Memoria justificativa

M E M O R I A

Centro de danza en la latina. Pilar Jiménez Abós P. F. C. (junio 2013)

I N D I C E

1.- LUGAR

2.- CONCEPTO Y DESARROLLO

3.- MATERIALIDAD


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1. - EL LUGAR

En Madrid, en el barrio de la Latina, Plaza de los Carros y adyacente a la

Iglesia de San Andrés se propone proyectar un edificio para albergar un

centro de danza.

Este barrio se caracteriza por un dinamismo "fuera de lo común" casi las

veinticuatro horas del día.


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El trasiego de habitantes propios y ajenos, lugareños y turistas a través de

un escenario barroco de expansiones y compresiones a través de las calles,

callejuelas, plazas y plazuelas es de tal calibre que un edificio que habite

este lugar deberá soportar estos flujos y además deberá aportar estímulos

suficientes para participar del carácter de estos espacios en la ciudad.

Lo primero que destacamos son esos flujos de los que extraemos la

siguiente representación:

Esto nos sugiere que el propio corazón del centro de danza estará en

movimiento perpetuo y, ayudado del fluir de las circulaciones de vehículos y

de personas, no se quedará atrapado en una piel estática y masiva sino que

"respirará" generando una fachada y un espacio tensado interior-exterior

hasta que la representación volumétrica de la fachada establezca un diálogo

entre la materia y el tiempo.


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Así, dibujamos este esquema de la respiración en sección de la fachada:

De tal manera que la sección resultante podría salir de aquí:


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De esta manera pasaremos de la fachada "madrileña" tradicional, estática y

con una clara vocación de ritmos vertical de masa y vacíos y que se apoya

en un zócalo generalmente granítico a una nueva manera de entender esta

situación en el siglo XXI: una fachada que diluye la estratificación y los

ritmos rígidos en una trama aleatoria.


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Lo representamos así:

De tal manera que ahora el edificio propone maneras abiertas de entender

que el continente y el contenido ya superan una relación cerrada para

superar el límite físico y mejorar la relación interio exterior.

Y en consecuencia se proyecta un edificio así:


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Y el reflejo interior de la polaridad interior - exterior:


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2. - CONCEPTO Y DESARROLLO

CRITERIOS DE PROYECTO

ENTORNO

La ordenación del espacio en las fachadas del entorno se caracteriza por una

dirección principal, la vertical, marcada por la proporción de las ventanas y la

de los edificios, apoyada por otra dirección la horizontal, de carácter

secundario, determinada por las líneas de imposta que marcan las plantas.


LO VERTICAL

El centro de danza adopta estos elementos definitorios de ritmos y

geometrías del entorno, sin embargo las volumetrÌas interiores, que

responden a espacialidades ajenas a la vivienda producen unas alturas más

variables que la monótona sucesión de plantas iguales y esto da como

resultado un primer cambio que afecta a las lineas de imposta, que se

quiebran para permitir los espacios interiores más variados.


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LO HORIZONTAL

Una vez quebrados los ritmos horizontales, los ritmos verticales exigen un

tratamiento acorde: son los principales del entorno y deben plegarse a la

topología creada en la fachada al romper las impostas. La disposición de

vanos en fachada más aleatoria es consecuencia de la diversidad de espacios

del programa del edificio y hace que las ventanas se adapten a ellos de

manera que dicha aleatoriedad responde a las fuerzas interiores más que a

la esclavitud de los ritmos. Conserva, no obstante, la proporción de vanos y

llenos de modo que el resultado mantiene una coherencia con el entorno.

En fachada el edificio se construye por medio del contrapeo de elementos

macizos: un aplacado de piedra artificial, y elementos vanos: unas cajas

abocinadas de acero que permiten el paso de la luz.

Estos dos elementos se componen entre sí en diferentes planos,

sobresaliendo por grupos unos respecto de otros, creando así una serie de


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pasos diferenciados que despiezan la masividad de la fachada para

adaptarse a la geometrÌa fraccionada de los edificios del madrid clásico.

El edificio, a nivel de distribución, se organiza sujeto a unos elementos de

recorrido lineal, dos pasillos, perpendiculares entre sí:

• El pasillo principal, perpendicular al alzado hacia la plaza, que sirve a

los espacios docentes y públicos de carácter general.

