IDEAS Magazine Edition 1.pdf

Embed Size (px)

DESCRIPTION

The Ideas Magazine contains several different topics in which the work of the students is classified. These include articles, essays, reviews, speeches, poems, biographies, letters, short stories and chronicles.colegio nueva granada, electronic publishing class, guzman julio, ideas, magazine.

Citation preview

  • OUR MISSIONTo prepare tomorrow`s leaders

    by educating the mind,nurturing the spirit,

    and strengthening the body.

  • EDITORS Guzmn Julio Camilo Bermdez Mery Tllez

    ORIGINAL DESIGN Eulalia Ospina Layout Guzmn Julio Cover Guzmn Julio Destop Publishing Class Camilo Bermdez Jose Maria Escalln Catalina Herrera

    PICTURES & PAINTINGS Photography Class - Stalin Lpez AP Art Class - Patricia Angel

    CLASS WORKS Martha Yanira Torres-Pre-Ap Espanol Sheldon Guenther -AP English Patricia Angel - AP Studio Art Caleb Harris - 10th Grade English Class Claudia Cern - French Class Cristina Meja - 9th Spanish Class Jesse Tangen-Mills - English Class Rosalba Figueroa - 10th Grade Spanish Class Gloria Gomez - 12th Spanish Class Guillermo Mina- 12th Filosofia Karina Lawrinowicz - 9th English Class Alex Aristizabal - 11th Chemistry Class Anne Gregory - Pre-AP Biology

    Special thanks Dwight Mott - H.S. Principal H.S. Teachers

    PRODUCTION CNG Communication Office

    PRINTED BY Cima Impresores E.U.

    ColegioNUEVA GRANADA Cra 2 Este N 70 - 20 Bogot, Colombia PBX (571) 212 35 11 Web www.cng.edu

  • 5IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Dear readers: Italo Calvino said The struggle of literature is in fact a struggle to escape from the confines of language; it stretches out from the utmost limits of what can be said; what stirs literature is the call and attraction of what is not in the dictionary. The collection of poems, essays, stories and other works by CNG High School students are proof to this. By inviting students to publish their works, both from class or from personal writing, this annual magazine is glad to portray the literary and artistic talent of its students.

    The purpose of the Editorial Team of the Desktop Publishing Class is to expose the elimination of literary and academic limits and expose the core of CNG intellect disregarding any speculations on academic rigor and scholar obligation. We are glad to breed and present to you a space of fiction and analysis, academic and leisure writing, a com-pilation of heterogeneous works that do not show a single idea when taken together but each one of them reflects the talent and intellectual capacity of High School students.

    EDITORIAL

  • 7IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    CONTENIDO

    ARTICLES - ARTCULOSUn nuevo Amanecer? Julin UribeThe End is near. Laura Steiner

    ESSAYS - ENSAYOSWho needs monkeys & alligators When we can have like, malls? Daniela ClevesChekhovs Uncle Vanya & Nathaniel Hawthornes The Scarlet Letter. Gabriel NietoFreedom. Julin UribeLa existencia y ex-sistencia. Juliana GmezEl existencialismo es un humanismo. Valentina Llins

    POEMS - POEMASProcrastination. Andrea ngel I will fight. Catalina HerreraConsolation. Chang Won LeeBefore The Man Was Gone. Chang Won LeeYearning. Chang Won LeeDeadalive. Daniel Snchez O.Will I Ever Understand? Daniela BuilesA Moment. Gabriel GonzlezFor You Id. Gabriel SalazarI Am. Gabriel SalazarOne, Two, Three. Johanna GoossensI thought I said goodbye. Johanna GoossensPerfect. Johanna GoossensCement. Johanna GoossensZidane Juan C. TamayoInfinite Transition. Juliana GmezAnd I Lost You For Ever. Laura SteinerEndless. Laura SteinerFighting For What I Really Want. Miguel PomboThe Light That Called Me. Pablo VaccaThe Fall. Nack Choon JungPuritan Literature In Shakespearen Style. Phil SmileyA Darkness Surrounds. Rodrigo ZamoraRonaldinho. Santiago SantosRemember Home. Sofa Milln

    89

    12

    14

    161722

    28303132343536373839404142434445464748495052545556

  • 8 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    5859

    6263646667687071

    747576777879808284858688909296969797979899100

    102105

    BIOGRAPHIES - BIOGRAFASAlone With My Thoughts. Sahar HerbolChined to a Bridge. Johanna Goossens

    LETTERS - CARTASLetter. Andrea ngelPresident. Julin Bermdez & Felipe MansillaFuneral. Johanna GoossensAlmighty. Julin Bermdez, Felipe Mansilla & Daniel SnchezSoldiers. Sahar A. Herbol Letter To Outsiders. Laura SteinerLetter. Laura SteinerMom. Sahar A. Herbol

    SHORT STORIES - HISTORIA CORTASLo nico que qued. Alejandra CarsonLa noche estrellada. Andrs MishaanEl guitarrista viejo. Andrea StephanouLos girasoles mgicos. Daniel BallesterosLa historia de Leo. Gabriel CarmonaThe Get-Well Card. Johanna Goossens Jester. Johanna GoossensAnd the Wheels on the Bus go Round and Round. Johanna GoossensEl molino. Juan David ArredondoEl enojo. Laura GmezShort Story. Laura SilvaI will no let you go. Laura SteinerUn vrtigo interminable. Laura Steiner Gothic Story. Michelle Gutirrez, Laura Steiner & Jos A. RozoCuento. Nicols MazueraAve Fnix. Nicols BejaranoEl mico. Nicols CadavidEl tratori. Nicols CadavidHistoria. Natalia Garca PeaBelleza de gladiador. Santiago SantosEl camalen. William Gaviria Longest Night. Sahar Herbol

    PLAYS - OBRAS DE TEATROThe Obsession House. Michelle Gutirrez, Laura Steiner & Jose A. RozoJournalism - Play (Reality Show) Nack Choon Jung & Johanna Goossens

  • cchronicles crnicas

  • 10 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Me levanto en la mitad de la noche, y me doy cuenta que no estoy soando. Siguen pre-sentes las mismas caras tristes, cansadas y sin esperanza que vivan ayer. No me gusta hacerles mal a estas personas, a estas personas que yo ni conozco, pero aun as lo ago. Todas las maanas amanezco con la misma mirada arrepentida; me avergenzo de mi misma. Yo soy una asesina. Cmo pude convertirme en una bestia sin sentimientos? A qu horas termin metida entre este infierno sin salida?

    Soy Viviana Len, tengo 17 aos, y hace tres me un a la guerrilla. Llevo 32 meses desesperada entre esta selva, y por ms que busque, no hallo escapatoria alguna. Todo comenz cuando conoc a Ral. Yo era buena estudiante, excelente hija y una amiga leal. Ral era muy apuesto y siete aos mayor que yo. l andaba con pistola, tena la moto ms rpida del barrio, y una reputacin de miedo. Recuerdo que sola mirarlo desde mi pupitre. Siempre con su camiseta esqueleto, con esos msculos de acero y esa pistola que lo haca ver tan sexy. En la fiesta de un amigo de mi hermano por fin nos conocimos. Bailamos, nos tomamos unas cervezas y pues ya se podrn imaginar lo que pas despus. Yo apenas tena catorce aos, aunque eso es muy normal por donde yo vivo. Llevbamos saliendo cinco meses, y yo estaba totalmente enamorada, aunque no s si de l o de mi nueva vida. Todos me respetaban, y ahora yo era la ms popular del barrio. Me alej de mi familia y de mis amigas, y me dediqu a beber y a estar con l. Se estaba juntando con una gente muy rara, y ya no era el mismo de antes conmigo, pero yo tena esperanzas de que todo iba a mejorar. l tena muchos problemas en el trabajo, y que por eso era que me pegaba. Pobrecito, estaba preocupado por mi bienestar. La verdad nunca tuve claro que era lo que haca o de donde sacaba la plata, pero saba que no deba preguntar.

    Un da, Ral no regres a casa del trabajo. Pasaron semanas y no haba noticias de l. Tena el corazn en pedazos, mi vida se desmoronaba. Mi hermano me cont que ha-ba odo que Ral se haba unido a las FARC. Trat de contactarlo de todas las maneras habidas y por haber, pero no recib respuesta alguna. En ese momento fue que tom la peor decisin de mi vida. Me un a la guerrilla. Yo pensaba que slo era andar por la selva unos das, recuperar a Ral, y regresar a mi vida de antes. Ay, pero que equivo-cada estaba!

    Al final yo s encontr a Ral, pero no como lo esperaba. El maldito se haba acostado con cual mosca se le pasara por delante. Al verme, se hizo el idiota. Afirm no cono-cerme, y por ser de un rango ms elevado que el mo, me golpe hasta dejarme incon-ciente. Quise irme, pero una vez adentro, salirte de es imposible. Soy un asco de ser humano, he matado a ms de cien personas, y no encuentro una srdida salida entre este hueco de mierda.

    Maldito Ral!Mariana Carrizosa - Espaol 10

    chronicles crnicas

  • 11IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    El da en el cual Edwin recibi su educacin

    Pablo Saab - Grado 10

    Edwin naci el 8 de octubre de 1999, desde chiquito Edwin era muy inteligente, adems tena una prodigiosa memoria, siempre preguntaba cosas muy interesantes y pronto cre-ci a ser un nio muy capaz. Saba las tablas de multiplicar, y tambin dividir todo esto a la mnima edad de 4 aos. Lo nico que faltaba era que l tuviera una buena educacin para poder ejercer este don que se le haba dado. Edwin viva en un barrio llamado La 5ta este era un barrio pobre, pero no era de muchsima miseria todos tenan sus casas hechas de ladrillo y de techo de zinc, Edwin viva en la casa ms alta de la montaa y sus padres se llamaban Gilberto y Zunilda, Gilberto trabajaba en una fbrica de hierro llamada Hierropol y Zunilda era una empleada domestica, ella dejaba todos los das a Edwin solo y ella se iba a trabajar con su esposo a las 5:30 de la maana. Edwin que-daba solo, y a veces sala a la terraza del techo que daba a una vista llena de casas con su misma arquitectura, muy poquitas veces vea nios jugando futbol o simplemente jugando algo que les produjera una sonrisa, a veces vea a nios con sus maletas y li-bros listos para ir al colegio y Edwin siempre pensaba que en algn futuro este iba a ser el con sus tareas hechas y listas con su maleta destinado a introducir su cerebro a otro poquito de conocimiento. El prximo ao entrara al colegio y Edwin contaba los das para poder ingresar a su educacin. Era el mes de su cumpleaos y el final del ao se aproximaba el estaba sumamente feliz y de regalo de cumpleaos pidi un morral, su mama se lo regalo con el esfuerzo y desempeo que le pona a su trabajo y le dijo que lo cuidara porque en unos meses estara en una clase educndose. Pasaron dos meses y Edwin segua contando, presenta que este iba a ser un buen da, pero esa noche llego su madre con devastadoras noticias que cambiaran el futuro del joven Edwin. La haban despedido y sin ms que decir se fue a descansar a su colchn roto. Edwin pens que en unos das su madre recuperara el trabajo y el podra ingresar al colegio con ayuda de su padre y de su madre, porque al papa no le alcanzaba la plata para sostener el colegio, y todo el mantenimiento que se le tena que hacer a la casa. Pronto se dio cuenta de que las probabilidades de su madre a que recibiera un empleo eran escasas y simplemente se rindi, y echo todo por la borda hasta su sueo de estudiar y volverse un muy buen profesional para poder sacar su familia adelante.

