tal galardón. Kathy Bates ganó merecidamente el Oscar a mejor actriz principal, tal vez porque en la versión fílmica no amputaba pies a hachazos, y volvió a interpretar a un personaje del escritor de Maine en la menos memorable Dolores Clayborne. En cuanto a King, no fue un fan quien lo dejó postra-do y con los huesos destrozados, sino una camioneta

que se lo llevó por delante, tras lo cual, al igual que Paul Sheldon, pudo sobrevivir. Sin embargo, luego de la publicación de Misery, uno de sus fans número uno entró a la fuerza a su mansión con un ejemplar del libro afirmando que King lo había plagiado. La policía intervino y King se salvó de probables marti-llazos de un probable Chapman, además de usar este suceso como punto de partida de otro de sus relatos. Pero esa, diría Conan, es otra historia.

Page 61: The 13th Número 20

61

¿Realidad filmada o ficción registrada?

[ Por Nicolás Ponisio ]

El documental llevado a cabo por Robert Flaherty no se destaca por captar la vida de una familia de esquimales a comienzos de 1920, de hecho poco de eso hay en el film, sino por crear un gran ensayo narrativo y de género. Mucho se le criticó a Flaherty por manipular el metraje de Nanook of the North, indicándole a los "actores" qué tareas realizar, cómo comportarse o incluso mostrando trabajos como la caza de peces que ya estaban muertos previamente a filmar. Sin embargo todo documental es manipu-lable y a fin de cuentas lo que el espectador termina viendo es lo que el director quiere que vea, dándole el ritmo que quiere y organizando las secuencias de imágenes a su antojo. Lo más que se puede lograr es un acercamiento a la realidad y en ese sentido Flaherty cumple.

Por más que para entonces los esquimales no vi-vían en iglús o no se comportaban primitivamente, el fin del director era captar la esencia del mítico esquimal y que antes solo había sido captado por artículos y algunas que otras fotografías. No solo lo logra sino que también entiende que para mantener

interesado al público no basta con mostrar las tareas diarias de los esquimales, se necesita una historia, lograr entrar en ella y vivir la experiencia.

Así es como Nanook pasa del suspenso a la hora de cazar unas focas a una secuencia cómica de él ju-gando con su hijo y de eso a presenciar el peligro de perros atacando. Todo en un orden narrativo lineal acompañado de variaciones de planos con la cáma-ra la cual no permanece absolutamente estática y le brinda mayor ritmo al film. El poderío ficticio plas-mado en la realidad y viceversa.

Page 62: The 13th Número 20

EL ESCRITOR SERIAL

Page 63: The 13th Número 20

63

RIGET:El horror de muchos... un hospital

Si por algo es conocido Lars von Trier es por sacu-dir al público a través de la provocación. Sea a tra-vés de sus films como de sus comentarios a la pren-sa. La polémica y controversia siempre están de su lado... y la mini serie Riget, co-creada junto a Morten Arnfred, no es la excepción. Si a comienzos de los noventa E.R. Emergencias hacía gala de las mejores mentes médicas yanquis acompañada de elementos telenovelescos, Riget lograba todo lo contrario expo-niendo la ineficacia de los médicos daneses y man-chando las relaciones triviales entre los personajes con un tono turbio y gore ofrecido por las tramas so-brenaturales en tan solo dos temporadas de cuatro episodios cada una.

Otro tipo de "manchas" o marcas son ofrecidas por medio de la fotografía que se caracteriza por sus tonos sepias, los cuales dotan constantemente a la imagen de un aura fantasmal y que también conta-mina los blancos característicos de un hospital (pasi-llos, guardapolvos, barbijos). El color blanco, símbo-lo de pureza e inocencia es apartado por tonalidades

anaranjadas o rojizas denotando la contaminación, el mal que invade al lugar, a quienes residen allí e invadiendo con horror el hogar de los espectadores.

A pesar de tener un desarrollo algo lento para los parámetros de entretenimiento televisivo que hay hoy en día, la creación de von Trier y Amfred no ha envejecido con el paso del tiempo. Su vitalidad se encuentra sobre todo en el tono de pesadilla que in-vaden al hospital y que aún alimenta las pesadillas de quienes lo presencian. Imágenes como las sub-jetivas fantasmales o la deformidad monstruosa de un bebé sobrenatural (interpretado por Udo Kier, un viejo amigo de la casa von Trier), son horrores nunca antes encontrados en la televisión.

Esos inquietantes momentos de pesadilla rozan tal genialidad que incluso despertó la atención del maestro del horror Stephen King. El escritor, cau-tivado por Riget, decidió adaptarla en 2004 (diez años después de su primera temporada) para el mer-cado estadounidense con trece episodios y la titu-ló Stephen King’s Kingdom Hospital. Cambiando

[ Nicolás Ponisio ]

Page 64: The 13th Número 20

ciertos aspectos de la trama, uno de los cuales in-cluye a un oso hormiguero gigante, y trasladando al hospital de Suecia a la querida Maine de King, la adaptación resulta ser fiel al material original pero perdiendo en el viaje de Suecia a Estados Unidos un poco del particular horror danés.

Riget irrumpió en pantalla como un claro cambio en los productos televisivos, cargado de crítica so-cial, religiosa y encargándose de alejar al especta-dor a través de la imagen con la utilización de sal-tos de eje y cortes abruptos que más tarde von Trier seguiría utilizando en films como Dogville (2003) y Antichrist (2009), éste último su mejor film hasta la fecha. Recursos que pueden ser chocantes pero que al fin y al cabo no hacen más que invitar al es-pectador a meterse con mayor intriga en la historia, ya que la inquietud que genera tanto visualmente

como de forma narrativa lo atrapa al espectador aún más, provocando como resultado un efecto contra-rio a lo que generalmente logran este tipo de ele-mentos distantes.

Claramente la serie bebe mucho del éxito y quie-bre televisivo que resultó unos años antes Twin Peaks. Ambas series también tuvieron dificultades en sus segundas temporadas, perdiendo un poco el rumbo de la trama y centrándose en subtramas poco interesantes. Entre la primera y segunda temporada de Riget pasaron tres años y al haber sido cancelada posee un final inconcluso al igual que la misteriosa investigación del agente Cooper. Pero más allá de eso, Riget supo abrirse su propio camino y explorar con mayor éxito otros lugares a los que la serie de David Lynch y Mark Frost, desafortunadamente, no pudo llegar.

Page 65: The 13th Número 20

65

Page 66: The 13th Número 20
Page 67: The 13th Número 20

67

EN CONCIERTO

Page 68: The 13th Número 20
Page 69: The 13th Número 20

69

MARRTE ATACA

[ Por Gabriel Rojo ]

Por segunda vez en dos años consecutivos, Johnny Marr se presentó en Niceto ante una apasionada au-diencia que coreó casi todos los riffs de guitarra, te-clados y hasta, insólitamente, las partes orquestales del clásico de Electronic “Getting Away With It”. Si bien la mayor parte del público probablemente asis-tió al show para experimentar esa sensación de catar-sis tan particular de los temas de The Smiths, temas nuevos como “Easy Money” fueron recibidos con una intensidad asombrosa. Y es que es especialmen-te notable que, al contrario de la mayoría de sus con-temporáneos, Marr realice un set compuesto prin-cipalmente por material editado en los últimos tres años. Seguramente este es uno de los motivos por los que se mantiene tan dinámico, vibrante y evidente-mente a gusto con cada minuto de lo que hace.

