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CULTURA CUPISNIQUE I. ESPACIO Y TIEMPO: La cultura Cupisnique, se desarrolló entre los años 1500 – 200 a.C, y sus expresiones culturales han sido localizados a lo largo de un extenso territorio que abarca la Costa y Sierra norte del Perú. Espacio que comprende desde el valle de Motupe (Lambayeque) hasta el valle de río Virú (La Libertad), Huaca Lucía Cholope (Lambayeque), Morro Eten (Lambayeque), Kuntur Wasi (Cajamarca). En la costa norte, los Cupisniques antecedieron a los Moche , Sicán y Chimú , y prácticamente a través de sus descendientes, dejaron sus conocimientos y cultura en herencia hacia ellos y aún hasta nosotros. El desarrollo cultural que ahora estudiamos es contemporáneo a otros desarrollos culturales del mundo, así por ejemplo habría de mencionarse su simultaneidad con la cultura Olmeca en Centro América, la cultura Egipcia en el África, la cultura Griega en Europa y la Cultura Longshang (antecedente de la Civilización China) en el Asia. II. ECONOMÍA:

Cultura Cupisnique -Informe

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CULTURA CUPISNIQUE

I. ESPACIO Y TIEMPO:La cultura Cupisnique, se desarrolló entre los años 1500 – 200 a.C, y sus expresiones culturales han sido localizados a lo largo de un extenso territorio que abarca la Costa y Sierra norte del Perú. Espacio que comprende desde el valle de Motupe (Lambayeque) hasta el valle de río Virú (La Libertad), Huaca Lucía Cholope (Lambayeque), Morro Eten (Lambayeque), Kuntur Wasi (Cajamarca). 

En la costa norte, los Cupisniques antecedieron a los Moche, Sicán y Chimú, y prácticamente a través de sus descendientes, dejaron sus conocimientos y cultura en herencia hacia ellos y aún hasta nosotros. 

El desarrollo cultural que ahora estudiamos es contemporáneo a otros desarrollos culturales del mundo, así por ejemplo habría de mencionarse su simultaneidad con la cultura Olmeca en Centro América, la cultura Egipcia en el África, la cultura Griega en Europa y la Cultura Longshang (antecedente de la Civilización China) en el Asia.

II. ECONOMÍA:

Los diferentes pueblos Cupisnique tuvieron una economía basada en tres actividades fundamentales: la agricultura, la pesca y las antiguas prácticas de recolección y cacería que realizaban en lomas y bosques.

Estas se complementaban con otras actividades que conducidas por sus élites religiosas empezaban a desarrollarse en la época, como la ganadería, el comercio interregional y la producción artesanal de bienes suntuarios (orfebrería, cerámica, ornamentos en huesos y concha, etc.).

III. AGRICULTURA:

Cupisnique abrió las puertas al impresionante desarrollo agrícola logrado por nuestros antepasados en la Costa norte. Muchas de las tecnologías que posteriormente causaran gran asombro fueron iniciadas por ellos. 

Testimonios importantes que revelan sus avances en obras de infraestructura agrícola han sido descubiertos por diversos investigadores, así los arqueólogos Fidel Ramírez y Jaime Deza creen que los Cupisniques habrían sido responsables de iniciar la construcción de canales de riego: como el Racarrumi (Lambayeque) y el canal Chicama - Moche (La Libertad). Por otro lado, el arqueólogo Ravines ha señalado que población del valle de Jequetepeque (La Libertad) construyó Terrazas Agrícolas como parte de su actividad agrícola en Pampa de las Hamacas.

Los Cupisniques también fueron responsables de diversificar la agricultura, lograron cultivar: árboles frutales, plantas industriales y plantas alimenticias. Por ello fue que su cerámica representó al ají, la achira, yuca, palta, zapallo y loche. Y el Templo de Huaca Lucía - Cholope (Batangrande- Lambayeque) dándonos más detalles de esta diversidad, registra restos de frejol, maíz (vitales para la alimentación y bebida) y algodón. Purulen (Valle de Zaña, Lambayeque) también presenta frejol, zapallo y palta.

CAZA Y RECOLECCIÓN: Caza y recolección en las lomas y bosques: 

Como sus antecesores los paijanenses, los pueblos Cupisnique continuaron practicando la recolección de alimentos en lomas y bosques. 