    Pasaron seis aos y Edwin empez a juntarse con una pandilla llena de violencia, cam-bio radicalmente su forma de ser, de repente se empez a volver ms hostil, como si el odio lo consumiera de una forma que sus ojos se pondran rojos cada vez que se pusiera bravo. Pronto se vio tan enredado en esta pandilla que se enfrentaban con otras perso-nas que invadan su territorio y les pegaban hasta dejarlas inconscientes, pareciera que Edwin no tuviera vuelta atrs que todo su don e inteligencia fue un desperdicio, y que pronto este regalo de Dios muriera con l. Un da Edwin iba caminando y paso cerca de una iglesia donde haba un seor viejo, desaseado y con canas, media 1.75m era muy delgada y se le vean los huesos en la cara. Mientras Edwin estaba caminando con su grupo de amigos delincuentes el seor lo llamo. Edwin trato de ignorarlo pero haba algo

    chronicles crnicas

  • 12 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    chronicles crnicas

    que lo haca querer ir donde este seor, y pronto fue a ver qu era lo que pasaba, al llegar el seor le dijo que se llamaba Isaas y que fue muy pobre cuando joven y se empez a juntar con pandillas hasta que su vida dio un giro inesperado y lo hizo llegar ah. Edwin no hablo y pens que estaba loco y se fue, pero al voltear este hombre ya no estaba. Esa misma noche su pandilla se enfrento con otra y se empezaron a pegar con vidrios y con cuchillos, Edwin se escapo temiendo su muerte, y cuando llego a su casa y se meti a su cama empez a pensar con todo lo que le haba dicho Isaas y pronto pens que l era capaz y que l poda sacar la plata para poder educarse. Empez a volverse un reciclador y al cabo de dos aos ya tena la plata para pagar su matrcula para ingresar al colegio. Al pagar su matrcula sinti un sentimiento lleno de recompensa. Empezara al da siguien-te, compro un morral y unos libros con la plata que el papa le haba prometido, estaba muy feliz. Al otro da se levanto temprano y se fue para su colegio, al llegar ah todos lo miraban mal, pero al cabo de unos meses ya tena buenos amigos y muy buenas califica-ciones. Sus profesoras lo describan como mentalmente superior y que fuera mejor que lo mandaran a otro colegio sin pagar, porque gracias a su inteligencia el colegio haba decidido becarlo. Los aos pasaron y Edwin se volvi un ejecutivo supremamente capaz, aprendi hablar ingls con mucha facilidad, y lo mandaron a Europa a vivir y a partir de los aos ha mandado plata para su familia para que puedan tener una vida digna.

    Martn Gutirrez 11th Grade

  • 13IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    chronicles crnicas

    Crnica de un adolescenteCamilo Aranguren - Grado 10

    Me llamo Alfredo Galindo y soy un empleado en la panadera en el barrio Jazmn de la ciudad de Bogot. Soy una persona que sufri mucho durante la infancia por la vio-lencia de nuestro pas, y esta es mi historia. Fue hace aproximadamente 9 aos que yo viva junto a mis padres y mi hermano mayor en nuestro rancho en el pueblo Guamal localizado en el departamento del Casanare. ramos muy felices, recuerdo que me gus-taba ver los rodeos en la plaza. No tenamos mucha plata pero aun as vivamos bien. Pero todo cambio con la llegada del grupo terrorista ELN. Nuestra tranquilidad se haba derrumbado y nuestra esperanza de salir adelante tambin.

    Una tarde de septiembre estbamos todos reunidos en la casa y de repente entraron forzosamente 4 miembros del ELN. Mi padre sali corriendo y a los pocos segundos se oyeron unos disparos. No estoy seguro si fueron dirigidos a mi padre lo que si se es que no volvi. Uno de los miembros nos apunto con un revolver mientras los otros 3 miem-bros tomaron a mi hermano y se lo fueron llevando. Recuerdo que mi mama gritaba con desesperacin. Ese fue la nica vez que lo vi llorar y la ltima vez que lo volv a ver. Tena 18 aos y se llamaba Carlos Galindo. No estuve seguro para que se lo llevaran pero ahora se que fue reclutado para pelear.

    Mi madre lloro tanto que creo que se le acabaron la lagrimas. Decidimos empacar e ir a vivir con mi ta Lucia en Villavicencio. Cogimos la flota libertadores y tomamos un viaje de aproximadamente 5 horas. Cuando llegamos mi ta nos recibi con cario. Lo que mi madre quera era ganar la suficiente plata para poder pagar un arriendo y que ese trabajo nos sostuviera. Al cabo de unos meses los resultados no le favorecieron mucho. Mi madre luego tomo la decisin de de viajar a la ciudad de Bogot y tratar de encontrar nuevas esperanzas de vida .Al llegar a Bogot no conocamos nada ni a nadie. Vivimos las primeras semanas como desplazados. Mientras mi mama trataba de buscar un em-pleo yo peda limosna en la calle 26 para por lo menos comer algo en la tarde. Despus de un rato mi madre encontr un modesto trabajo en una fbrica de calzado. Aunque no tenamos una residencia fija por lo menos podamos comer.

    Mi madre al cabo de un rato conoci a un seor llamado Francisco. Salieron y al poco rato se enamoraron. El nos llevo a vivir a un barrio llamado Engativa. Dos meses des-pus mi mama estaba embarazada y en el mismo instante que el se entero de la noticia nos echo de la casa y de nuevo ramos desplazados, pero esta vez tenamos dinero as que no duro mucho encontrar un cuarto en arriendo. Nos mudamos al barrio Roma unos meses despus no mudamos a barrio Jazmn y all consegu trabajo en la panadera de don Segundo. Estudio en el colegio Antonia Villavicencio. Lo pago con la plata que gano en la panadera mi hermano ya tiene 7 aos y se llama Carlos igual que mi herma-no. Extrao nuestro rancho el Guamal y espero algn da poder volver.

  • 14 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    AmanecerLorenza Rodrguez Espaol 10

    Eran las siete y diez. Mara Fernanda dio un par de vueltas en la cama antes de abrir y cerrar los ojos frentes a la luz radiante de la maana que se asomaba por su ventana. Ella era de las primeras en levantarse todos los das, incluso los fines de semana. Com-parta una habitacin con otras nueve nias, de las cuales la mayora eran de su misma edad. Pero no con todas se entenda bien. Ana Luisa, una muchachita a la que haban encontrado hacia poco abandonada en un callejn, era fastidiosa y mandona. Le haba bastado hablarle una vez para darse cuenta que no era la persona con la que le gustara familiarizarse. Mara Fernanda no era una nia a la que le gustara mucho socializar. Haba trabajado muy duro por acostumbrarse a la convivir. Entablar relaciones no era cosa fcil. Solo le haba hecho falta la llegada de otra nia ms para echar a perder todo. De igual forma, Mara hizo lo posible por convencerse de que las cosas resultaran por ser diferentes. La llegada de la nueva compaera seria desapercibida y discreta. Nada cambiaria, todo seguira siendo igual.

    Claramente no fue as. La llegada de Ana Luisa fue realmente catastrfica. Result por ser todo lo que Mara haba temido Pero volviendo a la realidad, Mara Fernanda se sent en su cama, aun con los ojos cansados, esperando la llegada de la niera para despertarlas. Despus de diez minutos de espera, decidi ir a arreglarse. Mara era una nia juiciosa, por ms que no le gustara demostrrselo a nadie. En realidad se diverta demasiado fingiendo su rebelda. Crea entretener a todo el mundo cuando la que ms lo disfrutaba era ella. Pero aun as, sus compaeras la protegan, dado que ella era la menor del grupo, la mas indmita pero a su vez la mas vulnerable.

    Camin hacia el bao y parndose en la butaca, se dedico a lavarse los dientes y la cara. Luego cepillo su pelo corto, que a decir verdad era un intento sin sentido alguno, pues al llegar la niera, le desbarataba su peinado, cual fuera, para peinarla como al resto de las nias. Esto era algo que Mara detestaba porque le gustaba ser diferente.

    Luego de ya haberse vestido, se puso a mirar por la ventana y a pensar n lo que seria el resto de su vida. Pens con tristeza que estaba condenada a vivir en la casa de adopcin para siempre. Nunca nadie la querra por no ser como las otras, por tener un carcter tan fuerte e indomable. Comenz a recordar esos das en la poca de navidad, cuando las nias reciban hermosas muecas de trapo con sencillos pero luminosos vestidos de colores. A Mara un par de veces la haban confundido un nio. Le decan que pronto se lo cambiaran por el regalo adecuado pero nunca era as.

    En mayo cumplira tres aos de estar en la casa de adopcin, y ya iban terminado febrero. Pensar en lo rpido que pasa el tiempo la aterraba, y no sabia si este era motivo de celebrar o ms bien llorar. Pronto serian cuatro aos, despus cinco, y as hasta que cumpliera doce aos de estada. Qu hara entonces? Estaba realmente perdida. Cump-lira dieciocho aos y no tendra idea de lo que es vivir en familia. Pero despus record lo que haba hablado con la sicloga.

    chronicles crnicas

  • 15IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    chronicles crnicas

    -Piensa en este lugar como un hogar, con una familia. No como una crcel, ni siquiera como un colegio, una familia.-

    Y eso era, una familia muy, muy grande con muchos hermanos y hermanas con quienes compartir. El pensar esto la alivi un poco. Y fue entonces que se dio cuenta de que estaba llorando. Se limpio los ojos con el puo del uniforme azul y sonriendo, volte el rostro para encontrar a la niera entrando por la puerta, anunciando el comienzo de un nuevo da.

    Ese da tuvimos que huir pues la guerrilla de seguro buscara a Jaime, ya que l se haba escapado. Empacamos slo lo necesario y partimos hacia la ciudad. Pero lejos de que nos importara dejar nuestro hogar y el pueblo, entendimos que lo nico importante era siempre permanecer los tres juntos: mi mam, mi hermano Jaime y yo. Ese da recibimos los dos, el mejor regalo de cumpleaos del mundo; un reencuentro y otra oportunidad para estar juntos.

  • 16 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Corriendo del PasadoManuela Cleves Espaol 10

    chronicles crnicas

    Apenas amaneca, y el sol cortaba suavemente por el cielo volviendo a la vida todo lo que tocaba con sus delicados rayos. El canto de los pjaros se oa nuevamente como en los das anteriores y como se oira en los das despus. Minutos despus se oan cremalleras y botines uniformados saliendo organizadamente de sus carpas alineadas, alistndose para un nuevo conteo. Treinta y nueve seria el nmero de hoy, tres menos que ayer, y probablemente tres ms que maana. Cuarenta y dos el nmero de unifor-mes, el nmero de vidas desperdiciadas, y el nmero de almas cicatrizadas y torturadas da a da por la miseria de la guerra. Despus de desperezarme, lentamente, reluctante a salir de mi carpa por miedo a lo que me esperara en el da que hasta ahora empezaba y que se acabara como todos los anteriores, y todos los que lo seguiran, me pare, me vest y Sal de afn para buscar mi sitio en la fila. Siguiendo la rutina que defina mi vida; decir mi numero, tomarme el fro caldo que llamaban desayuno, empacaba mi equipaje y iniciaba otra eterna caminata. Lo que no me imaginaba era que esa no era cualquier caminata, ni cualquier caldo. Seria el da que cambiaria mi vida.

