Beriain. Integracion sociedades Modernas. Cap 3

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Josexto Beriain. "La integracion en las sociedades modernas" 1996. Capítulo 3: La unidad de las diferencias, el problema de la integración en las sociedades modernas.

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Si bien hasta ahom he iuterPretado ]as clivelsas formas de cambio, de tEnsformaci6n, de allcnci6n que sxPerimentarl las sociedades modemas subsumi6ndolas bajo el concepto dc diferenciaci6n, en sus divercas modalidades - {ivisi6n del trabajo @urkneim), incremento de la capacidad adaptativa (Parsons),-racionalizaci6n sociocultrml Weber), dislanciamienlo entre pasado y tuturc (KossellecD y complejidad sist6mica (Lohmann)-, el siguiente paso que voy a dar sisnifica la Posrulr, ion de una dralidad de Io ,ocial que.e basa err la cop"rttnrin, en la ro,rxio't de la socied,d tuncionrlrnrnre diter.rr ciada, una concepci6n holista de la realidad social. Hasta ahom se han enlrentado diagn6sticos sociol6gicos que enfatizaban-una posici5n o la otra, asi, el estmcltllal-luncionalismo (Parsons) ha subrayado la idea de una sociedad cliferencjacla en subsistemas sociales, por otra parte, el ma.dsmo ha postulado la (totalidad concreta' de la sociedad justa y bBena doDde se produciria rma desdilerenciaci6n soci,lI generallzada, superadora de las actuales clesigualdades. Frente a ambas posi. ciones mantengo que las socieclades modernas avanzadas sor en ias que la Producci6n social del "idelidsle;-diferenckdas" -ientido no e,ieree?e-la xclusi6n de uno de ambos momen1os, sino de un "tertium non dalur" que rcsulta de la conexi6n de uDidad y diferencias. Las cosmovisiones odeffales han submyado mes la idea de una anldad del mundo, subestimando la diferenciaci6n, mientas las cosmovisiones occidentales (como ha pue$o de manifiesto Ma"\ Weber) se han basado en la fag mentacl'n, en ta difernciaci6n, descuirlando la uridad de 1() social. La sociedad o 1o social-hjst6dco no es algo estable, sino que se basa en la autoaltemci6n, en el deprsserlzfll de lo insti tuido por ]o instituyenle inscrito en la acci5r social,t qlle en nuestro caso, la socicdad modema tardia, signilica .expansiirn de opciones sin lin", por lo menos como si8nificaci6n cullural generalizada, pero, incluso en el cambio, nuDa sociedad no se puede crear, ni :rear sin crear a Ia vez,:l ideal"'1(, aspecios de cornporta.lo,D. RuBclemeyer, ?orrcr , th. DirisiDn of labor, Star loli, I936, 141- I69. "l 17. NI. Heidesgcr, S.n? !rl] Z?r, nrlingr, 1936, l26llq L. Tiling, sl,.oril, dd ,1lrturlnty, Cambnd8c, IIA, lrr2, l3+171,

ci6n mundial producida en la guena del Golfo contra Sadam Hussein, todas elas conngumn una rcalidad soclal de desdifbren-