• El pasillo secundario, paralelo a la medianera y elemento de

comunicación de la banda de servicios que se establece anexa a

aquella.

El edificio en planta de acceso se pliega a la fuerte influencia pública de la

plaza y desarrolla los espacios más fluidos y accesibles al público a nivel de

calle.


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El cerramiento en planta baja se diferencia del resto del edificio,

respondiendo así en forma mimética a la estructura de zócalos que impera

en el madrid antiguo.

No es, sin embargo la solución de materiales mimética respecto a los

edificios del entorno; se elige en planta baja una chapa de acero corrugado,

con diferentes niveles de perforación, que permite hacia el interior una

mezcla de cerramientos opacos y permeables a la luz velados por la chapa

de modo que el cerramiento en planta baja queda como un elemento

continuo, sólo interrumpido para los accesos.

Un gran patio interior cubierto articula todo el edificio de arriba a abajo. Lo

hace permitiéndose variaciones entre planta y planta, cada una de las cuales

es perforada por este vacÌo de un modo particular a ella, produciendo a su

alrededor diferentes espacios. En segunda planta el vano en el forjado

produce un vacío sobre la zona de exposiciones aportándole a ésta una

altura suplementaria.

En las plantas intermedias del proyecto se establecen las funciones de tipo

docente, tanto las aulas de danza como los espacios de ensayo y las aulas

teóricas.


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En las plantas en las que existen aulas de danza los espacios de aseos se

amplían transformándose en vestuarios.

La planta sótano se organiza a nivel funcional de un modo más libre. Un

gran espacio se reserva para eventos de todo tipo que necesiten funcionar

a puertas cerradas, mientras que algunos de los espacios actúan como

espacios servidores de dicha sala o servidores del resto del edificio (espacios

de almacenaje e instalaciones). El resto del espacio se ocupa por una gran

sala abierta destinada al trabajo libre, preparada para efectuar happenings,

perfomances y actuaciones de carácter más libre, menos constreñiido.

Los muros de contención de dicha planta se trabajan en su acabado interior

con un encofrado de tablas de madera, de modo que este acabado sirva

como cerramiento interior.


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3. - MATERIALIDAD

Según hemos descrito anteriormente, la materialidad del edificio pretende

que se establezca una membrana porosa, penetrable entre el interior y el

exterior.

Para ello planteamos una fachada compleja, multicapa, donde la relación

hueco-vacío se resuelve mediante embocaduras de acero calibrado y paneles

de piedra anclados con subestructura a la estructura primaria.

Además, el tradicional zócalo pétreo madrileño se troca en chapa grecada

perforada con distintos diámetros de perforación y diferente densidad de

perforado.

Así, la planta de calle se ofrece a la plaza y permite tanto el acceso a los

usuarios del centro como a algún visitante espontáneo que quiera acceder a,

por ejemplo, la cafetería.

Al ascender por el edicicio llegaremos a la última planta, que se abre y que

permite el uso y disfrute de la cubierta del edificio, variando la "cubierta-

tapa" por una terraza para ser habitada.

En sección, el edificio va variando su geometría para representar esa

"respiración" interior propia de un uso como el que tendrá y de una zona de

la ciudad igualmente "movida".

De esta manera, el empleo de una sencilla geometría estructural y el uso de

placas prefabricadas de hormigón, permite una construcción en seco y de

rápida ejecución, reflejo de la modernidad en que vive.


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Como resumen, podríamos decir que se consigue una evolución coherente

pero valiente de la tipología edificatoria madrileña adaptada a los nuevos

tiempos que vivimos con movimientos convulsos pero de inusitado interés.

Los edificios no son ya "cajas muertas llenas de obras muertas" (Tuñón y

Mansilla en referencia al MUSAC de León) sino elementos capaces de

estimular sinergias nuevas en la ciudad y objetos permeables que permiten

la interacción de los que usan específicamente el edificio y de los que

"pasan por allí".

Esperamos que nuestro proyecto consiga reanimar una importante esquina

en la sucesión de espacios del barrio de la Latina de Madrid tanto en la

relación horizontal como en la diagonal que se crea mediante el vacío en la

cubierta y su relación con la plaza que se abre bajo él.

Madrid, Junio de 2013


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