SUMARIO

editorial Cuarenta aos de Piedra y Siglo 7

especial Presencia y persistencia del grupo Piedra y Siglo Francisco Morales Santos 9

Poemas de Jos Mara Cullar 22

Poemas de Jonathn Alvarado Saracay 43

Poemas de Jorge Campos 46

Poemas de Uriel Valencia 52

Poemas de Ovidio Villafuerte 59

Poemas de Ricardo Castrorrivas 73

Poemas de Luis Melgar Brizuela 91

Poemas de Rafael Mendoza 102

Poemas de Julio Iraheta Santos 118

Valoraciones sobre Piedra y Siglo 139

Sobre Crnicas de infancia, de Jos Mara Cullar 142Roberto Armijo

fotografa Escuela de otros mundosFotografas de Kim Manresa 147

ensayo Historia de Repertorio Americano 177Mario Oliva Medina

Maritegui y la revista Amauta en 1927: 196redes, accidentes y deslindes

Ricardo Melgar Boo

Pinturas de Jos Sabogal

Dos textos de Jos Carlos Maritegui 229

Papeles para una Historia de las Literaturas Centroamericanas: La Biblioteca Csar Braas y otras colecciones 232

Jos Edgardo Cal Montoya

discurso Palabras de Elena Poniatowska en la entregadel Premio Internacional de Novela Rmulo Gallegos 243

Elena Poniatowska

comentario El poeta y su destino 249Claudia Hrodier

poesa Tango 257Ada Prraga

Seleccin potica de Raquel Huerta-Nava 269

Poesa de Roger Guzmn 276

tinta fresca Dos antologas y una novela sobre trenes 281

El grupo literario Piedra y Siglo lleg a sus cuarenta aos en 2007. Hace falta todava una valo-racin crtica sobre lo que estos poetas han aportado a la literatura salvadorea. Cuando ciertacrtica hace un balance de lo ms importante de la poesa de la ltima mitad del siglo XX ha co-metido el error imperdonable de obviar a Piedra y Siglo. No puede entenderse completamentela labor potica de las generaciones de las dcadas de los setenta y ochenta sin tomar en cuentaa Piedra y Siglo.

Con la dedicacin que les ha caracterizado, los miembros de este grupo (Jos Mara Cullar,Jonathn Saracay, Ovidio Villafuerte y Uriel Valencia, ya fallecidos; Ricardo Castrorrivas, JorgeCampos, Luis Melgar Brizuela, Julio Iraheta Santos y Rafael Mendoza) han legado un importanteaporte grupal e individual. Uno de los aportes del grupo que nos ocupa es el haber mantenidoviva la tradicin innovadora de la poesa nacional, enriquecindola con aportes sumamente ori-ginales. Bebiendo de las fuentes daltonianas, Piedra y Siglo asumi como suya la tradicin deruptura que tambin comprende a Escobar Velado y a Geoffroy Rivas.

Los logros individuales de Piedra y Siglo son bastante desiguales. Ya de alguna forma estose prevea en el manifiesto grupal publicado en 1968 e incluido en esta revista: No ignoramosque varios o alguno de nuestro grupo, por una u otra circunstancia, se quedar a la zaga en elviaje a la meta que nos hemos sealado. Algunos de los miembros del grupo fueron suma-mente parcos para publicar su obra, lo cual dificulta una valoracin completa de la misma.

La muerte trunc la trayectoria ms que prometedora de un Jos Mara Cullar en los aos80. En 2003 sufrimos la partida del poeta Uriel Valencia, quien viva en Mxico desde hacevarias dcadas. Este ao perdimos a Ovidio Villafuerte, autor de Ritual de piedra, quien dejmucho trabajo indito.

Algunos de los integrantes de Piedra y Siglo han cultivado otros gneros adems de la po-esa. Ricardo Castrorrivas se revel como un narrador singular a partir de Teora para alcanzarla inmortalidad. El poeta Luis Melgar Brizuela, con un talante ms acadmico, ha producido una

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importante obra crtica que suele conocerse ms que su no menos importante obra potica.Ello, sin mencionar los aportes que han significado, para los ms jvenes, sus libros de textosobre literatura salvadorea y latinoamericana. En reiteradas ocasiones han hecho periodismoJulio Iraheta Santos integrante del grupo Segunda Quincena, en los aos noventa y RafaelMendoza quien mantuvo en los aos ochenta una columna titulada Miramundo, en DiarioEl Mundo y fue integrante de los Cinconegritos, grupo que mantena una pgina de igual nom-bre en el mismo peridico. Luis Melgar Brizuela, por otra parte, perteneci al grupo queanim la revista cultural Amate, en las postrimeras de la guerra.

