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La Venida del Mesías en Gloria y Majestad Vol. III

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h 9 Si prcgnnfamos ahora qnk sigaif ican varias cD:as

l~iei i notables que leenios asi cn este texto clc S. .fa- cob0 , coiiio cti el de A d s , con eslo solo entrarwnos en sospecha sobre La bondad de esta eaplicacion. ~ Q L I ~ '

siplf ica , por exeinpio, aquelia pnlahra prinaunt , Iia- blando de la vocacion de las gentes? l Q u 6 significan aqnellaq otras post laaec revertar ? Estas gua t ro pala- bras , quc son capitnles, las onaiten no c h t d n t e 10s mas de 10s doctores que he paclido + e r . S d o u n o ha- 110 cpe se hace cargo de ellas: mas iq~ie' e s lo qtie dice? Dice brevisirnainentr que aluden ci la c o w e r - sion del Centurion Cornelio, llamado de Dios ei pri- mrro cle todos 10s gentiles, coma se refiere en el ca- pitulo I O de los aetos de Ins Ap6stoles. Wespaes cEe lo q u a l , post h ~ c , que& abierta la puerta, y empe- zaron Q e n t r a r , y hasia ahora estcin entraiido genies Q millares, que son las q u e forman principalinente e1 fabei-niculo espiritual de David. Compirese ahora 8s- ta explicacioii con el text0 , y se conocer:: ikcilinen- te su poca coherencin. De modo qtre primcro ? i s i t 6 IJios A las gentes para sacar cle entre ellas 1111 pue- 1310 paya su ironibre , 10 qual sucedi6 en la cooversion de Cornelio con toda st1 famiLia : p1-imum DCLLS visitn- mit sicinere ex gcnribus p o p l u i n non;ini suo. U despues de estas cmas qric snccdieron en la c a ~ a de Corne- l i o , post h ~ c , cntonccq ~ o l v i 6 Dios , y ediCcG cle nae- vo e! tnbernkfculo r!e Dnvitl post iimc reverlar, et rea'- di jcabo tabei-naculuna David , quod cecidit. P como cs- te taber~ibculo de Da\ i d segun tIicen 10s misinos tloc- t o re s , no cs otra rosa y:~e la iglcsia or is t idnn. sola- mente despues de la coiiTersioii del Centurion Cor- nelio es quando esta emperaria d cxistir.

- Fuera dc esto: iyut: significan en el texto de Am& aquellas paiahras ; e t i.ee&JZcabo illud sicut in diebus mtiquis ? ; Acaso la isiesia cristiana la ha seedificado Dios corn0 cstaha eta 10s tiernpos antigiias antes &3

mer ? Srrscitabo tabernncrdun8 David quod cecidit , e t remdificabo il2iLrE sicibl in diebuy anriquis. Despue; de reedificado e! tabernicnio de Darid (prosigue el pro- feta) -con7pi*ehe1zdet avotor ine$mrem , et culcatnr GVE

nziten:ena y e i n t i t , e t stillahsuit nzorztes dvlcedirtenz , e t om- ne? colles culli entint. i; Q.6 quiere decir esto? Lo quo -

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610 quiere decir responacn , es que ea la iglesia de Cris- t o , SLIS ministros ii operarios , tendr:in siempre so- h r e si grancles y continuas ocupaciones , sucedidndo- se 10s ininisterios unos d otros , sin deuarles un p u n - to de reposo , como sncedi6 5 10s Apdstoies , y s ~ - . cede hasta aliora Q 10s hombres apostdlicos. Que 10s montes destilarzin dulzura est0 e s , que llover,in con- suelos celestiales sohre 10s vcrdaderos fides : que to- dos 10s collaclos estartin cult ivados, csto e s , cpc no Ilahrzi pueblo 6 nacion algnnn dondc no trabajen ios ministros de la iglesia, y clonde no recojan aigunos frutos para Dios. Y a c p l l a s palahras clue sigijen: e t conuertana ca~~tivi~atent populi niei Israel .... e t planta- t o eos super lzrtntuin siiani e t izoa evellani cos ultra d e terrr, s u a , quanz dedi eis , i cdmo se entienden?

Parece que q u i debidrarnos esperar de In yiedad de tantps doctores cristianos algnna misericordia pa- r a 10s miseros judios : mas nnestras esperanzas yue- dan aqui tan clesvanecidas como siempre. No se atre- ven 6 dbrir ni consentir la apertnra cle una sola puer- t a , por el temor de algnna mala conseyuencia. hsi p e s ayuellas palabras con que acaba csta profecia: e t corzveriani caytivitalem populi niei Israel, e t ccd$- cabunt civitates desertas. ... et plantabo eos super h i d -

munz suana , e t non evellana eos 1~1ti-n de terra sua quam dedi cis, no t ienin otro sentido para elios sin0 esic: yo sacarE de l a cantividad del pecado y dcl demo- nio asi 6 Ias Sentes como Q los judios que creyeren: 10s plantar6 en su propia t ierra , id e s t , in ecclesia mea: y no 10s movcr6 jamas de esta t ierra yue les he claclo) si ellos no la clexan por sn iniyuidad , co- mo la hai l clexado tantos ap6stdtas y hereges.

Veis ayui ) sciror inio , toda la expiicacion , 6 co- mo dicen ) el verdaclero sentido intentcido por el Es- pir i tu Santo asi de la profecia de Am6s con10 del discurso de S. Jacoho en el concilio Sc Jerwsalen. S i este sentido pwrainerrte acomodaticio es suficicnte 6 130 , para contener plenamente ci cpien Insca en las escrituras la verdacl , no toca ini el resolverlo. Qual- yuiera se lo puadc p r e p t i t a r zi si misnio , pesQndolo fielmente en la bahn7a de1 sentido comun. El maTor trabajo e s t c p c si algnno se atreve a' alzar la YOZ,

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61 I picliendo algnna buena razon de toda esta inteligen- cia 6 sentido que flarnan verdadero y finico, no tie- ne que esperar otra respucata , que trcs 6 yuatro 6 nias renglones cle c i tas , est0 e s , que otros muchisi- mos doctores lo han entendido asi. Bien: 1 ~ ' en r p d se l ian fundado para 'pensarlo, entenderlo y expiicarlo asi ? Si esta rami1 6 rundamento n o se produce , d e que' sirve IIenar piginas enteras con citas cle autores?

Algunos clicen, esta inteligencia es de todos 10s s OrtodoxCs. cQuB cpiere decir esta en el

asunto de que iiablamos! iAcaso que solo IGS inte'r- p e t e s BterodoxGs 6 hereges pueden pensar oira cosa di iersa? iAcaso que dicha inieligencia es de lid cat6- lica , e s ortodoxs , es verdadera B ind ispntabk? No veis, sciior, la pretension y el emperio? iiVo veis el rniedo y escrilpulo con que nos quieren espaniar?

Creee todavia mas el empeiio y la pretension. Un autor grave dice forrnalmente ciiando k o t ro , que la sol~rerlicba inteiigencia de la profeecia de hi i ids , y par consiguiente del text0 de S. Jaeoho, rstd YA delinida conlo verdadera y literal contra Teodoro obispo de Mopsuesta, poi- el papa Vigilio en el concilio roma- no. Qaalquiera que lea estas palabras d a d por con- clnida esta disputa, YO tamhien la diem a1 punlo si esto fuese cierto , 6 sino friese evidenternenie falso. Digo evidentemente f d s o , pnrqae n o consta de la IIis- tor ia clue en tiempo dc Vigilio, ni quando fue ant i - papa, ni quando fne papa, se haya celehrado en Roma algnn concilio. A mas, las yiiestiones que tanto per- turharon la paz 'le la iglesia sobre 10s t i e s ce'iehjes capitulos, es 6 saber: sohre algiinos escrilos de I L ~ s ohispo de Edesa , de Teodoreto ohispo de Ciro, y de Teodoro ohispo de Mopsuesta, no pasaron en occi- denle, sino en oriente: no en Roina , sino en Cons- tant inopla . Y ii!timarnerrte , poryne las Pe5enta proIJ0- sicioiles extraviaclss cle 10s cscritos de Teodoro que se condcnaron, ninguna dc ellas tiene conexl"on, n i in mas minima relacion con el astinto que aliora t ra ia- ]nos. E n todas las sesenta proposieiones que pollen lo4 historiaclorcs no 5 ~ ' lee jamas tabern&~ln de David, ni profecia de B m B s , ni eouciiin de Jernsnlen, ni clis- cwso de S . Jncabo, ni otra cosn alsuna que con esto

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614 p u s de las nac iones ; y esta misma eoncordancia se patentiza e n e l ca'ntico, no nienos I~ reve que admi- r ah lc , del just0 S i m c o n , e l qual ten ie ido en sus bra. zos i la esperanza de Israel y de todo e l universo, e n el estaclo fodavia de infancia , anunci6 lieno del Espiritu §an1 0 , que seria primero h72en ad revela- tionena gertlircm , y d e s p e s gloriuin plebis ~ua? Israel. A todas estas c w a s y otras aemejantes que se leen e n 10s Iil~ros sagrados , parece que aluden aquellas dos palabras : primuna : pos t I L E C .

Acaso se podrd oponer, que ni en la p ro feda de Am& ni en 10s otros profetas se !ecn jamas estas pa- lahras: p a s t hEc resertar; sino siernpre 6 casi siem- p r e e s t a s otras: in d i e illa: in diebus i l l is: in tempo. re ill0 &c. Bien: j Y qu6 inconveniente se halla cn es to? El profeta dice : en aquel dia (s in sefialar el dia prec is0 de que I ~ a h i a ) yo resucitard e l tabern& culo de David que c a y 6 , y lo reedificare' como en 10s dias antiguos. §. Jacoho citando esia profccia sefiala c l dia 6 tieinpo de que Iiabla este y otros prcfetas, y lo seiiaia con eqtas tres palabras : poct Izec revertar, dando en ellas dos claras contraserias. Pr imcra : pos t 7mc: despues de estas cosas, eat0 e s , d e las perte- nrcientes a1 g p n niisterio de la vocacion de las gen- t e s , d quicncs Dios visitaba en pr imer Ingar. Segun- cln coiitrdsclia : revertar, yo vnlvere'. iQui6n volver i? j d d o d e , y L: que' volvenk? Qnien volier8 no puedc ser o i r o , sino aquel nlipmo Eioinbre noble, qui abiit in regionern langinqrtnnz accfpere sibi regnzcm e t rever- ti ( I ) , y cle qu:en se dixcron aquellas consolantes pa- l ahrdq : ?-ii.i Gff l f i a i quid srff l is irspicieizres in ciE~lLl?z?

Hic Jrsup qui crswrvpiris est rZ vobis in ce lun i , sic ve- niet q:ieniacL*nodum siclistis e t m ermtem in celunz. 2 Adon- d c ro lver i? VoiverA sin du& a l ~ u a a ri esta inisma tier- r a clue dcxd , y de donde es e n qrianlo liombre. ( A q116 volverk Volt er:i seczmclzirr, scripturns 5 resucitar en su propia r c r sona , y 6 edificar 6 reerlificar sicut iri diebra9 nnliqrjis (con aquella grandem y justicin dig- nas de un hombre Dios) el tahern8cnlo 6 soli0 dc Da- vid su padre, que capd: in die illa suscilabo tnber-

(1) Luc. c. 19. 9. 12.

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615 rrnciiluna David quod cecidit. Post IZOX reoertar et reE- dificabo tabei-nactrlum David , qrlod decitlit. Et veniet potestas prima rrgnzinz $lie Jerusulenz. Estas tiiti- mas palahras de1 profeta YIiqneas corresponden visi- blernente ti ayuellas otras de Am&: et reedficnbo iliud sicut in diebus antiqrris : y arnbas anuncian claramente el juieio de 10s vivos, 6 lo que cs, lo inismo, e l r e j n o del Mesiac: sohre 10s vivos.

De todo est0 que acabarnos de decir se sigue en conclusion : que priinero ha de reeoger Dios de en t r e las p t e s un paeblo S U J O en lugar de Israel, que no r p s o congrcgarse. Y clespixes que ya no se I d l e mas que r e c o g e r : despues que , aun lo que estaba recogido se vaya , 6 salientio luera p o r f d t a de fd , 6 corronipienclo tIentro por sobra de iniqui- dad: en suina: despues que se lienen 10s tieinpos d e Ias naciones : despues de todo esto empezari ti amanecer otro dia de que ianto hahlan 10s profe- tas de Dios , en el q u a l eimpemri el rnisino Seiior ti pasarse de las gentes i Ins ju6,ios : y preparados estos , 6 sus rcliquias preciosas con las preparacio- nes convenicnkcs , de que j a heinos hahlado , vol- i e r d tamnbien en su propia persona cde aqueeiin region longinqua , aclonde i'uc dias h a , m r i p e r e sibi regnrsnz r t reverti. V o l i e r i , digo , quando liaya recibido del niismo Padre potestatem , e t hoizoreni , el regnuin.

Se con$snaa todo lo dicho con otros lugares de la e scrihirn.

S . 5." I.' Isaias, haMando del Mesias, dice de 81 entre otras cosas ( I ) : super soIiuuIn D a v i d , e t su- per regnrinz e j u s sedebit, rrt con.r'niet illrrd , e t corro- borer in judicio, e t in justitia , antodo et usque in pena- piternunz : zelus Domini exercitiiunr fac ie t hoc. Si se compara e s t e texto 'con el de Anids citado por San .Incoho , y se pesan en balanza fiel! p r e c e irnposi- ble hallar entre ellos alguna diferencia &glia de con- siderncion. Isaias dice que el hfesias , como hijo de D a v i d , ti cluien est in hechas Jas proiiiesas, sc sen-

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( I ) c. 9. v. 7 .

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616 tar& algnn dia sohre S ~ I solio y sobre SII repno , para confirmarlo y corrohorario en juicio y en justitia. S. Jacobo ci tando en general verba pryhetcirum , y en particular la profecia de Ain6s, r!icc cine el Me- sias inismo, que ya eiitonces he Iiahia itio a l ciele, volverd i la tierra algun d i n , y reeciificard ei tither- n jcu lo cle David que c q 6 , le.trant6rdoio dei polvo de la t ierra donde est$ repul:adn, y que eft0 ser8 post lzcec. Am6s dice que en a r p e l dia , in d i e ilia, el Seiior resucitara , y IcsaniarG de la t ierra el ta- 3erndculo de David quod c c t i d i t , y lo edificari de nuevo , sicirt in ciiebus antipis.

P o r estas tiitinkas paiiabr,is po n o pienso decir ( n i SR me podrd atribuir un tal drspropdsi+o sin una ma- nifiesta injualicia) qxe el r q B o de! Atecsias de qzrc hablo serd 6 podrd scr sicut in diebus aizrrqriis , ba- ciendo c a w la palalira sicut sebre el modo , y n o piecisamelate s o h e la subsiancia. Yo pienso y {en- s" por cierto esto sewimdo. Si mis judios Elan pen- sado y pieizsan h a s h ilko?a lo p i m e r o , 6 alguna oira cos% seiuejante , ciertarncrite !>an errado -y yeIran en lo mas suhstanckti de s o s escrituras. Mas esie p otros e r io i e s semejanles , ~nnoificsiaiiiente groseros , se ies podrian Laciirnen!e coircgir con sus rni,inias escrituras.

2." Ea prorecia dc Isaias , cle que en6pe7dnios ri haljlar , la :ia;iawos exprewmcrr:e cithila en rl evan- gciio ( I ) por ei Avgel S. C s a b i i ~ l , enviado de Dios ti la Snntisima Virgen Maria. k n t r e l a s cobas que e! i ~ g 0 1 le promete dc parte de Ditrs, una de ellas e s , lo ynr contietie y naunc ia esprcialmente Ia p io- fecia de Isa inq : et dul:il iili Dmr si.cJen? David pn- tris ejus , et regnccT;t in demo Jacob iic leternlint , e t regiai ejiis nciz t i it c6rzis. Eqta solemnisima prowesa, heclin a !a S a n t i s i r u Xi:i-E-n para el Meyias su h j o , es cierto q-ce h a t t n alisra ilo se !e h a citinplitlo, y c s de! mitmo nzr;clo cierto , qiir es lda irnica que no se hz c::irlpiIrlo ; p e s tcdas las o t ias dc que e l & n p i la aie.-,ord de parte cir Dios, se cunipdercn ppriectibirnzrnente en SZI sentido natural y piopic,

3.

..

( I ) Lvc. c. I . v. 32.

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coni0 e$ claro por todo el texto sagrado y p o r el d o p a que se fun& en 61.

Si esta dnica promesa n o se ha cvmplido hasta aliora nnestra Seliora parece necesario que re le cumpla algnna t e z en aqurl iriisrno serttido propio y natural en que se. cump!ieron las otras , pues n o bay mas razon paia ayueiias , que para esta. Si pa se le h a curnplido esta promesa, como se intenta b u - poner deberj ~ ~ ~ t b t n a r t e con distincion y claiif’lnd su perfecto curnpliili;euto, sin recnr r i r para esto a1 6nnAo sacerclucio de 6r i s to secuizclrlm ordiizein Mekhi- scdeLh, con eii qndS e i trono (le David no tiene co- nextctn aiguna , ni la mas miriirnd relacion : siendo c:aro que la promesa n o hahia del sacerdocio , sino del trooo de David : dabii illi Dew seu’eiib David patris (jus. Ebia promesa pces i y a n d o b e h a cumplido, 6 qiidndo >e h a podido currip:ir ? E n totla la liistoria sa-

radd no Eiallainos ot:a c05a , sino que el Mesias liijo 3e Davit! entrci una vcz pili>jicamente en Jerusalen entLe l a b dclaniaciones dr la pielw, con ayiieila pompa nue- ,d e‘ inairditn q u e reiieien 10s evangelistab ; mas tam- Jjien sabernos , que lejos d e ponrrio en el t rono ds Dav id , io pnsieron seis dias despnes e a otro tro11o de cioior J’ de ignominin , q a n l ftre la cruz : y la pjehe inisnid que io hailia aciarnado por hijo de Da- \ i d , clam6 contra 61 d grandes voces crucfige , cru-

Despnes de SLI rnuerse y resurreccion sahemos de cierto que se fue a1 cieio como 61 mismo habia di- cho : ac.cipere sibi rpgiizm, e t reverti. Sahemos de c i r r to que all5 en el cielo est; sentatlo en el t rono niil;mo de SKI Padre : sedi c u m Patre ineo in Lrono . e j w . Sahemos de cierto que all6 estarli sentado: do- nee ponnm iiiinzicos tuos JcabeEluni pedrini tuoruna ; .y coin0 ai iade e l Ap6,tol : de catero spcctnns &c. Sabe- mos en fin cpe vol\kr;i a!gun din d esta nuestra tier- ra ) judicare wiwos e t ntortzios, cu jw regni non erit

$.is. Mas i i i el trc-no de Dios , adonde aliora est&, ni el trorio de i g n ~ , n i i n i a , donde lo pusieron 105 EU-

J O T , se puetle llaiiiar , sin tam martifiesta violencia, e i trono 6 bOli0 6 k t ~ J t ? l ” i ~ ~ ~ C ~ ~ ~ O de David su padre , que le est& tan esprebarneatc prometido.

ci2.g e.

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61s Responcler: 1 esto, que el reyao dcl Mesias de que

hablan h s escrituras no es tcrreno ni mundaiio sino ccleatial y divino ; no t empora l , sino eterno; no carnal , sino espiritual. Asi anoqae . se dice c p e at " V l d a s se le clari e l trono de David su padre : que se serrtar8 en este t r o n o , dzspues de recdificado y levantado del polvo de la t ierra : qne reynara' eter- namente in domo Jacob ; mas todo esto no pue- cle en~ender se literalrnenie, sino en otro sentido per - fectisimo, qml es el aleg6rico y espiri tual , en p a n - t o el trono de David sohre todo Israel fue una figu- ra 6 sornbra del trono espiritual de Cristo solxe todos 10s cr ryentes , (clue no es otra cosa qm su sumo sacerdocio seciindunt ordinenz Ilfelclaisedech ). Yo h e protestado en otras partes , q n p no pienso oponerine d e modo algnno a lo qur se dice 6 se yuiere decir en este sentido aleghrico y cspiritual ; lo qual yo tambien lo dig0 y lo cren coiiio todos 10s iicles. A lo que si me opongo con toclas mis de'biles i'uer- zas , es a1 enipeiio y pretensioti de 10s que ya ieren clespciticamente que este sea e l xinico sentido de l a s fiantas escritnras , y que el perisar otra cosd fuera 5e esto, es un e r r o r , es un suefio , y es tin despro- p6sito grosero. Mas es to , i c h o lo p ruehan? YO & Io menos no hallo prueba yae me satisfaga.

Es certisimo q n e el reyno del Mesias de q u e ha- blan Ias escriinras no p e d e ser un reyno te r reno y mundano , sino celestial y clivino : no puede ser r r y n o temporal, sin0 e te rno : no puede sei- an rey- no carnal , si40 espir i tual ; es decir , no puede sei- el reyno del Mesias , coin0 10s reyrios que hasta ahora hemos visto en nuestro mund6 , poryue sus principes han sido y son puros h o m b r e s , y su po- testad puramente terrena y mundana ; mas el reyno de l Mesias se IlamarS con propieclad celestial , di- vino y eterno , porque si bien e r i s t i r s en la t ierra y sobre 10s liomhres , SII autoridad su poder y la persona que lo exercc son todu celestial y divino, y ianias ha de tener f i n . Entendiclas dc este modo las palabras t e r r eno munclana , celestial y divino, crsarii a1 moinento todn qitrstion y tocla disputa, y se responderd s otra dificultad clue suele oponerse,

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619 y se reduce ti que Jesucristo ( d i c e n ) declar6 pre- siderite Pilatos ( an le cuyo tribunal estaba C O ~ O reo de lesa magestad, acusado falsaniente de habe r que- rid0 liacerse l e y , y rebelarse contra el Cdsar) ~ U C

$11 reyno no era tle este inurido : regmint nieunr nolz est de hoc nmndo ; luego no hay que esyerar el rey- no cle Cristo en este mundo , -por mas ylle lo a n u n - cicn 6 parezca que lo aiiuncian las escrituras. Mas A esta inisina dificultad dclsen contestar antes 10s rnismos que la proponcn ; pues la igksia presente, d quien llama11 reyno de Cristo , ciertamenfe n o es de otro rnnnclo , sino de este : ni se compone de $ngcles 6 de otras criaturas incdgnitas , sirlo cfe h o m - bres racionales clel linage de Adan , que realmente habitan en este m u n d o , y son de este mnndo. Res- ponden y con razon clue Cristo no clixo clue su rey- no no estaba cn cste mundo , sino que no era de este mundo ; a s i aunque In iglesia cristiana estd real- mente en este mundo , con todo eso no es CIP este inundo ; ya poi-que no e s de institucion humana, sino divina ; ya porquc 110 se conl'orma, 6 no debc conformarse con las costuinhres y imkximas del nmn- d o , que propiamente Ilamarnos mnndanas. Bien : lue- .go en este niisnio sentido pucde mny liien estur en cste mundo el r e y n o de Cristo de que vamos ha- blando , sin sei. reyno de este mundo, esto e s , sin tener semejanza alguna con 10s reynos de esle mnn- d o , ni conformarse en Io mas miniino con sus mdxf- mas y costnmbres. En este sentido, y solo en PI dixo e l mismo Seiior cle s i , p de s u s ApGstoles : de mrcn- do nor1 sunt , siczit e t ego non s u m de mundo ( I ) .

Mas para salir cle toda clucfa p coinprehender hien el sentido de este t e x t o , lejmoslo integro, p e s FS brcve : Regnuin rneiint ncln est de hoc nzundo. Si ex hoc niundo esset regnunz nieunz , nzinisiri r i ze i uti- qiie decertnrent , lit non traderet Jirdeis. fl1112c autent regnunz meunz non es t hinc (7).

que' signi- fican en realidad? Y o temo rnuclio obscnrccerlas, si me mcto 5 explicarlas. Por tanto ias dexo sin Locar-

Estas ~ l t i m a s palabras : iiunc autenz ,

( I ) Joan. c . 1 7 . v. 16. (a) Joan. c . 18. w. 56.

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620 fas ; pnrecidndome qrie ellas se vxplican I s i mismas, y expiica3 a l mismo ticiilpo todo ri texto.

El3 cl baAmo 171 lrabla David (proi'eta p r e y ) dz In pronrcssa que Dim le tenia lrgcila, confirnlada c o : ~ j u w m e n t o d ' clue el Mesias su hijo se sentaria algun &a en su nlisnio trnno ; p p a r n mayor cor&- mzcinn aoade , cpie e5ta proinesa de Dios e.; tlnn ocr- dad q n e no f ~ i l t a i ~ ~ ni qnedar8 frcistrdda : Jtrravit DO- minus Urmid verilatenz , e t izon Jizulrabitrir enni : de

fruclu ventris tui ponam super sedena tuam. EsIa pro- mt'sa de B i o s conlirmacla con jurameiito, 1 de qnien h a b h ? Rabla de Snlornon , y de Lo5 otros reges de Jar id , 6 habla de Cristo Jesus? Los iQt6rprebec di- cr-n cornriamente q:ie la promesa dc Dios , liabla l i - teral 6 inmediatameate de Salornon, y de 10s rcpes que siguieron hasta Jeconias 6 Sedecias , donde cay6 el trono de David y detde cuga 6poca no se h a vuelto B ver en nuestra iierra ; y que solamente ha- l-sla del Mesias e n sentido aleij6rico y espirituni. Bo obstante yo me atrevo B dccir , que la promesa de Dios confirrnada con jnramento h a b l n !iter.almente d e solo e l M ~ s i a s , no de Salomon ni de 10s otros re - yes de Judci. ~a razon en qne mc fundo es el capi- tulo z de 10s actos de 10s Ap6stoles, desde el ver- ~ i c a l o 25 hasta e l 31. hlli sc: Ice qae S. Ped$o en el mismo clia de PpntPcosfes, acabndo de recihir ple- nisimamente el E;piritn Santo, hi60 ayriei primer per- mon d i l i n o y acliniiahle, en cpe proh6 6 10s j u d i o s eon tres lugares de 10s salmos de I ) d \ i d , t res verda- des propias y pecnliares del inismo Mesia-s Jesucris- t o fiijo de David secuizdanz carizcm. Primera : que aqucf mismo Jesus polens in opere e t sernzone .que ellos mis- mob liabian repiwhado suspendentes f i t bgno realmcn- t e hahia resncifailo segnn las eserituras; de lo q u a l e'l miismo, y todos 10s otros Ap6stoles y discipulos eran t e s t i p s oeulares ; pnes lo Iiahian visto cleapnes de resucitado , no a n a soia sino niucliisivrins veces: ha- bian comido y hehido con d: hahian oiclo su VOT: '

liahian recibido sus instrurcianea 9 mxnclatns antes de pnrtirse para el cieto. P era imiioqih!e segiin es- to, y segura las escritriras, que el i n f c r n o 10 re ta - v k s s mucho tiernpo dcntro de si : juxta quod inrpos-

3."

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62 2 frirctu ventris tui poiaana super scckna tuam del salmo 131 delle hablar literal, inmediata y ilnicamente de Cristo ; pues no hay nias razon ni mas privilesio pa- ra nyoeHos que pain este , siendo como aqinellos igual- mente dictados p o r 'el Esgir i tu Santo e n un mismo & a , y en tin mismo cliscurso. Srgunda conseyiiencia. Asi C O ~ B O 10s CIOS prinieros lusares citados se cum- glicron perfectamente cn Cristo en su propio , natu- ral J- literal sentido ; asi ni inas ni menos se de- herd crirnplir e l t c r ce ro , po r nias yne se repugne. T a l vez tuvo prcsente esta repugnancia el que todo lo sahe: pnes no contento con af i rmar es to terccro coli SEI simple palabra do , quiso todavia asegurarlo rnas aijacliendo un for- n:nI y solemnc juiamento : Airazrir Dominus David ve- riiatem et nor1 friislrabitiir eani : de fructu wentris l i ~ i pozam sriper sedenz tuanz.

Propizeta igimr ~ 1 ~ 1 7 2 esset et sciret quia jwejuran- do jiirasset illi Dew de fructii lunabi ejus sedere super sedena ejiis , locutus est de resurrectione Chrisli.

coiiio lo primero y lo segun-.

U l h a obseruacion.

5. 6." Esta dltima ohservacion cleberd ser inevita- hlemente algo rnas difusa c p e toclas l a s clue han pre- cedido en e 5 k f'ea6ineno; y" por [os varios pullkQ5 que coniprehende ; ya por In dificnitad inas que or- clinaria en aclararlos y unirlos entre s i ; ya tamhien porque su union y plena inteligencia nos parece de gran importancia.

El capitnlo 16 de Isaias empieza con esta miste- riosa oiacion: Entiile agimnz Doiniize , doniinatorent ter- r e , de pelra deserli ad nlontein f i l h Son . Estas pala- hras y toclas las que sigiien liasta e l versiculo 6 , no hay duda que son olrscurisiiiias , no solamente con- sideradas en si misinas sino aim consideradas con todo b u con tcx to , yiie cs e l clue suele ahr i r e l ver- dadcro sent ido, y aclarar Ins cmas nias obscnras. La eyplicacion que liallo en 10s intRrpretes confieso c p n o iiie saiislace. Dircn todcs 10s q u e h e podido cnn- s i i l ~ ~ r , clue el p r c f c t a 1,acc ayui una especie de pa- sc'ntesis 6 1,revisinia cligresion , pues que llahlando

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62 3 contra Moab desde el capitulo antecedente, se le vi- no 6 In memoria con esta ocasion la d l e h r e viuda Rath Moabi ta , la qual dexando su p a t r i a , se vino ri la Judea , s i p i e n d o 6 sn suegra Nohemi : y despues de algun tieiripo se cas6 con B o o z , y f u e visahuela d e David. Acnrclcindose pnes de e l la , se acorc16 por consiguiente clei Mesias hijo de David, y pol' .David liijo tainbien <le Ritth, Con este recuerdo , lleno de f6 , de esperanza p de u n ardentisiino cleseo, pide ci Dios que envie quanio'antes a1 Corder0 q u e debe dtr- minar espirittralmente la t ierra , p que lo envie de p t r a dcser t i : id ert , dicen , de Moab , de la Ara- b i a p c t r r a , don& Vivian 10s R'loabitas, no porque el Mesias hul4iese de vcni r realinente de la Arabia, 1 de In lierra de Moah , sino alwdiendo , dicen , a' la patria de R u t h , sii progcni tora . Si prosegnimos aho- rs leyerido el rapitulo hasta el vcrsiculo 6 , nos ha- llamos n o obstante, sin yade r evitarIo , con otras cosas hien diversas y bien agenas d e toclo lo pasado.

Yo propongo a q u i otra inte3igencia de este Iuf;"r de Isaias , p pido para ser eetendido , no solamente atencion , sino tnmbien pacicncia. Prinieramente con- vengo con todos , que e l profeta a1 einpezar el capi- tu10 16 hace iina especie de parr'ntesis 6 breve di- gresion, e n c p e extiende por un momento sn vis- ta lidcia ol ios tieinpos, y l i h i a o t ros sucesos niuy . C t i T erscs , p muclio mayores q u e acpelllos de cine va hal-1land3. E s ~ o es freyiientisiino en Isa ias , y se pue- de con ver:?acl ilecir que cs su propio caracter. Pa- ra esta l i r e ~ e digwsion te d a una ocasian l i e n opor- tuna, no Ia viuda Ruth Moahita , s ino el inismo Bfoah, contra p i e n va proi'etis:indo, y cuya proCecia se cnm- pli6 plcnisitnamente en ticmpo c!c Nahncodonosor. (Vdase todn e l capitulo 4s de Jeremias). Mas no pue- do conxrenir en que $1 pardutesis 6 cligrcsion de Isaias sea tan breve , que coroprencl~i solamente et vkrsicu- lo I ; 5 mi ine parece c!aro, que pasa algo inas ade- lante hasta incliiir clentro de si todo el versiculo 5 , sin lo q u a l no sd ccimo se pnecte dar a l g i n sentido razonal>le y conferme eu la Itistoria sagrada d estos cinco p r i n i ~ r o s versiculos capituio r6. Wdase a y i i el texto sesiiido.

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6 2 4 (V. I .) Entitle ogfiuna Donahe, donairxatorent terrce de

petra drscrti ad rlioialentjfilice Sion. (v. 2.) EL erit sicut avis fugiei is , e t pili de nido avolmtes ; sic errtnt 3- lis? Moab in Irunscensu Amon. ( v . 3.) Ipi conTiZium, coge conciliurn, pone quasi noclene nnzbram tuam in nae- ri& abscorzde fiigientes e t oagor ne prodas. (v. 4.) IIcibilabrtnt apud f e profiigi r x e i : Moub est0 latibuEuplz eoruin d j i i c i e vnstu~on's : $nilus e s i enini prclvis: ConCuni- nzatus est niiser: defecit qui cozcni'cnbar ierram. (v. 5 . ) Et preparabihrr in n?e'ser.icordia sokiiivz , rt sedebit super iLlud in veritate i,a tu5emuculo David @diems, e t que- rens judicium , e t velociter redclcnr qIiod j us tuz est.

En ia siiposicion que todos estos cinco wrs icc los eritran en el parc'ntesis 6 en la digresion del profeta, yo os digo seiior m i o , c p c todo se enliende 6 se puccie e n t e i i d r ~ naturalisimameni'e , sin Gci- neczqario recurrir a Riith Moabita , an~iguis i rna a u n en tiempo de Isaias. Mi modo de ~ i f s c ~ ~ r r i r es eqle.

Aca1)aba Isaias de habiar contra Moa13 e n todo el capituio 1 5 , y todavia prosigile el mirmo asrinto en el capitulo IG. Mas coino el car ic te r p prcfeta, s e p n sc cliee en PI Eciesi declinar insensible >- c a 4 continna 6 i t i m a r ; con oeasion de hab la r dc lWoab, anunci6n- dole SPZ extrema hnmillacinn pn cnstigo de SII extre- ma soberhia, hace e n nle&Q dc la z)rofc6ici n n C G P ~ O . parCntesis 6 hreve digresion y prol'etiza e p yuatro palahras otras eosas hien singalare': cpc de?)en SZICC-

dcr en otros tienipos n.eniotit.imos en la inisrna t ierrn 6 pais de RIoJI. Ernpirza pidiendo ,i Dios que envic del ciclo a1 Corder0 de5tinacTo d doininxr la tierra: Bnzitle agnitnz Donzine , domiizr~~orem terrc. ; Qu6 ~ t r o Gordcro paede ser esic destinado i domiuar la tier- r a , siilo ayuel niisrno de quieo se hnbia e a el capt- tu10 5 del Apocaiipsis , el yrral sc prewnta delaiite del trono de Dios, recihe de SD n n n o un );hro ccr- yndo y sellaJo, lo abrc a l i i inisino e n preqenciz db todos 10s coniueces, 7' elc todos los a'i3,;ele 6 foiios , con solo khrirlo, de t i t i mlno se clifiintle ti todo el u n i \ ~ r . o ? i Q L z 6 pr,ccIe sea es:e destiando ;: dd?mic?r la tierra , Grio ayilel de qu;cti se I J ~ L ~ s e*: ei eapi tuls 7 de Ua:>icbl )

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625 El qaal en 10s tiempos de la qaa r t a bestia, esto es, en 10s til~irnos tiempos se presenla delsnje del rrii5mo

trono de Dios, quasi j l i u s lzoniiiais ; y al i i recibe de su mano pilblica y solemneinente potesfatenz , et ho- n o r ~ ~ ? ~ , e t regnum; et onznes popuii ti5!ms e t lingua +si sm&nt. ('Vease el €en6meno anlecedente articu- lo 3.") Esta misma yeticion se le bace & es!e Cor- dero , rlestinado & doininar la tierra , en e1 capitu- lo 64 de l mismo Isaias : Urirzailz disruniperes cmlos et clescenderes , d facie tiiu nzonles clrJbereizt. Todo lo q u a l , por mas que qmiera sutiliaarse, es ciaro que no comprte de modo a l iuno raronahle & la primera venida dei Seiior, sin0 la segunda, segun todas las c scri i ti m s.

Aliade Isalias en su hreve sla'plica a1 Sefioi, que envie al Corder0 dominadnr de la t ierra de peira de- serli ad niontenr $lice Sion. Estas palabras de petra de- Aerti miiaJas en s; rnismas , no hay drrda que son inuy obsctiras; mas si se conihinan con otros lugares de 10s p-oretas y de l mismo Isaias , pueden muy hien en- tentlerse sin vioiencia, antes con gran naturalitlad y propicchd. E n Habacuc po r exemplo se dice ( I ) : Deus CSG cvrciro veniet , et saxctus de nronte Pharant , opericit cwlos gloria ejus , et laudis ejus plena e s t terra, splen- dgr ejus ut lux erit, cornua in manibus ej1.s. ~ Q u i e ' n puede desconocer aqiii ;y en tocio rs te capitulo la veiiida del S e 6 ~ r e n gloria y magestacl? Ahora: el monte F a r a n est2 ciertamente en la Iclumea, hticia e1 anstro respecto de la Palestina : y poi- e s t 0 10s 7 0 , en lugar de ab aus fro , leen d TIie,xan veniet: por- que Teinan era la metr6poli de Idumea. Por otra parte , en el capitulo 34 d e Isaias se dice que e t Seiior , q u a n d o venga en g!nria y mapes tad , vendrai primern elirectamente B la Idumea : Bcce super I&- imam dercendet , et super popiLZim interfeciionis mea ad jucliciuin : gladius' Dornirzi repletiis est sanguine. ... victinza pniin Donzirii in Bosra , e t intcrftctio naugna in terra Edont. A este lugar yarece que alude San Jwn quando dice (2) : et calcuius e s t lacus extra ci- vuitatena , et esivit snagiiis de lacu usqm ad f r m m equo-

( I ) c. 3. v. 3. (2) k p o c . c. 14. 2). 20.

40

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626 run2 per sfndiu mille sexenta: y en e l c a p i t d o 19, vel?sicUiG 15 , se dice del mismo quando ya viene del cielo B la i ierra : et ipse calcat torcular viici fiiroris irE Dei oninipoientis. Rqui en Ia Idumea ad austrtina Se- rusalenz t e n l i d tanto c p e Eiacer la espacla de dos G- OS que trae en su hoca , qraaiito se poede ver y con- siderar despacio en todo este capitulo 34 de Isaias y en el cnpitulo 63, 10s qtiales 1uf;nres y otros seme. ]antes 10s toma manifiestaiiiente S. Juan , y 10s hnce servir todos juntos ell e l capitulo 19 (le su Apoca- lipsis.

Con todas estas adverfencias parece ya fa'cil coni- preher:dcr Eien todo e l pnrCntesis con que enipieza el capitulo 16 de Isaias: Einitte ngnzrnz Donzine clo- mimiorenz ferrm de petra deeserli ad ntontena ylilic Sion. Despues de esta hreve oracion , sigue luego dent ro del inismo pare'nlesis la profecin parlicuiar comprc- henclida en 10s quatro versiculos sigaientrs : Et erit ( c p e es lo misino yue si dixera : succclcra' en estos tiempos inmediatos li la venida de l Corrtero domina- clor de la tierra) Et erit: sicut avis fiigiens , et pzrlli de nido avolantes , sic erunf f i l i m iWooab in traiiscensrs Ar- non. ~ a r e c e ;i primera vista yoe a c p i se anuncia una liuicla vcrciaclera de 10s fiioabitas , 10s quales , por ternor de a l p n enernign formidabte clue Ticne contra ellos , clesamparan su pa is , y pnsa:~ d la Gtrn parte dcl torrente Arnon. E n efecto , asi lo snpcnen 10s in- te'rpretes , insinuariclo que todo esta pndo Zialier su- cetiido , y sncederia en las expediciones de Senacjue- rih ti de Nabticotlonosor.

&ins ic6mo podreinos cornponer niia huicla ~e rc l a - dera de Moah fuera de su pais, con las palahras clue inmediataniente se le dicec? Ini coitsiliunz , c o p con- cilium : pone quasi noctenz unzbranz tuant in niiridie, nbs- con& fiigientes , e t vagos ne perdas : Iznbiiabnrzt aprid t e projkfilgi nzei: Hoab esto latibuliiin eoriirn CZ facie ves- tatoris.

Por estas palabras se ve c!arainente cpie Moab asrutado entrard en pensamientos de huir fuera de sus confines, y en parte eiiipeiarft ft moverce , no cirrtamente por ternor de algnn principe enemigy que venga contra 61 , s in0 por tenior de 10s prohgos

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qne va se acercan ri su t i r r ra , y yrie vienen Iiuyen/- do $facie vastatoris. LO qual aiude visiblernenie A lo que habia sncedido en otros tiempos en fa mis- I Y J ~ t ierra de Modh , quando estos mismos prCfugos Fenian huyendo de Egipto., como se puede ver en el capitulo 2 2 p a5 clel libro de 10s Nlinieroq. Asi se IC dice aqni d Moab cpe no tema como tennib l a primera YCZ , c p e no se aiboroie c p e no se asus- te : q u e entre primero e n cmsejo auies que huir ; mas que no tome el concejo ni irniie la conducta de sii antigrio rev Galac , el q u a l cerr6 sns puertas , y no r p i s o hospedar ni dexai- p a r por sus tierras d estos miwios prdfugos de Dim ( N h z . 32.) , sin0 qrie tome n h o r a otro consejo mas humano y mas prudente que se le propone de parte del Sellor: ini consiliunt, ccge conciliunt. [Que‘ ronsejo es e s t e? Pone qriasi noctenz riiitbrant ti~nnz iu mcridie , ahconde fugientes, e t zagos ne perdns. Prepara para rnis pr6k’agos un asilo , 6 una sornbra, que sea corm la de la noche mas ohrcura en la niitaad del d i a , y esccindelos de modo que senn como iovisilsles : no 10s descnhras, ni le5 hagas traicion. Bhora, i c 6 m o ha de escon- der A h a b dentro de s i d 10s prcifiigos de Dios , si el niismo WLv’Loab h a Iiuido fnera de si d la otra parte del torremate de Arnon ? Ilabitnbzmt apzbd te profugi nsei , prosigtre e l Seiior , Moab esto letibiilunz eorunz d fcicic oaptatoris : $nit:is est eizinz pulvis , consunznaa- tus es miser, drfecit qui conciilcabat terranz. Habita- r8n 6 se hospedartin en t u pais rnis pr6fngos por algrin poco de t iempo: recibelos , 6 Moab , y es- c6ndelos dentro de ti. No temas que este oficio d e humanidad te pneda ocasioiiar algun perjuicio ; pow yue te liago sabe r , que ya pasa , ya se acaba , 6 va luego A acabarse el gran polvo de 10s exe‘rcitos que 10s persiguen (.salidos sin duda de la boca de l dragon) : ya acaba s i i s dias , 6 10s acabarri en hre- ve el miserable miser, 6 corn0 leen Pagnini y Va- tablo oppressor, eqto es , el que oprime h otros, y 10s bace miserables, y por esto misino es mas mi- serable cine todos: ya se acaba, 6 va lnego Q aca- harse el que conculcahn la timra : defecit qui con- ciilcabat terranr : el qual segrrn tQd0 el contaxto y pa-

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628 rcce d a r o clue no pnede ser otro, sino el figurailo en l a p n estatna de Daniel.

Seria conducente para in plena iuteligencia <e este Ingar de Isaias , adi.eriIr ayni estas t ies cosas. Pr i - mera : que la tierra 6 pais d~ R/iosb est& tan cerca de la t ierra de Israel , G de prornision , qtie so10 Ias diiide el rio Joidan : Profectique (dice Moyses) castranzetati suril in canyestribus B o a b , ubi i'ranr Jor- danein Jericho sita PSI ( I ) . Segunda: que en esta t ierra 6 pais de Moab est,: e i ciilehre monte Nevo , in quo Jfoyses ascendit, et widit Dei Izereditatem , don& 61 mismo muri6 jubente Doxino ( 2 ) y doncle e l pro- feta Jeremias divino ~^csponso ad s e f a c t o escondi6 por 6rden de Dios , Llespaes J e destruitla Jerusalen , el arca grande clet ant iguo testamcnto , el taberndcnlo, y el altar ; profetizando in serii~one Domini quod ig- notus erit locus donec coiagreget Deus congregationem populi ) et propitius $at , e t tunc Dominus o3rendet hccc, e t npparebit majestas Dontini , et nribes erii , sicut e t fifoysi iizan~~estabatur (3 ) . Tercera : clue quando toclo Israel pr6fugo de Egipto c o ~ ~ d n c ~ d o pa por Josud, pas6 el J o r d a n , entr6 luego a1 p~ in to en el ial le fcr- t i ik imo de Achor) en donde se empe26 a' clilatar sa corazon , y z i abrirse sus esperaiizas con la rniiagrosa toma de JericG (a). Toclo lo qual . nos p e d e traer facilmente 6 la memoria lo que pa qrreda o;~:ervacto en el fenbmeno antecedente, articnio 8 c p a d o ha- hldTnOS de la huida d la soledad de aqael la mnger metafhriea , d qnien deben dame alce dua aquike niagnte , ut volaret in desertum in locum siiunz , ubi alitiir p e r tempus e t tempora , et dinaidiuni tenjporis, d facie serpentis, 6 como aiiacle Isaias en el lugar de yne varnos hablando , d facie waslatoris. Esta r n u - ger que Lnye a1 desierto in loczinz sziuin , asi con10 11a de ir directanmile a1 vdlie de Achor , srgun le promete Dios por Oceas (cap. 2.)) asi d-he pasar segiindd zez p o r la tierra de Noah , y detenerse en ella algiin poco cle tiempo, coin0 pas6 y se detuvo l a primera t ez quando sali6 de Egipto. §in esto,

( I ) l\bnt. 22. v. I . ( 2 ) Deul. c. ~ d t . ( 3 ) 2. Mnch. c . a. (4) Jos. c. 6.

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629 2 cdmo podrS verificarse la .profecia de Isaias ? Por esto pues se le aconseja rl Modh de par?e de Dios , qrie no cierre otra vcz sus puertas Q esta nmger yoe vicne hngendo , sino que la recilia con humanidad, y la esconda dcntro de si : habitabutat opud te pro-

Jugi nzei : Aforzb , esto Zat&ubm eorunz d fa& vas- latoris.

Con estas trcs advertencias se entiende ya sin di- ficuIt2d ei initinin uersicnlo dei pardntesis de Isaias: et pi-rpambitur in misericordia soliwn , e t sedetiit super i l b d i)? veritnte in tabernncido Drizria! &c. DpymeS de estas C O - ~ S , concluye el profeta, se prepararg en mi- sericoidia un so l io , que sers el misnio solio 6 ta- bcrndcnio de David , p en d se sentark el p e debe s e n l a r v , y se sengarti in veritate jzrdicarzs et quE- rem j!:diciurn , e t veZociter redden? quod juytun, e s t . nos cosaq de grsn importancia teneinos aqui que con- sidcmr. Primera : e i t e soiio 6 tabernicralo de D+~. id de c p e aqni se habla , para y n i h se deberd pre- pnrar? iQt i6 persona e s esta , qoe clespues de pie- parado estc soli0 deberti sentarse en d l iiz writate judicaizs, e t qucerens jrtdiciunz? Segiinda : i crimo 6 con qu6 cosas cnnlenientcs 6 necesarias se dehe r i hacer esta preparacion ?

Qtianto 5 io primer0 snponen 10s int6rprefes cine aqiii no h a y otro misterio sino anunc;ar el r eyna - do de Ezeyaias , que es uno cle 10s Ires reyes de Judd que canoniza ]a escrilara ( I ) . Para Ezequias p u r s y para sns sncesores se yrepara , clicen, el solio de D a \ i d , de que habIa Icaias en este Ingar. Este hwen rey se sentard s y e r illud in veritate : este buscarii 6 exercital-6 con sns sdbtiitos el jiiicio y la jnslicin ve- lociter reddens quod jnstunt e s t . Para saker si est3 suposicion es hieo funcbd2 6 00 , sr psegunta : iesta preparacion del solio de David, d~ y w aqni sc ha- I h , quando se lrtzo? Sin dncta &hi6 hacesse des- pues que se verific6 plcmmente io que anuncia en [os tres versicnlos que preceden, esto e ? , d ~ s - pues yne 10s p r j h g o s de Dios se hospedaron e n la tierra de Moab , y en eI!a se escoadieron d Jack

( I ) EcEes. c. 49.

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630 onstatoris ; despnes yne pas6 el gran polvo que Ie- vantaba et misrno vastaclor, y despues que acab6 sus dias el que conculcaha la ticrra. Todo csto se lee segnido con este misnio 6rden en la brevisiina pro- fecia.

se pregun+a otra vez : i q u 6 vas- tador es e s ' e , qne en aqoeilos tiempos de que quie- ren yue hahie ia profecia , concuicalsa ia t i e r r a , le- vantaba tanio polvo , oprimia y hacia niiserahles a' iiiuchos, y c u p ruina precrdi6 B la preparacion del soli0 Je Datid? El ,vastador , responden , ( n i hay btra cosa ri que reciirrir en aqueilos t iempos anti- yuisimos) fue ya la Asiria , pa tamhien la Caldea. Esta ccm N a l x ~ c o d n n o s ~ ~ r , aqnella con Salmanasar, ye ro mas prnpia y 1i:erairnente con Sennyuerib. Aho- ra bieo : warnos por paries. Primcramcnte : 10s Cal- deos con Nabucotltmo<or no piitden venir a1 cas0 res- pecto de Ezecpias. iPor quP? Porqne estos devasta- -ron la Judea , p tambieo ;< Moab cerca de cien alios despues de la miif rte de Ezeqnias : y clesde aqnella e'pcca hasta e l dia presenie, en que coiitanios mas de veinte y dos siglos, el soli0 de David no se ba preparado para persona dlgnna ; antes clestlc enton- ccs hasta aliora parece gace sepuitado en el olvido. Solo quetla poes la Asiria con Salmanasar y Sena- querih , y de es'a ckbemos ciecir lo mismo 5 pro- porcion, esto e s , que para el puuto particular de q u e ahora halilamos no vicric a1 cabo.

Sahnanasar rev de flinive , ri d~ A s i r k , es cier- to qne concnIc6 totio el r e p o de Is rae l , d de Sa- maria , llevhclose cautivas Jas diez t r i h s que lo componian. Mas i cpanndo? La historia sagrada dice que esto sucecli6 utmo sexto E'zeclrie ( I ) . Senaque- rib , sucesor de Sdlmanasar, es cierto que conculc6 tambien una gran par'e c?e la J u d e a , y pus0 en u n gran conflict0 p consternation d Jernsnlen ; inas i q u a n d o ? La niisrnn historia sagrada dice que esto sucecli6 uiano qimrtodecinzo regs Ezecl ih (2). Y es bien ohservar aqni , que n o consta por instrnrnento alguno que este principe entrase en la tierra de

Siendo esto asi

( I ) 4. Reg. c. 18. v . IO. ( 2 ) Ibicl. e. 13.

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63 1 Moab , ni yne 10s Moabitas hnyesen de sn fierra. Lo que solo consta es , cpe a u k s de llegar A Jeru- salcn , un angel envi,ido d e Dim arruin6 tcdo su exdrcito , m a h n d Q en una noche 185 mil soldados: con lo q n a l el priacipe se volvi6 apresuradamente para s u reyno. Siendo cierto todo esto, Lc6mo po- di-emos acomodar a i rey Ezequias aqnellas palabras, e t yccrarnbitur in ntiFericortbia solium ? Estns paiabrag tinidas con Ins que preceden como clehe ser , sn- ponen evidenterncntc que quando se siente en el soli0 de David la p-rsona de qnien se habla y para quien el soli0 se dehe preparar , ya b a b r i pasado e1 gran polvo de l que conculcal)a la t i e r r a , y aca- Jx~cIo sus &as e l vastador. Con que si es te vastador era Senaqnerib , P I soiio se prepar6 despues yae SC- iiarpcrib hay6 para Kinive dexando su eue'rcito destrozado y murrto. Cqn que se prepard en el aiio catorce 6 quince del reynado de Ezeqoias. Con que oe prrpar6 para Ezecpias catorce aiios despues ye:e estalia sentado en 61.

No sienclo pues ni pudienilo ser Ezecpias la per- sona de quien se habla en aquellas palabras : et prrr- pnrabitur iiz miszricordia soliim , et sedebit s r p r illrid i i z veritate in Zr;herizuculo David , es preciso I>usrai. otra persona ii quien esto paeda cotiipetir s in Iia- wr violencia a1 texto , y tamhien s in caer en UII

vcrdadero anacronisiiio. Bnscadla selior , C Q ~ Q qrii= siercis , y iiie parece B mi que 110 IzaILnreis otra en que descansar , que In persona iiiisiira d e l Mesias, h i jo de 1)avid secu7zdnnz carizein , quando Ilegtien aqiiellos t i ~ m p o s y inoinentos que Paler. posuit iiz sun potestcrre. Esio es lo clue se repugna , 7. lo c p e se I i~ipe de todos nioclos e:i ei sistema ordinario ; m a s esto misino parecc inevitabie en el sistenia de I n CS-

critura. AI rey Ezequias nnda coinpct-e ;esun la his tor ia sagrada , ni de este t e s to , n i m i i c h rnenos d e tantas otras cscrituras perFectz.mente conl'r,rtnes 6 esta de qne hablarnos. Al Mcsias 1:ijn de David le compete t o d o , y todo segnn e s t a , y s e g u n l a s otras escrituras. Dcsde el principio de este capifnfo 16 empirza liablando Isaias ( p o r confesion de todos) no de Ezcqui~is , sino dcl Rlesias : Emitte agizunz Do-

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632 mine donainntorem tcrrcc?. Este Corclero destinado Q do- minar / a t ierra , dicen todls que es ciertamcnte e l Mesia ; y d ningnno le l i d pasado por e l pensamien- to ync puecla sei* Ezeqnias , n o obstante que este re? e , <I descendiente de Roth Moabita, n s i cnnio lo fuelon 10s cttrns reye? cle Jucld. Con yne para e! Me- sias , no para Ezpqi i ias , prrrpcirabitur in misericordia soliirni , e l sedcbit super illlid in verilate ita taberna- ciilo D a v i d , jiidicanv e t qcIErens jrrditiunt , et veloci- ier reddens quod justrim es t .

E t e teyto concrierdn perfectamente con el cnpi- tu10 32 del rni5rno I s a i a s , qoe ernpieia a s i : Bcte zt t justitia regnabit r ex , e t principrs in judicio prmriint, e t erit vir , sicut qui absconditirr CZ verito , e l celat se d tempe~tate : (erpresiones propic,irnas y semejnnTns adrnirahirs , q u e indican acjuelia pnz y w m l n c l e i a fe- licidad del i e y ~ o del Mesids.) Asi prosigue dicien- d o : EL erit ( r ex i c te ) sicut rivi aquaruin in si;i, e f una- bra petra: prominentis in terra deserta. Aron calignbunt oculi videntfim , e t awes adienliurn diligenter u u ~ t u l - t a b i d . Et cor striitowsz inlelliget sc imt in in , et lingua balborrtni velociter loqrie fur., e t plane. SOTI vocuLrlLtr t i h a i s qui inyipiens e s t , princeps : nec frnudulenlus vocahitur ntcijrr.

Dicen que todo esto habla tamhien d e Ezqi i iaq , y annncia su rrynado feliz : mas 1c"n yri6 r a o n ! S i se lee ei texto cien veces , p se consideran toclas sns expiesicnes , apenas s r ha2iarCi alguna acOmQCh- ble a1 rey k b e c p i a s , ni asan d ninguno otro d e 10s reyrs del rnundo. Basta leer s i i s ditimas palabras: non vocabitiir icllrn is pi insipiens e s t , pririceps : y no obstante, sin salir dr.1 reyno de Jracla, e l siicesok inmediato de Eaecpfas fne e l mas necio y el mas ini- quo dr todm 10s priocipes. En snrna, le'dnse con es- t e cuidado 10s tres eapitnlos siguirnies: en eiios se vera que todo camina srgnido y perfectamente con- forme a1 reyno del Mesias qne nos anuncian todas las escrituras , sin que ptieda, ni aun de paso , ofrecer- se $ la imaginacion Eaequias.

icito hablar a s i , Iia- biendo ccnocido la persona para qiiien se clebe pre- yarar in misericordia el soli0 de David, nos queda

IJabiendo observado , y si es

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633 ahora qne o'hservar , i cdmo y CQII qub cosas se de- her& hacer esta preparacion ? Para eilo seria conve- niente volver ;i leer con nneva atencioii 10s cinco pt-i- nlcros versiculos clel capitnlo 16 de La ins , adbirtien- do en elios e<ias t ie3 cosas piincipaies c p e qtredan ya notaclns. P r imera : la oracion mis'eriost con que einpieya este pardntesis 6 e s b profech particailar: Enzktie ngnrint , Dontine, dominntcrent term. Seg;u;da: cn el consejo yne a c p i se le da ri Moab : ini C O ~ J ~ L I I L I I ~ , cog,, co:iciliuna : pone quasi noctem umbrant tranna in niei-idie : aCsconde jitgientes et vagcs ne prcdns. Terce- r a : qae estos niisrnos vagos 6 prbfngos que el Seiior l lama snyos , hahitarSn por algun tiempo escondidos cn In tierra de Moab : hnbitabun~ aptcd te profugi nzei: X o a b eAto lat;biahim dJncie vastatoris. Qbservadas es- tas Ires cosas capitales d ~ l texto de Isaias, podetnos va sin emharazo aigano clar algunos pasos mas ade- lante, saccindo de e l h s las dos propnsiciones sigaientes:

I . " E n este tiempo d;. que hablamns , eo que 10s FT"QgOS de Dies, que vienen buyendo & f a c i e vas- t n t c ~ j s , se hospec?ar:\n en la tierra de Moab , clescu- hrirri nios en esta t ierra (doncle ciertamerite cstB e n una rueva del monte Nevo) el arca sagrada clel anti- guo testamento, el tabern5cralo 9 e l altar q u e es- cor!c!i6 Jeremias por 6rden de Dios , despues de des- t I' ti i da Je r u sa I e n p or Na 5 B c o d o n os or. S e d e s c u 11 I i r5, digo, este rlepjsito sn;rdo p z x 10s finec que Dios solo sahe , I-. qoe no hay necesidad de que 10s sepa- mos 10s C U ~ I O S O S .

Ignotus erit locus , donec congreget Deus congrega- tionem populi , e t propitius f i n t , el tunc Dominus ostera- det I L R C , e t appnrebid majestas Domini, et nules eric, siciit et Moysi nianifestabntrrr ( I ) .

El lngar clonde queda deyositada poi- 6rden d e Dios el arca sagrada, el tahernhculo y el altar (dice Je- rem!'as) s e d en 10s siglos veaideros un lugar desco- nocido y del todo itiaccesihle, hasta qne congregae Dios , segun SUS promesas infalibles, la congregaclon de sn pueblo : y entonces el rnismo Seilor in ipifesia- rd estas cosas, y tamhien sus fines 6 clesigvios : et -

( I ) 2. Haehah. c. 2. v . 7.

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634 tunc Dohinus ostendet A m : y entonces el monte Be- Y O ) situado en la t ierra de M o a h ) serd como otro nuevo y atlmirabte teatro, donde se renovardn t u d ~ s arpelios prodigies que se vieron antigaamente e u et monte Sinai : Et tunc Domiiircs osiendet h c c : et nppa- rebit narjjestus Doniiiii , et izubes erit sicut et lsloysi nza- nif;s'nbatur.

A esta cdlebre profecia parece que alnde S. Juan qr-ando e11 el tersiculo illtinlo del capitulo I I del Apo- mj:psis, rln mornento antes de enipezar A liahiar de 10s iniskrios de la 'rnuger testida del s o l , dice asi: e t apertuni est CempZuuFn Dei in ccelo, e t visa est altcn teslanienti e j l l s in templo ejus , e€ fac ta siint f U l g i w U , e t vcces , e t terrmiotus , et grcndo ntngna. Acaso po- dr6 reparame en aqueila palabra in ca.Lo, cr,nio si es- to se Iiuhiese ya verificado, 6 se hu6iese de verifi- car all$ en e l cielo; mas est0 seria no conocer el ca- rccier 6 distintivo p r r p i o y peculiar de la profecia ac?inirab!e del Apocalipsis. De ninguno de 10s otros profetas se dice : qire su l i e se a1 cielo en espiritn, para v e r all$ lo q u e Dios yueria mani€estarle. Mas ei nii3ino S. J u a n nos advierte desde el principio d e l capiCulo 4 , &;de donde empieza en propiedad la pro- fecia , que todas 6 las mas de sus visioncs las tuvo en el cielo , adonde fue en espiritu po r providencia 6 privilpgio p r t i c a l a r : Post h m sicti, e t ecce osliurn aper- trcnz in cceln , et vox prinia quam aucliwi , turnqriuna tu- ba, loyuenris mecunz dicens : nscende huc , e t ostendant tibi qiic cportet $eri post 1mc : el statim fui in spiritu Gc.

Aliora clecidme , seiior, con sinceridad: esta pro- fpcla d~ Jeiemias , tan Clara en si misina , i'e h a ve- riiicado 6 no? La escritura divina da testimonio cla- ro y inaaifiesto de no liaberse verificado hasta el dia de lioy: tanto, qrxe lo copfirsan de biaena f6 10s au- toms mas eruditos , dicienclo annyue muy de paso ) ~ 1 ~ 6 se verificard hicia el fin del yliiincIo quando vengnn Ejias y E n o c h , 10s yuales descu l i r i r~n este tesoro escondido para facilitar la conversion de 10s judios. 3 f n s dificilmente podr;i concebirse , qne el descuhri- miento del arca , del ta1,ernaiulo y del altar puetla se r un rnedio proporcinnndo para convertir ri Crisio ri 10s judios , 6 para facilitar s e conversion, si es-

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635 tos no se snpanen p convertidos y plenainente i l u ~ trados. ContentEnionos no obstante con lo que ayui se nos concede, esto e s , qire la profecia de que ha- blamos basta aliora no se ba verificado. Luego .tam- poco se ha verificaclo la congregacion del puehlo de 1srat.I , y la propiciacion de Dios respecto cle este pueblo infeliz : donec c o n p g r t Ceus congre<aticnent po- puli, et propitius fiat. Luego la congregacion de este pueblo c d e b r e (del yiial estd escrito para la primera venida del Mesias, clue no se conpegar ia : e t Israel non congwgabitur) la propiciacion cle Bios para con este pueblo , y la manilbstacion del dep6sito sagrado con todas las circunstancias que antincia Jeremias, de- h e r i toclo verificarse en algun tiempo so perm de tat- sificarse !a profecia. S i todo se ha de verificar en d p n tieinpo, ciuando mejor secundum scriptiwas y segnn un justo raciocinio, que en c l tiempo de cpe vixxos hahlando? [En el tienipo, digno, en que 10s prb€ugos de Dios congrcgados i x nziseratioizilius n2crg- nis , r p c vienen huyentlo, n o ya solamente de Egip- t o , sino tambien 2 qzcatrror plagis terre, lleguen 5 hos- pctlarse en la tierra clc Moab? <Quando habiten p o r algun poco de tiempo en esta tierra : habitabunt n p d le prnjugi nzei , escond;dos i., fac ie vastatoris, sive h

facie serpentis , como dice S. Jnan? 1No parecr, esto rnuy vFrisimil y quasi includable?

Con estos pr6fugos de Dios q u e llegnn 5 la tier- ra rle &Io&, buscando en ella latibulurn Ci facie vns- tntoris, 6 (lo que parece u n mismo misterio) con la iiiiiger del capitulo 12 del Apocalipsis que hiiye li la soledad in locum paratunz d Deo &facie serpentis, ern- pezari 6 levantarse cle la t i e r r a , y ti prrpararse e n loda forma el taherndcnlo 6 soli0 de David. No es verisimil ni creible que esto suceda in monterzto ; asi que podrs emplearse en esta preparation a p e 1 tens- pus et ternpora e t dimidiunz teniporis del Aporalipsis, en c u j a +oca se ver i f i r a rh en Moah en el monte Nevo 10s inisterios cpe anuncia Jeremias ; en r.1 val le de Achor 10s que insinila Oseas c a p i t d o 2 ; y en las denias partes de la t ierra prometida, 10s que anun- cian 10s profetas.

Para probar esta s s p n d a proposicion no me ocure

2.'

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636 r e otro modo mas hreve ni mas eficaz, qi ie remitir- rrw enteramente n' todo lo que qneda observado en e l fcnciineno dntecedente ; y si est,, no basta podr,ln su. plii. ahnndentemente aquellos qna t ro aspecios e n cpe c.n.s.i:!eramos d 10s jurlios en todo el ien6meno b.", y clnsg~aes e n el 7.' A toclo lo q n a l afmdimos aqni, io.rjpencLiando todo Lo c~icho esta sirnpie renexzon.

La m u q w rne;af6rica del Apocalipsis 6 In c1audi- cantr cle Sofonias y nliyueas , cnmpnesta visiblemente de 10s p&fttgp de Dios , congregnrios in n?iperutioni- An5 ningnis, es eiaro yoe huy-e & la soledad, 6 es contl-icida yor rl hrazo omnipo+ei>te d~ su Dios con grarrdes designios , y para fines mas que ordinarivs, proporciQaal~os sin dada A la novedad y p-andeza de [os S I I C ~ S O S rnaravillosos que dehen prececkr y acorn. paiiar sn Ihnida: [que' fines ri dcsignios pueden ser e s t n s ? No otros, seaor mio , sino 10s que hallamos expresos y claros in scriptzrra veritatis , e s ;i saber , aqnal los mismos en substancia y serwata proportione, p2r.a 10s qr ia ley sac6 el mismo Dios nntigriamente de Egipfo ii esta misrna mugcr , compuesta y fomiada de estos misinos prbfugos suyoq, y la condiixo a1 desierto y soledad del monte Sinai : Seciinduiia dies egressionis iue de terra Bgypti ostendrcna e i niirahilia ( I ) . EiFt erit in die illa: v o c a b ~ t m e vir nteiis.... e t canet ibi (in valk kt hor ) juxta dies juventutis s u r , et juxla dies ascen- s i o ~ f s suit? de lepra B g y p t i ( 2 ) . Et erit in die i l ln : ad- jicict dlov inus secrtndo nzariunt suana ad possiderzdim rcsidmma populi mi.. . . et congregabit profirgos Israel, et dispersos Juda colliget ci quntrror plagis t e r m ( 3 ) .

E n nqucl primer t iempe 6 arpelia primera vez sac6 Dies de EgiP+o 5 esta m n g e r , y la conduxo qriasi SUj7Cl' ' ulas q u i & a1 desierro y soledad del monte Si- nai , para pne a i l i , lejos de todo tumulto , y desem- ha~-i izad~t clc t d o otro CISidRdQ , pticliebe oir qnieta- iricrite la voz de SIX Dios; para que alii fcese apacen- t ada con el paslo de doctrina, e' instruida e n las nne- vas Iey-es y ceranionias con qTie Dios yueria sei. ser- ciilo ; para preparar en ella u n pueblo digno de %OS:

(1) M'Cch. C. 7 . V. 15. ( 2 ) OSeaS C. 2. W e € 5 . (3) Isai: c . 11. v. I € .

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I

ut s i s e i populiis peculiaris, le decia B Moyses ( I ) : y en fin para celebrar con ella a m pacto , UII contrato, nna alian-a solernne y estrechisiina, q u e el mismo Dios Ham6 clesposorio formal.

a proporcion, y con 10s nris- mos fines y designios, sacard Dios segunda vez a' esta rnisma muger , compuesta de los inisrnos prtifugos s i t - yps, n o pa solamente de Egipto, sino de las qea l ro plagas de ia t ierra, ,y la contiiieirA con los rnismos J'

magores prndigios a otra soleciad que ya le tenclri preparacla : rtl ibi pascant eans diebrts mille dricerzlis i e - xrrgi772a ... ri facie serpentis para hzblarle a1 corazon: e i dricana earn in solitrrdinern , e t iPi loquar ad cor e j m : y ljala celcbrar con eila otro nuevo pacto es- table y permanente : e t sronsabo te naihi in judicio , e t in jiisfilia , e t in misericordia , e t in miseratiortibus , e t sp j lz rabo te nzihi i7zJtde (2). No cierto (prosigue dicien- do por Jeremias capitulo 3 1 , vcrsiculo 92) no cierto segnn aytlel primer pacto 6 alianza que celebre' con vuestros padres , qnando 10s s a c p E cie la. servidnrn- b re de E g i p t o : pacto que eIlos inismos liicieron ir- rito 6 intiti1 con SITS freqhentes inficlelidades , sino segun otro pacta nue3.o y seiupiterno que tengo pre- pai.a(Io para ins dos C ~ S ~ S cle lsraei y de Jncld, 6 para las 2oce t i ibus dc Jacob.

Ecce dies vrizieizt , dicit Donainus , et feriant donziti Iwacl , e t dcnicii Juda f X u s n o w i z : non secritidunt pac- tiina , quod pepigi cunz patribus eorum in die qua npre- b n d i miani~in e x w i i ut edzicerenz cos de terra Bgypi: pnctru?i quod irritrinx fecerun!. Scd hoc erit pactum , feraanz crina tlonao Israel , pos t dies i l los , dicit DonLi- nus : dab0 l e g e x nmzm in zrisceridns eorunz (lo qual cor- respande perfectamcnte k la expresion de Qseas : lo- quar ad ccr e j u s ) e t in corde eorum scriban earn: e t ero c i s in Deum , et ipsi erunt nzihi i.2 popiilunz. Et non clocebit ulira yir proziniurn suuna : dicens : cognosce $0-

nzinuin : ornnes ei&z cognoscent nze , ~3 nziniino eoruni u s p e ad nzasinairin , ait Donxinrts : p i a psopitiabor ft;i= quituti eoruin , e t peccati eortm non n2emorabor anzplircs.

D e este modo pnes

-~

( I ) 1 Deut. c . 7 . v . 6. (2) Qse. c . 2.

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63 S A C ~ S O se nponclrA cine S. Pahlo ( I ) cien este nxis-

m0 text0 de Jeremias , como si ya en sn tiempa se hubiese plenarriente verificado. A lo qnal se respon- d e , que S. Pablo cifa este texto de Jeremias 6nica- mente para prohar i 10s judios,. que el antiguo tes- tamento no podia ser e t e rno , sin0 que debia t ene r f i n , coino es clarisiino por todo su contexto. Esto rnismo les prueba en el capitnlo 8 de la misma epis- toia por estas palabras ( v . 13 . ) : dicerzdo autem no- v i m , zwteruvit prius : quod nzitent antiqziatur e t series- c i t l pro1.w interifurn est. Mas esto no es clccir que la profecia que cifa se 'habia ya verificado plena- meiite, sino en aquel punto parlicular y determi- nado para qtie la cita ; es a' saber, para probar que dcbia 11aber otro testamento nuevo y- eterno , con- firmado solenincmente y seliaclo irrevocahlemente con la s a n p del Mesfas niisrno, asi conio el antigijo se habia c o n f i r i ~ ~ ~ d ~ y sellaclo ad t e n i p s con la sangre de animales. Por consiguiente , que el pr imer testa- mento clebia teuer fin , para dar Ingar a1 scgaedo. Esto es 10 qne itilicamente interita S . Pablo quando citn esia proi'ecfa de Jeremias.

Sigasc ahora leyendo enterarnente lo yuc resta de ella : aii.ldase para adcpirir mayores lnccs Ia coasi- deracicn de toclo el capitulo en t r so , y ann del ail-

t cc rden te , y Iiallarenios cosas t a n g r a d e s , tan admi- rable$ y tan nuevas , qnc nos verwnos precisado., ci. confesar, qne ni se h a n veridicado , ni se lion po- dido verificar. Lns esfuerzos inismos que se hacen, y las .ciolencias de que se m a para s~lponcrlas ve- rificadas, son nna prueha la mas sensiide de yuc c i e i t a m r n t e no se lian verificado basta el dia d e I10y ; pero q u e se verificargn ii su tiempo en toda su plenitucl.

Pues con esta innger metafbrica , voePvo :i clecir, conipuesta totla (le I t s pr6fugos de Dios congrega- rios in nziseraticnibris iizngnnfs ( [os ynales en sn huitla c?rEen hosprclarse poi* algiin tienipo e n la t ierra de bfoah para I( s iinrs q n e yurdnn insinnados, y pasar cqecrl- a l i i a1 val lP de Achcbr) se comrnzarri ri hacer,

~- - ~~~

( I ) Ad Heb. c . IO. v . 16.

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63a J

y se prosegairs hacieiido per tempus, e t tenapora , e t dinzidiunt ~ ~ i n p o ~ i s a c p e k preparation del soli0 de David cle clue linbla Isaias : et preparahitur in niiseri- col+dia soliunz : y despues que este soli0 est6 bien psepnl-ado en la forma diclia , d e b i t super illud i i z .uerilate in tabernaciilo David, jirdicans e t qnareizs judiciicna , el reddens quod jUFtLiJ?& est.

Resiinzen y conclusion.

Lo que acnbnmos de ohservar en este dltirno psi-- rnfo , correspontle perfectamente ii todo cluaoto cpc- cia observodo en toclo este feu6meno. Corresponde 10 psimero a1 texto de Ani;, , y a1 de S. Jncoho yne 10 cita : In die ill0 suscitabo tabei*nactiliLna David , quod secidil , e t remlificabo cpertrwas inurormi ejils , e t ea qim corruerant iiistaiira8o , e t rctt.d$cabo illiid sicut in diehus antiqrtis.

CorresponcEe lo s e p n d o a1 texto de Sofonfas ? PJiqueas : In die i(la congregabo clairriicnntem , e t ecimz rjrsain ejearerurir , ~ ~ l k i g ~ ~ i i i : e t qiiam ofyixlerani.. .. e t rcgirabit Donziizr~s super eos in naonfe Sion ex hoc iiiinc, el u y u e in nternrsin. ... el Deiziei poieslas priina regrium ,I;Iie Jerztsniem.

Cqr-despcwde lo tescern a l text0 cte Isaias ( I ) , que hshiando eieriamente drl Mesias dice : Super so/iism d)uvici, e l sriper regnwi ejus sedehit : ut cor:firniet iLludq et corroboret it2 j i d i c iu e t iz jwsiilirz , n.viodo e t usqire in sei~pilerniiin : e t dnbit illi Delis serlenz David patris c j u s ( 2 ) .

Corresponde lo t p r t o al salino 131 , en que el misino rey Daiid refiere la pronresa que Dios le tie- n o h c c h n J- confirinnda con juramento de que el Me- sins SII hi]o se sentaria en su iiiisaiin troiio : Jiiravit Do:n:rzus Dsvid cwztaiena , e: izon j w t r a b i f i i r eani : de Jkielir zrentris tui pO?EGNZ S r L p e r Jedein f i~nnz . Yrriphefa igi/w ciim essct , e t scfret , .4niu jurejurando , jurasset i2li Delis de fi-uctti 21mbi e p s sedere super sedeni ejus: provideris locutus est de resurrectioize C h i s t i ( 5 ) .

~-

( I ) c. '3. ?I. 7 . ( 2 ) zuc. c. I . *. 32. ( 3 ) Act. Apos t . c . 2. v. 30.

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7-

640 Corresponde 10 qriinto a1 capitdo 23 de Jeremias,

digno ciertamen:e d e I n mayor atencion y reflexion: E( ce dies venirmt dicit Donainus ; e t suscitabo David ger- iiien jristunz : e t regnabit r e x , et sapiens erit : e t fuciet jd i c i r rnz , e t juslitiarn in terra. In diebus illis salvabi- tur J u d a , et Israel hahitabit conFdenter ... , e t non di- cent ultra : vivi t Donrincis , qui eduxit j?lios Israel de terra B g y p t i : sed vivit Donrinrss qui eduxit , e t ad- &zit semen donius dsruel , de terra aqrLiionis, et de cunctis ter-ris , ad quas ejeceram eos i l luc: et habita- Bunt in terra sua.

Corresponde lo sexto a'todo e1 capitulo 37 de E7e- quiel , maqormente desde el versicnlo 20 liasia el f in, donde se leen enlre otras estas palabras: Et habita- bunt super terranz , quam dedi servo ??WQ Jacob ... . e t David servus nieus princeps eoruin in perpetuum. Et per- c!ltium illi Jwdiis pacis , pcxctunL sen?pirerrzurn erit eis : el Jundabo eos , et nzdtijdicabo , et daho sanct$catiu- nem ~nennt in medio eorum in perpetuum. Et erit taber- nctcullcnz nmim in eis : et ero eis D e w , e t ipsi erunt mi- 7Li popuhis. E t scient gentes , quia ego Dominus sanc-y zi$cator Israel . cuna Juerit sanctficatio mea i n inedio eorun2 in per-petuiinz.

Del inismo modo habla el mismo profeta en el ca- p i tu lo 39, iersiculo 25 : PI-opterea h a dicit Dominrrs -&us : nunc reducanz captivitatent Jacob , e t miserebor oninis domus Israel: et assziniunz z&nr pro nomine sufzcfo naeo. Et portabunt (6 corn0 lee Vatahio postquanzp@r- tnbtintj coriJusionenz man2 , et onznem pr.czwuc;.icationer;Liz suanz , qriu prevaricati simt in m e , cum habitaverint in ierra sua conjdenter , nen,inenz forrnidantes: e t reclrlxe- ro eos de populis, e t congregnvero eos de Lewis ininii- Corunt suorunz, et sancti3catus fisero in eis , in ocrrlis geiatiunz pluriinarum. Et scient quia ego Donainus Deus eorum , eo quod tralasiulerim eos in nutiones : et con- gregaverinz eos super terranz suam , e t rzon deiinquerim guernquam BX eis i b i . BI non abscondant u h a factem ineani ah eis , eo quod efludeiini spirilum ineuli'z super omnena dninuna Israel , N I I Dominus Deirs. I

E\to mismo hahia d i c h o ri S r ~ c i r en elvapitnlo de dr ri versiculo 22 : Sal-

? d o grcgent r n p i i n z , et non, erit u i fra in rnpiaam , et - I 3 E del iiiisrno profeta,

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64 I iirdl'cnbo in!er pecrcs , e t pews . Et suscitnbo swper pas paslw-ern ununz , qui puscat C O S serviinz nie~it~t Dowid: ipse pnrcrt e n s , i.1 iFxe erit eis in pnstorena. Bgo LTIL- t e r n Donziizus ero eic iii B~'z~nz : tt sers'as nieus Davidprin- c f p s in anedio coruni: ego Donzinrrs locutzs sum : e l fa- ciana cuna e is pactum pacir .... e t scient quia ego D7n2i- nus, cum contrivcro calmas jug; eorunz , et eriiero eos de manu inyerarzriunz sibi. Et non ermt ultra in rnpi- nant in genribuc, nrqrce besticz, t e r m rlevorabicni eos : seck Itubitabuizt conjdenter absque ullo ierrore.

A t rdo I O qual corresponde en fin la brevisiina y atlmirnbie psoiecia del capi tulo 3 de O\eds : Quiu dies rnultos sedebunt $Lii Israel tine r e p ... . e t sirie sacr-55- cio , e t sine altari , e l sine Eplaod , et sine I'lteraphinz: e t post hmc , revcrteiztur $lii Israel , e t qunrent Doniirzum Beum suunt, et David regena suunt, e t pavfbrrnt acl Do- niiririnz , et ad hoiiurn ejus in novissirno dierim.

0 toclas cstas cosas y otras innumerabjcs yne on& timos son sae i~os 6 ficciones de 10s profetas dc Dios, 6 clelieremos esperar sn pieno y perfec;g

-%-?

FENOJIENQ X.

El monte Sion sobre los

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T 642 sllblinzis super colles : e t j lueat ad eicnt popcsli. Br yro- perabunt gentes niultE e t dicerzt : venjie iisrendoniiss ad 11zontzna Domini, e t ad dontunt Dei Jacob : e t dccebit nos dc viis suis , e t ;birnus in senzitis ejtis : p i n de S ion egr-ediehrr lex , et 4erbzinz Domini de Jcrnsnzeni. Btjc6- d t c d i t inter populos nzultos , e t corripied genies j b r i e s usque in longinqurtne : e t concident gladios SLWS in vo- iizeres e t hasras s u a s in ligorzes: m n suntet gens ad- wcrsus gentent gladiunz : e t zaon discent icha belligerure. Et sedebit W ~ P subills vifeni kccam, e t s u b i u s j c u m S U U J ~ Z

et lzon erit pi delerrcat : qura os Domini etercituim Zo- c u i i m est Gc.

Jdos interpretes de la escritura llrgaiido 5 tocar estas dos profecias, se rien lntlcho de la gsoserin de nuestros Rabinos , 10s ynales entendieron estas cosas C O R una extrema materialitfad, diciendo , clue e n la venida del Mesias creceria fisicarnenlc el rnon- te Sion, elevhdose sobre todos 10s otros niotltes y collados veeinos 6 Jernsalen. Presciedamos por aho- ra del grado de tonteria ri que llega esa opinion, qpe a1 cabo nada contiene contrario ii la escritura ni ei la potencia del Senor y veamos qnd nos di- ceii 10s intdrpretes.