    Corra rpidamente entre los rboles sin mirar atrs, tratando de sacar tantas imgenes de mi mente, tantas caras, tantos gritos. Lo mas triste de todo es que ni siquiera me sorprenda pues la muerte ya era parte de la rutina, tan comn y corriente como lo era despertarse a ese indiferente desayuno. Me tena que escapar, era algo que deba pasar y senta desde muy adentro que si no tomaba la oportunidad me arrepentira por el resto de mi insignificante vida en la lnea. Fue en este momento escalofriante que empec a pensar en mi vida, en esta historia y en el da que comenz todo.

    Ese da empez con un amanecer algo diferente a el que ya he mencionado. Hacia fro y el viento entraba por cualquier hueco a mi casa helando a todo en su camino, me tirita-ban los dientes y me encoga en mi cama enrollndome en la sobre sabana tratando de calentarme. Mi Madre y mi hermano ya se haban ido al trabajo en la fabrica yo, de solo nueve aos, empezara a trabajar el prximo ao. Era lo nico que quera, por fin poder trabajar junto a mi mama y mi hermano en la inmensa fabrica de flores. Por alguna razn extraa a mi no me permitan entrar a fabrica aun y mi mama deca mirando al piso que

  • 17IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    chronicles crnicas

    no era un lugar de nios y que debera aprovechar este ultimo ao para correr y jugar y vivir la vida de un nio. Lo deca de tal manera que hace a la fbrica sonar como un monstruo que me arrancara la niez del corazn. Suavemente me paraba de mi cama y hacia camino sobre las fras tabletas de barro, raspadas por los aos de uso, y me diriga a la cocina para comer algo de pan antes de salir. Era un sbado por lo cual ningn nio del barrio tenia escuela haciendo que las calles perecieran un cuento, lleno de risas y de felicidad. Nios corriendo por todas partes y nias jugando a saltar lazo, todos aprove-chando al mximo cada segundito de la vida, cada pasito. Estaba sentado en los escalones de una casa de barro, pequea y igualita a las otras cientos alrededor, pensando en como serian esos mismos nios en diez anos. Cuando seria que esos nios pierden la niez, esa simples y alegra con que ven la vida? Pues, todos fuimos nios, inocentes y felices, hasta el ms malo de los ladrones, o el ms macabro de los asesinos. Preguntas por ese estilo fluan por mi mente derramndose a m alrededor en una cascada de pensamiento. Antes de poder concluir lo ocurrido, haban nios corriendo por todas artes, gritando y llorando. Madres tiradas en el piso llorando y rezando cogindose el corazn como si les hubieran abierto el pecho con un cuchillo para arrancarles el alma. Un hombre, grande y fuerte, vestido uniformado con camuflaje y botines que llegaban a su pantorrilla, rapados y con una cicatriz escalofriante sobre su ojo derecho, me cogi del brazo y me paro. Me arrastraba hacia un camin viejo y raspado, con llantas altas y tan sucias que no se vea ya el caucho por la espesa capa de lodo que lo tapaba. Yo peleaba y gritaba, usando toda mi fuerza para librarme de el, antes de que pudiera contenerme lagrimas empezaron a rodar por mi rostro y pegaba patadas y manotazos desesperadamente hacia mi atacador que escasamente tenia que hacer un esfuerzo para seguir arrastrndome por las calientes piedritas que se sentan como pedacitos de carbn ardoroso sepultndose en mi delicada piel. Lo mire a los ojos y aun despus de dos aos no he podido olvidar su expresin. Era vaca, como si no tuviera alma, como si todo sentimiento cada pizca de emocin hubiera sido robada. Su rostro estaba sucio y sus ojeras prpuras y profundas le hacan hinchar los ojos hasta llegar a los parpados, empapados de sudor. Luego de tirarme adentro, con otros dos nios de mi vecindario que recuerdo muy bien, el camin empez a andar y saba que por ltima vez haba visto a todo lo que amaba. Por ultima vez haba vista a mi madre, haba escuchado se delicada voz y haba sentido su calidazo beso en mi mejilla despidindose de mi para ir al trabajo. Haba escuchando la profunda voz de mi hermano, y haba visto su blanca, luminosa sonrisa de oreja a oreja. Por ltima vez haba recorrido las calles de mi hogar como un nio, jugando como un nio, y pensando como un nio. Despus de eso la historia es difcil de recordar y ms de contar. Hubo mucha guerra, mucho fro, mucha sangre, mucho miedo y todo eso muchas veces.

    Segua corriendo y corriendo, ya no se oan disparos ni gritos pero segua corriendo igual. Calidas lgrimas se deslizaban en mis mejillas y el viento despelucaba mi cabello. Pensaba en esos cuarenta y dos y en todo su dolor, y segua corriendo y seguira corrien-do hasta que se me diera la gana de parar porque por primera vez en dos aos era libre de hacerlo.

    Ese da tuvimos que huir pues la guerrilla de seguro buscara a Jaime, ya que l se haba escapado. Empacamos slo lo necesario y partimos hacia la ciudad. Pero lejos de que nos importara dejar nuestro hogar y el pueblo, entendimos que lo nico importante era siempre permanecer los tres juntos: mi mam, mi hermano Jaime y yo. Ese da recibimos los dos, el mejor regalo de cumpleaos del mundo; un reencuentro y otra oportunidad para estar juntos.

  • 18 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Crnica Cristina Bayona Espaol 10

    Ayer fui promovido. Gracias a mi nuevo trabajo, finalmente puedo darle a mis hermanos las condiciones que se merecen. Me siento orgulloso y feliz; por primera vez en mucho tiempo, tengo ganas de seguir adelante y afrontar las experiencias que me traiga la vida. Mi mala suerte ha sido abundante y me tom mucho tiempo encontrar la esperanza que necesitaba para levantarme todos los das. Mi mala suerte es algo con lo que he cargado toda mi vida, pero en el ltimo ao, se volvi crnica.

    El 15 de octubre de 1988 a las 7:02 PM comet el peor error de mi vida. Ese da mi mam estaba muy enferma, estaba tan mal que no poda ni levantarse de la cama. Yo, siendo el primognito, era el encargado de la casa. Entre a la cocina para preparar algo de comer mientras mis hermanos hacan sus tareas. Como yo tambin tenia que estu-diar, dej el fogn prendido mientras yo iba por mis cuadernos que estaban en mi cuar-to. Mientras que esculcaba entre mi maleta o a mi hermana gritar desesperadamente. Llegu corriendo pero ya era demasiado tarde. La cocina estaba totalmente en llamas. Mis cuatro hermanos estaban metidos debajo de la mesa gritando y llorando. Qued pa-ralizado ante la situacin. Cuando finalmente reaccion, les di instrucciones a los nios para que salieran con mucho cuidado y me esperaran a fuera de la casa. Entre el pnico del dao que haba causado y el sentimiento de responsabilidad me qued intentando apagar el incendio en vez de ir por mi mam, ese se convertira en la peor decisin. Yo haba causado esto, por eso mismo tena que arreglarlo. Cuando me di cuenta que no haba nada ms que yo pudiera hacer, fui en busca de mi mam pero ya era demasiado tarde. Esa noche perd a mi mam.

    Esa misma noche fui en busca de ayuda, la nica persona que se me ocurri fue mi abuela ya que mi pap nos haba abandonado cuando naci la menor de los cinco. Dej a mi hermana encargada de mis hermanos y me fui solo a encontrarla. Desafortunada-mente no al encontr. Volv a donde se encontraban mis hermanos y trate de conseguir un lugar donde pasar la noche, al final nos conformamos con un puente. En medio de mi desesperacin comet mi prximo error. Tratando de ayudar a mis hermanos decid ro-barme unos panes, como ya algo de experiencia con los robos, me senta muy confiado y fui descuidado. Me cogieron con las manos en la masa y me metieron a la crcel. No saba cuanto tiempo tendra que aguantar el encierre, pero lo que ms me preocupaba eran mis hermanos. Debido a que era menor de edad, que acaba de perder a mi mam y mis hermanos y yo no tenamos a nadie en quien confiar el Juez tuvo consideracin y me solt a la semana.

    Sal en busca de mis hermanos con la ayuda de un trabajador social y me tom dos das encontrarlos. Me encontr con cuatro personas que nicamente sentan odio y rencor hacia m. Me culpaban por la muerte de mi mam y las malas condiciones en que se encontraban, incluso que culpaban por la posibilidad de que terminramos separados en diferentes orfanatos. Por ms convincentes que fueran mis argumentos, el Juez no tuvo compasin en esta segunda ocasin y nos separ.

    chronicles crnicas

  • 19IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    chronicles crnicas

    Mis nimos se encontraban en su punto ms bajo y no tena la energa para seguir con mi problemtica vida. Ya que no tena hermanos que cuidar y no tena ms propsitos en mi vida, llegu a la conclusin que la salida mas fcil era quitarme la vida. Me escap del orfanato donde me vigilaban constantemente y no haba manera de llevar acabo mi ltimo deseo. Estando en la calle confirme mis sentimientos de inestabilidad emocional y decid tirarme de un puente. Mientras estaba parado en la baranda me tome un mo-mento para recordar, lo que nico que venia a mi mente era tristeza y arrepentimiento. Los sucesos que sucedieron instantes despus cambiaron mi vida. Un seor se abalanz sobre m para impedir que cometiera una tercera mala decisin. Este seor se convirti en mi ngel de la guardia, me llev a su casa y me tom bajo su ala. Me encontr en condiciones tan buenas, que ni siquiera haba soado tener. El me cuido cinco meses hasta que cumpl los 18 aos. Me ayudo a conseguir trabajo y un hogar; me mostr el lado bueno de la vida.

    A los pocos meses de cumplir la mayora de edad, me propuse ir a todos los orfanatos para rescatar a mi familia. Teniendo en cuenta mi nueva situacin, volv ante el Juez para conseguir el permiso para responsabilizarme de mis hermanos. Impresionado con mis logros, el Juez me lo otorg. En menos de una semana haba recuperado a mi familia.

    Con el tiempo espero que la nica familia que me queda encuentre una manera de per-donarme y volverme a amar. Ya se que esta bien tener aspiraciones y espero poder hacer feliz a mi familia y darles todo lo que necesiten. Lo ms importante, es que descubr que la vida si vale la pena y que lo ultimo que se pierde es la esperanza.

  • 20 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Crnica Cristina Donado Espaol 10

    El barrio ya estaba dormido, todo estaba callado, a excepcin de los perros guardianes de la central de polica de Usme. Todo sonaba perfecto y no era difcil decir que no, a menos de que estuvieran los ojos fijados en la casa de los Salgado. Vivian al final de la colina, en una casa de material desechable. La familia estaba conformada por Luis Fernando, el pap, Mariza, la ama de casa, o ms conocida como mam, Fernando, el hijo mayor, y por ltimo, el hijo no deseado, Juan. Juan es un nio que ha crecido entre muchas peleas, tiene la autoestima muy baja, sus padres no lo tratan muy bien. Juan est en un colegio donde sus padres pagan veinte mil pesos al mes, eso es mucho pero ellos hacen un esfuerzo para mandarlo y no tenerlo en la casa. Mientras Juan, idolatraba a su pap, lo nico que reciba de l era desprecio y golpes.