Como ocurre en muchos casos, la obra de los integrantes de Piedra y Siglo todava est porvalorarse. Ha pretendido negarse la obra de estos poetas con valoraciones ideologizadas que lonico que evidencian es desconocimiento. Es de elemental justicia reconocer que ha sido lafeliz iniciativa de la Fundacin Metfora cuyo aporte ha sido decisivo para la presente edi-cin, al dedicar su encuentro internacional de poesa del ao 2007 a Piedra y Siglo, que la obrade estos poetas se est releyendo. Y lo ms importante: que est ganando nuevos lectores.

Esta edicin de Cultura es un sentido homenaje a este grupo y una invitacin a la lecturade su obra. Rafael, Ricardo, Julio, Chema, Ovidio, Uriel, Jonathn, Uriel, Luis: Gracias por Piedray Siglo.

* * *

Por otra parte, nuestra revista se engrandece con la contribucin de dos destacados fot-grafos: el espaol Kim Manresa y el salvadoreo Francisco Campos. Del fotoperiodista Fran-cisco Campos, quien ha colaborado anteriormente en nuestra revista, presentamos la serieMujeres. Las credenciales de este fotgrafo son reconocidas en el mundo periodstico. Y sinmayores pretensiones, su obra fotogrfica ha alcanzado una gran calidad artstica.

De Kim Manresa traemos una muestra de su exposicin Escuelas de otros mundos, tra-bajo que rene las hermosas imgenes captadas por el artista junto a la palabra de grandes au-tores universales. Esta primicia para El Salvador fue el producto de la generosidad de C & Duke,productora cultural radicada en Barcelona, y en particular, a las amables gestiones de su presi-dente y curador de la exposicin, el poeta salvadoreo Carlos Ernesto Garca. Por cierto, Es-cuelas de otros mundos se public recientemente en forma de libro en Espaa. Lo que traemos,pues, es una parte de esa exposicin para los lectores y lectoras de El Salvador y Centroamrica.Kim Manresa no es un husped nuevo en las pginas de Cultura. En el nmero 90 publicamosalgunos de sus trabajos, los cuales se expusieron en el Centro Cultural de Espaa en El Salvador.

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Publicada en tres tomos, cada uno titulado segn el epgrafe del ttulo: Pcaras, Msticas yRebeldes, esta antologa recoge la obra de poetas poco o nada conocidas. En todo caso, el co-nocimiento que se tiene sobre lo que escriben las mujeres resulta insuficiente. El trabajo de lasmujeres no es reconocido, en ningn pas del mundo, del modo en que debiera. Esta obra con-tribuye a hacerlo visible y a darlo a conocer. Cada una de las antologadoras se hizo cargo de untomo. Presentan la obra de escritoras que vivieron y viven de Argentina a Venezuela (alfabti-camente hablando), sin excluir a Espaa, del siglo XIII al XIX. Aparecen representados todoslos pases hispanohablantes con una abundante produccin y con nombres fundamentales delas letras del continente. El tomo dedicado a las pcaras nos ofrece una visin fresca y desfa-chatada del erotismo desde los ojos de las mujeres. El de las msticas explora la compleja re-lacin con lo sagrado, no importando ortodoxias. El de las rebeldes se concentra en las obrasque rompen los paradigmas del patriarcado y del buen tono. Una labor extraordinaria la des-arrollada por estas mujeres que se dedicaron a recopilar poemas de autoras repartidas en doscontinentes. Esta es una obra indispensable en la biblioteca de todo acadmico que se respete,en especial de los estudiosos de la literatura, y en la de todo amante de la buena poesa. Aportaadems un cmulo de valiosa informacin bibliogrfica y hemerogrfica, amn de tres estudioscrticos de densa enjundia y buen estilo. Pocas obras hay tan indispensables como sta, sobretodo hoy, cuando cada vez menos se aprecia la poesa y cuando la necesitamos cada vez ms.