Inleligencin conzun de estas profeec!a”as.

s. 1 . O Ahrid sefior mio , qualqniera expositor2 &go qualquiera, porque partiendo to do,^ de u n mis- mo principio , y caminando sobre un iiiisyllo stipes- t o , eS precis0 qne digan en suhstancia lo mismo, aunque varfen algo en 10s accidentes. Despccs de haher Icido In explieacion q u e dan rl clichas profe- cias , tornad el peyuefro trahajo de confrontaria eon el texto , y CGII todo su context0 , y hallareis , B mi parecer , dos cosas tan dhersas y tail distantes enitre si , cjrsnnlunz dislat oriiis ab occidente.

Dicen priwerainente 6 lo suponen, q u e en am- bas profecias se h a b l n dnieainente de la iglesia pre- senle ; esta es la casa del Seizor, y al misnio tiem- po el monte de la C ~ S R d e l Sefior, por estar d e - x a d a , corn0 ‘lo est: un monte sobre la sriperficie de la tierm. De estc: monte de I n , casa de! Seplcrr ( k e n

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6/,3 ambos profetas : erit in nooissinzis diebus prEparaius iiz artice moiziium , et elevabiirrr super colleu. ~ Q U C yuieren decir estas expresiones tan singuiares No quieren de& otra cosa sino que la iglesia cristia- na est& fiindada sohre montes y collados ~ como so- bre firmev y solidisimos frunrlamentos : l q t d e s son estos ? S o n 10s patriarcas, 10s profetas , 10s apbsto- les y, tarnbien 10s preceptos , consejos y m;ixinas evangelicas : ipso suiitnio nngulari Irrpide Chrtsto $e- su ( 1 ) . Todo esto no hay duda que es unit verdad, mas que no viene a1 CBSO,

A esta iglesia pues se yrocuran acomodar, J se van acomodando en qnanto se p e d e , las palabras y expresiones de las dos profecias. Dig0 en quaiito s e puetle , porque hay algunas pocas , qrre sin haczr notable resistencia, se dexnn acornodar hastaute hien: otras necesitan de verdadera violencia y coaccion : y las mas no lo permiten de modo alguno.

su acomodacion cierta especie d e hri- 110, reparan mucbo e n aqnella expresion nueva 3’ admirablr:, de fiuir las gentes y pueblos hricia l o alto del m o n k Sion : et$uent ad eunz oiimes gedes: et jZueizt ad eum populi ; siendo esto dicen , contra la naturaleza de 10s fluitlos , 10s quales natnralmcnte baxan no suben : corren ligeramente de lo alto bii- cia lo baxo , no a1 contrario. Con la qml sirrdlitud se anuncia , q~:e las gentes y 10s pueblos de todo el orbe vendrian ri la iglesia de Cristo , no. baxando, sino sabiendo : 110 sigtiiendo Ins inclinaciones de la naturalcza , S ~ I Q peteando contra e l l a , y superando c o n la divina gracia t o & su oposicioii y resistencia. Vuelvo A clecir, que todo esto es una verdad inas clara que la luz : i p e r o e l fluir hicia lo alto , es alguna maravilla tan grande, que no se vex de mil maneras praciicada continuainente gor la misma na- turalcza ? Qui611 ignorn , por exemplo, que nnestra sangre fluye naturalmente no solo de la cahoza hasta 10s pies, sioo tamhien desde 10s pies hasta la ca- h e m ? i@”iCn ignora que 10s j t I g Q S del mas alto CS-

dro del Libano fluyeti naturaLiiiente desde la raiz

Para dar

~- ~ ~.

( I ) Ad Bphes. C . 2. v . 20.

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v-

644 hasta I n s rnmae? i.Qriic'n Eg~7o1-a gne e3 rncia, y ann las l lav ias inas cr,pinbas, 1x0 pudieian Utrir de lo a l t o &cia lo baxo , si p i r n e r o no hvbieten flniclo de lo hexo hlcin lo a l t o ? GOPI que el fhis Ins gentes per similitridinenz hdcia lo alto del monte, no es tin n i -

. lagro t a n nvevo qce inetczcn ebpecial srparo. La p a - b,ibrajLuent , yue es la qcie d a ocacion B dicbo re- parn , se halia en 10s 70 sin misterio a i p n o , paes keen sirnplenieote uenient : y Pagnini y \ aiablo l een coypuent , que no s u m a otra cwsa , que I!IP p a l i concurso de todas las gentes a i monte de l a easa de\ Seiior , lo qual estd atinnciado en el salrno 85: oinnes gentes , gzascumque fecisti , venierll et adcrabwit cornin t e Doniirze et glorz@Labunt nome?$ tuum.

Mas la facilidad con que sc aconiorlan a' la ig!esia pwsen te 10s primems versos, dura tan poco, q17e ai ]legal* a1 ~ e r s i c u l o 4." ya se enwentrail en un atas- ca Oero i n snpe rab le.

Dicen aiiihos profetas, que en acpiellos liein- pos de que hnblan , quando S i o n se piepaise y e ie \ e sobre 10s otros moretes , suceclcri entre otras niuclins cosas una bien singular, y ciertaincnte inaudita hasta el d i n de htry; c s & saher , c p e totla5 Ins gentes y p t ~ e b l ~ ~ de la tierra ,, juzgados y corregidos por el SeDQr ~ o z a d i i en acleiarite de una periecta paz : q u e arrojaran de s i , como trastos indtiies , todas las ar- m a s con que mirtunmenie se Ziahian ofendido hasea entonees , convirtidndolas to+s e n instruiiientos de agricultnra : que ya no levantara' la espada una gent@ contra otra : qne ,va n o aprendergn ni h a b r j quien enwile el aife m i l i t a r , ni habni mas esercicio de arm99 para la guerra : que todos y cada aria v i v i - r i n F e p r o s .y quieios siii temor de enemigos : d stdebit mir siiktLis v i tmz srtarn , et sublzis j , i i n i s ~ m , et nun eiait qui ditJrreat : porque el Seiior ha hahla- do l o La ordenado as i : quia os Domini exerciiuum Zocuruna est.

Eus intc'rpretes l l e g a d o S( esle mal paso , con- fieqan la dificriltad de pasasio hien ; y en xerdaJ que asi es , potqne l a igieqia pwsente quirn se ern- pe7ahan & ncornodar Jas proleciax, cuenla d i e z p ocho sigios y pic0 , y hasta aliora no se ha visto en e:la

s. 2.'

' ' ,3

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- I -

lnlpp Iejos de la dificultad en vez d e acoineterla ; por-' qi ie dichas profecias nada prescrihen nada mandan, ni B 10s cr is t ianos, ni A 10s liereges ni al redo ?le 10s hombres ; solo aiiuncian simpirraente lo que de- berii snceder en esta nnestra t ierra en otros tiem- pos que todavia 110 han llegado.

La quarta respuesta cIicc , que el sentido yropio de las profecias es que 10s veidaderos cristianos y fheles hijos de la iglesia no usara'n 6 no podrgn w a r Iicitamente de las armas sin haber pr imer0 procu- rad0 amistosa -y pacifrcamente alguna boiiesta y ra- zonahPe composition ; lo q u a l se ha visto y se ve freqiienternente no solo entre 10s particulares sin0 tamhien en t re 10s principes y sefiores cristianos. Y esto misino 2 n o se ha visto jamas, ni se ye i'reqiien- t e m e n f e , ni FS posible clue se vea fuera de la igle- sia? Nonne et Btaici hoc faciunt?

Ea yuinta respiiesta del todo mistica d ice , que el verdadrro sentido de estas profecias e s , que 10s h i jos de la iglesia , esto cs , 10s perfectamenle jus- tos y santos , snjctos enteramente 6 las ma'x2mas del evangelio , y l lenos del espiri tu de Cristo , gozara'n d e una inteina p verdadcra p a z , no paz del manclo, sino de Cristo : y esto aun en niedio cle las per tur- baciones y yersecuciones de 10s malos, ann en me- dio cle 10s dolores , traliajos y molestias de In vida precente ; pups como se dice en el salnio I 18 : pax nllc~Zcb diligentibm legem tiiani.

A esto se reduce en substancia todo lo que ha- llamos e n los doctores en respuesta, g como por S O - Jucion de la gravisirna dificultad. Si confrontarnos aliora todo esto con el tcxto de las proikcias no hemos nienester 0tra cliligencia para ynedar plena- mente coszvencidos de la iniprnpiedad de la acomo- dacion. Poi- consigaiente nos persuadinios mas y inas de que las profecias bahian de otros tiempos , y anuncian otros misterios infinitamente diversos que todavia no se han verificado. Lo c p e admira es , yne siendo f an violenta la sxplicacion que dan A estas proi'ecias , afir- men no obstante , que este F S su verdadero sentido, p q u e esta inteligencia es de f6 divina, yor ser con- forme a1 consentimiento unaninie de 10s Santos Padres.

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647 Es te coiisentiinicnto iinbnime de doctorer y Santos

Padres, que tantas weces oimos repetir , aun en co- sas que no pertcnecen a1 dogma n i k la niorai, se nos figiira txachas i e c e s corn0 un niur6 altisirno e' inaccesihie c p e debe detenernos el paso , y obii- garnos ;i volver atras. Mas si por curiosidad Ilega- mos k tocarlo, no hallarnos otra cosa que uiia ver- dadera pcrsyectiva ; pa lmrqne no todos , ni ianchos, ni 10s mas d e 10s antiguos Padres tecaron aquel punto particular de qrie se trata ; ya porqae 10s que lo t o - caron clc prop6sito , no era huwando y enserianclo su Tcrdadera intcligeneia, sino so!amente para sacar alguna moralidad , 6 algun concept0 de edificacion: ya tambieri po rque ninguno de 10s dichos Padres se atl-evi6 asegura r , que aquei sentido moral y mis-. t ico , 6 puramente acornodaticio cn que hablaba, fuese cl verdadero sentido. Todo esto sc ve claro e n la intei isencin de las dos protecias qne actunlrnente 05- scrvaruos , p casi lo inismo pndemos decir de otras innunierabks que quedan ya ohservadas.

Lo piiinerQ: es &Is0 que todos 10s Padres (aun ha- blando solamerite de los que tocaron este punto) con- vengan unriniinenienle en l a inteligencia J' dplicacion cle &has profecias 6 la iglesia yr-csente ; S. Grrgorio papa es Santo Padre , y dice expiesainente que el inon- t a snbre 10s montes de c p e ayui hnbla Isaias , es la Virgen Maria (I) . S. Gerdninio, S. Basilio y Rnper- to dicen: que el monte sobre 10s montes es Cristo mismo. S. Bernards dice que e s el cielo , donde to- do est& en perfecta p a z . Con que tenenios & lo me- nos qnatro 6 cinco Padres , que tocando estas profe- cias , no convirnen nnrinimemente en su inteligencia. iQudotos mas hallariamos, si nos fnese posible leer- 10s todos detenidarnente?

Lo s c g ~ ~ n d o y principal : porqne los Padres qrre tocaron estas dos profecias, las tocaron solamente de paso, y coin0 p o r incideneia; y as i I n s tornaron en aquel henlido acoinodaticio que con, cnia k sn prnp6- sito a c t i d , el qnal po r Io coninn , n o era otro c p la ediGccicioa y provecltio rspiritual de 10s Geles: ni

( I ) Con:. in I . Reg. c. r .

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. 648 mas ni menos , comb lo Iiacen hasta el dia de h ~ y aues t ros mas celoms predisadores.

Se prcpone otra inteligencia de e s t a s dos profedas.

S. '5." Prirneraniente : yo convengo de huena fc' con todos 10s doc:oi e s , asi cristianos corno judios . en qne en ellas se Labla rnanifiesfanwnle de 10s tiempos tiel Mesias: e t erit in riovrssinlis d.'ebus. Et erit iiz novis- sinio clieruni. Pcl est, tempore J f e s s i e . Tempore Christ-. Mas esle id e s t , si no se expiica mas, r s rtlti, equi- voeo. El tiempo i e i Mesias , el t icmpo de Critto (.e- gun tudas las escrittiras antigvash y u u e f a s , 7 segun todos 10s principios fuvdarnientaies del c r i s ~ a a i s - r n o ) no es u n o solo, sino d.)s tiempos infinitainente diversos en t re si. Uno que Y H p s 6 , y que persevera h a s h a h o r a en Q U e:c'cios ciertamente grandes y ad- iiiirabies; oiro q u e t rdavia no ha l l e p d o , pero cpe se c i ec y espc'ra firmeirnente que Hegarti: el q u a l t i t m - po segnndo parece t tdab ia mas grande y adnJiiahie, segun las e:cniruias q u e se endereran ri 61 mnnifies- tamesite , y en 61 se lerminsn. Este es el tiempo de qne tanto 'Eiabian IOS profc:as ynancIo. diccn : in k t e il(a , in illa die , in teniprre ilko , in novisrinzis diebas, in novissinio clizrunz , in s ~ c u l o nltero , in seculo ven- turo E c . Este e s ri t i rmpo de cpe tanto hahian en sus epistniaq S. Pedro y S. l'alilo, diciclndo f req ien t i - simaniphte in die Goncini nostri Jesu Christi = in die cidwen/L'i Domini =in die cum cpparuertt = in die adven- tris ejus . et regni ejus. Y esle es el tieinpo mimlo de que tanto h a h i 6 in pcrabclis , e t sine parcbclis el inis- mo M ~ s i a s , conLo se piIede v e r e n los evnryelios.

E! primer tiempo del Mesias , de que habran las profecias, civtarnvnte ya est,[ xerificado , y el mun- do La gozado, g ~ a y puptie gozar B satisihccion de sus eipctos adrnimbies. M a s con todo eso las proie- ciaa no se h a n veri6cc>clo plensrnente ; poryue n~ solo c o n ~ p r c h e ~ d r - n ei pr imer tiempo tiel Mesias, sino tam- h icn p nnuc:in i A s rl seguntio que toclavia se espe- r a . Esto es tan e.iiden+e p tan c ia ro , que seguu Pus d ive rws principios 6 sisiemas , se IJan sacadr, do5 di- ferentes conseqciencias; y aunqiie la una inas f m e s -

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.L,

ta que In o t r a , no por e i o clevan de ser ainl,as ri dus ikgi t in ias y faisas.

Q L U P ~ O e l Mesias no lia veniclo: p e s las pro- fecias n o se han cumplido.”

))Lnego ias profecias no pneden entenderse co- mo suenan, sin0 en utro sentido inejor , conio cs e l alesrjt ico y espiri tual; y en esie seriiielo pa se b,in veriGcado, y se es t jn verifienndo e n la igiesia pre- se 13 1 e .”

Si fuuese necesario tornar partido por atgnna de r - s t ~ s dos conseqdencias , y no hobiese espeianza de Iia:lar oisa tercera mas legiiima y 1 ~ x 3 ccnt‘orme d las escrituras, yo sulsscribiria a1 pnnto pcir la s e p n - d a , cauiipando mi cntendiniienlo in obseq:knt $‘dei. Mals esta tercera conseq;iencia i sera rnuy dificii Ita- llarla ? ( 30 se presenfn de suyo a‘ cpaiqriier entendi- miento liht e CIS: preocapacion , .Li de enlprfio fcfcrmal y declarado? Pnr todas las rscri tnras sahcmos con certidnmbre , clue el tiempo del Mesias compre- hende doe +ocas diversas : luego .... ( v e d la terce- f a ccasrqiiencin).

n lvego Bas piofecins de que hnh!amos, y otras mu- cbas semejan!es d eiEas , que no se han uerificadc, ni se han potiido Ferificnr e n el primer tiempo del N c - sias , podrdn muy hien verifjcarse en cl s r p d o I e l q u a l tiempo PZQ es m e n m clr i% divina que el prirnero.”

Wc),la conseqfiencid , dicrn c,bstiiiadnrnent~~ 10s doc- t o r r s jnilios. iPor que? Poryue p r o w & sohre un [ai- so supnesto , c,sfo e s , s o h e (10s tiempos ctitersos de l N r s i a s , no hahiendo n i pudiendo Iiaber otro que e t CJVC anuncian Iris profetas en gloria y maps tad . iOln J‘ clu6 cegucdad! LY F O anuccinn 10s profetas con la n k i s m n c iar idad el otro iiempo’ que debe prececder d esle ? i NII hablan df%l Mesins corrio de un mneslro p eyernp12r de toda jnst ic ia? i Como de n n hombre mnn- SO , pacifico y hu>nildc? i Como de 1111 hornbre in- j:ieiarnenlc prrsegc ido , !!en0 cle opvohins y d.: inju- r i a : , ;v pacientitinio en mcdio de p a a d e s triBula- ciones? (Saimo 2 1 7 69 ) . ;No 1inbian de P I , y IO ton icleran como tin Cordero manso 6 inocente, qui

cet ? i Ho lo conhidcran quasi lepro.s.ina , et percussow

I . ~

2.’

l lo r f /# / l r r nd vjrtin:ow , qui cIO~’~~~i t !Oi28/e72fd se otn~utes-

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650 d Dfo , et hrcnziliahinz? J No Io represei2km vulneratns prz:pter iniquitatzs nostrns , ailriftis propter scelern 120s-

tra , repratus inter iniquos? ( I ) iNo h a l d a n de sus liagas de rnanos y de pies , de s u dpsnudez en la criiz , d- su afrenta , cwfusion y dolor? (2) i No ha- Bian en fin de su nineite , de su rerurreccion , de sii ascension A 10s cielos , de su descarlso y Gloria A la clieaira de Dios hasta otro t iempo? ( 3 ) i 0 cie- g n s , tardm 6 infeliees judios ! No teneis , hermanos, que bitscar por otra parie la causa J- origen de yues- tros trabajos : ahi la teneis , p vuestros doctores tie-. nen toda la culpa, por Iiaberse ohstinado en zina idea tan agena y tan contraria d !as escr i tnras , qual e s de que el tienipo del Mesias clchia ser uno soIo, y este en gioria y magestnd. i 0 slulli c t tardi corde ad creden- durn in ornrzibus qua? loculi sunt prophetE, os J i go con pa- labras de vuestro Atesias ! (4) Nome hax opnrtuit pati Christum , e t ita intrare in gloriam suanz? No teneis pues razon alguna para reprobar mi conseqtiencia , ni la suposicion sobrc que procede pues todo se Eialln perfectamente conlorme cum onmibus que locuti sunt prophets?.

Mala conseqiiencia (oigo por otra par te a' 10s doc- tores eristianos ). Mas por yiiP? Porque ese t iempo segundo del Mesins, que se Cree y espera rcligiosa- mente , no es s prop6sito ni lo puede sei- para que se verifiyne lo qcle annncian estas 7 otras profecias sempjaates. [POI- c p e ' razon? Porclue este tieinpo se- gundo del Mesins n o se dexar i ver sin0 ab fin del mun- do, quando todo el linage l i u r n a ~ o , y todos S E I S incli- viduos sin €altar uno so lo , esteinos no solo mnertos, sino resucitados y conSregados en el valle de Josafat para e! juicio uniycrsal; porque este segando tiein- p o del Mesias deberk ser Griicamente para destruirlo t o d o , y acnhar con todo: para arrojar 10s malos a1 infierno, y ilcvar a1 ciclo ti 10s hoenos.

Atas esta idea ;de donde se h a tornado? ( D e las santas escrituras? Cierko qne no : poryue cstas la re- pixgnan y contraclicen ;i cnda paso , s e p n hemos ob-

( I ) Isni. e . 53. (.) Snlnz. 2 1 . Zach. c. 15. I

(5) Salnz. 15. ci tog. ( i f ) Lrcc. c. 2%. v. 25.

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65 I servado hasta aqui , p tadavia tenemas qne obcervas. i Acaso cle alguna verdadera tradicion ? Falso tam- bien: ya porque esta no pneJe haberla contra las es- cri turas : ya porque su osigen es mu7 mociern~ , pttes- t o que en el quinto siglo de la iglesia como testifica S. Ger6nimo ( I ) la idea opnesta era la coninn entre 30s doctores cat6licos y pios: sed et nosfrorunt in hnc parte dunztaxcit plrcrima sequilu,. nzidiirudo : y en otrn parte : inulli ecutesiasticoruna sirorunt , et nznrlires ira dixericnt. Con que no hay razon alsilna para re- prohar nnestra conseqkencia , la q u a l pal-ece perfec- tamente conforme con todas las escritui’ns antiguas y nncvas , y con 10s principios funclamentales del cris- tinnismo. Luego bien podrernos esperar sin temor ai- gun0 que las profecias de yue hahlamos . y otras in- numerables semrjarites A ellas , se verifiquen plrna- meiite juxta litterant en el segundo tieinpo del Me- sias, plies en e l primer0 no ban podido tener lugar.

Lleganclo pnes este segunslo tienipo que toclos Cree. mos y esperamos religiosainente, sacederd luego entre utras cosas la elevacion del rnontc §ion sohre todos 10s niontes y collados ; exprcsion visihleniente figu- rada, pero admirable y propisim:l para explicar la dig- nidad, e l honor y la gloria & que serli entonces su- bliinada la ciudad de David; despues clue resucite, y se ponga en ella, sicut in diehus anfiquis, el taber- ndculo 6 s o h del mismo David, p o d cecidit: J- des- p e s que vuelva la potestacl primera, y el reyao de la hija de Jerusalen: e t seniet pofestas prima, regimnz JXlc Jer~isalena. .. et rcgnavit Dominus super cos in i n o m le Sion. Entonces se verificariin pienamenre jrsxin iitteram las dos profecias en question y oiras inna- inerahles que anuncian lo inisrno con diiersas pala- bras : POT consiguiente deberrin flair en sque l tiem- po l as gentes y 10s pueblos ha’cia lo alto del monte Sion.

iQuE gentes, y qud pueblos? Sin duda 10s que qixerlaren vivos despues de la venida del Sefior, corn0 parece certisimo que lian de ynedar, asi poi- €antae escrituras expresas y clams como por el articulo de

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( I ) 2 . ad Tim. c. 4.

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654 iitione , et iniquitdte , como lee Pagnini) n e ergo di- inittas cis. Despues cle este pare'ntesis hien importan- t ~ , etidereea otra vez la palabra 1 la casa de Jacob, dici6ndole en e l nombre del Selior lo que sc sigue hasta el fin del capitulo : ingredere in petram , et abs- condere in f o s sa hicnio ct fucie tintoris Donzini, e t li gloria majestatis ejus. Este rnismo consejo se le CIS, 6 esto misnio se annncia corn0 cma que dehe suce- der en algnn tiempo en cl capilulo 26 del rnismo lmias , vcrsiculo 20 : T u d e popule nzeus intra cubi- cula tua , Claude ostia tiia super te , et abscondere mo- dicum ad m ornenlum , donec pertranseat indignatio: ecce eninz Dominus egredietur de loco s u o , ut wisilet iniquitatem habitatoris terrnr contru euna , et revelabit terra sanguinern S U Z C ~ , et non operiet ultra interfec- tos S U O S .

Dado este ConsejO, pasa luego A representar coli la major viveza lo clue deberg snceder en nuestra tierra con la venida del Se i ior ; es ri s a b e r , la dcs- truccion de 10s imperios , reynos 6 potestades : la ruina entera de. toda la iinpiedad: la humillacion de 10s soberhios : el temor y temblor con que estarlin entances 10s homhres mas nltivos y mas lienos de si. E n suma , la angustia y tribnlaciori de todos los pue- b los , tr ibus y l e n p a s , que clebe preceder 6 la cpie- tud y paz de la tierra.

Oculi sublinz'es hominis himiliati siirzt , c t irzcurva- bilur allitlido viroruna : exaltabitisr airtein Dominus so- ,!US in die illa. Quia dies Domini exercituuna super o n ~ - nem superbuni e t excelsuna , e t super onmenz nrrogan- Zen6 : et Iiumiliabitur. Et super oinms cedros Libani su- blinaes, e t erectas.... et super onines colles eltlvalos. Et super onznenz turrim excelsam, e t srcpcr oninern murunt munitunz. E t super oinnes naves T?&arsis, e t s y e r onanc quod vim pidchruna est.

Todas estas expresiones metafdricas tan vivas y magnificas de que usa este profcta, diciendo exprz- samente que so11 cosas todas reservadas para el dia del Seiior curia surrexerit perculere terrarn se aplicari en van0 A la destruccion de Jerusalen y Juriea par Nahucodososor ; poryue e l texto no alwaza u11 suceso particular solo, mi0 L toda la tierra : quia dies DO-

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655 mini super omnent superbma , et arrogantem. .. . super onines cedros Libond sublimes , e t erectas.. .. super om- nzs nionIes e.xce2sos , e t colles elevatos .... super oninent niuruno nzunituriz .... super onznena turrirn Gc. super om- nes saves Tlarsis.

Estas illtimas palabras, aunyue no se considerasen Ias otras , hastahan 'pars conocer que no se B a l ~ l a acpi de Bahucodonosor, ni contra Jernsalen y Ja- dea. Que' n a e s de Tarsis il del mat- occidental te- nian en ayuellos ticmpos 10s juclios? Esta inisma es - presion y la sahrtancia de las oiras se iee en el sal- mo 4 7 , que manifiestarnente BahIa~rFel dia de1 Seiior: qmxzinnt ecce reges term congregati sunt , convenerunf in tinrinz : +si virlenles sic adniiruti suizt , contrirbali sunt, cornniofi sun1 ; tinzor nppreliendit eos : ibi dolores ut pariurienlis in spirilu wehenzerzfi conteres naves Tharsis,

Dicen que n o se habla ayui de las naves propias de 10s judios , sino cle 10s Tirios y Egipcios, que cleseaban e' inbentahan socorrer ri Jertisalen contra la prepotencia de 10s Caideos. &:as clado cas0 que 10s Tirios y Egipcios taviesen l ~ u e n a voiuntad de socor- r e r i Jerusalen, icBrno poctriaii socorrerla con sus naves ? Serusalen i era ncaso en ayvellos tiempos al- s u n pne r to de mar?

Dicen tarnhien cpie la profecia no liabla solamento eontra Serusaien y ios judios, sino tarnhien contra T i r o , kt caaI siendo en ayiiellos tieinpos la reyna del m a r , y teniendo tantas naves c p crtbrian el RIe- diterrrineo , n o p d o coil todo esto itefenderse cle la potencia del rey de Babilonia. Bicn: mas ri que' pro- pBsito se traen ;i eonsic?m+cion las nales de Tarsis ( a n i q u e t d a s hubiesen sido de sol3 Tiro) en 1s er- pedicion de Wahueodonosor contra Jerusalen 1 Qoie'n if;nora que si bien el tiempo de este principe fue terrible y funestisimo para Tiro , no Iof'ue de modo a l p n o respecto de sns uaves! Asi corno las naves dc Tiro nada liicieron ni podian hacer contra el exe'r- cito dc Nahuco , que ohraha por la parte de tierrtl; as i cste esdrcito n d a hizb ni p ~ d i a iiacer contra las n a w s de Tiro : antes estas le yuitaron de las 11la-

nos todu el iruto que podia esperar de su trahajo,

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656 pues qne salvarotl todas las riquezas y tesoros in- mensos de la reyna del mar.

San Grr6nimo schre el capilnlo a6 de Ezequiet citantlo las liistorias antiguas de 10s Asirios : dice que 10s Tirios liendose ya sin eq-eranm de poder resistir & IFS Caldeos , FC emharcamn en sus naves, embarcando cmsigo todas sus riqrrezas ~ y todo quan- t o b a b i a en Tiro digno de alguaia estixnacion , y se retirnrnn unos 6 Carsago , colonia de 'ri1.0 otros 6 la Jonia 6 Grecia , otros 6 Q ~ I * ~ S p a r t e s de Europa y Lti'rica , dexando a i rcy (le Eabilonia solamente la ciuclad destruidai La vcrrlad de esta noticia sin re- cirsiir B \a liisioria a n k i p s de 10s hs;r;o5 se coiige r l~r i s i rnameole d e l capitulo a9 dcl r,ii:mo Ezequiel: Fi'ii konziizis , le dice e! Scam- 6 es4e prcfeta iersi- cnio 18 , NnBrLcodor,osor rex Babilonis servire feci t ezercit:rnr siiunz servioife magna ndversus Tirum : e t nierces 7z0n e s t reddita ci , nrc exercitui ejits . d e Tiro pro seruilz& p a servivit inilri aclvtrsus enna. Propte- ma Imc dicit Doruinus Bezis : ecce ego dnbo Nnbuco- donosor regenz BabiEonis in term &'gypti et accipiet mrsititiidirzent ejus, e t depredahilur naaizirlrins ejus e t di- rijiiet spolia ejus et erit rizerces exercitui illius , e t operi quo servivit adversus eamz.

De rr ianrra , que liabiendn trahajado tanto el ex&- ci to de Nahoco en la conrytaista de Tirg habiendo servido d Dios ser'witute magna en abatir el orgiillo de la r c y n a del mar , y qccricndo el iiiismo Dios premiar ii este grincipe y 6 s u exe'rcito el gran sesvicio que IC babinn hecho sin saber Io que ba- c i a n , le fue necesario echar m3no de oiro erario, xi de otro ram0 de s i1 erario qual foe el Egipto; paes de Tiro 110 hahian sacado utilidad niguna : e t merces non est reddftea e t , izec exercilui e&s de giro: y ipoi- que' n o hab;an sacado utili13 d mlguna de una ciu(1acl t an riea C Q I I ~ O T i r ~ , sine porqrie sus naves 3iafJian librado zi sns hallitadores con todas s n s ai- qrierns ? L71eqo acpellas palabras del profeela tan ex- prcsivns 9' tan viras : qriia d:es D5~;iazi super om- nes m v e s Tharsi's no vienen a l cam, n; son de moelo a jgam acomwIah!es ;i los tiempcas de Nabticodonasor,

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657 ni :$ su eTpeclicion contra 10s jodios , ni contra io's Pirc,s. i Qu;;nto menos ?e podrdn acoiiiodar A aqrie-

110s tieritpus tod;is l a s otras eupresiones de la iiliqma profecia? Rep ircce la de! versiculo 1 7 : e t i;zcur-vnbi- tui- subl i~ iz i t~s honaiizuni , et hunziliabitur altitrrclo virorimz, e t elevabit(w D o n z i i ~ u ~ solus in die illa , e t idolu petzi- tzrs conferenlrsr. i Todo eslo se verific6 en tiernpo de Nabucodonosor ? En tieinpo de este principe i f:ie exiiltado , clevado y g lor i i ic~do e l Seiior solo! iDes- aparecieron enterainente 10s idolos ?

Eos intdrpretrs se dividen para est0 en dns opi- nioncs 6 niodos d e p e n w r . Unos dicen clue aqui no se hahla de 10s idolos de toda la tiersa en general, Fino solamcnte de 10s idolos de 10s jndios. Estos ido- 10s , a h a d e n , se acabaron del todo respccto de 105 in- dios , porque desde la cautividad de Babilonia d e u - ron de ser id6latras. i M n s eon que' iwon se contraen ;i solo 10s idolos de 10s judios, aquellas pslabras tan absolutas y universales : in die illa icloln peiz i t iu con- tri'eritur? con que raeon se asegwa dcspues de est0 yce 10s judios clescle aqueila dpoca dexaron de ser id6iatras? Eo contrario n o s dice la escriiam inisma. 3Inchisi:nos lo iiieroii en su cautividacl, y cnai tndos cn Jernsalca y Judca en 10s tiempos del rey Antioco. Otros confic a n que se behla ayiii en general de :os id*)los dc to& la t ie ira: 10s yualcs ancque en rI irn- px*io de Piabuco no S E cxtcrmiiiaron plena y per fec l~?- m r n i e , li io niello5 sc ningc7aror, 5 extermioar , Linsta yyie e a iiernpo de Teodosio sc acaR6 de verificar pie- namente ia profecia : IdoZn pmitirs corzter*nhrr.

En este ~ x o d o de acomodar , parece fdcil ~ e p r n r , eufre o t ~ s doh defectos cap;ta!es. Prirnero : e l pro- feta habla ciertarneriie de un dia 6 tienipo 6 d p c a eilehre , e n la qual dr.ber6n suceder todns la4 C Q S X S

p c 61 mistiio anuncia. Entre estas una eb el exter- niinio pleno p total de 10s id?los e t i d d a pnilus co:i te imtrw. hhora : d e dia 6 tiempo 6 e'poca , yriie- rr:i 10s doctores cpe f w 4 e e l dia 6 tienipo de Ma- buco ; mas corno e n eclc dia no se verXc6 el ex- tcr:ninio de 10s itlolos, se llace precis0 aiargar este clia de P T ~ ~ u c Q mug cerca de mil aiios, que iueron

r 7 .

42

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G58 10s que pasaroii hast2 Teodosio. Con lo qual se l o p e \ que la profecia se empiece i? verificar e n tiernpo de Nabuco, y. se concluya mil aiios despuea en tiem- PO de Teodoslo. tQnB t a l ?

Segundo defccto: aiin despues de hecho el gran rnilngro de alargar aynel dia cerca de inii aiios, iquc cosa se p e d e concluir contra aqriel enemioo , idola penitus cni?lerelltrrr? ~ L O S edictos de Teodosio eater- iiiinaron perzitus 10s idolos de toda la tierra! Los ex- te rminaron , d i cen , en el imperio roniano. Mas a u n - que esto fuese verclad , que no lo es , t " ~ hahia mas itlolos en toda la t ierra que 10s del imperio rornano? i N o e r a n idrilatras , y lo son hasia el d;a de hoy 10s habitadores de 10s vastisimos paihes clet Asin, desde el Eufrates hasta la China? ~ L O S de lo inte- r ior del Africa, hasta e l cabo de Euena-esperanza? iLos de la Amer ica , y cle todas 1as islas del OcSai~o? Y aun en la Europa misma, [no eran id61a11.a~ t res 6 quatro siglos despues de Teodosio casi todas las r eg imes septentrionales, desde e l Rio y 10s Alpes h a : t a el Glacial? Con que aqnellas palabras icloEa pc- nitzis conlerentur, w i se verificaron en el dia de Na- bucodonosor, ni en el dia de Teodosio , ni tampoco en el dia qtre h a corrido desde Teodosio liasta lo presente. Luego clebcri llegar algun dia en que se verifiquen: que s e d sin duda el rnisinp dia en q u e deben verificarse totlas las palabras que preceden e t inczcrvabitrar sublitnitas horninurn , e t hziniiliabilzir nlti- tudo sirorurn, el elevnbirrir Dominus solus in die illu, et idola penilrts conterenizar.

Fucra de esto: se puede hacer aqni una refle- xPon tan breve como inieresante. Los doctores inis- mos desde el grincigio de esta profecia nos asegn- ran coni0 una vrrdat? indi*putahla, 6 corn6 un a r - t iculo de € 6 , que se habla en ella de l tienipo de Cristo y de la iglesia presensp. Ahora bien:' si esto es tan cierto y tan indisputable, 2 ?or qu& no ex- plican squ idamen te toda esta Ti-ofecia particular del tiempo de Cristo? [Poi- qu': tiexnn tan presto este ticmpo y la predicaciou clel cvaiig(J!io? lPor quB desde el yersiculo 6 .retroceden cerca d e 600 aiios , reciir-

9

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659 riendo tan repentimmente- a1 dia de Nahnco? i POY- qu6 dan luego un salto tal? pbudigioso, dcsde Nabu- co liosta Teodusi-i?

Despues de haber hecho estas y o ~ a s reflex?ones, volved , seiior, B leer con inas cuidcldo 't+ esta pro- fecia particular contenitla en el capitalo 2 \<e Isaias. Si en esLa leccion poneis 10s ojos h~ icd inen te en el segundo tiempo del Mesias , yo nie atrevo B c b j r que con esta sola diiigerrcia a1 punto la entende- reis t oda , desde la priiriera hasta la ultima palabra, y esto seguida p llanamente, sin hal lnr tropiezo n i embaraTo alguno que os obligue 6 retroceder ni mu- cho ni poco $ otros dias 6 tiempos ya pasados. Del inisino modo entendereis el ponto del ditimo versi- culo de esta profecia particular q u e h a parscido t aa obscuro.

S. 5." En verdad despries clue el profeta nos Ea representado can la mayor viveza la tribulacion hor- rible de aquel dia , la humiliacion de 10s sobcrbios, la exbltacion del Seiior s o l o ) y el exterminio total de 10s idolos, concluye todo el misterio con estas palabras : quiescite ergo ab hornine cujus spiritus in na- ribus ejus e s t , quia excelsus reputatus est ipse.

iQuti quiere decir esto? ; A cpiienes se endere- zan cstas palabras? iQu6 hoiiihre es este de yuien se deho descansar en a c p e l d i a ?

Dos modos de pensnr se hollan sohre esto en 10s int8rpre:es. El priinero dice que estas palabras se en- derezan B 10s judios para 10s ticrnpos de Nabtrco, el qual es el hombre cr+s .spiritus in n a r i h s ejus est, En esta inteligencia las paiabras tienen este seniido, quiescite ergo a h homiize : dexad , 6 judios , de resis- t i r d nn hombre tan grande co~iio Nabuco, poryue es un priticipe guerrero, y lleno de fuego ) es el jk- gell'unt Dei , y til se mira ii si ixismo , y es mirado de todos coino n n liomhre escelso p superior B todos 10s hombres : quia excelsits reputatus est ipse.

El segundo modo cle pensar pretende que las pa- lahras se enderezan B 10s jndios, no para 10s tiern- pos de Nabrrco , sino pai-ii 10s tieinpos de l Mesias, el (11131 e s el Iloin1)re c~I/'iis spiritus in izaribus ejus est. En esta inteligencia las palabras tienen este sentido:

"\

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GGo yttiescilc E F g O a t h011~iite : id est : clexad , C pdrfidos jildios de iesistir :: vneqtro Mesias : dexacl de per-e- guirio , de i n j n r i a r i o , de caluniniarlo , poryiie ar i l - que es t rn hornbre inanso pacifica, e s lamhien un h o J & ~ e superior & todos ! O S iioinbres cz+s s p i r h s in laaribr~s e+s est. E s un hombre Dios , coya orn- nipoteocia os puccle en un momento an;cluilar. Ya ?IC- inos ob.,eriado, clue toclns las palabras d c esta pro re - cia clue precedcn son inncomodabics a' Kal,uco, y a1 tienlpo priinero del BIesias ; yuniyuiera pncs de ccias dos i:iteIif;ciicias i*cpugna al context0 de la profecia.

khbiiri lose pues aqrii del dia .grande del Senor que t o d o s esperarnos no teneinos que buscar algunn per- sona s inmular de yuien iiablen ayuellas iiitimas pala- 3 bras : r/rr~esciie crgo ab honzine. Este Iioiiilwe no es o:ra cosa , que todo ayuei en ~ 7 1 ~ 7 3 s nianos h a e s r a d o y estard lrasta aqur l tiempo toda la poicsiad cmam- da de Dios , toclo el mando, todo el impeaio, to- do el juicio. Este hornhre 6 estos hon.brcs son e i i - denlemente 10s que en esta profeeia de Isaias vicnen figurados por 10s cedros del Libatin, por 10s altos robles de Basdn, poi- 10s mcntes y coiiados , poi- Iss torres elcvailas k c . diciendo CJUE el dia del Seiior se- rri directa C inrnecliakiinente sobre ellos. Estos son 10s mismos clue pertmeccn 2; la estatua de Daniel, con tm 10s yrie se fornia el consejo : ut az~ferariir yotenlicz , et conterafur et dispereat usque in $nun ( I ) .

k!rirnillado pues cste hombre, iocurvado, yuebran- tado can el golpe terri1,ie de la piedra, y conlo di- ce S. Pablo, evacoado iodo principado , potestad y \in.- t u d , se dii,igen las Llltimas palabras de la profecia e!e I sa ias no sciamente ;i 10s j id ios en particular, sino wnernimenfi. :[ foda I R t i e r ra , 6 ri todo el rest0 del ?inage i ininnno, cpe 1;o Iia pasaclo por e l f i ~ o cle la ecpada dei Rey de 10s reyes : qziicscite ergo ab icon?i- ne , cu jus spirjtus fn rzar~hris ejcis e s t , qu;n excelsits repufcltiis e r l @e. DcscassaJ 3 3 , 6 pohres judios, y descansad tambien toc!o el resiclito de las gentes : des- cansad de In poteqtad y dominacion del llomhre, cn- yo espiritu , eu? a fucs zn , cnya gmpcleza cc nsistin so-

( I ) c. 7 . $7. 26.

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GG I Iamenfe e11 un poco clc a r r e que respiroho por sns narices, y no ohstante (:i peri.:ibd de si quc era er- celso, 1: de o t ra clase siipeiior a l recto 10s honibies, enPaneci6ndoec en su poiested recibida de Dios co- mo si fne:e prppia. scya : p i a excelstis reyrrtniris e s t kpsr ,

Ilabiendo oh~crvac!o ntrninmentr todo el con- ies lo de I s a i a s , patemo.; A ofs?eivrw hre \emente el de N i q i t e a s , yiricn I l ies c l i , Iialier anunciado has- t a el versicuio 6 cl rni io gcncral que anuncia Isaias, p casi con ias misrnas pdabras , I!cr.a c i misterio mis- mo por otro camino particn!ar, mirando en 61 tini- cnmente In que pertenecc a1 cstado futuro de su puc- blo. D i p Eiittiro, no solamcnte respecto de 10s t i e m - pos dc esie pro€ctctl , sino i a i ih ien respecto de nues- tros tiempos , piirs las C O W S que lriego anirncia , cier- tamente no se hm Terifkacfo h a s i a e l dia de Iroy. In die illn ( prosiguc ) coi7gregah clairdicnntena , c t cain quam ejcermn cdioant , et qiiani oAUixerani : e t ponant clawhcttn~eiiz in reliquins ; e t caiii q ~ c e labo;*aberut, in gcrzteni robr:stanz : e t r~giznhit Doniiizris super cos in nzon- tern Sioia, ex hoc iiiiizc e t urque ii2 alerrzum. ... e t m- niet poieJinr prima , regizziiia J,':irc J~::isn2civ. C'ta mis- ma c l a u c i i c ~ ~ ~ ~ + e aparcce con mas r i c x galas en e l ca- pitalo 3 de Sci'onias , vcrsicx!o ~q : Ecce ego, le di-. ce el Seftor, iiiter;fjciant otnnes qui uflixerunt le iiL tempore ill0 : e t satvabo clcudicaritem : et earn qucz ejeC- ia fucrat corigregnbo ; e t poiznti~ eos in laudena , e t in 11o1ne12 in oniiai terra conjksiorils eoruna.. . . dnbo mint vas in nomen , et in Ini idens ontnilms p o p l i s terrarim, c u m convei-tero cayrawitatem vestrain , corana ocrilis ves- tris , ait Duniiizus.

las yualcs conocidas , cpeda entendido todo cl misterio. Pn ime- ra : i qiiicn es rsta ciandicnnie , q:tmz ejecrrat Donti- nus , e t quam nJExertr/? Segunda : i d c ' q r i ~ dia yuc' ticrnpcrs SF; iiabla a c p i ? B n : b ~ s cusas las I

s e n 10s intt iprries coin suina brevedad, dicjentlo yne la c laudicar~ie no e s o!r<i que la cast de 3ntll i qne llev6 mul i r a ri 3abilonia Mabuco, la c p a l setenta aiios drsplles conwrcg6 D ~ G S en JeivsaIen p Jucle.1, coil li- Qeticia y benepihcito del rey C k o , siho hubiese otra

5. 6."

0.

Dos cosas lcneiiios a q u i ytie conocer:

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662 ckusula que esta: cangr~gaho claudicrrnten? in die illn, es claro que podia aplicarse ri 10s tieinpos de Ciro. M a s , y las otras icomo se acornodan 6 dichos t iem- yos? por exeinplo : quando volvieron de Bahilonia aquellas religuias , i r e j n 6 Dios sobre el!as e n e l mon- t e S i o n , drsde entonccs para sienipre sin fin ? P n e s esto es lo q n e afiatle inmediatarnen'e Miqueas : Et reg- nabil Dominus super eos in nionie Sion, e x hoc nunc, et t r s p e in. aternuni. E n este tiempo ivolvi6 a' esas re- liquias la potestad primera p el reyno de la hija de Jerusa len? Pues esto sigrie anuncianclo el misnio pro- f c ta : et venfef pofestns prima, regnum j l fc t . Jerusai'em. E n aquel dia 6 tiempo de C i ro , [puw Dios ebtas re- liyuias que volvieron de Bahi!oiiia, in daudenr, e t in nomen omnibus populis terrct.? Pues eslo promete Dios por Sofonias, Tersiculo 19 p 2 0 , y poco antes h a - bia ilicho 5 la misma claudicank versiculo 1 5 : Rex Israel Doniiniis in medin tui, non tiniebis malum ul- tra : in die rlla dicernr Jeritsalem: noli tirnere Sfon: non disolvantur manus tuct. .i'?oniinirs Deus trrus in rnedio fui

fortis , ipse salvavit: gaadeLil super te in lcptilia, sile- bit in dilectione sria ; exultabit super te in l a d e . ; Q u e c o w tan diversas y tan agenas de las r p e sn- cedieron e n la vuelta de Enbilonia, como de todas las yuc Iian sucedido hnsta lo presente!

F n e r a de esto : 10s intdiprehes nos clicen de esta pro!ecia de Miyueas lo mistrio que de la de Isaias, estn es, yne una y otra einpieaan Bahlando del tiem- po Jel Mestas , y de la igiesia cristiana. Mas ya he- mos visto quan irrposihIe I P S es en la c!e Isaias svs- tener 9 a c o a ~ o d a r la explicacion a1 printer t iempo de4 Mesias , y no hay duda qne igual imposibilitlad han de liallar e o la de Miqueas, p o r per iino mismo PI misteiio y las palahras ; asi que deherdn confeii- t a r s r , y no tener d mal que se explicjue toda clescle el principio basta el fin en el s egunc !~ iicrnpo del Mesias, sin salir c k 61, p o r q u e para este riitimo tiem- po est& dirigida.

Se conzrma todo este punto colt e.? salmo 45.

5 . 7.' La inteligencia de este salino parece Clara y

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663 racilisima, si se cnnibina 10 cpe en 61 ?e dire ) con io que acab,imos de o l -e rvar rn las dos profeeias de Isaias y Miqueas. Toclo caniina naturalrc~ente liicia un mister io , y u n mismo tiempo. Y aunque para ~ n i prop6sito artnnl haktaba la observaricin de dos 6 tres de sus vcrsiedos no obstante me p a r m e con- vcniente obserkarlo todo, j a p r SEP breviqirno e' i n - teresanie en s i mismo , ya pcrq:ie su inteligencia abre el sentido clt: otros muchos salmos , y de otras much is i m a s p 1'0 fr cia s ,

adjutor in tritu- Zntionibris 7ure inverierirnt nos nimis : prnperea iwn ti- tr2rbinzrrs cluna lurbubittir terra ) et frarasJerentur naonles iit cor ?naris.

1 Qnidn habla en esta profecia ? i De que' t iempo 6 para c p C fiempo se habla en e l la? Los doctores crisfianos (segiin su sisterna 6 empe5o foriiial dc acomodarlo todo 6 la i g l e s i a presente ) clicen yrie aqni habla la iglesia quando pasados 10s 300 aiios de la persecucion , p e d 6 victoriosa de todos sus ene- migns externos , y e n nna paz uni$ersal con la ccn- .rei-bicn , y l~a-uo In protecciou del gran Consianiiiio.

Es la inteiigrncia f w r a bastante bucna , A lo me- nos en ayuel sentido que se I t a i m acomodaticio si todo el salmo se cooclrryeve e n e l iersiculo 6. El 3.ran trahajo es , que lo que signe hasta su coneiu- won , rehusa abiertarnente esta acomodacion y se opone 6 elta ; por cuyo rnotivo 10s in tdrpre tes , ann los mas difusos , apenas tocan esta irltima parte del sa lmo, como si e n ella n o huhiese cosa alguna dig- ria d e consideracion. Algunos otros tiran 6 explicarla hi evisimaniente , y pretenden haberla erplicado su- ficientemente con solo insinuar yue desde Constantino liasta la era presente , se ba verificado todo quanto clicen 10s profetas d e la paz y f ~ i i c i ~ l a d del reyno del Mesins ; mas en la realidad nada concluyen , por Eo qne ha l~rdn de perinitir qne asegurenlos , gne qiLien hah la en este salmo y en 10s dos s i g u i e n t r s , es la clandicante misrna ) no en yualqtiier estado 6 tiempo indeteiminado, sino precisamente en el tieinpo y es- tndo de su fniura vocacion , de su congregacion, de su asuncion y plenitud.

d)cus i~oster refiigirinz , e t zirliis

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6G(t Esta claudicante , epta pobre eoferina , ahando-

Dada del cie?o y de la tierra , cvh;eita toda de Ha- gas horrih!es . es cerlisinio qve aiy,un ctia Ira de sei- -pel-fectamcnte cnrada. Es iertlad que piir Jeremias ( I )

le dice el Seiior , que sti rotun-a es incuiab!e y pC:- sima s a l l a p . Mas tamlsien io es, <{:;e se lo dice Gni- carnentc para que conoeca la g r a n d e ~ a de su mal, pnes luego la consuela a 1 Tersiculo 1 7 con la pro- mesa de esta Ferfecta sanidad : cl-diicarn eniriz cicu- tricena t i b i , et ci srilne'ribis tuis scnnbo te quia ej rc- tam vocaverurit te Sion , ircc est yure non 1.abebat re- qriirenteni.

Plies esta pollre, resti tuida ya a' su sali;d , es la q u e cinpicza a hnblar , 6 e n persona dc quien em- pieza, y prosigue hahlando el Espiri tu Santo per os David en todo e l salmo 45, y en 10s d:.s siguicnies.

Versiculo I , 3, y 3 : Deus noster ref~rrgiiiitt, et vir- t r rs , crdjritor in tribrilationihrrs que inverrerimt nos nimis.

El 8eiior es riuestso rcflpgio y nuestra fort;tleia: SLI hrazo omnipotente nos h a sacado lihres de tarif a s angustias y trihulacioiies arrtiguas y naevas , qure in- oeizerurzt ncs nimis : no teneriios ya clue temer , atin- que se t w L e ;v desconcierte toda ia tierm , annciue 10s montes scan arrancac1os de su sitio y hunclic'.os en l o mas p i - o f ~ i ~ r ' r ~ dcl r m r : rrtodo de hablar yrre &nola una I crilacieia coi.fianza y plena srguiidacl haxo 13 pioleccion del orniiipotente. Pasa luego A decir pio- fc'ticamerite y muy en Iiieve io que Jebe suceder en :a venida giorrosa clrl Seiior; mejor direnios , I O que e n a c p e l i iempo de que habla el espiri tu acd- ba de suceder.

Versiculo 4 : Sonrserunt , e t turbata? szint aqzice eo- rum : coriturhuki m i i t ntonles in f o r t i t i d m y'i~s.

E \ a s e I p r e e i o 11 e s s on con u ci d a m c 13 t e m e t a fcir i ca s ; torn,:ndose a q u i por las aguas t t ~ r b a d a s y sonantes, l a agitacion , ruiclo C O ~ ~ L J S Q y espaniahle (le toclns las g;ciItPs , 131iehlns y I c n y a s c) f i i c i e forn:idiizis Do- mfni , e( d glorrr i naujestnlir ejiis , ciirn srirrexerit p i - -

ct i lere f e r n 7 m (2) ; .y tpimindose (le1 niisino modo por In contuibacion de 10s montes , la contnrhncion y

( 1 ) ~ c. 3 0. v. 12. (2) Isni. c . 2.

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G G 3 tenihlor de 10s hombres mas altos y sublimes, y e prececlen en digniclad , y se eievJi1 sobre 10s otro3 hombres: lo qtial se dice clarainenk en la profccia de Isaias que pcco ha observamos : quia dies Donzi- ni supcr onzrzem super bum^ , e t e x c e l s u n t , e l s:Lpzr om- nem arrogantern , e t hnniiliabiirw.. .. e t super o i m e s moz- tes excc l sos , e t cnlles e levntos . Esto inlsmo sc d ice en la claudicante clrspoes de curada CIP sus l ingas, y cobiertas las cicatrices ( I ) : Ecce trwbo Dortzirzi , Jur:v- egredicns ; prccella ruens , in ctipii'e i n i ~ u o ~ i m conpries- cet. iVnn aver'tct irnnt indig notionis Dnmfnzis , d o n e c sa - t ia t e t conglent cogi'tcitionena cordis sui : y para que no se ignore el rni:,*erio iii el ticmpo de clue se ha - bla , afiade inmetlintarnente que estns cnsas las enten- der& la clantlicanle solamente e n e l clia novisinio : irz novissinzo die irzlelligetis e a .

Versiculo 5 : Fluminis iilzpttris Ia~t$i'cot civitatenz Dei : sanctijcavit tul'reriiaculimz suurta A l t i s s imrs .

Para entender hien csias palahras , que d prime- r a vista parece que no vienen al easo ~ yo n o liaiio oiro mejq'r intCrprete que Ia pnlifrasis calclea, la y l ln l asi entie 10s judios corn0 en t re 10s eristianos, se ha mirado sieniyre con extrdordirbario rcspeto. Esta p e s expiica as i este I ersiculo : Popdi tamqcmna JZun:inn, et rivi eoriim veniet , e t Iat[fic'ccrliuid tic-itntena Dei , e t orabrmt in donauiiz sanctuarii Domini in tnbernaculis Altis simi.

En ebta inteligencia concnerda este testo con in- nunieraLles oiros de que (.stan lieirus Ins escrituraq: en t re ellk~s con el tento (le I 4 a s : e fJ l r ien t ad e i im ( a 1 monte S i o n ) onmcs gentes . Cnn el de Miyuerrs: e t $rent ad c u m nmnrs pnyidi. Con Io que se l e d i c c a' Jerasalen en todo el capftiilo 60 de Isaias , desda el versiculo 4 : filii tui de longe venicizt , e t ?lie fuce de Lotere .curgent : tunc videbis , e t aflT2iLes , niirabitrw, e t dilntahirur cnr t i i i i ra . Concuerda en siuna con e l salmo 85 : onines g;n[ts pusc iLrnque f e c f r t i , venient cf adorabunt coram i e .&mine : e t g!OF"i$ClZ6UF!t nonicn I n r ~ n 7 . Si n o obstanle alquno prc tendc que el ~ j i t i ~ i i -

( I ) Jcrenz. c . 3 0 . v. 2 5 . '

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666 nis impetris c l e h significar agaas m?teria2es gropia- mente cliclias , n o nos qneremo.: oponer a‘ eqte sen- tido , pues no hay rn ello irnconpenlenfe a!gunn. Para Io qiial se puede considemr el capitulo 47 de Eeeqniel , e n donde se ba i l an agrias v i c a s e n ahun- dancia que dehen salir rn aque!ios t i e m p s subter li- merr dontus , p formar aynel deiicioso torrente po- hlaclo por una y otra parte c?e a’r?~o!c-s fruiales : e t super torrentena orieiur in ripis ejus ex utraque parte onine ligni~nz pontiferwnz : non dr3iceL fo l ium ex eo e t non deficiet fructus ejus : quia L q i i p r j u r de sanctrin- rin egredientnr , et erunt fructus ejiis iiz cibunt , e t f o l ia ejxs in nzedicirzanz. Estas inismas aguas sc h;ilian en el capitulo 6ltimo de Zacarias , versiculo 8 : et er-it in die i l la : exibirnt a q m V I V E de Jerusalenz : nirdiunt earunt a d mare orienlule e t nzediunz earuna a d mare novissiniuna : in ceslate , e t hierne erunt. Todo lo qual lo toma S. Juan , lo extiende , lo explica , lo acla- ra , y - 1 0 bace servir en el rapitulo Liltimo de su Apocalipsis

Versicnlo 6 : Deus in medio ejus nor1 conimovebi- tur , adjuvabit eatn Deus ntarte diluculo.

Dios no se mover& en adeiante , 6 no se aparte- r i de en medio de ell?. i D e qii ien? De S i o n , de la qual se apart6, 6 i qnien apar t6 de si clrspaes que ella reprob6 su. Xesias , y cerrb obstinadamente 10s ojos ti la gran i u 7 . y [ o s oidos 6 las voces de sns enpiados. A la igiesia presente en tirmpo de Cons- tanlino no pueden competir estas palalwas q u e s Dios no se hahia apartado ni rnovido de en medio de e l l a en 10s tres siglos anteriores , a u n en medio de s u s mayores persecuciones : antes estas hobian siclo co- mo un cultivo que la hicieron rlav Frutos excelentcs, y en una prodigiosa canticlad. Esta promesa del Se- ilor de no apartarse jatnas de Sion, (Iespues que la llame y recoja todas s i i s rpliquias in nzi~er.ationiCus ntagrJis, se halla repetitla de mil niarieras , p con su- ma claridad en otros mnchas lugares de la escritu- m saota, yke tantas veces hernos observacio. E n So- fonias , por exernplo, hahlando con la clandicante rnisriia, y llatn8ndola con este nornbre , st. le dicen es-

como ohservarernos d su tieinpo.

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667 tas palahras ( r ) : &nuda j%u Si'on: jtubila Israel, h- iare e! exillla in omni corde j 2 i a Jrrusalenr. Absf~l i t Dominus jisdiciunz tuum , averlit irairnicos tnos : rex Israel Dominus in niedio t u i , non tintebis nialrint ul:ra. In die illa dicetur Jerusalem : noli t h e r e : Sion non dissotvantur manus tucc : Dominus Deus tuus in nzedio tui j o r t i s , ipse salvabii.

Lo mismo en substancia se annncia en Ewqniel (9.), despnes que revivan 10s huesos a'rido.; p secos, y se les introdozca el eepiritu cle vida : Et hahitukunf super terrana , ,quam dedi servo nteo Jacob, in qua hnhifawe- runt patres vestri .... e t David servus naeus princeps eo- run? in perpetuunz .... Et ero eis Deus , et ips; erunt niihi popukus : e t scient gentes quia ego Doniinus, sanct@ca- for dwae l , cum filerit sanctgcudo mea in ntecZio eo- sum -in perpetuum.

Compirense ahora estas dos profecias (como s i fae- sen i'nnicas, y no hnbicse otras muy semejnntes) con las palabras del sa!mo que actualrnente ohservamos: Deus in nzedio +is non conznaovebitur ) y me parece qne se haliar& el mismo misierio y en el rnismo tieinpo sin poder dudarlo.

A mas de la promesa que hace a c p i el Sriior de no apartarse mas de S ion , despucs yne la recoja y la cule de todas pas llagas , srliala inmediafanren'e el tiernpo en que estas cosas se empezarin Q verifi- c a r , diciendr, que esto sucederd a1 aniafiecer 6 a1 venir el dia: Adjzrvabit eanz Deus maae dibcuko.

iQuP quiere clecir e s t o ? iQu6 dia es este cle ca- po principio se habla a q u i ? iEs acaso algun dia na- t u r a l de diez 6 doce lioras ? 2 80 salta luego 6 10s ojos, v sc presenta de siiyo ague[ mismo din de que tan- ro haljian 10s profetas de Dios , 10s Apilstoles , 7 aun 10s evangelios ? El clia , digo, del Sefior , a' distils- cion del dia de 10s hombre^. El decir ayud6 Dios B su iglesia mane diluculo ~ id e s t : oportune , celeriter, son parabras q u e en realitlad nada rnpl ican; pues a' SIT islesia siempre y A todas Itoras la ha ayudado el Scitor , 7 no dexai i de ayudada usque ad conmnma- tioneni seculi.

( I ) C. 3. v. 14. ( 2 ) C. 57. v . 25.

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66s 1I;~hlando pries del dia del Seiior dice David, que

mvy n l a l b a de este t i i n , 6 al a c . a h \ e ei d i n anle- cetlente, cytu F S , ei Iiodie $e qlre h 9 b l n S. Pablo ci- ta;:tlo e l salmo 05. ncihor tamiizi ,cos riwtip7os , per sir+ gulcs dies, doizzc lzodie cog~iomii;zci~iir ( I ) , e::tonces nput lar i Dios d esta miserahie enicrmn, ddndole la. maiio para yrre ~e lerante : ocl j i l : ' r ,~~c.bi~ earn Deuy nzalze diluculo. Con esta inteligeiicia poclemos dccir sit1 exj- geracion concordurzt vcrbr; propheturunr , y concuerdan tai i to qua de ah i hail concloidri 10s doctoreq comn u n a vertlatl infiegahie, que los judios se ban de con- vertir a i fin del muitdo, y en visFe:as de acaharsc todo , co rm si fuese lo i-nisr~o fin del mu_ndo que fin del s i g h ; y como si el d i a del Sefior yi:c &be amn- necer e n si t i en ida , no se ptadirse separar de l fin (!el tnrtndo, 6 n o se dehiese sepamr . Dixa el fin del mni1cllo, et1 Io q u a l so lo entiendo el fin de 10s via- dores 6 d e la generacian y corrnpcion; p o q u e yo no soy de parecer que el niundo , esto es , Ins craer- pas niateriales, 6 glohos celestes q u e D i o s ha cria- do (entie 10s quales u n o es el nuestro en q u e h a h i - t n m o s ) hags de t ener f i n , 6 v o l j e r a1 caos 6 nada de dot& salic;. A su tiempo espero hablar sobre estn de prop6sito.

Dehernos ahora cleferiernos nn moiiirnto inas e n la considet,acion de tn palabra mane. Esta palabra SE halla n o pocas 17efe~ c11 10s profelas y saimos: y es facil rcparar qrie sc usa cle elia q a a n d o se hobla d e la vncaeion futura de Israel Poi exernplo : e l cq- pitulo 26 de Isaias es ti11 c j n t i c o admirable, muy se- mejante e n lo sribslancial a l salnio 4 5 , el qual c i n - tico diae e4 rnismo Iqaias que se cantar t i en aynel dia e n la tierra de JuclB : in d i e iEla caiztabitzir canti- cum istad in teri'a Jutin. Ent re 1as cosas yrie dice pro- f6ticarnentc la persona qcie lo bn de cantar , esto es, Sion, una de ellas e s estn (v , 9.) : alzinza n z ~ a deside- ravit le in rzocte , sed spirifie nteo in precorclis n ~ i s de m a m 2)igilnbo ad t r . Mi al l i in , I C dice ti su RIesi:ts, t e Iin desendo siempre e n In noche. iEn yne' noclie.' Sin duda en la noche presente, pues respecto de ella

,(I) Ad Heh. c. 3. v. 15.

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669 en este asunto i ~ i l o c s nnclie. No obstante en me- dio de c ~ t a noclme , ciesea y suspira incesantemen- t e p o r 61; inas qiiando estn noche est@ park acnbar- sc , entonces (drce en rspiritu) que no se dormiid, sino qrie se alzar& protita y iervorosamente, y esta- I.& despierta a1 arnnnecer : srd c t spiritih iizeo in pre- corcliis ineis de mnlu vigflubo ud l e . Lo niismo y con cii-cunstancias mas particalares (lice gor Micjteeas ( I ) ,

10 qlle es bien dlaiio de nna p r o h o c h consitierarion. Por Oseas cayitirio 6 dice e l S c t ~ o r , habianclo de

la conversion f u t r i i n tie I s rae l , coni0 p i e c e claro por todo el contezto: in iribulaticne sua nzane con- srrrgent nd m e : v e d e , e t revertanzur ad Domiiium, quia ipse c e l d , e t snnabit R O S .

E n el salmo 5 h e dice : mane exnridies vocem nienni, ntane a c l ~ ~ a b o titi, et videbo. En el salmo 56: ex:iZ. tnbo nznize mi.pel-icordiant tiianz. En el salmo 89 : re- pleti suii ius n i n , ~ rnisericorcliu ha. .'. 2etr;ti sunzits pro diebur quibus nos himilinsti , aimis quibiis vidimus m a Za.

s : iiznize ornrio mea preveiaiet te= i n m e nzisericordianz tuum. 'I'odo lo

q u a l eoncuerda ~ 0 1 3 el salina 45 tpe actualrnente ob- s e n a i m s : acjjLivniiii cain Deiis mcIne riiluculo.

Qersieuilo 7 : Coiiliu*ha[c szint genles , e t inclinnta siint regnu , dedit worc i ia suai i i , niola est terra.

E n el vcrsiculo 4 Irabia diclro Sion esto mifirno con la 1netdfor.a de la a,itacion y sonido de las aguas del m a r , y de la inorion y c o n i u r l ~ c i o n cle Ius man- ~ e i , aqni lo dice y-a claramente sin meldfora alguna. L a s genies bodas :e linn eonturbado, 6 inclinndo Ios reynos , sin duda con et gokpe de la piedra. Tcdo !o qual acaha de sucedcr en ei tiempo de ( { L I ~ se Iiabla, y lo ha visto Sion aunque de lejos, y lo ha sabido y sent ido derde el retino de su soled<id. El Sefmr, proqigtie clicienclo , ha I-iecho sent i r su Y O Z , y In tiens,t doda SF ha lnovido: dedit voceni szian:: , mora e s t terra. Este nzota est terra se baila eon mas fuerza y vivwa en las otras Tereiouea. Pagnini Ice : L)r$iuI lerra. Va- t.liblo: e,xtreine,frirta e ~ t t e r m . La pnr i ih s i s cnldea: disso- lriti s r i i ~ t lmbi(ofoi.es i e r m . Esta V G I del S e f ~ o r tan p a n -

( I ) c. 7 . 'u. :.

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670 de y tan operativa, no es otra cosa que aquella vara de su hoca de que hahla Isaias ( I ) : et percuiiet ter- ram virga oris sui, e t spiritu labiorimt suoruin inter$- ciet inzpiunz ; 6 lo que es lo mismo , ayuella espada de dos filos q u e ha de t raer en su boca el Rey de 10s reyes : ut in ipso percictiat gentes ( 2 ) .

A este prop6sito se puede l f e r todo el capitulo 24 de Isaias, en que se lrabla por confesion de todos de la venida del Seiior que esperarnos: y entre otras cosas se debe reparar aquella viva y elegante descrip- cion que liace el profeta, del espanto , .conmocion y conturbacion de toda la saperficie de la t ierra por esias paiabras (v. 19.) : confrrtctione confringetur terra, cpnrritione conteretur terra.. .. agilatione agitabitur terra sicrtl ebrius ... . e t grababit earn iniquitas sun et corruet, et non adjiciet ut resurgnl, Mingnno que lea esle ca- pitri!o puede ignorar que aqui no se habla de lo ma- terial cle nuestro glob0 en que habitarnos, sino de sus hahitsdores , que lran corrompido su superficie con SII iniquidad, y la corromperin todavia mucho mas. De esta superficie de la t ierra empieza haldando clesde las primeras palabras : Ecce Dominus dissipabit terram , et nudabit eanz, et asiget faciem ejus , et dis- perget habitatores ejzis: y aqiii rnismo dice , que des- pues de esta afliccion, agitacion y coninocion de la su- perficie de la t i e r r a , qnedarhn en ella algunas reliquias del linage hurnano : e t relinqitentnr hoininer panci.. .. quoinodo si pa i~ce olive que renznrcseruizt excutiantur ex olea , et rucerni cum fuerit $%ita vindemia: hi l e - ziabirnt wocem suanz atque lazrdabimt: cum glorficatus

Hahienclo p e s sucedido est:: movirniento , agita- cion y contnrbacion de la superbicie de la t ierra , pro- sigtie Sion con todds sus preciosas reliyuias, dicien- do llcna de un sagrado jdbilo y penetrada del mas vivo re c o 11 o c; mi en t 0:

Versicuio S : Donainus virtutunz rzobiseunz , suscep- tor nosfer Deus Jacob.

EL Seiaor de las virtudm (estc nomhre se ie da al Mesins en varias partes de l a rscriiura , por exrm-

fuerit Dominus, hinnzienl de mari. (v. 6 y 13.)

( I ) C . 1 1 . W. 4. ( 2 ) A p o c . e'. '9. 'u. 15.

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67 I pIo en el salmo 2 0 ) el Sefior de las vistadcs estd ya con :iowtros, y nos ha llnmacld, iluminado , perdo- Dado y recibido en t re sus brazos el Dios de Jacob.

Luego mirando e l estado actual de la t i e r r a , y compar;indolo con todos 10s tiempos ya pasados, con- viela a1 iesicluo de Ins gentes , a' ver , admiral. y ii a laha r a1 Seiior, poi. tantos prodigios nnevos e' inau- ditos q u e ha ohrado e n nuestra tierra con su pre- sencia: uno de 10s ynales, y el mas admirable entre todos , e s la paz ac i le rsa l , la q u a l se anuncia y describe por estas breves y expresicas palabras.

Versiculos 9 y I O : Y e n & e t videie opera Bonzini qnce posuit prodigia super terram , ailferens bella usqrie ad $nem terra: : arcunt conteret , et conzringet arma, et scuta conzburet igni.

El conlironto de este tevto con el cle Isaias y Mi- p e a s , forma segun parece su propia y legitima ex- piicacion, 6 la q ~ t a l nada teneinos que a n a d i r , per- suacliclos que no puede atlmitir otra secundum scrip- turns; si con esta idea clara p sencilla se leen 10s salmos siguientes , podra'n s e r i i r de mayor confirma- c i o n , y faciiitar la irrteiigencia dc otros muchos sal-. rnos , y tie o t ras inuehisimas profecias. Especialmen- te se entender6 a1 punto todo el salmo 75, muy se- mejante a l 45, aunqite con nuticias todavia mas p a r - ticulai es : Noiris in Judea Ileus : in Israel niagnrr~n no- men ejus : e t ,factus est iiz p a c e locus ejus : e t habitu- t io e j u s in Sion : ibi conJCregit potentias arcuuna , scu- tum , glcidirinz e t bellnm.

No hay dnda que estas C O W S p otras iiiuclias de l toclo sernejarrtcs, sc procuran accmoclar del modo posible a' afgunns sucesos a n . t i q r i i s i m o s que sc l een en la historia sagratfa. 141~s conlo esta aeomodacion, aunqne intcntada con ernpeiio y empezada tal yez con felicidad, no es facil ni pc,sible ilevarla adelan- te , por 10s graves y continuos embarazos q u e A cada pasa se precentan, se ven a i fin p r ~ c i s ~ c l o s 10s in- t C rp ret e s ma s 1 it c ra 1 e s d recu rri r frcqGie n t is i ma me n t e- ,i seirtidos figurados y pnramente aconioclaticios , y parar en ellos. Nin5qna newsiclad tenclrian de este dPl ) i l recnrsu , si q n i h i e r d o athriitir de t u e m f6 uues- tro sisteina, en el q u a l todo io hallarian facil y Ilano.

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67 3 ce A la historia no hace A nuestro prop6sito., ni h a inenester o b ~ e r v a c i o n particular. Todos 10s cristianos creelnos f i e h e n t e tcdos ayuellss sucesos conforine 10s liallamos escritos : 10s entendemos d la letra sin g ian dificultad: y d ningiino le ha pasado por e l pensa- iniento clarles o t ro sentido di? erso del que skienan obvia y literalmende las palabras. N o sucede a s i con Jernsa!en en profecia ; poryue 10s clgctoi es apeian ti varios sen t idos , srgnn son l a s cosas que de eila se anuncian. Po ryue tinas son mnnifiestamente contrarias d Jerusalen , otras rnaniiiestarneote favorables. Unas l e anuncian tan tos castigos , y tan liorrihles , cpan- tos y quales ha visto y ve todo el rnunclo plena y- perfectainente verificad1,s ; otras le anuncian tantos favores y Beneficios tan eutraordinarios, que h a n p a - recido y parecen totlavia del todo increibles. Unas le anuncian ira y vcnganza, no solannente para 10s tieiiipos anteriores sino iiiucho mas para los tiern- pos postsritrres a1 M e s i a s ; otras le annncian amor. cornpasion y misericoidia. Unas le anuncian terror, r ~ i i n a y desolncion; otras hondad y paz , reedifica- cion y G I eacion ; n n a s niiiertes e' ignoniinia , otras resrirreccion y gloria.

Las primeias se entie?tlen sin dificu!tad en su sen- tido propio , ohvio y ii terai : tanto rpe coiiio c l i r ~ o 10s docfores, este es s n 6nico sentido, pues que e n 61 se verilicaron plenisimamente. Dios lo clixo por sus pro!'etas, y todo se ha cumpiicio coin0 lo cliso. La ilitiina profeecia contra esta in i cpa e' ingrata ciu- dad , i'ne In del a les ias mismo quando vidit c i v j f u - tenz Jlevit szrper illam ( I ) ; y esta profecia (registi,;,da ya. ,en el capitalo 9 , versiculo 26 de Daiiiel) se cum- pho perfectainente ynarentn alios despues de la inner- te del Seiior , coin0 e s notorio d todo el muedo. Es pues constante que todas quantas profecias 6dy en ias escrituras contrnrias a' Jerusnlen , se tlehen toniar d la letra , y entender en este sen t ido , pnes asi I P S vemos ya todas plenamenire verificadas. M a s las €a- vorahles no. $'or qu6 won? Porqiie estas no S P liam verificado hasta ahora , n i se han p<.dido vpi-ificar,

,

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674 ni hay tiempo para qne se verifiquen a' la letra, en especial aquellas grandes y inagn,ficas, c u p grnn- deaa misma mrirstrn hien que ocirltan dentro de su cortera g i - a d e s trsoios. ' Veis a q n i rednciilo d pocas palabras e l modo pi~tc- t ic0 de cliscnrrir de 103, cfoctores e n el asunto de Je- r u s a l e n , as i coino en tantoa otrns de que ya he- Inns bahlado. Y veis a p i , vuelvo ;i repet i r , a p e 1 gran snpnesto que ha lieckio ininteiigible nnn Bran parte de las profecias; pnes en tlicho sripuesto n o hay otra cosa en e l misler;o grande de Uios , que la iglesia presente , y e l cielo ; c s clecir, la vocacion de Ias gentes en l n g a r dc I s r ae l , propter incredulita- tena eorunz, y el f i t 7 Jel munch. Por una buena con- seqaencia parece iinposiible In verification propin y literal c!e acpeilas mngnificns profeecias que auuncian a' Jercsalen tanta gmn(leza, inagcstad y gloria , y a l rnismo tiempo t a n t a justicia y sant i t iad , qual nunca se ha visto , ni se lia poelich ~ e r en 10s siglos an- teriores. As i 10s que h a n niiradn ayuel sapuesto co- M O u n a x e r d d d , n o solamente h a r i cbsechaclo el s e n - tido p,-opio y l i teral e n la efpiicncion de torlas es- tas profecins favorables s ino que con grande y ar- dentisirno celo reprelirnclcn durisiiiiamei:te 6 10s jn- d i n s , J' t ra tan de judaimntes , de grnseros, d e im- hdciics, p t a l w z dr hereges , ri lo.; que en ~ 5 t e y ot rns puntos seinejantes h a n crriel.) ;i la ofnrma- cion de Dios

El gran a r ~ i r m e n t o , y el L!?ico yve opooen con- tra todns las profeci2s favoralsles A J e r o s a i r n , es n n a profecia de Daniel ( I ) , e n yue ltabiatldo d~ la rnuer 'e del Mccias (sfgun la v n l g a f a ) y tie / a s renilins terri- 1 1 1 ~ s para Jerusalrn , p para ~oclo el priebio dr Is- r a e l , (lice a s i : et civi/afrrn , ef F bit pyrrlris cum d u c e venttwo , r t I; p o s ~ ,firzcnz bel l i sia~ufu d~rn to t io . . .. et u q w c ad crn- s r i r ~ i ~ ~ ~ a / i o n e n ~ , el f inem yrrsrverobii d r so la t 0. Sii j tuesta la verdatl de rsta profecia que nq se di prira, argn- m e n t a n asi. L a rriiaia p d(Dsolacicjn Lie Jrrnsalrn de yiir Fiyui 3r Iia1i17 es et i r ~ ~ n ' e r i ~ r n ' ~ Ici ytre S I J C P ~ ~ ~ )

que ;i ] a s s n p o s ; ~ i o n r s b r~ inanas .

( I ) c. 9. v . 76.

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676 nwro basta p o r si solo, no po r eso tenemos por intiti1 el segnndn; antes podri ayutlarnos IIQ poco para la m e j o r y mas fitcil inieli’gencia asi de e4te coni0 cle Q ~ I > O ~ puntos mrip semejantes. Este segnndo modo pues se reduce pi-oponer una dnda , q i l e b i ]lien ea apiica- hie A varios otrns casos, lo es con esp~eial idacl ri esie.

c i e n profceias quaticlo menos ine hahlan exprcsa y nnminaclnmente de Jerusa leo , no en qualquier es - tad0 indeterminado ; sino de Jerrrsalen destruida po r stis pecados , desolada , couc~ilcadn y sepnltada eri el olvido: de esta pues me d i e m con tor12 claridarl que algun dia se levaritard del polvo de la t ierra, que re- sucitars, yne se ecliiicara de n u e \ f o , e t videhitur in gloria sua (salmo 1 0 1 . ) . Y para ci1ue no eqwivoque esta Jerusalen d e que hahian con aquelia o t ra yne se e&- fic6 in angustia tenzporunz, por 10s que volvicron de Ba- hi lonia , ilie dan unas seiiales tan clams y tan indi- yidnales, yne es iniposihle el confundir la n n a con la otra. Por exrmplo: una profecia me d i c e , que en aquel tiernpo de que hahla , Jerusalen serti llamarla el soli0 del Sefior: In tempore ill0 vocabunt Jerusa- lem soliiinz Domini , e t congregnbiintur ad eani onznes gentes in nomine Domini in Jeruscrkein , e t non ainbu- laCrcnt post prnvitatenz cordis sisi pessinii ( I ) . Otra me dice que sti nombre d e d e aquel dia e n que se edifi- qr.e de nuevo sera este : el Seiior est:; a q u i ; e t nonzc12 cititatis ex illa d i e , Don&zris ibidem ( 2 ) . Qtra le dice 6 la misnia Jernsalen, clue clespues de las grand-s tri- balaciones que se le anuncian po r sus iniqnidacles se llamarli ciuclacl del justo : ciuclad fie1 : P o s ~ lmc voca- beris civitas jccsti, urbs f idelis (9). ‘IT en ot1.a parte: wocabilur tibi nomen novunz qziod os Donzini nnnzina- Lit. E L pris corona glarice ita ~ J L ~ E U Domini , e t dia- denta regni in man= Dei -tui. Non vocaheris ultra de- relicfa : e t terra tiLa non wocr;bitiw ni?iplhrs rlesrlatu= et vocahrmt eos , populics sanctirs , redempti d Dontino: tu autenz vocaberis : quesita civitas e t non derelxto (4).

Ei mismo le dice en o h par te ( 5 ) : pro eo p o d

~ ( I ) Jerem. c. 3. v. 17. (2) Ezeq. c. ult. v. ult. (5) Isai. c . I. v. 36. (4) dsai. 6. 62. v. 3. ( 5 ) c. Go. 0. 1 5 8

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677 fitisti derelicta, e t odio laubitu, e t non erdt qui per te traiasiret , ponanz te in superbium s~eculorunz. .. . non au- dietur ulfra iiiiquitas in terra tua : vaslitas , e t con- tr i l io in terntinis ti&-. QqxiZiLs t i i i i ~ onanes jusli-dec li- nabo super eain quasi JkLwirLna pacis ( I ) . Y por ab le- viar (pues son cosas que se lesn fr.ec[uttnfisimamente en 104 profrtas de Dins) oira profecia d i ce , hablbn- do cle Jerusalen , y dP 10s judios : e t lLiLbi/nhccnt ia ea , e t anatl~enm non erit ainplirrs , sed serlebit JL’I’IL- salena secura (2) .

Estas y otras profecias -qtw pasan de cien me ha- cen espemar oti-a JtJrusdlen todavia futura ; mas 43%- niel en el capituio g me yuiia todd esperanza, pues que acegura que la desolacion de Jerusalen , que delx cornenzar despues de la mrierte del Mesias, per,e- verarri irrevocsbier~iente hasta la consnmncion y fin: et cirque a d consrLnt?nationenz et $nem persevei*ab;t dc- solutio. Baxo esle srrpoesto , que es indudable ,, pre- gunto: i nos deberemos aiensr r i Ins cien profrcins primeras, qne proiiwten la Jerusalen fu tn ra , 6 h esta iiltima de Daniel que nos la niega?

