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TESIS DOCTORAL ENRIQUILLO, EDICIÓN ANOTADA Y ESTUDIO CRÍTICO NANCY JOA LICENCIADA EN F ILOLOGÍA HISPÁNICA DEPARTAMENTO DE LITERATURA ES PAÑOLA Y T EORÍA D E LA L ITERATURA F ACULTAD DE F ILOLOGÍA UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIÓN A DISTANCIA MADRID, 2009

Enriqu Illo

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  • TESIS DOCTORAL

    ENRIQUILLO,

    EDICIN ANOTADA Y ESTUDIO CRTICO

    NANCY JOA

    LICENCIADA EN FILOLOGA HISPNICA

    DEPARTAMENTO DE LITERATURA ESPAOLA Y TEORA DE LA LITERATURA

    FACULTAD DE FILOLOGA

    UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIN A DISTANCIA

    MADRID, 2009

  • DEPARTAMENTO DE LITERATURA ESPAOLA Y TEORA DE LA

    LITERATURA

    FACULTAD DE FILOLOGA

    UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIN A DISTANCIA

    ENRIQUILLO,

    EDICIN ANOTADA Y ESTUDIO CRTICO

    NANCY JOA

    LICENCIADA EN FILOLOGA HISPNICA

    DIRECTORA DE LA TESIS

    DRA. MARGARITA ALMELA BOIX

    PROF. TITULAR DEL DEPARTAMENTO DE LITERATURA ESPAOLA

    FACULTAD DE FILOLOGA DE LA UNED

  • AGRADECIMIENTOS

    A Anglica, mi ngel.

    A mis padres y a mis hermanos por su apoyo incondicional en todos mis proyectos.

    A la Dra. Margarita Almela Boix por su asesoramiento y gua durante todos mis aos

    en la UNED, fundamentalmente, en la investigacin y redaccin final de mi proyecto

    de tesis.

    Al Departamento de Literatura Espaola y Teora de la Literatura por su incondicional

    apoyo en el transcurso de mis aos de estudios en la UNED.

    A la Dra. Rita Tejada, por despejar las dudas en el planteamiento de mis hiptesis con

    un criterio objetivo, serio y profundo. Gracias por todas tus correcciones y crticas.

  • A la Dra. Valentina Peguero por su ayuda desinteresada al contestar todas mis

    preguntas.

    A Bergen County Academies y Montclair State University por haber contribuido a mi

    crecimiento intelectual.

    A mis amigos Carlos Gonzlez, Maribel Guzmn y Lule Seltzer, por su constante

    apoyo moral, espiritual e intelectual.

    A todos los organismos bibliotecarios que hicieron asequible todo el material de

    investigacin: Archivo General de la Nacin, Real Academia Espaola, Academia

    Dominicana de la Lengua, Fairleigh Dickinson University, Montclair State

    University, Library of Congress, The New York Public Library

  • NDICE GENERAL

    Introduccin 8

    Captulo1. El autor y su poca 13

    1.1. Panorama poltico y socio-econmico 16

    1.1.1. Primera Repblica 16

    1.1.2. Anexin a Espaa 16

    1.1.3. Segunda Repblica 16

    1.2. La hispanofilia de la poca 38

    1.2.1. Papel de Galvn durante la anexin a Espaa 40

    1.3. La literatura del siglo XIX 44

    1.3.1. El Romanticismo en Hispanoamrica 44

    1.3.2. El Romanticismo en la Repblica Dominicana 91

  • 6 ndice general

    1.3.3. El indianismos 105

    1.3.3.1. La novela indianista 105

    1.3.3.2. El tema indianista en la literatura dominicana 109

    Captulo 2. Enriquillo: Sus fuentes histricas y modelos literarios 119

    2.1. Fuentes histricas 119

    2.1.1. Influencia de la Historia de las Indias en la obra de Manuel de Jess

    Galvn 119

    2.1.2. Dcadas de Herrera 126

    2.2. Modelos literarios 129

    2.2.1. Romancero del Cid 129

    2.2.2. Atala Chateaubriand 140

    Captulo 3. Ambientacin de la obra 146

    3.1. La Espaola durante el siglo XVI 146

    3.1.1. Organizacin de la colonia 146

    3.2. La raza indgena y su cultura 157

    3.3. Presentacin del paisaje en la novela 162

    Captulo 4. Historicidad en la novela 166

    4.1. Novela histrica de origen romntico/ novela histrica de aventuras o novela de

    aventuras histricas 176

    4.2. La historicidad de las notas de Enriquillo 184

  • ndice general 7

    Captulo 5. Enriquillo y la caracterizacin de los personajes 195

    5.1. Caracterizacin de la raza indgena 195

    5.2. El colonizador espaol 201

    5.3. Idealizacin de los personajes femeninos 205

    5.4. El personaje de Enriquillo como arquetipo del indio civilizado 210

    5.5. El padre Bartolom de las Casas y su papel dentro de la narracin 219

    Captulo 6. Enriquillo y la glorificacin de la conquista espaola 225

    6.1. Colonizacin de La Espaola 230

    Captulo 7. Los preceptos del cristianismo y su importancia en la novela 244

    7.1. El ideal religioso de la conquista 252

    Captulo 8. Crticas y controversias 259

    8.1. Discrepancias entre el Enriquillo histrico y el literario 259

    8.2. Racismo e hispanofilia 266

    8.3. Galvn: Idealizacin de la realidad y de la verdad histrica 273

    Conclusin 280

    Bibliografa 287

    ndice de autores 323

    ndice de personajes 327

    Criterios de edicin 336

    Enriquillo. Leyenda histrica dominicana 338

  • INTRODUCCIN

    Ya han pasado ms de cien aos desde que Manuel de Jess Galvn escribiera

    y publicara su novela Enriquillo. Cien aos han pasado sobre la literatura dominicana

    y Enriquillo es la nica novela que ha trascendido a la literatura universal como una

    referencia clave dentro del gnero indianista. El tiempo, pues, se ha constituido en

    justificador de la importancia y trascendencia de esta obra dominicana, cuyo anlisis

    se presentar en el desarrollo de este trabajo.

    Este anlisis de Enriquillo ser precedido por la descripcin del panorama

    poltico, social y econmico que rode la vida de Manuel de Jess Galvn, como una

    manera de reconocer las circunstancias que motivaron la realizacin de este libro.

    El siglo XIX se caracteriza por la inestabilidad poltica que generan en la

    Repblica Dominicana la invasin haitiana que se prolonga por veintids aos y, ms

    tarde, los diversos gobiernos que se suceden en la frgil etapa que comprende la

    primera repblica. Este perodo culmina con la anexin a Espaa y luego con la

    denominada segunda repblica.

  • Introduccin 9

    La situacin socioeconmica del pas durante el siglo XIX no es nada

    halagea: el empobrecimiento econmico (a causa de innumerables emisiones de

    papeletas inorgnicas) y el atraso campean por doquier.

    Sin embargo, a la sociedad dominicana de esta poca llegan los aires de la

    filosofa liberal, del racionalismo y del romanticismo:

    De todas estas corrientes, el romanticismo se convierte en la tpica expresin

    cultural de todo el XIX (Peguero et. al., 1989: 257).

    Basada en personajes histricos, el Enriquillo de Galvn es una obra que ha

    planteado la interrogante de si se trata de una novela histrica de origen romntico,

    novela histrica de aventuras o novela de aventuras histricas. Sobre esa cualidad

    abundar en el desarrollo de este anlisis. Un aspecto que debe ponerse de relieve,

    inicialmente, es que la biografa de Las Casas sobresale en el marco de la narracin,

    matizada por la historia de Enriquillo y sus amores con Menca, a la par de los amores

    de Mara Cullar y de Juan de Grijalva.

    El maniquesmo se manifiesta en la caracterizacin de los personajes, los

    cuales aparecen claramente estereotipados en buenos o malos. A pesar de ello, Galvn

    no deja de exaltar aquellos elementos que hablan al lector de las bondades del

    colonizador espaol, como buen exponente, al fin, de la hispanofilia que permea su

    vida.

  • 10 Introduccin

    Sobre Enriquillo, a mi juicio, el crtico literario ha emitido, hasta el momento,

    opiniones incompletas y parciales. Esta novela ha merecido artculos y ensayos que

    luego se han convertido en libros. Sin citar nombres, es lamentable ver cmo muchos

    de estos trabajos crticos no hacen sino repetir, ser eco de lo expresado ya por unos u

    otros, en demrito de la misma novela, sobre la que aparentemente hay mucho que

    decir, pero nada nuevo. Tenemos, adems, la intenc in de aclarar que Manuel de

    Jess Galvn escribi una novela histrica romntica y no un texto sobre la historia

    dominicana, y as debe juzgarse.

    En el anlisis que se presenta a continuacin pretendo apuntalar los aspectos

    ms cuestionados de la obra a travs del estudio de sus elementos intrnsecos y

    extrnsecos.

    Se subrayar la fuerte influencia de la Historia de las Indias de Las Casas, as

    como otras fuentes a las que recurre el autor de Enriquillo (Chateaubriand, Herrera,

    Romancero del Cid).

    Los personajes aparecern caracterizados atendiendo a las dos razas que se

    oponen en la novela: indios y espaoles. Captulo aparte merecen los personajes

    femeninos, cuya caracterizacin responde a los cnones de la mujer ideal del

    momento en que fue escrita la novela. Incluimos el ndice de personajes ficticios e

    histricos, el cual consideramos muy til para el lector, sin tomar en cuenta la

    relevancia del personaje en la novela. Sealamos todas las pginas donde aparece el

    personaje y, en algunos casos, aadimos una nota aclaratoria breve para dar una

    visin ms precisa de la funcin del personaje en la novela.

  • Introduccin 11

    Un tema que vale la pena destacar es el del cristianismo: el importante papel

    que asume en la novela la religin y el hecho de que sus preceptos acten como

    condicionante de la trama que gira en torno al personaje que da ttulo a esta obra. Es

    la religin la que modifica conductas, la que es enarbolada para generar determinadas

    actuaciones en personajes especficos y la que mueve la accin hacia uno u otro lado.

    En esta investigacin, adems del estudio crtico de todos los aspectos de la

    novela (histrico, social, poltico, religioso, literario...) se aade una edicin anotada

    de la obra, para lo cual fueron usadas las ediciones de 1882 y 1909, ambas

    supervisadas y corregidas directamente por Galvn. La edicin de 1882 (Santo

    Domingo) fue la primera edicin completa de Enriquillo, que es la que he utilizado.

    Se preservan, de la edicin de 1882, la dedicatoria hecha por el autor a D. Rafael

    Mara de Labra, el prlogo de Jos Joaqun Prez, el apndice y las notas. De la

    edicin de 1909 (Barcelona) se incluye la carta de Jos Mart y el prlogo

    retrospectivo que el autor escribe. Se agregan notas aclaratorias de algunos aspectos

    geogrficos, histricos, bibliogrficos, sociales, culturales, etc., con la finalidad de

    que el lector tenga una panormica ms completa de la poca y, sobre todo, de los

    personajes histricos que constituyen el eje central de la trama de la novela. As

    mismo presentamos la bibliografa ms completa del autor, que incluye casi todas las

    ediciones de Enriquillo en nuestro idioma, adems de los documentos, artculos en

    peridicos y revistas publicados por Galvn.