De las lomas, recolectan caracoles terrestres los mismos que luego de ser (purgados) son consumidos; como fue el caso de los Cupisniques de Montegrande. Los caracoles que no eran /purgados/ eran consumidos como parte de rituales shamánicos. De los bosques, cazan venados, zorros y lagartijas y palomas, actividades que han quedado registradas en su cerámica y en los contextos arqueológicos. 

Ganadería: La llama domesticada en las sierras de Junín alrededor del 4000-2500 a.C.

aprox., llega a la costa norte durante el desarrollo Cupisnique. Su presencia fue de un especial impacto para la vida de las poblaciones, tanto en lo nutricional como en lo económico. Las llamas, apoyaron notablemente los intercambios comerciales de productos agrícolas y pesqueros entre los centros ceremoniales de los distintos valles lambayecanos e inclusive a nivel interregional. 

Con razón, aparecen corrales de llamas en centros ceremoniales como Morro de Eten (Puerto Eten), Huaca Lucía (Batangrande), Guañape (Huaca Negra), Huaca de los Reyes (La Libertad), etc. Los entierros de Kuntur Wasi (Cajamarca) han revelado la presencia de restos de pescado y Strombus como una demostración de este antiguo comercio, en el cual seguramente las llamas tuvieron activa participación. 

Consumo de Cuyes: Sin embargo junto con la crianza de llamas, en la costa se empieza a asumir la crianza del cuy, complementando de esta manera su alimentación y mejorando su contenido proteico.

PESCA:

La actividad pesquera y la recolección de mariscos también desarrollaron importantes avances entre los pueblos Cupisnique. Al construir embarcaciones pesqueras y redes más amplias de algodón pudieron ingresar mar adentro y con ello abrieron las posibilidades de pescar mar adentro. 

En Morro Eten (Chiclayo-Lambayeque) se han encontrado restos de sardina en la tumba del Shamán. De la misma época se han hallado en Huaca Lucía (Batan Grande - Lambayeque) restos de tiburón, guitarra, raya, etc. especies marinas que no se pescan precisamente a orillas del mar, sino mar adentro. 

Asimismo cerca de las playas los pescadores desarrollan dos actividades adicionales a la pesca, ayudados de arpones o mazos hechos de madera cazan el abundante lobo marino , el mismo que se constituía en un animal proveedor de

carnes en cantidad (los machos pueden pesar hasta 300 kg y las hembras 144 kg.). A la vez estos ambientes eran adecuados para extraer moluscos como el caracol barreno, almejas, almejas blancas, conchas, y otros moluscos propios de aguas frías. 

En las épocas de alteración climática por la presencia del Fenómeno del Niño, las especies marinas cambiaban y entonces procedentes de aguas tropicales ingresaban conchas negras, jaiba de manglar, etc., las mismas que también eran capturadas y consumidas por las poblaciones Cupisnique.

3.3. COMERCIO: El comercio intervalle e interregional del pescado: 

Entre los pueblos Cupisnique, las abundantes faenas de pesca posibilitaban el intercambio comercial con las zonas agrícolas alejadas del litoral. Huaca Lucía (Batangrande) distante a 50 Km. del litoral presenta restos de abundante tiburón, raya, bagre, lisa, suco, sardina, etc. Igualmente en Purulen (valle de Zaña) lo que abundan son restos de peces, moluscos, y hasta lobos de mar. 

En ocasiones también entre los pueblos de la región costeña y los pueblos de las regiones serranas hubo activo comercio de especies marinas. Richard Burger estudioso de este período, cree que el consumo de pescado y algas saladas y secas en la sierra, fue la manera que encontraron estos pobladores para superar la ausencia de sal en sus organismos (evitando de ese modo el bocio). 

Por ello largas caravanas de llamas debieron recorrer el territorio en forma horizontal y cargando en sus lomas ingentes cantidades de pescado, conchas y yuyo salado (algas marinas), cuyos restos hoy en día encuentran los arqueólogos en lugares alejados de las costas. 

