18
Fundamentos de la Aritm´ etica y del An´ alisis Julio Rey Pastor Digitalizaci´ on: [email protected]

[Matematicas].Fundamentos.de.La.aritmetica.y.del.Analisis.(Julio.rey.Pastor)[MadMath]

  • Upload
    pepeele

  • View
    213

  • Download
    1

Embed Size (px)

DESCRIPTION

fundamentos de aritmetica

Citation preview

Fundamentos de la Aritmetica y del AnalisisJulioReyPastorDigitalizacion:[email protected] Analisis. J.ReyPastor 1Si alguien nos pidiera una denicion de la Matematica futura, le diramosqueseralaCienciadelosconjuntos; ysi acontinuacionnospreguntaranqueexpresaestapalabraconjunto, nosveramosmuyapuradosparadaruna denicion aceptable. Se ha dicho que el signicado de esta palabra nodieredel vulgar; peroestonoescompletamenteexacto. Enel lenguajevulgar nos referimos siempre a conjuntos nitos, a conjuntos cuyos elementostodos se pueden enumerar al cabo de un cierto tiempo; si bien hablamos aveces de conjuntos que no somos capaces de imaginar, ni mucho menos deenumerar, aloscualesatribuimos, porinduccion, lasmismaspropiedadesexperimentadas en los conjuntos que imaginamos o percibimos bien.Conceptoden umeronaturalDelosconjuntosnitosnace, porabstraccion, el conceptoden umero,fundamento de toda la Matematica. Mas, como a esta nocion suele llegarsedemodonadariguroso, convienedeciralgunaspalabrassobrelagenesiscombinatoria de la Aritmetica y sobre el metodo axiomatico.He aqu un ejemplo clasico, que nos muestra la necesidad del concepto den umero, y el camino mas natural para llegar a el. Una madre que carezca deesta nocion, tiene varios hijos, que llamaremosA,B,C,D; hace entre ellosun reparto de manzanas, y seana,b,c,d las que corresponden aA,B,C,D, respectivamente. Cada ni no tiene, pues, su manzana; y si como hemossupuestolamadrecarecedelconceptoden umero,tendrabuencuidadode dar a cada chico su manzana, para tener seguridad de que ninguno quedasin ella.Mas supongamos que, tomando las mismas manzanasa,b,c,d, ensayarepartirlas de otro modo; y, por ejemplo, da a a B, la d a A, la c a D, y la ba C. Entonces observa un hecho sorprendente: cada chico tiene una manzana,aunque no sea la suya, y no sobra manzana ninguna. En cambio, si intentarepartirel conjuntoa, b, dentrelosni nosA, B, C, D, indefectiblementequeda un chico sin manzana.Dos conjuntos se dicen coordinables cuando entre sus elementos se pue-deestablecerunacorrespondenciabiunvoca;esdecir,detalmodo,queacadaelementodeunocorrespondeuno,yunosolo,enelotro.YelhechoFundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 2antes observado no es casual, sino que dos conjuntos cualesquiera, coordi-nablesdeunciertomodo,losondecualquierotromodoqueseensayelacorrespondencia.Deestehecho, facil dedemostrar, naceel conceptoden umero. Parapoder estudiar las propiedades comunes a todos los conjuntos coordinables,y distinguirlos de los no coordinables, se introducen estos entes abstractosrepresentativos quellamamos n umeros. Todos los conjuntos coordinablestienen el mismo n umero; los no coordinables tienen n umeros distintos. Re-sulta, pues, el n umero, de una doble abstraccion: del orden de los elementosdel conjunto, y de la naturaleza de estos.Estemetodo, parallegaral conceptoden umeronatural, ydemostrarsus propiedades primeras, se apoya en las nociones de conjunto y de tiempo;y por si alguien se preguntara si sera posible prescindir de ellas, o de