La resoiucion de esta cluda no es una misma en dos diversos tribnnaies. El nno decide prricticaineilte que debemos estar por la ilitinia prorecia , auncpe sea iina soia ; y todas las otras , aunque Sean ciento 6 mil , se dehen explicar en otros senticios. Si al- gnno claimre pidiencio l a razon de tiria sentencia t a n dura, en vano la espernri , porque no la hay. El otro tribunal dec ide , que debeinos estar por las cien profecias, y expiicar una poi- ciento , no ciento pur una. Para lo qual produce tres brevisirnas razones. Primera : porque aquellas son mnchas , y esta una sola. Segunda : poryue aquellas son claras , y est& no tanto. Tercera : porque aquellas son ciertamerite favorabBes i Jernsalen , y esta contraria , y en cdso de h d a Jfavorabilia srcnt arnplianclc[. Sin mcAteruiir .go li resolver q u a l de estas dos sentencia., e s Pa nias justa , pnes esto toca S jweces irnparciales, solo me tomo la libertntl cle coucluir , y ’ e nsi coiylo Ics doc- tores interpretan las cien pt.nfeciLis en el cent Pdo y e

( I ) C. 66. v. 12. ( 2 ) Zac. c . tilt.

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678 les acomoda , para que no clestrrayan su sistema, violenidndoias Ins mas veces ; asi tambicn podia ha- cer yo oiro tanto con la de Daniel., y con mas fun - darn e 11 to.

No por esto se pieiise que yo prelendo dar ri la profecia de Dan;el O ~ F O sentido diverso del obvio y literal. Esto seria no estar de acuerJo co~lmigo mismo. El mismo sentitlo en qne entiendo las cier, qrofvcias , en este mianio sin clifeerencia i l l p n a en- tirndo :a liltinha , y ror ella t engo yor cicsto d in- f'aiibie qtir la desoiacr,lii pi esente de Jerirsalrn per- se1erar:i hast3 in ccnsuinacion y fin. ;Mas de aciui que' he s igne? iLa~rg,o no tpnemos que esperar otra riueia Jerrisnien ? Esta comeq&encia que sacan 10s int6:prrtes ell su sisferna , es pnntualrriente la que se 8 i i c . p ~ 0 1 1 1 0 ilieuitinaa y falsa ; parece que d ~ b i a sacarse eata otra lrrstisima por todos sus aspectas: luego la Jeriisalen f~ziitora que tantas veces anluiician 10s profetas de Dios, no podr6 eclificarse antes, sino despues de la consnmacion y fin. Antes no , porqne e n este caso se faisificaria la prufecia de D,ir?iei ; des- pries si , porque sit) e s t 0 se faisificclr~ln cien pro- fecias. E,ta consryvencia qrie yc~ admf fo y absaeo coiiio vcrdaclera , y coiiio t a n conferme d l a s escri- ~ U J - ~ S , es tarnbien r u i segtmda respuesta por linea recia.

La consumacion y f in de cpe hehla Da-icl , no pnrde ser otra , s i n n a q u e i l a in is in^ de qiic hablan o 1'0s miichtss profetas , esg)eciaimrsite Isr las , acre- rnias , N a h u m , Sof0nia.i y Zdcarias , , .y clr que se hahla e n varias paries do los evdngriios. POI- con- siguien!e n o purde ser la ~ o n s ~ i m a c i o n y Tan del mnn- d o , coino se piensa en el sistema orcAar io , sin0 la consnmacit~n y fin d e l siglo.

Estas (10s palabias : m r ~ n d o y siglo , annq i i e mu- &as vcces se toman en un inismo sen t ido , y sig- nifican u n a misrna C Q W ; mas reaimente hay entre etias una grandc y notable difcrencia : g en e! asunto que actnalniente trntamos , de gran importancia. R h n - do se l l a m a propiamente toda la inmensa mdcpina de1 universo , y tnmhien ma3 inmrdiatamente este globo terrdqiieo en cuya supegfieie habitamos. Siglo

?

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679 Re llama no solnmcnte In re.colncion de cien aiio*, s i tarnbien , 9 c 8 n mas prcpicdad todo el aparato extern0 tic niiestro iiiiii:d3 , ti de niiestro sloho, su fatisto , s u l n ~ o , :;it e n p i l o , su ven idnd , su m e n - t i ra , s i i pernc!o. En SUWIR , se ilnma sigio el dia

at de 10.; 1 ~ o i i ~ h i - c ~ , d e s a pofcstad, de SEI clo- in i i sac inn dc st1 virt::d , d e 311 ioicio , de su g+ bierno iyrc. ,i distineion dcl dia ctel Sericr. Yo liallo mnchns w c e s en Izs r:critilras , principnlmcnte c n 10s evnng.!ios , estns palahs-as : consnmncion de l si- g h . j amas haiio estas : consuniacion del naunclo.

En e,te sent ido pves en que hablan Q ~ I ~ S cscri- turas , dice D a n i r l , qne la desoiacioa actrial de Je- rusaten , que enapeiij t e spues de la iirurnie del Me- sins , deherd per ipanecsr basta la consurnacioti J; fin de! sE;lo; es cleeir , l insta que se concliiga y Ilrgue d su fin el clia preseote, y empiecc d nrnanecer e l dia dcl Sen i~ i - , hasta q l i e Fetaga el Mesiss en gloria y magcqtad : y con SEI segoaita vrriida tenga pnnc i - p io el din de su viaiud en 10s espienclores de 10s sand06 (snlino 109) : 113sta que se execute e n la lies- t i a aynella jos t ic in ternihk, de que se habla en el niisino Danie l , y en e ! Apocalipsia : has t a qtle ia gran ebtatiin caign en tic-rra al solpe d e In piedla, y dcsnparrzea como U E I ~ levci ceniza en rnedio de tin gran viento : hasta r p c snceda acpella evacuacion de todo principado , pote5tad y virtucl de que babla §an Pnl)lo : J ias ta que e n fin se Ilcncn 10s tiempos d e l a s nnciones. Coinparad de ~ I S Q r s t a s dlt imas palabras del Srinor con las de Daniel , y i i i ~ pirece que ha- Ilareis el mismo miiterio sin difrrcncia alg:una : Je- ruTakrn c o l ~ d i t u r h gziz'ibrtT dnnzc impleanfur fenz- pora nnfionuni = usqiie ad consummationem e t Jinena persrvwahit desolalio.

Estn e s c~iidt~mternente I n consumacion y f i n de q l i e hAb.hla Daniel ~ la q u a l debt%rA suceder con la ve- nida rnisiria d e l Spaor ; qne por rsto el mismo Se- Tior compara su xenida con el dia tie No6 : qcarzdo venit dilirvium e t tuli t onzizes (I). Esta consuniacion y fin snuncian tnmbicn otros profetas con exprrs ior~es

( I ) &rut. C. 24. ,

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680 vivisimas , y con eircunstancias bien particnlares, como tantas veces henios observado; y no obstante estos misrnos profetas nos aseguran esprcsarnente ) q u e Jerusa len ilestrnida y concaleada de las gen tes , vol- vrrii edificarse de nnevo, con tanta grandeza , con tanto espienclor , con tanta jnsticia , y con ta l r s y taies circnnsiancias , que no, hal~ie'ndose verifieacio liasta el Cia de hoy , n i pndientdo verificarse antes de la consuinacion y f i n , 6 antes que sc liencn 10s tic,mpos de l a s naeioi,es , debereinos esperar que todo se kerifique despues (!e la consumacion y fin d c l si- glo , ut prophetiz tui Jideles inveniantur.

D i p m o s ahora rpatro p a l a h a s sobre el texto de Jeremias que sirve de confirinxion a1 argi:mento: #EC dicit Donainrrs e.xercituiina : ric coizferana populrrm istirnt ) e t civiiaterta iTtnnr , sicut conlerilur v a s $ g i ~ l i , yuod nwz porest ultra instcirirari. Eslas palabras ( ciicen algunos simaiendo ti S. Ger6nimo , aurayae o(1 os son de contrario parecer ) n o pueden entenderse propia y rigorosamente cle aynella pr'imera Jerosnlen que destruperon 10s Caldeos, pries esta se volvi6 6 e&- f icar pocos aiios despueh; inas se entienden con tcda propieclad de la Jerusalen cpe destruyeron 10s Rn- imno$ despues de ia muei ie de Cristo, la q u a l hasta hoy- dia perscvera clrstrnida y desolada , J debe per- severar en esta forma hasta el fin dcl mnndo. Las palabras J e S. Ger6nimo son estns : Perytcue hoc noit de Gnbilnnica , sed de Roniaita dicilur ccpriw'ifde. Post Bahiloiiios qaippe , et icrGc inytmrttla , et p-pulus re- d ~ ( Lus in Jird~ana , e t ahundunlice p r i s h E restitutus esf. Post cnpfivitaienz auirriz , qu(c SU?J Vespnsiano , e t Tipi'lo , e t poslen accidit snb Adriano u y e ad ccnmnt- nanti nena w c i r l i r i r rn~ Jcrusalern pernuinsurn: sun:.

Esto liltimo i qiiidn puede negax-Io ? Qualqniera que lea el versicuio dtiino del capitulo g de Daniel, de- br.1-6 confesar conio una verilad indi\pntahle, que us- qrie ad con~ccinrnnt~onern sn:i*uli ruine Jerusalem perman- s : i m sirnl. Mas lo pi imero, esto e s , que Scremias hab la no de la Jernsalen destrniila por 10s Bahilo- B i o s , s ino de la que destruyeron 10s Romanos 600 arios despues , ~ c 6 1 n o pndrrl admi t i r se , si ?e iee se- guidamente el texto del prol'eta? Et erunl (prosipe

a.

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68 L h e g o w’rsicalo 13.) et erunt doronr~s J~rrisctlent , e t do- n2us regum Jridcc sicrrt locus thophet imnaunch : omney donaus in qrsarunt dontaiibus sucri$catrerunt onmi niili- ti@ cmdi e t dibnverrcnt libaniinn diis alienis. E*ta cola contraseiia , aiinyne no hithierd otra , pareee irias clue suficicnte para conocer a1 punja 10s tiernpos cle qlie

se l i a b l a p la Jerusalen contrda yuien se Labla. Q u ~ ~ I - d o 10s Rornanos sub Pespasiaizo e t Tito, destrnyeron a‘ Serusalen, ide~struyeron tamhien jiinfo con eiia las cacas y palacios de 10s repec: de J u t l i ? i Q L ~ r e j es de Jcrcld habia en este ticmpo? Destrnyeron asirnismo todas eqiaellas casas donde se cfrecian sac1 iiicios ;i 10s idolos ? QuC idolos hallaron Ics R ~ i n a n ‘R e o Je- rusakn , sino lo< clue elles Ilevarcn y cciocaron en e l l a clespiies cle destruida? Mas si ponemos ios oins en ayueila priixera Jerusaleo, que viviendo Jerc.niins dcs!ruyernn 10s Babiloiiios , hallaxnos cams y pala- cios de 10s reyes de Jud:i, y bailamos idolc,s ;i mi- llares en los ferraclns y en lo mas alto de casi t r c l a s las c a ~ s de la ioiqun Jerusalen. Luego es claro por esta sola contraserin que Jeremias habia de la prime- r a Jeriisalen destruida por 10s Bahilonios, no de la que destrnyeron 10s Rornanos. Si esto es asi se po- drli replicar : i cbmo entendercnios con propiedad aqiielia similitnd de que USB el profcta : con~ernna ci- vitatent isinnz sicut conteritur vas Jiguli quod non potest ultra inrtaurari?

La iu~eligoncia de esta semehnza nos la ofrwen otros docfores, que se apartan del sentir de S. Ge- r6nirno: Exponi debet, dice uno de e l los , de instau- ratione , qua. propia porenlia ,fiat : nant post expletos 70 annos instarirata e s t lnguncula judaica , e t sub $- nein .sacculi sursus insinurccbitur , sed potentia di.rvinc, cui facile est quod honzinibus impossibile vidctur. Y para que veais que aqnesias palabras de Jeremias DO pneden adinitir un sentido tan ahsoluto como que- r e i s , leed !as del capitulo 31 del inismo a [ versi- ciilo 38 , donde dice: ecce dies seniunt , dicit Donti- nus e t edificabitur civitas Dontino ... . non evellemr , e t non destruefur zikira in pcrpetunt. Y en Zaearias capi- tulo tiltirno se Ieen estas otras: et hahitaabrmt in ea, e t anathema non erit antplius : sed sedebit Jerrisalem

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683 inteligible 6 ininteligible. Si la i d e a de l reyno de Gristo aqui en la tierra , y de otra Jernsaien todavia futura , es , cnmo qtiieren , u n a idea f aha y erro- n e a ; In yrofecin de '8' bias es cier'ramente la c m a mas obscura , In m a ? dificiI , y la in&> ininteLigib'1e de quantas paetlcn imagindrse. AI cont ia r io : si aque- Ila idea es verdadcra y jiasta, corno tan coril'rtriirc ri Ias escrituras ; la prolecia se entiende a1 printo todn. e n t e r a , s in mas t iabajo que Iceria. Con yne el en- teiiderIa 6 n o en tenJer la , cpnsis te coiamen'e en atkc mitir 6 no a d m i t i r aqueiia idra. LQS intr'rpi-eies yrr- t enden , q ~ i e no hay necesidacl d e t a l idea para en - t ende r la psofecia. Pos t an fo han hecho 10s mayores eifucrzos para expiiearla. Si lo l i an conaegnido 6 no , lo Qodi~,i facilrneiiie j r i zgar qna lyu ie ra que Ira clicha esp l ieae ion , y la colahonle &clnnen!e cc 1 1 la profecia.

Dieen e n general , y esto de tin modo ciiiinirvo s i n prucha aiguna : que to& e-fa profecia , ewcep- tuando sns qaiatro prirncras lirieas , no pnede a d m i - tir ett'o skt~tido yiic el aIeg6rico mezetado c n el a n a o ~ & c o :,a ; plies ToE:'as como profeta hizo lo mis- rim (diccn ) qtie hacen otros prol'etas , esto es , mi- i a r a1 rnisnio t iempo l a igiesia militante y In triun- fante , y hahlar de amhas haxo el nombre p fg i i ra d r Jerrasa1e.n. En este supnesto, la ewplicacion ne- ceaita de €res sentidos, y ann estos no aicanzan para todo. El primer sentida es el ! i t r i d ; inas esle solo sirve para las gnafrn prinieras livens. i P o r qud? Por- rgne scn contrarias s Jerusalcn. E n eiias se anuncin SLI castigo, su r n i n a , SZI exterminio; todo lo qual se verific6 plenarnente pocos afios clespues. El segnotlo sentido es el alegnrieo, que dehe Incgo eo t ra r e n l u g a r del literal. iPer yu8 tan pres to? Poryne pasadas estas qiiatro l ineds contrarias a' Jerusa len , se empieza lue- go A hahiar cn SZI favor, p se dicen de e i la , 6 se le proaneten tantas p tales cosas , q;le ni se han leri- f icado, ni es posible clue se verlfiqrlen jninas en el sislerna o d i o a r i o ; asi deben acomodarse e n c p a n t ~ se pueda a' la iglesia presente. El t e rcer srntido, yne dehe snylis todos los drfectos del scgonilo , es e l anag6gico. iPor c p d ? Porqne el a leg6r ic0 , 6 la aco- modacion ii la iglesia psesente , apenas puedc, liegar

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< una pequeaa distancia, pasada la quai queilo como inserviblr. Poi- tanto e3 necesario para no voher atras , toinar proniamente alas de a'guila , y dar nn vuelo hasta lo inns alto dr i cielo , para acomodar aliS lo qne poi- acri no ee pnsible. Mas como tam- poco es dable acoinaclar allti algnna parte conside- rable y seguida de la profecia , e s necesario en la explicacion sub;, y baxar continnamente , porq.rte e n

, la proCeci2 est:in Inemladas , segun d i c e n , las cosas de la iglesia militante con las dc la tr iunfante, sien- do el resuitado de tan improho t rabajo el que se dcs- cubra 6 la vista la violencia B irnpropiedad tPe las a c o m o d a ci o nc s.

Mas si dexarnos por un mornento la algarahca incc'rmoda C inintrligihle de aquellos tres sentidos, enfenderelnos facilmenie toda la profecia , distin- guienrlo e n e!la sus clos puntos capitales , esto es , .In que hay en c o n t r a , y lo que hay d €avor de la rnisina Jerusalen. Entenderelnos lo pr imero , conlo desde el principio se anuncia ri csta ciudacl ingrata y drlinyurnfe , arpe6 castigo liorrihle que virio sobre eila , y la dispersion y cautiverio del residuo cle Is- r a e l , esto e s , d.1 repno de Jud<i. Entenderelnos lo srgnndo , que hablando con la inisma Jerusalen cas- t i p d a y destruida , le annncia para ot ros t i rmpos que ciertarnente no lian llegado , toda aquella ma- grs tad , esplendnr y gloria que se puede colegir de- estas solas palabras , annque no hubiese otras : Z z m splerdidn fulgebis , e t omiaes j n e s term adorabuut le. Estas p a l a b r a s , y todas las que siguen liasta el fin, i con cp ien hahlan , 6 6 quieti se d icen? i No es claro que s e tlicen B la inisma Jerusalen , a' yuien se anun- ciaha a n i r s su castigo inminrnte y ruina t o t a l ? Si cste castigo y ruina no habla ni con la iglesia mi- litante , ni con la triunfante , i c o n yne' r azon se p a e d e asegorar que todas las cosas pr6speras que siguen inmediatamente no liahlan Fa de dernsalen castigada y destruida , sin0 con la iglesia ya militante, ya triunfante ?

Con esta profecia de Tobias concuerdan perfec- tarnrnte entre otras innninerables tndo el capitula 60 .ie Isaias : todo el capituto 5 de Garucli : los ca-

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685 pitnlos 30 y '91 de Jeremias , y el capitnlo Gltimo d e Zacarias. Todo lo qual lo hace servir S. Juan en el capitulo 2 1 de su Apocahpsis. La profecia de Barach poi. ser breve y notalile me parece hien po- nerla ayui : Exile te Jerusalem stola lucttrs e t ve- xationis tuct: ; et indue te clecore et honcre ejus , q u e d Deo tibi est senzpiternE gloria. Crrcunadabit te Deus diploide justitia? , et iinponet niitrant capiti honoris reierni. Deus enina ostenclet splendorem siiunz in te , omni qui sub ctxlo e s t : nonzinabitu!: eninz iih' nomen tuum h Deo in senzpiiernunz : pax justitie et honor pietatis. Exrrrge Jerusalem , et s[n in excelso, et circunspice ud orientem , et vide collectosYfilios tuos ab orienfe sole wsque ad occideniem , in verbo sancti gaudenles Dei memoria. Bxierunt eninz labs te yedibus ducti a b ini- naicis : additcet autenz illos Doniinus ad te portatos in lionore sicrct filios re p i . C o n s t h i t ertinz Deus hurnilin- re oninem nzontern ' excelstlnt , et rupes perennes , et convalles replere in cequalilatenz terra , ut anzbulet Is- rnel diligenter in honor em Dei. Obunibraverunt antern et silva e t onme lignum suavitatis Israel ex manolato Dei : adducet enint Deus Israel cum jucuiiditate in h ~ - mine majulatis SUE , cum niisericordiu, et justitia qua est e x ipso.

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E LA VENIDA DEL E N G L O R I A Y M A G E S T A D .

, Que contieae e t f ru to de las observaciones precedentees.

IN TRODUC CION.

asia aqui hemos estado cas; enteramente oerapados en estahlecer un espacio gi-ande de tierslpo entre la venicla gloriosa del Sefior que estarnos esperancio, y el jnirio y resurreccian general : Fersuadidos intima- mente que con esto soko sin otra diligencia , cpeda faci'i y llana la inteligencia cle toda la Bih!ia sagra- da , ann e n Lo yuc come p o r lo mas obscuro p di- 6 c i I yi ie es la prcfecia. Si este espacio de t i ~ i n p o c p e cla s t i fi cie n terne.r, t e c s t a b I eci do, lo pu e den s 01 a In r n- te decidir jneres snbios , atetitos, sensatos 6 impar- ciales , c!espr-e.; de ciiscutida toda esta gran causa por todos SULS a.;pectos.

F u c r a tle esie espacio cle tiernpo, qne es lo snbs- tanciai de nnestro sistema, y que clebe combatir qual- quiera que q u i ~ i e i e direetamente inipugnarnos , Leinos tntnhien propuesto, ex8minaclo y j.1robaclo algunos otros puptos bien impor tan tes , relakivos ci ecte iiiismo es - Facio de tieiiipo , iiniclos con & L e ~ t i ~ ~ c h i s i ~ n a m e n t e , 6 clue e r idrn tcmente le suponen. Serin hncrr injuria ri 10s lectores sensatos, que son 10s que finicamcnte bus- carnos, el repetirlcs a q n i lo qne dehamos suponer: que ellos h a n leido y considerado ateii?:tniente todos kos fen6menos clue yr:edan crlser\ados y aim 10s pre- parativos de la pr imera p i t e .

Ahora , cste espacio grande de tieinpo despues de la venida gloiiosa d e l Se i ior , u v a Y C Z ailmiticlo p ccr- nocido , sin poder rayonrhirmenfe negarlo n i a u r i du- clarlo, parere naturalisirno el desro de acercarse ri 61, de conocerlo coli aiguna distincion y claridatll y

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si est0 20 es posihle , de divisar ;i lo menos, aunqne sea de iejals, aigunos mcesos p r i n c i p l e s y mas no- tdbies de este siglo vrninroso. Esto es lo que vamos ii proponer segnn las rioticias que hallamos en la ea-

N o se trata pa dc proLar el reyno (?e Cristo aqui e n nuestra t ierra, 6 lo que es lo n i i s v o , e l reyno de Dios q u e ba de venir , 7 que pediinos que ven- ga , S P ~ I J I I el mandato del niisino Crisio. No se tra- t a de prolmr su venida gloriosisiiiia cun7, sanctis mil- l ibus sui^ , ni la resurreccion de estos millares de san- tos , qui digni lialjentur sreiirlo i l l0 , e t resurrecttone ex nzorluis, mucho antes cle la general resnrreccion : n o se trata de prohar el juicio 6 reynado de Cristo so- h i e los v ivos , n i el tieinpo que requiere este juicio segun escrituras. Estas cosas quedan ya probadas con toda la evideiicia que piiede caber en estos asuntos.

Se trata ziuicsrnente del niodo y circunstancias con que todo esto debe sucetler. Este niodo dr se r cle u n a cosa Sraadisima y admirable, no hay duda que es cli- ficii y a n n iinpnsib!e de coneebir en el estado pre- sent? . N a s iesta pod14 se r una caitsa justa para rlu- dar dicho s u c p s o , 6 para atreverse a' negaslo? Ann e n C O S ~ S pnrameiite Ciricas se rcpettara por incpto y aiin con10 insufrihle tal i n d o de discurrir. PzsernQs ya pucs ;i pi opaner con trda clandntl y iianeza I:, que nos qllecla de este iniportante asunto.

CAPfTULQ I.

El din niismo de la venidn deb Sefior s c p n las sscri- turras.

.De este dia hernos ahl la do no poco et1 varias par- teq de este escrito segun ba id0 acmrrienc?o. Por tanto , apenas tenernos yrie hacer ayrii oi ra Cora clue un hrevisimo resumeti de to 3 l l i S ~ 0 , 3 1 0 para aliadir algo 6 las clarns y v i ~ i m a s eiipre ;ones de 10s profeias p de 10s ev,tnge4ius , s i n 0 p a r a tomar e ! hilo y seguir la corrierilo de tdntos niisterios des- de su principio.

Este dia se llama en las escrltru.as dies nzagirns

' C I L C : ~ ! ~ de la verciatl.

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689 e t hnrribiiis. (IldaZnq. c. 4.) Sk: llama dips t f i n i u l ~ i ~ s Don7 n i , dies i r ~ ~ ' i w o r i s e j u ~ . (fsar. c. r3. et 5i. ) Se liarria dies Mnrlinna , a1ncl;eodo i la c6leba.e Jbatnila de Geciieon. jdsai. c. 9. v I 6. et c. I O . v . 33.) Sr: I h n a d i e s irE, tribulationis et angustice , dies calunzitatis et iziTericv, dies tenebrarunz e t caligiru's dies rzebzile e t Iiirbiiiis, dies tubE e t clangoris. (Soph. c. I . ) Se l lama dies mng- n a , dies illa , n e c es t similts ei. (Jebesem. c . 50.) Se llama repentina dies illa: el c u d &a, tarnqztanz la- qzieus superveniet in onanes qrii sedrnt super jaciem om- nis terra. (Luc. C . 2.1 . v . 3$.) Se llama dies nzagiius i r e ipsorum , scilicet, dies ira Dei onmipotentis , et irre ,dgrai. (Apoc. 6. v. 17.) Se llama en suma por abre- viar: dies Domini.

Pues conclnidrx 10s tiernpos y momentos qzm Pn- ter posrtit in sua poteyfate , esiando todo el orbe de la tiesra, y la iglrsia m i s m a , exceptuando algniios pocos individnos sicut ii2 diebus iVoe (Math. c. 24. v 38.) et sicut ~ C C C I Z L ~ I I , e y t in d i e h Lot , (Luc. c. 1 7 . v. 2S,)

liegars finaiiiiente acpel clia de que tanto se habla en Io$ proi'r:as, en 10s evangelios, en 10s escritos de 10s Ap6stohs , y mas de prop6sito, y con notieias circnnstaiicins las inas iodi~ iduales , en :;a ziitima prn- lccia canipnica, que es el Apacatipsis de S . Joan; voiver8, ciigo, del cielo i la tierra e l hombre Dios, y sr, manifestair6 en fin propia persona con toda su magestact y gioria aniable ;y deseahle respecto de pccos, terribie .y admirable respecto de 10s mas: e t videbunt j l i iun lzoti~!i~is venirnteri~ iiz iziibibr~s cwli czim wiriute nzulin e t majestale. (Matlz. c. 2 4 . ) Bcce venit cum mibibas , e l videbit e l m ornnis oculus , e t qui euna p a - pugerimt e t plangent se super euin onines tribrrs teirre. (Apoc. c. I . v. 7.) Esta venida gloriosa ciel Seaor Jesus es una verdad d iy ina , tan esencial y funda- mental en el cristisnismo, como lo es su primera vrnida en czi-ne pasihle. Dicen q u e esta segunda \ e - nida socederd solainente a l fin del liltindo, qr~ando ya n o liaya C R todo 91 viviente alguno, liahiendo + I clo s i d ~ consumido p r el f w g o , y habicndo suc~d ;do la reLurreccinn universal ; mas si la escritora divioa 3 i ce f r e y i ~ o t i 4 m a ni e n t e p s II p on e evi d en t r ni e nte to- do lo contraria, & qiaien debereinos creel-?

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690 Llegaclo p e s este gran dia que espera con Ias

mayores ansias el cielo y la t ierra , fpse Donzinus in jussir, e t voce nrcltangeli , et in tuba Dei descerzdet de tal0 ( I . ad TheSdo72. c. 4. v. 15.1; entonces a1 ve- nir ya del cielo ii la tierra ( y coiuo yo me-figui-o) a l punto rnisino de tocar ya la atm6sfera de nuestro glob0 , suceder6 en d l en primer lugar la resui'rcc- cion d c todos acfuellos sanius , qui digni hcbehntar swculo ill0 , et resuirectioize ex nzorii~i's , ( Lric. 2ci. v. 35.) de 10s qudles, pr05ig~ic diciendo inmediatamente S. Pablo , et naortui qui iiz Chsislo sunt resurgent printi. Sacedicla in nzomenlo in ictu oculi , esta primera rc- sorreccion cle santos de primer orden , 10s pocos clignos & este nombre que cntonccs se ballaren vi- vos sohre la tierra por SU fe' y josticia ineorrupta, s e r in arrebatados juntanienfe CQII 10s santos mucr- tos que acahan cle resiicitar, y subirdn sirizul cuiiz illis obviani Christ0 in aera. Todo esto es clarisinio y de bicn facil inteligencia como qucch observado y ponderado , principaliiiente en nuestra primera par- te disertacion seguncla.

Estando p e s las cosas cn osta s i tuac ion , n o te- niendo ya el Seiior que conicmpiar a' nndie en todo el orbe de la t i e r r a , exceptciaado soianiente ;jl cierta muger solitaria , c p e llora en el desierto su cegne- dad y cinlpas pasadas , & la q n d saivari en a y u d ilia segun sus promesas (auncpe para esto sea ne- cesario algun gran milagro j empezarzin Inego 5 ve- rificarse cn estc orhe de la t ierra todas acpellas C O -

sas grandes y horrihles que para este &a e,ston a m m - ciadas. TocIas las cpales p o r evitar pro i i s idad , YO las comprehend0 en estas yiiatro palalsras drl mas e l e p n t e de todos 10s profetas, de rp i en se dice en el Ecfpsiristico (cap. 48 ) spiritzr ntagno vfdit idtima, e t consolatus est lugerites in Sion.

Forinido e t f o m n , e t laqtreits super te 711i habi- tator es terre. Et erit : 721i fiigerit dz voce Jornzidinis, cadet in fo-uennz , e t qui se explicaverit de f o v e a , te- izebitur laqiieo, quia catnracttz de excelsis nperfe sunC, e t coizcritieitlur fzciidnnzenta terre. Confrpctione confrirz- geiur tcrra ; agitatione agitabitur terra sicut e E r k , e t aufcretur quasi tabernaciclrinr unius n o d s e t grava-

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69 bit earn iniquitas sua , et corrrret , et non adjiciet ut resurgnt. ( I s a i . c . 24. v. 17. )

Pucas en esta coniuslmcion de tcdo lo que hay en la snperlicie de nuestro gloho: en esta conrnocion y agitacioii : en esia obscuridad y tinieblas: en este espanto y pavor : en esta coin0 lluvia de rayos que el evangelio llama estrellas, las quales , como se dice en el lihro de la sahiduria (c. 5. v. 22.): ibrint directe enizssiones fulguriini , e t taniqiiant d bene cur- onto arcu nrrbiuni externtinabuntur ? e t ad certuni locunz insilent; no hay dudn que perecerii la m a y o r par te del linage humano , ac;nellos en primer lugap., que de algun modo se hnhiesen agregatlo ii la yuarta bes- tia de Daniel 6 perknec ieren i las clos bestias del capitulo 15 del Apocalipsis. De estos tengo p o r cier to que no quedars vivo tino solo, porque asi lo veo ex- preso en amhas profecias: Et via? ((lice Daniel) quo- niant intcrfecta esset bestia (la qirarta) e t periisset cor- pus ejus , e t trndiilunt esset ad conzburenduriz igni. K v i nzissi srint duo (dice S. Jrxan de sus dos bestias) in stugnuna ignis ardentis 'sulphure , e t ceteri occisi surzt in glnrlio scdentis super C ~ I L U I ~ , 7ui procedit de ore i,mirrs; l o qual IIallo coniirinatln de mil maneras en las pro- fccias y en 10s salinos, coni0 he clicho.

Mas asi conlo tengo por cierto que dc esta clase de gente no ynedara' vir70 un solo ind i r iduo , asi itel

~rnisnio modo y con e l mismo funclamento rnc p a ~ c c c cicrto que qoedara'n vivos ninchos individuos , n o solo cle 10s que entonces perteneceran a l ' vercladcro cristianisrno (como serlin 10s clue haa de subi r en Ins nul3e.i ohiaaz Christo, 10s que h a n de c o n - poner la muger soli taria) sin0 taiiibien de 10s per- tenecientcs A las tres priineras bestias , que no se hayan asregado &la quarta , corno queda cliclio y probado en otras partes: 10s yuales vivos compara- clos con 10s inuertos, serdn poquisimos. Asi lo leo espreso en el rnismo capilulo 2 4 , versicrrlo 13 de Isaias : quia ILPC eriint in meclio t e r m , in nzediq po- pul~runz , quomodo si paucE olivLe, q m remanserunt, excuiianrur ex olea , et racemi cum j ier i t ,finita vinde- min : hi l e v a h n t vucceni s i~anz atque 1nirdaGuiit Gc . En el capitulo 14 del Apocalipsis, yersiculo 1 9 , se ha-

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Eg2 hka de esfa vencliniia rnetaririca de tin niodo cnpaz (le hacrr ternL19r a1 mas aninloso : e t nzissil aizge1us *fnlcena sua i7a acnlanz in lerr ana , e l vindeaiiavil vineanz termc, e t niissit in lacuni im ,?hi onznipotenfis.

Esta vendiinia horrible serd neccwria d indispen- sable en I n venida dr i Seiior ses,um el e s t d o mise- rable e n qrie Eiallarii la v h a de la t ieria , asi para evacziar tcdo principado , potrstad y vi , tnd , o lo que es lo liiislno , yard destrnir y converiir en pol- 7 0 la gran ectatua, como para acabar con tanta ini- quidaci, y para plantar de nrrevo la itisticia, dando a‘ Ins pocas plantas cine quetlaren seriibles el tiitimo cultivo , y jmra recoser en SZI conseqb.eneia 10s fru- tos ccpicsisnmos y bptirrios dignos de Dioe, que has- ta ahom no se hnn recogido, contra la interacion de l niisino Redentor.

s i estadianios con mediann ntencinn las es- crituras a s i dcl antiguo como del ~ u e i o testmienlo, nos serJ preciao ilecir y confesar que secuizduna Jicec eri t , qua die$iizis horninis revelablticr. (Lite. c. 1 7 . v . 5o.J Jeuricrisko qirando ve lqa hnl ta rc t ccrtisimamenie to& iiucstrn t ierra corno estaba POGO a n t m dttl diiuvio, esto es , corrripa coraiit Deo , e l replctu il2ipi(nte : pnr consiguiente , sin f6 , sin justicia , sin religion, cn un srimo des6rden y e n un Jlaiiientable descuido. Asi le serd coruo inelitable y necesario en t ra r e n sta rpyno, conio 10 desc-1.ibc: Isaias (cap. 59.) : inch t i i s e s l westi- mentis ultionis , e t opr‘liis esl p a r i palio zeli, s i c u t ad vindiclarn , quasi ad rdributioizena ind;gnakt‘orcis ILosri- bus .suis: y en el capittilo 63 dice ei misnio S e ~ o r : e t conculcavi yopulos iri /ttrore naeo , e t iizebricivi eos i ~ z indignutione nien , e t delraxi in terruna viriiiOern eo- r m . Entrar, digo , en su. wyno con la espacda des- nuda : e t d e ore ejus pi-ocecbit gludirts ex zifi~,yrie parte ucutiis , ut iii ipso perrutiat grnles. ( A p o c . c. IS.) Y como lo dice su padre Da\ it1 ~ liabia~iclo con 61 en espiritu: Doniinuc d de.xtris tuis , corfregit in die ire S U R r eps , juclicabit in riafionihs , inaplevit ruinns , conqna pabit capita in twru miiltoriini. iT~uE:orunz dice , iion onmiion; y aunyue la capiicacion de este I n g a r , as i curno la de otros semejantes, v. gr. el versicnlo 2 del capi- tnlo 12 de Daiiiel , explictin a l p n o s nzr~tto;.unz. , id est ,

Al:or;i

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693 omniuna qui ei:imt on/& multi ; mas esta explicacion es ccnocidnrr.errtc violenla , ni estriha sohre otro funda- niento qve sohre una snposicion arbitraria y falsa, que ni S E prueba ni es posibie prohar.

Concluido este priniero y neccsnrio acto del jni- cio de Crislo sobre 10s vivos, 6 esta especie cle ven- dirnia Ierrible ; aunque !a viiia de la tierra , y la t ierra toda quedma despoblatla , c n s i t a i l t o como qnedd de+ pnes del dillavio , no por eso d e x a r h cle cpcdar clis- persos acri y all& algunns peyneuo.i raciinos , a s i coma succde siempre en i ~ n a gran vendiriiia : quomodo si p a u c c oliwce que renaanserunt , excutiontur e x olea, nut racenzi ciinz Jiierit @ita uinclenzin. Estos pocos residuos (prosigne Isaias en el lngar citado capitnlo 2 4 , versiculo 13) pasada 3a gran 5orra>ca levaritardii la voz , y alabnrjn ri s u Sefior: hi levutunf vocenz .warn atque laurlabzmt. Quando es!e fuere glorificado con la destruccion y ruina de t~lilos 10s inicpos, cla- niar8r, p sarpirardn por 61 eon cleseo p ansia de co- nocerio y adornr!o, a71n los que 5e hallaren en 10s tiltimos fines de la t i e r ra , separados dc este conti- neiite por vastistinos inares cum glorjficatus filerit Bo- miniis , hiriizierit de mmi ... . CZ f i i i t z s t e i m e Znudes a ~ - diviiizus glorian7 j i ~ ~ t i . hscc lugnr de Isaias unido eon todo el con!r:a:n de este capilulo, 129 cornpie- Iiendo ~6x110 se pueda a c ~ ~ n n c l a r i la predicacian de 10s Ap6stoles y vocncion de Bas gcntes, que parcce .el linico a s m ~ t o interesaiite que t ienen en mira ?os intP'i-prctes de la escritu1.a.

Pnes en C Q ~ O S pocos que q u e d a r h vivos sobre la tierra , p en toda su nirmcrosisirna postericlad, pro- seguird g6r niuchos sisios ( q u e S. Juan llaiiia con el n t h e r o redondo de mil sires) el julcio de Cristo sohre 10s vivos 6 lo qw parrcc I O inisino , su rcy- no sohre los i i r o s y ~ i a d o r c s , hasfa que estos €d- ten de1 tndp, scgun x einos i su tieinpo.

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994 CAPITULB 11.

Idea generaZ deljzzicio de Cristo segun -

ZUS escrituras.

&stas dos palaliras reyno y juicio, 6 rey y jnez en frase de la escritvlra , y scgan la iriteiigencia uni- versal de todos 10s pueblos, no sisniiican ni prieden significar clos cosas dirersas , sino una sola. TJn rey, 6 principe sobcrano, recibicIo y reconocido por tal de todos SPIS respectiros stibditol; , no es otra cosa que un juez en quien reside tvdo el jaicio respec- t o cle estos rnisrnns siihditos: ni su reynado e s otra cosa, que jnicio. Aunqae no toJo jnez merece el nom- bre c?e r e y , ni cle principe , ni de soherano : mas tot10 rcy , todo principe soherano merece el nomhre de juez , y se IC debe de jhlsticia, p e s lo es en la realiclad. TZI elegisti nze , ( le decia 6 Dios el mas sa- Dio de 10s reyes, Sap. c. g. v . 7 . ) regenz populo tuo, e t judrcena Jilioi-urn tuorrrnz; y cn el capitulo 6 , Iia- hlando con todos 10s reyes de la t i e r r a , les da pro- miscuamente cl nombre de reyes y de jueccs: nudite ergo reges et inrelligile , discire judices jniunz terrce. Eo rnismo hace sn padre David eE ei salmo 2 : Et I Z L I ~ C reges intelligite , erudirnini qui juclicatis terranz ; y es hien tticil observar esto rnismo casi 5 cada paso en las escrituras. La palahra misrna R e x , se deriva evi- drntemenfe del verbo rego , que significa gohernar, dirigir , ordenar , mandar , premiar , castigar &c. : todo l o ynal supone el juicio que cEebe preceder. Asi todos 10s reyes 6 principcs soberanos (wan personas pnr- t iculares , 6 cnerpos morales) soxi otros tantos jneces de sus respectivos dominios, ti cuyo liien y ielici- dad deben a k n d e r , y sobre cuya defensa y protec- cion clehcn Telar , rlanclo ;i todos y d cada uno lo que merezcan segun sus obras.

Aliora , conrio 10s reyes y soberanos de la tierra no puecle~i j ~ i ~ g a r l o todo por si mismos , la razon na tu ra l , la experiencia y la necesidad les h a ense- fiado ab antiquis dielius, aqua1 exprcliente que acon- sej6 a' M o p e s su suegro Jetro (Bxod. c. IS. v. 21.);

es s a h e r , rrpartir entre muclios tinieiztes Deriin , in grrilus sit veritas, et qui oderint avaritianz ~ a y e 1 jrii-

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J cio que reside CII eUos, A a n h Q cada uno aqneL\a pa r t e y por aqnrl t iempo quc le paseciere : mas con la condicion iidispensahle de yue todos reconozcan sa dependencia del soherano iirisino, de qu i rn re- cibieron la porcion dc juicio que cada uno t iene, 6 In potestad de juzgar rlentro de 10s lirnites de SLI ju- risdiccion. Esios conjueces son propiamente hahlan- do 10s conreynantes, y 10s c p e i'ormnn junto con e l r ey el rcyno activo, ci la parte aciiva del r eyno , que es la principal. Esh pareee la vercladrra idea sen- cilla y clam (le un r e p y de tina naonai*cpia. Y esta parece del mismo IYIOC~O ( p a r d a n d o la tlebicla pro- portion) I n verdadtra idea del juicio de Cristo, que 110s anuncian para SII tiempo las escritnras.

Este juicio iiv p e d e ser una cosa pasagera ni li- mitada 5 algunas boras , &as ni afios : como quien se sienia pro ~i-ibunali, y exdrninada 1- substanciada la caiisa de uii reo , da la scntc.ncia difinitisa. Esta idea ~ tornada confusamente de una parithoIa del evan- gelio , n o es tan justa , que no riecesite de una mas atenta consideraeion. El jnicio de Cristo desde que empiece in die virtutfs sim, 6 en el dia de tt: venida en gloria y iiiagestad , dchc sei' un jnicio tan per- manente y tan cierno corrio el rxisnio Crisio. Asi como Cristo en quaiidad de rey lia cle sur eterno, pues SIX reyno h a dc scr etcrno , cz+s regiai non eri t

$ x i s , asi h a de ser etcrno en calidad d e juez , pues el jnicio es esencial a1 rey. Si puede concehirse un rey 6 soberano, corn0 ley 6 coin0 soberano, sin con- eehirse junto con 61 , y en 61 inismo, e l juicio 6 la potestad de j r ; z p , de orclcnar , de mandar , de re- gir y gobernar. Cristo quando s in0 I n primera vez, no ~ i n o ciertaincnte como r c ~ , por consiguiente ni como juez ; ni hzp e;; h d a s las escrituras an- t iguas, ni r n 10s evangelios , ni en 10s escritos de 10s Ap6stoles iiiia sola palahra que p~rsnadn d indi- que de algrin modo asta i dea ; an!?§ p o ~ el contra- r io , toclo iicis indica y persaaade d r a idea i n f i n i h - rnentc diverra. Por resuniirio todo en tin palabra ( q u e ciertamcnte vale For m i l ) , el niismo Seiior 110s lo asrgurd asi expresnmerite con la mayor cidridnd que puede caber en e l asunto. ,Won eninz iitissit De7ucF-

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696 lirina s,urmt I L E judicet nziindunE , sed ut 'sdvelrw mun- dirs p e r ipsunz. (Joan. c. 3 . v . 17 . ) Con que es cosa ditersisima jozgz7r a1 "inmdo como rej- 6 cotno juez, y salvar conio S a h a d o r y lieclentor ti 10s que creye- r en e n 61, p lo cregeren a 81 , y conl'orniaien sus obras con su E6 , que es la verdadern creeiicia s i n la qual no p u d e Eial>er saind.

Mas qoaizdo venga la LegLinda vez ( q u e creernos y esperanius con ansia io ; l~>s 10s gne le mnaiiios) ven- clr$ sin 9nd,i como re) : et facfimz esl, ut rediret nc- ceplo regno (kuc. c. '9. 2'. 15.) ; por consigniente ven. d r i conlo juez , n i n t Yater cnmem judiciunz ded i t j l i o ... e t potestatem dedit e i judicitrrn Jicere , quia $lius ho- minis est. (Joan. c. 5. w. 22. el 27.) E n esta potestnd coosiste sd~s tanc ia lmente el testamento nuevo y eter- no cle Dios , to1110 que en 41 renuncia 6 deposita en- teramente el Padre e n el Bijo, p pone rn sus manos t o d o el juicio, y esto poryue se hizo hsn thre , y en q n a n t o hombre : e t poiestulena dedit jridiciunz J n c w e , quia Jiliics lzon7inis e s t : et cledif e i , (dice Daniel ra- pitulo 7.) potes'utenz et honoiena, et rrgnrim , et 01111zes populi , tribus e t lingrm ipsi servient: pviesias ejus , po- testaas reternn , qua rzon ar@ehrr, e t r e g i m t x Gus qrcod non cornrmpetuv.

Este juicio de Cristo nos Io presentan las escri- t u ra s lo so10 s a n t o , rccto y justisirno, sino suma- m e n t e magnifico, dmira ls ie , y tan ileno de todas aqr:eilas pr.rteccicnes 7 exce!encins , que no ha teniclo j a m a s , ni ha godido tener ei juicio de 10s hornbres. &si se dice tie Cristo en e l saimo 9 , corn0 una cosa nurva e' iaancl i ta cn todo e l orbe cie la t ierrn: pa- ravit in judicio tIu-owm suiim, e t ipse judicnbit orbenz terra in a+tc>te , jridicnhit populos in justitia : p e n los salmos 95 y 97 EFTI e das-todas l a s criatu- ras ~ aun las irraeionaleq P insensibks , d alegrarse y r<ioC+wse, n o solo porque yicne , sino rxpreEa- inente porqiiT+,iene 6 j w p r 10 t ierra: Err.tenrzLr tali et ex id l e t terra , t r?ri?nzovealrir mare et plenil:& ejris, gor d-biint cnnipi e t orjinia qua in eis stint: tunc- exril- t~rbrml oninin ligna .riiwtar i i n ~ ci. facie Bonzini quia amit, quoniarii venit judicrzre terrana : jirdicgbit orbenz terra? in aqriilate , et prpulos in verrtate sua. 3uubilate in cons-

".

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697 pectu regis Donzini, ntovedrir mare e t plenitudq e&s:

fluminu plaudent nianu , sinrul montes exuitabunt d conspeciu .Domini , quonianz venit jnck'care ierrana.

E n la idea o s d i ~ a i i a del jvicio de Grist0 ) y de s a vcnitia, no se' cGrno prieda t ene r 1ug;ar esta alegria. De estos lugares de la escritnra paciicra citar dos 6 t res centemares, pues no hay cos9 iiias o h i a en los profetas y en 10s bairnos ; mas porque esta proliai- dad seria tan enfddosa ccmo i n i i i i l , iiic contento 130'

&ora con un solo lugnr ;le Isaias, que ohser.var-6 en el capitnlo siguienie.

C A P l T U L O 111.

Se examina nn texto importante de Isaias.

E n el fenbmeno quinto , aspect0 g r imeso) instru- nierito segtando , me acnerdo Isiei; q n e ciexe' suspensa la ohservacion cle ia priinera initad del capituio I T

de Isaias , pareci6ndtsnie que no era entonces s in0 ahora si1 i u g a r propio y oportuno. Dice asi : Et egre- dlelur virga de radiice Jesse) e t Jics t& raclice ejiis as- ( endet. Bt requie.ycet super euni spivitrts Domini : s+-. ritus supienlice et inlellrctris , sitiritris consilii e? Jci-tf- tudirtis , .spiritus scientrce et pieratis , e t replevit e i m spi- rilu tinzoris Donzini : non secrtndrinz visioizenz ocrdcrum juciicubit , neque secundum auditvnz airriurn argrret : sed j i idicabit in justitiu yariperes et argtret in mqicitate pro nicinsueiis terrce : et percritiet te r~nns girga oris sui, e t spiritu lubiorunz sucrutn inter$tie.! intptrcnz. Et rrit jus- tilict cingulunz liimboruni ejus : e t fides cincloriuna re - M I W Z ejus. Habitabit lupus cum agno ) e t pardrcs ciine hcedo accrrbabit : viiitlus et leo ) e t ovis s i rnt i l rnorahrm- tiir , e t puer parvulus nainabit eos. Vitiilus, et zirszcs pas- eeialur :' sirnu2 requiescent catrili eorum : et lea quasi bos Lonzedet paleas. Et delectabiirrr injans ab ubere super

/crnnzine aspidis ; et in c a w m a reguli, qui ablactatus fuer i t , manum suanz nzilfet. Non noccbunl , et nclz occi- dent in miverso ntonie sancto nieo : quia repletn est terra scicntia Domini sicut aqim nzaris cperirn fes. 1 1 2 die illu radix Jesse , qui stat in sfgimni pop~1lo:rini ipsun: gentes AeprecaEurztiw , e t el it sepultltrirnz ejris glcriosuin.

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FQ [ilium convnlliu?n. Super hwnc igitiir $orern qrci de trun- co e t radice Jesce pcr iMarinnt F?'i.gimm r e p n t e C O I Z - s iwget ~ el reqiuiescet spirillrs Domini 6 c. ( S. Cer6nimo in P~uinm.)

P o no me op01130, ni patedo oponerme sin i i n - piedad, a' l a vcidad dc f d clivina que a c p i nos dice rste santo d o c t o r , que Cristo naci6 de la Santisirua Virgen l\f.wia, la cual era Virgo regia Uaoidicw stirpis. Esta verdad debenios saber J' c rce r f;~inisirnarneritc todos ios cristianos. Mas csta verdncl de fe' diuina, c i r r t a 6 i n d u b i t a b l e , i e s la mi?ma q u e se anrincia, li d e yne se hahla e n estas pi*inieras palalsra5 de la pro- fecia ilr: Isaias? Despues de haber lcitio y Ineditado la pr i fec ia en tera , nnida can el capitulo antpceden- te y e l sigaicnte (qne todo dche eiitrar en conside- ration) : asi como se halIa infinitamente violenta la acomcidacion qrie se pretende hacer $ la iglesia pre- s en te ; asi no se sabe ri yue' p r o p h i t o viene ayui el nacimiento d c Cristo de la Snnta Virgen Maria. Aun- que se atencliese finicarnente 6 la primera cl6nsula de este capitnio , srpxrAndola enteraxnente de toclo lo que precede , y cle todo lo que sigue, a u n a s i , la inle- ligencia valgnr no pue2e suhsistii-: se ve en ella y sv preseota de snro tin inconveniente gravisimo, 6 una con s e cj G e n c i a in to1 e rab 1 e.

Si la vnra dc qne aqui se hnbla (pndiera o p o n e r algran incrddaio) e= rrri;niente la Santa Virgen Ma- rc,~ ~ Cristo i-io naci6 (3, ctla seguii eiie lugar de la escr i tura , ni l a Santisima Virgen pudo ser Madre de Cristo. 2 Por que 1 Porqnr, expresamenSe se dice que la flor dehia nacer no cie ia pa ra ni poi- la w r a , sino inmediatamentc de la raia , asi coxno la vara misnza: egredittur virga de radice Jesse, et $os de radice e j l s ascentlet. Con que 6 In §anta Virqen Maria 110 tcvo mas pnrtc r n la gcneracion de Crisio qiic 13 qne dice esta pi-ofecia est0 e ? , niagr:r;a; .J si se qtaiere que la Satxtisirnn Virgeii vcnga s;gniEcadn por la Tiara , s e d nceesario akerar nn tegto tar: ciaro aiiadiPot!ole li- brerneute dos pal:ibras p a r a qi:e dign IO que se p ~ - tcntle, y lecrlo a5i: et@os d , rnd ice cjzc? conswgetper mirgnm , lo q r d n o s6 qur prieda pcrnritir>eiios.

Crew I ~ S la clificultad si s g aticnde t: toclo e l con-

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'jo I terto. CecJe el capitnio antecedcnte se empiemn p$ ri notar [ o s ticmpus de que se kiabia, no rnenos que 10s sucesos y las personas. ,411i se hahla claramente del residno, ii de las relicpins preciosas de la casa de Jacob , las rpales ( c o m o se anuncia en o:ras mil partes de la escrittara santn , que >-a hemos ohserva: do ) se convertirzin perfcctameiite A Dios , antes q u e vengn el rlia del Seiior. A!li se clicc de ellas que sa n o confiaran en !cs hembres , ni estribarzin en adc- lan te e n !os principes 6 potestadcs de la t i e r r a , por cnyo inedio han sIdo castigados d c su Dios, abnii- cbs y hnmi!lados b a s t a lo sumo, sin0 qrre estriba- ran dpicamente en el santo de Israel, y esto en sin- ceridad J' en verdad : e t erit in die illa : non ndj2j'iciet residuunz Israel e t hi qui fugerint de donzo Jacob (re- cordad ]a mrager cine fiuye 5 la soledail con ciento J , Fjunrenta y quatro mil sellados en la frente eon el sel!o de Dios vivo del fm6meno 8.") inniti stsper e 0 qzii pcrculit eos , sed inrdetnr super Dominrrna Sanctrint Israel in veritaie rcliquip convertentur , r e l i q u i ~ in- cj7lGnZ , ad Deim fwlem. (versicnlo 20.) Alli se IC dice y promete 6 cste resirlao de Jacob q u e ayuel yugo q u e tantos siglos ha Eleiaclo sohFe s a cneilo, y a p e i peso enorme qiie h a oprimido siis bombros , le serd en nyiiel dia en4eramente quitado : e t erit in die illn, m1J/kretiir onus ejus de izuniero iuo , e t jugum ejus de c o l - l o tuo. Alli se dice en f i n , y sc eonclnpe tudo e s k capitnlo i o eon la hninillecion de Ics soberbios , y rtiina tiitera de toda la grandera h u m n n a , haxo la seinejanaa del nronto Kibano , con t a c h S U S altisimos cedros : Ecce doniinntor Doniiiztis eicrciiurinz confi inget Iagzrnculnni in terrore , e t exrelsi stntiira sticc!'den/ur, el sublimes h u n ~ i l i a b ~ a ~ ~ i ~ r , e t subverteritltr condemn snl- tus ferro , c t Libanus cunz excelsis cadet : inmediata- mente siuue el capitulo I I cliciendo : e t egredietur vir- ga de ca2lice Jesse Gc.

Con esta adveriencia previa p K e n importante, pro- seguid ahora La lcccion afenta de todo este capitulo,

cl cinlico d e afaban7a y accion de gracias q w can- t a en e! capitdo sigiiiente el mismo rcsiduo d e Ja- c o b , lihraclo PPI aquel d i a con tanfos prodigies, y recogido in ,wiseratioidus nzugnis ; y yo ine atreyo k

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702 a s e w r a r reaueltamenle , qtte no hallcreis nna soia ex- presion , r t i a n n siquiesa una sola palabra, que aten- didas todas las circunstanciis se pncda aCGnlOdar de un incdo razonable B la prirnera venicia del Scfior, 6 :i sus efcctos en la iglesia presente. Y si' quereis cer- tificaros p!enaii~entc dc esta verdad, sin que os que- de ni a n n sospecha de d u d a , abrid cinaiquier expo- sitor de la escritura sobre es'e !ugar , cotejcd lo cpe aiki lcais clin la profecia ; y csto solo , mucho mas qne otros argnioentcs , os h a r d facilnlente aZlrir 10s ojos, y pasar cle las t inieblas a' la luz.

F u r r a de esto: sin0 rehnsais algun poco de tra- lmjo niaterkl , abrid las concordancias d e la bihlia, huscad la palabra virga, y despues de haber extlmi- nado uno por uno todos 10s lugnres e n que se lee esta paialira, tengo por cierio (pues lo he prohado) que n o hallareis n n o solo, doarle no se tome en u n riiisrno sentido genera l , esto es , p o r Is poiestact ac- t u a l de jrizgar, de gohernar , de mandar, de cor: rcg i r y de castigar ; y algrlnas pocas veces p o r ef instrumento lnisino de la correceion , ti del castigo: l o quai en SLIS propios logares , ningnno ha pensado jamas poner e n dnda. I)esde 10s tieinpos de M o p e s F e l ee , hablando expresamente de! Mesias, la cele- bre profecia de Balaan (Nbm. c. 24. Y . 1 7 . ) Orielrtr stel- l a ex: Jacob , e t consurget virga ex Israel .... De Ja- cob eril pi donainetiir. Esta profecia , aunque algunos RalGnos m a $ rnodernos , y muy ignorantes (A cu j o sen- tirniento se inclina el Tosiado) pretandieron acomo- darla ri David, B Salonion , y demas reyes de Israel y de Ju&, mas todos 10s interpretes jniciosos se rien con raxon de la impropiedad d insulsez de esta in- trligencia , def'cndiendo pro viribus que en ella se ka- bla evidenleinente del Mesins, y pue este J no otra persona oieae ayui significarlo , as1 por la vara coino p o r La estrella: J ri ningunn le ha pasado por el pen- samiento en tender 'por esta vara la Santa Virgen Ma- r i a , ni decir que de esta vara clebia nacer la estre- ]la. En suina , liablaoclo exprcsamente de Cristo, se ve esta misina vara , y sc ve freqiicntisimamente en 30s profctns, en los salinos , en 10s escritos de Sail €'&lo, en el Apocalipsis , y siempre se ye en el mi.;-

a.

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mo sentido sin ,muc1anza ni novedad alguna. iPc?r pues solamente en cste lugar de Isaias h a de signi- iicar otra COSR diversa? iPor yae' solamente en este Jugal* se h a cle convertir la yara en la Santa Virgen Maria ? Si hemos de hahlar fi'ancamente como pick la gravedad del asunto , parece claro que no hay otra verdadera razon, sino e l miedo y pavor de la vara misma , y de las cosas tan grandes , tan indivitlraal~s, tan agenas y contrarias a1 sistema vnlgar, que se di- cen cle esta vara en este lugar.

6 de la casa y familia de David , 5 yuien se liizo la p romesa , sa l J r r i , dice este profeta , la vara y la flor. Sobre esta nor y yam , es decir , sobre este imperio, sohre esta po- testad , sohre esta persona admiral>le, descsnsar:: con permanencia eterna el espiritu septiforrne del Seilor, y por e s t a r este priacipe lleno de este ecpiritu sep- tirorme , no juzgar'd c i rnundo como lo Zian ju7ga- do, y como solo ptieden juzgarlo 10s reyes 6 jue- ces que son 1mros hombres , esto es , juxta alle- gata et probata , 6 por el testimonio de 10s ojos y de 10s oidos : noiz secuizdimz visionent ocalorunt jucli- c a b i t , neque seciindrivz auditicnz auriunz argue€. La vara de su dominacion (prosigue Isa ias ) la traerri , no en la niano , siam r n su b o w , para clenotar la pron- t i tud y facilidad con que sera al punto execntodo todo yuanto mnnclare. Con esta vara (que S. Juan llama espada de clos filos) b e r i r j en primer higar toda la t ierra , matarri toclo impfo, y clestrnira' en- teramente todo el misterio de~iniq.uiclac~ : et percir- iiet terrnna virga oris sui , e t spiriirs labiorunz sumwnt iizter$ciet inipirtm. ii esfe I z r g a r de Isaias aIucle visi- hlzrnente todo e l capitulo I I del Apocalipsis , coni0 tamhien S. Pablo , q i ~ n n d o bsbla del hombre de pe- cado : qi~i ' in Dominus Jesus interficiet spiritu oris sui, e t destruzt illustmtione adventus sui.

Despues de este primer golpe de la vara (que a1 principio s e r i ciertainente virga ferrea despues CIP estc primer acfo necesariarneiite severo y rigiiroso del jriicio de CrisIo , einpieza loego el profeta ii des- crihir la felieiclaci de u t r o sislo 6 de otro tieoipo del todo niievo , que dehe sep i r se inrnediatamentt:

De ia raiz a e Jes6

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;ob en esta nucstra tierra. Su p a z , sa q u i c t u d , m jus- ticia , sv. santidad , con la presencia G baxo la vara y gobirrno del sabio y pncifico Sa tomnn (de qcaien se dieen aquellas palabras del salirro 44 que cita Ean Pablo Ad Me5. c. I . v. 8. Y7rgn directionis , sive rcqrti~atis virga r e p i tu; ) sc aiiuocian con semejan- zas y cxpresiones t a n vivas t an adtnirahles , tan nuevas 6 inauditas en todos 10s tiernpos anteriores, c p e s u misma nocedad y grandesa ias ha hecho in- creiblcs. Ved xqui algnnas de elins.

Hahitars en axpe l ticrnpo el lobo con el cordcro, y el p a d o dormkit coli ei cabrito. El becerro , el feoo y la oteja innrardna jlinios e n uea misma habi- tacion , e t prrer ~ ~ ~ r v ~ i l z r s niinabil ecs : el oso y el be- cerro pastarria en un rnisino prado : 9; 10s hijos de amhos , auiaque tie inclinaeioces tan dircrsas , clor- mirin j un tos en tit3 misnio Ingar. EL ieon se con- t e n l a r Q enionces con aquei simple alimento, de que usa el buep. Un infante iicrno 6 inocentc podrc di- vertirse sobre la cuma de un ;ispid y axin meter I n mano dentro de eiln sin pc1igt-o aigtino; porcjue en acpellos iiempos no m a t a r h 171 I i a r th nial las hes- i i a s ponroiiosas que a h o m sori t an teuiibles : y esto no en sima parte deierminnda de la tierra sino ge- iieraIrncoic in miverso nzarzte sancto nieo. e Que' n1c.n- tc sa to de Dios p e d e scr este? A mi me parece por todas s n s sexiils combinadas con otros 1tigarcX.s de la escritusa, que se habla ayni de aquel rnisvno mon- t e t an gi-ande yne debe cnbrir alqian dia t uda la t ierra, y de qne hnhlainos en el fkJn6meno prirnero: La- pis nzitenz pi percuserat statuanz , fkctt~s est m o m mug- nus , et inzplevil z~nivei-savz terram. Lo q u a l se csnoce claraniente por las palabras que Iwego ariade , seas- land0 la causa y origen de Cantas anaiaviilzs , esto cs, porcpe toda la tierra se IlenarB entoamces de la cien- cia del Serior, asi como estan l!enas de agna t cdzs aquellas partes de la rnisma tierra que: cuhre e4 mar: quia rrpbtn est terra s6ienlia Domini sicut uque nza- ris oprrientes. Todas estas cosas -y otras iguales 6 =myores i as rcpite varias veces ~ s t e mismo profeta e o n igual V ~ V P ~ A y elaridad, e s ~ x ~ i a l m c n t e en i o 8 ca- -pituios 33 y 6 5 , de 10s quales ciecimos lo rnismo yile

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705 de este I I ~ est0 es, que todas son cosas no pasadas ni presentes , hino resei-vadas visibleinente in tesauris Dei, para otros tiempos todavia foturos, como lo mues. tra y Lace palpable SII rnisma novedad y grandeza.

E n fin concluye el profeta este pun to , diciendo: in die zlln, radix Jesse ( 6 como k e n Pagnini y Va- tab lo , pi egredietur de radice Bsni) qui stat in signum p o ~ d o r u n a , i?isz~m gentes deprecnbunrztr. Este misino q u e al1oi-a est& in signum sioe vexillum populorunz , .para que se alisten ~ E ~ W J esta l~ande ra 10s que quisierrn t ene r parte con 61, y est$ tarnbien segttn la profecia de Sirneon ( kuc . c. 2. v. 3(,) in signunz cui contra&- cetrrr : este niismo sera enionces reveienciado y aclo- raclo de todas las gentes , todas le IiincarSn las ro- dillas, csperariin en 61 , y depender&n enteramente de 61: ipi inz gentes deprecabi~ntrrr; y como anade San Pabio (ad baona. c. 15. $7. 12.) conforme 5 10s' 7 0 : in e i im gentes sperabuizt : y su descanso , su asienio, su tabernAcnlo , SLI t rono, sera no solainente glorioso, sino la inisma -loria : e t erit reqzaies ejus honor, k e n 10s 70 : e t erit regures ejus gloria , leen Pasnini y Vatablo.

Ninguno pnede extrariar ( 5 lo menos con razon y just ic ia) que yo lea eslas i l l h a a s palahsas de esta c6- iehre proi'ecia de Isaias srguii 10s 7 0 , 7 s e p n Pag- ni i i i y Vatablo. N o ignoro que S. Geronimo las lee de otra manera , dn'ndoles otro aspect0 infinitamente diverso, esto es , e t eril sepulchrrini ejus gloriosuni: lo qual os causari cierta sorpresa ; mas esperad un poco. Los intdrpretes mas sineeros J' mas inleligentes en la lengria liehrea confiesan ingenuamerrte contra S. G e - r6nirnot que la pahhra seprilchrunz no es la que cor- responde con propiedad al original , sino yudndo mas en un sentido latisirno 6 impropio. La palabra he- b r e a , dicen , corresponde prrfcctarnente d la yala- b ra latina reqziies. Bras estn palabra reqiiies , 6 de^ canso , e s inuy general , p 'se pcede faciimente apii- car 6 contraer A muchas cosas particulnres scgnn ias circunstancias : descanso ee llama comunmente el acto de estar sentado 6 recostado, y tdinbi-n el asiento y la caina en que se Isgra rste tlescnnsci : deicanso se llama el sueiio 6 acto de dormis : de simple cesacioa de todo trabajo, 6 corporal 6 mental:

s

45

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706 descanso se llama la nmerte misrna especialmente quando h a prececlido una vicld molesia, i r aha jc sa y liena de doiores y clisgiastos: sc llama en fin des- canso annyne con una wrna impropieclad, e l l u g a r cloncle se deposita un cadiver que es lo que t i e x el nombre de sepulcro. Por ilonde pareee ciaro que quien eligi6 esto illtimo t w o por eukonces muy pre- sente e l concurso g r a d e de cristianos qne c lede el quar to 6, qa in to sigao iban c( Jernsaleii i visitar la iglesia del sane0 sepulcio dell Seiior.

CAPI'ICtJLO IV. .El cielo nuew , y la tierra niieva.

c o n la venicla en gloria y magesiad del Sefior Je- sus : clestroidos enterainente Eos cie!os y la tierra que ahora son, coinenaarda otros ~ L I ~ V O S cielos , y otra nueva t i r r ra , donde 11abita1.i CD adelante In ins- ticia : izovoy vero ccelos , e t novain terranz secundisin pronaisn ipsius spectamus in. ( I I E L Z ~ L I S juirtitin habitat, dice 5. Pedro en SLI segvn;La cpistola , capituio 3 . iQu6 cpiere decir esto! 2 Acnso ciuicre decir que 10s riclos y t i e r r a , 6 el rnundo qne s i io ln es devara en- toraces de se r , 6 sei& a n i q u i l a d o , para d~ lugar a' la creacioii de otros cielos, y de otra t i e r r a ? Asi yudicra tal vez imaginarlo , yuien leyese solamente u n a par te del teytc. Bo bay clucla c p e todo 61 se prespnta tanibien obscuro y dificil, ya por s1Js ey- 1' re si o II e s e s tra orcli ra a ri a rn c 11 1' e con ci sa s , y a t am?) i e n p o r la colccacion de las p a l a h a h . Mas e n medio de esta concision y apnrente ohscur;dacl pnede clescuhrir qna!rpiera su. sentido propio y natural , si lo l ee con reflexion.

De modo (cliec S. Peclrn) que asi coma el cielo I" la tierra , que eran antes del d i luv io universal , pe.

qucr il le tunc nzundiis aqua inundasus periit asimismo el cielo 6 10s cielos y t i trra que abora s o n , pere- reidn taidJie:> poi. la misiiia palabra de DCos p por el fucso : GmEi auleni qui nztiic runl et Irma eodeiia v ~ r h o i -epcs i t i surit , i g n i mservari i7a dicnz judicii e t per- ditionis in;piorum honrinunz.

recieroii por la palabra de Dios, y por el a p a : Per

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7"7 Abora pregunto yo: 210s eielos y tierra que pere-

cieron poi- e l agua en tiernpo d e No6 yuaies fueron? i fueron acaso aquellos cielos sd idos que iinaginaron 10s Caltleos , 10s Egipcios , 10s Griegos, y que de ellos tomaron 10s Romanos? ~ S e r i a n 10s que cn e l sistema preseiite se ilanian cielos, esto es , todos 10s cuerpos celestes , sol , luna planctas, conietas y es- t r e ihs G r a s ? Y Iiablando de este nuestro globo, que ]lamam05 iievra, iperwii t acaso la substancia de esta pos e l diluvio de agiia? Parece certisimo que ni lo uno n i lo otro. Por lo q n e toca d 10s cuerjios celes- t e s , a' estos 110 pudo alcanzar n i tocar e l cliluvio de agna. Por Io clue toca A nuestro globo , d estc lo cubrieron las aguas coiiio lo cuhrian quando rlixo Dios ayuellas p a l a h a s : Coizgrrgetztzlr aqrrce q u e sub ccelo sunt in Zociuia uiiunt , e t crppnr*ent crricla. Mas no por csto pereai6 su substancia. PUCS ~ c ~ i x e ' fue lo que pcreci6 p ~ r el d i lur io de agua en frase de S . Pedro? A esta pregunfa no hallo otra cosa que resporJder, ni inas n n j u r a l ni inas cont j rc ie ri la verdzd , sino' solo eato; es 6 sabe r , que pereci6 en la tierra todo qunnto h n b i a en su superGcie ; perecieron todos s i i s Labitadores , Iiwnhres y hestid?, eiceptuando s o h - men+e 10s p ~ ~ c o s dc catla especie c p e se saivaron en el arca de N o & : perecieron lotlas 13s obras que 10s hombres habian trabajado hasta entonces sobre la tier- Fa , de las qsales no nos ha claetiado monimmento al- guno : pereciit toda la hclleia, l oda la I'ertiiiclad , la clieposicion y 6rdeii acliniraJ>:e con que Dios la habia I

crindo para el hombre justo 6 inocenie , no para el i n g r a t o y pecatlor.

Si hablainos ahora del cielo , xi de Ins cielos, de cjue tainbien h a b l a S. Pedro, d k i e n d ~ ~ ( 7 c r s i c ~ i o 5.): iatet eiriiiz cos hoc vrilentes , p o d . C a l i erunt pi,ius e t terra de aqim e t per rlqunnt consistdrrs Dei vcrho, per que ille tunc naundu~ uqun iizrrndntus p p r i i t : C a l i ~ I L -

tenz qui niinc srrnt, e t terra &c. cle est? cielo 6 c:e!os c l ~ c i ~ ~ i a s lo inisino que acalnmos de tlecir de nuestra t i e r r a , est0 P S , que pewci6 e n el diluvio el cielo 6 cielos qiie hahia antes de esta Gpora, 6 cle eTle qi-aa suceso. 24116 cielo G quP cieios eran eqtos? No otros ni otros ( en mi pohre juicio) que to& la atmcisfeera

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708 que circnnda nuestro glob0 como partc saya esena ciai , la qual atm6sfera diversificada e n tsntos climas, scgun el comun modo de hablar cle las escrituras, y iainhicn d e todas l as naciones asi l ~ i r b a r a s como civiles, se llama general y universalrnente cieio 6 cielos.

Estos cliinas, 6 estas difcrentes partes de la at- m6sl'ei.a , son sin rluda en 1i7i opinion 10s cielos de que habia S. Pedro : porqnc n o hay olros cielos de quienes sc pueda con i c r d n d clecir perecieron en e l dilravio. Estos de gut: hsbi~nnos , s i , perecieron con et diluvio ; m a s e n el misiuo sentido en que pereci6 la tierra ; es decir , s:: altcraron, se deformason, se deterioraron y se m ~ ~ c l a r o n d e hien e n mal. Hasta e l diln\io universal parece mas que verosimil, q u e nucsiro glob0 con tcda su atmi.s€era, y todo lo cpe lianiamos la naturaleza , hahian perseverado e n e l misino esiado fisico e n quc habian salido d c las ma- nos del Criaclor ; pues no nos consta de algon SLI-

ceso grniicle , extraordinario y universal , capaz cle alterar noiahleinente todas estas cosas ; antes tenemos en contra un fundamento positivo , esto e s , las vidas Iargr t is imas de 10s homl>res , para lo qual no aparece ojrd razoii fisica , sin0 la huen;l diqposicion de la tier- ra y <I.: SII atm6sl'era. Mas ha l i endo liegatlo est& dpo- ca ieri&!e, parece jgualmente cierto que todo se a i - t e r 6 , Lierra, mar y atmhsfera. S e alter6 la superfi- cie de la t ierra y e l m a r , ocupmdo las aguas des- de entonces liasta lo piesente una gron parte de lo que antes ern u n continente nnitlo comv se 9e en las islas , e s p e c i a h e n t e del Arehipidlago, rlexando desocupado > iihre lo qrie antes ocnpahan , corn0 acre- diian las infini tas produeciones marinas que encueti- t ran cada dia 10s cnriosos aun en 10s paises inas le- jauos del mar. Se a l te r6 t amhien , y por la misma ca(isa general (que propondremos B su t iempo), toda la atrndisfera de la tierra , pasando generalmente to- dos 10s climas 6 cielos diferentes de !a benignidad a1 riqor: d e la templanza A la i n t e m p l i e : de la uni- fomiitlad quieta y pcifica ri la ia~yuietud y mudan- zn cavi continua.

Asi q u e , cl Ap6stol S, Pedro bahl6 en t6rmino.c

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709 10s mas pi*opios y natnrales qnando diso : la t ierra y 10s cielos yoe eran antes dcl d i i u v i o , perecieron por la paiahra de Dios, y pnr el agua : Carli craizt prius e t terra.. .. i l l e tunc nsr~ridzis a q a inuizdnlus , periit : aita- de que 10s cieios y t i e r r a que ahora son (ciertamen- t e iideriores 10s anterlilavianos) p e r e c e r h tarnbieii d su tiernpo; no ya por el agua , sin0 por el €Tiego: C d i auteiiz qui ikzinc s m t , e i ferru eodem verbo repo- siti sun!, igni reservati: viniendo en s ~ i lngnr otros nue- vos , cpe excedan en bondad y pei-feccion as i l<- sica coin0 nioral 6 10s presentes y pasados : Novos vero ca.los , e l novatn tcrrunz secitnduna pronzissn ip- sius spectamus , iii quibus justitia habilal. En w m a , asi corn0 estos cielos y tierra g r e s e n + e s , siendo en aitbstancia 10s mismos yrne 10s que habid antes <!el diluvio , son no obstante diversisitnos en su cjrdeo, en su disposicion , en su herinosura y en sus efectos; asr' 10s cielos y tierra uneva que .esperamos , a u n q u e Bean e n substancia 10s mirmos yuc ahora , sei-6n ia- h i t a tnen le diversos en todo lo demas. Esta me pa- rece 6 mi la verdadwa inteiigencia, y Ia dnica que yuede admitir el texto de S. Pedro. Lo qual supnes- t o , pasernos 6 'o t ra ohservacion importante.

Los nuevos cielos y nneca tierra que esperamos (d i ce este priiicipe de 10s Ap6stoles) 10s esperamos segnn la promesa de Dios : seculactunc yronzissn ipsirss spectamus. Mas estas proincsas de Dios , i de clonrle eonstan ? Si registrarnos con cuidado todas las escri- rzis s a g r a d a , en todas ellas no hallamos otro Ingar que el capitulo 65 de Isaias y el 66, don& se vnel- v e Q barer mencion de lo que se habia diclio en e l antecedente. Es verdad qne en el c a p i ~ u l o 2 1 del R p o - caiipsis se hahla tambien magnificamcnte de estos ntie- vos cielos y nueva t i e r r a : mas S. Pedro no podia ci- tar el Rpocalipsis de S. Juan , que ciertnmeirte se es- &hi6 rnuchos aiios deqpaes de SIX rnnerte ; S . Juan sequn sus continnas alnsiones B todn la escritur;l se r ehe re claramente 6 este Ingar de Isaias. Ah'ora, co- mo en todas l as escrituras no bay otro I n ~ a r de don- de consten expresamente Ins promesas de nucvm cic- 10s y nae%a tierra yne este capitnlo 65 de Isaias, pa- x c e claro que ii este lugar nos reinite s. P e d r o , y-

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710 taiiibier.1 S. Jrinn ; y parece del misrno modo claro, que para en e.ide..- hien el texto conciso de S. Peclro, y tamhie? e < de S. Junn , richerernos estudiar pr imer0 el texto d- I 2i3s , donde se hal lan conio en su pro- pia f.1F.n.e ias p;.oinesas de Dios de clue aliora ha- biatnns. E s j a s habhn rnanifiei-ta y evidenlsmente con Jc.rnsaledi fu tura , y con las relicpias preciosas de 10s judios c~ mo es facil ver J c' mprrLencter a1 pnnto, asi poi- todo lo que piecedr en eote rriisrno c a p i t d o 65, conio por todo ynanto se dice en 10s cliez capitulos antccrdentee. Entiemoc p i es a1 rsirnen a t e n t o 6 im- parcial de este instrurnento fundamental de las pro- mesas de Dim.

Bcce rnim ego creo ccwlos nwos e t terrain novain, e t E o n erunt in mrnioria priora , e t non as( eizdeiif super cor. Sed gaudebifis , et exicltabitis ucqiie in sempilernum (sive in scculurn seccili, coiiio leen Pa 411'ni y Vatablo) in his, qum ego creo: q kin ecce ego creo J z r u s n l m e n & tationern, et populuin e j u s gaudiunz. Et exiL!tnbn in Je- rusalem, et gariddo in 1 q x ~ l o nzeo: e t non cudietur iu eo iillra V O X JrJfirs ei vox clanaoris. Arm erit ibi a3n-

plius infans dierum, et seiwx qui lion inipleat dies suns: quoniana puer ceahiin annoi uti2 inorietur , et peccntor cen- tuna annorunz ntalediilus erit ( 6 como lee mas clara- mente PaSnini c o n l \ r m e k 10s 7 n , non egredictur in- de ultra a d sepulchriw? i n f~ r r zs rlirriitn , sizrc inimaturus, e t senex qlii no inzplevei ic t r ~ n p u s S T L I L I ~ , erit eizim ndo- leccenc cenliim nnnomtiz ccc.) Et Ltd(ficabunt donaos, e t laabitnbunil . e t plantobunt ~ l i k c ~ ' s , el conredent fructus eartun. Non ~dificahrint , e t nliris Iiabilubit : n o n plan- tabunt , e~ nliiir cornedrt: secundrcnz enini dies Ifgni erunt dies popidi n ie i et n p r a rn/ nuiina eorunz iriveterabnrzt. Electi m e i iton licborabutzt frzistrn , nrqrie genwabunt in contnrba!i.mr: (6 segun 10s 7 0 neqzbf j l i o s gmrrabrtnt in nialedicticnen.t) quia semrn benedictoruna Doniiizi est, et nepotes eorrin? cum c i s : eritqtie nnleyuanz clnnient, ego exaudiarit : adhuc illis loqiientihus , ego audianz. Lu- ' pus e t agizus pasceniur sinaul, Zeo et bas cowedent pn- Zeus : et serpenti pulvis panis ejus : non noceburrl , negue Occident in onzni monte sancto nieo , dicit Dontinus ( c. 65. v. 1 7 y sig.)

Veis a p i la grande y ce'lehre profecia que cita

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71 evidentemente S. Pedro quando dice : ~ Z O V O S c e l o s , e t novain terrunz secandurn proniis?a ipsius spec ianiiis , in quibus jirstill'a habitat. 1- ~ e i s ayiii tarnbien una de aque- llas profccias que Lan puesto en sumo caiciado y coiiio en ~ i n a verdadera tortura 10s mayorcs ingenios. Estos en su sistrrna h a n imaginado c b s n>odos de ex- piicarla , 6 diretnos +or, dr eludiria: Ias cpaies ex- plicaciones, auncjuc diversisimas, convienen en el so- lo punto interesante cle negar ci esta profecia , asi co- mo ri taritas otras , su propio y natnral sen t ido , que en t i rnden a1 punto 10s que saben leer.

La primera esplicacion , 6 el pr imer modo de elu- dirla , dice q u e estos nnevos cielos y m e \ a tierra de que liahla Isaias y despues S. Pedro y S. Juan, son para despuss de la rwurreccion universal : clue enton- ccs se r e n o v a r h todas las cows : que entonces res- pec to de 10s hienaventurados non eriint in nzenaorin priora , neqrie ascendef supcr cos : clue entonces n o n azidietur ultra v o x Jlefus e t v o x clnnzoris : que en- tonces. ... Toclo est0 est& hien : todo es t a n verdade- ro como inntil por ahora , y fuera de prop6sito. P tantas otras cosas particnlarcs que anuncia expresa- men te esta profecia admirable, 2 qu6 sentido puerleo t ene r ? Painguno pues todas se omiten purque no cs dable esplicarlas.

La segunda explicacion mas comun ent re 10s in- te'rprcfes Literales, se acoge a1 d t i m o rrfugio c a p u de salvar el sistamx, q-uc es Q la pura alegoria. M , I ~ es cosa verdaderamente admiralile ver el iiicrlo em- barazoso, confuso y ohscurisimo con clue s~ eupli- can , 6 con yne no se explican iinos hombres t a n gran- des. El sistema t iene sin clnda tocia la cntpa. Ved una inaestra : Quia ec'ce ego creo c a l m novos , e t ier- rnnr novain. I d e s t dice la explicacion , creo Izovr~nt nzundunt rrtcta.phoricur?z , izentpe ecclesianz Chrisri , ~ L L R multo rtnz~liop. , ornatior augicslior est sinngoga , t t est p a s i p O c ' 1 6 S nzmdus. i Q x r : verclad ! Mas i que wr- d a d tan fhera de tiernpo , y tan agetla cle e s i a proircia !