miento cle superticie, de lo que Enin Gofman d romina a "la mSs.am social necc'-ia:.ia" o de lo que R.K. Mertr .1 ha entrevisto en las consecue;cias de la "profecia autocur,plida,. 6) El individuo se rclaciona tambin con el (todo> cuando considem no ya Ia .doxa,, sino 1a "verdacl,, de tipos itleales,l?.s vifiudes del buen ciudadano, del buen trabajador del buen-padre, etc., con independencia de la media social. c) ED el Fototipo social del .habajador,, mmo vimos mfs ariba en ei analsis de la racionalizaci6n occidental, m6s alld de la pasi6n mcionalizada, por tanto, mtu alld del intercs de maximizaci6n mcional egois1a del prcpio beneficio, consicierado como virlud pr.'rblica, aparece el arq etipo Aeb det hombrc frente ai "autoprcsenaci6,?" entomo (Datunleza, otros ext?iios), aparece la sigtificaci6n imaginaria de dominio de una .realidad absoluta" clonde la t6cnica no es mds que lr insirumento de la rmor,fizaci6n del mundo por la figura del trabajadoo,,rs una pi.sentificaci6n hierol6nicare de un imaginario social, un atefacto .a la mano, (zr ,4and)20 que el hombre sit'ra enbe 6I y una (realidad absoluta". Este modelo prometeico (el Ulises de Adorno y Horl:heimel e] Fausto goethiano) c.ftoca con el moclelo de Hcr:nes, reprcsentado arquetlpicamente po! la figura Dodema de brrsqueda del sentido de Ascherlbach eD la nrlrerte en Veneci.z de Th. Mann. Estc modelo se maniEesta como (el otro, de 1.r autopreseruaci6n, couo "la sombra', como el riesgo, como la contingencia, como la mrerte, Como vemos, "el 1odo" cofiparece de varias fornas en la psique personal. Esta breve m:tpificaci6n intrcductoria, induclivamente realizada, de la copresencia clel todo (.on el Estado-naci6n. No obstante, el p.oceso de dilereDciaci6n La afectado de tal rnanera a determinadas comunidacles snnb6iicas, por ejempto, la clase obrera (gnrpo mds conciencia diferencial), que ha terminado por romper la iclentidad del grupo a trav6s de la diferencia73. T, PaEols,

ne s/ier orMol",t

Socierics, EnEleoood clitl,s, NJ, 1971, t2,

128

t29

ci6n interna, asi lo ponen de manifiesto las teorlas del (fin de la clase obrcm, (cL offe, U. Beck, A. Gorz).74 La diferenciaci6n social, co o ya vimos ariba, es uD fen6meno social pamd6jico,75 ya que tiene elementos positivos y elemcntos negativos. En el lado positivo, la creciente dilerenciaci6u Irncional opera como ]a plesuposici6n para el incremento de rendilnienlos y el incremento de la eficiencia (adaptattue upsadirg), y de fol1na mds general como la mcionnlizaci6n intqma de los subsistemas especializados o de las esferas de acci6n. La diterenciaci6n insiit cionaf6 sirve como baremo que garantiza la libeflad, la individuaci6n, la autonomfa.TT En el lado neeativo la diferenciaci6n social se manifiesta como una disarnonia (especializaci6n, 6:asmentaci6n, anomia) y p6rdida de la posibilidad de inte8raci6n del todo sgcial- La "individuaci6n' se manifiesta aqul como aislamiento, como una p6rdida de los vlnculos con ]a comunida.l, como una sobrecarga de las capacidades .le integnci6n de la persona a tmv6s de pretensiones sociales dispamladas (conflicto de roles). Lo social hperdiferenci.rlo se .indepcndiza, de los actores-sujetos socinles, eD las diferentes racionalidades ar{orreferenciales de los subsistemas con sus sem6nlicas, sus c6cligos y sus nredios de comunicacj6n especializados. De aqLri slrrge ln "indilercncia, sistmica que se concreta en el nivel de las relaciones en una .c?ril hlattention,, en los t6rrninos de Goffrnan,73 en un plegamiento meramenle tuncional al rol plagado de racionali.lad v vacia.lo de sentido.

1.3. Entre las relaciofies sociales inilirectas

!

las (comufiidades

r-ianldinl, t 986j A c.\a, )i.td orNha! d t tnr.jl, P^\ls, )98a, 7s. Para una Lruela dkcusj6n smiol6ai.. del con.epro de ,p.'ndojx, vdase R.Nl. Sai$btry ,.drudo6, Cambridgc, 1988i y R. Rnnos, quia aproriBacion a hs pahdojns de ln acci6n so.ial, e. E. Lnmo .le Espinos? y J.E. Rodn&ez rbai,ez (eds.),Ptublenlas de teodo sacial contet Aanlnca,