otrasanalogas, yconstruirlaAritmeticaconlaLogicapurasimplemente, nosadelantaremos diciendole que la Logica es una palanca poderosa, pero quenecesita un punto de aplicacion exterior a la palanca misma; ella, por s sola,no puede dar sino tautologas.Por otra parte, como ha hecho notar Hilbert, en la exposicion usual delas leyes logicas se utilizan, tacita o explcitamente, la nocion de conjunto yhasta la de n umero; y una separacion rigurosa de lo intuitivo y de lo logicoen esta primera nocion de n umero natural exigira un progreso de la Logicaactual, paralelo al de la Matematica.MetodogeneticoDilucidenloslosofosestascuestiones; peroseaellocomoquiera, unavez el matematico en posesion del n umero natural1, con dos n umeros enterosconstruye el n umero racional, con innitos n umeros racionales construye elirracional, con dos n umeros reales cualesquiera compone el n umero complejoordinario, y con todos ellos edica la Aritmetica primero, y el Analisis supe-rior despues, sin recurrir a la intuicion. Por esto ha podido decir Poincare,que hoy el rigor absoluto esta logrado.1Para Kronecker el n umero natural debe considerarse como dado, sin necesidad de fun-damentacion.ParaHelmoltzesunfrutodelaexperiencia.ParaHilbert,elmejormetodoparaintroducireln umeroeselaxiomatico.FundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 3Estaconstruccionaritmeticapura,enlaquesolosehabladen umerosynodecantidades, enlaquesedeneel n umeroracional comoparden umerosnaturalesenunciertoordendesucesion, yel irracional comocortadura en el campo de los n umeros racionales, con total independenciadelanociondelmitelacual presuponelaintuiciondelacantidad,esunaconquistamoderna, engranpartedebidaaDedekind, ypuntodepartida para la aritmetizacion de la matematica, realizada por Weierstrass.Constituira ofensa a la ilustracion de mis oyentes detenerme en la explica-cion de esta nocion moderna del n umero inconmensurable o irracional; puesesto equivaldra a suponer que hay entre ellos quien sigue todava encari nadocon la ya derogada teora de Euclides.MetodoaxiomaticoExpuesto queda as, a grandes rasgos, el metodo genetico; con el se llega ala nocion de n umero real por sucesivas ampliaciones del concepto de n umeronatural. Hilbert preere, sinembargo, desdeel puntodevistalogico, elmetodoaxiomatico, parallegardirectamenteacaracterizarel sistemadelosn umerosreales, perosindejardereconocerel altovalorpedagogicoyeurstico del metodo genetico.No podemos detenernos hoy a exponer en detalle el metodo axiomatico.En el se llama n umeros reales a un conjunto de cosas o entes cualesquiera,a, b, c, . . . que cumplen un conjunto de condiciones; y esta serie de postuladosconstituyenunadenicionindirectadedichosn umeros. Estospostuladoshan de ser compatibles e independientes entre s; punto importante sobre elque insistiremos al tratar de los fundamentos de la Geometra.ConstrucciondelaAritmeticaEn el metodo genetico es preciso ir generalizando sucesivamente las ope-racioneselementales,paracadanuevosistemaden umeros;yestosehacedisponiendo de la arbitrariedad de las nuevas deniciones, de tal modo, queen el nuevo sistema, los n umeros satisfagan a las mismas leyes formales queen el sistema anterior menos amplio. Esta norma o principio de permanen-cia de las leyes formales (con frecuencia interpretado muy erroneamente enFundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 4nuestro pas) es la que da a la