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CICLO DE CHARLAS “GRANDES PINTORES DEL
Francesco Hayez
OMANTICISMO EUROPEO”
Carmen Cabrejas Almena Museo del Romanticismo
Autorretrato a los 31 años 1822
Francesco Hayez (1791-1882) Primeros años
- Procedente de una familia humilde de Venecia. Debido a los apuros económicos, sus padres toman la decisión de enviarlo con su tío, empresario naviero y coleccionista y marchante de arte aficionado.
- Con siete años, demostrado su precoz talento para el dibujo, su tío
le facilita sus primeras clases de arte con el pintor Francesco Maggiotto, que le orienta hacia los asuntos mitológicos e históricos. Dos años más tarde, en 1800, comienza a frecuentar la galería del palacio Farsetti, copiando yesos de esculturas clásicas, y obras de Tiziano y Rafael.
- En 1803 comienza a tomar clases de dibujo de desnudo en la Academia, dos años después gana el primer premio de esta disciplina.
- En 1806 entra en el estudio de Teodoro Matteini, donde perfecciona la composición de pintura de Historia.
Alegoría de la pintura Francesco Maggioto
Joven con una carta Teodoro Matteini, 1797
Eros y Psique Antonio Canova, 1786-93
En 1809, con 18 años, gana la beca de la Academia para estudiar en Roma. Se traslada a esa ciudad y con el apoyo del presidente de la Academia es acogido como alumno y protegido por el escultor Antonio Canova, que será una influencia fundamental en su trayectoria.
Áyax Antonio Canova (1811-12) y Francesco Hayez (1822)
Magdalena penitente Antonio Canova (1790) y Francesco Hayez (1832)
Laocoonte, 1812
En 1813, como último proyecto de su beca, envía al concurso de la Academia de Venecia esta obra, reconocida como una de sus primeras obras maestras.
Reinaldo y Armida, 1812-13
Ulises en la corte de Alcinoo, 1814
Retrato de la familia Cicognara con busto colosal de Antonio Canova 1816-17
Detalles de los frescos para el edificio de la Bolsa, en la planta baja del Palacio Ducal, 1819
En 1817, tras ocho años de estancia casi ininterrumpida (excepto por una breve estancia en Nápoles en 1814) en Roma, contrae matrimonio con Vincenza Scaccia y decide instalarse de nuevo en Venecia. Llega a la ciudad como un pintor consolidado, con fama como retratista y decorador (ya había realizado importantes decoraciones al fresco en Roma). Durante esos años recibirá numeroso encargos de esas tipologías, que le sirven para afianzar su posición económica y social, mientras gesta su estilo más puramente romántico, que eclosionará en 1820 con la presentación de la pintura Pietro Rossi.
1817-20:Vuelta a Venecia
Mujeres danzando, frescos del Palacio Correr, Venecia, 1817
Pietro Rossi 1818-20
Detalle de Pietro Rossi y detalle del monumento a Vittorio Alfieri de Canova (Italia llorando)
1820-1837 Creación de la escuela romántica de Milán
Desde la presentación y triunfo del Laocoonte en la exposición de la Academia Brera en 1812, Hayez había cosechado múltiples triunfos en Milán. Su éxito se acrecienta a partir de la exhibición de Pietro Rossi, y no deja de crecer en los años siguientes, hasta que el artista opta por establecerse en esta ciudad en 1823. Considera que el mercado del arte milanés es el más moderno de Italia, y que allí su carrera alcanzará su verdadera magnitud.
Yo siempre fui honesto, y en lugar de pedir y reclamar a los venecianos, me marché; realmente el artista, después de tanto
esfuerzo y de los estudios realizados, desdeña hacer el charlatán consigo mismo y con los demás para tener algún mérito
En Milán desarrollará su estilo más puramente romántico, gestando a su alrededor el núcleo más importante de la pintura italiana de este movimiento.
Autorretrato con grupo de amigos 1827
(De izqda. a dcha., los amigos representados son los pintores Palagi, Migliara y Molteni, y el
escritor Grossi)
El conde de Carmagnola conducido al suplicio (estudio) 1821
Estudio para diversas versiones del Carmagnola, 1821-22 y 1834
Todos hechos a semejanza de Uno;
Todos hijos de una misma redención,
En qué momento, en qué parte de la tierra,
malgastamos este aura vital.
Somos hermanos; estamos cerca de un acuerdo:
¡Maldito el que lo rompe,
el que se eleva sobre el débil que llora,
el que entristece a un espíritu inmortal!