    Un da Juan estaba merodeando por su casa, buscando solamente un pedazo de papel para su tarea. Lo que encontr no fue nada parecido a un papel, fue algo que lo im-presion, lo asust, y lo hizo salir corriendo olvidando sus deberes. Al otro da en la guardera, no lo mencion para nada, y aunque no poda parar de pensar en el hecho de que en su casa haba una de esas, sigui su da como si nada. Al pasar los das, em-pez a notar un comportamiento extrao en su pap, nunca estaba en su casa, lo nico que segua igual de l era ese maltrato, y las borracheras casi todos los das. Su mam segua igual, slo que un poco ms flaca y desgastada. Despus de unos das, y de ms problemas, Juan se olvid de lo que haba visto, de ese objeto que quita vidas.

    Pasaron los das, y los meses. Juan estaba cumpliendo sus 5 aos, y ya haba vivido ms que muchos de nosotros. En su cumpleaos, la nica celebracin que recibi fue la de su colegio. Ni siquiera fue gran cosa, le cantaron el primer verso de la cancin de cum-pleaos, y hasta ah lleg. Llegando a su casa, slo se encontr con un vecino que le dijo feliz cumpleaos. Fercho siempre haba estado muy pendiente de l. Juan lo invit a su casa, pero al acercarse se ahuyent por los gritos. Juan entr a la casa deprisa para ver qu pasaba, dejando a su profesora, la cual lo acompaaba a diario, se quedaba atrs coqueteando con Fercho. Cuando entro, lo primero que reconoci fue el objeto que alguna vez, vio en el gabinete de su pap. Estaba en una mano de su pap, en la otra cargaba una botella de ron sin etiqueta y casi vaca. Al ver esto Juan se asust, pero todo empeor cuando su padre empez a hablar. Le dijo lo siguiente;

    Juan hijuemadre por fin llega culicagao! Le tengo una linda historia que contar. Hace ms o menos 5 aos, en esta casa, todo era perfecto! Hasta que pas lo del caucho roto, y apareci la maldicin para esta familia. A los cinco aos, Juan ya entenda y senta todo lo que su pap le estaba diciendo no tuvo otra reaccin que quedar en shock ante la actuacin borracha de su pap. Su padre continuo Hoy ya se cumple el quinto aniversario, de tenerlo aqu. Y creo que no quiero aguantarme ni un ao ms con usted culicagao. Luis Fernando le apunt con el fierro. El gatillo sudaba, pues no quera ser parte de este homicidio, pero el gatillo no puede controlar los impulsos del dedo, que tembloroso, y sudoroso empez a presionar hacia abajo.

    chronicles crnicas

  • 21IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    chronicles crnicas

    Fernando no quiso permitir esto, el nio ya tena doce aos, y no pensaba ver la muerte de su nico hermano, al que a pesar de todo lo quera mucho. Se puso en el medio, y le dijo a su pap pap si lo va a matar a l, mteme a mi primero que l le falta vivir cosas que yo ya viv. En mitad de la borrachera, Luis Fernando se sent, un malestar le lleg de repente. El malestar era un recuerdo, se qued callado y empez a ver, como se identificaba en este momento con su padre, empez a recordar lo que se senta que a uno lo golpearan, o maltrataran. Solt la pistola, y qued en shock. En ese momento lleg la polica, Fercho los haba llamado despus de or todas las barbaridades. La po-lica entr al recinto, le cogi las manos a Luis Fernando, y lo arrestaron. Lo nico que ste pudo decir en medio del shock fue, los quiero mucho, y perdn, en especial a ti Juan. Y se fue, con la cara ms de miedo y arrepentimiento que se pueda tener. En el momento en el que Luis dijo esto, Juan sali del lapso que tuvo, y fue el nio ms feliz del mundo. Hasta que le dijeron que no iba a poder ver a su pap en un largo rato. Las notas bajaron, y el nio se deprimi, en la guardera, todos andaban preocupados, e hi-cieron lo posible para hacerlo sentir bien. El pap de Juan empez a pedir a gritos todos los das como una huelga, que le dejaran ver a sus hijos. No fue nada fcil ni para ellos, ni para el reencontrarse, pero lo lograron, y ahora que es libre y est consciente del mal que le hizo a su familia, se comporta como el mejor pap de el mundo y espera que sus hijos no cometan el mismo error.

    El barrio ya estaba dormido, todo estaba callado, a excepcin de los perros guardianes de la central de polica de Usme. Todo sonaba perfecto y no era difcil decir que no, a menos de que estuvieran los ojos fijados en la casa de los Mendez

  • 22 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    chronicles crnicas

    A la FuerzaMariana Florez Espaol 10

    Nuestro padre sali de la casa y se march para nunca ms volver. Jams lo volveramos a ver. Era el da despus de que mi hermano y yo cumplimos 4 aos. Nuestra madre, desconsolada, no comi ni durmi, sino simplemente se hecho a llorar sobre la cama. Como nosotros ramos tan pequeos, no pudimos entender lo que haba pasado. Lo que si entendamos era que todo iba a cambiar de ahora en adelante.

    Al pasar el tiempo, nos dimos cuenta que nuestra madre se esforzaba ms que las otras familias del pueblo por darnos lo necesario. Ella era costurera y encima de todo madre soltera. La verdad es que este trabajo no pagaba muy bien y por eso todos tenamos que sacrificarnos y esforzarnos ms. No obstante, algo que nunca falto en nuestro hogar fue el amor, y pensamos que esto nos bastara para ser felices y seguir adelante. Hasta que un da ca gravemente enferma.

    El mdico del pueblo me diagnostic asma. Esta enfermedad consiste en que las vas respiratorias se tapan y por lo tanto, la persona no puede respirar. No es muy grave si la persona se cuida y usa los medicamentos necesarios, pero nosotros no tenamos los recursos para pagarlos. Tuvimos que pedir ayuda y a veces, hasta rogar para que alguien me comprara las medicinas. Las soluciones ms efectivas fueron que mam le subi el precio de la ropa a sus clientes y en la iglesia, una pequea porcin de la limosna era destinada para mi salud. Dios mo, nos dio este milagrito de que las personas fueran generosas y nos ayudaran.

    Jaime, mi hermano, y yo crecimos rpido. O al menos eso es lo que dice mama. Cuando tenamos nueve aos, mam nos confes la razn por la que papa nos haba abando-nado. l era un paramilitar en el pueblo, donde los que mandaban eran la guerrilla. Por esto era que lo veamos tan poco y tambin era la misma causa de su abandono, o mejor dicho, huida. Esta confesin nos aterr y no supimos que hacer ni pensar. Tras esta mala noticia venia una an peor. La guerrilla llegara pronto para reclutar menores, con o sin su consentimiento.

    No se por qu no nos preocupamos en aquel momento. Y cuando camos en cuenta de lo que esto podra significar, ya era demasiado tarde. La guerrilla se llev a Jaime junto con otros 60 nios. Y en ese momento mam y yo, supimos que lo habamos perdido. La tristeza y la impotencia no sirvieron de nada. Lo nico que hicimos fue llorar y llorar y no parar.

    Decidimos esperar y tener fe en que Dios tendra misericordia con nosotras y as mi que-rido hermanito volvera. Pasaron das y los das se convirtieron en meses. Al cabo de un ao ya lo creamos muerto. Y cuando toda esperanza se perdi, mam decidi continuar

  • 23IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    chronicles crnicas

    como si Jaime nunca se hubiera ido. Al principio pens que se estaba enloqueciendo, pero despus entend que esa era su forma de hacer el duelo. La vida sin mi hermano no tena sentido alguno. Nuestra casa se mantena en silencio y las dos perdimos la risa.

    El da de mi cumpleaos numero diez, recib el mayor susto de mi vida. Alguien tocaba la puerta y al abrir, cre ver un fantasma. Me qued absorta mirando algo que segura-mente era un delirio, pero no poda evitar pensar que tambin poda ser un milagro. El espectro se rio con esa risa que solo poda pertenecer a mi hermano. Era Jaime! Haba vuelto. Ni mam ni yo podamos creerlo y estbamos tan felices que lloramos como lo habamos hecho el da de su partida.

    Ese da tuvimos que huir pues la guerrilla de seguro buscara a Jaime, ya que l se haba escapado. Empacamos slo lo necesario y partimos hacia la ciudad. Pero lejos de que nos importara dejar nuestro hogar y el pueblo, entendimos que lo nico importante era siempre permanecer los tres juntos: mi mam, mi hermano Jaime y yo. Ese da recibimos los dos, el mejor regalo de cumpleaos del mundo; un reencuentro y otra oportunidad para estar juntos.

  • 24 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    La vida no es tan dulce y linda para todo el mundo y, pues, menos va a ser para nios como yo que se vieron obligados a dejar sus familias por culpa a la violencia.

    Hola, me llamo John Alex Caicedo. Tengo 16 aos y soy guerrillero de la frente 36 de las FARC en la selva del Guaviare. Llegu a las FARC cuando tena 12 aos, pues recu-erdo con claridad ese da; el mismo que me cambi toda mi infancia.

    Era una poca lluviosa, las calles estaban encharcadas y los mosquitos alborotados. Caminaba del colegio hacia mi casa y en mi mano traa un barquito de origami que haba hecho en clase de matemticas despus de terminar todo mi trabajo. Fijndome en las calles inundadas de mi pueblito, a lo lejos, vi un charco que me llam la atencin. ste estaba como a diez pasos de m, y corr hacia l. Solt mi barquito y me distraje un largo rato. De repente escuch un tiroteo y muchos gritos. La gente de las tiendas de la plaza gritaba con desespero, ah mi infancia termin. Lo primero que pens fue que la guerrilla haba llegado. Ni siquiera alcanc a huir. Antes de salir corriendo sent una mano, spera y fra, agarras mi cuello con fuerza y firmeza. La noche pasaba y yo segua caminando por la selva virgen, sin saber a dnde iba. La selva era muy tupida y con diferentes especies de rboles. Yo iba como en la mitad de la fila y mis ojos slo vean pal frente. EL guerrillero mayor iba de primeras. Llevaba en su mano un enorme machete el cual usaba para cortar ramas y as abrir el camino. Despus de un largo recorrido, llegamos a un campamento lleno de cambuches camuflados entre los rboles.

    Nos instalaron y nos llamaron para explicarnos todo y. despus, nos sirvieron la comida. Despus la vida iba a cambiar del todo. La comida que nos haban dado eran unos pan-deyucas medio crudas, pero me las com porque mi estmago grua del hambre tan hijoemadre que tena. Los primeros das fueron una pesadilla. El fro en las noches y el miedo que tena me paralizaba y no me dejaba dormir!

    Al cabo de dos meses ya me haba acostumbrado. Mi vida era muy diferente, yo senta que estaba haciendo algo bueno ya que me haban convencido de que este grupo militar le estaba facilitando a Colombia conseguir la paz. Ahora s que todo esto es mentiras, me di cuenta de la triste realidad! Las FARC es un grupo colombiano revolucionario, y me di cuenta de que yo era un secuestrado ms en cautiverio. Igualmente yo estaba consciente que mi vida no tena vuelta atrs. Yo pensaba en escapar y volver a casa; pero esa idea desapareci cuando mataron a un buen amigo por intentar huir.

    Sueo con volver a mi vida de antes, a donde mi familia, mi escuela; y ahora slo me quedan esperanzas para algn da regresar y poder seguir jugando con mi barquito de origami, como lo haca esa tarde, en poca lluviosa. Las calles estaban encharcadas y los mosquitos alborotados.