Su primer disco solista, The Messenger (2013) fue muy bien recibido por prácticamente todo el mun-do, no sólo por su calidad sino también porque sig-nificó un resurgimiento de la visibilidad y actividad de Marr, quien finalmente empezó a realizar giras por su cuenta, en las que no sólo cubrió obras de

JOHNNY MARR en Niceto, 17 de junio de 2015

toda su carrera incluyendo a The Smiths e incluso Electronic, sino que también los temas de su disco brillaron probablemente más que en sus versiones de estudio. Los Argentinos pudimos evidenciar esto en Abril del 2014, cuando el músico se presentó por partida doble en el festival Lollapalooza (show inmor-talizado en el packaging del disco Playland) y en su primer show en Niceto.

Pero el Johnny Marr que se presentó nuevamen-te en Buenos Aires en Junio del 2015 ya no fue exac-tamente el mismo, al contar con un nuevo disco so-lista en su discografía, Playland (editado a fines del 2014,) donde la musicalidad de las letras y su corre-lación con las partes instrumentales estuvo mucho mejor lograda, al punto que Marr finalmente logró establecer una voz lírica propia bastante única e in-teresante: la de un rockero juvenil en aspecto y pen-samiento (a pesar de sus 51 años), pero sabio por la experiencia ganada, que critica a la sociedad de una forma simultáneamente comprometida y distante, y a pesar de todo no completamente desesperanzada.

El show abrió con el estridente tema que da nom-

Page 70: The 13th Número 20

bre a su nuevo álbum, una montaña rusa en formato de canción de Rock. Otros puntos álgidos de Playland representados fueron la vertiginosamente autobio-gráfica “25 Hours”, la apertura “Back in the Box” y la excelentemente armada balada “Candidate,” pro-bablemente su mejor canción solista hasta la fecha, dotada de una deliciosa ambigüedad que hace que el oyente no termine de convencerse acerca del tono de la canción (¿es esperanzadora, irónicamente crítica, o ambas cosas a la vez?)

Incluidos en el set estuvieron también varios temas de The Messenger como “The Right Thing Right”, “Upstarts” y la deliciosamente melódica “New Town Velocity”, ya recibidos como clásicos. A los temas de los Smiths ya interpretados el año anterior y que no dejan de causar desenfreno en el público (“Panic”, “Bigmouth Strikes Again”, “Stop me…”) se sumó el debut en el país de “The Headmaster Ritual.” La au-

diencia vivió esta crónica de la brutalidad escolar del Manchester de los 70s como si la hubiesen vivido en carne propia – y a esta altura, con la música de los Smiths acompañándolos durante tantos años, esto es hasta un punto cierto y definitivamente genuino.

El clímax del show se dio con una versión “coral” de “There’s a Light That Never Goes Out” incluso más emotiva que de costumbre. A esto le siguió un encore en el cual Johnny incluyó otra novedad: un cover fiel del clásico Blues-Rockero de Depeche Mode “I Feel You,” grabado hace poco para el Record Store Day.

Es natural que el fan añore a los Smiths y recla-me una reunión, pero si vamos a los hechos, tanto Morrissey como Marr se encuentran en muy buenos momentos de sus carreras, haciendo lo que disfrutan a su manera y sin sucumbir enteramente a la nostal-gia. ¿Qué más se puede pedir?

Page 71: The 13th Número 20

71

Page 72: The 13th Número 20

PURA MELOMANIA

Page 73: The 13th Número 20
Page 74: The 13th Número 20

THE 13THSIXTIES ELEVATOR

Page 75: The 13th Número 20

75El día que electrificaron la tierra

[ Por José Luis Lemos ]

“Electrifiqué a una mitad de la audienciay electrocuté a la otra.”Bob Dylan

El set duró poco más de 15 minutos. Solo se tocaron 5 temas, y gran parte del público abucheó a los intérpretes luego de oirlos. Sin em-bargo, la presentación de Bob Dylan en el festival de folk de Newport aquel 25 de Julio de 1965 cambió la música por siempre, o al menos el concepto tradicional del género. No era la primera vez que Dylan se presentaba allí; de hecho lo venía haciendo desde 1963 con grán éxito y el público aficionado al festival lo veía prácticamente como una espe-cie de profeta que iba a salvar el folk y ,tal vez, el mundo ¿Como iban a saber ellos que años después terminarían gritándole a la cara “Judas”?

Todo había comenzado un día atrás, -en el marco del mismo festival.- con la presentación de la Paul Butterfield blues band. Anunciados con desdén a una audiencia acostumbrada a los intérpretes folk más tra-dicionales (guitarra acústica, armónica y poco más), pese a que trans-gredían tal dogma con su formación puramente eléctrica- con Mike Bloomfield en guitarra.- no suscitaron polémica alguna entre los oyen-tes. Entre el público se encontraba el propio Dylan quien, irritado ante

Page 76: The 13th Número 20

el trato condescendiente que el organizador del fes-tival tuvo hacia la banda, decidió electrificar su lista de temas en forma de protesta. Contaba con menos de 24 horas, ya que su presentación oficial estaba planeada para el dia siguiente, y a tal efecto reclu-tó a cuatro integrantes de la Paul Butterfield band y a Al Kooper, con quien ya había grabado un single editado apenas 4 días antes: Like a Rolling stone. Ensayaron juntos esa misma noche algunos de los temas que iban a interpretar, incluido el nuevo sin-gle y una versión rabiosa de Maggie´s farm.

La primera reacción de los presentes no fue indig-nación, sino sorpresa. Dylan subía al escenario con una Fender Stratocaster y lo secundaba esa banda de rock que el día anterior habían recibido con despre-cio. Peter Yarrow –miembro del trío folk Peter, Paul and Mary- ofició de maestro de ceremonias y anun-ció: “Damas y caballeros, la persona que subirá al escenario tiene muy poco tiempo…y su nombre es Bob Dylan.” Pero lo que tenía poco tiempo era el gé-nero folk tal como se conocía. Los primeros acordes de Maggie’s farm despertaron abucheos. ¿Guitarras eléctricas? ¿En un festival de folk? Era como si a un

músico punk se le hubiera ocurrido comenzar un show tocando el violín. Fue suficiente para desper-tar la furia del público, quienes inmediatamente se dividieron en dos grupos: los que festejaban el atre-vimiento de Dylan y su arrojo al sepultar años de tra-dición, y aquellos que no podían concebir que el mis-mo tipo que años antes los había hecho llorar con Blowin’ in the wind ahora los hubieran traicionado. Los electrificados y los electrocutados. La leyenda cuenta que Pete Seeger - emblema de la canción de protesta y una de las mayores influencias de Dylan- desde un costado del escenario pedía un hacha para cortar el sonido, enfurecido por el sacrilegio que es-taba presenciando. En este punto conviene detener-se, ya que las versiones varían como si el festival de Newport fuese el asesinato de JFK. Pete Seeger afir-mó muchos años después que es cierto que quiso cortar el sonido, pero que no se debía a la electrifica-ción de Dylan, hecho que a el no lo había escandali-zado. No, la razón era que la distorsión no permitía escuchar bien lo que Bob estaba cantando. Dado que el mensaje era lo más importante en este tipo de mú-sica, era un crimen que su voz no llegara al público

Page 77: The 13th Número 20

77adecuadamente, perdido en una maraña de ruido. Quienes asistieron a aquella presentación históri-ca también sostienen que en realidad abucheaban la mala calidad del sonido y el breve setlist que pre-sentó Dylan, siendo que otros artistas llegaban a es-tar una hora sobre el escenario. El hecho de que el día anterior la performance eléctrica de Howlin’ wolf había sido bien recibida respalda esta teoría.