Quia GCCC ego C ~ G O Jesrbsalern eXlL!tL2tiO?ZGfJl , e t 110- p i i l u n ~ ejus g-andirinz. I d e s l , dice la explicacion , ( r ro ecclesianz Christi e x u k n t e u t et gazcderzlena i7t Spirit{& Sancto.

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712 I Non audietur in ea &a vo.r"$etus, et wox clawlo- ris ( dice Uios ) non erit anzplius ibi inJans dierum , aut 5ene.z , qui non inzpleat dies suos, quoniana puer centurn annoruna rnorieliir , e t peccaior centtin& annorutn naale- dictzis <rit. I d est , dice la expiicacion , in ecclesin mea ownes iniplebrant dies sicos bene viwendo, et s u e cetutis cfficia ac nrunia recte oberinilo : qui au~enz in ea fuerit peccator , etiam si centurn dit unizoruin, nihili cesEininhi6r~r ; sed reprobatus cipud otnnes , e t naaledic- tus eril. iQud idea tan contraria ri la qne nos clan nuestiaq historias , y tambien nuestros ojos y nues- tros oidos!

Secunclunt dies ligni ( dice Dios) erunt dies populi ntei , et opera mariuurtt eoruna invcternbrini. Elecli naei non lahorubunt friistra , neque genernbrrnt in conlirrba- tione quia senzen benedictunz Donaini esl , et nepotes eo- rum ciinz eis. Sensus est , dice la explicacion , j c l e E e s mei Zongevi , alacres , e t bene sani erua , perinde nc si essent in prinirevo imamentire s tatu, et vescerentur

frucfus nrhoris vice. Como la substancia de esta explicacion es la mis-

m a con diversas paialsras en 10s autores d e ella, yo lie e:egido ttos de 10s mas dortos y mas litesales, de quienes be cop;ado a lgunas palabras ,* para que poi* ellas se haga concept0 de toda / a explicacion. Quieri quisiere asegrxrarse mas lo puede faciliiiente ver por s a s proyios ojos.

Alioia se psegunta : las cosns que a q u i se tiran 6 aconiodar :I la igiesia presente haxo el nomhre de Je- rusaien, i le cornpeten 6 ella en realidad? iE:btas co- sas hahinndo de La iglesia son vr rdaderas? [ S o son todas visiblemante falsas ? ;Una profecia en que habla el espiri tu de Dios, puede anunciar ri la ig1er;ia pre- sente haxo e l nomhre de Jernwlen cows clue no ha hahido jamas en e l i a , ni las pu rde h a b a r en l a pre- sente provideocia? Por axempfo : que n o se oirci en elta llanto R i c l a i n n r : q u e n o hahra ' joven ni viejo que no Ilene sns d i a s , Fene vivendo , e t s7m cetcitis, ac nttrnia recte obeundo: que todos SUS f;eleP hijos vi- virrin niuchos afiios sapos J; a l a g r e s , como si comie- sen del arhol de la vida : que el que edificare una casa viviri en el la : el clue plantare una vifia 6 un

,

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7 ' 3 arhoiI gozai4 pacificamenfe de sus frutos, sin te- mor cl e e n e mi go s. A n ZI n ci o s tf iarnetra 1 men ! e o p u e 5 i os hallamos ;t catla paso en 10s evangrlios, y la iarra eFperiencin nos h a enseaado que ias rniserias de ia vidn hnniana la enrermcdnd , el d o l o r , ei diqgusto, I n afdiccion , el clamor, e l Ilanto &c. son urtos ma- les generales 6 todos l o ~ liijos de Adan , (pie :[ na- die e s h e n , ni ann 6 10s nias justos y sanios , anics B cllos se entleremn iniriedialarnente atlueiras paia- bras del Apdstoi : qrii pie volwzt vivere in Chris/o Jeesu, perseczctionem patienfur (2. ad Tiin. e . 3. v. 1 2 . ) , y aqnellas dei mis~no Cristo : niundtrs niilcnt gnrrdeilit , vos atLCern contristabinzirzi (Joan. c . 16. v. 20.) Si m e yer- secuii suiit , et VC.F pcrsequentur. ( e . 15. v. 2 0 . )

Sail Pedro Aptistol , que sin dnda ententlia w e - jor todas estas cosas cita evidenternente esin p ro - feci3 cle Isaias , y pone estos nnevos cieios y iiuewa tierra secrcnclum proniissci , no aliora , sino despues yr;e prrezca esta tierrn y estos cielos presentes. Asi como estos n o eiitraron , sin0 tlespues que perecieron &os antediluvinnos ; asi estos presentes pel ecei.8n para que entren 10s nuevos : per q u e il le tunc nzundus aqua itirctidutus periit ; cadi ariteni qui nunc sunt , et terra eodrnt wet bo r e p s i h siirit , igni reservati , novos vero cmlos e t terruna novana secrrizdum promistn , expecta - mus. De estas palahras tau claras del Ap6stol se in- fiercn estas conseqtiencias indisputables. I .a Que es- tos cielbs nuevos y t ierra nueva no pneden ser la iglesia de Cristo , purque segun el Apdstol 10s cie- 10s nuevos y la t ierra nueva que hay prollietirlos , no vendran hagta que perexcan 10s presentes por me- dio del fuego : esto todavia no ha s u c d i d o , lupgo 6 10s tales cielos no son la iglesia de Cristo , 6 la iglesia de Cristo no est& todnvia en el mundn. 2 . a

Tanipoco pueden ser estos nuevos cielos y n w v a tierrs para despues de la resurreccion general, conlo pretencle In pr imer explicacion , p m y u e entonces no habr& ni muerte ni pecado , ni generaciones , ni necesidad de cams y de viitas : todo lo q u a l dice Isaias que habrd en aquellos cielos nnevos y t ierra nueva 6 que se refiere S. Pedro. 3." Lues0 des- p e s que perezcan por el fuego estos cielos y esta

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7 4 t ierra presente , y antes rpe se verifirgrae Ia resur- reccion general , se veri11 estos cielos nuebos p esfa tierra nueva cle que h a b i n 5. Pctllw , y succderrin las cosas que para psta +oca estdii reservadas se- grin la profecia de I s a i a s , qne es la tinica ( p e con- tiene cstas proxnews. Veamos puss segun ella y:& t i e n i p s y qud cosas ser in estas.

Primerarriente los tiernpos de q n e va hahlando este gran profeta, asi en este capitulo 65 cnmo en 10s I einte y ciratro antececieates, SOD evidenternelate 10s tiemgos pr6xiinos y a m casi ininediatos 6 la ve- nida d e l Sefior ( s e p n qmdia dieho y probado e n ei Fendmeno 5 , arpecta 3 , pdirafo 5 j ; Q saber , 10s jiempos dc; la vocacion, conversion , 9 conp-egacion in nziserntLoni6zi~ inagnis de Ias rcliquias de Israel. Desp:aes que: e l Sci ior se ba mostroclo con70 inex&- rabie la oracion fervorosisirna q u e en el capitnlo avitecedente hace el mismo I s r a e l : despues de ha- b e r l e responrlido con dure7n , dnndole e n cara con SR ineredulidatl , con su i n g r a t i t u d , y con todas siis antiguas iniqnidades , se deja a l fin vencer , da inues- t ras de h a b e r oicb su orac ion , y condesciendc be- nignainrnte , si n o con todo I s rae l , ri lo menos con sus rrliqnlas , diciendo a1 versiculo 8 : q 7 L O I ? l O d O si inverziatur granum in bolro , ~t dicaiur , ne dissipes il- Zud , quoriiant beizer1;ctio est ; sic Jncianz propter ser- oor nteos , ut no12 dioperdanz t m . m , e t educanz de Ja- cob senzziz, e t de Juda pqsideiztent montes n ~ e o s e t hceredital?rinf eain electi nzei , e t servi n le i hahitabura2- i6i. Pasa luego d hahlar de la snerte infelicisima q u e tendr;l’n tndos.ayaellos que no operen si1 voz , 10s yuales ( c o m o diximos en e l fen6meno 8 , ar t icu- l o 2 ) s e r h d‘ lo menns las dos terceras par tes ; des- pues de lo yud , vuelae otra vcz 10s ojos A las rc- liquias preciosas del rnisrno I s r ae l , ;i c p i e e e s a n u n - cia y promefe dcsda e l rersiculo 1 7 hasta e l fin (le! capitrrlo , 10s nuevos cielos y n u e m tierra , y toclas Bas deinas cosas particulares que deljertin sucecler cra ems tiernpos , asi en Jerusalen y e n I s r ae l , como

~ en todo e l resiclato de las gentes ; 6 saher , 1,i p.iz7 In ciuietwl , la segriridad, la justicia y santidacl ~ la inocencia y simplieidad , la6 vidas largas de 10s

~

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E n aquel los tiempos (eri 10s c p i a l - ~ como dice S . Pedro habiiara la Justicia) no morirs ningiino an- tes de la edad maduia dice Iqaias : si algano m u - risre de cien acios, se dira yae ha moerto aiin jo- ven : y s i en estn edad muriere pecador , serd rnal- &to entonces como lo es a h o r a , y como c s n e w - sario que sea en todo tiempo. De don& se colige rnanifiestaniente , que a m en medio de tanla jnsti- cia y conocimienko de l Senior, que en ayrtel siqlo ventirro inrrndarci toda nnestra t i e r r a , no por eao f a i t a r j n del todo el pecado y 10s pecadores , pues a l fin todos ser jn entonces tan lihres como lo son ahora , y todos pQdEh bacer un us0 bueno 6 malo tle SII l ihre aibcclrio. El llanto y e i clamor pro- sigire Isaias qire ahora son tan frecfiientes en tc,dn c h s e de gentes no se oir&n 6 se oirdn rarisinia YCZ en nquellos tiempos felices. El que edificare iina cam , v ~ v i r ; i cn ella: c l qce plaeiaie u n rtrhol , 6 una v i n a , gozara de sns frntos : n o suceder i en- lonces lo que tantas veces ha sucediilo en 10s si- glos anteriores , esto e s , que quierr ne ha edificado nr?a c a m , ni plantado una viha , se haga, d t ~ ~ r i o y poseedor dr e l l a , 6 por prepatencia 6 por derecho q u e llarnan de conquisia. Los d ia s de mi puehlo, p ros ipe el Selior , se r in iguales 6 mayores que 10s del rirhol yue ha p lan tado , y el trahajo de siis ma- nos l o verai envegrcerse delante de siis ojns. Mis escogidos no trabalarrfn en aqurllos tiempos inntil- mente , ni engendrardn hijos para la esclavitntl y rnaldicion ; antes sercin i i na generacion henrtita de8 Senor y sns hijos y nietos como ellos. Es ver- dad qne todaq estas cosas , y otrns seiiiejantes clifi- ciles de numeral- por su prodigiosa mnl t i t nd , se di- ccn expresamente de Jerusalen f~rtura , y de las re- liquias preciosas dr: 10s jiidios ; mas poi- otros mu- chos lugares cle la escritura , y del inismo Isaias, que ya %remos apuntaclo , parece claro, que las re- liquias de todos 10s otros pueblos, trihus y lengnas p ar t% pa rB n abu n da rmt isi m amen t e de t o do s e st o s hi e - nes natnrales y sohi e n a t u r a l e s , cpre pimariamente sc prometen 6 las relicpias de A h a h a n , de Isaac

. .

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7 E6 y de Jacob ; ni 10s judios somos en este asunto tan avaros , qup lo yuerainos todo para nosotros , con

totlas las gentes.

CAPITULQ V.

Congetrim sobse estos nuevos cielos, y aaue3a tierra.

5. I . ' n a r e c e also mas que probable p e esta nuestra t i e r r a , 6 esie g i o ? ~ u terraqiieo en que habi- tamos, no est$ a h o r a e a la iniema fnrma ni en la misrni siLuaciorr en que estiivo desde sn principio h a s l a la gran dpoca del diluvio uniT-ersal.

@.ita proposicioo hien importante se pede facil- mente probar con el aspect0 actnal del misrno glc bo, p con quanfas observaciones lian becho hasta ahora y hacen cada din Ins naluralistas : mucho m a s , si es te nspecto p estas observaciones se comhinan con i o qua nos dice la escritura sagrada.

Primeramente la escritura nos dice que n ios antes de criar viviente nlguno, gnando todavia t e r m erat inaiais et vacua, sive irzvisibilis e t incompositn , hizo que las aguas yee la cuhrian toda se dividiesen e n doc partes : que ana parte subiece p o r esos ayres ra- rificada y separada por medio d e l firmamento, y se eytentliese poi- todo lo que llarnamos con verdad la atmiisfera de la t i e r r a , y la otra se congregase e n un l uga r deferrn inado, $ qno se le di6 e1 noinhre de mdria 6 de abisuc., dexando libre y desembarazado todo lo dernas, y capaz de ser liabitado.

Este lugar determinado, que Dios les seaal6 en- toncec 6 las agnas inferiores , no hay ra7nn a lguna para decir n i aun para sospecbar que lo derasen na- turalmente antes de l diluvio uniaersal , n i tanipoco yiie lo dexasen por algun aceidente grande p extraor- tl inario, del q u a l no consta, ui p o r la historia sa- Vradd, n i a n n siquiera por las f6bulas de 10s Bgip- 8. cios, ni de 10s Criegos. Con que podemos creer y ase- gurar yne las aguas inferiores se conservaron hasta el ciiluvio de No6 sin mudanza alguna notable en el misrno lugar que Dios Ies selial6 desde el principio.

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7 I 7 Est0 suptiesto , pasernos 31uego a’ ohservar la superfi- cie de todo 13uestro glob0 il de nuestra t ierra ahora haI>itada, y no solamente ahora, sino de tiempos in- inernoriales.

El aspect0 actual de esta sziperficie, y todos 10s clescitbri~aientos de sus curiosos observadores , nos obligan i creel’ , sin poder racionalmenie dodarlo, que las aguas del mar en tiempos anteriores ocu- yaron esta que &ora es i r i d a , 6 d lo menas una gran parte cle e l la , est0 no de paso, sino estahle- mente por miichos siglos. iPor qu6 ? Porque en todo, 6 casi todo 10 que ahora se llarna arida , 6 t ierra habitable (eaceptuando solamente 10s montes , que con razon llarnan 10s fisicos prii77itiwos) se hallan d cada paso despojns ciaros y palpablcs de Ins vivien- tes del mar , no solamente en la superficie de In tierra, 6 ri poca distancia , sino basta 60 y 80 pips de pro- f’ramdidad; J- est0 no solanicnte en I C s valles 6 t ierras l lanas , s ino tam1,iei) en las c o h o s y montes secunda- rios, ;i 10s yuales se les da este nombre, porque parecen liechos despues aecidentalrnente , poi. el mokimiento y concurso violento y confuso de diversas materias.

De este principio cierto d inpegable ccnihinado con la histcria sagrada, se sigue legitimamcnte, que niiesiro glob0 terraqiieo no est:< :,horn como estuvo en 10s prinieros t iempos, 6 en 10s tiempos cle sz1 juventutl. Por consiguiente , qve ha suceclido en 81 en tiempos remotisimos respeeto de nosotros , algun aceiderite grande y estraordinario , 6 algun trastorno, aniversal de toclas PUS cosas , q~7e lo hizo mladar en- tesampnte de semblante: que cblig6 & las aguas in- fer iores ii niudar de sitio: que convirtici nznre in ari- dam, y tarnbien nriclarn in mare: que hizo €oormarse nuetos mares naevos rios , nuevos valles , nuevas colonfas , nuevos monies ; en suma ~ una nlieva tier- ra , 6 un nuevo orlte cli~ersisimo de 10 qae habia siclo hasta entonces. EsIe acciclente n o p e d e ser otro, PO: mas que se fatiguen 10s fi l6srfr~s, que el di lui io nni- versa1 de M o d , en el qual C O ~ O dice el Ap6stcl §an Pedro : i l l e tunc nzundns agzra iiuindatuv periit, y co- an0 dice el mismo Cristo : venii didriviunz , s t tukt onz- ?Ws. ( M f f t , c. 24. *I. 39.)

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718 La inisma causa general que produxo en todo 11Ue5-

t ~ o glob0 iin n w t o niar , y una nueva i r i d a , mud6 ~ a m b i e n mcesariamenie todo el aspect0 del cielo; quiero decir , no sotan~ente el antimu0 orden y tem- peramento de iiaestra atintisfcra , stno e l antiguo or- (lei3 y disposicion del s o l , dc la l u n a , y de toclos lo.; c u e ~ p o s celrstes respecto del gloho terraybeo. i f tut : causa gc tx ra l itle esta? A mi me parece q u e n<J piz( c!c stiia!arse otra , I sino la misrna mano omni- pr,tente de l Criador : e l qual i n d i p a d o con tocia la tiei'i-a , cxbrcmarnente corrompida , la hizo moverse repcntinamente de un polo 6 otro , inciinando el cxe 25 grt.d,>s y inedio , hati6ndolo mirar por una de sus ex<rem:clacles hicia la estreila que ahora llamanios po- l a r , 6 Isa'cia la ertrrmidad de In cola de la osa menor.

Ccn esta rcpentina inclinacion del exe de la t ierra se drbieron srs;nir a1 yrnto dos conseqiiencias nece- sarias. Primera : que tQd0 quanto liabia e:i la super- ficie del gioho , a s i liyuiclo como s6lid0, perdiebe su ecpllibrio , ;v quedase en un sunio desorden y con- ft43icin n o ruenos horrible que universal: qne todo se dPsoidenase , todo se trastornase , todo se confun- diese, c a y d o todas las cosas unas sobre otras , y mwclrindose todas e g k e si : y que rompidndose coriio dice la liistoria sagrada ( G e e . c . 7. o. I I . ) I n s ft irn- t r s del grande alnsino rornpiendo tambien el m a r t d o s sus l imites, ?- derramando ssis ai juas sohre lo que entonces era i r ida 6 t ierra, qurdase todo nues- t r o glolpo enterainpnte ctibierto de a p d , como lo es- t n v o en 10s primeros monientos de su creacion.

La scguntia corrseqGiencia que dehid seguirPe ne- cesaridinenie de la inciinaciou del exe de Pa tierra ( sobre cuyo supue.;"o vam04 hahlantio) fue: y-ne e1 circnio 6 linea eqaiiioccial , qiie Lasta entonces habia sido una misma con la wliptica , se dividicse en dos, p que rs 'a liitima cortnae 6 la primera e o dos pun- t o s rliainetraimeritP opne~tns yne Ilsmamos m c h , eslo es, r n el pr imer grado de ar ies , y en el primer0 de lihra. De lo q u a l r ~ s u l t 6 que nues t ro sloho no ini- race pa directnmente al sol p0.r s u rqnador sino solamente dos d i a s cadd ai io , el 2 1 d e Marzo y el 22 de Setiernbre, presentando siempre en tgdos 10s de-

?

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7 I 9 mas dias del aiio nneuos puntos de su snperficie a1 ray0 direct0 del sol. i Y de aqui c p 6 result6! Resnl- t a r o n necesariameute las c p n t r o estaciones , que lla- rnamos primavera , I e r a a o ) otoiio d invierrio : las yuaies :i diebus Noe , usque od diem Doniini ) han sido , son y serBn la r u i n a de la salnd del hombre, y Conlo un casiigo 6 gestilencia universal que ha acor- tad0 nuestros dias ) y 10s Iia hecho penosisimos , y Pun casi insufribles.

iPues no hnljia antes del diluvio estas qaatro es- taciones? N o , aniigo , n o las hahia segun yo pienso, y segun han pensaclo antes de i d a l p n o s otros au- tores graves, rrligiosos y pios. (Vc'ase entre otros el religiosisiino y eleqante au tor del Espect:knlo d e la NnturaIeza.) Es verdad yric muclios otros no h a i l yue i ido adoptar est2 opinion , pareciCndoles c p e a l mundo dehia haber eslado siempre corn0 est& a b a i a ; mas tarnbien E S verdad que las razones que oponeii son clCbiles, ohscurns, inccnchiyenles , y ta l vel prnc- han t o d o lo contiaiio. Como es u n asunto de pura congeiura . podiA cnda u n o opinar cam0 yniera. Yo soy de parecer qne antes del ctiluvio 110 h a l ~ i a estas cgttatro eslaciones de l afio) que en l o pi-esente son nucstra t u ~ b a c i o n y niicstrn riiina ; sino c p e nuestro gSiolro goxaba siempre de 1117 prrpetno cyuincccio. En esta liip6tesi (pues no pma cle alii) me parcce que l o eiitiendo todo ) asi l a s obsertacioiies de 10s natu- r a I i s t a s , como lo que leo en las san ta s escrituras.

En esta hip6tesi , lo primero: todcs 10s climas, y ann todos 10s circulos paralelos a1 ecpadcr , aunyue divcrsos en t r e s i , debia cada uno ser siempre uni- forme consiyo mismo. Eo regnndo: la atm6sfera d e la t i e r r a , piendo en todas partes uniforme, debia en toclas partes esjar quie ta ; no cjerto con acpelia yuie- tucl que t iene el I,ombre de inercia ) 6 de inmovili- dad , con10 esl6 yirieto 3-11) pefiasco, 6 an monte en el lugar qrie Dios le h a seiiaiado; s ino can aguella especie de yuietud natural ~i respectiva que compe- t e ti un fluido, quando no es agitado violentamenIe por a l g u n n causa externa qrie lo obligue a' perder su pa2 , su qu ic tnd , 6 lo que es lo m i s m o , su ecpili- hrio. LO tercero: en aquellos tiempos PO hahia ni

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720 p n t t i a hahe r natnralmentc nubes horribles , clensas y nlxscuras, por el C~IICLII‘SC) y meacia de divcrsos vapo- rcs j- exbainciones de toda e spech : 110 habia frota- inrl-mto i iulcrl lo de unas con otras por la contrariedad <!e ios vientos: no se encendia en este fi-otamento el fucgo eldctrico , por Gonsigaiente no habia ayne- l ias iluvias g u e , ni aquellos t ruenos , ni ayucllos r a p s que ahora nos causan t a n t o pavor J’ daiios, asi en 10s habitadores de la t i e r r a , C O ~ O en todas las ohras de sus manos.

De aqni resulta y debia resultar natnralmente, que 1as costipaciones , las pestilencias , las en€eesniedades de toda especie , qne aliorn son sin nlimero , eran en- t Q n C f S 6 pocas 6 ninpnas ; y que 10s homhres y aun ]as bestias Vivian naturalmente diez 6 cloce veces mas de lo que aliora v i v e n , rnuriendo de pura vejez, des- pars dc habe r vivido sanos y rohustos, unos 700, otros fino,. y algunos inas de goo alios, con30 cons- ta de la historia sagrada, esto e s , de la dnica his- toria antbntica que tenemos de aquellos tiempos.

9‘. 2 . O Volvamos ahora dos pasos atras. S. Pedro en el Ingar citado dice expresarnente que aquel an- tigiio mundo antediluvian0 , a q u a irzundatus periit, y que este p re sen te , que entr6 en su lugjar, perecera del misrno modo por e l f n e p : 6 ~ Z i autevz qrri RUTZC s m t , e t terra eodenz vrrbo reposiri sunt, igni reservati. De ayui se sigue lr-gititnamente lo prirnero: que del mismo modo , y en et IniSmQ sentido en que ayuel antiguo inrindo percci6 por el agua , este piesenie pe- recerd poi. el fuego. Se s i p e legitimamente lo se- g,indo : quc asi C I ino ayuei ant igno inunitlo n~ pere- ci6 en lo substancial, s i n 0 solamente en l o acciden- ta l , esto e s , se deform6 horriblemente , mud;iidose d e bien en mal , y apaieciendo despaes del diiuvio romo otro mundo n u e \ o , diversisimo del a n t i g u ~ , (corno aparecr un boinbre despufs de una larga en-

‘ f e rmedad) asi este nitrndo que ,thora es , tampeco pe- recerri en lo snhstancial por el h e g o , sino que se mu- dar& solamente d P .mal en h i e n , recohrando ~ C J T este meclio 5u anflgna san idad , p volv;endo a’ aparecer CQU

grancles niejoi’as , con toda aclnella 1ierinosun.a y pel*- feccion con que salid a l principio de las in~lnos tic

,

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72 i su Criador. Aunque esta Gltiina cnnseqiiencia E O pa- w c e contenida eir aquellas palabras 10 estd en [as que signen : itovos vcro c c ~ l o s , e t novam terrailr secun- dum pr.on~issa ipsius expectanrids , in quibzis justitia Xa- bilat.

Con q u e los, nuevos cielos y nueva t i e r r a , 6 e l rnundo nuevo que esperamos despues del aetiial, &he sei' sin coinparacion inejor yue el presente, y esfo no solamente en 10 moral , sin0 la inhien e n lo fisico y material. E n lo moral, porqile en 61 hahita- si la justicia : in quabus j u s t i l z habilat, las cjuales pa- labras generoles no se pueden clecir con ?erdad ni del ~nnrado presente , ni niucho menos del aiitiguo. Tarnhien lo L'isico y mater ia l , porcpe el mrpncio nue- Y O que esperarnos , lo espcramos segun Ins promesas de Dins, y estas promesas que solo constan del ca- p i tdo 65 de Isaias liahlan expresa y ciaramente de una bondad no solo moral, si que tamhien f'isica y in ate ria I.

Esta %ran mudanza clue esperamos de nuestro mnn- do presrnie de ma l en h i e n , me parece 6 mi segun rn; sis tema, qtle clehe coinenzar p o r don& comenz6 en tiempo de 3 0 6 , de Lien en riial , quiero deck , gor la restiiucion del eye de Is tierra ii aquel misino sitio donde estaba antes del (Iiluvio, 6 lo que es lo mismo , por la union de la ecliptica con el equa- dor, sin !a qual asi como n o p e d e habet- un per- petrio a e ~ p i n ~ ~ c i ~ asi no paeden faltar las qnntro tstaciones de l a?io, las p a l e s son enemigas per- petuas B implacables cle la salnd del laotn?,re, Por consiguiente no se corteibe aqriella felicidad natu- r a l , granda , extraordinaria y digna de una nue- ? a t ierra ;y nr-evos cieios; ni se lialla como pugdm cntonees Iwlver. n a t u r a h e o t e y sin un G O ~ ~ U O mila- gro las vidas I a r p s de ios Saomhres que se acaltaron con etdilua-io , n i eomu puedsn verificarse tantas otras cosas admirabies y inagnificas, que sohre esta fclici- dad n a t w a l , aconipaiiarln ya de l a justieia , se fieqirP-temente en 10s profetas d e Dies. A1 contritrio: si ei perpctun eqninoccicr Yuelve A nuestra tierra, des. terrarids para siempre ;as quat ro estdcioi~es, todo que- (la llano y faciiisiino de cor:oebirse y explicarue. . " .

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7 2 2 S. 3." Lo primero que se conprehende a1 punto en

esta hip6tesi soti 10s anuncios terribles clue para el lid grande del Seaor se ha l l an a'cada paso en lases- critnms. T d o s estos anuncios concuerdan entre si,

concuerdan pel fectamente con (a Izip6tesi daisma. Fara ver estn concordancia , imagindmonos poi- u n mo- metito cine ahora en nuesiros dias sucede la inclination d e l exe de la t ierra , para q ~ e l a eeliptica y la c p i - noccial se wnan entre si y formrn una rnisrna l inea indilitiual : iinagindmonos tarnbien que desde ciei-ta aliura conapeteute y Fegura , observamos con hiaenos telesccpios tcdas las cows particukarrs que sncedcn aqui ahaxo de resultas de la union de estas dr~s li- n e a ~ . En este case, qoe suponemos repentino y violen- to , dchen seguirse naturalrnente todas estas consc- qiiezicias anunciadas en la escritura de la \ erdacl. Pri- inrra : quc nuestra tierra, 6 nuestro gloho, movidn- dose de polo 5 polo, se rnueva realmente de SZI In- gar ; pces esto es lo q u e se lee e n Isaias (6. 13. v. 15.): Siiper lzoc ca>.Iiim turbnbo , e t nzovebitcsr terra de loco suo propter iizdipalionena Domini exerciluuin , et proptcr diem irce furoris Gus.

Segiinda conzeqtlencia : cpe rnovie'ndose la tierra violentnmente de un polo 5 ot1.o , es r rgular pien- sen todos siis habitadores que Io5 cielos , 6 toclos 10s cnerpos celestes, sol Inna , "planetas y esfrellas, sc niuevan con la rnisma violcneia 6 ligesoza en sen- tido contrario. Esta apariencia 6 ilnsian es tan fre- qciente coni0 natural : 10s que navegan con huen viento B vista de alguna t ierra , ,peiiasco 6 nirhe fi- xa, se figuran que su m a t h esta cjuieto , J que 10s otros objetos que t irnen li In ~ i b f n son 10s quc se mileven hacia el rtimho diameisalrnente opuesto. Paes esto es Io que se l e e e n e l t c r t o de S. Pedro tan- tas w c e s citach : advcnjet autena dies Dom;ni z i t fur in quo c e l i magno impelti triinjient. Esto es lo que se 1.e en el Apocalipsis (c. 6. v. 14.): e( celutn re- cessit sicut libel" involultcs.

lercera consey;ieocia : que m o v i h d o s e la tierra violentarnente de t i n polo d otro , es natural se tur- he y ohscnrczca Iiorrihlcmente tgida nriestrn atmds- fera y quc cstn turbacionm. y rnezcla de tnntas par-

. i 7 7

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7 2 3 ticulas hetcrog6neas que nadan en e l la , nos impicla por entonccs e l aspect0 libre de 10s cuerpos celes- tes. N o conlo io 11ncen ahora las nubes , as yuales aunque sean densisirnas sieinpre dexan pasar muclios rayos de luz ; sino de o t ro modo ins6iito 6 infi- nitaiiiente mas horrible , que sin ocultarnos del todo estos cuerpos celestes, nos 10s h a p a p r e c e r ya n e - gros , ya p8lidos , ?a sanguineos , produciendo e n nuestra superficie otra especie de obscuridad muy sernejante li las tiniehlns de Egipto. Ptres csto es lo que se annncia en Isaias ( e . 50. v. 3 . ) : Induana c ~ l o s tenebris , et saccum poizunz operimentrim. eorunz. Esto es lo que se anuncia en Zncarias (c. I$. v. 7.): e t erit dies m a qtm nota est Bonaino : noli dies neque n o x , e t in lernpore vesperi erit lux . Esto es lo que se anuncia en el Evangel io ( L u c . c. 2 1 . v. 2 5 . ) : e t erunt signa in sole , e l luna , e t slellis , e t in terris pressura gurtium. Esto es lo que anuncia en fin el Apocaliysis (c . 6. v. 12.): et ecce ter'rentotus magnus factus e s t , e t sol factus est niger tanquain succus cilicinus , e t luna totu facta est sicut sanguis.

Qunrta conseqiiencia : que rnovie'ndose In t ierra Tiolentainente clc un p010 a otro , todas yirantas co- s~ se ha!lan e n su superficie pierJan su eyuilibrio, el qual perdido caigan unas sohre otras confusa e' irreii iediablenie~te , asi como sitcedi6 en 10s dias de No6. Puss esto e s bo qne se anuncia e n Isaias (c . 30. v. 25.) : irz die iratcrfectionis nmltorzirn , c u m ceciderin.? tilrres. Esto es lo que se anuncia en el Apocalipsis (e. rG. v. 19.): e t civitates gentirtnz ceciderrint ... et ona- nis insula Jugit, et nzori:es noli szint irzvenli.

Quinta conseqtiencia : que inoviCnclose la t ierra de un polo B otro , pierdan tarnbien SLI equilihrio las aguas del mar : cl qual perd ido , se alhoroten, se conturben , se derrarzlcn sobre muchos Iugares de lo que ahora es drida , y espanten con sus braiiiidos horribles aun $ 10s que 5e hallan distantes de sas playas. Prres esto e s lo que se anuncia eALp v xresem, n t e en el Evaugelio (Luc. e . 21.): e t in terris pressza-a gem tiirnz , prm corfusione soizttrrs ?naris et JIuctrwn ares- centibus homiraibus pra titleore , e t expectaticne , qtLE

Pupervenierzt universo orbi. HQ hay que terner pol' esto

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7 2 4 que sac rda en nuestra tierra otro diluvio de agna coma ci de ROE. Para e s t e , como j a dirinios, n o hastd q c e se rompiesen las fuentes del grande abis- mc) , 6 yne las aguas d e l mar Le derramawn sobre la Srida : fue necesaria adcmas de esio una Ilu- , la ' con- t i n u n de quarenta dias y quarenta nocEics : fue ne- cesaiio que se ahriesen las eataratas d e l eielo , y cpe !as aguas superiores basasen pnr 6rden del Om- nipotente , y ayuctasen ti las ivfeerioves A cubr i r cn- terairiente la t ierm ; lo qual D O suceder i otra vez, segun la promesa rxpresa p clnra del rnismo Dios.

Ses ta conseqiieneia : qae conttaibada toda la ai - mdsfera, y mezcl,indose tsntas evlialaciones y vapores, choqorn unas con o t ras , esciten el filaego eldcfrico, y produzcan por consiguiente Tina prcdigiosa multi- tud de rayos , 10s ynales consuman y conviertan en ceniza la trayor parle de 10s hombres, y de h s obras de s n s manos. Plies est0 es lo yae se annncia fre- qkentisimampnte en las escritnras. Esto es lo que se lee en e l salino 1 7 : e t intonuit de cclelo Dominus , et Altissintus dPrZit vocein suam , grando et carlimes ignis: e l niisit sogittas suus , e t dissipavit eos , frilgura multi- plicaoit, et conturbavit eos. Est0 es l o que se lee en e l salrno 96: ignis m a t e ipsunz prececlet, e t iiaj7amavYit in circiiiiu irtimicos ejus ; illnxerunt fulgirra ejtls orbi t e r m , v i & , et coiiimotn est terra. Est0 es lo qae se lee e n e l Evangelio (Jfuk. c. 24,) quando se dice : et ste& cadeizl de cclelo , las q:iales palabras, segain 90 pienso con otvos I I l i l C h ~ s ~ ~ ~ S , no pueden teamer otro verdndero seniido. E n f in: estn misnio es 10 qne se l ee en e! Apocalipsis (capiiulo 6, versiculo 1 5 ~ ) : et slellce de cmlo ceciderunt super terranz , sicut Jiciis mil- tit grosos S L J O S cu7n Li vento magno movetur.

Este fuego qii: se nnunmcia taatas Yeces para el dia gronde y I3nrrible de In venida del Sefior , no puecle ser segrrn las esrritiaras un ~ L W ~ Q unis,emal q ~ ~ e inunde todo noestro g lo l~o , corn0 10 innnclaron las aguas del iiempo de B u g : ni que Io constima y r e d u ~ c a hurnc* y ceniza, romo tantos han imagina- do. Esta idfa poco j r a e f a , y aiun conocidamente falqa, no esir iba sohre otro fuundemento que sobrr el testo del Ap6std S. Pedro ma1 exlminado. A l p n o s au-

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725, tsres, y no pocos, no sc arergiicrizan de citar para esto tres 6 quatro versos de las fdsas sibilas, cmno si esta3 fuesen dignas de alguna estimacion entre 10s cristianos. El texto de S. Pedro aunvue obscuro, dehe explicarse (Segun todas las reglas de la bnena critica, pia y religiosa) por centenares de textos claros de la escritura santa; y no centenares de textos ciaros p o r un texto obscuro. El misuio S. Pcdro en la rnisma epistola (capitula I vorsiculo IS.) hablando de la trans- iiguracion de Cristo, de que 61 inismo fue testigo, dice estas palahras llenas de sinceridad, y de verdad: e l Aanc voceni nos audivinius de cmlo (illatam, cum essemus eunt ipso in monte saneto. Et ltabenius ylirniiorenz pro- phe!icuni sermonem , cui Genejaritis utrendentes quasi lu- c e r n e lucenti in caliginoso loco.. . . hoc prinzirm z'ntelli- genles quod omnis prophetire scriptura? propria interpre- tulione non ,jt. Ndtz enini volnntat,? hunianu allata est aliquando ftrephetia, sed Spiritu Sancto inspirati , lo- suti sunt sancfi Dei lzonzincs.

iCbnio puede sei- un filego universal, que ahra- se y consuma inc1ifereazte:nente todas las cosas de nuestro g1000, y ai glob0 mismo , quando dice la es- critura (Sap. 5 . ) ibunt directe rrnissiones ~ 5 i P g u i . r ~ .... e t ad cerluni locum innsilicnt? iC6ino puedc s e r tin fue- 30 unikersal que ecnsnrrta ihidifrrenlernente todas laa w s a s de naeutro globo, y ai globo misnio , cpando dice iia ewri tnra (Isaias capitulo 34.) que qnedar8n vi- vos # indenines algunos individnos del Iinage humano: q~rornodo si pawcc olivce que renzanserunt , excnlian- tur ex olea , aut racenai cunt fuerit $nits vindemia 7 E5te print0 10 he tratado en otras par'tes. Vdase la adicion yue est6 a' fin de la grimera p a r t e , acioode me rernito, y tanibirn al I'enciineno I , pkha fo 3.

En s u m a el dia del Seiior segun todds las escri- turas , es Gnicnniente conira sus memigos deciara- dos, que en ayueklos tienipos de que hahiarnos serdn 10s mas , 6 casi t o d o s , como quetia notado en t ~ d o e l fen6meno del Antecristo. Esta idea se lialla cons- tanre .y uniformc en todas las (Asciitiwas del antiguo y naevo teetainerilo, ;v yrralyniera que las leyeve con ecte cuiclaelo, lo podrti fhciimcntc rr'parar. Ved aqixi tres G qnatro Icgares de estos, corno yor rnuestra de atros

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726 muchisirnos del todo sernejantes que podkran citarse.

E n Isaias (capitnlo 1 3 , versiculo 9.) se dice : ecce dies Domini veniet crudelis, e t indignafionis p k n u s , et irce , furorisqtce ad ponedam terrana in soliiudinem e t peccatores $us conlerendoq de ea.... et visitabo super orbis m a l a , e t coima iniyios iniquifatena eorunt , e[ quies- cere facianz superbianz i:iideliiint , e t arrogantiarn lo r - tiunz humiliabo. E n Jeremias (capit tilo 30 , versiculo 2 5 . ) se lee : ecce turbo Domini, fiwor egrecliens, pro- cella riiens , in capiie iniyiorunz conquiescel .... in novis- sinto dierunz intelligetis ea. En Nalacliias (capitulo 4.) se dice : ecce enin& dies aeniat succensn quasi cantinus: et erunt onines superbi , e t onines facientes irnpie~atent stzpula : e t injanzmavit eos dies veniens , dicit Bo- ininus exercituim ? quce non clerelinquet eis radicem , e t germen. Por ahieviar : en el lihro de la Sabidnria (capi- tnlo 5 , versiculo 18.) se dice : nccipiet arniafuranz zeZiis illius , et armahit creaturana ad ullionein inimi- corunt... acuet autein duran, iram in lanceani , et pug- naliit curia ill9 orbis terrarun2 contra inseizsabos. Ibunt directe enzissioites fi~lgusiina , et taiiqriant d bene curvato arcu nubiunz exierminabuntitr , e t ad certuna locum in- silient.

Terminado finalmcnte este gran dia (el qual no sabemos qaanto fieiopo durar i ) : passda la horri- ble ternpes~acl: exterininados en clla lodo$ 10s inipios y pyadores : unidas rerfectamente en una misma in- divirlua linea la eciiptica j - el ecpador : sowgacla tocla l a atm6sfeern, aclnrado el a p e , quieta el mar , y con- gregadas todas s u s aguas en el lngar que les fue re entonces seilalado , dehe luego necesariamente apare- cer otra nueva tierra', ofro nuevo cielo, otro nuevo orbe k r r a q u e o , dibersisirno en todo de lo que es a1 prcsente , as i como este presentc apareci6 d i b ersisiino en todo despues de pasado el dilavio de Nod; y todo ello t a n hueno a' lo menos, comg lo fue en su es- tado prirnitivo. Diso B lo rnenos, porcjne me parece siiniameriie verisiinil, que pur respeto y lionor de nna persona de iofinita santiclacl, qual es un hcmbre IXos, se renueve y se rncjore todo en nuestro orhe, da'n- dosrle a' este en lo i-ratnral (asi como se l e ha de dar en lo moral) nn nnevo y sublime grado de perfec-

S. 4."

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727 cion : noms vero cmlos , e t novarn ierrnnt secrindziria proniiAsu ipsius expecfninrcs I in quibus justitia habitat.. . e t dixit qui sedebat in trono: ecce nova f a c i o onziziu- (Apoc. c. 2 1 . ) ) con todo lo yual concuerda el ApGstol quando dice (Ad Eph. c. I . v. 9.): secundum berzepln- ciiranz e j i ~ s : quod proposuit in eo , in disyeizsatione ple- tLitudiiLis temporurn instnurare onrnia in Christo.

Y veis aqui conc lu i t l~ el siglo presente, y Ilega- do 6 si1 fin e l dia de 10s hoinbie.;. Veis aqui la con- sumacion y fin del siglo, de que se Iiabla tanto en las escii taras , esyec izhec te en 10s evangelios. Veis a r p i ainanecido el dia claro del §faor , y el princi- pi0 del S i g l O venturo , del yual se habla mucho mas y con igual 6 mayor claridad. Aqui eiiipieza ya 6 ma- nifestarbe en nuestra t ierra aquel reyno de Dios, que tantas veces p e d i n m que velaga : adveiiiat regnrinz tcrunz : aqui empieza la revelacion 6 rnsnil'estacioo de Jesucris to , y e l clia de SII virtucl en 10s resplando- res de 10s santos : ayr-ti einpieza la' revelacion de 10s hijos de Bios , yr!e no son otros sin0 10s santos qne vienen COB Cristo resncitados : a q u i enipiezan 10s mil alios de §. J u a n , e a criyo principio ciebe soceder In prisioii del diablo , con todas las circunstancias que se k e n expresns en todo el capitulo 20 del Apoca- lipsis: a q u i ahierto :-a el tcstarnento nuevo del Pa- dre, en qne constituye a i hijo eo quanto hombre h e sedcnt urziversorunt , evayuado todo priricipado . p o t ~ s - tad y v i r tud , y sujetas ri este hombre Dios todas las c o s a s , einpieza 6 reynar verdaderamente. y 6 expr- citar s u virtiid, su jnicio y su potestad absoluta, Ile- na de snhiduria , de bondad y eyuirlaci: el factus est principatus super 1~ritizeri~rn e j u s , et vocabitirr nonzen ejus adniirabilis , cozsiliarius Beus , forlis , Pater futiiri soxicli , Fri?zcrps pacis. (Isai. e. 9.) Aqui emple- l a 6 manifestnrse inas de ccrca el mistprio grandr e' incoinpr.ebensibis; de habcrse Lecho hornhre el mis- mo verho de Dios , e[ rnisino unigc'nito de Dios, e l niiarrio Dios. Aqui en sumn se enrpima a' ver y cono- cer C Q ~ mayor ctaritlaci el fin y tCrmiiio adonde se en- dereaabn ownis visio e t prophetia.

L l e n n cle estas ideas (y sin c?adcs tirinpo 6 que se eiapareri y se confundan con otras) andad ahora

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728 ti l e e r la hiblia sagrada: k e d principahnente 10s profr tas ; y me atrcvo B asegua-ar qric todo lo enten- dereis seguidamente sin dificu\tarl. Eos salmos 7 1 y 92 especialmente 10s leerris ? a con intciisencia g coil g a s t o ; ri vos serg facilisiino leerlo todq y exnmiitasio todo d vuestra satisfnccioii. Por este niedio me p o m e - t o coiiseguis lo que no puedo esperar por solas mis palabras y refiexiones.

Corno esta nueva tierra .y nuevos cielos li que ya hemos Ilegado , coinprehentlan tamhien nuevos suee- sos 6 nnekos misterios proporcioandos d un siglo del todo nucva , no nos eci posibie considerarlos todos en u n mismo lugar. Deberemos p e s ccnsiderar se- paradamente sin0 todos estos nue7os misterios , ri lo M ~ I I O S algunos de 10s p r inc ip l e s 'I de doiide se pueden ioferir legitimarnente otros infinitos.

ADJCJON.

Annyue clixe a1 principio del pdrrafo 4 , q u e es incierto qunnto tiernpo durar8 el dia granJe y hop- rible d e la veriida d e l Sefinr , 6 lo que e s lo mismo, Ja conmoc~on, contnrhacion -y agitacinn de nnestro gio- b o ; mas t iab iendo ahora icido con mayor reftesion el capitulo 1 2 del profeta Daniel , me parece cierio, que no puede d u r m nienos que e l espacio de yna- ren ta y cinco dias naturales. Qualqriicra que lee es- t e capitulo conoce a1 punto , sin pcder duddrlo,. que todo es una pi-oFecia cndercznda B 10s iiltirnos tiem- p'os hien inmediatos 6 la venida del Seiior , pties e n Ci se anuncian finicsmrnte P S ~ Q S dos puntos capita- I c s : I ." la vocacion p conversion de 10s judios: 2..

. la tentacion y trihnlacion anticristiana en t re las gen. tes . De esta dice el profc ja , 6 el ringcl que hnhla con 61, que durarn' en toda su fuerza mil doscientos noventa & a s , que hacen quarenta y €res rneses: et ri triizpore cum ablnlran? fuerit jcge sacr.z)5ciiina, et po- sits fuerit abominatio in desolationem, dirs mille du- crizli nonagintc-i. Eos quales dias cancluidos (sin d u t k en e1 prirrcipio del dia del Seiiar) anade estns pala- bras , yxe eiernpre se ban mirado wino un rniprna in- disoluble : Beatns qui expectat, etperoenit usqw nd dies

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729 iiaille trecentos tr’ginta qLtinqzre : la dXere1lcia entre cs- to s dos nfirneros es puntualrnente la de qnarenta y cinco.

2 Por qnd praes ser6 dichoso el yne esperare 6 pcr- mancciere vivo eatos quarenta y cinco dins? Porqrie serd uno de 10s pocos ri quienes no tocarri In espada de (?as f i los , que t rne ea su l n c a el Rey de 10s reyrs . Porquc sera uno de !os pocos racimos que rehiartin intactos en la grande vifia, cttm ftceritcfinita vindenzitc: yarque sera‘ uno de 10s pocos que no se 1i:ihrBn h a - Iiado dignos de la ira del Dios ornnipotenle, ni de l a ira del Cordero : poryue sera‘ uno de 1 0 s pocos, que hahiemlo visto esta tierra y cielos presenies, me- recerd ver tambicn cl cielo nuevo y nueva tierra, kpe secundum pronzissa +sitis expectnnms. Estn in(: pnrece :i m i la verdadera inteligencia y solucion de este enig.- ma. Cnmido B todos 10s inteiigenies d qt ie lo essrnl- neii con mayor atencion , cousidrrando como cde1.e se r , totlo su context0 ciescle e i principio hasta fin del capitalo.

Em este e x h e n es muy natural , que cpaicpicra repnre en otra especie de enigma, que annqne acci- dental a1 purlto preeenie , potli~i causar aigun emba- razo; es a’ s abe r , q u e et profeta Daniel liace dnrar la tribulncion anticrisfiana mil tloscientos noventa dias, 6 quarenta y t res rneses , quando S. Jiian en su fipo- calipsis solo le da de durncion mil closcientos seseo- t a dias , esto es , treinta &as menos. Esta dificulfad me tnvo en otros tiempos no poco ernharazado , IMS- ta que me acord6 dc a q u ~ i l n s pahhras de cristo ( i k l C 6 f .

c. 24. v . 22.) : et nisi brcviati fuissent dies illi , non Jieret snlvn oinnis caro ; sed propter electos breviabunttir dies illi. Corn0 S. Juan escrihi6 despues de esta profecia y promesa de Cristo , pone- ya abreviado el tiempo dr esta grzn fribnlacion, y a s i yuita treinta dias a1 t iempo que debia durar segnn la profecia de Daniel. E n i ina pestilencia 6 incendio t an grancle p tan nni- versa1 , os pnrece peqrrefia misericordia apagar P I fue- go treinta dias antes de lo que debia dwar , para que 110 perczca toda carnc?

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CAPITULO VI. 730

La ciudad santa y nueva de Jerirsalen , que baxa del cielo.

H a h i e n d o perecido e n la veoidn del Seiior la tierra y cieios , 4ui nunc $U72t: hablentlo entrado en s u lugar secundum pronzissa ipsius otsa nueva tierro y nuevos cielos, otro glob0 terraqiieo d e l todo n n ~ v o ; l o primer0 que se yresenta 5 nuestra consideraciLn es e l Rey niismo q u e acaba de-liegar in terranz nos- trum , de regione Znnginqua , accept0 regno : que acaha de llegar in gloria Patris sui cum angelis suis (Mat. 16. v. 27.) in sanctis millibus suis (Epist. Jncl.) in splen- doribus stlactorum (Salnt. I 09.) cum senioribus populi s u i , e t principibus ejus (Isai. c. 3. 'u. 14.) glorijca. ri in sands suis (ad Thehesal. a. c. I . v . IO. ) . Todo lo qna l , como deciar6 e l rnismo Sei ior , se entiende de aqnellos solos santos , qui digni habebuntur smxdo illo, et resurrecticne ex naortuis (Liic. e. 20. w. 35.1, 10s yua- les tudos deheo componer la corte 6 el reyno activo drl grancle y sumo Rep , que como tal habet in veslinien- to , el in f intore scriptum : .Rex regunz , et Dominus do- m:'rtantium. Esta corte del hijo na tura l de Dios, de l hijo- de l homhre , del liijo de la Virgen , del hijo d e David, del llijo d e A!)rahan 6 del linmbre Dios, que ssgun las escriforas (!el nuevo y antiguo testa- mento drhe haxar algun dia con e l Rey misino del cielo i i nuestra t ierra , ut in hnbitet gloria its terra noslra, es lo $ue llama e l Ap6stol S. Juan la ciu- dad santa p nueva de Jerusalen que baxa del cie- l o , 6 con otro nombre sponsa , et usor agni.

Es verriad clue este gran S U C ~ S O lo pone el ama- do disciputo en el capitulo ar , luego despues gue acaba de lrahlar en el capitado 20 de la resnrreccion 7 joicio unitersal. ESta circiingtancia accidental yne

priinera vis ta parecc favorab:e a i sistema v u ~ g ~ i * ~ es evidentpmente la q ~ e h a cwasionado el qrande ecpivoco de que lnego Iiablaremos. Mas 1qLit: iinpor- ta es to? S. Juan observn, y signe en este ?ngar e l inisnro ordrn ;r rndtndo que ha ollservado eonstante- mente en su profecia ; es 6 sabe r , quando Jos 6

S . I.'

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I

tres 6 mas misterios coi~curreii PI? n n mismo tiempo, 10s divide 6 sepnra el uno del otro , Labla del n n o coin0 si no liubiese otro, y este Io lleva hasta sn fin. Concluiclo este vnelve qua t ro pasos atras , y toinando a1 otro lo lleva del n ~ i s m o modo bar ta su f in , et sic de reliqziis. i Y qu& Buen liistoriador $10 ohserva este mismo orden? Es te orden y 1I1&OdO del Apocalipsis desde el principio hasta el f in es f d ~ i t de ohservar , y sin este anteceilenie no concibo C61710 peds entenderse bien este lihro divino , qne com- prebenrle en tan poco volnmen tantos y tan gran- des misierios , pel-tenecientes todos , & In menos des- de el capitulo 4 , 6 la revelacion de Jesucristo 6 10 que es lo inisrno , A su seguiida venida en gZoria y m a g e s tad.

No espereis , ami50 Gristdfiio , cpe yo os diga aqui cmas grandes y extraoldinarias , nuevas y nnn- ea oidas sobre la gloria interior de esta nueva cor- t e , 6 de esta santa y nueva Jerusalen que debe ha- xar del cieko algan dia d nuestra t ierra : ni tainpoco sohre lo q u e pe r t e rece A 10 exterior d e ella. Todns estas cosas soil mny superiores 6 mi compreliension, y . y a el Aptisto1 de& de el las : qzeod oculus m n 3;- d i t , nec auris nuciivit , lzec in cor Iionainis ascerzdit, quLe, preparavit Deus ii's, qui diligunt iltunz. ( I . ad Co- rint. c. a . v. g.) Asi no pienso detenerme en estas cosas que no entiendo ~ ni pertenecen ti mi asunto prinripal.

Convengo de huena fe' , con todos 10s inte'rpretes del Apocalipsis , en clue este capitulo 2 1 est6 l ieao de mettiforas 6 semejanzas , asi como lo estti tcx1.1 el libro ; mas estas metiforas 6 semejanzas isigui- Gcan algo , 6 nada? isignifican alguna cosa particri- l a r , real y verdadera , 6 estrin vacias absolutamente de tcda signiiicacion? Si pues algo significan real y Yerdadel.0 , que' cosa sers esta? i s e r a algana pura a!egoria , 6 sera' alguna coca visible y corporal? Y esta cosa , sea q r d f i l e r e , i ha baxado ya del cielo A la t ierra? Si n o h a baxado hasta abora , como pa- r ece evidente , ihaxarA real y verdaderaniente algun d i a ? iEsIai-A con Ics homhi-es vivos y viadares , y habitarri con ellos en nuestra t ierra? Despues que

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1 7 3 2 Baxe , i antlarcin todas las gentes quae reliquae’fuerini en todo noestro o r b e , no ya en tiniebtas , sino 4 In loz y cia:.ic!acl ( 6 10 yrae es lo misrno) a i gohier- no y . clireccion de esta misnta cindad ? Eos reyps, principes , 6 caberas de totias las tribus y traciones q u e relique fuei’inl in lo10 orbe lerraruriz ,, lie+ariEn d evviar8n totla su gloria y hOlIQr B e s ~ a n&ma ciudad que ha baxado del cielo 5 nuestra t i e r r a?

Pr.es , arnigo, todo esto be dice y afirrna clara J

expre.amcnte en cste l u g a r del Apocalipsis : todo esto se dice y afirrna e n otros ninclilsiinos lugares de 10s profc’as y salmos , de esta misnia ciadad san ta y nue- va de Jeiwsalen , quce descendit de c e l o Ci Deo meo, ri quien sin duda se endeiezan ayuellas paiabras del salrno 86 : gloriosa dicta sunt de te , civitas Dei, y aque- l l n s otras con qne concluye el mismo salrno : sicrit letantiurn onzniunz habifatio esl in t e .

S. 2.’ Los intdrpretes del Apocalipsis siguiendo sn sisterna general , han trabajado infinito en acclmo- d a r tcdas estas C O S ~ S , y explicarlas de modo ,clue 110

les per-judiqnen , atrihuyendo parte de ellas 5 la iglesia triunfante , 6 ti aquella qua: sursu~n est Jeru- salem, segun la expresion Cap1 Ap6stol ( a d Gnlat. c. 4. v. 26.1, y parte a’ la militante : fuera de ayuelin otra parte que se ornite y desprecia , poryue 110 e8 posibie hacerla sercir , ni d la una ni A ia otra . Dican en general que la cirrd-id santa de que varnns hablan- d o , n o es otra cosa y:ac la patria celestial, 6 la glo- ria y feiicidad eterna de 10s santos. Nasta aqii i vamos conforrnes; mas la clifieultdd est& en explicar COKIO

esta ciiidnd , despues de eclificada de vivis e t electis Eapidihs en el c i e lo , haxa a1 globo nuestro para asentarbe en 61 , firmarse j r estabiecarse scilidamente: y est0 e.m~ltatione universe terra?. (Salin. 4.7.)

Sohre este punt3 capital (Cnera del q u a l , a ~ i n - que se trahaje mncho , nads se h a c e ) confieso in- genraernente que liailo ca;i naila en todos qnnntos Iiltdrpretes he Ieido del Apocalipsis. Algunos dicen q i i e Jicha ciudacl , id e s t , pairia celestis et glqrin snmclgrum, se le niosti.6 ii ti. J u a n como en aspect0 1 de b a i r a r del cielo , para que la viese m e j o r , p pu- diasa Sksc~ihrir ‘sca &-ancleza, s n estructura , su fe-

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733 licidacl y SIoria Src. Mas esta c i adad , que se le nic~s-

'tr6 A S. Juan ccmo en acto de bsxar del cielo, 1 l)a- x a r j algun dia real y vcriladeramente A nuestra tier- ra ? A eato responden otros ylae si. Mas cuanc!o, y cbmo? Waxara , d icen , la ciudad del cielo i nuestia lierra el dia del juicio universal, y.por pacas boras. Qoieren decir : que el dio del juicio y resnrreccion universal , t t das Ias atmas de 10s justos ,endrin cc.n Cristo 6 nuestra t ierra , y tomando sus prcpios cuer- pop, fortnarhn en el ayre encirna del valie de Jo- saiat una especie de ciudad , ad moduin amphiteatri, el yrral anfii-eairo ad modma civilatis se voiverri a i cieio el mismo clia , antes de anochecer.

i N o es esta , arnigo mio , l a idea ger~eral y casi universalmerite recibida? Mas esta idea general no es evidzn!emente falsa? i N o es inacordabte con la profecia misrna, con todo su contexto, y con todas SUS eypresas paiahras ? Ved aqni algunas obserracio- nes que me ocarren.

Dice S. J i ian , que la ciudad santa y nueva . de Jernsalen, de que habla en toclo el capitdo 21, I n vi6 baxar A nriectra tierra del cielo ri Deo , en el mismo tiempo en que vi6 una nueva t ierra y un nuevo cielo : e t vi& ccelitm novum e t t o Lrra.72 nowana: primun: enini c ~ h n , e l prima terra ab%? , et mare j am ncn erb : e t ego Jonnnes vi& ciwitatern sanclam Jerrislclem novam desccndentern de c d o d Deo. Segnn es to , es clnro que llegnndo el tienipo feliz en que se crrinplxn ias promesas de Dios , de urra mieva tier- m y un niievo cielo ( I n qual secuirdim proinissa ip- siris expeclamrcs) se deber i uer en nuestra tierra l a corte del nuevo R e p , 6 la ciudad santa y nueva de Jcrusalen , que baxo del cielo 5 nuestra tierra. En esie snpnesto innegable volved l e e r , car0 Csietj- fila, rmsstro c a p i t d o 4- En 61 hailareis , sin poiier racionalmente pegarlo , clue las promesas de Dios de nrieva tierra y nuevo c i e lo , no son ni pueden ser para el clia de la resnrreccion y juicio nniversai. ;For r p d ? Poiclue estas promesas q u e solarnente constan del capitnio 65 de I 4 a s , versiculo 1 7 , hsblan paxa e5te inisrnn ticmpo de generscion y corrupcion : de vicla y ninerte : de justicia y pecado : de vidas lar-

/

I . ~

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734 gas B cortafi: de edification de cams : de ;le &boles y viiias : de $,Lieyes, de leones , pientes que vivirjn arnigabiemente corniendo inisma mew , y suslenthndose de unas misrnas vian- das k c . Todo lo qual no tiene lugar ni puede te- nerlo e n el dizt de la resurreccion y juicio univer- sal , oi macho rneeos despues de esie dia tiltirno: de donde se infiere , clue si la tierra nueva y nuevo cielo no se anuncia cn la eseritura santa para cles- pncs de la resarrcccion y juicio universal , tampo- co pucde anunciarse para esta tiltinla +oca la ciu- c1.d $anta y nueva de Jertisalen , que vcrificado el cieio nuevo y t ierra nueva &!,e baxar a1 punto del cicio 5 nnestra tierra.

Et anibulalunt gentes in lunzine ejiis : e t reges terra aflerent glosiam suam, et honorena in illam. Bs- tas palabras del ve r s i cdo 2.4 no solamente aludea, &no que son las iuisrnas que leernos en Isaias capi- tu10 60 : Surge illuntinare Jeer.usalena , ,quia venit lis- men turrin , et gloria Domini supcr t e orta est, quia ecce tenebra! operienl terrarn et caligo popirlos : super t e au- ten1 orietur Dominus, et gloria ejus ita te videbitur : et ainbulnbunt gentes in luinirie tuo , et reges in splendore orfzss tui. Lo inisrno en suhsrancia se dice e n Jere- mias ( c . 3. v. 1.7.) : I n tempore illo vocaburit Jerusa- lem soiium Bonzini : et congregabvnJur ad eana onines genies in nomine Doniini in JerusaZcna , et non arnbu- labunt post pravitaienz cordis sui pessimi. Eo inismo se lee en e! salmo 71 : Domtnabitur ~2 n2ari usque ad mare , et CZ $umine usque ad lernzinos orbis terrarunt.... reges Tharsis et insuln: munera qflhrent : reges Arabisnz, et Saba dona adducent : e t adorabunt eunz omizes re- p s terrce, onincs gentes servient ci. Lo inisrno en Da- niel , capitulo y. Lo mismo en Zacarias , ctipit~110 14. 'd generalmente halllando , la niisrna idea avhstancial e n todos 10s protetas, y en la mitad de 10s salmos quando rnenos. Decidme ahora Crist6iilo rnio, i e n el juicio universal , 6 despues del juicio universal, all6 e n vuestro cielo empireo, podrAn vesifiearse 6 t ene r s!gun !ugar todas estas coca?? Se' de cierto que ayui recurcis otra vez ri la igiesia presente ; mas en acpel scntido alegcirico , arbitsario , acomodaticio,

2 .a

1 , -

plantio de ser- en una

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735 Y por eso Ievisiino super qzm jam nauseat anrnia nostra.

3.n I n medio p!u/ee ejus , e t ex iitraqire purte j?u- minis , lignum vitce offerens frririus duodecini, per men- ses singulos reddens jructuni siium , e t jolia ligni ad sa- nitcitein gentium. (c. 22. v. 2.)

Lo mismo se lee en E7eyaiel (cap. 47. v. 12.) e t folia ejus in rnedicinam. En e l juicio universal , ci decpues del juicio y resurreccion universal , all& en e1 cieio , i qu8 USQ pueden ya t e o ~ r estas hojas medicinales ad sctniiatenz gentium ? Las diaIersas expli- citcitrnes 6 acornodaeiones iogeniosas , que han procn- rado da r 6 todas estas cosas, podrian tal vez delei- t a r ii yuien gustase de conceptos predicables ; mas pa- rece iinposihfe que puedan satisfacer $ yuien busca la verddd.

De estas pocas reflextones qiie acahamos de hacer, parece claro (y este es e1 punto capital , del qual de- p e d e la inteligeneia de toda esta profecia) que la ciudarl santa 2e que hablamos , debe baxar algnn dia. real y verdndrramente del cielo B ntiestra t ierra : n o cierto e l dia del jnicio -y resurreccion universal , si- no el dia de la \en ida del Sefior in sanctis ntillibus suis. Debe establecerse , y como Sandarse sijliriainen- te , exrrttafione universe ttrrce, coino corte y soli0 del grande y sumo Rep, quia civitas est naugni Regis. (Mat. c . 5. v . 5 5 . ) EL misrno Sefior en el capiktrto 3 del Apo- calipsis, mucho antes q u e S. Juan viese baxar del cielo esta ciiidad santa, dice estas palnhras, .que afir- man 6 suponen el rnisino punto capital : qis vicerit .... stribanz super ewn nomen Dei nzei, e t nomen cic9itaris Dei mei nom? Jerusalem, que descendit de cmto d De0 meo.

Venida esta celestial JerusaIen a‘ nuestra t ierra, erit Domino regnimna (Abd. v . uli.) eriL Don.’ ?rnzis r ex su-. per oiniienz terram. (Zach. c . 14. v. 9.) In die illa erit Dominus i~nr i s , et ei it nomen ejus un:~ni. [ibidem). E n - tonces , dice David, adorabimt in conspertti ejus unih versce j2iiniLie gentium, quia Domini es t regnrim , et ip” se doiniizabijur gentium. Entonces se verificarn‘ 10 q u e se dice ell e l sslnlo 95: Conzmovedtiw d f a c i e e jus ttniversa terra dicite in gentibus quia Donzilrus segna-

.

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li 36 1 .- ~it. Efenint cormxit orbem t e r m pi iton conzrnooebitur,

judicahit poprilos in qu i la t c . Yo no p w d o n t g a r , cntes ccsSeso sencilla-

niente , que ri las pregunias que sobre csta sania ciu- clad se mc podrdrt liacer , no soy capaz de responder. SB inny hien que F ~ O es lo misano p ~ i e r prrbar con las escritnras la salsztancia de aigun &ccso parlicu- lar clue ellas anuncian , clue poder cxpiicar el mcdo coin0 serS este suceso partictihi., y Las circunstan- cias yne deberci:i acoixpaiiarle. Si csie modo de ser no se halla en las escrltoras, 6 porclue Dios 110 yui- so r e i e l a r lo , 6 porqne e n el e shdo preseiate no so- mos capaces de en tender lo , ic6mo io podrcmos saber? Podreinos quando inas ihacer sobre esto algunas con- ge tmas , y si ni aun estas nos satisl'acen , cleberemos co:,formariios religiosameiite con 10s llimites qne Dios 'ha puesto A nuestra razon. SerA pues iinn temeridad negarse a' reconocer la suhslancia dc una eosa? po r soia la razon , de cpe no puede conccbirse c6mo s e d

P o r esta misma razon podria yo concluir, que Je- sncristo despnes de resucitado no estuvo aqu i en nuestra t ierra quarenta dias , arinqrie lo &$a la. es- critura. t Por que ? Borgue no se' , n i ~ O K Z C I I B O cdmo estuvo , ni Jonde ectnvo. No sr; n i concibo qnC liizo , ni en yid se ocnpd todo este tiempo fnera de 10s pocos instantes en clue se dex6 ver de sus discipulor. No se' si es tuvo vestido 6 deqnudo. No se' ccimo entr6 en el cenriculo y'anuis cIausis. N u s6 cbmo estahan ni quC hacian 10s innchos santos que resacitaron con 61. No se.... s6 solaine!i:e yne as i Cristo como sus santos estiavieron en nuesira t k r r a quarenta dias , de on modo digno de! estado en que ya ?e hallaban , esto es , J e cuerpos gioriocos , L? de personas resuci!adas y Bienaventuradas. Si este modo n o lo concibo con ideas claras ni por e m qcedo libre para negar el hecho. E n lugar r k ne- gar10 iazfiero legitimamante , p concluyo seligiosa- rnenfe , qiic en el estado presen!e no sop capaz de comprehender estas C O S ~ S ni Dioq m r manda que las compreiienda , sino clue las crra. hpliyuese al-uora esta s e m ~ j a i v a a1 asunto que Ira'plmos.

Yo cicrro a p i todo este ~ L I R ~ O , porque me re-

9'. 5."

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737 conomo incspnz de dccir mas sobre d. Me parece que oigo aqk-elln 6i t ; ina seatencia que se ie iotim6 A Daniel , qrando p-cguntcj : Dontine nti quid erit post J I R C ! ( y . 1 2 . v. 8.) La respuesia frte esta: vude Daniel qiiia c!nrrLc m n t signntiyiie serniones usque ad prc$railunz tempus. El. que no contento con esto, qnisiere todavia nias noticias , lea atentamente y re- flextone sobre esta hltima profecia conienida cn 10s dos illtirnos capitulos del Apocalipsis , con ios qun- les se concluyen todas las eacrituras caobnicas p des- pues de las qoales no teneinos otra que sea digna de fe’ divina.

CAPITPTLO VII.

Se respoizde d nlgunas qiiestioneo.

Clerrado ya e*ste pusto y con F I a lp inns cosas qriw non Iicet honziizi loqiii dehemos no obstante respou- der ti aigunas qgestiones, caya respuesta se nos pide por modo de mer3 congetura.

Esta ciuclad que kia de baxar del cielo a‘ nues- t ra t i ca -a , iserri una cindad material con toda la es- troctnra jt dimensiones que se iecn expresas en la proi’ccia? Se responde que s i ; ni hay necesldnd ni raion algnna que nos ob!igue r; alegoriiarla ni B es - piri! ualizarkt. L a figura cjuadrada it cdbica , y las tres diinensiones geoni6tricas de longi tud latitud y pro- frandidacl , no competen ciertamen!e 6 cdsas puraniente- erpirituales, sirio & C O S ~ S nialer.ia!es y coipitreas. Esta santn ciuciarl es sin dnda para haljitacion no cle es- piritas puros, sitlo de penonas compuestns de es- piritn p cuerpo esto es ? de 10s millares de santos que v i c n e n eon Cristo pa resucitados. Si estos han de Fer mnteriales y corpbreos, i p o r yuC n o l o w1.8 tambien su Iiabilacion? rnuchih;rnes autores 6ra.r es siea- ten y afirrnan 10 iriisnio que y o 1 con soia la clifereo- cia acc id~n ta l , di> q u e e,ita ciradad,lnnierial no la c p i e d reti e n rmectra tierra donde ia pone la escritura, sino a119 el) un c ; e h s6lido c p c se h a n iriiaginacio rnwy s1.2perior & tocltr el uoiverso. V A , q si en es t e cieln ima- ginado 110 reprigna la ciudad material con toda su es-

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738 t r n c t c ~ ~ a y diimensiones , i po r que' ba d e i ' e p p i * en tin sitio no imaginado, sino real y verdadero ~7 C O -

nocido d e todos! Si se adrnite en tin l ~ g a r incierto dondr: 110 la panc In escritrtra , poi- yu6 no J I O ~ I ~ I ~ I ~ S

nosotros admitiria e n u d lugar cierto p deLerinin;icio, tlonde La escritura la colcca?

E n cas0 que se ncimita r n nuestra tierra esla santa ciudacl, isera' reaimente tdn granile en si ts ties dimensiones conio pnrece que la desrribe S. J u a n ? Este le cla asi en latitiid corn0 e n longitnd doce mil estadios , de 10s c p a l e s entran ocbo en cada niiila ro- mana , pol- consignieate In exteneicn cle la citti:ad por cnda u n o de s m quatro lados clche ser de mil qtiinicn- t a s niiilas, y si su altura es i g u d d SII longitnc? y lati tud, corxio parece q u e lo da ;i entender por aclne- l las paiabras (versiculo 16.) e t Zongftudo e t Zatilzdo, e t aILiludo P3pnZia surzt , sale una ci~rdacl de figtila cir- bica, de una enorrne extension en 1ongE:ncl y la i i iut l , ~r de u n a aktura tan elevada, que pasa 10s limites de la atm6si'eia d e nuestro giobo.

E n esta spgundn qiiestion tenemos dos cosas que declarar: pr imera , la longi tud y latitud de In ciuclad: segiinda, su al tura y eievacion. 'Focaate a' lo pri- mero, i mi me p r e c e por el mismo texto , que 10s docc niil estadios n o deben e n k n d e r s e seguidos e n l inea recta , sino yuadrados: e t civitas in qitndro yo- sita e s t ; e t Zorzgido ejus tanta est quanta e l latirrrdo, e t ntensus est civitnienz de nrrirzdinc arirea per slndiii duoduina millin. No dice qne inidi6 per. stndin duo- decinh niillia la longitud ni la latitiid. de la ciudad, sin0 la ciudC7d mismn : por doode podemos sospechnr que 10s doce mil estaclios cneti sobre toda In ciudad, no sobre coda u n o de SLW iados. En esta suposicion no desprcciable , la ciudatl hoi?a en'iera tenclrd clcce niil estadios quacirados, 6 mil y cpinirntas millas q u a - dradas, que corresponde $ cada 11110 de s i i s laclos i rece millas- y poco mas d e media: extension no t an ex- t r ao rd ina r i a , que no la hayan teniclo otras ciitdadcs como Niiiive , Bahilonia, Menfis , Pecpia k c . To- cantc ':{ lo sdgnndo decimos 6 sospecharnos lo misiiio zi proporcion. El t ex to n o dice clue la cinrlad y s u s edificios srr ih tan altos quanta F S la Iongitnd 6 la-

2.a

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739 titud de la niismn cittdad : solo &ice silnplementc inn- gi tudo, e t lntitudo, e t altitrrdo ejus aqualia sririt: modo cle habiar q u e adinite bicn estos tlns senlidos. Pri- rne ro , la a l t u t a de la ciudad ti c k sus ediCcios s c i i tantn , quanta e s su longitud y la t i tud , y en este sen- t ido hien inverisirnil, la ciudaid no serA pa yuatlrada sino cdhica. Segundo la l o n p i t u d , latitud y a l t u r a scrtin iguales en si mismas : de modo q u e asi conio la ciirdad miracia poi* su longittic1 p fati t i id, muestra un mismo aspecto igual y uniforiiie , asi l o muestra niirada por su altura pues sus edificios son todos iguales y nniformes : ninguno ma$ alto que o t ro , uin- guno mas lieriraoso ni mas rico yoe oiro , nin- gnno mas anclio ni mas largo que ctro , Zongitudp,, et Entituclo , e t ailitodo i~qiealia a n t . Estc segundo sen- tido me parece el mas natural y bsstante conforme con e l teito.

3.' Las doce pnertas de esta Ciudad siempre ahier- t a s , el nombre inscripto en ellas de las dbce tribus de Iwael , y 10s doce Anseles yuc est$, en ellas, iyud significa? Para saber Io que todo esto significa, 1,xsta conocer d estos Angcles qiic estn'n en las priertas, cnda uno en !a suya. Parece claro que no significan doce guardias dc la cir:dad para iinpetlir cl paso A qual- ciciera viador que cp'isiere an t r a r , pries para esto era iacil cerrar la cntrada y las puertas, 6 murarlas &el todo. Pdrece d e l misino modo claro , que estos d rce Avigrles son m i y semejantes d aquellos siete de Ias siete igie5ias con quicnes se ba l~ la en el capitulo 2 y 3 del mismo Apocalipsis. De manera que asi como ayEielfos siefe ringeles no significan otra cosa mani- ficstarnen!e que el sac t i docio cristiano , 6 la iglesia aciiva preseirie en zieie 6 machos estados diversi- sirnos que h a tr,niclo hasta e l dirr de hoy , asi 10s doce $nSe!es de las doce puwtas de la sarita y nueva Je- rusolen, que desceizdit de e e l 0 ci Deo m e o , no sig- nifican otra cosa que ei juicio de Cristo 6 SLI reyno activo ; es decir , doc7 jiieces silpremos , v n o en c d a pverta , en ynienes clebe tesidir todo el joicio a n a - riado del rnisniv Crisio en quanto sumo Bey , y sruno Sacrrdote.

Madie ignora que el jdicio antiguamente no esta-

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740 deatro de las C i tdde .8 , sin0 en sus pnertas: est0

es obvi0 en la Iiisioria sagrada y tamhien en In profana atrtigva. Tampoco es de i w o r a r aquclla cd- ~ e b r e y m a p i f i c a prokccia dei h i j ~ tie ius ;i suq dote Ap&.to!cs : amen dico vobis p o d v o s qui scLnti estis rize , in regeneratione ... . Sedebilis super scdes dim- decim judicuntcs duodecim tribus Israel ies dice por S , M a k o , cepituio 1 9 , versicalo 28. Y por S. Lrr- c a s , capitulo 22 , versieulo 28, les dice con mayor espresioJ.1 y clariclad : wos auleni estis , qui permnn- sistis nzecuaz in tentahnibus nzeis : el ego diapono vobis, sfcut disposuit mihi Pnter nzeus regniam , ut eda/is e t bibatis super iwrnsum nieana in regno naeo , e t scdealis slLper throno%s judicnntes duodecirn ti ibus Psrael. Asi corn0 pol- estas 6ltimas palabras et sedealis super rhronos judicnntes drmdecint tribus Israel , conceden todos que se h a n de verificar no ail6 e n el c ic io , sino a q u i en nnestrn t ierra asi las yae inmediatameate p w - cetIen deher8: verificarse del nnismo modo en nues- t i a t ierra , 110 e n el cielo ; p e s las tinas y las okras componen m a rnisma C l h 1 1 5 L l h seqaicla , sencilla 1- Clara. De estos troaios hahin rnanifiestamerite S. ~ c n n quando dice ,, luego despues de la veriida de Cris- to y prision del diablo : e t vidi sedes , et sedermt super e m , et jicdicircm datum est illis. ( A p o c . e. 20.

v. 4.) Parece tambien claro qae Jas doce tribus de Israel

ga congregadas en aqnel los tiprnpos in iniserntioiiibiis mzagnis , tcndrtin facia acceso hasta las puertns de la santa y celestial Jerusalen , pues que habrri in porris angelos duodecim et nomina znscriptn que sunt nomina duodecint tribuunz jl'liornnz. Israel. Este acccso ser,i s i l l duda n 6 para h o n r a r y respetar ri sus respectivos princ;pes , sino para consultarlos e n qualyhiera dut la , -y para recibir poi' su incclio las 6rdenes del sumo Bey, y comunicnrlas ri toda la tierra. Paes entonces, como se lee en Isaias y Miqueas: de Sioiz exibit lex, et verSun? Domini de Jerusalem.

iiicio de 10s doc? Ap6stoles de Cristo so-.

t o d n s 10s intP'rpretes : ims leidos sin preocupacion lea dos lugares del evangelio que acaho de ci tar , pa-

? :

hre I n s B oce trihiis de Jacob se halla obscurisimo en

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7431 rece claro 6 innegable que 10s doce Apcistoles de Cristo es t in destinados d Ler IOS principes 6 10s jne- ces inmediaios sobre Jas doce trihus de Israel I cncla itno sobie ia que le rerd seiiaiada; ni es creible ni a m sufi-iIi?e ci mi parecer , que una promesa tan gsan- de y tan expresa del hijo de Dios, beclia nominada- mente ti sus docr Ap6stoles se reduzca finalmiente & lo que se halla hasta ahora reducida en el sistema v u l p - , csto es , a' nada, S. Gercinimo sohre este ltigar expone asi : sedebitis super sedes chodecim con- denzrmiles (en lugar dc jztdicantes ) duodecinn tribws I s - rael ; quia vobis crecleittibus , illi credere noluernrat. Mas i e s t e honor lo tendrdn solamente 10s ctoce Ap6sto- les de Cristo? i N o serd cumtin 6 tocios 10s yuc hu- bieren creido ex onini tribu et lingua, e t populo, e t nalione? [ N o condenarcin estos en este mismo senti- do ri iodos 10s incre'dnlos quia ipsis credentibus illi credere noluerunt ? Qtros con funden demasiado la pro- M C S R de Cristo rl sus doce A~~cis toIes , con la prome- sa que se lee en el mismo lugar 6 todos Ios que cle- xaren el p d r e y la madre &c. Mas si estos tiltimos soto se les dice : et onanis qui reliqicerit .... cenlzcplunc accipiet , e t witam ceternanz possicleSif. No se les dice: scdcbi!is &c. Otsos van por otros carninos igualmen- t e a'speros y ohscnros , y todos Tan Li parar confusa- mente ai dia de la resurreccion y fupgo universal, solisre la qual idea (falsa 6 la verriacl, 6 poco justa) Basiante hemos hablaclo hasta aqni.

Los habitadores de esta sailla J celestial ciu- dad vivircin e n ella tan cncerrados y tan invisibies, yae no puedan saIir fuera cfe szis inui-os y ciexarse vex- de 10s viadores? Se respondc , que gozara'n so- h re esto de una perfccta iibertad. Es ta r in 6 saldrrin de la santa ciudad quando qnisieren, y por el tiem- po que quisieren. Qiadnclo estuvirren , podr6ri decir con suma verclatl : bonum est nos bic esse. Quando salieien , se llevarrin consigo toda feiicidad sin temor dc perclerla ni clisrninuiria nn pnnto por accidente a l p n o . No solo saldrrin si ver y visitar persona1men:e todo el orhe cle Is tiei-ra sino tam- hien toclos 109 cuerpos celestes , y todas las obrar del Criador : quorziam videbo c d o s tuos , opera digi-

4."

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713, torum tiiorrina , lrinnm , e t stellas q u m t ~ i Jrrrizdasti. Sic3n- do j a heredes Dei , cohwecles autcna Cliristi , tocio el u n i v ~ r s o s e r j sriyo, C Q ~ O lo es de Ci- ' i? t~ , qui est hseres universorun2. Emtonces p solo entcnces se cnrnpii- r d e n estos santus lo que Te c5ce de eilos e n el libro de la Sabiduria: Fulgebunt jusfi, e t tanqrsnnz scintilla? in ni-iiri-

diizeto dibcrirrent , judicabrmt nationes, et dornincbrintur popidis , e t regnubit Donziniis i2lcrun: in perpctwn?. En- totices y solo entorices se cnmplirli lo yne te dice en el salrno 149 : exriltahrint stlntti in gZcria , y solo entonces se podra' responder seguramea~e 6 ayue- lla p i - e p n t a de ILEaias ( c . Go. v. ti.) : y u i srii7t isti, qui ut rides volunt, e t qziasi colrrnabie ad fenestras m a s ?

