Upload
emilio-carcano
View
612
Download
5
Embed Size (px)
Citation preview
El Tirus - La Nueva Iliada
Emilio Carcaño Bringas
IAquí, en Fenicia
Comienza la epopeyaMás grande de que haya noticia
Del cruzar de una centellaQue ilumina dos continentes
Y acecha la gran isla.II
Aquesta de la gran tinturaQue adorna ropaje de reyes
Que con el buccinum y la pelagiaElaboran mercaderes.
IIIA esta tierra circundada
Por Neptuno y sus maresGrandes olas, de cristalinas sales
Del ocaso a la alborada.IV
Objetos de vidrio y metalAlimentan su intercambioEn toda la costa fenicia
No hay mejores, no hay tal.V
Ha arribado el centuriónDesde cerca del Olimpo
Quien se dice descendienteDe Aquiles, de Amón.
VICon su soberbia ha querido
Intimidar a los de TiroBravos navegantes
En asuntos de combates.VII
He aquí que el Rey dijo a los tiriosDe nutrida lengua y prudente hablar
Emisarios de AzemilcoLa gran isla, de Macedonia
¡Parte ha de formar!VIII
He llegado ante ustedesGrandes señores del marCon un propósito firme¡A los tirios hermanar!
IXPor mandato de los diosesHe derrotado a Memnón
Desafío a mi falangeNo previniendo su error.
XEl de Rodas fue enviado
Por Darío el de PersiaY el magnánimo desafiadoHa mostrado eminencia.
XIMe he adueñado de esta tierra
Pero someterla no es mi intenciónDemostrarles mi valía
Liberar pues las cadenasCon que Darío y sus persas
Oprimieron sin razón.XII
¡Presentad a Hércules la ofrenda!¡La hecatombe y el incienso!
Que poca cosa me resultaComo obsequio para un Dios
¡Para deiforme figura!¡Para tan excelso señor!
XIIIRespondieron ancianos sabiosVersados en política y justicia
No será tu ofrendaEn la isla admitida
Cual sacerdote del temploConsagrado a este Dios.
XIVPensaron aquel rey sin derecho
De siquiera contemplarEl almo templo, la Gran TiroEncendiendo así su pecho.
XVNo pudiendo el gran magno
Sus regalos presentarNi mostrarse obsequiosoAnte los señores del mar.
XVITan lacerantes palabras
Haría el macedonio pagar¡Alejandro caro a Marte!
¡Debes la isla tomar!XVII
Señor de MacedoniaHijo de Olimpia y Filipo
Creemos en tu buena voluntadPero es menester informarte
Que para presentar la hecatombeEsta isla has de tomar
XVIIIPorque tu presencia no es grata
Ni de tu bizarra falangePreferible seria que presentes
Tu ofrenda en tierras continentalesXIX
Ya que el gran AzemilcoVoz y corazón de nuestro puebloTe da a conocer que desapruebaPresencia funesta de macedonios
Evitarla el podría, con el fuerte escudoO con mordaces metales.
XXDe uno y otro bando
Las palabras procedentesHan sido escuchadas
Por los dioses del OlimpoY acudido en marejadasAl auxilio de las huestes.
XXILas palabras de los sabiosNo ofendieron a AlejandroEl estratega muy paciente
El político eminente.XXII
De Marte los deseosNo quisiera conocer¡Qué difícil entender!
¡Su afición a los trofeos!XXIII
Pero el hábil ParmenioHa incitado al macedonio
Para no pretender un convenioCon los coléricos marinos
¡Escúchame descendiente de Aquiles!El dios del combate me ha confiado.
XXIVTe pertenece fenicia
Es el camino de tu hadoDe los navegantes hostiles
A su isla entres ornado.XXV
Los dioses son testigosDe mi prudente proceder
Que no presto he iniciado combateQue es escarnio, dolor y padecer.
XXVINi roja gota de sangreHe querido derramar
¡Oh! Bravos tirios¡Ea! pues el combate acre.
XXVIIComience pues la batallaComience el sitio de TiroHe de mostrar a Azemilco
Las cóncavas naves en la playa.XVIII
Mas los hábiles ingenierosExplicáronle al generalEs por tierra el caminoImposible es por mar.
XXIXLlamóse pronto a los fenicios
De firme tierra continentalExplicándoseles las razones
¡Poned las huestes a trabajar!XXX
Viendo razones muy justasPara auxiliar al Aquiles MegaPrestos fueron los de Antaro
Mas así Tripoli y Sidón
XXXIPalebiblos y Sarepta
Concurrieron las dos LeptesCartago la del istmo
Con sus hombres y mujeres.XXXII
Andrumeto-Tisdro, Botri y OrtosiaAcudieron con Berito
Tantas tierras tan hermosasDe aquel continente bendito.