Dylan interpretó dos temas más con su formación rockera: la flamante Like a Rolling stone y Phantom engineer, versión primitiva de It Takes a lot to lau-gh, it takes a train to cry, que luego aparecería en el clásico Highway 61 revisited. Luego de este set arro-llador, dejó el escenario ante el desconcierto de to-dos, incluido el propio Peter Yarrow, quien intenta-ba calmar las aguas diciendole al público que “Bob seguro tiene un par de melodías más… no es cierto ,Bobby?”. Un poco a regañadientes, Dylan regresó y advirtió que el tipo de armónica que el había pedido no estaba allí. Le pidió entonces al público una armó-nica en E, tras lo cual decenas de esos instrumentos cayeron sobre el escenario. Interpretó solo dos te-mas más ,ahora en formato acústico: la emblemáti-ca Mr tambourine man –que un par de meses antes había sido electrificada por The Byrds- y It´s all over now, baby blue, que significó la despedida de Dylan al Festival folk de Newport por más de 37 años.

Luego de este ¿desafortunado? suceso, el folk había cambiado para siempre. Con la edición de Highway 61 revisited, la osadía estaba en boca (y oídos) de to-dos, aun cuando las emisoras radiales se negaban a pasar Like a Rolling stone por su extensa duración para los cánones de la época y su sonido “estriden-

te”. La electrificación del género, un paso que ya ha-bían dado The animals en 1964, con su versión de House of the rising sun, fue la primera de muchas innovaciones de la mano de artistas como Donovan, Jefferson Airplane y Buffalo Springfield, quienes les sumaron a las nuevas sonoridades la influencia de la recién llegada psicodelia, transformando las can-ciones de protesta originales en composiciones más intrincadas y cercanas a la fantasía

Durante la gira de presentación de Highway…a mediados de 1966, volvieron a caer sobre Dylan acusaciones de traición por su reciente conversión al rock n’ roll. Mientras tocaba dicha canción en el Free Trade Hall de Manchester, Inglaterra, alguien entre el público le espetó “Judas!”. La respuesta de Dylan fue tan breve como concisa: “No te creo,eres un mentiroso.” Luego se dirigió a la banda y dijo: “Tóquenla más fuerte que nunca!”. Ese fue su últi-ma enfrentamiento con los puristas del folk.

Si bien no hay lanzamientos oficiales del breve con-cierto que Dylan dio en el festival de Newport, es po-sible encontrar versiones piratas con calidad de soni-do aceptable. Entre ellos está Live at the Newport folk festival, donde además de los cinco temas interpreta-dos por Dylan podemos oir las canciones de la Paul Butterfiel’s blues band, incluyendo una versión de estudio de Maggie’s farm que data de 1966. Tambien hay un soundtrack no oficial del documental The other side of the mirror: Bob Dylan at the Newport folk festival (Murray Lerner, 2007), que registra las tres presentaciones del cantautor en Newport has-ta 1965. Dos buenas razones para electrificarse…o electrocutarte si pertenecés a la otra mitad.

Page 78: The 13th Número 20

Extracciones deun paisaje divino

[ Por DIego Centurión ]

Siempre me sentí atraído por los aires sonoros provenientes del sello 4AD, desde bandas como Cocteau Twins, Dead Can Dance, The Wolfgang Press, Pixies, y si bien la lista no es interminable, es extensa. Pero una enigmática banda que siempre me despertó las más dulces simpatías fueron los Dif Juz, sacando las anteriormente mencionadas que se llevan todos los aplausos.

“Extractions” es el tercer y último álbum de estu-dio, grabado y mezclado en abril de 1985, producido por Robin Guthrie.

Dif Juz fue un cuarteto casi instrumental que duró tan sólo seis años, creando un singular sonido post rock, con aires salpicados de la sonoridad de Durutti Column, con mucho ambiente etéreo y por momen-tos paisajes difuminados, con mucha melancolía.

Uno de los momentos más luminosos es sin lugar a dudas el track cuatro “Love Insane”, con la bella voz de Elizabeth Fraser de los Cocteau Twins. Pero tam-bién a la banda escocesa la tenemos en la produc-ción de Robin Guthrie, logrando la mayor expresión etérea y cristalina del álbum. Marcando la estrecha relación entre Dif juz y Cocoteau Twins agregamos a Simon Raymonde quien dijo que por esa época los Dif Juz era la mejor banda en vivo. Más tarde (un año más tarde) esta hermandad se vería reflejada en algún pasaje de “Victorialand” de los Cocteau Twins en 1986.

Dif Juz logra mareas de sonidos simples, armóni-cos, que bañan un cielo de veloces nubes blanqueci-nas, disipando al sol de manera intermitente.

Los hermanos Dave y Alan Curtis crean corrientes con sus guitarras, mientras que Gary Browley, con su bajo, va llenando el cauce del río rítmico creado por Richard Thomas, quien cuando no toca la bate-ría crea imágenes desde algún instrumento de vien-to, que embellecen de colores la pintura creada por las guitarras.

La canción perfecta es “Love insane”, pero la ar-

quitectura sonora de esta banda crea momentos que roza un jazz etéreo y difuminado. Como su nom-bre lo oculta (“Different Jazz”). “Crosswinds”, “A Starting Point”, “Silver Pasagge”, “Echo Wreck” son canciones que muestran la bella mixtura de las guitarras en un andar que da velocidad al ál-bum y luminosidad. Canciones mágicas como “The Last Day”, “Marooned” o “Two Fine Days (And A Thunderstorm)”, nos aportan esa cuota esperada del mejor 4AD ensoñador.

“Extractions”, en su versión original de nueve canciones, años más tarde le agregaron cuatro can-ciones más innecesarias, no porque tengan baja calidad, simplemente es que la duración se hace ex-tensa, en cambio la cantidad original es la correcta, nueve canciones.

“Extractions” carga en su genialidad sonora un paisaje divino y por momentos difuso, pero con una gran brillantez.

Dif Juz – Extractions (1985)

Page 79: The 13th Número 20

79El perfil más orgánicode la banda

[ Por Erick R. Vieyra ]

Cuando Clan Of Xymox aparecen en escena la mú-sica electrónica obscura ya se encontraba en pleno auge y próxima a sufrir una segunda ola que traería una modernización en las formas de hacer sonido obscuro. Bauhaus y los que en su momento hicieron el afterpunk habían sembrado la primera transición del punk rock al gótico, después, para el inicio del segundo tercio de los 80s explota el gótico trayendo a bandas que hoy son legendarias como Sisters Of Mercy o Clan Of Xymox.