    Finalmente, hay la pretensin, ante todo de, aclarar la ideologa que subyace

    en el trasfondo de la novela, con la finalidad de juzgarla sin parcialismos , con la

  • 12 Introduccin

    ptica del analista no prejuiciado por doctrinas aliterarias. A la vez se entiende que

    este estudio sirve al propsito de lograr la edicin ms completa y exhaustiva que se

    haya realizado hasta ahora de Enriquillo.

  • CAPTULO I

    1. EL AUTOR Y SU POCA

    Al iniciar cualquier estudio o investigacin acerca de Manuel de Jess

    Galvn, el estudioso se enfrenta a la difcil tarea de rastrear documentos casi

    inexistentes por el paso de los aos y la dbil estructura bibliotecaria con la que

    cuenta la Repblica Dominicana. No obstante, se decidi emprender la bsqueda y

    desentraar la vida del dominicano ms clebre en los anales de la literatura mundial.

    Poco se conoce de los primeros aos de su vida ntima y familiar. Por todas estas

    razones, se quiso realizar un esquema que presentara un panorama general de la vida

    del autor y de los acontecimientos que se desarrollaron en torno a sta. Concha

    Melndez, al referirse a las dificultades con las que se enfrenta el estudioso de

    Galvn, escribe:

  • 14 El autor y su poca

    La importancia de la obra de Galvn exige una biografa elaborada con

    disciplina y precisin. Esa biografa no se ha escrito an. Requerira una

    investigacin llena de obstculos por estar los documentos necesarios dispersos en

    revistas y peridicos dominicanos coleccionados en bibliotecas particulares de acceso

    casi imposible (Melndez, 1961: 129).

    Manuel de Jess Galvn es comnmente catalogado como romntico y su

    novela Enriquillo sigue siendo considerada, hasta ahora, la obra cumbre de la

    literatura dominicana. Bruno Rosario Candelier, en su libro Valores de las letras

    dominicanas, se refiere a la generacin del 1870 como romntica, destacando entre

    sus seguidores a Galvn, Javier y Alejandro Angulo Guridi, Flix Mara del Monte y,

    Jos Joaqun Prez, Salom Urea de Henrquez, entre otros. Mientras que Jos

    Alcntara Almnzar, en Antologa de la literatura dominicana, alude a la importancia

    de la novela en estos trminos:

    La novela del siglo pasado dio especial nfasis al tema histrico, como hubimos

    de sealar. Muchos de nuestros polgrafos hallaron en el refugio de sus gabinetes de

    trabajo el ambiente que faltaba en el exterior para la estructuracin de obras

    fundamentales en documentos y archivos. As, surgi Enriquillo, una de las obras de

    mayor difusin fuera y dentro del pas (Alcntara, 1972: 33).

    Planteado el panorama general de las limitaciones de esta investigacin, se

  • El autor y su poca 15

    presenta el siguiente esquema con las escasas informaciones obtenidas acerca de la

    vida de Manuel de Jess Galvn y los acontecimientos culturales, polticos,

    econmicos y cientficos que rodearon su existencia.

  • 16 El autor y su poca

    1.1. PANORAMA POLTICO Y S OCIO-ECONMICO

    FECHA

    BIOGRAFA

    HISTORIA

    ECONOMA

    ARTES, CIENCIAS Y

    LETRAS

    1834

    Nace en Santo

    Domingo el 13 de

    enero, hijo de

    Francisco Xavier

    Abru, cubano, y

    Mara Candelaria

    Galvn, dominicana.

    Estudia en el Colegio

    de San Buenaventura,

    donde tuvo por

    condiscpulo a

    Fernando Arturo de

    Merio, Manuel

    Rodrguez Objo,

    Eugenio Perdomo,

    Carlos R. Nouel,

    Mariano Antonio

    Cestero y Jos

    Gabriel Garca.

    Pap Goriot, La

    bsqueda de lo

    absoluto, de Balzac.

    La conjuracin de

    Venecia, de Martnez

    de la Rosa.

    El doncel de don

    Enrique, de Mariano

    Jos de Larra.

    El furioso en la isla de

    Santo Domingo: melo-

    drama en dos actos, de

    Ramn Carnicer.

    Con el amor no se

    juega, Lorenzaccio y

    Noches (1835), de

    Alfred Musset.

    Los cantos del

    crepsculo (1835), de

  • El autor y su poca 17

    Vctor Hugo.

    Cantos (1835), de

    Giacomo Leopardi.

    Don lvaro o la fuerza

    del sino (1835), del

    Duque de Rivas.

    La hija del capitn

    (1836), de Alexander

    Pushkin.

    Los amantes de Teruel

    (1837), de Juan E.

    Hartzenbusch.

    El matadero (1838), de

    Esteban Echevarra.

    Los novios (1842), de

    Alessandro Manzoni.

    Don Juan Tenorio

    (1844), de Jos Zorrilla

    de San Martn.

    El seor de Bembibre

    (1844), de Enrique Gil

    y Carrasco.

    Ensayos poticos

  • 18 El autor y su poca

    1854

    1855

    Funda la Sociedad

    Amantes de las

    Letras, junto a

    Manuel J. Heredia y

    otros, y el semanario

    El Oasis, donde

    publica bajo el

    seudnimo

    Enmanuel.

    Desempea varios

    cargos pblicos:

    copista o escribiente

    del Senado

    Consultor,

    por nombramiento

    Segunda

    invasin de

    Souluque.

    (1843), de Javier

    Angulo Guridi.

    Los amores de los

    indios (1843), de

    Alejandro Angulo

    Guridi.

    El anillo del

    Nibelungo, de Richard

    Wagner.

    Tiempos difciles, de

    Charles Dickens.

    Amalia, de Jos

    Mrmol.

    El canto de Hiawatha,

    de Henry Wadsworth

    Longfellow.

    Hojas de Hierba, de

  • El autor y su poca 19

    1856

    expedido el l de

    marzo; secretario

    archivista del Senado

    de la Repblica por

    nombramiento

    expedido el 29 de

    mayo; director-

    redactor de La

    Gaceta de Gobierno,

    Nombrado el 12 de

    junio.

    Viaja a Pars, donde

    se convierte en

    asiduo lector de la

    Biblioteca Nacional.

    Realiza los primeros

    esbozos de su novela

    Enriquillo.

    Batalla de

    Sabana Larga,

    Jcuba y la Ceja

    de Guayaba.

    Manuel de

    Regla Mota,

    presidente. 2do.

    mandato de

    Buenaventura

    Bez.

    Emisiones

    monetarias sin

    respaldo,

    devaluacin del

    peso.

    Walt Whitman.

    Madame Bovary, de

    Gustave Flaubert.

    Las flores del mal, de

    Charles Baudelaire.

    Las contemplaciones,

    de Vctor Hugo.

    Cuentos del mirador,

    de Herman Melville.

    La fantasma de Higey

    (1857), de Javier

    Angulo Guridi.

  • 20 El autor y su poca

    1858

    1859

    De regreso al pas, es

    nombrado

    administrador general

    de Correos, el 10 de

    junio.

    Trabaja como

    secretario del Gral.

    Pedro Santana. El 20

    de marzo es

    nombrado para la

    Proclamacin

    de la

    Constitucin de

    Moca, el 9 de

    febrero.

    Derrota de

    Buenaventura

    Bez y nuevo

    gobierno de

    Pedro Santana.

    Fundacin de la

    Gran Logia

    Simblica de la

    Repblica

    Dominicana, el

    11 de

    diciembre.

    The Courtship of Miles

    Standish, de Henry

    Wadsworth

    Longfellow.

    Historia de dos

    ciudades, de Charles

    Dickens.

    Tristn e Isolda, de

    Richard Wagner.

  • El autor y su poca 21

    Legacin de la

    Repblica en las

    Cortes de

    Copenhague y La

    Haya por el Poder

    Ejecutivo, como

    secretario de don

    Felipe Dvila

    Fernndez de Castro,

    para zanjar

    diferencias con

    Dinamarca. El 16 de

    diciembre asume el

    cargo de oficial-

    redactor del

    Ministerio de

    Relaciones

    Exteriores con

    carcter de Secretario

    de Legacin por el

    Poder Ejecutivo.

    El origen de las

    especies, de Darwin.

    La leyenda de los

    siglos, de Vctor Hugo.

  • 22 El autor y su poca

    1860

    1861

    Ejerce como oficial

    mayor del Ministerio

    de Relaciones

    Exteriores, nombrado

    el 20 de mayo hasta

    el 17 de marzo de

    1861.

    Se casa con Francisca

    Velzquez Objo, con

    quien procre cuatro

    hijos: ngela,

    Eugenia de las

    Mercedes, Manuel de

    Jess, Enrique Julio,

    Antonio, Luis y

    Rafael Octavio

    Galvn y Velzquez.

    Ocupa el cargo de

    oficial mayor en la

    Direccin Provisional

    de Relaciones

    Exteriores, nombrado

    Negociaciones

    secretas de

    Santana con

    Espaa.

    Proclamacin

    de la Anexin a

    Espaa, el 18 de

    marzo. Invasin

    de Francisco del

    Rimas, de Gustavo

    Adolfo Bcquer.

    Grandes esperanzas,

    de Charles Dickens.

    Recuerdo de la casa de

    los muertos, de

    Dostoievski.

    De los trovadores en

    Espaa, de Manuel

  • El autor y su poca 23

    el 10 de abril. Dirige

    durante tres aos La

    Razn, rgano oficial

    del Gobierno de

    Anexin, fundado

    para neutralizar la

    propaganda contra la

    reincorporacin. Es

    nombrado jefe de la

    Seccin

    Administrativa de

    Fomento y Obras

    Pblicas de la

    Secretara del

    Gobierno Superior

    Civil, el 10 de agosto

    y jefe de negociado

    de la misma

    secretara el 7 de

    octubre, pero asume

    el cargo el 19 de

    noviembre.

    Rosario

    Snchez.

    Nombramiento

    de Pedro

    Santana.

    Mil y Fontanals.

  • 24 El autor y su poca

    1863

    1864

    Desempea el cargo

    de secretario interino

    del Gobierno

    Superior Civil, desde

    el 23 de octubre;

    administrador general

    de Correos desde el

    16 de noviembre.

    Trabaja como

    secretario del

    Gobierno superior

    Civil, por

    nombramiento Real

    del 27 de agosto.

    Toma posesin el 5

    de octubre.

    Rebeliones

    contra la

    Anexin en

    Neiba, el 3 de

    febrero, y en

    Santiago.

    Inicios de la

    Guerra de

    Restauracin.

    Jos Ant.

    Salcedo,

    Presidente

    desde el 14 de

    septiembre.

    Destitucin y

    muerte de Pedro

    Santana.

    Los cosacos, de Len

    Tolstoi.

    Cinco semanas en

    globo, de Julio Verne.

    Romola, de George

    Eliot (Mary Ann

    Evans)

    La peregrinacin de

    Bayon, de Eugenio

    M. de Hostos.

    Viaje al centro de la

    tierra, de Julio Verne.