Lo qne clecimos de 10s sanlos de Cristo coliere- deros suyos y conreynautee , dqcirnos B pvoporcion dei iiiismo Rey. Estarti en su corte , p s a l d l j de ella segnn sii voiuntad. Se dexara' ver quando yuisiere y C W ~ O yuisiere de 10s viadores , del misino modo

* de s i t s diicipufos ctespucs de s i t rc- en eLto repugnaBcia 6 inconvenien-

t e algnno? Jesucristo q ~ a t i d o t c n g a , isera' acaso me- nos huenio , menos henigno respecto cle sus fie!es amadores , que lo fue Lespues de su resiirreccion per dies quadrugiii'a apparcns eis 2 Estos qnaren:a c l i a s , y lo que en ellos svcedi6 s e p n 10s evange- l ios , 1105 hasta y sobra para conocer el caracter de nuestro Itey , esto es , cu berjigoidad 9' bondad res- p w ~ o de sus amigos. De 10s santos resucitados con Cristo dice el evangelio q u e aparzierrint muitis. (Mat . c . 27. v. 55.) L o misaio debemos pensar que snce- der;{ pi1 10s tiempos de que hablamos, se dexarsn ~ e r 6 n o , s e p n les palecicie necesario 6 coine- niente.

5." i Y perienecerdn t a m l ~ i e n 5 esta cindad santa aqnellos v i v o s , que s r y u n el Ap6stol ea s'11 carta g 10s Tesalonicenws , b a n de ser a r r ~ h i a r l o s ~ u n t a - menf e con 10s santos rcsucitados in nribibns obvianz Chrisio in uera ? i Qual serti la suerie de ellos? i qual su ocupacion y SZI ministerio? S . Pnblo h a h b n d o en persona de estos i'elicisirnos vivos , n o resnell e cla- ramente esta grancte e' importante ques t ion : el mis-

J -1

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743 terio to60 lo concluye con estas solas palabras : si- niul rapiemur cum zlh's in nu1,ibus obvianz Christo in acra , c t sic senipw ciinr Domino eriniu. Mas es fa s tiltiinas palabras e n mi pobre jnicio, no quieren de- cir que estos vivos antes cle pasar poi- la ley ge- neral 6 indispensable de la niuerte , gozarAii de la vision beatifica y de t cda la completa bienalentu- ranra de Ios santos rcsaciiadrs , sino que habi6n- doseles concedido una yez la inmutscion 6 el dote de a g i l i d a d , habiendo snhido pot. esos apres hnsia lo mas alto de nuestra \atm6sfeia , hahiendo visto por sus ojos la sacrosanta Immanidad de Jesucristo cn toda su Sioria y magestacl, yuedarjn con esto confirinados en gracia , y confirmados tamhien en e l dote yne acaban de recibir de agilidad ; pues 10s dones de Dios , coino nos enseila el Apdstol, soti sine pccnitentia. ( a d Xoiri. c. I I . v. 29.) Por con- siguienie ycedarirr aptos y eypcclitos para servir ;i si1 Seiior proniisirna~nrnte en qualyuier minis- ~ m i o que Ics fuere enionces sefin!ado 6 insinuailo. ;Q~xa l ser<t este ininisterio segun Ids escrituras? Yo no b d l o otro mas clararnente e ~ p r e s o , yiie el q u e se spnnta e n Isaias (e. r8. v. 2.): i:e aizgeZi v e l n c t p ( seu n~ciz~rs lebes corn0 lecn 10s 70.) ad ;enteni e t dilaceratnin , ad yopulirn~ t e ~ ~ i l - i i e n i post q u e m n o n est alicts.

E o esta gente y pueblo, yo no entientlo otrn cosa, sino las relicpins de todas ias naciones qtxe qriecla- r h en varias partes de nuestro orbe hasta 10s t i l - timos tr'rminos de In tierrn : quomodo si pnuce olivce qrm remanser'isnt , excutinntar ex olea , aut racenii cum

frierit $ni;lzila airzcEenzin : dc lo qnal hnBla el miswo Isaias ( capituln 24.) , y q r o s i p e en este capitullo 18, versiciilo 7 , dicicqclo : zn tempore ill0 deferctur nzu- nus Domino exwcitrsrint d popido divalso , et dilace- raio , d p o p l o terribili , pos t quem iion fk i t alius , rt genie expLtariie , e t conculc~trta , C I ~ I L S cJiripricsimt $u- niina ferrcin ejus , ad locunz nomitiis Doniirzi exerci- tihum , nzont,n& Sioii.

Poi. todo 01 cor,[exto de cste l~ rev i+no capitulo, m i r ~ h s bien y conihinadxs en t re si kt3 rpatro ver- siones , mc p w e c e algo mas que verisiniil, que es-

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744 tos cingeles veloces , 6 nuncics 1;geros de que ahora hablamos, sera'n 10s enviatius 6 niidislros del sumo Rey , y de su corte , r i qnienes se tLarr: por entooces la mision 6 el cjrden general que se lee en el sal- m o 95: annrintia(e infer genies glorinna e j u s , in omnibus popidis nzirnbilin ejus .... Dicite in geniibris quia Domi- i t us rpgnuvit.

De estos a'ngeles veloces 6 nuncios ligerns ne ha- hla tambien , segun yo pienso , en el capitulo ilitimo de Isaias , el qual con e l cPpitu!o antecetlente, e5 una mr rac ion continuada de lo que dehe sucedea en niies- t r a t ierra in scrculo ventrtro , 6 en el iiuevo cielo y nueva tierra. Una de las cosas que a q u i be dice (ver- sicuio 1 9 ) e s esta : e t ponnnz in eis sigI/urn , e t mittam ex eis , qui salvnti .frrer-int, ad gentes in more, ad in- sulas longe , ad eos qui non auclieriini de m e , e l annun- tiaBurLt gioriam meam gentibus.

Estos serdn yerisirniilmente aqucllos siervos buenos y fieles (annquc pocos) de quienes hahla el Seiior en varias padboias yue Irn1lar:i en vela quando venga, y de cpienes Ee dice : Beati servi illi, quos cunt vene- rit Dontinu?, invenerit vigilantes : amen dico vobis quo- ninm super onania bonn sun constitiLet eos. Lo qual por aLreviar se expiicn m a s en particular en el capituio 19 de S. Lucas : Buge serve bone , quia in modicofitis- ti f idelis , eris polerinlrnt habens suyer.decen civitates .... e t tu esto supper quiriqt~e civitates.

Esias expresiones p tantas ctras del todo seme- jantes de clue nhurrdnn 10s evangeiios , se dehen en- tender en nn sent ido real y perceptible a' todos, y explicarse juxta Zitieranz de algnn iliodo accclsihle ri nnestra inteiiger!cia. Los siervcs litienos y fjeles de q u e h a b h e1 Sotior hequentemente , pcedcn bien se r en el sentido acornodaticio todos aquellos que se lian hal lado , se hal lan y se hallara'n preparaclos 6 la ho- r a de su mucrte. Mas esto no quits el que a1 tex- to se le d6 S'LP sentido literal, y se antienda solo de arpellos sirrvos bnenos y fieles , clue realinente ha- 11x6 el Scfior en su venida gloriosa , pues dice: cum wnerit Dominus.

Estos pries parece yue ser:in ccmo unos scgandos apjstoles 6 maestros naeycc de la nueva t i e r r a , que

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745 eniiados ri todas las reiiquias de las ~ e n t e s rrsque ad iernzinos orbis t~.rraruna , delaer,ln recogerlas , instrnir- las , civiiizarlas , santificarlas y como criarias de nne- vo : no ya con aquellas kontradicciunes y prrsecucio- nes que hallaron y sufrieron 10s prinieros Apdstnles cle Cristo, sino a i contrario con hei:diciones y acia- maciones generales, Henas de sinceridad y de verclad; p e s como se lee en Isaias, cnpitnlo 2 4 , versiculo 14, estas felicisimos relicpias de todas las naciones levn- bunt zlocenz suani , afqrre larldnbuizt : cum glorificatlcs

)ieril Dominus hinnient de nrnri. Proytzr ltoc ( s e dice ;I estos nnevos ap6stoles y maestros de esta n u e i a tierra ) in doctrinis glorijicute .Do?7:inunt1 in irzszilis ntn- ris nomen Domini Dei I.troel: d ufii'LibU,$ terra? larides uu- diviinus gloriam juJL No igncro que tcctas estas CO- sas se procnran aeomedar ( d e grado 6 fcerza) ;i I r a primera vcnida de Cristo, 6 a' la mision c!e sus clo- ce Ap6stoles , in rncmdurn riniuersunz : mas si se logra haccxlo con propiedad, deberrin juzgarlo imparcid- inante 10s sabios.

Los santos clue yendrin con el Seiior ri 111ie5-

Ira tierra , resucitados y plenamente bicno~~enturaclos, p que formaidrr la corte de este %ran Rey , iser'ln acaso totlos qnantos se b a l ~ r ~ n s n l v n t l o ltasta cnlon- ces? S. Jiian a i capiftilo 20 del Apocalipsis solo ha- bla oe los nin'itires de Cristo , degollndos 6 mnertos vioientaniente propter tesiinionircm Jesu , e t proper ver- bum D e i , y de 10s clue 110 adoraron ri la bestia, aun- cine por csto no cleriamasen su sangre efectivairpen- fe . Lo mismo insinlia clarainente en el capitula 6, ver- sicriio 9 , y en el capitulo 7 , versiculo g hasta e l fin9 s. Pablo habla del inisnio inodo, cliciendo (ad Tlwsal. c. 4. t i . 13.) : Si eninz credimus quod Jesus m ~ r - t m s e s t et resrtrrexit, ita e t Deus eos , qui dormicrnnt per Jesitnz , addircet cicnt eo. E n Isaias (capitulo 26, versiculo 19.) se ve la misilia idea , 6 el mismo mis- te i i n particular. Interlfecti nzei resurgrnt , dice Dios:

imini , et laudate qui habitatis in pulwere , quia ros Iucis ros iuus &c.

Frrera de estos nmertos de Dios, que 61 mismo llania supos , que xnurieron niucrte viofenta propter tes!iiiioniuna Jesu et proptir verLurr, D 5 i , hal-sr8 sin drs-

6."

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746 da otros rnuchisiiiios de insigne santidnd y bondad, qui digni hab~~burctur srvcrilo ill0 e l resurrectione ex mor- tuis. Ent re ellos s ( ~ encont rar in todos aqucllos yue han obraclo jnsticia y l a ernseiiaron ccn sus palahras y con sus obras : qzii fecerit e t dcczterii, lric nzagnus vocabifnr in regno ccdorunc: y en Danicl sc l ee (ca- pitoio 12, versicolo 3. ) et qui ud justitium erudiimt nzril~os, Julgcbutit p z s i sfellct: in p e r p e t u s u,?crnitates. De unos y otros liahla e l AptistoP yuando dice: primiticc: Christiss , cleinde hi qui surtt Christ;. [ I . ad Corint. c. 15. v. 23.) Esta expresion hi qui sunt Chrisii, para que ninguno le dt! una eytension Iatisima e' indefiriida, co- nio si hahlase con todos 10s que se s a l v a r h , la ex- plica et mismo Apcistol e n otra parte por es9as forma- les palahras : qui arrtem sunt Christi, carnent suain cru- cifixrrrcnt cum vitiis et corzcupiscentiis. (ad Gal. c. 5. v . 24.) i Y pensais, amigo, que todos 10s cristianos que se han salvado hastd alzora, y se salvar:h en adelante, son 6 s e r h de Cristo de esta inanera? i O s faltara dis- erecion para juzgar intcr peciis e t pecus, inter pecus pingtie et niacilentunz ? (Ezeyuiel capi tdo 34.) i N o veis la dil'rrencia casi infinita ent re unos y otros?

D e estos fiiiimos qui carnent suom crucifixerunt czm witiis et coizcupisccntiis , p de 10s que paciecieron muer- te violenta propter testiinoniirnz Jesu hahla e l mismo Seiior e n el sermon c l t l monte en la primera y oc- tava hieoarenturanza : ,SztA;i partpres spiritu , quia ip- sorunt est regnum ccelo~iitn. Geuii qui persecutionern pa- tiuntur propter justitiant , quoniarx ipsorunz est regntcm cadorurn : 10s prirneros son eviderrtemente 10s humil- d e s d e coiazon , 10s pnales crncificados con el mun- do (ad Gal. c. 6 . v . 14.) viven una vida inocente y pnra : ohservan puntnaiisimamente 10s preceptos d e Dios: en nada se conforman con las m8ximas del rnundo : cleseando conformirse enteramente con la irna'gen viva del mismo D i n s , quc es s a dnico hijo Jesucr i s to , ti quien aniari intensnrnente, p por quipn suspiran noclze y dia. Los segiindos son propiamen- t c [os q n e llarmrnos r n d r t i w s 6 tcstigos : sc3 esle mar- t i r io 6 testimonio de Cris+o y de la jnsticia con efusion de sangre , 6 pBrdida de su victa, 6 no lo sea. Esta circunstancia parece purameiite acciden-

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tal y tal la ha eonsidcrado siarnpre la iglesia con suma razon; p e s e l derraniar el'eetivamente la san- gre d morir por Cristo, no est& ciertanrentc en ma- nos del mar t i r , s ino en manos del t i l ano , y el ho- n o r del rnartirio se dehe lju?car no talito e n la mala voluntad del perseguidor ciriawta e n la bucna del p t~rseguido , q u e Li tocio se ofrece p o r amor de la justicia.

De estas clos clases de santos dice el Senior EO sim- plementc q u e en t ra r in e n la vida 6 c n el rcyno de 10s Scielos, sino yue el reyno de 10s cieios seid suyo. iQut: significa esta eipreeion tan s ingular? i 0 Cris- tCflo amigo! ?No veis a c p i In di ie iencia? <PO veis ayui clarisirnarnente )a p a t e activn j pnsiua? i Serti lo rnisrno entrar 4 0 en un reyno y cstablecerme en 61 , que s e r miio este reyno donde eritro y cion..de se m e permite estahleccrme por pura misericordia? ~ M o veis ayui a ! Rey stzpicmo con sx rorte, con si1 cuiia, con sus conjdeces , con 611s conreynantes, que tierlen parte en cl x i io r io , en la dominacion , e n el gobier- no, e n el imperio y e 3 :a pctestad ; y i ios clue d ~ b e n obec?ecei- ti este irnpcrio, y sc r rnaiidadns J goberna- dos? iQiieieis que 1 1 0 h a j a gcrarqnia en e l regno de Cristo? ;@ereis q u e no h a y a un 6rden estabie y per- manente de la suprema cahrra (que es Cristo Jesns) a' SIIS cwnjueces y corirepuantes , d e estos & otros in- feriores, y de estos ir. [os irrfirnos de su reyno , que serrin ciertamente 10s m a s ? ii7ilo admiten 10s tedlogos esta g e r a ~ c p i a 6 este 6 r d c n , atin ent re 10s Bngeles hienaventurntlos?

P o r a q u i podrmos l l c ~ a r a' conocer si es 6 no to- lerable nqwella idea vulgar de que en el cielo 6 en el r t y n o 4 e Dios tcdos s e r i n reyes. LTndos sera'n re- yes? Liicgo ninguno lo sera' ni podr6 ser. ;Todos se- rdn reyes ? Luego lodos yrrerrrirr niandar, y ningana ohedecer : luego toctos wtrin superiores, y ninguno in 'erior: lueco en el reyno de 10s cielos n o l l a b i ~ i 6r- d e n algoaio. Di re i s , aniigo, yuc la idea vulgar (le q u e en el i e y n o <?e Dios 6 co el cielo todos serzin reyes, no se dehe cntender en tin sentido tan e,trecho y rigorloso q u e exciuya todo 6 r d m y gerarquia , sino en uii sentido latisirno, en qnanio todos 10s que en-

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t ra ien en este rayno sera'n eternamenie felices, co- mo juTganios qile lo sbn en el mrrndo 10s reyes 6 sobernnos de la tierra. Mas ann con esta l imita- c i o n , la idea general parece puraiiientc vu lga r , y DffCO iusta.

No sc niega poi- esto, que tcdos Ius fieles cris- tianos que observaren Ins prrceptos de Dios, 6 6 lo menos hirieren .i.erdaclera penitcncia de s u s pecados, entrar in aliqriando a l reyno de Dios. Mas se paede rntay hien negar , que 10s que de esta suerte apenas entraron en la vida 6 en el reyno de Dios, Sean 6 pnednn ser reyes , 6 conreynantes con Cristo : se puecle y debe negar que puedan teller estos parte alvnna en la primera resurreccion , y por consi- guiente en la nanta y celestial Jerasalen , qzm des- cendit de c a b 0 d Deo nreo. Esta santa ciudad se clehe componer liriicaniente de santos de insigne santiddd, qui sunt Christi ... . qui dormierunt per Jesuna .... qui car- nem siiam crucijixerunt cum witiis et concripiscenliis ? que padecieron persecucion por la justicia , y reslstre- ron constantemente usque ad sclngujnem, sirio en efec- t o , ri io menos en afecto , quibris dignus non erat ntundus.

Pues estos cristianos que no pr r tenecen ri esta clase privilegiada, iquC suerte corlerd'n e n aquel & a ? Sino lian de tener par te c c n los grandes santos en la primera resurreccion, icp& serri de ellos? Se responde clue queda r ih entonces coiiio esEBn ahora , gozando sus ai- mas de la vision beatifica conforme ri la capacidad de cad2 nna. Pues esto mihmo tendrAn en el siglo futuro de que varnos 'ilahlando , con sola l a cliferen- cia de que vendran con Cristo ti nuestra t i e r r a , mas no resric;tar$n basta la resurreccion general : ceteri rnortuoruw non wixe'erunt , dice S. Juan , donec coiaszi- neentur n d l e ami .

2Y eta esta primera resnrreccion tentlrdn t a m - bien parte 6 msucitardn algunos malos de insigne mal- dad e' iniynidad? Sin dacla clue s i , segnn se infiere de varios texios de las escritoras. Estos iniquisimos, rc- 5 U C i t a d O S en aquel dia con 10s mayores santos, s e r jn sin ciudx aquellos hoin!ires qui dedernnt q u m - dam @-midineme s w n z in terra viventiuni (Ezeq. c. 32.

3.

7.'

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749 W. 26.) Sobprbios , altivos, inhnmanos y crueles , que ahtrsnndo de la potcstacl de super illis da la , y nlvi- d fndcse de que eran hombres similes nobis passibiles, hicieron gernir a1 linngc hnmano.

De la reitarrwcion de estos y otros sernejantes, se dice en Daniel cepi:ulo 1 2 , versjcnlo 2 : et nirilti de his qui dormirmt in l e rm pnlvere , evigilabrmt ali i in wilnnt rrternaiiz , alii in oprobriirm ut videant sem- per. Con este tes to concuerda perfectamente el ca- p i t ~ l o 5 de la Sabidnria : Videntes turbaGtiniur iirno- re horribili , et nzirabuntur in -iLbiiadone &>c. A todo est0 sonde Isaias (capitulo illtimo , versiculo 6lti- nio ) que estos mismos infeiices resucitados , d quie- Res c!a el nonibre de caddveres , no solo ver&i /i- more horribili la gloria de 10s hijos de Dios , z’i cpie- nes despreciaron y persignieron, sin0 que ellos mis- nios seriin vistos de todos , y coino expuestos ri la vergiienza de toclos.

CAPITULO VIII. SALIDA DEL DESIERTO DE L A TiIUGER SOLITARIA, I’ SU NUEVO

DESPOSORIO.

Iateligencict literal a’ esle propdsito del crintico de los cdnticos.

La muger vestida deli $01, que con dos alas de iiguila grande ha de volar algun dia it la soledad ad locrim parufuiir d Deo, ut ibi pascant eant diebus mille nucentis srxcgiitta, sa!&*$ de esta soleclad pasados a p e - I l ~ s qnarenta y dos meses, J’ se mrcnifeestark a1 mun- do nuevo de zln modo digno de la grandma de Dios, digno dc las rnapificas erpresioucs de la gran pro- f’ecia contenida en todo e l capitulo 1 2 del Apocaiip- sis , y digno tambien de tantas otras que clenamos notadas y ohservadas en 10s fendmenos de la segnn- da parte. Ya ollservamos alli e l fin para que la con- ducirC; Dios ri la soledad, y 10s prodigies que para ello nbrar8.

Pile3 esta cGlehre muger , antigua esposa de Dios (no menos cdlchre en sus prosperidades que en s m adversidsdes) preparada ab anllquis diebus para el Me-

s. 1.0

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7 50 sias con proridencias, y atin coil inilagros casi COD- tinuos, :{ ciltirnamente arrojada ipxn in iosamen te hacia todos ios vientos : donec irtrpleorztrcr teipora izatiorzunz, debe vo l i e r a l p n dia segr~n Jas misinas escrituras ri la gracia dei espoko: ckbe ser otra vcz llamada e n sus relicpias prrciosa ;y congregnda in nziserationibus mngrzis , y tain!iien assuntpta segun la expresion de §an P a i h d SII ant igua clignidarl , coni0 qrieda 110 solo d k h o , sin0 probado eu varias paries clc esta ohra, principa1men:e e n el ieii6nicnu qninto.

Poes ebta es la primera cosa, y la mas admirable clue dcbe snceder en nuesiro nuevo cielo y i~uewa tierra , ltieoo inmediatamente despues de la venida del Seiior 2 la saiita y celestid Jerusalen. Las pro- f'ecias que aiiuncian este gran suceso son innumera- bles , a i paso cpe clarisinias, las qualcs ser6 bien tener alrorn pre-elites , principalmentc nqucllas pocas y mas notables ync yuedan ya observadas, y que no es posible r epe t i rks sin enfadar 5 10s qae leen. En- t r e estas me a t r ivo solamente ci rcpetir lo cpe se h a - l l n en el c a p i t d o 2 de Bseas , e! mas lac6riico de to- dos 10s profetas.

Enipieza el Sefior amenazrtnclo a s u infiel 6 ingra- I tisima esposa, que llegarii el c a w de arrojarla de si,

de no mirarla ya coin0 esposa suj-a , n i cornpadecei-se de e!la; n i de sus hijos. Juclicale, empieza la pro- fccin, 6 corn0 lesn 10s 70 , judicaniizi cum nzatt-e vcs!ra, quoniam @sr, nora uxor mea , e t ego lion vir ejus e t

$liorunz e j z s non ntiserebor. Pasa luego $ anunciar- les 10s g r a d e s C innumernbles Srahajos que dehe r i sul'rir en 10s tiempos de S ~ L deskierro, p de sn aban- dono total: Propter hoc ecce ego sepiain wianz tuanz spinis , e t sepianz ean7 naaceria, e t seniita~ m a s non in. venizt. ... EL cepare faciain oiiiiae garcdicmz ejus , solen?- nitatem e j u s , rzeornenia ejus , SUbbGtUlJl ejus , et omnia

f c s ta tenipora ejus , et corrumpum viizerinz e j u s , e t Jjcunr ejus. i-6 no es este el estado e n qae h a visto y ve t odada el m a n d o &verso B esta infeliz esposa diez y ocho sigios h a ?

Finalrnente clescle el versiculo I$ hasta el fin no le annncia ya oira cosc sino mispricordias , benefi- cencia y pros1rei idaJes tan gsantieq , que S U misrna

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I

grandem cos admira: como son sn vocacion y lei-- dadera conversiot, , sir condrrccicn a' otra soledad se- mejante 5 la del monte Sinai, para h3hlal.h alii al corazon: su penitencia ) su i ianto, SEI justificacion y su perfecta satisfaccion ; y despues de todo esto , como una conseqiienria necesaria de las promesas de Dios, s u nuevo desposorio haxn otro tratado , testamento 6 yacto sernpiterno : propfer hoc ecce ego laciato eon2 et dzicnrn earn ,irz solitnc2inen2, et l o p a r ad cor ejus, e t dabo e i vinitores ex eodena loco , e t vallena Achor ad aperiendnm spenz ) et canet ibi juxta dies juventutis sue, e t juxttl dies nscensionis s u e d e terra $gypti.

En este dia de que Iiablamos , y con ocasion d e este nuevo y soiemnisirno clesposorio parece opor- tun0 tratar de aqiiel csntico subl ime, de ayuella pro- fecia sdmirahle , cuyo ti tulo es canticrinr canticoruin. Es te chntico, tin3 de las coinposiciones mas celebra- das en t r e totlas Ins clue se leen en 10s libros sagra- dos, este c h t i c o sensihiernente div ino , pues siempre se l e e , aim sin entenderio, con tin cierto deleyte in- terne que n o puecle producir la carne y la sangre: este c io l ico , & g o , es del todo ininteligible, sino SQ-

mos conducidos por unas luces verdaderas. No h a y ciuda que algnnas c o w d e 61 se han acomodado bas- tante hien i la pasion de Cristo: otras :; la Santa Vir- Sen Maria i?Iadi*e de Dios &c. iQuie'n no lee con gusto 10s serrnones in cnnticn del devotisimo P. S. Rermr- do? 2Quidn no lee con el mismo gusto y edificacioii lo que sobre este cAntico escrihid S. 14'rancisco de Sales ~ e l jesnita Luis clr la Fueo te , y a!gunos otros misticos cine liari segilido A Hstrjs maestros insignes de espiri iu ? 'I'odos dicen cosas h e n a s , pias ieli- giosas y santas , coma qae son t c n d a s de lugares de la pscritrira, P conf'ormes i la moral tiel evangelio.

No hablando ya de 10s doctores misticos, v e n p - mos ri 10s intdrpretes cpe llaman literales. Estos Jicen comunmente , 6 5 10 menos soponen, que aunque Sa- lomon cornpixso este epitalamio sdhiiiuie para sus nup. cias con la liija r?e Fapaon rey de Egip to , mas el Es- piritu Santo ci-ie mo>/ia P U plama , tom6 5 esta hija de Fararjn co1110 a' una fignra de la iglesia cristiana (se entiende de esta piesenle de las genfes), y a Sa-

s. 2."

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iignra de Crislo. La primera p a ~ t c yarece no S P I O f a h a , no solo im-

111:en intolerable. LEI Espiri tu Santo del rey Salonion en la composicion sus nupcias con la hija de Faraon,

a b n n prohibidas p o r la ley? t Y cs to poryiie Salornon y la bija de 3'araon i i p r a h a n , 6. po- dian figurar a' Crislo y ii la ig!csIa presente? Direis acaso yce e l mairiinonio de Snioiiion con la princesa de Egipto no fue ilicito , ya porcpe la ley no habla expresaniente de ins inugeres de Egipto. s ino de la! Canancas, Atnorreas, Jebaasras &c. ya tarnbien porque esla princesa rennnci6 6 BUS id013s, J abraz6 la .cei-- dadera relif;ion. Mas l o uno y lo ~ h - o me parece fa!so c' improbals!e. Falsn : porcpe In escritura reprehende d Salomon ignalinente p o r si1 alianza COD la hija de F a r a o n , cornu po r SZI alianza con tantas otras muge- res extrangeras: Rex azstenz Salomon d z n t u v ; t nzulieres alirnigenits inriltas , $lianz quoque Farnoitis, e t Moa- bit idas, et Arnoni&Las, el Idurnens, et Sidonias , et f lethcay, de geiitibus , super quibus dixit Dominus filiis Israel [Bxod. c. 34. v. 16.) non ingrediernini ad eas, nec de illis ingredientrir ad vestrns, certi~sinze rninz aver- tent corda vestra ut sequnnaini Deos eorunz (3. Reg. c . I I . ) Improbable : porque este hecho no se iialla e n la his- toria sagrada , y parece inverisirnil y aun imposibk. que n o se Iialiase , si hrihiese suczclido. Con el niistno fundamento podria yo dec i r yne todas las dernas mn- geres c p e tom6 Salomon , Moabitas , Amonitas, Idu- meas , Sidonias , Heteas &c. tanihien renunciaron a' sus i~ to los y abrazaron la vercladera reliqion , no obstante que el scnsnalisimo rey, 6 todr is y d cadz u n a les edi-

\ fic6 sixs teinplos doncle sac14?caban J' oraban ii sus ido- I n s , y el niismo rey de Israel afeminado ya , et de- pi-avaturn cor ejus per nzulieres , ut srquei*eiur deos d i e - nos (ibidem v. 4.) no dexaha de lionrar con su pre- sencia Ids fiestas y sacrificios de sns r n u g s - . ~ ~ ~ .

Pues iyn ien es e l autor 6 el escritor de este c:;n- t ico divino? Amieo, yo no io se', ni lo desen saber, porcpc erta noticia nada iiie importa. Solamente s6, que su ~e rda r l c ro an tor es el Espiri tu Santo ,. qrLi Zo- autus est per prophefas, pues as i la antigua sinaqoga,

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753 cornn la iglesia cristiana , lo h a n tenido sienipre entre sus lihros can6nicos 6 divinos, y lo ha estirnado y venerado no rnenos q u e ri Moyhes y A 10s profetas. Esta soia consideracion m e baska 6 mi para n o w e e r q u e el csntico de 10s cthticos c o n t e n p 10s amores mutuos e' impddicos del j6ven Salomon con Ahisac Sunamiticles, iiltima erposa del santo y decr6pito rey David, coinn pensaron rnuclzos Rahinos , ni tampoco con la hija de Faraon , como han pensado tantos cris- tianos.

P e r o 5 lo rnenos es cierto , decis , que el esposo del c::ntico no es otro que Jesucristo, ni la esposa p e d e ser otra que la i$esia d e Cristo : esta segun- da par te de la proposicion 7 0 la concederia sin gran dificultacl , sin0 supiese de cierto lo q u e quereis qne entendamos p o r rstas paiabras iglesia de Cristo ; es z i sabe r , la iglesia presente de las gentes , ,v e n e [ estado q u e ha tenido hasta el dia de 110~- , y que tenclrii 6 p d r 6 tener liasfa la *enida del Sefior. En esta inteligencia no podremos convenir jannas. $?or que'? Porque es una inteligencia violentisi- im , y 5 inas de esto f d s a 6 imprubable. Sobre lo q u a l (poi, aliorrar clisputas ine'liiles) yo no C i i 6

ni pienso citar otra autoridad ni otro testigo que vos misrno.

B o ignorais que hombres ingeniosisiinos y sa- pientisimos l n n trahajado in f in i to para acoinsdar y llacer servir este epitalnmio divino d la iglesia pre- seute. Tanapoco pocleis dudar que el resultado es su- ponpr , afirinar y no probar: yue dicen , y no hacen: afirman, y n o prueban. D i c e n , y afirrnan e n ge- n e r a l , qne la esposa del cintico es la iglesia cat& lica presente ; mas l l e p d o 6 la acomodacion de :as diversas pastirularidades que s e l e rn en e l cfintico, ya nn se ye t a l iglesia. Se lmwa esta , y se h a - l l%, fuera de do? 6 t res v e w s , p ~ r q t i e n o parezca que la hari olvic?arlo del todo. En 311 i t ~ m ~ r tl -. se v e subsfitnitla yual$uiera alma huena qtie rp ie ra en- trar d Id vi& devota, y aspirar A la porfrccion cris- tiana. Mas esto ,iIjor qu8? S i n dnrla porqoe ri la iglesia presente , 6 se tome iatisimarnente, 6 se con- sidere tan sola su parte prineipdi y que es e l sa-

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754 cerdocio , nada le compete 6 casi nada cle lo $ne a q a i dice el esposo de la ecposa ni lo que eiia dice cte si misma. Si esta acornodacion ruese posi- ]>le i dexarian A la iglcsia universal , y se pasarian 6 una persona particular?

80 hac? a' mi prop6sito prohar aqni detenidamente que n o se l iabla en este cintico ni una sola pala- hra de la iglesia 6 esposa presente de las gentes; para esto seria necesario un gran vollirnen. Para que- dar ylenaniente convencidos , no es necesario tanto. Nos basta considerar alentamente una ~ otra expre- sion entre las innumerahles que nos ofrece el c i n - tico divino : poi- exemplo : Tofu pulclra es anaica mea, et ntacula nora est in le . S i esta sola alabanza (aunyue no Iluhiese otras seniejantes) que da aqui e l esposo n' la esposa ) es ciertamente inncomoda- hie & la iglesia presente de las gentes , con esto solo ynedamos en derecho de concluir que no se ha- hla de ella en todo este criritico d iv ino , sino de otra cosa mucho me jo r , clue segnn las escrituras dehemos esperar.

Acaso direis que esta alabanea bue da aqui el es- poso i la esposa le yuadra bien a' la iglesia cat& lica p re sen te , ri la que llama el Ap6stol colunana, e t cj$rnaamentuna zleritutis ; pues en elia sola se en- seria y se practiea la vcrdadera f6, qiace per charita- telia operatur. A lo qual $e responde en brcve , que si esto solo hasta para dar esla iertladern alabanza ri la iglesia 6 esposa presente , deberg tambien bastar para dar la inisina alabanza & la iglesia 6 esposa a n - tigua , que vulgarmente llamarnos simgoga. Esta e n 571 tiempo mientras r e p 6 ensea6 siempre sin in- terrupcion la verdadera fe' , y la verdadera justicia, y tamhien la practic6 en mucl i s imus de sus miem- bros; y de ella 6 por medio de ella hernos recili- do p aprendido casi quanto bneno tencmos. Si no hu- hiese rnsefiacto siempre la verdydera f d , y la verda- drra justicia , parece imposihfe que el Mesias misuio huhiese remitido A esta enseiianea asi 5 las turhas CQ-

mo i sus mismos discipulos : ttmc Jesclg locutus est ad turbns , et ud discipulos siios dicens. Super cathedrrinz Moysi sederunt scriba: e t faris& : oinniu ergo qua?-

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755 mrnque dixerint vobis servrrfe , et faci te : secundum vera opera eoruna nolife facere : dicunt enina , et non fuciunt.

Direis tamhien que el Apdstol y maestro de las gentes d i ce , que Cristo se entre66 a' la muerte acer- ha 15 igiiominiosa de la cruz : ut exhiberet ipse sibi gloriosant ecclesiain , non hahentent naaculant , neque r u g a m , aut aliquid hujusnaodi; sed ut sit sancta , et intrnacctkata. ( A d Eplz. C . 5. w. 2 7 . ) Aqui pudierais aiiadir tarnbien , que el mismo Ap6stol en la ~nisrna epistola ( capitulo I , versicul-i 4.) dice 6 todos y B cnda uno de 10s cristianos , de 10s quales consta y se compone la iglesia , que Dios nos eligid ri todos, ut essenziu sancti , e t inznaaculati in conspecfu ejus in charitate. Mas (que cristiaiio pnede dudar de esta verdad? Esta fue certisimamente , es y sera la Y O - luntad de Dios , y la intencion y deseo del Redcn- tor. Por consigniente esta es la vocacion y obliga- cion de toda la iglesia? y de todos y de cada uno de siis miembros. Con todo e s o , es no menos cierto y visible que esta voluntad de Dios no ha tenido su efecto pleno b a s h el dia de l ioy, asi como pa- rece certisimo que lo teiidrli cn algum tiempo secun- dum scripturas.

E n suma , Crist6filo mio , no confundamos las ideas , ni cperamos cegarnos voluntariamente : la iglesia presente de Cristo es sin duda un cuerpo moral y mistico , cuya caheza que es Cristo es per - fectamente santa , santo el espiritu que 13 anima, santa SKI creencia , 8u m o r a l , sus Ieyes, sus sacra- mentos , sus medios de satisfaccion , s!'quis eis legi- time rrtatrcr. Mas todas estas cosas no prueban la pulcritud , hermosnra , justicia y santidad de la es - posa , solo prneban la hondad y liberalidad del es- poso para con ei la : por consiguiente pruehan iuu- chisimo ti favor del esposo , y nada ;i f'aFor de la es- posa. Mas claro. Es t e cuerpo moral y mistico, cuya cabeza es Cristo, se compone de innumerables miem- hros : entre 10s qnales , 10s perfectamente sanos son y ban sicio siernpre pocos : 10s de'biles y enfermos k c h i s i r n o s : 10s imitiies 6 iiiservibies sin niimero:

10s pdsimos y pel-jtldiciales innumerables. NO es

('ivat. C . 25. V . I . )

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756 csto as i , mi huen Crisldfilo? No ha sido siem- p re as i ( j a m a s , gn mcnos con pbca diferencia) en todc,s 10s s iglos , afios y me.?es de la era cris- tiana ?

Piles ii este cuerpo morn1 cornpuesto de virgenes prodentes y necias , de peces huenos y inajos, de sier- vos fieles e' ini ie lcs , de poco trigo y muclia pajn, p tamhien de mncha cizana , ;os atrevereis 5 apropiar- le aqnella suma alabanza y tantas otras seinejantes de que abunda el cdntico divino : lota pzdchra es ami- ca nze-a;, e t nzacuZa non est in t e ? Me atrevo a' deci- ros con el Ap6stol y maestro de ins gcntes , non est bona ghriatio aestra. Parcce que con mayor fun&- mento le podreis apropiar aquellas otras palabras que se dixeron ,i la primera csposa, no menos satisfecha de si inisma : si luveris t e nitro, et inrLZt~plicauei*is ti- bi herban8 boritlz, nzaculatn es in iniquitate tun corani m e , dicit Dominus Deus : iquonaodo click non sun? pol- hila? (Jerena. c . 2. V. 22.1 Direis que ayini se habla de la idolatria de la primera esposn; mas lo prime- ro : la idolatria n o era general en torla la esposa, si- no en muchos de los miembros que constituian aqucl cuerpo moral. Lo segunclo: no solamente niancha y afea el a h a la idolatr ia , sino tocla suerte de iniqui- dad. S. Pahlo bahlando en general de toda iniqnidac?, y en particular dc la avaricia, dice que es simula- crorwn sewitcis. (Ad C o l o ~ . c. 3 . v. 5 . )

Pnes [de quie'n 4e dice11 estas palabras y tantas otras del todo semejaiites ? iQtiie'n es esta espma tan santa 5 yuien puedan acomodarse unas alabanzas tan gi-andes , que dificihnente se podra'n imaginal- otras mayores? Yo bnsco esta esposa santa en toctas las historias asi sagradas como eciesidsticas , y no la ha- 110. L a husco en los profetas desde Movses hasta e l Apocalipsis , y no hal lo o t r a , por mas que la busyue, sino nynella sola , todavia fntnra , vestida del sol, que oonsideramos dihusamente en todo el fendmeno 8 , que acampafiamos hasta la soleclad, y qne ai l i desamos retiradn , quieta y segiira dfacie serpentip. Qnando esta salsa clc la soledad, y se tlespose de nnevo haso otro testamento 6 pacto sempiterno , lo qua l , segun 10s misiiios profetas, no p e d e sucedsr sino en el. siglo

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5. 5."

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venturoso que ellos mismns aniincinn, 6 lo que es lo misino, eo la t ierra nuexa y cielo n u o o ; en- tonces tendremos la esposa Li yuien se dirigsn tantos loores.

Esta es vjsihlemente aquella misnia de yukn se hahla en e l c a p i t d o 54 versiculo 6 de Tsaias: quia ut mulierenz derelictam , et mmrentenz spiritn vocnl,it te Dominus, et uxorem ab udolPscentia al+ectam dicil Derts fuus. . . . sicut in diehus Nne istucl mihi e s t , cui jurcvi ne inducerent aquas Noe ultra supra terrunt sic juravi, ut non iruscar tibi , et non increpeni le.

Esta es aqnella niisma de quien se dice: fIsai. c. 51. v. I 7.) elevnre , elevare , consurge Jerusalem, p r e Bebisti de rnnnu Domini calicern i re ejus : usyiae ad fun- durn calicis soporis bibisli , et potasti usque ud Jieces. Esta es aquel ia misiiia ,i yuien dice: (c. 52. v. 2.) Ex- crrlere de pulvere , consurge ; sede Jerusalem : solve vin- cula colli trii captiva.$lin S o n . f c . 60.1 Pro eo quod

fuisti derelicla, et odio Iiabita , et non erat qui per te transiret , ponanz t e in .ruperbianz sozculcrunz , gaiidiunz, in generationem, et gmerationena. (Jerernia c. 3 0 . v. 17.) Obducanz enint cicafricena iibi , e t 2 vulneribiis triis sa- nab0 te , dicit Donainas. Quia ejectam vocaverunt le Sion: Imc e s t , p e noit habebat reqcairentenz. (Bar. c. 5.) Exue te Jeri~sctlern stolrs luc~us et vexationis t m , el indue te decore , et honore , qim 2 Deo tibi est sempiterrtm glo- rice : circurndahit t e Delis diploide justitiiz \ et iniponet naitrant cupiti honoris reterni.

Esras y otras mil cosas muy sernejantes le estdn ciertamente prometidas para su t iempo ii esta rnisma muger , ahoia sterilis , et non pariens, vidiaa , e t de- solata, transmigrata , et capliva , destiluta, et sola (Isui. c . 49. v . 3 1 . ) para 10s t iempos, digo, toilavia futuros de su pleni tud) de su asuncion , 6 de su noe- vo desposorio , y todas concuerdan perfectarnente con las qiie se leen e n e l crintico de 10s cgnticos. Yo 110

puedo aqui producirlas todas , porqiie esto no lrnce 6 mi propdsito : b8stame dar una idea general notan- do algunas de las mas sensihles y lumiiiosas.

Primeraniente : la santidad que amncian 10s profe- tao para su tiernpo B esta muger rnetafbrica, 6 n' cs- ta esposa antigaa de y w hablamos, es tali grande,

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758 qiie hasta ahora no se ha visto en nuestra tierra. Si hasia a h o r a n o se ha &to , es necesario que se vea en algiin tieinpo , ut propheta Dei j d e l e s inveniantur, Las expresinnes de estns profetas pnrece que no poeden scr mas clarag. Ved algnnas pocas entre mi- Jlares. Bt nnrlrip ficnbitur que dereliclcc fuera t iii medio terra , et adliuc in ea dfcimulio: e t convertelur , et erit in oslensioneni sicut ilzerehintus , et sicrct quercus qurt: ex- paridit ramos si los: semen sanctum erit id quod extele- rit in ea. (Isai. c. 6. v. 12.) Si querris ahora saber de cierto dr qufen se liabla aqu i , no temis yne hace r otra diiigencia , sin=, leer este capitulo con mediana ateiicirhn, d io rnenos ctesbe el versiculo 8. En dl vcrris anunciacla clarisirnamenie la crpaedad, sorclera y dnreza p i ewnte de Israel : la duraciun de eata rliitezn, ceguedad y $order*, y iambien el fin y te'rmino de eila. P o r don& \ e r e i s , s in p( der d u - darlo, que la inisma , que derelicta fkerat y qne ha estado y est& tndavia ciega, sorda y clurisima , esfa inisma es la que convertelur , et erit in ostpnsionenz. Ponanz visifationeni tuum pacem , e t prqmsitos tuos justitianz : ncn audielrir ultra iniquitas in terra ma. Po- pdus autem L'UUS onznes justi. (c. 60. w. 1 7 . ) Acomc- dad tamhien estas cosas d la iglesia presentc. LMas coni0 ? i E n e i ln son toclos justos? ;Lo l i a n sido j a - mas ? {Lo serin todos alqnna vez? Ilzvenit grntiatn in dserio pop idus , qui remanserat d gladio : vadet ad re- quiem sunrn Israel. (Jrrenz. c. 31. v. 2.) El non do- cebit vir rcitra proxinzum suum , et vir *frrrtrem suunz, dicens : cognosce Doniinrinz : omnes enin8 cognoscent nie d mininzo eorunz usque ad nzaxiniuna , ait Doniinuy : quid prrpitinbor iniquatati eorunz , et peccati eorunz non nae- niorabor amplius. (g. 34.) In diebus illis , et in tem- pore iUa ait Donainus ; quaretur iniquitas Israel , e t non erit: e t pecccttum Juda , e t non invenietur: quonianz propitius era eis, quos reliqtrero. (c. 50. 2). 2 0 . ) Sic& mint fuit sensus vesler, ut erraretis d Ueo : decies tan- tuin iterunz convertentes requiretis eunz. Qai enirn incluxit vobis mala , ipse rursum adducet vobis sempiternana jucnndiilaienr cum salute veslra. [Baruch c. 4, v . 28.) I& jucEiciiLt nteig ambirlabunt , e t mandata mea custo- dient , et facient ea ; e.! habitabisnt -super terram , quam

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759 &di servo inco Jacoh , in qua hubifaverrant palr.es ves- tri .... e t percutianz illis fedus pacis , pactrrna sempiter- nuin erit cis : e t fiiadubo eos , e l n2ul:iplicubo , e t dab0 sanc$$catioiient naeana in medio eoruna in perpcturma e t erit ta6ernaculrsna meum in eis , e t ero eis Deus , et ipsi eruiet ntihi populus. E + scient gentes (scil icet christiaracL., p e s entonces todos lo sera'n) quia ego Dominus sanc- tgcator Jsrael , C L ~ fuerir sanLtfficatio mea in niedio eorum in perpetzuna. (Ezeq . c. 37. v. 24.) Etrton abs- conclam ultra faciern meam ab cis , eo quod eJjuderirn sp;ritians nLeuna super onynena c1?onall17z Israel, air Oonti- nus Deus. (c. 39. v. t i l ' . ) ReliquiE Israel lZOi7 fucieret iniquitatern , nec laquentur niendaciuna , et noia inve- nietur in ore coruin lingua dolosa .... In die illa di- cetur Jerusalem : noli tintere ; Sion , non d2'ssolvantctr manus tule : Donainus DPUS iuus in ntedio tui fortis , ip se salvabit , gaudebit mper te in laetitia , deb i t in di- lectiorie s u a , exultabit super te in laude. (Soplaon. c. 3 . 0. 13.)

Comparad ahora estos pocos !ugares de 10s profe- t a s , y tantos otras del todo semejantes , con lotlo lo que se lee haxo figuras y seniejanzas aclmirables en todo el cintico de 10s cinticos , y hallareis , 6 por lo rnenos entrareis en grandes y veheinentisinias sospechas, de que la esposa de 10s cantares no es otra , ni p e d e ser otrn , que la de 10s profetas. Si esta ha de ser algnn dia tan santa q.ue en toctos sus confines non audietur ultra iniquitas: SI esta ha de ser algnn dia tan sanfa que si se hasca en ella e l pe- cad0 no12 invenietur quia non erit , ;no podrri en ese inismo tiempo decirle e l esposo con suma Tpldad y propiedad : toia pulchra es anzica m e a , et macula non est in r e ? i N o podrd decirle en este mismo tiempo con sunla propiedad y verdad otras infinitas alaban- zas rnuy semejantes a esta de que estd lleno todo e l c int ico 1

S. 4." Mas observernos ya algunas particuIaricIades d e este czhtico , que es iinposihle acornodar 6 otra esposa q u e B esta qne sale de la soledad. I . ~ El es- poso de e s t e divino csnt ico, que no puecle ser otro sino e l Mesias , el bijo de David p de A h a h a n , le da A la esposa varias veces el nonibre de !iermaiin,

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760 jnntamente con el de espasa : Soror men spoizsa. Esta expresion aingtilnr , ~d qriien cc>nviene con toda ver- dad y propiedad, sino j la muger vestida del so l , 6

la e posa antigun en 511 nuevo cicsposoi~io? Esta tdinhien re da a1 esposo el n~rnhre de hermano. (ca- pitulo 8 , versiculo I . ) Di?*cis cier'arnente que Jesn- cristo llam6 hernianos , herinartas y Run madre $ qiialquiera que hicicse la Fo lun tnd de su Padre: quicrin7q~ie enint fecerit voluniaten, Patris niei qui in cal i s e , t , ipse T F Z C I L S frater , e [ sopor, e t nzarer est. (Narh. c. 12. v . 50.) Birn : nias y o pregunto a l ~ o r a : Jesu- cristo por rqtas palahias dichns e n rtquellas circirns- tancias , i n e g b acaso yae era hijo verdadero secun- dum naturana de la §anta V i r y n Maria? i N c g 6 que esta Snntisirna p adinirahle crlatura bacia la volun- tail de s n Padre ? iNc,g6 qne eran sus paricntes ? t en frasr ordinar ia de la escritura, sus hermznos , 10s q i ie acompafiahan en arpel la ocasion :: SLI Santisima ltlaclie? Cierto yur n o : c n n qtle estas palabias clc Cristo , lo que piuetian tinicaiiiente es est0 : que la rsposa de que 1 ia l )~amos , tcntlrii en aqnellos tiempos dos vertladeros titulos por doncle nieiccer el nnm1)re d e heimana c p e le cia el e$poso , .y a u n cl de ma- d re , cpe ianibien le d a (capitulo 3 versiculo I I . ) :

uno por serlo en realidad, sicndo arnhos cspcsos hi- jos de Ahrahan y S a r a , de Isaac y de Jacob : O ~ T O ,

porcpe en 3CjIlel tieinpo h ; , r ~ pa la csposa plena y perfectamentc 13 voiuiihcl del Pddrc ce!ehtial y de u n m d : , histn cntances inaudi lo . Bsi le (?ice y le ananc ia para este tiernpo e1 ini,sliio e*piritu de Dios ( I s a i . c. 62. v. 4.): ATon vocabpris ultra derelicta .... sed vocaberis volrintns m e n in e a ; y en el versicu- 10 I 2 : et voi'abunt eos populu~ suizctus redenipti Ci Domino.

2.a A esta ecpnsa de que hablamos , y e n el tiem- PO y circunstanciss yne vamos tiiciendo, le compe- i e n bn i ca m e nt e con t o da prop ie da d a que 1 la s pa I a h ra s : VOX tu?-triris nvdira est in terra noslra. (capitulo 2, versiculo 1 2 . ) Ea voa 6 canto de la t6rtola , no pa- rece otra cosa que nn continuo llanto y geinido tris- tisirno; y esta Iia sido rasi toda la ocupscion de la esposa en todo el tieinpo de su retiro y soledad, en

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76r e1 que el esposo le ha hablado 6 OS oidos por me- diu cle sus concluctores, y a l corazon por si misnm. Curacla perfectamente de s u cegutdatl , aorticra y du- reza pnsada : quitado de su corazon aqurl v e h denso y tenebroso de que habla s. Psblo ( 2 . ad corint. c. 3. 9. r 4 . ) : hafiada a1 niisnlo tiempo p circnndndd ~ i - c u i vestimento de toda la litz ce,e\tinl : con iciclo e n suma distintarnentc todo el mialeiio de su &2eYias, y al Mesias mismo s e p n las escritiiras , iqu! otra ecisa han de hacer estas santas y prcciosas reiiquias, S ~ I I Q liorar y lnmentarse, imitando la Y O Z p gcinido de la tbrtoia? Llorar , digo y gerriir , pa por l a me- moria y recuercio ale todo lo pasndo antes del Me- s i a s , ya por acpe i exceso horrible de su pasion y inuerfe igrporniniosa ~ ya por un inlimo agradecirnicn- i o de la misericordia actual que se h c e con eiias, ya en fir1 p o r un ainor entminble p deseo ardentisiiiio del rnisrno Mesias. Este Ilanto y gerriido est6 bien claramente PntanciaJo para s i i tieinpo e n la escriiura cle la veldad. Ve'ase 1 0 qne qtieda dicho e n el i'en6- ineno 8 , donde se tra:6 de prop6sito de la soledad de esta muger.

A ebta le cornpeten iinicanwnte con toda Yer- clad y propiedad ayuellas palahras que liahlando de ella dice el esposo : i Q m est irta qzcm ascendit de deserto , deliciis c7fluen.s , innixa siLper diltiticat suurn? (capitulo 8 , verslculo 5 . ) A esta p q u n t a (6 qne e n e l cBntico no se responde) responclc hien I sdas por estas palabras (capitulo I O , versicnlo 2 0 . ) : Bt erit in die illa : non adjiciet resiclnrcnz Israel , et hi qui fugp- rint de dorno Jacob , inniri super eo qui percutit eos, sed innitetur super sanctum Israel in writale. ReliquiE conwertentrcr , relicpip , inquunz , Jacob ad Dennz fo r - tent. Crtmbiriad ahora aquellas palabras : hi, qui f u - gerht de dorno J a c o b , Coli ayuellas otras del capi:cJo 12 del Apocalipsis : e t niulier fugi t in solitr&kmt, y hallareis e l mismo inisterio que contietirn Ins qrre ahora observamos de los cantares : iqcw est istn qrm ascendit de deserto , deliciis afluens , inrzixn supper di- Zectum suuot? Ahara, la afluencia de delicias con qlte sale la esposa del ctesicrto, es una CQnSCCl&?liciZt na- 'turd y necesaria de salir hziaixa super dilectunt suim,

3."

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762 seu super sanclunt Israel in verifate. D e esta misma afluencia Iiahlan freq8entemen:e 10s profetas y 10s salrnos , coiiio ohsen aremos ti su tiempo.

4." [Que est ista quce ascendit per cleseriunt, sicut ++gtila Jimi , ex aronzatihus m y r r h e t ihuris , e t uni- versi pelueriy pigmentarii? (capitulo 5 , versicnlo 6.) iQuie'n no ve en csta met r i l h ra achnirable la justicia y las virtudes heroicas con q u e In esposa aparece ador- nada deiante del esposo a l salir del desierto? Con otras metAforas semejantes , y no menos admirahles, de*crihe el esposo esta rnisma justicia y virtudes de Ia e5posa en varias partes de este divino epitalamio, sing$armente en cl capitulo 4, versicuJo 1 0 : Qzcant pui'chrcr: w z t nzanznz~ tuce, (seu antores t u i , conio se lee en Fagnini y Vatahlo , y eomo dehe s e r , segun testiiica el m d e r n o y eruditisimo en la lengria hebrea el seiior Makei): Quam pulchri sunt anzores tui , so- ror rnnpa spoizsa , hortus coiaclusus , f o n s signatus : enz- m i 5 :iont-s LUG= paradisus .... Surge uquilo , et veni aus- tzr , pe?;J/a horlunt meum , et fluant aronrata illius. Todo lo q u a l lo coinprehende el profeta, 6 el Es- pir i tu Santo que hahl6 por medio suyn , en estas pa- lahras , 6 rn esta promesa formal, hecha a' esta r s - posa , 6 5 estas santas y preciosas reliyuias : I n odo- rein suavitatis stmipinin vos , cicnz eduxero vas de po- puZi.y , e t congvegavero vos de terris , in p a s dispersi es t f s . I

Finalmente bagamos esta simple y brevisima reflcycon: el esposo de este cAntico siempre que ha- ],!a con la esposa, la snpone no en otra p a r t e , sino precisamente en e l desicrto y soledatl, en montes, e n yuehradas , en hosqnes y cuevas &c. Esta circuns- tancia es gravisima y de sumo peso. Si esta se husca,

I y n o se halla e n todas quantas esposas se han ima- g inado hasta ahora pnr 10s mayores ingenios; esto soio hasta (annyue no tnvie'semos 6tras prnebas) para conclnir a1 pnnto que ninynna de estas esposas, que hasta ahora se han imaginaclo , es la de 10s can- tares. Mas si esta circonstancia grasisima se halla clava y palpable segun las escrituras en esta esposa: si en esta concurren otras rnuchas circnnstancias igual- mente graves segun las misnias escdturasl, J- a1 misrna

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763 tiernpo todas !as expresiones, locuciones, y atin pa- labras del ca'ntico inismo, i n 0 serii esta una prueba Clara y sensible de que la esposa de este cdntico es la misma que ia de 10s profetas? Si es la rnisma que la de 10s profetas, es tamhien visihlemente la misina que la del capitdo 1 2 del Apocalipcis, como ohser- varnns en el fenbrneno 8 , la qiml debe algun dia huir , volar, 6 ser condacida 5 la soledad, para clue Dios la paeda hahlar alii5ai corazon , instruirla , enseiiaria, santificarla , como se dice en Isaias , Ose26, Miqueas y Ezcquiel , y coin0 s? dice en este lugar clel Ape- catipsis : ut i b i pnscant eant diebus mille ducentis se- xaginta. E n esta sola esposa torlo se entiende , y tudo segnn las escrituras y sin e l l a , 6 fiaera de clla , nada.

De este desierto y soledad (pasados sin clntla 10s mil doscientos sesenta dias) la llama rnnchas veces el esposo , sieinpre con palabras y expresiones llenas de :mor y clc ternura dicie'ndale que salga afriera para ser coronada , .porque ya ban pasado 10s dins rigidos del invierno, 6 10s tiempos del castigo, de obsccridaci , de tribulacion , y tamhien 10s dias de pi-ueha. Surge , propera, anzica ntea columba mea, f o r - niosa nzea , et deni : jana eninz hients transit t imber ubiit, e l recessit. .. surge, arnica mea speciosa mea, et veni.. . c o h n b a mea in forantinibus petrce , in cavernu mace- ricr. ( c . 2. v. I O . ) Veni de Libano, sponsa mea vcni de Libnno, veizi coronaberis , de capite anzana , de w r - tlce Sanir , e t Hernion ( inontes tados de Palestioa altrrs y Bsperos) , de cubilibus leonum , de moittibus pardorum,

Esta coronacion zi qtre e l esposo llama con tanta instancia 5 la esposa , parece segun el crintico mismo, que ha de ser mntna , 3si, coiino lo dehe ser e l nuevo dssposorio ; qniero decir , que e l esposo ha de co- r o n a r a la esposa su l iennana, pues para esto la llama de l desierto, veni coronaberis, y a1 rnisrno tiernpo h a de ser coronaclo de ella. Uno y otro se hal la clari- sirno en las escrituras, como luego veremos. Parece del rnisino modo, que este dcsposorio y coronacinn de arnhos hernianos ha de ser pilJ)lica ;y solernnisir m a , qua l nunca se ha visto en nuestra tierra. TwIo

( E . 4. 21. 3.)

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764 clnanto sncedid antiguamente B esla misina eaposa in die jrtvenlutis s u e , en su pr imer desposorio en cl de- sierto del monte S i n a i , todo h e como un prclimi- nar , 5 como una sornbra bien obscnra de lo que debe suceder en el segundo desposorio de qne hablamos ahora. A M todo Cue ternor , pavor y t e r ro r cou que se liacia entonces un tratatio con personas rndisimas, y apenas superiores A las bestias : tanto que estas yer- S O I I ~ S que coniponian aquella erposa , pidieron por gracia qne no les hablase el esposo por s i rnisino, sino por media de 3b3loyscs: Zoquere tu n o b i s , e t au- clirrwis : non loqualui- not is Dominus, ne forte ntoria- m7w. (Bxod c. 20. $1. r8.) Acli sei% todo al contra- r io : q,ue el amor solo ocuparrd, tod6 el ternor y pa- vor : tiinor enint nori est in clbari:ltrte, qnonianz charifas foras naiitil iimorem.

All& en a q w l primer ctesporio fueron testigos y minislros solamente 10s &ngeles : a c i en el segundo dcsprasorio ser8n ministros testigos y participcs de la aiegria y jribiIo cle aqnel so[ernniaiino dia no solamente 10s Bngeles sino tambien toc?a la corte del rey , todn la santa y celestial Jcrusalen que aca- ba de bajar del ciclo d nuestra tierra. Asi se en- tienden nalriraiinente sin vio!encia ni artificio alguno aqiiellas palabpas del epitalaniio , 6 cdntico nupcial: (cnpitcilo 3 , versiculo I I . ) Egredinzirzi $?in Sion , e t widete Regem Salonionena in diademate 7. quo corona- vit r:mz mater sua in die desponsationis i l k ~ i s el iii die Z d : i ~ corclis ejiis. Por las qnales pnlahras se corn- prehende a1 piinto, no solamente el nuevn y festi- vicimo desposorio entre 10s dos hermanos , sin0 tarn- bIen la nuew coronacion, como rey pecnliar de 10s jxdios, como rey y seiior de todo lo criado. Una y o h corona (universal y particular) se lee clam y distintnmente en las escrituras. Ea universal es freqtientisinia. en 10s salmos y en 10s profetas , y fuera una cosa vergonzosa el ignorarlo 6 dudarlo. La particular se puede ver en Isaias c a p i t d o 9 , en Amcis capitulo 9 , yersiculo 11 en 10s s a l m o ~ 88 y 131 , y por ahreviar en el evangelio de s. LuCaS capil-ulo r , ver s i cdo 32. La particnlar de Pa esposa

-misma de que hablamos , se puede ver en fodo el

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765 c a p i t d o 5 de Barnch , en donde ent re otras cosas se leen estas palabras : circuizdahit te Deus diploicle jiistitice , e t imponet inilrana capiii Aoiiori~ eeterni : Deus enimz ostendet splendorem sziiim in te, onirzi qui sub cce- l o est. Estas palabras siienan muchisirno , y no hay razoti alguna para clespreciarlas , y muclio menos para acomotlarlas zi otra esposa , <le cpien y con quien ciertamente no qe babln aqui.

$. 5." S i Ias particnlariclades que acabanios de observar , os conzencen de qnie'ii es la verclndera es- pasa d e 10s can ta r r s , me atrevo 6 aseguraros que. rais ti acielantsr infinito en la inteligencia de este divino epitalamio , con fl-ontjndolo siempre con 10s pvofetbs y con 10s salmos. §e' tambien qne todavia encontrareis C O S ~ S obscuras y dificiles ; ya porcpe no entendereis a1 pnnto la significacion vercladera de las metdforas , 6 seniejanras admirables con yae se explican estas C O S ~ S e b ~ c o r a s ; ya tamhien po rcpe despucs de h a l e r i a s entendido e n substancia , no pcdreis contmerlas con f a d i d a d si mibterio y tiern- po de que hablamos. Estas cosas particulares (que D O son muchas) me tuvieron tanlbiea A mi n o poco t i empo suspenso e' indeciso , h a s h qiie adFert i 6 empccc! 5 sospschar que la esposa refiere aCpi al- guns vez todo quanto le ha sucedido en 10s ticm- pos de su crguedatl , de sus tinielilas, de S U viu- dez , de SLI esterilidad , de su transmigracion y dis- persion en t re totlas Ins naciones.

Po17 exemplo , quanclo dice capi:ulo 3 : in Zec- tolo meo, per noctes qimsivi quem diligit anima mea: qircesivi illunz, e t noiz inveni. Stirgain , et circrciho civi- tnten? : per vicos , et plateas qira.mm quenz diligit ani- ma n2ea , qztcesivi illurn, e t i m a inveni. i Y no es es- t o pnntnaintente lo que le Iia sucedido zi esta i n k - l i z , desde qne se le ewondid por su incrednlidad 6 iniquidacl el So1 de justicia, y la dex6 en tinieblas? ? N O cs esto mismo lo qve anunci6 c!arisirnamente SII Mrsias , quando le dixo (Joan. c . 7. v. 34 . ) : yriceretis m e , et non inveniefis , et ubi sum ego, vos non p e s - tis wenfrc? Los yne oyeron estas palabras, prosigue S. Juan , drcian entre s i (y decian la verdad sin en- tenderla) : iQiio lzic iturus e s t , quia non invenieriius eurn?

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766 3'Linquid in dispersionenz gentium iturus est e t doccu-

riis gentes ? i Qziis est liic sernio quent d ix i t , queretis nte, et non iizveizietis , et ubi sun2 ego, vos non potestis venire? E n otra ocasion les dixo el mismo Seiior es- tas palabras, tomadas eviclentemente del salmo r I 7: Non nie videbitis amodo , donec dicatis , benedictus qui wenit in nomine Domini. (Math. c. 23. v. 39.) Y San Pablo plcnaniente instrniclo en la verclaclera inteligeil- cia de las escrituras , dice expresamente : quia c m i - tas e x parte conligit iiz Israel , donec plenitudo getitium intraret , e t sic ortzizis Israel salvus Jieret, sicrct scrip- luna est. [Act Ronr. c. I I . v . 25.)

Signe la esposa refirienrlo lo cine ha pasado en estas noches de su ceguedad, tribalacion p dolor: I n - venerzint me vigiles , qui custodiunt ciditatern. De estos centinelas que guardan la ciadad hahla la esposa dos veces , y (le nn modo hien cliverso. PQS donde po- demos sospechar que habla de dos centinelas arnhos metaf6ricos , pero diversisimos. i gua le s son estos? La historin y la experiencia quotidiana parece q u e nos 10s ninestran coin0 con el derlo. De 10s unos di- ce : Invenertint me custodes qui circunzeunt civitatem, percusserzmt me, et vulneraverunt me: tuleruntpalitwn meum nzilzi custodes nzurorum. (capitulo 5, versicnlo 7.) Es- tos segun yo pienso, no 'parece que pneden ser otros, que l aa gentes misnias entre cpienes ests dispersa es- t a infeliz , Sean etnicas , 6 mahometanas 6 cristianas. i Quie'n iFnora, si sahe algo de his tor ia , las grandes ye rs e cu c I on e s , t r i b u laci one s , concu sion e s , crue Ida des 77 har l~a r i e que ha tenido que sufrir esta triste viu- da en todas las lierras de su dispersion y cautive- rio ? i Quie'n ignora que se han verificado en ella ple- nisimamente tantas y tan claras profecias, que le anun- cian esto mismo desde Moyses hasta Malaquias ? Om- 7zes qui inveizerunt (anuncia Jeremias capi tdo 50 , ver- siculo 7.) comederunt eos , et liostes eorrvtlrt dixertrizt, non peccclviniz~s , pro eo quod percaverunt Domino decori justitia , e t expeciatioizi patruin eorum Domino, Estas trihulaciones es claro R innegahie que han sido ma- yores y mas crar les entre !os cristiinos,. principal- mente en tieinpos de i p c r a n c i a ? barbarie , qnanclo 10s centinelas, ignorando cz$iis S ; J ~ , ~ U S ernnt, inataban,

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767 quernaban y pedian fuego del cielo : arbitrantes ohse- qZkl r l l l 2 se prestare Deo. A est0 parece que alucle la es- posa de este cantico , diciendo : Filii nzatris mea? p i g - nnverzmt contra me.

De 10s otros guardias dice Gnicamente, que ha- bi6ndo.e encontrado cou ellos , les pregunt6 : ;iYCcriz quem diligit anima mea viclistis? Se ve aqui la pre- gunta , mas la respueata se clesea. Se ve el encueutro con 10s guardias, mas no se Yen concusiones ni-cruel- d a r k s , sino por tocla respuesta un profundo silencio. iQtiienes pnrden ser es tos? A mi se nie fignran 10s Rabinos 6 doctores bel~reos. A estos dice la esposa ( c a p i t d o 3 . ) que Ies pregnot6 por su amado, 6 les ~

pidi6 noticias ciertas del Mesias, mas no tuvo noti- cia ni respuesta algunn determinada. i Y no es esto lo que pasa y IO que ha pasado basta el dia de hoy ? Por tanto concluye dicicnclo : Paululunz cum pertran- sissenz eos , iizveni q u e m diligit anima mea : tenui e i m , nec dimittam. Como si d ixera : despues que vi yne mis doctores nada me decian que no me daban de mi amado idea alguna Clara: despues que 10s dead p despreci6 conio if €alsos e' ignorantisiinos maestros: despaes que en l u g x de oirlos B ellos oi i Elias, qui quidem venturus est , et restiltlet onznia , y junta- mente con Elias , i Mcpses y ri 10s profetas ( L u c . c . 16. v. d t . ) , entonces liiego a1 punto hall6 lo que de- seaha : Yaululwn cunz pertransissenz eos inveni quem diligil anima mea : tenui eunt , nee dinzittam.

Si con esta idea se lee todo este cintico nupcial: si este SE conihina en jnicio y justicia con 10s pro- fetas p salmos, y con otras no pocas y ohscuras es- cri turas del nnevo testamento, me parece cierto que no se hnllars clificultad alguna inaccesihie en toclo este ca'ntico de 10s c8nticos; antes se hallarri todo fa- cil y llauo , desde la primera h s t a Ia illtiina pala- bra. Lo qual no sucede , ni es facil ni posible que saceda en todas quantas ideas 6 sistemas 6 modos cle penbar que basta aliora se han imaginado sobre este cdntico no ciertanien!e carnal sin9 espiritual : n o human0 , s i n 0 divino: d lo qual me parece aiiadir esta sola palabra : 110 ca'ntico de este siglo 6 para este siglo , sino del siglo venturo , en e i nuevo cie;

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todo.

10 y nueva tierra : clespnes que el Mesias vuelva del cielo 6 nucstra t i e rm accepto regno , in gloria, et majestaie. Leed ahora el salmo 4 4 , y l o entendereis

iOh\ c p a n t a s cosas se me ynedan por decir , .y yuantas reflcxiones bien iinporkantes me veo precl- saJo 6 omitir! Mas [no podrdn snplir esta falta 10s Iectores cloctos y sensatos? A estos me reni i to .por ahora , pues yo no tengo tiempo ni talent0 para tanto.

C A P I T U L O I X .

ivision de la rierra santa entre las reliquias de Ius doce tribus de Jacob. Jerusalen de 20s profetas,

todavia viadora , y su templo.

I H a h i e n d o salido del desierto la muger solitaria, p a - si aurora corzsurgens.. .. inniza super dilectunz suan7; habiendo cetebrado SKI ntievo tlesposorio con otra niieva alinnza 6 pacto sempiterno, con una solernni- dad. infinitamente mayor que la del desierto del mon- t e S i n a i ; habiendo ungido y coronado B sn hermano y esposo corn0 ;i rey propio S D J T Q , no obstante que viene coronado del Padre cOmQ Rey universal de todo lo cr iado, debe h e g o seguirse el carnplimiento pleno y perfecto de iantas y tan magnificas promesas de Dios, yoe leemos expresas y clams en la escritura de la verdad: las yuaies no han tenido hasta ahora, ni h a n podido tener segun la misma escritora su pIe- n6 y perfecto c u m p h i e n t o . Aunque eslas promesas d e que habio sori P O C O menos que innurnerahles, ohscrvaremos esfas t i e s p r inc ip l e s de que dependen, 6 se signen naturahnente tcdd5 las o t r a s , y que por esto mismo son las mas obscuras (come, tiicen) , y tal vez dixeran mpjor, las m ~ s repugnnntes l a s mas enernigas , las mas pwju3iciales a1 sisiema vu lga r . Primera : la nueva divisiqn de la t ierra sati ta entre las doce trihus de Jacob , la qua l n o se ha vis- t o jamas in terra nostra. Segunda: la Patur:t Jerusa- Jco : n o cierto l a que debe hauar de! c ic lo ti nuestra t ierra , clue ya consideranios CII el c~tp;tu10 6 , sin0 la que segun las escrituras dehe ser todnvia viactora,

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769 y como ta l ciudad sacerdotal , cindad regia , .y corno la llama Jeremias princeps provintiarrrnz donziiia gcn- riunz (Tren. c . I . ) : capital 9 centro de unidad , no so laments de las doce tribus de Jacch , sino tambien de todos 10s hahitadores y viadores de toda nuestra tierra. Tercera : el templo magnifico y Linico en sn especie de esta nue la ciudad; y lo cine en 61, p S O L O en 61 deLerA hacerse en aynellos tiempos segun e l mandamiento de Dios misino. Eatos tres puntos p a - visimos de que hablan frequenternente 10s proretas, ( y de q a e todos tiran A prescindir , temienda la ruina t o t a l de su sisterna) s e r jn e l objeto de todo este capitulo.

El Seaor anuncia pur Ezecpiel en su capi- tulo tiltimo , - m a nueva division de la tierrn santn em t re Ins rcliquias de las doce trihus de Jacob , recogi- das poi- sn hrazo omnipotenie; no hahidndose ve- rificado esta todavia, no hay clrrda q u e se rerificard e n el tienipo para qiie est5 anunciada. S i yuereis sa- ber yo81 sen este k e d a1 profeta tlesde el capitulo 36 , y en todos 10s trecc capitulos que median has- ta el illlimo, encontrareis u n mismo misterio cons- tantemente continuado, que es el de Ia vocacion p conversion de las rdiquias de Tmel , con todos 10s sucesos generales y pnrticulares que la ban de pre- cede r , acornpaliar p seguir segun tenemos ohser- vado.

Sabemos de cierto que la division de la t ierra pro- meti t la , que se hizo en t iempo de JosnP ( fnera de la q u a l 110 se h a heclio janias otra) es infinitaiiiente tli- versa de la que aqa i antancia y prescribe Ezecguiel. hyuella Eue corno en circulos 6 espacios cliversos, y bien desiguales entre s i , en que m a s trihus tuvie- ron mas, otrns m e n o s : unas se estahleciercn cerca del mar , otras estahan no poco (listantes del mismo: i inas 6 esta p a r t e , otras k In otra del Jordan. Mas l a division c p e snultcia Ezeyuiel es perfectaniente i g w l eiitre todas las tr ihus : tnelas se extienden coino n n cpadri lqnSo de oripnte 6 ponicnte: todos estos cpadrilongos parten desde cierta altura muy oriental respecio ciei mar, basta terniinarse en el misino mar: todas van wrno zonas 6 faxas ipuales entre s i , p e s

S. 1.O

49

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770 2 todas y Q cada una se l e seiiala Ia misms porcion de pais , esceptnando la tribn cle Josef por sns dos Elijos Efraim y Manasds , quia Joseph (d ice el mismo profeta) dqdzcena fiiniculurn hnbet : e l qual pris iiegio se le consen ark liasta clptonces ai pairiarca Sosef, por ]a donacinn particnhr que le hizo su padre poco an- tes de niorir : do tibi partent imam extra fratres tuos. (Gen. c. 48. v . ult.) Tamhien se except& la tribu cIe L e v i , 6 quien se le seliala en Eiecpie l dcbie me&- da /& OJ. $. usque ad 23 . ) no obstante que es:a tri- hu jamas t n v o antiguariiente ni podia teiicr segun la ley posesion alguna entre sus Eierrnattos , pues Dios solo era su posesion. A todo esto se dehe afiadir, que e n la aritigua diYision de la tierra proinetida, la tri- hu de J L I ~ ; ~ y de Benjamin cran Ins iiias australes, por consiguiente lo eran tainhien Jerusalen y su templo. M a s en la division de ETequieI, la tiibu de Jut l i y Jernsalen yuedan en medio de todas las tribus: y la t ierra santa &he extenderse mas hicia e l austro usque ad aquas contrndicticitis Cndes (capi tdo 47 , versiculo rg.) , para Jar lugar ri cinro tr ihus q u e deben esiabk- cerse a1 nnstro de Jndli, que son las de Benjamin, de S imeon, de IsacSr , de Zahulon , y de Gad: todns Ias yuales en la antigna division era13 I parte septentriona- lcs , parte occidentales respecto de Jucli.

i Y que' dicen sohre una profecia t a n clara 10s in- tCrpreFes ? i coin0 procuran elttdil-ki? Los nnos ape- lan a' Bnbilonia, y tlicen qtie ad Eicteranz einpezci a l i i si vctificarse , per0 qoe en sentido aleg6rico se en- deteza toclo B la iglesia. iMas cbmo? Y o no lo SI!,

per0 Io q u e se' es q u e el texto es niucIio mas claro que la explication que se intenla ciar. Catros mas ani- niosos tirarAn :: persnadiros , que tcidas estas costs de que h:ihlamos, 6 las m:is de ellas no admiten senti- do l i tcral . M a s i p o r qu6 n o ? {flay alguna cosa en la escritnra santa ni la p e d e h a h e r , que n o arlrni- ta y que rralrnente n o tenga sentido literal? Si se ma niuestra a lg i ina , yo nhrir6 a1 punto la Biblia sa- grada, y mostrando lo que priinero ucnrre , dire' con la niisrna animosictnd , y n ~ ayri~llo que l e o , sea Io que foere , no atiiiiitr sentido literal. 2 Poi- c p b ? Por- que no hay raicn alguna ~ ni la puede habzr ~ para

,

,

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77 I que unas C O S R S admitari sentido l i teral (esto es , p ro- pi0 y genuino) p otras no.

Todas estas cosas de que actnalrnente hablamos (os oiso replicar) no adniiten ni puetlen admirir :,en- titlo literal , propio y genuino, porque contradicen, porque chocan , porque aniyuilan , en swna , p ~ r - q n e no se concihen. i M a s este no concehirse, esta contradiccion , esta repugnancia, es poi- ventura coil algun dogma de fC divina, 6 alguna otra veidnd ?;a conocida C inilubitahle? N o , Cristhfiio. Si csto f-lera, no dig0 yo cier to , pero d Io menos probable , 10s doctores catcilicos bahlaran sohre estas cosas en alfa v o z , p e n tono de segi i r idad, asi c o h o 10 Iiacen, y ccin snma razon en todos 10s puntos de d o g m a , y nos mostraran cemo con la mano acpelia verrlad de fC divina ri la qnal se oponen y contradicen estas mismas cosas de que Lahlamos.

Con que todn la dificnltad y repugnancia consis- te solamente en e l sistema vulgar, sohre el qual todos proceclen y clcl qua l todos parten como de un p i n - cipio s6lido y firme. Alcese paes alguna vez este ve- l o , y c h a s e sin rniedo esta cor t ina, y a l putito des- aparecertin todas las dificultades , las repugnancias y las contraclicciones; y la verilad de Dios que estaha cuhierta con este velo , se verd pa Clara y- mnrrifiesta con todo s n esplendor. El erudito y pi0 Cornelio AM- pide dice estas palabras hablantlo de la division de la t ierra santa de l capitulo t'tLtiino cle Eeequiel : quo- modo aictena hcee sortiuna Ezrqriielis divisio intelligznn'a s i t , faclaque , nenao explicat ~ nee ego divinnre avsim. Por las qua les palabras se ve que todos hasta su t iem- po habian prescindido de estas cosas: nemo expiicnk: y yo aimdo que desde e l tiempo de este sabio hasta el dia d e hoy ha sncedido lo misino : izeriio expiicaf: todos prescinden, todos h n y e n , coino si el Espir i tu Santo linbiese manilado escr ibir toclas estas c o w pa- r a que liuyesen y prescindiesen de eilas 10s que las k e n .

S. 2.' El simple discurso q u e acabamos de hacer sohre este pr imer punto lo estrndeinos confiadamen- te ;i 10s dos siguientes. La ciudctd capital de que ha- bla Ezequiel ciesde el capitulo 49 h a s h el @ , es evi*

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77" denternente Ia inisma de que h a M a n casi todos 10s o t a . 0 ~ prufcctas, y nias qne toctos e l santo rey y profeta Da- v i d , y de:pues de 61 Isaias. Es ta ciucbcl de 10s pro. fetds, no y u c d e sei- la que considerarnos y" r n cl ea- yitulo 6 baxada del cielo d nuestra t ie lm. La dife- rencia es pa lpable , si se comparan eon mcdiana aten- cion anihas ciudades. S. Juan ira de La suya todas las sefiales posibles , de que es m a ciu6nd cuinpvesia tocla cle santos ya resncitailos y perfectamente biena- ve iw rados. Ezequiel a1 contrario cla todas !as seirales posibies (as< coin0 Ias clan 10s otros profrtas) de qiie la ciuclad de que h a b l a , se coinpoiic totln de viado- res , justos y saotos ; mas que no han visto la iiiucrte, ni pasado pop ella. 5. Jilan dicr de SII cin- dad: et templunz non vicli in eu : Doininus eninz &its temphnz ilbius est , et ugizras : Ezeqraiel nl contrario, no solo le pone templo & la c;-udac! de que Iiab!a, si- 110 que se det ieee e n dcscribir proiixamente este teni. plo con todn su estructura con todas sus medicias, con to& 5us l eyes , p con todas Icis cosas particnla- res que se tlcherdn pmcticnr cn 61 p o r drdcn de Dios. S. Juan dice de su ciudad haxada del cielo: etporire ejus non clnudentur per diem, nox enim non erit illic. (versiculo 2 5 . ) Mas Ezeyuiel hahtaoclo de las puertas orientales de s n ciaclad, dice de una de ellas poi. donde entr6 In gloria del Seiior : Porla hrec clansa: erit : non aperietur , et vir non [ransibit per eunt : erit- q u e clausa priracipi , princeps ipse sedebil izt ea, ut co- nredat pctnena coram Donafno. (capitula 44, versiculo 2 , )

Otros inuchos distintivos podrcis facilmcnte advertir e n la cousideracion y confronto de iinii profecia C Q ~

otra. Dr esta ciudatl de Ezeyniel se habla tanto e n otros

profetas , que ser ia tina cosa iriierminnhlc el citarlos todos ; algunos viinos en el fcncimeno yuinio , ohserd vemos ahora e s ~ o s gocos. En el saiino K O I se dice: et iinzebunt gmtes nomen tiirrnt Doriw~e, et onznes re- ges terra? glorianz tuant : quia cpd?$caLit Dominus Sion, e t videbilur in gtoricL suu.... scribanfw hac in genera- l i m e altera ( 6 coin0 k e n Pagnini y la pardfrasis cal- dea pro genera ione riovissiiira ) et ~ O ~ Z Z L S qui creabi- tiv , lauclabit Domainiina.