El disco homónimo del grupo se publica a la par con esa segunda ola de la música obscura donde se abandona el estilo desgarbado del punk y se abre puerta a las composiciones estilo balada, letras que básicamente hablaban de romance y aspectos exis-tencialistas, se abandona la política y la narración de la vida cotidiana y llegan los temas etéreos don-de Clan Of Xymox logra rápidamente posicionarse.

En este primer disco el escucha encuentra ocho temas (las reediciones integran más) donde se mezcla la música de club, el EBM y el Dark Wave. Actualmente, así como ocurre con Sisters Of Mercy, los tracks pueden resultar aburridos dado que mu-chos otros grupos hicieron una calca de ese estilo y ya es muy común escucharlo, pero en su momen-to fue algo que contribuyó a la revolución que hubo en la música hasta entrados los noventas, revolu-

ción que terminó cuando el rock alternativo vino a dominar la escena con grupos prefabricados como Nirvana y tantos otros.

El disco se deja apreciar como un material hecho por artistas, tanto en su base instrumental como en sus letras se deja ver que Clan Of Xymox realmente tenían muy desarrollado el sentido de la belleza en la música, basta leer sus letras y prestar atención al jue-go de instrumentos que desde el primer track hasta el octavo es capaz de impresionar. En mi opinión, la más profunda del disco es Equal Ways, track inspi-rado en la filosofía existencialista donde se trata la reafirmación de las causas por las cuales un artista decide a diario su forma de vida.

Como recomendación extra, no pierdan la sesión que John Peel hizo con Clan Of Xymox. Ese es el dis-co donde verán el perfil más orgánico de la primera época del grupo.

Clan Of Xymox - Clan Of Xymox (1985)

El paso crucial

[ Por Diego Centurión ]

Cuando Clan Of Xymox aparecen en escena la mú-sica electrónica obscura ya se encontraba en pleno

The Wolfgang Press - The LegendaryWolfgang Press and other Tall Stories (1985)

auge y próxima a sufrir una segunda ola que traería una modernización en las formas de hacer sonido obscuro. Bauhaus y los que en su momento hicieron el afterpunk habían sembrado la primera transición del punk rock al gótico, después, para el inicio del segundo tercio de los 80s explota el gótico trayendo a bandas que hoy son legendarias como Sisters Of Mercy o Clan Of Xymox.

El disco homónimo del grupo se publica a la par

Page 80: The 13th Número 20

con esa segunda ola de la música obscura donde se abandona el estilo desgarbado del punk y se abre puerta a las composiciones estilo balada, letras que básicamente hablaban de romance y aspectos exis-tencialistas, se abandona la política y la narración de la vida cotidiana y llegan los temas etéreos don-de Clan Of Xymox logra rápidamente posicionarse.

En este primer disco el escucha encuentra ocho temas (las reediciones integran más) donde se mezcla la música de club, el EBM y el Dark Wave. Actualmente, así como ocurre con Sisters Of Mercy, los tracks pueden resultar aburridos dado que mu-chos otros grupos hicieron una calca de ese estilo y ya es muy común escucharlo, pero en su momen-to fue algo que contribuyó a la revolución que hubo en la música hasta entrados los noventas, revolu-ción que terminó cuando el rock alternativo vino a dominar la escena con grupos prefabricados como Nirvana y tantos otros.

El disco se deja apreciar como un material hecho por artistas, tanto en su base instrumental como en sus letras se deja ver que Clan Of Xymox realmente tenían muy desarrollado el sentido de la belleza en la música, basta leer sus letras y prestar atención al jue-go de instrumentos que desde el primer track hasta el octavo es capaz de impresionar. En mi opinión, la

más profunda del disco es Equal Ways, track inspi-rado en la filosofía existencialista donde se trata la reafirmación de las causas por las cuales un artista decide a diario su forma de vida.

Como recomendación extra, no pierdan la sesión que John Peel hizo con Clan Of Xymox. Ese es el dis-co donde verán el perfil más orgánico de la primera época del grupo.

Convirtiendoel espacio en tiempoThe Verve - A Northern Soul (1995)

[ Por J. D. Daire Alujas ]

Disco poco conocido en general (sobre todo en Sudamérica), pero nada menos que puesto Nº 53 de los mejores álbumes de todos los tiempos, conside-rado así por Revista Q en aquella época. Esto último podrá ser sólo un dato de la causa, típica de la "cuan-tología" propia de los medios de prensa que inven-tan ránkings y formas de orientar el gusto masivo. Sin embargo, el disco en cuestión bien puede situar-se como un absoluto clásico desde su peso específico y desde una mirada retrospectiva, teniendo en cuen-

Page 81: The 13th Número 20

81ta la popularidad de Verve un par de años después.El proceso de concepción de este disco correspon-

de a un momento de éxtasis de la banda, donde ya han recorrido escenarios importantes, han recogido adeptos ya no solo en Inglaterra, y en el que dejan un poco atrás el formato más abstracto y jamming de su música y, sin mucho perjuicio de su sonido, herede-ro de la psicodelia y del space rock, lo perfilan hacia un formato más de canciones, donde confluyen tan-to las viejas influencias como las pretensiones más épicas. Incluso incorporan un par de baladas nota-bles, con lo cual definen en gran medida el camino que seguiría Aschcroft y la banda en sus composicio-nes a futuro. Una de ellas, History, sin duda es una de sus más trascendentes canciones, acompañada de un tremendo arreglo de violines, lo cual será un recurso distintivo y recurrente del posterior Urban Himns, así como de los discos solistas de Ashcroft. También es un momento complicado, pues durante la gestación de A Northern Soul se comienza a ma-nifestar el desgaste de la banda desde el núcleo crea-tivo, la tensión entre Aschcroft y Nick McCabe, pro-bablemente producto del propio choque entre sus genialidades y egos, lo cual detonó que a tres meses de lanzar el disco y sin haber conseguido el éxito pre-visto, la banda tuviera su primera separación.

En lo musical, es inevitable dar cuenta de las evo-

luciones presentes en el disco. La base rítmica y la elasticidad de las líneas de bajo tienen un aplomo y una firmeza de aparente simplicidad, que ofrecen la plataforma necesaria a las ricas y resueltas guita-rras de McCabe, haciendo gala de un sonido salvaje aunque pulcro, una soberbia expresada en cuerdas sumergidas en overdrives, delays y reverbs que será un sonido imitado hasta el cansancio hasta hoy. En McCabe están presentes la pastosidad y el grosor de las guitarras de Jimmi Page y Hendrix, con ciertos aires blues (Drive You Home, Life's An Ocean), pero disueltas en atmósferas, texturas y reverbs muy cer-canas a Gilmour y a toda la escuela shoegaze de la cual es contemporáneo. Y por su lado Ashcroft resol-viendo su rol de vocalista y frontman con una con-vicción propia de la experiencia y de quien ya conoce sus fortalezas y ha alejado sus límites en base a en-contrar su propia voz y su propio estilo, perfilándo-se ya como uno de los mejores vocalistas de los 90s.