  • El autor y su poca 25

    1865

    1868

    1874

    Se exilia en Puerto

    Rico y ejerce como

    regente de la Real

    Hacienda del

    Gobierno Espaol.

    Se acerca a

    dominicanos recin

    llegados a Puerto

    Rico para adherirse a

    la causa en contra de

    Buenaventura Bez.

    Mantiene

    correspondencia con

    Gregorio Lupern.

    Regresa al pas.

    Abandono de

    Santo Domingo

    por decreto de

    las Cortes de

    Espaa.

    Tratado de paz

    con Hait, el 8

    de noviembre.

    Dictadura de

    Ignacio Mara

    Gonzlez.

    Estancias y poemas, de

    Sully-Prudhomme.

    La Ciguapa (1866), de

    Javier Angulo Guridi.

    La fontana de oro, de

    Benito Prez Galds.

    El idiota, de

    Dostoievski.

    Pequeos poemas en

    prosa, de Charles

    Baudelaire.

    El triunfo liberal.

    Canto pico al ilustre

    americano A. Guzmn

    Blanco, de Alejandro

    Angulo Guridi.

    Lira de Quisqueya, de

    Jos Castellanos.

  • 26 El autor y su poca

    1875

    1876

    Es electo diputado a

    la Convencin

    Nacional que dict la

    Constitucin del 9 de

    marzo.

    El Presidente Ulises

    Fco. Espaillat lo

    nombra ministro de

    Promulgacin

    de una nueva

    Constitucin.

    Acuerdo de El

    Carmelo.

    Renuncia de

    Pepita Jimnez, de

    Juan Valera.

    Primera exposicin de

    pintura impresionista.

    Las tentaciones de San

    Antonio, de Gustave

    Flaubert.

    El canto de primavera,

    de Jos Antonio

    Calcao.

    Espinas de una flor!,

    de Francisco

    Camprodn.

    El sombrero de tres

    picos, de Pedro A.

    Alarcn.

    Gritos de combate, de

    Gaspar Nez de Arce.

    Fundacin de la

    Sociedad Amantes de

    la Luz.

  • El autor y su poca 27

    1878

    1879

    Relaciones

    Exteriores, desde el

    29 de abril hasta el 5

    de octubre.

    Desempea

    interinamente la

    cartera de Interior y

    Polica, en julio.

    Asume la

    vicepresidencia de la

    Cmara Legislativa

    que dict la revisin

    constitucional de

    1878. Muere su

    padre.

    Obtiene el ttulo de

    Licenciado en

    Ignacio Ma.

    Gonzlez.

    Ulises Fco.

    Espaillat,

    Presidente.

    Buenaventura

    Bez Presidente

    por quinta vez.

    Nueva

    presidencia de

    Ignacio Ma.

    Gonzlez.

    Cesreo

    Guillermo,

    Doa Perfecta, de

    Benito Prez Galds.

    Llegada de Eugenio

    Mara de Hostos al

    pas.

    Una carta, de

    Alejandro Romn.

    Fantasas indgenas

    (1877), de Jos Joaqun

    Prez.

    Marianela, de Benito

    Prez Galds.

    La colombiada: poema

    pico en doce cantos,

    de Felipe Tejera.

    Los hermanos

    Karamazov, de

  • 28 El autor y su poca

    Derecho, el 5 de

    febrero, de la

    Suprema Corte de

    Justicia; ocupa la

    Cartera de Interior y

    Polica en marzo;

    ministro de

    Relaciones Exteriores

    durante la

    administracin de

    Cesreo Guillermo,

    del 28 de febrero al 6

    de diciembre; dirige

    las carteras de

    Interior y Polica, de

    julio a agosto y de

    octubre a diciembre y

    de Justicia e

    Instruccin Pblica

    en septiembre.

    Publica la primera

    parte de Enriquillo.

    Presidente el 27

    de febrero.

    Dostoievski.

    Fundacin de la

    Primera Escuela

    Normal de Maestros,

    en febrero, por Eugenio

    Mara de Hostos.

    Cumand, de Juan

    Len Mera.

    Poesas (1880), de

    Salom Urea de

    Henrquez.

    Iguaniona (1881), de

    Javier Angulo Guridi

  • El autor y su poca 29

    1882

    1883

    Publica en Santo

    Domingo Enriquillo.

    Leyenda Histrica

    Dominicana.

    En abril, es elegido

    Presidente de la

    Suprema Corte de

    Justicia, por mayora

    de votos. Suscribe un

    contrato con el

    Ministerio de

    Justicia, el 6 de

    noviembre, para la

    La industria agrcola,

    de Jos Joaqun Prez.

    Parsifal, de Richard

    Wagner.

    Das ejemplares, de

    Walt Whitman.

    El amigo manso, de

    Benito Prez Galds.

    Ismaelillo, de Jos

    Mart.

    Robert Koch descubre

    el bacilo de la

    tuberculosis.

    Estreno del himno

    nacional dominicano,

    msica de Jos Reyes y

    letra de Emilio

    PrudHomme, en honor

    a Duarte.

    Instalacin de la

    primera escuela de

    pintura en el pas por

  • 30 El autor y su poca

    1889

    traduccin de los

    Cdigos Civiles, de

    comercio, de

    Procedimiento Civil

    y de Instruccin

    Criminal, y de

    revisin del Cdigo

    Penal Comn, que

    hasta el momento se

    utilizaban en francs.

    Mantiene una

    polmica con Jos

    Gabriel Garca sobre

    Pedro Santana, a

    travs de los

    peridicos El

    Ulises

    Heureaux,

    Presidente

    desde el 6 de

    enero.

    Fernando Corredor.

    Marta y Mara, de

    Armando Palacio

    Valds.

    La hija del hebreo, de

    Federico Henrquez y

    Carvajal.

    Viaje de Gerardo

    Etanislao por la mayor

    parte de los pueblos de

    la Repblica

    Dominicana (1885), de

    Juan Antonio Alix.

    Las vrgenes de

    Galindo (1885), de

    Flix Mara del Monte.

    Publicacin del Listn

    Diario, desde el 1 de

    agosto.

    Insolacin, de Emilia

    Pardo Bazn.

    El zarco, de Ignacio M.

  • El autor y su poca 31

    1890

    Telfono y El Eco de

    la Opinin.

    Sobresale como

    profesional y

    miembro de la Junta

    Superior de Estudios

    de dicho instituto.

    Integra, junto a J.M.

    Glass y Emiliano

    Tejera, la Comisin

    de Ministros

    Plenipotenciarios que

    deba negociar con

    los representantes

    designados por el

    gobierno de Hait un

    acuerdo para

    negociaciones de

    fronteras que no lleg

    a cristalizar.

    Emprstito con

    Westendorp y Ca.

    Altamirano.

    La bestia humana,

    Emile Zola.

    La bolsa, de Jos Mara

    Mir.

  • 32 El autor y su poca

    1891

    1893

    Acta como Enviado

    Plenipotenciario y

    Extraordinario en los

    Estados Unidos;

    negociador del

    Convenio Comercial,

    concertado por canje

    de notas, con los

    Estados Unidos.

    Ejerce como Ministro

    de Relaciones

    Exteriores desde el

    27 de febrero hasta el

    Ulises

    Heureaux,

    Presidente hasta

    el 27 de febrero.

    Trabajo de

    reciprocidad con

    los Estados

    Unidos, el 14 de

    junio.

    El retrato de Dorian

    Gray, de Oscar Wilde.

    Las aventuras de

    Sherlock Holmes, de

    Arthur Conan Doyle.

    ngel Guerra, de

    Benito Prez Galds.

    Su nico hijo, de

    Clarn.

    Versos sencillos, de

    Jos Mart.

    Cosas aejas (prlogo

    de Galvn), de Csar

    Nicols Penson.

    Ban o Engracia y

    Antoita (1892), de

    Francisco Gregorio

    Billini.

    Madre Culpable:

    novela original, de

    Amelia Francasci.

    Desvelos: [Ensayos

  • El autor y su poca 33

    1896

    1903

    25 de marzo durante

    la cuarta

    administracin de

    Ulises Heureaux. Es

    miembro de la Junta

    Nacional

    Colombina, desde su

    fundacin en este

    ao.

    Ejerce como profesor

    de Derecho del

    Instituto Profesional.

    Trabaja como

    Ministro de

    Renuncia de

    Horacio

    poticos], de Flix

    Francisco Rodrguez.

    Peas arribas, de Jos

    Mara de Pereda.

    Bustos y rimas, de

    Julin del Casal.

    Milagro, de Rafael

    Alfredo Deligne.

    Prosas Profanas de

    Rubn Daro.

    Las manos de Dios, de

    Rodin.

    Jugadores de Carta, de

    Paul Cezanne.

    Juanita la Larga, de

    Juan Valera.

    Perfiles: poemas en dos

    cantos, de Jos Mara

  • 34 El autor y su poca

    1904

    Relaciones Exteriores

    del Gobierno de

    Alejandro Woss y

    Gil.

    Acta como rbitro

    designado por la

    Repblica para

    dictar el laudo

    respecto a la deuda

    pblica contrada con

    la Santo Domingo

    Improvement

    Company of New

    York y dems

    Vsquez a la

    presidencia, el

    23 de abril.

    Alejandro Woss

    y Gil,

    Presidente por

    segunda vez.

    Carlos Morales

    Languasco,

    Presidente, el

    19 de junio.

    Jimnez.

    Heliotropo, de Amrico

    Lugo.

    La alegra de vivir, de

    Matisse.

    Las cinco naciones, de

    Rudyard Kipling.

    Flor de Santidad, de

    Ramn Mara del

    Valle-Incln.

    Antonio Azorn, de

    Azorn.

    Perdigones, de Joaqun

    Mara Bobea.

    El jardn de los sueos:

    (pequeos poemas en

    prosa), de Tulio

    Manuel Cestero.

    Larva y escarcha, de

    Hctor de Marchena.

    Cuentos

    puertoplateos, de Jos

  • El autor y su poca 35

    1907

    compaas aliadas, en

    julio.

    Combate la

    Convencin

    Domnico Americana

    que contena una

    clusula que permita

    la injerencia poltica

    del gobierno

    norteamericano en

    nuestro pas.

    Firma de la

    Convencin

    Domnico

    Americana, el 3

    de mayo.

    Ramn Lpez.

    El jardn de los

    cerezos, de Antn

    Chejov.

    La lucha por la vida,

    de Po Baroja.

    Arcos votivos, de

    Osvaldo Bazil.

    Juvenilia, de Federico

    Henrquez y Carvajal.

    Criollas. De casa

    [Poemas], de Miguel

    ngel Peguero.

    Soledades, de Antonio

    Machado.

    El canto errante, de

    Rubn Daro.

    Comedias brbaras, de

    Valle Incln.

    Perfiles y relieves y

    Rufinito (1908), de

    Federico Garca

  • 36 El autor y su poca

    1909

    1910

    Viaja por Espaa.

    Muere en San Juan,

    Puerto Rico, el 13 de

    diciembre, el

    Prncipe de las

    Divis in del

    partido

    horacista.

    Godoy. Poesas, de

    Unamuno.

    Galaripsos (1908), de

    Gastn Fernando

    Deligne.

    Del Cesarismo. Novela,

    de Rafael Damirn.