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773 El salmo 1 2 1 : Lretatus sunt in his yucr! dictn sime

nzilii es hien digno de consideracion , coin0 tarn1,ien el salmo 146 p 147. Eas cosas qiie se dicen e n eilos, y e n otros np pocos , a i quadran a1 ticmpo de David, . ni & la vueita dc Balsilonia , con10 es clarisimo por la riiisnia historia sagrada. Por exempio : ~dif icans Jerusalem Donii izi~s , dispersiones Iwaelis congregatit. E n tiempo de Ddrid Jcruscrlen c s t a h edificada , y 110

Labia tales dispereicnes de Irrael. En la vueita de Ua- bilnnia, aunque sc rdific6 dc niievo Jerosalen, 110 se consregaron ?as dispersiones cle Israel ni se lian con- gregado hasta el ciia de boy, solo se congrep ron al- gunos pocos pertewcientes a1 reyno de Jnd&

En Isaias liallareis tan4as cosab , tan grandes’ tan claras , tan ntievas 6 inauditas sobre la futura Je- rnsalen todavia +iadora , que os liar& olvidar este solo profeta casi todo quanto hemos leido en 10s de- mas . Leed :( lo rnenos el cnpitrilo Go y 62 , sin es- pantaros ni arredrasos por las rvplicaciones vio!en- tas que ddn 10s doctores. Despues de esta leccion, y despaies de una aicnta consideracion , yo os s u - plica carisinlo Cris thf i io , q u e no cerreis volunta- iiameriie 10s ojcs 6 una 1w tan clara. Ya veis que yo no us0 aqui ni de reliedoq ni de cliscurso al- guno artificial : solo os contido Li que leais por vuestros ojos el textu Fagratlo con toJo sn coiitexto.

EEI Jeremias ( c a p i t d o 3 , 3 0 , 31 y 5 2 ) hallareis eosas bien particnlarcs , grandes y noiahles. Elitre ,

ad hien estas palabras que os pongo li ce dies meniunl dicit Doririnus , et Edi- as kaoiizirzn d turre 4lnnaneel zuque ad

portanc aizgvili. Et extbii ultra norma nzensurce in cons- peciu ejus super , collenz Gareb , e t circriibit Goatha ( s h e G o l p t r z ) et onznem wallen8 cadaverunz , c t ci- neris , e t ziniwrsam regionenz mortis usque ad torrerz- tent Cedron , e t usqike ad anguliim porfa cequcrrcnr Orientalis , Snricrrinc Domini : non evelletw , e t non deAtruerrir iil[ra in perpetuum.

Estas iiitimas palabras parecen la Ilave propia y naiura! r’e b c l a esta prrrfccia ; considerad ahora La grancle exten-ion qoe da Jeremias 6 la ciudad dr qne habla , la q w l no t w o jamas la a n t i p a Jerusnlen;

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774 pues el monte Calvario , e l E a r e b , 10s valles de 10s sepu lc ros , y d e las eenizas , d u n d e se arrojaba la ceni7n dpl templo , todo est0 estnvo sicimpre fuera, n o dent ro cle 10s muros de Jerusalem. Esta dificul- tad e s tan g r a v e , q u e todos la reconocen, y nin- s u n 0 la resiielve.

Finalmente por ahrevinr: leed todo el capitulo 8 de Zncarias, teniendo presente que se escribi6 mu- cho despues de la inel ta de Bahilonia; por consi- go ien te el 1-ccurso a' la vuelta de Babitonia , J' d acpella Jerusalen q u e se edific6 entonces in angustin tempo- r u m , seria aqui inny fiiera de proptisito. Considerad pues estas paiahras: diiec dicit Boniinus exercituunz re- versus stin7 ad Sion (seu rezrerfar ad Sion, como se lee en el original) et lznbiiabo in rnedio Jerrisatem, e t vocabilur Jerrrsalent civilas veriialis , et nioiw Domini exercituunz , mons sanclflcnlus.. . Si videbilur di$icile in ocrrlis rel fquinrum p o p u l ~ hiGus in illis diebus , limnquid in cculis m e i s dLfjicile erit?.. . Ecce ego saluabo yopuliint ~neirnfi de terra or'ientis , e t de terra occasus solis e t ud- dircnnz eos , et habitabirril in iiiedio Jerusalem .... Bt erit sicut cratis nzaledic/io in g e d b u s domus Juda et donius I srae l , sic eritis beneclictio.

Seguid la leccion de este capitulo hasta e l f in , y m e parece cierto que no hallareis cosa algnna veri- f i cnda piendrnente basta e l dia cle hoy. Y si llegareis liasla el capitnio 14, hallareis en 61 (v. S. u;\que ad

J i i z . ) otra Iiave ti otrn seiial mas cierta de 10s tiem- p o s de que Le habla ; v. gr. (vcrsiculo I I . ) et ha6i- tahunt in e n , et ann&ema non erit aniplirts , sed se- debit Jerusalem secura. Ved s i vinieron de oriente y de ponien-ie 10s que regresaron de Bahilonia, y si hahi ta ron tan seguros en Jerusalen.

La gran dificultad y ilnica cpe se opone 6 esta Jerusalen d e q u e habiamos , y de clue liahlan tanto ]as escritnras, es el text0 cle Daniel (capittilo 9 , ver- siculo dltimo) que dice de Jerusalen clestruicla por 10s Romanos despues de la muerte y rrprohacion c?el Me- sias , e t usque ad consui~znzationenz , etJSlzem perseverabit desolatio. Mas esta iinica clificultad queda ya rcsuclta en el fenbmeno de Jerusalen a' lo que ndcla tepso que aiiadir , ni clue qnitar. Me remito a' 61 enteramente.

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775 5. 3." Yo no ignoro, CristSfilo qne estos dos pon- COS que a c a h m o s de considerar , auncpe gravisimos, no son 10s clue os dan mas cuidado , ni 10s que os parcccn mas r e p u p a n t e s en I d a esta larga profecia de E:qquiel. La nueva divisiou de la tierra santa entre Ias reiiyuias de !as dcce tribus de Jacob , y la nueva Jerusa1t.n en metlio de ellas, fucran d vuestro pa- recer de algun mrdo tolerables para otro tiempo fu - turo, sino se afiadiese po r el mismo profeta , y con la riiisma 6 mapor ciaridad, o tm tercera , esto e s , e l temp!o qor &scribe con una exlcti tnd y proliridad tan p r i d e que parece nimia, y rnttcho mas lo que anuncia y aun prescribe para acpellos tiempos en ayuel mismo femplo; 5 salier, algunos 6 muchos de 10s ant iguos sacrificios y cercmonias.

Este templo (decis conlo temblando) este nuevo teinplo con estos augustos sacrificios y ceremonias, si se yuiere entencler in sensu litternli, tiene gravisi- inns inconvenientes, 10s q d e s ban obligacio en todos tietnpos a 10s doctores cristianos B prescinclir abso- lutnrnente de este srntido l i teral , sin por esto ne- garlo 6 impugnarlo ctirectainentc. Mas ,par que' tnntos temoras en c ree r y espcrar 10 que el mismo Dios tiene aminciado y piminetido p a l a otro t irmpo con [anta ciaridad? E Por y n ~ tantos temores , 6 Cristd- 610, donde no hay que terner?

Esto no puede s e r , os oigo replicar, p o r r p e ann cfaclo cam que se tolere otro n u w o templo de oira futrira Jerusaleii pawcen con todo intolerables 10s sacrificios , ritos y ceremonias antiguas , que apa- xecen como resncitadas , y como restablecirlas de 8;ue- vo en este misrno templo. La razon de esta repng- saneia (prosegnis diciendo) consiste y se l'unda en una verdad ; a' saber, que los antiguos sacrificios del tem- plo priiviero de Jerrisalen , y aun todos 10s qne se ofrecicron a1 vercladero D i o s , clesde el justo Abet hnsta el justo N o 6 , y drsde este Iiasta Moyses , esta'n ya reprobatlos por Dios inismo, como qiie fueron ' todos unas meras figwas del sacrificio de Cristo en la crnz , el q u a l nna vez consnmado , dehieron luega cesar y desaparecer del toclo las COW*; (pie lo ligu- rahan. Este e s , Cristdfilo toclo voestro argumenio,

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776 y no lo estraiio, porque como 10s ie6logos no re- conncen mas iglesia cristiaaia que la presente , ni otro tieiiipo 6 siglo yne el actual , n o dehenios maravi- 1l:rnos de que hnilen en todas estas C O S ~ S de que 3c- trralniente liahiamos (como en tantas otrns yne ya he- %nos considerado) grandrs e' insuperahies dificuitades. Mas 10s que no hablainos del ectado presente de la iglesia crist iana, qiie ba tenido y tendrii has ta - la ve- nida gloriosa del Serior; 10s que esperainos otro es- tado ciiversisirno, otro s ig io , otra t ie r ra y cielos nue- vos, in qriihris justitia habitat; y esle no segrnn nnes- t i a s ideas a rb i t ra r ias , sin0 solamente secrtndum pro- missa ipsius , no Emailarnos repugnancia ni dIficu!tad alguna, qae n o desaparexea i t 1 primer soylo, 6 a' la priniera reflexinn. Vamos por paries.

S. 4." E n primer lugar se y rcgun ta : 10s sacrifi- cios y deinas I rgdes qiie por institucion di17ina se debian ofrecer a i verdadero Dios e n e l templo de Jerusalen , ; estrin prolribidos en l a iglesia presente? Wicen tndos clue s i , p yo creo lo niisino. §e pre- gunta mas : jestdn proliibitlos absolutaiaiente y para sirmpre 1101. a lguna ley ciirecta, divina 6 eclesidstica? Parece cierto que no. Pues ni de 10s escritos de 10s Ap6stoles, ni de 10s crinones de la iglesia consta de t a l l ey , n i jamas Ita hahido necesidad d c ella. Por ot ra parte sabernos con t oda certiduinbre, que mien- t ras dur6 el templo de Jerusa l rn , esto e s , cerca de quarenta aiios despues de fuudada la iglesia cristia- na 10s sacrificios legales piosignieron como sieinpre s i n novedad alguna. Los cristianos que i iv i an en aque- Ila cinrlad, y 10s que venian de fnera , 10s Ap6sto- les inismos , .y aim e l Ap6stol de las gentes, .entra- ban freyitentemente en acpe l terriyio , ccmo en tem-

i o Dios, oraban en e'i, as is t ian 5 10s , ios , se purificaban sectindiinz Zcgeni, y

se conforniaban enteramente sin escriipulo algiino con l o qiis Eiacian todos, lo c p a l n o IiuBieran podido ha- cer , ni habieran hecho , si hul iesen teiiido alguna ley positiva en contra.

Yues i c6mo estdn prohibidos , y son iliritos en nuestra iglesia 10s an t iguos sacrificios , y denias le- gales del antigno templo de 10s jud ios? Lo esta'n,

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777 porrpe desde que se fund6 el templo de fe rusa l cn , se prohihi6 por e l mismo Dios ofrecer sxcrificio al- g u n o faera de 61. No hahiendo pues teinplo de Je- rusalen , no puede hacerse sacrificio alguno. Asi que, la prohibicion d e 10s antiguos sacrifrcios es indirec- ta , y p o r ella estuvieron tarnhien prohibidos estos sacriElcios en tienipo de la cantiviclad de Bahilcnia, y poi. ella lo estara'n desde que se derrib6 e l templo poi- 10s romanos zisque ad corzsumn?ntionenz et $nenz de este siglo ; porque hasta entonces, sesun la pro- fecia d e Daniel, capitulo 9 , versicu\o t i l t i i n ~ , ha de perseverar la destruccion del teinplo de Jerusalen. Mas si despues de esta grande d p o r a , se vuelve i edificar la ciudad y s u teinplo coma parece ciaro por Jas escritnras ; e n este tiempo dcl todo nuevo, podrsn voiver sin repngnancia alguna a l mismo tem- plo 10s sacrificios legsles que e n e'i se practicaban, s i acaso n o se opone alguna prohibicion nucva de Dios , por la que manifieste su voluntad. i li esta prohibieion la hahrii entonces, 6 110 ? Es indubitable que no, porque 10s profetas nos aseguran formalmen- t e en tdrrninos claros y precisos , que en a p e 1 tiem- PO, y e n ague1 temp60 que tarnhien 'anuncian , no solamente no se probihirh , si170 que se ha r&n con henepljcito de Dios , y aun mandato supo : i n o bas- tar& esto solo para aquictar maestros temores 6 es- crtipnlos vanos ? 2 Queremos acaso poner leyes d Dios mismo , y atarle las rnanos?

Asi coni0 quando Dios man& 10s sacrificios a' su pueblo con ciertas leyes y cereimonias y en cierto lugar determinado , oJtIig6 5 10s hombres , no 6 s i mismo , quedando en plena y perfecta libertad para mandar otra cosa qua'ndo y c6mo qnisiese ; asi del mismo modo quando prohibib indirectamente dichus sacrificios , rnandando destruir el Iugar linico 6 que 10s tenia aligados, 10s prohibi6 A 10s bomhres , n o B si niisrno , quedando Pn la plena y perfectisirna li- hertad para volverlos :i manclar en el tienipo y cir- runstancias que e'L quisiere : Ita Deus legifinla illn mandavit , ut legem non sibi sed homiriibus dare?. (S. Arrgresi. past. 36. in Jurlicrs.) a31011 que c p a n d o ortlenci aquellos lngares, 110 se 0bJig6 a' no yuikwlos. '31 quando

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778 1 0 5 qnitQ p o r jrastisimar causas , i p o r qu6 yuereis ohligarlo a no volver B darlos , y esto no obstante que d l mismo lo d i p , y lo prometa per os prophe-

s. 5." No ignoro, 6 Cristirfilo , lo que ;i todo esto 1-8 spnndr is , ni tampoco ignoro 10s diliersos mo- dos sutiies , ingeniosos , y tarnbien reiigioscs y pios, con que prccurais prescindir a q z i , 6 h n i r con honor de l p c ~ o enormisimo d c la autoridad divina , que poi- otra parte respetais , y no podeis negar. Respon- deis pues l o primer0 huscando el sentido literal, que asi la grande y prolixa profccia de Ezequiel como algunas o t ras , que parece que anuncinn sacrificios le- gales para otro tiempo fnturo , que solo miraron B la tue l ta de Gabilonia , y ;i aquella Jerusalen y templo q u e entonces se veriiic6. Mas yo veo ?:le este-senti- do que llamais l i t e ra l , no lo pedeis seguir ni aun si- yuiera quatro pasos , y vos mismo confesais ya t:<- cita , y a expresaimnte que esta e$ una ernpresa absolntamente iinposible , pues se oponen esta in- teligencia ttrda la historia sagrada y aun vuestro sen- t ido coinun. Si fuese posihie acomodar estas cosaq ri aquella vuelta de Bahilonia , con esto solo estaba su- perada la grande difrcultacl, y no hahia razon algnna para pontlerar tanto Ia o lscur idad de 10s Cltirnos ca- pitnlos clc E~eyniel .

Viendo pue.; a h d u t a r n e n t e cerrado todo recurso ;i la vuelta de Bahi ionia , recurris e n segundo higar j ia pura alegoria , para B lo mcnos decir alguna co- sa brillante clue sea cle edificacion. Nos asegurais que asi la ciudad como el teinplo de Ezequiel , y quan- to se annncia y se prescribe e n 151, lo torn6 el Es- p i r i tn Santo solamente como una sornhra 6 figura de nues t ra iglesia presente: y con esta f igura , y haxo de cstas semejanzas , intent6 pr incipalmmte aniinciar 1

nuestra iglesia, y lo que en ella se hnbia de practi- car hasta e1 f in del riiundo , para lo que me ci- tais pot- toda piweba algunas hoinilias de S. GreSo- rio super Ezrquielenz. Si, a m i p : he leido estas h o - milias ~ 6 estos panegiricos de nriestra iglesia, y he La- Itado en ellos Inuchisimas cosas buends , pias 6 inge- niosas , siiiceranieiite aeomodadas. y lleiias todds de

turir EL?

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779 huenas moralidades. Est0 mismo Be hnllado aunque de diversa manera en la exposicion de S. Ger6ninio; mas liahlando la verdad, ni e n uno ni e n otro de es- tos doctores se halla e l profcta Ezeqniel ni su pro- fecia. Lo que dicen de esta larga profecia, n o bay duda qne es santo hneno y edit;ca!ivo ; mas pnrece del tnisino modo indubitable, cpae todo etlo es muy ageno de la misma profecia, e' incapaz dc conten tar

quien husca en eila lo que realmente annncia: por lo mismo recurr is finalmente a1 dltirno castillo yuc os parece fortisinlo e' incxpugnabfe, esto es , a1 i-d- ciocinio , y argnmentais asi.

Los sacrificios iegnfes, y todos qnanfos se ofi-e- cieron a1 w d a d e r o Dios desde hdan basta Woyses, fuerou fignras del sacrificio de Cristo en la cruz: luego verificado este sacrificio dehieron cesar aque- 110s , J yuedar no solo intifiles, sino proccriptos d iiicitos no pudieado ya figurar como futuro sin nna insigne mentira lo cjue ya no era i o tnro , si- no presente 6 p.as"ado. A este terrible a r g a m ~ n t a ( q u a asi ha parecldo ;i muchos) yo reqpondo hrevi- simainente con estas clos pregnotas. Priinera : 10s an- tignos sacrificios , legales 6 no lesales, t fueron so- lamente figuras del sacrificio cle Cristo en la crw; y nada m a s ? Segunda : lo que fue figura de una coFa i'utura , [ n o puede jamas en ningun cas0 cpedar vivo 6 coerh ten te con lo que figuraha? Tan faiso parece lo uno comn lo otro.

Quanto ;i lo primero : si leenios la historia sagra- d a , y ]as historias de todas las naciones , no ha- llainos otro origen de los sacrificios, sino la inlinia persuasion del hombre de la existencia de un Dios, y de su dependencia total cle este Ser infinito que lo liahia criado , y de euya beneficencia recibia todo quanto teiTia. Asi se ve que 10s sacrificios empe- zaron con el h o r n h e p Dios 10s recihid con agra- d o , mientras nacieron de u n corazon simple &el, agradecido 'I religioso y pio. Dios como infinitamente grande y felicisimo en si mismo , no tiene cierta- mente necesidad algnna de 10s obseyuios y sacrifi- cios clcl hombre. Mas el homble sienipse tielie ohli- gacion y neceaidatl de ohseyuiar A si1 Dios ~ J' darie

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780 seiiales externas de $11 fe' , de SIE r e spe to , de sn itgratiecimiento p de su entera dependencia. Y de qiiC tatrn modo inas simple y mas naiurai podia dar e s t n s seaales externas , sino ofrecierido ri Dios sacri- fncios en honor ;y cult0 say0 , 6 Emcieotio sagrada a i p n a parte de lo que rrcibia de si1 neano?

fis vrrdad yrie 10s antignos saerificios , asi 10s r p e preeetlieron ri la ley , cdmo 10s que orclen6 Dios 6 su priehlo , nada tenian y nada obrahan poi- si mismos, todo su h i e n efecto ctependja de la f6, piedatl y sinccro corazon de l Gferente. Asi dice la cscritura : respesif Dominus ad A b e l , et ad munera cjus ; ad Cain autem , e t ad immeru ipsius non res- pexit. 2 3 ' est0 por q u d ? Nb cierto por la rliifersiciad de ofrendas y sacrificios , sino pnr Pa diversidad de corazones. Aun en el feinplo de Jernsalen , nos dice la historia sagrada, yne unas veces acept6 Dios 10s sacrificios que aiti se le ofrecian, coin0 en 10s tiem- pos de Salornon, de Ezeyuias , de Jos ias , de Ne- Beniias k c . , y en otros tiempos di6 muestras c l a i m de Loclo lo contrario.

De aqui se signe i mi p a r e c w , qne 10s sacri- ficios con que antiguainente se le daba culto extarno a1 verdadem Dios , asi antes como despces dr Mop- ses , no iueron solamente figuras , ni fueroii insti- tuidos y ordenndos &~icamente para fignrar 6 sig- nilicar el sacrificio de Cristo en la c r a z , sino tam- hien y primarianienie para otros fines justos , reli- giosos y pios , y en aqnellos tieinpos necesarios. Porqrie si solamente Iiuliiesen sido institnidos para 6i;urar el sacrificio de Cristo en la c ruz , Dios Iiu- b1ei.a revetado este secret0 ri alguno de sus antiguos amigos ; y en este easo nos yuedarian en las epcri- turas algnnos vestigios claros e' indubitables <le esta institucion , y del fin linico adonde esta se ende- reznba, io qual no hallanins. A inas , en este cas0 10s antigoos sacrificios hitbieran sido aceptos 5. Dios par lo que figorahan, auncpe le desapx lasc por otra parte la iniqnidnd e' indignidad de 10s oferemles. POI- consiqniente no hnbiera dicho par Isaias : i Quo nzihi niultituclinenz victinzariint vcstrc;rurrt ? Pleizus sum; koEocausta arieturit , et udipeni pinguiiim , et sangui-

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7s I neiit vituloriim , e t dgnorunt , et hircorunt nokiri : ne ofeeralis ultra sacrficiuin frustrn , inceitsurn cibornina- tio est n z i h z . ( c . I . 9. I I.) Y cierto que no dixo esto Dios d e l sacrificio del jrlsto Ahc.1, ni del de Bob, n i del de A b r a h a n , ni del de Meiquisedec ; antes dice la escritura , hablando del sacriiicio (le N 6, odoratusque es t Dontinus odorern suauitaiis. ( Geiz. c. 8. v. 21.) Y la iglesia en el ca'non de la misa ora 5 Dios qne acepte aquel sacrificio : sicziti ncceptra Ra- bebe dignalus es naunera p e r i tiri jiisti A b e l , e t sa- crjficiuna putrinrchlt. nostri Abralire , e t quod iibi o6- tulit simzis sacerdos tulis Melchisedec. Y Gllimamen- te el mismo Bios 10s hubiera prohi1,iclo como in- fitiles , y aun perjudiciales , derjcle el momento niismo en c p c espir6 en la cruz. T Q ~ O io q u a l in- d ica que el fin priinario e' inmecliato de la institu- cion de 10s antignos sacrificios h e u t D e w colere- titr , e t mens cfferentis ordinnretur ad Deunz. No por esto niego e l otro fin secunrlario e' ind i rec to , que- fue la signification 6 figura del sacrificio de Cristo en la' c r w , pces esto lo hallo espreso cn la escri- tu ra misma. ( A d He6. c . 9. e t IO. ) Si alguno no obs- tante quiere persiiadirnos yne este ~ l t i m o fin fue el primario en la m e n t e de Dios , y ague1 e l secunda- r io , yo no pieriso en t r a r e n esta disputa 110 me- nos molesta que inaitil , pues para mi p r o p h i t o J I ~ - ria importa.

Mi segonda pregunta es estn: [lo que fue Ggura de una cosa ftitura, no prkpde jarnas c o e s k t i r con aquello misino yue figuraba? Yo n o lzallo e n esto re- piignancia a lgnaa , antes me parece tina cosa bien ibcil de suceder; y aunque pndiera producir n q n i no pocos cxemplares (que no tardare mucho en apuntar). me basta poi- ahorn el tcmplo mislno de Serasalen, y 10s sacrificios que e n dl se ofrccian por institrncion di- Tipa a l vcrdactero Dios, Aquel templo (decis con todos) fue fignra de nuestra iglesia presente , p 10s sacrificios que en 81 se ofrecian a Dios, fueron figuras del sa- crificio de Cristo en la cruz. Gien: yo creo lomisrno, y. io kengo por induhitahle ; mas con toch eso se' de cierio que este iiiismo ternplo, q u e tantos siglos ha- bia iigurado nuestra iglesia , coeiisti6 con eila, ya

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782 fundada , estahlecidn y propagada en Asia , Africa 3; Europa ' may- cerca de quarenta ahos. Se' del rnismo modo, que aiin habi6ndose verificado plenisimamenfe el sacriiicin de Cristo en la c r u z 7 10s sacrifieios d e a p e 1 tcrnplo no cesaron, sino que prosiguieron sin novedad algnna coil la misma solernniclad, y con las misinas cerenionias, instituidds y mandadas p o r e l mis- 1110 L'ios.

Direis sin duda que en aqnellos yunrenta afios, n i el temp!o ni sus sacrificios sigoificahan 6 fignraban cosa a!guna futura , p w s lo que tantos siglos antes h a h i a n slgnificado y f ip rado , . ya no era futuro , sino presen- te 6 pnsado ; por consigaiente ya eran como si no €ue- sen. Con todo eso digo yo: aquel misriio templo q n e tantes alios halria figrirado, y ya no figuraha cosa fu- tura , e s k t i a entonces, era realmerite teinplo de D i m , era casa (le oracion : 10s cristianos primitins spirilus hnbentes entrahan en 61, oraban en 81, adorahan en 61 a1 verdadero Dios. Del ohispo rnistno de Jernsalen §an Jacoho, dice s u hislor ia : huic uni licebat ingredi in snncta sanctornm. Si esto e s verdad, C A que entraba a l ternpio este santo obispo, si ya el templo era e n - toraces corno si no fuese? Del niismo modo cliscnr- r imos de 10s sacrificios. Lo que estos habiaii signifi- cado 6 figurado , estaba ya verificado ylenainente , ?: con todo , 10s sacrificios prosiguieron sieinpre en ho- nor ;y culto del vertladero & o s , liasta yue 10s Roma- nos destrnreron el templo : ni 10s cristianos tuvieroii janias escrilpulo de asistir B dichds sacrificitrs. A to- do esto se puede aiiadir lo que dice S. Lucas (Act. A p . c . 6 . w. 7.) nzulta etiana turba sacerdotunt obe- diehat f i d e i : y n o h a y dndn que estos sacerdotes , 6 hnhieran dexado e1 ministerio del teinplo , 6 hnhie- ran sido privados d e 41. Con todo , el historiador sa- gsado natla clice sobre esto.

De todo lo qna l , y de otras mil reflpxfones que es facil hacer sobre este asunto, me parece que po- demos concluir legitimamente, que asi el templo d ~ ? JerusaLen , corno sus sacrificios p demas legales no fueron solarnente Ggnras 6 inrras significaciones de 10 iiitnro, .y a u n quando lo fuesen, pudieraa muy hien coenistir con lo qiie figm-aban,

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783 5. 6." No temais, 6 Cristnfilo! qne en esta nurstra

ig!esia presente , antes de la venicla gloriosa del Se- i l o r , sc hapan de ofrecer alguna vez ai veidartero Dios 10s sacrificios legalcfi cle la antigua : ni tam- poco penseis por nn solo inomento, que yo soy ca- pae de a i a n z a r tan manifiesto absurdo. Los profelas de Dios que anuncian tantas veces y con tanfa clari- dad otra Jerusaken todavia futura , y ciertarnente via- dora, otro tetnpio ( en p a r t e , no en tedo) semrjante a1 an t iguo , y alguaos de 10s sacrificios q u e entonces se ofrecian, no halrlan de eq!e t iempo, ni dc= esta iglesia presente, ni de este dia de los hombres : en suma , no habhn de esta tierra v i e j a , y cicios 6 cli- mas viejos en que nos lialiarnos ciesde ei diluvio de No6. WabIan iinicamente de la tierra y cielos nuclos: q u e wcrsndum promissa ipsius spectaniis, pues cle otro modo se contradiseran entre si.

As: corn0 el antiguo templo de Jerusalen, y Jeru- salen rnisma, n o puedeu edificarse, segun las escsi- tiiras, rnientras darnre este siglo , 6 este tletnpo de l a s naciones, 6 esta t ierra vieja en que vivirnos ; asi no hay que temer p o r ahora diclios sacrificios en el t empto de Jerusalen : iquC: tenemos que tenler po r ahora, ciuando sahemos de cierto que Jernsnlen y su. teinplo perseverar6n destrtiidos usque ad consunimntio- nenh , e t J i n e m ? De ayui se indiere ( y esta es una ver- dadera apologia rle 10s doctores cristianos qtxe Lan to- cado estns pnntos desde el siglo quarto hasta el did de Jloy) clue todos 10s que espantados de1 granrie y Ierriiile fantasma de 10s rniienarios , repugnaron o h siglo futnro , ofro dia , otra nueva t ierra y nue los cie- OS, otro espacio granile de t i rmpo entre Ia venida gloriosa del S~f ior , y el juicio 6 rrsnrreccion univer- s a l , lran tenido todos sunla razon para eFpantarse tambien, y tirar hnir, 6 prescindir de todo quan- to leen en 10s profetas de D i m , de Jerusalen futura, de sti teniplo, de & u s sacrificios &e,

M n s tlesvanecido este verdadero fantasma , ique' tenemos ya que l emer? 2Quie'n nos ha pedido nues- tro dictamen , 6 nuestro heneplAcito, para lo que Dios harli 6 podr;i liacer en otro siglo diverso, 6 en otra tierra del todo rrueva, cuyo gobierno no nos toca.7

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784 Hat4 Dios entonces tndo yuanto qnisiere, y todo can i n f i n i t a sahiduria : harzi casas nuetas e' inauditas has- ta el d ia de Iioy : e t dixit qui sedebat in tl2rono: ecce nova fac io ontnia : h a r i cosas , que no sornos capaces ahora ni nun de imaginar: y entre estas hark tarn- I1 i e n in dn t i ab i e 11) en t e 1 oda s yuan tas t i en e an u n c iacla s y proineiichs p-ra aynei tiempo per servos suos pro- phetn.c. . . .quia impossibilz est mentiri Dermz.

P o r consiguipnte habrri en acpe l los tiempos, y en aqiielia nucYa tierra u n a ciudad llarnada Jemsalen, capital y ceniro de unidacl: hnl,r& en esta cindad ca- p i t a l un templo magnifico, n i mas ni nienos como lo describe Ezeyuiek: se dppositard otra vez en este nuevo tcmplo la misrnii-arca sagrada del antiguo tes- tamento, e l taberndcvlo y e1 aktar, que. escondi6 Je- remias divino responso ad se f ac to en una cueva d e l inorite Nevo , profetieando , quod ignotus erit Zo- CUP, donec congreget Delis congregatioiae~i populi , et propi t im f iat, et tunc Donzinus ostendet hmc , et a p p - rehit majestas Domini , e t nubes erit sicut et Mqysi ninn?fesfabatur, et sicut cum Salomon peliit , ut locus snnclcjicaretur n q n o Deo. ( 2 . Mach. c . a. v . €4::) En s u m a : se volvera'n ci ver en aquel templo, y h ~ i -

caniente en 61, Io que ahora tanto se terne, coni0 si hablira con nosotros; & saber , algunos 6 muchos de Ins antignns sacrificios y ceremonias.

Mas . ara yu8 , ( o s oigo replicar tiltiinamente) para qui'*in en este niicyo tempko (y.a cristiaiio co- 1x10 se snpone) estns antiqraisiinos sacrifi4os y cere- manias de la antigita alianza? LPara qu6 fin se ha d e vol ier ;i colocar en 81 la niisina a rca , el misrno ta- herna'cnlo y altar que se hizo en el desier to , secun- dicna cxenzplor quod Moysi in monte nzanslratiim est? i0 mi Crisi6itiio! Esta pregunta hacddsela al Espir i tn S a n t o , no 6 mir iQn8 yueieis que yo sepa de 10s fines y consejns de Dios? [Quis enin? cogqovit sensum Domini, aut quis consiliarizis ejus fuit? No obstante, peimitidme que os diga con las palahrits de Cristo (Marc. c. g. 2). 22.): Sipoies credere, cimiziapossihilia sunt credenfi. S i podeis w e e r sinceramente totlas estas cosas y ohas srrnejantes, que ieeis claras y expresas en la escritara de la yerdad, no Piallareis tanta dilicul-

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c85; /

tad en entenrlerlas. Mas si ynereis primero enten- dedas , si para creerlas esperais verias todas C Q ~ ~ ’ O I - -

mes a1 sistenia q u e os babeis forjado, en cste cas0 me parece iiiiposible su inteligencia. Por el contrario: una vez creidas todns esias cosas, esta fe‘ simple y humilde sei4 CQIMI un principio scilicto y firme, so- h r e el qual se podrsi trahajar con huenas esperanzas en la inteligencia de estos fines 6 consejos de Dios; B lo rnenos por medio de nlgunas razones de con- grnencia , fi de algunas priidentes conjeturas. A mi se me ofrece una que me parere t a l , y que voy luego 5 propowr B vuestra consicleracion , dexando abierto c1 gran campo para que discurrais otras rne- jores. Vedla aqui.

Los antiguos sacrificios que segun las escrituras yolverrin 5 aparecer en el siglo ien turo , en la nlicva t ierra , en el n m v o y i l l i r n o templo de Serusaien, no serdn entonces otra cosa yiie u G a nueva y sa- pientisiina liturgia, instituida y orcleiiaija por el saiiio J’ e terno Sacerdote Gristo Jesus. No s e r i n , dign, otra cosa que i inas cerenionias no solo significativas, s in0 chrarnente demostrativas, que dehersn enton- I

ce:s preceder en aquel solo individuo templo ai sa - crificio incrucnto de Ila Eucaristia. l Y esto para rgr:~’ Pam que concurrm a l p n a vez , se abracen, y se den Bsculo de pnz todas las antiguas figuras con lo que habinn fignrado; para que estas figuras se vean al- g u m vez de cerca, p confrontadas con el original alii presrnte se eBiticndnn todss con ideas claras, y se admire J’ bel~diga Ia sabiduria infinita de Dios en sn institncion.

que' teneis que r ep rebende r , ni qab estrnfiar en esta congetura ? E n la liturgia presenie , institus- da sabiamenie p ~ r la iglesia , Ino preceden rnachas veces la leccion de las profecias que lo annnciahan expresamente 6 en figuras? i Bo preceden muclias veces Q nuestso sacrosanto sacrifncio iiuu&as .cere- monias an t ig t i as y nnevas, laas 6 menos signifjcati- vas del mismo saeiiii‘noio? E n la tillima cena del Se- € tor , i no precedircon inmediatambnteJos legales 6 la institncion (le la Eacaristia ? Pues 2 que‘ r e p u p a n c i a ni yuC al,surdo puede iniagiuarse en que - e11 apucllas_

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786 t i empos , en aqiiel siglo, en aqnel solo templo se ofrez- ca 6 Dios et verdadero y sacrosanto sacrificio clel cue]-- PO y sdngre de Sesncristo, precediendo 10s legales que io hahian figuraclo ? eQud repugtiancia , en clue el arca misina de la antigna a l i anen , donde se depo- sitaron no solo Ins dos tablas de piedra escritw di- gilo Dei vivi, sino tambien un vas0 de man&, fng.nra cle nuestro sacramento, sirva entonces p ira deposltar y conservar pe rpduamen te el misrno sacramento? ;,Qne' rcpngnancia en f i n en ([ut3 se veiifnciue en acqnel tiem- P O , y. en aquel siglo del toclo n u c v o , todo c p o t o antincia el profeta Ezeqniel con tanta difusion y pro- lixic?ndl Si entonces n o b e verifica, 1 yuanclo poodrd se>-?

Decis aqui ( p e s es menester ocurrir ii todo) clue S . Pablo ( I . ad Cor. c. 1 1 . ) ascgura que e l sacrrfi- cio del cuespo y sangre de Grist0 durar8 solameutc hasta que d l venga : quoliescun7qrae enint nzaizdzccabilis paizena hunc , e t calirena hibetis , nzortenz Donaim' cinrztin- tiabitis doizec veniat. Luego despues que 61 venga, no podrii ofrecerse 6 Dios este sacrificic de justicia, y por consiguiente ni 10s a n t i p o s legales. Es ta pe- queiia dificultad se resuelve i'acilinente con solo eu- tender la propia y genuina signiGcacion del adverbio donec, a s i en frase de 10s latinos, como inucbo mas en frase cle la escritura santn : 17. 6. sede d dextris meis donec ponarn inimicos tuos scabelurn peduna tuoruna. Es- tas palabras del sdino 109, es certisinio que no cpie- ren clecir que despues cle estar puestox 10s enemigos de Cristo baxo sus p ies , deiarii cste de estar sentn- do & la dieatra de Dios ; pues que esle descanso ii l ionor y Gloria clebe ser eterna. Ee el niismo sen- t ido Jice S. M n t e o , hablando de .§. Sosef (capftnio I , vsrsiculo 2 5 ) : Et accept conjtcgrnz w a r n , et ncn cogizoscebat eana , donec peperit jiliunz stizitn printogt~- nilunz. Y iio obstanie es de fe' divinn la perpetua vir- ginidad cle nuestra Sefiora : por consignient.e e l doizec no significa en estos lugares e l tfr inino de lo que se anuncia. Del niismo modo potlemos clrcir del donec ve- nial de S . Pablo. No yuiere tlecir que quando vcngn el Seiior faltara de l tQd0 el sacrificio de su cuerpo y sangre , sino simplemenre que no falbarii jamas'cn tvdo el cspacio cle tiempo que debe Lnediar entre

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787 su institucion y la ve:nida gloriosa del Selior. Esle es Li mi paieczr , ni puecle ser o t r o , el serttido Ii- teral del texto de S. Pabio.

Volviendo ahora B lo que cleciamos, esto es, a' la concurrencia que h a b r 8 6 podrg haber an aquei t ieinpo, y en a p e 1 solo t e m p l o , del sacrificio in- c ruento del cnerpo y sangrc de Cristo , y de 10s antignos l egdes ) ine parece qoe V B O anunciada hien clararnrnte esta concurrencia en algiinos lugares de la escritura. Ved aqni dos 6 tres.

Prirnero: en el salrno 50 leo estas pnlabras: Be- nigne fac Laornine in bona voluntate tua Sion , r i t e&- @ce$rr niuri Jerusalem : tunc acceptahis sncr[ficiimt >iistitia , oblationes, et holocausla , tunc inapoiaerit su- per altare tuum vitidos. i Q L I ~ sacrificio de jiisticia puecle ser este , que aceptari Dies juntnmente con lae ohlaciones, holocaustos p vituios q u a n c l o se edi- fiyoen 10s miiros de Jernsa!en ? Ea e-ipiieacinn clue dais 8 estas palahras se reduce 8 que Dios acepfa- rci 10s sacrificios c p IC h a p im corazon pio. Mas el sacrificio q u e procede de tin ;Inimo justo y pio, i no lo habia .aceptatlo Dios antes que huhiese tern- pio en Jernsalen? Los sacrificios de animales ) ;me- recen el norribre i lnstre de sacrificios de jristicia ? Btros penetrantlo hien la gran dificultad ju7gdn ( 5 mi pnrccer tenierari,imente ) qtie estas pa!abras las ailadieron a1 sairrao !os cautivos de Babiionia. Mas esta noticia i de cpi6 Iiistoria Gdedigna la tomaron? Y aunrpe e&o se permitiese , 2 que' sacrificio de jus- ticia oi'recieron A Dios 10s q u e volviernn de Babi- l o n i a ? El niisiiio que antes sin novedad algutm. Otrets en fin , y 10s i n a s , se acogen acini a l recurso or- dinar io , que es In alpgoria : ut eedificeniur niuri JF- rusakna , id e s t ) ecclesia Christi , en la cisat acep- tar5 Dios el sacrificio de justitia, .que n o p e d e se r otro yne el que le ofrecen 10s cristianos. Segun esto 10s holocaustos y vitulos que !e p ~ n e n sohze el altar (le D i m , ciebera'n ser tamhien Iiolocanstos y vitnlos a?eg6ricos.

Sesundo : en Naiaqaias (capitnlo 3 , versicnlo 2.) se dice : Ecce veizil , e f qrris poterit ccgitnre diem ad- c w t t c s ejus? .... ipqc eriim quasi ignis colzjLnns e i qiinsi

S . 8."

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788 herba fiil2oniim. ... e t pupgabit Jilios L e v i , e t colabit eos quasi aurum , e t quasi urgentitin , et eiunt Domino of- Jerenles sacrifi(ia in justilia : et plccebit Domino sa- cr;$Lixm h d a , e t Jerusalem sicut dies scrculi, e t sicut anni ant ipi .

Crist6filo , la inte!igencia tan ohscura o violenta que pietendeis dar d estas palabras,

acmnoddrlas del modo p ~ h i b i e B la primera ve- ilida de! Seiior. Vuestro principal p dnico f~inda- inento que muestra alguna apariencia favorable es a t e , qoe Jesucristo mismo hnbiando de S. Sunn Brtu- tista citd el primer versieulo &e este capitulo 5 de Malaquias , diciendo expresainente que Iiabla de San Juan : hic e s t d e qC60 scriptrrnt e s t : ecce ego milto nn- gelunz W ~ F L L R Z nnfe fai ianz tuant qui praparabit vianz tuum ante te. ( M n t . c . 1 1 . v . IO . ) ( LPLC. c. 7 . v, 27.)

A este argutriento sc responde que Jesucristo cita el primer versieulo de este profeta con suma razon, y con suma propiedad, p e s en 61 se hahla minifies- tamente de §. Juan Bautrsta. Mas en este primer ver- s i c d o i s e Iiahla irnicamente de S. Juan Bautista? Esto es lo yue yo niego. iPues de qoc otro tingel 6 cn- viado extraortlinario se hahla a q u i ? § e habla , selior mio mrtnifiesta y propiamermte del profeta Elias , y de s u mision totlavia ftitura , y a1 mismo tiempo aun- q u e inttirecta y secundariameote de la mision de San Juan Bantista : el q u a l vino, como dice el evangelio, in spiriifu, et vir tute El ice . (Lisc. c. I . 2'. 17. ) §. Mar- cos empieza su evangelio con la pretlicacioo de §an J u a n Bautista , para lo q u a l c i fa no solainelite ei testo de Malaqoias, del q u e a1ioi.a I-iabiainos , sino tamhicn el versiculo 3 del capiiulo 40 de Isaias : v o x cZn- mantis in deserto ; parote vinna Doniini , rectas fac i te sernitas Dei nostri; y n o hay duda que en ambos texios se anunc ia la rnision de l Bautistn: in vir/ute Eli te , per@

i*incipalmen!e la del ' niismo Elias para su tiempo. L e d todo el contexto de uno p otro profeta, y me persuado ,[ue con esto solo ahrireis 10s $os. El con-

o de Malaquias lo acahais de l ee r en lo que sigue a1 versiculo I hasta el 5 , 6.1 conlevto cle Isaias lo p.odeis ver en lo giie precede p signe a1 texto par- t icular que cita S. MRFCOS, que es el versiculo 3 del

No ignoro

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\T% dicbo eapittdo 40. Basta leer estos tres primeros ver- siculos para cnnoce'r a i punto loc tietrrpos de que babla este profeta directa 6 indisectarnente , estn eii, 10s tiempos de la mision futura de E l i a ~ , p sectxi- daria 6 intlirectamente 10s tit,mpos ya pasados de la mision de S. J u a n , que apareci6 en el mclndo in spi- ritu , e t v'rtute E l k .

GonsoEanTini , consolamini popule meus , dicit Deas oesler ; loquiiiiini ad cor Jerusalem , e t advocate eam: qrioniant coriiplela est malitiu ejus , dimissn es t irziquitas illius : suscepjt de ntnna Domini dripliciu pro oriinibus peccutis s i t is . Vox claniuiatis irt deJerto , parute viant Domini, recins f u c i t e semitas in solitudine Dei rcostri. E n iieinpo de S . Juan Bauiista no se bahia con- cluido la maIicia de Jerusalen (li de Israel de doride era la capital), ni se !e Iiabia remifido SII inirpidad, iii b a l ~ i a recihido duplicia pro orranibus peccatis st&;

p i e s este duplicia lo sufre hasta el clia de hoy, y triclavia sigue sin saber Basta quando debe r i darar. El v o x clamantis in desert0 , se uerific6 ciertamente en la rnision de S. J u a n , y se verificarzi rnejor to- davin en la mision de Elins, poi. medio de la qual sesd llamarta Jerusalen , y todo lo yrie se eompre- hende baio de este ncmbre ; se le habiai*a entnnccs aI corazon , y se le perrtonar',i toda s u i n iqu idd pa- s a d a , cc rno que ya kahrd rccihido duplicia pro om- aibics peccatis suis.

Este parece el s t n t i d o manifiesto ~r palpable cle estn pr'ol'ecia (lo mismo d i p de la de Malnqiiias): el q n a l scnticlo lo confirm6 exprc\amente el nzismo 3e- sucfisto quando rlivo liabiando de S. Juan Bnutista: Elins jam sznit, e l non cogrioverrrnt c u m , e t fecerunt in eum gii l t .cz~n~qrre sollrerwzt ; mas para que ninguno eyuivc,case el espirita y virand de EZias con qne vino s. J u a n , como precursor de sit plimerd venida , con la persona misrna de Elias que 1eiidr;i como gse- cu r~ r ' i ' (le !a srtgunda , aFiatTi6 : Elfas qziirkena sen/rirz~s e s t , et restita:t oriiizia (Hat. e. 1 7 . 2'. i I . ) : con lo qiial, prosigue 9. Mateo, conocicron 10s discipalos q u e ha- hlnndo d e Elias , liablaba iainbiun dc Jrian : tll72C in- te l lexmint discipili, qirfa d e Jonnne BnpriJla , di.z.i.cs,;t c i s : asi que el primer versiculo de Malaquias liabla

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790 ciertamente de la predicacion fu tnra d e Elias. Los quat ro versiculos siguientes ya no pneden aplicarse a 10s tiempos de J u a n , 6 a la primera veriicla del §e- f ior , qorque en e d o s tiempos no se verific6, ni se l ~ a veidicaclo basta ahora nada de lo que anuncian. Bcce venit, e t quis poferit cogitnre ( 6 como leen Pag- n in i , Vatahlo y 10s 7 0 ) quis ferre poterit diem udueit- tus ejus , e t quis poterit stare cum apparuerit? Ipse enim qurrsi ignis conJans Gc. e t pur-gabit Jilros E e v i , et col- labit eos quasi aurum, e! yuasi nrgenium , e t erunt Do- mino oflei-entes sacr?ficia in justitia.

Totias estas expresiones p i -ecen inny impropias y agenas snmamente de ayuel 11iedo dulce y pacifi- e o , huinilcle J- llano con q u e apareci6 e l Seiior ea la t ierra la primera vez , quando vino en c a m e pasi- ble. Entonces, 1c.jos de purificar 6 10s hijos de Levi, como se purifica el or0 y la p la t a , 10s des6 por la mayor par te en toda su inrnundicia, en la qua l per- severan hasta e l dia de hoy. Enfonces n o ofrecieron ii Dios sacrificios en justicia. Ponetl ahora 10s ojos e n la seguntla venida dcl Senor , 6 la qual debe pre- ceder la misioii y predicacion de El ias , y- a1 punto entendereis todas estas cesas : al puiito entendereis qukncio y c6mo pnrificard el Seiior d 10s hijos de Levi, corn0 e1 or0 e n e1 criso1, esto e s , en 10s quarenta y dos meses cle soletlad y penitencia en que Jas re- liqiiias de Levi serrin verisirniirnente ias inas atendi- das , Entnnccs estas reliquias de L e v i , J’F purificadas y santificadas , ofreccrAn Dios sacrificios ell jnsti- cia. Srria hueno reparar a y a i , que el profeta habla e n p l u r a l , sacrficia, y es c i c r to , que en la iglesia presenie ( 5 ciuien se prerende acomodar todo esto) no ha h a I ~ i d o , ni hay , ni puede baber sin0 u n solo sacrificio que es el de currpo y sangre de Cristo: inas en 10s tiempos futuros de q u e liabla e?ta pio- fecia , podrA bicn haber en ayue i solo templo este sacriiicio prcsente jpntarnente con el antigno , y uno y o t ro e n vertladera justicia. Poi- todo lo q u a l podra en a q u e l tiempo decir la esposa a1 esposo Con toda veI-dad Y propiedad) zqucl las palcrbras q u e ya est6n regisiradns en e l cd~i t ico de 10s cihticos: nova e f ve- tera, dilecre nii, sci vava tibi (capitnlo 7 , versiculo 13.)

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791 Concluyo este punto con un pasagc luminoso del

sapientisimo autor Antonio Vieym , ciiya obra ma- nuscrita de regno Christi e t Dei in ierris consunznzato at fin h e podido lees. E n e l segiindo tonio, capi- tulo 1 1 , trata rlifusaniente del tempto de Ezeyuiei y de todo quanto en e'l se anuncia , y ent ie 10s seis rnodos que propone sobre la inteligencia literal de esie tenlpio, el terceso es en substancia el que 70 acabo de congeturar. Es verdad q u e su sistema parte de un principio i'also, piles swpone que Jernsalen y su templo se pueden volver li edificar antes cle la venida del Serior y cansuynacion de este sigSo ; mas derando esto aparte , dice este sdhio , i q u e in- csnveniente flay e n que s$ vean juntos la figura y el figurado? i No se puetie encontrar en su palacio el gran Alejanclro y su retrato? E11 el mismo cenk- culo y auii en la rnisma mesa ino se hallaron juntos el corderu pasyual y el nugusto sacraniento del altar? Narla Iiei;e pues de repugnante yrte en ayuel templo futuro se vca la somlwa y la v e r d a d , la figura y Q qnien se figuraba; y para qne no sc extrafie c o n h i i a este sdbio refiriendo lo que dl inisnio vi6 en Rorna.

Aio , quod m e vidisre n2cnaini, recurrente nilno su- luiis 165% lnizoceniio X extixctum esse Rome in teni- plo dicato nonaini J ~ S L L , pro sGlernizitnte 40 hornrun1 en qrm solet iizagizificentia ~ltealriinz anaplissiriarim Jurlivis igrtihlius , ut illins nrtis est , prospecirciiz ari:;tvtibus, in quo 9'nlonzonis tenzplrina niinfice reprcpsentdrbutur. In Ya- feriori ejus pnrle , victese ercit Salonicnent ipsiint , mi- nisti-aatibris sacerdotibus e t levitis , rilu yalric, sacr$- cantem : in siiperiori wero einiiubat de nzeclio nebulrr, circitinfri~i~ undiqiie radiis , punis verus qui de caclo descendit , chrisiiuizo ritu coitsecrafus , qziern solrcna in- naeiisa concicrrenlrs nzultituclo ciwiuni , et peregrinoriirn

Jlexis e t tiinsione pectoris prq f i i id i ss ime acEo?nbant. QLLU

qurclenz rei iningrne , nihil rllustriiis cogituri , aut 3iig.i potuit ad teniplum Ezrquie lis coircipicv7drrna , ejrrsque le- gnlia sacrijcia cum $de prmeiitis lesi@ e t l r g e gra- litr concorcicnclct. 11-1 eniin , ,figni-a e t Jigiwnluin, sol e t umbra , LcizLinz sucrficicsnr tt multtn sacr~jlcicin sintul visebantrir ... . illiccl veiwin , ista ad~17ibi,at(~ , illud ad

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7g2 cdt i in t e t adorntinnent , ista ad pompnm tantunt , e t spectaculrcat. Quod si in eo t h a t r o sacrtficia legnlia Salornonis non fictitrtrrn Ghrisii sacrficiunz, sed olint pra-

jiguratunt j a m prcesens osiendebat , i cur de teniplo Bze- quielis , e t pius sacrificiis citrn illud f i de i pericitlurn, in eundenr nzodicnt philosophare ylon Cicebit?

BL-residi~o de las gentes.

5. 1 . O E n t r e las grandes dificaltades p embarazas - "qne halla ;i carla paso cl sistema vulgar , uno de ellos es la resolucion de cierto prcblema en que las es- cri turas se ven opnestas en t re si ; pues hablando de un misrno suceso , unas afiaman , otras niegan, unas aseguran q u e la cosa sacrder;i infaliblernento , atras dicen todo lo contrario. No hay dnda qne esta opo- siciorl de nnas escrituras con otras so10 puede se r aparente , pnes el Espiritu Santo no puede contrade- cirse. Mas esta aparencia , i c6mo la desvanpcere- mos e n e l sisfeina vmigar? Esta e s la gran dificultad,

Mucliisirnas escrituras nos aseguran en te'rininos claros e' individuales (con10 pudiera pedir la mas rigida y eserupnlosa delicadeza j cpte ha de llegar fi- nalnientc cierto dia 6 siglo 6 tiempo ( t res palabras d e que i i s a n promiscunrncnte 10s escritores sagra- ~ Q S oorno que significan una misma cosa) e n que toda nueatra tierra, tocios sus Gnes 6 te'rminos por yualcjniera rqmbo yue se mire , tcdos siis halbita- dores , totlas sus trihns , cognacicnes, fainilias , pa- rentelas, y aun toclos sus individuos, Sean bencii- tos ell Cristo: todas crean y esperen en 61 : toclos lo conozean , lo adoren , lo bendigan , lo amen: por consiguiente todos Sean caistianos , y huenos cris- tianos , unidos en uiia misma f d , anirnados del mis- mo espiritu , y come una sola grey , simple e' ino- cen te , baxo el gobierno y direccian de U N so10 pas- tor. \'ed aqui ccmo en uri punto de vista algonas de estas escritoras.

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'193 La primera q u e se presenta iE nuestra considcra-

cion, como la inas antigna de todas , es !a prorviesn que Eiizo Dios , y que repit i6 y confirm6 varias ve- ces d SEI fidelisimo amigo el justo Ahrahan : In te benedicentrir universce cognationev term. ( Gen. c. 12 . 0. 3. ) Y en el capitulo 18 ) versiculo 18: et bene&- cendE sint in ill0 onznes nationes t e r m : y en el ca- pitnio m , versiculo 18 : benedicentur in senzinc lrro omnes gentes term. Tenenios pues a p i q u e toclas las cognaciones 6 familias cle la t ierra serdn herrditas en algun tienipo in semine Abrahana , id es t , in Chris- i o , C O ~ Q explica §. Pahlo. ( A d Gal. c. 3 . v. 16.)

D e c k a q u i , y rlecis con surna verdacl , que to - clas estas promesas heclias al Padre de todos ios cre- yentes , se estzin verificando diez y ocho siglos ha en las mnchas gentes ) naciories y cognaciones de la t i e r r a , que han creitfo y ohedecido al evangelio; g lo qual yo os respondo qne teneis razon aria- diendo no obstante nna palabra que no podeis ne- gar; es & s a b e r , que todo quanto h a hecho c1 Se- lior en diez y ocho siglo.:, es todavia poquisimo, eonfrontado con sus promesas infaiibles ; por consi- gniente , falta todavia rnneho que hacer para que estas promesas lleguen d 511 entera y peri'ccta p!e- nitud ; y para que lo veais , paseinos un poco mas ad elan t e.

En el salmo 2 1 , que todo es de Cristo eviden- temente , pues que 61 mismo hahla en espiritu. des- de la CFIIZ , refiriendo sus angristias ) SLI desampnso, su desnudez , sus llagas de pies y man05 , dice dL mismo estas palabras ) con una consequcncia ne- ccsdria en aigan tiempo de SLI rnnerte y pasion : Re- ntiniscentur ) e t convertentur nd Donzinum zriziversi j n e s term , et adorabunt in conspecfu ejus universE fami- lie geiztiuna , quia Domini e s t regnunt , e t ipse donii- naLitur gmtiuna. En el salrno 7 1 se dice cle Cristo: Donzinubiirw ri inari usque ad naclre , et 2. $irnziize us- que ad ternzinos orbis mnmm. Coram ill0 prou'de:rt wtiopes et inimici ejus terrcrnt lingent. Regea tlzmsis, et i'nsulce niunera offeerent, regcs arnbuni , e t s c ~ b n dona addiicenr. Et adorabunt euin omnes r e p s teerrce , otnnes

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794 gentts servient e i ... totu die berzedicent ei ... e t beize- dyceiztur in ipw omnes trihus terrre, o nijcahunt eunt... e t replebitur niajest ra : f i a t ,$at. E n el salnio 85 be dice : on2nrs gtiztes q u m ~ t i r n q i i e f ec i s t i , veiziertt , et adoraburtt coi*u?~a l e Domine et glor$cabunt nonaen. lurinz. En Isaias capi- tnilo I I , vers icdo 9 , se dice: p i n repleia e f t terru scietitin Doniini sicut aqure nznris oprrienles. Y en el capittilo 66 , versiculo 23 : veniet oninis car0 , rii ado- reC coram facie mea , dicit Donzinz~s. Eu Daniel ca- pilulo 7 , versiculo 14 , se dice: et de,?& ei potesta- t e m , et hcnoreni , e t regnurn , e t oinnes populi , tribr~s, et l i n g u ~ ipsi servient ... e t onines r e p servient e i , e t obedient.

P o r abreviar: en el ctfntico admiral& del 1Magni- f icat prokt iza la Santisiina Virgen entre otras cosas: Beatam iiae dicent ornnes generationes. Tndo lo qual concuerda perfeetamente con lo que observainos en el fen6meno primer0 : Lapis au/ena qui percusserat stu- tunna , Jizctus est m o n s niagnus , et inaplevit upiversant terram. E n torlos estos lugares de la escsitnra santa, y en otras sernejantes clue putliCranios citar , se dehe ohservar lo prirnero : la generaiidad 6 univer- saliciad con que haEdan de todo nuestro orlie, de to- dos sus fines 6 te'rininos de todas las gen te s , de to- das las naciones , trihrts 6 pueblos , de to&s las cognaciones 6 famiiiss sin excepcion algona. Esta misma observacion !iacc> S. Pablo, sobre ia palabra oninia del salmo 8 , dicienclo : in eo eninz quod oninia ei subjecit , nihil dintissit noia s~~bjectuna ei. ( A d Heb. c. 2. v. $.I Lo q u a l , coin0 a i d e el inisrno Ap6sto1, no habia sucedido hasta su tiempo : y nosotros po- demos aiiadir que ni hasta el nuestro : nimc autem nec dam viclenius omnia subjecta ei. Si todsvia no w m o s sujetas 2 61 todas las cosas , luego debere- mos esperar o t ro tieinpo en que lo sean: ncn eninz angelis su!jecit Dcus orbeni ierrcrfiitrtrunt de quo loqui- m u r , dice el misino Ap6siol' en e l lugnr citndo.

Lo segnndo que se dehe ohservar en 10s lugares cle la escr i tura poco h a citados, c s , q u e no solamen- l e anuncian la fd en Cristo de todos 10s hahitantes

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79.5 ale la t ie r ra , sino jnntainente con la €6 una jrlsticra universa-l , nunca vista ni oidrc in tfr’m noitr’a. Las vi- visimas palahras y expresiones de que u s a n 10s pro- fetas de Dios , t tdo esto suenan y sigrrifican: t. g. Benedicentur uniwersce cognutiones t e r m = aclnrrrlirrnt = laudabznnt nzagn(ficabnrzt = tota clie bcriedicertt e i = servient e i et obecliierzl = y e n e l salmo 144: n~cnzorinnz a6uridantiLt. srcavitatis lure enictahuizi, et justifia [ria cxul- tabunt i c o n qn6 r;slabras mas propias n i mas cx- presivas se pudiera clescribir m a j usiicia unicersd ? E s t a €6 y justicia dniversal e n tocla la t i e r r a , inun- dada ya de la ciencia del Selior sicrit ~ Z L R nzuris ope- r im tes , es certisiino que no se h a visto iariias e n nuestra t ierra ; antes se h a visto sieinpre lodo 10 con- trario ; luego si se Cree i 10s profetas , es preciso de- cir y confesar que se ha de ~ e r alguna vez. 2 Mas quando? Este es, 6 mi Cristdfilo, el gran trabajo, ia grande e‘ insuperable dificultad en vl;estro sisa ema .

No podris ignorar , Crist6fiio , que muclaisi- tnos doctores cai6licos ( antiguos J’ moclernos ) Elan reconocido , han c o n h a d o y sostenitlo coino u n a I er- dad innegable este tienipo feiiz , cn que comerl idas 6 Cristo todas l a s gentes de t ~ d ~ el o r h e , reynuci can 61 uni%epalmente nna f6 una religion, u n a jiis- t i c i a , nna concordia 6 paz universal : ui2usquisgzre J L L I ) vite ~ u a , et subJicu sua , et lzci2 erit qui dedrrent. Es verdad y i e mnchos otros con S. Gereinirno , ciivisan- do sin dnda en esto algun qravisilno inconveniente para su sistenia, ni lo coiifiesan expresainente rii tampoco st: atreven i negarlo; y no ohsiante, q m n - do ilegan B ciertos lugares de ]os profetas , de 10s salmos , de los evangelios, y de San Pahlo, lo sapc- men asi , p hablan haxo esta suposicion, coni0 sino hu- biese en est0 inconveniente algnno.

Ahora hien : este t iempo felicisimo , nunca visto ni Qido en nuestra tierra , i tlGnde se coloca? S e p - ramente clebe colocarse en el sisterna vulgar antes de la veniila del Se i ior , pues despues de esfa no se admite espacio algnno de tiempo. 7: en efecio asi es. Knos lo colcican antes del Aniecristo, ntros decpneG, ;v tinos .y otsos pasece que se oil idan c:c tantns. e w r i - turas q u e se oporien Clara , expipsa .y evidentei:.ei:te

5. 2.’

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I J a' SZI modo de discurrir. Antes del Antecristo nd puede s a - , segrln la idea que nos clan 10s eiangelios y 10s escrifos de 10s Ap69tooles , como V P I ~ O S S oh- servar , cie+gnes Gel Aalteci isto m u r h o rrenos, como quecla clcrnostra6o e n el fendmeno qnarto; luego nunca.

Demos no ohstanre por un nmnienta , que este tirrnpo teiiz hapa de ser antes de la veiiida gloriosa del Seiior-, y considerelnos atentamerate las conse- qiiencias legitirnas y necesarias que de acpi se dehe- rdn segriii. Pl.irnet-a : lcego antes d e la venicla del S p f i o r ( 6 sea antes 6 tlespues del An:ecristo) se ha- hrsn ya ierificado plena y perfeclamente todas la5 profeci,:s poco lia citadas , y otras semejantes que pndieran citarse. Segunda: lriego antes de la venida clei Scfior ya se hahr8n conrcrtido a e'i todos 10s pueb los , todas las ndciones , todas Ins congregncio- lies 6 farnilias d e toda la tierra. Tercera : luego an- t e s (le la venida del Scfior ya se hahr6 llenado toda nuestra t ierra de la ciencia 6 eonccirniento de Dios, as i como esthn llenos tie agua tcdos 10s l u g a r e s que ocupa el m a r . Quarta : luego antes de la venitla del Seiior pa hahrdn sicio tcclos 10s pueblos , t r i h s y lenguns , inciiisos 10s judios , no solamente cristianos, sin0 cristianos -excelentes. Quinta : Itiego antes de la venida Sefirir ya h d h r i hahido un siglo , 6 un tiem- po detesminado 6 ind5:erni inaJo , pero muy grande, en que todos 10s hahi[ndores de la tierra hahra 'n ser- vido y obedecido ri C ~ i s t o , y tndos hah r in sido fie- l e s , justos y santos , que es lo que anuncian las pro- fecias. Sexta : finalmente, luego pn este siglo 6 tiem- po f'eliz pa no Eiahrh en toda nuestra t ierra ni ido- latria , ni supersticion, ni falsa religion: ya no ha- hr6 heregias , ni cismas , ni escdndalos, ni cizafia: no habri siervos huenos i malos : no habra virgenes yrndentes y necias: no hahra' en la gran red peces biaenns y malos : no habrri en f in lo que e l miamo Cristo dice y asegura taritas veces r p e siernpre h a de hnber hasta que 61 venga : lo q u a l sienqwe se ha &.to Eiasta el did dc hop, pnntuaiisimainente verifi- cad0 , sin h l ta r le jota unwn , .nirt ziniis apex.

S . 3." Para v c r In dificultad en to& su ~ x t c n s i o n , coedronternos lbrevemente una8 profecias con otras,

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797" y yeaRxos si pneden acosdarse ent re si en el s i b -

tpma vnlgar, para io qoal senternos estas dos pia- p o s i c i (> n c s .

Segun Ias profecias yne hemos anotado en el phrrafo I.", anies de la venicla del Scrior ync espc- rarnos en gloria J magestatl , se convertiriiu 5 61 todos IUS pueblos , trihus y lengiias , todas las cog- naciones y kaniilias de toda la tierr, : toclas adornran at \erdadero Dios : todas entraran eri la iglcsia de Crista : tcdas serAn banditas en 61 : todas lo ama- ran ~ io oI,edccerbn , lo servirsn: toda.; vivirtin en motua p z , nnikndose f i n a h e n k p besdndose la jus- ticia p la paz , dos enemigos irseconril?ables basta ahora : todas arrojardn de si conio del todo iniltiies, toda especie de a rmas ofpnsivas y defensivns , neque esercebrmtrir ultra a d prelium : todas en suma coin- pondrlin una grey rnansa , pacifica , inocente , bas0 el caidado y ciia-eccion de un pastor rnisimo. i.' Segan otras profecias , y especialmente segiin

10s evangeiios, antes de la venida del S ~ f ~ o r que es- pcramos en gloria y mag ad aunque, se prtdicar& e! evangelio in universo orbe terrctrunz (Mat . e. 2 4 . ) , no todas las gentes lo re~ihirhp, sino poeas. h u n en- t r e estas pocas que recibir;jn el evangelio, no todas lo observarrin , cayendo freqiienteiiiente ei buen 8n.a- n o , aliiid secus viant , nliud supra pelram , aliud i f z - t c r spiizas (Luc . C. 8. V . 5 . ) ! babrA ent re elkas s i n in- lerrupcion grantles y terribles escBndalos , h a h r ~ he- regias , habr j cismas, hahra apostasias I'orinales: ha- bra ociios mutuos , emulaciosnes , enviciias y guerras sangrienias 6 intermioables : hahra costumbres anti- evang~ilicas : habrd sieinpre una grm oposicion , y una p e r r a formal y continua entre la justicia y la paz : habrd sin ccsar, ya poi- una parte, ya p o r otra, ya p a r muchas ;i un t ienipo, vientos fiiriosos y tern- pestadcs hor r ib les , que ha r in que la nave de Pe- dro$tictibus jncfetur , y e n que sea necesario clamar: Domine, saEva nos , peri ims. Habra cas i siempre m a gran prosperidad rn viis impiorunt : y una ca- si continua arlvessiddd , tribulacion y persecueion in dis , qui pie volunt vivere in Christo Jesu ; pues corn0 anuncid, el misrno Semr: si m e persecuti aunt, et 00s

I . ~

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I

-7 9s per secrierztzrr. En una palabra : habrzi s i e m p e ciraiia clue oprima y no dere crecer ni rnadurar e l trigo, J;

todo est0 usque ad niessenz. Todo lo q u e contiene esta segunda. proposicion se

lee freqiientemente en 10s evangelios y en 10s escri- t o s dc os Ap6stoles : y nuestra h r g a expcriencia nos ha ensrfiaclo siempre la vcrdad de estas profecias. No 13s cito ayui en par t icu lar , porque son cosas sabi- das de tnc!os, y cpalquiera yrie lea las escrituras del n ~ i e v o testamento las encontrar& a cada ~ S Q . No ohs- tante , me parece conveniente no oinitir del toclc, una s o l a , pups en ella se contiene y se explica en bre- ye tcdo este rnisterio. Esta es la par&hola de la cizaiia.

E n eqia pardlola 6 profecia clarisima , propues- t a y eupiicada por el rnismo Cris to , se ve siempre sin inteintpcion la cizana junta con el tr igo , y siem- pre Lacieniio daiio ; pues habirndo propuesto 10s q e - rar ios a1 ciueiio del campo , que si le parecia irian

- & arrancarla respondi6: non ; ne Jarte colligenter ni- znnia , eradicetic sinaul cum eis et triticum : sinite utra- que crescere urque ad niessewz, et in fempore messis di- cam niessoribus : colligete prinzum ziznnin &c. (Mat. c. 13. v. 79.) La evplicacion que d a et inisin0 Seiioi- 5 esta pardbola es es ta : Qui senzinat b o n ~ ~ n t senzen, est Filius honLinis : ager airtern est niursdus : borrunz vero se- men, hi siintJilii re@: zizania aulenz ,$hi s i m t nequam: ininiicur aulenz quc senzinawit ea , est diaholus ; messis vero , consuriamatio s m d i est.

De manera , que desde la piedicacion de Giisto liasta La consumacion del s i g h , deberg estar siempre eri e ! inundo el h e n grano junto con la cizaria, y mezctado con elia. Con que hasta la consumacion del siglo cieherti saccder sieriipre cons!antemez-ite Io mis- iuo (poco nias 6 ineiios) que ha sucedido hasta lo pre enkc. Con que hasta la consumacion del siglo debcr,in estar siempre jnntos y i n e z c l ~ d o ~ entre si,

j l i i regni, e t $lii nequam , y esios ~ i i t i m o s haciendo siempre todu ayuel daiio que siempre hace la cizalia. Si ebto dehe siernpre suceder asi Iias:a la consuma- cion del s ig lo : si n o se admite espacio a l p n o de tiempn desde la consumacion del siglo hasta el f id del muodo ; antes se inira este espacio de tiempo cod

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7 9 9 xno nn e r r o r , 6 coin0 un sueiio , rlelirio y f :%i~i :

decidrue a h o r a , mi huem Crist6fiio , i ynAiiilo y c6mo podriii t ener alqun 1iigar decente toclas arpellas pro- feecias yare yuedan ya citadas, y tantas oiras seiiie- janies ye:e prtdieran citarse ? Volvecl ri leerlas eon ai- , p n a mayor aleticion : en ellas vereis , sin poder du- 'farlo, una f 6 , una paz y nula justicia universal r n todas las naciones, y en tndas las farnilias del orhe, cine son incoiiipatibles con la cizaiia del evangelio que Iia de durar basta ei f i n .

En van0 brascaremos e n 10s cloctores la con- cordia de ayoe!las dos proposiciones ; paryue ios qne deiiendeii con 10s profetas la verdad de la pr imera proposicion, se rlesentienden de la segunda ; y 10s qne atienden 6 ea ia , n i siyuiera se acuercian de la primera. Y no lo extraiio. Pues ique' no Iiay mas que v e r anunciado claramente en 10s profetas u n t iern- po en quc todo el mnndo respirard paz , jitsiicia p sant idad, p leer a1 propit3 tiempo en el nuevo testa- mento estas p otras eypresiones : ororlet e t lmreses esse : necesce est zct veniunt scandala : sinite utraque cr'cs- ( e r e usque ad r i i e s s e n z , y ser esta siega el fin del i h i - c o tiernpo que reconoeen T El chasco no es t&, Cris- t6filo miu, c n otra cosa, s ino en que asi 10s profe- tas como lias evangelios cficrn la lerclad, y que e n Yiiestro sistema dr- ningnn i i~odo pueclea concordarse; asi c p e se hace precis0 el que ceda vuestro i-isiema, 6 el que cedan 10s pro€eetas : y a veis qua'n duro e \ es- le dltimo. Es indispensable p e s que conf'eseis, yne la esrvitura de la verdad no es capaz de anunciar pa- ra tin solo t icmpo dos cosas t a n contradictorias, co- in0 l a s que romprehenden las proposiciones.

Corno en vaes t ro sistrrna no hay nins de un solo timipo , esto e s , e l inbrmeciiu entre la primera y segnnda venida del Seiior : como e n viiestro sistenn;L la c o ~ ~ s u m a c i o n del siglo , 6 la vendimia y la mies, es lo mignio qne el f in del mundo : cum0 en Tares- tso sisteina no bay que esperar otro tiernpo h s t ro sigio , ii otra n n i v a t ie r ra y nuevo cieio , despnes de In gran yendimin , despltes de la rnies , despnes de Ia conswnacion del siqio, poi. Io mismo tampoco p e d e oi'recer u m concordia en las profecias q u e haga

3. 4."

Q

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G'C) desaparecer su aparente contradiction. illas si se hace la CIcbida distincion entre tiempo y tiempo , c o m ~ 10 hace la escritura santa , todo lo haliarnos claro, facil y llano. Eas cosas opuestas , diversas y eiienii- gas entre si, cpie no pueden conciirrir en un misino ticinpo sin destruirse las unas ri las otras , [ n o po- drAn comparccer en diversos tiempos cada q u a l en ci suyo propio? Si antes de la consrrrnacion del si- $ 0 , 6 de la vendirnia, ti de la rnies , no yueclen todns verificarse , n o podriin verilicarse plenisirna- mente unas antes y otras despucs ? Esie despues (vol- l e i s A rcpl icar) se Iisce durisimo el adrnitirlo, por- que dastrpye ci fztndantentis niiestro sisterna. Bien: y iquC inconveniente hallais en esto? [ N o es este el a§nlltQ 6 f in principal adonde se endereza toda esta ob ra? i N o es esto 10 que veninins Izaciendo desde el princigio hasta lo presente? Yo sac0 de ayui una conseqkxcia legiliina , y es que vuestro sistema no es brieno, ni lo puede s e r en ningun t r i b u n a l , pucs ni ES capaz de concorclar m a s es- crituras con otras, ni dc concordarse con cllas inisinas.

S. 5." Ya henios prohado que en la venidn del Seaor q u e estamos esperando , asi como ha de pere- cer esta tierra presente para dsr Iugar d otra t ierra nlleva, asi ha cle perecer en este trastormo univer- sal la maynr parte del linage humano , quedando vivos L inclemnes algnnos peyuenos racimos despues de la gran vendiania de entre todos 10s pueblos, tri- bus y Ienguas de todo el o& : 10s qua les por 5u iaucencia y simplicitlad no se hal la i~in dignos de la i ra (le Dios onmiiipotente, C Q l l l O no se IlnllS en tiem- po del diluvio e l justo No6 y su familia. Estos pn- COS y pequeiios raciriios ( (lice Isaias ) levabunt vocenz Suanz atyue laudabunt cirni glorficalris yiierit Donzinus, hiizieizt a e nzari ... d *$nibus term laudes audivinzus, gloriaria jurt i .

De este solo texto de Isaias, aunqiie no hubiese tantos otros que lo confirman y ann lo aclaran corn0 verernos z i su t ie inpo, se colige evidenternente que totlo este residno de las gentes, que q n e d a r h disper- sas acA p all6 en todos 10s paises 6 t6rminos de to- $0 nuestro orhe, no yuedardn e n adelante en la mis-

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80 1 ma ignoragcia 6 distraction en qne antes estalian res- pec to del \erclacleio Dios; sin0 yue creergn en 61, lo alabardn , lo descardn, y se si i j~tarkn d su domina- cion con s u m o gozo y coniplacencia. Esia misrna idea srihstancial :e lee eo Jeremias : In tempore ill0 woca- bunt (dice) Jwusnlenz solium Domini , et corgregabunrur ad eanz omms gentes, et non anabulabuiii post pravifa- tern cordis sui pessirni. La misma idea en Tobias [c . ult. juxta 7 0 1 : ei onines genles converfentur vcraciter ad timendum Deurn Don,inunt , e t defodient idola s u a , et benedicent onmes gentes Dominurn. La niisrna en toda la escritura.

Y veis a q u i cob esto solo (auacpe proguesto con tanta generalidad) rrnovada enterarnenttt tocla nnestra t i e r r a , y- todo el misero linage de Adan. Veis aqui tilradas todas las lineas , .puestos todos 10s ftinda- rnentos para establecer solidarnente e n nuestra tierra e l reyno de Dios que esperanios y pedimos, 6 el quin- t o reyno incorrupiihle y ttterno, el qual como se lee en Daniel (capitulo 2 , versiculo 44.) : tornminuet, e t conlerei universa rrgna h ~ c , e t ipsunt s t ~ b i t in aternmi. Este rcsiduo de las gentes, instruido perfectamente, santificado , y cotiio criado de nuevo, no menos que el residuo de Israel , compondr& junto con PI acpel ununa o d e , et units pastor del evangelio (Joan. c. io . 9. 16.) ; se multiplicarB pacificamente, y IlenariC otra vez la t i e r r a , pasando 3e gkneracion en genelacion poi- muchos y rnucbisimos siglos (quelS. Juan espii- ea con el ndmero perfecto de mil) la fC, la simpii- cidad , la inocencia , el temor y conociiniento del Se- nor. Esto ~ i t i m o os parece ditkil de c r e e r , conside- rando lo que ha pasado siempre entre 10s hombres desde el principio hash el presente. Mas ri esta con-. sideracion debeis afiadir estas otras: que no todos 10s tiempos h a n sido iguales y uniforrnes; que Dios ha dado mas en unos tiempos que en otros: que siem- pre ha dado mas despues que lo que bahia dado antes: que su misterio para con 10s hombres sirm- pre ha ido creciendo de die in diem: que este mis- tcrio llegard algrina vez uspee ad perfeerum diem. quia m n c ~ t abrevinta manus Donzini. En suiiia : que 61 p r ~ d dixo el inietcrio de la vocacito de las gentes con -

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802 t0cI.o~ s i i s efectos bnenos p malos que actualmente ve- ~ Q S plenisirnamcn'e veriixcados. i N o basta la expe- riencia de la varacidad de Dias en lo pasado y en lo presente para creerlo tamhien en 10 iuturo?

CAPITULO XI,

Providencias extraordinarias para conservar en ape- , 110s tienipos la fi y la juslicirt en toda la C ' i erm.

5. 1 .0 U n a fg y justicia tan grandr y tan nnivrr- sal aaunciada tantas veccs B la nueva t i e r r a , p con e ~ - presiones tan magnificas en la escritura de la ierdnd. no puede ciertamente c o n c e l h w sin afgunos medios 6 providencias nueras, grandes y extraoldinarias , a s i positivas , con10 nt.gati\as y generales para todo e l orbe. Quando Bablo de iiiedios nuevos , no p i e n ~ o poi- eso excluir del toclo 10s que ahoia tenemcs; mucho menos ios que son de institaciun rlivina, como 10s siete saaramentos , la g e r a q u i a eclesi&iica , la doc- t r i n a , 10s preceptos y consejns de Jesucristo contc- nidos en 10s evangelios, la doctrina tle 10s Ap6sto- l e s , y generalniente hahlando toda la moral de las es- crituras. Estas cosas n o h a y duda que son suficientes y. inas qne suficientes para ntiertra perfecta santifica- C I O X I , como lo h a n sido para tantcs santos, ni ialta- rttn jamas mientras Iiubiere viadores. Mas fuera de estos inedios que aliora ienenins en consryticncia de la muerte del kionahre Dios , Je sn resarreccion , y de la e h s i o n del Espiritu Snnto, ballamos toilevia otros en la escritura santa que ahnra cic,rtarnente no tenelnos , y que estrin evider-itemente reservados para e l &glo ventnro , 6 para la nueva tierra q u e esppra- iiios; asi C O ~ O tenemos aliora tantos nnevos, qnc n o tnvieron 10s a n t i g u n s , pues jamas ilia dado D i O S en UII solo tiempo todo quanto puede &r.

En t re e5tos nuevos medios de ? n e hablamos, el prirnc3i-o yae se ofrece tt nuestrn consideracion e s la piesencia de Cristo misrrio en nuestra t i e r i a , no so? Iamente como lo tenelnos ahora en cl misterio todo de fe', d en e4 Sacramei i~s de la Eucaristia (e l qual

'

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803 Sacramento no faltar8 en aquellos tiempos) sino tam- bien en su propia presencia y inagestad, como est& ahom en 10s cielos. Paes esta presencia real per- sonal de Jesucristo , como sumo Sacerdote , como Rey 6 Jnez universal de toda nuestra t i e r r a , y la p r e - sencia tamhien de sus santos ya resucitados, corn0 jneces 6 conreynantes no puede menos que produ- e i r grandes y maravillosos efectos en toda la tierra, y llenarla toda , como anuncia Isaias (capittilo 1 1 . ) )

de la ciencia del Seiior : sicut aquce naaris operientes. Es bien c re ib l e , y algo mas qne verisimil, q u e

e1 Benign0 y humanisimo Rey (y d su excmplo tudos BUS santos) se clexe ver algunas veces de 10s vidclo- r e s , ya en una , ya en otra parte de la t ierra , pa de una persona , ya de muchas. Estas apariciones parece que serdn mny freqiientes en ayuellos tivnipos. La experiencia de lo que sucedi6 en todo el tieinpo que el Selior estuvo e n nuestra tierra despues de iesn- citado nos ensefia h i e n , y nos da ti conocer su ca- racter propio y natural que no pusde jamas muddr. E n aquellos yuarenta dias apareci6 muchas veces ya i uno solo, ya & dos , ya B 10s once: Ap6stoie5, l a tarnbirn como afiade S. Pablo (I. ad Cor. ci 15. Y. 6. ) : deinde visus est plusquaria quingentis fratribus sinaud. De 10s santos que resacitaron entonces con Cristo nos dice S. Mateo, que despues de 6u resurreccion a p - recicron B muelios : et exeuntes de monumentis post re- surrectionenz cjiis , venerunt in sanctana civiratern ? e t ap- paruerunt niultis. (c. 27. v. 53.) No dice e l eva que esto sucedi6 en $1 rnismo dia 6 maiiana $1: la re- surreccion de Cristo, y solo en aquel'dia (copno se han figurado tanto$ dcctores , especialmente aquellos que les dan ;i estos santos resucitados la injusta y cruel sentencia (le s e p n d a muerte) solo dice simplemente que estas apariciones sucedieron despues de la le+ srirreccion de Cristo : post resurrectionenz ejus : por ias quales palabras nos dera libres todos 10s yuareota clias, en todos 10s quales 6 en muchos de ellos ptldirron haber sucedido , asi como sucedieron las apariciones del rnismo Cristo per dies qciadraginta apparens e is Jesucristo p e s y szis santos que h a n de venir con 81, iserdn en cl sigle vmturo quando vuelvan del &lap

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7

804 iiienos humanos , nieDos henignos , xiienos, caritativos d e l o que fueroii ayrtel POCO tienipo que estuvieron en nuestra t i e r ra .an tcs de sobir 6 lo.; cielos? El srguirdo irirdio , aunque negat i ro , no por eso

seri iiienos conducrnte ; yuiero Jecir , la ansencia del <$lagon : qui vocutur diabolics , e t satuizar , qui sedrrcrl miversunz orbent ; e i q u a l e n acpeilos tieinpos eatal$ hien aSt?gtrmdQ en el alrisino , atado estrechn- mente con una grannrle y foriisima cadeoa propcreio- na& Q su naturalcza : cerrada y sellada la puerts de si1 carcel : zit iaon sedrccal anzplius genles doizec C O I L -

sunzeratztr mille arzrzi. E! qual iiiisterro se lee tambiru en el rapi tulo 24 de Isaias, veniculo 2 2 , eoino oh- servamos en otra parte. Kl gran hien que dehe re- suitar & tocla la t ierra clc la ialta total de este ea.?- inigo , no neceLita de q a n yoaderacion : basta consi- dciar 10s infinitos males rpe h a liecho siempre en el rliisero linage de Adan desde el principio del mun- d o basta el de hoy , 10s clue hace a1 presente, y ios que toclnvia dehe -1incer segan Ias esci i turas liasta la venida ck-1 Sefior: quolainnz a b iizirio diaboliis peccut.