Diría en definitiva, que es uno de los discos funda-mentales del rock inglés de los años 90. Sin querer ahondar en su impronta e impacto en la llamada co-rriente brit-pop, es un disco que trasciende por ser la antesala a uno de los discos más exitosos de la déca-da (Urban Himns) y por mostrar el proceso de re-or-denamiento de las partículas que componen la pri-mera etapa del grupo en función de llegar a su cenit.

El comienzo de la leyenda

Kyuss - “… And The Circus Leaves Town” (1995)

[ Por Pablo Ravale ]

Y se venía venir. 1995 fue el año elegido por Kyuss para poner fin a su trayectoria como banda insig-nia del Stoner-Rock. Nada más terminar de grabar el increíble “Welcome To Sky Valley”, en 1994, el baterista original y uno de los principales compo-sitores, Brant Bjork, abandona las filas del grupo. Justo él, que junto al guitarrista Josh Homme (hoy líder de los celebrados Queens Of The Stone Age) habían creado y propulsado el sonido único del fa-moso cuarteto de Palm Spring. Un sonido potente,

psicodélico, arrasador. En efecto, Josh se quedaba solo frente a la di-

rección musical de Kyuss, y eso le iba a permitir cra-near “… And The Circus Leaves Town”, álbum que el sello Elektra publicó para julio de ese año y que contaba nuevamente con el gurú Chris Goss tras las consolas.

Como obra, “… And The Circus Leaves Town” contiene todo lo que siempre se esperó de Kyuss, empero, y en comparación con las otras pla-cas, esta es mucho más madura y, en simultáneo, también más nostálgica (ya el título lo decía todo). Asimismo, el ansia de sacudir el avispero una última vez por parte de Homme y compañía, tuvo un claro

Page 82: The 13th Número 20

factor principal que fue el “nuevo” baterista: Alfredo Hernández. Aunque, ¿quién era Hernández? Para responder a dicho interrogante, tendríamos que re-montarnos varios años atrás; específicamente a los días de Yawning Man, banda ícono y germen gestor de lo que más de un lustro después se conoció en el mundo como Stoner-Rock o Dessert-Rock. Así las cosas, y con Hernández ahora formando parte de la alineación, los Kyuss se metieron de lleno a registrar la que fue su agridulce despedida.

En el aspecto técnico, Kyuss bien podría haber re-petido la fórmula de sus trabajos anteriores, no obs-tante, decidieron redoblar la apuesta innovando en su estilo y bajando el tono de la guitarra y ralentizan-do los tiempos. Sin embargo, “… And The Circus Leaves Town” no deja de ser apabullante. La diferen-cia es que, con respecto a “Welcome To Sky Valley”, en este los temas se hacen más cortos y los riffs más sobrios y minimalistas, sorprendiendo ya desde la primera escucha e innegablemente calando hondo en el oyente.

A todo esto, no he mencionado aún ni al impresio-nante John García en las voces, ni tampoco al desco-munal Scott Reeder en el bajo. Para empezar, John –quizás mi cantante favorito–, representa no sólo una de las gargantas más prodigiosas del género, sino también LA voz del Stoner (con esos tonos cru-dos y desesperados). En relación a Scott, qué decir que esas cuatro musculosas cuerdas no hayan habla-do por sí mismas: precisión, fuerza, contundencia… el bajista ideal.

De esta manera, entonces, los tambores de Hernández abren “Hurricane”, primer corte del ál-bum. Luego, el ritmo se acelera y ofrece el clásico bajo retumbante de Kyuss, soportando la brutalidad distorsionada de la guitarra de Homme. Entra “One

Inch Man”, pieza que nos ofrece un riff de tipo hip-nótico, con estribillo pesado y distorsión demen-cial. Pegadito llega “Thee Ol' Boozeroony”, una de-liciosa suite instrumental sólo al alcance de lo que Kyuss sabe dar como grupe. Más tarde irrumpe “Gloria Lewis”, un tema terroso y mala leche como pocos, el cual sirve de puente para desembocar en “Phototropic”, en mi opinión la más bella y emo-tiva de la placa, con un García que se deja el alma en el micrófono. Tras “Phototropic”, aparece “El Rodeo”, un temazo hecho y derecho, en el que los ri-ffs psicodélicos y machacantes vuelven a decir ‘pre-sente’. García, como es de esperar, épico de nuevo. “Jombo Blimp Jumbo” es otra gema instrumental que muestra el inmenso talento de Josh con la gui-tarra, quien suena como una especie de batido en-tre Jimi Hendrix y Tony Iommi. El álbum continúa con “Tangy Zizzle”, un tema que recuerda a la ban-da en la época del “Blues For The Red Sun”. “Size Queen”, por otro lado, es un corte que presenta un ritmo a medio camino entre el funk y algo parecido al reggae, una vez más construido sobre un riff obra de Homme. Un tema que muestra claramente la ex-pansión del sonido de Kyuss y que realmente es algo indescifrable. Para ir cerrando están “Catamaran”, composición original de Yawning Man, a la cual García le añadió una letra, y en la que banda fusio-na a la perfección potencia con melodía (¡los pelos como escarpas con esta canción!) El broche de oro es “Spaceship Landing”, una larga pieza (once minutos en total) como las de “Welcome To Sky Valley”, en la que los cambios drásticos de dirección y de estructu-ra muestran sin concesiones la grandeza de Kyuss.

En definitiva, un álbum hermoso, pero, por sobre todo, un maravilloso final para el legado de una ban-da que ya se ha vuelto de culto.

¡Larga Vida aThe Ramones!Ramones – Adiós Amigos (1995)

[ Por Rodrigo Debernardis ]

Décimo cuarto y último disco (a diferencia de mu-chos otros casos, esta vez la banda en cuestión sa-bía perfectamente que este iba a ser su último dis-co juntos, que la historia llegaría hasta allí) Adios Amigos (bueno, el título ya dice bastante, ¿no?) es un álbum que ha sido relegado dentro de la discogra-fía de Ramones; injustamente relegado agregaría, ya que contiene gloriosas canciones que, aunque no

Page 83: The 13th Número 20

83

El Último Gran Problema

Brian Eno - Another Day on Earth (2005)

[ Por Gabriel Rojo ]

Es indudable que, desde principios del nuevo si-glo, las computadoras han facilitado enormemente la creación y grabación de la música. Para Brian Eno, entonces, el “último gran problema” del músico son

las letras. Debido a esto, en el 2005 se embarcó por primera vez a realizar un disco de canciones desde el mítico Before and After Science de 1977 (excep-tuando la colaboración con John Cale Wrong Way Up de 1990 y el disco completo de 1991 A Squelchy Life, que por diversos motivos no salió a la luz hasta el 2014.) Para los fans de la música en general esto fue una gran noticia: después de todo, los cuatro dis-cos de Rock Alternativo de Eno de los 70s son uni-versalmente atesorados, incluso por aquellos que no estuvieron interesados en su (más extensa) produc-ción Ambient.

hayan quedado dentro de los “clásicos" de la banda, para los fans (entre los que me incluyo) representan un hermoso legado final.

Yendo a lo más específico, el disco, una perfecta continuación del gran Mondo Bizarro, de 1992 (no tomo en cuenta Acid Eaters, un álbum de covers de 1993) arranca con “I Don’t Wanna Grow Up”, una canción escrita por Tom Waits que pareciera haber-la compuesto especialmente para los Ramones. ¡El punk está vivo, señores!