    Dolorosa, de Federico

    Henrquez y Carvajal.

    Nervios, de Francisco

    Pereira.

    Mrmoles y Lirios, de

    Ricardo Prez

    Alfonseca

    Los intereses creados,

    de Jacinto Benavente.

    Amor que emigra:

    (Novela), de Ulises

    Heureaux.

    Cantaba el ruiseor, de

  • El autor y su poca 37

    Letras

    Nacionales.

    Fabio Fiallo.

    Frutos de mi huerto, de

    Pedro Germn.

    Lirios del trpico, de

    Ramn Emilio

    Jimnez.

    Oro virgen: (Ensayos

    breves), de Federico

    Bermdez.

    La hora que pasa:

    notas crticas, de

    Federico Garca

    Godoy.

    Horas de estudio, de

    Pedro Henrquez

    Urea.

  • 38 El autor y su poca

    1.2. LA HISPANOFILIA DE LA POCA

    Durante casi todo el siglo XIX, la Repblica Dominicana contina

    manifestando una adhesin a la cultura hispnica, patente, sobre todo, en la lite de la

    sociedad que rechazaba toda influencia africana. Refirindose a esta preferencia de

    nuestros escritores, Jos Alcntara Almnzar, en Narrativa y sociedad en

    Hispanoamrica, nos explica:

    Nuestra lite intelectual fue incapaz de articular un pensamiento totalmente

    desligado de los modelos hispnicos. Hijos de una burguesa en ascenso, los

    escritores dominicanos del diecinueve expresaron las aspiraciones y preocupaciones

    de su clase social. As el indigenismo que tiene sus ms altos exponentes en Jos

    Joaqun Prez y Manuel de Jess Galvn (1834-1910) represent un intento por

    recuperar los orgenes, mostrndonoslo como la mejor prueba de la naciente

    dominicanidad () Galvn, en el Enriquillo que siendo la novela dominicana ms

    conocida dentro y fuera del pas narra la historia del cacique alzado en las montaas

    del Bahoruco, con un reducido nmero de seguidores, contra la monarqua espaola.

    Esa lucha que dur quince aos, bien podra ser considerada como una especie de

    guerrilla primigenia (Alcntara, 1984: 22).

    Debido a la dbil estructura con la que surge la Repblica, al conservadurismo

    de los gobernantes, al prejuicio racial, al colonialismo, a la amenaza de los Estados

    Unidos de invadir el pas, al miedo a otra invasin haitiana, entre otros problemas,

  • El autor y su poca 39

    surge nuevamente la idea de la anexin o el protectorado con Espaa durante el

    gobierno de Pedro Santana. Eso lo indica Frank Moya Pons cuando dice:

    Las dificultades que confront el gobierno de Santana despus de la

    revolucin de 1858 fueron tantas y tan graves que l y sus amigos decidieron

    resucitar la vieja idea de recurrir al auxilio de una potencia extranjera que los ayudara

    a resolver los problemas de su estabilidad poltica y de su seguridad econmica

    (Moya, 1992: 337).

    As, pues, el 16 de marzo de 1861, Santana y sus aliados concretan la anexin

    haciendo ver que sta era aceptada y apoyada por la mayora de los dominicanos, lo

    que provoca diversas protestas a travs de todo el pas s in que surtieran ningn efecto.

    Sin embargo, los planes de Santana de continuar con su liderazgo poltico y de mando

    no se desarrollaron a su favor, ya que la Corona inici la anexin destituyendo a los

    principales aliados de Santana y nombrando en estos cargos a oficiales espaoles. En

    vista de su desfavorable posicin, Santana renuncia a su cargo. En palabras de

    Valentina Peguero y Danilo de los Santos:

    El hecho de la anexin (1861) patentiz el predominio de una mentalidad

    colonialista que se coloc frente a una joven repblica insegura por sus deficiencias

    estructurales. Signific la anexin un retroceso poltico y una traicin a principios

    liberales, que aunque no haban ahondado socioculturalmente, por lo menos haban

  • 40 El autor y su poca

    encontrado expresin en el independentismo profundo y radical concebido por

    Duarte. Las pocas manifestaciones espirituales que comenzaron a desarrollarse como

    nacionales se vieron a merced de sustituyentes hispnicos, porque as como la

    administracin republicana fue reemplazada por una colonial, instituciones y rganos

    espaoles se introdujeron rpidamente. De esta manera lo ms avanzado del clero

    criollo fue sustituido en la dir igencia espiritual como fueron tambin cambiados los

    cdigos napolenicos y proscritos todo aquello que pudiera resultar atentatorio al

    anexionismo (Peguero et. al., 1989: 265-266).

    1.2.1. PAPEL DE GALVN DURANTE LA ANEXIN A ESPAA

    Despus de enmarcar el momento histrico en el que se desarroll la anexin

    del 1861, cabe preguntarse, cul fue el papel de Galvn en la campaa anexionista de

    Santana? y por qu contribuye con la anexin y la apoya? El 2 de mayo de1861,

    cuarenta y cinco das despus de la anexin del pas a Espaa, Manuel de Jess

    Galvn fund el semanario La Razn, rgano oficial del Gobierno de Anexin

    fundado para neutralizar la propaganda contra la reincorporacin, el cual dirige

    durante tres aos. A travs de su pluma, Galvn ratific su apoyo a la poltica

    anexionista de Santana y celebr el retorno de la Repblica Dominicana al

    colonialismo. En los breves datos biogrficos que escribe acerca de Galvn en el

    Diccionario dominicano biogrfico-histrico, Rufino Martnez dice:

    GALVN, Manuel de Jess () Adherido a la orientacin poltica de los

  • El autor y su poca 41

    hombres dominantes, recibi con agrado la Anexin. Nadie vivi ms satisfecho que

    l, aun cuando el pueblo desesperado se sangraba para readquirir su libertad en la

    Guerra de la Restauracin. El peridico LA RAZN, que fundara en 1862, se

    convirti en rgano oficial del rgimen, y nunca estuvo escaso de argumentos con

    que justificar los hechos favorables o desfavorables al Gobierno (Martnez, R., 1971:

    187).

    El 10 de agosto, Galvn fue nombrado jefe de la Seccin Administrativa de

    Fomento y Obras Pblicas de la Secretara del Gobierno Superior Civil y el 7 de

    octubre jefe de negociado de la misma secretara. Tambin ocupa el cargo de oficial

    mayor en la Direccin Provisional de Relaciones Exteriores, nombrado el 10 de abril.

    Los historiadores y crticos literarios muchas veces han sido implacables al

    considerar las acciones de Galvn como antipatriticas y antinacionalistas por apoyar

    la anexin y contribuir a que se llevara a cabo. Ellos deberan recordar que Manuel de

    Jess Galvn naci durante la dominacin haitiana, lo cual marc su existencia para

    siempre. En torno a este hecho, en Historia de la literatura universal,

    Hispanoamrica: El nacimiento de un mundo, se expresa:

    Manuel de Jess Galvn (1834-1910) haba nacido en Santo Domingo

    cuando esta parte de la isla estaba bajo dominio de Hait; por eso vio a los espaoles

    como aliados y no como dominadores. En 1861 apoy el retorno de Santo Domingo

    al imperio espaol (Vargas et al., 1983: 192).

  • 42 El autor y su poca

    Al referirse al papel de Galvn durante la anexin, Enrique Anderson Imbert seala:

    Hay, pues, una diferencia de actitud entre Galvn y otros escritores

    indigenistas de su poca. Sea por salvar la hispanidad de Santo Domingo, amenazada

    por la franco-africana Hait, sea por el miedo al desorden, por conservatismo poltico,

    por falta de conciencia nacional o por su adhesin personal al general Santana, lo

    cierto es que Galvn colabor en el acto de la reanexin, obtuvo cargos pblicos

    durante la ocupacin espaola, y cuando se restaur la Repblica (1865) se fue a

    Puerto Rico, siempre al servicio de Espaa (Anderson, 1960: 63-64).

    Guillermo Pia Contreras tambin afirma la hispanofilia de Galvn y su papel en la

    anexin:

    Galvn era uno de los hombres de confianza del gobierno espaol y uno de los

    idelogos de la anexin. Estaba tan comprometido con las fuerzas de la corona que en

    el momento de la derrota de los espaoles, en 1865, fue escogido entre todos los

    funcionarios del gobierno anexionista, para entregar a los restauradores de la

    Repblica, en nombre de las autoridades espaolas, las llaves de la ciudad de Santo

    Domingo. Su compromiso con la corona espaola le impeda quedarse en el pas, y se

    vio obligado a partir con los espaoles a Puerto Rico donde fue nombrado Intendente

    de la Real Hacienda (Pia, 1985: 23-24).

  • El autor y su poca 43

    Por otra parte, su novela Enriquillo, pese a que su temtica fundamental es la

    defensa y la exaltacin de la raza indgena, logra traslucir el gusto del autor por lo

    hispnico, la defensa de su influencia cultural y el apego a sus normas y costumbres

    como los cimientos fundamentales de los dominicanos, como lo expresa Bruno

    Rosario Candelier en el siguiente prrafo:

    Desde luego, se dir que fue un contrasentido que un Galvn publicase una

    novela indigenista por su postura antinacional durante la Anexin a Espaa en 1861 si

    se lee con atencin su novela se aprecia lo que hay, pese al indigenismo indiscutible

    de su obra, un apego por lo espaol, una defensa de lo hispnico y una exaltacin del

    blanco. Por eso, aunque como escritor ha merecido el gran aprecio nacional, porque

    Enriquillo es una valiosa obra literaria, por su actitud antipatritica ha merecido un

    repudio de parte de los verdaderos dominicanos (Rosario, 1988: 130).

    Todas estas claras manifestaciones de defensa y apoyo a las acciones de

    Santana provocan la antipata del pueblo dominicano, y despus del fracaso de la

    Anexin en el ao 1865, Galvn se exilia en Puerto Rico alrededor de una dcada,

    donde tambin ocupa cargos importantes en el gobierno espaol. Refirindose a esta

    etapa de la vida de Galvn, Federico Henrquez y Carvajal seala:

    Era Galvn de aquella generacin, la segunda en la serie, ganosa de saber y

    de cultura literaria, que, sin recursos, ni alicientes directos, en vez de ncleos

    intelectuales, dio al pas algunas entidades de alto relieve, ora en el rido campo de la

  • 44 El autor y su poca

    poltica militante, ora en el campo florecido de las bellas letras. Galvn era uno de los

    ms erguidos.

    En el de la poltica de partidos de vencedores y vencidos, joven an, un

    cmulo de circunstancias llevronle al desempeo de un rol ingrato: tendencias o

    antecedentes conservadores, quizs, indujronle a aceptar el hecho infausto de la

    reincorporacin a Espaa, que l tuvo por hecho cumplido. Pero volvi al regazo de

    la Repblica, pasada una dcada, y a poco entr, con honra singular en el consejo del

    prcer Gobierno de Espaillat. Despus, en ocasiones diversas, ocup su curul, sitial o

    poltronal en las tres funciones del Estado. En todas ellas mantuvo el criterio

    conservador, de autoridad, si no autoritario , que fue su caracterstica en el ejercicio

    de las distintas actividades sociales (Henrquez, F., 1934: 6-7).