Aritmetica uniformidad y sencillez.Nonosdetendremos,porserbienconocido,enexplicarestasgenerali-zaciones sucesivas; ni como se combinan luego las operaciones elementales,dando origen a muy diversos algoritmos (fracciones continuas, determinan-tes, etc.). Perocitemossiquierala ultimadelasoperacioneselementalesaritmeticas, que sirve de enlace con el Analisis, y de la cual hemos de ocu-parnosmasdetenidamenteenotraconferencia; asaber: el pasoal lmite.Una combinacion cualquiera de las operaciones elementales restantes, y deesta nueva, es lo que constituye un algoritmo innito: las series, los produc-tosinnitos, lasfraccionescontinuasinnitas, losdeterminantesinnitos,etc.InnitopotencialeinnitoactualEsta cita nos lleva como de la mano a establecer la frontera de separacionentre la Aritmetica y el Analisis, que pudiera establecerse as: la Aritmeticaestudialosconjuntosnitosyel innitopotencial; el Analisis, el innitoactual. Precisaremos esta distincion.Quequeremosexpresarcuandodecimosquelaseriedelosn umerosnaturales1, 2, 3, 4, 5, . . . eslimitadaoesindenida,oesinnita?Sencilla-mente este hecho: despues de cada n umero hay otro; he aqu en esta frase elsignicado del innito potencial. Toda la Aritmetica de los algoritmos in-nitos puede construirse sin usar esta palabra innito; y es que, en realidad,solomanejamosconjuntosnitos, conjuntosformadospor nelementos, yluego tomamosn bastante grande, para que se cumplan ciertas condicionesimpuestas.Se presenta, pues, esta cuestion: podemos operar con conjuntos innitoscomo con los conjuntos nitos? Mas a un: es, legtimo hablar de conjuntosinnitos, siendo el hombre incapaz de concebir simultaneamente los elemen-tos de un conjunto nito apenas el n umero de ellos es algo grande? Porqueyanosetratadeconsiderarunn umerondeelementosquevacreciendo,sinodeconcebirsimultaneamentetodosloselementosdel conjunto; eslaenorme diferencia existente entre la potencia y el acto, entre el devenir y elser.FundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 5ConjuntosinnitosNo podemos entrar en esta cuestion del conocimiento del innito actual,lacual correspondealaFilosofaynoalaMatematica; perosi nopode-mos concebirlo, sabemos manejarlo; y este estudio del innito actual obraadmirable de Cantor ha revolucionado esta ciencia; dentro de pocos a nossera el comienzo obligado de todo libro de matematicas.Supongamos establecida una ley, un convenio cualquiera sujeto al prin-cipio del tertio excluso (es decir, no contradictorio); diremos que forman unconjunto todos los objetos que cumplen esta ley. Poco importa que no po-damos concebir simultaneamente todos ellos; nos basta la seguridad de que,dado un objeto cualquiera, o cumple esta ley, o no la cumple; y en el primercaso queda incluido en el conjunto.Observese que nos guardamos de decir que se pueda saber si dicho objetopertenece o no al conjunto. Pudiera, en efecto, suceder, que, con los recursosactuales de la Matematica, no fuese posible saber si dicho ente cumple o nola condicion impuesta como denicion del conjunto. Un ejemplo: el conjuntode los n umeros irracionales esta perfectamente denido, y, sin embargo, dadoun n umero, no es facil, ni a veces posible, decidir si es racional o irracional.Tenemos,porejemplo,lafamosaconstantedeEuleroMascheroni,quesepresenta en multitud de teoras diversas; se conoce su desarrollo en serie, enproducto innito, en forma de integral:C =