El Comercio del Mullu y del Strombus: 

Dos de los elementos más importantes de las ceremonias religiosas eran el Mullu (Spondilus princeps) y el caracol (Strombus Galeatus). El mullu era ofrecido a los dioses como una forma de propiciar la lluvia y el caracol (huallaquepa o pututo) era usado como un instrumento de viento, capaz de producir impresionantes efectos sonoros durante los rituales de los sacerdotes. Sin embargo; ambos no son originarios de los mares peruanos; sino más bien proceden de las costas ecuatorianas, por lo que su demanda debió incentivar un activo comercio con esta zona. Lumbreras, destacado investigador del periodo Formativo cree que algún pueblo Cupisnique de Trujillo o Lambayeque controló y distribuyó hacia el resto del área andina estos moluscos procedentes desde tierras ecuatorianas.En el centro ceremonial Kuntur Wasi (Cajamarca), se han encontrado junto al entierro de señores de élite tres –pututos- (Strombus Galeatus) decorados con imágenes Cupisnique. Y últimamente en la -Galería de las caracolas- de Chavín de Huantar (Ancash) se encontraron 20 pututos (strombus galeatus) decorados también con motivos de la misma cultura.

IV. SOCIEDAD CUPISNIQUE

Teniendo los Cupisnique a la combinación agricultura, pesca y recolección como actividades económicas predominantes, y la producción artesanal y comercio como actividades complementarias, la organización de su sociedad se estructuró de acuerdo con las características de dicha economía.

Las escasas investigaciones que se han realizado sobre el tema revelan que entre los Cupisnique se había desarrollado una clara diferenciación de roles entre los individuos que componían su sociedad, identificándose una élite sacerdotal, los artesanos y el pueblo.

Cada sector de esta sociedad tenía roles bien definidos, los mismos que garantizaban el bienestar de las Comunidades. A la vez los arqueólogos han descubierto que el rol que se tuviera en la sociedad Cupisnique, determinaba la posición de los individuos dentro de la escala social.

LA ÉLITE SACERDOTAL:

Eran los encargados de la conducción de las actividades en el centro ceremonial, individuos que ante la comunidad tenían el poder de /comunicarse con los dioses/ y aconsejar al pueblo sobre las actividades a realizar. Para ello, basándose en la observación rigurosa de los astros y el comportamiento de los animales frente a los cambios estacionales, habían desarrollado conocimientos sobre el tiempo y el clima, habilidad que les permitía predecir las épocas más adecuadas para la preparación de los campos, el sembrado o la cosecha de los productos agrícolas.

Basados en estos conocimientos y en un poder que supuestamente emanaba de sus dioses y de sus ancestros dirigían las actividades de la comunidad, tanto para la habilitación de canales de irrigación, como para la construcción de terrazas agrícolas, el enterramiento de templos o la renovación de los mismos, etc. Se sabe por ejemplo que en Huaca Lucía-Cholope (Batangrande-Lambayeque) sacerdotes con una notable ascendencia sobre el pueblo, los movilizaron para enterrar un templo con 3000 metros cúbicos de arena que trasladaron desde el río La Leche ubicado a 6 kilómetros de distancia.

La élite sacerdotal a la vez, era la responsable de acopiar los excedentes productivos, almacenar y distribuirlos en épocas de carestía. En Huaca de las Llamas Moxeque (Ancash) se ha encontrado un centro ceremonial en cuya cima se habían construido habitaciones cuadradas en los que almacenaron 4400 m3 de artículos de consumo entre maní, palta, frejoles, algodón, papas y camote.

Asimismo, los rituales religiosos eran conducidos por los sacerdotes. Tanto las ceremonias de sacrificio humano, como las procesiones, la quema de spondylus, la molienda de hematita, etc., revelan una clara participación de los sacerdotes. En el templo de Morro Eten (Chiclayo-Lambayeque) se ha descubierto evidencia de capas de Spondylus triturado como ofrenda. Sin duda debió existir rangos diferenciados entre la élite sacerdotal, pero ello aún no ha sido estudiado con detenimiento.

LOS ARTESANOS:

Eran los arquitectos y artistas que realizaban sus actividades bajo la influencia de los sacerdotes del centro ceremonial. Se conoce que en Kuntur Wasi (Templo de clara influencia Cupisnique) los artesanos llegaron incluso a tener talleres dentro del mismo templo.

Se encargaban de diseñar las formas arquitectónicas de los centros ceremoniales, aconsejar las remodelaciones, como también diferentes artesanos eran los responsables de producir la parafernalia religiosa que acompañaba a los sacerdotes en sus ceremonias y rituales. Así producían bellas espátulas talladas en huesos para las inhalaciones de alucinógenos, hermosos collares de turquesas, vistosas orejeras, sorprendentes ceramios escultóricos, mates ornamentados, pectorales, coronas, y brazaletes repujados, etc.