    1.3. LA LITERATURA DEL S. XIX

    1.3.1. EL ROMANTICISMO EN HISPANOAMRICA

    En este apartado ser analizado el romanticismo hispanoamericano, su origen,

    races, transicin, caractersticas particulares y autores destacados. Se iniciar un viaje

    por Hispanoamrica para conocer de cerca las caractersticas del romanticismo en

    algunos pases hispanoamericanos. Se tendr en cuenta la vida y obra de algunos

    autores destacados. Obviamente no se le dedicar ninguna atencin a la Repblica

    Dominicana, ya que, por ser sta la cuna de Manuel de Jess Galvn, se estudiar el

    romanticismo dominicano en un apartado especial.

    El romanticismo en Hispanoamrica tiene sus races en el romanticismo

  • El autor y su poca 45

    ingls, francs y espaol; este ltimo es el que mayor influencia ejerce en la creacin

    romntica hispanoamericana. Se podra decir, por lo tanto, que el romanticismo es un

    movimiento importado, no obstante , tiene su sello propio. Segn Raimundo Lazo, en

    Historia de la literatura hispanoamericana:

    La literatura hispanoamericana, en cuanto a tcnica la nomenclatura de su

    proceso histrico, parece ser una literatura importada. Recibi de Europa los

    instrumentos para elaborar sus obras con materiales americanos; pero stos, precisa

    reconocerlo, tienden a sobreponerse a todo lo formal, y de este modo comienza a ser

    asimilacin y creacin nueva lo que a primera vista parece ser solo importacin e

    imitacin pasiva de modelos extranjeros. Lo substancialmente americano va llenando,

    pues, los moldes importados y modificndolos, y de este modo los ismos europeos

    adquieren carcter en Hispanoamrica. Se tornan movimientos artsticos con nuevo

    sentido, segn nuevas interpretaciones determinadas por el autor hispanoamericano y

    sus circunstancias; son, en fin, ismos americanizados, y con tal carcter deben

    considerarse (Lazo, 1967: 12).

    El romanticismo fue un movimiento que se desarroll de una forma lenta y

    progresiva ocupando todos los rdenes de la vida hispanoamericana. Se apoder de

    todo el pensamiento del Siglo XIX destacndose en todos los gneros literarios, sobre

    lo que Raimundo Lazo afirma:

    En Hispanoamrica, el Romanticismo fcilmente tom posesin de un mundo

  • 46 El autor y su poca

    que pareca pertenecerle, en el que todo, la Naturaleza con sus poderosas fuerzas

    elementales y sus paisajes grandiosos, y la vida dominada por incierto y agudo

    dramatismo reclamaban una expresin de forma y de espritu romnticos. De Europa

    vino, pues, solo el estmulo y fcilmente se expandi por todos los pueblos del Nuevo

    Mundo Hispnico, penetrando y caracterizando toda su literatura, impregnada de

    lirismo juvenil a veces infantil su poesa, su prosa narrativa, su proyeccin potica,

    su incipiente teatro, siempre en torno a motivos dominantes: el amor, la naturaleza, la

    libertad, el progreso (Lazo, 1967: 13).

    Jos Miguel Oviedo en el captulo El romanticismo y la gauchesca

    roplatense de su libro Historia de la literatura hispanoamericana subraya la

    prolongada duracin del movimiento romntico:

    En el primer tercio del siglo XIX, el romanticismo llega a Europa y se

    propaga por toda Amrica con una rapidez, intensidad y persistencia pocos comunes,

    que lo convierten en el fenmeno de ms larga duracin. Sus mrgenes cronolgicos

    pueden establecerse entre 1830 y 1875, casi medio siglo en el que pasa de la eclosin

    y la novedad del impacto inicial, hasta las formas ya fosilizadas y acadmicas del

    postromanticismo con las que languidece histricamente (Oviedo, 1997: 13).

    Qu es el romanticismo? Cules son sus races ideolgicas? Qu es ser

    romntico? Se podra completar una tesis para contestar estas preguntas, simples en su

    estructura y cuestin, pero profundas en la cantidad de respuestas existentes al

  • El autor y su poca 47

    respecto. Sern citados los estudiosos ms destacados del movimiento romntico para

    escuchar sus opiniones. Por su parte, Gmez-Gil apunta:

    El romanticismo es un movimiento literario y de ideas que comienza a

    florecer en la transicin del siglo XVIII al XIX. Tiene carcter internacional, porque

    no es privativo de ningn pas en particular y porque se produjo en todas las naciones,

    aunque sin mucha simultaneidad. Las cinco grandes literaturas europeas francesa,

    alemana, inglesa, italiana y espaola tuvieron grandes e importantes movimientos

    romnticos (Gmez-Gil, 1968: 238).

    Carlos Hamilton por su parte nos ofrece la siguiente conceptualizacin del

    romanticismo:

    El trmino romntico, se emplea, primero, en ingls: romantic significa lo

    propio del romance, lo novelesco, la ficcin, lo fantstico. El Romanticismo es un

    movimiento vasto y complicado, que excede los lmites de una escuela literaria o de

    un estilo artstico. Abarca el campo de la f ilosofa (Shelling), el jurdico (Von

    Savigny), la historia poltica, el arte, la literatura y una manera universal de vida

    (Hamilton, 1960: 116).

    Jos Miguel Oviedo al definir el romanticismo seala:

    Es una reaccin contra una concepcin normativa e inmutable del arte y una

  • 48 El autor y su poca

    exaltacin de las potencias de la fantasa individual y de las formas autctonas con las

    que cada pueblo se expresa artsticamente (Oviedo, 1997: 14).

    En cuanto a la ideologa del movimiento Gmez-Gil proclama:

    Ideolgicamente, el movimiento tiene muchas de sus races en el Siglo de las

    Luces, pero en literatura surgi como una reaccin contra el racionalismo y el

    neoclasicismo, postulando la completa libertad del individuo y la supremaca de la

    emocin sobre la razn (Gmez-Gil, 1968: 238).

    El romntico se define como el hombre que promueve la renovacin total de la

    vida. Bsqueda infinita de la justicia, identidad nacional, individualidad,

    identificacin con la naturaleza e impone la pasin sobre la razn. El romntico es

    aquel ser capaz de expresar sus ms ntimos sentimientos, con el lirismo ms ntimo y

    profundo que se haya podido transmitir en cualquier otro movimiento literario

    anterior. Es el ser comprometido con la valorizacin del pasado. En Historia de la

    literatura hispanoamericana, Leguizamn define al romntico con estas palabras:

    El romntico adapta su ropa a la expresin de un estado de nimo luto son

    bitos, corbata tambin negra de moo cado, sombrero de anchas alas y su

    fisonoma a la expresin de una potica y funesta predestinacin. Los rostros plidos

    traducen la abrasadora y lenta agona. Se ha dicho con acierto que el cuadro lrico de

    la tisis se reputaba como la ms autntica credencial de la aristocracia intelectual. Del

  • El autor y su poca 49

    necesario conflicto entre el ideal y lo real, entre el arte y la vida, sobreviene la

    desazn, el mal del siglo y, como consecuencia, el suicidio, en cuya ancdota es tan

    frtil la historia del romanticismo. Solucin para la tristeza y el hasto de la vida

    constituye el suicidio uno de los elementos que mejor definen la actitud sentimental

    del romanticismo. Por sobre el ms fuerte de los instintos el instinto de vivir

    presupone un cansancio al par que renuncia del propio destino, situacin que solo se

    da plenamente en los romnticos. Esa actitud en el plano de lo vital est indicando

    que el romanticismo trasciende la esfera de lo esttico o literario simplemente

    (Leguizamn, 1954: 459).

    La fuerza y profundidad del romanticismo se deben, en parte, a la situacin

    poltica histrica que estaba viviendo el Nuevo Mundo. Los cambios profundos en el

    pensamiento y la bsqueda constante de la libertad y de la identidad del yo hicieron

    que los grandes pensadores usaran la pluma para plasmar sus pensamientos y

    revelarse ante una sociedad en bsqueda de su identidad nacional, la libertad, la

    justicia y un nuevo orden social. Orlando Gmez-Gil, en Historia crtica de la

    literatura hispanoamericana, expresa al respecto:

    Los romnticos eran los heraldos de un nuevo credo que tena por base la

    libertad en todos los rdenes de las actividades humanas. En el romanticismo estn

    confundidos en estrecho vnculo histrico, lo poltico, lo social y lo artstico, porque

    significaba una renovacin total de la vida (Gmez-Gil, 1968: 238).

  • 50 El autor y su poca

    Otro aspecto interesante que se analizar son los diversos temas del

    romanticismo. Sin lugar a dudas, el romntico hispanoamericano adopt los temas

    europeos, pero los adapt a su entorno, su realidad, su historia, sus creencias y su

    idiosincrasia en general, tratando as mismo de tener una voz propia. Por su temt ica,

    se suele hacer una divisin del movimiento romntico dependiendo del enfoque de los

    autores. Generalmente se plantea la primera etapa del romanticismo como lrica,

    sentimental, ntima, individualista y una segunda etapa en la que la novela y, en

    general, la prosa toma un gran auge atendiendo as a temas ms criollos e histricos.

    Raymundo Lazo se refiere a esta divisin con estas palabras:

    En su avance histrico, el Romanticismo hispanoamericano se escinde en dos

    etapas, la de la exaltacin sentimental e imaginativa de varias formas, delicada,

    lacrimgena, o estridente y declamatoria, y otra de rectificacin de los excesos y del

    abandono formal y la vulgaridad de la expresin (Lazo, 1967: 13-14).

    Anderson Imbert comenta acerca de los temas del romanticismo:

    Dentro del vasto temario del romanticismo mundial, los temas ms tpicos de

    Hispanoamrica fueron el paisaje natural, los tipos humanos, las maneras de vivir en

    las diferentes circunstancias sociales y la historia. En los pases de grandes masas

    indgenas hubo una idealizacin del indio. Eran evocaciones de un indio remoto,

    imaginado en la poca precolombina, de la conquista o de la colonia (Anderson,

    1954: 220).

  • El autor y su poca 51

    Gmez-Gil, desde una visin ms amplia, expresa:

    El romanticismo era el lado opuesto del neoclasicismo en todos los aspectos.

    Revalorizacin del pasado; tendencia a ir a la Edad Media o a las edades heroicas en

    busca de temas. El romancero, los temas histricos y legendarios se convierten en

    venero especial a partir de Sir Walter Scott. Actitud de rebelda frente a la realidad, la

    opresin y la injusticia. Defensa del dbil y de la mujer. Sentido de humanidad y de

    humanitarismo. El amor es el ideal romntico esencial desdoblado hacia la mujer, la

    libertad, la gloria, la justicia, lo nacional el progreso. Tristeza, pesimismo, nostalgia y

    melancola (Gmez-Gil, 1968: 239).

    Emiliano Diez-Echarri y Jos Mara Roca Franquesa, en Historia de la

    literatura espaola e hispanoamericana, hablan de la casi total omisin del tema

    religioso en el romanticismo hispanoamericano, tan presente en algunos sectores del

    movimiento romntico europeo:

    El elemento religioso, tan importante en algunos sectores de romanticismo europeo,

    casi se podra afirmar que en el americano brilla por su ausencia. Hay excepciones,

    pero muy pocas y que apenas merecen atencin. El romanticismo en Hispanoamrica

    es en sus mximos representantes extrao a la religin; cuando no antirreligioso o

    francamente ateo (Diez-Echarri et al., 1960: 866).