Carmen Gonzlez Huguet

Dos antologas y una novela sobre trenes

TrilogapoticadelasmujeresenHispanoamrica(pcaras,msticasyrebeldes) de Aurora Marya Saa-vedra, Maricruz Patio y Leticia LunaEdiciones La Cuadrilla de la Langosta, ISBN 98-7887-11-7 Ciudad de Mxico, 2004

Mujer,desnudezypalabras. AntologadeDesmitificadorasGuatemaltecasde Luz Mndez de la VegaArtemis Edinter, ISBN 84-89766-91-6Guatemala, 2002

Una obra esencial para conocer la poesa escrita por mujeres enGuatemala. No es sta una antologa al uso. Viene con unsesgo particular y manifiesto: rescatar la obra de mujeres queno se resignan a los cnones tradicionales y que rompen conel paradigma de lo que se espera, de lo que es de buentono, en la literatura hecha por mujeres. Est dividida en trespartes: en la primera aparecen las mayores, nombres verdade-ramente mticos en la literatura guatemalteca, como AladeFoppa, desaparecida durante la dictadura del general RomeoLucas Garca en 1980 e Isabel de los ngeles Ruano, premioMiguel ngel Asturias, la ms alta distincin que en las letrasotorga el gobierno de Guatemala. Viene luego la segundaparte, formada por las mujeres que han publicado entre 1984y 2002, entre las que destaca Dina Posada, nacida en El Salva-dor, pero nacionalizada guatemalteca, seguida de una terceraparte, Las ltimas, como las llama la autora, en la que figurala ms reciente generacin de mujeres escritoras de aquel pas.Luz Mndez de la Vega es una autora de larga trayectoria en laacademia guatemalteca. Crtica de arte, periodista, doctora enLetras por la Universidad de San Carlos de Guatemala y por laUniversidad Central de Madrid, profesora universitaria, ha pu-blicado: Eva sin Dios, Trptico: Tiempo de amor, Tiempo dellanto y Desamor, De las palabras y la sombra, Las voces silen-ciadas, Antologa potica, Helnicas y Epigramas a Narciso,Toque de queda, Tres rostros de mujer en soledad, adems devarias antologas poticas, estudios y ensayos. Esta es una obraque contribuye a visibilizar el trabajo de las mujeres y queaporta informacin valiosa sobre autoras que, por desgracia,son poco conocidas.

C. G. H.

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Eltrenpasaprimerode Elena Poniatowska Alfaguara, Mxico, 2005. 497 pp.

La mexicana Elena Poniatowska es la rapsoda de las luchas so-ciales mexicanas. Sean estas las luchas estudiantiles del movi-miento de 1968, o las reivindicaciones femeninas a travs de lavida de Jesusa Rodrguez, Tina Modotti o Frida Kahlo, la obraliteraria de esta autora que mereci el Premio Rmulo Gallegos2006 pone al servicio de las mejores causas las virtudes de suprosa y su sagacidad de periodista. El tren pasa primero es la bio-grafa del movimiento ferrocarrilero mexicano a travs de lavida del dirigente Trinidad Pineda Chias, inspirado en buenaparte en Vallejo, el lder de los trabajadores de los ferrocarrilesmexicanos.

La huelga general de trenes y su pica no le impiden a la au-tora darnos los claroscuros de su personaje. Un dirigente sindi-cal de una disciplina espartana, de una integridad frente a lasseducciones y las represalias de los poderosos, pero tambinmachista como el que ms. Ni santo ni monstruo: simplementeun ser humano con las contradicciones de todo ser humano.

El libro de Poniatowska es tambin un largo canto a algoque es ms que un simple medio de transporte: el tren es un ar-tefacto potico que ha exacerbado la inspiracin literaria desdesu primer viaje. Sin ir ms lejos, Trenes, la novela vanguardista deMiguel ngel Espino es un ejemplo de la embriaguez poticaque provoca el vaivn ferroviario. En El tren pasa primero pasantrenes repletos de magia, poder y erotismo, como metforas dela existencia humana.

Luis Alvarenga

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COLABORAN EN ESTA EDICINFrancisco Campos, fotoperiodista salvadoreo.

Francisco Morales Santos, poeta guatemalteco.

Jos Mara Cullar, Jonathan Alvarado, Jorge Campos, Uriel Valencia, Ovidio Villafuerte, Ricardo Castro-rrivas, Luis Melgar Brizuela, Rafael Mendoza y Julio Iraheta Santos, poetas salvadoreos, todos miem-bros del grupo Piedra y siglo.

Roberto Armijo (1937-1997), poeta y ensayista salvadoreo.

Carlos Ernesto Garca, comisario de la exposicin Escuelas de otros mundos.

Kim Manresa, fotgrafo espaol.

Mario Oliva Medina, historiador costarricense.

Ricardo Melgar Bao, historiador peruano.

Jos Edgardo Cal Montoya, historiador guatemalteco.

Elena Poniatowska, novelista y periodista mexicana.

Raquel Huerta-Nava, poeta mexicana.

Ada Prraga, poeta salvadorea.

Rger Guzmn, poeta salvadoreo.

Claudia Hrodier, escritora salvadorea.

Carmen Gonzlez Huguet, escritora salvadorea.

Luis Alvarenga, escritor salvadoreo.

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