    CrnicaDenise Hakim Espaol 10

    chronicles crnicas

  • 25IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Hoy me levant pensando que ira a finalmente llegar el da en el que mi trabajo fu-era a ser ms valorado. Al llegar a mi lugar de trabajo a las seis de la maana me di cuenta que segua teniendo un fantasa. Mi nombre es Eduardo tengo 19 anos, y llevo 4 trabajando como recolector de caf. Al da trabajo 10 horas y por cada hora me pagan 3.000 pesos. En total me gano 30.000 pesos en el da, para estar todo el da bajo el solo, aguantando calor sin nada q comer ni beber. Slo nos dan 30 minutos para almorzar, y el almuerzo lo tengo que traer desde mi casa. Con el saldo que gano tengo que man-tener a mi esposa y a mis dos hijas.

    Mi lucha da a da es por ellos, pero mi fantasa es que algn da el gerente de la empresa para la cual recolectamos este caf se de cuenta que nosotros somos los que hacemos que su empresa funcione, y que merecemos ms crdito que cualquier otro empleado. Nos deberan tener ms en cuenta a todos nosotros que a Juan Valdez.

    Antes de que mi mam muriera hace 1 ao me dijo que no me quejara tanto de mi trabajo pero es que es inevitable levantarse todos das a las 4 de la maana y acostarse a las 11 de la noche por que tuvimos que caminar kilmetros para llegar a nuestros hog-ares. Me dijo que le tena que dar las gracias a Dios de que tena un trabajo para poder mantener a mi familia y aunque ah ella tiene razn no puedo soportar esta injusticia que me invade da a da.

    Espero que algn da se haga justicia, que el da de maana la gente de Colombia sepa de donde verdaderamente viene el caf y quienes son los que verdaderamente mueven a las empresas grandes como Juan Valdez, Oma, Sello Rojo, guila roja etc. le doy gra-cias a Dios por mi trabajo porque tengo como mantener a mis niitas y a mi esposa.

    CrnicaMaria Lucia Pardo Espaol 10

    chronicles crnicas

  • 26 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Ms conocido como Ramoncito, este pequeo se levanta muy temprano y alista todos sus tiles de trabajo. Muy temprano sale de su casa en el barrio Egipto y baja hacia la sptima. Camina muchas cuadras hacia el norte, y en la calle 72 frente a un Foto Japn, deja todos sus tiles de trabajo, cierra los ojos, ora y le pide a Dios que le vaya bien, pues quiere conseguir algn centavito para poder sobrevivir un da mas en el duro frio de una ciudad desconocida para l.

    Sin saber matemticas, pues no recibi educacin alguna en su pueblo natal, sabe que tiene menos de un minuto que es lo que dura el semforo de la 72 con 11 para lavar los vidrios de los carros que se detienen en la luz roja. A l no le gusta mendigar, pues su mama dice que pedir limosna es como robar, eso s decentemente tal como afirma l.

    El agua la saca de una manguera donde riegan las plantas que adornan la Av. Chile, e inmediatamente la vierte en el balde amplio y sucio, el cual le tiene que durar con agua hasta la noche. No es la primera vez que veo una persona, ms an, un nio que trabaja de 8:00 AM a 8:00 PM casi sin descanso, siempre solo, sin tener ni siquiera tiempo para almorzar. Igual cual almuerzo si la gente lo desprecia a donde intente entrar a comprar algo.

    La esperanza de Ramoncito se enciende cada vez que el semforo se pone en rojo. Lastimosamente le dura tan poco, como el tiempo que dura el semforo cuando est en verde. En pocos minutos, empieza a limpiar los vidrios de los carros, muchas veces le pitan o le echan el carro encima para que no lo limpie, le suben la ventana y hasta lo in-sultan. Los conductores le notan la tristeza que reflejan sus ojos y su agona al rogar que alguien le d una moneda para que pueda comer por la noche. A cada rato, Ramoncito se planta firmemente en la ventana del conductor y sin murmurar palabra, no alcanza a decir ni siquiera por favor, y los conductores lo niegan, lo ignoran y lo desprecian. Es por eso que a veces le toca lanzarse al limpia brisas de adelante y a veces al de atrs esperando que algn conductor se apiade de l y le de alguna monedita.

    Su tristeza queda por siempre impregnada en la ventana del conductor sabiendo que mu-chos nunca vern al otro lado del vidrio. La gente no tiene nocin ni tanta imaginacin para comprender que es lo que pasa por la vida de Ramoncito. Entonces el pequeo se resigna, le agradece y con las manos vacas intenta nuevamente con otro carro. La suerte es la que gobierna ahora y el no abunda en las respuestas. Es otro semforo que cambia de rojo a verde sin que Ramoncito pueda echarse siquiera una moneda de veinte pesos al bolsillo del pantaln. Ramoncito tiene las manos negras de trabajar mientras los carros Mercedes, BMW y Volkswagen arrancan directo a los Rosales, uno de los barrios ms play de la capital, o simplemente siguen la trayectoria por la sptima.

    Cuando el semforo se pone en rojo

    Juan Manuel Venegas Espaol 10

    chronicles crnicas

  • 27IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Y a la tpica escena de pelcula aparece, empieza a hacer bastante fro, y aunque el pequeo limpiavidrios tirita por la noche helada, no es excusa para que huya de su misin y persiste en trabajar. Que lastima que muchos siguen pensando que es la tpica escena de pelcula y nunca llegan a darse cuenta que es una realidad que esta ms cerca de lo que ellos creen. Espera que nuevamente el semforo cambie a rojo para seguir trabajando. De nuevo el balde, el limpiavidrios y su sonrisa. Implacable. De nuevo la negacin, el vidrio, los carros y la tristeza.

    Ya se acerca la noche, y Ramoncito solo recibi $500 pesos. Seguramente para usted que est leyendo en este momento y para muchas personas ms 500 pesos es muy poco. Pero quinientos pesos le sirven para comprarse un Chocorramo o unas papas de paquete.

    Han pasado dos das y Ramoncito no aparece en la calle. Pareciera que se hubiera tomado el da libre, o quizs hoy no venga a trabajar. Esto es lo que piensan sus compa-eros de oficina que mientras tanto aprovechan que l no est para darle ms duro, y as ganarse lo que Ramoncito se ganara. En este mundo, donde escasea la plata, donde cuesta trabajo trabajar y donde cada colombiano empieza a quedarse sin empleo; o al menos uno que page siquiera el mnimo y nos tenga suscritos al sisben. Muchos necesi-tan el trabajo para mantener a la familia. Para sobrevivir en este mundo complicado e incluso para evitar caer en la pena de pasar hambreo de convertirse en ladrn.

    Despus de estar ausente esos das, sucio y ms cansado que nunca, Ramoncito llega a su lugar de trabajo y todo se repite una vez ms. Igual el ya est acostumbrado, o al menos eso es lo que l dice comenta lucho, unos de sus compaeros de oficina. Sus ojos, su fuerza y su cuerpo tal vez no estn acostumbrados como l quisiera. El trabajo lo va desgastando poco a poco. Menos horas de sueo, menos comida, ms trabajo, ms horas, ms noches.

    Al haberle preguntado el por qu de su ausencia los das anteriores, Ramoncito da una respuesta cmica. Es increble que un nio como l tenga suficiente humor y creatividad para momentos tan difciles como el que atraviesa casi a diario. es que quise tomarme unas cortas vacaciones Es lo que le dice a su compaeros y amigos mientras aban-dona en el suelo sus tiles. Definitivamente una respuesta agridulce, pero as es l, un nio de apenas 12 aos y con un enorme sentido del humor, que pone a pensar, cmo a muchos tanto trabajo nos pone a veces de muy mal humor.

    Cuntas veces vemos a nuestros padres o amigos que llegan muy cansados, a veces de mal genio y otras veces silenciosos despus del trabajo. En cambio, ste pequeo an-gelito siempre tiene un nimo esperanzador, una lucha diaria y sobre todo, un empuje a hacer las cosas que varios nios de nuestro nivel no lo haran. Su verraquera me deja impresionado, me llena de energa saber que existe gente como l. Lstima que nadie le preste aunque sea cinco minutos de su tiempo para conocerlo.

    chronicles crnicas

  • 28 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Ramoncito no es el nico nio que lucha incansablemente a diario para poder sobrevi-vir. Esta es la situacin de varios nios que trabajan en diferentes calles capitalinas. unos pueden sufrir ms que Ramoncito o quizs menos que l. As es la vida en las calles de Bogot. As viven lo que jams son escuchados, los que gracias a un pequeo porcentaje de bogotanos son auxiliados. Muchos no nos damos cuenta de su sufrimiento, de la realidad que viven aquellos seres, una realidad que puede ser muy distinta a la nuestra, pero que est ah y que aunque muchas veces queramos, nunca podremos ocultar.

    Y si as son los nios de la calle que se dedican a limpiar vidrios Cmo ser la realidad de los desplazados, los pordioseros, los indigentes, los desechables y los necesita-dos?

    chronicles crnicas

  • 29IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Los diecisis aos marcan el comienzo de los problemas de un ser humano. Aoraba con muchas ansias el da de mi decimosexto cumpleaos, el cual indicaba que podra iniciar mi vida frente al volante. No paso mucho tiempo, y en el mes de Febrero me present a la academia Fitipaldi.

    El chuzo como bien se puede describir, est ubicado en la carrera quince en un se-gundo piso. Despus de golpear en la puerta de vidrio por lo menos diez minutos, me abri una seora de edad con el saco chorreado y la boca llena de comida. Con mucha calma, la seora me tom los datos y dijo; espere a Wilian que ya viene. A la media hora se asom un extrao personaje en la puerta de vidrio con los brazos cubiertos de tatuajes, y una camiseta esqueleto de Iron Maiden. Mucho gusto Wilian dijo este ex-trao individuo y me gui hacia una camioneta Chevrolet Trooper de 1970.

    Wilian empez con un discurso que me dejo impresionado no solo por el contenido de la informacin, sino por la velocidad con la que hablaba. Encend el motor de la ca-mioneta y met primera. Manej con facilidad hasta el primer semforo. Cuando fren, el carro salt y sin esperar un segundo Wilian empez a hablar. Mire hermano usted tiene que sacar el embrague como si estuviera tocando a su novia.. suavecito. El lxico de este personaje era demasiado avanzado, y mi capacidad auditiva no estaba lo suficientemente desarrollada para recibir toda esa informacin. El primer da de clases termino si mayores inconvenientes.

    En la tercera clase ocurri otro fenmeno que se podra considerar un abuso e irrespeto al estudiante. Wilian me recogi en las horas de la maana y me dijo lo siguiente. Hermano prese ah en el Chopinar de la 127 que no he desayunado. Despus de esperar una hora dentro del carro Wilian sali del establecimiento como si se hubiera demorado cinco minutos. Manejamos por toda la ciudad hasta llegar a los parqueaderos del estadio El Campn. Aprender a parquear era mas difcil de lo que pensaba, y despus de mltiples intentos le empec a coger el tiro.