    El tema indigenista es otra particularidad temtica del romanticismo

  • 52 El autor y su poca

    americano. El hombre americano, a diferencia del europeo, no conoce sus races, sus

    antepasados, la conquista y colonizacin haba en muchos casos borrado la herencia

    de estos pueblos y en otros las huellas que quedaban eran casi indelebles. Por estas

    razones, el romntico siente la necesidad de descubrir su pasado y le dedica

    innumerables pginas a sus ancestros y a su cultura casi desaparecida. Diez-Echarri y

    Roca Franquesa opinan al respecto:

    La historia no poda presentar a los ojos de los americanos el mismo

    sugestivo cuadro que la suya a los europeos. El pasado histrico anterior a la

    conquista les era desconocido; adems, ningn vnculo de sangre o de cultura, como

    no sea muy dbil, les liga a las viejas razas, ya en su mayor parte desaparecidas.

    Centran, pues, su mirada en los tiempos de la Colonia; y aun ms cerca, en los de la

    lucha por la emancipacin. De ah surge el nuevo gnero: el indianismo () (Diez-

    Echarri et al., 1960: 866).

    Cundo, dnde, cmo se inicia el romanticismo hispanoamericano? Al

    respecto sern remontados los inicios del romanticismo hispanoamericano a la poca

    de la independencia de la mayora de las colonias de Espaa. El panorama poltico

    social en este perodo de transicin fue agitado, turbio, con cambios profundos que

    renovaran siglos de lucha, dominio, educacin y pensamiento. Se podra decir que,

    debido a estas circunstancias, el escritor romntico no puede separar la poltica de la

    literatura y viceversa como lo seala Gmez Gil:

  • El autor y su poca 53

    El romanticismo es el primer movimiento literario que tiene lugar despus de

    lograda la independencia de Hispanoamrica, con la excepcin de Cuba y Puerto

    Rico, de manera que aquellos pases se estrenaban en el disfrute de la vida autnoma.

    Las constantes de este perodo turbulento de nuestra historia son la anarqua, herencia

    del mundo colonial; las encarnizadas luchas civiles; las dictaduras; el despotismo; las

    luchas entre unos pases y otros. El signo general de la poca es la inestabilidad

    poltica y social en casi todos los pases. En cuanto a la vida interna de cada pas,

    sera imposible catalogar la sucesin de golpes de estado, de levantamientos militares,

    guerras civiles, revoluciones y dictaduras de la poca (Gmez-Gil, 1968: 240).

    Segn Emilio Carrilla, en El romanticismo en la Amrica hispnica, el inicio del

    romanticismo hispanoamericano se podra enmarcar en el ao 1830:

    El romanticismo llega a Amrica, como escuela consciente, definida,

    despus de 1830. Dejando a un lado precedentes ms o menos autnticos, las fechas

    son conocidas: Echeverra, en 1832, nos da en Hispanoamrica la primera obra

    romntica con su Elvira o la novia del Plata; en 1836, Gonclves de Magalhes, al

    publicar en Pars sus Suspiros poticos e saudades, abre el romanticismo brasileo

    (Carrilla, 1967: 180).

    Julio Leguizamn corrobora esta fecha, aunque plantea la posicin de algunos

    entendidos que piensan que el romanticismo entra en Hispanoamrica antes de 1830:

  • 54 El autor y su poca

    La aparicin de las primeras manifestaciones romnticas en Hispanoamrica se

    advierte con posterioridad a 1830. Cejador y Frauca afirma que entr en Mjico antes

    que en Espaa, con la insurreccin de 1820. Mas la fecha es prematura para sealar el

    comienzo del romanticismo literario. Con excepcin de vagas notas romnticas

    perceptibles en poesas de Fernando Caldern, escritas hacia 1826 y 1827, el

    movimiento recin se define con Rodrguez Galvn durante la dcada que sigue a

    1830. En 1838 estrena el primer drama romntico: Muoz, Visitador de Mxico.

    Queda por consiguiente, en pie la afirmacin que considera al argentino

    Esteban Echeverra como precursor del romanticismo en Amrica, a su regreso de

    Pars, en 1830 () Los argentinos formados a su influjo determinaron el desarrollo

    del movimiento en Chile y el Uruguay, hacia cuyos solares emigraron durante el

    gobierno de Rosas (Leguizamn, 1945: 467).

    En este trabajo se sostiene, por lo tanto, que el romanticismo

    hispanoamericano se inicia en el ao 1830, aunque antes de este ao hubo asomos del

    romanticismo europeo que se concretaron en el movimiento romntico

    hispanoamericano para esta fecha. Diez-Echarri y Roca Franquesa reconfirman esta

    fecha como el surgimiento del romanticismo:

    De ordinario se da como fecha inicial del romanticismo americano el regreso

    de Echeverra a Buenos Aires en 1830, tras sus cuatro aos de permanencia en Pars.

    En 1831 publica sus primeras poesas de franco signo romntico; en 1832, la leyenda

    de Elvira, y cuando en 1837 aparecen sus Rimas se puede decir que el movimiento

  • El autor y su poca 55

    romntico est ya en marcha (Diez-Echarri et al., 1960: 868).

    Qu estaba pasando en Hispanoamrica para esta poca? Entre los

    acontecimientos que discurren en estos momentos se puede destacar la dictadura de

    Juan Manuel Rosas, en Argentina, que va desde 1829 hasta el 1952. En 1839 se

    desarrolla la guerra civil entre las provincias federales de Uruguay. Estado de sitio de

    Montevideo, que se prolonga de 1842 al 1851. Las luchas duraron alrededor de diez

    aos entre Buenos Aires y las dems provincias (1852-1862). En Per, la dictadura de

    Ramn Castilla y la guerra civil que se extiende de 1854 al 1861. En Ecuador, se

    establece la dictadura de Gabriel Moreno de 1861 al 1875. En Mxico, se produce la

    revolucin y reformas de Benito Jurez de 1855-1860. Los franceses invaden Mxico

    nombrando a Maximiliano de Austria como Emperador. En Venezuela, se establece la

    dictadura de Antonio Guzmn Blanco y de Cipriano Castro de 1870-1909. Y para

    concluir este panorama poltico general se puede escuchar la voz de Gmez-Gil, quien

    sintetiza los acontecimientos de la etapa final del siglo XIX de esta forma:

    Despus de 1860 se fue prolongando cierto grado de estabilidad con algunos

    gobiernos democrticos (como en la Argentina bajo las presidencias de Bartolom

    Mitre y Sarmiento) con regmenes de hombres fuertes como es el caso de Porfirio

    Daz (1830-1915), en Mxico, que gobierna despticamente desde 1876 hasta 1911.

    De las armas las demandas de Chile por las provincias productoras de nitrato. El

    ejrcito chileno ocupa a Lima y quema varios edificios, entre ellos la Biblioteca

    Nacional (1881). La paz entre ambos pases vino a firmarse en 1883. En los pases

  • 56 El autor y su poca

    ms pequeos era ms grande todava el grado de anarqua que subsisti casi hasta

    fines de siglo. Claro que durante este tiempo hubo algn progreso econmico y

    social, aunque no con la rapidez que los pases necesitaban (Gmez-Gil, 1968: 241).

    Anderson Imbert ha establecido la existencia de dos generaciones romnticas,

    de acuerdo a las obras literarias escritas y a la fecha de nacimiento de los autores ms

    destacados, pero aclara que por ser ste un movimiento que se dio de una forma lenta

    y expansiva es muy difcil hacer una cronologa exacta:

    Tenemos pues, dos generaciones romnticas: la primera es la que da obras

    significativas antes de 1850 (como Facundo de Sarmiento); la segunda es la que

    empieza a producir despus de 1850 (como los folletines con que se inicia la novela

    Alberto Blest Gana). Si, grosso modo, fechamos as las dos generaciones, la primera

    nacidos entre 1800 y 1825, y la segunda nacidos entre 1825 y 1850, () (Anderson,

    1962: 207).

    Orlando Gmez Gil habla de tres generaciones:

    En el romanticismo se distinguen perfectamente tres instantes o fases. El

    primero entre 1800 y 1834. Luego viene la plenitud o apogeo (1834-1864), en que se

    asimilan los elementos romnticos en combinacin con elementos nativos hasta tomar

    una fisonoma muy hispanoamericana. Finalmente tenemos la transicin hacia el

    realismo (en la prosa que se inicia alrededor de 1854) y hacia el modernismo (en

  • El autor y su poca 57

    verso y prosa), entre 1882 y 1888. En esta ltima etapa la novela mezcla elementos

    romnticos y realistas y algunos poetas Caro, Zorrilla de San Martn anuncian ya

    el esteticismo y la riqueza metafrica del modernismo (Gmez-Gil, 1968: 244).

    En sentido general, se analizar a los preromnticos, los romnticos de la

    plenitud del movimiento, la primera generacin y la segunda generacin donde se da

    plenamente el romantic ismo local, criollo, es decir, el romanticismo que se podra

    denominar propiamente hispanoamericano.

    PREROMNTICOS/PRECURSORES/INICIADORES

    Los primeros esbozos del romanticismo hispanoamericano surgen del contacto

    de los emigrados liberares de Espaa e Hispanoamrica que se establecen en Londres.

    Entre los iniciadores del romanticismo encontramos a Jos Fernndez Madrid

    (Colombia 1879-1830) conocido como el Sensible, y en referencia a ste, Anderson

    Imbert escribe:

    () fue uno de los primeros en cultivar una poesa con temas de hogar, con tonos de

    meditacin y con sentimientos de la naturaleza que debi de haber ledo en Inglaterra

    () (Anderson, 1962: 204).

    Si se sigue hurgando entre los primeros romnticos se encontrar a Jos

    Antonio Miralla (Argentina; 1789-1825), Jos Mara Gruesso (Colombia; 1779-

  • 58 El autor y su poca

    1835), Francisco Antonio Ulloa (Colombia; 1783-?). A todos ellos se les podra

    considerar prerromnticos, pues fueron los que, directa o indirectamente, dieron

    inicio, de una forma tenue, a la una nueva sensibilidad que se denomin

    romanticismo.

    A la puerta del romanticismo se encuentra a varios autores que, sin dejar de

    lado el clasicismo que impregna sus obras, empezaron, algunas veces sin admitirlo, a

    escribir en la nueva tendencia romntica, ya sea en su temtica o en su estilo. Entre

    los ms destacados estn Jos Mara Heredia y Heredia (Cuba; 1803-1839), con su

    obra En el teocalli de Cholula. Al referirse a Heredia, Anderson Imbert expresa:

    Del neoclasicismo recibi la influencia de los poetas que reavivaron la antigua

    escuela de Salamanca: ley a Melndez Valds, el mejor lrico de la poca, a

    Cienfuegos, a Jovellanos, a Quintana. Y se puso a escribir en esa franja literaria que

    iba desde el dulce y melanclico erotismo hasta la poesa filosfica y social.