Toda su producción artística estuvo fuertemente influenciada por el pensamiento religioso Cupisnique, y por ello se nota en sus creaciones, elementos felínicos, cabezas decapitadas, segmentos de los rituales religiosos Cupisnique, extractos de sus mitos, etc.

EL PUEBLO:

Conformado por agricultores-pescadores, eran los responsables de la producción de alimentos agrícolas y la obtención de especies marinas, las mismas que también procesaban salándolas o secándolas mediante la deshidratación.

Vivían en viviendas precarias construidas cerca de los centros ceremoniales. Vestían en el caso de los varones, el característico taparrabo, y en el caso de las mujeres una vestimenta en forma de túnica. Mujeres y hombres gustaban de llevar los pies descalzos y usaban los cabellos largos. En ocasiones suele observarse algunos varones del pueblo, portando gorros que rematan en forma de cono.

Para su alimentación combinaban productos agrícolas como el maíz, maní, frejoles y también productos de mar como la sardina, el suco, la lisa. En los meses de verano cuando bajaban las aguas de regadío, pescaban lifes y camarones y los incorporaban dentro de su dieta alimenticia. Cuando las lomas reverdecían acudían a ellas para recolectar caracoles terrestres, los mismos que purgaban con maíz y luego consumían. Aunque no se han hallado restos de cuy se cree que ya los consumían.

Cuando fallecían, sus muertos eran enterrados en lugares secos, alejados de las zonas cultivadas; pero cerca de sus poblaciones. Depositados junto a otros miembros de su comunidad en tumbas de forma irregular (algunas circulares, otras alargadas, en ocasiones semielípticas), acompañaban sus restos con sus indumentarias propias, alimentos en mates e inclusive sus mascotas (En Puemape un perro fue enterrado a los pies del individuo). Luego colocaban cerca de su rostro hematita, de tal forma que su cuerpo se pintara del característico color rojo. Posteriormente lo envolvían en una estera y depositaban; tierra y piedras cubrían finalmente el sepulcro.

V. RELIGIÓN:Entre los Cupisniques, las actividades religiosas marcaron profundamente cada uno de los actos de su vida cotidiana. Se sabe que al dedicarse estos pueblos a la agricultura de irrigación, la pesca y la recolección, su preocupación por lograr la fertilidad de la naturaleza y de sus campos, motivó la creación de una serie de ritos religiosos.

Investigadores dedicados a develar los misterios de la religiosidad Cupisnique, han logrado identificar al Jaguar y el Decapitador Araña como las divinidades principales del culto cupisnique, y al sacerdote - shaman como el personaje encargado de dirigir los ritos en el centro ceremonial del valle.

Este, después de ingerir productos que contenían sustancias alucinógenas (caracol de las lomas o el cactus San Pedro), experimentaban su transformación en jaguar e iniciaban el vuelo mágico que le permitía comunicarse con los dioses y pedir sus favores para la comunidad y para los que padecían enfermedades.

El Shaman del Morro Eten.

Uno de estos shamanes habría sido el encontrado en Morro Eten. Según el arqueólogo Carlos Elera, su descubridor, sería el shaman más antiguo del Perú, con cerca de 2200 años de antigüedad.

En su tumba se hallaron los implementos propios de un shaman: una espátula para inhalar sustancias alucinógenas y una sonaja que cargaba incrustada en su pierna. Elera supone también que éste recorría largas distancias brindando su conocimiento a las comunidades aledañas.

Por otro lado, también se ha logrado identificar los complejos rituales realizados en el centro ceremonial y a cargo de los sacerdotes-shamanes . Carlos Elera, Lucy Salazar y Richard Burger han determinado que la religión Cupisnique efectuaba ritos en relación a los cerros, ritos de sacrificio al mar y rituales de decapitación; todo para el logro de la fertilidad.

Ritos en los Cerros

Ritos en relación a los cerros: En tiempos prehispánicos cerros y montañas fueron tenidos como espacios sagrados, por considerarse que estos lugares eran morada de los seres celestiales, los mismos que propiciaban las lluvias y otorgaban el agua de los ríos.

Tomando en cuenta la idea antes señalada, el alemán Michaell Tellenbach considera que en el templo Cupisnique de Monte Grande (valle de Jequetepeque - La Libertad) se habrían realizado ceremonias en relación al agua y los cerros. Al respecto, se ha

descubierto un conjunto ceremonial, cuya cima del espacio arquitectónico mayor se orienta deliberadamente hacia la visualización del río Jequetepeque y los contrafuertes andinos. En tanto que el espacio arquitectónico menor se orienta hacia la visualización de las laderas y cima del cerro Sapo.