Le sigue “Making Monsters For My Friends”, can-tada por el bajista CJ, quien se haría cargo de las vo-ces más adelante en “The Crusher” (04), “Creting Family” (08) y “Scattergun” (10). Ante esto quiero decir, está bien que CJ cante, no lo hace mal de he-cho, pero si canta él, es otra banda. En The Ramones, el cantante fue, es y será Joey, y cualquier otra voz siempre va a sonar desubicada, como forzada a es-tar ahí, sin convicción. En la mencionada “The Crusher”, por ejemplo, la melodía es incómoda has-ta que llega el coro, justamente la parte en donde en-tra Joey; ni hablar de “Creting Family”, una canción que nadie, pero nadie excepto su compositor (Dee Dee Ramone) podría cantar sin quedar en ridículo, y así suena en la voz de CJ.

A propósito de Dee Dee…estaría loco, nadie lo que-rría en la banda, pero en este disco, de los 13 tracks…aportó 6 !!! así que…un poco más de respeto con el recordado y querido Dee Dee.

Volviendo al disco, y volviendo a Joey…escuchen el track 05, “Life’s Gas” y díganme si no se les pone la piel de gallina, con esa voz única del gran Joey

Ramone !!!! o “She Talks To Rainbows” (12), uno de los cinco mejores temas de toda la discografía de Ramones. Una joya musical y una rareza a la vez dentro del clásico sonido hardcore/punk de la ban-da, con un tempo más ralentado y una interpreta-ción maravillosa del eterno e irreemplazable Joey (¡¡¡gracias Joey por habernos regalado tanto!!!)

El disco cierra con un tremendo track compuesto por Dee Dee, “Born To Die In Berlin”, otra gema, y una muestra ejemplar de cómo debe terminar la ca-rrera discográfica de una de las bandas más grandes de la historia.

¡Larga vida a The Ramones!

Page 84: The 13th Número 20

Another Day On Earth, sin embargo, está lejos de la estridencia, la extrañez y los desopilantes giros verbales de esos discos clásicos, e inevitablemente más cerca del Ambient. De todas formas, las me-lodías vocales, letras y rica instrumentalización lo vuelven su disco menos abstracto y más accesible en años. Eno no busca recrear glorias pasadas (algo consistente con toda su carrera) sino experimentar con letras para evocar sentimientos y descripciones sobre el rol del ser humano en el vertiginoso nuevo milenio. Esto es evidente desde la apertura “This”, donde Eno se cuestiona su lugar el mundo median-te un tapiz Electrónico con los marcados tintes de Gospel tan propios de sus trabajos vocales, sobre todo en estos últimos tiempos. A partir de ahí, temas como “And Then So Clear” y “Going Unconscious” son esencialmente bellísimas composiciones de Ambient vocal, mientras que “Caught Between” es una balada donde Eno suena prácticamente como su amigo David Bowie. “How Many Worlds” utiliza principalmente instrumentos acústicos, y su breve parte vocal cumple el rol que Eno define como “darle al cerebro una pista acerca de la temática de la can-ción”, ya que el protagonismo del tema se lo lleva una impactante sección de cuerdas.

El punto álgido del disco sigue siendo “Under”, un tema originalmente grabado para My Squelchy Life, tan bueno que Eno decidió usarlo aquí, 14 años después, en una versión prácticamente idéntica: una afirmación del individuo en medio de una tor-menta sonora, con algunas líneas verdaderamente épicas. El disco cierra con “Bone Bomb”, un esca-lofriante relato desde la perspectiva de un terrorista kamikaze, que logra ser completamente emotivo a pesar de (o quizás, debido a) estar narrado por una voz computarizada. En definitiva, un disco donde la principal característica de la obra de Eno, el vínculo entre lo intelectual y lo emotivo, aparece con menos filtros y de una forma que resultará disfrutable para casi cualquier público.Los dos cortes en directo de Wide Awake in America, muestran entonces lo que bien podría ser el resultado de todo ese proceso de ajuste que llevaría a Bad, una canción bastante dis-

creta en el contexto del LP, a convertirse en uno de los picks de los shows de la banda, canción con la cual darían su golpe definitivo en Live Aid, show me-diático de Bono mediante. A Sort Of Homecoming por otra parte, es una versión de la canción (grabada en vivo en sentido estricto pero sin la debida adre-nalina de un show, dado que se grabó en una prueba de sonido), que suena desprovista de todo su ropaje original de su versión de estudio, pero no así menos auténtica, lo que deja entrever lo que será el verda-dero arte de U2 en adelante, el de re-interpretarse a si mismos (y a otros) en vivo.

El lado B del EP contiene un par de outtakes del propio Unforgettable Fire, tal vez como souvenir sin grandes pretensiones, aunque a decir verdad, la can-ción Love Comes Tumbling, probablemente incom-prendida en la época, personalmente la considero una de las mejores canciones de U2 en los 80.

Teniendo en cuenta que lo que vendrá después será Live Aid, la gira Conspiracy Of Hope (junto a The Police, Lou Reed, Bob Dylan, entre otros), The Joshue Tree y todo el éxito mundial que trascendería como la época dorada de la banda, probablemente Wide Awake in America haya tenido algo de paso en falso, pero un paso que sirvió de avance, al menos.

Page 85: The 13th Número 20

85

Page 86: The 13th Número 20

QUÉ BEBER PARA ESCUCHAR MEJOR

Page 87: The 13th Número 20

87Phantasmagoria& Rusty NailThe Damned - Phantasmagoria (1985)

[ Por Max Wilda ]

En mi opinión no se puede escuchar un disco de The Damned sin introducir en nuestro cuerpo algo de whisky (ya sea por decisión o necesidad). Para esta ocasión me haré de un buen Scotch y un Drambuie (licor de origen escocés hecho a base whisky, miel y algunas especias como azafrán y/o nuez moscada) para mezclar en partes iguales y conformar el clásico neoyorquino de finales de os 50s: Rusty Nail. Nada más sensual que un saxo, diría Fausto Papetti (y bas-tante razón tendría), Street of Dreams comienza con una invitación sexy a un viento de cambio para la banda (sin Captain Sensible), melodías cuasi-fla-mencas, brasses pegadizos, teclas por doquier, ba-tería endemoniada de Scrabies, son el punto de par-tida para este álbum icónico. Se abre una tenebrosa puerta, una lograda guitarra de Roman (Jugg) (todo el disco), un hipnótico galopeo y las perfectas voces de David (Vanian) son los ingredientes de Shadow of Love para un tema al estilo Morricone, pero “ni-vel oscuro”. There´ll Come a Day, un tema más post-punk, saltarín pero manteniendo algunos fetiches de este rumbo diferente. Si el saxo era sensual, el Pipe Organ de la intro de Sanctum Sanctorum da el clima perfecto para esta cambiante y épica canción, donde las melodías vocales, el piano y mi Rusty Nail se mezclan perfectamente, hundiéndome de mane-ra placentera en la mitad de este disco. Co-autoría de Sensible en Is it a Dream, un tema más pop como Edward the Bear (con voces de Roman y con un bajo a lo Peter Hook, en la versión del single Grimly Fiendish), los cuales sin ser malos no dejan de ser lo

más débil del álbum. En el medio de estos anteriores encuentro a Grimly Fiendish (primer single), que no sé si es por el Rusty Nail, pero le encuentro un sabor a Madness, leve como el Drambuie pero marcado como el golpeteo de ese piano; raro pero excelente a la vez. El octavo track, The Eighth Day, ¿casuali-dad? No importa para este otro clásico post-punk. Termina mi segundo Rusty Nail junto con Trojans, último track, instrumental, interesante cierre para este álbum de 1985, un giro en Damned luego de la partida de Sensible y comando total de David, expe-rimental, atmosférico, coqueando con el Goth pero alegremente; gracias a que nunca dejaron de ser una banda de punk rock, y eso se nota en las letras junto con la irónica forma de mezclar algunos estilos. Un álbum fuerte pero con algo de dulzura en el fondo, como el Rusty Nail, catalogado por mucho tiempo como un trago de “viejos”, este disco con el tiempo también lo ha sido.