    Ejemplos de la literatura inglesa y francesa le indicaban que iba por buen rumbo; y

    traduciendo e imitando la poesa osinica, a Chateaubriand, Byron, Ugor Foscolo,

    Lamartine y quiz Vctor Hugo () ti sus versos de imaginacin, melancola y de

    angustia romntica (Anderson, 1962: 208).

    Andrs Bello (Venezuela; 1781-1865), otro ilustre poeta, hispanista,

    clasicista, didacta, conservador que, aunque pareca que renegaba del romanticismo,

    fue uno de los verdaderos precursores e introductores del romanticismo

    hispanoamericano, pero permaneci siempre neoclsico. Fue poeta, humanista,

  • El autor y su poca 59

    filsofo, fillogo. Entre sus obras ms importantes encontramos Alocucin a la

    poesa (1823), A la agricultura de la zona trrida (1826), Principios de derechos

    de gente (1832), Instituciones de Derecho Romano (1843), La oracin por todos

    (1843), Gramtica Castellana para uso de las escuelas (1951), Filosofa del

    entendimiento (1881), etc. De Bello, dice Anderson Imbert:

    Su reaccin pareca antirromntica, pero en realidad iba contra lo que la

    moda tena de insincera. Bello comprenda los ideales romnticos pero estaba

    dispuesto a resistir la moda () Bello demostr que era el ms comprensivo de todos.

    El haba conocido el romanticismo en su fuente ingls: solo objetaba la

    superficialidad de los repentistas. Traviesamente tena un sentido fino de la irona

    desarm la mquina de resortes y mecanismos del estilo romntico y luego la

    volvi a armar demostrando as que comprenda su funcionamiento (Anderson, 1962:

    197).

    Por su parte, Alberto Zum Felde, en ndice crtico de la literatura hispanoamericana,

    declara acerca de Bello:

    () su amplitud de criterio, su equilibrio de juicio, no lo sealan como un enemigo

    del romanticismo ni del americanismo ni de los principios liberales, tendencias de las

    que, al contrario, participa, en la forma y medida que ellas se concilian con las otras.

    No es un revolucionario, como sus opositores, pero s un evolucionista (Zum Felde,

    1954: 74).

  • 60 El autor y su poca

    Se mencionarn otros autores destacados en los albores del romanticismo, sin

    ahondar en detalles de sus caractersticas y produccin literaria. En Mxico, se

    destaca Jos Joaqun Pesado (1801-1861). Aunque fue un poeta mediocre, sobresale

    su coleccin de poemas Los aztecas (1854), cuya importancia reside en su intento de

    rescatar y revalorizar la poes a indgena mexicana. En Mxico, junto a Pesado,

    encontramos a Manuel Carpio (1791-1860), quien trata de rendirle culto a la poesa

    neoclsica mexicana. En Venezuela, Fermn Toro (1807-1865), Juan Vicente

    Gonzlez (1811-1866) y Rafael Baralt (1810-1860). En Per, se distinguen Felipe

    Pardo y Aliaga (1806-1868), Manuel Ascencio Segura (1805-1871), Jos Batres

    Montfar (1809-1844) y en Guatemala, Juan Diguez Olaverri (1813-1865).

    Adems sern analizados brevemente los romnticos hispanoamericanos,

    precursores, padres y propagadores del romanticismo en la Amrica hispnica. Segn

    Pedro Henrquez Urea, Esteban Echeverra (Argentina; 1805-1851) es el verdadero

    descubridor e impulsor del romanticismo tanto en Argentina como en el resto de

    Hispanoamrica:

    En 1825 un joven de Buenos Aires, Esteban Echeverra (1805-1852), fue a

    Pars y pas all cinco aos, en plena insurreccin romntica. Descubri el

    romanticismo como revolucin espiritual que abra a cada grupo nacional o regional

    el camino de la expresin propia, de la completa revelacin de su alma, en contraste

    con la fra ultraracional universalidad del clasicismo acadmico (Henrquez, P., 1949:

    116).

  • El autor y su poca 61

    Gmez-Gil reafirma la importancia de Echeverra como el precursor del

    romanticismo en Hispanoamrica y sobre todo en Argentina:

    Aunque Heredia es el primer poeta romntico hispanoamericano por su

    actitud espiritual frente al paisaje y su profundo subjetivismo, el verdadero patriarca

    del romanticismo en la literatura hispanoamericana es ESTEBAN ECHEVERRA

    (1805-1851), porque fue el primero en aconsejar y luchar por la adopcin del nuevo

    credo esttico y poltico as como en formular toda una doctrina al respecto. El

    Manifiesto del romanticismo en este continente se debe a Echeverra. El primer

    romntico argentino fue poeta, novelista, poltico, pensador y revolucionario y en

    todas estas actividades ejerci funciones sobresalientes de iniciador y orientador,

    siendo el verdadero heraldo de la nueva doctrina esttica que se haba adueado de

    toda Europa (Gmez-Gil, 1968: 245).

    Por su parte, Anderson Imbert tambin seala a Esteban Echeverra como el

    iniciador del romanticismo en Hispanoamrica:

    Esteban Echeverra (Argentina; (1805-1851) fue el portaestandarte. En 1825

    (tena veinte aos y haba vivido borrascosamente, sin tiempo para dejarse atrapar en

    las redes racionalistas que le tendan sus maestros del Colegio de Ciencias Morales de

    Buenos Aires) Echeverra parti para Francia. Por lo que luego revel en sus escritos

    y por las noticias que nos dejaron sus amigos inferimos que Echeverra observ

    atentamente, en los cuatro aos que vivi en Pars, la sntesis de romanticismo y

  • 62 El autor y su poca

    liberalismo que se produca justamente entonces (Anderson, 1962: 221-222).

    Luis Alberto Snchez, en Breve historia de la literatura Americana , dice al respecto:

    Mientras Juan Cruz Valera emigraba y se encenda de pasin poltica,

    iniciando ya el cielo fecundo de los proscritos, el joven Esteban Echeverra ()

    rompa oficialmente los fuegos contra el hispanismo y el clasicismo e iniciaba,

    oficialmente tambin, el romanticismo argentino (Snchez, 1940: 230).

    Giuseppe Bellini tambin declara a Echeverra como el introductor del romanticismo

    en Hispanoamrica:

    El verdadero introductor del Romanticismo es en el fondo Esteban

    Echeverra (1805-1851); su estancia en Pars lo haba puesto en contacto con los

    mayores representantes del romanticismo francs, de De Vigny a Musset y Dumas,

    pero Echeverra prefiri sobre todo a los ingleses y los alemanes. De vuelta a la

    Argentina expres de manera concreta sus ideales liberales fundando en 1838 la

    Asociacin de Mayo (Bellini, 1985: 240).

    En oposicin a las ideas expuestas anteriormente Teodosio Fernndez en

    Historia de la Literatura Hispanoamrica y Antonio Lorente en la edicin que hizo

    de Rimas no sealan a Echeverra como el nico introductor del romanticismo, sino

    como uno de los personajes claves en la introduccin de las ideas del movimiento

  • El autor y su poca 63

    romntico en Argentina. Teodosio Fernndez confirma nuestras ideas con estas

    palabras:

    () en 1830 Esteban Echeverra (1805-1851) regres a Buenos Aires, despus de

    cinco aos en Europa. Volva convertido en literato, y con pretensiones

    renovadoras que significaron de hecho la irrupcin del romanticismo. No haba de ser

    el nico agitador del ambiente intelectual porteo un grupo de estudiantes, entre los

    que contaban Vicente Fidel Lpez (1815-1903), Juan Bautista Alberdi (1810-1884) y

    Juan Mara Gutirrez (1809-1878), crearon en 1833 una Asociacin de Estudios

    Histricos y Sociales que mostraban inquietudes similares, pero s quien le dio

    cohesin y posibilit un acontecimiento de mximo inters en la evolucin de la ideas

    y las letras del Ro de la Plata: otro grupo de jvenes que vena reunindose en

    Librera de Marco Sastre (1809-1887) los mismos, en buena parte, que haban

    figurado en la efmera Asociacin mencionada, inauguraba en junio de 1837 el

    Saln Literario () En sucesivas reuniones en las que Echeverra puso de manifiesto

    su condicin de mentor intelectual de esa generacin () (Fernndez, T., et al., 1995:

    66).

    Lorente Medina expresa:

    La verdad y sin desmedro de Echeverra es que en la capital del Plata

    exista ya un ambiente cuasiromntico, creado por cierto grupo social que como una

    corriente pura circulaba por Buenos Aires y bajaba con mpetu de mayor saber, desde

    las aulas laicas de la Universidad y del Colegio de Ciencias Morales, y se perciban,

  • 64 El autor y su poca

    desde antes de 1830, indicios de renovacin cultural (Lorente, 1984: 20).

    Echeverra no es considerado un buen poeta, aunque se destacan sus obras

    Elvira o la novia del Plata (1832), Los consuelos (1834), Rimas y La cautiva (1837).

    Sobresale en la prosa especialmente con su obra El matadero (1838), la cual ocupa un

    lugar memorable en la produccin literaria romntica. Anderson Imbert con relacin a

    El matadero, escribe:

    () en la historia literaria f igura en sitio de honor El matadero (1838), cuadro de

    costumbres de extraordinario vigor realista, diferente de cuanto se haba escrito antes

    por la intensidad del pathos y del clmax. Como cuadro de costumbre tiene una

    intencin poltica y reformista: mostrar la infame turba que apoyaba a Rosas

    (Anderson, 1962: 223).

    Debemos destacar la importancia de Argentina y su aporte como nacin a la

    expansin del romanticismo en Hispanoamrica. En Argentina, como en todo el resto

    de Hispanoamrica, la situacin poltica influye en la vida cultural y en los hombres

    de letras. Rosas, con su frrea dictadura, provoca el exilio de los escritores hacia otros

    pases de Amrica como Chile, Uruguay, Bolivia y otros, trayendo esto como

    consecuencia la diseminacin del romanticismo por el resto de Hispanoamrica.

    Anderson Imbert, al referirse al romanticismo argentino, subraya:

    Tendremos que detenernos en la Argentina porque aqu a diferencia de lo que

  • El autor y su poca 65

    pasaba en otros pases hispanoamericanos, hubo una generacin claramente

    romntica. El de 1830 es el ao lmite. Hasta el 1830 los hombres cultos de Buenos

    Aires viven en la poca de las luces, racionalista y humanitaria. Bajo el signo de la

    Ilustracin se hizo la revolucin de Mayo, la independencia y la primera organizacin

    poltica y cultural de la Repblica, de Moreno a Rivadavia. Desde 1830 Buenos Aires

    recibe las influencias del romanticismo francs y se forma la generacin de

    Echeverra, Alberdi, Gutirrez, Lpez, Sarmiento, Mitre en la que todos concuerdan

    en justificar la ruptura total con Espaa, en expresar las emociones originales que

    suscita el paisaje americano y en probar un sistema poltico liberal (Anderson, 1962:

    221).

