Ética y valores como la esencia del ser humano

Autor: Delgadillo Carmen

Universidad Fermín Toro

SAIA

ÉTICA

Tiene como objeto los

actos que el ser

humano realiza de

modo consciente y libre

es decir, aquellos actos

sobre los que ejerce de

algún modo un control

racional.

Las normas éticas se

derivan de supuestas

declaraciones sobre

los seres, con

frecuencia pasan

inadvertidos por el

uso de la

ambigüedad

normativa y

empírica de

términos como

“esencia”,

“naturaleza”,

“determinación”,

“función”,

“final”,

“sentido”

U “objetivo

alcanzado”.

VALOR

Es todo aquel objeto

que tiene de alguna

manera representa un

nivel de importancia y

se caracteriza del

comportamiento que se

tenga ante la sociedad

El valor puede que

tenga muchos

puntos de vista: se

encuentra en él la

física, informática

finanzas entre otras,

pero cuando nos

referimos a los

valores de una

persona se refiere a

las creencias

fundamentales que

nos ayudan a

preferir, apreciar y

elegir unas cosas en

lugar de otras, o un

comportamiento en

lugar de otro.

Ética y valores como esencia del ser humano

Desde la creación del hombre se plasman

experiencias que determinan su paso hacia sus

metas.

La habilidad que Dios no dio en ser pensante

permite dirigirnos entre alternativas de

beneficio y alternativas de daño.

La esencia del hombre como ser racional

consiste en que desarrolle su potencial

construyendo, a partir de la experiencia

acumulada por las generaciones pasadas.

Quiere decir esto que el conocimiento es

transferible y por ende la solución de

problemas también.

ÉTICA como esencia del

hombre

Si bien pues sabemos que la

ética es un acto humano

podemos decir que es parte de la

esencia misma que poseemos y

que nos permite trasformar

nuestras vidas para bien o para

mala, y además que nos hace

únicos incomparable en su

forma de pensar y de actuar

valores como

esencia del hombre

Dentro del concepto de lo

humano el hombre es invitado a

tener el valor de aceptar su

existencia desde el punto de

vista de su recto uso de decisión

y la idea que tiene de sí mismo.

Hoy el hombre posee mejores experiencias

y conocimientos para enfrentar las

condiciones más adversas de le existencia.

A través de la historia del hombre siempre

ha manifestado un afán y un deseo

permanente de saber. Por eso el saber es

universal e irresistible para el hombre. De

ahí que las aplicaciones prácticas del

conocimiento ayuden a mejorar el estado

de bienestar y de calidad de vida de las

generaciones actuales tales como la ética

que aplique o los valores que obtenga.