Juntainenie con el dragon y sus dngeles , faitarrin del todo e n la nueva t ierra 10s que llama la escritu- r a psendoprofetas: por 10s qnaies se entiende hicn toda srierte de falsos maestros, de scductores , tit: Iiipbcriias iniyuisimos , qui venixizt in vestinzenlis oviunt, intrirzrecus uuteiiz sunt Itspi rnpuces. Estos han sido en todos tirinpos 10s priocipalcs insfruinentos tiel prin- cipe (le l a s tinieblds. Estos h a n Iiecho , liacen y ha- rjn en ndrlante usque ad n iess f i i z , danos lanientab!cs e' irreparables. Pacs tcdos ellos iaitar6n absolutainen- ie e n aquellos tiempos , s icu t scripturn est . Et errt irc die i l k 8 , dicit Danzirirss exeru?uiIm , clispei-ctana nnnii- na iLZIoIorEim d e tprra , e t H O I Z ni~inornliziitiir ukra , e t pseucioprop1xt~e.s , e t spiriiitnz ininriindiiiiz uuferana de tcr- ra. (Znc. c . 13. v . 2.) EFta piomesa de Dios i s c ha - verificado jamas! @taodo? Si jninas se ha verificado, in0 dehrrri Jirgnr algun tieinpo en que se verifique p(enisimameiitr ? Este tienipo 4 podrri wr , segun las esc t i tu ras , autes de la ~eoel imia 6 de Ia mies , & de la c~nsumacion clcl siglo ?

Desde e1 yrincipio del muado hasta e i dia pre- 5. 2.'

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bcnte, asi comn no se h a vistn jamas una justicia universal en todo nuestro o r b c , asi no se ha podido ver una paz universal; estas dos cosas son dsso lu ta - mente inseparables , coimo que dependen mattiamen- te la una de la okra. Este es pues el tercer medio que t ime Dios reservado para ' la justicia ~ ~ n i v e r s a l de la nueva t i e r r a , esto es fa paz universal. Eata paz universa l , segun ias exprssiones de la escritura santa , dehe sei- como la basa, y cc,mo la ley prima- ria-y fundamental del reynado de Gristo. Asi se halla anunciada y prometidn para aquellos tiempos no me- 110s que la justicia universal : justitia , e t pax oscu- late sun t : 6 como lee la ver5ion arjbiga : viderunt sejilcie ad faciern , salmo 84 ; el qual leido con me- diana atencion , se halla todn entero , clesde la pri- mcra A la &tima pa labra , inaconiodable a otros tiem- pos fuera de !os tieinpos fnturos , d del orhe frituro. E n el salmo 45 se vc la misiiia idea: venite , e t ui- dele opera Bonsini , que posuil prodigia super terrnm, nu f e rens bella usque ad jinent tcrrcp , arcunz conteret, e t confringet nrnza , et scula condmret igni. Eo niisrno en el salrno 75 : e t $ictus es t in pace locus ejus , e t hutitatio ejus in Sion : ibi confregit potenlias arcuum, scirtum gladiuna, e t b e l l m i . Sigese hasta el fin la consitleracion de este breve s d m o y se entiende a1 punto asi lo que anuncia , coin0 10s tiernpos de que Iiabla.

En Isaias (capitulo 2 , versicalo 4 ) se dice del Me ias iatdnhitablementr para sii sepunda venida ( pnes en la primera ni ha sticedido, ni ha podido sucrder): et judicabit gentes, e t a r p e t poprtlos niriltos e t con-

Jlabunt gladics suos in voineres, el lanct-as m a s in Jklces : rLnn levatit gens contrrr geritena gladiimt , nec exercebziiztur ultra ad prmliuna. Ea Micpeas ( cnpitulo 4 , vrrsiculo 3 ) : e t judicnbit iizter populos multos1' e t corripiel genfrs fqrtes usque in longiizquuna et ccnci- denl gladios suos in vonzeres , e t hastas mar in ligo- nes : nor1 sunwt gens adversus gentem g l d i u m , e t non &scent ultra belligrrnre : et sedebil v i r subtus vilena suanz e t subtiis j 'cunz s w m , e t non erit qui deterreat, qui0 cs Domini exwci!uiina tocutuna est.

Querer ya dar por verificactas t odas estas cosas en

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$06 la primera venida del Mesias, 6 en la iglesia presen- t e , aun despues de hnber visto todo lo contrario en tQdOS 10s diez y ocho siglos que nos h a n precedido, parece lo sumo d que pnede ilegar el despotismo y la violencia, 6 diremos mejor , el miedo y pavor del fantasrna milcnario. De este asunto tratamos difusa- mente e n todo el fen6meno diez.

El quarto niedio condacentisimo para la nnidad d e fe', de costumbres y fratema caridad enire todas las gentes y familias de la t i e r r a , sera sin cluda la uniformidad en el idiomil, 6 en Ia lengua : esla eerai entonces una sola en todo nuestro o rbe : a1 que ve- risimilmente res t i tuir i Dios la lengaa primitiva q u e se liabl6 desde Adan hasta No6, p hasta la confasion de lenguas introducida en la construccion de la torre de Babel. Pues esfa confusion, 6 esta innninerable rnul-

' titud y diversidad de lenguas, que hasta ahora divi- de y separa m a s gentes de otras , como si no fuesen todas hijas de u u misiiio padre, y de una misma ma- dye : estas , digo , cesardn del todo , se acaharih, se aniquilara'n y no !isbra' memoria de ellas en el si- glo veotnro : queclando solamente una , que en hre-

, \ e entenderan todas fas reliyuias de todos 10s pueblos, tribus y lenguas, y consiguientemente toda su pos- tericiad y descendencia.

Es certisirno que esta noticia no se halla Clara y expresa sino solamente en un profeta , clue es Sofo- nias : mas esto i que' irnporta? i Serd rnenos cierto lo q u e el Espiri tu Santo hahl6 poi- un profeta, que lo que h&l6 por rnuchos? Ved aqui p e s el texfo to- do entcro de Sofmias (capitalo 5 , versiculo S.), p o r el qual parece indubitable as i la promesa de Dios, co-

, mo 10s tirtnpos de que bahla : Quapropter expecta me, dicit Dnnziiius in die resurrectionis m e a in f i i m w n ( 6 corn0 leen conocidaniente mejor Pngnini p Vntablo, ad dient qua ccnsrcrgani ad spolia) quia judicium meunt, ut congregcni gentes, e t colligona regnu, et rfJiindam super e m indignotionem nienm, oninen iranz furoris niei: in igne eninz aei'i niei devorabirrcr oninis terra. Quia tunc red- dam prpul is Zcthhnt edecfiirn , ut invocent ontnes nomen Domini, e t serviant e i Arcnzero uiio , (seu jugo uno co- lyio leen ios 7 0 , sive tonsensu uno como lee Pagnini).

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De& ayui que toda esta acomcdar a' la vocacion de jar, pues de I n resurreccion de principios de esta gran Ppoca , q u a b pasado yuarenfa anos , c o n g r q 6 Dios c dins las gentes y 10s i eqnos , id e s t , l as I manas con Vespasinno y Tilo, y derramd s fd est sctbre 10s jridios , oninem irnna J'uroris igne enina zeli suidevorabitur oninis terra / id est , ont- lzis terra j u d ~ ~ e . ) Ahora , e n esta inteligclncia T i n -

lentisima , q n ~ senticlo pueden admilir aguellas pa- lahras del mismo context0 : tiinc reddarn populis Zrtbrum elecliinz: irt invocent omnes in noiniize Doniini, e t ser- viant ei Iinmero iirto?

Respondeis que el :enticlo de estas palabras pue- d e sei- e J t e ; en el ilia de mi resnrreccion , 6 des- de es 'e ctia para adelante in fum-unz , yo voIx ere B 10s pueblos , 6 les dare' ( i 6 C i i s t < f i l ~ ! i E s lo niismo d a r que voLier? i E s lo rrrismo dar yne res t i iu i r? ) nn la- ],io e iec io , esto e s , pnio y santo, para quc todcs in- voqtien unCniiiirunente e l nombre del vercladero Dins, l o sirvan, lo ahlien y io magpifiqurn , J' esto cacla uno en si1 prnpia j e n p a . N o deLeis quetlar rnuy sa- tisfrclies de eqta ezpticacion quando aiiadis otra la p a l tlebe snpfir 10s tirlecfos de la priniera ; p es que es te la l , in e e c t o , 6 Iengna, 6 idionia Le veiificaizi alia' en cl cielo, despnes (le la iesnrrecciori uni- versal , piics en acpe i pais €eiicisimo todos 10s pve- bios, 6 todos 10s ivdivitluos cx owni tribu , e t p o p k o , e t l ingua, et natione que eniraren en 61, Iiablarcin en-

' t e ramentc una niisnia lengua , esto e s , la e!ec!a , 6 la que di6 Dins en et paraiso a' ntiestros primeros padrcs.

El Tirino ( au to r sapientisimo ) aoode sobre esie lagar yuatro p i n b r a s , las qua:es arinyne las d a a sricltas, solas, p csmo aislatlas ,. n o obstante , se co- nocr p'.r ellciq cpte p e i e t r 6 bicn , 6 ;i lo riiencs S I ' S -

pecb6 todo este m i s t e i io ; pues confirsa mprcasamen- t e q u e r s te labio viec'o, 6 csta lenspa universal cn foda la tierrn , $e vct i f i r a r i plenarnente, airtes de nca- harsc rI mnndo. §us paial>i.as son e s t n s : Sed ylem pei$ciclur siib j n e m tnuridi in gencrali onziaiiinz j i idm-

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808 runi ad Christum eonversione. Lo que este sal io dice y confiesa , est0 rnismo e n suhstancia es lo yne 'yo rligo , sin otra difcrencia que poner post*finenl SPLU-

li el misino suceso que d l p re i e rde pocer sin razon algtina sub,Fnenz rnundi.

L e e d , 6 Crist6filo7 peguidarnenfe el iexto sagra- d o , y prosegnid leperido hasta el f i n del capitalo. No haliareis en d l otra idea que la vocacion futura de todo Israel , y jrintarnente con es e gran sit- ceso aminciado en casi todas las escrituras , l iallareis tarnhien el fin de esta tiei-ra presente , 6 Io que es lo rnismo el fin del dia de loa lionilxes ~ que el Se- iior llama fantas i eces consuninlatio Jlrculi: y luego despnes de este dia ha l l a re i s ei de? Sefior , el siglo ven- tnro, e l reyno de Dios , - 6 la tievra nueva y n u e \ o c i e h , in qriibus justitia habitcit : para cnya justicia, p a z , caridad y uniformidad e n la misma k6, en el mismo culto , e r r l a s rnismas leyes y costanihres, de- h e r s servir y ayudar infinitamente la uniformi~lad d e la lengua en todos 10s p u d ~ l o s , trihus y farnilias de Coda la tierra.

-, CAPfTULO XII.

Conzuencia de todas Ins gentes de todo e l orbe ha'cia iir~ centro contiin.

S . 1.0 O t r o de 1 0 s merlins m a s eficaces para con- servar en la tierra In jnsticia universal en ayuellos tieinpos serd, segnn Ids escritnras , la Feregrinacion a' Je iusa l en , entonees el centro de unidad de toda la tierra. De esta peregrinacion fi la €uttxra Jerusa- len (viadora) habian muchas veces 10s profetas y sal- nios, como de una CQsa freqiientisinia en ayuellos t iempos , 6 como de una ley general e' indiFpensalJle

I para todos 10s pueblos de la tierra. Ved aqi i i algn- r i m lugares de 10s mas ciaros y perspicuos , scAre 10s qnolcs, despues -de bim considerados , podreis hacer las mas serias seflewioncs : corn0 tambieo sohre la in- teligeficia puramente acornodaticia , y conocidarnente violrntfsima, que se les pretende dar en el sislerna vulgar. Et erit in novissirnis diebus (se lee en Isaias,

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8.9 eapitulo 2 . ) prqxmxtus nionr domus Domirzi in ver:ice ntontium , et eleva5itur super collrs , et $uent ad e w z onrnes gentes. Et ibirnt p y u l i nrulli , e t diceat : ornite, ascendamus ad naonlem Doniini , et ad domum Dei Jc- cob , e t docebit nos viLis sitas , e t anibrilahintiis in &e- mitis ejiis , quia de Sirn exitit l e x , e t ver?,uns Domini de Jerusalem. Lo 'ni;srno se lee en f i f iq~~eas , ea- pituIo 4 ; -y lo rnisrno en 10s saimos 7 1 , 64 y 65. En el nlismo Isaias , capitulo 6 0 , se !e annncia ci Jera- salen evitlentemente futura , cntre otrns C O S B S esla, versiculo 5 : Tunc videbis et a$?ues , nzirabitrrr, e I di- ZatabitLir car tuum , quando canversa Sttwit a d l e mal- zitudo niaris , fortitrido genriztnz vencrit tibi? inundulia canzelcrunz operiel t e .

Y en el capittilo 49 ~e IC hnb:a anunciado, wp- siculo 2 1 : Et dices in ccrde iuo , p i s gemit niihi i.t/os? .Ego sierilis , et non pariens, trnn.cniigraru, e t cuptiwa,

e t istos quis enutrivit? iBgo destiiirta, e t s c l a , el i h t i nbi erai?t? Y el versicalo 18 : V i v o ego dirit Dominus, p i n onmibus his velui ornament0 vesfieris , e t circirnadahis tibi eos , quasi sponsa , quia deserta tuii , e t solitrrdrnjs tuce et ferru ruirire tim nunc arigusta erunt prce habitntori- hus : et lcnge ftrgabnniur , qui absorvebunt t e . Todo lu qual < bre:.~nmos dii'usamente en el feniimeno qminto.

En Tobias, capitrilo 1 3 , versiculo 1 3 , se le dice a la misnia Jerutalen : Lirce splendida fulgebis , et oiiznes

$nes term ndorabnnt l e , nationes Zonginquce ad te ve- nient , e t niunera drfrenles , adorahzcizt in te Domirzr4n2, et terrnna tuani in sarict@cationena habel.iint : nomen eninz ni ag nrina in VG c ab un 1 t e .

Finalmeute , por abreviar , en Zacarias, capitalo 8 , versicuio 2 0 , Fe dice: Usquequo veninnt populi, e t habitent in civitafibus muhis ( 6 romo leer1 10s 7 0 , y ccn poca cliferencia Pagnini y Vatahlo de un modo mas claro y inas inteligi?>le): Adhric wenient populi inulti> et /~abitnfores rirbiiini niulrariina , et ibunt hubitntores ziizus nd alterurn dicrnte.s ' earnus, e t dqxwenzur Ufizcienz Do- mini , er qiinraneus Domin~ini exercifwurn ... I ~ W C dicit Do- minus exercituiwn : in diebus i l l i s , in yuibiis aprPh ndeat decem homines e x onsriiiiis r'inguis gentiirna $nt/7riam viri JidLei, dicenics : ibimus volijLuna, au&tufizibs eninz, quod Doininus ooLiscunt est.

,

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$10 Y en el c a p i h l o I $ , acabaclo de anonciar la con-

s u i m a c i r n y I uiria !obai de nuestro s i g h , amancia llnego (~er ' s i~ i i l o 16.) no solo qur qnedarrtir reliiquias de todas las gcntes , siwo tainbien lo qr,e estas irtirjiiias y sit descendcJncia deijetiitr I i a w r cn cl si310 berXturo : e t onznes qui reliqrci fuer. int ex onmiGus gcnGlTus , que vc- ncrrrnt L ontra Jrrirsaleni (sive onme residrtiini de ani- versis g>nlfbus (Pagnini) sive , qii icuny~e relicli fkerint de c r i n c h grntibus , 10s 7 0 . ) a.scendcn1 ab cnno in nn- n i m , ut ndorent Rcgenz DoniinunL ex'erciiriima e t celebrent

fes t iv i fnlern tnber-naLuloi una & c. P o r esta drtima prc fecia leida y considerada hasta

el fin del capittilo, y por tantas otras , pal w e aigo mas que i e r i s imi l , que t s t a confluencia de todas !as ieiiqiiias (le ias gentes B Jerusalen, sera' lrbre ii toJos 10s indi \ idaos qLie quicierrn tr por su de \ r c ion ; mas &era' tarnbien corn0 una ley fi indamental a toclos 10s yiiehlos, 6 tr ibus, 6 reynos de pie5enfarLe rada airno en Jeruealen por medio de a!gunos clipatedos , para que estos adoren en ncimbre de tcda la naciori a1 sa- premr, Rep , le protesten sn \asal lage, p reciban si ts drtlenes particulares por medio de sus legitimos mi- nistros.

A s i a' 10s unoq como Q 10s otros les scrd en aqne- 110s tiemi'os facilisirno el Fiage d Jeriwalen : ya por- q u e la tierra nneva ? naevo cielo cpeclnr$n en rnrjor disposicion , y en rnejor fenirelainento de lo yrhe ahora estdn: ya porciue ni POL' m a r ni por tieria haliardn einbarazo alguno; pnes ya no bahra ' en totlo el orbe ni p i r e t a s , n i ladrones, n i m i h i a s extwnjieras que impidan el paso: ya tarnl,ie*2 porqiie la muiua cari- dad y 1iospital;tlatl eriti r todas las gentes estaisii en- tonces en to& SII perfeceiori , principalinenfe en Je- rnsaien y en Jucli, en donile , coino aiincle el rnisino Zacarins (versiculo filtimo), t c J a s Ias oilas 6 caldcros serii i santificados a1 Sefior, F S : O e < , destinados i i la lrospitaliclacl : et erit crnnis lebec in Jei usaknz , e t in Juda sanc@cicrztiis Donzfno .... e t non eri' naercator rilira in domo Domini exercitunz iia die illa.

Estas peregrinncinnes d e i a s gentrs 6 Seru- salen , ut ndcrent Rcge7z. Dorniizrina m e r - c i h t r r n , no ser:in enionces estdriles ii de POCO fruto, como lo hail sidd

S. 2.'

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81 I siempre por la mayor parte las peregrinaciones dc ahora , d e las r p a l r s dice , no s i n gran mzon , el ve- nerahle Toinas de Keifipis : qui niultrina peregrinciiztur, raro, vel nunquanz sanc+'%aiztiir. El fruto en aqurl si- glo feliz deberg ser tan grande , yuanto lo seriin las cvsas nutwas g estnpcndns de que senc'n testjgos OCU- lares. [Que' cosas ser8n estas?

i0 Cristdfilo mio! Sera'n sin ducla mnchisimas que no estan escritas en la biblia sagrada, p qt:e el Es- piritu Santo dexa a' nuestra consideracion ; m a s faera d e es tas , s e r h en p r imer lugnr aquellos pncns que estan escritas , y que no hay neccsidad aiScna dr qui- tarles su propio sentido obvio y literal: en t re estas 30 solo considero tres principales , y lrien notables, de las quales se puedrn inierir oti-as muchas.

Primera: verdn ri lo menos algrma VCE estos san- tos peregrinos la persona niisma del liornhre Dios, ii de un modo llano y fami l ia r , corno lo vieron 10s Ap6stoles d e s p e s de resucitado , 6 en todd sii g.10- ria y xiagestail como en el Tabor. Esto suenail oh- via y naturalmente las vivas expresimes de 10s pro- fetas : e t revelavitur gloria nomini, e t videbit oninis car0 pariter , prod os Domini loculunz es t , ( 6 como leen 10s 7 0 ) videbit oninis car0 salatare Dei , quia Dominus locutus est. ( I s a i . c . 40. v . 5 . ) Tidehunt g c n - t e s jrcstuna tuum, e t cuncti rPges irzclificnz tuunt. (c. 62.) Yidebitur Deus DeoriLnz in Sion. (Salnz. 85.) Viderunt onmes populi glorian? e j u s : Tidcrunt omnes j ines lerrm salutare Dei nostri Gc.

Segrrnda : verdn y experimentarBn por si misinos la santidad de Jerusalen y de todos sus liahitadores, con yuienes hablara'n en nna rnisma lengna , de quie- nes recibirhn toda suer te de ohseqnios , p en q u k - nes n o Trra'n otra cosa sino exemplos infinitamente inas eficaces para prrsuadir que todas las palebras. De esta santidad cle Serusalen fntura henios Lablado ya en varias p a r t e s , especinlmente en e1 capitulo 8, y no hay q u e repetirlo aqui. Estos devotisimos pe- reqrinos dc todas las naciones 6 pueblos de la tierra nueva , parece que son aquellos mismos con ytiienes se 11ahla c n el capitnlo ilitimo de Iwias , verLii.nlo 10 : Lataniini cum Jerusalem , e t e x u h t e in e a onines

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81 a qui diligftis cc~nz : ga&te cum en garrdio iiniversi qui lugitis super earn , (scilicet nirizc ) ut sitgLitis , e t re- plcaiiiini ab ubere conscEut/oriis e j u s , ul t,Ju/geaiis , e t delitiis a$uaiis nb ornnirnorla gluria ejus : qaiu h ~ c dicit Dqniirius. Ecce ego dcclincbo super elvnz quasi

$uviunb pacis . E n el templo niisrno donde enirara'n freqtientemen-

t e como en casa de oracion , pile9 coino se Jet. en Isaia, (capi tulo 56 , rersiciilo 7 ) : IIZomis mea domris oraliwiis vocabitur cunclis popidis , verAn l o que anun- cia Ezequiet para SII nuevo templo (capilulo 4 4 , ver- sicuio 4.) : e t vidi , e t ecce inaplevif glorin Domini tenz- plum Dcnz ni , et cpcicii in faciern nieartr. Verrin lo que se antincia in descripioizibus Jerenme ( 2 . Hach. c. 2.):

ti apparebii majestas Domini , et riubes erit Ticut e t Moy- si n7aniJkstabafur , et siciit LFnZomon petiil , zit locus sanclz$caretur nzcigno Deo. Entoncen se entender8 bien, pues se vera perfectamente cumpiida la c&!ehre pro- fccia de ASeo , cnya erplicacion ha sido sicinpre hien iac6iiioda. Aclhuc L I ~ L I I ~ modicum est, 6 como Ire San Pablo con 10s 7 0 (Ad IJeh. C. 12 . 17. 26.): Adlm se- nzcl , et ego comntovebo c a h z , et terrani , et mare, e t aridanz, e t niovebo o m m s genres, e t veniet deside- ratus cuncti9 gentibus , et implebo domrinz istunz gloriu: meum es t argentum , et meum est uurim ; nzagria erit gL70r.L.a domus istiiss noviasfme plus qanm prime , e t in loco isto dnbo p z ~ : v : .

Decis aqui que t:*Jo esto se verific6 litteraltter e n aquel segundo qnc eelificaron 10s que vinieron de Balr;Sonia , pues en e'h se clex6 ver rnuchas teces ; el Mesias riiismo predic6 , hahi6, ensefi6 &r. A lo qua l respondo en breve qne no teneis razon : lo prirnero, po rque aque l templo, a u n q u e fuue el segundo , no h e e! iiovisimo 6 e l ~ l i i m o , ni se le p e d e aplicar este nom2,i-e con yropiedad: conira esta idea , universal- mente recihicla e n el sistema vrrlsar, c l a m d gran- des voces la verdad de las escritnrns : las qnales pro- meten p,wx lo futuro otro tcrnplo iofinifameiite me- joi- , asi e n lo material como en 10 formal. Lo se- gundo : pe,.yqne en aquel segundo t ~ m p i o , r n tcdos 10s q ~ ~ i > > i e n ~ t ~ ~ ahos q i i e dnrci , no se cumpli6 aqne- Ila promesa Seiior: e t in loco islo &bo pacem. Lo

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8x3 tercer0 : porcpa la gloria de aqncl segurado templo no file mqyor ni a i i ~ sirpiera igual li la del prirnero que rdifi;6 Salonion : vcs inismo lo confesais asi e n o t ~ a s partes ; p e s es inneghhle segan tcda ia his- toria sagrada. Si Leemos el lihro de Behemias , p 10s dos de 10s Maedbeos, h a h m o s todo Io conlrzrio. Si leeiiios los evangelios , hallamos aquel seguntlo templo en tanta profanacion p en tanta ignominia, que el Mesias inismo entrando en CI se sinti6 abm- sado del zelo de la caqa del Seiior qcionianz z e h dOn2ES tiin. conzedit n2e (Joan, c. 2. v. r4.) , y ech6 :t Jatigazos 5 10s que lo prcfamban vendnenclo y corn- prando. Confrontad ahorn como de pasn esie suceso con aqueilas dtinzns palahros de ia prcifecia de Zaca- rias : et non erit nzercatos uktru in donzo Domini in die i k : y Pailad en jiiicio y en justicia.

Mas 6 sea e n el templo 6 iuera de 6 1 , en toda la gran Jernsalen y en sus confiincs verrin estos di- chosos pasageros y goaardn de cerca de a q u e l mag- nifico coovite que sc annr:cin y pi-oinete 6. tcclr3s 10s pneblQS en el cap i tdo 2 5 de Isaias , versiciilo 6 : et

jkciel Dornirzus exercitrrrLnt ontnibus . p o p ! i s in nzoiite hoc cortviL iunz pirzgiii14n2 , cmviviunz mindernice , pinguiunz ~rtedulutorzrns , vindenzin. ~ + C C L { E , expresiones J' se- mejawas vitrisimas que prneban niiirho , y ciicen mas dc 10 q u c podrmos ahora imaginal-. Con razon clecia el Saoko Tobias : Bealris P P O , si faeriizt reliqiiic senainis naei ad vidrndum claritnlenz Serrrsalem ... . pe7 vicos ejur nlleluja carztabilur : beidictus Bomzinus , ~ 1 1 ~ 1

cxtll tuvit earn , r t sit regnunz ejus in sreculn scectdorrinz super eanz. Anteii.

No es: inverisirnil que w a n por dcfuesa la cin- dad santa haxada del cielo ; y si acaso esta se Ies oculta, coni0 yo sospecho , por estnr cnbierta pol' deruera de nlgnna nabe , (de un modo scmejante ii 10 que scccdi6 antiguamente en e l monte S i n a i ) qtle vean a Io nienos esta n u b e , y entre ella alqor:as seinales externas y nada equivocas de la sailtidad y gloria iirefahle de aqnel lugar. Jesucrjito divo una T'CZ a' algiinos de st is cliscipulos , pies eaLe Nicode- mras: vidcbifi9 ccrluna nperttant , e t arigelos Dei ascen- dentes , et clescerzderites supru jiliunz hominis. (Joaiz.

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814 c. I . v. 51. ) Esia promesa visihlernente alusiva ii 1% escala de Jacob , y que no consta haberse verifica- do jamas , i no podra verificarse plenisimamente e n aqueilos tieinpos?

Finaimente : para radical- mas profundamen- t e en todas las gentes , tiribus y familias ile todo el orhe un santo y religiose temor de Dios ne es e l yrincipio de la verdadera sahiduria , d e d e z n todos 10s dipotados , an'es de volver L1' BUS respectivos pai- ses , baxar tambien a1 inf iefno, y ver p o r siis pro- pios ojos esta Iiorrible vision. d Basar a l infierno ? Si, Crist6filo , deberhn baaar personalmente a1 infierno. No penseis poi. esto q a e hahriin de haxar a1 r en t ro de l a t i e r r a , 6 segun id expresion de S. Pahlo in inferiores partes terrcR : el inficrno de que hablo es- tar& entonces bien visible , aun con 10s ojos mate- r ia les , sobre la superficie de la tierra. El texto de Isaias (capi tula 6 6 , versiculo liltiino) con que pone fin 5 toda sa profecia ( fue ra de lo q a e ya qaeda oliservado en la yiiestion 7 c a p i t d o 7 , que seria bien tenerlo ayui presente ) no admite otra intetigen- cia poi. inas que se husyue 6 s z desee. En 61 vuel- ve <i tocar la nueva t ierra y nuevo cielo , de que h;1b16 difusamenre en e\ cap'itulo antececlente : y en- deiezanclo la paiahra d las reliquias de I s r ae l , les vuelFe B asegurar de par te de Dios todo qnanto est6 escrito en sa f avor , y todo qwnto 61 misiuo les ha anunciado en toda su largn profecia : quia sicut cae- li nov i , e t terra nova que ego f a c i o stare coram me, dicil Dominus, sic stabit senzeiz vestrunt, e t nomen ves- trunz. Atendecl ahora y considerad lo que se sigue inmeciiatarnente : Yeniet onmis taro, ut adorel coram me , dicit Dominibs , e t egredienfur , et videbunt c a - davera virorunz qui prccvaricati sunt in me : ver- mis eoruna non nzorietur , et ignis eoruna non ex- tingueiur : e t ericnt usque ad satietafent visionis onini

5. 3."

carni. Pnr estas palahras parece claro : lo primero : la

peresrinacinn *tie todas las gentes ic ~ e i u s a l e n : no digo yo de todos 10s individuos, que esto parece no solo moralrnente sino fGcaniente imposible, s ino de todas ias gentes por medio de algunos enviados, fucra

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cfe 10s yne quisiwen 6 pudiesen ir por su pro- pia tietoeion 6 curiosicldd, que no clexarlrr de zer innumerablcs : venirt onrnis cur0 , ut udoret torant

Jacze mea. Lo segundo: la vision horribte d e l in- fiernv , p de sns conde'nados , de que vainos IiaLLn- do : et ei'unt usque ad satietatenr visionis onrni carni. Lo tercero : que el iagar dunlle estar in eticdrceld- d 3 s e s : 05 ins i g ri e s clef i n y ;e n t es f e suci t a clos e n t 1) ri c e s in oprcbriuna (Dan. c. 12.) n o estar i distante , sirlo muy vecino. B Jerusaien. Esto sucnan ohvia y natu- ralmente ayuellas palabras : et egredientur, e t vi- debunt.

'510 sospecho vehcmentemente por otro liignr del mismo I s a i a s , que esta liorrib!e carcel n o ser& otra cosa que el valie soinbrio de Jophet , vecino B Je- rnsalen , y contigiio ai valle de Ceciron. Este valie de Jophet rue bien ce'.ehre en otros tiarnpos por 10s Aorrores que alii se executaron , y que tan to cles- honraron ai pneblo de Dios , ,est0 P S , qne 10s pa- dres y madre3 sacrificaban sus propios Iiijos pa'rvu- 10s de un ~lzoclo cruelisimo a1 idoio de Moloc. De este valte hahia algunas veces Jeremias como de un lugar el rnas ahominable del i i iando, y pareee que estas abominaciones se efcetuabag ya desde 10s tiem- pos p t e r i o r e s S David, pues de elias habia en el salrno ro5 , y que rliiraron hasta 10s tienipos del Santo Josias ; del q u a l dice la historia sagrada (4. &g. c. 23. 9. I O ) : Contamiraabi! quoque Toplzrllz , quod est in convalle $lii Ennoria , ut nemo consecrarei $&urn aut ,filiarn per ignenz 17.loloch.

Pnes de este valle dicc Isaias estns palabras: (capitulo 30 , versicnlo Gltimo) PmpurGte est rlainr ab heri Topheth , 6 rege prRparata , profunda , et dila- tatn : rtutritnenta ejus ignis el ligna 'multa : f lu tus BO- mini sicut torrrns sulplzaris succerzdens ecnz. Para totuar h estas palabras todo su gusto, y coriocer de que' suceso hoblan y de que' t i empos , seria convenienii- simo leer atentamente todo este capiiulo 30 de Iqaias, 6 lo nienos desde e l versiculo 1 8 , desde dondc se empieza i l iahlar inanificstainente de la conversion y estado fQturo de 10s judios, y tarnhisn de In venida glcriosa del Setior. Despues de esto, seria del mis-

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516 m o modo convenientisimo confrontar un texto con otro , y considerado el context0 de ambos , se vesk qve en el nno se aiiuncia la substancia del SU-

ceso ciertamente fulnro , y en el otro s e s e i d a el ltrga~.. Cotcjese el versicuio ~iitiiiio del capitulo 30, con el vcrsicnlo tiltimo del capituio 66 , y se yerlf est0 cla2.o.

Mas sea lo que friere del lngar de esta carcel fi de este Ge-enrzon , ti de esta GeAennn, a‘ lo inenos pa- rete indubitabie que eStw insignes d inrelicisirnos &- l inq i ie r~ t rs , coin0 resucifados dinicanlenie in opro- brjzim, estaran en aquel los tiempos puestos k la ver- giienzn, 6 ii la vista pirblica de tocia came , y clue e - ~ c tiorrentlo espect&xio deher6n vel- con sus pro- pios ojos todos 10s yne fueren 6 Jerusalen, ut ado- rent Regent Donzinum exerciturinz ? para que se vea al- guna vcz patenie en la superficie de nuestro gloho la providencia y la justicia de Dios, y la infinita di- ferencia qve hay inter justunt e l inzpizinz , et inler ser- clienten2 Deo et non servientem ei. (Mnluq. c . 3 . d ult . ) Del mismo in( do parece indiihitabie , que esta hor- r i b l e vision hnrh teinhlar d toda came , prodnciendo en todos qriantos la vieren, y en yraantos la oyeren de estos testigos oculaies , todos ayaellos efectos sa- liidahlrs que produce sieinpre el religiose y verda- drro tenior de Dios.

Con Io memoria C irniigen viva de esta horrible vision, y con la memoria 6 irnsgenes igualmente vi- vas de todo ynanto liabra’n visto y O i d O en Jcrnsalemn, volrercin estos w l i g i o s o s peregrinos ri sws ~espec t ivos paisas, manifestando toctos aquellos sentimientos y afectcs saludnbles que e l Espiritu Santo gniso que quedawn escritos en el ,<airno 144: Generatio et ge- nerulio lnudabit opera tua , et potentian1 tuam pro- nuntiabunt : nlugnificentiarn glorilr sumtilotis tu& lo- qiieit/zir , e t ntirabrlia tua riurrabiint , e t ujrtuteni ter- ribilium tucirum dicent , et nzagnitiidinenz ruant narra- bunt : inenzoriant abundanfia? suavitatis tun? eructa- Crtclzt, et justitia iua exnltabiinf ... . Gloriam regni tu i di- cent , et pntmtiam tuani loqrrentur , ut notarn jlzcinnts$- &‘is fioniinunz potentiam tuani , e t glotiani naagrz$cerztirtl regizi tui.

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817 jQue niedio t an excelente y tan eficaz esta pere-

Srinacion ;i de;-usnten, para conservat en toda per!ec- cion la f 6 , el temor de Dios, la jiasricia , la p a z y la inocencia en todos 10s liabitacioi e : de la t ieria ! Mientras esta Icy se observare, no hay cine tenier quiehra aiguna de cousideracion Li cle dif ic i l reniedio: per0 el gran trahajo e s , qi ic la oliservancia de es- ta ley fundamrntai no serii perprtiia , seorin v-ereinus a' su tiernpo. Ent re tanto nos es ndcesarro a y u i ? pa- r a llenar aigttnos vacius, una especie de digresion.

d: AP I T U L O XIII.

r!

&!e Jutisface d zlariao quesfioizes d$cuZtndes.

3. I." L o que qneda escrito en esta tercera parte, d i re is , parece muy- pohre , ni corresponde d n-ctestra espectacion ni es capaz de t i m a r nuestra cnriosidad. Esperibamos saber cosas graodes J maraviilosas sohre el ri'yno (!e= Jesucristo en nuestra fierra. Esperdha- mos notieias clnras 6 individnales no so!arnente so- b r e la substancia , sin0 tamhien y r n t i c h ~ mas so- h r e las circunstancins y modo cle esie reyno de Je- sucristo. Espei-ibanios v. g. ver y eniender perfecta- inei3te la economia y gohierno de un r e p o fan gran- de , que debc compi-ehender el orbe de la tierrn to- do entero : e t erit Dominus rex super omnem terrana: (Zac. c . 14. v. 9.) su gerarqoia asi eclesia'stica como civil : SIIS ieyes civiles y ectesigsticaq : su liturgia , sns cerernonias eo el rito extern0 : sn disciplina : 10s ver- daderos limites 6 confines entl e la gotestad eclesids- tica y civil : si estardn unidas en n n a sola persona, d e modo yne el pastor sea a1 inismo tiempa el reg de toda aquella porcion de pais que comprchende su clidcesis: cosa decis que no es inverisimil , pues h a n de nnirse perfectameote en el supremo Bey p stirno Sacerclote Cri5to Jesus asi como estuvieson nnidas ea si1 tipo Melqnisedec , que fne a l mismo tirin- po rey r b Saleill, e t sacerdos Dei abtissini?. (Gcn. c. 14. v. 18.)

De estas pregnntaq podcis hacer quantas se ofrc- cieren & yaestrn irnagiaacioo , p e s el campo es ciesd

'3 3,

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$13 I

taniente amplisimo; mas la respuesta d todas ellas nle parece tl mi tan facil coni0 breve y compcndio- sa. Si yo respond0 que todas estas C O S ~ S Ins i ~no i -o , poryue no las hal lo en la sevelacion i quedareis por eso en clereclio de negarlo todo?

.PARABOLA. _-

5. 2.’ P O C O ~ alios an te s del nacimiento Je Jesu- cristo , quando ya todo e1 imperio roman0 IiaBia quedado e n paz haxo A I I ~ U S ~ O , un pequcrio Rabirio, repatado con razon po r uno de 10s infimos , se pus0 i l e r r y ebludiar 10s libros sngrados : ariadiendo para sll mejor inteligeneia el estndio de yuantos escrito- res 6 legisdoctores le fueron accesihles. Hahiendo perseverado en este estudio mas de veinte alios, til- tenJi6 finalmente entre otras cosas tres piintos CR- pitales , 6 t res misterios gravisimos , que ya insta‘ bat? 6 que no podian t a r t l a r mucho tiempo segun I n s escrituras. Eotendi6 lo pr imer0 con ideas clams, s in pader ya dudarlo , que Tenido el Mesias (cuya. venida ya instaba conforme ri las semanas de Daniel capitulo 9.) el pueblo de Dies , el pueblo santo, e l pnehlo hebreo , q u e tantos siglos lo habia esperado y deseacio, seria ~h mayor enenxigo que 10 perse- guiria que lo reproharia y que lo trataria como 6 xzno de 10s mas inicpos delinqiientes. (Salnz. 21. Isai. c. 5‘3. Don. c . 9. ) Entendi6 lo segundo : yne p o r este sumo clelito, y m u c h mas por su increduliilad y olstinacion , Israel seria reprcihado de Dios : clue e[ Mesias seria resprcta del misnio Israel in lapirleiiz offen&nis, e t in pt:ra’anz scandnli duabus domibus Is- rael , in. laqcieunL , et in ruinaria habitantibus Jerusaleni. ( I s a i . c . 8 . v . 14.) Que dexaria en fin de ser p u e h ! ~ de Dios. ( D a n . c. 9. Ose. C. I . et 2. Isai. c. 6. v. I O . ) Entendi6 lo tercero : que en l u p r de Israel ioi- q u o , p poi- eso incre‘dulo, que no cperria congre- g a m e , ni se congregaria : e t Israel i m z congregabiinr, (~sai. c. 4.9. 2 7 . 5 . ) llamaria Dios A totIas Ias gentes, triIms p lerignas, de entre las quales (Ins que aye- sen y obedeciesen a l evangelio) sacaria otro Israel, otro pueblo ; otra iglesia soya sin cornparacion ma-

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819 yor y mejor : que en esta iglesia 6 pnehlo suyo, esparcido por tadx la t ierra ( y a1 mismo tiempo con- , gregaclo en un solo cuerpo mora l , y anaimado y 50- hernado de u n misnio espiri tu de Dies) se le ofre- ceria poi- todas par tes un sacrificio de justicia lim- pin y puro, 6 infinitamente agradahle a1 mismo Dios. ( MaZaLh. c . I . v. I I . ), Y que este sacrificio no seria ya secuizdum ordinena Aaron , sed secundunz ordinem Melchisedec. ( Salm. I 09.)

Sobre estos t res pnntos capitales escribi6 nues- t r o Rahino un oplisculo pobre y simple ; mas tan convincente, q u e aun 10s inas doctos y eraditos no, liallaron modo a l m n o razonabie (aunque lo hnscaron con todo el empzfio posihle) de impugnarlo directa- mente. i Pur yu6? Porque citaha fielmente lugares clarisimos de la escritura santa , incipiens d Moyse e t omnibus prophetis, Porque comhinaba unos lugares con otros, y con esta combinacion hacia nias patente la verdad de Dios. Po rque con esta verclad de Dios Clara E innegahle, conpencia cle arbi t rar ias , de im- propias , de violentas y p o r consiguiente (le faisas las inteligencias que daban 10s Rahinos ri tliclios lu- gares de la escrllnra santa .

No obstante : como estas ideas, aunque mnfornies & las escritnras, eran diametralmente opuestas i las ideas valgarinente recihidas , fue como una conseqiien- cia natural que se alborotasen no pocos. Decian 10s mas ( y los menos cue rdos ) : i n 0 es este uno de 10s infini?os entre todos nuestros escribas? Pues i e s crei- hle que h a p venido B descnbrir uilos misterios tan g a n d e s y tan nuevos, que hasta ahora se habian ocnltado B nuestros sabios? Et scandulizabaiztuy in eo. Qtros mas cnerdos 6 mas sasaces , Conocien- do hien la diiicultad de cornhatir directamente la suhstancia de aquel escrito (en el qual no hallaban otra cosa que la escritura inisma f i e h e a t e citada y comhinada) se convirtieron enteramente ;i las circuns- tancias.

Empezaron desde luego d oprimir a1 pequefio a n - t o r con pregnntas no menos impartunas que irriso- riaa, d que ni 61 ni otro alguito era capaz de res- ponder. L e pregontaban v. 8. i c6mo seria este nue-

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820 vo pueblo de Dios, este nueyo Israel , coppues to de tantas gentes , pueblos y lenguas? iQual SZL cirrlen , 6 su geraryiiia : qual%ser ia su. ciudacl capital, 6 el een- tro de unidad: cjuales sus ieyes , s u s costuinbres , su disciplina , sti c d t o exterior, su saccrdocio , sus sa- crificios , sus ceremonias? L e instaban algunos fuer- teniente que se expiicase mas soBi-e la inteiigencia literal clue pre:enclia dar d aqoel t ex to de Malaqnias (capitulo I . l e rs icu lo I O ) : ibon est nrihi vokrntas in V O V L S , e t nziinus non suscipianz dc manu v e s t m : ab or- tu enim solis rrJqrie ad o c c a m m , niagrauna est nonzen meum in genlibus , e t in omni loco sacr7jZcatur, ct ojyer- tiir nomini naeo oblatio ntiinda quia naognunz est no- men nzeuna in geiztibus dicit DonziiLLcs exercitriurn.

Le pedian yur expliease con iricas d a r n s qud sa- crificio seria este : cor1 q n d ri tos 6 ceremonias se

’ ofreeeria a1 veriladero Dios , si tiabria e n todas paries teiiiplos tan magnificos conto el de Serasaiea : si ha- bria sacerdotes , tornados indiferentemente de todos los pueb los , tribus y lenguas il cle aJgnna t r ihu 6 I’ami- lia particular : que I estidos nsarian estos asi en 10s terripfos, corno fuera de ellos Stc.

E1 pequefio Rabino, apenas d;gno de -es t e nom- hre , se sentia no solo wribarazado , sin0 oprimitlo con tantas preguntas. S u respuesta ti todas ellas era u n a misina ( n i podia ser de otrn manera, pues el inodo y las circunstancins particutares de nuestra igiesia presente no se ballan ciertamerrte en la re? eiacion, no obstante se Eiaiia clarisinm tntEa la substancia de este gran misterio). Asi decia a‘ grandes voces sin t emor de la ternpestad de piedras que veia en las ina- nos de la infinla plebe : La cosa sucederd puntualmeate asi coni0 estri escrita. I s rae l -drxarh de ser pueblo de Dios por sit incredulidad, y las gentes serhn 141- inadas 5 ocupar su lugar. EL modo -y circnnstancias particularcs con que se ohrard este gran inisterio , YO no lo s d , poryue no lo hallo eypreso y claro en las escritnras sagradas.

Solo S P p o r ellas ( p r o s e p i a diciendo) yne el Me- sias quando venga se vfrccer& B si inismo en sacrifi- cio. ri Dios su Padre p o r 10s pecndps de todo el mnndo : si posuerij animam suam (dice Isaias , eapi-

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821 tulo 5 5 , aTersicnlo I 0. ) videvit semen loizgawum , et vo- lrintas Domini in nzhnu ejiis dirigo~trir. Solo sd que este semen longrevurn, 6 lo yi?e yawce lo niisino , esia sncesion continuada de hijos de Dios engeirdrados por el Mesias mismo con SIX muerte dolorosisima , coil sa s a n g i e , y con la efusion de sti dipino espiritu, se- rAn tantos e n toda la t i e r r a , yne serh iinposible nu- merarlos y contnrlos : generahmenL ejus qriis enarm- hit? .... in sciftztin sun just9ccsbit ipye jriJ!ns servits nieus nzzilfos , e t iniquifates eorzitn ipse porinh!. So10 s$ por e l salmo ‘“9, que habidndose ofreciclo a‘ si misino pro peccnto, sexi tin Sacerdofe e ’ e m o ; no pa se- cunduna orclinent Aaron , sed secundrini orcKinenz MeZ- ch i sed~c , cnya ohlacion 6 sacrificio fue el inas simn- ple de todos, p e s se r e t h x o todo Q pan y vino.

De este modo respcnciia nuss t ro simple Rabino 6 todas l a s prrgirntas qne se le hscian , y ri todas las tlilicnliatles cpe se IC proponian. Y en efecto, 2 cc;mo era p o d l i e qne un homhre pudiese ies- p o n d e r treinla afios an tes del nacimienlo de Jesu- eristo Q t au t a s y tan ciirrrsas preguntas sohre el trio- do de ser de nuestra iglcsia presenie? iQiiiPn po- clria sahcr enionccs con ider?s ctaras y circunstancias indibiduales lo yuc deSIa suceder en el m u n d o des- J I U ~ S tie la muerte clcl Mesias? Ea subitancia de r s - t e gran rnisLerio se hnlla ciertamewte en las escri- inras, y nueqlra propia experirncia nos lo ensFila a s i , y nos lo lrace advcrtir fl.eciirel7tisirnainente ; mas las ckcunsfancias psrticnlnres no se hal lan. [Pues c6m:t las podian s a h r r r i i a a n sosp’cliar 10s q u e vi- vian e n Jerusalen en t irniyos de A i ~ g ~ ~ t o ?

;Podria rntonces pr,ol>arst: con algun lugar de la c q c r i ~ a m , cjne ei MeGias eiegiria doce hombres idio- t a s , humilties p simples para f n n t l a ~ su iglesia y Ila- mar y congregar en c l l a tocla suarte de gentes? iFo- dria entonces proliarsc ccn alenn 1upr de la escri- trara Astkntn, qvr uno de estos idiotas, constitnido pr incipe entre toclos, fieria enviado a‘ poner s i 1 silla en l a misma capital dcl grande y sol)erliio imperio romano 1 i Q a ~ ecta silla humilde se mantendria rn Rov1.a firm? P innrnlable, Q pesri:. de toclas las oposi- ciorles , contradicciones y vioiencias del mayor inipe-

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822 r io del inmdo? iQue esta silla seria reconocida y res- yetada como el vercladero centro de unidad de todos 10s creyentes de todo el o rhe? ;Que estos edificarian en todas sus ciudades y pueblos templos innumera- hles para dar culio e n elkos a1 veidadero Dios? i Q u e en todos estos tempios se o€recerin incesante- mente B Dios viva el j u g e sact^tficiuns, est0 e s , e l satrificio y oblacion niunrla de que se habia en Ma- laquias? [Que este sacrificio y ohlacion munda , n o seria otra cosa, sin0 el misino cuerpo y sangre d e Cristo que se ofreci6 en la cruz una yez , y esto ba- xo las especies de pan p vino, secyzdunz ordinenz Melchisedec? i Q u e este sacrificio en fin se ofreceria d Dios con 'estas 6 con aquellas ceremonias? To- das estas cosas particulares que abora veinos y go- zarnos, i s e podian saber treinta aiios antes del na- , ciniiento de Jesucristo solamente con la leccion de la ley y de 10s profetas? Pues ap!iquese la semejanza a1 asunto de clue ahora tratamos, La aplicacion no pue- de ser inas facil.

5: 9." A todas quantas preguntas me hicieren 10s curiosos , $1 tocias quantas questiones y dificnltades me propusieren, yo no puedo responder de otro mo- do. >Confieso simpiemente ( n i tengo porque avergon- zarme de esta confesian) que ignoro ahsolutarnente '

infinitas cosas particulares que sucedera'q en aquel siglo feliz, y que la escritura no refiere. Ignoro tam- bien e l modo y circunstancias con que deherin ve- rificarse aun ayuellas mismas que,anuncian clarisima- m e n t e , y cnya substancia 6 mizlerio general me pa- reee innegahle. No obstante,, en medio de esta igno- rancia y obscuridoct , rne,persuado que las cosas anda- rin en aquellos tiemyos de tin modo rnejor y inas perfecto de l o qup poddamos imaginar , porque at cab0 , aquel sei& el r q n o del Sefioi,, y no el de 10s hombres ; y segnn Isaias capitulo 32 ! Ecce in justi t ia regnawit rex , et principes in judicio p m - errcnt. Serao entorices ciertos y palpables 10s verda- cirros lirnites entre el sacerdocio y el imper io , pues entonces e l sumo Sacerdote Cristo Jesus serti a i mis- mo tiempo Rex-super- oninern tzrram , et erit Dominus

I unm , et nonzen +is ununz. (Zac . c . 14.) De consiguien-

,

.

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823 te las leycs asi civiles coin0 eclesia'sticas sersn sapieo- tisimas y yroporcionadas d aqucl tiempo feliz, en el qual estaran en su vigor aquelias particulares que he- mos olservado, de no hacerse 10s hornbres guerra al- g u n a , de conservar entre s i una paz y una fraterni- dad sin liini te , y cle hacer sus perrgrinaciones y visi- tas a1 santnario del Seiior ; pudieaido tamhien estar bien persuadidos, que el sapientisinlo y justisimo Pkey acordarri qnantas providencias Sean oportunas para el h e n gobierno de su r eyno , porque segun 61 mis- mo nos dice de Sion exibit lex, e t verbum Domini de Jerusalem.

CAPIThJLQ XIV.

Fin de 10s nzil aiios de que habla S. Juan, y soltura de 2 dragon.

S. 1.0 H e m o s llegado finarinente 5 la drtima , 6 direnlos rnejor d In pendlima e'poca del gioho que habitamos. Dixe penfdtinia &paca , porqne despues de esta que vamos B conisiderar a l iora , nos yueda toda- via otra q u e es la eterna. Hasta 10s confines de esta tjpoca nos b a n acornpariado y ayudado infinito casi todos 10s antigrros proCetas. De acpi para adelante no tenetnos ya que consnltarlos , porcjue toclos nus aban- donan. T ~ O S terminan sus proi'ecias en el reyno de n i o s , J' del M e s h su hijo aqui en nuestra tierra, sabre 10s vivos y Tiadores. Todos paran aqui, y nin- gnno pasa adelante.

Solamente el irltirno de 10s profetas , que es el h p c i ~ t o l S. J u a n , sigtie hasta s n dltirno fin este hilo, 6 esta grandisinia cnclena del misterio de Dios con 10s hombres : la sigue, dig0 , hasta la consuniacian entera y perfecta del niismo rnistesio de Dios, 6 lo que e s lo rnisrno , hasta la resiirrereion y juicio nni- Persall : et postquam coizsunznznti fuu in t Inille anni, solveiur satanas de carcere suo. ( c . 20. v . 7 . ) Ya 'he dicho en olras partes que el libro divino y ad- misable dcl Apocalipsis e6 la l h e vcrdaclera y dnica cle todos 10s profetas. A todos 10s cxplica, 10s aclara, 10s compendia, 10s extiende , y llena frequentisinia-

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824 mente no pocos vacios qi?e e h s dexaron. Est0 se ve y a u n se toca c ~ i i las m a n o s en 10s quafio iiltimos capitfilos del h p o c ~ i i p s i s , [os ytiales poc!emos mirar con gran r2Fen c( ]no u n Parciiip6rnenon, 6 como un suplemento bi evisimo de muclias cosas particulares y hien suhstanciaies que c~ilns omikici on , Qmitieron, digo, porque no se ies dieron , y no se les clieron, po rqne todavia no e ia su tiempo. Si se admitc estn idea , tkspues de bien ex&ninada , todas las escrituras antignas se v e n a1 instante llerras de iuz. Sino se quiere ex;^lminar, y por M t a de este eu3men no se guisiere ailinitir , me pal ece como i i ~ a cunwydenr ia nrcesaria, que quectareinos suhi e la inleiisencia de ias escritn- ras , e n la misnia obccniidacl yve liasta de ahora .

No obstante esta veidacd geileral, qiir por tal la t e n g o , m e es precis0 cnniesar , y io confieb-o inge- nuamente, que llegando a1 Tersicnlo 7 del rapitulo 20 del Apocalipsis, se ecba menos, falta , se clesea en esfe ParaliptFmenrin, 6 en este s u p l e m e n : ~ de 10s prolktas ana cosa bien suhstancinl, cuya fal ta coria e' in!errntnpe eritlentemente la $ran caciena del mis- terio de Dios con 10s Iionibres. Expl icome: el arnado disc;puIo hahla solamente de lo yoc clebe su rede r e n toclo nuestro o rbe , despues de consumados sus mil afios , 6 lo q n e es e5Tidcntemente lo mismo, despues de consurnado aqnel d i a 6 ticmpo felicisimo de que tan to habian 10s profetas de Dios con estas expie- siones : in di,. ilIn=in diebits illis=in novissinzis die- bzrs=in navissirno dievutn=in tempore i l l0 &c. Mas no nos dice ni nna sola palabra sobre las causas , n i sobre el modo y circunstancias con que se deherb acahar aqnel miLmo dia G tiempo que e'i I!ama mille ami. Solo nos dice I~ rev i s i~namen te que pasaclo este tiernpo se so31316 oisa vez el clrason,.yue pucsto e n su antiRita i i he r t ad , v ~ l v e l d 5 FeGncir dc nuevo Ias gentes : e t postqrraaz consitinmati firerint mille a m i , soivefnr snfanas de curcere . w o , r t rxibit , et seducet geriles , quce sitrit super quatzior angulos term. iR'las es crei?,le ni po"ble , diWo y o 9 que pueda suceder esta nneva soltura dei dragon con todos !as ef'ectos terri- bles y admirall les exprcsos cn el inisrno texlo de Snn Jua i i , sin liaber precedido en las misrnas gentes al-

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825 gunas culpas ymerales y gravisimas, y por eso dig- nas de la ' jnstisiiaa ii-dignacic n d e Bios omnipofenie? iQtie' culpas podrdn :,er ~ s t n s cw acpelios tiernpos , gm- visinias y universaiea 1 Eate e s pnntcalmente el aniiio 6 eslahon de la gran cddena de1 misterio cle Dios que falta en el text0 del Bpd-caifp4s.

Coino este anil lo me ha pareciclo sieiiipre aina gie- dra de soma irnportanci,t, i o he btiscaclo con ia mapor diligencia yiie me ha sido posiihie en 10s antigrios pro- f'efetas, p finalmente me pasecc habedo hallado en el penriltiino de todos qne es Zacarins. (capi+ulo dltimo, versiculo 16.) Considtrese atentarnrnte el texto (:e e * k profeta con todo su ccntex to , y ccnsi0brese con la niisma atencion la intrligencia reaimente fria , y aun conocidarrtente falsa , qiic se le ha pi,etcnrtidc clai. desde 10s principios tiel sigio c p i n t o liasta el d i a de hoy: Et ornnes qui relfqrri f m r i n t de rcniversis g ~ i z t i I ) z ~ s , qrm venerzznt con'srz Jerusalem , ascendent ab anno in aniizim zi t adorent Plegcm Dominun? exerciluunL , e t celelrriit Jes- iiwitntern tnbernncrdorzcm. Et crit : qui non ascendwit de

fatntiliis temp ad Jerusnlen~ , ut adrret XegPnE Domi- nunz exercitriiina , non erit super eos iniber. Quod e l A i f a - milia .Egyp+i non ascenderit , e t non venerit , ncc super cos erit , sed erit ruinu , qua prrcutiet Doniinics onii7P.s gert- t es , 4 % ~ non tzcceizderirit ad cclebrandanrJestivib tenL tn- Eernaculorrrm, Hecba es'a amenaza general , sigoe inine- dlnfrin-irrite el vclticiirio cliciendo : hoc eril peccatuni LE- gypii , e t hoc peccnlrirn oniniuna gentium , qim ncn a&- Leiderint ad ce lebrcndam f r stidatem tn lirr.naculoruin. De mod? que coneidcrado hien rl lexto de este psofe- ta c m todo SZI context0 , y co rnb ;~ado cer1 el del A p - calipsis , se v e tcda !a substancia del nriiqlerio general de yne vanios hahlando , y tamhien algurias de sus piincipales ciicunstnneias. Se v e lo pr imrro , que ebie resitluo de 13s gentes 3. toda su posieridad rstarR obii- s a t l o , C O J ~ O POP' una ley f u n d a m e n t a l 6 indispensa- lde, A preseniarse una tez a1 afio en Jriwsaien (sin dirda prir medio (le siis diputados) ut adcrenl Regene Dominim extwiiiiuna , e t celebrent fesrivitntent tnherrzn- Lielorurn. Esia ftstividacl de 10s t;?berr.dca:c?s, g Jos fines que trivo D:os cn su inst i iucion, Q P p ~ ~ ~ d ~ n ~ e r cn el Deatcronomio (capitulo 1 6 , T ensicuiu 13) .

+

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826 Lo segundo: se ve que pasaclos muchos , aun

mnchisinios siglos , que S. Juan encierra en el numero perrecto de mil : pasaclo , cligo , este tiernpo feliz , en inocencia , en siniplicidacl , en bondad, en f6 Src. co- menzark a' entrar poco a' poco , ya en e$te , y? en aquel pais cle nuestro glob0 cierta especie dc tibieza, de floxcdacl , ii de tedio, en lo que toca B Ias yeregri- nacioiies annuas 6 Jerhsalen. Esta tilzicza , como e s natnralisirno, ir8 creciendo de die in dient, p e s no es verisimil ni creihie que el mundo se pervierta de repenfe, ni en pocos aiios.

L!egada pues esta libieza de las gentes 6 cierto te'rmino ya indisirnulahle , empezara el Sciior a' casti- Sarlas sunvemente con aqueila especie de castigos de yne suele usar un huen padre con iin hijo in- obedientr y rebelde Ernpeiar j , d igo , ti escasearles, y aun nrgarles casi del toclo el sustento necesario, y les enviara la caresfia. Esta caresiia la explica e l profeta con estas simples palahras : non erit super eos irnber; pues es hie11 s a l d o que sin lluvias no hay cosechas.

Lo tercero: se ve , unido un texto con el otro, que n o hastando estos castigos personales para hacer volver 6 las gentes a' su antisua dcvocion y fervor ( n i hastanclo otros muchisiiiios medios stlaves y fuertes de que m a r 8 la hondad infinita del Padre Dios, como dehemos suponer , aunque no lo hallemos expreso en Is escritura santa) IlegarA finalinente el tiempo , en que llenas todas las medidas del snfrimiento, se use con ellas del d t i rno rigor. Es decir : liegarri e l tiem- po de abrir las pnertas del ahismo, y dar otra vez al dragon entcra l ibertad: Et post hirc oportet i h n z solui , naodico tentpore. ... e t cunt corzsanznzafi fuel-int i d l e anni solveirrr satanas de carcer-e s u o , e t exibil, e t scducet gentes, i No veis y a , 6 ainigo , por lodo lo que acabamos de observar el esldbon 6 ani110 que fatta iiidubitnblemente en el tr-xto de S. J u a n ?

Aahiendo ballado en Zacarias e l anillo qtie €alta en el texto del Arocalipsis , queda segnida y continuada In caclena de toJo el misterio. S. Juan nos cl ixo, q u e despues de concluiclos stis mil silos, sc darti o h vez l ibertad a1 dragon, y Zacarias SC-

S. 2.'

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827 fiala elaramente la razon y la cansa de esta soltcra; mas sin d a r un paso mas adelante, ni explicarnos sus resultas. Estas las hallarnos continuadas por el ainado discipulo, quicn llevando Basta su fin e l mis- ter io de Dins con 10s hombres , psosigue : et CUI18 coiasunanaati fuerint mille anni , sdvetrrr satanas de carcere s u o , e t exibit , et seducet gentes, qun: sunt SU- per quatuor angulos terrE, Cog, e t Mug05 , e t congre- gabit eos in prEliuna, quorum numerus est sicut are- na nzaris. La sedaccior~ pues de las gentes , y su le- vantamiento general contra la ciudad escogida , serrln las consequencias de I n soltura del dragon. Mas ya vea , Cristnfilo, que os levantais contra mi , que en tono decisivo me proponeis an argumento en estos t&minos.

Si Be entiende literalmente el capitulo 20 del Apo- calipsis , deb'erri Jesucristo mismo ,-con tQdoS sus san- tos ya resucitados reynar efectivamente en Jerusa- lei1 sobre torlo el orhe de la t i e r r a , y esto po r mil aiios, ti determinados 6 ipdeterminados. Si esto se adinite, deberri adrnitirse poi. necesaria conseyueucia todo lo que se dice en el lnisrno t e x t o ; pnes no hay mas razon para lo uno que para lo otro. Deherri pries admitirse , qne pasados estos mil afios del ieyno pa- c i f i c ~ de Jesucristo en inocencia en simplicidad, en bondad , y en jasticia se soltarri otra i'ez e l drag013 , q u e volvera' ti sedncir ri todo nnestro orbe. Eebcrd per fin admitirse que todo este orhe se vol- v e r i de nueyo contra su legitim0 soherano : q'ue to- mar& ]as armas contra 61 : q u e irLi $ hacerle guerra en sn misma corte : que rodearti 6 ponr ld sitio for- mal B esta misma corte , e t circuierunt civitatem di- lectam. Todo lo qua l lo anuncia e l mismo capitulo 20 clesde el vrrsiculo y : e t cum consunmati fueriiit ntilte aiani, solvetur satanas de carcere suo , et exi- b i t , e t seducet gentes quce sunt super quatuor angulos lerre, Gog , et Nagog , et congregabit eos in yrelium quo- rum numerus est sicut arena maris , et ascenderunt su- per datitudinem term , e t circuierunl casfra sanctorum, et civicatem dilectam , e t descendit ignis d Deo de CG-

do, et devorabit eos. Baxo estos antecedentes, decis : i y ser5 p s i b l e

I ,

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82S que reynando Jesucristo sobre tocla la tierra se per- vierta esia liasta el extieino de qastig;irscla , ddndo- l e l i be r t ad B sn mayor ctnemigo? i Y sera' crciI3!e que 10s homhres puetlan llegar a1 e.rtrrino de la loclrra de qncrer cercar 6 Dios en s u miqina corte? Esto solo , conrluis , basta para inirar c'on:n fkhuia, corn0 delirio ;v como saieiio el sistema rniierrario p e s no siendo esto sicpiera imaginal>le , tanipoco pueJe serlo todo lo dernas.

p a s calmad nn poco , Cnistnfilo i n io , p no deis tan pronto e l asunto por concluicto. Qid con pacien- cia yuatro palabras que t a l vez os desarmar$n. En quanto d la priinera rvflexfon que me l-iaceis , de- beis Iener presenic , Crisl6fiio mio , que 10s born- Bres de entonces sera'n viadores cnmo 10s (le abora, q u e en sa mano estara' el hueno 6 mal uso de su lihre alheclrio qne andardn como ahora p e r j d e n z e t non p e r specienz, y i p e po r tanto podr in pecar. i Q u d tiene pues de extraho que despnes de mil arios ( 6 Sean cien mil) de justicia y de bondad, se v u e I ~ a otra vez ri pervertir e l orbe? Yo no me atrevere' ri aseguraros c l modo como est0 se verificari , p;rquc e n las cosas de fnturo , para m i no h a y mas gnia que la revelacion y esta va muy cscasa rcqpecto B Ias cir- curistancids de estos tiempos. Con tndo , yo veo que S. Juan me dice que deipues de mil anios se sol iar8 otra vcz e l d r a g o n , y creo halwr hnllado en Zaca- rias la canqa de esta desgracia ;. plTedo pues con mri- cba prohabilidad raciociriar asi. l[rnaginCmonos que despnes d e muchisirnos siglos de pae , de inocencia y de justicia einpiesa ii m t r a r en l as gentes, ya en e s t e , ?a en otro pais , cierta distraccion de las co- sas de Dios, y .que B esta va siguiendo lentamente y por grados cierta tihieza en el atnor de Dios , algun apeso Q las delicias J; comoclidades de la tierra. Que en conseqiiencia de esto empiecen tarmihien d dexar poco ri poco la peregrinacion A Serusalen para adorar a 1 Rey y Senior de 10s exe'rcitos , y por con- siguiente vayan olvidando las grnntlezns de Dios, y 10s exrmplares de su just ic ia , qne insinuainos en e l capitolo anterior. Que finaimelite vaj7an de auinento

-estas faltas, sin que las correcciones amorosas del

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829 Padre celestial baiten para contener'ios : i no tenentos ya eatonccs ei gran pecatio que dice Zdcariar corne- terdn el E:gipto y ias demas gentes7 Y a esie prca- do i n o es consiguiente que se siga la i'alta de [e' y cle justicia, ia s e p r a c i o n del centro de uriictacl , q u e estarh entonces e n la Jerusalcn viaclora, y por con- siguicnte la anzrquia , el desorclen y la disolucion en las cosiiimbres ? i Que mucho pnss que entonces sae!ie e l Seiior e l dragon , pelmitiendo. que salga de i ahisrno para enFtiiclr cic nuevo Ei estas gentcs dcsmoralizadas p twlp i ' a r ias en el abismo de la lo- cura , y cornplefar d e este modo el gran misterin de Dios con 10s laoiribr-es' Aceso esEo es n n e v o ? 2 80 bclnos visto en varias ocasiones perniitir e l Seiior q u e cieguen llas gen ie? , qne no vean e n just0 cas- tigo de sn ob,tiaacion? Pdcs lo inismo debemos dis- ciirrir para entonces , porque segun e4 E c l e d s i i c o , capi tulo I , versicialo 9 : ~ Q r ~ i d e 5 t q u o d j k t u m est? iysum q ~ o d ftzcietzdnna est.

Est0 supicestu, Crist6Gio mio , ya no extrafiareis lo que tanto poniti,ra?)ais en vuesti-a segunda tscfie- xion. S u c i ~ o ya el dragon , y deseoso cle p r r d e r al l inage liumano , de cuyo gristo habia estaclo gor tan- to tienrpo privado , 110 es dificil e l creer emplear i todos 10s nredios de-seduccion de cine cs cayaz su in fer id astucia , n i menos cs imposible concelsir hasla cjiian!o se ,prestaran las gentes ya corrompidas. El iap t o s exeinpios tezemos de io tino y de lo o t r o , coya memoria nos h n e e ilorar. iTendrri pues nnda de e l - trai'io clue alboro:a ti las gentes , qile las coliLni?eva, y c l n ~ haqa se re5clen contra SIX icgftiino Principe y Sriior ? No ententlais CriskLiiZo, [;!re aque!ias pala- bras de S. Juan : e t nscenderiiai sr'per icti~adinenz tcr- I it' , e t cii-criierimt c a s t r u sanctorun~ et civitotena dilec- tam , siguifiyuen precisarnrnic La nve.ia Jerusaien baxatla del cieio , pues DO hay fundamento aigltoo para ello; ind ican , si , la Selusalen v iado la , y ia 1110-

rads 6 I i a b i ~ ~ ~ c i o n r ~ s d e 10s judios , cuyas reliquias ya saheis las l lama In escritura con el nosnhre de S B ~ -

tas , y que en aqnci cntonces goseevlin la tlerra pro- rnetida a SKIS pndres. Contra eslcs p,ues , ?' contra e! cclltro de u n i i t d de iodo el orbe, b e &rigir&ra 10s

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830 tiros de las gentes .y la fiiria de1 dragon. Ultirnamen- te tengo que recordaros , Cristdfilo m i o , que e l no concehirse con ideas claras el modo y circunstancias particulares con que podra verificarse una cosa qual- yniera que sea anunciada expresameiite en la escri- tura santa , ni lia siclo, ni es , ni podrci ser jamas ztn fundamento suiiciente para negarla. Si esto se mirase nlgnna vez como pasable, 6 como tolerable, i que' pudidramos responder 6 tantos incrdclnlos, cuyo total fundsinento para nrg"r y para inipugnar nues- tros rnisterios mas sacrosantns no es o t r o , sin0 e l que ellos no pueden conccbirlos 1

Acahamos de ver el primer efecto de la sol- tnra del dragonf que serri la seduccion y rehelioh formal de todas las gentes , 6 las m a 3 de ellas qum srint szipr quatrior aizgukos terrre. Nos qbeda aliora que considerar brevisimamente el fin dc este aborto con todas sus resillths: e t descendit ignis d Deo de caelo , e t devorabit eos : et diabolus , qui seducebut cos, missus es t in smgtzurn ignis e t sulplmi-is, ubi e t beslia e t psmdoprophic crr~ciabuntur die ac nocte in srecula scecidoriinz. Por estas palabras insinGa e l amado dis- cipnlo en compendio todo e l rnisterio , . q u e lnego se pone d explicar con mas difus?on 6 individuali- dad , lo c p a l es bien freqiiente e n toda s t ~ profecia.

Sobre este dtimo texto se pneden hacer estas dos pregunias, Primera : yuidn es , 6 qa6 cosa es este ~ o g y Magog-de yuc haMa ayhi S. Juan con tanta brevedad? iEs t e rnislerio es acaso e1 mkmo que des- cribe difusarnente el profeta Ezcyuiel e n sus dos ca- pitulos 55 y 39, como se piensa cornunmente? Se- gunda : ;es te fuego de yiie halsla S. Juan que caera y consumirli la muchednmbre de Go5 y Magog, la q u a l circuibit castra snnctorum e t civifctem dilectunz, sera acaso nniverssl 5 todo nuestro orbe ? 1 Consumirri enterampnte ri todos siis vivientes y at orbe mismo?

Quanto 6 l o priinero decimos : que el Gog y Ma- gog de §. Juan no signifiican otra cosa sin0 estas gen- tes p r e suirt super quatuor anglilos t e r m : pues esta es la explication precisa que el rnismo Apcistol da B aquellas clos palabras Gog e t Mugog. Mas ceto inis- mo ( decis ) i que' cosa significa? i Buestra t ierra , en

S. 3."

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83 I cuya superficie hahitamos, es acaso algun yuadro 6 cpadriiongo , que tenga yualro Angutos rectos , agu- &,s , 6 o l ~ t u s o s ? i N o es ciertamente una esfera 6 glob0 cas; perfec to , cuyo dihinetro de nn polo 6 otro se haUa un poco iiienor que el cle oriente ri ponien'e , tirado p o r e l equador ?

Teneis razon, amigo mio , mas todas vueslras pre- guriias 6 dificnltades se desvanecen a[ primer asorno de seflex$on, Gog y Magog , dice S. J u a n , son las gentes que hahitan sobre 10s qnatro dngtdos de la t ierra. i Q ( i 6 Aiigulos son estos? Para formaros de esto una idea ciara , t irad solamente dos lineas qiie se corten 6 crucen ])ax0 vuestros pies: una de orien- t e a' pon ien ie , otra de norte ri SUI-. Con esta sola diligpncia , facil;sima en yualquiera parte del mnndo donde os halidreis, veis ya baxo vuestros pies yua- t ro ringulos rectos cada uno cle noventa gratlos. l'nes esto es lo que llama s. Jrtcin gentes q u e suizt surer qriafuor aiqplos t e r m Gog e l Mogog.

Con esta iuteligencia facil y simplicisima nos li- hramas aqui de entrar en ncpella ytiestion 6 disputa ( no inenos embarazosa qae inii t i i) sohre e l verda- dero origea de esfas dos palabras Gog e t f i f ~ g o g ~ 6 soBre el pais y lugar determinado de Ia tierra don- de habitaron , babi tan y lxtbitara'n iiasta aqnclios tiempos estas dos tribus naciones 6 generaciones. Sobre lo qual n o se bace mas que a d i v i n a r , p e s que n o hay mas luz que la que nos cla el Apocn- lipsis con estas l~revis in~as palabras : gentes q u e stcnt super qiratuor nngulos t erme.

E n todo este texto del arnado cliscipnlo, 110s con- suela infinito no leer e11 61 la palabra oinnes. Len e n 61 qaie el dragon saliendo de su carcel seducet gm- i es , que sunt super qztrrtuor angzilos t e r m ; mas no le0 que rnganarri todas las gentes I ai 6 todos sus in- dividuos. Por Jon& pnedo prudenteinente sospecbar, y piadosamenfe c r c e r , que muchos, 7 aun muchisi- rnos de [os que entonces hahitarjn sobre ios cpatro ringulos de la tierra, no e n t r a r h en la seduction general , en la qual 'parece cierto que m t r a r i la ma- yor parte.

Si Buscamos ahora como poi* modo de eru&-

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832 C ~ C ~ T J 6 diiersion este Gog y Magog en la familia de No6 , segunidn padre del linage h a m a n o , halla- mos Magog , hijo segut:do de Ja fe t ; rnas B Gog no lo h a ~ ~ a n ~ o s ni en e l Gc'nesis , ni en tocla la escriiura hnsta el capitulo 38 de Ezecjuiel des- piles en el capituiu 2 0 del Apocanipsis. Solamen- te en e l libro I ? del Pcwaiip6nienon (capilulo 5, versiculo 4.) se nombra un cierto Gog nieto d r Rn- b e o , de +en nada se sabe , ni trace figura algiina en la hirtoria. P-'or tanto , yo sespccho que el Gog, as i de Ezeyniel , como d-1 Apocakipsiis , no es o ~ r o qtae Gonier hermano m a j o r de illagog , y primog6- iiito de Jafc'ct. De la fratnilia de estos cbs y de sns citico benuanos iiienores dice la Ewritnra e\tas pa- l ab rns : ( G w . c. I O . v. 5.) Ab h i 6 d m i a sunt insidE qentiiinz ita regionibus suis , unusquirque secundum lin. - gumn siiktn~ , e t fantilins suns i7a nationibus suis. Esto es lo linico que sohre esle pnnto lraliarnos en la es- critni-a santa , lo qua1 parecr qne concuerda per- fcctamente con e1 texto d e S. Juan: ge iz tes que sunt super qualuor angulos t e 7 - r ~ ~ Gog , e t Magog. Eo de- m a s ruera de er:o no es otro q u e adiviiiar.

Ahora : estc Gog y fif.ngug d e l Apocalipsis, t PY acaso el misino rnisterio de que iiahia tiifusamente Ercqitiel en sns dos c a p i ~ u l o s 38 y 39? os ihtdr- pteies asi lo snponen , mas n o lo prinehnn. Ea di- f e r e n c i a y distancia entre uno y otro niisterio es tau visibfe , que Iiaqta i i na simpie ieccion de am- hos lugares para convenceria a1 pnnto sin poder du- darla. Pritneramente 10s tiempo.; de uno p otro mis- terio s o n evidentemente dirersisimos : e l mistcr io de Ezequiel por conlesion de i t d o s , y segun el misrno texto , debe sucecier rnricho antes d e la venida del Seiior , y aim antes del Antrcristo , segan 37arias escrituras yne quedan ya ohhervadas especialmente en el fentjrneno 8 , articulo 8 , poryue despues de destruidd la muchedamhe de @ o s , de que ha& Ezequiel , despnes de sepultada in w a l l e rnultitirdinis Gog . ad orientern nzarts dehe quedar un tienipo grancle e' indetcrininado , piles 10s jridios ya resta- biecidns Q ia tierra de sus padres, contra quienes ha d e i r esta gran muclisdninBre , recogeran 10s des-

? Y

$. 4."

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533 pojos de estos enemigos 1 nrnta 9 ckipeum , e t hastas, arcuna , e t sagitas , e t baculos ntanuunz , et contos : e t snccendent ea igni septent annis, e t non pastabunt ligna de regionibus , neque succident de saltibus , qiioqiam arnza succeizdent igni. Mas en el inisterio y text0 de S. Juan se ve otra idea infinitainente diversa ; ya poryue este misterio solo p e d e verificarse mil ailos ( 6 Sean mil siglos) despues de la venida del Seaor en gloria y magestad, despues de la inuerte de la bestia y prision del diahlo ; y ~ t porcjue l adgo a1 pnnto , sin melliar otra C O S R alguna, pone la resur- reccion y juicio universal: e t descendit ignis ci De0 de cado , et devorabit eos. . . . et vidi thronrinz niugnunz, et candiduna. (versicnlo 9.)

Lo segundo : el profeta Ezequiel habla solamente de Gog, y- con Gog, no con Magog: antes 2: este t i i l i - mo lo supone yuieto e' innidvil en su pais. Asi dice de Magog (y es la dnica vez que lo noinhra, q n a d o ri Gog lo nomhra once veces): e t inzniittain igizem in Mugog, e.! in his qui Izabitaizl in insidis con$denter, e t ficicnt quia ego Dmnknus. (capitulo 39, versieulo 6.) Mas S. Juan en su Gltirno misterio tiombra 6 10s dos Gog y Mago%: przles ~ L L E sunt super quatrror angukos tcrrre : ias q:iaaic3 gentes , id es t , Gog y Magog, circaibunt costra snnc- toruna, et civitatent cirlectana, e t descendit ignis d Bee de c d o , e l Jevoravil eos.

Lo tercero: el misterio de Ezeqraiel es evidente- mente el misrno que anunciaron otros profetas . como lo dice e'l niisrno erpresarnente hahlando con Gog I p.0~ estas palabras (capi tdo 38 , versicnlo I 7.) : U m d7CZt Donainus Deus : tu ergo iEle e s , de p o loqutiis mna in diebus antiyuis , in manu sefvorunz nieoruni propketarunt Israel , p i prophetaverunt in diebus illorunt temporctmj ut adducerenz le super eos : e1 erit in die ilka , in die advenfus Gog super terrain Israel ait Dominus Deus, ascendct indignatio ntca in fiirore meo , quia in die itla erit conanzolio magna super terram Israel. Estos pro- fetas de Dios enteriores ii Ezequiel , qne laa6laron de este mismo misterio de yrPe 81. babIa, son estos : I<'' David e n varios salinas, principalmente en el I I 9: Joel, c a p i t d o 3 : Rbacue , e a p i t n h 3 : Zacarias , capitulo S y I.$: Mique;ks , cnpitolo 7 drc. (vdasa lo que sobre

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834 esto yueda ohservado en el fendmeno 8, articulo 8.) A todos estos lugares d u d e certisimamente S. Juan, no en el capitulo 2 0 , sino en e l capitulo I 2 , versi- C L ~ O 15 y 16, en donde nos representa esta muche- dumbre baxo la inetifora admirable y propisiina de un r io de agua que sale de la buca del dragon contra la niuger clue h a huido a1 desierto: et nzissit serpens de ore suo aquanz taniquant $maen , ut eant Jaceret trahi d fikmine ; et adjuvit terra mtilierenz , e t operuit terra os situna , et absorbuit punzen , p o d ntissit draco de ore suo. Todo lo qual se lee en Ezeyuiel sin met i - fora alguna poi- estas palabras : Et erit in die illn, &bo Gag locum nontinatuna, sepulchrunz in Israel, vaklenz via- torum ad orientenz maris , qrrcz: obstupescere . facie1 pro.?- tereuntes , et sepelient ibi Gog e t ornnenz mullitudinent ejus , et vocabitur vallis ndii tudinis Gog. ( capitu- lo 39, versiculo J I.)