XXXIIICooperando en la edificación
De un puente a la islaDos plectros luenga la obra
Hasta tomar el bastión.XXXIV
Destruyóse la vieja TiroPara aportar material
Que moviera los dominiosDe Neptuno ¡Señor del mar!
XXXVLos kolymboi usaron
Diáfano tonel de cristal Donde el fastuoso Alejandro
Fisgado hubo el mar
XXXVIPero el de famoso carruaje
De delfines muy velocesConcurrió a ver la obraApresurando las coces.
XXXVIIVolvióse hacia Anfítitre
Pronunciando aladas palabras¿Es que mis hijos del marHan permitido a AlejandroConstruir divino camino
Para mi isla tomar?XXXVIII
Remisos son a la guerraCobardes a la pelea
Destruid aquel portal¡Macedonio! ¡Iluso mortal!
En anhelos harto yerra.XXXIX
El hijo de Amón afirmo:Nadie puede con ellos sobre la tierra
De aquellas huestes tenía razónEs su final esta guerra.
XXXXDoscientas dársenas poseemos
En quince leguas de circuitoLo que Alejandro pretendeNo es materia, solo mito.
XXXXITomaron ligeras naves
Provocando vinosa estelaConducidos por el aire
Que golpea la hermosa vela.XXXXII
Dejaron el puerto exteriorY dos plectros navegaron
Para llegar a la costaAhí de Alejandro hallaron.
XXXXIII¿Te crees más que Neptuno?
Queriendo mover la tierraPara unir isla y continente
E iniciar la gran guerra.XXXXIV
El capitán no respondióPero sus artífices sufrieronTremendo ataque sorpresa
Que el macedonio no previó.XXXXV
Lluvia de mordaces saetasPequeños pegasos de bronce
Penetraron los pechos repletasSemejando raudas coces.
XXXXVIY en las barcas prendían fuego
Para detener su caminoPara evitar la pelea
De el horrible sitio de Tiro.XXXXVII
Tan seguro estaba el MagnoQue ni siquiera acalló
Las injurias de los tirios¡La construcción prosiguió!
XXXXVIIIPor soberano a Alejandro
Los tirios debían tener¡Ilusos tirios rebeldes!
Como pretenden con naves¡Divina ráfaga contener!
XXXIXComienza el éxodo a Cartago
Embarcando a los niñosEmbarcando en las naves¡Temerosos los de Tiro!
LEl de mirada torcida
De la obstrucción se desdijoPara salvarles la vida
A anciano, madre e hijo.
LIRecordando a OlimpiaLa adoradora de Amón
Lo embarga un sentimientoLo embriaga la pasión.
LIILos tirios se van a mofar
De lo que se precia Alejandro¡Diestro capitán ufano!
Quiere el dominio del mar.LIII
Con sus ochenta cóncavas navesTrialadas naves de ApoloGritaban los mercaderes
No quedara en tierra uno solo.LIV
En el circuito interiorDe las murallas se apuranArtífices en los ingeniosQue tanto causan terror.
LVTuvo Tiro comercio, dicen los tetrarcas
Pero fue escaso el númeroYa que poco comerciaban
Por transportar Persas y parcas.
LVIYa de mucho el comercioCon los persas termino
Pues al inicio de la querellaLa agonística floreció.
LVIIBalistas, lanzas y arcos
Catapultas de todos tamañosEl arsenal conformo
Para causar grandes daños.LVIII
Así las cosas en TiroLos hombres del conquistador
Construían el gran diqueTomando Neptuno el tridente
Blandiéndolo con tal estruendoQue en las filas macedonias
Provocaba terror.LIX
¡Argente arma fulgente!Acuífero rayo marino
En su camino hacia la bahíaMarina bestia partió
Depositándola en la bahía¡El pétreo dique obstruyó!
LXPor mal presagio es tomada
Por la furia de Neptuno temenLos del lado de Alejandro …
Los que de la isla vienen.
LXIDe ambos lados temíanExcelsa cólera del dios
Ante la divina furiaLos más bravos no seguían.
LXIIApolo a la liza ha llegado
Su parecer manifiestaDe su bando en la gestaA través de un mancebo
A las puertas de aquel temploDe los tirios, de Heracles.