Rituales de Sacrificio

Rituales de sacrificios al mar: Dada la importancia del agua para la labor agrícola, la maternidad de todas las aguas fue asignada al mar e inclusive se le consideró ente sagrado ofreciéndole por ello distintos rituales.

Henning Bischof, considera que el sitio Cupisnique de Morro Eten (Puerto Eten-Chiclayo) habría sido lugar elegido para la realización de rituales de sacrificio en honor del mar (Dramaturgia ritual- la denomina).

Para ello los cupisniques de Eten construyeron un camino con muros de piedra que conducía hasta el acantilado de 15 metro de altura, desde donde se habrían practicado los sacrificios. Bischof ha identificado imágenes de sacrificios parecidos en los templos de Sechín (Ancash), Las Haldas y Culebras (Lima).

Decapitación para la Fertilidad

Decapitación para la fertilidad: Uno de los motivos frecuentemente representado en el arte Cupisnique es el de las cabezas decapitadas. Muestras de bellísima cerámica escultórica, piezas de complicada escultura lítica y ornamentos de orfebrería abundan en representaciones de este tipo.

Realmente llamativa y bella es una pieza de cerámica escultórica, actualmente en poder del Museo de Louvre (Francia), en la que se observa a un personaje de la nobleza cupisnique autodegollándose con un cuchillo y derramando su propia sangre sobre el cuello.

La razón de estos sacrificios por decapitación o autodecapitación, se debería al deseo de propiciar la fertilidad de los campos. Lucy Salazar y Richard Burger han señalado que existen platos y vasos de piedra donde se observan junto a cabezas decapitadas representaciones de plantas con frutos y además aves, moluscos, reptiles, etc. Es decir, el acto de sacrificio transforma la muerte en elementos esenciales para la vida como son los productos agrícolas-.

En el mismo sentido el reconocido arqueólogo chiclayano Federico Kaufmann, cree que los sacrificios humanos fueron realizados para contrarrestrar las adversidades del clima (sequías e inundaciones) y a la vez para propiciar la fertilidad de la tierra con estas acciones mágico-religiosas. 

VI. ARTE

El arte de los pueblos Cupisnique se nutre y expresa el pensamiento religioso de la época, el mismo que es estructurado y difundido a través de los sacerdotes - shamanes del centro ceremonial.

En ese sentido las actividades artísticas serán testimonios tanto de sus creencias religiosas como también de los rituales religiosos celebrados por éste.

Entre las actividades artísticas los Cupisniques destacan : la orfebrería, cerámica,

escultura lítica (talla lítica), petroglifos, mates ornamentados, caracoles ornamentados y ornamentos tallados en hueso. 

ORFEBRERÍA

En la costa norte los pueblos Cupisnique iniciaron con gran maestría el trabajo orfebre con oro, la plata y el cobre. El asombroso desarrollo que alcanzaría posteriormente esta actividad (durante los Mochicas, Sican y Chimú) tiene su origen en esta época y con esta cultura.

Con metales preciosos extraídos de minas costeñas (como en el caso del Morro Eten) y otros traídos de las arenas auríferas de San Ignacio, Chinchipe y Alto Marañón, su orfebrería fue la primera en usar las técnicas del laminado, repujado, recortado y la fabricación de ornamentos bimetálicos (oro y plata).

Fue con dichas técnicas que los orfebres elaboraron ornamentos usados por las sacerdotes durante sus rituales, como: coronas o tocados, orejeras, narigueras, pectorales, pendientes, alfileres, sortijas, pinzas, máscaras, collares, espátulas, cucharas, cetros, vasos, depiladores, etc. Los diseños artísticos de la orfebrería Cupisnique están cargados de alegorías referidas al culto al dios Jaguar, el vuelo shamánico, cabezas decapitadas en relación a la fertilidad, entre otras.

En algunos sitios donde sacerdotes fueron enterrados como: Chongoyape, Morro Eten (Chiclayo) , Cerro Corbacho (Zaña- Lambayeque), Valle de Jequetepeque (La Libertad) , etc., se han encontrado hermosos ejemplares de los especialistas en orfebrería.

VII. BIBLIOGRAFÍA

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