Qué más me queda, a un jóven-viejo cuarentón, que disfrutarlos como clásicos. ¡Salud!

Page 88: The 13th Número 20
Page 89: The 13th Número 20

89

Page 90: The 13th Número 20

La Casa al Mare | This Astro (EP)

Novel banda italiana con base en Roma, éste es su cuarto EP. La casa al Mare bucean en un bello shoe-gaze a lo My Bloody Valentine. Paredes de distorsio-nes elegantes al frente, que logran que la corriente no se detenga. Con acordes perfectamente superpuestos con el resto de los instrumentos. Uno logra sentirse en una casa frente al mar y disfrutar del sonido de las olas romper y esa inmensidad que nos aporta las mareas sónicas y elegantes, nos hace sentir surfista en la corrientes eléctricas de las guitarras. Pero tam-bién nos acomodamos frente al poniente sol, en las canciones como “CD Girl” y “This Astro”, en donde el dreampop hace un esbelto esfuerzo por encontrar

algo de calma que logra de manera magnífica. Este EP nos da la pauta de que cuando hay belleza en las composiciones, lo demás viene sólo.

Label: BandcampFecha: 01 de Mayo 2015

El concepto del nuevo álbum de esta iconoclástica agrupación de Música Contemporánea es a su vez sencillo y ambicioso: se les encargó a compositores alrededor del mundo que desarrollaran una pieza a partir de alguna grabación de campo ya existente, ya sean las máquinas de un casino, cantos autóctonos, ruidos de cosas cayendo, charlas o recitados. En pro-yectos de este estilo, a menudo el concepto es más atractivo que el producto final, pero la mayoría de los temas de Field Recordings no son sólo innovadores sino también altamente accesibles. La espectacular apertura de “Reel”, con una melodía aborigen a ca-pella acompañada por un ensamble de instrumentos percusivos y melódicos, hasta goza de cierta sensibi-lidad Pop. Varias piezas como “An Open Cage” (una musicalización de una charla del mítico John Cage) retoman la idea de Steve Reich de borrar las barreras entre el habla y la música. Reich mismo aparece en el

Bang on a Can | Field Recordings

Label: Cantaloupe MusicFecha: 12 de Mayo de 2015

disco, contribuyendo una de sus piezas más Ambient hasta la fecha. El álbum es extenso y no todos los te-mas funcionan bien (“Fade to Slide” y “Casino Trem” son poco más que ruidos azarosos,) pero en defini-tiva Field Recordings es altamente provocador, escu-chable y hasta celebratorio en su enfoque multicultu-ral y atemporal hacia el proceso creativo.

Page 91: The 13th Número 20

91

Upon Contact Reworked está conformado por una espaciosa, Minimalista pieza original para piano de Sanfilippo y seis reversiones de esta misma por dis-tintos artistas electrónicos emergentes (Francesco Giannico, Olan Mill, Leonardo Rosado, Jorge Haro, Quivion y Hior Chronik.) Al leer esta descripción uno se inclina a pensar que es simplemente un dis-co de remixes, pero termina siendo algo mucho más único: las pistas fluyen de tal manera que, en vez de presentar 7 versiones distintas del mismo tema, el álbum suena como una pieza única de 40 minu-tos. Cada artista mantiene las notas originales de Sanfilippo y añade sutiles arreglos Ambient/Glitch, no demasiado alejados del estilo de las colaboracio-nes entre Alva Noto y Ryuichi Sakamoto. De esta ma-

Bruno Sanfilippo Upon Contact Reworked

Label: BandcampFecha: 21 de Mayo de 2015

Pasan los años y la visión del mundo de Muse sigue siendo la misma: las autoridades son implacables y despiadadas, y el individuo debe hallar la forma de superar su condicionamiento cerebral, independi-zarse y reclamar el mundo. Simplista, pero cuenta con la ventaja de ser fundamentalmente verdadera. Si uno logra superar el cinismo, es difícil no conmo-verse con los falsettes de Matt Bellamy, por sobre sus quasi-sinfonías de Rock progresivo, cuando suplica a los gobernantes que le otorguen aunque sea algo de piedad (en “Mercy”), o cuando proclama a los cuatro vientos su independencia a espaldas de un discur-so de John Kennedy (en “Defector”): la música nos devuelve a un tiempo donde creíamos que el cam-bio sí era posible, y, por más adolescente que sue-

Muse | Drones

Label: Warner Bros. RecordsFecha: 05 de Junio de 2015

ne, nos recuerda que quizás sí lo es. Promocionado como una “vuelta a los orígenes” de Muse, luego de la experimentación electrónica y orquestal de los úl-timos discos, Drones en realidad vuelve a demostrar la prodigiosa variedad musical de la banda: abre con

nera, cada “remix” es en realidad simplemente un movimiento nuevo dentro de la progresión natural de la composición. En definitiva, un disco no sólo disfrutable para los fans del Ambient en general, sino también interesantísimo por su particular for-ma de enfocar la colaboración entre diversos artistas.

Page 92: The 13th Número 20

Con sus beats intensos pero suaves y su sensación fluida, envolvente y progresiva, es realmente muy fácil perderse completamente dentro de estos ricos paisajes sonoros, para luego retomar nuestras vidas diarias enriquecidos por haber experimentado, aun-que sea por un tiempo, un atisbo musical del futuro.

Tras el deliciosamente instrumental y psicodélico Further (2010), los Chemical Brothers se han toma-do cinco años para producir un álbum que es, para bien o para mal, un álbum típico del dúo: estridentes

The Chemical Brothers | Born in the Echoes

Label: Virgin EMI RecordsFecha: 17 de Julio de 2015

composiciones basadas más en ruidos que en melo-días, voces invitadas “cool” como Beck y St. Vincent, acercamientos leves al hip-hop, una sección inter-media instrumental, y una balada calma al final. El

Tras repasar toda su historia discográfica en los dos boxsets retrospectivos titulados History of the Future (seis discos y dos DVDs en total,) los pioneros del Ambient House regresan con una nueva produc-ción firmemente anclada en su raíces pero todavía con miras hacia adelante. El título de Moonbuilding 2703 no podría estar mejor reflejado en la música en sí: enteramente instrumental (exceptuando al deso-pilante monólogo breve que abre el disco,) el álbum realmente suena como una banda sonora para un documental sobre construcciones lunares emitido por la televisión del mañana. Aun con algunas fallas (cierta falta de melodía por momentos, y un final abrupto totalmente desprovisto de climax,) éste pro-bablemente sea el disco Electrónico del año, carga-do de todas las características esenciales de The Orb.