'14. Cl. Olie,

Ia la.inan

ael izrnrb, Mrlhi.t, 1992r U, Beck,

ltiJil,ssz/L.rrr,

duos en una situaci6n de copresencia se perciben y.se comunican entre st. Esto inclu) Ia percepci6n de la mutua percepci6n. El llmite tangible de los sistemas de interacci6n se revela por el hecho de que podemos hablar s61o con y 1to soble aquellos que est6rl p.esentes, y conseclicnremelrle, s61o sor,,a pero no cor aquellos que esl6n arlsentes.ao Estas intcmcciones face to lace constituyen los elementos dc flni.la.ies sociales mayores y mrs duradems como siiuaciones de interacciones ripificadas en la vida social de colectivos del mes vafiado cardcrcr. Las Intcrxccione\ IueJen ser rnrimds y personilr,,ada< o disren.il das. srrpemcialc= y nerrualcs (com; muchas trinsx.cione\ en el marco de relaciones especializadas de rc1).3r Las nlteracciones pueden ser fornas relativamente aut6nomas de socialjzaci6n, ante todo en la fonna de tuteracciones enrre extmltos en espacios pnblicos la -en cale, en los edificios pdbticos, cuan do se escriben cartas a alguien desconocido que represenra un rol dentrc .le un.t insrituci6n, tambi6n en los ]o3 origrnados por las expectativas du^li_ zadas en litigio. La organizaci6n de la complejidad de este n].oceso se manifiesta en el entltlazamiento de la coopemci6n y et conflicto por ambos Portadores sociales rccuriendo a ,,acuetdos neocotporatil)os o negociaciones",ro9 en los que se manifiestan di[ercncias sobre cuinto se suben los sal^rios (en el caso de los sindicatos americallos) y en romo a 1as subicias salariales, el tiempo de trabajo, la flexibilizaci6n de plantillas, los seruicios sociJes, los derechos de cogesti6n, 1os beneficios de la emprcsa, la inFodtlcci6n de nuev$ tecnologias (en el caso de los sindicalos erropeos). Las dinlmicas de cstructrmci6n cle las socicdades desarotladas se articulan en lorno a: a) El disenso y el coilticto entre 1os diferentes stGsistemas sociales ciencia, polilica, sanidad, rcligi6n, educaci6n, -economia, tecnologia - q'r" prrgnrn por trn .lcl ci6rcilo. .ullrrra, "pedezo c:rda uno de ctlos se clileL'encia err sus c6diso', ;".,p,'..'". in sus cnterios de decisi6n, en sus preferencias y en sus mcio_ nalidades, uno frente a otro acllian como (cajas negras' b) El calsenso ! la cooper.Lcidn que pr-oceden con anegio a una concepci6n holista de la sociedad, de una identidad colecti''/a raclonalmente constnrida donde coerdsten difercncias m6ltiples'

lo,l. F. axelrcd y R. (eoh.nc, d\chivnrs Coopelntion undd. Arar.hvi Shtc3ics nnd rnsrnrdons,,lfora k iir?r,33, I (1985),226-2s4 (esp.226l 105. lL willle, s}Jr.rrrzori... , ,p .n, 10o 106, M. \{cbd, El ?o/rt, / .l .icr.,'r.o, N adri.l, 1975, 2 3. El subtnvxdo es nrto lO7. Cl. Offe, "Th; CrrrtlenSe of ihe Nerv Soci:l morlem.nrs', Sddl ^asenL-.'[1

t. ci1,

534.

entre diferentes comunidades simb5licas o entre formas de vida que coeisten dentro de sociedades Dlulticulturales, a pesar dJ que los conflictos enire comruidades religiosas, los connictos r;gionales y 6tnicos y los afltagonismos eDtre clases lLeron parcialmente solicionados o al menos "civilizados" a tlzv6s de la "nation borrlding and citizenship",lro a tmv6s de su integmci6n en un orden jurfdico-politico y en una comunidad nacional. En primer ltgar, el connicto reapar:ece como una escisi6n de 1:r idenridad del yo ante \a identilicaci'll con nn pluralismo de identidades colectivas corro la identidad consin-rida en tomo a los odgnes 6lnicos (yoltsrm,roT?), la ideniidad construicla en tdmo a la iglratdad crltural de los hombresl0ll,J. Elster,

I]

F.n las socidades modernas subsisten zonas de tensi6n

109.

(19s5), 817 365,

II.willke,.A.it, I 10. R. Bmdix, e'ral,

Ira

Csrrdrr Sod.rr, Lon&es, 1r39i101.

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'|rsdz, L.ndrcs,

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14,

Bue,os Anes, 197',.