LXIIIComunica a los tirios
Los propósitos del solar aurigaDe marcharse de la isla
LXIVDe Alejandro un ardidCreyeron los isleñosPara ganar en la lid
LXVTras el joven una turbaDe enfurecidos feniciosCorrió para destruirlo
Para acabar con sus artificios
LXVIPero prudentes magistrados
Le dieron su protecciónEn el templo del gran Heracles
Escondiéndolo con fruiciónLXVII
De un lado y el contrarioLos preparativos continúanY las ofrendas a los dioses
Repletan el incensarioLXVIII
El enamorado de HomeroDefendió a sus marinos
Pues fue atacado de nuevoPor soldados azemilcos
LXIXDiadès de Larisa, ingeniaCon pericia nuevas armasDirigía el terrible ataque
Contra hombres, contra almasLXX
En quince cóncavas navesSe embarcaron los tirios
Como emisarios del hadesComo acuáticos lirios
LXXIAtaquen pues los honderosAgredan animosos arquerosA los que mueven la tierra¡Detenedlos con la guerra!
¡Mortíferos dardos certeros!LXXII
Aliactes presto al avisoDel ataque del naveganteAcusa pronto el ataque
Avisa pronto a AlejandroPara iniciar el combate
LXXIIIEl bélico cuerno anuncioEn respuesta un ataque
En manos de los mancebosLuengas lanzas urgió
LXXIVPrestos embarcan las armasSon precisos en respuesta
Tres corvadas son las navesQue se posan en el mar
Cruzan el mar las nefastas¡A los tirios! ¡A retar!Para iniciarse la gesta
LXXVOcho mancebos en líneaDe fondo treinta titanesDespliegue de la falange
Que sube presto a los mares
LXXVIMagno dueño del mundoEncabeza el contraataqueLlameantes naves embateCon las flechas furibundo
LXXVIILa ligera flecha de EcnibalBravo guerrero de Cartago
Rozo la rubia melenaDel divino Alejandro
LXXVIIIPreciso fue el auxilio
De la criselefantina MinervaAl desviar la saeta
Del magnífico fenicioLXXIX
Seis trialadas navesAl final del contingente
Encontraron su finalEn mordaz lluvia ingente
LXXXDe bronce de saetasDe fuego de balistas
Sin protección del tridente
LXXXIVio las naves a piqueA la costa de fenicia
Prefirió por su periciaAnclar las suyas al dique
LXXXIIEsforzada obra es destruida
Por la furia de NeptunoCerca del dique contempla
La acción del rey del mundoLXXXIII
Marte dios de la guerraHa incitado a seguir
Continuando con la tierraEl dique a construir
LXXXIVHa nacido una penínsulaDe dos plectros de largo
Orgulloso ingeniero reportaTerminado el encargo
LXXXVEntrambos ejércitos concurren
A el término del camino¿Cómo vencer al destino?Varios sabios ya discurren
LXXXVINeptuno y Marte instigaronAl encuentro de mortales
Que Apolo y Amón congregaronY causaron tantos males
LXXXVIISolícitos los artesanos
Trabajan en los ingeniosQue del hierro ellos son dueños
Y las forjan con sus manosLXXXVIII
Torres y almenas conducenTirios y alejandrinos
Que en diáfano mar ya producenMuy intrincados caminos
LXXXIXNeptuno ha obsequiado
Una especie de rezónA contumaces isleños
Que querellan con tesónLXXXX
Atando anclillas a las cuerdasTiraban de los alejandrinosQuitando las armas lerdas¡Apartándolas del camino!
LXXXXIAl perder los escudos muy forzados
Los titanes perecíanSin embargo concurrían
A la liza muy osadosLXXXXII
Si mantenían con esfuerzo las rodelasResistiendo el ataque¡Morían precipitados!
Manteniéndolos en jaqueDefendiendo las almenas
LXXXXIIIEn las cucharas argentesQue con arena llenabanCon cantidades ingentesEn broncíneas moradas
LXXXXIVHiriendo alejandrinos
Complacidos los de TiroEntre aquellos los de Biblos
Entre estos AzemilcoLXXXXV
La tremolante tierraGime al caer los macedoniosEl gran rey ordena ataques
Y los guerreros arremeten triunfantesCon saetas de querella
LXXXXVISe calienta en los escudos
Alma tierra ¡Al ataque!Los del magno con coraje
Los de Azemilco muy rudosLXXXXVII
Piedras, venablos y llamasEn el muro catapultas
En alguna parte grandes flamasAlejandro ¡¿Por qué indultas?!
LXXXXVIIIDel Magno Aquiles otrora bravo
Los soldados se amedrentanLas cuerdas se revientan
Haciendo los arietes de ladoLXXXXIX
Se retiran los marcialesPersuadidos por el nocte
Escanciando el vino nepenteDudando ser inmortales
CAlejandro al ataque
Largas filas ya hendiendoEsa roca aun late
¿Roca? ¡Corazón pétreo!