    La ltima clase marc el final de mis experiencias con Wilian. Como era costumbre, me recogi en mi casa en horas de la maana. Cuando me monte al Chevrolet mire hacia atrs y sin esperar mucho tiempo Wilian dijo; le presento a mi novia se le hace no? Observ que la seora que estaba sentada en la silla trasera llevaba una garrafa de jugo de naranja, lo cual y me puso un poco nervioso. Prend el carro y manej sin dificultad por unos cinco kilmetros. En el tercer semforo comet el error de todo principiante. Al arrancar el carro, saque el clutch o embrague de manera muy rpida lo cual apag el motor inmediatamente. Mientras esto pasaba, o un chillido en la parta trasera del carro. Cuando tuve la oportunidad de voltearme, me di cuenta que la ventana de la camioneta estaba totalmente cubierta de jugo de naranja. La idea de la novia de Wilian haba sido poco inteligente. Con este suceso termin en la academia Fitipaldi.

    Debo asegurar que haber conocido a Wilian fue una experiencia mas innovadora que la misma ciencia de manejar. Sus dichos, expresiones y lxico sern recordados por todo el que maneje la desgastada Chevrolet Trooper.

    El mundo de WilianJose Maria Escallon Grado 12

    chronicles crnicas

  • 30 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Tena 10 aos, Gabriel, cuando lo separaron de su padre y fue forzado a unirse a el grupo guerrillero las FARC. A los 3 meses aprendi a vivir con su metralleta, a quererla como su madre y su nica compaa, quien cuidara por l el resto de su vida. El vio e hizo cosas que nunca se hubiera imaginado mientras viva en la finca con su pap. Despus de un ao de haber estado en la selva sin ver ningn tipo de civilizacin, lo apuntaron a ser uno de los guardianes de ms o menos 50 secuestrados. l nunca se fij en los rostros, porque no quera quedar con sus imgenes en su mente por el resto de su vida. Las rdenes que les daban, tambin le sirvieron, ya que un era no interactuar con nadie por la misma razn. Mientras los vigilaba, l se acordaba de cmo su pap arriaba al ganado sobre su caballo y como l lo observaba como su hroe. A veces mientras estaba cuidando de los secuestrados, se quedaba dormido soando con su pap, y lo levantaban a golpes. Esto sigui as por un poco ms de 2 aos, hasta que Gabriel se empez a enloquecer con la imagen de su pap en su cabeza, que ya no pareca algo real, sino un sueo imposible.

    Una noche l decidi correr sin importar hacia donde; ya l senta que nada poda ser peor. El corri por 2 horas y media, atravesando riachuelos, matorrales, cruzando por todo el bosque tropical. No tena idea de donde estaba, ni hacia donde iba, solo quera correr lejos. De repente vio una cabaa en la mitad de la nada; el corri hacia ella con una emocin que casi llora, pero al acercarse, oy a una mujer gritando y unos claque-teos como algo pegndole a madera con gran fuerza. De inmediato Gabriel se asust y corri hacia su izquierda a mxima velocidad. Mientras huye, se tropieza con la raz de un rbol; mientras se frota la pierna para aliviar el dolor mira hacia arriba y ve unas nubes de un color como anaranjado. Su mente se demora en realizar, por la deshidrat-acin, que el color de las nubes es debido a unas luces.

    Rpidamente se levanta y toma agua de un riachuelo que ve. Contina corriendo hacia las luces con gran emocin. Despus de 30 minutos de estar corriendo hacia las luces llega a un pueblo. Ve que hay luces de muchos colores y decoraciones navideas por todos lados. Deprisa se acerca a la primera puerta y toca con afn. Un seor de unos 40 aos, le abre y reconoce su estado fsico. Extiende su brazo y lo hala hacia adentro mientras chequea si haba alguien por las calles. El seor le pregunta a Gabriel su nom-bre y que de donde venia. Gabriel le respondi con respiraciones hondas y rpidas, Me llamo Gabriel fui forzado a ser guerrillero por las FARC acab de escapar, llevo horas corriendo. Usted cmo se llama? el seor le respondi, soy Ramn. Nadie puede saber que est ac. Este pueblo es controlado por las FARC. Venga y le muestro donde quedarse por los siguientes das mientras averiguamos como sacarlo de ac.

    Las memorias de Gabriellvaro Cadavid Espaol 10

    chronicles crnicas

  • 31IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Gabriel dur 3 meses comiendo pan y agua de panela 2 veces al da esperando a que lo saquen de ese pueblo. Un da que pareca como cualquier otro para Gabriel, se oyeron tiros por todas partes. Explosiones que hacan temblar el piso, Gabriel se asust, pero no tena donde esconderse, ya que estaba en un tico vaco. Estos sonidos de guerra sigui-eron por media hora hasta que hubo un silencio absoluto. Gabriel esper unos minutos hasta que se asom a mirar que haba ocurrido, y vio soldados caminando por las calles. l salio corriendo hacia ellos gritndoles, Gracias, gracias, gracias! sinti como si todo se hubiera solucionado.

    l les explico todo a los soldados y fue llevado al comandante del escuadrn quien lo escuch mientras contaba su historia. El comandante llamo por un helicptero quien recogi a Gabriel y lo llev a Bogot. La historia de Gabriel fue contada por todos los noticieros y medios de comunicacin del pas y del mundo. Luego Gabriel fund una fundacin, la cual se la dedic al pap, con ayuda del gobierno, para aquellos que deci-dieron desarmarse y vivir en paz.

    chronicles crnicas

  • 32 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    En esta crnica tengo ganas de recordar el pasado, pensar en todos los momentos y deci-siones que me han trado a donde me encuentro hoy en da. Todava recuerdo mi primer da en el Nueva Granada, recuerdo que mi saln era el nmero 12-E y mi profesora se llamaba Mrs. Bookwalter. Camin por los corredores de Elemental hasta llegar al saln donde tendra que ir por el resto del ao. Apenas entr, sent las miradas de todos mis nuevos compaeros observndome y estudindome, analizando hasta el ms mnimo detalle, desde mis zapatos hasta mi maleta, o por lo menos as lo sent.

    Siempre he sido un poco tmida, y por lo general, prefiero quedarme callada en muchas ocasiones. La profesora me salud y me dijo que buscara mi escritorio asignado, as que obedec, y al encontrarlo me sent. Not que todos hablaban con sus amigos de sus vacaciones, y que al mismo tiempo empezaban a organizar sus nuevos cuadernos y tiles escolares, as que decid hacer lo mismo. Cuando iba a empezar, o una voz que me salud y me pregunt la misma pregunta que oira mil veces ese da: Tu eres nueva?, cmo si no fuera suficientemente obvio, pero haba algo diferente en ella, not la sinceridad en su voz. Me dijo que su nombre era Sofa y se ofreci a presentarme a algunos de los que luego se convertiran en mis mejores amigos por el resto de mi vida. Primero vino Silvia Gmez, una nia un poco loca, un poco desordenada, pero con un corazn enorme. Despus Ximena Manrique, la nia ms tierna, pero tambin fuerte que conozco. Y mi amigo Alejandro Pinzn, a quien desde que vi por primera vez, supe que iba a llegar muy lejos en la vida. Y por supuesto, Sofa Milln, la amiga ms incondicional que he tenido en toda mi vida. Es increble pensar que despus de 9 aos sigamos siendo tan amigas como lo fuimos desde el primer da.

    Y todo empez desde ese momento, con el pasar de los aos conoc al resto de mi familia, en Middle School llegaron Vernica, Laura y Mafe, a quienes considero mis hermanas. Cada una con caractersticas nicas, por ejemplo Mafe y su forma tan singular de ver la vida, siempre emocionada hasta por los detalles ms triviales, y que de alguna forma u otra siempre logra alegrarme el da. Ms adelante llegaron Mara Camila y Nata-lia, dos nias con quienes he pasado algunos de los momentos ms felices de mi vida.

    Al llegar ese da al saln 12-E, jams haba imaginado que dentro de este conocera a las personas que ms quiero y admiro en el mundo; a mis mejores amigos. Y que poco a poco este pequeo grupo ira creciendo y convirtindose en lo ms importante de mi vida.

    Mi primer da en el saln 12-ECatalina Herrera Grado 12

    chronicles crnicas

  • 33IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Mi mam nos dijo que nos bamos a mudar a buscar una mejor vida en la capital. No hace mucho que lo paracos se llevaron a mi pap al cielo pero de la forma ms cruel. Como l ya estaba empezando el proceso de desmovilizarse habamos decidido cambi-ar de vida para estar ms seguros e irnos lo antes posible para no correr el riesgo de que mataran a alguno de nosotros. El problema fue que una noche simplemente lo mataron a la entrada de mi casa y a los pocos das llegamos con mi mam a la ciudad de Bogot. Yo saba perfectamente quin haba matado a mi pap y juro que yo estaba dispuesto a hacerle pagar por todo el dao que le hicieron a mi familia.

    Mi mam sufra de epilepsia y por eso no poda trabajar as que mis hermanas Nelsy y Mnica y yo salamos bien tempranito todos los das a vender frunitas y pedir platica a la entrada de restaurantes o tal vez un poquito de comida para nosotros y mi mamita no nos vendra mal. A m me gustaba mucho ms Neiva pero ac nos iba mejor y est-bamos ms seguros y protegidos. En abril entraba al colegio y estbamos ahorrando con mucho esfuerzo para comprar los tiles escolares, a m me gustaba mucho estudiar y siempre quise ser un doctor bien bacano para poder curar a mi mam, a gente buena y ayudar a todos los del pueblo con mucho cario.

    Casi todas la noches tena pesadillas pensando que los paras iban a volver por nosotros ya que todos en la familia sabamos que mi pap sapi muchas estrategias y por eso lo torturaron y lo mataron. Yo saba que ellos con facilidad podan encontrarnos y esperaba que nunca llegaran. Esos hombres guardan mucho rencor y son muy malos y a uno lo pueden encontrar sin ellos tenerse que esforzar mucho. Lo peor fue que lo hicieron, encontraron a Moniquita y ella con mucha inocencia confi en esos hombres malos. La desaparecieron y nos mandaban muchas notas a la casita, eran muy desagradables y decan muchas cosas que le hacan a la nia. Mi mam lloraba mucho y se estaba enfermando mucho pero la peor carta fue cuando nos dijeron que la estaban violando, torturando y que nunca nos iban a volver a dar novedades de ella que lo merecamos por tener un pap como el mo. Nunca volvimos a saber de mi hermanita y en su honor yo segu muy juiciosos con mis estudios y cuid mucho de Nelsy y de mi mam. Du-rante da y noche no paraba de pensar quin se atrevera a hacerle cosas as a una niita tan chiquita e indefensa. Hubo un punto en que mi mam se enfermaba cada da ms y como no tenamos seguro ningn hospital la quera recibir no tard mucho en morir y yo ya con 19 me estaba graduando del colegio y Nelsy de 15 era todava una nia.

    Mi mam siempre quiso que yo tuviera una buena vida y que prosperara y pensando en ella decid aplicar para una beca de medicina, tengo muy buenas notas y yo se que puedo ser un gran doctor. La vida siempre nos da golpes muy fuertes, a algunos ms que a otros pero siempre hay que seguir adelante y uno no se puede rendir siempre pienso el orgullosos que se pondran mis paps si supieran todo lo que estoy tratando de salir adelante por que ahora yo soy el pap de mi hermana y le voy a dar la vida que merece la cual no implica muchos lujos para ser perfecta. Algn da voy a ser un muy prestigio-sos doctor que va a salvar miles de vidas y va a ayudar a miles de personas enfermas que tienen derecho a una vida digna.