139 138

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(KultLrnation), y la identida.l conslruida en torno a los derechos individuales civiles de igualdad y a los procedimientos de legitimaci6n democEtica de 1a autofid:rd a trav6s d(rl ciudadaDo (Staa$bnryen1.atio11).r I ! Er segu--Jo lugar, el co licto se manifiesta ente el Estado na.i6n y e.,.' - /iacianaliilades, e re una configuraci6n dominante de la co'r,iunidad societal, er: los tenninos de Parsons, que se articula como Estado, disponiendo del uso de ia violencia legitima dePtro de teritorio dado, frente a comunidades societales que no estin organizadas politicamente como Estados-naci6n y que coexisten dento de Estados-naci6n de una forma ambivalente, unas veces, viend.o r*' conocida su ideDtidad sociocultuml Por el Estado-naci6n, otras, en oposici6n a la autoddad polltica estatal potadora, asimismo de una concepci6n cultuml de base vehiculada por h violencia del Estado. En tercer lugar, el contlicto se mani{lesta entre Demos y Ethr?os,rr2 entre el nivel politico en e1 que el pueblo aparece como el potador de ios derechos Politicos de ciudadaniarr3y entrc el nivel prePolitico en el que el pueblo aparece como el podador de la unidad 6tnica, cultural y socioecor6mica. En cuarto lugar, se producen couflictos entre comunidades snnb6licas por motivos reiigiosos --cat6licos y protestantes en la alta Edad Media, judios y musulmanes hoy en Ismel, cristianos ortodoxos y musl manes en Bosnia-, por y proabortistas, nacionamotivos ideol6gicos -antiabortistasEn qrlinto lugar, el conflicetc. listas xen6fobos e inmigmntes, to entre cirikzaciones ---{]omo entidades crlltumles- rcprsenta una iltima fuse en la evoluci6n del conflicto en el mundo moderno. Gmn parri de los conflictos se desalrollan hoy a lo ]argo de lin?as cultLLrales (r$ econ6micas, ni Pollticas) que separan Una civilizaci6n de otrarr4 la occidental, la conftrciana r.l nar. h iaponesa, Ii islimiL.,, la hindri la eshtoonodoxa. Ic l,Lindmencana y la alricana. En los connicro. ideo)ogico. ia cuesti6n clave ell" len qui lado csrds?, eD los conflictos entre civilizacioDes la cuesti't\ esl. i,qu! eres tnz Las lineas divisot1l.IdeerI

rias ente civilizaciones se slrperponen a las tuontems politicas e ideol6gicas de la guena fria como nlcleos de crisis y derramamiento de sangre, el tel6n de terciopelo de la cuirru:a se superpone aI tel6n de hiero de la ideologia coNo ulra de las mds significantes lincas divisodas en Eutopa,rls con areglo al iss\e ,xtte tion cycle q-te la dinimica de lucha de valores --cullumles, politicos, econ6micos, religiosos, etc.- establece corno relevaates en un momento dado. Como ejemplos del conliicto civilizacional actual aparccen: el sindr.ome del lein country qre se manifiesta n gnrpos o Estados que Pelteneciendo a una civilizaci6n que se enfrenta a travs de Ia guelra a gente de ota civilizaci6n diferente, naturalmente u:ltaD de buscar apo_ yos en otros miembros de su propia civilizaci6n, asi, en la guerra del Golfo, en el Ciucaso o en Bosnia. Algunos paises tieestan divinen un alto grado de homoseneidad cultural -pero pertenece a una civilizaci6D o a didos sobre si su sociedad otla. Turqrria, M6xico y Rusia sol1 lom corrnl,"ie.t que se encuentran eIl csta situaci6n.

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l2,

M.R. Lepsnls, .N.tion urd N:tion.lisnrus i! Deuls.nl.nd,, m lrreldser, h6tilutionen, op]:.\en, 1990, 235 ss, NI.R. Lcpsius, 127 no pre_ vistas y no deseadas de deterrninados ctrrsos de acci6r que ya

comtn

no median, sil,o la acci6r social.