CIComandando el despliegue
De fuerzas de avanzadaEn la liza el refriegue
Con la espada, con la adargaCII
Las balistas que te ofendenHijo de olímpicos señoresEntre llamas se retuercenDel Gehena traen dolores
CIIIHeterasto de Grecia
Convoca a la lizaCon el cuerno y la sarisa
En la mágica peleaCIV
Puntas mordientesDe flechas luengasMaderos en arcos
Liberados, invidentesCV
Y tan ciega es la cóleraDe las huestes combatientes
Que acribilla inocentesLos solípedos en guerra
CVIPlutón recorre los camposDe panorama portentoso
Y en el gélido reposoDe su reino los acoge
CVIIA los héroes y cobardesOuragoi y a los tetrarcas
A los guías y heraldosPor colérica balista
Se enfilan al infiernoLos poetas de la liza
CVIIICon sus círculos de mármol
Ya desvían las saetasYa detienen los embatesDe guerreros y ouragoi
CIXQue de bueno en la historia
Que figura de las musasQuien sabe ¿Escriben confusas?
¡¿De que lado hay victoria?!CX
De titánicos valientesComo anónima descansaSu bravura en las plazasSus maléficos tridentes
CXILas murallas se protegenTras vestimentas de algasComo murallas se yerguen
Como corazas de plataCXII
¡Oh! Magníficos navegantesCon provisión de materiales
Con los hombres con las armasConsentidos de la gloria
CXIII¡Fuertes! ¡Confiados! ¡Alegres!
No descuiden la gran plazaEn confianza que los ciega
Mejor esperen noticiasDel magnífico estratega
Del estratega, del Aquiles megaCXIV
El estratega al omega¡De la mente! ¡Del valor!
Confinado en este mundoDel cual ahora es motor
CXVNi en el asedio de Motie
Los ejércitos se esforzaronComo con este maestro
¡Gran discípulo de Marte!
CXVIA la voz de Filotas
De Parmenio y del restoConsigue acallar prestoEl comandante funesto
CXVIIDecidido por Egipto
Alejandro titubeaPero con ejércitos pelea¡Que al magno vitorean!
CXVIIIAmintas de Andromene opina
Con atinado talanteSobre la feliz decisiónDel homérico amante
CXIXCalafatean los trirremesCon la brea bien fundidaReparando las corazasEvitando nave hundida
CXXSoslayando amenazasPrevenidos de la baya
Del arsenal no muy fuerteAplicando el ariete
Contra la débil muralla
CXXIEn dos fronteras asediado
El baluarte de NeptunoLa gran catapulta y arco oportuno
Ha unido al de su aliadoCXXII
Rocas, lanzas y tridentesTodas armas en ambos frentes
Los metales, minerales emolientesZahieren combatientes
CXXIIILos trirremes en batalla
Con las torres en almenasSoldados de broncíneas grebas
Bordeando la murallaCXXIV
El semidiós encara al enemigoCon la mordacidad de su espada
Castigando con su lanzaSin contar con el peligro
CXXVEl ariete al muro ha vencido¡Gran temor entre los tirios!
El artificio ha causado¡Los de la isla no están vencidos!
CXXVIAbran paso al sintagmaQue el tetrarca los dirigeVamos Azemilco ¡elige!
O la tierra o tu almaCXXVII
El tripolita atacaCon su larguísima pica
No hay en la liza arma más ricaQue su mortífera estaca
CXXVIIIDentro tienden barricadas
Tratando de retener la ciudadPor más que Tiro se esfuerza
No consigue la unidadCXXIX
Del rompeolas en las almenasGran estrépito y confusión
El cuerno anuncia al sintagmaReventar las argentes cadenas
CXXXUn gigante de Baalbek
Toma parte en la querellaLa vida de este la pica sella
Para acallar su poder
CXXXIMares de sangre y poder
Hay diez miles en combateSiete miles han de perecer
En el trágico embateCXXXII
Hipaspistas y PezhetairoiAcompañan a Alejandro
Consolidándose en la murallaRegalándole el mando
CXXXIII¿Qué destino ha de escoger?
Quien en Melkart halle resguardoExiliado o como esclavo
¡No prefiera el Agenorium!Después de tanto intento…
CXXXIIIIEl mar de gente se detiene
Los de Tiro derrotadosNeptuno a derrota se avieneLes espera ver expatriados
CXXXVAlejandro usa dos mil cruces
Imnissas, decusatas y patibuladasUnos mueren de pie, otros de brucesEn altas cruces en el suelo hincadas
CXXXVILa otrora indestructible
Es un bosque del avernoCon árboles sangrientos
Portentoso cuadro indecibleCXXXVII
No pelearon por la gloriaEn los tiempos por venir
Su sueño, su victoriaEs por siempre proscribir…
CXXXVIIIProscribir la guerra del Mundo
¡Gran intento tremebundo!¡Tomad pues la espada!¡Y el camino proseguir!