10ln(ln(x)) dxC = 1 ln

21

+ 12 ln

32

+ 13 . . .C = ln

n=1ne1/nn + 1

C = 0, 577215664 . . .Podemos calcular tantas cifras exactas como queramos, y, sin embargo,no sabemos todava si este n umero tan perfectamente conocido es racionalo es irracional.Perfectamente denido esta igualmente el conjunto de los n umeros alge-FundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 6bricos, y, sin embargo, no sabemos, ni parece hoy posible averiguar, si 22oesonalgebricosotrascendentes.Masparaquebuscarejemplosarti-ciosos, si tenemos el n umeroy el n umeroe, los dos fundamentales de laMatematica,cuyocaractertrascendentenosehalogradodemostrarhastanes del sigloxix, a pesar del interes supremo que en ello haba, por llevaraparejadalacontestaciondenitivaalafamosacuestiondelacuadraturadel crculo?LasucesionnaturalyelconjuntorealFijemonosenlosconjuntosinnitosmassencillosquesepresentanalestudiar el Analisis; por ejemplo, los terminos deunaserie. Cuandosedice que la serie esta dada? Cuando se da una expresion general algortmica(n), de la cual se deducen sucesivamente los terminos, dando a n los valores1, 2, 3, . . . . (as, por ejemplo, la serie armonica 1 + 1/2 + 1/3 + . . . ), o biencuando se da una ley cualquiera de formacion. As, la serie de Fibonacci sedenedeestemodo:losprimerosterminosson0y1,y,apartirdeellos,cada termino es la suma de los dos anteriores:0, 1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, . . .Estos ejemplos podran inducirnos, como dice Borel, a dar la denicionsiguiente: Diremosqueunconjuntoestadado, cuandoporunaleycual-quiera se pueden determinar sus elementos sucesivamente, sin dejar ningunoni repetir ninguno. Esto equivaldra a reducir el innito actual al innitopotencial.Aquellos de mis oyentes que no esten familiarizados con la Matematicamoderna, aceptarandesdeluegoestadenicioncomosatisfactoria. Nadamas peligroso, sin embargo, en todas las teoras donde interviene el innito,quedejarsellevardelainduccion, dejandopasarlaspalabrassinexamenriguroso que precise y delimite su signicado.Darloselementossucesivamentequieredecir:daruno,yluegootro,ydespuesuntercero...;equivale,pues,aenumerarlos,y,portanto,anume-rarlos;esatribuiracadaelementounn umerodelasucesion1,2,3,4,. . .FundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 7de modo que, recprocamente, a cada n umero natural corresponda un soloelemento. Dicho concisamente: es establecer una correspondencia biunvocaentre los elementos del conjunto y la serie de los n umeros naturales.Ybien: sontodoslosconjuntossusceptiblesdeestaenumeracion, deesta numeracion, de esta correspondencia? Es decir, son todos los conjuntosnumerables?Fijemonos enel formadopor todos los n umeros reales comprendidosentre 0 y 1. Vamos a demostrar que este conjunto, perfectamente denido,noesnumerable; esdecir: decualquiermodoqueseformeunasucesionindenidan1, n2, n3, n4, . . .de n umeros comprendidos entre 0 y 1, hay otros n umeros de este intervaloque no guran en la sucesion.Recordemos para esto una propiedad elemental de las fracciones conti-nuas: todon umeroreal admiteundesarrollo unicoenfraccioncontinua(nitaoilimitada);y,porconsiguiente,silosdesarrollosdierenenalg uncociente incompleto, representan n umeros distintos. Sentado esto, desarro-llemos los n umerosn1, n2, n3, . . .n1 =1a1 +1b1 +1c1 +1...n2 =1a2 +1b2 +1c2 +1...Y ahora es muy facil formar un n umeron =1a +1b +1c +1...distintodetodosellos, ycomoelloscomprendidoentre0y1. Enefecto:bastatomara =a1, b =b1, c =c1, . . . ; estafraccion, as formada, tiene,respectodecadaunadelasanteriores, al menosuncocienteincompletodistinto, y, por tanto, es distinta de todas.FundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 8Tenemos, pues, dos conjuntos innitos no coordinables entre s: el forma-do por los n umeros naturales 1, 2, 3, . . . y el conjunto de todos los n umerosreales comprendidos entre 0 y 1.NociondePotenciaPara los conjuntos nitos hemos podido apreciar la importancia capitaldelacoordinabilidad. Desdeel