qrl.e

mediatizafl, subvierten la racionalidad de

Podiamos, alardados de J. Elster, inlerpretar estas consecuencias jmprevistas cor;.: aqttella contafinalTad donde comparecen las consecuencias no intencionales que surgen cuando cada indMduo erl un grupo actira sobre una presunci6n acer" ca de sus relaciones con otros que, cuando se generaliza, pro'

duce la contradiccr6n ente la intenci6n y el resultado.r'zs Lo que tiene su orieer eD el plan intcncional de alguien parece si no surgiera de las intenciones de naclie,,.''ze R K. Mer"como ton en el citado arfculo dc 1936, intitulado .Las consecuencias no prcvistas de 1a acci6n", expone aquellas que coDsidem son las fuentes de consecuencias imprevistas de acci6n En primer lugar, en al8unas ocasiones tene'mos suficientes conoci_ mientos de los limites del espectro de posibles conseauencias, e iucluso conocimiento adecuado para precisar las probabilidades estadlsticas (empiricas) de las diferentes consecuencias posibles, pero es imposible predecir con certeza los resultados de cualquier caso paticular,l3o es deci.r, pamd6jicamenle, cuanto mds conocemos, mds sabetnos que fi:agmentos de la rcalidad permanecen ocultos a la luz de nues1rc conocimiento La isnorcnLia, por tirro, Fr tuentc de torr'errten-iJ. rro previstas. En segundo lugar, el eror es un factor de impofiancia cn las inesperadas consecuencias de la conducta. Una falacia muyecial" 12?. Vdase R.L Menon, "Ltu coDscuencnd no prcvistas de la ^ai6n (.n1- )936), q inbiroloEia [email protected] ! otras c,Earos, M^dtid, 1180, 173-186i .si. nismo R.K Menon, iln prcfecla que se aulodode a sI misma", q Teana! 6truc' ,ru s@ia/E, Mxi.o, 1930, 505-520, R. Boudon, E/It.is r.?dr ct a',1ft sacial, Parls, 1977, aMlia crttic.mente los efectos peNersos de deleDrinad6 cursc dc acci6n quc han sido }! lcnltiz:dos por Du.I}leim, Tocqleville, Merton y Rawlsi J. Elst.r, U,6 a,rrg6, Barelona, 1938, 159-203t Insica, saci.,1a4, Barcclona, 1994, 144 s; J S. C'],eman, The rou danatts of Social Ihabry, c^ bndPc, MA, 1990;E.Lamodc Erpir6a,Ii s@ieddd relkrira, M..l.i.l, 1990, 45-58j A.o. Hi6c!ma!n, ,re xlz.ani

es aquella que se encierra con frecuencia eD .La suposici6n excesivamenie simple de que las accioncs que han producido en el pasado el efecto deseado seguidn produciendolo en el futuro. *El actor no se da cuenta de que procedimientos que han tenido 6xilo eL ciertos circufistancias no hay mz6r pam que sigan teni6ndolo baio cualquier condici611.,13t El tercer tipo de fuctor, la (imperiosa inmediatez de iDteres>, hace referencia a casos donde Ia preoctpaci6n b5sica del actor Por las consecuencias inmediatamente previstas, excluye la consideraci6r1 de las posteriores o de otras collsecLlencias del mismo acto. Pot ejeDplo, en 1a economia clasica, el individuo, preocupado por acumular riqueza (personat), gelela .guiado por una mano invisible para favorecer un fin que no cs en absolll to pade de sus intenciones, (Adam Smith) unos inglesos anuales de la sociedad lo m6s elevados posible. MelloD en su seminal afiiculo de 1936 estd ya prefigurando 1os aD6lisis que treinta aios mis tarde realizara Mancur Olson en su nl-6gica de ta acci6n colectiva". "La acci6n eD la que intenienc el elemento de Ia inmediatez de inters puede ser racional en cuanto a los valores basicos de ese ioter6s, perc irracional en lo relativo a la organizaci6n vital del individuo. Racional, en eI sentido de ser una acci6n de la que cabe esper?r que cond(zca a la obtenci6n de una meta especlfica; irracional, en el sentido de que puede impedi la bnsqueda o consecuci6n de otros va' lorcs que, de momento, no son principales pero que, sin em_ barso, toman parte integral de la escala de valores clel indivi' dto. Pot ello, tlebido a que u a acci1n .letemtinarla no se tlevrL a cabo en un rocio psicolt1ico o sociat, sus y''ectos se tamifica' rdn pol olras eslbras de ralor e interis."13z El cuarto factor es aque! que se manifiesta en el car-6cter parad6jico de valores bdsicos, cuando la