    No me rendMariana Saldarriaga C. Espaol 10

    chronicles crnicas

  • 34 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Llova desde las tres y quince de la tarde. Debajo del techo de dos metros de altura, de la tienda Cerrajero Mvil, estaba Steven envuelto en peridicos empapados tratando de gastar el tiempo y as no tener que regresar a donde sus padres. Se acord de un momento parcialmente feliz tres noches antes, antes de ser desplazado por la violencia. Se imagin que de pronto nada de eso haba pasado ya que el nico sentimiento que exista en l era tristeza. Mir a su bolsillo perforado por la pestilencia de una vida in-humana y cont exactamente ochocientos cincuenta pesos que haba logrado recuadrar por dos seoras que en la vida lo tienen todo. A ellas se les haba ablandado el corazn cuando vieron a Steven, un nio con piel morena gastada por las llagas, llevando un letrero blanco el cual informaba su estado de desplazado y hurfano.

    Viendo que ya era la hora de regresar a la esquina de la iglesia, Steven corri por la lluvia sin saber que un indigente lo haba divisado veinte segundos antes en la distan-cia. En una fraccin de segundo cay al piso empujado por el ero que instintivamente le rob toda la plata que haba logrado obtener. Petrificado por el miedo, Steven sali corriendo sin ninguna direccin hasta que pudo llegar a donde sus padres estaban. Le preguntaron por la plata nada ms, sin siquiera saludarlo ni preguntarle por su salud. Al responder la vredad, recibi un golpe en la cara que lo mand a un charco. l, que ya ni saba qu pensar o hacer, huy a otra esquina deseando que nadie lo encontrara. No quera ni seguir vivo.

    Se levant a medianoche por una fuente de calor externa que, al abrir los ojos vio que era su madre con una cara preocupada pero al mismo tiempo radiante. Ella le comunic con su voz arrulladora disculpas por el golpe de su esposo y, tambin, su plan de sal-vacin. Le ofreci una huida inmediata sin mirar atrs y sin arrepentimiento, pues ella tambin estaba cansada de ese seor violento y despiadado. Steven, instantneamente, acept la propuesta y ambos corrieron como el rayo de luz al amanecer; tan rpido como pudieron hacia la libertad y las nuevas aspiraciones.

    Noche hacia la libertadIgnacio Gonzales, Pablo Saab, y Diego Albn Espaol 10

    chronicles crnicas

  • 35IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Lus se despierta temprano en la maana como cualquier otro nio lamentablemente el propsito de su madrugada no es ir a estudiar. l tiene que ir a trabajar con apenas quince aos Lus ya tiene que aportar su grano de arena en la casa, la situacin est difcil y que puede hacer el mejor trabajar que le peguen cuando llegue a la casa por venir con lo bolsillos vacos. Lus es un joven inteligente y le da rabia que su padrastro cree que puede llegar e imponer su ley as como se le da la gana. Pero que puede hacer l desde que su pap se fue, vctima de la violencia en Colombia. No le queda ms remedio que aguantarse al pendejo ese porque si no cascada segura. Lus se despierta y la luna sigue brillando con todo su esplendor apenas son las cuatro de la maana. No obstante tiene que apurarse para poder llegar a tiempo para el inicio de la construccin diaria. Se apura el camino por delante no es corto, por lo menos unos veinte kilmetros hasta el sitio de la construccin. Se descuida entonces apura el ritmo hasta llegar a un trote. Piensa en el picadito del almuerzo el nico momento del da en el que se le olvidan sus problemas.

    Despus de un largo da de trabajo Lus se dispone a devolverse a casa y en el camino unos vndalos le quitan el sueldo del da, Lus no sabe si preocuparse ms por la plata o la cascada que le espera en la casa por su padrastro. El nio se encuentra desesperado y en un ataque de adrenalina decide que por primera vez va a enfrentar a su padrastro. Se llena de valor y casi temblando se dirige en pasos inseguros hacia la puerta de su casa. Cuando abre la puerta de la humilde morada sus ojos no se ven sorprendidos al ver a su padrastro borracho preparndose para darle una golpiza, de la cual slo se salvara con una buena suma de dinero. Cuando el padrastro se dispone a preguntarle por la plata Lus se para enfrente y le dice que ya se aburri del mismo cuento todos los das. Este le dice que se calle y le manda un correazo. La madre llora impotentemente en una esquina en la cual sigilosamente mira a travs de las ranuras de sus dedos. Lus se llena de valor y le manda un puetazo al padrastro y en ese momento se le rompe el corazn a la madre porque ella sabe lo que esto significa, por lo menos la nariz rota para Lus, el padrastro es un hombre muy orgulloso y no dejar que esto le ocurra. Despus de la pelea el padrastro sale casi ileso excepto por ese golpe en su ojo pero Lus si queda destrozado ms de lo normal. Este incidente lleva a un impulso en Lus decide largarse de la casa, para siempre. La calle es un sitio duro para vivir le toca sufrir mucho a Lus sin embargo no sufre violencia fsica.

    El dilema esta ah muchos jvenes en Colombia enfrentan la misma situacin a la de Lus donde se ven abusados de uno u otra forma en la casa y esto los lleva terminar en la calle. Donde estn mejor en un sitio donde pude que se les proporcione con lo bsico para vivir pero son maltratados y abusados o en otro que les falte todo pero sean libres de una manera u otra. Esta es la realidad de muchos nios que se ven obligados a hacer decisiones que no deberan.

    Pobre libertadDiego Baena Espaol 10

    chronicles crnicas

  • 36 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    La navidad de 2007 fue una que nunca olvidar. Para empezar, estbamos en la finca, como de costumbre, pero el 26 por la maana nos fuimos dizque a una fundacin de ni-os pobres a pasar un rato con ellos y celebrarles la navidad. Este sitio, segn mis paps, lo haban conocido por una serie de donaciones que ya haban hecho y por ms raro y aburrido que nos son a mis hermanos y a m, no tuvimos ms remedio que meternos en el carro y esperar a llegar.

    Finalmente llegamos a un portn verde donde estuvimos parados por lo me-nos 20 minutos antes de que un seor apareciera. Por fin entramos y comenzamos el trayecto hacia la fundacin, pero debo admitir que durante todo ese tiempo slo estuve pensando en lo vaco que estaba ese sitio; despus de todo, se supona que era una fun-dacin de nios, pero no haba ninguno a la vista. Cuando llegamos a la sede y no se oa ni un murmuro, ingenuamente le pregunte a mi mama, Y dnde estn los nios? a lo que ella me respondi, Aqu no hay nios. Entonces me perd. Cmo as que bamos a una fundacin un 26 de diciembre a celebrarle la navidad a los nios cuando no haba ninguno? Al bajarnos del carro apareci un tal Yar que nos pidi que lo siguiramos y lo que vi a continuacin fue algo que ni me esperaba y que de repente lleno mi cara con una sonrisa.

    La supuesta fundacin de mis papas no era nada ms y nada menos que un criadero de perros y fue ah cuando entend todo el cuento que se haban inventado sobre una fundacin de nios, pues realmente bamos a recoger nuestro regalo de navi-dad: una cachorra labrador negra. Ya haban pasado casi seis meses desde la muerte de Canela (nuestra perra anterior) y en los ltimos dos mi hermana y yo no habamos hecho ms que insistirles a mis papas que compraran otro perro. Es ms, recuerdo per-fectamente que el nico regalo que le ped al nio dios esa navidad fue que convenciera a mi mama de que volviera a tener un perro, pues yo saba que ella realmente quera otro. As pues le escrib una carta, obviamente consciente de que mi mama era quien la lea, y supongo que en algo ayudo pues ahora estbamos frente a una jaula llena de labradores chiquitos. Yar entr a la jaula y de los 13 cachorros que haba, sac a una perrita: la nmero 11. Esa era la nuestra. Ese da fue uno de los ms felices de mi vida ya que era una nueva oportunidad para tener al animal que ms quiero del mundo otra vez en nuestra casa. Haca tiempo que habamos pensado en el nombre que nos gustara para otro perro el da que volviramos a tener uno, entonces, ese da ya sabamos que la perra se llamara Kala debido a su color negro (Kala es un trago a base de caf). Ese mismo da nos la llevamos para la casa y desde entonces ha permanecido ah convirtin-dose en mi nueva mejor amiga: en aquella persona en quien puedo confiar plenamente sabiendo que siempre va a estar ah para cuando la necesite.

    Hoy en da, Kala ya tiene un ao y 4 meses y aunque fue un terremoto durante los primeros das que estuvo en la casa, ya se ha calmado significativamente. Es la perra ms bonita que he visto en mi vida y me alegro de que sea nuestra, pero obviamente, su presencia no es razn para que olvide a Canela y mucho menos en que vea a esta nueva perra como un reemplazo de la anterior. Entiendo que son animales diferentes pero ambos igual de importantes para m.

    Un Regalo InesperadoJuan Guillermo Villaveces Grado 12

    chronicles crnicas

  • 37IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Santiago cerr con un portazo la puerta de su cuarto. Eran las tres de la maana de un sbado y se acababa de pelear con su padre, quien haba llegado a recogerlo de la casa de Too bastante pasado de tragos. Al no querer montarse en el carro con l, su padre arm una escena enorme y con tal de evitar los gritos, Santiago se mont en un taxi y se fue a casa. Se acost con la luz apagada pero no se durmi. Al rato oy como se abra la puerta y la ruidosa entrada de su padre y sinti como su corazn se le aceleraba. Cerr los ojos, respir hondo y rez.

    Dos das despus Santiago se alistaba para el colegio. Estratgicamente cogi una camise-ta manga larga y parti. Sigui escogiendo ropa que le cubriera los brazos enteros por el resto de la semana, y eventualmente la noche del viernes lleg. Junto con Too iba a comer con unas amigas, y se estaban cambiando cuando Too mir sin intencin los brazos de su amigo. Lo que vio le eriz la piel. Los brazos estaban llenos de huecos ne-gros, como si le hubieran apagado cajas enteras de cigarrillos en sus antebrazos. Sinti que Santiago lo estaba mirando y subi los ojos para que sus miradas se encontraran. La de Too expresaba incertidumbre y sorpresa, mientras que los de Santiago mostraban miedo. Cuando le pregunt lo ocurrido Santiago se apresur a cambiar de tema, insis-tiendo en que iban demasiado tarde.

    Too no durmi esa noche a pesar del cansancio. La imagen de su amigo herido le preo-cupada, y an ms el hecho que no quisiera compartir lo ocurrido. Estaba convencido de que era algo grave. Al mismo tiempo, Santiago tampoco dorma, debatiendo si deba contarle la verdad de los abusos de su padre. Por un lado senta que deba desahogarse, pero le preocupaba terminar involucrando a un inocente como Too y aparte no podra solucionar nada. Adems, si denunciaba a su padre, Santiago quedara sin su ms grande fuente de recursos econmicos y no poda imaginar su vida sin lujos.

    El tiempo pas, y la preocupacin de Too iba desapareciendo, pero muy lentamente. Trat de hablar con Santiago varias veces pero l siempre evitaba el tema o inventaba excusas, tanto que Too le empez a creer que todo era producto de su imaginacin. Hubo pocas donde otra vez not que Santiago constantemente se tapaba el antebrazo, pero Too se sacuda los pensamientos de su cabeza una vez ms, mientras que San-tiago aguantaba los abusos ocasionales de su padre siempre con la esperanza de poder graduarse rpido y terminar con todo.