E n suma, no perdamos t iempo: le'ase toda esta pro. fecia de Ezeqaiel , contenicla en 10s capitnlos 38 y 39: le'anse para mayor claridad 10s dos capitulos an- tecedentes y 10s nueve sigaientes, y esto solo basta para conocer a1 p u n t o , que todo habla visiblemente d e la conversion, restitucion , asuncion y plenitucl d e las reiiqnias preciosas de Jacob , i la qual se opon- drti con todas sus fuerzas la inuchedumbre de Cog. Mas destruida esta, . comidas SLIS carnes de la's ayes

fieras , que sera'n convidadas ti esta gran cena , y sepultados sus hoesos in vnlle nzultitudinis Gog , se Ten en todo el texto continuado de esie profeta otros sucesos grandes , nuevos 7 extraordinarios que piden t iempo , 'J" tienipo grandisitno para yne pueclan veri- ficarse : mejor diremos : desde entonces clebe comen- zar otra +oca, y otro siglo infinitamente diverso de toclo lo pasaclo. No sucede asi en el texto continuado de S. Juan , ya porcpe habla solamente del fin de esta misma +oca, ya porque entre e l fin de e l l a , y la resnrreccion y juicio nniversal, nada se ve interme- d i o : et descendit ignis de c m l o , et devoravit eos , e t diabolus , qui seducebat eos missus est in stagnum ignis nrdentis , e t si~lplarrris , ubi et bestia e t pseudopropheta crnciubuntur die ac nocte in sEcula smuloninr ; e t widi thronurn magnum et cundidiimz.

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_ - Poi* este liltirno texto que acahamos de copiar

(que e s el dnico (le todas las escrituras cancjnicns que habla clara y expresaruente dci fin de todos [ o s vi.c.ientes viadores , de la resurreccion y juicio u n i - versal) se h a sospechado prudentemente , que este fuego liltimo, que caers y consumir j todas acpel las gentes atrevidas, q im ascendent szrper latitiidinem lerrte, e t circlribunt castra sanctoi-una , e t civilalena dilectarlz: q u e este €uego, digo , s e r i uniaersal en todo nues- tro o r b e , y que acabarcl con toclos sus vivientes, a b Izonaine usque ad pecus e t ic repilibus u r p e ad p i s c e s maris; Yo tambien lo he pensado asi aigunas veces, nias siempre con miedo, pries esta noticia 6 circunstan- cia particular no la halio tan clam en el texto sa- grado, que m e obligue d pasar 10s limites de una inera sospecha. No es tan cierto (vuelvo 6 decir) ccmo se piensa comunmente, que este fuego de r p e Iiabla S. Juan haya de consurnir A todos ios vivierites de nuestro globe, pues e1 texto hahla solamen te de ayue- 110s furiosos que congregados y animados por el dra- gon , cii-ciribunl castra sanctorun8 , et civitatent dileclarn, et descendit ignis de ccclo et devoravit eos.

c6mo se acabard este rnundo , y t o c h SCIS

vivientes? ;No es cierto y de f'd yne todo se ha de acabar alguha vez? i N o es cierto y de f6 que algnna vez ha de cesar tocla generacion y corrupcion? Si, ainigo , todo esto es certisimo y de f6 divina: y yo lo w e o y confieso religiosainente con todos 10s Geies cristianos ; mas el nioiio y circunstancias particulares con clue lodo esto debe sucede r , yo lo ignoro ab-, soliatarnente, poryue no lo hallo claro en las eseri- turas. Por tanto: no pieijso entretenerme en disputas inlitiles , qne no convienen d la substancia de mi astinto particular. Eo mismo digo sobre el modo y circons- tanicias particulares que leernos en infinitos IiBros : las huscamos en el lihro de la verdad , y no las hallamos. E n 10s profetas es certisimo que nada se halla claro y expreso , eaccptuando solamente la substancia del misterio. En 10s elangelios y en todas las escrituras del nuevo testamento sucede lo inismo ; ptle5 Io poco que hay sabre esto en el capitxilo 25 del evangelio de s. Mateo, versfcalo 9 1 , parece itact inera par.;-

Pues

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836 bola , cuyo €in primario p principal es una doctrina importantisima , y aim muy iiecesaria ri todos 10s cre- yen te s , qual es la caridad con el pr6gimo: quod uni ex nzininiis meis Jicistis , nzihi fecistis .... et quod non

fecistis nzihi , non fecistis Gc. 10 qual dirimos en el ca-' pitulo S de la primera parte.

No nos queccla p e s otro lngar ixas claro ni mas expresivo que el capitnlo 20 elel Apocalipsis desde €1 versiculo 1 7 hasta el f in , en dontle se hahia ya con t o d a claridad, asi cle la resnrreccion universal de todos 10s indiyiduos del linage lmmano (po r ctrnsi- guiente de la muerte de lodos, que ya habr6 prece- clido), comn clel juicio universal de todos , en que 6 cads uno se le clard la dltima sentencia irrevocahle y eterna. Como yo no sop capaz de representar cstas COsas con la propiedad y viveza con que lo hace San Juan ; antes teino con gran razon ohscurecerlas con mis explicaciones : k e d , 6 Crist6filo, el texto entclro de este Ap6stol y dltimo profeta , leecllo COII toda atencion, y contentaos con 61; pues ciertamente no hay en todn la escritura santa cosa algnna sohre este p u n t o , ni mas e rp resa , ni mas Clara, ni mas viva, ni mas difinitiva : Et vidi tlronum magnum et candidunr, et sedentena super eunz, d ciljus conspectic fiigit terra, e t cmluna ,, et locus non est inventus eis.

Expresion admirable , vivisiriia y propisima para jlenotar la Srandeza , 13 magesiad, la soherania infi- nita de aquel t rono , y clel snpremo principe que en 61 se sienta , ante cuya prcsericia , 6 6 cnya visla qui- siera huir y escovderse el c i e h y la t i e r r a , y todos 10s que en ellos hahi tan , y no linllan clonde: e t locus non est invenlus cis : Et vidi nzorluos niagncs e t picsillos stantes in conspectu throni , et libri aperii sunt: et alircs EiL-er aperlus est , qui est witz , et juciicati srmi naortui ex lais que scripta erant in libris secundrina opera ip- soricm. E t dedit mare mortuos qui in eo erant, e t mors et infernus dederunt morticos suos qui in ipsis erant, e t

judicaluna est de singidis seconduni opera ipsoricm. Et infernus e t mors naissi sunt in stagnum ignis. Hmc est mors secunda : et qui non inventus est in libro vi& scrip- t u s , nzissus est in stagnum ignis.

Yo creo firmemente con todos 10s fieles cristianos

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837 todo lo que aqui leo en su sentido propio, ohvio y literal ; mas no poi- esto dexo de conocer , sin poder dudarlo, que aqui se anuncia tinicamente la substan- cia del misterio, no s u modo ni sus circunstancias pm-0 ticulares, Sohre este modo y circunstancias , asi del fin cle todos 10s vivientcs wiadores, como de la re- surreccion de todos p juicio universal , n m o nzihi mo- Zestus sit. Como estns cosas particulares no las liallo en la revelacion, es preciso que las i sno re , y que me contente con mi ignorancia. No obstante, entre estas cosas particulares pertenecientes a1 mismo mis- t e r i o , hallo una sola que no ignoro, ni puedo dexar de conocerla, osto es , l a circunstancia del tiempo en que el misterio entero debe suceder. Quiero clecir, clue el misterio entero , 6 lo que es lo inisino, la re- surreccion de todos 10s intlividuos del linage de Adan, el juicio tiltinin, la sentencia tillima, y la execucion de esta cltirna sentenria , no pueden suceder luega inmediatamentc en el mismo dia natural de la venida en gloria y mogestad de nuestro Sefior Jesucristo, For- que esta idca repngna visihle y evidentemente a1 texto mismo de S. Juan. ltauclio inas repugna, si se con- sidera y exBmina con todo su contexto, como debe ser. Y rcpugna torlavia mricliisimo mas, si se consi- dera imido y coinbinado con todas las escrituras del antiguo p nuevo testamento. Todo lo qnal , corn0 que es el asunto primario p principal de toda esta obra, liernos venido declarando , y tal vez demostrarido hasta el presente.

G A P I T U L O XV.

Bstado de maestro orbe terraqiieo y todo e l universo naiuado despes de la remrreccion y jiticio universal.

5. 1 . O Resuc i t ada to& carne del linage de Adan, concluido el juicio universal, y executacla la senten- cia irrevocable, para tinos de vida , para otros de snplicio eterno , os oigo decir, Cribf6fiIo amigo, quid wit post Jmc? A e s h pregnnta general, yo no puetlo responder sino con la rcspuesta tambien general del

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misino Jesncristo : itmt hi in supplicium reternurn, jirsti autena in vitam ceternnnz. Veo tarnbien que no sa- tisfecho con estas generalidades , deseais saber a l p - nas otras cosas particulares pertenecientes a este mis- terio , del modo que estas %e pneden ahora saber, esto es , . 6 p.or revelacion divina , 6 A lo inenos po r u n buen raciocinio, 6 por una prudente congetura fundada s6lidamente en la misma revelacinn. P o r tanto me preguntais entre otras mil cosas que os ocurren estas t res principales y fundamentales.

Priniera : i q u 6 e s Io que yo pienso segun las es- cr i turas sohre la suer te 6 estado en que quedarii nues t ro miserable e' iniquisiino orbe en cuya super- ficie hahitarnos despues de la resurreccion y juicio universal , estend;endo vuestra curiosidail todos 10s otros orbes innunierahles que se nos presentan a' la vista en una noclie serena quando levantamos 10s ojos al c ie lo? Segunda: iqiie' es lo q u e yo pienso segun las escrituras sobre el lugar donde cleberdn ir todos 10s que resucitnren ad vi tam, para gozar en El asi de la vista €ruitiva de Dios , con10 d e otras cosas accesorias que les estdn igualmente prometidas ? Ter- cera : ique' idea formo yo sohre la felicidad que est5 prometitla a' 10s que se salvara'n , principalmente des- pues d e la resurreccion universal : no tanto snhre szz gloria y hienaventuranza snbstancial , que consiste e n la fiwitiva vision de Dios , y posesion del s u m o hien, la qual es inefable e' inexplicable quanto sobre aqueiia gioria y feliciclad que llamamos accidental, la q u a l compete 5 nncstra a h a , no ya separada del cuerpo , sino nnicla con E l estrechamente ; no ya como purainente racional 6 intelectual , sino tamhien como scnsitiva , por merlio de 10s 6rganos del cuer- po ; no ya cn fin como pnro espiritu , sino unida insepsrablemente con aquel mismo cuerpo para e l qual fue csiada?

0 amigo mio : rerfz dtxficilenz p o s t u h t i . iQuidn es capnz e n el estado presente de satisfacer plena- mente 6 estas tyes pregunta i? Os dirg no obstante l o quc mis cortas luccs afcancen.

S. 2.' Empezando poi- el primer pnn to hallareis una gran diversidad de Qpiniones, hallareis u n a pro-

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839 digiosa multitud de qiiestiones , emanadas quasi to- das de 10s princigios de una mala fisica. Yo no pienso meterme cn este laher into, y perde r el tiernpo in- utilinente en cosas que no liacen ii mi prop6sito ni en pro ni en contra. Solo quiero considerar en Bre- ve t r e s opiriiones principales , la liltiiim de las yua- les e s la que yo ahrazo con ainbas manos.

Pensaron unos, y no de infima clase, que coli la accion del fuego de que habla S. Pedro,. qnedarii nues- t r o orhe terraqiieo perfectainente cristalizado, p o r con. signiente dirifano 6 trasparente desde cierta distancia de su superficie hasta su centro. Si preguntais liasta que' distancia, os responden que hasta incluir e1 limho de 10s pn'rvulos que inurieron sin hautisnio , porque no es c r e i l ~ l e , ariaden , que estas yohres criatnras , qne no tnvieron ni pndieron tener pecado personal , Sean condenadas despues de su resurreccion 5 perpe taas ti- nieblns. Mas la luz y claridad de este gran globo de crista1 no 1Iegai-A ( p r o s i p e n ) hasta el limho 6 infierno de 10s condenados; porcine estos zisque in czternrcnz non videbunt limen. (Salrrz. 48.) Preguntad ahora , de donde se ha podido tomar una noticia tan singular, y es- perad la iesguesta in etenzurn e t ultra. La seguntls opinion, que es de niuchos antiguos y rnodernos, pre- ten& que asi nuestro gloho terraqiieo cnmo todos 10s otros glolios celestes , luna , sol ,. planetas y es- trellas , voiverdn despues del juicio universal A la nada de donde salieron. Fbndase esta opinion en dos 6 tres logares de la escritura santa que tal vez se han Ieido con demasiada yrisa. Los lngares de la escritura sou estos : ( I s a i . c. 51. v. 6.) Levate in C E - kina oculos oestros, e t videetc .sub terra deorsum , quia cwli sicut f u m i s liquescent (seu deficient , corn0 leen Pngnini y Vatablo. Los 70 leeo : Ccelurn sicut funzus

Jirnzatunz est) e t terra sicut veslinzen!unz atterelur , et habitatores ejus sicill hcec interibnnt. Sa lus azitem niea in senzpiterrmnz erit , e t jztstitin mea non def7ciet. E n e l snlmo 1 0 1 sc dice : Initio tu Donaine trrranz jkndas- ti , e t opera nianunnt ti~arunz .runt C a l i : ips i peribunt, tu nutem pernznnebis , et onznes sicut vestinzerztun~ ve le- rascent , et sicrct cpertoriunz niutnbis eos , e l nmtabuta- tur : tu auleoz idem ipse e s , e t anni tui non de$cier,t.

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$40 A io qnaI a h d i 6 e l Sefior gnando dixo : (Mat. c . 24. v . 35.) Cmliinz e t terra iransibunt , verba autem mea non prtxteribunf.

A estos pocos Ingares de la escritnra santa poco hien meditados, responden, 10s mas y mejores de ios intgrpretes t edogos y yo con ellos , que el senti- do que se les preiencle clar de perfecta ariiquilacion 6 destruccion total , no es ni puecle ser su sentido yropio , ohvio y literal ; sin0 qnando mas, u n sen- t ido puranienfe gramatical. Asi gne 10s textos ci- tados , lo pr imero: ,deben tomarse y entenderse li- teralmente per siniiiiitudinenz , non per propietatem ; pues realmente hahlan po r rneta'foras 6 sernejanzas : el qual modo de hahlar ordinaria entre todos 10s pueblos, t r ibus y lenguas , es tambien ordinario entre todos 10s profetas de Dios ; v. g. montes exultaverunt ut arietes , e t colles ,sicut agni osiunz .... ininzici Domini qrsernadmodum olera Iierbnmna cito decident. ( Salni. 36.) Sicug pullus hirimdinis sic clanaabo , medituhor ut eo- lumba. ( P s a i . c. 58. s. 14.) Lo segnntlo : 10s textos oitados , no hablan ni pneden hablar de aquellos cie- 10s s6lidos que se fignraron 10s antfguos: tampoco Iiablan de 10s planetas, estrellas &c , , sino de la gran- de atin6sfei.a que p o r todas partes circuncla e l gloho, el qual giobo es el que dnicaniente consideran 10s profetas de Dios. Lo t e r c r ro y principal: 10s textos citados n o Lablan afirmando absolutamente sino corn- paraudo el ser de todo lo criado, que pnede corrorn- perse y perecer , con el ser del Criador de t o d o , con SU verclad y S U palahra , que jamas faltar6n : Cmlum et terra transibunt , serha mea non prceteribunt. Fun- dados ell esta inteligencia sencilia y natural de 10s ci- tabs textos , sostienen 10s mas de- 10s doctores con S. Gregorio Magno y S. Agustin, que no ha de ha- h e r jamas ta l aniquilacion ni destruccion total de naestra t i e r r a , ni de lo que vemos sohre nosotros; sin0 u n a graride y bien notable mudanza de mal en hien , -6 de hien en mejor.

Esta tercera- opinion es la que yo ahrazo, por- cine la lidlo conforme l a s escritaras , y afirinada en las rnismas con ttirminos expresos y claros. E n - tie otros muchos lugares que pudiera citar , y que

'

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si; I citare' mas adelantc , elijo por ahora esie solo, c~1ie me parece decisivo : Didici, 71~r:d omnia opera, V U E

fecit Deus perseverent in ceternirm. ( Ecclecinrt. c. 3 . v. 14.) Este solo teyto , annque no hubiera c>tros, ex- plica h i e n , asi el lexto ohscaro de §. Pedro, como 10s otros dos 6 t res clue citan 10s aniquiiadores. Snn Gregorio Xagno paiece que lo tuvo presente quati- do dixo (lib. 1 7 . mor. c. 5 . ) : G c d i per ennz qrrnnz 720n habent inzcrginem trnnseunt , sed tnvzen per essen- tianz sine ,,fine subsisrunt. Y S. Agust in ( lib. 20. de Ciirit. Dei, c. 14.) : Nutartione naniqire rerum , nom onzninzodo interitu trnnribit hie nmnclns.. . . figiwa en in^ prrrterit , nom natura. Y en el capitulo 16 : ut scilicet mundus in naelitcs inizovatut , npie nccoFnmode!ur hooii- nihus, etiana came in nzeliris innovatis. Teiied bicn presente esta sentencia exprcsa y Clara [le estos (10s ma'xi'rnos doctores , para no reprehenderme ligera- mente de noveclad en las cosas que voy d proponer \

y considerar. Cottclriido el juicio universal de la manera J

que se har6 ( l o quai no sornos por ahora capaces de concebir con ideas claras) dice Jesucristo- que 10s jnstos irrin ;i la vida eferna : jus t i autein in vitam flternani. Sohre estas palahras dcl Seiior , 6 sohre este dogma de f6 div ina , esencial y fundamental en el verdadero cristianismo, se pregubta : i ad6nde , & qni pal-te 6 lugar determinado y inaterial de toclo e l m n l d o irkn 10s justos ya resucitados ri gozar de la vida eierna? A esta preSunQ veo , Cristcifilo, qiie respondeis a1 punto lieno de satisfaccion y seguri- dad que irdn todos a1 cielo , abandonando absolu- tainente esta miserahle t i e r r a , 6 este valie de 1Bgri- mas. Mas yo os d i g o , amigo inio , que no eratiendo voestra respuesta. La palabra cieiio en frase de la es- cri tura santa , y en frase tamhien cle toclos ios pue- blos , tr ihus y lenguas , es muy general : cielo se llama quanto rodea nuestro o r b e , y est$ fuera de 41, no solamente nuestra airn6sfm-a , si que ininhic.n el espacio inmenso que lo circunda. Asi decinios con gran verdad , qne la luna , el so l , 10s plai>e+as y todds 1as estrellas cbtrin en el cielo ; y putlie'minos nciadir con la misina proiQiedad y verdacl , que nues-

S. 3."

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842 t ra t ierra 6 nuestro globo terraqiieo, est& del mismo modo en el cielo.

Para aclarar Inas vuestra primera rcspuesta , res- p.ont1eis lo segundo, que todos 10s justos ya resu- cltados i r sn a1 paraiso celeste. Mas est0 es desar I x cosa en el rnismo esbado de obscuridad en que estaha. Es ta palabra paraiso, 6 sea pdraiso celeste, es t a n general 4 indeterminada como la palabra cieio. Pa-ai.0 llama la escritura aquei lugar donde f u e traslndado el justo Enoc : n e videret nrortem. ( A d Heb. c . I r . v. 5 . ) Asi corn0 la niisma cscritura llama cielo, aquel lugar donde fue conducido en uii carro de fuego el gran Elias : el qual veiztzirur est e t restituet on~nia. Paraiso llam6 Jesucristo poco antes de espirar en In cruz a1 infierno rnismo , quando le diso a1 Ladron penitente : hodie mecum eris in p r a d i s o : y es c i e r t o , y de M divina , que Jesncris!o e,ce iniqino dia ( y luego despues de 61 e l Santo Lactron) desceiz- dit ad inferos, y n o salic5 liasta el tercero dia. Con que parece necesario que aqucllas dos palabras ge- nerales cielo y paraiso se expliqireri mas , dc modo que satisfaoan A la pregimta particular.

Para s a t d a c e r a‘ esta plenamente , y explicar las dos palabras cielo y paraiso , respondeis i o tercero: que todos 10s justos ya resncitados irdn d goza1.de la vi& eterna a1 cielo empireo. i 0 C r i s t - d f l ~ mio! permitidrne que os diga a c p i , qne con esta palabra cielo empireo ( palabra griega c p e significa igneo , 6 de fuego ) pretencleis explicarnie una cosa obscura poi- otra mas obscura. Este cielo que llamamos em- J)ireO , idonde est$? [ L o ha visto alguno entre 10s fildsofos antiguos 6 modernos, 6 alguno de 10s pro- fetas de Dios? LEste cielo es acaso s6lido quasi ces

J%SIIIZZ ? i Cs iicpido como algun metdl derretido , que ffuye d la accion de un fnego violentisirno? Uno g otro siiena la palahra empireo.

Yo he huscaclo esta palabra , 6 su eynivalente, en la escritura santa , en 10s escritos de 10s pa- <Ires y escritores eclesidsticos ? y n o he I~a l l a t lo e l inenor vestigio , 1‘ poi. lo inisrno soylecho de que la paiabra cielo empirco , es mas mor’e5.na cle 10 clue se piensa. Lo clue finicamente h e podido hallnr so-

?

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843 bre este asunto es , yne algunos fiI6sofoOs antiguos, cspecialmente Platen , y algnnos de sus discipnlos, asi como imaginaron mnchcs cielos stilidos , Ta ires, ya nueve, ya once , ya mas ; asi iniaginaron sobre todos ellos n n c i 4 0 supe r io r , que llainaron empi-

-reo 6 igneo , a1 qual consideraron como centro 6 region del fuego , J‘ tamhien eorrio el a h a 6 vida de todo el uniserso. Los AristotPiicos imaginaron este rnismo empireo cn yoanto region del fuego, mucho mas cerca de nosotros, prtes lo pusieron entre la t ierra y la Inna.

Volviendo ri la escriiura santa que es la antori- dad mas resretahIe , en ella no se halla otra cosa sobre el asunto que aliora ctnsideramos , sino pala- bras generales ; cs i s a b e r , c ie lo , cielos, cielo del cielo , cielos de 10s cieios , reyno de Ios cielos. Mas estas palabras ciertarnente generales e’ indetermina- das se halian bien explicadas en las inismas escri- t u r a s , y de un motlo perl’ectamente conforrne a l dogma de la f6 divina , y tambien d la recta razon. Por exemp’ro : tu exaudies de cozlo , de sublinzi sci- licet habitaculo tu0 , le dice Salomon & Dios (2.Yar. c. 6. v. 30.) y versiculo 39: tu exaudies de ccwlo , hoc est de $rmo habilaculo tuo. Esta habitdcion de Uios firme y sublime [que‘ cosa e s ? iEs acaso algun gran p a l a r i o , 6 templo , 6 cielo material , 6 algun I i ~ f i a r determinado ? Nunquid non c e ~ u r n et terrant ego iinpleo , dicit Dominus ? (Jereni. c. 23. 11. 24.) ,

Dc esta misma babitacion de Dios sublime y fir- misiiiia liabla el hp6stol quando dice ( I . ad Thim. c. 6. v. 16.) qui luceni irihabitnt innccessibileni. Y en otra parte : ( A c t . c. 1 7 . v . 27.) Qrcniizvis non longe sit a b uno~uoque nostrum, in +so enini viviiitus , mo- wenzur e t surnus. Lo qual estaha ya dicho con u n a viveza , clegnncia y propiedad pariicular en el snlino 158 : Si uscendwo in rcw2tn,s tis illic es , si descendero i iz inferiaunz ades. Todo lo q u a l nos ensefia acpel a t r ibuto de €6 divina esencial ti D i n s que es su ininensiclac1 6 presencia real y verdndera en t d o el universo, y en todas y e n cacla u n a tic las partes que lo coinpo- nen. No obstanie e i f o , os oigo tcdavia w p l i c a r yne es preclso conceder a igur~ lugar deierminado , fibico y

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t , $44 real adonde se manifieste d 10s bienaventurados la glo- ria de Dios, 6 Dios mismo con toda si t gloria , p en donde estos gocell pienisiinanirnte de s u vis ta , y Sean perfectamente Mices , principalmeote despurs dc la resurreccion y juicio nnivercal. Este punt0 de s r a n imporiancia neccsita de una particular cousi(?eracion. Entrernos en r i la .

Es preciso admitir algun lugar deterniinado fisico y real , rlonde Dios se niariifirste con totla sri gloria B 10s justos ya resucitados , y donde estos lo Yean eternamente con vision intuitiva y fruitiva. Esta proposition que os parece tan cierta , es puntaalmente la clue yo niego , funtlado no solamente en Ias escri- tu ras sagradas, sino tamhien en la razon natural. D e c k sin d~icia que est0 es demasiado negar, pues este lngar deielminndo todos lo admiten : y y o os respondo yue padeceis equivocacion. El Ingar deierminado de que hablamo> , ni lo admiten todos ni mucbos. Solamente l o imaginan, 6 se lo figuran: y esta figura 6 imagi- nation es lo clue l hman 10s ascdticos cnmposicion de Iugar , l a qual es buena y conducentisimn en la me- ditacion para fixar en algnna cosa 6 Ingar determi- nado nuestra inquieta , vaga e' inconstante iinagina- cion. Mas este lugar determinado es certisiino que In inisma iniaginacion lo fiege y compone a' su modo, segnn el talento 6 gnsto de cada uno. De esta com- position del lugar tuvo sin clnda su or i sen acpeila imiigen de la gloria , que nos ofrecen 10s pintores, hridna en si misnia y edificativa, irnas podrci de eso inferirse que se hallara f x a eternanientr esta gloria en algun l u p r deterrninado del cielo fisico y real? Esto es, 6 CristGfilo, lo que os vuelvo a' negar . Y para haceros tocar con las manos vuestra insigne equivo- cacion , permititlnie que os h a w solire esto una sola pregunta. Decidme , ipodreis s&alarme este logar de- terminado del cirlo d6nde est&? A esta simple pre- grinta , coin0 todavia no comprehendeis bien nlis in- tenciones secretas, me rgspondeis a1 p ~ n t o ( levan- t a n d o 10s ojos y Ids manos Mcia lo mas alto del cirlo) clue esi-ti en vuestro zenit , y en toiIas sus cercanias. Habienclo O i d Q y roteiidiclo bien vnes!ra respttpsla, Ida- 90 Ia misrna pregunta a todos 10s habitadoies de la

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t ierra , y veo con grande aclrniracion qne,todos sin fal- t a r uno so lo , me responden lo misino que vos. Todos y cada uno levantando 10s ojos y las rnarios Iiricia lo rnas alto del cielo, me seiialan el misino lugar fisico y rea l , es Jecir , szz ienit. Mas yo repsro y es hien ficil de reparar ) que este lugar fisico y real que todos me sehalan , aunque parece L ~ O mismo respectivamen- te , rnas e n realidad, cada pneblo , t r i hu , lengua , y ann cada individuo , m e seiiaia un lngar ahsolutamente diverso de todos 10s o t ros , pnes cada u n o tiene SI% particular enit. D e docde se infiere ) que ese lngar cleterininac. IF o , que os habcis figurado corresponde a1 mismo tiempo & todos p $ cadn uno de 10s piintos de la t ierra donde haya habitadores , .y pcr consiguiente se extender& ti tocia la convesidad inrnensa que ahraza deritro de si A tnclo el universo. [ N o l e i s pues"como todo es una pura imagihncion 6 composition de lugar?

Debpups de tndo esto que acahamos de con- siderar , veo , mi CrisLcifilo clue todavia no cluedais satisfecho. Os hace todmia fuerra i in text0 del Apos- to l ) y clos 6 tres cle 10s profelas, 10s qiiales, clecis, vieron en espiritn el paraiso celestial, 6 e l lugar deterrninado doncle Dios se iiianifiasta & sus ringeles y santos. A esta pequeiia dificultad me reconozco ohligailo , y confieso clue clebo responder de un modo perceptib!e.

E n pr imer Ingnr el texto de S . Paldo , hahla t~do de sus visiones revetaciooes-, es este (2 . ad Co~-i!,t. c. 1 2 ) : Scio homineile in Christo ante annos qrsatuor- decina , sive in corpore izescio) sive ex'ira corpus nescin, Deus .wit r a p n a hiijusn2odi usque ad tertium cai?~i~l . Et scio kiijirsnrodi homftreni ... quorziana raptus est in para- disurn. De a c p i coplcluis que el paraiso celestial, 6 e! lugar d e t e r n h a c t ~ fisien y rea l donde Dios se mani- fiesta a l iora , y se manifeketar5 e t e rnanen te ri 10s jn- geles y saiitos, dehe estar en el tercer, cielo. Mas 2 c6mo no os avergoniais ya de aquelia multitud d e cielns s6liilos , unos sabre o t ros) y todos transparen- tec , que imaginaron 10s antiguos? Ahora ~t '0 ? u s en Iugar de eHos imaSi%aiT solos tres, 10s dos prlnleros flraidos 6 licpidos , p el "lercero sblido: el pkin2el-o Ilain?nis aereu

S. 5."

esto es ~ toda

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846 cuoda por tcdns partes naestro orbe terraqiieo, p no hay dntla yne esta aim6sfera se llama freyuentemente ciclc: en la escritura santa , asi como se le da este nom- hre en todos 10s pueblos y naciones. El segundo , qne llamais etereo iquat es este? Es , decis, todo el es- pacio irrinenso d indefinido donde habitan J coin0 na- dan la l u n a , e l s o l , 10s planetas 10s cornetas y las estrellas sill nfimero. El terccro sinperior d todos es el que llamais cielo empi rco , zdtro quod nihil est.

Mas todo es to , ainigo mio , i que' otr-a cosa es sin0 suponer y afiriiiar lo mismo qne disyutamos ? Nnestra piesente contro7 ersia riieda dnicamentt: sobre un pun to d e apoyo ; ri sabe r , si hay un cielo scilido altisimo, igneo, 6 sea iilcido, superior todo lo criado ma- terial , en c u j a superficie iiimensa h a p un ltigar determinado; 6 un' paraiso, donde se m a i d e s t e ri 10s hipnavrnturados !a glorin de D i m , y Dios mismo. Bien sabeis que semejante cielo ni lo Pdmite la buena fisica n i puec!e estrihas en la revelacion es s i , nn cielo snpuesto 6 imaginario, cine solo se encuentra e n la fiecion cle las gentes. S. Pahio p e s escrihiendo A 10s de Corinto , que era una de ]as ciudailes mas flore- cientes de la Grecia , se acornod6 prndentisimamente ti las opiniones , que entre ellog reynaban sobre el sis- tema celeste. Es bien sabido que cii las cosas pura- mente fisiras c p e no pertetiecen ri la religion, ni ai d n g m n , ni ;I la mora l , todos 10s escritores sagrados ha?,Iaron siempre como hablaha el pueb lo ; ni el Es- piritn Santo enseiid jamas algtina verclad de pnra ii- sica ri ningnno d e sus prcfetas. Asi q u e , Iiablaron de 10s cielos y de 10s cuerpos celestes, n o c o m ~ son en la realidad, sin0 como aparecen a' nnestros ojos; lo q u a l es precis0 reconocrr y cnnfesar S O pena de gravisimos inconvenientes, S. Ger6ninio sobre el ca- pitulo' 28 (le Jeremias dice estas palabras : niulta in scrip turis snizctis dicuntrir juxta opinionem illius tempo- r i s , quo gesta rrferuntzr ~ et lion juxta quod rei veri- tas cziger',rtl. Si esta scntencia d e este sapientisimo t l ~ ~ c t ~ r es vcrdndera (corn,) J O la tcngo 'por tal) lo es priocipa1incn:e y tal VFZ dnicainetite en cosas de pula Cisicn, e n q i i c el Espi r i ta Santo h a observado skin- prc 1111 proiipndisimo silencio , dexa'iiddas todas d la

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947 Qcnpacion y dispiitas de 10s hombres : vidi a$zictio- ne??? puna dedit Deus $liis koniinisna , ut disknrinntur in ea (d i ce el inas sabio de 10s hornbres, Ecles. c. 3. v . I O . ) cuncia fecit bona , in tempore suo , et mundicnt trradidit disputationi eorum Gc.

La resptiesta A tres 6 quatro lagares que citais de 10s profetas, y aun del Apocaliysiq , es mncho mas facil. Estos , d e c k , vieron en no se' que iugnr deterniinado la gloria de Dios, y d Dios niismo ro- deado de innumerables iingeies : et secleritem super so- lium e.xcelsunt , e t ele.r;alunz : como dice Isaias, capi- tu10 6 : Danie l , ciipiiclo 7 : Ezequiel , capitalo 7 ; y S. Juan e n varias partes d e su Apocalipsis , especial- merite e n e l capitulo 4 y 5. ;Mas ignorais , & Cris- t6iiio , que todas 6 casi todas Ins visiones de 10s pro- €etas de Dios fsicron visiones iinaginarias? Si , el mismo Dios propti50 e' hizo ver 6 los profetas aqne- llas cosas per medio de imriwnes y figunas animadas, muy semejantes y anrilogas a las que adquirimos poi- 10s sentidos. Asi p!ies coimo las cosas q n e se vei l por este inedio no son otro q n e i t a8senes i asi lo es el lugar done?e se ven , el qua1 l a r i a segun las circunstancias. Con q u e el argument0 toinado d e l rnpto de S. Pah lo , y de t a l q u a l lugar (le 10s pro- f'etas , nada prueha a k v o r de nn lugar determina- do , fisico y r e a t , en donde deha mnnifestarse eter- namente ,d 10s tinseics y santos la gloria de Dios, y Divs inismo.

QueJa totlavia ofra dificultad, sobre la qual de- bernos dec i r quatro palabras. La hurnanidacl saet i - sinia de Cristo , 6 el hombre Dios , d 'cis con S U ~ ~ I ; ~

ra ioi i , e s de f6 divinn que despues de muerto y vesucifado smbi6 a1 ciclo , en donde sedet ud de.x- lerant Dei Pat& . nhora , este hombre Dies no es 1111 puiw espiritu , es necesario pues qtle ocupe fisica- inente algun lugar deterininado , digmo de sti p a n - cleza ; lo inisnio podeaios dec i r con respecto & la SJr-rlisima Virgen Maria , y 10s otros santos qtre re- sucitaron con Cristo. Este Iuga r i q u a l p s ? cD6nde est&: Mas : la ~ ; ~ t c b d snnta y n:ieaa Jerusaien , que algun dia ha de baxa r drl cielu ri n-estra t i e r r a , y clue aclualinente se estd edificancio de ozvis, e t eZetlis

3,

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848 LnpicliGus, idt6nde e s t i ? i E n que lugar del cielo se est& coustruyendo este gran edificio ?

A esta d i f i cd tad se responde en hreve : que la santa y celestial Jerusalen se est5 edificando inslchos dias ha de vivis , e t electis Zapidibus en el inisrno l u g a r donde est& Jesncristo. I'or consigaiente la Santisima Virgen M a r i a , niadre de este hombre Dio3 ~ ya resn- citada , 10s otros santos que resucitaron junto con Cristo y toda la turha graiidisinia , qztanz,dinuinerare nema potesl , que ban enlradu hasta ahora, p entrardn en adelante en la vida, estrin donile est; Jesucristo SZI redentcr. Y Jesricristo niismo (volveis d d e c k y rcplicar) 1 d6nde estd? Esto illtimo , Crist6filo mio, (si se liahla de algrin lugar determinado , que es e l pnnto particular y Gnico sohre cine actualmente dis- p u ~ a n i o s ) esto 6ltimo yo no lo se' , ni vos , ni ningiino de qaantos viveo sohre la tierra. Solamente $6, y. esto :i no poderlo d u d a r , que Jesncristo clesde el dia de sn arlinirable ascension G 10s cielos, ha estado , est& actualmente y estarrl en adelante donde qnisiere es- tar. Donde h a estndo , donde estri , y dontle quisiere a s t a r , ha es tado , est&, y estarri eternamente in gloria Dei Pairis ad dexterant Batris , 2. dextrts De i , d dex- tr is virtrttis Dei Et. Y alii misrno estri y estara' eter- namente con toda su corte , por ahora par te en caer-

. po , y parte en solo espiritu, y despues de la ge- neral resurreccion todos en espiri tu y en cuerpo. Esta corte , compuesta toda de hijos de Dios y her- innnos de Cristo , goza actualmente (y gozarL eterna- mente err qualquiera paste del universo en que se hallare , junta 6 divididaj de la vision beatisirna , 6 del sumo b ien : y todos y cada u n o en qua lquier i par te del uniwerso , son ahora, y serhn eternaniente bienaventurados. [No es esto una vcrdacl?

lPtaes con qriC razon quereis encerrar B el horn- bre Dios no solo ahora , sino eternamente , y junto con 61 a' LCJdOS sus gngeles y santos en ain solo h g a r detfrminado del cieio yixe vos misrno habeis imagi- nado? LBO es cluefio de todo? 1No se h a hecho todo por 61, y para e'[, y por respeto de e'l? La C O X I ~ Q -

siciou clel hg.nr haena es en si nisma , y bonisima on la mcditacion de la gloria. Usad de ella, arnigo

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849 mio pueq na:Iie os la prohihe 6 irnpidp , 'CQlnO Ig Iian usado tantos hombres justos y espiriirrales , 5; yo con ellos ounqaxe pecnclor. Mas si preiendeis que esie lu- gar particular y deterininado que vos niisino habeis compuesto y ordenado ri vuestro gusto , deba ser aho- ra y eternamente el lugar ninico verdadero , fisico y real , dsnde Dios se manifiesta ahora , y se manii'es- tar6 eternaniente a sus ingeles y santos , debo deeiros amigahiemente que vuestra prctension cs irregular? por no tlecir injnsta. Me contenta mriclo mas lo que dice S. Pablo ( A d Epla. c. 4. v. I O ) : qui ilesce:zrlit, ipse est e t qui asccndit super onznes emlos ut inzpleret oninin. Si esie nt irnpleret omnia se hace , 6 se est6 hacienclo actuaimente I 6 se har& solamente despues de la re - surreccion universal yo no se'. Me p ~ r r c e que be iiace actualmente, y que despnes se h a r i en su 6Ltiino gracdo de perfcccion. Me queda aliora que considernr vnes- t ra Liltii~a peticion: la p a l poi. sn inmema exten- sion necesita de uti capitulo sepdrado.

CAPITULO XVT.

Idea general dr la hienatmiwanza eternaz de lodos lo3 justos , despries de la resusreccion y juicio universal.

S. I A 0 La idea general qoe pocleinos formarnos de la hienaventuranza segun 10s prineipios qve aca- l a m o s de scnlar, 110 solo es magnifica y subIirne, si que es a i yropio tiempo f a d y perceptible poi- su sirnplicidacl, & todn clase de gentes. Porque n o habiendo 1i:gar alguno determinado , donde se clexe Bios gozar de sus santos, e s eiaro que lo serri todo el zaniverso , y cacla una de sus partes 6 c n ~ ~ p o s in- nunierabies que lo coinponen , sin excluir nnestro inisrno glob0 de la tierra. E n efecto, este es nnes- tro &leina , poryrae este es rl nuestro entender e l de ia escr i tura segun iremos riendo.

S. PaNo ~ el doctor y maestro de lac gectes (la- cando estos .inismos puntos que ahora tocarnm) dice lo p r h e i - o , yrie Jesucris to est& con.!ituido por s a dibino Padre !iercJero de tc.clo Po criado; gues por d l y para d l y pur respeto de 61 sc ha h e c h ~ todo:

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850 Q l l e l n constiluit ih~reclerrt universorum , per quem f e c i t e t spc.ula .... propter qrsena oinnia et per quem oninia. Lo ,-pal, repite S. Juan en el principio de su evansclio: Olltnia per ipsuna facta sunt , e t sine ipso factrmt est nihil, quod factum est. Dice el Ap\i-hol lo scgundo, que &he liegar algun dia en que todo lo criado se s u j e k entei’a y perlectarnente Q este hombre Dios : propter quena omnia et per quem oninin : dicendo alitena omnia, nihil diniisit non subjectuns ei , nunc nufenz necdum vi- denitis omnia sidJjecectn e i ( A d Beb. C . 2. v. s.) ; y en okra parte ( I . ad Cor. c. 15. v. 28.): ciinz aulenz sub- jerta jiier’int e i oninia , tunc et ipse Jilius subjectus ei errt , qui subjcrit sibi oninia , ut sit Dem omnia in oni- nibus. Es de&: quando todns Ins cosas (sin excep- €ion a l p c a ) se sujeiarcn ti 61 plena y perfectamen- t e , entonces el hijo natural de Dios, heclio horn- ])re, 6 el Eombre Uios , corn0 Iiermano mayor , CCI- mo cabeza de todos 10s jus tos , y causa de su justi- c i a , se sujetai’i j u n t p con ellos y haciendo un mis- mo cuerpo, B SII divino Padre : qui subjecit sibi om- ilia, para que este sea eternameiite onznia in onznibus. A lo c p a l aiincle S . Juan (ep . I . c. 3. v. 2.): Charis- sinti: m n c filii Dei suiizus, et nonrliim apparet quid eri- ntus.. . . scirms qiioniam cum appuruerit , similes e i eri- niuy , quoniarn uidebinius euni sicuti est : e t onznis qui habet hanc speiii in eo , sanctficat se , &ut e t i l le Sam- tus est.

Dice S. Pablo l o tercero , que todos 10s hijos adop- tiros de Dios , C Q ~ X O hermano5 de Jesucristo y con- formes ti dP , m o a mias y otros menos , sera’n tambien heret leros de Dins, y cohrreclems con e l hijo mayor que es Jesuci-isto : Si aukmzfifi‘lii, e t Izctredes : lazcercdes quidem Dei , cohamclrs mitein Christi : si tanten conz- pnhzur , ut e t congloilificenirir. [Ad Rom. c. 8. v. ‘ 7 . ) De aci~ii se sigue natumlinentc, q a e siendo el her- mano rnag”Or heredero y selior de todas las cosas sin excrpeiori alguna , d e ? ) e ~ d n tambien serlo si propnr- cion todos 10s cohwederos. Es Terclarl yne entre es- tos c ~ h e r e d ~ r o s 11ahi-A m a infinita diversidad, s e p n 10s mlcritos dr cad? uno. Diios s t r i a m:;x;rnos, otros granclcs, orros i i ~ c l i a n o s , u t r c s menords , y 10s mas rnininios : inas como !a cariclad , que est i ~ i i i c u h n per-

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85 I fectionis, esiarn' entonces en el grado mas perfecto ri que puedli l iegar , no habrk ni podrk haher entrc t an - tos Eiijos de Dios, ?neuna a c tuum, frigidzmt illitd ver- bum; sino que serli tuyo lo que es inio, y mio lo que es t u p : lo qlie es de todos , sera de cacia uno; y IO que es de Cristo, sera de todos: et Deus onziiia .in onznibus. Esta idea general , aunqiie apenas tocada lIrevisimamen!e, me parece verdaclera racional y jus- tisima por todos sus aspectos. Vengainoa $Bora ti lo par t icular , principalmente s o h e -la gioria que llama- mos nccidental'

Extension y grandeza material del reyno de Dios.

S. 2 . O Para que podamos Eiarer algun digno coli- cepto de la grandeza y extension det repno d e , 10s eielos , p o r lo que hace d lo accdsorio y accidcntal, .levantad, 6 Crist6filo , vuestros ojos a1 cielo p esto e n qualcpier lugar 6 pais don& os liallareis , y con- templad por eqpacio de un quarto de hora esie es- pectkalo magnifico yiie os presenta esa inultitutl de: esferus celet.tes y lumioosas , cpie solo el Criador pue- de cootar: cunsultad sobre ellas d 10s mas sabios y diligentes observadores, y os dirkn que la multitucl de 10s cuerpos celestes es ahsolutaniente incompren- s ible , y que con el auxilio d e 10s inejores teiesco- piJs, a p e n a s se descubre una pequena par te de es- t as 1 u iribi e r a s .

Os cliriin que todos 10s innumeratles cuerpos ce- l e s t e s , que llarnamos estrdlas , deben ser lurninosoq p o r si misrnos, pnes en la distancia prodigiosa en que se hallan respecto de nuestro sol no pneilen recibir de 61 tanta Inz, que puedan reflectarla 6 no- satros con tanta clariclad y l~ril lantez. Que la gran- deza de eSbS innuineraldes cuerpos briilantes clehe ser 6 io inenos t an ta quanta e5 la del sol que nos aluinhra ; pnes est& demostrado p o r muchisixnos as- trcinonios insignes que nuestro so l , puesto en 1.7 &- tancia en que est5 respecto de nosotros qualqti i ira es t re l la , se viera itin pequeiio corne elln.

0 s &r;in q u e la distancia de una estrella ,?I otra debe ser ignnl poco inas 6 menos , s i ,p iendo 13 analo-

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852 gia , Q la que ‘hay de nuestro sol ri la estrelln que t e n p I I I ~ S J ecina , y que esta distancia es iiicalculabie . clue estas estrellas lxminosas p o r s i niismas , y t an clistante la una de la. otra, como lo est6 e l sol de ia Inas cercnna, 130 puedei? es ta r ociosas, e5to e s , 110 pneden gozar elias solas iiiuiilmente de SLI Inz J’ caior. Parece que deben comnnicarlo 5 otros cuerpos fr,ios y opacos por s i mis- mos, a s i como lo hace imestro sol.

Os clirdn que si cada estrciia lurriinosi For si inis- nia no poede considerarse ociosa, sino clesilnacla a fo- inentar y aIumj)rar oiros cuerpos O ~ C Q ~ r frids que la circriizdan y giran en su c o i ~ t u ~ n o , 6 B sii alrede- clor: 1ue;o cacla estrclln es tin sisterna solar y plane- ta r io , asi coino lo es clertanicnie, nuestso so l : lue- go cntla estrella tiene innchos cuerpos (inas 6 menos) que La circultdan , conio ceiitlo coniiin dc m o ~ i m i e n - t o , y que necesi tm de su 1ttz y calor.

Os cLir8n e n fin qne esta iuz y calor q u e cacla es- trella repnrte Libicmcntc ri 10s cnerpos opacos y fi-ios que i n roclcan, n o pacde parar soiarnente en 10s cuer- pos inismos inanimados : parcce clue debe alumbrar y calcntar criatriras v i ias y anirnarlas ; ya solo sensi- t i v a s , an:ilogas d noestrds best ins; !a tamhien, 7 piin- cipahnente ti cr iaturas rncionales , c o ~ n p l ~ c s t a s d e euerpo p esFiri tu, nnriiogas a i hombre hahitador de este giolso.

Yo estop innuy lejos de to i i i a r partido por esta fi l t inia idea. Las razoraes espcciosas c p e se alegan ;i SM f avor , son tcdns de mera conjetura y con- gruencia : por consignior,ic solo prteden prolwr que la cosa 110 repuqna , ni e5 impoGblc, ni se opone nlguna vcrdacl: inas m d a puedeti probar Li favor de SLI e - d s l e n c i a r ea l .

TJo p c ’ tnicamcntee se pucde y se debe defender es , que si acaso hap en otros glohos otras criaturas andlogas a i Irornbre (-can Eas que fueren , y coino fae- r e n ) , todns eilas itttbeii per tenrcer A Crivto Jesus y snjetarse enteramente d SIX dominacion , p i e s to - dits e l i n s , no i-ar~ios que nosoiros , fneron criadas gor 61 , y para 6 i : prq>ter quem onznin , e t per quem anmi((.

19 ire i s a cas o gu e 1 o dac: c s f a c ria :was in 11 urnerab le s, I

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/

553 ootnpticsias dr cuerpo y a h a racional (si acaso 1;:s flay r n otros orhrs), no solainente deben pertenecer a1 hombre D i m Cristo Jesus en ytranto Rey y Seiiop

sino tamhien en qnanto nedcntor , mediaclor y pacificador en t re Dios y 1as c r ia turas , asi conlo lo es y l o s ~ r i i respecto de todo el linage de Adan. Bien: i y quE diiicul!ad hallais en r s t o ? ~ Q u d sabernos, ni vos , ni y o , ni ningiino si estas criaturas de que ha- blarnos andlogas a1 hombre, han tenido, 6 an tes , 6 ri lo menos despues de la mnerte y resnrreccion del honibre Dios , aigana mision divina por el ministerio de 10s d n p l e s y de a!gunos justos i n s i p e s co- in0 Enoc , BoC, Abrahan , Moyses , David y otros ? Con cine todas estas i nnurne r~b lcs criatnras , ancilo- gas ai hombre ( s i acaso las hap) pneden hien Fer- aenecer a l lioinhre F i o s Cristo Jesus no solamcBnte e n ynanto Key J' Sefior universa: de toclo lo criatlo, sino tarnhien e n yoanto Redentor , inccliador y paci- Gcador e n i i e e ! Crindor y siis crinturas. Para este cam podria servir aqncl testo no poco clifici! del Ap65to1, qnc hab!ando de 10s frutos d e la pasion p muertc del honibre Dios , d i c c b (Ad Colos. c . I . v. 19.1: 7ziia iiz ipso ton2pZacuit oninem plrnitudrnent inhabitue , e t p e r C U F ~ reconciliare ownia in i j m i n z : pacLficarzs per san- gru'cem criicis c j l ~ s , sive p c e in !erris, sive qun. in cmlis sitrzt. (Que ciiaturas racionaies hal:itndoras c',c 10s cirios pueckn scr cstas 7tm in cmlis sunt , que f'iieron pacifi- catlas 6 rrconciiiadas con Dios por ia inuerte de Qisto, aci C O I ? : ~ 10 ha 5ido La especie 6 e Adan en anestra tierrn 1 Cotisitleradlo bien : iiins no penseis por eslo, que po doy e s ~ a inirligencia ai teuto del Ap6stol &I--

inando ahsolutnmerite , sino S O L O en el cas0 (no impo- sible, ni absnrdrj) d c yne eslen bahitndos 10s cue]'- pos ccicstes de otras criatnras aiirilogns a1 homb1 e. Fue ra de este cas0 , Liire' que ignoro su vetdadera i i 3 -

te!igcncia ; ni es mi Briimo meteune y tomar parte e n sernejatitr: dispnta , p e s solo m e conti*aigo d relei ir- l a , y para que sirva con10 de apoyo c i Io idea i n a s - nifica qcc IlastR 10s fi!6sofos lian forni36o tic esta lie;.- mc-,isi:m o b r , ~ , que nosotros coasidcr6banios a1 PIT-

scn!r cou soio el refpeto d In bicna\c!,turanza de 10s eoheredt ros de Grist0 Jesus. -

' de todo

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854 Todo lo que vernos e n e l nniverso con naestros

6jos, todo IO cine alcanzanios $ ver con 10s niejores teiescopios , y todo l o q u e no alcanaamos B uer (que t a l vez es lo inas y nirjor) , todo e l lo , amigo niio , es la herencia del hombre Dios Ciisto Jesus y por con- siguiecte d e todos sus hermanos mennreb , despues de la resurreccion nnhe r sa l . P todo ehto serri como afiadidura accesoria y acc;Zcntal 8 su biena~enturaaza y gloria snbstancial, esto es , a' la vision fruiii.ca de Dios y posesion del sumo hipn. Esta vision de Dios pertenece solamente a1 alma en quanto racional 6 in- telectnal: mas en quanto es sensitiva por rrredio de 10s 6rganos del cne rpo , para el qual f u e constitnida y clestinaria, se le aiindir.8 la v i s ion , la posesion , la fruicion de todo lo criaclo material. De modo que po- dra'n todos ir corporalmente donde guisieren , y v e r con sns ojos, y tocar con sus rnanos con pima in- teligencia todas y each una d e las infinitas obras del Ornnipoteote, sin teinnr a!guno d e q u e les faile tienipo para i e r l o y ohserrario t 0 : quoniam videlo c e l o s ~ L L O S , opera digitoruna tiinrriin , lunarn , et stellas , 7im tu fiiizdnsli (Psalm. 8.) : y sin q u e esta vision y ob- seryacion cle l a s obras de Dios les impida 6 distraiga tin nioniento de la vision y fruicion inaniisible del sumo s i e n , ti cluien hal la ldn inmutable e' igual asiinismo e n todas partes. Por aliiwa en el estatlo presente , corpus quod cosrutnritur nggi-avr~t onimam (Sap. c . 9.) , 3' mu- chisimas T eces nos sueede 7zmd spiritus quidenz pron7p- fus e s t , cur0 uutem iifirma. Xas en aqucl estailo f e l id - s in io , el cuerpo ya incorruptible y glorificado, 1e;os de perturbar a1 alma , n i de irnpedirle un solo nio- niento la contemplacion, fruicion y amor intimo de l sumo b i e n , antes le ayndar8 a u n en esto mismo; pues participantlo d e SLI gloria, la servirri d e instrumento para gozar de toclo, y para alabar y bendecir eri todo y por todo a1 Ciiador de todo.

flo me confunddis ~ h o r a , Cr ist6filo , esta idea sen- cilia y clam , funrlada scilidarnentt! en la revela- c i o n , con aquel las ideas ricliculas, secas , injustas e' insufrih!Ps , que inventaron algunas gentes de 10s si- $os ohscuiws , persoadi6nclo-e que dehpues de s u muer te , andarian sus a h a s de glob0 en 9:obo ad-

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855 qai r iendo niievos conociinientos en las ciencias fisi- cas para per€eccionarse en el las , p e s que seme- jantes gentes st: extraviaron enorinemente del camino de la revelacion. Mas dexando d estos infelices di- vertirse po r a h o r a , y consolarse un momento con siis ridicnlas irnaginaciones , volvamos B tornar e l hilo de nuestro discurso. Nosotros , 6 Crist6filo, no es- tribamos , como sabeis, en puras imaginaciones , sino en ftmdamentos reales , s6lidos , estahles y eter- nos , como son la palabra de Dios autentica , Clara, y condirmada con juramento: in quo nbundantius vo- lens Deus osfendere pollicitationis Imredihus inintobi- litatent corwilii sui , intcrposiiit jusjiirnndum : ut per &as res inintobiles , quibus inapossibile est inentiri Deuni , fortissinzunz solatium habeantus , qui conj’ugi- mus ad tenendan8 propositanz spen?. (Ad Heb. c. 6. v. 17. ) Bsi nuestra esperanza n o consiste en palabras pomposas, nli en decisiones orgullosas , sino en he- clios innegahles, $ 10s p a l e s , lejos de oponerse la recta r azon , antes la favorcce nyuda toclo quanto puede. Corno yo n o habio con estos desgraciados, sin0 con CristGfilos , 6 amantes de Cris to , discnrro sim- ple y confiadaniente asi .

Bay evidentemcnte nn supremo Ser, eterno d in- c reado , &e quieri I:a leribido SII sei. todo quanto e s : i p t e fecit nos , et 12012 ipci ncs. Hay tin Dios infinito en t o d o , Criador y Seiior del cielo y de la tierra: wisibiE7nm oniniiinz , e t invisibiliun?. E s l e Dies vivo y vertlarlero , T o r sn suma boi idad , se Iia dignado d diebrts antirp~is de entrnr en sociedad , en aiianza , en cornrrcio con los lioinbres , I,ahitadores de este gran orhe. Se lia dignado de re:t.iarse B ellos, de reve- larles SLI modo de ser inefnble 6 incol?:prehensible, esto e s , zLniis Deus in Trinitate , e t Trinitlz? in unitnte: de revelarlcs fueva de ~i rnismo otros rnuchos nris- tcrios y de baccrles millares de prornesas. Se dig- n6 despues de esto , de u n i v s e con nuestra natura- k z a en la persona de su liijo , para rematliar nues-

- trris males : sic Deus dilexit nirrndrrnz , ~ 1 ~ j i t 7 i i c n ~ suum unigmifrirn &re t , ZLI onznis qui credit in ipsunz non pererrt , sr.d IrcLent viiam &ervin?n.

Ahorn : eote liijo de Dios , hecho h o m b r e , 6 este

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856 hornhre Dios , dehe ser neeesarianlente hmre5 universo- r r r n z ; pues por 61, y qara 61 se 1 1 % l iecho todo p a n t o es : proper quem oninin, ci p r yrrenz omnia : y toclo a l p n &a sc ha de so je ta r 6 (:I eteriinmcnte. Fiiera de s e r uni'gdnito natural cle Dios, y ccmo t a l hrercs uiziversorim , es tarnhien p7 inzogenitris in niultis frGitri- bids : tiene ya actualrneiite y leadrii t t &via innume- rables hermanos menores hijvs adoptivos de Dios, q u e se han nprovcchado, y se aprovrchardn en ade- lante d e la potestatl que iecihen' de 61 todos io8 que creen en e'l : q ~ ~ o : r / u o ~ nurena receperrint e l m , dedit eis poteslatem ji'lios Dei f ieri , his qui credrint in nornine ejiis. De aynrlios digo, que por su fd sincera e' in- corrupta , y pop si1 justioia 5 toda prueba, se con- formaren con dl ( j a m,fs, y a menos), y merecieren por esta eonSolmidad en t ra r en el nLirnero de hijos dr Dios , y como ta?es coherederos suyvs. Si p e s para este h i jo Dios Lornl~rc sc liizo t odo , y con 61 han 2e re? rinr siis h e m a c c s 3' coheretleros , y est0 es e n la reaiid,:d e! repso ( ' e Ics ciclos, iqu6 otra cosa puede se r est-e s inn el xr,i \crso rnunclo , y todas quan- tas cosas liny en 61: <p@ ctna ccsa pucde Fer , sino todo el uniyerso rn'uccio, y tcdas las criaturas innu- merahics c1u.e lo c o n i p c ~ e n , dc quienes Jrsucristo es el 1el;itiruo her ed+>ro , y rohcrec?ero todns 10s jrrstos!

Me h3rP carg:, de In liltinla digcultad que me pr.opor:eis. R r i n q ~ e se cocccda , cJecis, que el rey- no de 10s cicicc el rep?ro dc Dios, P I reyno de Cris- t o , el p a r a k o , la patria ce!cstiat , lmyd de ser todo el nnun(?o, y toclcs 10s cuerpos innnmcrahies q u e com- ponen rste universo , s i r ) eucepcion alguae ; aitn en este cas0 (pro:i-guis dicicndo) es precis0 concehir 01- gun lugar 6 gicbo de!riinilnatIo, y rnas pricilegiado entre t o d o s , donde se G-.e eternamrnle la corte, el t r c n o , el j u i c io , 6 el centro c?r u d a d de un reyno tau gralide ; piles a1 Gfin en este ~ r y t t o , aunque vas- tisirno succpe c p n e s l o todo cle 11ijos de niob hien- aventurados 6 im:lectaliies , c1el:erti Ihalier una justa y pacific? subordinac;on 6, nnos i: oiros (y esta Clara, cctnocfr?~ de todcs , 4 ii:disput>Isie) ; es i saher : de 105 minimos 6 10s inrnores : de e5tcr5 6 otrcs maynres: de estos 6 ios gm:ides : da I o 4 grannt'lcs ci los nr;<rl^mos:

4. 4."

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857 y de todos a1 siipremo Rev. Esta gerarcpia, 6 este go- Bierno perfecto, i no lo adiniten toitos :os doctores, aun entre 10s Angeles bienaventarados , qui senzpet- vidrnt fnciem Patris? ;Pues p o r que' no dcber& bureder lo misnio entre 10s innumerabies hijos de Dios que en- traren en la vida? hsi cpe (conclois con raeon) delle admitirse algun Itagar de t e~minado , ii'sico y real entre todos 10s orbes innumerables que conijmnen el uni- verso , donde resicla ordinariamente el supremo Rey, 6 su cor t e , de don& como de centro comun salF,a eternaniente la l u x , y se dilhnda h:icia todas partes. A csta iiltima dificultad puedo responder hcilisinia- mente de dos maneras: p r imera , que donde est:; et r ey , alli est& ordinariamerite la corte ; pues ning<in soheralno est& obligado 6 residir perpetuarnente e n an Ingar mismo determinado. Si esta brevisima resp,urs:a no os contenta plenamente como es i'kcil c r e w yo os c o n c d o , amigo , sin repugnancia a l p m esie I c - gar deternainado , fisico y real , que liedis con t a c i a s instancias. La corte del supremo Rey, y-el centro de unidad de u n reyno tan grande , estars sin dudn eter- namerite en algun Ingar deterininado, 6 en alguno de los orbes innumerabies de que se compone todo el universo mnndo. Dise en a lgano de [os orbes , por- que cielo s6lido, que sirva de h6vecla i todo el nni- %erso , y lo abarque todo dentro de si ) yo no lo ad- rniio : et unz~sqr~isqiie in SLLO sensu nbundet. Mas este orbe tan privilegiado entre todos , ,qual s r r s ? Bin- gun otro , Cristdiilo , seFun mi pobre jriicio, s ino este niisrno en cuya superficie habitarnos. ELte serd eter- namente el mas afefidido , el mas Erecjibentado , el mas honrado de Dios y de todas si ts criaturas , y poi' con- siguiente el inas feliz y glorioso , B lo inenos en tcdo lo que pertenece & I n %loria accidental y accesoria, que despoes de la resnrreccion universal no pnecle s e r poca.

Acaso &rei9 , y me parece que ya oigo vuestra ex- clamacion : clurus est Yiic S C ~ N ~ O ) et p i s potei it CIIFIZ SZLS-

tinere ! Nnestro orbc iniserahle c u i mo/edi.zit Dorrii'nus: naestro valle de ldgrimas , (le eiii'ermedad, de triiieza, de corrnpcion , de iniqnidad &c. jscra' a ! g m d i n ia corte y ceritro de uniclad dc todo e i r e p @ de Dios,

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858 r ti de toclo el inmenso reyno de 10s cielos? Si , amigo rnio , si serd : no trneis razoii a l cp ia pnryue evtraiiar esta proposicion, la q u a l lejos de oponerse 6 la es- crifura santa , ni B la recta r a ~ o n antes S F halla p r o - tegida p confirmada s6lidarnente por ia i m a y por la otra. Ved aqui en breve las razones clue militan 5 favor de nuestro orbe sohre todos 10s otros.

Primerarnente el hombre Dios Cristo Jesus nnes- t r o Selior, 6 el Rey supremo, es de esta misma tier- r n , q.uam dedit Deus3Jilii.s honairirm : ayui se h i z o hom- Lre srcndo Dios : aqui se uni6 estrecbisiinamerile con nuestra pobre , enferrna y vilisima riatnraleza : ayu i serneti~ieurrz exinnnivit , formam servi accipiens , in siini- litudinem honzinunz factus , e t laabitu invei;trrs ut homo: ayui naci6 e x Virgim Maria , de progerrie David se- czsnclrrm carnem : a y u i predicb, q u i ensei.6, ayii i mu- rib: a t p i padeci6 la mayor afrenta , JT e l mas in jus - to deslionor que se ha visto jamas, mrrricndo des- nudo en una infame c r u z , como uno de 10s h o m h r e s mas iniqnos : e t inter sceleratos reputatus est. Lurgo ayiii riiismo se le clebe manifestar plena y perfccla- mente S U inocencia , sn justicia $11 honclad, su dig- nidad infinita , y todo qiinnto pnedan comprekender estas dos pnlabras : hombre Uios. D+l misnio modo cliscnrrimos de 10s cohcrrecles , y con especialidad de 10s principnles. Estos padecieron aqr:i p o r Xl : q u i pa- desieron prrsecucion por la just ic ia , ayui fneron des- booraclos y atr ibn~ndos , y innchisimos z i s p e ad nzor- tent : aqui obraron josticia r n niedio de la general in i - quidad p corrupcion : ayni izon drlexerunt aninzcis suss usque ad naor:em. Luego aqui rnismo, como e n el Iu- g a r de sn paciencia, de s u justicia, ,y de sus t r ihn- laciones p o r Cristo, deberBn goear eternamente el fru- to mas que centuplo de todo Io que nqn i sembraron : sic quiden? est jrcstum , et Deo dignunz (como d e c k Tertu- liano lib. 3. hdw. Marc. c. 24.) : illuc qiioqzie exiilta- re Jainulas ejus , ubi . sz~nt e t o%$ixi in nomine 6 j W .

Lo segnndo: la c iudad santa y nucva d? Jerusa- len clue ahora se , edifiea de vivis e t electis lapidibus, es certisiino i p e algnn dia h a de baxar con Jeoucris- to mismo del cielo B nuestra t iewa ~ y establecrrse en ella s6lidameute. La eseriturd santa asegtira que

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vendi-6, y habi ta rs con lunz Dri cum lzoniinibus , dice ni insinda jarnas, que esta hahitaci,>n de la ciri- dad santa e n naea(ra t ierra h a j a tie per soio p o r al- gym tiempo limitado, ni que alguna V P Z h a dc dsxar la t ierra y volar ri otra p a r t e ; antes del i e s to y COD-

teato de 10s capitnlos 2 1 y 22 del Apocalipsis se colige todo lo cont ra r io , y macho mas si se combi- nan con otrcis lugares de la escriterra: consir'erad PP- tos pocos : J z i d ~ ~ a in ctternunz hafiitahitur: e t Serusnlcm in generutionem, et generafionenz. (Jcel C . 3 . V. 20.)

Non evelletur , e t non destruetur ultra in ptrpetiitsnz. (Je$.eiia. c. 31. v. ulr.) H a c reqicies mea in sccciilrirn set-

culi : hic habitabo quonianz elegi ertnz. iPsrtlnz. 131 .) Super soliunz David, e t super regniirii e j u r sedrbif , (16

confinaet illrid , e t corroboret in judicio e t in jusiitin, ci modo e t usque in seniptternum (Isai. c. 9. v . 7 . 1 91 e fue la prcmesa qtie hizo el ingel ci nriestra Sei:o!n: duhit ei Dominus-seden8 David patris ejus , e t regncL- bit in domo Jacob in ceternuna, e t regni ejus non er'it finis.

Estos y o t ros muchisimos lugares de la escrifura santa muy semejantes B ellos , parece que prme- lmn ohvia y naturalmenie ri favor de nnestro orhe. Para af i imar otra coha contraria 6 diversa, era nece- rario algan fnndaniento positii o d iv ino que explicase dichos lugares e n o t ro senticlo : el qual fundamen- t o se husca en todas las escrituras, y n o se halla. S i aquella idea vulgar, de que cancluido e l jtiicio uni je rsa l (sea este rlonde ftieie) Jesucrisfo SB volve- r j cie la tiema a1 ciclo empireo, llevaiido consigo $ t, dos 10s beriditos de su Padre , fnese verrtackra; 2 es creih!e que n o se I:alla>e alguna noticia , 6 siquiera algun vestigia de uii suceso tan grande en tcdas las escrituras ?

Fuera de 10s lugares que quedan apnnt3dos 6 fa- vor de nuestra t ierra , y f'uera de tantcs otros de que ahtinilan 10s profetas y Ins salinos, considerad yor I i ! f i l710 este solo, que por su precisioc 7- clni-!dad va- le por mil: Injusti pqnieniur , e t semen ikpicu u m ixri- hit : justi arifem h ~ ~ ~ d i & ~ b i l l l t ferranz , e t irihaki/aLmt in saculunt sceczrli super e m & , (P~a lm. 36.) Y poco an-

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860 t e s se hahin d k h o pi1 el niisrno s a l m n : Quoninm qui ?nfl l~g3&6lnl i tr , esl,’i~i7liriflbZtritlrr i s l ~ s l i f t e i ? f e ~ niitern n o - nzhum , i j j s i /ia?wditabiuzf tei-rnm : ~t adhtlc pushiluni, e t non erir peccator , e t qr!n+res Iociritz ipsius , e t BOIL inue- n l e s . M m s u e l i mrtcnt hcri.edi:abraiat terrrrnz ) e t delecta- liwiiur in tnul/i~udine pncis. A lo r p d niiidi6 el Maes. t i o biieno cn el sermon del monte ) tliciendo : Ben- ti miles , quoiiianz ipsi possidebrmt ferrnrn. A todo es!o se &be afiaclin. q n e nuestra tierra ) axin mi- racla cii e l estailo presente , no es tan tlesprecia- b t c e n lo ii‘sicn g n a t u r a l , que no inerrrca grancles atrncio:ies. No hay duda que ahcra s c hallan en ella mczc!ndos y confundictos entre si 10s bieoes con 10s males , resa l tando de esta mezcla un todo , 6 un c r ~ n j i ~ n t o poco agracdahle ) 6 direinos 113pjor , agra- daljie p ~ r u n a parte , y desagradable p o r mil. MAS separad por un mornento lo malo de Io Iiueno y lo precioso de lo vil. Quitad it nnestra tierra-todo . cjua:ito tiene de inaio p desagradahle ) asi en l o n i o i d , coin0 en lo fisico, deja’ndole solamente lo 1:ueno. Qsitadle en prinirr l u a a r I n concnpixetwia, la sohcrbia , la eoviclia; qaiiacllle 10s deceos des- reglndos y vanos cle sus haLitadores, que son ordi- nariamente SZI mayor suplicio . QuitadIe despaes ( !e es to la enfermedad, el d o l o r , la tr isteza, la indi- geac ia , cl f r io , e l c s l o r , la yar iedad de cstaciczes, y sus necesarias rexulta5 er, perjur’cio de nxestra salurl: y en smna el tcmor de la niuerte, y de todo enenxigo. Con esto solo, sin afiadirle aEgrrn otro bien positivo, i no seria nuestrn t ierra un verdaclero ynrai- s o ? Si ann ahcra en medio dc esta rnezcla J’ con!ii- sion de males y de bienes, hag tantos que yaiisie- r.nn peerpetiznrse en ella, solo por till qual hien que pileden pescar cntre tantos males, iyue seria sino hallasen mal 2 l p n 0 , sino todo A SZI satiahccion?

Pues recordad ahora que con la vene’da gloriosa del Senor 6e mej orark esta t ierra secrmduna pi-oncissa i p ~ i ~ ~ c , ape hahiiarti en ella la insticia y la paz ) y eqpezare is k reconoceda ya digna de una eqrie tan 5 io 1 5 io s a. C, m si de d la s expre s i ones v Ivisima s de que llsan 10- pi.ur,tacl de Gios halt land? solan:rute cle nucs- tra iierra indnvia +iadc;ra, so!o p o r p e serk rcnova-

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86 a t ras cpe las que nos o h c e el sistema vulgar apenas se perciben < fuerza de sutilems. Debernos no obs~an te confesnr, que sea c p a l f r m e el siatenia que sigaiuos, no podeinos en el estado presente forrnar idea cabal ni de la ft-licidad accitlentak que tendr in 10s justos ya resaciiatlos ; yues coin0 est& cscrito en Isaias , capitulo 6 4 , vereiculo 4 : IZL'C oculus widit, ner azirrs audivit co- ino lo r rp i te S. l?aBlo: izec itz CQI" lzoniir>is ascendit, que prrparnbit Deus dil;geritit.ics se. ( I . ail Cor. c. a . v. 9.1

Por si acilsn OS yarece aigcna novedad es- traiia y peligrnsa todo Io que acalro de proponer en eate Liltimo cppittdo , sabed , aniigo, ,que ya otros niejclres clue yo lo han prnsado asi. E n efecto, 10s saljios autores franceses que comentaron el n u e - vo testalneirto contra Quesnei al i lrgar ai capiEnlo 5 de la seganda c irta de S. Pedro , dicen : nSe pregiinta iyu ieaes habitardn esta nncya t i e r i a ? S. hnselnio, Guillerino de Paris , Pic0 blirnnclr~iano , el 'Kostado, Cayefano , y muchos otros sabios tediogos, rcsponden, qtie esta iiiieva tierra sera liabitacion eierna de 10s pir- vulos q u e rntieren siii bantisino. Otros c r ren que sc rd para 10s bienaventiirados mismos, porcpe despnes del juicio, todo el unirerso sei*& la lierencin dc 10s esco- gjdos, y S. Juan ( A p o c . c . 5 . 7) I O . ) dice en par- ticolar que reynarernos sobre la t ierra : regntsbi- nms supper terram."

Y veis ayni , Csist6filo , amigo carisimo, que h e - mos llegado con el favor de Dios a l fin y te'rini- no de nuestra larga conlersacion. En eiia h e pro- pneslo a' vuestra consideracion todo quanto os ha- b i a prometido, y p e d 0 decir con uerdacl que niu- cho mas ; p e s inter sci.iberzdwz han itio ocurriecdo cosas en que yo cicrtamente no habia pensatlo anfes . T o c a aliora 2 vos misino evAriiiiiar seriarnente y juz- gar tiespnes de este exlmen en juicio y en justicia; pues coino haheis oido de m i otraa veces , * n o sola- mente snjeto todo este escrito a1 juicio d e la iele- sia ? cujus es juclicore de oero sensu, e t itrterprctntaone scrLpturarunt sanctar'rinz , sino tarnbien a1 juicio y cen- su:-a de ytialyuier bombre particular, docto srnsato, c p e $e digaai-r de leerlo y de favorecerme con sns adlertencias caiitativas ; pues mi intencion no B S otra

S. 6."

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863 certisirnainpnte ( teslinzoniitm nzilzi perhihente conscicntia nzea in. Spiritu Sanclo) c p e bacer aigun servicio 5 Dios, y B mis pr6girnos : coricurriendo con esto poco se- gun mi pobreza y peyueliez in agizitionem nzisterii Dei Patris, et Christi Jesu , in quo sunt onines thesauri sa- pient&, e t scientie ubsconditi. ( A d Colos. c. 2.) +si gloria , et imperium in secula saxdorum: Anzen. ( I .

Pet. c. 5. 2). 1 1 . )

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. . . . . . . . . . . . . . . . . . PR~LOGO. , Pag. 7 DISCURSO PRELIMIWAR J ? . . . . . . . . . . . . . . .

PARTE PRIEERA.

CAPITULO I. De la letra de la santa Escritura. . *CAP. 11. De la autoridad extrinseca sobre la le-

tra de 1~z santa Escritura. CAP. 111, Se propone el sistema ordinario sobre la

segunda venida del Mesias , y el modo de ex&- minarlo, . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

CAP. V. Primara di$cultad. = Los Mdenarios,

Am. 11. Dieiersas clases de mililevlarios, la con- ducts de sus impugnudores . . . . . . . . . . .

ART. 111. L a explicacion que se prefende dar a1 capitdo 20 del Apocalipsis. . . . . . . . . . .

CAP, VI, Segunda dificultdd. = La resurreccion de la carne siniul e t semel.

CAP. VII. Tercera dificultad. z Un te%\tto del sim- bolo de S. Atandsto . . . . . . . . . . . . . .

CAP. JrIII. Quarta dificultad. = un texto del Esan- gelio.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

CAP. IX. Ultirnn diJicultad. = Un texto del Apos- to1 S. Pedro . . . . . . . . . . . . . . . . . .

. . . . . . . . . . .

CAP. PV. Se propone otro nuevo sistema. . . . . ARTICULO I . 3x&men del primer punto. . . . .

. . . . . . . . . .

3'

46

51

60 58

63

G7, 87

99

133

139

SEGUMD,4 PARTE.

FEN~NENO I. Ln esiutun de quatro tnetales del

FEN~M. 11. Las guazro bestias del capitrilo 7 del capitulo z de Danie l . . . . . . . . . . . . . . . ' 4 4

mismo Dmie l . . . . . . . . . . . . . . . . . . 171

2 0 3

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . F ~ ~ d n f . 111. El Antecristo 197 AR'P. I . Origcn del Autecrisfo

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ART. 11. Patria y principio del Antecristo. . . . ART. III. EL Antecristo creido y recihido de 10s

208

. judios como su vevdadero .Wesins. . . . . . . . ART. IV. Moonarquia universal del Antecristo. . . 2’4 FEN~M. IV. El $n del Amtecr.dsto. 304 FEN~M. V. Los judios. 341

uistianos 345

dos de SLC pa l r ia . 354

del honor de pueblo de Dlos. 385

da de caSa del esposo. . . . . . . . . . . . . . 398

tes poseian solos. . . . . . . . . . . . . . . . . 432

2 IO

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Zstado J’ULLGTO de 10s judios, segun 10s doctores

ART. I . Aspecto primero. = Los judios desterra- ’

ART. 11. Aspecto segundo. = L o s judios privados

ART. 111. Aspecto tercero. = L a sinagoga arroja-

ART. IV. Aspecto quarto. = Los judios rnuertes y ’ priuados de In vida espirituai y divina que an-

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

e . . . . . . . . . .

,F$M. VI. L a iglesia cristiana . . . . . . . . . 442 FENdnT. VII. Babilonia y sus cautivos . . . . . . 492 FEN6nT. VIII. L a rnuger vestida del sol . . . . . . 525 ART. I. Explicacion del capitulo 1 2 del Apoca-

l i p s i s . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 535 ART. IT. Continuacion. . . . . . . . . . . . . . . $42 AUT. 111. Idern.. . . . . . . . . . . . . . . . . . 545 ART. 1V. Idern. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 559 ART. V: Idem. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 56% ART. VI. Idem. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 570 ART. VlI. I d e m . . . . . . . . . . . . . . . . . . 573 ART. VIII. Idem. . . . . . . . . . . . . . . . . . 579 ART. ULT. Idem. 5 9 2 FEN&. IX. El taberna’culo de David. . . . . . . 596 FEX~M. X. EL moate de Sioa sobre 10s montes. 641 AP~NDICE. Jerusalen. 672

INTRODUCCION ..................... 687

. . . . . . . . . . . . . . . . .

. . . . . . . . . . . . . . . TERCERA PARTE.

CAP. I . E I dia mesmo de la vonida del Serior se- gun Eas escritrcras. . . . . . . . . . . . . . . . . 683 .

%

, 1 -

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CAP. PI. Idea genefa1 del juicio de CrisZo segitn

CAP. 111. Se exhmina un texto importante de las escrituras. . . . . . . . . . . . . . . . . . 694 Ism'as. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 697

CAP. IV. El cielo nuevo , y la tierra nueva . . . 706

vu t ierra . 7'6

que haxa dcl cielo CAP. VII. Se responde a' &gunas qiiestiones. . . 737 .

CAP. V. Congetura so5re estos nuevos cielos y nue-

CAP. VI. L a ciudad sunEd y nueva deJerusaEen . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

. . . . . . . . . . . . . . . 7 30 . CAP. VIIL Suliclo del desierto de la muger soli- taria , y s u nueuo desposorio. Inteligencia lite- ral -Ei este propdsito d d cdntico de 10s ccinticos.

CAP. IX. Divis8on de la tierra santu, entre Ins reliquias de las doce tribus de Jacob. Jerusalen de los profetas , todavia viudora , y su templo. 768

792 CAP. XI. Providemias extraordinarins para con-.

servar en toda lu tierpa la f e y la justicia. . $02 . Cap. XII. Coqjloencin de todas las gentes de todo

el orbe hn'cia E n centro comun.. . . . . . . . . 808 CAP. XIII. Se satisface n' varias qiiestiones y di-

CAP. XIV. Fio de 10s mil arios de que hubla San J u a n , y solttlra del dragon . . . . . . . . . .

CAP, XV. Estndo de nirestro orbe terraqiieo y todo el universo mundo d e s p e s de kt resurreceion y

749

. . . . . . . . CAP. X . El redduo de lus gentes.

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ficultades 8'7

823

. . . . . . . . . . . . . . . . juicio univei*sal. 837 CAP. XVI. Idea general de la bienu

eterlza de todos 10s justos , despes d receion y jzcicio u,niversal . . . .

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E R R A T A S .

Pdg. Linea. Dice. I__- L-.-

lee ambigtiant sornniabit dcprabent

talento

argentium opercrsionern

eran facieiit

ansalzzimiento $lis

nustrices Cpde

testimonio pedezos

pascent tlor saluta

OCiOSO:,

<' tempos munu vanu v n l i l h

estudiorurnque inipitatem

mnerse

652 31 . Isais 663 13 turbubitur 665 a 5 veniet 689 3 Nadiam 699 30 agrerc'ietur 704 3 1 . . implevil

clausis audierum

747 5 744 16 750 4 preciosa 760 36 circunstanciss 763 24 dransit 815 3 2 prceparata: 8 2 0 4 . voois 82 f r videvit $34 9 operuit

Le'ase.

leen nmbigam somnia ba t deprovent gobiarno

ociosn eu talento, argeizteurn

operationem erant

fcrciant ensalzamiento

filii nzitrices p e d e

te?tamento pedazos

pascentur scclulat tempus

mnnu valida .+tudiorumquc iniq~iitaturn

niuerfe auscrdtabunt

Isaias turba hi tur

venicnt fiJudian

implevit clausi

audieiunt preciosas

circunstancia6 transiit

prreparata vobis

' aidehit nperuit

-

egredietut; ,