puntodevistamatematico, dosconjuntoscoordinables son equivalentes, y el n umero es el ente abstracto que nos servapara representar todos los conjuntos coordinables entre s. Lo mismo aconte-ce en la Matematica trasnita. Cantor ha introducido una nocion que, paralosconjuntosinnitos, tienelamismaimportanciacapital queel n umerotiene para los nitos; este concepto es el de potencia.Se dice que dos conjuntos tienen igual potencia, o son equivalentes, cuan-do son coordinables, y distinta potencia en caso contrario. Tenemos, pues,porlopronto, dospotenciasdistintas: ladelosconjuntosnumerables, esdecir, ladel conjunto1, 2, 3, 4, . . . yladel conjuntodelosn umerosrealescomprendidos entre 0 y 1; esta ultima se llama la potencia del continuo.OtrosconjuntosCualquieranoversadoenestascuestionestrasnitas,podracreerque,halladas estas dos potencias distintas, es facil obtener otras potencias diver-sas. Por ejemplo: si del conjunto de los n umeros naturales 1, 2, 3, . . . supri-mimosvarios,parecequeelnuevoconjuntonoserayacoordinableconelanterior, pues contiene menos elementos que el.Y, sin embargo, nada mas lejos de la verdad que esta aparente evidencia.Nosoloprescindiendodevarioselementos; aunsuprimiendoinnitosdelconjunto1, 2, 3, . . . el formadoporlosinnitosrestantesesequivalentealanterior, es decir, coordinable con el. Suprimamos, por ejemplo, los cuatroelementos primeros, osuprimamos todos los impares y, sinembargo, heFundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 9aqu la correspondencia biunvoca:1 2 3 4 5 6 . . .5 6 7 8 9 10 . . .2 4 6 8 10 12 . . .Al elemento n del primer conjunto corresponde el n+4 en el segundo, yel 2n en el tercero; cada elemento de uno tiene un homologo, y solo uno, enel otro, sin excepcion ninguna.Ejemploinstructivoeseste, encuantonosense naaprocedercautelo-samenteenestascuestionesdel innitomatematico. Lasnocionesdemasymenos,desumaydiferencia,soloestandenidasparaconjuntosnitos,y al aplicar inconscientemente proposiciones como el todo es mayor que lapartealosconjuntosinnitos,paraloscualescarecendesentido,obtene-mos consecuencias falsas. Es preciso, pues, para ocuparse con fruto de estascuestiones trasnitas, sin incurrir en paralogismos, borrar de nuestra mentetodossusprejuicios, ynousarning unvocablosinanteshaberlodenido,aunque este tuviera claro signicado en el orden de la nitud.Fracasados en la obtencion de conjuntos innitos de potencia inferior a lade la serie 1, 2, 3, . . . intentemos siquiera obtener otros de potencia superiora la del continuo. Parece a primera vista que tomando, no solo los n umerosdel intervalo(0, 1), sinotodoslosn umerosrealespositivos, esteconjuntomas amplio no sera coordinable con el anterior. Y, sin embargo, nada masfacil que establecer aritmetica o geometricamente, dicha coordinacion.Geometricamente,losn umerosdelintervalo(0,1)estanrepresentadosporunsegmentoAB;ytodoslosn umerosrealespositivos,porunasemi-rrectaAC. Coloquemos ambos con el origen com unA formando un angulodistinto de cero y de 180. En la paralela aACtrazada por B, tomemos uncentro O, y proyectando desde el los puntos del segmento AB, obtenemos losde la semirrecta AC la correspondencia es punto a punto, es decir, biunvocasin excepcion.FundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 10Conjuntoden umerosracionalesTodava otra sorpresa. Formemos ahora el conjunto de todos los n umerosracionales; de el forma parte la serie 1, 2, 3, 4, . . . ; y el, a su vez, esta conte-nidoenelconjuntomasampliodetodoslosn umerosreales.Paraquienestratanal innitoconexcesivafamiliaridadseraevidenteque, conteniendoeste conjunto de los n umeros racionales innitamente menos n umeros que elde los reales, e innitamente mas que el de los naturales, no sera posible sucoordinacion con uno ni con otro; mas bien parece que tendra una potenciaintermedia entre ambos. Totalmente inexacta esta sospecha; coloquemos enun cuadro los n umeros racionales1// 2~~}}}}}}}}}3~~}}}}}}}}}4~~}}}}}}}}}5. . .1277nnnnnnnnnnnnnnnnn22