    Raimundo Lazo, en Historia de la literatura hispanoamericana, alude al

    romanticismo argentino en estos trminos:

    El perodo que comprende la dcadas centrales del siglo XIX,

    aproximadamente de la tercera a la penltima, definido literariamente como

    romntico en Hispanoamrica, en la historia del pueblo argentino coincide con los

    tiempos de cruentas e incesantes luchas internas centradas en torno a la sangrienta

    tirana de Rosas; y cada y dificultosamente liquidadas sus consecuencias se cierran

    aquellos tiempos de inseguridad y perturbacin colectiva con el inicio de lo que se ha

    llamado la organizacin nacional. La dictadura de Rosas tuvo dos consecuencias

    fundamentales para la literatura: al expulsar a los escritores, obligados a buscar

    refugio en Chile, Bolivia y Montevideo suspendi en el pas el movimiento literario, e

    impuso a ste, en el destierro, el tema social y poltico con carcter combativamente

  • 66 El autor y su poca

    polmico (Lazo, 1967: 127-128).

    PRIMERA GENERACIN ROMNTICA

    ARGENTINA

    Dentro de la literatura romntica de la primera generacin argentina, se

    hablar esta vez de Hilario Ascabusi (1807-1875), proscrito como todos los

    argentinos de este perodo. Poeta gauchesco a la poesa gauchesca nos referiremos

    con ms detalle en la subdivisin segunda generacin romntica que describe la

    Pampa, la vida, costumbres y vicisitudes del gaucho con un detallismo fotogrfico.

    Entre sus obras ms representativas se encuentran: Paulino Lucero (1853), Aniceto el

    Gallo (1854), Santos Vega (1872). En torno a Ascabusi, Raimundo Lazo concluye:

    Hilario Ascabusi (), tiene una vida de aventuras algo legendaria, que comienza con

    las circunstancias de su nacimiento en una caravana de carretas que cruzaba la Pampa

    () Fue su escuela la de las experiencias de mltiples ocupaciones a las que hubo de

    dedicarse. Como era inevitable, intervino en las turbulencias polticas; luch al lado

    de los unitarios, contra Rosas; vivi en el destierro en Montevideo; y cada la

    dictadura rosista apoy a Mitre, que lo envi a Europa en misin oficial. Public en

    Pars lo coleccionado de sus obras poticas de tema gaucho, y muri en Buenos Aires

    en 1875. Hay en la obra potica de Ascabusi lo ocasional de raz poltica, () (Lazo,

    1967: 137-138).

  • El autor y su poca 67

    Otro destacado romntico argentino fue Juan Mara Gutirrez (1809-1878),

    quien a diferencia de los otros desterrados de la dictadura de Rosas, se dedica a la

    crtica y estudio de la literatura. Fue muy cuidadoso con la forma de sus expresiones,

    lo cual lo distingui de sus contemporneos. Sobre Gutirrez, Lazo afirma:

    El ms completo hombre de letras de la generacin de los proscritos es Juan

    Mara Gutirrez () Vivi en el exilio en Montevideo, en Europa, en Chile y en el

    Per, e intervino despus en la dictadura de Rosas en los trabajos de la organizacin

    nacional; pero, en medio de la conmociones de la poca es vocacionalmente un crtico

    y un investigador de la historia literaria (Lazo, 1967: 135).

    Entre su produccin literaria, se destaca Amrica potica (1846), Poesas

    (1869), El hombre hormiga (1839) y El capitn de patricios (1874). Hizo varias

    ediciones crticas y comentadas de autores destacados como Sor Juana Ins de la Cruz

    y Juan Ruiz de Alarcn, entre otros.

    Censurador, fro, reflexivo, as era Juan Bautista Alberdi (1810-1884),

    otro desterrado de la dictadura de Rosas en Montevideo y Chile. Sus escritos eran

    moralizadores, crticos, contribuyendo as a la constitucin Argentina con sus Bases y

    puntos de partida para la organizacin constitucional de la Repblica Argentina

    (1852). Entre sus obras se destacan: Cartas quillotanas (1853), Peregrinacin de Luz

    del Da o Viajes y aventuras de la Verdad en el Nuevo Mundo (1878). As describe

    Anderson Imbert a Alberdi:

  • 68 El autor y su poca

    Juan Bautista Alberdi (Argentina; 1810-1884) fue de los que ms lcidamente

    comprendieron a los autores romnticos. La capacidad de comprender era su fuerte.

    Era ms bien fro, reflexivo, observador, cauto, adaptadizo; y ante el romanticismo

    fue ms comprensivo que entusiasta (Anderson, 1962: 225).

    Domingo Faustino Sarmiento (1811-1888) es el personaje multifactico del

    romanticismo argentino y, en torno a esta caracterstica personal y literaria, Raimundo

    Lazo dice lo siguiente:

    En la personalidad mltiple, de Domingo Faustino Sarmiento (1811-1888),

    maestro, poltico, escritor, gobernante, lo decisivamente definidor es el hombre de

    accin, () Siente el espritu liberal de su generacin, la de la Asociacin de Mayo

    de Echeverra: combate a los tiranos de provincia, mantenedores de Rosas, sufre

    prisin, pasa por riesgo de ser ejecutado; busca refugio en Chile, regresa y se dedica a

    labores periodsticas () (Lazo, 1967: 132).

    Entre sus obras ms representativas deben mencionarse Facundo (1845), su

    obra cumbre; Viajes (1849-51), Recuerdos de provincia (1850). Fue un escritor

    fecundo, pero sus mejores obras son las que redacta en Chile. Despus la vida pblica

    arrop su atencin y, aunque sigui escribiendo, no logra entregarse a la literatura

    como en sus aos de destierro. Zum Felde, al expresar su opinin sobre Facundo,

    afirma:

  • El autor y su poca 69

    No es extrao, sino muy natural y muy lgicodado el clima intelectual

    predominante y caracterstico de la poca, en relacin con las condiciones de la

    realidad histrica que se vive a mediados del siglo XIX, el hecho a primera vista

    sorprendente de que el ms original y poderoso de los libros escritos hasta entonces

    en Amrica, el Facundo, sea, en su gnesis, un folletn periodstico de combate, un

    panfleto poltico genial, una apasionada improvisacin de la intuicin historiolgica y

    de la facultad literaria (Zum Felde, 1954: 99-100).

    Vicente Fidel Lpez (1815- 1903) fue el historiador de los desterrados

    argentinos. Educador, periodista, orador, escribi varios estudios histricos y dos

    novelas histricas: La novia del hereje y La loca de la guarda. Su obra culminante es

    Historia de la Repblica de Argentina (1833-1893), la cual se compone de diez

    volmenes. Lpez es uno de los autores que mejor define la concepcin de la novela

    romntica histrica, como lo explica Anderson Imbert:

    Lpez se entreg con alma y vida a sus estudios de filosofa de la historia.

    Con esta preparacin escribi una novela histrica (), La novia del hereje. En su

    carta prlogo de 1884 dice que escribi la novela a los veinticinco aos (o sea en

    1840) y que la public luego como folletn en un peridico chileno. En la misma carta

    prlogo expuso mejor que nadie en su generacin hispanoamericana la concepcin

    romntica de la novela histrica. Parta de una profunda comprensin de la naturaleza

    histrica del hombre. Nuestras existencias estn entramadas en el tiempo: un pasado

    nos asalta y con l a cuestas nos lanzamos al futuro. Adems de existir, coexistimos

  • 70 El autor y su poca

    con nuestro pueblo. Si una accin humana afecta el desenvolvimiento colectivo, la

    llamamos histrica. Pero lo cierto es que toda accin es histrica, por privada que

    parezca, pues en cada instante somos sujetos de la historia, agentes de un proceso

    espiritual. Lo que gracias a los documentos sabemos por seguro del pasado, nos

    ayuda a imaginarnos lo que no podemos saber pero que intuimos vivamente porque,

    despus de todo, el drama humano es uno. La novela, con lo que sabe y con lo que se

    imagina, salva el pasado (Anderson, 1962: 233).

    Jos Mrmol (1817-1871) es otro de los destacados romnticos argentinos.

    Como Echeverra, sufri las consecuencias del destierro de la tirana de Rosas,

    situacin que marca su produccin literaria. Sus escritos se convierten en armas de

    combate contra el rgimen. Entre sus obras se destacan Cantos del Peregrino (1847),

    Armonas (1851), y dos dramas: El Poeta (1842) y El Cruzado (1851). Se le considera

    el iniciador de la novela argentina con Amalia (1851-1855). Raimundo Lazo se refiere

    a Mrmol con estas palabras:

    Jos Mrmol (1817-1871) fue el prototipo de los poetas de la proscripcin y

    de la prolongada y cruenta lucha contra la tirana de Rosas. Su romanticismo es una

    bien anudada convergencia de lo literario y lo autobiogrfico. Por la persecucin y el

    destierro que sufri y por sus viajes fiados a la incertidumbre y a los peligros, (),

    vivi la vida del personaje heroico de prestigio legendario (Lazo, 1967: 130).

    Con respecto a Mrmol, Orlando Gmez-Gil escribe:

  • El autor y su poca 71

    Mrmol se distingui como poeta lrico, novelista y autor dramtico, adems

    de su labor como periodista y revolucionario. Entre sus versos son los ms famosos

    aquellos dirigidos a atacar a Rosas (Gmez-Gil, 1968: 248).

    URUGUAY

    Como ya se mencion anteriormente, los desterrados argentinos llevaron hacia

    otras tierras americanas sus ideas romnticas y sus bibliotecas. Los uruguayos se

    unieron a los escritores en busca de un objetivo comn, que era encontrar una

    expresin que revelara el alma criolla, el sentir del hombre hispanoamericano. Entre

    los escritores ms sobresalientes, se encuentran Andrs Lamas (1820-1891), crtico;

    los poetas Adolfo Berro (1819-1841) y Juan Carlos Gmez (1820-1884), ninguno

    de ellos fue un escritor prolfero ni dej una obra de renombre.

    CHILE

    Si se sigue viajando por Hispanoamrica, se encontrar con que tambin en

    Chile el romanticismo fue introducido por los proscritos argentinos. A diferencia de lo

    sucedido en Uruguay, hubo cierto rechazo de las ideas romnticas que fueron

    combatidas por algunos escritores como Salvador Sanfuentes (1817-1860), discpulo

    de Bello y, por lo tanto, clasicista, aunque por su temtica del indio y del pasado se le

    podra considerar uno de los iniciadores del romanticismo chileno, es decir, fue

    romntico sin aceptarlo. Otros le dieron la bienvenida como, Jos V. Lastarria

    (1817-1888), quien es considerado el primer cuentista; sus obras estn repletas de

  • 72 El autor y su poca

    asuntos polticos. Entre sus escritos deben mencionarse El mendigo (1843), Don

    Guillermo (1860), Antao y Ogao, Novelas y cuentos de la vida hispanoamericana

    (1885). Jos Joaqun Vallejo (1811-1858), conocido como Jotabeche, es reconocido

    por sus cuadros de costumbres. Vicente Prez Rosales (1807-1886) escribe una de

    las obras chilenas romnticas ms ledas como es Recuerdos del pasado (1886).

    BOLIVIA

    En Bolivia, se destacan Mara Josefa Muja (1820-1888), quien crea una

    poesa inspirada en temas msticos y en la melancola producida por la desgracia de

    haberse quedado ciega a temprana edad. Sus obras estn dispersas en peridicos y

    revis