    Una Vida Sin LujosGabriela Paredes Espaol 10

    chronicles crnicas

  • 38 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Juan llego a su casa a las 9:30 PM. Se vea cansado y con hambre. Puso la caja de los dulces al lado de su cama y se sent a comer junto a su mama, su hermano y su her-mana. No haba sido un da fcil para ninguno de los miembros de la familia, pero sin embargo pareca no importarles. Hablaban con calma, riendo en ocasiones, contn-dose lo que haba ocurrido por el transcurso del da.

    Esta era una familia pequea y trabajadora. No vivan en las mejores condiciones, peros aun as luchaban por obtener lo necesario y agradecan por cada cosa que obtenan. Don Oscar el papa de Juan y sus dos hermanos haban muerto meses atrs, pues este se haba ido a buscar al novio de su pequea hija, debido a que este no quera responder por el bebe que vena en camino. Al amenazarlo a muerte por no querer responder por su nieta, Don Oscar recibi un tiro y antes de que alguien pudiera hacer algo, muri. Don Oscar era el sustento econmico de la familia y dejo una casa en un barrio hu-milde de la ciudad. Los restantes de la familia Garca les toco trabajar.

    Juan se levantaba muy temprano cada maana y ayudaba a su mama y sus hermanos con todo lo que tuvieran que hacer. Ms o menos a las 7:30 AM volva a la casa y se pona el uniforme para ir a estudiar. Sala a estudiar a las 3:30 y sala a trabajar, a vender sus dulces por las calles de la ciudad. Regresaba a la casa a las 10:00 PM, hacia todas las tareas, y coma lo que su mama le tena preparado. Desde la muerte de su papa toda la familia empez a trabajar porque estaban ganando menos de un salario mnimo, y adems venia un bebe en el camino.

    La joven haba tenido complicaciones con el bebe. Por sus problemas de salud tuvo que abandonar el estudio y ahora deba trabajar en la casa haciendo labor domestica para poder ayudar a reducir gastos. Ella pasaba los das solitaria y de vez en cuando la vecina la acompaaba. Los dolores no muy frecuentes de su vientre eran muy incmo-dos y al estar sola en su casa no poda hacer ni siquiera los quehaceres bsicos.

    La situacin de la joven preocupaba a la familia. No tenan plata para pagar un buen mdico que la atendiera y le diera los remedios necesarios, y los mdicos del seguro no podan darle toda la atencin que necesitaba ni los caros remedios que deba tomarse. La nia tomaba Dolex para sus dolores y no le hacia ningn efecto.

    A medida que el embarazo avanzaba, la nia se pona peor, y con ella la familia. Los dos nios debieron empezar a faltar al colegio para conseguir la plata para sostenerse, pues su mama ya no poda salir a trabajar, debido a que su hija no se poda quedar sola. Estaba en cama y ya no poda levantarse. El nacimiento del bebe se acercaba, y los dolores cada vez ms fuertes.

    La familia se encontraba muy mal, no tena suficiente comida y no podan comprar lo que necesitaban, los nios no estaban recibiendo educacin. La angustia de la nia hacia enfermarse mas a diario y a la vez los otros se enfermaban de la preocupacin. Faltaban ya solo 15 das para el nacimiento del pequeo.

    Una Luz de VidaJuliana Michelsen Espaol 10

    chronicles crnicas

  • 39IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Llego el 3 de Julio. Ya era hora de que el pequeo naciera. La nia casi inconsciente tuvo que ir al hospital. Salieron a coger bus y haba mucho trancn. Llegaron al hospital y es-taba muy lleno. Las contracciones eran insoportables. Por fin entro a la sala de partos y el nio sin demoras naci. El nio que en un principio causo problemas, ahora traa nuevas esperanzas para la familia. Una luz de vida.

    chronicles crnicas

  • 40 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Cours Sans Frontires 2009Alex Alder, Franais II

    Cette anne jai voyag en Europe avec un groupe de mon cole. Nous avons atterri Paris vers midi et demi. Jtais anim. Ctait seulement mon seconde voyage en Europe. Avant jtais all en Angleterre, mais je navais pas voyag dans des autres pays en Eu-rope. Cette fois-ci, ctait diffrent, spcialement parce que jai voyag avec ma petite amie, Nikky. Jtais trs excit, ctait la premier fois que jtais tout seul avec elle sans ses parents. Quand nous nous sommes rencontrs avec notre guide, Sam, dabord, jai pens quil allait tre ennuyeux, mais ce ntait pas le cas.

    Les premiers trois jours nous avons visit Paris, la cit de lamour. Tout ctait vraiment beau, bien quil faisait mauvais et froid. Nous sommes alls Notre-Dame, Montmartre, la Tour Eiffel, un tour dans la Seine, au muse dOrsay, et finalement au Palais de Versailles, quelques kilomtres de Paris. Jai aim toutes les activits. Quand nous tions Paris, je pensais que nous allions visiter le Louvre, mais il ny avait pas as-sez de temps.

    Le troisime jour nous sommes partis en TGV pour le Sud de la France. Nous avons voyag en Provence. Nous y sommes arrivs la quatrime ou cinquime nuit de notre voyage. Ctait ma partie prfre de notre sjour.

    Chaque jour au Sud de la France il faisait trs bon, sauf le jour quand nous som-mes partis. Nous avons dormi dans un htel Nmes, mais pendant le jour nous avons voyag aux autres villes. Nous sommes partis de la gare en bus lhtel. Ctait trs dif-ficile de reconnatre quelque chose dans linfinie obscurit.

    Le lendemain matin, je me suis rveill trouver un trs bleu ciel grandiose. Ce jour-l, nous avons visit le centre de Nmes. Nous avons fait connaissance de larchitecture romaine de la rgion. Aprs, nous sommes alls au Pont du Gard, mais avant , nous avons fait des courses un march et nous avons achet de la nourriture pour faire un pique-nique. Nous avons mang au Pont du Gard. Je dsirais manger tellement, que je nai pas pris de photos du repas. Le lendemain nous avons senti la Mditerrane dans notre peau. Plus tard, Nikky et moi, nous avons djeun une quiche extraordinaire, deux sandwiches trs dlicieux, et une glace et une crpe trs sucrs.

    Finalement nous sommes partis pour Barcelone. En route, nous nous sommes arrts Carcassonne. Cest une petite ville fortifie. Ctait trs cool. Aprs nous avons continu notre chemin Barcelone.

    Barcelone nous avons eu beaucoup de temps libre. Ctait trs dlassant aprs tous ces tours guids. Mon ami Greg, Nikky, et moi avons fait la tourne de Barcelone. Nous avons visit le port et la plage, et nous avons explor la ville.

    Jadore ce voyage. Cest un de mes voyages prfrs de ma vie : mon cours sans frontires.

    chronicles crnicas

  • 41IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    chronicles crnicas

  • 42 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Clase De EspaolJuliana Jimnez Grado 12

    Hoy hablamos de un tema particularmente interesante en clase de espaol: la incapaci-dad de la gente de hacerse notar por medio de ser original. La discusin se dio debido a la lectura que estamos haciendo, La Resistencia de Ernesto Sbato. El autor habla puntualmente acerca de lo fcil que es para cualquier individuo dejarse llevar por la corriente, por las teoras y los valores que la mayora consideran correctos. A pesar de que no estoy de acuerdo con todas las tesis de este autor, debo admitir que estoy de acuerdo con l en cuanto a su teora sobre la originalidad. Es impresionante la manera en la que la gran mayora de la gente se conforma con creer y aparentar solo para que otros lo acrediten con nombres y estereotipos falsos. Pero aun ms impresionante son aquellos individuos que resaltan por sus ideas y por la originalidad de las mismas. Debi-do a esto, he decidido escribir la tercera crnica de mi vida acerca de lo que considero que es original acerca de mi porque si hay algo que quiero mantener a lo largo de mi vida es mi originalidad.

    Probablemente mi caracterstica ms notable es que nunca he tenido miedo de dar mi opinin. A veces es una caracterstica que acta de virtud porque me distingue, y a veces acta de defecto porque es preciso aprender cuando y donde dar una opinin. Adems mis opiniones se caracterizan por ser fuertes y usualmente bien argumentadas. Tener opiniones fuertes es una caracterstica que se deriva de otra de mis grandes cua-lidades: ser apasionada. Siempre he sentido que quien soy est directamente ligado a lo que pienso, y por lo tanto ser apasionada acerca de lo pienso es para m una manera de honrar lo que soy y lo que quiero ser. Hace aos que mi pasin es la medicina, sin embargo en todos mis aos de colegio nunca he descuidado otras materias porque siem-pre me he involucrado apasionadamente en otros temas. Desde chiquita fui la nia que vea programas de salas de emergencia y ciruga, pero con ese mismo inters he ledo y aprendido sobre historia, arte y literatura.

    Me parece interesante que estos aspectos de mi vida queden escritos porque uno de mis miedos ms grandes es dejar que la competitividad y el capitalismo del mundo afecten quien soy. A pesar de que sueo con seguir creciendo y madurando, siento que hay cosas que quiero que se queden intactas. Entre esas cosas estn las caractersticas que me hacen original, que hacen que la gente quiera saber que pienso para as descubrir quin soy.

    chronicles crnicas

  • 43IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    chronicles crnicas

  • 44 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

  • eessays ensayos

  • 46 IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    Anthem by Ayn Rand is a book that evokes a feeling of transcendence or passed and will motivate people in some way. Is this book a tragic one full of despair or is it actually a story of liberation and hope? I think this story makes us want to be free in every way and gives us hope because sometimes we only make new and important decisions when someone gives us the cue to do it, since we feel we arent capable enough to make a decision. In Anthem, the main character, Equality, lives in a society ruled by restrictions, punishment and oppression. It is he who decides he should do something for himself and find what a life with an individual spirit is.

    Equality was born physically different to the other human beings. He was taller and, according to the other characters, he was evil in his bones. The head of the society always looked at newborn children and predicted the type of person he or she would be. When they saw Equality they were frightened that he would be more intelligent than the rest. Therefore, it was order that Equality would become a sweeper, and I was surprised by the attitude that Equality put on when he was told this would be

    AN ANTHEM OF LIBERATIONAND HOPE

    Ignacio Gonzlez English 10th

    his job. He didnt argue as I thought he would. Although his profession seemed the least dangerous, it was what led him to question everything. As Equality discovered more and more things he started being more curious until one day the lack of freedom within him made him rebel to every rule the society had. In some way, Equality is similar to me since I feel that my freedom stands above everything else and it drives me to seek knowledge constantly.

    Why shouldnt we think that the punishment Equality received and the fact that he was a minority by the end of the book, make his situation one of despair? I think that nothing is entirely dead if theres at least one person that is willing to fight for it. Equality didnt let his freedom die and fade. Even at the moments that he was being punished, he knew that he was keeping something that could never be taken away from him. Throughout his life, Equality lost his fear of oppression and started to think about freedom to the point where he lost all his fear and realized that we is a word used only in second thought and willingly, while I represented everything he believed in

    essays ensayos

  • 47IDEAS H.S. MAGAZINE, June 2009

    as an individual. With these thoughts he knew that an individual spirit and the freedom in it was everything that meant to him, and in a very heroic Anthem he started giving hope to mankind by saying that the societies of slavery and oppression would end and liberty would ultimately lead the world to become a new, unique and free place. For the coming of that day I shall fight, Me and my sons and my chosen friends. For the freedom of Man. For his Rights. For his Life. For his Honor. (pg. 59) In this qu