32

4252. . .1399tttttttttttttttttttttttttttt23334353. . .1424344454. . .. . . . . . . . . . . . . . . . . .Despues de tachar las fracciones reducibles, cada n umero racional quedaescrito una vez y solo una vez, y entonces podemos enumerarlos, comenzandopor 1 ysiguiendo el orden indicado por las echas, obteniendo la sucesionordenada siguiente:1, 2, 12, 3, 13, 4, 32, 23, 14, 5, . . .A cada n umero racional corresponde un n umero de orden, y recproca-mente; es decir: el conjunto de todos los n umeros racionales es numerable. Ya la misma conclusion llegamos si incluimos tambien los n umeros negativos.FundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 11Todo se reduce a efectuar la enumeracion como indica el siguiente esquema:. . .

oo

//

. . .. . .

OOooOO . . .. . . // // // OO . . .. . . . . .Este hecho, que no podamos sospechar, y todos nuestros fracasos ante-riores en la busca de un conjunto que no sea coordinable con el natural niconelcontinuo,hacensurgirennosotrosunaduda:existenconjuntosden umeros reales que no sean numerables ni tengan la potencia del continuo?La duda es completamente fundada; mas a un: es un problema, y proble-ma capital; y, por a nadidura, problema todava no resuelto. Es una de lascuestionesfundamentalesse naladasporHilbertalosinvestigadores,ensufamosa conferencia de Pars.Potenciayn umeroHemosadvertidoquelapotenciavieneaserparalosconjuntosinni-tos como el n umero para los nitos. Con las potencias pueden denirse lasmismasoperacionesfundamentalesqueconlosn umeros(adicionymulti-plicacion), de este modo: suma de dos potenciasm + n es la potencia delconjunto obtenido agregando los objetos de un conjunto de potencia m y otrode potencia n. Producto mn es la potencia del conjunto obtenido apareandocada objeto del primero con cada objeto del segundo.He aqu, pues, las mismas deniciones que sirvieron para la suma y pro-ducto de dos n umeros. Pero este paralelismo entre n umeros y potencias noes completo. La potencia toma del n umero solamente su caracter cardinal,mas no el ordinal. Precisaremos esta diferencia.Loselementosdeunconjuntonitopuedenordenarsemediantecual-quier convenio. Si, por ejemplo, se trata de cuatro objetos, indicaremos estaFundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 12ordenacion as:a b c ddonde el signo tiene el signicado: anterior a. Sea, analogamente, l k p m otro conjunto de igual n umero de elementos, tambien ordenados. Sepuede, evidentemente, coordinarlo con el anterior de modo que se conserveel orden de ambos, as:a b c dl k p mEs decir, el n umero natural, aunque ha sido denido como n umero car-dinal (con abstraccion del orden), sirve tambien de n umero ordinal; y as su-cedeenlavidapracticaqueel mismosignousamospararepresentarunconjuntodeveinteobjetos,queparadesignarelvigesimoobjetoentreva-rios ordenados.ConjuntosordenadosQue sucede si los conjuntos son innitos? En primer lugar, no siempre esposible la ordenacion de sus elementos. Fijemonos solamente en los conjuntosordenados, es decir, en aquellos para los cuales es posible jar un conveniotal, que entre dos elementos cualesquiera establezca un orden de prelacion;y para que esta no sea contradictoria, cumpla la condicion siguiente: Si esh b, yb q, esh q.As, por ejemplo, el conjunto de los n umeros racionales es ordenado, y elmodo mas sencillo de ordenarlos es ponerlos de menor a mayor. Pondremos,verbigracia, 2/5 3/4 por ser 2/5< 3/4. Por otra parte sabemos que esteconjunto es numerable, es decir, se puede coordinar de muchos modos conel conjunto 1, 2, 3, 4, . . . Y ahora nos preguntamos: sera posible hacer estacoordinacion de modo que se conserve el orden de ambos conjuntos; es decir,de tal suerte que, en la sucesion numerada de fracciones, cada una sea menorque las siguientes?Evidentemente,no;puesentredosn umerosnaturalesconsecutivos,nohayotrosn umerosnaturales;mientrasqueentrelosdosracionalescorres-pondientes existen innitos otros racionales, los cuales, por tanto, careceranFundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 13dehomologoenlaserienatural. Nobasta, pues, quedosconjuntosestenordenados