The Orb | Moonbuilding 2703 AD

Label: KompaktFecha: 19 de Junio de 2015

el Pop/Rock electrónico de “Dead Inside” y termi-na con una aria a capella, pasando por el impresio-nante opus de 10 minutos “The Globalist” (con una intro instrumental que es suena como una versión Western de Pink Floyd y luego culmina en una extra-polación del “Nimrod” de Elgar) y exabruptos Prog-

Rock como “Reapers”, que nunca dejan de demos-trar cierta sensibilidad Pop. En definitiva, un disco conceptual donde las obsesiones y fortalezas carac-terísticas de la banda se ven potenciadas hasta pro-porciones épicas.

Page 93: The 13th Número 20

93

Los trabajos de SPC ECO (banda de Dean García, ex Curve) me parecen muy interesantes, éste no es la excepción, aunque el efecto en la voz de Rose Berlin, en los dos primeros tracks ("Creep In The Shadows" y "Different Kind"), particularmente y es una opi-nión personal, me resulta insoportable e innecesa-rio. Pero el álbum empieza a crecer a partir del track 3 “Let It Be Always”, con un clima Portishead nos empieza a meter en un álbum por momentos subli-me. “Playing Games” nos regresa a Curve de mane-ra mágica. Pero en “I Won't Be Heard” el efecto “cur-veano” se hace presente más y corpóreo. “Meteor” es bella y etérea. “Breathe” es oscura y profunda. “The Whole World Shines” es mi elegida. La estática y ai-

Veruca Salt | Ghost Notes

Label: El Camino MediaFecha: 10 de Julio de 2015

problema no es sólo la falta de inventiva, sino que aun dentro de la fórmula las composiciones no son especialmente memorables: en “Just Bang”, por ejemplo, el título lo dice todo, mientras que “I’ll See You There” es básicamente una reversión pobre del clásico “The Private Psychedelic Reel.” Exceptuando al filler “Taste of Honey” (cuya característica más memorable es el zumbido de un mosquito que pa-rece haberse quedado atrapado dentro del tema,) la segunda mitad mejora. Los dos temas en los que colabora el saxofonista Colin Stetson son notables: “Reflexion” es puro groove plagado de melodías in-sólitas (pero melodías al fin y al cabo,) mientras que “Radiate” parece un Himno Nacional del futuro (con un pequeño tributo a Kraftwerk hacia el final.) “Wide Open,” la sutil balada pop cantada por Beck, es sorpresivamente emotiva y cierra al disco con dig-nidad. En definitiva, Born in the Echoes es un re-

reada “Under My Skin” nos eleva y el álbum la cierra “Sling Me Down” marcando un pulso lento pero bri-llante. Un trabajo cautivante, íntimo y etéreo.

torno a las raíces algo carente de sorpresas pero no completamente desprovisto de calidad.

Page 94: The 13th Número 20

La banda liderada por Guy Garvey ya tiene conti-nuación a su sensacional “The Take Of And Landing Of Everything” del año pasado, y es un EP con cua-tro canciones titulado “Lost Worker Bee”. Según ellos, los temas fueron inspirados por la ciudad de Manchester, de donde los cinco son oriundos, más los mismos ahondan en esa línea tan arrobadora y melancólica que, como una copa de buen vino, pa-recen estar acariciando con su lengua nuestro pa-ladar auditivo. Suaves como el algodón de azúcar o profundas como las noches de inviernos, las compo-siciones de “Lost Worker Bee” vuelven a confirmar que estos muchachos son verdaderos artesanos de la canción. Qué sigan los éxitos para ellos, entonces.

Elbow | Lost Worker Bee

Label: Fiction / Polydor RecordsFecha: 24 de Julio de 2015

Page 95: The 13th Número 20

95

Page 96: The 13th Número 20
Page 97: The 13th Número 20

97

EL PUNKEN LA SANGRE

EFEMÉRIDES

¿Qué decir de Rat Scabies que no tenga nada que ver con las palabras intensidad, contundencia, personali-dad, actitud y tantas más que tengan corresponden-cia con la energía sudorosa de un baterista rabioso?

Christopher John Millar (así su verdadero nom-bre) nació en Surrey (Inglaterra). Sus primeros pa-sos como baterista fueron las bandas Tor y London SS, para luego fundar The Damned junto a Brian james, Dave Vanian y Captain Sensible en 1976, la historia es más que conocida, abandona la banda en

1995, y durante esos años formó parte de algunas bandas más como la efímera Vicious White Kids, con el mismísimo Syd y Glen Matlock. Pero tam-bién fue parte del divertido proyecto de los Damned, Naz Nomad and the Nightmares, bajo el seudónimo Nick Detroit.

Nombrar a Rat es hablar de una parte muy impor-tante en el punk inglés, por su manera furiosa de tocar la batería, por su actitud siempre incorrecta, y por su pasión por la batería.

Rat Scabies30 de Julio de 1955

[ Por Diego Centurión ]

Page 98: The 13th Número 20
Page 99: The 13th Número 20

99

ICARO DANTE

DERECHO DE PISO

En este mes de julio presentamos a Icaro Dante. Bajo el seudónimo de Icaro Dante se encuentra el

músico Rodrigo Bejarano, quien luego de participar en varias bandas decide en el 2012 largarse al rue-do como solista. Según él alega influencias de John Lennon, Beck, la psicodelia, el pop de los años 60’s, entre otras.

Su música viene tomando forma más íntima des-de su primer destello. Entre 2003 y el 2006 estuvo componiendo y el resultado de ese período se pue-de encontrar en el álbum “Canciones Encontradas 2003/2006”. En 2014 edita su verdadero primer ál-bum pensado como tal, “Lobo Cachorro”. Los siete tracks de este álbum marcan una atmósfera de cal-ma y pereza brillosa que, por momentos, nos hace el efecto de prisma bajo lun haz de luz, convirtiendo un sonido en una paleta de colores. Lo que se supo-ne como un folk que por momentos es rock, se con-vierte en un viaje a un mundo interno, tranquilo y

cadencioso. Canciones que simplemente se pueden desnudar en una guitarra y la voz, pero que es acom-pañada por el resto de los instrumentos sin perder la esencia simple y sutil.

Icaro Dante se nutrió de la sabiduría de Marcelo Belén en la Producción artística y los arreglos de Alejandro Schuster, quienes junto a Rodrigo han cristalizado un álbum plagado de magia.

Actualmente Icaro Dante se encuentra grabando el video de “Autos al Limbo”. Y también se encuen-tra trabajando en un mini Disco para la primavera del 2015.

La formación actual incorpora a Dan Jejos y Julián López Perello.

Links para conocer al artista:http://www.icarodante.bandcamp.comhttp://www.facebook.com/[email protected]

Page 100: The 13th Número 20

UNA REVISTA IMAGINARIA

The13th