El conde de Carmagnola Alessandro Manzoni, 1820
Las vísperas sicilianas 1822
Las vísperas sicilianas 1834
En alta mar y azotado por el viento, ¿Ves aquel barco en mitad de los elementos
próximo a naufragar? ¿Escuchas el llanto
de los marineros por sus barcos rotos? Deh! Calma, oh Dios poderoso
Con tu risa, el cielo y el mar Suba hasta ti esta ardiente oración
¡En ti confían los marineros! Y Dios responde en su voluntad soberana:
"Al que confía en sí mismo, el cielo le sonríe. ¡Mortales! ¡Vuestro destino está en vuestras manos!"
Coraje, coraje, valientes hijos del mar; despreciad los peligros.
¡Lamentarse es cobardía! Al cielo ofende gravemente
el que carece de valor; ¡Atreveos! Valor y alta empresa
¡Dios os protegerá!
Las vísperas sicilianas Giuseppe Verdi, 1855
María Estuardo en el patíbulo 1827
Los habitantes de Parga abandonan su patria 1826-31
Los apóstoles Santiago y Felipe (los hermanos Giacomo y Filippo Cianni)
1825-27
Ruth 1835
Betsabé en el baño 1834
Venus con palomas (retrato de la bailarina Carlotta Chabert)
1830
Baño de ninfas 1831
Baño de ninfas Palma el Viejo, 1519-20
Desayuno en la hierba Édouard Manet, 1862-63
Retrato de Carolina Zucchi en la cama o La enfermedad
1825
La agitada vida amorosa de Hayez tuvo durante estos años, una gran protagonista: la joven Carolina Zucchi, con la que mantuvo una tórrida aventura durante al menos una década. Carolina fue modelo para muchos de sus cuadros (entre ellos Betsabé, Ruth o La Magdalena Penitente) y protagonista de una serie de explícitos dibujos eróticos del pintor.
“Durante aquellos años, todos me consideraban enferma, pero mi
enfermedad era el amor”
Retrato de Cristina Trivulzio de Belgioioso 1830-31
Retrato del conde Arese en la cárcel 1828
Un león y un tigre en una jaula con el retrato del pintor 1831
1838-1860: las grandes obras románticas
Estas décadas representan los momentos centrales de su carrera. Continúa ahondando en los géneros del retrato y la pintura histórica, y firma dos obras consideradas los máximos manifiestos del Romanticismo italiano: La meditación y El beso. Su éxito nacional e internacional se acrecienta, trabajando en Viena (1837-38, 1852), exponiendo en París (1855) y siendo nombrado profesor y director de la Academia Brera (1850 y 1855).
Autorretrato a los 57 años 1848
La cantante Matilde Juva Branca 1851
El escritor Alessandro Manzoni 1841
Massimo Taparelli, marqués de Azeglio 1861
Retrato de Camillo Benso, conde de Cavour 1861
La última reunión de Jacopo Foscari con su familia antes de partir al exilio 1838-40
La sed de los primeros cruzados en Jerusalén 1833-50
Melancolía 1840-41
Un pensamiento melancólico 1842
La meditación 1850
La meditación 1851
El beso 1859
El último beso de Romeo y Julieta 1823
Versiones posteriores de El beso (1859-60 y 1861)
1860-1882 Últimos años
Durante la década de 1860 realiza sus últimas obras históricas de gran formato, consideradas su testamento artístico, a pesar de continuará pintando casi hasta el último momento de su vida. Consciente de la importancia de su obra, en 1861 dona a la Academia de Brera gran parte de sus pinturas, y entre 1869-1875 dicta sus Memorias, fuente fundamental de estudio.
Autorretrato a los 69 años 1860
Destrucción del templo de Jerusalén, 1867
Los últimos momentos de Marin Faliero 1867
Desnudo con libro 1867
Retrato de Rossini 1870
Retrato de Giuseppe Verdi Giovanni Boldini, 1886
Jarrón de flores en la ventana de un harén 1881
Autorretrato con 90 años 1881
“Yo me encontraba al unísono con los
románticos, portadores del
sentimiento puro del arte”
Bibliografía
• MARELLI, I., MAZZOCCA, F., Hayez nella Milano di Manzoni e Verdi, Skira, 2011.
• MARINI CLARELLI, M.V., Ottocento: da Canova al Quarto Stato, Skira, 2008.
• MAZZOCCA, F., Hayez, Giunti, 1998.
• MAZZOCCA, F., Ottocento lombardo: arti e decorazione,
Skira, 2006.