y tengan la misma potencia, para que puedan coordinarse orde-nadamente; es precisa alguna condicion mas.ConjuntosbienordenadosObservemos que esta imposibilidad estriba en lo siguiente: en el conjuntodelosn umerosracionales, aunqueordenado, cadaelementonotieneotrosucesivo;sepuedehablarden umeromenorqueotro,peronoden umerosconsecutivos. Pues bien: un conjunto se dice bien ordenado cuando a cadaelemento sigue otro; y dos conjuntos bien ordenados, entre los cuales existeuna correspondencia biunvoca, que conserva el orden, se llaman semejantes.Pondremosunejemplosencillo;yenvezdeoperarsoloconlosn ume-ros,utilizaremossurepresentaciongeometricaparalograrclaridadmayor.Enunarecta marquemos los puntos a1, b1, c1, d1, . . . de abscisas 0, 1/2,3/4, 5/8, . . . ; es decir, bsecamos el segmento unidada1A1por el puntob1;lasegundamitadlabisecamosporel puntoc1, etc. Apliquemosestemis-moprocesoal segmentoa1b1, yobtenemosen el lasucesionindenidadepuntosa1, a2, a3, a4, . . . ; hacemos lo mismo en elb1c1, y resulta la sucesionb1, b2, b3, . . . ; en el segmento c1d1 nace la sucesion c1, c2, c3, . . . , etc., etc. Heaqu, pues, un conjunto innito bien ordenado, compuesto de una innidadnumerable de conjuntos numerables.N umerostransnitosPuestoqueel conceptoden umeronatural noshaservidopararepre-sentartodoslosconjuntosnitosquesoncoordinables, ydistinguirlosdelosnocoordinables,logicoparecegeneralizaresteconceptoden umero,demodo que sirva para representar todos los conjuntos bien ordenados que sonsemejantes, y distinguirlos de los no semejantes.Paramayor sencillez, nos jaremos enel ejemploanterior. Comence-mosnumerandosuselementos,paralocualnosbastan,porlopronto,losn umeros naturales; los puntos a1, a2, a3, . . . ocupan los lugares 1o, 2o, 3o, . . .Masahorasenospresentaunadicultadinesperada: mientrasnoexisteFundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 14ning unn umeronatural queseamayor quecualquier otro, aqu tenemosmuchos elementos por ejemplo: elb1 que son posteriores a todos los in-nitos elementosa1, a2, a3, . . . an. . . Aparece, pues, bien clara la necesidadde introducir nuevos entes abstractos, nuevos n umeros, que nos sirvan pararepresentar estos nuevos elementos.Peroantesdeconsiderarel b1, apareceyaladicultad. Enefecto, eln umero natural n nos sirve para representar el conjunto de losn primeroselementos. Mas con que n umero podemos representar el conjunto de todoslospuntos a1, a2, a3. . . , an, . . . ?Yanosetratadel innitopotencial, delconjunto nito que va creciendo indenidamente, sino de la serie total quees innita; es decir, se trata del innito actual numerable; para representarlointroducimos el smbolo.Salvada as la primera dicultad, los conjuntosa1a2a3. . . an. . . b1a1a2a3. . . an. . . b1b2a1a2a3. . . an. . . b1b2b3. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .se representan por +1, +2, . . . respectivamente. Mas de nuevo surge laduda: que n umero asignaremos al conjunto de todos los puntos a1, a2, a3, . . .an. . . mas todos losb1, b2, b3, . . . bn, . . . ? Porque el n umero +n, por muygrande que tomemos n, designa el conjunto de todas las a con las n primerasb, mas no todas lasb.Operacionesconn umerostransnitosPero antes de avanzar mas, hagamos una digresion : como podran de-nirse con los n umeros trasnitos las mismas operaciones fundamentales delosn umerosnitos?Bastauncambiodepalabrasyunapeque narestric-cion. Llamamos suma + de dos n umeros trasnitos y , al n umero quecorrespondealconjuntoobtenidoagregandoacontinuaciondelosobjetosde un conjuntoM, cuyo n umero sea, los de un conjuntoN, cuyo n umerosea, conservando el orden prejado para los elementos de cada conjunto.Aplquese esta denicion, y se vera que no solo es + 1 distinto de 1 + ,FundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 15sino que es 1 + = , y en general es + = +. La adicion de n umerostrasnitos no es conmutativa.Compongamosahoralosconjuntos MyN; esdecir, apareemoscadaelementom deMcon cada elementon deN, y establezcamos el siguienteordendeprelacion:decimosque(m, n)esanteriora(m

, n

)siesn n

;y en el cason =n

, cuando seam m

. El n umero trasnito del conjuntoas compuesto, se llama producto de por; y en general esdistinto de. Aplique el lector la denicion, y vera que, lejos de ser 2 igual a 2es 2 = .Sucesionesden umerostransnitosYa es facil asignar n umero a los conjuntos que van obteniendose en nues-tro ejemplo. Al formado por todas las a y las b, le corresponde + = 2;a los obtenidos agregando un objetoc1, o bienc1, c2, . . . , les correspondenlos n umeros 2 + 1, 2 + 2, , 2 + 3al formado por todas las a, todas las b y todas las c, le asignamos el n umero 3, etc. As llegamosalosn umeros 4, 5, . . . , n; y, nalmente,recordando la denicion de producto antes dada, el n umero que correspondeal conjunto total es o sea2.Peroel procesoaplicadoal segmentoa1A1paraconstruir el anteriorconjunto, lo podemos repetir para un segundo segmentoA1B1, y para otroB1C1,...ysielegimoslospuntosB1, C1, D1, . . . comoantes,demodoqueconverjan hacia un puntoX, podemos repetir el proceso en otro segmentoXY , yluegoenotros, yestarepeticionnotienen. Yvamosobteniendoas n umeros trasnitos cadavezmayores; al 2siguenlos 2+ 1, 2+2, . . . , 2+, . . . , 2+2 , 2+3 , . . . , 2+2= 2 2; y luego vendran2 3 y 2 4, ... y 2 = 3; y repetido incesantemente el proceso, se llegaa4, 5, . . . , ; y despues vendraPodemosaumentarcuantoqueramosel n umerodeexponentes, y, sinem-FundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 16bargo, nobasta; siempreexistenelementosposteriores, esdecir, n umerostrasnitos mayores. El smbolo es ya impotente para designarlos, y enton-ces se introduce un nuevo smbolo. As como era por denicion = lmn, es ahora= lmn=...(n potencias)yllegaunmomentoenqueestosnuevossmbolos,combinadosconlaypotenciadosconexponentesaltsimos, nosonsucientes; yseintroducennuevosynuevossmbolos,nuevasynuevasunidadestrasnitasdeespeciesuperior.CalculoconlasalefdeCantorCantorhadesignadolaspotenciasdelosconjuntosrepresentadosporlos n umeros trasnitos, por las letras 1, 2, 3, . . . ; pero el calculo de estossmbolos alef ha provocado algunas impugnaciones, en las que no podemosentrar. Citaremos solamente algunos resultados que han sido rigurosamentedemostrados:Sia < b es a +b = by a b = b.0 0 = 20= 30= =potencia del continuo = cy como 0es la potencia de los conjuntos numerables, o primera potencia,tenemos aqu ligadas algortmicamente las dos potencias fundamentales deque antes nos hemos ocupado con todo detalle. En cambio esc2= c3= = cn= = c0= cigualdad cuyo signicado geometrico hemos de estudiar en la proxima con-ferencia.ElproblemadelcontinuoNos hemos jado ha poco en el hecho de que los n umeros racionales, ensu orden natural de menor a mayor, no forman un conjunto bien ordenado;pero alterando convenientemente este orden hemos conseguido esto.FundamentosdelaAritmeticaydel Analisis. J.ReyPastor 17Tampocoestabienordenadoel conjuntodetodoslosn umerosreales,dados en su orden creciente de magnitud, y Cantor se pregunta: podra es-tablecerse entre los n umeros reales un orden de prelacion tal que resulte unconjunto bien ordenado? Para los n umeros racionales, esto era sumamentefacil, porsernumerablesuconjunto; peroahorasetratadel continuo, esdecir, deunconjuntononumerable, seg unanteshemosdemostrado, yladicultad sube de punto.Problema gravsimo es este de Cantor, cuya solucion llevara probable-mente consigo la del otro problema que planteabamos al principio, a saber:el de la existencia de potencias intermedias entre el continuo y los conjuntosnumerables.DespuesdelaconferenciadadaenelCongresodeHeidelbergporel ilustrematematicoKonig, nohacemuchofallecido, llegoacreerseresuelto el problema de Cantor en sentido negativo. En efecto, utilizando elteorema de Bernstein, expresado por la igualdadXV= X 2Vse deduce que el continuo no es un conjunto bien ordenado. Pero, desgracia-damente, la demostracion del bello teorema de Bernstein tiene una lagunatodava no llenada, y la consecuencia de Konig careca, por tanto, de basesolida. Sin embargo, una consecuencia muy interesante resulta de su trabajo:si el continuo no es un conjunto bien ordenado, el teorema de Bernstein escierto. Son, pues, equivalentes ambas cuestiones, y el problema del continuoqueda as reducido a la demostracion del teorema de Bernstein.En cambio, si la sospecha de Cantor es cierta, el continuo, es decir, losn umerosreales,sepodrandisponerdemodoqueresulteunconjuntobienordenado, y la potencia del continuo sera inmediatamente superior a la delos conjuntos numerables. El desarrollo de la teora esta, pues, pendiente deesta pregunta: esc = 1?La sospecha de Cantor ha obtenido una demostracion muy ingeniosa deZermelo, la cual ha sufrido varias impugnaciones de Borel, Baire, Schonies,Poincare, Lebesgue,... Ambos problemas siguen, pues, enpie, desaandoconlasencillezaparentedesusterminoslamismadelosproblemasdela esnge el ingenio de los matematicos, a dura prueba sujeto en esta suatrevida lucha con el innito.